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Anexo 3
Talleres de planificación
La convocatoria para este taller debe estar sustentada en un detallado análisis de actores que
permita identificar quienes deben ser invitados a participar y su posible relación con el futuro
proyecto.
Una vez que se ha desarrollado el primer taller de planificación, el grupo a cargo del proyecto
deberá iniciar un proceso de planificación con mayor grado de detalle para llegar a
confeccionar un plan de proyecto con especificaciones de implementación, lo que incluye un
plan de actividades, un cronograma para la ejecución de las mismas, un análisis de los
recursos necesarios y los aportes comprometidos entre otras cosas.
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Metodología del Marco Lógico. Anexo 3
Metodologías de trabajo
Este moderador debe contar con conocimientos específicos de la Metodología del Marco
Lógico que se pretende aplicar lo que le permitirá organizar y conducir el taller en las distintas
fases que lo integran. Se recomienda que este profesional no esté involucrado en la futura
implementación del proyecto ya que su rol debe ser totalmente objetivo, sin realizar aportes
para la construcción del proyecto y limitándose a encausar y organizar los distintos espacios de
intercambio y diálogo entre los actores convocados. Para cumplir este objetivo suele preferirse
que no sea un especialista en la materia del proyecto de modo de buscar, desde la óptica de
un extraño a la temática desarrollada, la mayor claridad que se pueda en la formulación
buscada.
El taller suele comprender trabajos en plenaria así como también discusiones en grupos que
permiten segmentar a los asistentes de acuerdo con algún criterio vinculado al tema de
discusión. Siempre los trabajos grupales deben ser presentados a la plenaria con la intención
de recibir aportes que puedan enriquecer el desarrollo realizado por cada grupo.
Un punto muy importante a ser tenido en cuenta en el desarrollo del taller, es la técnica de
visualización empleada. Se busca que todo el trabajo quede debidamente documentado, que
todo aporte sea tenido en cuenta y quede registrado y que toda construcción esté a la vista de
los participantes. Para esto se suelen emplear distintas herramientas siendo muy difundida la
aplicación de la técnica de visualización conocida como Metaplán.
Esta técnica se vale del empleo de tarjetas donde los participantes vuelcan sus contribuciones
las que son luego integradas en una construcción global. Para esto se emplean paneles que
permiten ubicar libremente y de manera no permanente las tarjetas con los aportes recibidos.
Se suele trabajar con tarjetas de diversos tamaños, geometrías y colores, con la idea de
valerse de estas distinciones para lograr estructuras más claras. Por lo generalizado de esta
técnica, muchos de los pasos que la MML realiza, se suelen presentar con esquemas que
representan construcciones realizadas mediante estas tarjetas.
Así una lluvia de ideas se vería como se muestra en la Figura 1, donde los rectángulos
amarillos representan las tarjetas que fueron integradas a un panel (en gris), con los aportes
realizados para la lluvia de ideas.
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Metodología del Marco Lógico. Anexo 3
Figura 1 Figura 2
Figura 1 Figura 2
Finalmente, la Matriz del Marco Lógico suele representarse por sus 4 filas y sus 4 columnas y
como la muestra la Figura 3, las tarjetas ayudan a esquematizar su contenido.
4 filas
4 columnas
Figura 3
Los talleres suelen tener una agenda estándar (por lo menos indicativa) que comprende los
siguientes pasos:
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Metodología del Marco Lógico. Anexo 3
2. Nivelación de expectativas: En este espacio se busca conocer con que idea asisten los
participantes al taller para verificar si existe concordancia con el motivo de la
convocatoria. Una vez definido el “porque estamos juntos en el taller”, se puede pasar a
la definición del objetivo del mismos.
3. Objetivo del taller: Se busca formular un objetivo claro y posible para el taller y suele
acompañarse de la definición de los productos que se esperan obtener como una
medida de que se ha alcanzado el objetivo buscado.
4. Revisión y aprobación de agenda: Una vez que se tiene en claro el motivo de la
convocatoria y los productos que deben ser obtenidos, se analiza la agenda preliminar
preparada por los organizadores para verificar que se ajusta a los trabajos que deben
ser desarrollados.
5. Espacios de trabajo: En este momentos se busca desarrollar todos o algunos de los
puntos contemplados en la agenda, empleando distintas herramientas para favorecer el
trabajo grupal.
6. Cierre del taller: Suele incluir una revisión general del trabajo desarrollado y una
comparación con los objetivos y productos originalmente identificados para el taller a
modo de revisión del éxito del mismo. También se trabajan “próximos pasos”, a modo
de generar la convicción que el proceso iniciado continuará y que los actores serán
debidamente tenidos en cuenta en trabajos posteriores. Finalmente se solicita a los
organizadores (el grupo encargado del proyecto), que presenten algunas conclusiones
sobre el trabajo desarrollado lo que es acompañado por los asistentes.
También suele observase la inclusión de una evaluación del taller mismo, lo que permite
conocer aciertos y fallas sobre aspectos logísticos, metodológicos y organizativos en
general.
Un taller de trabajo se convoca para recibir aportes y opiniones de los actores y por lo tanto su
formato no es el mismo que el de un seminario. Si bien puede incluir alguna presentación sobre
la temática de la convocatoria, el mayor tiempo se dedica al trabajo de los participantes.
A modo de conclusión podemos decir que los talleres de planificación son una herramienta muy
útil para crear espacios participativos y permiten también un mayor grado de acercamiento y
conocimiento entre los actores involucrados.