A continuación, se mostrarán ejemplos de los museos de arte los cuales se encuentran en la república mexicana e internacionales que servirán como referencias para el diseño. La estructura es el soporte de los edificios y construcciones, su esqueleto, lo que hace físicamente posible la existencia de la arquitectura. La finalidad última de la arquitectura es ser construida, construir aquello que se proyecta, para poder ser utilizado, aprovecharnos de lo que nos ofrece y, en definitiva, que tenga sentido. No se puede concebir la arquitectura sin la presencia de la estructura. La estructura debe formar parte de la idea generadora del proyecto, tanto como el lugar, el programa, la función, la orientación etc. Ya que va a condicionar en gran medida el resto de los aspectos del edificio. Es por ende que La arquitectura de los museos ha adquirido una importancia creciente a lo largo de los siglos, especialmente en los últimos tiempos. Un desafío para la arquitectura de los museos es el propósito diferente del edificio. La colección del museo debe conservarse, pero también debe ser accesible al público. El control del clima puede ser muy importante para los objetos en la colección. En la arquitectura del museo, dos puntos de partida opuestos pueden colisionar, lo que a veces puede ser difícil de reconciliar. Por otro lado, debe tener en cuenta las colecciones y su almacenamiento, transporte y exposición, y las normas de seguridad para el público y los empleados. Por ejemplo, algunos objetos requieren la preservación de la humedad y el calor que son dañinos para los humanos, y algunos objetos deben mantenerse tan bajos que causen problemas para las exhibiciones. Los museos a menudo se consideran objetos de diseño arquitectónico desafiantes e interesantes ya que combinan los requisitos visuales y de sostenibilidad del edificio público y los complejos aspectos funcionales y técnicos.