Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
CAPÍTULO 1: BEAR
Es una de las razones por las que mi estudio de pornografía gay,
Ballsy Boys, es tan popular. Entregamos porno gay de alta calidad
y tenemos a los mejores chicos del negocio. Se necesita mucho
para que los contrate. Necesitas amor por el sexo, buena química
con tus parejas y, lo más importante, una gran conexión con la
cámara. En este caso, solo necesitaba imaginar su cuerpo ágil
con ese culito regordete inclinado hacia un hombre como
nuestra estrella principal Rebel con su galardonada polla para ver
las posibilidades.
Me siento en mi oficina y vuelvo a estudiar su formulario de
solicitud en línea, aunque prácticamente lo sé de memoria ahora.
Cuando se puso en contacto conmigo por correo electrónico, le
envié el enlace al formulario. Es el primer paso necesario para
poder eliminar a los peores bichos raros. No es que supiera que
estaría en esa categoría, pero nunca se sabe.
El poco maquillaje que se puso tampoco duele, ya que resalta sus
labios tan besables. Los ves y no puedes evitar preguntarte cómo
se verían alrededor de tu polla. Bastante bien, supongo.
CAPÍTULO 2: PIXIE
No puedo creer que esté haciendo esto. En unos minutos, estaré
completamente desnudo, siendo follado por una de mis estrellas
porno favoritas. Ninguna de esas cosas es un problema; es toda
la gente que mira lo que me hace un nudo en el estómago.
–Lo sé. Quiero decir, he visto tus videos. Eres ... sé quién eres –.
Puedo sentir que me sonrojo de nuevo, pero esta vez una sonrisa
de satisfacción se dibuja en mis labios. La mención de Bear hace
que mi corazón se vuelva loco de nuevo.
Su cabello oscuro está peinado hacia atrás con estilo, canas
salpicando sus sienes y su corta barba. Los músculos tensan su
camiseta negra, más cabello gris y castaño oscuro asoma por el
cuello de la camiseta. Mi polla se pone más dura, preguntándome
cómo se vería sin su camisa.
Rebel parece sin palabras, y Bear mete la mano en sus jeans para
reorganizar su erección, haciendo que se me haga agua la boca.
Me dejo caer en el sofá y cierro los ojos, relajándome para que él
pueda sacarlo. Tan vergonzoso como es, encuentro que mi polla
se pone increíblemente más dura cuando Rebel abre mis mejillas
y comienza a liberar el enchufe. El líquido preseminal gotea de
mi raja y se acumula en mi estómago.
Lo libera, lo arroja a un lado y se seca las manos con una toalla.
Nos volvemos a poner la ropa interior para la continuidad de la
escena y volvemos a nuestra posición original.
Una de las cosas por las que estaba más nervioso cuando envié el
video de mi audición fue el hecho de que no tengo exactamente
lo que la mayoría consideraría una polla de estrella porno.
Quiero decir, es una polla bonita, no me malinterpretes, pero
mido un metro sesenta y cinco y cincuenta kilos empapados, y mi
polla es proporcional al resto de mi cuerpo. Es un idiota lindo, y
nunca me había sentido cohibido hasta que comencé a
considerar postularme para Ballsy Boys. Cuando Bear llamó para
ofrecerme el trabajo después de revisar mi cinta de audición, no
mencionó el tamaño de mi pene, así que pensé que no era algo de
lo que debería preocuparme. Rebel tampoco parece desanimado,
así que supongo que no será un problema para los espectadores.
Lo miro con los ojos muy abiertos y hambrientos y separo los
labios lentamente. Dejando que mi lengua se salga, puedo
saborear su líquido preseminal salado en mis labios. Lamiendo su
raja, con avidez recojo más, y Rebel gime. No pierdo más tiempo
antes de tomarlo en mi boca y bajarlo fácilmente por mi garganta.
¿Qué puedo decir? Me encantan las pollas enormes, así que he
tenido un poco de práctica manejandolas. Rebel jadea en voz
alta, enhebrando sus dedos por mi cabello mientras lo chupo,
haciendo ruidos ruidosos y descuidados mientras me ahogo con
su polla una y otra vez.
No me contengo, haciendo todos mis mejores movimientos
mientras lo chupo, sin detenerme en su polla, sino también
lamiendo sus bolas y tomándome la libertad de besarlo también.
Aunque no me dijeron expresamente que le lamiera el culo, no
recibo ninguna reprimenda, así que me imagino que todo está
bien. Claramente ha tenido mucha práctica para contener su
orgasmo porque no importa cuánto jadea, gime y se retuerce, no
hace tapping. Felizmente le doy todo lo que tengo hasta que Bear
nos pide que cortemos de nuevo.
–Mierda, Bear, creo que podría tener que llevarme al niño a casa
y quedármelo para mí–, bromea Rebel sin aliento, y me acicalo
bajo los elogios. Incapaz de contenerme, miro a Bear por encima
del hombro. El ligero bulto de antes es mucho más notable
ahora, y ni siquiera se molesta en fingir que no está allí.
–¿Estoy bien, Bear?– Verifico , sin saber por qué llamó a cortar,
o si esto es estándar para tomar descansos a lo largo de la escena
de esta manera.
Bear mira a Rebel con medio ceño fruncido antes de que sus
rasgos vuelvan a la normalidad, y corta su mirada en mi dirección.
–Es importante leer el lenguaje corporal de la persona con la que
estás haciendo una escena para que puedas retroceder cuando se
acerque demasiado. Rebel puede darte consejos cuando la
escena termine si los necesitas –.
–Lo estás haciendo bien. Es tu primera escena. No espero que
lo sepas todo el primer día –, me asegura y luego saca un condón
de su bolsillo y se lo lanza a Rebel. –Vístete y mantengamos las
cosas en movimiento–.
Una vez que Rebel está listo, Bear me dice que me arrodille en el
sofá, mirando hacia atrás. Rebel se coloca detrás de mí y las
cámaras comienzan a grabar de nuevo. La gruesa cabeza de la
polla de Rebel empuja mi agujero, y todo mi cuerpo palpita en
respuesta, desesperado por esa sensación perfecta y completa
que me hará correr.
CAPÍTULO 3: BEAR
Fóllame de lado.
Estoy en tantos problemas con este chico, aunque tal vez debería
dejar de llamarlo así después de la escena que acabo de ver
porque trae connotaciones que son diez tipos de errores. Dios, la
forma en que respondió a cada pequeña indicación y toque de
Rebel. Hot ni siquiera comienza a describirlo. Tan jodidamente
ansioso, tan necesitado.
La ducha todavía está abierta en el vestidor, así que dejo a Rebel
y Pixie en paz y salgo por la puerta. Llego a mi destino en nueve
minutos exactamente, ocho de los cuales pasé pensando en esa
escena que presencié, y cuando Jared, si ese es su nombre real,
abre la puerta, mi polla todavía está dura como un hierro.
Me quito los pantalones, luego lentamente rodeo mi polla con la
mano y la aprieto una vez. –¿Te gusta?– Yo digo.
Me mira con las pestañas. –¿Tu piensas que soy lindo?–
–Eres aún más bonito así, con la boca llena de polla–, le digo y
veo sus ojos iluminarse.
Podría hacer ambas cosas, con lo nervioso que estoy. Mi tiempo
de recuperación no es el que solía ser, oh, las alegrías de
envejecer, pero hoy tengo otra ronda en mí. –Chico bonito,
¿estás preparado para dos rondas?– Verifico con Jared.
Maldita sea.
PIXIE
Estoy volando alto cuando salgo de los estudios de Ballsy Boys, mi
interior burbujea con la emoción de lo que acabo de hacer. Me
jodieron, frente a la cámara, mientras una docena de personas
estaban alrededor mirando ... y fue increíble.
Una pequeña risa brota de mis labios y luego, porque parece que
no hay otro lugar al que puedan ir todos estos sentimientos locos,
siguen más hasta que casi me doblo de risa en el
estacionamiento.
Soy una estrella del porno.
Maldita sea, eso es caro. Todo en Los Ángeles parece costar tres
veces más que en Illinois. Hasta ahora, tampoco he tenido un
trabajo que me ayude. Gracias a Dios por las tarjetas de crédito.
Saco mi brillante Mastercard y se la entrego .
CAPÍTULO 4: PIXIE
Mis brazos están casi abrumados por bolsas llenas de ropa de una
de mis tiendas favoritas cuando mi teléfono comienza a sonar en
mi bolsillo.
–¿Es una invitación?– un hombre con una camisa holgada que
no le hace nada pregunta mientras pasa, lanzándome un guiño
obsceno.
–No vestido así–, le respondo bromeando, renunciando a
guardar todo y dejando algunas de mis maletas en el suelo para
poder atender la llamada antes de perderla. No puedo
imaginarme quién me llamaría, especialmente cuando veo que es
un número local. Bear es literalmente la única persona en Los
Ángeles que tiene mi número, pero lo tengo guardado en mi
teléfono, así que no puede ser él.
–¿Hola?–
–Listo–, declaro.
Me mira de arriba abajo con una mirada apreciativa en sus ojos.
–Espero que sepas, los otros chicos van a estar peleando por
quién puede hacer una escena contigo a continuación. No puedo
esperar a ver cómo resultó el nuestro. Tengo la sensación de que
será un nuevo favorito de los espectadores –.
–Lo hiciste muy bien, especialmente por primera vez. Estaba tan
nervioso durante mi primera escena que seguí perdiendo mi
erección. Estaba seguro de que Bear me iba a despedir después
de eso. En cambio, me llevó a un lado después y me dio algunos
consejos sobre cómo relajarme y divertirme más –.
BEAR
No soy uno de esos tipos corporativos cursis que afirman que su
empresa es como una familia, porque eso siempre me da
vergüenza. Mezclar la familia y la empresa rara vez es una buena
idea, porque las líneas se vuelven borrosas y dificulta la toma de
decisiones que beneficien a la empresa. O de la familia, lo que
más priorices.
Por eso animo a mis chicos a que salgan del trabajo. Además, es
divertido. Si Tank y Brewer no terminan matándose, claro está.
Tank se llama acertadamente, un tipo enorme de oso que gruñe
más de lo que habla pero folla como si no fuera asunto de nadie.
Y Brewer es la madre de todos los coqueteos, siempre
bromeando y rara vez sin algún hombre dulce en el brazo.
Lo juro, esos dos terminarán peleando o follando algún día, y tal
vez ambos al mismo tiempo. Si lo hacen, espero verlo en video
porque no puedo ser el único que pagaría un buen dinero por
verlo.
Veo como Pixie charla con los chicos, feliz de verlo encajar bien
con los demás. Arrugo la frente. Un poco demasiado bien con
Brewer, tal vez, cuyas manos son aún más sensibles que de
costumbre. No es un mal chico, Brewer, en absoluto, pero nunca
lo he visto hacer otra cosa que coquetear.
Rebel le envía una cálida sonrisa. –Lo hizo increíble. Una de las
mejores primeras escenas que he visto, ¿verdad Bear?
Tank deja escapar uno de sus gruñidos estándar que parecen ser
su respuesta habitual cada vez que Brewer abre la boca.
Me alegro de que Rebel haya dicho algo. Es un buen tipo, ese.
Tan estable como puede ser, súper confiable, y su química en la
cámara no tiene rival. Eso, además de que tiene una polla por la
que babear, y si eso suena raro, recuerda cuántas he visto. El
suyo es legendario por una razón.
–Y estoy diciendo que creo que la PrEP es increíble y todo eso,
pero si la carga viral de alguien es indetectable, no pueden
transmitirla–, dice Brewer, y tengo que controlarme para no dejar
que se me caiga la boca .
–Yo llamo BS–, dice Heart. –Hay una razón por la que tantas
personas murieron de SIDA. Esa mierda es muy contagiosa –.
CAPÍTULO 5: PIXIE
–Si sale, no es algo que discuta con nosotros–, dice. –Pero, por
todo lo que he aprendido sobre Bear en los años que he trabajado
para él, es que se enorgullece de ser profesional. Estoy seguro de
que no es un accidente que no sepamos de su vida personal,
porque mantiene su vida personal y su vida profesional separadas
–.
–No puedo creer que no les haya dicho muchachos. Este tipo
apareció en mi casa con un traje de banana el otro día –, explica
Rebel.
Dejo que mis ojos vaguen un poco por el club mientras el resto
de los chicos siguen hablando y Rebel y su amigo se dirigen a la
pista de baile. Casi todo el mundo aquí parece estar en la
veintena por lo que puedo ver, lo cual es un poco decepcionante.
Me pregunto dónde pasan el rato todos los Daddy's calientes en
esta ciudad. ¿Es algo que puedo buscar en Google?
No es que nunca me acueste con chicos que están más cerca de
mi edad y que no son Daddy's, pero cuando me siento así de solo,
sé que cualquier chico al azar no lo hará. Tomo el resto de mi
bebida y me dirijo a la barra para buscar otra. Recibo miradas
agradecidas de varios chicos que me reconocen de Ballsy Boys o
simplemente quieren conocerme mejor porque, seamos sinceros,
soy jodidamente lindo.
BEAR
Es lindo cómo los chicos creen que pueden pasarme por alto
algo. Quiero decir, vamos, ¿realmente pensaron que no sabría
que están planeando una fiesta sorpresa para mi cumpleaños? La
mayoría de ellos no pueden mentir ni una mierda, con la
excepción de Heart, y no lo digo como un insulto. Ha tenido que
aprender por las malas, así que no lo culpo ni un poco. Pero en
serio, Pixie tratando de fingir que no sabe lo que está pasando es
muy gracioso.
Me enteré por primera vez de lo que estaban haciendo hace una
o tres semanas, cuando Rebel me preguntó con demasiada
indiferencia qué había planeado para hoy. Parecía demasiada
coincidencia, considerando que mi cumpleaños es mañana, pero
fingí que no despertaba mis sospechas y seguí el juego. Aprecio
que intenten hacer algo por mí, así que fingir estar sorprendido
es lo menos que puedo hacer. Solo puedo esperar que mis
habilidades de actuación sean suficientes para lograrlo.
Deja escapar una risita melodiosa. –No eres viejo. Eres maduro.
Experimentado–.
Está coqueteando conmigo de nuevo, y me encuentro
respondiéndole. –¿Te gusta la experiencia de tus hombres,
pequeño diablillo?–
Se inclina hacia adelante, sus ojos nunca dejan los míos. –
Algunos hombres son como Honda. Son súper confiables, pero
aburridos como la mierda. Eso no es para mí. Otros son como un
Lamborghini o un McLaren, estos superdeportivos llamativos y
caros. A todos nos encanta verlos en Rodeo Drive, pero en algún
punto, inevitablemente chocarán. Yo tampoco necesito eso, algún
tipo que me derriba y luego choca –.
Mi garganta está demasiado seca para hablar, así que tengo que
tragar antes de responderle. –Espero que encuentres a tu
hombre BMW–, le digo, ignorando el destello de celos rojos que
me recorre incluso al pensar en Pixie con otro hombre.
Se ríe mientras niega con la cabeza. –Ábrelo en casa. Creo que te
encantará–.
–Uf–, dice Brewer. –Eso está mal. No es sorprendente, pero está
mal –.
–Si lo sé. Hubo mucha resistencia, por las mismas razones por
las que lo escuchamos hoy, porque los condones no son sexys —
digo, apenas capaz de mantener la furia fuera de mi voz.
Una vez más, estoy impresionado por los destellos del Brewer
adulto y serio con el que nos trata de vez en cuando. El contraste
con su imagen habitual de playboy no podría ser mayor.
–Y te respetamos por ello–, dice Rebel. –Es una de las razones
por las que Ballsy Boys tiene una reputación tan excelente–.
CAPÍTULO 6: PIXIE
He notado que la única persona con la que todavía tengo que
filmar una escena es Tank, y estoy empezando a preguntarme
sobre eso. Sé que es más rudo que los otros chicos cuando folla,
y sé que soy todo pequeño y de apariencia delicada, pero sé que
podría tomar cualquier cosa que Tank pudiera repartir y alejarme
con una sonrisa en mi rostro.
Veo a Bear flotando cerca del set, charlando con Joey, nuestro
camarógrafo jefe, pero aún no con Brewer, así que me acerco a mi
jefe para saludar. Mi piel pica con la conciencia cuando me
acerco a él y su atención se centra en mí. No estoy seguro de por
qué me tomó hasta que me paré directamente frente a Bear,
mirándolo, para darme cuenta de que no estoy en nada más que
un par de ropa interior ajustada con un tapón en el trasero.
Torpe.
–Solo un poco.–
El nombre sale de mis labios sin pensarlo. Y, aunque sé que no
debería, extiendo la mano para tocarlo. El olor de su desodorante
y colonia de su camisa me hace cosquillas en la nariz y mi polla
comienza a endurecerse. No puedo ocultar mi reacción en estos
calzoncillos ajustados. Afortunadamente, la camiseta cae hasta la
mitad del muslo, por lo que mi erección está completamente
cubierta.
BEAR
Esta extraña obsesión que tengo con Pixie debe terminar. Lleva
meses trabajando aquí y no puedo dejar de concentrarme en él.
¿Qué diablos me pasa? Cada vez que lo veo, es como si me
transportara mágicamente al pasado y me convirtiera en un chico
cachondo de dieciséis años con una mente unidireccional.
Demonios, creo que era mucho más maduro a los dieciséis de lo
que soy capaz de hacer cuando estoy con Pixie. Es como si me
quitara la capacidad de pensamiento racional.
Eso tiene sentido. Es libre ante la cámara, pero tan pronto como
termina el rodaje, parece un poco avergonzado. Eso es algo que
lleva un tiempo, lo sé por experiencia. Es un trabajo extraño.
Me concentro en Rebel, cuyo rostro está tenso. Uh oh. No me
gusta el aspecto de esto en absoluto. Por favor, no me digas que
se marchará. Lo he visto demasiadas veces para contarlo, uno de
mis chicos tiene un novio que quiere que dejen el porno. Tiene
sentido, y nunca les digo que se queden, pero apesta. –De todos
modos, dijiste que querías hablar conmigo. ¿Qué pasa, chico? –
Está enamorado. Es obvio para mí, la forma en que sus ojos se
suavizan cuando habla de su hombre, la forma en que sonríe un
poco incluso cuando solo piensa en él. Él lo ama. Pero cuando le
pregunto, me dice que es complicado. Sí, no jodas. El amor
siempre es complicado.
Le doy a Rebel una respuesta sobre los horrores de ver morir a
alguien, incapaz de pensar en algo mejor, pero incluso después de
que se fue de mi oficina, sigo pensando en ello. Si hubiera sabido
que Freddie iba a morir cuando lo conocí, ¿aún lo habría amado?
¿Habría tomado la misma decisión para estar con él?
–¿Pasó algo?–
–Solo… ¿podrías decirme, mamá? Soy curioso.–
—Una última cosa, Maxwell. No olvides que el gozo de ser amado
supera la tristeza y el dolor por perder ese amor. Por eso lo haría
todo de nuevo, porque el amor de tu padre por mí era el mejor
sentimiento del mundo, y me rompería el corazón mil veces por
sentirme así de nuevo –.
Sé que necesito dejar de coquetear con él, pero es muy difícil.
–Gracias. Me gusta tener una segunda persona presente para las
revisiones, por lo que es un poco más profesional. Y Rebel y yo
hemos tenido recientemente una discusión sobre él alejándose
de la filmación para esencialmente aprender mi lado de las cosas
y ayudar en un aspecto más creativo y de gestión, por lo que
pensé que tu revisión sería un buen lugar para que él comience a
aprender las cuerdas. –
–Por supuesto.–
–Genial, así que comencemos con tu revisión–. Rebel hace clic
con su bolígrafo y lo coloca sobre una hoja de papel.
–Quiero hacer una escena de DP–, le digo, sobre todo para ver su
reacción. Los ojos de Bear se agrandan y luego frunce el ceño.
–Pixie, yo ...–
BEAR
Apenas he colgado mi chaqueta de cuero en el armario junto a la
entrada cuando Susan, la coordinadora de Almost Home, el
hospicio donde soy voluntario al menos dos veces por semana,
me llama. Y si alguna vez ha oído hablar de un nombre peor para
un hospicio que Almost Home, me encantaría saberlo, porque
creo que es horrible. Aparentemente, una mujer que donó un
montón de dinero al lugar hace años estipuló que debería
llamarse así durante al menos diez años, para que no puedan
cambiarlo, pero está mal.
Está claro que quiere decirme más, así que entro en su oficina y
cierro la puerta detrás de mí. –¿Algo especial que necesite
saber?–
–Es VIH positivo–, dice Susan en voz baja, y todo tiene sentido.
Me hace un gesto. –Tienes un Silver Daddy escrito sobre ti. Los
twinks deben volverse locos por ti –.
Un hombre gay de unos cincuenta años. No hace falta ser un
genio para descubrir de qué me conoce. –No tomes esto como
una ofensa, pero ¿alguna vez has visto porno gay? ¿A qué
llamaríamos ahora vintage?
Asiento con la cabeza. –Ex estrella del porno, pero sí, ese soy
yo–.
CAPÍTULO 8: PIXIE
Se siente bien estirar las piernas cuando nos bajamos del avión, y
solo puedo imaginar cómo se sentirán Bear y Tank después de
tener sus enormes cuerpos apiñados en asientos tan pequeños
durante tanto tiempo. Todos están emocionados, hablando en
voz alta y bromeando mientras nos dirigimos al reclamo de
equipaje. Veo mi maleta Gucci bajando por la cinta
transportadora y la saco, tropezando un poco bajo su peso. Sé
que solo estaremos aquí por dos días, pero necesitaba
asegurarme de tener muchos atuendos para elegir para la
ceremonia de premiación, sin mencionar mis productos para el
cuidado del cabello ...
BEAR
–Bien–, dice Pixie y sale, mirando por encima del hombro dos
veces.
–Si. Tengo ... cosas que necesito hacer. Por los premios.
Necesito hablar con algunas personas —digo, casi encogiéndome
de lo mucho que apesto mintiendo. Estoy bastante seguro de que
puede ver a través de mis patéticos intentos, pero simplemente
me mira con un poco de tristeza.
–Ah, vale.–
–No te aventures solo–, le digo, lanzándole una mirada que lo
digo en serio. –Los demás querían hacer turismo, así que ve con
ellos–.
–Sí, Daddy.–
–Me tengo que ir–, digo, y luego salgo por la puerta antes de que
pueda decir otra palabra, lo cual es bueno porque lo juro, si me
hubiera pedido que me quedara, no habría podido decir que no. .
Camino por el hotel aturdido, sin ver nada realmente, hasta que
mi teléfono comienza a sonar con una llamada Facetime de
Travis. Me perdí mi visita con él hoy debido a este viaje, así que le
dije que me llamara cuando estuviera despierto.
¡Ups!
–Yo…–
–¿Sabe él?–
Hace reír a Travis. –No sabía que podías ser muy gay–.
Ups, de nuevo.
–Quieres ser el papi de ese chico. Por lo que me dijiste sobre él,
lo necesita, necesita un papi para mantenerlo a salvo –.
CAPÍTULO 9: PIXIE
–Es tu jefe–, señala Rebel. –Y eres tan nuevo en Ballsy. Sé que
muchos estudios de pornografía tienen cierta reputación, y no
me gustaría que te sintieras nervioso o raro por estar solo en una
habitación con el hombre que firma tus cheques de pago –,
explica, eligiendo cuidadosamente cada palabra.
–No debería–.
BEAR
La sonrisa que abre su rostro es tan pura y feliz que destruye mi
última pizca de resolución. Míralo, en exhibición completa en esa
cama, todas sus elegantes líneas, los suaves planos de su pecho,
esos bonitos pezones rosados… esa hermosa polla todavía
escondida detrás de ese deportivo pecador. Quiero hacerlo volar.
Su piel es tan suave, tan perfecta, como el terciopelo bajo las
yemas de mis dedos, y dejo que mis manos vaguen libremente
mientras exploro su boca. Sabe dulce, como helado de vainilla, y
casi sonrío. Es exactamente como imaginé que sabría. No puede
quedarse quieto mientras mis dedos siguen las suaves caídas de
su cuerpo, moviéndose contra mis manos, buscando más.
Observo como se quita la ropa interior, sus ojos nunca dejan los
míos, como si yo fuera todo lo que ve. Dios, cómo quiero que sea
el único que ve. Es un pensamiento que necesito rechazar,
porque no tiene sentido y es imposible. En cambio, me
concentro en el sonido de las bofetadas que hace su pene cuando
se libera, balanceándose contra su carne. Me coloco de nuevo en
la cama y mi mano se enrosca a su alrededor al instante. Pixie
deja escapar un suspiro, empujando mi toque.
–No soy muy grande–, dice, mirándome por entre sus pestañas.
–Te sientes tan bien, papi...– dice Pixie, su voz apenas más que
un susurro ronco.
–Excelente. Irás con Campy y Brewer, así que haré que Brewer
te recoja por la mañana –. Su tono es despectivo y la decepción
se apodera de mí. ¿Realmente solo me llamó aquí para
preguntarme sobre el modelaje de ropa interior?
–¿Eso fue todo, Daddy Bear?– Pregunto con la voz más sexy y
sin aliento que puedo manejar. No podría dejar más claras mis
intenciones si me desabrochara los pantalones y, honestamente,
esa opción tampoco está descartada.
El cheque de pago adicional que recibo por hacer este trabajo de
modelaje ciertamente tampoco afectará mi situación actual, así
que en general, no necesito arruinar esto.
–¿Hola?–
Estoy más que feliz de hacer lo que me pide, cerrando los ojos y
relajándome mientras él se pone a trabajar aplicándome todo tipo
de cremas frías alrededor de mis ojos, tarareando felizmente para
sí mismo mientras trabaja.
En poco tiempo, declara que está hecho, y abro los ojos para ver
que no se estaba vendiendo a precios bajos. Realmente es el
mejor. No se puede decir que mis ojos estaban rojos e hinchados
solo unos minutos antes. Me veo fantástico.
Le doy una palmada en el pecho y ambos nos reímos. –Así no.
Me refiero a fácil como sin complicaciones. Tú y yo, estaríamos
tranquilos juntos, ¿sabes? Nos divertiríamos, compartiríamos un
buen sexo, disfrutaríamos de la vida –, explico con una sensación
de nostalgia en mi pecho. Amar a Brewer como amigo es muy
fácil. Sería tan bueno si pudiera amarlo como más y que él me
amara de la misma manera. Sería como un par de pantalones de
chándal grandes y cómodos, sin duda la forma más romántica de
imaginar una relación. Daddy Luke definitivamente era un
pantalón de chándal. Lo amaba, pero no un amor real, verdadero
y profundo.
Hay luces grandes por todas partes y una pantalla blanca donde
se supone que debo estar para modelar.
–Estoy muy feliz de estar aquí modelando para ti hoy. Soy nuevo
en esto, así que tendrás que ser amable conmigo –, bromeo, mis
ojos se dirigen a la puerta por la que Kendra ya ha desaparecido.
Saber que Brewer y Campy están sentados del otro lado me hace
sentir un poco mejor. Campy estaba aquí solo con este tipo, y
estaba bien, así que estoy seguro de que no hay nada de qué
preocuparse.
–Fuiste hecho para usar esta ropa interior–, dice el fotógrafo, sus
ojos recorren mi cuerpo como un toque físico, lo que me hace
querer retroceder. –Sin embargo, no están acomodados del todo
bien. Déjame ayudarte a ajustarlos para que se vean mejor en las
fotografías –.
–Está bien, puedo—– La protesta no pasa del todo por mis labios
antes de que él me apoye, sus manos en mis caderas,
apoyándome contra la pared y encerrándome . Mis ojos se
agrandan cuando sus manos se mueven hacia mi pene,
ahuecando mi ropa interior.
Campy suspira. –No haga nada estúpido, jefe. Eso es todo lo que
estoy diciendo –.
–El médico quería hablar con él, y se suponía que su amigo Ryan
estaría aquí, pero creo que no puede venir por algo en el trabajo–.
–¿Qué quieres decir con lo que crees? ¿No hablaste con él?
–Oh, Bear–, dice Travis, su voz llena de dolor. –Esa es una carga
pesada de llevar para un chico de dieciocho años–.
–Soy más de veinte años mayor que él. Ambos sabemos que,
estadísticamente, moriré antes que él. No quiero que tenga que
pasar por lo que yo tuve que pasar. No es lo suficientemente
fuerte para eso –.
Pixie: Oye
Pixie: Meh
–Hola–, respondo.
–¿Qué esta mal, bebé?– Luke pregunta sin perder el ritmo. Su
preocupación me calienta, pero no como solía hacerlo. Me gusta
saber que hay alguien que se preocupa por mí y se preocupa por
mi bienestar, pero eso ya no me hace querer abrazarlo o besarlo.
–Ahí está este hombre ...– confieso con un suspiro. Estoy seguro
de que no hay nada que Luke pueda decir para mejorar esto, pero
tal vez sacarlo de mi pecho me hará sentir menos solo.
–Odio decirte esto, cariño, pero tal vez solo hubiera querido una
cosa de ti–, dice con cuidado.
Mi corazón late un poco más rápido esta vez. Quizás Luke solo
me está diciendo lo que quiero escuchar, pero quiero que tenga
razón.
–Es el chico más dulce que jamás hayas visto, creo que podría ser
alguien especial para mí–.
–Igualmente.–
BEAR
Nunca le dije a Pixie que venía, así que ni siquiera estoy seguro
de que esté en casa. Pero cuando toco el timbre, mi cerebro
todavía lucha consigo mismo por lo que voy a decir, Pixie se
apresura a abrir la puerta. Claramente no esperaba visitas, a
juzgar por su atuendo, un lindo pijama que me hace querer
reconsiderar toda la idea de solo hablar. Venir aquí fue una mala
idea, pero ahora no puedo dar marcha atrás.
No es solo que me mienta. Es que es tan malo en eso. –No estás
bien–, le digo en voz baja.
–¿Que pasó?– Pixie susurra, sus ojos nunca dejan los míos.
–¿Pero qué tiene esto que ver conmigo?– Pixie pregunta con
cuidado. Se inclina hacia atrás para mirarme a los ojos. Entonces
su expresión cambia a algo alarmante. –¿Me estás diciendo que
eres VIH positivo?–
Miro la nota de nuevo. Dice que tengo treinta días para desalojar
el local.
Me deslizo por la puerta y pongo mi cara entre mis manos. Daría
cualquier cosa por un Daddy ahora mismo para que todo fuera
mejor. Un hombre grande y fuerte para levantarme en sus brazos
y decirme que todo va a estar bien. Quizás eso me vuelva
patético o un terrible adulto. Bien, soy ambas cosas.
Me decido por Vibe. Hice una aparición allí no hace mucho con
Tank acompañándome, y fue una noche divertida. E incluso
había hombres que eran más de mi tipo, en lugar de la multitud
de veintitantos en Bottoms Up.
–Vibe.–
–Daddy–, me quejo.
Estoy preocupado por Pixie. No puedo señalarlo, pero algo anda
mal. Es distante, no su yo coqueto y burbujeante. Casi de mal
humor, y eso no es Pixie.
Toda la pandilla se ha reunido en el estudio un sábado para una
sesión de fotos. Nos gusta actualizar las imágenes en el sitio de
vez en cuando, y habíamos planeado esta sesión durante meses,
asegurándonos de que todos pudieran estar aquí. Y todos
incluyen no solo a los chicos que considero el corazón de Ballsy
Boys, sino a todos nuestros clientes habituales. Algunos chicos
hacen una sesión al mes, otros una sesión cada trimestre, pero
todos forman parte de nuestra familia extendida.
–No lo sé.–
Meto las manos en los bolsillos de mis jeans, apenas puedo mirar
a Rebel a los ojos. –¿No puedes hablar con él? Ustedes dos se
llevan bien, ¿verdad?
–Lo que quieras, jefe–, dice. Sí, como dije, el sarcasmo es fuerte.
–Dice que está bien–, dice Rebel en voz baja cerca de mi oído.
–Lo sé, pero cuando le pregunté qué le pasaba, dijo que no había
estado durmiendo bien–.
–No creo que lo esté. Está preocupado por algo, pero no me dice
qué. Quizás deberías intentar hablar con él. Tienes una manera
de hacernos decir las cosas que creemos que queremos guardar
para nosotros –.
Rebel no dice nada, pero el suspiro que deja salir lo dice todo.
PIXIE
–¿Que pasó?–
–No pueden echarte por pagar el alquiler tarde una vez–, dice
Troy, regresando con un vaso de agua y entregándomelo.
–Fue más de una vez. El inquilino dijo que si volvía a pasar, me
iba a desalojar, y luego volvió a pasar –.
–Está bien, esto no es tan malo–, me asegura Rebel. –¿Cuánto
tiempo tienes antes de tener que salir? Creo que deberían ser
treinta días, ¿verdad?
Se las arregla para que todos los demás acuerden reunirse en mi
casa y no mencionárselo a Bear.
–Oye, gracias por venir–, les digo mientras salimos del auto de
Rebel, cargando todas las bolsas vacías que tenemos.
–No eres un idiota, Pixie. Esta era la primera vez que vivís por su
cuenta, ¿verdad?–. Pregunta Campy.
–Si.–
–Sí, tengo muchos juguetes sexuales. No creo que eso sea
exactamente impactante –.
Pongo los ojos en blanco. –Están todos limpios. Los lavo a fondo
después de cada uso. No soy un animal –.
–Gracias–, murmuro.
Me dejo caer en el otro extremo del sofá y ellos ocupan el resto.
Rebel elige una película mientras Troy enrolla un porro, lo
enciende y se lo mete entre los labios. En realidad, nunca he sido
un gran fumador de marihuana, pero en este momento, parece
una excelente manera de escapar de mi miserable vida.
–Lo que sea que tenga que decir para ejercer suficiente presión
sobre ti para que cedas, considera eso dicho–, digo. –De esa
manera, puedes decirle que te hice decirme–.
Se mete las manos en los bolsillos de los pantalones cortos. –Lo
desalojaron de su apartamento–.
–¿Qué?–
Rebel duda, pero luego dice: –Creo que necesita más ayuda que
esa. También encontramos otras facturas impagas que apuntan a
que está acumulando deudas. Se está ahogando, Bear. No solo
necesita un salvavidas; necesita a alguien que le enseñe a nadar
–.
–¿Y este extraño baile entre ustedes dos? No ayuda. Le gustas, y
es posible que tengas razones por las que te mantienes a
distancia, y lo respeto, pero él te necesita. Necesita que alguien
lo ayude. Dios, Bear, está a una mala decisión del desastre, y
necesito que me prometas que intervendrás y arreglarás esto o
retrocederás y dejarás que alguien más intervenga. No puedes
negarte a ayudarlo y luego salir enojado cuando otros lo hacen –.
Mis mejillas se ponen calientes ante sus palabras, porque tiene
tanta razón que ni siquiera es gracioso. Y luego me deja con su
disparo de despedida.
PIXIE
El texto que Bear me envió fue ominoso por decir lo menos. Todo
lo que dijo fue baja a Ballsy, tenemos que hablar. ¿Me está
despidiendo? No puede despedirme. No he hecho nada malo y
los fanáticos me aman, me tranquilizo mientras abro la puerta
exterior y entro.
–Nop, sólo aquí para hablar con el gran jefe–, digo tan
casualmente como puedo. No me van a despedir en absoluto. Va
a estar bien.
–Bromeas–, me quejo.
Bear me nivela con una mirada evaluativa. Puedo ver las ruedas
girar detrás de sus ojos. Parece que está en guerra consigo
mismo durante varios tensos segundos mientras el músculo de su
mandíbula se contrae y su ceño se profundiza.
–Yo no-–
Al salir del estudio, Rebel me detiene con una mirada de disculpa.
Rebel frunce un poco el ceño. –¿Te parece bien? Sé que hay una
cierta dinámica entre ustedes dos, y él es tu jefe, pero no tienes
que mudarse con él si no quieres –.
Me mira con ojos llenos de lágrimas. –¿Cómo voy a salir de esta
deuda? No tengo dinero, así que ¿de qué voy a vivir? –
–Sabía que quería intentar hacer algo por mí mismo. Me hizo un
presupuesto completo y todo, que claramente ignoré –. Sus
labios inferiores tiemblan un poco. –No he sido un buen chico
últimamente y él estaba molesto conmigo cuando le conté lo que
había sucedido–.
Se ve tan travieso como un pequeño diablillo puede ser, sus ojos
brillan. –Es la mejor sensación del mundo. A menos que Daddy
Luke estuviera realmente molesto. No había nada peor que la
sensación de decepcionarlo . Dios, extraño tener un Daddy… –
–¿Lo amas?–
–El amor debería ser como una nueva bolsa de Gucci que no
puedes esperar para usar y lucirse ante todo el mundo. Incluso
mirarlo te hace sentir efervescente y burbujeante por dentro. O
un par de jeans ajustados que son de una talla demasiado
pequeña pero que hacen que tu culo se destaque de una manera
garantizada para que te acuestes con la mejor polla de la
habitación. Esa emoción, esa prisa, así es como debería sentirse
... como si estuviera asustado y emocionado y se sintiera
increíble, todo en uno –.
PIXIE
Cuando Bear estableció las nuevas reglas sobre mi asignación,
hice todo lo que pude hacer para no subirme a su regazo y
besarlo sin sentido. Pero sabía que eso no era lo que quería.
Había dejado muy claro dónde estaban las cosas entre nosotros,
y sabía que si me iba a quedar en su casa, tenía que respetar eso.
Eso fue hace dos semanas, y déjame decirte, es mucho más fácil
decirlo que hacerlo.
Parece que bailamos entre nosotros, evitándonos mientras
pretendemos que no nos estamos evitando. Cenamos juntos la
mayoría de las noches, excepto cuando Bear va a otro lugar
después del trabajo. Adónde va, no tengo ni idea, pero siempre
llega triste a casa.
Me doy la vuelta para ver a Bear haciendo una mueca. –Soy
mayor, pero no me jubilo–.
Suelto una carcajada y niego con la cabeza. –No quise decir eso.
Solo quise decir que no sería tan malo tomarse más tiempo para
ti y dejar que Rebel haga el trabajo pesado –.
Una cosa que aprendí de Luke fue que los niños también pueden
cuidar a sus Daddy's a veces. No es que Bear sea mi Daddy, lo ha
dejado muy claro, pero aún así es agradable cuidar de él después
de todo lo que ha hecho por mí.
Después de que termino de frotarle los pies y parece que ha
terminado de comer, salgo de debajo de la mesa y recojo sus
platos. No dice nada mientras enjuago cada uno y los coloco
cuidadosamente en el lavaplatos, y cuando me giro para mirarlo,
la calidez en sus ojos me invade.
Bear entra al baño con nada más que una toalla, y los recuerdos
de Nueva York se vuelven difíciles de resistir. Mi polla se pone
dura y noto que la parte delantera de la toalla también se tensa.
Pero cuando arrastro mi mirada hacia arriba para encontrarme
con la de Bear, hay vacilación y resistencia allí, no calor como
quiero ver.
Le doy una buena mirada, desde su camiseta ajustada hasta los
jeans que abrazan sus muslos del tamaño de un árbol y las botas
resistentes. Oh, sí, tiene la vibra de Daddy. –Te ves muy
caliente–, le digo. –Si yo fuera, ya sabes, veinte años más joven,
un pasivo y un jovencito lindo, me inclinaría por ti en un
santiamén. Lamentablemente, no soy ninguno de esos, así que no
tienes suerte aquí. –
–No pensé que por eso estabas aquí. Entonces, ¿por qué estás
aquí? Lo último que supe es que estabas viviendo en Nueva York–.
–¿Cómo ves que funcione, estar afiliado a los Ballsy Boys?– Hago
zoom en el aspecto que me afectará más directamente.
–Mira, Bear, estoy aquí por dos razones. La primera es que nunca
abriría un estudio de pornografía sin tu aprobación. Seríamos
competidores, incluso si mi nicho objetivo es diferente al tuyo. Te
respeto a ti y a lo que has construido, demasiado para ir a tus
espaldas. Pero lo más importante. Me encantaría utilizar su
experiencia y conocimiento de la industria. Quiero hacer esto
bien, y la forma en que has construido tu negocio, no tengo nada
más que respeto por eso. Tienes una reputación fantástica y
tratas bien a tus chicos, y entregas un producto de alta calidad.
Eso es lo que quiero, por lo que tendría sentido para mí trabajar
junto a ti. Los detalles, eso es algo de lo que podemos hablar, pero
estoy imaginando algo en el que obtendría parte de las ganancias
a cambio de permitirme estar afiliado a los Ballsy Boys –.
Me froto las manos en esa última frase, mi rostro se abre en una
amplia sonrisa. –Me gusta cómo suena esto. He pensado en
expandir el estudio, pero simplemente me falta la mano de obra.
Y contratar gente para ejecutar algo como esto, no es fácil.
Tendría que ser alguien en quien confíe explícitamente. Alguien
como tú. –
Me río. –¿Es eso lo que hacen los hombres? Malditos cabrones
como tú, ¿se contentan con estrechar la mano? Si eso es lo que
haces, estás en el negocio equivocado, hombre–.
PIXIE
No puedo evitar preguntarme quién es el hombre que se presentó
hoy en los estudios Ballsy para hablar con Bear. Escuché
descaradamente en la puerta, pero era difícil entender qué
estaban diciendo exactamente. Capté algunas palabras como
pornografía y Daddy, así que ¿tal vez el hombre tiene su propio
estudio de pornografía? ¿O Bear lo contratará para trabajar aquí?
Una risa pasa por mis labios. –Por supuesto que lo eres.– Le
estrecho la mano, su palma cálida mientras envuelve la mía. –
Soy Pixie–.
–No mucho. Me pidió una cita para el viernes y eso fue todo –.
–Es demasiado mayor para ti–, señala, y solté una risa áspera,
levantándome de la mesa y parándome directamente frente a
Bear. Estoy lo suficientemente cerca que tengo que inclinar la
cabeza para mirarlo a los ojos, su postura se relaja un poco, pero
toda la tensión sigue ahí. Puedo sentir el calor irradiando de él, y
es todo lo que puedo hacer para no frotarme sobre él como un
gato.
–Me gustan los hombres mayores–, digo con firmeza. Sus brazos
caen de su posición cruzada, y me presiono contra él solo un
poco mientras extiendo mis dedos por su cabello. –Me gustan las
canas–. Arrastro mi mano hasta su bíceps. –Me encantan los
brazos fuertes de Daddy para abrazarme fuerte–, continúo ,
moviendo mi mano hacia la parte delantera de sus jeans. –No
puedo tener suficiente de una gran polla de Daddy separándome
–.
Mi corazón late con fuerza mientras escucho los pasos de Bear,
imaginándome que viene detrás de mí para castigarme por la
forma en que actué en la cocina, burlándome y tocándolo y luego
alejándome y golpeando la puerta. Daría cualquier cosa por que
Bear entrara aquí y me azotara el culo rojo por la forma en que
me comporté, para enjaular mi polla y follarme hasta que esté
lleno y goteando con su semen. El deseo es tanto que casi me
ahoga mientras apoyo la espalda contra la puerta.
Pixie está pasando el rato con Rebel y Troy, así que le envío un
mensaje de texto rápido de que llegaré tarde a casa, luego le
envío uno a Rebel con las instrucciones para llevarlo a casa
personalmente. Sabiendo que Pixie está bien, salto a mi coche y
conduzco hasta el hospicio. Me lleva más tiempo de lo habitual
debido al tráfico de la noche, y durante todo ese tiempo me
preocupa llegar demasiado tarde.
Llegó al punto en que el director del hospicio tuvo que tener una
conversación con Travis sobre arreglos alternativos, porque él ya
había estado allí durante meses. Pero aparentemente, Travis
tiene dinero, y una generosa donación de él aseguró que pudiera
quedarse en su hermosa habitación en el jardín. Me dijo que
esperaba morir en unas semanas, así que ya había vendido su
casa y no tenía adónde regresar. Pero ahora parece que, después
de todo, ha llegado su momento, lo que no me sorprende después
de nuestras últimas visitas.
Ryan niega con la cabeza. –No. Mis padres todavía están vivos.
Perdí a mis abuelos, pero yo no estaba allí cuando fallecieron–.
–En ese caso, debe prepararse. Aún podría llevar horas, tal vez
incluso días. He visto a pacientes recuperarse inesperadamente y
aguantar durante días más. Hay muchas cosas que los médicos
aún no comprenden sobre el proceso de morir y por qué algunas
personas parecen durar cuando no hay razón para ello y otras
mueren mucho más rápido de lo esperado. La muerte es uno de
los últimos grandes misterios que quedan en la vida –.
Es como una hora después que realmente necesito usar el baño,
y cuando camino de regreso, me encuentro con Ryan en el pasillo
fuera de la habitación de Travis, terminando una llamada. –Solo
actualizo a mi esposa–, dice, y una ira irracional me llena de que
no pudiera amar a ese hombre maravilloso. No tiene sentido,
porque no se puede forzar el amor, pero he visto cuánto lo ama
Travis, y no puedo evitar sentirme un poco molesto porque un
amor tan grande nunca fue devuelto.
Mi primer instinto es romper con Ryan con uno nuevo, pero de
alguna manera, no puedo. Parte de la razón es el conocimiento
de que el hombre que muere en la habitación de al lado lo ama
más que a nada en el mundo. Respeto demasiado a Travis como
para deshonrar su amor atacando a Ryan. Pero es más que eso.
No quiero decir nada con eso más que una referencia a su
amistad, pero los ojos de Ryan se agudizan cuando se encuentran
con los míos. –Sé que está enamorado de mí–, dice, su voz se
reduce a un susurro.
–Porque para mí, hubiera sido curiosidad ver cómo hubiera sido.
Atracción, claro, pero no al mismo nivel que su amor por mí. Y
nunca podría haberme perdonado si hubiera roto su corazón .
Así que al final, decidí que lo nuestro sería una amistad, y nada
más. No ha habido un solo momento en el que lamenté esa
decisión, hasta esta noche. Sabiendo que estas son las últimas
horas que pasaré con él, lamento no saber lo que es estar con él
–.
Su voz se quiebra y una lágrima escapa de sus ojos nublados. Lo
alcanzo y agarro su hombro con mis manos. –Sé que no nos
conocemos, así que esto puede significar una mierda para ti, pero
hiciste lo correcto. Al final del día, Ryan, el amor es amor, ya sea
amistad o más. Y por lo que hiciste, protegiste ese amor entre los
dos. Puede que no sepas lo que hubiera sido estar con Travis,
pero estás permitiendo que muera sabiendo que su mejor amigo
lo ama. Créame cuando digo eso vale muchísimo más que el sexo
–.
Le doy unos minutos para calmarse después de eso, y luego los
dos regresamos a la habitación de Travis. Todavía está dormido,
aunque se despierta minutos después de que ambos volvamos a
tomar sus manos.
Su voz se vuelve cada vez más débil, apagándose al final. Aprieto
su mano, sabiendo que esto es todo.
Solo tengo dos horas hasta que Daddy esté aquí para recogerme
para nuestra cita, así que dejo de pensar en Bear y me dirijo al
baño para tomar una ducha. Mi estómago se agita con los
nervios mientras me lavo, gastando más tiempo en todas mis
partes divertidas, porque nunca se sabe.
–Estoy seguro.–
Daddy sonríe, mostrando unos sexys hoyuelos escondidos en la
piel gris de sus mejillas. Maldita sea, es tan caliente. Me ofrece
su brazo y lo tomo, cierro la puerta detrás de mí y luego dejo que
me lleve por el pasillo hasta su brillante y plateado Jaguar en el
camino de entrada.
–¿Te gusta?–
–Daddy, yo ...–
Y tal vez eso también sea cierto para Pixie. Aunque nunca lo tuve
realmente, tuve su deseo, su devoción. Pero ahora está con
Hunter, y no puedo imaginarme a los dos sin hacer clic. Hunter
es un tipo fantástico y sería el Daddy perfecto para Pixie. Joder
sabe que Pixie anhela uno.
Por mucho que duela pensar en los dos juntos, ¿cómo no podría
estar feliz por Pixie? Lo he rechazado tantas veces que ni
siquiera lo culpo por seguir adelante. No es culpa suya que me
haya tomado tanto tiempo darme cuenta de la verdad. Y la triste
realidad es que sin que Travis me lo haya señalado, podría
haberme tomado aún más tiempo.
Dios, tenía tanta razón. Todos estos años, y todo este tiempo
con Pixie, me dije a mí mismo y a él que estaba manteniendo mi
distancia para protegerlo. Había cierta nobleza en ello, en ser la
mejor persona que se aseguraba de que su corazón no se
rompiera.
Sabía de los efectos obvios, con los que luché durante años. Las
pesadillas después de su muerte, después de que vi Dios sabe
cuántos hombres mueren de manera similar. El miedo a
enfermarme también me llevó a permanecer célibe durante dos
años después de su muerte, hasta que dejé que la ciencia me
convenciera de que los condones protegían. Nunca, nunca fui a
pelo después de eso. Siempre condón.
Era una ironía que me metiera en el porno, por supuesto,
considerando mi miedo al principio de contraer algo. Pero
siempre había sido sexualmente activo, incluso cuando era
adolescente. Demonios, siempre me ha gustado el sexo. Todavía
lo hago. Al final, prevaleció el pensamiento racional y juré estar a
salvo. Nunca me desvié de ese principio, ni siquiera cuando el
barebacking me podría haber hecho ganar el doble. Incluso
ahora, con Ballsy Boys, la seguridad es mi principal preocupación
y estoy orgulloso de la reputación que tenemos.
Cuelgo la cabeza. –Lo sé.– Sale apenas más que un susurro. –Te
hice mal, bebé.–
Pixie traga, sus ojos fijos en los míos. –¿Qué estás diciendo?–
pregunta, y esta vez, no se puede negar la esperanza en su voz.
Me atraviesa que después de todo lo que le he hecho, todavía me
quiere.
No puedo evitar sonreír. Tiene tanta razón en pedirme más que
un término vago. –Si me aceptas, quiero ser tu Daddy. No sólo
por sexo o encuentros, sino para una relación. Tú y yo, bebé,
juntos–.
Un grito ahogado vuela de los labios de Pixie, y luego sus ojos se
llenan, apuñalando mi corazón una vez más. Prometo que si me
perdona por ser tan idiota, pasaré el resto de mi vida
acariciándolo.
Mi polla se pone dura, como suele ocurrir cuando él está cerca,
pero esta vez me doy cuenta de que no tengo que esconderlo. No
tengo que contenerme más ni contenerme. Él es mío.
–Sí, papi.–
–Sí, papi.–
Sus ojos brillan con aún más calor, su mano se frota arriba y
abajo de la parte delantera de sus pantalones.
–Sí–, me quejo.
Pixie deja escapar un suave gemido y luego abre los ojos. Tan
pronto como me ve, el pequeño puchero en sus labios se curva en
una dulce sonrisa. –Buenos días, Daddy–, dice, y mi corazón se
tambalea de nuevo.
Hay algo en la forma en que dice esa palabra, con tanta alegría y
orgullo. No es forzado o actuado, sino esta reverencia natural
que me hace sentir tan fuerte y protector. –Buenos días, bebé–,
le digo.
Y oh, los sonidos que hace. No es ruidoso, pero es más como
este flujo constante de sonidos suaves, pequeñas inhalaciones y
gemidos, este lloriqueo que hace cuando realmente le gusta algo,
la forma en que chasquea la lengua cuando se impacienta por
más.
–No, no, no, por favor, Daddy Bear. No puedes parar ahora–,
suplica. Está moviendo su trasero, claramente tratando de que
me mueva de nuevo.
Me río. –No es difícil entender por qué. Eres muy difícil de
resistir cuando suplicas–.
Parpadea dos veces y luego una lenta sonrisa se extiende por su
rostro. –Me gusta suplicar–, dice, con los ojos brillantes.
Es más que hermoso, casi un sueño hecho realidad, una visión si
no fuera por las sensaciones muy reales que evoca dentro de mí.
Mi pulso se acelera, mi piel estalla en una fina capa de sudor, lo
cual es gracioso, porque apenas estoy haciendo nada. Es todo él,
usándome para su propio placer, como si mi disfrute fuera una
ocurrencia tardía. Y de alguna manera, eso es lo más erótico que
he visto en mi vida.
PIXIE
–Quiero ser tu chico todo el tiempo, Daddy. Me gusta saber que
me cuidarás, me recordarás que sea responsable, me cuides y
siempre sabrás lo que es mejor para mí –.
–Sí papi.–
–Mucho, Daddy–.
–Gracias Daddy.–
–Adelante.–
–Gracias Daddy.–
Me limpio y luego tomo mi ropa interior del piso para volver a
ponérmela mientras Heart desaparece en el vestuario y Rebel
habla con Joey y mira las imágenes que acabamos de filmar. Me
acerco a la oficina de Bear en lugar de al vestuario, sin perder de
vista a nadie que me preste atención. Cuando estoy satisfecho de
que a nadie le importa un carajo lo que estoy haciendo ahora que
la escena ha terminado, me apresuro en silencio por el pasillo
hacia la oficina.
Toco la puerta y Bear me llama para que entre. Al entrar, miro su
gran escritorio como lo he hecho cada vez que entro en su
oficina, e imagino lo bien que podríamos divertirnos aquí. Al
menos uno de nosotros. La diferencia es que esta vez tiene el
potencial de ser más que una fantasía.
–Estaba pensando más en algo que podría hacer por ti–. Muevo
las cejas de manera sugerente y Bear deja escapar una risa
profunda y retumbante que me calienta por dentro.
–¿Está bien?–
Aunque solo vine hace unos minutos con Heart, mi propia polla
ya se está poniendo dura de nuevo cuando Daddy pasa los dedos
de su mano libre por mi cabello, sosteniéndome en mi lugar
mientras continúa burlándose de mí con solo su punta.
Bear se ríe, pero mis ojos se agrandan. –Dios mío, eso sería muy
divertido. ¿Podemos, Daddy?
BEAR
El sonido de la risa llena el salón privado del restaurante
mexicano donde estamos reunidos. Nuestro grupo ha crecido a
lo largo de los años y, al mirar alrededor de la sala, no podría
estar más orgulloso. Están Rebel y Troy, una pareja hecha en el
cielo si alguna vez he visto una. Son perfectos el uno para el otro,
esta pareja sorprendentemente sólida que se apoya y
complementa.
Creo que Rebel está listo para un compromiso aún mayor, pero
es lo suficientemente inteligente como para tomárselo con calma.
Troy ha recorrido un largo camino, por lo que tengo entendido,
pero a veces todavía está nervioso. Poco a poco está
construyendo una relación con su madre, y me alegro cada vez
que Rebel me informa que todo va bien.
Con una introducción como esa, solo puede significar una cosa, y
mi corazón se llena de felicidad por ellos. Campy toma la mano
de Jackson, y la mirada que el vaquero le envía está tan llena de
amor que me hace llorar. Lo ha hecho bien, nuestro Campy, pero
también lo ha hecho Jackson.
Está claro que esto es algo por lo que está estresado, y me alegra
ver que han encontrado una manera de manejarlo bien.
–El futuro.–
–He mirado algunos, pero solo sus sitios web. No he hecho
ningún recorrido ni hablado por admisiones ni nada –.
–Está bien, esto es lo que vamos a hacer. Dime cuáles son tus
tres favoritos y programaremos una cita para visitarlos y obtener
más información. Luego, te inscribiremos para el próximo
semestre disponible –.
Él se ríe y me abraza fuerte. –No creo que tengas tiempo para
trabajar en Ballsy si te concentras en la escuela–, dice una vez
que dejo de besarlo.
Me desinflo un poco con eso. Hacer porno puede no haber sido
parte de mi plan, pero realmente me gusta. Me gustan todos los
chicos del estudio y amo a los fans. Es divertido y emocionante.
Sé que todos los chicos también están avanzando con sus vidas,
así que pronto habrá modelos nuevos. Me entristece pensar en
este momento del final de mi vida. Nunca antes había tenido
amigos como ellos. Nunca pensé que pudiera amar un trabajo
como este antes. Sé que todo el mundo sigue adelante no
significa que no seamos todavía amigos, pero sigue siendo triste.
Es el final de una era.
–Da la vuelta y enséñale a Daddy ese bonito culito tuyo para que
pueda enrojecerlo–.
–No voy a ser duro contigo, bebé, así que no creo que
necesitemos una palabra segura. Si es demasiado y quieres que
me detenga, dilo, ¿de acuerdo?
–Sí papi.–
–A mi niño le gusta eso, ¿no?– el elogia, apretando los globos de
mi trasero de nuevo antes de darme otra nalgada, otra sacudida
de excitación que me hace gemir y empujar mis caderas
involuntariamente.
–Tu piel es tan sensible, toda bonita y rosada para mí sin tener
que azotarte demasiado fuerte–, dice, frotando mis mejillas y
separándolas de nuevo. Puedo sentir su mirada en mi agujero, y
me llena de calor y necesidad. Tiro de mi polla más rápido, mis
bolas se tensan mientras más líquido preseminal gotea de mi raja.
–Por favor, Daddy, por favor.– No estoy seguro de lo que estoy
rogando, tal vez estoy atrapado en el puro placer de rogar.
–Unas pocas horas. Aunque está bien. De todos modos, tenía
que hacer algo de contabilidad –.
Me apresuro al baño lo más rápido que puedo. El día que
volvimos a casa de celebrar con Rebel y el resto de los chicos
hace unas semanas, Bear me dijo que trasladara todas mis cosas a
su habitación porque ahora era nuestra habitación.
BEAR
–Por supuesto.–
Querido Bear:
Hay tanto que quiero decirte, pero se me acaba el tiempo. Espero que
tengamos la oportunidad de tener una última conversación de corazón a
corazón, pero si no es así, necesito decirte esto.
Gracias. Tu amistad ha significado el mundo para mí estos últimos meses
y me ha traído tanta alegría. Si las circunstancias hubieran sido diferentes,
sé que hubiéramos sido amigos de toda la vida.
Amor,
Travis.
PD: Y por el amor de Dios, abre tus malditos ojos y mira lo perfecto que
sería ese chico dulce para ti antes de que se encuentre otro Daddy. Idiota.
El tiene razón. He pagado mi deuda, si es que alguna vez tuve
una. Cumplí mi promesa a Freddie. La triste verdad es que
murió, pero yo sigo vivo y quiero vivir con mi Pixie a mi lado.
Todo lo que necesito hacer ahora es convencerlo de que lo amo y
que lo amaré por siempre.
PIXIE
–Lo es, pero entre tú y yo, siento que soy un poco mayor para
llamar novio a cualquiera–, confiesa Bear, sentándose y
palmeando el otro asiento para que yo haga lo mismo. Helena se
ríe y niega con la cabeza antes de sufrir un ataque de tos. Bear
tranquilamente alcanza un pequeño cubo en la bandeja cerca de
su cama y lo sostiene debajo de su boca para que pueda escupir
un poco de flema en él. Luego agarra algunos pañuelos y se los
ofrece.
–Gracias por esto. Voy a tener que hacérselo a Eli tan pronto
como lleguemos a casa –. Bear pone una mano sobre la de
Helena en agradecimiento.
–Creo que es un buen plan. Hay mucha vida por vivir, Maxwell.
No dejes que se te escape –.
–Igualmente.–
Le lanzo una mirada oscura. –Me gustaría verte filmar un porno
a nuestra edad–, le digo.
La única solución que se me ocurrió fue filmar una escena con él
yo mismo, y aquí estamos. Hunter estaba en la luna cuando se lo
dije, ya que su investigación muestra que Daddy Kink es súper
popular. De alguna manera, eso no me pone menos nervioso.
Dios mío, ¿han pasado qué, quince años desde que hice porno?
–Esto debería ser interesante–, comenta Joey, y lo juro,
literalmente se frota las manos.
Él recibe una mirada aún más oscura de mí, no es que espero que
tenga algún efecto. –Ni. Una. Palabra.–
Una voz que conozco demasiado bien. Una voz que no debería
estar aquí, porque anunció su retiro hace semanas.
Cuando lo pone así, es difícil resistirse. Lo beso por última vez.
–Está bien, bebé. Hagamos esto.–
Pixie se muerde el labio. –He sido travieso, Daddy–, dice, con los
ojos brillantes de alegría. Sabe lo que se avecina y, a juzgar por lo
excitada que está su polla, no puede esperar.
Oh, lo hace tan bien. –¿Te tocaste dónde, bebé? ¿Jugaste con tus
bonitos pezones?–
Se arrastra un poco sobre sus rodillas, abriendo las piernas. Su
mano derecha se arrastra desde su clavícula hacia abajo,
serpenteando por su cuerpo hasta llegar a su pequeña y bonita
polla. Solo lo golpea, sin decir una palabra, aunque su mirada
acalorada me dice mucho.
Por el rabillo del ojo, noto que Joey se acerca con la cámara de
mano, incluso cuando otros dos camarógrafos están obteniendo
tomas amplias y medias desde otros ángulos. Intento sacarlos de
mi mente y concentrarme en lo suave que se siente la piel de
Pixie bajo mi mano mientras froto su trasero.
Pixie gime, jadeando mientras su piel se pone más roja con cada
golpe. Lo toma maravillosamente, como siempre lo hace, casi
apoyándose en mi toque.
Las manos de Pixie ya están en mis jeans. –Sí, por favor, papi.
Déjame chuparte. Me encanta tu polla gruesa en mi boca.–
Me levanto del sofá por unos segundos para permitirle que me
baje los jeans hasta los tobillos. Por supuesto, fui comando. No
es necesario hacer las cosas más difíciles de lo necesario.
Pixie acaricia mi polla. Es una de esas cosas que hace al respirar
mi olor. Dice que es reconfortante y lo hace sentir amado y
apreciado. Una vez más, soy consciente de las cámaras
moviéndose a mi alrededor, pero luego Pixie me lleva a su boca y
me olvido de todo lo demás.
PIXIE
Esto no se parece en nada a las otras escenas que he filmado. Es
mucho mejor. Miro a Daddy Bear desde mi lugar de rodillas, su
gran polla estirando mis labios, y es fácil olvidar que hay una
docena de personas alrededor, fuera de mi visión periférica,
mirándonos, filmándonos. Apuesto a que nos vemos increíbles
juntos así. Mi polla se pone más dura al pensar en ver nuestro
video más tarde, sabiendo que otras personas también se
divertirán mirándolo.
Salgo con un pop y le sonrío con los labios húmedos. Mi piel está
caliente donde la mano de Bear la enrojeció, y no puedo esperar a
ver esto más tarde para ver qué tan caliente se ve. Muevo mi
lengua a lo largo del eje de Daddy, hasta sus bolas. Él abre sus
piernas más separadas, y tomo cada una de sus pesadas bolas en
mi boca una a la vez.
–Me dijiste que tocaste tu linda verga, pero puedo decir que
también jugaste con tu agujero. Todo está elegante y abierto
para mí –.
–Un chico tan codicioso–, dice Daddy Bear. –No estoy seguro de
si un niño tan travieso merece más de Daddy–.
–Ven aquí, bebé–, dice, y solté el brazo del sofá para volver a
meterme en su regazo. Me siento a horcajadas sobre él, mi
agujero se agita de emoción mientras su erección roza la curva
de mi trasero, sus manos agarran mis mejillas y las separan.
–Úsame, Daddy–.
–Gracias papi.–
Recojo las fotos que envió antes de que solicitara su video. Esos
definitivamente no fueron disparados por él mismo, lo cual fue
inteligente. Hizo arreglos para que un fotógrafo algo profesional
tomara algunos desnudos atractivos de él que mostraran su
cuerpo. Esa sonrisa atrevida y coqueta que tiene le irá bien en
cámara.
Rebel chasquea los dedos frente a mis ojos. –Jefe, ¿todavía estás
conmigo?–
–Sí, el vídeo que ustedes dos grabaron lo dejó muy claro–, dice
Rebel.
El alivio llena el rostro de Byron. –Me alegra escuchar eso. Solo
quería ser sincero sobre mis ambiciones y no engañarlos para que
piensen que esto es algo que me gustaría hacer como carrera–.
–Lo sé. Pero siento que al menos estoy haciendo esto en mis
términos y me pagan por ello. Realmente me gusta el sexo, y
siempre he estado muy abierto a experimentar–.
Cruzo la habitación arrastrando los pies con Daddy Bear justo
detrás de mí y entro al baño. El relajante aroma de mi bomba de
baño de lavanda favorita me hace cosquillas en la nariz, el aire del
interior es cálido y húmedo.
–Así es.–
–Por favor, Daddy. Por favor, por favor —jadeo, hundiendo mis
dedos en el borde de la bañera con más fuerza para evitar
tocarme.
Lo escucho alcanzar algo más, y giro la cabeza para verlo agarrar
una botella de lubricante que está apoyada en el costado de la
bañera. Daddy siempre está preparado. Lo que no noto es un
condón. Ahora que no estoy filmando con regularidad, los dos
nos hicimos la prueba de nuevo y hemos tenido muchas largas
charlas sobre no usar condones. Me dijo que nunca se había
desnudado con nadie, y puedo entender su vacilación, con su
historia y todo eso, pero también me muero por sentirlo desnudo
dentro de mí.
–Ven aca.–
–Montame, bebé–.
–Cualquier cosa por mi niño–, dice. –Ahora, será mejor que nos
vistamos para tener tiempo para desayunar antes de irnos–.
–Te ves realmente guapo hoy–, le digo una vez que nos
separamos del beso. Aliso mis manos sobre la tela suave y cara de
su camisa de vestir que me dejó elegir por él. –¿Listo para
irnos?–
BEAR
El cielo es de un azul nítido, el aire todavía fresco tan temprano
en la mañana cuando nos reunimos en un prado detrás del
extenso rancho de Ethan. La coprotagonista de Jackson fue lo
suficientemente generosa como para ofrecerle el uso de su casa
para la boda. Ya era hermoso cuando lo visitamos por primera
vez, pero se ha transformado en un pedacito de cielo.
–Har, har–, dice Brewer, luego le saca la lengua a Heart. Veo que
ya hemos alcanzado el nivel máximo de madurez esperado, pero
no puedo evitar sonreír.
Rebel comparte otra mirada con Troy, y me encanta que sea tan
comprensivo con las sensibilidades de Troy en esto.
–Créeme, tan pronto como sea legal, me casaría con estos dos en
un abrir y cerrar de ojos–, dice Lucky, besando primero la mano
de Heart y luego la de Mason, cuya mano agarra accidentalmente
el bonito mantel y casi lo derriba todo. Los reflejos de Lucky
deben haber mejorado significativamente desde que salió con
Mason, porque con calma previene el desastre con un agarre
rápido como un rayo y luego toma las manos de Mason, como si
fuera la cosa más normal del mundo. Bueno, probablemente para
él ahora, como Mason es propenso a los accidentes. Es un niño
lindo, un amor total, pero una carga ambulante.
–Eso los deja a ustedes dos, Bear–, dice Brewer con un guiño.
NOTA INFORMATIVA
Esta es una traducción amateur hecha sin fin de lucro, no obtengo ningún
beneficio monetario por ella.
Cualquier modificación realizada al contenido fue hecha para su adecuación
al español, y sin motivo alguno de alterar las ideas plasmadas en la obra.