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La historia de la Bota de Navidad se inicia con la llegada de San Nicolás a los Países
Bajos hacia mediados de noviembre de cada año. Sinterklaas Pakjesboot 12, Bote de los
Regalos de San Nicolás 12, el barco en el que llega a Holanda.9
Según la tradición, San Nicolás viene de España, y todos los años desde llega a las
costas holandesas en un barco de vapor. Una vez desembarcado, monta en un caballo
blanco llamado Amerigo. Viene acompañado de unos ayudantes (pajes) llamados
Pedritos que lanzan pepernoten (unas galletitas especiadas) a la gente. Se trata de una
de las tradiciones más importantes de Holanda.
Pepernoten
El mito se basa fundamentalmente en la figura de San Nicolás de Bari (que fue obispo
de Mira, en la actual Turquía, en el siglo IV).Originalmente la figura de San Nicolás fue
reverenciada solamente en el este. Sólo a partir del siglo XIII se convirtió el día de su
santo en una festividad reconocida. Ya en aquel tiempo existía en Utrecht la costumbre
de llenar con monedas los zapatos de cuatro niños pobres.
Tras la rebelión de las provincias holandesas contra la Corona española, los
predicadores calvinistas intentaron eliminar la festividad de San Nicolás, al considerar
que contenía demasiados elementos paganos. Sin embargo, sus esfuerzos no tuvieron
éxito, debido a que la fiesta era extremadamente popular incluso entre la población
protestante.
Cuando San Nicolás se convirtió más adelante (ya en el siglo XVI) en una festividad
familiar, se impuso la costumbre de poner los zapatos junto a la chimenea. Según la
tradición, San Nicolás (o más bien su ayudante, Pedrito) visitaba la casa de los niños y
colocaba los regalos en los zapatos, generalmente dulces y juguetes. Esta tradición sigue
manteniéndose viva.
Zwarte Piet
San Nicolás no trabaja solo: le acompaña un criado que recibe el nombre de Zwarte
Piet (en español: Pedro el Negro o Pedrito), que lleva el saco de los regalos y desciende
por las chimeneas de las casas para dejar los regalos en los zapatos de los niños.
Según la versión más amable, San Nicolás habría comprado la libertad de un niño etíope
en el mercado de esclavos de Myra. El nombre del pequeño sería "Piter" (derivado de
Petrus). El niño, agradecido por su liberación, habría decidido acompañar y servir a San
Nicolás.
El color de su piel es ocasionalmente fuente de críticas, según las cuales sustenta ciertos
prejuicios racistas. Pero otra teoría defiende que, en realidad, se trata de un
deshollinador italiano.
Su cara, pues, sería negra por el hollín de las chimeneas, y no por una cuestión de raza
(Pedrito Tiznado o Pedrito Hollín).
Esta teoría se ve apoyada por el hecho de que lleva una vara usada por los
deshollinadores, trepa a los tejados y lleva ropas que podrían corresponder a los
antiguos deshollinadores italianos.
Hasta la Segunda Guerra Mundial San Nicolás tenía un único ayudante. Tras la
liberación de los Países bajos por tropas canadienses, los soldados extranjeros ayudaron
a organizar la primera fiesta de San Nicolás de la posguerra.
Sin atenerse demasiado a la tradición, pensaron que si un Zwarte Piet era simpático, un
gran grupo de ellos sería aún mejor.
Desde entonces son varios los Pieten (plural de Piet) que acompañan a San Nicolás.
Cada uno tiene una tarea propia encomendada (por ejemplo, "guía", "cocinero", etc.).
San Nicolás se comporta siempre con distinción y seriedad, mientras que los
acompañantes son acróbatas juguetones y traviesos.
La vestimenta de Zwarte Piet es una especie de traje de paje de en torno a los siglos
XVI y XVII. Los sirvientes de las cortes de aquel tiempo llevaban vestimentas
similares.
Cada país les puede asignar un significado diferente pero lo cierto es que la gracia de
estas botas reside en que técnicamente representan a las botas de Papá Noel, de modo
que es por ello por lo que muchas familias optan por guardar ahí los regalos de los más
pequeños de la casa para que estos se encuentren con la sorpresa mañanera que tantas
sonrisas es capaz de conseguir en cada Navidad.
Aquellos que tienen la suerte de poseer una chimenea en su vivienda perfectamente pueden
colgar estas botas encima de la chimenea; en cambio, las familias que no disponen de
chimenea pueden conseguir un resultado muy estético también colgando las botas por
ejemplo en el árbol navideño como si de un adorno más se tratara.
Cuando los pequeños vean que en el interior de las botas están sus regalos, probablemente
saltarán de alegría.dice que la verdadera historia de Santa Claus comienza con un hombre
llamado Nicolas, nacido en el siglo III en lugar llamado Patara (actualmente es o pertenece a
Grecia) y que heredó una gran fortuna y debido a su formación católica, aplicó lo de: "vende lo
que posees y dáselo a los pobres" .
Llegó a ser obispo y era conocida su generosidad, su amor por los niños y preocupación por las
personas que trabajaban en el mar y sus embarcaciones.
Y a través de los siglos se han formado historias acerca de San Nicolás.
Una de ellas es acerca de un hombre muy pobre que tenía tres hijas y se preocupaba que ellas
no se casaran. Porque de acuerdo a las viejas costumbres, el padre debería de entregar con
cada hija una dote, en otras palabras, para que se animara el pretendiente con el paquete Un
día, sus hijas lavaron su ropa y colgaron sus medias en la chimenea, cerca del fuego para que
se secaran. San Nicolás, sabiendo de la preocupación del padre, esperó a que durmieran y
colocó oro dentro de las medias de las muchachas.
Por la mañana, las hijas descubrieron su regalo y se alegraron porque ahora si podrían casarse.
De ahí surge la tradición de los niños de colgar sus medias o colocar sus zapatos para que San
Nicolás les traiga regalos.
Pero como no todos hoy en día tienen chimeneas, pues se estila el colocarlas donde mejor se
pueda.
LA BOTA LLENA DE DULCES.
La bota de navidad que los niños suelen colgar para que sea llenada con dulces y
pequeños regalos tiene su origen en una leyenda de la vieja Inglaterra. Según el relato,
hubo una vez tres jóvenes hermanas que no podían casarse porque eran tan pobres que
no tenían dinero para su dote. Al enterarse de esta situación Santa Claus decidió ayudar
a las hermanas lanzando por el agujero de la chimenea tres bolsas con monedas de oro.
Sin querer, éstas cayeron dentro de las medias que las chicas habían colgado del canto
de la chimenea para que se secaran. A la mañana siguiente encontraron las monedas y
así fue como cumplieron su sueño de casarse.
Esta tradición se extendió luego a otros países. En España, donde no existe la tradición
del Viejito Pascuero, los niños no cuelgan botas, sino que ponen zanahorias y pasto seco
en sus zapatos y los dejan en la ventana para los caballos de los reyes magos. Estos les
agradecen dejando a cambio dulces y golosinas en los zapatos
Las botas de navidad tienen que ser unas de las mejores partes de Navidad, a menos de
que seas uno de eso chicos mal portados a quien solamente les toca un trozo de carbón.
La tradición de las botas empezó en Holanda en el siglo XVI. Los niños colgaban sus
zuecos (zapatos de madera) cerca de la chimenea para los renos de Santa. Santa, en su
lugar, dejaba obsequios para los niños. Con el tiempo, la gente empezó a usar botas (o
botines) en su lugar, lo cual seguimos haciendo en la actualidad.
OTRA HISTORIA
Una de ellas cuenta que una noche ,cuando trataba de transportar tres bolsas de oro
hasta las tres hijas de un mercader arruinado, una de las bolsas cayó dentro de los
calcetines que colgaban de la chimenea para secarse y que por eso desde entonces se
cuelgan los calcetines en espera de regalos. El mercader, vecino suyo, había decidido
prostituir a sus tres hijas porque no tenía dinero para la dote. La historia cuenta que el
santo arrojó las limosnas discretamente por una ventana para librar de la deshonra a las
tres doncellas.
CÓMO CONFECCIONÉ MI BOTA NAVIDEÑA
Paso a paso:
Lo primero es lavar muy bien la botella y realizar dos cortes. Se corta el cuello de
la botella y la base así se obtendrá un cilindro y el poto de la botella.
Luego ubicamos estas dos partes sobre el cartón bien apegadas y con un lápiz
dibujamos una silueta imitando la plantilla de un zapato.
Debemos cortar la base del cartón.
Luego con cintas de colores brillantes tapamos las imperfecciones y decoramos los
bordes de la bota.
Para finalizar el trabajo yo escogi un adorno navideño con ramas de pino, regalo,
campanas, cintas y flores. También pueden ocupar hojas secas, piñas o cintas en
forma de moño.