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Tema 4

Columna vertebral:

La columna vertebral o raquis es un largo tronco óseo, ubicado en la linea medio dorsal del cuerpo.

La columna vertebral esta constituida por piezas oseas superpuestas, las vertebras, cuyo numero es de 33 a 34. La
columna comprende 4 porciones que, de arriba hacia abajo son: cervical, torácica, lumbar y pelviana. Existen:

-7 vértebras cervicales.
-12 vertebras torácicas.
-5 vertebras lumbares.
-9 (o 10) vertebras pelvianas soldadas entre si para formar 2 piezas oseas distintas: el sacro y el cóccix.

La longitud de la columna vertebral varia con la talla del individuo. Es, término medio, de 73 a 75 centímetros en el
hombre y de 60 a 65 centímetros en la mujer.

Esta longitud disminuye en la vejez, como consecuencia del aplastamiento de los discos intervertebrales que aumenta
la concavidad anteroposterior: la cifosis.

Curvaturas vertebrales.

La columna vertebral no es rectilínea y en el hombre presenta dos clases de curvaturas: unas en el plano sagital
llamadas curvaturas ante el posteriores y las otras en el plano frontal o curvatura lateral. Debido a la posición que el
feto adopta en el útero (encorbado, con la cabeza doblada sobre el pecho y los músculos flexionados sobre el
abdomen) su columna vertebral describe una cola curva, de concavidad anterior a la que se denomina curvatura fetal
primaria.

Al nacer tenemos que la columna adopta las siguientes curvaturas:

– Cuando el lactante es capaz de levantar la cabeza, se endereza la rama superior de la curvatura fetal, originándose
a nivel de la región cervical una nueva curvatura, es decir concavidad posterior.

– Cuando el niño comienza a ponerse de pie se origina otra nueva curvatura a nivel de la región lumbar también de
concavidad posterior.

En oclusión podemos decir que el raquis del adulto presenta tres curvaturas entero porte río res: una dorsal de
concavidad anterior que representa la curvatura fetal primaria y dos curvaturas secundarias o de compensación ambas
de concavidad posterior, ubicadas en la región cervical y lumbar. A estas curvaturas que en conjunto se podrían
denominar curvaturas móviles, por cuanto están constituidas por vertebras articuladas, se la añade una cuarta
curvatura (curvatura alternativa) ubicada en la región sacrococcigea, que es una curvatura fija, ya que las vertebras
que constituyen el sacro y el cóccix se sueldan entre si.

Desde el punto des vista fisiológico las 3 curvaturas móviles y alternativas sirven para llevar la linea de gravedad de
la cabeza y del tronco al eje de sustentación que pasas por la pelvis. En efecto la pelvis es la que sirve de punto de
apoyo a la columna vertebral y por eso, no es de extrañar que sobre ella se inserten los músculos extensores y flexores
de la columna, de cuya contracción depende el equilibrio vertebral en todas las posiciones. Las curvaturas laterales
son menos pronunciadas y constante que las curvaturas anteroposteriores, pero se observa en la mayoría de los casos
3 curvaturas:

- una cervical de convexidad a la izquierda.


- una dorsal convexa a la derecha.
- una lumbar convexa a la izquierda.

De estas tres curvaturas, la mas importante es la curvatura dorsal, la cual se extiende de la extiende de la IV a la VIII
vertebra con su vértice en el disco que separa la V de la VI dorsal.

Curvaturas vertebrales: son anteroposteriores y laterales.

1. Curvatura anteroposterior: se encuentran 4 (figs 48 y 49).

La primera, cervical, es convexa hacia adelante; la segunda, torácica, es convexa hacia atrás; la tercera, lumbar, es
convexa hacia adelante, y la cuarta, sacra, es convexa hacia atrás. Solamente la última es fija. Las otras 3 se
modifican can los movimientos de flexión o de extensión.

Estas curvaturas existen en el esqueleto articulado de los cuerpos vertebrales, pero también intervienen la forma de
los discos intervertebrales; es así que en la unión lumbosacra, por ejemplo, donde la concavidad sacra continua la
“lordosis" lumbar (convexidad anterior), el ángulo intervertebral abierto hacia adelante está ocupado por un disco
muy alto adelante y mucho mas delgado hacia atrás.

Las curvaturas anteroposteriores de la comuna vertebral denotan la adaptación del hombre a la posición de pie. Ello
se demuestra tanto por su evolución durante el crecimiento como por la anatomía comparada:

– En el recién nacido, la columna vertebral es regularmente convexa hacia atrás. En el 3er o 4to mes se esboza la
curvatura cervical cuando el bebé comienza a levantar la cabeza. Cuando comienza a mantenerse pie y a caminar se
dibuja la curvatura lumbar (2 años). Esta se afirma alrededor de los 5 años cuando el niño salta, corre y desarrolla su
caja torácica.

– En la mujer, la curvatura lumbar es mas marcada que en el hombre. Pareciera que la actitud del embarazo ha
proseguido en una serie,incalculable de generaciones y ha terminado por crear un tipo de transmitido por v ía
hereditaria, que se manifiesta netamente con la pubertad t adquiere todo su desarrollo en la edad de las funciones
maternas.

Si bien existen variaciones étnicas, se debe señalar también la influencia, muy evidente, desde hace 30 o 40 años,
de la profesión: se opone entonces fácilmente el raquis cóncavo hacia adelante del trabajar de la tierra o del buró
crata sedentario, a la columna enhiesta y curvada del soldado. En nuestros días se distingue más frecuentemente al
individuo, ya sea niño, adolescente o adulto, que mantiene su musculatura y su flexibilidad articular, del que lleva
una vía inactiva: en el 1er caso se observa talla curvada, hombros echados hacia atrás y pared abdominal paralela al
raquis; en el 2do, dorso abovedado, “escápulas aladas", tórax estrecho, hombros proyectados hacia adelante y pared
abdominal prominente;

– En el hombre, el desarrollo de la musculatura cervical da a la cabeza la posición necesaria para la exploración


visual del mundo que lo rodea, mientras que la curvatura lumbar demuestra que s ólo los miembros inferiores
participan en la locomoción. Los procesos espinosos lumbares son horizontales así como los procesos transversos.
Estas salientes ofrecen a los músculos que en ellas se insertan un apoyo orientado exactamente en el sentido requerido
para la posición del pie.

2. Curvaturas laterales: Son imperceptibles en el hombre normal, con la excepción de una curvatura torácica convexa
hacia la izquierda que correspondería al predominio funcional del lado derecho (en los diestros). Pueden hacerse
evidentes algunas anomalías vertebrales (hemivertebras), en KAS destrucciones parciales de un cuerpo vertebral, o
bien cuando se originan por una debilidad muscular (parálisis, falta de uso). Los acortamientos de un miembro o
pleures í a pueden tambi é n aumentar las curvaturas laterales determinando una escoliosis, generadora de
deformaciones raquídeas suprayacentes y subyacentes y también deformaciones torácicas.

Fig. 48. Columna vertebral, vista lateral. Las flechas indican los limites de las diferentes
regiones de la columna. 1,7,19,24 y 34, indican el número de orden de la vertebra que señalan,
con tanto de arriba hacia abajo.

Fig. 49. Corte mediano anteroposterior de la columna vertebral. A, limite de las regiones
carvical y torácica; B, limite de las regiones torácica y lumbar; C, limites de las regiones
lumbar y sacra; D, limite de las regiones sacra y coccigea.
Curvaturas patológicas de la columna vertebral:

Como consecuencia de enfermedades óseas o musculares pueden


encontrarse curvaturas de la columna vertebral muy pronunciadas,
así tenemos que:

– la curvatura dorsal excesiva se conoce como cifosis.


– la curvatura lumbar muy pronunciada se llama lordosis.
– las curvaturas laterales anormales, a cualquier nivel se
denominan escoliosis.

1. Estática vertebral:

El equilibrio de las vertebras, unas por relación a las otras, y el mantenimiento de este equilibrio durante los
movimientos o los esfuerzos depende, de una pequeña parte, de la forma o el encajamiento a nivel de los procesos
(apófisis) articulares. Intervienen además otros 2 elementos:

– la solidaridad intervertebral dada por las articulaciones;


– la musculatura vertebral.

Acción de la musculatura: frente a la columna vertebral actúa como los “obenques de un mástil" obenques vivientes,
contráctiles y con tono vigilante. La electromiografia (Basmajian) demuestra que la actividad muscular es débil en
la posición de pie; el ser humano no se mantiene por largo tiempo en una misma posición; de forma imperceptible se
desplaza lateralmente exigiendo un pequeño gasto en la posición de pie. El aumento de peso de la masa abdominal y
la adiposidad de la pared anterior del tronco aumentan este gasto.

Los mismos estudios demuestran que es necesaria una actividad muscular importante para el mantenimiento de la
rectitud del tronco en la posición sentado; las personas poco musculosas tienden a inclinarse hacia adelante en esta
posición. Ello provoca un cansancio de la articulaciones posteriores que se manifiesta por “lumbalgias" (por ejemplo,
choferes de vehículos pesados).

Movimientos de la columna vertebral:

La columna cerebral puede realizar 5 movimientos: flexión, extensión inclinación lateral, rotación y circunduccion.
Estos representan la suma de los movimientos elementales de pequeña amplitud entre 2 vertebras, pero cuya suma
se traduce por un movimiento más amplio.

A. Flexión y extensión:

1. Mecanismo articular: Durante la flexión se asiste a los siguientes desplazamientos entre 2 vertebras vecinas:

– separación de los procesos (apófisis) espinosos;


– aplastamiento del disco intervertebral en su parte anterior;
– deslizamiento de los procesos (apófisis) articulares entre si.
El centro del movimiento se ubica en los procesos (apófisis) articulares, inferiores.

En la extensión, los desplazamientos se suceden en sentido inverso. La limitación de estos movimientos se produce:
en la flexión por la tensión de los ligamentos posteriores y en la extensión, por el contacto de los procesos (apófisis)
articulares de las vertebras adyacentes, por ello el movimiento de extensión es mas limitado.

2. Acciones musculares: La flexión está asegurada por músculos; los abdominales (rectos oblicuos y transversos)
tienen una acción preponderante. La extensión se realiza con la participación de los músculos erectores de la espina,
en su totalidad.

Cuando se busca examinar la movilidad de la columna vertebral (del raquis) se requiere fijar la pelvis; en efecto, la
flexión del tronco hacia adelante se produce también en las articulaciones coxofemorales, la pelvis firmemente
compnectada a la columna vertebral (al raquis) bascula sobre los músculos.

Estos movimientos tienen variaciones regionales; los mas móviles son el cervical y el lumbar según las cifras
siguientes:

Segmento cervical entre C1 y T1 (D1) 70°, 63°


Segmento torácico (dorsal entre T1 y T11 (D1 y D11) 55°, 54°
Segmento lumbar entre T12 y S1 61°,46°

Los movimientos de flexoextension de la columna modifican la posición de la cabeza en relación con el tronco; los
de flexoestension que se realizan en la región toracolumbar y lumnosacra modifican la posición del tronco, en relaci
ón con la pelvis.

En la práctica, el máximo de fuerza es requerido para levantar en peso enderezando el tronco, lo que significa una
fuerte contracción para enderezar la columna (extensión). Estos movimientos solicitan al máximo la musculatura
posterior traumatizándolos las articulaciones, el contenido del conducto (raices espinales {raquídeas}) y los mú
sculos, que se manifiesta por lumbalgias de esfuerzo.

B. Inclinación lateral:

1. Mecanismo articular: se realiza alrededor de un eje anteroposterior que pasa por el canal vertebral (conducto
raquídeo); horizontal a nivel de la columna lumbar, se inclina unos 45° en la cervical.

En este movimiento el disco se aplasta en su parte lateral, se separa del lado opuesto y se produce un desplazamiento
de las superficies articulares posteriores. Este movimiento está limitado, del lado hacia donde se inclina la columna,
por el contacto entre el proceso (apófisis) articular inferior con la raiz del proceso (apófisis) transverso de la vertebra
subyacente.

Esta amplitud es máxima en la regiones cervical y lumbar y limitada en la región torácica (dorsal); en ella la rotació
n asociada con la inclinación lateral es prácticamente imposible.

2. Acciones musculares: Además de la acción de los músculos interés piñales y del espinal del tórax (espiespinosos),
la contracción unilateral de los músculos erectores de la espina (de los canales vertebrales) provoca la inclinación
lateral.
C. Rotación:

Se procede como consecuencia de la torsión de las vertebras alrededor de un eje vertical.

1. Mecanismo articular: Si se consideran 2 vertebras adyacentes, el desplazamiento que se produce es muy pequeño.
Está limitado por la forma de los procesos (apófisis) articulares y de sus superficies, en especial a nivel de la columna
lumbar. En este movimiento, el disco intervertebral es vigorosamente solicitado, pero la poca elasticidad de sus fibras
permiten un estiramiento limitado.

2. Acciones musculares: La contracción unilateral del transverso espinal (espinoso) lleva la cara anterior del tronco
hacia el lado opuesto. Los músculos longissimus thoracis (dorsal largo) y sacrolumbar orientan la cara anterior del
tronco hacia el lado que se contraen.

El movimiento de rotación acompaña, casi siempre, a la inclinación lateral en las regiones cervical y lumbar.

D. Circunduccion:

Resulta de la combinación de los movimientos descritos.

Fig. 68. Movimientos del tronco. A. Flexión, B, extensión; C, inclinación lateral; D, rotación

E. Variaciones y evolución de la movilidad de la columna:

La movilidad de la columna varia entre los diferentes individuos de una misma raza, y en tres razas diferentes. De ha
comprobado una diferencia de más del doble entre europeos y bantúes, de la misma edad: 42° de la flexión a la
extensión en los primeros y 87° en los segundos.

La edad es el factor primordial que interviene modificando los discos intervertebrales, los ligamentos, etc. El niño
posee una columna extremadamente móvil y flexible; ello disminuye gradualmente con la edad. Existe cierta adaptaci
ón de la columna a la forma requerida. Pero con los años y sus limitaciones los ligamentos se fibrosan, los discos se
vuelven rígidos y aparecen osificaciones periarticulares si no se ha ejercitado la columna.
La columna es exigida en la extensión: existen cálculos que establecen que para levantar 100kg de peso del suelo, se
transmite a la unión lumbosacra una fuerza de 1.000kg. Este esfuerzo puede realizarse gracias a la contracción
simultanea, demostrada por las electromiografia, de los músculos abdominales y torácicos que representan apoyo
suplementarios, distantes de la columna vertebral.

F. Acción del núcleo pulposo:

En los movimientos precedentes descritos, el núcleo pulposo desempeña una acción preponderante. De acuerdo con
Rouvière, se debe aceptar que la presión que soporta este núcleo es una dirección, es distribuida en todos los sentidos.
En él confluyen los movimientos desplazándose hacia el centro del disco. Este movimiento está limitado por el
anillo fibroso periférico del núcleo. Cuando por diversas razones este anillo se debilita o se rompe (traumatismo), el
núcleo puede proyectarse hacia atr ás o posterolateralemente, hacia el vpcanal vertebral (conducto raqu ídeo)
pudiendo comprimir las raíces espinales (raquídeas) (lumborradiculalgias de origen discal).

La degeneración del núcleo pulposo contribuye a limitar los movimientos de los cuerpos vertebrales.

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