SEXUALIDAD Y DIABETES:

CÓMO SE RELACIONAN, COMPLICACIONES

Y CONSEJOS
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SEXUALIDAD Y DIABETES: 3
CÓMO SE RELACIONAN, COMPLICACIONES Y CONSEJOS

DISFUNCIÓN SEXUAL FEMENINA 5

¿QUÉ ELEMENTOS SE VALORAN PARA HABLAR DE DISFUNCIÓN 5

SEXUAL FEMENINA?

DISFUNCIÓN SEXUAL MASCULINA 6

¿QUÉ ELEMENTOS SE VALORAN PARA HABLAR DE DISFUNCIÓN 6

SEXUAL MASCULINA?

¿QUÉ FACTORES RELACIONADOS CON LA DIABETES 7

INFLUYEN EN LA DISFUNCIÓN SEXUAL?

FACTORES FÍSICOS 7

FACTORES PSICOLÓGICOS 9

CONSEJOS 10

BIBLIOGRAFÍA 12
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SEXUALIDAD Y DIABETES: CÓMO SE RELACIONAN,

COMPLICACIONES Y CONSEJOS
*En este e-Book el término “mujer” y “femenino” hace referencia a personas cuyos genitales son los generalmente ligados

al sexo biológico femenino y el término “hombre” y “masculino” hace referencia a personas cuyos genitales son los

generalmente ligados al sexo biológico masculino. Existen otras realidades como las personas trans, intersexuales y con

desarrollo sexual diferente que no se van a detallar en este e-Book.

La sexualidad es, tal y como expone la Organización Mundial de la Salud (OMS) [1]: “un aspecto central del ser

humano presente a lo largo de su vida. Abarca al sexo, las identidades y los papeles de género, el erotismo, el placer, la

intimidad, la reproducción y la orientación sexual (…).” Se vivencia y se expresa de distintas formas a nivel individual y

personal y a través de las relaciones interpersonales. Al tratarse de un aspecto de la realidad del ser humano, está

influenciada por la interacción de múltiples factores: factores biológicos – de salud, de enfermedad-, psicológicos,

socioeconómicos, culturales, religiosos y enmarcada en los distintos contextos políticos e históricos.

La diabetes mellitus al tratarse de una enfermedad crónica puede afectar a nivel físico y psicológico repercutiendo

a su vez en la sexualidad y salud sexual de la persona que vive con diabetes. Algunos estudios realizados en mujeres

y hombres con y sin diabetes (tanto tipo 1 como diabetes tipo 2) apuntan a que hay una mayor prevalencia de

disfunción sexual entre las personas con diabetes que en aquellas sin esta enfermedad.
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A nivel fisiológico, la respuesta sexual femenina y masculina incluye la integridad y normal funcionamiento del

sistema vascular y del sistema nervioso sensitivo y autonómico. A nivel físico, el hecho de tener diabetes, sobre

todo, si existe a medio plazo un control deficiente, puede alterar tanto a nivel vascular como a nivel del sistema

nervioso, alterando la respuesta sexual y conllevando una situación de disfunción sexual. Por otra parte, en la esfera

psicológica, el hecho de tener una enfermedad crónica como es la diabetes, aumenta la frecuencia de depresión

y ansiedad así como la aparición con cierta frecuencia de “miedos” o inseguridades relacionadas con la propia

enfermedad.

Tanto en hombres como en mujeres con diabetes, aparte de los factores físicos y psicológicos que pueden afectar

en la función sexual también hay que considerar los que guardan relación con las relaciones interpersonales y de

pareja debiendo explorar estos aspectos de la vida de cara a identificar los aspectos que puedan estar afectando a

la sexualidad.
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DISFUNCIÓN SEXUAL FEMENINA

La disfunción sexual femenina engloba un grupo variado de causas caracterizado por alteraciones a nivel de la

respuesta sexual o de la experimentación de placer sexual de la mujer.

¿QUÉ ELEMENTOS SE VALORAN PARA HABLAR DE DISFUNCIÓN

SEXUAL FEMENINA?

Entre los elementos que se tienen en cuenta para valorar el grado de disfunción sexual femenina cabe destacar:

La disminución del deseo sexual y de excitación

Lubricación insuficiente

Disminución en la frecuencia de orgasmos

Presencia de dolor o molestias en relación con el coito (dispareunia)

Percepción subjetiva global baja en cuanto a la propia satisfacción sexual

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DISFUNCIÓN SEXUAL MASCULINA

De forma global, se denomina “disfunción sexual masculina” cuando hay una alteración a nivel de la respuesta

sexual o de la experimentación de placer sexual del hombre. Un hombre con diabetes puede tener con mayor

frecuencia problemas de disfunción sexual y que esta aparezca a edades más tempranas.

¿QUÉ ELEMENTOS SE VALORAN PARA HABLAR DE DISFUNCIÓN

SEXUAL MASCULINA?

Entre los elementos que se tienen en cuenta para valorar el grado de disfunción sexual masculina cabe destacar:

Disminución del deseo sexual y la excitación

Alteraciones de la erección

Eyaculación

Orgasmo

La diabetes mal controlada puede producir alteraciones vasculares y nerviosas que afecten entre otras partes al

pene y al área genital, pudiendo desencadenar problemas en la vida sexual masculina.

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¿QUÉ FACTORES RELACIONADOS CON LA DIABETES

INFLUYEN EN LA DISFUNCIÓN SEXUAL?

FACTORES FÍSICOS

Infecciones genitourinarias

La diabetes se considera por sí misma un factor de riesgo para presentar infecciones del tracto urinario

que pueden ser localizadas (cistitis) o complicadas asociando fiebre o dolor a nivel lumbar traduciendo una

infección de vías urinarias altas (pielonefritis).

Existen además algunos fármacos para el tratamiento de la diabetes, los llamados inhibidores de SGLT2 que,

como efecto adverso, predisponen al desarrollo de infecciones genitourinarias.

En cualquier caso, el hecho de presentar los síntomas típicos de una infección urinaria (dolor al orinar,

escozor, tenesmo uretral, sensación de micción incompleta, micciones frecuentes, presencia de mal olor o

sangre en la orina…) puede interferir a nivel sexual.

Por otro lado, en las mujeres con diabetes también es más frecuente presentar infecciones por hongos a

nivel vulvovaginal, generalmente candidiasis. Los síntomas en este caso suele ser picor intenso y quemazón

localizada a nivel genital interfiriendo igualmente en la esfera sexual. En los hombres con diabetes, también

hay cierta predisposición al desarrollo de infecciones por hongos a nivel del glande como es la balanitis.
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Sequedad vaginal

En situación de hiperglucemia, la presencia de deshidratación afecta también a la hidratación y elasticidad de

la mucosa vaginal, habiendo una menor lubricación vaginal e incomodidad en las relaciones sexuales

Complicaciones crónicas, neuropatía:

Cuando ha habido un control insuficiente de la diabetes, a medio plazo puede afectarse el sistema nervioso.

A nivel de los nervios sensitivos, puede desarrollarse neuropatía diabética con pérdida de sensibilidad

influyendo a nivel sexual al presentar una menor reactividad al estímulo táctil y vibratorio pudiendo disminuir

la satisfacción sexual a dicho estímulo.

Complicaciones crónicas, vasculopatía:

En el caso también de presentar alteración vascular por la diabetes, puede haber una atrofia del clítoris y una

respuesta sexual reducida que a su vez conduce también a una menor lubricación vaginal pudiendo conllevar

molestias con el coito.

En el caso del hombre, la disfunción eréctil o impotencia consiste en la dificultad o imposibilidad permanente

y repetida de lograr y mantener una erección que permita tener unas relaciones sexuales satisfactorias.

Afecta a un porcentaje considerable de varones entre los 40 y 70 años, siendo más frecuente en aquellos

con diabetes.

La disfunción eréctil se puede producir por alteración a nivel de los nervios y de la sensibilidad del pene

(alterada en el caso de que se tenga neuropatía diabética) y por alteración en la vascularización de las arterias

del pene, que no permita la llegada suficiente de flujo sanguíneo. Entre otros factores, la diabetes influye en

esta alteración vascular y en el desarrollo de neuropatía.

Complicaciones crónicas, otras:

En relación con otras complicaciones crónicas asociadas a la diabetes como son la retinopatía, úlceras por

pie diabético o alteración autonómica cardíaca, puede haber una influencia global negativa en la calidad de

vida e, indirectamente, en la actividad sexual.

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FACTORES PSICOLÓGICOS

En cuanto a los posibles factores psicológicos que pueden influir en presentar disfunción sexual femenina destacan

los siguientes:

Síntomas ansioso-depresivos: esto no es exclusivo de las mujeres y hombres con diabetes pero sí pueden

presentarlo con más frecuencia, entre otros motivos porque la diabetes es una enfermedad crónica con todo

lo que ello implica y puede asociar complicaciones crónicas que deterioren la calidad de vida y de satisfacción

sexual.

Temores en relación con la enfermedad:

• Miedo al rechazo, desarrollando temor a ser “rechazados” como pareja por el hecho de tener diabetes.

Esto puede menoscabar el plano de la sexualidad.

• Miedo a presentar una hipoglucemia durante las relaciones sexuales o el propio hecho de presentarla

pueden afectar negativamente en la sexualidad.

• Miedo a un embarazo no deseado: a este temor, que no es exclusivo de las mujeres con diabetes, se

sumaría el hecho de que, al ser una mujer con diabetes puede haber un embarazo de mayor riesgo y

puede haber mayor frecuencia de malformaciones en el feto, sobre todo si la diabetes no está bien

controlada.

• Insatisfacción con la percepción de la imagen corporal, ligada o no al hecho de tener diabetes y esto,

a su vez, influir en la calidad de la vida sexual

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CONSEJOS
La sexualidad es muy compleja por lo que son muchos los factores que influyen en la misma. Es importante lograr

un adecuado equilibrio entre todos ellos pudiéndose recomendar:

Mantener una buena gestión de la diabetes:

Una buena gestión global de la diabetes, sentirse seguro en cuanto al conocimiento de la misma, de

la resolución de posibles situaciones que se pueden dar en el día a día ayuda a tener más sensación de

seguridad, reflejándose esta también en la vida sexual. Por otro lado, un buen control de la glucosa ayuda a

evitar situaciones de hiperglucemia, hipoglucemia y, a mediano plazo, minimiza las complicaciones crónicas

que pudieran influir en la salud sexual.

Mantener una buena gestión de otros factores de riesgo cardiovascular:

Además de un adecuado control de la diabetes, es importante presentar unas adecuadas cifras de colesterol

y de presión arterial, una vida activa y evitar el fumar o el abuso del alcohol así como el sedentarismo.

Trabajar en una relación de pareja sana:

En el caso de que se tenga pareja y existan además problemas en la relación de pareja, es fundamental

hablarlo abiertamente y plantear solicitar ayuda.

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Propiciar un ambiente cómodo y de disfrute para la sexualidad:

Además de conocerse a sí mismo y a la pareja, en caso de tenerla, un ambiente cómodo, estimulante y el

apoyo de otras herramientas como pueden ser los geles lubricantes y estimulantes pueden ayudar a mejorar

la disfunción sexual.

Consultar con los especialistas necesarios:

Se puede consultar con el equipo médico que considerará si ante una situación de disfunción sexual, precisa

un estudio amplio hormonal endocrinológico, una valoración individual o en pareja por parte de Psicología o

ser remitido a un especialista de Ginecología o de Andrología y Urología para realizar un diagnóstico adecuado

y proponer distintas opciones de tratamiento.

Recibir el tratamiento adecuado:

En caso de necesitar tratamiento puede ser necesario el abordaje psicológico y la psicoterapia en algunos

casos. En otros casos, puede ser recomendable plantear distintos fármacos en función de las causas e incluso

plantear opciones quirúrgicas en algunas ocasiones por parte del profesional cualificado.
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BIBLIOGRAFÍA

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