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Aquí les envío algunas citas de EGW.

que hablan sobre Sábado y sobre las relaciones


sexuales en el matrimonio, no dicen nada en cuanto tener sexo en Sábado, pero posiblemente
nos ayuden a tomar una buena decisión

Digo a los que se llaman adventistas del séptimo día: ¿Podéis reclamar el sello del Dios vivo?
¿Podéis afirmar que sois santificados por la verdad? Como pueblo, no le hemos dado a la ley
de Dios la preeminencia que debiéramos haberle dado. Estamos en peligro de hacer lo que a
nosotros nos agrada en el día del sábado (Carta 258, 1907).

Por encima de todo, cuidad a vuestros niños durante el sábado. No permitáis que lo violen,
porque el permitir que ellos lo violen, es como violarlo vosotros mismos. Cuando les permitís a
vuestros hijos jugar en sábado, Dios os considera a vosotros como violadores de los
mandamientos. Vosotros transgredís sus sábados (Manuscrito 3, 1854).

Todo milagro que Cristo obró era esencial, y tenía el propósito de revelar al mundo que había
una gran obra que hacer en día sábado para el alivio de la humanidad sufriente, pero que el
trabajo común no debía hacerse. La búsqueda del placer, jugar a la pelota, nadar, no eran una
necesidad, sino que constituía un descuido pecaminoso del día sagrado santificado por Jehová.
(Carta 252, 1906).

Queremos recomendar a todos que no laven los platos el sábado, si es posible que esto se
evite. Dios es deshonrado por todo trabajo innecesario hecho en su día santo. No es
inconsecuente, sino apropiado, que los platos se dejen sin lavar hasta el fin del sábado, si esto
puede hacerse (Carta 104, 1901).

Hay personas que están observando a este pueblo para ver cuál es la influencia que la verdad
ejerce sobre sus miembros. "Los hijos de este mundo son más sagaces en su generación que
los hijos de la luz". Cuando se colocan delante de ellos las exigencias del cuarto mandamiento,
vigilan para ver cómo lo observan los que dicen que lo obedecen. Estudian la vida y el carácter
de sus defensores para descubrir si están en armonía con su profesión de fe; y debido a las
opiniones que así se forman, muchos son influidos mayormente o para la aceptación o para el
rechazo de la verdad. Si este pueblo conformara su vida con la norma de la Biblia, sería por
cierto una luz en el mundo, una ciudad asentada sobre un monte (Manuscrito 3, 1885).

Terminad el viernes los preparativos para el sábado. Cuidad de que toda la ropa esté lista y
que se haya cocinado todo lo que debe cocinarse, que se hayan lustrado los zapatos y tomado
los baños. Es posible lograr esto. Si lo establecéis como regla, podéis hacerlo. El sábado no
debe destinarse a reparar ropas, a cocinar alimentos, a los placeres, o a otra ocupación
mundanal. Antes de que se ponga el sol, debe ponerse a un lado todo trabajo secular y
guardarse fuera de la vista todos los periódicos de ese carácter. Padres, explicad a vuestros
hijos lo que hacéis y os proponéis y dejadlos participar en vuestra preparación para guardar el
sábado según el mandamiento (Id., tomo 3, pág. 22).
En muchas familias [durante el sábado] se embetunan y lustran los zapatos y se dan puntadas,
todo porque estas cositas no fueron hechas durante el viernes. No se acordaron del "sábado
para santificarlo". . . .CONDUCCION DEL NIÑO

Debemos cuidar celosamente las extremidades del sábado. Recordemos que cada momento
es tiempo santo y consagrado. DIOS NOS CUIDA, MRZO 2

No se malgasten en cama las preciosas horas del sábado. El sábado de mañana, la familia
debe levantarse temprano. Si se levantan tarde, hay confusión y apresuramiento en los
preparativos para el desayuno y la escuela sabática. Hay apresuramiento, roces e impaciencia.
Así entran en el hogar sentimientos profanos. El sábado, así profanado, produce cansancio, y
en vez de amarse su venida se la teme.

Dios no podría haber tenido una razón más excelsa para ordenar que el hombre reposara en el
séptimo día que aquella de que al descansar así el hombre pudiera disfrutar de la oportunidad
de reflexionar en el amor y bondad de su Creador, y así asemejarse a él....Por lo tanto, el
hombre que retenga para sí cualquier parte de todo este tiempo santo se hace culpable de
desobediencia contra Dios y de robarle como propietario original de las facultades y del tiempo
del hombre. Como una institución establecida por Dios, el sábado merece nuestra honra y
estimación. Su descuido Dios lo computa como pecado.
El sábado demanda la abstención de todo trabajo físico común y la dedicación de la mente y
del corazón a las cosas santas. Se advirtió a los israelitas que lo usaran para santas
convocaciones (Lev. 23: 3). Los Evangelios afirman que así fue usado por Cristo y los
apóstoles (Luc. 4: 16; Hech. 17: 2; 18: 4, etc.) y que deberían continuar observándolo los
cristianos después de que Cristo completara su ministerio terrenal (Mat. 24: 20).
COMENTARIO BIBLICO, tomo 1
Cristo declaró enfáticamente: "El día de reposo fue hecho por causa del hombre " (Mar. 2: 27).
Luego añadió: " Por tanto, el Hijo del hombre es Señor aun del día del reposo " ( vers. 28 ). El
sábado es de Cristo. El es "Señor" de ese día. Nadie debiera violarlo, pues nadie tiene el
derecho de tocarlo. Dios lo llama "mi día santo" (Isa. 58: 13).COMENTARIO BIBLICO, TOMO 1

Puesto que "el día de reposo [sábado] fue hecho por causa del hombre" (Mr. 2:27) -es decir, en
beneficio del hombre- es lógico llegar a la conclusión de que la bendición divina con que el
Creador invistió al 7º día de la semana debía constituir un canal de felicidad para Adán y Eva.
Puesto que Dios también lo "santificó" (Gn. 2:3), o lo separó para uso sagrado, podemos estar
seguros de que nuestros primeros padres dedicaron esas horas santas a Dios. Que el Creador
tenía la intención de que la bendición del sábado fuera para todos los hombres de todos los
tiempos, resulta evidente de la declaración de que "fue hecho por causa del hombre" (Mr. 2:27),
con el propósito de que éste descansara y lo empleara con motivos santos. DICCIONARIO
BIBLICO ADVENTISTA
Y puesto que el reposo de Dios en el 7º día no era consecuencia del cansancio, y que ese día
formaba parte de la semana de la creación, tal como su nombre lo indica, resulta evidente que
la bendición y la santificación del sábado también eran en beneficio del hombre,
particularmente para su bien espiritual y moral.

Muchos postergan negligentemente hasta el comienzo del sábado cosas pequeñas que
debieran hacerse en el día de preparación. Esto no debe ser. Cualquier trabajo que sea
descuidado hasta el comienzo del tiempo sagrado debe permanecer sin hacerse hasta que
haya pasado el sábado.
Debe velarse sobre las palabras y los pensamientos. Los que hablan de asuntos comerciales y
hacen planes en sábado, son considerados por Dios como si se hubiesen dedicado realmente
a efectuar los negocios. Para santificar el sábado, no debemos permitir siquiera a nuestra
mente que se espacie en cosas de carácter mundano. JOYAS DE LOS TESTIMONIOS, TOMO
2, La Importancia del Sábado

Si retrajeres del día de reposo tu pie, de hacer tu voluntad en mi día santo, y lo llamares delicia,
santo, glorioso de Jehová; y lo venerares, no andando en tus propios caminos, ni buscando tu
voluntad, ni hablando tus propias palabras, entonces te deleitarás en Jehová; y yo te haré subir
sobre las alturas de la tierra, y te daré a comer la heredad de Jacob tu padre; porque la boca de
Jehová lo ha hablado.( Isa. 58: 13, 14 )
El sábado... es tiempo de Dios, no nuestro; cuando lo violamos estamos robando a Dios. .. Dios
nos ha dado el conjunto de los seis días para hacer nuestro trabajo y se ha reservado
únicamente uno. Este debiera ser un día de bendición para nosotros: un día cuando
debiéramos poner de lado todos nuestros asuntos seculares y centralizar nuestros
pensamientos en Dios y el cielo.

"El amor de Dios ha puesto, un límite a las exigencias del trabajo. En su día reserva a la familia
la oportunidad de tener comunión con él, con la naturaleza y con sus prójimos."-Ed. 245.
"El sábado y la familia fueron instituidos en el Edén y en el propósito de Dios están
indisolublemente unidos. En ese día, más que en cualquier otro nos es posible vivir la vida del
Edén."-Id. 244.
"Puesto que el sábado es una institución recordativa del poder creador, es, entre todos los
días, aquel en que deberíamos familiarizarnos especialmente con Dios por medio de sus
obras."-Id. 245.
"El santo día de reposo de Dios fue hecho para el hombre y las obras de misericordia están en
perfecta armonía con su propósito."-DTG 172.
"Durante una parte del día, todos debieran tener la oportunidad de estar al aire libre. ¿Cómo
podrán los niños recibir un conocimiento más acertado de Dios que: pasando una parte de su
tiempo al aire libre, no entregados a los juegos sino en compañía de sus padres? Permitid que
sus mentes infantiles se relacionen con Dios en las hermosas escenas de la naturaleza.... Al
contemplar las bellezas que él ha creado para la felicidad del hombre, serán inducidos a
considerarlo un Padre tierno y amante.-T 2, 583, 584. 39

La obra de restauración debe comenzar con un reavivamiento de la verdadera observancia del


sábado, cuya esencia es la comunión con Dios, y la conmemoración de su poder creador y
redentor en el día que él mismo santificó. El destino de Israel como nación fue determinado por
su proceder ante el santo día de Dios (Jer. 17:24-27). Nunca fue el propósito divino que el
sábado fuera un fin en sí mismo, sino un medio por el cual el hombre pudiera conocer mejor el
carácter y los propósitos de su Creador ( ver com. Exo. 20:8 ). COMENTARIO BIBLICO, TOMO
4

El mismo lenguaje que se emplea en el mandamiento del diezmo se usa también con respecto
al sábado: "El séptimo día es reposo para Jehová tu Dios".- CONSEJOS SOBRE
MAYORDOMÍA

Según estas citas, entiendo que el Sábado es de Dios y que ese tiempo debería de ser un
deleite estar en comunión con Dios y haciendo sus obras, no deleitandonos nosotros "andando
en nuestros caminos" ni haciendo nuestra voluntad"
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En la década de 1860 -la década de dos visiones básicas sobre reforma pro salud (6 de junio
de 1863 y 25 de diciembre de 1865)- Elena G. de White comenzó a tratar asuntos relacionados
con el sexo. Declaraciones posteriores desarrollaron más el tema. Al referirse al acto sexual en
el matrimonio empleó expresiones tales como "el privilegio de la relación matrimonial", "el
privilegio de la relación familiar" y "los privilegios sexuales".

Para obtener un concepto exacto y equilibrado de las enseñanzas de Elena de White en esta
área delicada, deberían tomarse las declaraciones en conjunto. Debería observarse el equilibrio
que se revela en muchas de sus declaraciones. Debería tomarse nota cuidadosa del significado
de las palabras que utiliza.
A veces usa palabras tales como "pasión" y "propensiones". Con frecuencia se las califica con
palabras tales cómo inferiores, animales, sensuales, depravadas, corruptas. Este lenguaje
fuerte podría conducir a algunos lectores a suponer que se condenan todas las pasiones y que
toda actividad sexual es mala. Las siguientes citas difícilmente apoyarían esta idea:

Dios requiere que Ud. no sólo controle sus pensamientos sino también sus pasiones y sus
afectos... La pasión y el afecto son agentes poderosos... Cuide positivamente sus
pensamientos, sus pasiones y sus afectos. No los degrade para atender a la sensualidad.
Elévelos [las pasiones y los afectos] a la pureza, dedíquelos a Dios. -2T 561, 564 (1870).

Todas las propensiones animales deben sujetarse a las facultades superiores del alma. -HAd
112 (1888).

En el mismo contexto en que usa algunas de esas expresiones fuertes, ella recomienda que las
pasiones sean controladas por lo que llama "facultades más elevadas y nobles", "la razón",
"limitación moral" y "facultades morales". Escribe acerca de temperancia, moderación y de
evitar excesos. En el matrimonio, esas pasiones comunes a todos los seres humanos deben
estar sujetas a control, y deben ser gobernadas. Nótese además:

Los que consideran la relación matrimonial como una de las ordenanzas sagradas de Dios,
protegida por sus santos preceptos, serán controlados por los dictados de la razón. -HL, No. 2,
pág. 48.

Muy pocos consideran que es un deber religioso gobernar sus pasiones... El pacto matrimonial
cubre pecados del más vil carácter... Sacrifican la vida y la salud sobre el altar de las bajas
pasiones. Someten las facultades superiores y más nobles a las propensiones animales... El
amor es un principio puro y sagrado; pero la pasión concupiscente no admite restricción, no
quiere que la razón le dicte órdenes ni la controle. -1JT 264, 265 (1870).

Las pasiones animales, acariciadas y complacidas, llegan a ser muy fuertes en esta época, y
sus resultados seguros son innumerables males en la vida matrimonial. En lugar de
desarrollarse la mente y ser el poder controlador, las propensiones animales gobiernan sobre
las facultades más elevadas y nobles hasta que son llevadas a la sujeción de esas
propensiones animales. ¿Cuál es el resultado? Los delicados órganos de las mujeres se
desgastan y enferman; ya no es seguro tener hijos; se ha abusado de los privilegios sexuales.
Los hombres están corrompiendo sus propios cuerpos, y la esposa ha llegado a ser la esclava
de la cama de los deseos bajos y desordenados hasta que no hay más temor de Dios ante sus
ojos. Complacer los impulsos que degradan tanto el cuerpo como el alma es la tónica de su
vida matrimonial. -Ms 14, 1888.

Ojalá que pudiese hacer comprender a todos su obligación hacia Dios en cuanto a conservar
en la mejor condición el organismo mental y físico, para prestar servicio perfecto a su Hacedor!
Evite la esposa cristiana, tanto por sus palabras como por sus actos, excitar las pasiones
animales de su esposo. Muchos no tienen fuerza que malgastar en este sentido. Desde su
juventud han estado debilitando el cerebro y minando su constitución por la satisfacción de las
pasiones animales. La abnegación y la temperancia debieran ser la consigna en su vida
matrimonial.
Tenemos solemnes obligaciones para con Dios en cuanto a conservar puro el espíritu y sano el
cuerpo, para beneficiar a la humanidad y rendir a Dios un servicio perfecto. El apóstol nos
advierte: "No reine, pues, el pecado en vuestro cuerpo mortal, para que le obedezcáis en sus
concupiscencias." Nos insta a ir adelante diciéndonos que "todo aquel que lucha, de todo se
abstiene." Exhorta a todos los que se llaman cristianos a que presenten sus "cuerpos en
sacrificio vivo, santo, agradable a Dios." Dice: "Hiero mi cuerpo, y lo pongo en servidumbre; no
sea que, habiendo predicado a otros, yo mismo venga a ser reprobado."No es amor puro el que
impulsa a un hombre a hacer de su esposa un instrumento que satisfaga su concupiscencia. Es
expresión de las pasiones animales que claman por ser satisfechas. ¡Cuán pocos hombres
manifiestan su amor de la manera especificada por el apóstol: "Así como Cristo amó a la
iglesia, y se entregó a sí mismo por ella [no para contaminarla, sino] para santificarla y
limpiarla," para "que fuese santa y sin mancha"! Esta es la calidad del amor que en las
relaciones matrimoniales Dios reconoce como santo. El amor es un principio puro y sagrado;
pero la pasión concupiscente no admite restricción, no quiere que la razón le dicte órdenes ni la
controle. No vislumbra las consecuencias; no quiere razonar de la causa al efecto.
Satanás procura rebajar la norma de pureza y debilitar el dominio propio de los que contraen
matrimonio, porque sabe que mientras las pasiones más bajas se intensifican las facultades
morales se debilitan, y no necesita él preocuparse por el crecimiento espiritual de ellos. Sabe
también que de ningún otro modo puede él estampar su propia imagen odiosa en la posteridad
de ellos, y que le resulta así aun más fácil amoldar el carácter de los hijos que el de los padres.
Puede hallarse en las relaciones matrimoniales una pasión de clase tan baja como fuera de
ellas.
¿Cuál es el resultado de dar rienda suelta a las pasiones inferiores? . . . La cámara, donde
debieran presidir ángeles de Dios, es mancillada por prácticas pecaminosas. Y porque impera
una vergonzosa animalidad, los cuerpos se corrompen; las prácticas repugnantes provocan
enfermedades repugnantes. Se hace una maldición de lo que Dios dio como bendición.
Los excesos sexuales destruirán ciertamente el amor por los ejercicios devocionales, privarán
al cerebro de la substancia necesaria para nutrir el organismo y agotarán efectivamente la
vitalidad. Ninguna mujer debe ayudar a su esposo en esta obra de destrucción propia. No lo
hará si ha sido iluminada al respecto y ama la verdad.
Cuanto más se satisfacen las pasiones animales, tanto más fuertes se vuelven y violentos
serán los deseos de complacerlas. Comprendan su deber los hombres y mujeres que temen a
Dios. Muchos cristianos profesos sufren de parálisis de los nervios y del cerebro debido a su
intemperancia en este sentido. HOGAR CRISTIANO

El mismo lenguaje que se emplea en el mandamiento del diezmo se usa también con respecto
al sábado: "El séptimo día es reposo para Jehová tu Dios"

Hay que vigilar estrictamente las pasiones inferiores. Las facultades perceptivas se perjudican
en forma muy definida cuando se permite que las pasiones se manifiesten incontroladamente.
Cuando se complacen las pasiones, la sangre, en vez de circular a todas partes del cuerpo,
aliviando al corazón y aclarando la mente, es llevada en cantidades indebidas a los órganos
internos. Como resultado de eso se produce enfermedad. La persona no puede vivir con salud
hasta que se descubre el mal y se le pone remedio. CONSEJOS SOBRE LA SALUD,
SECCCION XIII

Algunos reconocerán el mal de las prácticas pecaminosas y, sin embargo, se disculparán


diciendo que no pueden vencer sus pasiones. Esta es una admisión terrible de parte de una
persona que lleva el nombre de Cristo. "Apártese de iniquidad todo aquel que invoca el nombre
de Cristo" (2 Timoteo 2: 19). ¿Por qué existe esta debilidad? Es porque las propensiones
animales han sido fortalecidas por el ejercicio, hasta que han prevalecido sobre las facultades
superiores. A los hombres y mujeres les faltan principios. Están muriendo espiritualmente
porque han condescendido durante tanto tiempo con sus apetitos naturales que su dominio
propio parece haber desaparecido. Las pasiones inferiores de su naturaleza han empuñado las
riendas, y la que debiera ser la facultad dominante se ha convertido en la sierva de la pasión
corrupta. Se mantiene al alma en la servidumbre más abyecta. La sensualidad ha apagado el
deseo de santidad, y ha agostado la prosperidad espiritual. CONSEJOS SOBRE LA SALUD,
SECCION XIII

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