EL ORDINARIO DE LA

MISA
Son cinco cantos cuyo texto litúrgico
tiene como característica principal, la
permanencia y la fijeza definida por Los
textos litúrgicos, especialmente por el Misal
Romano.

Necesitan ser respetados como textos

litúrgicos oficiales que la Iglesia ha
conservado a través de la tradición.

Su texto ha de guardar las normas

litúrgicas de cada tiempo y celebración.
."SEÑOR TEN PIEDAD"
ORIGEN Y
Este canto es la triple invocación dirigida a Cristo por los
cantores, que tiene sus orígenes en una larga letanía antigua,
tomada como oración universal, en la que se manifiesta el
sentido del arrepentimiento y de misericordia.
ELEMENTOS
Se puede recitar, pero no hay que olvidar que por ser una
letanía debe cantarse, sin excluir al pueblo.
Inicialmente, este canto responde a la propia dinámica del
Acto Penitencial de la Misa.
También, puede tener lugar en el mismo Acto Penitencial
anteponiendo un “tropo” a cada una de las aclamaciones.
El rito de la bendición y aspersión del agua sustituye el acto
penitencial, pero se recomienda entonar o recitar el Kyrie
Eleison.
No puede ser más largo que el acto penitencial.
ORMA MUSICAL
Deben cantarlo todos, tomando parte el coro o solista, junto
con el presidente y la asamblea.
En su forma binaria, debe cantarlo el solista o el coro y la
asamblea responde.
Fuera del acto penitencial:
o “Yo confieso ante Dios”
o “Señor Ten Piedad de nosotros”
Dentro del acto penitencial:
o “tropo” y luego aclamación.

2. GLORIA
ORIGEN Y
Este himno tiene su composición a partir del texto del
evangelista Lucas 2, 14; a partir de esto, tomó sentido y se
perfeccionó
 por medio de nuevos versos que en si formaron una doxología.
Gracias al Papa Símaco fue introducido en la Misa de Navidad
y finalmente su práctica se extendió a los domingos y a todas las
fiestas, fuera del Adviento y la Cuaresma. El Gloria tiene
sentido, ya que por medio del él se canta la gloria de Dios,
expresada en la alegría de todo el pueblo celebrante.
ELEMENTOS
Es un himno y por tanto está destinado a ser cantado por toda
la asamblea que se une en una sola alma que alaba a Dios.
No se pueden interponer estribillos, ni cantarlo bajo la forma
coro-estrofa, ni responsorial.
El texto de este himno no puede cambiarse por otro.
Se canta o recita los domingos fuera de los tiempos de
Adviento y Cuaresma, en las solemnidades o fiestas, y en
algunas celebraciones peculiares más solemnes.

FORMA MUSICAL
Debe ser entonado por el sacerdote o según las
circunstancias por un cantor o el coro.
Debe ser cantado por toda la asamblea o alternado con el
coro o el solista.

3. CREDO
ORIGEN Y
La recitación o canto
se introdujo a partir del
siglo XI en la liturgia
Romana, gracias al Papa
Benedicto VIII, antes de
esto, el Credo era una fórmula
propia del Bautismo impuesto al abrazar la fe; a partir del
siglo XVII el pueblo tuvo una plena participación en este
momento. Finalmente es con el Papa Pablo VI en donde el
Credo queda ubicado la celebración Eucarística, luego de la
homilía.
 Este Símbolo manifiesta el sentido pascual y eclesial, con el que
el pueblo responde a la Palabra anunciada en las lecturas y
explicada en la homilía.
ELEMENTOS
Se canta o recita en los domingos y en las solemnidades, se
puede decir en las celebraciones especiales más solemnes.
Se debe hacer por el sacerdote con el pueblo
Como es un símbolo dogmático está destinado a ser
proclamado y confesado, sin negar otras posibilidades como
el canto.
Su texto no se puede alterar y no se puede sustituir este
canto por otros, aunque hablen de fe y digan la palabra
FORMA MUSICAL
"creo".
Puede ser cantilado o hacerse con lectura musical.
Debe ser cantado o recitado por el sacerdote con el pueblo.
Lo inicia el sacerdote o de acuerdo a las circunstancias el
cantor, pero será cantado por todos juntamente, o por el
pueblo alternado con los cantores.
4. SANTO
ORIGEN Y
Se introduce en el corazón de la Plegaria hacia el siglo IV, con
procedencia sinagogal, recoge con ligeras variantes el texto de
Isaías 6,3; el Benedictus de Mateo 21,9 y el Salmo 117,26; es
preciso aclarar que fue el Papa San Pio X en el año de 1903 quien
prohibió cantarlo de forma separada como se hacía
antiguamente, es por eso que en la actualidad se recita o canta
como una pieza única.
Este canto ritual, está inscrito en el desarrollo de toda una unidad
eclesial y celestial que responde a la proclamación de las
maravillas de Dios que se anuncian en el prefacio.
 ELEMENTOS
A pesar de su carácter explosivo y festivo, no se puede
opacar la voz ni del coro ni mucho menos de la asamblea.
Debe impregnar unidad.
No se debe cambiara su texto.
No se debe exagerar en las repeticiones de estribillos, lo
adecuado es la repetición triple.
FORMA MUSICAL
Es un grito de júbilo en forma de diálogo.
La melodía debe ser conocida, ya que toda la asamblea debe
lanzara al unísono su aclamación.
Hay que tener en cuenta que con la nota o tono de voz que
termina el ministro se debe continuar el canto del santo.
CORDERO DE DIOS
ORIGEN Y
En el siglo VII, el papa
Sergio quiso que el
rito de la fracción del
pan fuera acompañado
con algún canto por
parte del pueblo y estableció
el canto del Agnus Dei.
Este canto está inspirado en
las palabras de San Juan Bautista al saludar al Redentor con
acentos de gloria y alabanza tomados del Apocalipsis; este nos
remite al gesto de los discípulos de Emaús, a los primeros
cristianos que partían el pan y nos recuerda la institución de la
Eucaristía al principio fue un canto litánico, una invocación
que se repetía mientras durase el rito al que acompañaba y con
el paso del tiempo se simplificó y se unificó para así llegar hasta
lo que hoy tenemos. Este canto ritual tiene sentido en cuanto a
que los fieles siendo muchos, forman un solo cuerpo a través de
su voz, pero principalmente por medio de la unión del Cuerpo y
la Sangre de Cristo.
 ELEMENTOS
No es necesario o no se debe cantar el Cordero de Dios
durante el gesto de la paz, conviene esperar a que termine el
gesto de la paz y comience la fracción del pan.
No se debe sustituir el canto del Cordero de Dios por los
llamados “cantos de la paz”
Si se canta o cantila el Rito de la paz también se debería
cantar el Cordero de Dios.
La duración del canto está ligada al gesto de la Fracción del
Pan, la última vez se concluye con las palabras " Danos la
paz " (OGMR 83.)
ORMA MUSICAL
El Cordero es el canto ritual único en el Ordinario de la
misa.
La estructura tiene forma dialogada de manera litanica.
El coro o un cantor normalmente canta la suplica de
Cordero de Dios precedida la respuesta del pueblo.