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Resumen
Fecundación
En cada ciclo menstrual normal, un óvulo se desprende de uno de los ovarios unos 14
días después de la última menstruación. La liberación del óvulo se denomina ovulación.
Este óvulo suelto se dirige hacia el extremo de una de las dos trompas de Falopio,
caracterizadas por tener forma de embudo.
Durante la ovulación, el moco del cuello uterino se vuelve más fluido y elástico, de forma
que los espermatozoides puedan entrar en el útero rápidamente. En unos 5 minutos, los
espermatozoides se desplazan desde la vagina, a través del cuello uterino, hacia el
interior del útero y hasta el extremo en forma de embudo de una trompa de Falopio,
donde se suele producir la fecundación. Las células que recubren el interior de las
trompas de Falopio facilitan la fecundación.
Si no se produce la fecundación, el óvulo baja por las trompas de Falopio hasta el útero,
donde degenera y se elimina del útero en la siguiente menstruación.
Ya dentro del útero, las células continúan dividiéndose y se convierten en una bola
hueca denominada blastocito. El blastocisto se implanta en la pared del útero al cabo de
unos 6 días después de la fecundación.
Una vez al mes, un óvulo se desprende de un ovario y entra en una trompa de Falopio. Después del coito, e
desde la vagina, por el cuello uterino y por el útero, hasta la trompa de Falopio, donde un espermatozoide fe
fecundado (cigoto) se divide varias veces mientras se desplaza por la trompa de Falopio hasta llegar al útero
cigoto se convierte en una bola sólida de células. Luego, se convierte en una esfera hueca de células que se
Dentro del útero, el blastocito se implanta en la pared uterina, donde se transforma en un embrión unido a u
membranas llenas de líquido.
La pared del blastocito tiene el grosor de una célula, excepto en una zona, en la que
equivale al de 3 o 4 células. En esta zona engrosada, las células internas se convierten
en el embrión, mientras que las externas penetran en la pared del útero y se transforman
en la placenta. La placenta produce varias hormonas necesarias para mantener el
embarazo. Por ejemplo, produce la gonadotropina coriónica humana, la cual evita que
los ovarios liberen más óvulos y los estimula para
segregar estrógenos y progesterona de forma continua. La placenta también transporta
oxígeno y nutrientes de la madre al feto, y materiales de desecho del feto a la madre.
Algunas células de la placenta se convierten en la capa externa de las membranas
(corion) alrededor del blastocisto en desarrollo. Otras células se desarrollan en una capa
interna de las membranas (amnios), que forma el saco amniótico. Cuando se forma el
saco (alrededor del día 10 o 12), el blastocisto ya se considera un embrión. Este se llena
de un líquido claro (líquido amniótico) y se expande para envolver al embrión en
desarrollo que flota en su interior.
Los pulmones siguen madurando hasta casi el momento del parto. El cerebro acumula
células nuevas durante todo el embarazo y durante el primer año de vida después del
nacimiento.
Embarazo
A partir del quinto mes, ya puede oirte, su sentido del tacto está preparado y
empieza a mover brazos y piernas con suficiente fuerza. La madre puede
captar sus movimientos. Sus dedos adquieren agilidad y empieza a
desarrollar coordinación y fuerza.
Otra forma de educación prenatal consiste en la estimulación del feto con sonidos,
movimientos y olores para ayudar al desarrollo de los sentidos del bebé. Muchos
especialistas creen que esta forma de educación prenatal le da al bebé una ventaja de
aprendizaje temprano.
La educación prenatal puede ser especialmente útil para los padres primerizos, ya que
les permite aprender sobre el embarazo, el parto y el cuidado de un bebé. Las clases
están diseñadas para hacer frente a las necesidades físicas y emocionales de los padres a
medida que progresa el embarazo. Todas las sesiones destacan especialmente las
necesidades de la madre y el feto durante cada etapa del embarazo y ofrecen consejos
sobre nutrición, las actividades que se deben evitar, y el descanso adecuado.
Mediante la educación prenatal también se destaca el cuidado de los bebés. Las sesiones
enseñan lo esencial, como por ejemplo primeros auxilios, cambio de pañales,
alimentación y cómo bañar al niño. La lactancia materna es otro tema común en las
sesiones de educación prenatal. Los instructores guían a la madre en la forma de
amamantar adecuadamente a un niño y la fisiología de la lactancia materna.
Las clases de desarrollo prenatal son otra forma de educación neonatal. Estas sesiones
se centran en la educación del feto. La teoría detrás de este enfoque es que durante su
desarrollo, el feto aprende constantemente, mientras que en el útero, su exposición a
diferentes sonidos, olores y tactos ayuda al avance del bebé.
Lo primero que una madre puede hacer es acercar unos altavoces pequeños a su
estomago para que su bebe pueda empezar a escuchar buena música. De esta manera es
posible hacer que el niño pueda empezar a reconocer los sonidos que podrá encontrar en
el mundo.
Otra buena idea es masajear suavemente el vientre de la madre. Se cree que esto ayuda
al niño a aprender a relacionarse con sus padres.
Para que el feto desarrolle mejor sus sentidos, los padres pueden experimentar con
diferentes tipos de alimentos durante todo el embarazo para exponer al bebé a muchos
olores y sabores.
Relacionado
DESARROLLO INFANTIL DESDE EL
NACIMIENTO HASTA LOS 11 MESES
Los seis primeros años de vida de un niño son un maratón espectacular del
desarrollo, tanto a nivel físico y cognitivo como a nivel psicológico y social. Los
niños aprenden a gran velocidad y desarrollan habilidades motoras, sociales y
cognitivas que marcarán su en parte su personalidad futura.
Abundantes frutas y verduras frescas.
Cantidad moderada de carbohidratos complejos (pan, arroz, pasta,
patatas, legumbres).
Un par de porciones diarias de proteínas animales (carne, pescado,
huevo).
Cantidad reducida de grasa total y azúcares refinados.
Leche y derivados: basta con el equivalente a 500-700 ml. diarios.
Pueden tomarse productos desnatados.
Bebidas: agua y zumos naturales. Evitar: refrescos (tienen exceso de
azúcares) y bebidas estimulantes (colas, café, té), pues la cafeína pasa a leche
y el resultado será un bebé inquieto durante varias horas.
No hay más que seguir las sensaciones corporales de hambre y sed para
alimentarse bien. No conviene comer dulces ni picar entre horas. Si se tiene
hambre fuera de hora, se debe recurrir a la fruta.
Por una parte, a que la mente de la madre está muy ocupada en atender
y adaptarse a las necesidades de su bebé.
Por otra, a que durante la lactancia, la vagina está más seca, debido a
las hormonas, lo que se puede solucionar con un lubricante.
Todas estas dificultades deben ser comentadas por la pareja para que puedan
decidir juntos.
Anticoncepción y lactancia materna
Durante milenios, la lactancia materna ha sido el único medio para espaciar
los hijos. Cuando la lactancia materna empezó a decaer y aún no había
anticonceptivos, las mujeres tenían los hijos muy seguidos. Empezó a dudarse
de la eficacia de la lactancia materna como anticonceptivo.
Sin embargo, la eficacia de la lactancia materna exclusiva como método
anticonceptivo es similar a la del preservativo, con determinadas
condiciones.
Para que la eficacia de la lactancia materna exclusiva sea similar a la del
preservativo deben cumplirse 4 condiciones:
Lactancia materna
La lactancia exclusivamente materna durante los primeros seis meses de vida
aporta muchos beneficios tanto al niño como a la madre. Entre ellos destaca la
protección frente a las infecciones gastrointestinales, que se observa no solo
en los países en desarrollo, sino también en los países industrializados. El
inicio temprano de la lactancia materna (en la primera hora de vida) protege al
recién nacido de las infecciones y reduce la mortalidad neonatal. El riesgo de
muerte por diarrea y otras infecciones puede aumentar en los lactantes que
solo reciben lactancia parcialmente materna o exclusivamente artificial.
La leche materna también es una fuente importante de energía y nutrientes
para los niños de 6 a 23 meses. Puede aportar más de la mitad de las
necesidades energéticas del niño entre los 6 y los 12 meses, y un tercio entre
los 12 y los 24 meses. La lecha materna también es una fuente esencial de
energía y nutrientes durante las enfermedades, y reduce la mortalidad de los
niños malnutridos.
Las madres y las familias necesitan apoyo para que sus hijos reciban una
lactancia materna óptima. Entre las medidas que ayudan a proteger, fomentar y
apoyar la lactancia materna destacan:
Alimentación complementaria
Alrededor de los seis meses, las necesidades de energía y nutrientes del
lactante empiezan a ser superiores a lo que puede aportar la leche materna,
por lo que se hace necesaria la introducción de una alimentación
complementaria. A esa edad el niño también está suficientemente desarrollado
para recibir otros alimentos. Si no se introducen alimentos complementarios
alrededor de los seis meses o si son administrados de forma inadecuada, el
crecimiento del niño puede verse afectado. Los principios rectores de una
alimentación complementaria apropiada son:
Alimentación en circunstancias
extremadamente difíciles
Las familias y los niños en circunstancias difíciles necesitan una atención
especial y apoyo práctico. Siempre que sea posible, las madres y los niños
deben permanecer juntos y tener el apoyo que necesiten para recibir la opción
alimentaria más apropiada entre las disponibles. La lactancia materna sigue
siendo la modalidad de alimentación preferida en casi todas las circunstancias
difíciles, tales como:
La OMS recomienda actualmente que todas las personas infectadas por el VIH,
incluidas las embarazadas y las madres que amamantan a sus niños, tomen
medicamentos antirretrovíricos de por vida en cuanto sepan que han contraído
la infección.
La OMS ha creado una Red para monitorear y apoyar la aplicación del Código
Internacional de Comercialización de los Sucedáneos de la Leche Materna y
las posteriores resoluciones pertinentes de la Asamblea Mundial de la Salud. El
objetivo de la Red, denominada NetCode, es proteger y fomentar la lactancia
materna, velando por que los sucedáneos de la leche materna no se
comercialicen de forma inapropiada. Concretamente, NetCode está creando
capacidad en los Estados Miembros y la sociedad civil para reforzar las
legislaciones nacionales relativas al Código, monitorear su cumplimiento y
tomar medidas para detener todas sus violaciones.
Si bien muchos programas de crianza surgen por iniciativa de las agencias de salud y
protección infantil, el papel de las escuelas resulta fundamental para involucrar a los
hermanos menores y servir como núcleo de apoyo a los grupos de crianza. Además, las
agencias educativas pueden asociarse con los programas comunitarios de cuidado
infantil para promover el aprendizaje temprano. Si comienzan pronto, ayudarán a
garantizar continuidad durante los primeros años.
6. Integrar a los niños con discapacidad y llegar a los más vulnerables. Todos los
niños tienen derecho a acceder a los programas para la primera infancia. A medida que
se expande el prescolar, debemos asegurar que se incluya en ellos a los niños con
discapacidad y que los profesores y administradores estén preparados para garantizar su
éxito. Al mismo tiempo, el número cada vez mayor de situaciones conflictivas que se
presentan en el mundo, como la desintegración familiar y la creciente migración,
dificultan el acceso a los programas para la primera infancia.
Asegurar protección y seguridad es una necesidad básica y un componente fundamental
del cuidado afectuoso. El compromiso y la sensibilidad hacia los niños vulnerables
deberían ser una prioridad. La educación y la protección infantil van de la mano,
particularmente en los primeros años.
Así, mientras avanzamos en este nuevo año, celebremos el interés cada vez mayor que
suscita la primera infancia y promovamos el mejor de los cuidados para los niños
pequeños. Podemos comenzar reafirmando la necesidad de aunar esfuerzos entre
múltiples entidades para asegurar un desarrollo infantil saludable y exitoso en el seno de
familias sólidas y afectuosas.
El nuevo paradigma educativo que se construye en el país, tiene como centro al ser
humano como ser social, capaz de responder y participar activamente en la
transformación de la sociedad en la que vive. En este sentido, se concibe la
educación como un continuo de desarrollo del ser social que atiende los procesos de
enseñanza y aprendizaje como unidad compleja de naturaleza humana total e
integral; de esta forma los niveles y modalidades se corresponden a los momentos
del desarrollo propio de cada edad en su estados físico, biológico, psíquico, cultural,
social e histórico, en períodos sucesivos donde cada uno engloba al anterior para
crear las condiciones de aptitud, vocación y aspiración a ser atendidas por el
sistema educativo. Tal como lo establece el artículo 103 de la CRBV.
Sociales y económicos
- Incide sobre la población de más alta vulnerabilidad; así como contribuye en la
reducción de la desigualdad social, cultural, económica y de género.
- Favorece la formación integral del ciudadano que se inicia desde los primeros
años de vida, ya que proporciona la posibilidad de vivir experiencias significativas
orientadas hacia la convivencia, el respeto por la personalidad y la cultura del otro.
Políticos
Educativos
3. Políticas y estrategias
Políticas de Estado
- Seguridad Alimentaria.
Estrategias
Todo ello, para garantizar a los niños y niñas entre cero y seis años los derechos
fundamentales, conforme a la Constitución de la República Bolivariana de
Venezuela
Aun cuando los niños y niñas del nivel maternal serán atendidos por la vía
institucional en los centros de Educación Inicial, prevalecerá su atención por la vía
no convencional, a través de orientaciones directas a la familia, en centros
comunitarios (ludotecas y centros de atención integral) y a través de medios de
comunicación masiva y alternativa (radio, televisión, material impreso). El nivel
maternal incluye la orientación a las mujeres embarazadas en las áreas de salud,
alimentación y estrategias para favorecer el desarrollo de manera que al nacer el
niño y la niña cuenten con potencialidades que les permitan avanzar en su
desarrollo integral.
El nivel preescolar se orienta a niños y niñas desde los tres años hasta cumplir los
seis años o hasta su ingreso a primer grado de Educación Básica, al igual que la
fase maternal ofrece atención en instituciones educativas, en la familia y en la
comunidad. En este nivel se continúa con la atención integral del niño y la niña,
fortaleciendo el área pedagógica ejecutada por distintos actores educativos o
personas significativas, los cuales promueven experiencias de aprendizaje
orientadas a las áreas cognoscitiva, del lenguaje, física, psicomotora, sociales,
morales y emocionales, que faciliten el desarrollo pleno de las potencialidades de la
niña y el niño, para que puedan encarar con éxito la escolarización de la Educación
Básica.
La Educación Inicial, en los niveles maternal y preescolar, se ofrece a través de: (a)
atención convencional, institucionalizada en: maternales, preescolares, centros de
educación inicial y otros servicios e instituciones de atención al niño y la niña,
incluyendo los sostenidos por las empresas para la atención integral de las hijas e
hijos de los trabajadores y los de coordinación interinstitucional; (b) atención no
convencional que se desarrolla en locales y espacios diversos que incluyen
ambientes comunitarios, familiares, ludotecas, centros comunitarios de atención
integral y arreglos espontáneos de cuidado infantil.
Promover el aprendizaje y desarrollo del niño y la niña entre cero y seis años, como
seres sociales, personas y sujetos de derechos, partícipes activos de su proceso de
formación integral, miembros de una familia y una comunidad que poseen
características personales, sociales y culturales particulares.
Dentro de esta concepción el entorno del niño y la niña se aprecia con un sentido
ecológico, siguiendo a Brofembrener (1987), considerando todo lo que los rodea y
los afecta directa e indirectamente: la familia, los centros de cuidado, los centros
de Educación Inicial, los adultos significativos, la comunidad, la garantía de sus
derechos, la cultura, los medios de comunicación social, las previsiones y acciones
para la atención integral, además de los espacios físicos, sociales y naturales que
condicionan su desarrollo.
A través de este proceso se adquieren los patrones básicos de relación entre los
que cabe destacar: la identidad (autoconcepto, rol sexual, pertenencia de grupo y
nación), el apego, el autocontrol, la cooperación y la solidaridad, la aceptación, la
afiliación, la amistad, la apropiación de la cultura propia y la diversificación de las
relaciones sociales.
La adecuada socialización del niño y la niña es uno de los más importantes
resultados que la sociedad exige de la familia y de la institución educativa y se va
construyendo a través de las relaciones que establece con sus familiares, con otras
personas y con un entorno educativo y social favorable. Mediante este proceso el
niño y la niña internalizan pautas, normas, hábitos, actitudes, valores que rigen la
convivencia social.
El elemento esencial del proceso de socialización son el propio niño y la propia niña,
su capacidad para relacionarse con el entorno e ir accediendo gradualmente a
niveles de mayor conocimiento y de nexos sociales cada vez más complejos, a
través de una interacción dinámica. Su propia actividad, la de sus pares y la de los
adultos responsables de su desarrollo facilitarán la construcción de nuevos patrones
sociales.
Cabe destacar el artículo 81 de la CRBV, que incorpora los derechos de las personas
“con discapacidades al ejercicio pleno y autónomo de sus capacidades y a su
integración familiar y comunitaria…el respeto a la dignidad humana… su formación
y capacitación…”. Igualmente el artículo 9 de la misma Constitución se refiere al
castellano como idioma oficial de los venezolanos y los idiomas indígenas como
oficiales en los pueblos indígenas “por constituir patrimonio cultural de la nación y
la humanidad”; así como, el artículo 121 señala el derecho de los pueblos indígenas
“a mantener y desarrollar su identidad étnica y cultural, cosmovisión, valores...
tienen derecho a una educación propia y a un régimen educativo intercultural y
bilingüe, atendiendo a sus particularidades socioculturales, valores y tradiciones.”
Esto permite afirmar que la Educación Inicial está orientada hacia el desarrollo de la
persona y la universalización de los derechos fundamentales, desde una perspectiva
humanista social. La población infantil entre cero y seis años, objetivo de la
Educación Inicial, es el grupo etário en cuya etapa de vida se estructuran los
esquemas de acción en todas las áreas del desarrollo humano que lo acompañarán
durante toda su vida.
- Hacer: para influir en el entorno hacen falta técnicas y métodos, utilizados con
intencionalidad.
- Ser: la síntesis de los tres pilares anteriores, lo que demuestra que el ser humano
es la construcción de las experiencias de toda una vida.
De esta forma se propicia el desarrollo del niño y la niña, como seres sociales,
orientándolos, desde sus primeros años hacia la toma de decisiones pertinentes y
dirigidas a la búsqueda del bienestar y mejoramiento de la calidad de vida. El
enfoque sobre el aprendizaje significativo en la Educación Inicial se basa en lo
planteado por Ausubel y sus colaboradores (Ausubel, Novak y Hanesian, 1978), que
se define como el proceso mediante el cual un sujeto incorpora a su estructura
cognitiva, nuevos conceptos, principios, hechos y circunstancias, en función de su
experiencia previa, con lo cual se hace potencialmente significativo. En ese proceso,
el aprendiz logra relacionar la nueva información, en forma racional y no arbitraria,
con sus conocimientos anteriores, de tal manera, que la nueva información es
comprendida y asimilada significativamente.
De esta manera, los ejes del currículo, son puntos de referencia para el trabajo del
docente y de otros adultos significativos que atienden niños y niñas entre cero y
seis años. El desarrollo pleno e integral es la mejor forma de prevenir la aparición
posterior de los problemas que los ejes vienen a atender. En consecuencia, los ejes
curriculares, consideran aspectos integrados y diferenciados que permean el
proceso de aprendizaje del niño y la niña, en acción conjunta con la familia y la
comunidad, de manera que no enfrenten situaciones contradictorias entre su
entorno familiar y el ambiente educativo.
Por otra parte, el eje inteligencia está orientado hacia el desarrollo intelectual, que
se refiere, fundamentalmente, al desarrollo de la percepción y del pensamiento,
siempre en estrecha interrelación con las áreas motora, social, emocional y
lingüística. Igualmente, el desarrollo intelectual está estrechamente vinculado a los
procesos cognitivos, porque es a través de las sensaciones, de la percepción y de
las representaciones, que se forman las primeras ideas, las concepciones acerca del
mundo, se crean, además, las bases para la imaginación y la creatividad.
La vinculación de los tres ejes del currículo en forma coherente se produce porque
la esfera afectiva, las motivaciones, los intereses, ejercen una gran influencia en la
realización de actividades y en el planteamiento y solución de problemas,
elementos esenciales en el desarrollo del pensamiento. Por su parte, las actividades
lúdicas planificadas en la acción pedagógica, son fundamentales para el desarrollo
cognoscitivo e intelectual, y si se desarrollan en un ambiente de afectividad
propiciarán la imaginación, la creatividad, a la vez que el esfuerzo y la dedicación.
Es así que la Educación Inicial, para cumplir con sus objetivos desarrolla su
componente pedagógico en atención a la integración de ejes curriculares y
aprendizajes fundamentales.
En este sentido, se define el perfil del niño y la niña que egresa de Educación
Inicial, específicamente del nivel preescolar en función de cuatro aprendizajes
fundamentales: aprender a conocer, aprender a hacer, aprender a convivir y
aprender a ser, señalados en el Informe a la UNESCO de la Comisión Internacional
sobre la Educación para el siglo XXI (1996). Asumiendo el “aprender a ser” como
síntesis de los anteriores aprendizajes.
El niño y la niña:
El niño y la niña:
El niño y la niña:
- Desarrolla una conciencia ecológica de amor por la naturaleza, por las personas y
por su entorno particular.
- Manifiesta sentimientos positivos hacia las personas del otro sexo, de respeto y
solidaridad.
Para cumplir con sus objetivos, en sus dos niveles, maternal y preescolar, la
Educación Inicial, utiliza la atención convencional y no convencional. En este
sentido, la acción pedagógica es ejecutada en el marco del aula, de la familia y de
la comunidad, a través de distintos actores educativos o personas significativas que
se relacionan con los niños y niñas. Además del maestro o la maestra, intervienen
los padres y otros miembros de la familia, madres voluntarias y cuidadoras, vecinos
que promueven acciones sociales y culturales, otros adultos, adolescentes, niños y
niñas.
Por ello, una de las funciones de los centros es activar sus comunidades educativas
para convertirlas en ejes de confluencia de familias, niños, niñas, jóvenes,
profesionales, docentes y miembros de la comunidad, para que verdaderamente
sean ámbitos que favorezcan la socialización y donde se complementen los
procesos de aprendizaje ya iniciados en el hogar. Asimismo, para favorecer el
desarrollo local-comunitario, desde la escuela como centro pedagógico, cultural,
social, deportivo, donde las organizaciones de base social tienen un escenario para
su desarrollo.
La atención no convencional
Las estrategias pedagógicas son: visita casa por casa con mochilas o bolsos que
contienen material lúdico, reuniones grupales de formación a las familias, atención
a niñas y niños con sus familiares adultos en las ludotecas, intercambio de
experiencias, incorporación de pasantes de las universidades y colegios
universitarios, programas radiales, micros de televisión y material impreso para la
formación a las familias y adultos significativos.
El horario de atención a las familias, a las madres cuidadoras y a los niños y niñas,
así como los espacios comunitarios, se organiza de manera flexible atendiendo
tanto a las necesidades y características de la población a atender, como a las
expectativas y posibilidades del medio circundante.
- Atiende a niñas y niños en la fase maternal (cero a tres años) y la fase preescolar
(tres a seis años o cuando ingresa al primer grado de Educación Básica).
- Ofrece atención integral: educación, salud, alimentación, recreación y protección
legal.- Ofrece atención a las
- Promueve y se integra en una red solidaria para la atención integral infantil donde
participan activamente la familia y la comunidad.
- Cuenta con una estructura física acorde a las características de la población que
atiende, a las exigencias educativas del nivel y del contexto donde se ubica.
- Posee recursos materiales que responden a las características de los niños y niñas
(según su desarrollo), a los requerimientos del currículum y del entorno
sociocultural.
- Una matrícula actual que supera al millón de niños y niñas de cero a seis años a
través de la atención convencional y no convencional.