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El sistema financiero

Carl reconoce que en la etapa anterior le habría ido mucho mejor si hubiera seguido
las recomendaciones del director del banco. Directamente, ha podido comprobar la
importancia que tienen los bancos para las personas y las empresas. Sabe por las
crisis financieras y bancarias sucedidas, que el negocio de los bancos es muy
complejo por las implicaciones y relaciones que mantiene con la economía.

Los bancos son las empresas más visibles del sistema financiero, pero éste es mucho
más amplio. En realidad, el sistema financiero está formado por una amplia multitud
de entidades e instituciones, públicas y privadas, que están velando constantemente
por el adecuado funcionamiento de la economía y por la conservación del valor del
dinero.

En síntesis, el sistema financiero es un conjunto de autoridades, entidades, mercados


e instrumentos financieros regulado mediante normas legales, cuyas funciones
fundamentales son:

Facilitar el intercambio ►

Facilitar el intercambio de excedentes de dinero entre los agentes económicos con

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recursos (ahorradores) y los agentes económicos con déficit de éstos (demandantes
de financiación).

Facilitar el movimiento ►

Facilitar el movimiento del dinero en la economía, es decir, facilitan la realización de


transacciones: pagos, depósitos, compras, transferencias electrónicas,….

Cada vez que usamos dinero,


interactuamos con el sistema financiero de alguna manera. Es parte de nuestra vida
diaria. Las instituciones financieras facilitan el movimiento del dinero en la economía,
nos permiten hacer pagos, depósitos, compras, transferencias electrónicas, entre
otras cosas.

Así pues, el sistema financiero establece canales de intercambio monetario entre los
diferentes agentes económicos nacionales e internacionales. Para conseguir el nivel
de confianza y seguridad requerido para todos sus usuarios, el sistema financiero
está integrado por tres tipos de instituciones:

Reguladoras ►

Establecen las normas, leyes y requerimientos que se deben cumplir en el sistema


financiero.

Operativas ►

Ofrecen servicios a sus clientes y se encargan de captar y colocar el ahorro y la


inversión. Por ejemplo, bancos, cajas de ahorros, cooperativas de crédito, entidades
aseguradoras, fondos de inversión, sociedades de valores...

Apoyo ►

Asisten a las instituciones operativas para facilitar sus procesos. Por ejemplo, la Bolsa,
el Mercado de Deuda Pública Anotada, el Mercado de Derivados...

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Respecto a las entidades operativas, dado que las necesidades de los diferentes
agentes son tan diversas y sus requerimientos tan diferentes, entre las entidades
operativas podemos encontrar una multitud de entidades e instituciones altamente
especializadas. Entre éstas podemos diferenciar cinco tipologías:

Bancos
Bolsa
Derivados
Seguros y fianzas
Pensiones

El funcionamiento y la coordinación de los elementos del sistema financiero se


realizan a través de normas legales que, entre otras funciones:

Determinan las condiciones de desempeño de la actividad de las entidades e


instituciones financieras, así como sus competencias.
Regulan el funcionamiento de los mercados financieros.
Establecen ciertas condiciones necesarias para la emisión y formalización de
activos, instrumentos y productos financieros, y para su negociación con éstos.
Señalan qué entidades e instituciones pueden usar unos u otros activos,
instrumentos y productos financieros.
Establecen mecanismos de protección de los ahorradores que actúan como
inversores financieros.
Facilitan la compensación de cobros y pagos de las distintas entidades
financieras.

Además, hay que tener en cuenta que, a lo largo de los años, la economía va
desarrollándose e internacionalizándose. Esto significa que la capacidad de ahorro,
las necesidades de inversión y el ámbito geográfico de las operaciones varían con el
tiempo. Por tanto, el sistema financiero tiene que ir adaptándose a las circunstancias
cambiantes.

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