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ENSAYO

La comunicación es inherente al ser humano, en cada faceta de la vida diaria y en todas las
esferas de su existencia. Además, le es imposible no comunicar, es un arroyo constante e
incansable. Ahora bien, el ser humano comunica no sólo a través de las palabras, sino con
cada gesto, con cada silencio y acción. La palabra, sin embargo, le confiere un poder casi
ilimitado, por ella define, da nombre, conceptualiza.
El ámbito de la palabra y de los idiomas representa un mundo en sí mismo, el cual ha sido
estudiado y se ha se ha desarrollado como una disciplina. La Lingüística, como disciplina
científica que investiga el origen, la evolución y la estructura del lenguaje, estudia las
estructuras fundamentales del lenguaje humano, sus variaciones a través de todas las
familias de lenguas (las cuales también identifica y clasifica) y las condiciones que hacen
posible la comprensión y la comunicación por medio de la lengua natural.
Uno de los primeros en tocar este tema fue Platón. En su diálogo Crátilo, Platón toca el
tema de las etimologías y plantea un debate sobre la naturalidad o convencionalidad de
las palabras, en el que interviene Sócrates como árbitro de la cuestión. La historia de la
lingüística ha apreciado en esta obra un antecedente de la teoría del signo lingüístico.
En ella, los personajes desarrollan una especie de debate o diálogo en la que el autor
combina su pensamiento filosófico con esbozos de historia y parte de la teogonía griega,
con constantes alusiones y citas de autores. Con el análisis del origen y significación de las
palabras, el diálogo inaugura en cierto sentido el primer apunte de un dilatado debate
sobre la naturaleza del lenguaje en la época clásica griega.
Sin embargo, el debate no lleva a ninguna conclusión clara sobre la pregunta de la justeza
de los nombres.
Esa obra inicial sobre el discernir la capacidad de los nombres para conocer la realidad
podría seguir muchos rumbos referentes a las palabras, el lenguaje y su función social.
Me viene a la mente la novela de George Orwell cuando, en su afán totalitarista, el Estado
pretendía tener el control sobre la población, y fue precisamente una vía de acción el
coartar al ciudadano mutilando el idioma. Al hacer esto, apresaba a las personas y sus
mentes como un ave cautiva en una jaula metálica.
Finalmente, esta reflexión sobre las palabras puede ayudar al pensamiento claro, y
exactitud. Que, como docentes, el lenguaje y su uso sirva a los objetivos planteados, en
pos de mejorar la práctica docente.

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