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ANTECEDENTE

Existieron varias causas que motivaron la Independencia de la Villa de Los Santos


y la Independencia de Panamá posteriormente, entre ellas se encuentran:

El abuso continuo de los gobernantes de turno, que fueron los causantes de la


grave situación económica del Istmo, debido a las grandes restricciones que
imponía España lo que llevo a una lamentable miseria.
El surgimiento de líderes como Simón Bolívar, José de San Martín, Francisco
Miranda, entre otros, que fueron los libertadores de varias naciones en toda
América del Sur.
La Declaración de Independencia de los Estados Unidos la cual estableció un
gobierno democrático suceso que para las otras naciones subyugadas fue una
circunstancia decisiva para su independencia
El triunfo de la Guerra de Independencia de los Estados Unidos Mexicanos, y su
gran influencia en la separación pacifica de la corona española y posterior anexión
de las provincias centroamericanas a México.
La Revolución Francesa, que con la Toma de la Bastilla impuso la proclama de los
derechos del hombre en lo referente a la igualad, y fraternidad.
Estos sucesos fueron importantes, pero la real motivación surgió al aprovechar la
fragilidad del gobierno, pues Juan de la Cruz Mourgeon y Achet encargó su
jefatura al panameño José de Fábrega, quien participaba de las ideas
independentistas de su pueblo.

LA MISCELÁNEA
Virrey Juan de Sámano
La Miscelánea fue el primer periódico de circulación de toda la Historia de
Panamá, y marcó de manera decisiva la Independencia de Panamá en 1821. La
imprenta llega oficialmente a Panamá por el año 1820 y da inicio al a circulación
del primer periódico en marzo de 1821, en el cual se comenzaba a divulgar las
opiniones políticas de diversos personajes revolucionarios, que iban en contra del
régimen español establecido en Panamá; razón por la cuál los dueños de este
periódico fueron perseguidos y encarcelados para callar sus ideas
independentistas.

En julio de 1821 muere el cruel y sanguinario virrey Juan de Sámano, perseguidor


acérrimo de todos aquellos que tuviesen ideas de independencia en Panamá, y lo
sucede Juan Sebastián Murgeon, que marca una época en la cual se cimentan
varias sociedades patrióticas y se instala la libertad de prensa, circunstancia que
es aprovechada por varios líderes populares para dar a conocer diferentes
publicaciones que alimentaban a sublevarse lo más antes posible. Uno de los
principales líderes de estas sociedades fue Francisco Gómez Miró, quien pone en
conocimiento un manifiesto en el cual promueve la Independencia de Panamá del
Imperio Español, lo que provoca gran algarabía en la sociedad de la Villa de Los
Santos y ocasiona la primera gesta independentista de Panamá.

INICIO DEL MOVIMIENTO INDEPENDENTISTA DE PANAMÁ DE ESPAÑA DE


1821
Juan de la Cruz Mourgeon y Achet, tuvo una propuesta de la Corona Española; si
lograba recuperar el control de varias colonias sublevadas sería nombrado virrey.
Debido a ello realizó un viaje hacia el Ecuador con el propósito de formar un
batallón y desde este punto geográfico arremeter contra los granadinos. Su viaje lo
realizó en octubre de 1821, mientras duraba su ausencia el mando del gobierno
del istmo de panamá lo encargó al militar panameño josé de fábrega que en ese
momento desempeñaba como gobernador de veraguas. este incidente fue
decisivo en las pretensiones independentistas de la villa de los santos.

EL GRITO DE INDEPENDENCIA
Primer grito de independencia de la Villa de Los Santos, la valoración de nuestra
identidad. EL 10 de noviembre de 1821 tuvo lugar una de las mayores y más
heroicas gestas en la historia de nuestro país. Un día como cualquier otro, con la
excepción de que un pueblo cansado de la esclavitud en la que se encontraba, se
levantó y dijo no más, no más a ser explotados, no más a ser tratados como si no
existieran, un pueblo en busca de ser libres, un pueblo con un sueño, armado con
una visión, inspirados por las ideas de libertad que hacían eco desde Francia,
pasando por Bolívar y el resto del mundo. Como estudiantes desde una corta
edad, aprendemos que el 10 de noviembre es un día importante pero ¿Por qué es
un día tan especial y emblemático para nuestro país? Con las independencias
logradas en América del Sur y los Estados Unidos Mexicanos se contagió a los
istmeños con un espíritu patriótico y nacionalista, queríamos ser libres; con la
llegada de la imprenta al istmo en 1820, estas ideas se fortalecieron. Esta primera
imprenta la operaba don José María Goitía. Pronto se publicó un periódico que se
llamó La Miscelánea. Formaban el cuerpo de redacción el prócer Juan José Argot
de nacionalidad colombiana y los panameños Mariano Arosemena, Manuel María
Ayala y Juan José Calvo. Este semanario circuló por todas las poblaciones del
Istmo. Estas ideas ya mencionadas hicieron que despertara la Villa De Los Santos
y que los hombres de esa heroica villa se agruparan alrededor de don Segundo de
Villarreal. El pueblo lo aclamó como su jefe, un batallón de voluntarios se formó
prontamente y las armas de ese batallón eran machetes, simples palos y unos
cuantos arcabuces. Don Segundo de Villarreal, patriota de grandes méritos,
organiza al pueblo santeño para que adopte la decisión de declarar la base de la
independencia del istmo de España.

DECLARACIÓN DE LA INDEPENDENCIA DE LA VILLA DE LOS SANTOS


Luego de proclamar ciudad independiente a la Villa de Los Santos, el Cabildo
Abierto cuyo presidente fue Julián Chávez, invitó a todos sus miembros además
de los concejales, a deliberar acerca de la escogencia de Don Segundo de
Villarreal como el jefe de las nuevas fuerzas libertadoras de la Villa de los Santos,
luego de lo cual se confirmó por unanimidad la moción expuesta confirmando su
cargo. Esta decisión tomó en cuenta la infranqueable postura de Segundo de
Villarreal de libertar la Villa de Los Santos al precio que fuese, incluso exponiendo
su propia vida. Esta noticia del Grito de Independencia de la Villa de Los Santos,
se difundió por todo el territorio panameño y fue respaldada por los pueblos de Las
Tablas, Macaracas, Las Minas, Parita, Ocú, Penonomé, Pocrí, Pesé, Natá de los
Caballeros, San Francisco de Veraguas y Alanje, en la provincia de Chiriquí.
El espíritu libertario de los santeños se remonta al año de 1569, cuando se funda
el pueblo de La Villa el 1 de noviembre, día de todos los santos, según expresan
Pedro y Domingo Moreno en su revista Memorias 10 de Noviembre, basados en
los escritos de Alfredo Castillero Calvo de 1965.

Moreno señala que entre La Villa y Natá se entabló un pleito durante la


instauración de la nueva población deseosa de libertad. Rodrigo Zúñiga, alcalde
de Natá, quien tenía a su mando la jurisdicción del territorio azuerense, arma un
grupo de hombres y los envía hasta Los Santos, pero unos 38 villanos los estaban
esperando armados con lanzas, espadas y ballestas dispuestos a presentarles
resistencia a los natariegos.

Pero los cabecillas santeños fueron sometidos y llevados presos a Natá donde
luego de ser arrastrados por las calles del poblado, fueron condenados unos a la
horca y otros a 10 años de destierro.

Se aprovecho la ocasión que en la capital de este istmo acababa de fallecer el


destronado virrey español, Juan de Sámano, quien tras haber sido derrotado por
Simón Bolívar en la batalla de Boyacá, que dio la independencia a Colombia, vino
a exilarse a nuestro futuro país.

Casi al mismo tiempo arribaba también Juan de la Cruz Mourgeon, quien iba para
Bogotá, a fin de tratar de reconquistar para España todos estos territorios, que la
nación ibérica acababa de perder.

Pero a última hora Mourgeon es enviado a México, con otra misión.

La ocasión para la ansiada independencia se hacía más favorable, lo cual anima a


los ciudadanos de varias provincias centrales a buscarla a como de lugar.

Y es así como Francisco Gómez Miró, por medio de proclamas escritas y orales
hace leer y oír desde Natá a miles de congéneres, lo que inflama más aún sus
ansias de libertad.
Fue entonces como cundió el entusiasmo por la misma razón en La Villa de Los
Santos, en donde el 10 de noviembre de 1821, y guiados entonces por Segundo
Villarreal, el pueblo ataca las instalaciones militares de La Villa y proclama su
ansiada libertad.

Y se conforman los batallones conocidos como: De la Libertad no sólo en La Villa


sino en Las Tablas, Pocrí, Macaracas, Parita, Pesé, Las Minas y Ocú.

Para los que deseen conocer los nombres de esos centenares de seres que
formaron los batallones mencionados, les recomendamos leer la obra El grito de
La Villa, escrita por el historiador Ernesto J. Nicolau, e impreso en la Imprenta
Nacional entre 1928 a 1930, cuando el autor se encontraba en Bogotá.

Antes del 10 de noviembre, la Patria estuvo de nuevo conmemorando un


aniversario del grito de La Villa de Los Santos, por medio del cual un grupo de
ciudadanos presididos por el alcalde Julián Chávez y compuesto por los ediles
José Antonio Moreno, José María de los Ríos, José Antonio Salado, Salvador del
Castillo, José Catalino Ruiz, Manuel José Hernández y Pedro Hernández, decidió
proclamar su independencia de España, lo cual comunicaron de inmediato al
libertador Simón Bolívar.Fueron los firmantes: José de Fábrega, José Higinio
Durán, obispo de la capital; Juan José Martínez, Carlos Icaza, Manuel José Calvo,
Mariano Arosemena, Luis Lasso de la Vega, José Antonio Zerda, Juan Herrera y
Florez, Juan José Calvo, Narciso Urriola, Remigio Lasso de la Vega, Manuel de
Arze, José de Alba, Gregorio Gómez, Luis Salvador Durán, José María Herrera,
Manuel María Ayala, Víctor Beltrán, Antonio Bermejo, Antonio Planas, Juan Pío
Victoria, Manuel de Urriola, José Vallarino, Manuel José Hurtado, Manuel García
de Paredes, Manuel José de Arze, José María Calvo, Antonio Escobar, Gaspar
Arosemena y para finalizar, José de los Santos Correoso, escribano
público.Pasando al origen de la copia del Acta que aquí ven, Luis Ramón Alfaro.
Del Acta original del grito de La Villa, existe también según el historiador Ernesto
J. Nicolau, copia en la capital colombiana.Los nombres que aparecen en los
óvalos a los lados del texto del acta son los correspondientes a las firmas.

EL GRITO DE LA VILLA
Pero el deseo de libertad de los santeños fue acogido por Segundo de Villarreal,
quien formó un batallón de voluntarios villanos y, armándolos con escopetas,
machetes y palos, montó una guardia dispuesta a dar la vida por conseguir la
independencia de su patria y deponer el gobierno
español.

Es así que decididos, atacaron el cuartel, poniendo en libertad a todos los


ciudadanos que se encontraban presos por conspiradores.

Durante la afrenta no se registró un solo crimen como tampoco ultraje a la


dignidad personal de los avasallados españoles. Fueron tratados con
caballerosidad e hidalguía hasta que fueran remitidos y custodiados hasta la
ciudad de Panamá de donde fueron enviados a Cuba.

Según los historiadores, los cabildantes anunciaron al resto del país mediante
postas (correos) la noticia de que ya eran libres y que la monarquía española no
gobernaba en el país y se había acabado la dictadura militar que tantos
sufrimientos les había causado.

Desaparecieron las diferencias sociales y todos los ciudadanos eran iguales ante
la ley. La nueva población se unió espontáneamente al gobierno de la Gran
Colombia.

RUFINA ALFARO

El escritor santeño Horacio Moreno plasmó en uno de sus escritos que el brazo y
la acción de una joven de 22 años vinieron a ser el genio de la estrategia que se
empleara en la destrucción de la fortaleza cuartelaria española que tantos daños
había causado a los jefes de familia que sufrían los frecuentes atentados contra
los derechos humanos y lo más sagrado del hombre, la vida.

Era atractiva, de ojos negros rasgados, cabellera negra que siempre llevaba
extendida, trigueña, de alta estatura, delgada, de cintura flexible y senos
protuberantes. Nació en el caserío de Las Peñas de Los Santos, aunque todavía
se ignora la fecha de su nacimiento como también el nombre de sus padres.
Vivía junto a ellos en una casa de techo de tejas y pencas. El sustento provenía de
la agricultura y la cría de gallinas. Sabía leer, escribir y rezaba la doctrina cristiana.
Vestía ordinariamente de vasquiña con pliegues que le ajustaban a la cadera. Se
dedicaba a vender verduras y huevos en la población.

Consintió en coadyuvar al triunfo de la revolución que se fraguaba contra el


sistema colonial y se comprometió con el hondo sentimiento popular.

Se distinguía por sus finos modales y chispeante charla que le habrían paso a las
mejores salas de la ciudad. Así, pudo conquistar simpatías entre los soldados
españoles, ya que su negocio también le daba acceso a esas visitas. Según narra
Moreno, el jefe del cuartel mantenía largas charlas amorosas con Rufina.

Fue Rufina quien comunicó a los revolucionarios que los soldados españoles
realizaban limpieza de armas y les indicó los puntos débiles.

Al comenzar la batalla no dejó de gritar ¡Viva la Libertad! Al esclarecer el día 10 de


noviembre de 1821, habían conseguido la libertad istmeña.

Moreno explica que los datos de esta historia fueron obtenidos de una pariente de
86 años que tuvo amistad con la familia Vásquez Zambrano, muy conocida en Los
Santos, quienes mantenían un negocio de carne de res, cerdo, arroz, frijoles y
otros granos cuyo local era visitado frecuentado por el padre de Rufina.

La Junta de Festejos del 10 de noviembre de La Villa de Los Santos, que preside


Francisco Eloy Vega, anunció que todo está listo para la celebración del grito de
independencia de Panamá de Colombia 1821.
Hoy conmemoramos ciento noventa y un (191) años de un importante movimiento
nacionalista del pueblo panameño, al recordar ‘EL GRITO DE INDEPENDENCIA
DE LA VILLA DE LOS SANTOS’, acción heroica de un pueblo valiente, luchador y
progresista que unido en un solo haz de voluntad realizó una de los grandes y
memorables acontecimientos que dieron inicio a la liberación del Istmo panameño
de la opresión española.

Ante la situación vivida, por ese noble pueblo, por años, un grupo de hombres
encabezados por don Julián Chávez, José Antonio Moreno, José María de los
Ríos, José Antonio Salado, Salvador del Castillo, José Catalino Ruiz, Manuel José
Hernández y Pedro Hernández, en el amanecer del 10 de Noviembre de 1821,
llenos de valor, hidalguía y arrojo, realizaron una hazaña sin precedente en la
historia panameña convirtiéndose en el ‘Canto de libertad’ al tomarse el Cuartel
Militar Español, incluso sin derramar una gota de sangre.

Esa flama de libertad encendida por ese valeroso pueblo, sirvió de acicate a todos
los habitantes del Istmo y emularon su valentía y patriotismo. Fue el inicio de una
lucha incansable de generaciones que mantuvieron la panameñidad y permitió que
alcanzáramos, posteriormente, nuestra Independencia para convertirnos en una
República libre, soberana, llamada: PANAMÁ.

No obstante, existen dos corrientes o versiones sobre el patriótico suceso. Los


libros de historia patria, han marcado con énfasis notoria la participación de la
mujer santeña, en la figura de doña Rufina Alfaro, quien ‘dio información de la
tropa española’, al grupo de santeños dispuestos a liberarse del yugo extranjero.

Se ha destacado su participación con suma importancia, siendo imposible


certificar su existencia real y verdadera como figura humana de los contornos
santeños. Se cuestiona a Rufina Alfaro como ‘Leyenda o Realidad’, pero su
nombre está escrito en la historia como real y existente en la lucha de un pueblo
por alcanzar su libertad.

Otros, consideramos que la mencionada santeña, Rufina Alfaro, representaba otro


papel en el acontecer de la vida poblada de la Villa de Los Santos y así se nos
enseñó cuando éramos estudiantes y para incluir a la mujer como ícono de lucha,
se le menciona partícipe del movimiento, llamado independentista.
El otro aspecto importante al conmemorar un aniversario más de la Gesta
patriótica de los santeños es la nominación dada históricamente al suceso: GRITO
DE INDEPENDENCIA DE LA VILLA DE LOS SANTOS. Es imposible desconocer
el significado real y valeroso del pueblo santeño, caracterizado por ser trabajador,
íntegro, digno y con sangre de gente emprendedora en el lugar que se encuentre.

Fue el GRITO DE LIBERACIÓN, el clamor incontrolable de un pueblo ansioso de


llamarse independiente y gobernarse en forma autónoma. El llamado de libertad
dado el 10 de Noviembre de 1821 resonó en todo el territorio istmeño como
campanas de liberación y su eco traspasó los límites provinciales convirtiéndose
en una voz imitable de esperanza, orgullo nacional y alegría permanente que se
refleja en sus tambores y su consagración al trabajo, la franqueza, hidalguía y
honradez.

Rendimos tributo a todo el pueblo santeño por ser herederos de una estirpe de
hombres y mujeres dignos que nos legaron liberación, Independencia y soberanía.
De igual forma elogiamos el valor de hombres encabezados por el que fuera
‘Alcalde Constitucional Primer nombrado Presidente del Ilustre Ayuntamiento’ de la
Villa de Los Santos, honor conferido a don Julián Chávez, quien participó del acto
de libertad hace ciento noventa y un años.

¡VIVA LA HERÓICA VILLA DE LOS SANTOS!... ¡VIVA EL PUEBLO SANTEÑO!


RUFINA ALFARO VIRREY JUAN DE SÁMANO

Simón Bolívar le dio el nombre de


 "Heroica Ciudad" a la Villa de Los Santos

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