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REVOLUCION INDUSTRIAL

1. Elabore un cuadro que contenga por lo menos 10 inventos con nombres de autores y
países con dibujos durante la revolución industrial.

2. ¿Qué consecuencias tuvo para los obreros la introducción de nuevas máquinas en la


industria textil?

3. ¿Qué problemas ha de afrontar un país en busca una rápida industrialización?

4. ¿Qué consecuencias sociales trajo la revolución industrial para gran bretaña?

5. Investigar y redactar un resumen de cómo se organizaron las primeras empresas


(sociedades anómimas, monopolios) y el capotalismo comercial.
CONCLUSIÓN

1. Elabore un cuadro que contenga por lo menos 10 inventos con nombres de autores y
países con dibujos durante la revolución industrial.

INVENTO INVENTOR PÍAS AÑO


Lámpara de Edinson Tomas Alva Edinson Italia 1879
Telar John Kay Gran Bretaña 1733
Buque de vapor Roberto Fulton Estados Unidos 1803
Locomotora Jorge Stephenson Inglaterra 1804
El Pararrayos Benjamín Franklin Estados Unidos 1752
La Fotografia Nicéphore Niépce Francia 1793
Aeroplano Wilbur y Orville Wright Estados Unidos 1902
El Teléfono Charles Bourseul Francia 1854
Clave Morse Samuel Morse Estados Unidos 1836
2. ¿QUÉ CONSECUENCIAS TUVO PARA LOS OBREROS LA INTRODUCCIÓN DE
NUEVAS MÁQUINAS EN LA INDUSTRIA TEXTIL?
Investigaciones y escritos sobre la revolución industrial referentes a las condiciones de los
trabajadores han traído hasta nosotros descripciones que de haber sido inventadas no
hubieran descrito peores grados de inhumanidad y crueldad.

Nos hablan de niños obligados a trabajar de doce a dieciséis horas diarias, encerrados en
profundos socavones mineros a loa que apenas entraba el aire y menos aún luz.
Abandonaban sus casas a la madrugada para regresar con la medianoche, habiendo apenas
comido algún pedazo de pan o una sopa aguada.

Carecían por completo de vida familiar, pues sus padres estaban sujetos a similares o
peores condiciones de trabajo. Las posesiones familiares se podían limitar a un poco de
paja que servía de cama, una tabla como mesa y algunos harapos raídos y sucios iguales
para verano e invierno. Por casa solían no tener más que un cuarto, compartido con varias
familias.Era frecuente el que niños, mujeres y adultos murieran trabajando por la simple
debilidad en que el hambre o la permanente enfermedad los tenían. En tal caso, se les
remplazaba por otro obrero, con la facilidad que ofrecía la existencia de una gran masa de
desempleados. Las permanentes mejoras técnicas de las maquinarias dejaban sin trabajo a
los obreros y facilitaban la disminución de los salarios aunque los precios siguieran en
aumento.

3. ¿QUÉ PROBLEMAS HA DE AFRONTAR UN PAÍS EN BUSCA UNA RÁPIDA


NDUSTRIALIZACIÓN?
Cuando se empezaron a industrializar otros países tuvieron que enfrentarse a la ventaja
acumulada por Gran Bretaña, pero también pudieron aprovecharse de su experiencia. En
cada caso, el éxito del proceso industrializador dependía del desarrollo de nuevos métodos
de producción, pero también de la modificación de las técnicas utilizadas para adaptarlas a
las condiciones imperantes en cada país y de la propia legislación vigente, que favoreciera
la implantación de maquinaria barata gracias a una disminución de los aranceles, lo que, en
ocasiones, podría perjudicar a otros sectores sociales, como los campesinos, que veían
cómo sus productos debían competir con otros más baratos. Aunque la intervención pública
para favorecer la industrialización fue importante en el caso británico, el papel del Estado
fue mucho mayor en el caso alemán, ruso, japonés y en casi todos los países
industrializados durante el siglo XX.

4. ¿QUÉ CONSECUENCIAS SOCALES TRAJO LA REVOLUCIÓN INDUSTRIAL


PARA GRAN BRETAÑA?

La primera Revolución Industrial tuvo lugar en Reino Unido a finales del siglo XVIII;
supuso una profunda transformación en la economía y sociedad británicas. Los cambios
más inmediatos se produjeron en los procesos de producción: qué, cómo y dónde se
producía. El trabajo se trasladó de la fabricación de productos primarios a la de bienes
manufacturados y servicios. El número de productos manufacturados creció de forma
espectacular gracias al aumento de la eficacia técnica. En parte, el crecimiento de la
productividad se produjo por la aplicación sistemática de nuevos conocimientos
tecnológicos y gracias a una mayor experiencia productiva, que también favoreció la
creación de grandes empresas en unas áreas geográficas reducidas. Así, la Revolución
Industrial tuvo como consecuencia una mayor urbanización y, por tanto, procesos
migratorios desde las zonas rurales a las zonas urbanas.

Se puede afirmar que los cambios más importantes afectaron a la organización del proceso


productivo. Las fábricas aumentaron en tamaño y modificaron su estructura organizativa.
En general, la producción empezó a realizarse en grandes empresas o fábricas en vez de
pequeños talleres domésticos y artesanales, y aumentó la especialización laboral. Su
desarrollo dependía de una utilización intensiva del capital y de las fábricas y maquinarias
destinadas a aumentar la eficiencia productiva. La aparición de nuevas máquinas y
herramientas de trabajo especializadas permitió que los trabajadores produjeran más bienes
que antes y que la experiencia adquirida utilizando una máquina o herramienta aumentara
la productividad y la tendencia hacia una mayor especialización en un proceso acumulativo.

La mayor especialización y la aplicación de bienes de capital a la producción industrial creó


nuevas clases sociales en función de quien contratara y tuviera la propiedad sobre los
medios de producción. Los individuos propietarios de los medios de producción en los que
invertían capital propio se denominaron empresarios. Cuando invierten capital en una
empresa sin participar directamente en ella se denominan capitalistas.

Como la Revolución Industrial se produjo por primera vez en Gran Bretaña, este país se


convirtió durante mucho tiempo en el primer productor de bienes industriales del mundo.
Durante gran parte del siglo XVIII Londres fue el centro de una compleja red comercial
internacional que constituía la base de un creciente comercio exportador fomentado por la
industrialización. Los mercados de exportación proporcionaban una salida para los
productos textiles y de otras industrias (como la siderurgia), cuya producción aumentaba
rápidamente gracias a la aplicación de nuevas tecnologías. Los datos disponibles sugieren
que la tasa de crecimiento de las exportaciones británicas se incrementaron de forma
considerable a partir de la década de 1780. La orientación exportadora y el aumento de la
actividad comercial favorecieron aún más el desarrollo de la economía: los ingresos
derivados de las exportaciones permitían a los productores británicos importar materias
primas para crear productos industriales; los comerciantes que exportaban bienes
adquirieron una importante experiencia que favoreció el crecimiento del comercio interior.
Los beneficios generados por ese desarrollo comercial fueron invertidos en nuevas
empresas, principalmente en mejora de la tecnología y de la maquinaria, aumentando de
nuevo la productividad, favoreciendo la dinámica del proceso.
5. INVESTIGAR Y REDACTAR UN RESUMEN DE CÓMO SE ORGANIZARON LAS
PRIMERAS EMPRESAS (SOCIEDADES ANÓMIMAS, MONOPOLIOS) Y EL
CAPITALISMO COMERCIAL.

organización económica que, en las economías industriales, realiza la mayor parte de las
actividades. Son organizaciones jerarquizadas, con relaciones jurídicas, y cuya dimensión
depende de factores endógenos (capital) y exógenos (economías de escala). Las empresas
son, al menos la mayor parte, sociedades, entidades jurídicas, que realizan actividades
económicas gracias a las aportaciones de capital de personas ajenas a la actividad de la
empresa, los accionistas. La empresa sigue existiendo aunque las acciones cambien de
propietarios o éstos fallezcan. Una empresa o compañía posee una serie de activos; cuando
se crea una empresa hay que redactar una serie de documentos públicos en los que se
definirá el objetivo de la misma, cuál es su razón social, su domicilio fiscal, quiénes son los
socios fundadores, cuál es el volumen de capital social inicial, en cuántas acciones o
participaciones se divide el capital social y cuáles son los estatutos de la sociedad, entre
otros. La actividad y la estructura legal de las empresas se regula mediante el Derecho
mercantil, que establece los requisitos contables, las obligaciones de los gestores o
administradores y los derechos de los accionistas. Existen otras formas jurídicas, como la
empresa unipersonal o la cooperativa, pero lo más usual es la organización en forma de
sociedad.

Por lo general, los accionistas de la empresa tienen una responsabilidad limitada: sólo
responden por las deudas de la empresa con la cuantía de su aportación, medida por el valor
de las acciones. Existen distintos tipos de compañías que, en función del grado de
responsabilidad de los socios o accionistas, reciben distintos nombres. En primer lugar hay
que distinguir entre públicas y privadas; las públicas pertenecen al sector público
(administración central o local), mientras que las privadas pertenecen a individuos
particulares y pueden vender sus acciones en el mercado de valores. Las compañías o
empresas públicas a veces venden parte de sus acciones a individuos particulares, pero se
consideran públicas siempre que el 51% de las acciones estén en manos del sector público.
En función del grado de responsabilidad de los socios y del número de accionistas, las
empresas pueden ser sociedades anónimas o sociedades de responsabilidad limitada.

También se puede distinguir entre las compañías o empresas privadas los siguientes tipos:
empresas asociadas, cuando dos empresas tienen entre el 20 y el 50% de las acciones de la
otra; holdings, cuando una empresa (conocida como empresa matriz) es propietaria de otra
u otras empresas, cuya actividad es dirigida por la primera; y, por último, empresa
subsidiaria, que está controlada por la empresa matriz (poseedora de más del 50% de las
acciones de la subsidiaria).

Teoría de la empresa, estudio del comportamiento de las organizaciones empresariales, de


cómo compran las materias primas, de las técnicas de producción, de las cantidades que
producen y de cómo fijan los precios. La teoría tradicional supone que la empresa pretende
maximizar beneficios. Las interpretaciones más recientes intentan tener en cuenta las
complejas características de las empresas modernas, que suelen tener varias líneas de
producción y en las que asumir decisiones se logra, en mayor o menor medida, de forma
descentralizada. Así, según las concepciones modernas, las empresas prefieren aplazar el
objetivo de la maximización de ganancias para lograr beneficios satisfactorios e intentan
maximizar las ventas o el crecimiento de la empresa.

La teoría basada en el comportamiento de la empresa reconoce que en las grandes


compañías es inevitable que existan conflictos entre individuos y subgrupos, y que los
objetivos de la organización dependan de las consecuencias de estos conflictos. Los
defensores de esta teoría afirman que las empresas deberían tener varios objetivos
(incrementar su producción, su cuota de mercado, el valor de sus acciones, sus ventas y
beneficios), y cada uno de estos objetivos un directivo responsable. Estos directivos
diseñarán líneas de acción para alcanzar sus objetivos, pero en ocasiones habrán de llegar a
acuerdos con los responsables de otros departamentos, que pueden tener objetivos
diferentes. De las negociaciones entre los directivos surgirán los fines globales de la
organización. Además, esta teoría defiende que, a diferencia de la teoría tradicional que
suponía que la adopción de decisiones se hacía de modo racional, en la práctica los
objetivos se alcanzan de forma imperfecta y, por lo tanto, pueden ser incompatibles con las
políticas existentes. Por otra parte, esta teoría afirma que los objetivos pueden cambiar con
el tiempo por diversas causas, como la experiencia acumulada o la falta de comunicación
entre los altos ejecutivos y los ejecutivos intermedios (en quienes se suelen delegar
importantes decisiones), que a veces hacen difícil el cumplimiento de los objetivos
impuestos por los altos directivos.

La teoría del comportamiento de las empresas parte de dos supuestos. Uno es que los
propietarios de las grandes empresas no tienen el control de las mismas; en otras palabras,
serían los directivos de las empresas, y no los accionistas, los que imponen los objetivos
reales de la empresa. El otro supuesto es que los directivos están más interesados en la
producción y las ventas, por ejemplo, que en los beneficios, porque son la producción y las
ventas las que demuestran su eficacia en la gestión.

La teoría permite analizar con nuevas perspectivas el comportamiento de las grandes


empresas, pero son muchos los economistas que afirman que el objetivo de maximización
de beneficios resume mejor que todos los demás los intereses de las empresas. Esta teoría
está muy relacionada con la teoría de la organización.

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