El domingo 7 de marzo se bautizo nues-

Tomo 29 Marzo-Abril 2021

tro ahora hermano Hary Javier Solís
Matute. Hijo del hermano Luis Roberto
Solís Rodríguez y nuestra hermana
Anita Nohemí Matute Duarte . Pedimos
que lo tomen en cuenta en sus oracio-
nes para que el Señor le ayude en su
crecimiento espiritual. Durante la cam-
paña en Elixir visitamos una pareja que
esta visitando la iglesia en Olanchito.
Les pedimos que oren por esta congre-
gación y por los hermanos que luchan
por seguir firmes en la fe. —Freddy Rivas

En este lugar se llevo a cabo una campaña del martes 20 miércoles 21

Abril. Gracias a Dios muchos recibieron el mensaje del evangelio. La igle-
sia aquí acogió a los hermanos con alegría de corazón se estudio con
muyas personas que nos visitaron en las reuniones y el local no se dio
abasto. Agradecemos a los hermanos de Guatemala, El Salvador y de Obreros listos para tocar puertas, durante la campaña, en
nuestro país. Estuvimos muy animados y contentos con la labor evangelis- Barrio La Isla en La Ceiba, Atlántida, Honduras.
tica hemos dado seguimiento a varios contactos y les pedimos que oren
por nosotros para seguir cosechando frutos para Cristo. -Esau Ramos

En este número lea: Pág

Del jueves 22 al viernes 23 de Abril, estuvimos tocando puertas en el Barrio La Isla
y alrededores de esta ciudad. Gracias a Dios tuvimos éxito en predicar el evangelio Dios acepta solamente la ofrenda de Él 2
ya que muchas personas estuvieron anuentes a recibir el mensaje y tuvimos visi-
tantes durante las reuniones. También dimos seguimiento a varios contactos con la
ayuda de hermanos de Elixir y La Ceiba. Agradecemos a todos los hermanos que ¿Podemos Entender La Biblia De La Misma Manera? 6
vinieron de diferentes partes de Centroamérica como también al hermano Tony que
colaboro con generosidad para que pudiéramos realizar dicho evento. Fue de gran
provecho ya que compartimos expresando la unidad en paz que hay entre predica- El discípulo inquisitivo 11
dores y hermanos que se fueron muy gozosos. —Freddy Rivas
Al Azar (noticias de la iglesia de Cristo) 12

En Internet: www.mensajero.wordpress.com.
Correo electrónico: freddyhumbertorivas@gmail.com

12

Introducción:
Sobre el tema de la ofrenda
se da una particularidad: o se habla
mucho sobre él, o se dice muy po-
co, o nada. (Los de la falsa doctrina
de la prosperidad, mucho, pero en
la iglesia de Cristo poco se habla de
él)
Sin embargo, puesto que en las es-
crituras este es un tema amplio,
¿Por qué no abundamos nosotros en
predicarlo, siempre y cuando se
aborde de forma correcta?
(Podríamos llevarnos meses estu-
diando solo este tema, porque es un
tema abundante)
Hay varias razones por las que en
muchas iglesias de Cristo casi no se
toca la temática que tiene que ver
con el dinero o la ofrenda.
1. Podría ser porque algunos
maestros tengan temor de ser con-
fundidos con los comerciantes de la
palabra de Dios. 2 Pedro 2:3 “y por
avaricia harán mercadería de voso-
tros con palabras fingidas. Sobre
los tales ya de largo tiempo la con-
denación no se tarda, y su perdición
no se duerme.”
2. Porque no se entiende sobre
el tema.
3. Porque los maestros com-
prenden el tema y ellos mismo no
están dando la única ofrenda que
2 11
Dios acepta
solamente la
ofrenda de Él
Por Adrián Torres
Dios acepta.
I. ¿Cuál es la ofrenda de Dios?
En primera instancia, la ofrenda
debe darse conforme al manda-
miento que en el Nuevo Testamen-
to nos dice cuándo, cómo y cuánto
ofrendar. 1 Corintios 16:1,2 En
cuanto a la ofrenda para los santos,
haced vosotros también de la mane-
ra que ordené en las iglesias de Ga-
lacia.
2 Cada primer día de la semana
cada uno de vosotros ponga aparte
algo, según haya prosperado, guar-
dándolo, para que cuando yo llegue
no se recojan entonces ofrendas.
Siempre se genera un estira y enco-
ge del que enseña con los enseña-
dos, con respecto a este tema. “Que
los judíos daban tanto” (los que
enseñan, tratando de dilucidar).
“Que nosotros damos entre el 25 y
27%” (dicen algunos enseñados
tratando de contrarrestar).
¿Puede usted notar cuanta carnali-
dad, banalidad y superficialidad
existe en todo ello? Es una muestra
de lo que es no ser conscientes, de
una fe empobrecida y de que la gra-
titud y la generosidad son difuntos
en un corazón marchito.
Todos debemos de saber, que cuan-
do un cristiano deposita su ofrenda
según haya prosperado, se encuen-
cado «Dios le da justicia a cam- «justificados», declarados justos
bio de su fe». Esto es falso. La de toda nuestra maldad. Dios
palabra traducida «por» en este
versículo es una mala traduc-
ahora nos trata como que si nun-
ca hubiéramos sido culpables.
ción. Aquí «por» traduce la pala-
bra griega eis, la cual siempre Conclusión:
significa «para». Como dice el
diccionario griego Tuggy, el La fe de Abraham fue una fe vi-
concepto principal de eis «es de va y activa y le fue contada para
movimiento para penetrar o en- justicia. Hoy en día, bajo del tes-
trar en». La misma frase griega tamento de Cristo, nuestros cora-
(εἰς δικαιοσύνηn) de Romanos zones rebosan gratitud porque en
4:3 traducida «por justicia» es Cristo hemos sido:
traducida «para justicia» en Ro-
1. Justificados en su sangre
manos 10:10.
(Romanos 5:9).
Romanos 10:10 «Porque con el
2. Justificados por su gracia
corazón se cree para justicia, pe-
(Romanos 3:24)
ro con la boca se confiesa para
salvación».
3. Justificados por la fe
(Romanos 5:1)
Hermanos y amigo, no creemos
por justicia, sino «para justicia» 4. Justificado «por las obras,
o sea para alcanzar la justicia.
y no solamente por la
Dios no transfiere literalmente la
fe» (Santiago 2:24).
justicia de Cristo a nuestras al-
mas (tal concepto es antibíblico
Esta justificación no se recibe
y muestra ignorancia sobre la
por transferencia, sino por medio
naturaleza del pecado y la justi-
de una limpieza interna de todos
cia). No ocurre ninguna nuestros pecados. Justificación
«transferencia» cuando Dios nos
significa perdón de nuestras
salva.
ofensas y eliminación de toda
culpabilidad. Gracias a Dios por
Lo que ocurre es que Dios can- el acto de justicia de Cristo en la
cela nuestra culpabilidad, nos
cruz por la cual todos los hom-
perdona, nos absuelve, nos exo- bres podemos gozar de la justifi-
nera, nos justifica, nos exculpa
cación de vida (Ro.5:18).
de todo crimen (pecado, trans-
gresión, iniquidad). Somos

altar? 22 ¿No ves que la fe
actuó juntamente con sus
obras, y que la fe se perfec-
cionó por las obras? 23 Y se
cumplió la Escritura que di-
ce: Abraham creyó a Dios, y
le fue contado por justicia, y
fue llamado amigo de Dios».
Por lo tanto, no fue hasta que
Abraham ofreció a su hijo que
se cumplió la Escritura
«Abraham creyó a Dios, y le
fue contado por justicia».
SOLA FIDE– UNA DOC-
TRINA PERVERSA
Es triste que Martín Lutero in-
trodujo la herejía de Sola Fide
(por la fe sola) sin obras de obe-
diencia. Romanos 4:2 no hace
ninguna referencia a un recibi-
miento de justificación sin obe-
diencia, sino que la justificación
de Abram no se basaba en la
circuncisión ni en guardar las
obras de la ley de Moisés. En
Romanos 4, Pablo está enfren-
tando a los judaizantes que que-
rían exigir la circuncisión y el
cumplimiento de la ley mosaica
como condiciones de salvación
(Hechos 15:1). El apóstol no le
está restando importancia a la
obediencia a los mandamientos
de Cristo.
10
Nadie jamás en ninguna dispen-
sación ha sido justificado aparte
de la obediencia. «Las obras»
mencionadas en Romanos 4:2
son las mismas que mencionó
unos versículos anteriores ha-
blando de las obras de la ley de
Moisés (Romanos 3:27,28). La
justificación de Abram se efec-
tuó íntegramente sin las obras
de la ley de Moisés, la cual fue
dada unos 400 años después,
pero su justificación no se efec-
tuó sin obras de obediencia. De
hecho, Romanos 4:12 habla de
seguir «las pisadas de la fe que
tuvo nuestro padre Abraham
antes de ser circuncidado». La
mención de «las pisadas» o «el
andar» de Abraham implica que
su fe era activa, que él andaba
obedientemente en los caminos
de Dios. No era una fe mera-
mente mental o una fe inactiva
o muerta.
LA IMPUTACIÓN DE
JUSTICIA
Otra herejía fundada en Roma-
nos 4:5 es que el pecador se en-
cuentra un estado de deprava-
ción total y que sus pecados li-
teralmente son transferidos al
Cristo crucificado, y que la jus-
ticia de Cristo es transferida al
alma del pecador. Malinterpre-
tan la frase «su fe le es contada
por justicia» dándole el signifi-
tra en el punto de poder decir:
“siervo inútil soy”. Lucas 17:10
Así también vosotros, cuando ha-
yáis hecho todo lo que os ha sido
ordenado, decid: Siervos inútiles
somos, pues lo que debíamos ha-
cer, hicimos.
La ofrenda que Dios acepta no está
basada en porcentajes rígidos. Al
contrario, Dios nos enseña por me-
dio de muchos ejemplos, que la
ofrenda que Él acepta está íntima-
mente relacionada con la condición
del corazón de aquel que la da.
Pablo usa un gran ejemplo al res-
pecto, con el afán de animar a los
corintios a ofrendar y a cumplir su
promesa. 2 Corintios 8 Asimismo,
hermanos, os hacemos saber la
gracia de Dios (don o favor que se
hace sin merecimiento particular;
concesión gratuita) que se ha dado
a las iglesias de Macedonia;
2 que en grande prueba de tribula-
ción, (Los romanos les habían qui-
tado todo) la abundancia de su go-
zo (fruto del Espíritu) y su profun-
da pobreza (calamidad) abundaron
en riquezas de su generosidad.
3 Pues doy testimonio de que con
agrado (con complacencia, volun-
tad o gusto) han dado conforme a
sus fuerzas, y aún más allá de sus
fuerzas, (Pablo estaba sorprendido,
pero los hermanos estaban gozo-
sos, enriquecidos de generosidad y
gratitud, y con la fe plena de que
Dios es el dueño de todo).
4 Pidiéndonos con muchos ruegos
que les concediésemos el privile-
gio de participar en este servicio
para los santos. (Por favor, Pablo,
es verdad que estamos en calami-
dad, pero queremos servir a nues-
tros hermanos de Jerusalén)
5 Y no como lo esperábamos, (a lo
mejor Pablo ni se imaginó que es-
3
tos hermanos tan empobrecidos
fuesen tan ricos) sino que a sí mis-
mos se dieron primeramente al
Señor (si ellos mismos se entrega-
ron por completo a Dios,
¡imagínese si podrían poner límites
en lo material si en algo era útil en
la obra del Señor!, y luego a noso-
tros por la voluntad de Dios;
Con esta acción, los hermanos de
Macedonia muestran qué tan cons-
cientes eran de la gracia de Dios;
también muestran el grado de fe y
gratitud que tenían.
Eso, hermanos, solo podría ser
comparable con la acción de la
viuda que ofrendó dos blancas, con
el centurión que amaba a su siervo,
con la mujer cananea, con la rame-
ra que secaba con su cabellera los
pies de Jesús, con Zaqueo al ofre-
cer devolver triplicado lo robado,
etc.
Cuánta razón hay en las palabras
de Jesús al decir: “Y conoceréis la
verdad y la verdad os hará libres”.
Los macedonios eran libres en to-
dos los aspectos. Eran libres de
ataduras materiales. Ellos, con su
acción, revelaron qué tan pobres
son los ricos, los que se aferran a
las cosas materiales, los que se
cuelgan de un centavo para irse
con él antes que perderlo. Pero los
macedonios eran más ricos, porque
ellos eran libres.
Entonces, ¿Cuál es la ofrenda de
Dios? La que se da con liberalidad,
con espontaneidad y con riqueza
de generosidad.
Pablo les decía algo a los corintios
que los hermanos de Macedonia
comprendían a la perfección 9 Por-
que ya conocéis la gracia de nues-
tro Señor Jesucristo, que por amor
a vosotros se hizo pobre, siendo
rico, para que vosotros con su po-
breza fueseis enriquecidos.
En este punto es donde entra en
juego el trabajo de los evangelis-
tas, los ancianos y maestros: Qué
tanto empeño, alejados de prejui-
cios y perjuicios, estamos ponien-
do en instruir a los fieles de nues-
tras localidades; con qué empeño
empleamos la mente y el corazón
en lo que enseñamos, sin procurar
ganar el favor de nadie sino el de
Dios.
Efesios 4; 11-16 Y él mismo cons-
tituyó a unos, apóstoles; a otros,
profetas; a otros, evangelistas; a
otros, pastores y maestros, 12 a fin
de perfeccionar a los santos para la
obra del ministerio, para la edifica-
ción del cuerpo de Cristo, 13 hasta
que todos lleguemos a la unidad de
la fe y del conocimiento del Hijo
de Dios, a un varón perfecto, a la
medida de la estatura de la plenitud
de Cristo; 14 para que ya no sea-
mos niños fluctuantes, llevados por
doquiera de todo viento de doctri-
na, por estratagema de hombres
que para engañar emplean con as-
tucia las artimañas del error, 15
sino que siguiendo la verdad en
amor, crezcamos en todo en aquel
que es la cabeza, esto es, Cristo, 16
de quien todo el cuerpo, bien con-
certado y unido entre sí por todas
las coyunturas que se ayudan mu-
tuamente, según la actividad pro-
pia de cada miembro, recibe su
crecimiento para ir edificándose en
amor.
II. ¿Cuánto deberíamos dar
para que Dios acepte nuestra
ofrenda?
Después de ver el primer punto,
esta pregunta suena absurda, pero
la contestaré para darle más clari-
dad al tema. Pablo usa una compa-
ración entre el que da una ofrenda,
con un campesino, para ejemplifi-
4 9
carnos cuánto deberíamos dar de
ofrenda. A la vez, nos declara una
de las más significativas promesas
de Dios para ser cumplida en noso-
tros mientras vivimos.
1 Corintios 9: 6 Pero esto digo: El
que siembra escasamente, también
segará escasamente; y el que siem-
bra generosamente, generosamente
también segará.
7 Cada uno dé como propuso en su
corazón: no con tristeza, ni por
necesidad, porque Dios ama al da-
dor alegre.
8 Y poderoso es Dios para hacer
que abunde en vosotros toda gra-
cia, a fin de que, teniendo siempre
en todas las cosas todo lo suficien-
te, abundéis para toda buena obra;
9 como está escrito:
Repartió, dio a los pobres;
Su justicia permanece para
siempre.
10 Y el que da semilla al que siem-
bra, y pan al que come, proveerá y
multiplicará vuestra sementera, y
aumentará los frutos de vuestra
justicia,
11 para que estéis enriquecidos en
todo para toda liberalidad, la cual
produce por medio de nosotros
acción de gracias a Dios.
12 Porque la ministración de este
servicio no solamente suple lo que
a los santos falta, sino que también
abunda en muchas acciones de gra-
cias a Dios;
13 pues por la experiencia de esta
ministración glorifican a Dios por
la obediencia que profesáis al
evangelio de Cristo, y por la libe-
ralidad de vuestra contribución
Dice Hebreos 11:9, «Por la fe
habitó como extranjero en la
tierra prometida como en tierra
ajena, morando en tiendas con
Isaac y Jacob, coherederos de la
misma promesa».
Abram pudo haber vivido lite-
ralmente con Isaac y Jacob co-
mo dice el texto porque Isaac
tenía 75 años y Jacob 15 cuando
murió Abraham. Sin embargo,
ya estaba habitando como ex-
tranjero en la tierra prometida
muchos años antes de que na-
ciera su hijo Isaac y su nieto
Jacob, como comprueba Géne-
sis 13:14-18. Otra vez,
Abraham ya era un hijo obe-
diente con mucha fe antes de
ser pronunciado «justificado»
en Génesis 15:6.
(3) En tercer lugar, según Gene-
sis 12:8, nos enseña que Abram,
antes de viajar a Egipto, edificó
un altar a Jehová cerca de Betel,
e invocó allí el nombre de Jeho-
vá. En Génesis 13:4, volvió a
ese mismo lugar y reedificó el
altar «e invocó allí Abram el
nombre de Jehová». En Géne-
sis 13:18, Abram erigió un altar
a Jehová cerca de la ciudad de
Hebrón. Por lo tanto, sabemos
a ciencia cierta que Abram ya
era un hijo de Dios, un verdade-
ro adorador del Altísimo antes
de Génesis 15:6.
(4) En cuarto lugar, Génesis 14
habla de Melquisedec que le
bendijo diciendo «Bendito sea
Abram del Dios Altísi-
mo» (14:19). Abram no era un
pecador maldito, sino bendito
del Señor.
Entonces, cuando llegamos a
Génesis 15:6, es un error decir
que este texto describe la con-
versión de Abram en hijo de
Dios. Ya era hijo de Dios por fe
y obediencia muchos años an-
tes. Es un error también alegar
que Dios hizo el pacto nuevo
con Abraham por primera vez
aquí en Génesis 15:6.
Como ya hemos visto, los acon-
tecimientos en Génesis 12 al 14
indican que Abraham ya se en-
contraba en un pacto con Dios.
Según Hechos 3:25, este pacto
que Dios hizo con Abraham co-
menzó en Génesis 12:3 cuando
Dios dijo: «Serán benditas en ti
todas las familias de la tierra» y
este pacto fue reconfirmado en
Génesis 22:18. Por lo tanto,
en Génesis 22:18 y 15:4-6, Dios
simplemente reafirma su pacto
con Abram.
Entonces la justificación de
Abraham empezó mucho antes
de Génesis 15:6 y este verso
simplemente expresa nueva-
mente que Dios al ver esta de-
mostración de fe lo acepta para
justicia. De hecho, la justifica-
ción final de Abraham no ocu-
rrió hasta Génesis 22, como
indica Santiago 2:21-23.
Stg. 2:21-23 «¿No fue justifi-
cado por las obras Abraham
nuestro padre, cuando ofre-
ció a su hijo Isaac sobre el

LA FE DE ABRAHÁM
Pregunta: ¿Enseña Romanos 4:2-5 que Abraham
fue salvo por fe antes de hacer obras de obediencia?
¿Enseña Romanos 4:5 la doctrina de la imputación
de justicia? (E.E.U.U) Publicación: El Mensajero
Marzo-Abril
Respuesta: Los falsos maestros 14 que prueban sin lugar a du-
das que Abraham se encontraba
han tergiversado Romanos ca-
pítulo 4 para defender la doctri- un estado aprobado por Dios
na humana de sola fide (la fe antes de ser pronunciado justifi-
sóla) y la imputación de justicia cado en Génesis 15:6.
al pecador.
LA FE DE ABRAM AN-
La declaración de Romanos 4:5, TES DE GÉNESIS 15:6
«Creyó Abraham a Dios, y le
fue contado por justicia», fue (1) En primer lugar, cuando
hecha originalmente en Génesis Abraham salió de Ur de los cal-
15:6. deos, ya era reconocido como
hombre de fe (Véase Génesis
Génesis 15:6 dice, «Y creyó a 12:1-5 y Hechos 7:2,3).
Jehová, y le fue contado por
justicia». Leamos Hebreos 11:8, «Por la
fe Abraham, siendo llamado,
Muchos ‘evangélicos’ alegan obedeció para salir al lugar que
que en ese momento, Abraham
había de recibir como herencia;
fue convertido en hijo de Dios. y salió sin saber a dónde iba».
Es decir, creen que antes de Gé-
nesis 15:6, Abraham era un pe- Por lo tanto, Abram no era un
cador sin la justificación de pecador condenado al infierno,
Dios y que en ese instante sino un creyente obediente. Par-
Abraham creyó la promesa de tió sin saber adónde iba, con-
Dios y fue salvo antes de hacer
fiando plenamente en la prome-
alguna obra de obediencia. sa de Dios.
Esto no es cierto, porque si lee- (2) En segundo lugar, según
mos Génesis capítulos 12, 13 y Génesis 13:14-18, Abraham ya
14 descubriremos que Abram se había radicado como extran-
ya era un siervo fiel de Dios
jero en la tierra prometida, habi-
antes de llegar al capítulo 15. tando en tiendas de campaña
Consideremos cuatro aconteci- antes de ser proclamado justo
mientos en los capítulos 12 al en Génesis 15:6.
8 5
para ellos y para todos;
14 asimismo en la oración de ellos
por vosotros, a quienes aman a
causa de la superabundante gracia
de Dios en vosotros.
15 !Gracias a Dios por su don
inefable!
1. Aunque no deberíamos
ofrendar por lo que cosecharemos,
sino porque sabemos de la gracia
de Dios, Pablo nos hace saber de
todas formas que habrá un efecto a
esta acción.
2. Dar como propuso en su
corazón, es despojarse de toda tris-
teza al ofrendar, también de la idea
absurda de que Dios lo necesita.
Me gusta el Salmos 50: 12 12 Si
yo tuviese hambre, no te lo diría a
ti; porque mío es el mundo y su
plenitud. Esto se lo decía al pueblo
de Israel.
3. Para Dios no es difícil hacer
que nos abunden las bendiciones
hasta el punto de que tengamos
todo cuanto necesitemos, le es tan
fácil como fue soplarle la nariz a
Adán; pero lo haría con el fin de
que nosotros abundemos en más
generosidad.
4. Él, Dios, no tiene dificultad
alguna para aumentar los frutos de
nuestra sementera y de nuestra jus-
ticia. Él solo quiere bendecirnos,
quiere llenarnos de todo lo necesa-
rio, quiere evitarnos el desamparo
y que nuestra descendencia mendi-
gue pan. Con este mandamiento
solo quiere darnos la oportunidad
de bendecirnos, de hacer que so-
breabunde en nosotros toda clase
de bendiciones, de permitirnos pa-
recernos a Él en amor, en bondad,
en generosidad, etc. Me gusta lo
que dice Salmos 32:9 NVI 9 No
seas como el mulo o el caballo,
que no tienen discernimiento,
y cuyo brío hay que domar con
brida y freno,
para acercarlos a ti».
5. Dios quiere que seamos en-
riquecidos en todo para toda libe-
ralidad. Cuando su corazón alcan-
za esa condición de libertad, enton-
ces Dios nos permite meter nues-
tras manos en sus riquezas, pero
con un solo fin: que abundemos en
buenas obras, que nuestra genero-
sidad no se limite, porque de esa
forma logramos que abunden las
acciones de gracia. Eso quiere
Dios. Con el ejemplo del rico y
Lázaro, el rico insensato, el rico
que no quiso vender todo lo que
tenía para repartirlo a los pobres,
Dios nos enseña que aferrarse a las
riquezas no es ninguna garantía de
ir al cielo.
6. Hay tanta riqueza de ense-
ñanza y aprendizaje en este texto,
que sería imposible enseñarlo a
cabalidad en solo un año. Por
ejemplo, piense en el cierre de este
capítulo, que dice: !Gracias a Dios
por su don inefable! Eso quiere
decir que es de tal magnitud, que
no se puede explicar con palabras.
No existe en el lenguaje humano
una forma de describir Su dádiva o
regalo para la humanidad, y para
sus hijos, ese don es más profundo
aún.
Conclusión:
Hay dos clases de riquezas: Las
que se obtienen sin la gracia de
Dios, y las que Dios provee para
que demos con liberalidad.
Las primeras producen placer car-
nal, y las segundas producen placer
espiritual, infinito, inefable.
¿Podemos Entender La Biblia
De La Misma Manera?
Johnny Elmore
En nuestro mundo moderno, los
hombres han formado muchas sec-
tas diferentes y han enseñado mu-
chas doctrinas contradictorias, no
obstante, todos afirman seguir la
Biblia hasta cierto punto. Muchas
personas han visto la confusión
entre los líderes religiosos y han
perdido la esperanza. Ellos piensan
que, si los predicadores no pueden
ponerse de acuerdo, ¿qué esperan-
za tiene la gente común para estar
de acuerdo en las enseñas de la
Biblia? Muchos han tomado refu-
gio en la idea que no es posible
que todos entendamos la Biblia de
la misma manera. Si la Biblia es
verdad, la obediencia a sus manda-
mientos trae la única esperanza de
salvación. Si la Biblia tiene que ser
obedecida, entonces tiene que ser
entendida. ¿Podemos entender la
Biblia de la misma manera? o
¿para usted la Biblia tiene un signi-
ficado y para mí tiene otro signifi-
cado diferente?
La palabra más frecuentemente
traducida "entender" en la Biblia
es una palabra que significa " ejer-
cer la mente, comprender, captar”
según el Diccionario Griego
Strong. Dios nos ha dado una reve-
lación. Cuenta con los hombres
escuchen o lean los hechos de esta
revelación y ejercen la mente, y
capten el significado. Esto no es
una operación extraña; lo hacemos
esto todos los días. Por ejemplo,
encontramos un problema de mate-
máticas: dos más dos son ¿qué?
Toda persona de cualquier nivel de
inteligencia entiende y sabe que
solamente hay una respuesta a esta
ecuación, y es cuatro. Si alguien da
una respuesta diferente, es que no
hubo entendimiento o no hubo res-
6 7
peto por la verdad. ¿Puede la gente
entender algo y todavía verlo de
forma diferente? No, como mues-
tra la ecuación de antes, tienen que
comprenderlo de la misma manera.
El verlo de manera diferente impli-
ca una falta de comprensión. Hay
muchas maneras de no ver las co-
sas, pero si lo vemos del todo, lo
veremos igual. ¿Tiene la capacidad
el hombre de entender la Biblia?
Algunos dicen que para que el
hombre entienda la Biblia, se re-
quiere una operación inmediata del
Espíritu Santo en su corazón. Si así
fuera, entonces Dios sería respon-
sable si el hombre no entendiera.
Pero, el hombre tiene la capacidad
de entender. El hombre es la única
criatura que puede comprender las
abstracciones, pesar evidencia,
razonar de causa a efecto, y de
efecto a causa. Debido a su inteli-
gencia, el hombre es moralmente
responsable y tendrá que dar cuen-
ta por sus acciones.
¿Puede ser entendida la Biblia?
Si la Biblia no puede ser entendi-
da, entonces la falta queda con su
autor. ¿Nos ha dado Dios delibera-
damente un libro que no podemos
entender? ¿Fue incapaz de darnos
una revelación que podemos enten-
der? Si decimos que Dios delibera-
damente nos dio un libro que no
podemos entender, proyectamos
una sombra sobre el carácter moral
de Dios. Si decimos que Dios no
fue capaz de darnos un libro que
pudiéramos entender, entonces
proyectamos una sombra sobre su
poder. Si cualquiera de estas dos
alternativas sea verdad, entonces
Dios no es el Dios que creemos
que sea. La Biblia describe a Dios
como aquel que todo lo sabe, que
es lleno de bondad y amor y todo-
poderoso. Ciertamente, un Dios
bueno no nos daría un libro que no
podía ser entendido. La Biblia nos
dice que "Dios no es Dios de con-
fusión" (1 Corintios 14:33). Cierta-
mente un Dios plenamente sabio,
todopoderoso, que hizo al hombre
con la habilidad de razonar, fue
capaz de darle un libro que podía
ser entendido. Hay que concluir
que la Biblia puede ser suficiente-
mente entendida para que el hom-
bre pueda seguir sus instrucciones.
¿Quiere y espera Dios que los
hombres entiendan la Biblia de
la misma manera?
Sí, Dios manda a todos los hom-
bres que entiendan la voluntad de
Dios y la hagan. El apóstol Pablo
dijo: "Por tanto, no seáis insensa-
tos, sino entendidos de cuál sea la
voluntad del Señor" (Efesios 5:17).
Juan enseñó que "el que hace la
voluntad de Dios permanece para
siempre" (1 Juan 2:17), y dijo:
"Bienaventurados los que lavan
sus ropas, para tener derecho al
árbol de la vida, y para entrar por
las puertas en la ciu-
dad" (Apocalipsis 22:14). No sola-
mente debemos entenderla, sino
que también hay que entendemos
de la misma manera. Pablo les
mandó a los Corintios: "Os ruego,
pues, hermanos, por el nombre de
nuestro Señor Jesucristo, que ha-
bléis todos una misma cosa, y que
no haya entre vosotros divisiones,
sino que estéis perfectamente uni-
dos en una misma mente y en un
mismo parecer" (1 Corintios 1:10).
Hay muchas causas por las que el
hombre no logra entender, entre
ellas, la pereza, el prejuicio, la so-
berbia, la deshonestidad, intereses
personales, preferencias emociona-
les, etc.
La mayoría de los desacuerdos
surgen a raíz de lo que la Biblia no
enseña, y no de lo que la Biblia
enseña No estamos en descuerdo
en que Pablo tenía un aguijón en la
carne (2 Corintios 12:7), pero es
posible que estemos en desacuerdo
acerca de lo que es el aguijón por-
que la Biblia no lo dice. Temas
controversiales como la membre-
cía infantil, bautismo por rociar
agua, música instrumental en la
adoración son prácticas que no se
encuentran en el Nuevo Testamen-
to. Podemos estar de acuerdo en lo
que la Biblia enseña.
El hombre es un ser responsable.
Dios le manda entender y obedecer
su voluntad. Debe poner a un lado
todo prejuicio, soberbia y desho-
nestidad porque su alma está en
juego. No debe estudiar para pro-
bar lo que ya piensa, sino que debe
acercarse a El objetivamente, con
oración, reverencia y humildad.
Debe tomar en cuenta cuatro cosas
en su estudio de la Biblia.
(1) ¿Quién habla? No obedece-
mos las palabras de Satanás
que están anotadas en la Bi-
blia.
(2) ¿A quién habla? Algunos
mandamientos y promesas
no nos incluyen.
(3) ¿Cuándo fue dicho?
(4) ¿Por qué fue dicho? Mucha
de la confusión actual acerca
de los dones milagrosos po-
dría ser elimina-da con estas
cuatro reglas sencillas. Al-
gunas promesas tenían sola-
mente una aplicación provi-
sional o local.
Jesús les dijo a los judíos, "Si vo-
sotros permanecierais en mi pala-
bra, seréis verdaderamente mis
discípulos; y conoceréis la verdad,
y la verdad os hará libres" (Juan
8:31-32). Si somos estrictamente
honestos en el estudio de la Biblia,
y estamos listos para usar las re-
glas ordinarias del sentido común
para llegar a conclusiones, sin aña-
dir ni quitar nada de la revelación
de Dios, entonces podemos enten-
der la Biblia de la misma manera y
evitar la división y la confusión
religiosa que ahora permea el mun-
do.