Tiene 35 años, es microbióloga de la Universidad de los Andes y
doctora en ciencias biológicas de la Pontificia Universidad Javeriana. Actualmente está terminando una estancia posdoctoral en el grupo de biología del cáncer del Instituto Nacional de Cancerología. Su investigación se enfoca en evaluar las diferencias en el comportamiento clínico de pacientes colombianas con cáncer de mama, de acuerdo con las porciones variables de ancestría europea, africana e indígena, y específicamente para los tumores HER2 positivos, analizar cómo la expresión génica de ERBB2 y la localización de HER2 en el núcleo y/o membrana celular puede impactar el pronóstico de los pacientes. Con esos resultados se espera conocer factores que pronostiquen el cáncer de mama, especifico en poblaciones mestizas que ayuden al control de esta enfermedad, considerado como un problema de salud publica en Colombia.