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1. Análisis del modo de ser del Dasein (primera fase desde Ser y tiempo (1927))
2. Análisis de cómo es el ser (segunda fase: el Heidegger de la Khere (vuelta))
Heidegger dice sobre Husserl que él no reflexionó sobre el ser del sujeto. En Ser y
tiempo su intención es hacer una reflexión fenomenológica sobre el ser del sujeto.
En Ser y tiempo pretende responder a cuál es el sentido del ser del sujeto. Al tomar al
sujeto como existencia es un análisis del sentido de la existencia.
El Dasein es pregunta por su ser y el ser en general. La pregunta por el sentido del ser es
nuestro carácter, el del Dasein. Esta pregunta la pone Heidegger como fondo ontológico
fundamental.
El ser es aparecer cómo o en cuánto. El ser se expresa en modos distintos que son los
entes. No se pregunta por el ser absoluto, sino por un ser determinado. Se da el
acontecimiento de ser de un modo determinado.
“Permitir ver lo que se muestra” = subraya la segunda dimensión que es una “pasividad
activa” en el Dasein. La realidad se muestra desde sí, pero para que se muestre desde sí
el sujeto tiene que permanecer en una “pasividad activa”
Un “mostrarse algo” equivale a que yo no lo constituyo, sino que pongo las bases para
que se dé. El modo de ser se nos muestra, no es construible.
A los universales de la existencia los llama existenciarios. Cada rasgo al que se refiere
es un existenciario. La fenomenología se convierte en un análisis existenciario (un
análisis de los rasgos universales existenciarios de la existencia) o hermenéutica del
Dasein u ontología fundamental (la más básica). Se pasa de una fenomenología idealista
a un análisis existenciario.
En el texto 1.4 se presenta un existenciario de los más básicos, análisis del párrafo:
(1) El “ser-ahí” no es una cosa, “al Da-sein le va, en su ser, este, su ser”. Da-sein
(existencia) – ser-ahí = ser en un contexto determinado, esto implica: a) que la
esencia es la existencia (lo esencial en el ser humano es la existencia, ser-ahí).
No cree que el ser humano tenga una esencia fija, quiere introducir nuevas
significaciones a conceptos tradicionales. No es que tenga una esencia que se
actualiza y que dé lugar a la existencia como se consideraba en la tradición, sino
que la esencia es la existencia; b) El Da-sein no es algo determinado, en anhelo
de ser o hacer por ser. En cada contexto en el que soy, soy anhelo de ser, soy
indeterminado, soy “mi hacerme”, nos hacemos a nosotros mismos.
(2) El Dasein en su estar siendo se juega su ser. Tu ser se pone en juego en su estar
siendo. La relación del Da-sein consigo mismo (jugársela) es una “relación de
ser”, es una relación no contingente. Lo inherente del Da-sein es la relación que
tiene consigo mismo cuando se juega su ser en el estar siendo = relación de ser.
DASEIN
En lo profundo hay una demanda de existencia. El anhelo de ser es la capa profunda (el
acontecimiento= en la que está instaurado el Dasein quiera o no quiera.
Mathesis universalis: ciencia universal que englobaría a todas las ciencias y contiene a
la matemática como su ciencia más clara. La Mathesis universalis = ciencia del orden y
la medida.
En el texto 4.1 se tratan las actitudes ante lo que nos rodea, modos de estar entre los
entes:
MUNDO DE SENTIDO
VORHANDENSEIN ZUHANDENSEIN
El “ser-en-el-mundo equivale a habitar el mundo y no simplemente “estar en”. Habitar
es poder pertenecer a un mundo de sentido. El ser-en-el-mundo es un existenciario.
En la actitud Zuhandensein está uno con el ente habitando un mismo mundo de sentido
participativamente. “Forma parte de”, “estar dentro de”…equivale al abandono de la
perspectiva de 3ª persona. Siempre que se habita un mundo de sentido se está en
relación con el ente, “estoy con” este ente formando parte de un contexto.
4.1. “detenerse en”= entenderlo en el sentido del tiempo de Aión, “demorarse en”
haciendo que se muestre a sí mismo saliéndose del tiempo cronológico (Cronos). Aión
es el tiempo existencial, vivencial. El “detenerse en” tiene que ver con el pensar puesto
que el pensar surge en el habitar.
Para tomar distancia (Vorhandensein) primero hay que habitar, es decir, “ser en”
(Zuhandensein). Ejemplo:
a) Voy al cine → habito la película → puedo tomar distancia (3ª persona) y hablar
de aspectos específicos de la película.
b) Voy al cine→tomo distancia, me centro en aspecto específicos→no he habitado
la película.
Sorge implica:
1. “Pre-ser-se”: yo habito, habitando no solo estoy aquí y ahora, sino que estoy en
un proyecto de ser, siempre estoy en un proyecto de ser. El proyecto de ser, es
proyectivo, tiene un horizonte de sentido. Yo habito un proyecto de ser hacia un
horizonte de sentido. Representación del proyecto de ser:
HORIZONTE DE SENTIDO
Lo que hago en este momento no es solo “aquí y ahora”, sino que lo hago
dentro de un proyecto de ser en dirección al horizonte de sentido.
Este proyecto surge de mi propio “hacer por ser”. Lo que nos imponen actualmente
supone el derrumbamiento de nuestro proyecto de ser.
2. “Curarse de”; “procurar por”: estoy “curándome de” en virtud del proyecto
de ser que soy, intento que el ser se intensifique. Promociono el ser
intensificándolo de acuerdo al proyecto al que estoy arrojado.
“Procurar por” es en referencia al otro. Se caracteriza por un “dejar ser”, no es
abandonar al otro, sino que es aproximarse a él de tal modo que procuremos que
emerja desde sí. “Dejar ser” es llevarlo a un lugar donde él mismo sea capaz de
proyectarse desde sí. Es tratar al otro de tal manera que lo conducimos a una
situación en que dejamos que se muestre desde sí.
Heidegger nos quiere transmitir que todos estamos arrojados a un proyecto de ser. La
sociedad nos ofrece proyectos exógenos para tratar de sustituir el proyecto de ser que
surge de nuestra propia existencia. Heidegger dirá que nos daremos cuenta de que no
san impuesto un proyecto de ser externo y entonces dejaremos emerge un proyecto de
ser que puedo vivir, pero que no puedo construir. EL proyecto de ser es algo en lo que
reparamos, algo que ha surgido de ti como acontecimiento y no algo que
reconstruyamos nosotros. Lo único que podemos hacer es preparar las condiciones para
el surgimiento.
El ser “habla”: esta es una metáfora que utiliza Heidegger para tratar de explicar que el
Dasein no dirige la aparición del ser. El ser tiene un hilo conductor que arrastra al
Dasein y que permite que este lo aprehenda. Que yo sea ser es el acontecimiento de
estar siendo.
La otra cara es que si yo habito pre-siéndome entonces habito en relación con entes. Si
se habita un mundo y hay relación Zuhandensein con los entes que habitan ese mundo
de sentido contigo esto significa que lo estás cuidando.
El Dasein es posibilidad, somos relativos al poder ser y por eso el Dasein tiene la
responsabilidad de hacerse a sí mismo, de hacer por ser. En función del proyecto de ser
que yo soy se tiene una relación u otra con los entes que habitan mi mismo mundo de
sentido.
Todo esto ocurre en la existencia, entonces ¿qué ocurre con la conciencia, con lo
teorético? Heidegger no está diciendo que la conciencia carezca de sentido, pero lo
teorético es derivado respecto de lo existencial. El pensar conscientemente es derivado
del habitar de un modo concreto. El modo en que yo reflexiono dependerá del modo en
el que habite, del modo en el que sea en el mundo. Atendiendo a las condiciones de
emergencia, al génesis de la conciencia, la conciencia emerge por una disidencia del ser
en el mundo.
Heidegger afirma que la posición “ante los ojos” respecto de los entes ya es un modo de
ser y no una abstracción del modo de ser y hay que demorarse en ese modo de ser. Si de
verdad se está en el ser ante los ojos, se está siendo. Por lo tanto, Heidegger no está en
contra de la técnica, sino que a esta le da valor, pero deja claro que se parte del habitar y
a partir de ahí se va a lo teorético (estar ante los ojos).
Lo que viene es una inversión (siguiendo a Nietzsche). Lo que se viene es un ser que ya
no habita el mundo y que parte directamente del Vorhandensein. Esta es la época en la
que nos encontramos inmersos y de la que debemos salir.
Hay tres existenciarios en Ser y tiempo que constituyen el modo de ser proyectivo:
el encontrarse, el comprender y el habla.
LENGUAJE
HABLA
El problema del MAN (UNO): la existencia puede ser propia o impropia. En la vida
cotidiana al estar el Dasein arrojado todo está deformado, ¿cómo sabe que tiene un
proyecto propio? Porque lo empuña, lo propio respecto al proyecto de ser de uno es
empuñarlo, “apoderarse de el”. Que el proyecto de ser sea propio es que yo lo empuñe-
Pero esto es sustituido en el mundo cotidiano por la creación de un proyecto externo. El
MAN es el generador de proyectos desde fuera.
1. Habladurías:
1.1.No hay cosa misma que lleve las riendas, es un mero hablar referido a lo
hablado del habla. Hay un vacío de significación, no hay cosa misma.
1.2.El hablar se convierte en un mero transmitir y repetir. Lo transmitido y
repetido pretende llenar el vacío interno.
1.3.El que sí trata los problemas y las cosas lo hace como si lo hubiera
comprendido todo, como si no hubiese un fondo interrogante del asunto,
como si no hubiese nada más por lo que preguntar.
Se da la primacía del ver, se considera que el mundo está ahí para ser visto, para
ser contemplado y esta primacía del ver se opone al ser a la mano
(zuhandensein). El ver es un ver des-alejador. Des-alejar es no empuñar la cosa,
sino que se mantiene distante aunque sea una distancia próxima.
El ser hasta ahora ha sido analizado desde una analítica existenciaria del Dasein. Este
proceder tiene un sesgo kantiano, el sesgo de una filosofía trascendental. Este sesgo está
centrado en el análisis del sujeto como condición previa del análisis del mundo.
Heidegger reconoce este sesgo en Ser y tiempo, el Dasein es una re-significación del
sujeto (sustituye al sujeto clásico). Se mira al ser desde la estructura existenciaria del
Dasein.
Ahora quiere ir directamente al Ser sin pasar por la estructura existenciaria del Dasein.
¿Qué es el SER? El ser humano aparece como alguien que se admira con lo que le
rodea. Aprehende lo que le rodea como un mundo que ES (admiración humana). ¿Cómo
aparece en nuestra vida cotidiana la pregunta por el ser? La pregunta por el ser
acompaña al ser humano continuamente. Darse cuenta de que algo está ahí ES, esto es
algo que no puede hacer un ordenador puesto que no puede experimentar que algo ES,
pero nosotros sí y lo hacemos sin darnos cuenta. Asumir que lo que hay ES nos
pertenece como seres humanos.
En el SER hay una diferencia entre el ser en sentido estricto y el ente. El ser es lo que da
sentido al ente. El mundo nunca aparece separado sin una interpretación, su
interpretación es el ser de un modo o en cuánto. El ser no es algo separado, es siempre
ser del mundo, del ente, pero el ser no es el ente ni viceversa. El ser solo puede ser el ser
del ente.
El ser necesita del Dasein para presentarse de un modo determinado y el Dasein necesita
del ser para el hacer-por-ser, necesita que acontezca el ser. La actividad el Dasein es una
respuesta a la petición o apelación del SER.
Des-encubrimiento Ocultamiento
DIMENSIÓN ONTOLÓGICA
Occidente está en decadencia, en esta tiene lugar el olvido del ser. El ser humano ha
dejado de preguntarse por el sentido del ser y se pregunta por el ente y busca un
fundamento en el plano óntico.
La realidad se constituye de entes que se fundan unos en otros y hay un ente primero del
cual dependen los otros. A partir de la primera Ilustración griega se olvida la dimensión
ontológica del acontecimiento y el ser humano se interroga solo por relaciones ónticas.
DIOS→ C → B → A
Las corrientes filosóficas del S.XX realizan una crítica al mundo contemporáneo.
a) Abandono del ser y penuria: Siendo así esta época, con esta estructura de
emplazamiento, resulta que es una apertura que tiende a hacer confortable la
existencia del hombre en ella. En todos los ámbitos, el ser humano se
experimenta a sí mismo como “señor de la tierra”. Esta arrogancia con la que se
coloca ante todo lo que le rodea le hace experimentarse “a gusto”, se siente
complacido. Esto hace que nuestra época sea muy peligrosa porque al sentirse
complacido puede darse que ya no se pregunte por el ser y que se llegue a un
olvido del olvido del ser (texto 11.4).
Hay una recíproca necesidad entre el ser humano y el ser. Este último necesita
del Dasein para aparecer desde sí y el Dasein necesita del ser porque es su
abrigo, su ámbito en el que habita. En el caso de no habitar, nos convertimos en
constructores que aplican normatividad y que, por ejemplo intentan dominar una
conversación sin que el ser fluya, es decir, que no se participa en la
conversación.
Lo que tiene lugar en la comprensión técnica del mundo como máximo peligro
es que el Dasein al sentirse confortable caiga en el olvido de la penuria (su
necesidad de ser) y esto será la máxima penuria. Su penuria es la no penuria.
Todo ente se funda en una falta de fundamento, la idea de “Dios ha muerto” indica la
muerte de la idea de que el mundo tiene fundamento. Lo óntico se funda en una
comprensión de sentido que carece de fundamento.
La explicitación del nihilismo impropio: el ser humano se enroca en una relación con
cuestiones ónticas de tal modo que deja fuera al ser. Dejar fuera al permanecer fuera
quiere decir convertir al ser en un ente- Lo único que le concierne al ser humano es lo
que está presente, lo que permanece fuera de lo óntico no le importa . En el olvido del
ser, el nihilismo propio acontece en la impropiedad de sí mismo. El olvido del ser es el
acontecimiento propio del ser en su impropiedad, como contradiciéndose a sí mismo. Es
la negación del ser en su aparecer.