Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
I NSTITUTO DE
G EOLOGÍA Y
R ECURSOS
SEGEMAR
SERVICIO GEOLÓGICO
M INERALES MINERO ARGENTINO
Boletin Nº 406
Buenos Aires - 2015
Programa Nacional de Cartas Geológicas de la República Argentina 1:250.000
Sabrina Crosta
REFERENCIA BIBLIOGRÁFICA
Fotografía de tapa: vista desde el sur del cerro San Romeleo, donde se encuentra la
antigua mina de cobre sedimentario alojada en las areniscas rojizas del Grupo
Neuquén.
ISSN 0328-2333
ES PROPIEDAD DEL INSTITUTO DE GEOLOGÍA Y RECURSOS MINERALES – SEGEMAR
PROHIBIDA SU REPRODUCCIÓN
Av. General Paz 5445 (Colectora provincia) Av. Julio A. Roca 651 | 3º Piso
Edificio 25 | 1650 - San Martín - Buenos Aires 1067 - Ciudad de Buenos Aires
República Argentina República Argentina
(11)5670-0211 | telefax (11)4713-1359 telefax (11)4349-3162 | www.segemar.gov.ar
RESUMEN ..................................................................................................................... 1
ABSTRACT ..................................................................................................................... 1
1. INTRODUCCIÓN .................................................................................................................. 1
3. METALOGÉNESIS ................................................................................................................ 7
3.1. DESCRIPCIÓN DE LOS PRINCIPALES DEPÓSITOS ................................................ 7
3.1.1 Azufre ..................................................................................................................... 7
3.1.1.1 Hilda Mary ................................................................................................. 7
3.1.2. Cobre ..................................................................................................................... 9
3.1.2.1 César .......................................................................................................... 9
3.1.2.2 Grupo Minero El Manzano ......................................................................... 9
3.1.2.3 La Carmelita .............................................................................................. 12
3.1.2.4 Pablo Daniel ............................................................................................... 14
3.1.2.5 San Romeleo .............................................................................................. 15
3.1.2.6 Modelo genético para las mineralizaciones de cobre en areniscas ............ 19
3.1.3 Cobre-Vanadio ........................................................................................................ 20
3.1.4 Hierro ..................................................................................................................... 21
3.1.4.1 Cerro Mayán .............................................................................................. 21
3.1.4.2 Cerro Nevazón y Quebrada Mala ............................................................. 22
3.1.5. Plomo ..................................................................................................................... 23
3.1.5.1 Juan Carlos ................................................................................................ 23
3.1.6 Uranio ..................................................................................................................... 26
3.1.6.1 Ranquil Có-Los Petisos.............................................................................. 26
3.2. FAJAS METALOGENÉTICAS ......................................................................................... 27
3.2.1 Faja del Arco Volcánico Cretácico superior-Paleoceno (POS-AVKSTPa) ........... 27
3.2.2 Faja del Arco Volcánico Terciario-Mioceno (POS-AVTM) ................................... 29
3.2.3 Faja del Arco Volcánico Plio-Cuaternario (POS-AVTPcQ) ................................... 29
3.3 METALOTECTOS .............................................................................................................. 29
3.3.1 Litológicos ............................................................................................................... 29
3.3.2 Estructurales ........................................................................................................... 30
3.4 ANOMALÍAS ..................................................................................................................... 31
3.4.1 Anomalías de color reconocidas a partir de imágenes ASTER ............................... 31
3.4.2 Anomalías geoquímicas ........................................................................................... 31
3.4.2.1 Metodología de muestreo y selección de muestras de archivo .................. 31
3.4.2.2 Análisis de factores .................................................................................... 32
3.5 HISTORIA METALOGENÉTICA ..................................................................................... 34
4. CONCLUSIONES ..................................................................................................................... 35
6. BIBLIOGRAFÍA ..................................................................................................................... 40
Godeas
BARRANCAS 1
muestreo de la mineralización y de su roca de caja; Bonfils et al. (1971) y Bonfils y Fallet (1972, 1974).
y descripción de las labores mineras. A partir de las Posteriormente, se efectuaron los trabajos de Arballo
muestras obtenidas, se realizaron cortes (1984) y Fusari et al. (1998) para la Dirección Na-
petrográficos y pulidos calcográficos. Asimismo, se cional de Minería.
efectuaron análisis químicos de elementos mayori- La Comisión Nacional de Energía Atómica tam-
tarios por fluorescencia de rayos X y análisis de bién ha explorado algunas zonas con manifestacio-
elementos de interés metalogenético mediante nes nucleares (Achen, 1958).
espectrometría de emisión atómica por plasma En las últimas décadas, los skarns ubicados en
inductivo (ICP). el faldeo oriental de la Cordillera del Viento han sido
La actividad minera en la zona ha sido rudimen- estudiados por Franchini e Innes (1997), Curci y
taria y de pequeña escala; se ha desarrollado, princi- Franchini (2001), Franchini et al. (2003) y Pons et
palmente, durante las décadas de 1950 y 1960 con la al. (2010).
explotación de azufre (mina Hilda Mary), cobre (mi-
nas El Manzano, San Romeleo y La Carmelita) y
plomo (mina Juan Carlos). 2. SINTESIS GEOLÓGICA E
El área que abarca la presente publicación fue INTERPRETACIÓN GEOTECTÓNICA
objeto de numerosos estudios prospectivos por parte
de la Dirección Nacional de Minería y Geología y la El área que comprende la Carta Minero-
Dirección General de Fabricaciones Militares (den- Metalogenética Barrancas abarca: el extremo sur de
tro del marco del Plan Cordillerano); pueden men- la provincia geológica de Cordillera Principal
cionarse los informes realizados por Catalano (1943), (Irigoyen, 1972) y el segmento occidental de la
Aparicio (1945), Barrionuevo y Elizalde (1950), Se- Payenia (Polanski, 1954). El primer sector se carac-
rrano y Devito (1952), Ré y Murici (1956), Ré (1960), teriza por la presencia de secuencias sedimentarias
Elizalde y Tabacchi (1961), Navarro (1967), Salaberry acumuladas en depocentros de sinrift triásicos y de
y Nuñez (1967), Salaberry (1968), Dirección Gene- sag jurásico-cretácicos, y por el desarrollo de la de-
ral de Fabricaciones Militares (1969), Canessa (1969), formación ándica que originó las fajas plegadas y
BARRANCAS 3
Figura 2. Mapa con las principales características geológicas de los Andes Centrales Australes entre los 34º y 40º LS. El
rectángulo rojo indica la ubicación de la Carta Minero-Metalogenética Barrancas. Modificado de Ramos y Kay (2006)
corridas de Malargüe y Chos Malal mediante inver- extensional evidenciado por alineamientos de volca-
sión tectónica del sistema extensional. Este sector nes monogénicos (Bermúdez et al., 1993; Ramos y
también se distingue por presentar una serie de vol- Folguera, 2005a y 2011).
canes plio-pleistocenos, unos pocos aún activos (Ra- De acuerdo con Ramos y Kay (2006), el sector
mos, 1999a). En territorio neuquino, dentro de la pro- de la cordillera entre los 35º y 39ºS muestra las si-
vincia geológica de Cordillera Principal, Ramos et guientes características que lo diferencian del resto
al. (2011a y b) reconocieron otras unidades de los Andes argentinos-chilenos (fig. 2):
morfoestructurales como la Precordillera Neuquina
norte, que abarca la Cordillera del Viento, y el Maci- • presenta una extensa actividad magmática
zo del Tromen. Hacia el sur, la Cordillera Principal cenozoica en la región del antepaís
engrana con la Cordillera Patagónica que se carac- • un frente de corrimientos activo ubicado al oeste
teriza por afloramientos casi continuos del batolito de una faja plegada y corrida cretácica superior
patagónico. a miocena, inactiva
Con respecto a la Payenia, se caracteriza por • gran evento extensional plioceno y pleistoceno
sus extensos campos volcánicos, correspondientes
mayoritariamente a coladas de basaltos alcalinos del El mencionado segmento de los Andes puede
retroarco andino y por la presencia de un fallamiento ser dividido en dos regiones con historias evolutivas
4 Carta Minero Metalogenética 3769-I
distintas. Estas regiones pueden limitarse por el están representados por el Grupo Cuyo (Forma-
lineamiento Cortaderas, un rasgo estructural lineal ción Los Molles y Formación Lajas) (Weaver,
de orientación NO-SE. El área que abarca la Carta 1931, Arregui et al., 2011a). Una nueva ingresión
Minero-Metalogenética Barrancas se encuentra marina se produjo durante el Calloviano tardío-
principalmente al norte del mencionado lineamiento Oxfordiano, con la consecuente depositación de
(fig. 2) y se caracteriza por la distribución de las sedimentos de plataforma (Formación La Man-
rocas ígneas del retroarco mioceno a holoceno ga) (Stipanicic y Mingramm en Groeber, 1951;
(Payenia), y por haber sufrido mayor deformación Stipanicic, 1966; Arregui et al., 2011b). Luego, una
compresiva durante el Mioceno superior, respecto caída del nivel del mar llevó a la acumulación de
a la zona al sur del mencionado lineamiento y la evaporitas y materiales calcáreos (Formación
deformación miocena es insignificante (Ramos, Auquilco) (Weaver, 1931; Arregui et al., 2011b).
1978; Kay et al., 2006; Ramos y Kay, 2006; Ra- Hacia el Kimmeridgiano, se depositaron areniscas
mos y Folguera, 2010). Se asume que el lineamiento continentales (Formación Tordillo) (Groeber, 1946,
Cortaderas es el límite sur del flat slab mioceno Stipanicic, 1966, Spalleti et al., 2011), y para el
(Kay et al., 2006). Tithoniano se produjo una nueva transgresión mari-
na y se depositaron las unidades correspondientes
2.1 HISTORIA GEOLÓGICA Y al Grupo Mendoza (JMKI c S) (Stipanicic et al.,
EVOLUCIÓN TECTÓNICA DEL ÁREA 1968; Leanza et al., 2011).
Durante el Cretácico tardío, cambiaron las con-
La historia geológica de la comarca se inicia con diciones de régimen extensional por condiciones
la finalización del Ciclo Orogénico Gondwánico y con netamente compresivas debido a modificaciones en
el comienzo de un importante período extensional la losa subducida vinculadas a la velocidad de con-
desde el Pérmico superior al Triásico, cuando tuvo vergencia, a la dirección del vector de convergencia
lugar un magmatismo ácido considerado post- y a la disminución del ángulo de inclinación (Ramos,
orogénico y asociado a una tectónica distensiva 1999b; Mosquera y Ramos, 2005; Ramos y Folguera,
supracortical generada por el colapso orogénico de- 2005b; Ramos y Kay, 2006; García Morabito, 2010;
bido al cese de la subducción (Grupo Choiyoi, Tunik et al., 2010; Ramos et al., 2011b; Arregui et
PsTRM m PO) (Kay et al., 1989; Mpodozis y Kay, al., 2011c). Esto provocó la inversión de gran parte
1990; Llambías et al., 2003 y 2007; Llambías et al., de las estructuras extensionales previas y dio lugar
2003 y 2007; Llambías y Sato, 1990, 1995 y 2011). al comienzo de la estructuración cordillerana
Durante el Triásico tardío y hasta principios del (Mpodozis y Ramos, 1989; Vergani et al., 1995;
Jurásico, continuó el régimen extensional que permi- Macdonald et al., 2003). Como resultado del levan-
tió el desarrollo de depocentros limitados por fallas tamiento, se produjo el desacople definitivo con el
extensionales y considerados como cuencas de sinrift, Océano Pacífico. En esta etapa, la cuenca pasó a
donde se depositaron las primeras unidades estar dominada por subsidencia por carga tectónica
sedimentarias que conforman la base de la columna (Franzese et al., 2003; Howell et al., 2006). Bajo
estratigráfica de la Cuenca Neuquina (Formación estas condiciones, se produjo la depositación de se-
Remoredo, TRSJI c IC) (Groeber, 1946; Gulisano, cuencias continentales rojizas (Grupo Neuquén, KS
1981; Carbone et al., 2011). c RA) (Stipanicic et al., 1968; Garrido, 2011), porta-
A partir del Jurásico inferior, se instaló en el doras de depósitos de cobre.
margen pacífico un régimen de subducción con una En el límite entre el Cretácico y el Terciario, se
importante componente extensional (Ramos, 1993, produjo una nueva ingresión marina somera, esta vez
Ramos, 1999b, Mpodozis y Ramos, 2008, Ramos, desde el Atlántico (Windhausen, 1926; Wichmann,
2010, Ramos et al., 2011b) y, a partir del Jurásico 1927; Bertels, 1979; Uliana y Dellapé, 1981), la cual
medio, comenzó la etapa de subsidencia térmica depositó calizas y limolitas calcáreas (Grupo
(Uliana et al., 1989, Vergani et al., 1995). Esto per- Malargüe, KSTPa c A) (Digregorio y Uliana, 1980;
mitió la ingresión marina desde el Pacífico y la Rodríguez, 2011).
depositación de sedimentos fuertemente controla- Durante el Cenozoico, la evolución tectónica y el
da por los cambios eustáticos en el retroarco. La magmatismo asociado estuvieron relacionados a las
cuenca pasó de estar conformada por depocentros variaciones en el ángulo de subducción de la corteza
aislados a ser una única cuenca de gran tamaño. oceánica. El empinamiento y la subhorizontalización
En este período, se acumularon potentes secuen- de la placa subductada controlaron el grado de defor-
cias de sedimentos marinos que, hasta el Calloviano, mación y la localización del arco magmático, así como
BARRANCAS 5
sus características químicas y petrográficas (Mpodozis A partir del Plioceno medio y hasta el Pleistoceno
y Ramos, 1989; Kay, 2002). se produjeron las intrusiones de cuerpos graníticos
El intervalo comprendido entre fines del (Grupo Domuyo, TPcmQPl am) (Miranda et al.,
Cretácico y el Paleoceno se caracterizó por una eta- 2006).
pa de deformación y de expansión del arco Durante el Pleistoceno, la extensión se propagó
magmático desde Chile hasta aproximadamente los hacia el eje de la Cordillera Principal y grandes volú-
69º45’S (Spagnuolo et al., 2012a). El arco está re- menes de vulcanitas ácidas e intermedias (forma-
presentado en el área de estudio por andesitas y ciones Tilhué, Payun Matru y El Portezuelo,
pórfiros andesíticos y dioríticos (formaciones Riolita Cerro Domo, Formación Planchada y
Collipilli y Pelán, KSTPa av), algunos, como los Andesitas Matru; TPcsQH av) fueron eruptadas
del flanco oriental de la cordillera del Viento, de im- desde una serie de calderas y domos volcánicos (Ra-
portancia metalogenética por alojar depósitos de mos y Kay, 2006).
skarn ferrífero. La columna estratigráfica se completa con los
La etapa compresiva se habría extendido en la depósitos de remoción en masa, aluviales y
región hasta el Eoceno superior y fue sucedida por coluviales (QH d) que llegan hasta la actualidad.
una etapa extensional debida a la fragmentación de la
placa de Farallones y a la desaceleración de la placa 2.2 UNIDADES
Sudamericana, lo cual provocó un nuevo régimen TECTONOESTRATIGRÁFICAS
extensional en el arco y en el retroarco de la región
que se prolongó hasta el Mioceno inferior (Folguera A partir de lo expuesto en el capítulo anterior, se
et al., 2003). Esta fase de extensión oligocena supe- definieron trece unidades tectonoestratigráficas (cua-
rior-miocena inferior generó estructuras normales que dro 1) que surgen de la reclasificación y del agrupa-
controlaron la acumulación de secuencias basálticas miento de las unidades litoestratigráficas represen-
(Grupo Palauco, TOsMi m RA) (Galarza et al., tadas en la Hoja Geológica 3769-I Barrancas a es-
2009). A fines del Mioceno inferior, finalizó la exten- cala 1:250.000 (Narciso et al., 2004). Para esto, se
sión y se produjo una expansión del arco neógeno aso- han realizado una serie de consideraciones previas
ciada a un nuevo episodio de somerización de la placa basadas en datos actualizados de las edades de al-
subductada. El arco volcánico mioceno está repre- gunas de las unidades magmáticas:
sentado por rocas de composición predominante
andesítica (Grupo Molle y Formación Huincán, • Los pórfiros dioríticos, dioríticos-cuarzosos y
TM av) (Nullo et al., 2002; Kay et al., 2006; gábricos expuestos entre el flanco oriental de la
Spagnuolo y Folguera, 2008; Spagnuolo et al., 2012b) cordillera del Viento y el arroyo Curri Leuvú, en
de interés metalogenético. Este nuevo estadio com- el ángulo sudoccidental de la Carta, y que habían
presivo, con una expansión del frente orogénico en el sido asignados a la Formación Pelán (Llambías
Mioceno superior de más de 60 km hacia el este, co- et al., 1978) con edad santoniana superior-
rresponde al inicio de la etapa más importante de ple- campaniana inferior, han sido datados por
gamiento y al desarrollo de las cuencas de antepaís Franchini et al. (2003) quienes obtuvieron eda-
durante el Cenozoico (Silvestro y Atencio, 2009). Es- des entre 62 y 56 millones de años. De esta ma-
tas cuencas fueron rellenadas por depósitos nera, estos cuerpos hipabisales quedan asigna-
sinorogénicos (formaciones Agua de la Piedra, dos al arco volcánico cretácico tardío-paleoceno.
Loma Fiera, Tristeza y Letelier; TOQPl d SO)
(Criado Roque, 1950; Dessanti, 1978; Combina et al., • Algunos de los cuerpos subvolcánicos de Punti-
1997 y 2000; Silvestro et al., 2005; Arcila y Ramos, lla de Huincán y los intrusivos del cerro Bayo del
2008; Combina y Nullo, 2011). Zampal, del cerro Las Llaretas y del cerro Bayo
Con posterioridad al Mioceno, el arco magmático de la Esperanza, que Narciso et al. (2004) ha-
fue retrocediendo hasta emplazarse en su ubicación bían asignado al Oligoceno inferior, han sido
actual; esto evidenciaría un empinamiento del plano datados y reasignados al Cretácico tardío-
de subducción de la placa de Nazca (Ramos y Paleoceno por Spagnuolo et al. (2012a); por lo
Folguera, 2005b; Folguera et al., 2010) que trajo aso- tanto, son vinculados también al mencionado arco.
ciado el colapso extensional de ciertas estructuras y
un importante volcanismo basáltico alcalino (forma- • Los afloramientos de basaltos olivínicos defor-
ciones Coyocho, Chapua, El Puente y Tromen; mados asignados al Grupo Palauco con edad
TPcQH m RA). miocena media son considerados, aquí, de edad
6 Carta Minero Metalogenética 3769-I
Cuadro 1. Unidades tectonoestratigráficas definidas a partir del reagrupamiento de las unidades litoestratigráficas reconocidas
por Narciso et al. (2004), previa reconsideración de algunas edades.
oligocena superior-miocena inferior de acuerdo tores, y cuyo rango varía entre los 19 y 10 Ma
con Galarza et al. (2009). (Valencio et al., 1969; Linares y González, 1990;
Irigoyen, 1993; Silvestro y Atencio, 2009;
• La mayor parte de los afloramientos asignados Spagnuolo et al., 2012b).
al Grupo Molle y a la Formación Collipilli es atri-
buida, en la presente Carta, al arco volcánico • La edad del Grupo Domuyo fue reasignada al
mioceno en acuerdo con las edades obtenidas a Plioceno-Pleistoceno a partir de las edades re-
partir de dataciones realizadas por diversos au- portadas por Miranda et al. (2006) para el grani-
BARRANCAS 7
to de Cerro Domuyo y por Folguera et al. (2007) tán intruidos por cuerpos subvolcánicos dacíticos
para el cerro Palao. adamellíticos y graníticos del Plioceno-Cuaternario
como en el cerro Domuyo y en el cerro Palao. Este
último y otros anticlinales menores exponen en sus
3. METALOGÉNESIS núcleos una discordancia mayor entre las secuen-
cias del Grupo Mendoza y las andesitas y basaltos
3.1 DESCRIPCIÓN DE LOS PRINCIPALES del Mioceno medio (Folguera et al., 2007).
DEPÓSITOS Estos domos están asociados a una alteración
que produce una intensa decoloración de las rocas
3.1.1 AZUFRE (ver capítulo 3.4.1).
Groeber (1947) y Péndola y Rossetto (1962)
3.1.1.1 Hilda Mary describieron, sobre la línea que une los intrusivos de
los cerros Palao y Domuyo, manifestaciones post-
Generalidades volcánicas del tipo solfatara en los intrusivos dacíticos
que se encuentran alojados en las andesitas y los
Introducción: se encuentra sobre la ladera oes- basaltos miocenos.
te del cerro Bayo, en el extremo sur de la sierra de la
Cruzada, provincia del Neuquén y a una altura supe- Geología del depósito
rior a los 2500 m snm. Se accede desde la localidad
de Chos Malal recorriendo 45 km por la ruta provin- Litología del entorno: de acuerdo con Ré y
cial 2 hasta Tricao Malal; desde allí se continúa 50 Murici (1956), Péndola y Rosetto (1962) y la Direc-
km por una huella minera en mal estado de conser- ción General de Minería (1980), el depósito se em-
vación. plaza en una secuencia volcánica neógena, que incli-
Producción y destino: el yacimiento fue explo- na 15 a 20º SO con variaciones locales. Dicha se-
tado durante el período 1957-1963 por la Empresa cuencia consiste en mantos efusivos andesíticos,
Minera Chos Malal, con una producción total de 1136 tobas andesíticas y cenizas volcánicas (Ré y Murici,
t de azufre refinado (Dirección General de Minería, 1956). Según Péndola y Rossetto (1962), se distin-
1980). El producto, obtenido por flotación con una guen dos entidades litológicas: la inferior, que consis-
ley de 79,56% de azufre, fue comercializado en la te en una brecha de color blanco amarillento altera-
zona del valle de Río Negro y de Neuquén para su da, bancos de tobas estratificadas, lentes de tobas
utilización en la fruticultura y vitivinicultura. cineríticas porosas y friábles, y una toba andesítica
Sistema de explotación: el yacimiento se divi- silicificada (esta roca estaría separada de las ante-
día en dos sectores: el I con dos piques y una decena riores por una discontinuidad que coincidiría con los
de labores subterráneas, y el sector II con varias sectores mineralizados); y la superior, que está cons-
labores y una cantera donde se explotó por bancos tituida por una colada de andesita piroxénica (fig. 3)
en forma desordenada (Péndola y Rossetto, 1962). seguida hacia el techo por una riolita de color rosado
(Dirección General de Minería, 1980).
Leyes y reservas Estructura: en el sector del yacimiento, se han
identificado dos sistemas de fallas: el más importan-
Las leyes varían desde 49,85% hasta 0,20% de te de rumbo general E-O, y otro sistema subordina-
S (Zanettini, 2004); la ley media ha sido estimada en do de rumbo general NE-SO.
23% (Ré y Murici, 1956). Las reservas calculadas Morfología: la zona mineralizada sigue una faja
ascienden a 19.200 t probadas, 20.160 t probables y de rumbo NE-SO, la cual correspondería a una o
13.250 t posibles (Péndola y Rossetto, 1962). varias fracturas. De acuerdo con Péndola y Rossetto
(1962), el grado de mineralización estaría controlado
Marco geológico por el tipo de roca portadora: donde aflora una roca
más coherente con pasta vítrea, el reemplazo es casi
La zona donde se emplaza el cerro Bayo corres- nulo y la mineralización rellena planos de clivaje,
ponde a la faja plegada y corrida de Chos Malal, mientras que en otros sectores se observan
donde las secuencias volcánicas del Mioceno medio fenocristales parcial o totalmente reemplazados por
se encuentran ampliamente plegadas. El gran azufre.
anticlinal de La Cruzada está formado por una serie Mineralogía: el azufre se presenta, en la parte
de cuatro domos tectónicos alineados, los cuales es- inferior, con color amarillo verdoso, compacto y en
8 Carta Minero Metalogenética 3769-I
Figura 3. Plano topográfico y bosquejo geológico de la mina Hilda Mary. Modificado de Péndola y Rossetto (1962)
Tilhué). De esta manera, Hilda Mary se relacionaría conglomerádicas en parte, pertenecientes al Grupo
con los depósitos de azufre fumarólico de los volca- Neuquén. Los bancos se encuentran afectados
nes Tromen y Wayle, ubicados al sur del área de tectónicamente, fragmentados, con rumbos variables
estudio. y, en general, en posición subvertical.
Morfología: la mineralización se presenta en
3.1.2 COBRE algunos horizontes como reemplazo de madera fósil
y, en otros casos, diseminada en la arenisca a modo
3.1.2.1 César de pequeñas manchas y nódulos (Dirección General
de Fabricaciones Militares, 1969).
Generalidades Mineralogía: sólo se observaron impregnaciones
de minerales secundarios como azurita, malaquita y
La mina César se encuentra sobre la margen supuesta calcantita (Dirección General de Fabrica-
izquierda del arroyo Chaquira-Có (afluente del arro- ciones Militares, 1969).
yo Calmuco), aproximadamente 1 km aguas arriba
de la desembocadura del arroyo Seco en aquél. Modelo genético
Cuadro 2. Análisis de elementos de interés metalogenético de muestras de areniscas mineralizadas del grupo minero El
Manzano. Resultados en ppm
Figura 4. Grupo Minero El Manzano. a) Vista desde el norte del cerro de las Minas, donde se localizan parte de las labores del
Grupo Minero El Manzano; b) Tronco silicificado en el contacto entre una arenisca y un conglomerado del Grupo Neuquén; c)
Tronco silicificado con mineralización de cobre; d) y e) Bancos de areniscas con impregnación de minerales oxidados de cobre;
f) Lentes de calcosina rodeadas por malaquita
12 Carta Minero Metalogenética 3769-I
Figura 5. Grupo minero El Manzano. a) Fotomicrografía de sección pulida, nicoles paralelos: arenisca con mineralización de calcosina
(Cc) y calcopirita (Cpy), esta última se encuentra reemplazada por digenita. Escamas de covellina (Cv) diseminadas; b) Fotomicrografía
de sección pulida, nicoles paralelos: arenisca con calcosina (Cc), pirita (Py) y bornita (Bo) reemplazadas por covellina (Cv)
está formada por tablillas suborientadas de plagioclasa al N (Catalana, 1943). Este estilo de mineralización
muy alterada a arcillas, acompañadas por se observa en una brecha de falla asociada a la falla
clinopiroxeno y anfíbol, ± mineral opaco, todos E-O anteriormente mencionada. La labor principal
intersticiales. Se observan además clorita, carbona- (ver su ubicación en fig. 6) permite observar que
to enturbiado por limonitas y sílice isótropa (ópalo?) dicha brecha consiste en una masa de andesita que
también intersticiales. Como minerales accesorios, incluye trozos de areniscas; en el contacto con uno
aparecen apatita, circón y minerales opacos. de estos clastos arenosos es donde puede observar-
Estructura: tanto la arenisca como la andesita, han se la veta o bien lo que queda de ella (fig. 7c).
sido afectadas por dos fallas: una de rumbo N10ºO e Mineralogía: la veta contiene minerales prima-
inclinación 80ºO, y otra, normal a esta, de rumbo este- rios como calcopirita, calcosina, bornita y pirita, par-
oeste e inclinación 75ºN (Salaberry y Núñez, 1967). cialmente reemplazados por digenita y covellina, en
Morfología: se observan dos estilos de ganga silícea (fig. 7d).
mineralización: impregnaciones de los estratos por Se han realizado análisis de elementos de interés
carbonatos de cobre (fig. 7b) en una extensión de metalogenético por ICP sobre muestras de veta y de
150 m, en forma discontinua (Barrionuevo y Elizalde, arenisca con impregnaciones de minerales oxidados
1950, Angelelli 1984); y una mineralización vetiforme de cobre; los resultados en ppm pueden observarse
de 10-50 cm de ancho, rumbo E-O e inclinación 85º en el cuadro 3.
Cuadro 3. Análisis de elementos de interés metalogenético de muestras procedentes de la mina La Carmelita. Resultados en ppm
14 Carta Minero Metalogenética 3769-I
Figura 7. La Carmelita. a) Vista desde el oeste de la mina La Carmelita, donde pueden observarse los bancos de areniscas y,
por encima, el manto andesítico; b) Impregnaciones de minerales oxidados de cobre en areniscas cretácicas; c) Veta portadora
de minerales de cobre, oxidada; d) Fotomicrografía de sección pulida, nicoles paralelos: calcopirita (Cpy) y escasa bornita (Bo)
reemplazadas por digenita (Dig) y «limonitas» (Lim); escasas escamas de covellina (Cv)
Alteración hidrotermal: las andesitas presen- nal 40 hasta su empalme con la ruta provincial 183.
tan alteración propilítica incompleta (clorita + carbo- Por esta última, deben recorrerse unos 20 km hasta
nato) suave y arcillosa suave a moderada. una huella que sale hacia el sur y que, luego de 3 km,
conduce hasta la mina.
Modelo genético
Leyes y reservas
La mineralización en impregnaciones pertenece
al grupo de depósitos alojados en sedimentos, mode- Se han desarrollado algunos pozos, escarpes pe-
lo Cu sedimentario (modelo 9a). La existencia de queños y aislados y cinco trincheras. A la fecha, di-
una veta con mineralización primaria de cobre, vin- chas labores se encuentran soterradas. De acuerdo
culada a la andesita, sugiere que las impregnaciones con Bonfils y Fallet (1974), se han calculado 12.411,75
de minerales oxidados de cobre en la roca t de mineral probado; 10.964,85 t de mineral proba-
sedimentaria serian derivadas de los sulfuros de co- ble y 6.743,36 t de mineral posible; la ley media de
bre de dicha veta. La relación entre los cuerpos ígneos mineral positivo es de 3,90%.
miocenos y la mineralización de cobre en las arenis-
cas cretácicas será analizada en el capítulo 3.1.2.6. Historia del depósito
neral de Minería efectuó dos sondeos, un muestreo bricaciones Militares, 1969); en este mismo sector,
de la zona mineralizada y la determinación de las Bonfils y Fallet (1974) mencionaron la presencia de
reservas (Bonfils y Fallet, 1972). En diciembre de un intrusivo de composición ácida-mesosilícica.
1974, mediante un convenio con el Banco Nacional Morfología: la mineralización se presenta de
de Desarrollo, se realizaron 9 calicatas, 3 sondeos y manera irregular, con potencias que oscilan entre los
la toma de muestras para la determinación de la ley 0,20 a 1m (Bonfils y Fallet, 1974).
media (Bonfils y Fallet, 1974). Mineralogía: la mineralización está representa-
La zona donde se ubica la mina Pablo Daniel da por impregnaciones de malaquita, crisocola y, en
también ha sido explorada por la CNEA (1957-1968); menor proporción, azurita (fig. 9b). Canessa (1969)
actualmente, el área forma parte del proyecto de reportó la presencia de calcosina fina como cemen-
prospección y exploración uranífera Ranquil-Co (ver to de la arenisca arcósica o bien como reemplazo de
capítulo 3.1.6.1). restos de madera u otras estructuras relícticas orgá-
nicas.
Marco geológico Se ha realizado un análisis de elementos de inte-
rés metalogenético por ICP sobre una muestra de
La zona se caracteriza por la presencia del arenisca con impregnaciones de minerales oxidados
anticlinal de Ranquil Có-Los Petisos, de rumbo nor- de cobre, los resultados en ppm pueden observarse
te-sur y vergencia occidental, cuya etapa de levan- en el cuadro 4.
tamiento mas importante sucedió entre los 18 y 11
Ma (Silvestro y Atencio, 2009). El núcleo de dicha Modelo genético
estructura expone en superficie al Grupo Neuquén
hasta el contacto con el Grupo Malargüe. El limbo La mineralización pertenece al grupo de depósi-
oriental es tendido mientras que el limbo occidental tos alojados en sedimentos, modelo Cu sedimentario
tiene mayor inclinación; el primero se encuentra re- (modelo 9a). Ver capítulo 3.1.2.6.
petido por tres corrimientos con vergencia occiden-
tal a partir de despegues en los depósitos evaporíticos 3.1.2.5 San Romeleo
de la Formación Loncoche (Álvarez Cerimedo et al.,
2008 y 2011). El resto de la zona se encuentra cu- Generalidades
bierta por coladas de basaltos olivínicos cuaternarios.
Introducción: la mina San Romeleo se encuen-
Geología del depósito tra a unos 160 km al sur de Malargüe desde donde
se accede siguiendo la ruta nacional 40 hasta el puen-
Litología del entorno: en el área, afloran capas te del Zampal sobre el río Grande. Desde allí, hay
del Grupo Neuquén que consisten en pelitas rojas a que seguir un camino secundario por unos 24 km
las cuales se sobreponen areniscas y areniscas hasta el desvío por la huella que arriba al Puesto Agua
conglomerádicas que hacia niveles más altos pasan de Issac.
a conglomerados con rodados de pórfidos y porfiritas. Producción: las tareas de explotación consistie-
Los estratos tienen rumbo NNE e inclinan entre 5º y ron en la extracción manual y superficial, de mate-
12º al ESE, aunque tienden a horizontalizarse hacia rial perteneciente a delgadas venas o estrechas fran-
el oeste Las areniscas y conglomerados se hallan en jas de malaquita de alta ley (5-20% Cu). La produc-
parte bituminizados y silicificados (Dirección Gene- ción total hasta 1967 se estima en 280 t con ley me-
ral de Fabricaciones Militares, 1969). La unidad se dia de 9-10% Cu (Navarro, 1967).
halla en gran parte cubierta por arenas eólicas y por
una colada de basalto cuaternario (figs. 8 y 9a). A Leyes y reservas
unos 200 m al SE del afloramiento principal, apare-
cen diques de clastos redondeados soldados por síli- Las reservas estimadas por Navarro (1967) en
ce (brecha hidrotermal?) (Dirección General de Fa- las áreas de quebrada San Romelo y Agua Amarga
Cuadro 4. Análisis de elementos de interés metalogénico de una arenisca mineralizada de la mina Pablo Daniel.
Resultados en ppm
16 Carta Minero Metalogenética 3769-I
Figura 8. Mapa geológico de la mina Pablo Daniel. Modificado de Dirección General de Fabricaciones Militares (1969)
BARRANCAS 17
Figura 9. Mina Pablo Daniel. a) Vista desde Pablo Daniel hacia el este. En primer plano, se observa banco de arenisca
mineralizado y pequeña escombrera de material removido en etapa exploratoria. Por detrás, se observa la colada del basalto
cuaternario y un pequeño cerro donde también afloran las areniscas rojas del Grupo Neuquén; b) Banco de arenisca con
impregnaciones de minerales oxidados de cobre
son 184.032 y 88.000 t respectivamente. Cattarossi filones capa basálticos y por domos traquíticos (fig.
(1967) calculó 171.000 t (probadas y probables) con 10). Estos últimos han deformado localmente los se-
ley media de 2,80% Cu; mientras que Maurici (1971 dimentos y conformaron estructuras periclinales (ce-
en Centeno y Fusari, 1999) reportó 257.000 t proba- rros San Romeleo o Liupuca, San José y Montecino)
bles con ley media de 1,29 % Cu y 230.000 t de (figs. 11a y b) y un par de pliegues diapíricos. A esta
mineral posible. estructura, se suma un juego de fracturas menos
perceptibles, con rumbo general NNE-SSO y E-O,
Historia del depósito que aparece relleno por diques básicos, por arcillas
con yeso y asfaltita o por venas de yeso amarillento
Los primeros trabajos en el depósito fueron efec- con manchas de malaquita (Navarro, 1967).
tuados en abril de 1967 y, a pedido de la «Cía. Mine-
ra Cattarossi SA», por la firma «De Witt Smith and Geología del depósito
Company, Inc.». Dicho estudio estuvo dirigido, prin-
cipalmente, a la determinación de reservas Litología del entorno: la mineralización está
(Cattarossi, 1967). En setiembre de 1967, se lleva- alojada en sedimentitas continentales del techo del
ron a cabo nuevos muestreos para la cubicación y el Grupo Neuquén, cerca del contacto con el Grupo
estudio genético del depósito (Navarro 1967). Pos- Malargüe. Las sedimentitas se encuentran intruídas
teriormente, el Banco Nacional de Desarrollo efec- por cuerpos traquíticos, traquiandesíticos y andesíticos
tuó una nueva estimación de reservas basada en la miocenos, y por mantos basálticos cuaternarios.
información de perforaciones proporcionada por la En la quebrada de San Romeleo, la roca de caja
«Cía. Minera Cattarossi SA» (Maurici 1971 en Cen- está representada por un paquete lenticular de are-
teno y Fusari, 1999). Durante 1998, se llevaron a niscas calcáreo yesosas feldespáticas, en parte
cabo tareas de exploración geoquímica. Un estudio bituminosas. Son de color gris a pardo, con estratifi-
sobre el probable método de explotación y cálculo cación cruzada y con intercalaciones lenticulares de
de costos fue realizado por Fusari et al. (1998). arcillas yesosas amarillentas. El rumbo general es
E-O, el buzamiento es 30-32ºN pero puede variar
Marco geológico con la proximidad al contacto con el intrusivo
traquítico; el afloramiento se extiende por 180 m
En el área inmediata a la mina afloran sedi- aproximadamente (Navarro, 1967).
mentitas de la Formación Huitrín y del Grupo En el sector Agua Amarga, 100 m al este de la
Neuquén, las cuales consisten en areniscas calcáreas quebrada de San Romeleo, aflora un banco de are-
y calcáreas yesosas, horizontes de yeso y sal, are- niscas pardas a negruzcas, bituminosas, de 12 m de
niscas bituminosas y arcillas yesosas. Por encima de espesor, rumbo N-S y buzamiento de 10ºO; dicho
esta serie, continúan areniscas calcáreas correspon- banco está en contacto con arcillas yesosas rojizas.
dientes al Grupo Malargüe. El conjunto ha sido ple- El cambio de rumbo y buzamiento, respecto a los
gado en un amplio anticlinal e intruido por diques y observados en la quebrada de San Romeleo, obede-
18 Carta Minero Metalogenética 3769-I
ce a fracturas subverticales menores de rumbo E-O calcantita ocupa, generalmente, una posición
(rellenas por cobre) y a la intrusión de un dique bási- periférica respecto a los carbonatos y existe un re-
co en las proximidades. emplazo selectivo de yeso por calcantita. Suele apa-
Morfología: los minerales oxidados de cobre recer en forma de pequeñas placas o rosetas muy
suelen presentarse como costras de impregnación, bien cristalizadas, mientras que los carbonatos pue-
en pequeños nódulos (fig. 12) o como guías de esca- den presentarse en finas venillas acompañadas por
sos centímetros de ancho que siguen los planos de pequeños núcleos de calcosina y cuprita. En gene-
estratificación (Barrionuevo y Elizalde, 1950). ral, los minerales de cobre han reemplazado en for-
Mineralogía: el estudio al microscopio de mues- ma parcial y/o total al yeso (Navarro, 1967).
tras de perforación reveló que la mineralización, lo- Los sulfuros son pirita fresca y calcopirita reem-
calizada en areniscas feldespáticas, se compone prin- plazada por calcosina y covellina. En una perfora-
cipalmente de «motas» de calcantita, acompañadas ción, se encontró molibdenita (Tonel y Fernández,
por una fina granulación de malaquita y azurita. La 1970).
Figura 10. Mapa geológico de la zona donde se encuentra el depósito San Romeleo. Modificado de Navarro (1967)
BARRANCAS 19
Figura 11. a) Vista desde el este del cerro Montecino. En primer plano, se observa una brecha traquítica; b) Vista desde el
noreste del cerro San Romeleo. Al igual que en el cerro Montecino, se observa la secuencia de areniscas del Grupo Neuquén
intruida por un cuerpo traquítico
las areniscas cupríferas ubicadas al sur del área de la Estas manifestaciones fueron identificadas en los
presente Carta, las mineralizaciones están alrededores de Calmuco, de El Manzano y de
genéticamente asociadas a las migraciones de hidro- Mechanquil, y en las orillas del arroyo Quili-Có y del
carburos y de fluidos ricos en cloruros a través de es- río Barrancas.
tructuras desde sus fuentes (las formaciones En los mencionados niveles arcillosos-yesosos,
generadoras de JMKI c S) hasta su entrampamiento suelen encontrarse horizontes con nódulos verdosos
final en los estratos portadores. De acuerdo con Hitzman de composición a veces arenosa y de tamaños que
et al. (2005), las aguas formacionales son capaces de alcanzan los 20 cm de diámetro (fig. 13), a los que
lixiviar el cobre de los estratos continentales rojos. En acompañan, a veces, impregnaciones de óxidos de
dicho caso, la migración también habría ocurrido a tra- cobre y delgadas películas y cristales amarillos de
vés de canales verticales vinculados a estructuras ter- volborthita (vanadato hidratado de Cu) (Dirección
ciarias y/o estratos permeables continentales. General de Fabricaciones Militares, 1969).
Pirajno (2009), al describir este modelo de depó- Los análisis químicos realizados a los nódulos
sito, mencionó que los metales son transportados en verdosos arrojaron tenores de vanadio variables en-
fluidos salinos, oxidados, ricos en cloruros, que trans- tre 0,08 y 0,35-0,45%, aunque con algunos valores
portan metales, generalmente de baja temperatura superiores que sobrepasan el 1% (Dirección Gene-
(100-125ºC) y que precipitan en ambientes redox, ral de Fabricaciones Militares, 1969).
como sulfuros. Según Parnell (1988), la concentración de meta-
En resumen, las mineralizaciones de cobre en les en los núcleos de nódulos de reducción es una
areniscas presentes en el ámbito de la Carta Mine- forma de mineralización ampliamente distribuida en
ro-Metalogenética Barrancas serían el producto de las areniscas continentales. Estos nódulos se habrían
un proceso de removilización del cobre preexistente formado o enriquecido en metales por la depositación
en las areniscas cretácicas (ver capítulo 3.1.3) aso- de minerales a partir de aguas formacionales ricas
ciado a anomalías de calor vinculadas a los intrusivos en carbonato y de relativa baja temperatura (Lisitsin,
miocenos. Las fracturas generadas por dichas 1962; Rich et al., 1977; Langmuir, 1978; Wanty,
intrusiones habrían actuado como canales para los 1987). El uranio y otros elementos redox (como el
fluidos que dieron lugar a las mineralizaciones de vanadio) son reducidos para formar minerales (en el
sulfuros de cobre de estas manifestaciones. caso del vanadio, micas, arcillas y vanadatos) y, en
algunos casos, elementos nativos (ej. Ag y Cu). La
3.1.3 COBRE-VANADIO simetría radial de los nódulos sugeriría que estos se
formaron después de que los sedimentos fueran ini-
En el ámbito de la presente Carta, se han reco- cialmente compactados y que la formación habría
nocido diversas manifestaciones de cobre-vanadio cesado cuando toda la materia orgánica fue oxidada
contenidas en niveles arcillosos-yesosos del Grupo (Kemp et al., 1994).
Neuquén, que consisten en pequeños asomos, distri- Algunos metales, como el cobre, contenidos en
buidos irregularmente y que carecen de valor eco- las areniscas del Grupo Neuquén habrían sido
nómico (Dirección General de Fabricaciones Milita- removilizados como consecuencia de anomalías de
res, 1969, Zanettini, 2004). calor vinculadas a las intrusiones miocenas dando
lugar a los depósitos de cobre en areniscas como La pos graníticos paleógenos que se emplazaron en las
Carmelita, San Romeleo, etc. secuencias sedimentarias mesozoicas, las cuales son
cubiertas discordantemente por los productos volcáni-
3.1.4 HIERRO cos miocenos (Spagnuolo et al., 2008 a y b).
Cuadro 5. Análisis de elementos de interés metalogenético de muestras con óxidos de hierro del cerro Mayán. Resultados en ppm
Figura 14. Cerro Mayán: diversas imágenes de la brecha cementada por óxidos de hierro
22 Carta Minero Metalogenética 3769-I
Figura 15. Cerro Mayán. a) Fotomicrografía de sección pulida, nicoles paralelos: cemento de brecha constituido por granos
euhedrales y subhedrales de magnetita con moderada martitización a partir de bordes del cristal; b) Fotomicrografía de sección
pulida, nicoles paralelos: cemento de brecha constituido por magnetita intensamente reemplazada por hematita (martitización), y
muy escasos granos de pirita parcialmente alterados a «limonitas»
norte, dichas sedimentitas están cubiertas por are- en cuarzo intersticial de la diorita, como en cuarzo y
niscas y pelitas continentales (Formación Tordillo) y piroxeno de los endoskarns, y en minerales de los
lutitas negras (Formación Vaca Muerta). Toda esta exoskarns progradantes de granate, de vesubianita
secuencia sedimentaria jurásico-cretácica se encuen- y de piroxeno. En el cuadro 6, pueden observarse los
tra intruida por tres stocks de composiciones varia- resultados obtenidos.
bles entre gabro y cuarzo-diorita (cerros Quebrada A partir de las salinidades y las temperaturas para
Mala, Pelán y Nevazón), y numerosos filones y di- los fluidos entrampados en cuarzo ígneo con eviden-
ques de composiciones gábricas y dioríticas (fig. 16); cias de ebullición, los mencionados autores estima-
dichos cuerpos corresponden al magmatismo ron una profundidad de 2,6 kilómetros. En los
paleógeno (ver Geocronología). Los stocks intruyen exoskarns progradantes de granate, de vesubianita
el núcleo de un anticlinal y pueden ser los ápices de y de piroxeno, no existen evidencias de ebullición,
un mismo plutón (Pons et al., 2010). por lo que durante su formación tienen que haber
Mineralogía y morfología: Franchini e Innes prevalecido presiones litoestáticas. Las inclusiones
(1997) describieron endoskarns de clionopiroxeno fluidas primarias indican que estos skarns se forma-
(hasta 35%), endoskarns masivos de escapolitas ron a expensas de fluidos con temperaturas mínimas
(hasta 65%) y de granate (hasta 60%) con destruc- similares a las registradas en el cuarzo ígneo pero
ción completa de la textura ígnea; los minerales opa- con salinidades inferiores. Se puede notar una ten-
cos están presentes en cantidades inferiores a 5% y dencia hacia menores temperaturas y salinidades
son pirrotina con pirita y arsenopirita. desde las zonas más internas de granate hacia las
Por otro lado, dichos autores reportaron que, en intermedias de piroxeno.
una primera instancia de metasomatismo, las limolitas Geocronología: Linares (2001) reportó una
calcáreas fueron tranformadas en hornfels biotíticos- edad de 81,5 ± 5 Ma por método K/Ar sobre roca
feldespáticos y hornfels anfibólicos que tienen entre total a un filón andesítico del cerro Pelán. Por
un 30 y 20% de sulfuros con pirrotina dominante, otro lado, Franchini et al. (2003) dataron por
respectivamente. método K-Ar sobre hornblenda a una gabro-
En estadios más avanzados de transformación, diorita y a una diorita del Cerro Nevazón, y obtu-
se desarrollaron los exoskarns progradantes. Estos vieron edades de 59,1 ± 2,9 Ma y 56 ±1,7 Ma
presentan la siguiente zonación mineralógica aplica- respectivamente. También realizaron una datación
ble a escala de distrito: por método Ar-Ar sobre plagioclasa de un gabro
- zona proximal de granate con 4% de sulfuros del cerro Nevazón y obtuvieron una edad de 60,2
con pirita dominante, ± 1,2 millones de años.
- zona proximal de vesubianita,
- zona intermedia de clinopiroxeno con 8% de Modelo genético
sulfuros con pirrotina dominante
- zona intermedia de escapolita con 10% de La mineralización pertenece al Grupo de depósi-
sulfuros con pirrotina, menor grieguita, pirita se- tos metasomáticos, modelo Skarn ferrífero (modelo
gún pirrotina con arsenopirita, calcopirita, chis- 5d).
pas de oro y plata
-zona distal de wollastonita 3.1.5 PLOMO
Las asociaciones de minerales retrógrados con-
sisten en las siguientes asociaciones: epidoto-cuar- 3.1.5.1 Juan Carlos
zo-calcita-pirita según granate; calcita-anfíbol-cloritas
según clinopiroxeno; y calcita-cuarzo según Generalidades
escapolita.
Los sulfuros se presentan diseminados y en Introducción: la mina Juan Carlos, antiguamen-
venillas; localmente y en contacto con los intrusivos te conocida como mina Theis, se encuentra 6,5 km
aparecen cuerpos masivos de magnetita fibrosa al norte del cerro Puntilla de Huincán. Desde
pseudomórfica según hematita en contacto con piri- Malargüe, se accede recorriendo 122 km por la ruta
ta con arsenopirita e inclusiones de pirrotina y nacional 40. Unos metros antes de La Pasarela, par-
calcopirita, cloritas y calcita (Franchini e Innes, 1997; te una huella de unos 9 km hacia el sudoeste que
Curci y Franchini, 2001). bordea el arroyo Coehue Melehue y que llega hasta
Inclusiones fluidas: Curci y Franchini (2001) la mina (a la fecha se encuentra allí el puesto Coehue
llevaron a cabo el estudio de inclusiones fluidas tanto Melehue).
24 Carta Minero Metalogenética 3769-I
Cuadro 6. Resultados microtermométricos para las inclusiones fluidas de los skarns de la Quebrada Mala obtenidos por Curci y
Franchini (2001). TH = temperatura de homogeneización en ºC. S= salinidad en % eq. peso NaCl
Producción: durante la década de 1950, se ex- Al describir el Huincalitense, Groeber (1947) in-
trajo mineral a través de 5 labores principales con- dicó que el máximo espesor de la serie de mantos
sistentes en galerías, cortavetas, chimeneas y algu- andesítica se encuentra alrededor del arroyo Coehue
nos piques (figs 17, 18a y b). La producción media Melehue, lo cual ajudicó a la presencia de un centro
mensual fue de 3 o 4 toneladas de concentrado (Se- eruptivo atestiguada por numerosos diques y masas
rrano y Devito, 1952). columnares de andesitas.
El muestreo puntual sobre veta dio valores pro- Litología del entorno: en el área, aflora una
medio de 45% de plomo, 18% de cinc y 200 g/t de arenisca feldespática caolinizada (fig. 18c), que ha
plata (Arballo, 1984). Las leyes promedio del mine- sido intruida por cuerpos subvolcánicos andesíticos,
ral, sobre muestras tomadas en canaleta por Rubio mantos de andesitas y tobas andesíticas miocenos
(1988), son: 8,52% Pb, 45,8 g/t Ag, 0,15% Zn y (fig. 17).
0,043% Cu. Estructura: en la mina, se han observado: en la
margen izquierda del arroyo Coehue Melehue, una
Marco geológico falla de rumbo N10ºE y buzamiento 74º E y otras de
menor extensión como subsidiarias de aquellas, por
La zona se caracteriza por un predominio de se- ejemplo la que se observa en la labor nº 2; y en la
cuencias de rocas ígneas cenozoicas que han sido margen derecha, aparece una falla con rumbo N60ºE,
descriptas detalladamente por Groeber (1947), por subvertical (Arballo, 1984).
Bettini (1982) y por Kozlowski et al. (1987). En ge- Las intrusiones andesíticas responden a dos di-
neral, se trata de lavas y cuerpos subvolcánicos de recciones principales: NE-SO y NO-SE.
composiciones variables entre básicas e intermedias, Morfología: la mineralización es vetiforme (fig.
y sus tobas asociadas. 18d), emplazada en las estructuras mencionadas an-
BARRANCAS 25
Figura 16. Mapa geológico del cerro Nevazón y quebrada Mala. Modificado de Franchini et al. (2003)
teriormente, y, en parte, se han explotado bolsadas de reflejos internos anaranjados y plata nativa en
de mineral (Arballo, 1984). Las vetas son de relleno granos de hasta 75 µm de diámetro.
y se intercalan entre los diques andesíticos. Los rum- Como mineral supergénico, se observó escasa
bos varían entre N10ºO y N60ºO con buzamiento covellina en escamas diseminadas o en los bordes
subvertical, los espesores se encuentran entre los 0,02 de los granos de galena. El mineral de oxidación mas
y 2,50 m (Zanettini, 2004) y la corrida alcanza los 2 abundante corresponde a «limonitas» que reempla-
km (Serrano y Devito, 1952). Las estructuras más zan a pirita diseminada.
comunes son bandeada, brechosa y diseminada Se analizaron dos muestras de mena por elemen-
(Zanettini, 2004). tos de interés metalogenético por ICP; los resulta-
Mineralogía: el mineral metalífero predominante dos se presentan en el cuadro 7.
es la galena, generalmente en agregados granulares
monominerales. Asimismo, se la puede encontrar Alteración hidrotermal: la asociación cuarzo-
intercrecida con esfalerita de reflejos internos blan- sericita se pone de manifiesto con sericita que reem-
quecinos. Como fases minerales incluidas dentro de plaza plagioclasa tanto en fenocristales como en la
la galena, aparecen pirita subhedral, calcopirita, pasta. El cuarzo microcristalino aparece en venillas
esfalerita opaca y, en menor cantidad, pequeños gra- o forma «núcleos» cuarzosos (Tonel, 1984).
nos de tetraedrita-tennantita (fig. 18e). La pirita suele La asociación propilítica está caracterizada por
aparecer diseminada o en forma de microvenillas, cloritas que reemplazan a fenocristales de biotita y
intercrecida con marcasita (fig. 18f). También en se encuentra también en la pasta, en forma de
forma diseminada, se observan: calcopirita, esfalerita laminillas y agregados hojosos de hábito fibroso-ra-
26 Carta Minero Metalogenética 3769-I
Cuadro 7. Análisis de elementos de interés metalogenético de muestras de veta de la mina Juan Carlos. Resultados en ppm
Figura 17. Mapa con la ubicación de las labores mineras de la mina Juan Carlos. Modificado de Serrano y Devito (1952) y de
Arballo (1984)
Figura 18. Mina Juan Carlos. a) Margen sur del arroyo Coehue Melehue donde se localizan las antiguas labores 4 y 5; b)
Margen norte del arroyo Coehue Melehue donde se observa la entrada a la antigua labor 1; c) Afloramiento de arenisca
argilitizada; d) Imagen tomada dentro de la labor 1 (única labor donde todavía se observa mineralización). Veta de sulfuros
emplazada en brecha andesítica; e) Fotomicrografía de sección pulida; nicoles paralelos: galena (Ga) con inclusiones de
calcopirita (Cpy), esfalerita (Sph) y tetraedrita-tennantita (Ttr); f) Fotomicrografía de sección pulida; nicoles paralelos:
intercrecimiento entre pirita (Py) y marcasita (Mar)
te Carta. Sus afloramientos se localizan principal- rándolas previas al Mioceno. Las dataciones efec-
mente en el flanco oriental de la cordillera del Viento tuadas por Franchini et al. (2003) en el cerro Ne-
y en una faja más oriental constituida por los aflo- vazón y aquellas realizadas por Spagnuolo et al.
ramientos de Puntilla de Huincán, Cerro Bayo del (2012a) en el cerro Bayo de la Esperanza y en el
Zampal, Cerro Las Llaretas y Cerro Bayo de la cerro Bayo del Zampal permitieron asignarle a es-
Esperanza, y habían sido mapeados por Groeber tas rocas una edad cretácica superior-paleocena
(1947) como Mollelitense. Posteriormente, Llambías inferior.
et al. (1978) denominaron a las rocas de la cordi- Esta faja se extiende hacia el oeste y sur del
llera del Viento como Formación Pelán, conside- área de estudio, donde se observan otro tipo de
BARRANCAS 29
mineralizaciones asociadas al magmatismo cretácico volcanismo ignimbrítico con algunos flujos máficos
tardío-paleógeno como pórfiros de Cu-Mo con póstumos.
skarns y brechas asociadas (Zanettini, 1979; Casé, La sierra de La Cruzada, junto con los volca-
1997; Franchini y Danieli, 1991; Franchini y Meinert, nes Domuyo, Tromen y Carrere constituyen una
1991; Franchini, 1992; Franchini y Malvicini, 1998), cadena de jóvenes volcanes de edad plio-
depósitos polimetálicos auríferos (Franchini y pleistocena dispuestos en dirección NO-SE a lo
Montenegro, 1991), vetas polimetálicas ricas en largo de la Cordillera del Viento (Mas et al., 2011).
cobre (Soto y Davids, 1954; Devito, 1955), filones Hacia el norte, estos cuerpos centrales asociados
y skarns ferríferos (Jutoran y Malvicini, 1961, a campos dómicos y a emisión de ignimbritas for-
Llambías y Malvicini, 1978) y vetas polimetálicas man parte de una extensa faja de grandes centros
de Pn-Zn-Ag. La mayoría de estos prospectos son bimodales que penetran en territorio chileno
subeconómicos dado que los plutones a los que se (Folguera et al., 2011).
vinculan son pequeños y poco evolucionados
(Franchini y Casé, 2011). 3.3 METALOTECTOS
Esta faja equivale a la faja POS-AMTP.
En la Carta se reconocieron metalotectos
3.2.2 FAJA DEL ARCO VOLCÁNICO litológicos y estructurales. Un metalotecto es un ob-
TERCIARIO-MIOCENO (POS-AVTM) jeto geológico que contribuye a la constitución y
emplazamiento de una concentración mineral
A esta faja polimetálica se vinculan las (Laffitte et al., 1965, en Routhier, 1980).
mineralizaciones polimetálicas ricas en Pb (modelo
7e) y de skarns ferríferos (modelo 5d). 3.3.1 LITOLÓGICOS
El magmatismo neógeno de composición bási-
ca-intermedia ha recibido diversas denominaciones Rocas carbonáticas jurásico-cretácicas
por diferentes autores: Groeber (1947) lo incluía dentro
del Mollelitense y el Huincalitense; Bettini (1982) Las manifestaciones correspondientes al mode-
denominó a estas rocas en el área de la Hoja 30 c lo de depósito de skarn ferrífero (modelo 5d) se
«Puntilla de Huincán» como Complejo Efusivo alojan tanto en los intrusivos paleógenos y neógenos,
Neógeno; Nullo et al. (2002) y Combina y Nullo como en las rocas calcáreas hospedantes. De acuer-
(2011) utilizaron la denominación Ciclo Eruptivo do con Franchini y Dawson (1999), al sur de la pro-
Molle; Galarza et al. (2009) se refirieron a estas vincia de Mendoza, predominan los skarns de hierro
unidades como el Grupo Molle; y Spagnuolo et al. alojados en los términos inferiores del Grupo
(2012b) eligieron la denominación Formación Mendoza, ya sea en las calizas organógenas, en las
Charilehue propuesta por Uliana (1978) para refe- dolomitas con lutitas y en las margas oscuras, de la
rirse a las volcanitas de las márgenes del río Barran- Formación Chachao; como en las pelitas bituminosas,
cas; dataron a estas rocas y obtuvieron edades entre en las pelitas calcáreas y en las calizas con
los 18 y 14 Ma. intercalaciones de margas de la Formación Vaca
La faja neógena se extiende inmediatamente al Muerta. En menor proporción, se desarrollan skarns
norte del área de estudio donde contiene en calizas, en grainstones oolíticos y en framestones
mineralizaciones del tipo pórfiro cuprífero, skarns coralígenos con calizas micríticas de la Formación
ferríferos y cupríferos y vetas polimetálicas ricas en La Manga, y en secuencias evaporíticas con
plomo (Crosta y Palacio, 2010). calcáreos micríticos intercalados, de la Formación
Auquilco.
3.2.3 FAJA DEL ARCO VOLCÁNICO
PLIOCENO-CUATERNARIO (POS- Areniscas continentales cretácicas
AVTPCQ)
Las mineralizaciones correspondientes al mode-
La manifestación de azufre fumarólico (modelo lo de areniscas cupríferas y con U-Cu (modelos 9a y
7h) de la mina Hilda Mary, en la sierra de la Cruza- 9b) se alojan en los estratos más permeables (are-
da, se vincula a una actividad post-volcánica del arco niscas y conglomerados que rellenan paleocanales)
volcánico plioceno-cuaternario. La mencionada sie- del Grupo Neuquén y unidades estratigráficas equi-
rra contiene varios centros como el cerro Palao y el valentes. Estas rocas suelen contener material
Azufre, los cuales se asocian a un campo de carbonoso y restos de troncos silicificados.
30 Carta Minero Metalogenética 3769-I
3.4 ANOMALÍAS
1-2 muestras por km2 en aquellas áreas con mayor de determinaciones bajo el límite de detección de estas
interés minero. El procesamiento y análisis por Cu, variables superan el 90%.
Pb y Zn fue realizado por la DGFM en su laboratorio Los seis factores se vincularon con unidades
de la ciudad de Mendoza. Dicha información fue tectonoestratigráficas. Con la distribución geográfi-
digitalizada, procesada y publicada posteriormente por ca de las muestras, se confeccionaron los mapas de
Ferpozzi et al. (2001). cada uno de los factores a partir del «peso» de cada
El análisis multielemento de los sedimentos de factor sobre cada una de ellas, y en todos los casos
corriente ha sido realizado en laboratorios canadien- se ha destacado el 10% superior de la distribución
ses durante el año 2000, como cumplimiento de los (fig. 21).
objetivos de un proyecto celebrado entre el
SEGEMAR y la Japan Internacional Cooperation Factor 1: Fe, V, Co, Ti, Sc, Mn, Mg, -K, Cr (-Be,
Agency (JICA) (Ferpozzi et al., 2001). La selección Zn, Ni). VTE 17,7%.
de las 899 muestras de archivo se basó en una den- Destaca la voluminosa actividad magmática de
sidad de muestreo que varía normalmente entre 1 composición básica a intermedia que se inició en el
muestra cada 10 km2 y 1 muestra cada 25 km2, en límite cretácico-paleoceno y que se extendió hasta
aquellos sitios de mayor interés puede aumentar hasta el Plio-Pleistoceno. Las unidades tectonoestrati-
1 muestra cada 6 kilómetros cuadrados. gráficas involucradas son: KSTPa av, TOsMi m RA,
Las muestras seleccionadas fueron re-analiza- TM av, TPcQH m RA.
das para determinar un paquete de 48 elementos
químicos, aplicando las técnicas de Activación Factor 2: Be, La, Sm, Y, Ce, Yb, Th, Lu, Cs (K, -
Neutrónica Instrumental (AANI) y de Espectro- Sr). VTE 11,9%.
scopía de Emisión en Plasma Inductivamente Aco- Resalta a las sedimentitas de la cuenca de
plado (ES-ICP). subsidencia térmica jurásica-cretácica, principalmen-
te en las nacientes del arroyo Colimamil donde aflora
3.4.2.2 Análisis de factores el Grupo Mendoza, y a las rocas ígneas de composi-
ciones ácidas e intermedias del arco magmático del
Este método estadístico busca reducir a un míni- Plioceno superior-Cuaternario. Principalmente, se
mo número de variables, la máxima cantidad de in- destaca la naciente de uno de los principales tributa-
formación contenida en los datos. Así, se reconocen rios del arroyo Curri Leuvú, donde afloran riolitas
grupos de variables, los factores, que representan la cuaternarias.
variación generada por un solo proceso geológico-
geoquímico (formación de rocas, mineralización, al- Factor 3: Ba, Mo, Cd, Zn, -Al, As (-Mg). VTE
teración, etc). 7,4%.
La información contenida en las muestras re- Los valores mas destacados se agrupan en los
analizadas fue sometida a la siguiente metodología: arroyos Chadileu, Domuyo, Curri Leuvú y Mogolillo,
análisis de los estadísticos descriptivos, tablas de fre- y se vinculan, mayoritariamente, a las litologías co-
cuencia, histogramas y gráficos del tipo q-q para cada rrespondientes a la cuenca de subsidencia térmica
variable; detección de outliers, los cuales han sido jurásica-cretácica y, en menor medida, a las rocas
reemplazados por el valor máximo inmediatamente ígneas del arco volcánico cuaternario.
inferior de la tabla de frecuencias. Los valores re-
portados por debajo del límite de detección por el Factor 4: Cu, P, Ni, Ca, -Hf (Y). VTE 5,6%.
laboratorio de análisis químicos, han sido reemplaza- Resalta a las sedimentitas de cuenca de
dos por la mitad del valor absoluto. La distribución subsidencia térmica jurásica – cretácica y a los ba-
de cada variable ha sido analizada a los efectos de saltos de retroarco neógeno – cuaternario.
su normalización; la transformación de tipo
logarítmica fue la seleccionada en los casos corres- Factor 5: W, Au, Ir, Se (Nd). VTE 4,1%.
pondientes. A diferencia del resto de los factores, los valores
El análisis estadístico definió 10 factores los cua- mas elevados se concentran al norte del río Barran-
les explican el 61,6% de la varianza total (VTE). Sin cas, principalmente en los sectores correspondien-
embargo, la interpretación sólo resultó coherente para tes a los cordones de Mary y de Mayán, donde afloran
los 6 primeros factores, que explican el 50,7% de la rocas del arco volcánico neógeno y las sedimentitas
varianza total. Los elementos Ag, Hg y Sn han sido de la cuenca de subsidencia térmica jurásica –
excluidos del análisis factorial dado que el número cretácica.
BARRANCAS 33
Figura 21. Mapas de factores y su vinculación espacial con las unidades tectonoestratigráficas
Factor 6: Pb, Sb (-Na, -Ir, - Th). VTE 3,8%. factor destaca a las sedimentitas de la cuenca de
Los máximos valores se encuentran en las na- subsidencia térmica, particularmente a las litologías
cientes de los arroyos Chadileu y Colimamil y en los calcáreas. Salaberry (1968) ya había reportado la
arroyos Los Filos, Cajón Grande y Mogolillo. Este presencia de rodados con sulfuros y valores anóma-
34 Carta Minero Metalogenética 3769-I
los en Pb y Zn en el arroyo Domuyo. Este autor et al., 2012a). Los principales prospectos y yacimien-
vinculaba estas anomalías a una probable tos metálicos hidrotermales asociados a las rocas
mineralización de tipo reemplazo en las calizas ígneas cretácicas-paleógenas varían desde
mesozoicas; asimismo, tenía en cuenta que la secue- vetiformes, diseminados con pórfidos de Cu (Mo),
la de valores anómalos en Pb y Zn podrían asociarse brechas y skarns mineralizados. Las rocas ígneas
a la mera presencia de lutitas, rocas que normalmente asociadas a las mineralizaciones forman varios cuer-
suelen estar enriquecidas en estos elementos. Cabe pos de tamaño pequeño intruidos como stocks,
destacar que, en general, estas anomalías en Pb y lacolitos, diques y filones capa de composición
Zn no están acompañadas por tenores elevado en diorítica hornblendífera dominante (Franchini y Casé,
Cu, como sí sucede en otros sectores de la Cordille- 2011). En el área de estudio, este magmatismo está
ra Principal con presencia de vetas polimetálicas ri- representado por stocks de composición diorítica y
cas en Pb (Crosta y Décima, 2011), ni tampoco se- gábrica que intruyeron secuencias mesozoicas
ñalan zonas con cuerpos subvolcánicos miocenos. contenedoras de rocas calcáreas; de esta manera,
Esto nos lleva a descartar que estas anomalías estén se originaron mineralizaciones ferríferas con anoma-
vinculadas a la presencia de depósitos epitermales lías de Au, vinculadas a skarns.
complejos. En el Oligoceno tardío-Mioceno temprano ocu-
Por otra parte, hay que tener en cuenta que, en rre un importante cambio en el régimen de subducción
otros sectores de la Cuenca Neuquina, existen de- y se desarrolla un período extensional con erupción
pósitos de baritina mantiforme usualmente acompa- de basaltos olivínicos alcalinos que en el área de es-
ñada por presencia de sulfuros de metales base, que tudio no presentan mineralización pero si existen
se alojan en la Formación Auquilco y Tordillo (Del manifestaciones de hierro tipo Laco en Huantraico,
Blanco y Barbieri, 1999), y que ambas unidades pre- al sur de la zona de interés (Zappettini, 1999b).
sentan buen desarrollo areal dentro de la Carta Ba- Durante el Mioceno medio a superior, la progre-
rrancas, coincidentes con zonas destacadas por el siva somerización de la zona de Wadati-Benioff ge-
factor 6. neró una migración del arco magmático hacia el este,
Asimismo, vale mencionar la presencia de una acompañada por un nuevo evento compresivo con el
mineralización epigenética, alojada en fracturas, de Zn- desarrollo final de la faja plegada y corrida de
Pb ligada a capas de dolomías, dolomías impuras y are- Malargüe (Galarza et al., 2009; Spagnuolo et al.,
niscas de la Formación Lajas, al sur del área de estudio, 2012b). Las condiciones generadas por la posición
50 km al SSE de Zapala (Garrido et al., 2000 y 2001; de la placa y el engrosamiento cortical dieron lugar a
Cesaretti et al., 2002; Gómez et al., 2008). Las rocas de un magmatismo dominantemente andesítico-diorítico
dicha unidad litoestratigráfica también se hallan presen- que culminó, nuevamente, con eventos de
tes en las zonas con anomalías en el factor 6, como en el mineralización del tipo pórfiro cuprífero, skarns
flanco oriental del Domuyo y en el sector entre los arro- ferríferos y cupríferos y vetas polimetálicas ricas en
yos Cajón Grande y Cajón del Medio. plomo. Algunos de dichos eventos reconocidos al
norte del área de estudio fueron datados: el sistema
3.5 HISTORIA METALOGENÉTICA tipo pórfiro cuprífero de Las Choicas se vincularía a
un evento datado en 8,72 ± 0,07 Ma (Sruoga et al.,
La historia metalogenética del área de estudio 2009); el grupo de vetas polimetálicas ricas en Pb
se vincula a los episodios Ándicos, los cuales estu- del Cerro de las Minas fue datado en 12,6 ± 1,2 Ma
vieron marcados por la evolución y por la migración (Crosta y Palacio, 2010, 2011). En el área de estu-
del arco magmático emplazado en el eje cordillerano dio, vuelven a desarrollarse skarns ferríferos y apa-
(Zappettini, 1999a). recen depósitos epitermales polimetálicos vetiformes
Durante el primer período de deformación por ricos en Pb como los reconocidos en el Cerro de las
contracción de la Cuenca Neuquina que se inició en Minas.
el Cretácico Tardío (Kozlowski et al., 1996; Ramos Los depósitos de cobre alojados en areniscas
y Kay, 2006), la actividad magmática periódica que cretácicas del Grupo Neuquén son de naturaleza
acompañó la estructuración de la Cordillera de los epigenética y también se vincularían a la faja
Andes produjo numerosos cuerpos ígneos intrusivos metalogenética miocena ya que el emplazamiento de
y volcánicos localizados en la región andina del NO algunos de los intrusivos miocenos habrían controla-
de Neuquén y SO de Mendoza, en una faja de rum- do la formación de este tipo de depósitos.
bo submeridiano que se extiende desde los 36º S, El volcanismo plioceno-cuaternario se caracte-
hasta los 38º30’ S (Franchini y Casé, 2011; Spagnuolo riza por un conjunto de campos volcánicos bimodales
BARRANCAS 35
En el cuadro 8, se indican los principales con- ción espacial de un metalotecto primordial con un
troles de las mineralizaciones presentes en esta metalotecto revelador define una zona con poten-
Carta. Se denomina metalotecto a todo objeto cialidad para contener determinado tipo de
geológico vinculado a la litología, a la paleogeografía, mineralización (ver esquema metalogenético en
a la estructura, a la geoquímica, etc., que contribu- mapa adjunto).
ye a la constitución y emplazamiento de una con- La interpretación de los datos geoquímicos
centración mineral. Estos metalotectos pueden ser multielementos, obtenidos a partir del análisis de
de diferentes jerarquías; el de mayor jerarquía muestras de sedimentos de corriente, permitió reco-
(metalotecto primordial) es la faja metalogenética nocer dos áreas prospectivas con anomalías
y los metalotectos reveladores son los controles de geoquímicas de elementos de interés minero: una,
la mineralización, tales como estructuras (fallas, localizada al sur del río Barrancas y caracterizada
fracturas, lineamientos), ejes de plegamientos, fa- por la asociación Pb-Zn-Ba; otra, ubicada al norte
jas de cizalla, facies favorables, etc. La intersec- del río Barancas con anomalías de Au-Ir.
BARRANCAS 37
38 Carta Minero Metalogenética 3769-I
BARRANCAS 39
40 Carta Minero Metalogenética 3769-I
Naturales de la provincia del Neuquén. XVIII CURCI, M. y FRANCHINI, M., 2001. Las inclusio-
Congreso Geológico Argentino, Relatorio: 63-76. nes fluidas de skarns de Quebrada Mala, Neuquén,
Neuquén. y su potencial aurífero. VII Congreso Argentino
CASÉ, A. M., 1997. La Quebrada del Bronce, un de Geología Económica, Actas 2: 31-37.
modelo de pórfido de cobre asociado a skarn. DEL BLANCO, M. A. y BARBIERI, M., 1999.
VIII Congreso Geológico Chileno, Actas 2: 891- Depósitos de baritina y celestina, relacionados a
895. las Formaciones La Manga y Auquilco, Mendoza
CATALANO, L. R., 1943. Yacimientos de minera- y Neuquén. En: Zappettini, E. O. (Ed.) Recur-
les de cobre del Payún Matru y Payún Liso, re- sos Minerales de la República Argentina, IGRM,
gión del Cerro Payén, Malargüe, Mendoza. Di- SEGEMAR, Anales 35: 1057-1069.
rección General de Fabricaciones Militares. DEPARTAMENTO DE MINERÍA DE LA UNI-
Carpeta 14, biblioteca SEGEMAR. 20 pp. VERSIDAD NACIONAL DE SAN LUIS,
CATTAROSSI, G. C., 1967. The San Romeleo copper 2006. Proyecto Ranquil-Co. Departamento de
mine. Province of Mendoza, Argentina. DeWitt Malargüe, provincia de Mendoza. Informe de
Smith and Company, Inc., (inédito), 39 pp. impacto ambiental para la etapa de exploración,
CENTENO, R. y FUSARI, C., 1999. Mina San (inédito), 45 pp.
Romeleo, Mendoza. En: Zappettini, E. O. (Ed.) DESSANTI, R. N., 1978. Descripción geológica de
Recursos Minerales de la República Argentina. la Hoja 28b Malargüe, provincia de Mendoza.
IGRM, SEGEMAR, Anales 35: 1147-1148. Servicio Geológico Nacional, Boletín 149.
CESARETTI, N., GÓMEZ, C., GARRIDO, M. y DEVITO, H. A., 1955. Estudio geológico minero del
DOMÍNGUEZ, E., 2002. Fluidos orgánicos aso- Cerro del Diablo, mina de cobre «María Aurelia»,
ciados a una mineralización de tipo MVT en la departamento Ñorquín, Territorio Nacional del
Cuenca Neuquina. Formación Lajas. XV Con- Neuquén. Dirección Nacional de Minas, (inédi-
greso Geológico Argentino, Actas 2: 427-431. to), 31 pp.
COMBINA, A. M. y NULLO, F., 2011. Ciclos DIGREGORIO, J. H. y ULIANA, M. A., 1980.
tectónicos, volcánicos y sedimentarios del Cuenca Neuquina. II Simposio de Geología Re-
Cenozoico del sur de Mendoza-Argentina (35º-37º gional Argentina. Academia Nacional de Cien-
S y 69º30’W). Andean Geology, 38 (1): 198-218. cias, 2: 985-1032. Córdoba.
COMBINA, A., NULLO, F., BALDAUF, P. y DIRECCIÓN GENERAL DE FABRICACIONES
STEPHENS, G., 1997. Ubicación estratigráfica MILITARES, 1969. Informe sobre las investi-
de la Formación Agua de la Piedra, Cuchilla de gaciones geológico-mineras realizadas en la pro-
la Tristeza, Cordillera Principal, Mendoza, Ar- vincia de Mendoza y resultados obtenidos. Car-
gentina. VIII Congreso Geológico Chileno, Ac- peta 701, biblioteca SEGEMAR.
tas 1: 460-464. DIRECCIÓN GENERAL DE MINERÍA, 1980.
COMBINA, A., NULLO, F., STEPHENS, G. y Prospección y exploración de azufre. Informe
RISSO, C., 2000. Características de los de avance, (inédito), 14 pp.
paleoambientes miopliocenos en el área de ELIZALDE, C. O. y TABACCHI, M. H., 1961.
Malargüe, Mendoza, Argentina. II Congreso Informe preliminar de las manifestaciones
Latinoamericano de Sedimentología y VII Re- ferríferas del Cajón del Yeso, departamento
unión Argentina de Sedimentología, Actas 1: 64. Malargüe, provincia de Mendoza. Dirección
CRIADO ROQUE, P., 1950. Consideraciones ge- General de Fabricaciones Militares. Carpeta 213.
nerales sobre el Terciario del sur de la provincia Biblioteca SEGEMAR.
de Mendoza. Revista de la Asociación Geológica FERPOZZI, L., TUREL, A., VARGAS, D., BU-
Argentina, 5 (4): 233-255. TRÓN ASCONA, F., JARA, A.,
CROSTA, S. y DÉCIMA, M. F., 2011. Anomalías SIEHANKIEWSKI, D. y CASA, A., 2001.
geoquímicas entre los 35º - 36º S y los 70º 30´ - Datos geoquímicos multielemento y ubicación
69º 30´O, Cordillera Principal, Mendoza. XVIII de sitios de muestreo de sedimentos de corrien-
Congreso Geológico Argentino, Actas CD, 2 pp. te de los Planes Cordillerano y Perforaciones.
Neuquén. Hoja 3769-I Barrancas, provincias de Neuquén
CROSTA, S. y PALACIO, M., 2010. Datos y Mendoza, República Argentina. IGRM,
isotópicos de las mineralizaciones de plomo de SEGEMAR. Serie Contribuciones Técnicas
los cerros de las Minas y Puchenque, Malargüe, Geoquímica 50/D.
provincia de Mendoza. X Congreso de FOLGUERA, A., RAMOS, V. A. y MELNUCK,
Mineralogía y Metalogenia, Actas: 157-164. D., 2003. Recurrencia en el desarrollo de cuen-
CROSTA, S. y PALACIO, M., 2011. Carta Minero- cas de intraarco Cordillera Neuquina (37º30’).
Metalogénica 3569-III «Malargüe», provincia de Revista de la Asociación Geológica Argentina,
Mendoza. IGRM, SEGEMAR. En prensa. 58 (1): 3-19.
42 Carta Minero Metalogenética 3769-I
LISITSIN, A. K. 1962. Form of occurence of MIRANDA, F., FOLGUERA, A., LEAL, P. R.,
uranium in ground waters and conditions of its NARANJO, J. A. y PESCE, A., 2006. Upper
precipitation as UO . Geochemistry, 9, 876-884. Pliocene to Lower Pleistocene volcanic
2
LLAMBÍAS, E. J. y MALVICINI, L., 1978. Geolo- complexes and Upper Neogene deformation in
gía, petrología y metalogénesis del área de the south-central Andes (36º30’-38º S). En: Kay,
Colipilli, provincia del Neuquén, República Ar- S. M. y Ramos, V. A. (Eds.) Evolution of an
gentina. Revista de la Asociación Geológica Andean margin: A tectonic and magmatic view
Argentina, 33 (4): 257-276. from the Andes to the Neuquén Basin (35º-39º
LLAMBÍAS, E. y SATO, A. M., 1990. El batolito de S lat). Geological Society of America, Special
Colangüil (29-31ºS), Cordillera Frontal de Ar- Paper, 407: 287-298.
gentina: estructura y marco tectónico. Revista MOSQUERA, A. y RAMOS, V. A., 2005. Intraplate
Geológica de Chile, 17 (1): 89-108. foreland deformation in the Neuquén
LLAMBÍAS, E. y SATO, A. M., 1995. El batolito de embayment. VI Congreso de Exploración y De-
Colangüil: transición entre orogénesis y sarrollo de Hidrocarburos, Actas CD: 28 pp. Mar
anorogénesis. Revista de la Asociación Geológica del Plata.
Argentina, 50 (1-4): 111-131. MPODOZIS, C. y KAY, S. M., 1990. Provincias
LLAMBÍAS, E. y SATO, A. M., 2011. Ciclo magmáticas ácidas y evolución tectónica de
Gondwánico: la provincia magmática Choiyoi en Gondwana. Andes Chilenos, 28-31º S. Revista
Neuquén. En: Leanza, H. A., Arregui, C., Geológica de Chile, 17 (2). 153-180.
Carbone, O., Danieli, J. C. y Vallés, J. M. (Eds.) MPODOZIS, C. y RAMOS, V. A., 1989. The An-
Geología y Recursos Naturales de la provincia des of Chile y Argentina. En: Ericksen, G. E.,
del Neuquén. XVIII Congreso Geológico Ar- Cañas Pinochet, M. T. y Reinemud, J. A., (Eds.)
gentino, Relatorio: 53-62. Geology of the Andes and its relation to
LLAMBÍAS, E. J., PALACIOS, M., hydrocarbon and mineral resources. Circum-
DANDERFER, J. y BROGIONI, N., 1978. Las Pacific Council for Energy and Mineral
rocas ígneas cenozoicas del volcán Domuyo y Resources, Earth Sciences Series 11: 59-90.
áreas adyacentes. VII Congreso Geológico Ar- MPODOZIS, C. y RAMOS, V. A., 2008. Tectónica
gentino, Actas 2: 569-584. jurásica en Argentina y Chile: extensión,
LLAMBÍAS, E. J., QUENARDELLE, S. y subducción oblicua, rifting, deriva y colisiones?.
MONTENEGRO, T., 2003. The Choiyoi Group Revista de la Asociación Geológica Argentina,
from central Argentina: a subalkaline transicional 63 (4): 481-497.
to alkaline association in the craton adjacent to NARCISO, V., ZANETTINI, J. C. M.,
the active margin of the Gondwana continent. SANTAMARIA, G. y LEANZA, H., 2004. Hoja
Journal of South American Earth Sciences, 16: Geológica 3769-I Barrancas, provincias de
243-257. Mendoza y Neuquén. Programa Nacional de
LLAMBÍAS, E. J., LEANZA, H. A. y CARBONE, Cartas Geológicas de la República Argentina
O., 2007. Evolución tectono-magmática duran- 1:250.000. IGRM, SEGEMAR, Boletín 253. 60
te el Pérmico al Jurásico temprano en la Cordi- pp.
llera del Viento (37º 05’ S- 37º 15’ S): nuevas NAVARRO, H., 1967. Informe sobre la mina San
evidencias geológicas y geoquímicas del inicio Romeleo, departamento Malargüe, provincia de
de la cuenca Neuquina. Revista de la Asocia- Mendoza. Dirección General de Fabricaciones
ción Geológica Argentina, 62 (2): 217-235. Militares, (inédito), 17 pp.
MACDONALD, D., GÓMEZ PEREZ, I., NINOMIYA, Y., 2004. Lithologic mapping with
FRANZESE, J., SPALLETTI, L., LAWVER, multispectral ASTER TIR SWIR data.
L., GAHAGAN, L., DALZIEL, I., THOMAS, Procceedings of SPIE, 5234: 180-190.
C., TREWIN, N., HOLE, M. y PATON, D., NULLO, F. E., STEPHENS, G., OTAMENDI, J. y
2003. Mesozoic break-up of SW Gondwana: BALDAUF, P., 2002. El volcanismo del Tercia-
implications for regional hydrocarbon potencial rio superior del Sur de Mendoza. Revista de la
of the southern South Atlantic. Marine and Asociación Geológica Argentina, 57 (2): 119-132.
Petroleum Geology, 20: 287-308. PARNELL, J., 1988. The mineralogy of red bed
MAS, L., MAS, G., BENGOCHEA, L. y LOPEZ, uranium-vanadium mineralization in the Permo-
N., 2011. Actividad eruptiva en la región del vol- Triassic of Belfast. Irish Journal oh Earth
cán Domuyo. En: Leanza, H. A., Arregui, C., Sciences, 9: 119-122.
Carbone, O., Danieli, J. C. y Vallés, J. M. (Eds.) PÉNDOLA, H. J. y ROSSETTO, H. L., 1962. Es-
Geología y Recursos Naturales de la provincia tudio preliminar del yacimiento de azufre «Hilda
del Neuquén. XVIII Congreso Geológico Ar- Mary». Primeras Jornadas Geológicas Argenti-
gentino, Relatorio: 609-612. nas, Anales 3: 281-291.
BARRANCAS 45
PIRAJNO, F., 2009. Hydrothermal processes and mática de los Andes a estas latitudes. XVI Con-
mineral systems. Springer. 1250 pp. greso Geológico Argentino, Actas 2: 115-126.
POLANSKI, J., 1954. Rasgos geomorfológicos del RAMOS, V. A. y FOLGUERA, A., 2005b. Tectonic
territorio de la provincia de Mendoza, Ministerio evolution of the Andes of Neuquén: constraints
Economía, Instituto de investigaciones econó- derived from the magmatic arc and foreland
micas y tecnológicas. Cuadernos de investiga- deformation. En: The Neuquén Basin, Argenti-
ciones y estudios, 4: 4-10. Mendoza. na: A Case Study in Sequence Stratigraphy and
PONS, M. J., FRANCHINI, M. B. y LÓPEZ ES- Basin Dynamics. Geological Society, Special
COBAR, L., 2007. Los cuerpos ígneos Publications 252: 15-35.
neógenos del Cerro de las Minas (35,5ºS-69,9ºO), RAMOS, V. A. Y FOLGUERA, A., 2010. Payenia
Cordillera Principal de los Andes, SO de volcanic province in the Southern Andes: An
Mendoza: geología, petrografía y geoquímica. appraisal of an exceptional Quaternary tectonic
Revista de la Asociación Geológica Argentina, setting. Journal of Volcanology and Geothermal
62 (2): 267-282. Research, 201 (1-4): 53-64.
PONS, J., FRANCHINI, M., GIUSIANO, A., RAMOS, V. A. y FOLGUERA, A., 2011. Evolución
IMPICCINI, A. y GODEAS, M., 2009. Altera- tectónica de Payenia durante el Cuaternario. XVIII
ción, mineralización de Cu y bitumen en el pros- Congreso Geológico Argentino, Actas CD, 2 pp.
pecto Barda González, Neuquén. Revista de la RAMOS, V. A. y KAY, S. M., 2006. Overview of
Asociación Geológica Argentina, 64 (3): 501-513. the tectonic evolution of the southern Central
PONS, J., FRANCHINI, M., MEINERT, L., Andes of Mendoza and Neuquén (35º-39º S
LÓPEZ-ESCOBAR, L. y MAYDAGÁN, L., latitude). En: Kay, S. y Ramos, V. (eds.)
2010. Geology, petrography and geochemistry Evolution of an Andean margin: A tectonic and
of igneous rocks related to mineralized skarns in magmatic view from the Andes to the Neuquén
the NW Neuquén basin, Argentina: Implications Basin (35º-39ºS latitude). Geological Society of
for Cordilleran skarn exploration. Ore Geology America, Special Paper 407: 1-17.
Reviews, 38: 37-58. RAMOS, V. A., FOLGUERA, A. y GARCÍA MO-
PONS, M. J., GIUSIANO, A., FRANCHINI, M., RABITO, E., 2011a. Las provincias geológicas
IMPICCINI, A., RÍOS, J. F. y TESTI, A., 2011. del Neuquén. En: Leanza, H. A., Arregui, C.,
Diagénesis, alteración y mineralización de Cu Carbone, O., Danieli, J. C. y Vallés, J. M. (Eds.)
en la Formación Huincul, prospecto Tordillos, Geología y Recursos Naturales de la provincia
Cuenca Neuquina. XVIII Congreso Geológico del Neuquén. XVIII Congreso Geológico Ar-
Argentino, Actas CD. 2 pp. gentino, Relatorio: 317-326.
RAMOS, V. A., 1975. Los ciclos sedimentarios y la RAMOS, V. A., MOSQUERA, A., FOLGUERA,
bio-rhexistasia en el control de las manifesta- A. y GARCÍA MORABITO, E., 2011b. Evolu-
ciones cupríferas del Neuquén extraandino, Ar- ción tectónica de los Andes y del Engolfamiento
gentina. II Congreso Iberoamericano de Geolo- Neuquino adyacente. En: Leanza, H. A., Arregui,
gía Económica, Actas 5: 373-394. C., Carbone, O., Danieli, J. C. y Vallés, J. M.
RAMOS, V. A., 1978. Estructura. En Geología y (Eds.) Geología y Recursos Naturales de la pro-
Recursos Naturales del Neuquén. Relatorio del vincia del Neuquén. XVIII Congreso Geológico
VII Congreso Geológico Argentino: 99-118.. Argentino, Relatorio: 335-348.
RAMOS, V. A., 1993. Interpretación tectónica. En: RÉ, N. O., 1960. Informe sobre las minas de cobre
Ramos, V. A. (Ed.) Geología y Recursos Natu- El Manzano y Liú Cullim, provincia de Mendoza.
rales de Mendoza. Relatorio del XII Congreso Dirección General de Fabricaciones Militares.
Geológico Argentino y II Congreso de Explora- Carpeta 226, biblioteca SEGEMAR. 5 pp.
ción de Hidrocarburos: 257-268. RÉ, N. O. y MURICI, J. A., 1956. Yacimiento de
RAMOS, V. A., 1999a. Las provincias geológicas azufre Hilda Mary. Banco Industrial de la Re-
del territorio argentino. En: Caminos, R. (Ed.) pública Argentina, (inédito), 8 pp.
Geología Argentina. IGRM, SEGEMAR, Ana- RICH, R. A., HOLLAND, H. D. y PETERSEN,
les 29 (3): 41-96. U., 1977. Hydrothermal Uranium Deposits: 1-
RAMOS, V. A., 1999b. Plate tectonic setting of the 246. Elsevier, Amsterdam.
Andean Cordillera. Episodes, 22 (3): 183-190. RODRIGUEZ, M. F., 2011. El Grupo Malargüe
RAMOS, V. A., 2010. The tectonic regime along the (Cretácico tardío-Paleógeno temprano) en la
Andes: present settings as a key for the Mesozoic Cuenca Neuquina. En: Leanza, H. A., Arregui,
regimes. Geological Journal, 45: 2-25. C., Carbone, O., Danieli, J. C. y Vallés, J. M.
RAMOS, V. A. y FOLGUERA, A. 2005a. El origen (Eds.) Geología y Recursos Naturales de la pro-
de la Payenia (Mendoza sur y Norte de vincia del Neuquén. XVIII Congreso Geológico
Neuquén): evolución estructural y tectonomag- Argentino, Relatorio: 245-264.
46 Carta Minero Metalogenética 3769-I
ROJAS, G. E., 1999. Distrito uranífero Ranquil Co, mioceno a los 36,5º S y la construcción de la
Mendoza. En: Zappettini, E. O. (Ed.) Recursos Alta Cordillera. XVII Congreso Geológico Ar-
Minerales de la República Argentina. IGRM, gentino, Actas 1: 154-155.
SEGEMAR, Anales 35: 1141-1142. SPAGNUOLO, M. G., FOLGUERA, A. y RAMOS,
ROUTHIER, P., 1980. Ou sont les métaux pour V. A., 2008b. Linkage between Neogene arc
l’avenir ?. Les provinces métalliques. Essai de expansion and contractional reactivation of a
métallogénie globale. Mémoire de BRGM 105. Cretaceous fold-and-thrust belt (southern Cen-
Orleáns Cedes. tral Andes, 36º-37ºS). VII International
RUBIO, H. A., 1988. Estudio geológico minero mina Symposium of Andean Geodynamics (ISAG),
Juan Carlos, departamento Malargüe, provincia Extended Abstracts: 513-516.
de Mendoza. Dirección General de Minería de SPAGNUOLO, M. G., FOLGUERA, A., LITVAK,
Mendoza, (inédito), 7 pp. V., ROJAS VERA, E. A. y RAMOS, V. A.,
SALABERRY, C. A., 1968. Informe final zona 2012a. Late Cretaceous arc rocks in the Andean
«Domuyo», área de reserva nº 38, provincia de retroarc region at 36.5ºS: Evidence supporting a
Neuquén. Plan Cordillerano. Dirección General Late Cretaceous slab shallowing. Journal of
de Fabricaciones Militares, (inédito), 5 pp. South American Earth Sciences, 38: 44-56.
SALABERRY, C. y NÚÑEZ, E., 1967. Informe so- SPAGNUOLO, M. G., LITVAK, V. D.,
bre el depósito mineral «La Carmelita». Direc- FOLGUERA, A., BOTTESI, G. y RAMOS, V.
ción General de Fabricaciones Militares, (inédi- A., 2012b. Neogene magmatic expansion and
to), 2 pp. mountain building processes in the southern Cen-
SANTAMARÍA, G. R., 1995. Descripciones tral Andes, 36-37ºS, Argentina. Journal of
petrográficas y calcográficas zona sur Mendoza. Geodynamics, 53: 81-94.
Secretaría de Minería, Delegación Mendoza, (in- SPALLETI, L. A., ARREGUI, C. D. y VEIGA, G.
édito), 8 pp. D., 2011. La Formación Tordillo y equivalentes
SEGEMAR, 1998. Normativa para las Cartas Mi- (Jurásico tardío) en la Cuenca Neuquina. En:
nero-Metalogenéticas de la República Argenti- Leanza, H. A., Arregui, C., Carbone, O., Danieli,
na. Programa Nacional de Cartas Geológicas y J. C. y Vallés, J. M. (Eds.) Geología y Recursos
Temáticas de la República Argentina. IGRM, Naturales de la provincia del Neuquén. XVIII
SEGEMAR, (inédito), 92 pp. Congreso Geológico Argentino, Relatorio: 99-111.
SERRANO, A. y DEVITO, H., 1952. Estudio cuen- SRUOGA, P., RUBINSTEIN, N., ETCHEVERRÍA,
ca plumbífera Malargüe, provincia de Mendoza M. y CEGARRA, M., 2009. Volcanismo
(inspección preliminar). Dirección Nacional de neógeno y mineralización asociada, Cordillera
Minería, (inédito), 34 pp. Principal, Mendoza (35ºS). XII Congreso
SILVESTRO, J. y ATENCIO, M., 2009. La cuenca Geológico Chileno, Actas en CD, 4 pp.
cenozoica del Río Grande y Palauco: edad, evo- STIPANICIC, P. N., 1966. El Jurásico de la Vega
lución y control estructural, faja plegada de de la Veranada (Neuquén), el Oxfordense y el
Malargüe (36ºS). Revista de la Asociación diastrofismo divesiano (Agazziz-Yaila) en Argen-
Geológica Argentina, 65 (1): 154-169. tina. Revista de la Asociación Geológica Argen-
SILVESTRO, J., KRAEMER, P., ACHILLI, F. y tina, 20 (4): 403-478.
BRINKWORTH, W., 2005. Evolución de las STIPANICIC, P. N., RODRIGO, F., BAULIES, O.
cuencas sinorogénicas de la Cordillera Principal L. y MARTÍNEZ, C. G., 1968. Las formacio-
entre 35º y 36º S, Malargüe. Revista de la Aso- nes presenonianas del denominado Macizo
ciación Geológica Argentina, 60 (4): 627-643. Nordpatagónico y regiones adyacentes. Revis-
SOTO, A. y DAVIDS, N. C., 1954. Informe ta de la Asociación Geológica Argentina, 23 (2):
geológico-minero del Cerro del Diablo, departa- 367-388.
mento Ñorquinco, Territorio Nacional del TONEL, E. M. Z. de, 1984. Petrografía y algunas
Neuquén. Dirección General de Fabricaciones determinaciones calcográficas de la mina de plo-
Militares. Carpeta 171, biblioteca SEGEMAR. mo «Juan Carlos», Malargüe, Mendoza. Direc-
27 pp. ción General de Minería, (inédito), 11 pp.
SPAGNUOLO, M. G. y FOLGUERA, A., 2008. Arc TONEL, E. M. Z. de y FERNÁNDEZ, G., 1970.
migration due to variations in the Wadatti-Benioff Resumen de las características mineralógicas,
zone: a new perspective. Symposium STT-01 petrográficas y calcográficas de las perforacio-
General Contributions to tectonics and structural nes S2-S4 y S8 de la Mina San Romeleo. Direc-
geology. 33º International Geological Congress, ción General de Fabricaciones Militares, (inédi-
Actas en Cd. to), 3 pp.
SPAGNUOLO, M. G., FOLGUERA, A. y RAMOS, TUNIK, M., FOLGUERA A., NAIPAUER, M.,
V. A., 2008a. Migración del arco volcánico PIMENTEL, M. y RAMOS, V. A., 2010. Early
BARRANCAS 47
uplift and orogenic deformation in the Neuquén uranium deposit. Bulletin de Mineralogie, 34,
Basin: constraints on the Andean uplift from U- 488-495.
Pb and Hf isotopic data of detrital zircons. WEAVER, CH., 1931. Paleontology of the Jurassic
Tectonophysics, 489 (1-4): 258-273. and Cretaceous of West Central Argentina.
ULIANA, M., 1978. Estratigrafía del Terciario. En: University of Washington. Memoir 1: 1-469.
Rolleri, E. O. (Ed.) Geología y recursos natura- Seattle.
les del Neuquén. VII Congreso Geológico Ar- WICHMANN, R., 1927. Sobre la facies lacustre
gentino, Relatorio: 67–84. senoniana de los Estratos con Dinosaurios y su
ULIANA, M. A. y DELLAPÉ, D. A., 1981. fauna. Academia Nacional de Ciencias, Boletín,
Estratigrafía y evolución paleoambiental de la 30: 383-405.
sucesión eoterciaria del Engolfamiento Neuquino WINDHAUSEN, A., 1926. Las antiguas conexio-
(Patagonia Septentrional). VIII Congreso nes de la Patagonia. Academia Nacional de Cien-
Geológico Argentino, Actas 3: 673-711. cias, Boletín 28: 213-250.
ULIANA, M. A., BIDDLE, K. y CERDÁN, J., YRIGOYEN, M. R., 1972. Cordillera Principal. En:
1989. Mesozoic extension and the formation of Leanza, A. F. (Ed.) Geología Regional Argenti-
Argentina sedimentary basins. En: Tankard, A. na. Academia Nacional Ciencias: 345-364.
J. y Balkwill, H. R. (eds.) Extensional tectonics YRIGOYEN, M., 1993. Los depósitos sinorogénicos
and stratigraphy of the North Atlantic Margin. terciarios. En: Ramos, V. A. (Ed.) Geología y
America Association of Petroleum Geologists, Recursos Naturales de la provincia de Mendoza.
Memoir 46: 599-613. Tulsa. XII Congreso Geológico Argentino y II Congre-
VALENCIO, D. A., LINARES, E. y CREER, K. so de Exploración de Hidrocarburos, Relatorio:
M., 1969. Paleomagnetismo y edades geológicas 123-148.
de algunos basaltos terciarios y cuartarios de ZANETTINI, J. C. M., 1979. Geología del pórfiro
Mendoza y de Neuquén. IV Jornadas Geológicas cuprífero Campana Mahuida, provincia del
Argentinas, Actas 2: 397-416. Neuquén. Revista de la Asociación Geológica
VERGANI, G. D., TANKARD, A. J., BELOTTI, H. Argentina, 34 (3): 224-234.
J. y WELSINK, H. J., 1995. Tectonic evolution ZANETTINI, J .C. M., 2004. Recursos Minerales.
and paleogeography of the Neuquén basin, Ar- En: Narciso, V. (Autora) Hoja Geológica 3769-
gentina. American Association of Petroleum I Barrancas. IGRM, SEGEMAR, Boletín 253:
Geologists, Memoir 62: 383-402. Tulsa. 43-52.
WALKER, T., 1989. Application of diagenetic ZAPPETTINI, E. O., 1999a. Evolución geotectónica
alterations in red beds to the origin of copper in y metalogénesis de Argentina. En: Zappettini,
stratiform copper deposits. En: Boyle, R., Brown, E. O. (Ed.) Recursos Minerales de la República
A., Jefferson, C., Jowett, E. y Kirkham, R (Eds.) Argentina. IGRM, SEGEMAR, Anales 35: 51-
Sediment-hosted stratiform copper deposits. 73.
Geological Association of Canada, Special Paper ZAPPETTINI, E. O., 1999b. El yacimiento de hie-
36: 85-96. rro Huantraico, Neuquén. En: Zappettini, E. O.
WANTY, R. B. eta 1987. The solubilities of some (Ed.) Recursos Minerales de la República Ar-
major and minor element minerals in ground gentina. IGRM, SEGEMAR, Anales 35: 1751-
waters associated with a sandstone-hosted 1753.