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TOMA LA DESICION CORRECTA

V: Josué 24:15: Si mal os parece servir a Jehová, escogeos hoy a quien serviréis, si a los
dioses a quienes sirvieron vuestros padres cuando estuvieron al otro lado del rio, o a
los dioses de los amorreos en cuya tierra habitáis; pero yo y mi casa serviremos a
Jehová.

E: Escoger: Servir: Otros dioses: Mi casa:

R: Cuando las personas del pueblo de Israel llegaron a la tierra prometida, se estaban
preparando para establecer sus casas permanentes, después de haber permanecido en
batallas y de trasladar sus tiendas de campaña de un lugar a otro. Josué, los lleva a
tomar una decisión ¿A quién van a servir? Al Dios verdadero, poderoso, amoroso o a
dioses pertenecientes a los pueblos paganos. Los encamina a elegir entre los dioses de
Egipto, pueblo que los había esclavizado durante más de 400 años o al Dios que los ha
liberado y los ha acompañado día y noche en el desierto durante 40 años. Cada familia,
cada persona tenía que hacer una decisión que haría la diferencia no solo para sus
vidas sino toda su historia.
Así como el pueblo de Israel, a cada uno de nosotros le toca tomar la misma decisión,
¿Servir a Dios o servir a otros dioses? Otros dioses son todo lo que en nuestra vida
ocupa el lugar de Dios.
Marcos 12:30 nos recuerda las palabras de Cristo: Amarás al Señor tu Dios con todo tu
corazón, contada tu mente y con todas tus fuerzas. Ante ésta afirmación, cabe
preguntarnos ¿A quién estoy sirviendo con todo mi corazón? ¿A quién estoy sirviendo
con toda mi mente? Y ¿A quién estoy sirviendo con todas mis fuerzas? Es bien fácil
determinar: ¿A quién le dedicas mucho de tu tiempo? ¿En quién o en qué piensas
más? ¿En qué o en quién gastas todos tus recursos? Sin darnos cuenta y sin ser
conscientes, en muchas ocasiones convertimos el dinero, el placer, el poder, los
paseos, el deporte, los propios deseos en dioses, porque les dedicamos más tiempo,
pensamos más e invertimos nuestros recursos más en ellos.
Hay muchas opciones, sin embargo, la que es totalmente importante es servir al Señor.
Podemos optar por otros dioses falsos como la ropa, las joyas, la televisión, el internet
por medio de las redes sociales, pero lo que realmente nos resulta vital es caminar con
Dios, tener su presencia en nuestras vidas, en nuestras familias.
En el año 2009, cuando falleció mi papá, me di cuenta y sentí que necesitaba un
cambio en mi vida, en ese momento pensaba tenerlo todo dinero, carro, familia, pero
no tenía lo más hermoso que es la presencia de Dios. En el momento de la partida de
mi papá comencé a sentir un vacío en mi corazón e intenté buscar cómo llenarlo, en
ese entonces descubro que quien me podía dar la paz es la presencia de Dios. Tomé la
decisión de buscar a Dios asistiendo a la iglesia Monte Sinaí, donde entendí que no
estaba solo, aunque mi padre terrenal había partido, pero tenía a mi lado a mi padre
celestial, en ese momento comienza una nueva etapa en mi vida. Ahora me doy cuenta
de que tomé la decisión correcta, vivo espiritual y materialmente con las bendiciones
de Dios en mi trabajo y en mi familia.
Josué, tomó la decisión de servir al Señor junto con su familia. ¿Tú, estás decidido a
servir al Señor? Nuestras decisiones siempre tienen consecuencias buenas o malas no
solo para nosotros sino también para otras personas. Si eliges servir al señor, te
traerá resultados buenos.

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