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DISCURSO POR LA BODA DE MI HERMANO

Me siento honrado y agradecido que mi hermano me haya elegido


para pronunciar mi discurso. Está le he escrito de mi puño y letra.
Yo, que en algún momento de mi vida me he convertido en un
«desocupado lector» y “desempleado caminante”, no he podido
sustraerme a intentar ofrecer mi pequeño discurso y dedicar algún
tiempo a mi hermano Cristian, y a compartir a quienes amablemente se
han acercado a escuchar mis palabras, este sencillo discurso que
quedara grabado en el recuerdo de los que nos hemos congregado en
este agradable recinto; y claro está, para hablarles un poco de mi
hermano.
Voy a compartir con ustedes mi pregón, e iniciar con las palabras de un
gran filósofo, por este filosofillo o filosofastro, como quieran llamarle,
Nietzsche decía: “En el amor hay siempre algo de locura, pero también hay
siempre en la locura algo  de razón”. (Y pues te has enamorado loca y
apasionadamente, has decido casarte). Recuerdo que hace más de dos
lustros, por recomendación tuya, inicie mi aventura filosófica, con una
frase que me habías dicho, la de Nietzsche, el maestro de la sospecha:
“El hombre es un animal insatisfecho, el insaciado el que disputa el dominio
ultimo a animales, naturaleza y dioses”. (Y yo siempre te venía con los
aforismos nietzscheanos, que eran con el escalpelo capaz de agrietar la
piel más curtida). Fue entonces cuando por primera vez perdía la
virginidad filosófica. Y nos decíamos a nosotros mismos que debíamos
ser unos antiasnos par excellence. Pero aquellas horas de lectura no
quedo allí también coincidimos, en nuestra pasión por literatura, en
especial por Camilo José Cela, y que de cuando en cuando, mientras
empinábamos el codo me lo pronunciabas de memoria, con estas
palabras de Pascual: “Yo, señor, no soy malo, aunque no me faltarían
motivos para serlo. Los mismos cueros tenemos todos los mortales al
nacer y, sin embargo, cuando vamos creciendo, el destino se complace
en variarnos como si fuésemos de cera y en destinarnos por sendas
diferentes al mismo fin: la muerte”. (tenemos nuestros libros de
cabecera), somos compañeros de las letras, amantes del arte. (también
de los toriles, huaynos con arpa y violín, el arte popular – vernacular).
Algunas de las anécdotas que compartimos, se rememoran a la infancia
y niñez en el pueblo de Cangallo, lugar donde viniste a este mundo. A
orillas de río pampas, donde los fines de semana, íbamos a pescar. Y
desde siempre hemos sido los mejores amigos, aunque hayamos
peleado o discutido como suele suceder, hemos siempre sabido eludir
nuestras diferencias de caracteres. Serás siempre mi amigo, Cioran
decía: “La amistad solo tiene sentido cuando no somos como nuestros amigos.
Hay que ser diferente de ellos. ¿De que serviría la amistad si no?... Todos
tenemos nuestros propios defectos, nadie es un santo. Pero la amistad debe ser
fecunda, pues nuestros verdaderos amigos son los únicos seres humanos a los
que conocemos íntimamente. El ejemplo de nuestros amigos debe ser útil para
nuestra educación”.
Eres el hermano de entre todos, (Saúl y Lizbeth, cada uno con sus
propias peculiaridades), el que mejor desparpajo tiene al hablar, todos
tenemos cualidades distintas. Eres bondadoso, dadivoso, atento,
aguerrido, elocuente que te distinguen como una rara avis. Eres un
grandioso profesional en el arte del Derecho. Y con esta emoción
espiritual, recuerdo que, alguien decía que el Derecho y Arte coinciden
en ese enriquecimiento humano a través de sus normas buscando
Justicia en las relaciones humanas y Belleza como esplendor del orden
creado.

Las etapas de la vida se nutren de experiencias enriquecedoras. ahora


te contemplo al lado de tu amada mujer, Pierina. Cuando te vi con ella
por primera vez, me dije a mi mismo que era perfecta para ti, querido
hermano, pues se reía a carcajadas con sus chistes y bromas tontas…
(bobas). Quien me conoce sabe que yo soy agnóstico, (para mí esto no
es una broma no se rían), pero vengo con la idea sólida y el deseo
ferviente de que un espíritu ancestral, vendrá a bendecir esta
maravillosa boda. Quizás sea pagano (pues creo en los virtuosos y
clementes apus). Aunque no fuera una persona muy religiosa, no iba a
perderme la boda de mi hermano favorito.

Cristian, una de las personas más significativas en mi historia personal,


eres tú, mi hermano, mi amigo, mi sangre, mi colega de las letras. (de
litros de licor). Querido hermano, estés donde estés quiero que sepas
que te queremos con locura, hoy es un día de alegría y jolgorio, y así
que vivan los novios y como he dicho antes, gracias por hacerme ver
que el amor es posible de verdad. La vida te está ofreciendo lo que
mereces, eres un excelente hermano, un prometedor poeta, gran
abogado, quien me dado su hombro. Tú has sido un elemento
importante para que tuviera una niñez divertida. Evoco con nostalgia,
las andanzas, venturas y desventuras, que tanto suceden en la azarosa
vida. Los juegos de fulbito, y los bailes y los zapateos de las canciones
de toril (huayno, con arpa y violín). No te cambiaría por nada en el
mundo hermano mío, y agradezco a mi madre que te haya concebido,
para ser parte de mi historia, es uno de los mejores regalos que mis
padres me hayan dado, y aunque muchas veces me sienta rudo,
imperturbable y fuerte, soy desagradablemente sentimental (al decir de
Borges).
Está en mi naturaleza hermano, (claro que voy a seguir haciendo
bromas jocosas, poniéndole apodos a tus amigos, creo que es mi deber
como hermano) y nos reiremos a carcajadas. También, nos hemos visto
llorar, por nuestros excesos y caídas, te conozco desde que tengo
memoria, desde que, tenía un lustro, desde los cinco años. Me alegra
decir que mi hermano es una persona fuerte, sabia e independiente.
voy a recordar todas nuestras aventuras infantiles. Todas las etapas y
locuras que compartimos en la niñez y adolescencia.
Finalmente, solo quiero decirte que me siento bendecido de compartir
contigo uno de los días más felices de tu vida. Yo sé que no he sido
alguien quien haya sido un buen hermano, (Un proverbio chino decía:
"El árbol torcido vive su vida, el árbol recto acaba en tabla", proverbio
chino.), y cuando te fuiste de la casa, estuve contento porque había uno
persona menos con quien pelear (es una broma). Y por más que me
negara, sabía que no podía dejar de extrañarte. Sabes que siempre
puedes contar conmigo. Igual sé que siempre yo, puedo contar contigo.
Porque además de ser mi hermano, eres mi mejor amigo.
Napoleón Bonaparte (mi padre putativo) dijo alguna vez: “Una mujer
hermosa agrada a los ojos; una mujer buena agrada al corazón; la primera es
un "dije"; la segunda es un tesoro”. Conozco a Pierina hace dos años. Y te
digo: Tu Pierina te has preocupado por el bienestar de mi hermano y
los has protegido. Mi cuñada se ganó su lugar dignamente en mi
familia, y eso habla de la buena educación que te impartieron tus
padres. Bienvenida seas a mi familia. Hoy ambos inician una nueva
etapa en sus vidas. Sé que van a educar muy bien a sus hijos, por ahora
la engreída, Rocío de la Aurora quien es fruto de un verdadero amor.
Pierina eres un tipo de persona auténtica y paciente, eres una mujer de
bien y buen corazón. La verdad que son una gran pareja. Y no puedo
más que desearles la mayor felicidad del mundo. A ti Cristian te digo:
te casas con quien amas, y empiezas el camino para tener tu propia
familia. Sin duda has elegido a la persona adecuada, y no podríamos
imaginar a otra persona mejor que Pierina para que comparta la vida
contigo. Y no tengo la mínima duda que Pierina sienta un amor real y
sincero por ti. Y los mejores augurios en esta nueva andadura. Hoy
Pierina, mis padres te están entregando a mi hermano, y que los
clementes y virtuosos apus (espíritus ancestrales telúricos) les
bendigan. Los quiero intensamente Manolete Bonaparte. Muchas
gracias…

Discurso.
Quiero agradecer a todos los que estáis aquí, muchas gracias por
haber venido a compartir este día especial. Para los novios, para
nosotros. Gracias de verdad de todo corazón, familiares y amigos.
Gracias a todos (a los que se han equivocado de autobús y están en…
a esos no), ellos no estarán para el banquete. Pues me ha tocado hoy
hablar en la boda de mi hermano. Voy a ser breve, porque tampoco
he tenido tiempo de preparar. Pues hace dos días no estaba invitado
a la boda. Mi hermano, me había mandado una invitación por wasap.
Era un sobre en la que ponía una nota, “espero que lo pases muy
bien”. Al parecer mi mama le ha insistido y mi hermano para
llamarme, me llamo y me dijo: Te invito a lo boda. Me dijo: te voy
poner dos condiciones: Una es esta misma en la que tenía que
pronunciar este discurso. Y la segunda más importante es que tenía
que hacerlo sobrio, y estoy sobrio. Para preparar un discurso lo
primero que hice fue buscar en google. Discurso para boda, y el
problema es que me salieron 10 mil entradas, hacer un resumen era
difícil, así que cambie de idea. Bueno pensé en una poesía, siempre
es bueno en una boda. Además, como un día para hoy, en el que
celebramos la máxima expresión del amor. Una poesía queda bien,
pensé en pablo Neruda (le gusta casi todo el mundo), Paolo Coelho
también. Así que buscando Pablo Neruda me aparecieron frases
como esta:
- Para que nada nos separa que nada nos una (un amigo que se va
divorciar lo voy a guardar)
- Están corto el amor y tan largo el olvido (joder que depresión,
esto no le puedo decir)
Mi hermano está pensando: “Me gusta cuando callas porque estas
como ausente”. Así que descarté a Neruda. Y dije voy a escribir unas
anécdotas. Siempre quedan bien, le gustan a todo mundo.
Cristian era muy fatal estudiando (era muy bueno), su profesor le
pregunto: ¿Quién escribió el quijote? – yo no he sido. Su padre…
Cristian era así, me acuerdo de otra anécdota graciosa. Mi hermano
me llamó y me dijo que no contara las anécdotas, igual las voy a
contar.
No me quedado otra que he escrito de mi puño y letra. Y este es el
discurso: Cristian sabes lo que tus padres y hermanos te queremos,
sabes que estamos orgullosos de ti, y que a pesar de ser una familia
pequeña en números siempre hemos sido grandes en amor. Ya desde
pequeños me toco cuidar de ti. Y cuando creciste tu también hiciste
lo propio. Es verdad que nos peleábamos mucho éramos unos críos.
Pero, también es verdad que desde entonces no lo hemos vuelto a
hacer. Sabes que siempre puedes contar conmigo. Igual que siempre
yo puedo contar contigo. Porque además de ser mi hermano, eres mi
mejor amigo. Hoy te casas, ya no somos esos niños que éramos
cuando estamos juntos. Yo estoy feliz, por el simple hecho de que
hermano, tu estas feliz. Te casas con quien amas, y empiezas el
camino para tener tu propia familia. Sin duda has elegido a la
persona adecuada, y no podríamos imaginar a otra persona mejor
que Pierina para que comparta la vida contigo. Y no tengo la mínima
duda que Pierina sienta un amor real y sincero por ti. (Por que
Guapo y rico no creo que seas). Cristian te llevas a una mujer
trabajadora, guapa, inteligente, trabajadora. Tu Pierina te llevas a un
hombre… te llevas a mi hermano. La verdad que son una gran
pareja. Y no puedo más que desearles la mayor felicidad del mundo.
Y los mejores augurios en esta nueva andadura. Los quiero de
verdad.

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