Impacto provocado por la minería en la zona de Santa Lucía

En la región de Santa Lucía, Castellanos, ubicado al noroeste de la provincia de Pinar del

Río, en Cuba, ha sido años de objeto de una explotación minera intensiva lo que ha
ocasionado consecuencias negativas al medio ambiente, por los sedimentos que contiene
gran cantidad de metales pesados que originan drenaje de ácidos contaminantes. Esta
investigación fue realizada por, Damaris Gallardo Martínez y Noel Bruguera Amarán. por
el Instituto Superior Minero Metalúrgico de Moa, en Cuba, en el año 2015. La problemática
que estaba sucediendo en Santa Lucía, son por labores mineras que han generado
contaminación por metales pesados debido al arrastre de sedimentos ricos en estos metales
que originan un drenaje ácido de pasivos ambientales, contaminando las aguas
superficiales. Los objetivos que se planteados es que, ya se habían planteado algunas
medidas de mitigación de los impactos negativos de las variables ambientales y los
proyectos minero-metalúrgicos ya ejecutados, pero lo planteado no fue exitoso. Esta
investigación se justifica porque los impactos negativos ya provocados por elementos
contaminantes tras llevar a cabo la actividad minero-metalúrgica en dicho lugar, tras esto se
debe realizar un diseño efectivo de las medidas de mitigación y monitoreo para la
recuperación de la región ya afectada.
En Cuba ha habido pocos antecedentes investigativos por el manejo de la información de
dicho país, pero en el año 2009, el Sr. Francisco Gallardo con apoyo de la misma
organización que realizo una investigación (con El Instituto Superior Minero Metalúrgico
de Moa) hallaron que, “existen pasivos minero-metalúrgicos que facilitan la contaminación
por dispersión eólica de las aguas terrestres, empeorando la situación ambiental que
presenta la región de estudio.” En el marco conceptual se desarrollará por el método
geológico de itinerarios irregulares en los que se eligieron 14 puntos de muestreo, teniendo
en cuenta para la selección la extensión de la contaminación in situ en cada zona de interés.
En el marco legal, Cuba tiene una ley minas de el año 1959 que estipula que,” es propiedad
estatal socialista de todo el pueblo, entre otros, el subsuelo, las minas, las aguas y los
recursos naturales tanto vivos como no vivos dentro de la zona económica marítima de la
República.”
En la metodología se utilizó la matriz de Leopold, lo cual se desarrolla para establecer
relaciones causa–efecto, a través de dos listas de chequeo. Para la evaluación de los
impactos se necesita la estimación subjetiva de la magnitud del impacto, en una escala de 1
a 10, siendo el signo (+) un impacto positivo y el signo (–) uno negativo. En el análisis de
datos respecto a las transformaciones que experimentaron los cristales de la pirita
(morfología cúbica) y otra que se propone reconocer las posibles fases oxidadas de los
sulfuros primarios y sus productos de oxidación a sulfatos. Lo que se discute es el
monitoreo anual de las aguas residuales producto de las escorrentías y los cuerpos de aguas
superficiales de los ríos Santa Lucía y Palma; el monitoreo de los suelos asociados a la
región de estudio y las evaluaciones de los índices de supervivencias de las áreas
reforestadas, así como realizar monitoreos de contaminantes atmosféricos.
Los hallazgos que se reportan es el incremento de los contenidos de CO2 orgánico que se
asocian a las bacterias ferrooxidans, el ZnO, SO3, Al2O3 y la disminución del Fe2O3,
respectivamente. Además, crecimiento de dichos microorganismos. Los que se halló con
los resultados ya presentados es que las áreas afectadas con las especies autóctonas y las
resistentes a estas condiciones ambientales, es que para que estas no desaparezcan, se tiene
que realizar un acondicionamiento de las de las aguas residuales, para ello se propone como
agente neutralizante más efectivo el óxido de calcio (cal viva), para la remoción de los
metales en los efluentes de Santa Lucía, Castellanos. Las conclusiones a las que se llega es
la ocurrencia de intensos procesos de drenaje ácido de minas que confirman el severo
deterioro ambiental de la región. Además, se reportan, por vez primera, dos fases
mineralógicas que facilitan la contaminación de la región, la oxi-sal melanterita y la
natrojarosita. También no se puede pasar desapercibida que se identificaron los principales
impactos ambientales de acuerdo con su magnitud y su importancia, los cuales se
recomienda las medidas de mitigación y monitoreo ya mencionadas.