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Versículo:

Juan 4:6-10
Reina-Valera 1960
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Las redes sociales no solo han revolucionado los medios de comunicación sino


también el concepto de las relaciones sociales. Primero se las elogió como
herramienta para comunicarse porque acercó a familias que estuvieron alejadas
por las distancias; luego se las cuestionó porque alejó a seres humanos que
compartían un mismo entorno.

Para los millennials, que son Los millennials, aquella generación que engloba a
las personas nacidas entre 1980 y 2003, es comúnmente calificada como
perezosa, poco preparada y sin aspiraciones.por ejemplo, las redes sociales se
han convertido en una plataforma para documentar cualquier aspecto de su vida.  
Comparten lo que comen, el tráfico del día o información personal.

Esto se debe a una tendencia en la que los jóvenes no se quieren perder nada. Las
redes se convierten así en un refugio mediante el que se evaden de la realidad ya
sea consciente o inconsciente. Huyen  de la rutina o actividades aburridas.

La psicóloga clínica, Vanessa Serrado,  afirma que los humanos somos seres


sociales por naturaleza, “muchas veces tenemos la necesidad de aceptación o
aprobación para sentirnos más seguros. En especial cuando somos reconocidos o
felicitados por alguna hazaña”.

Todo empieza cuando somos niños y buscamos el consentimiento de nuestros


padres. Esa necesidad se vuelve más intensa en la adolescencia porque en esta
etapa se define la identidad de cada persona.

Una encuesta de la Royal Society for Public Health, del Reino Unido y el Young
Health Movement, realizada en el 2017 a 1.479 jóvenes entre los 14 y los 24 años,
evidencia que quienes pasan más de dos horas al día en redes como Facebook,
Twitter o Instagram tienen más probabilidades de experimentar conductas
depresivas o de ansiedad.
 “Esta generación es hipersensible y tiende a distorsionar la realidad, entonces por
el afán de sentirse aceptados utilizan máscaras como mecanismo de defensa”.

Detrás de las fotografías irreales que se muestran en las diferentes plataformas


sociales, existen individuos con vacíos emocionales que llevan dentro y que son
aliviados por el sonido de una notificación o un comentario.

Muchas veces las personas olvidan cultivar los vínculos que valen la pena, quienes
están físicamente cerca y no dentro de la computadora. (I)

VACIOS

Sabías que Jesús trató de manera personal el tema del vacío en el


corazón humano?

Permíteme explicarte en detalle ese fenómeno que tú estás sintiendo,


o que tú y yo sentimos alguna vez en el pasado usando esta historia
bíblica.

Tener el corazón vacío, sediento.

Esa imposibilidad de encontrar alegría y significado pleno en la vida


cotidiana.

Hermanos, Jesús dice solo en este pequeño fragmento que acabamos


de compartir cosas extremadamente importantes y trascendentales
para tu vida y la mía.

Identifica lo que usas para llenar tu vacío


El primer paso para llenar el vacío en el corazón con Dios es que
intentes identificar las cosas con las que tu mismo has estado
tratando de llenarlo, pero que no dan resultado.

Para adentrarnos al tema de como llenar el vacío en el corazón,


quiero que nos concentremos en una cosa que Jesús dijo en
particular:

Todo el que beba de esta agua volverá a tener sed —respondió Jesús

Debes saber que Jesús no estaba hablando de H₂O cuando le dijo eso a la
mujer.

Jesús con frecuencia usaba metáforas del mundo real para develar los
secretos espirituales más hermosos del universo.

Él estaba diciendo algo mucho más profundo que se puede entender


en la respuesta que le da a la mujer cuando ella le dice lo siguiente:

―Señor, dame de esa agua (…).


 
―Ve a llamar a tu esposo, y vuelve acá —le dijo Jesús.
 
―No tengo esposo —respondió la mujer.
 
―Bien has dicho que no tienes esposo.
 
Es cierto que has tenido cinco, y el que ahora tienes no es tu esposo.
 
En esto has dicho la verdad.
 
Juan 4:15-19
El agua a la que Jesús se refería al decir que cuando se le bebe se
vuelve a tener sed, era las cosas que ella estaba utilizando para
intentar llenar su corazón.

Él sabía que aquella mujer había estado tratando llenar el vacío de su


corazón con entretenciones, pecados y errores de este mundo.

Había estado bebiendo de aguas equivocadas.

Ella había estado tratando de llenar el vacío de su corazón con la


atención, el afecto y la pasión que encontraba en los hombres.

Y Jesús la confronta con esa realidad antes de darle de beber el agua


que ella le pedía.

Del mismo modo debeos identificar aquellas cosas que nos dejan
sedientos y desgastados.

Si tú y yo queremos llenar el vacío de nuestro corazón, primero


tenemos que enfrentarnos a identificar y reconocer con qué lo hemos
estado tratando de llenar.

Quizá has estado tratando de llenar ese corazón vacío con


entretenciones pasajeras.

Tal vez has tratado de olvidar ese vacío con alcohol o drogas, quizá lo
has tratado de llenar con el afecto efímero de personas que te han
abandonado.

Quizá conoces más camas que una mucama profesional con treinta y
cinco años de experiencia en hoteles de cadena.

No sé de qué forma lo has tratado de llenar, pero tú y Jesús si lo


saben.
Acepta a Jesús como tu salvador
El segundo paso para llenar el vacío en el corazón es que dejes de
luchar solo tratando de satisfacer tu necesidad, y aceptes que es
Jesús quien la puede llenar.

Que aceptes a Jesús como el Señor en tu vida y como tu salvador.

Mira la respuesta de la mujer a la afirmación de Jesús:

―Señor, me doy cuenta de que tú eres profeta.


 
Juan 4:19
Esto quiere decir dos cosas, la primera que lo que jesús le dijo era
verdad, y la segunda que ella aceptó el rol espiritual de Jesús como
alguien enviado por Dios.

Jesús es el hijo de Dios, aquel que sana los corazones quebrantados y


venda las heridas del alma.

Si le das la oportunidad, tal como lo hizo en la vida de esa mujer,


puede hacerlo en la tuya también.

Tráele a Jesús lo que usas para llenar tu vacío


El tercer paso es entregarle a Jesús aquellas cosas con las que has
tratado de llenar tu corazón y que te hacen daño.

Cuando Jesús le dice a aquella mujer, ve a llamar a tu esposo, lo que le


está diciendo es: “tráeme el agua de la que has estado bebiendo”.
Cuando le entregamos a Dios nuestros pecados, adicciones, nuestras
zonas erróneas, es entonces donde Él se glorifica en nuestra vida,
renovando nuestro espíritu.

Deja que Jesús obre en tu corazón


Hoy Él te dice, trae a mí el agua que has estado bebiendo porque te la
voy a cambiar por una mucho mejor porque,

Todo el que beba de esta agua volverá a tener sed —respondió Jesús
—, pero el que beba del agua que yo le daré no volverá a tener sed
jamás, sino que dentro de él esa agua se convertirá en un manantial
del que brotará vida eterna.
Sabes, hay una única forma de llenar el vacío de tu corazón, la forma
en que eso se hace es dejando entrar a Jesús en él y hacer la obra de
sanarte.

Si realmente quieres dejar de vivir la vida infeliz, vacía y


desdichada que has estado viviendo; solo hay alguien que la
puede llenar.

Su nombre es Jesús.

Son cosas que, aunque quisiera, no te puedo explicar de tal forma


que la puedas entender tanto como yo las entiendo, porque son
cosas que se viven en el espíritu.

Son cosas que se experimentan en el corazón.

Tú necesitas experimentarlas por ti mismo o por ti misma.

Hoy por hoy, puedo decirte que mi corazón ya no está vacío, cómo
alguna vez lo estuvo.
Por el contrario, mi corazón ahora es un manantial de gozo y alegría,
de propósito del que brota vida eterna.

Mi vida y mi existencia ahora tiene total sentido.

Mi ser está pleno y mi alma satisfecha.

Cuando bebes de las aguas de vida eterna quedas irremediablemente


satisfecho.

Ya no necesitas lastimarte bebiendo porquerías y tu experiencia será


tal que no cambiarás a Jesús por nada en esta tierra.

Porque solo él puede satisfacer tu alma.

Conclusión
Dile hoy al señor conmigo en esta oración:

Señor, he bebido de las aguas de este mundo por mucho tiempo.

Tú mejor que nadie sabes lo vacío que está mi corazón.

Te pido que en esta hora entres en él, que tu santo espíritu empiece a
hacer de mi corazón su habitación permanente y que me enseñe a
estar cada día más cerca de ti.

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