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Este tema 0 sirve como repaso para los temas del átomo y el enlace atómico de química.
1. Los átomos.
El átomo constituye la unidad más pequeña de la materia (10-8cm) y está formado por
partículas subatómicas (protón, electrón y neutrón) situados en dos partes bien
diferenciadas: corteza y núcleo.
El núcleo atómico está formado por protones y neutrones, mientras que la corteza está
formada por electrones.
Los protones y los neutrones tienen la misma masa (1’6726 × 10−30 g), se diferencian en
que los protones tienen carga eléctrica positiva, mientras que los neutrones no tienen
carga eléctrica (son neutros). Los protones le dan la carga positiva al núcleo y los
neutrones estabilizan el núcleo, evitando que los protones se repelan. Los átomos
suelen tener el mismo número de protones que de neutrones.
Los electrones presentan una masa despreciable (9,1 × 10-34 g), presentan una carga
negativa y se encuentran girando alrededor del núcleo según los orbitales. En un átomo
el número de protones y de electrones es igual, por lo que los átomos son estructuras
eléctricamente neutras.
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2. Modelos atómicos.
- Dalton: el átomo es indivisible y no presenta partículas subatómicas.
- Thomson: el átomo es una especie de pudín formado por una masa cargada
positivamente en la que se incrustan los electrones (carga negativa) de manera
uniforme. Thomson descubrió el electrón, antes de que los protones y los
neutrones fuesen descubiertos.
- Rutherford: el átomo está formado por una corteza de electrones (carga negativa)
que giran en torno al núcleo que presenta carga positiva debido a los protones. Los
protones compensan la carga negativa de los electrones. La mayor parte del
átomo consiste en el espacio vacío entre el núcleo y la corteza.
Experimento de Rutherford
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Los resultados de este experimento indican que 1) la mayoría de las partículas
positivas atraviesan la lámina sin cambiar la dirección, 2) algunas partículas
desvían su dirección al pasar cerca de los núcleos de los átomos y 3) las partículas
rebotan al chocar con los núcleos.
Estos resultados fueron diferentes a los esperados ya que, según el modelo de
Thomson, todas las partículas positivas deberían atravesar los átomos sin
desviarse, pero estos resultados demuestran que el modelo de Thomson estaba
mal así que, Rutherford postuló su modelo.
- Si un electrón asciende de una órbita (n1) a otra de mayor energía (n2) necesita
absorber una cantidad de energía igual a: ΔE= E(n2) – E(n1) (Línea roja)
- Si un electrón desciende de una órbita (n1) a otra de menor energía (n2) emitirá
una cantidad de energía igual a: ΔE= E(n2) – E(n1) (Línea azul)
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Según Planck, la energía intercambiada por un electrón en un salto no es continua,
sino que va en forma de “paquetes” llamados cuantos o fotones. La energía de un
fotón se mide según:
4. Orbitales atómicos.
Los electrones giran en orbitales atómicos (y no órbitas circulares como Bohr decía,
pero en lo de que la energía es igual en todo el orbital sí que tenía razón) alrededor del
núcleo. Como no podemos establecer la trayectoria de un electrón con precisión
definimos un orbital como la zona de máxima probabilidad en la que podríamos
encontrar un electrón.
Los números cuánticos los empleamos como las herramientas para describir los
orbitales, así como los electrones que los ocupan. Los 3 primeros números cuánticos
(n, l, m) nos dan información acerca del orbital y el cuarto (s) nos la da sobre el
electrón o electrones que lo ocupan.
- Número cuántico principal (n): indica la capa o nivel de energía, así como el
tamaño del orbital. Cuanto más alejado del núcleo está el electrón, mayores son la
energía y el tamaño del orbital.
Puede tomar valores desde el 1 al 7 (a mayor n, mayor energía y tamaño de
orbital).
- Número cuántico secundario o de momento angular (l): indica la subcapa o
subnivel de energía, así como la geometría (o tipo) del orbital. Puede tomar
valores desde 0 a n-1.
ol=0 -> orbital tipo s: esférico
ol=1 -> orbital tipo p: lobular
ol=2 -> orbital tipo d
ol=3 -> orbital tipo f
- Número cuántico magnético (m): define la orientación del orbital en el espacio.
Puede tomar valores desde -l a +l.
- Número cuántico magnético de espín (s): indica las dos posibilidades de rotación
sobre sí mismo que tiene el electrón con respecto a un eje imaginario, dentro del
campo magnético. Puede tomar los valores -1/2 y +1/2.
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5. Configuración electrónica
Los orbitales se van llenando siguiendo el diagrama de Moeller, porque van entrando
al orbital según el orbital en el que son más estables.
- Principio de Aufbau: los electrones entran en los orbitales de energía más bajos
posibles.
- Principio de exclusión de Pauli: en un orbital atómico solo caben, como mucho,
dos electrones. Estos deben tener espines opuestos (si esto es así se dice que
están apareados y se representan mediante flechas verticales ↑ y ↓). No puede
haber electrones con los cuatro números cuánticos iguales.
- Segunda regla de Hund: cuando varios electrones ocupan orbitales de la misma
energía (un mismo subnivel), se disponen de forma que haya el máximo número
de electrones desapareados posible (con el mismo espín).
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6. Conclusiones de la configuración electrónica, formación de iones
estables y tabla periódica.
Según el diagrama de Moeller los elementos pueden presentar entre 1 y 8 electrones
en su última capa, esto hace que los elementos que tienen el mismo número de
electrones en su última capa tengan comportamientos químicos similares, definiendo
hasta 8 familias de elementos químicos con este criterio.
La tabla periódica de los elementos fue creada gracias a los trabajos de Mendeleiev y
Meyer, los cuales intentaron recoger toda la información de los elementos y
agruparlos en grupos o familias.
Tenemos dos criterios diferentes para definir la configuración electrónica y los
periodos en cada una de las familias.
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En los grupos 3-12 (Familias B):
- El periodo coincide con el número cuántico principal de la capa más externa que
tenga como mínimo 1 electrón, pero no es la que se está llenando (por tanto, no
es la de valencia).
- Estos grupos son los de los metales de transición, todos presentan el mismo
número de electrones en la última capa (2) debido a que se está llenando la capa
d, que no pertenece a la más externa.
o Grupo 3 (familia III-B): Su configuración electrónica termina en d1.
o Grupo 4 (familia IV-B): Su configuración electrónica termina en d2.
o Grupo 5 (familia V-B): Su configuración electrónica termina en d3.
o Grupo 6 (familia VI-B): Su configuración electrónica termina en d4.
o Grupo 7 (familia VII-B): Su configuración electrónica termina en d5.
o Grupo 8 (familia VIII-B): Su configuración electrónica termina en d6.
o Grupo 9 (familia IX-B): Su configuración electrónica termina en d7.
o Grupo 10 (familia X-B): Su configuración electrónica termina en d8.
o Grupo 11 (familia I-B): Su configuración electrónica termina en d9.
o Grupo 12 (familia II-B): Su configuración electrónica termina en d10.
Como podemos observar en esta imagen tenemos 4 regiones (dos de ellas divididas en
2), las cuales se nombran según los suborbitales que suelen llenar y son las siguientes:
- Región s: Corresponde a la zona de metales reactivos, son los que normalmente
reaccionan con los no metales para obtener la configuración electrónica de gas
noble. Incluye las familias I-A y II-A
- Región p: Corresponde a la zona de no metales, normalmente reaccionan con los
metales o entre ellos para obtener la configuración electrónica de gas noble,
dentro de esta región también encontramos los gases nobles. Incluye parte de las
familias III-A, IV-A, V-A y VI-A; las familias VII-A y VIII-A completas y al hidrógeno.
- Región d: Corresponde a las zonas de los metales de transición, así como la de
otros metales. Incluye todas las familias del grupo B y parte de las familias III-A, IV-
A, V-A y VI-A.
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- Región f: Corresponde a la zona de los metales de transición interna (o tierras
raras). Incluye tanto a los actínidos como a los lantánidos.
7. Propiedades periódicas
Determinadas características de los átomos varían de manera periódica en función de
su configuración electrónica, estas características son las siguientes:
- Radio atómico: sirve para medir el tamaño atómico y varía en la tabla periódica
según aumenta el número atómico, pero depende de:
Si es en una familia o grupo: si aumenta z el radio atómico aumenta, debido a que
al estar en la misma familia el aumento de z es bastante grande, suficiente como
para aumentar un nivel el número cuántico primario.
Si es en un periodo: si aumenta z el radio atómico disminuye, debido a que el
aumento de z es de un solo protón (y electrón) y eso implica que el núcleo tiene
una carga positiva más que antes y, por tanto, atrae con más fuerza a los
electrones, haciendo que el radio sea menor.
oRadio iónico: Depende de si es anión o catión:
Anión: tienen un electrón de más y teniendo en cuenta que los electrones
se repelen, el radio atómico se expandirá. Anión tiene mayor radio que su
átomo neutro.
Catión: tienen un electrón de menos, pero el mismo número de protones,
por lo que mayor carga positiva implicará que los electrones son más
atraídos hacia el núcleo, además que éstos no se repelerán tanto como
antes. Catión tiene menor radio que su átomo neutro.
Especies isoeléctricas: especies que presentan el mismo número de
electrones, pero diferente número de protones. Por ejemplo: S2-, Cl-, Ar, K+
y Ca2+. El S2- es el que menos protones tiene (Z = 16) y por tanto tendrá el
mayor radio, pues la atracción del núcleo será menor que los demás, por
otra parte, Ca2+ es el que más protones tiene (Z = 20) y por tanto tendrá el
menor radio, debido a que la atracción del núcleo será mayor que los
demás. Por lo que podemos afirmar que en especies isoeléctricas cuanto
menor sea el número atómico, mayor radio tendrán.
- Potencial de ionización: energía mínima necesaria para arrancar un electrón. Varía
al contrario que el radio atómico, debido a que cuanto mayor es el radio atómico,
los electrones se encuentran menos atraídos por el núcleo y es más fácil
arrancarlos.
- Afinidad electrónica: energía desprendida cuando un átomo gana un electrón.
Varía al contrario que el radio atómico, pues a mayor radio atómico menos será
atraído el nuevo electrón y por tanto menos energía será liberada al ser captado.
- Electronegatividad: capacidad de un átomo de atraer el par (o pares) de
electrones compartidos hacia sí mismo. A menor radio, más atraerá el núcleo a los
electrones compartidos, pues estos estarán más cerca de él.
+ electronegatividad: no metal -> tendencia a ganar electrones
- electronegatividad: metal -> tendencia a perder electrones.
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8. Formación de iones estables.
El objetivo de que los átomos formen iones es conseguir estabilidad, como lo más
estable que existe son los gases nobles, el formar un ion consiste en hacer coincidir la
configuración electrónica del elemento en cuestión con la de un gas noble, teniendo 8
electrones en su última capa (Regla del octeto).
Los elementos que suelen cumplir esta regla son los pertenecientes a las familias del
grupo A (excluyendo a la familia VIII-A, pues ellos son gases nobles y ya tienen los 8
electrones en su última capa).
Los elementos de los metales de transición, familias del grupo B a menudo incumplen
esta norma y suelen hacerse más estables perdiendo los electrones de la capa más
externa (los dos que hay en el s siguiente), además intentan perder electrones de su
capa d para dejarla vacía o medio llena; o intentan ganar electrones para llenar dicha
capa.
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10. Cuantificación: concepto de mol.
Un mol es la cantidad de sustancia que contiene 6,023 x 1023 partículas de dicha
sustancia, al unir este concepto con el de peso atómico/molecular podemos obtener el
número de partículas, así como moles, presentes en una masa determinada, pues el
peso atómico/molecular nos indica cuantos gramos de dicha sustancia hay en un mol.
El peso atómico suele venir dado por el número másico de un elemento y el peso
molecular se calcula al sumar los pesos atómicos de los diferentes átomos que forman
la molécula, según sus proporciones: H2O presenta dos átomos de H por cada uno de
O.
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