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¿Te sientes perdida?

¿Te gustaría tener una meta clara que


perseguir pero no sabes por dónde empezar?

Hace tiempo, leí una frase de Saint Euxepen que me dejó


boquiabierta, decía que “El mundo entero se aparta cuando hay una
persona que sabe dónde va”. Según la leí, tuve claro que esa frase
iba a marcar mi vida y hoy quería compartirla contigo en este
artículo.

Cuando no tenemos claro hacia dónde ir, vamos con la cabeza


agachada, nos tropezamos por el camino, nos perdemos…

¡Todo parece ir en nuestra contra!

Sin embargo, cuando sabemos exactamente lo que queremos,


nuestra actitud y nuestro rumbo es totalmente diferente. Vamos
con la cabeza bien alta, nuestro paso es firme, estamos seguras de
cada paso que damos y, sobre todo, dejamos de tropezarnos con
personas, situaciones o lugares que no nos felices hacen.

Creo profundamente que esta frase se puede extrapolar a cualquier


área de nuestra vida: profesional, personal y social.

Si no tenemos claro hacia dónde queremos ir, muy probablemente


nos sucederán acontecimientos que no queremos en nuestra vida,
que realmente no deseamos.

Hoy te invito a que reflexiones sobre esto y empieces a tomar


consciencia de que tú eres la única responsable de tu destino.
Debes ser tú quién decida el rumbo que quiere tomar en su vida,
¿estás perdida o sabes hacia dónde quieres ir?
Contenido

● Beneficios de tener una meta clara


○ 1. Beneficios físicos
○ 2. Beneficios mentales
○ 3. Beneficios estratégicos
● Cómo tener una meta clara

Beneficios de tener una meta clara


Como te decía al principio, quiero hablarte de los beneficios de
tener una meta clara, un destino al que dirigirte y, para empezar, voy
a decirte que bajo mi punto de vista existen 3 tipos de beneficios:
físicos, mentales y estratégicos.

1. Beneficios físicos
Relacionado con lo que te decía en la introducción de este artículo,
cuando una persona tiene una meta bien definitiva físicamente se
nota. Vas más erguida, la espalda recta, caminas con seguridad,
vas decidida…

Indudablemente, esto influye en tu salud, puesto que curvar la


espalda o tener una aptitud de derrota genera muchas molestias
corporales.

Con esto no quiero decir que teniendo claro tus objetivos se van a
acabar tus dolores, simplemente quiero que veas que afecta a tu
estado corporal y, por supuesto, los cambios físicos son visibles.

2. Beneficios mentales
En segundo lugar, se aprecian fácilmente los beneficios mentales o
psicológicos. Cuando tienes claras tus mentas, rápidamente
aumenta tu seguridad y autoestima, pues empiezas a visualizar
aquello que deseas lograr, en lugar de centrarte en lo que no
quieres que ocurra.

Cuando hay claridad, nos invade una sensación de paz, de calma,


de tranquilidad, ya que empiezas a tener las cosas bajo control en
tu vida.

Pronto vas a poder ver la realidad de una forma diferente, vas a


poder centrarte en las oportunidades que tienes delante para lograr
tus metas y, por supuesto, vas a conocer un estado mental del que
no vas a querer salir nunca más.

3. Beneficios estratégicos
Por último, lo que yo llamo beneficios estratégicos están
directamente relacionados con los dos anteriores. Una vez que
tienes tus metas claras, físicamente te encuentras bien y
mentalmente estás en paz. Al obtener estos beneficios, es muy
sencillo empezar a diseñar una estrategia que te permita perseguir
esas metas que tanto deseas.

De pronto empiezas a ver caminos diferentes para poder realizar


tus sueños, a crear estrategias que antes no eras capaz de ver
porque ni siquiera tenías claro hacia dónde quería ir.

Cómo tener una meta clara


Ahora ya conoces los beneficios de tener una meta clara, pero
estoy segura de que te estás preguntando, ¿cómo empiezo a definir
mi meta?
Tranquila, en su día yo también me hice la misma pregunta, por ello,
escribí un artículo en el que hablaba de los Objetivos SMART. Es
posible que alguna vez hayas oído hablar de ello, pero te invito a
que leas el artículo y sigas paso a paso las indicaciones que
comparto contigo para tener una meta clara.

Estoy convencida de que te va a encantar el sistema de Objetivos


SMART y me encantará que me cuentes tus avaces pero…

Recuerda: ¡Conocimiento es saberlo, sabiduría es aplicarlo!

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