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TEMA V DEL PROCEDIMIENTO ORDINARIO

 El Procedimiento ordinario.

El proceso laboral se caracteriza por su gratuidad, simplicidad y celeridad. La celeridad del


proceso laboral se manifiesta a través de la brevedad de los plazos para el ejercicio de las
acciones y la administración de la justicia; la restricción de los recursos contra las
sentencias, prohibición del recurso de oposición y el papel del juez en la instrucción del
proceso laboral, ordenando todas las medidas que considere oportunas y positivas al
proceso.

Es el procedimiento utilizado en las acciones que “tipifican” los conflictos comunes de


derecho del trabajo; tiene dos fases; por un lado, la preliminar; y por otro; la audiencia de
conciliación y el procedimiento de juicio.

El Juicio Ordinario Laboral, es el Juicio de conocimiento, establecido desde el año 1947 en


el Código de Trabajo, para la tramitación y solución judicial de los Conflictos Individuales
y Conflictos Colectivos de carácter Económico Jurídico, que surjan entre trabajadores y
patronos, así como también, los conflictos contenciosos en materia de Previsión Social,
derivados del Instituto Guatemalteco de Seguridad Social; y todos aquellos asuntos de esta
materia que carezcan de procedimiento determinado, en el Código de Trabajo.

Es un proceso que se caracteriza por la prevalecía de los Principios Procesales de: Impulso
Procesal de Oficio, Inmediación y Oralidad; los cuales garantizan el ejercicio de los
Derechos Laborales en Guatemala y el cumplimiento del Mandato Constitucional para el
Organismo Judicial, la aplicación de una Justicia pronta y cumplida.

El Procedimiento Ordinario, es el procedimiento de derecho común. Conforme


disposiciones del artículo 486 del Código de Trabajo, en las materias relativas al trabajo y
a los conflictos que sean su consecuencia, ningún acto de procedimiento será declarado
nulo por vicio de forma.

En los casos de omisión de una mención substancial, de mención incompleta, ambigua u


oscura que impida o dificulte el ejercicio del derecho de defensa o la sustanciación y
solución del asunto, los tribunales de trabajo pueden de oficio, o a solicitud de parte
conceder un término de no más de tres días a quien corresponda, para la
nueva redacción o la corrección del acto viciado, cuando esto último sea posible.

La nulidad por vicios no formales sólo puede ser declarada en los casos de
irregularidades que perjudiquen derechos de las partes o que impidan o dificulten la
aplicación de la ley.

Es el que se aplica a todos los conflictos salvo que la ley diga que ese conflicto estará
regido por un procedimiento diferente. Ese procedimiento está contemplado en el código de
Trabajo en los artículos 508. Hay otras disposiciones que le son aplicables.
El procedimiento empieza con el apoderamiento del tribunal. Art. 508, en toda materia
ordinaria relativa a conflictos jurídicos, la acción se inicia mediante demanda escrita de
la parte que reclama dirigida al juez del tribunal competente y entregada al secretario de
dicho tribunal con los documentos que la justifique, si los hay, de todo lo cual se
expedirá recibo.

Se hace por una demanda escrita que se deposita en la secretaría del tribunal. Esa demanda
no puede ser verbal, pero el trabajador puede hacerse asistir por el secretario del tribunal.

 Su Semejanza al Derecho Común: (Público, Contradictorio).

En términos generales, las disposiciones del derecho común son aplicables en los contratos
de trabajo a falta de norma expresa en sentido contrario. Las normas del derecho común son
aplicables en materia laboral a falta de disposiciones especiales. No basta invocar las reglas
sobre pruebas en materia civil ordinaria para dar por inexistente un contrato regido por la
ley de trabajo

En los conflictos de derecho común, el objeto se halla dentro de una órbita de carácter
patrimonial que atañe al interés individual y privado de las partes; en tanto que en los
conflictos laborales, el eje lo constituye el trabajo como actividad humana y personal que
excede del margen patrimonial; en los conflictos privados, la contienda se reduce a la
persona de los litigantes; en cambio, en el conflicto de trabajo se produce una especie de
despersonalización de las partes; la transcendencia o repercusión que el conflicto del
trabajo genera en el medio social difiere objetivamente de la que promueven los conflictos
de Derecho Privado; las partes no están situadas en un plano de absoluta igualdad, como en
el conflicto común; sino que, generalmente, existe entre ellas una chocante desigualdad
económica.

El Código Laboral establece en su art. 706, que son comunes a los tribunales de trabajo, en
cuanto sean compatibles con la organización y competencia de éstos, las disposiciones de
los artículos del 1 al 10, 14 al 20 y 24 al 26, todos inclusive, de la ley de Organización
Judicial, así como las de los capítulos III, IV, VI, X, XX, XXII y XXIII de la misma ley,
con las modalidades que se especifican a continuación:
Habrá un juzgado de trabajo en el Distrito Nacional, dividido en seis salas y un juzgado de
trabajo en el Distrito Judicial de Santiago dividido en dos salas.
Cada sala estará presidida por un juez que impartirá justicia conforme a las disposiciones de
éste Código. El juzgado de trabajo tendrá un juez presidente cuyas atribuciones, además de
las previstas en otras disposiciones de este Código, son: 1. Asignar las demandas, rotativa y
cronológicamente, a cada sala del juzgado. 2. Ejercer las funciones administrativas propias
del juzgado; 3. Conocer de las ejecuciones de las sentencias; 4. Suplir las ausencias
temporales de cualquier juez presidente de sala del juzgado de trabajo; 5. Mantener la
vigilancia necesaria para que los jueces presidentes cumplan con las obligaciones que les
corresponden.

Diferencias:
Oralidad: La oralidad está presente en los procedimientos ante las jurisdicciones de trabajo
toda vez que el demandante puede oralmente apoderar al tribunal (artículo 510 del Código
de Trabajo; el demandado puede igualmente contrademandar oralmente en audiencia
(artículo 515 del CT); el preliminar de conciliación se desarrolla oralmente (artículo 516 al
519 del CT).

Las partes en virtud de este principio han de plantear al tribunal a viva voz, sus
pretensiones en audiencia, reduciéndose la intervención de las piezas escritas a los escritos
sustantivos de dichas pretensiones” este es un principio también de carácter universal en
nuestra comunidad y sistema jurídica, todas la materias tienen este principio. La oralidad
permite que los casos sean explicados de manera oral y las discusiones orales a su vez
permiten a los escuchas que llegan por el principio de publicidad forjarse una idea de lo que
sucede en el juicio. Tiene un alcance procesal, porque las mayorías de las fases están unidas
al principio: ejemplo cuando se llegar a la audiencia de conciliación es oral, prueba y fondo
es oral, las audiencias en los recursos es oral y así sucesivamente.

La oralidad es un elemento propio y exclusivo de las normas de procedimiento, y como tal


constituye un instrumento más del proceso admitido por el Legislador a fin de hacer
efectiva la aplicación de las normas sustantivas y a fin de hacer viable la solución de los
conflictos entre las partes; pero, sobre todo, la oralidad constituye un elemento clave del
proceso para el establecimiento de la verdad material.

La oralidad, junto ciertos principios y elementos del proceso laboral, tales como la
inmediación, la concentración, la celeridad, la simplicidad, la gratuidad, el impuso oficioso
(llamado también “papel activo del juez laboral”), constituyen las herramientas creadas por
el Legislador, y alimentadas por la Doctrina y la Jurisprudencia, para hacer extensivos al
procedimiento ante los tribunales la esencia social de los principios que inspiran la parte
sustantiva del Derecho del Trabajo, muy especialmente el principio de la primacía de la
realidad sobre lo escrito, y el principio protector o tutelar del trabajador.

Lo que da origen a la oralidad en el proceso laboral es el carácter social del objeto del
Derecho Laboral: El trabajo humano. La naturaleza de las reclamaciones laborales y las
condiciones presumiblemente precarias de quien demanda es lo que impregna de socialidad
al proceso laboral, y hace que dicho proceso deba ser rápido (celeridad), sencillo
(simplicidad), económico (gratuidad) y tutelar (impulso oficioso).

La oralidad en un sentido absoluto, es el carácter del procedimiento que no deja ninguna


parte a los escritos (no exige, por ejemplo, ningún intercambio de conclusiones escritas
antes o durante la audiencia) y que reposa exclusivamente sobre simples intercambios
verbales, dados principalmente durante los debates en audiencia. Indica la importancia
relativa que reviste el elemento verbal en el proceso, muy especialmente el de la audiencia,
en relación a los intercambios de escritos.

La oralidad es una característica propia del derecho laboral e implica que las actuaciones y
diligencias judiciales, la práctica o discusión de pruebas y las audiencias, se efectúen
oralmente.
Simplicidad. Consiste en seguir procesos simplificados que, no solo han sido bien
diseñados, sino que también se mantienen regularmente.

No hay formas sacramentales, ni rigorismos procesales propios de la materia civil, de ahí


que: a) ningún acto de procedimiento será declarado nulo por vicio de forma, art. 468. En
ese tenor, la nulidad por vicios formales sólo puede ser declarada en los casos de
irregularidades que perjudiquen derechos de las partes o que impidan o dificulten la
aplicación de la ley, art. 469; b) es optativo de toda persona que figure como parte en un
proceso ante los tribunales de trabajo actuar por sí misma o por mandatario, art. 470; c) sólo
procederá la nulidad de una diligencia o actuación verificada antes de la expiración del
plazo legal que deba procederle o después de expirado aquel en el cual haya debido ser
verificada, art. 471: Primero, cuando la inobservancia del plazo perjudique el derecho de
defensa de una de las partes o derechos consagrados en el código de trabajo con carácter de
orden público; segundo; cuando impida o dificulte la aplicación del código o de los
reglamentos de trabajo.

Celeridad del proceso. La celeridad constituye un imperativo de todo litigio, pero en el


laboral tiene una mayor dimensión, pasando a ser la síntesis, la meta y un medio de medios,
los beneficios de la ley laboral cobran sentido y se perciben de inmediato, de otro modo se
desnaturaliza su razón de ser y ya no satisfacen los requerimientos ordinarios del
trabajador.

El plazo para que las Cortes de Trabajo pronuncien sentencias decidiendo los asuntos
puestos a su cargo está regido por el artículo 638 del Código de Trabajo, y el mismo se ha
instituido para dar celeridad en la solución de las demandas laborales, pero no como
condición para la validez de las sentencias que dictaren esos tribunales; la celeridad
constituye, junto a otras, una peculiaridad, derivada o correlato de los principios del
proceso laboral

La celeridad es conjunto de atributos, íntimamente ligados entre sí y virtualmente


inseparables, que debe conducir a un proceso ideal en el que el máximo de actos pueda ser
cumplido en un mínimo de diligencias, presididas personalmente por el propio juez y
ejecutables en forma prevalentemente oral, en aras de lograr una resolución no sólo justa y
equilibrada, sino pronta, habida cuenta de la naturaleza alimentaria de los derechos
patrimoniales del trabajador y la urgencia social que unánimemente se les reconoce.

La celeridad es una peculiaridad o rasgo característico del proceso laboral, matizada por la
brevedad de los plazos para el ejercicio de la acción y para la administración del
procedimiento.

Lo que se busca con este principio es la restitución del bien jurídico tutelado, objeto de la
transgresión, en el menor tiempo posible.

Es básico para cumplir con la finalidad del derecho del trabajo y de una buena
administración de justicia, así el secretario cuando recibe la demanda con la documentación
que la justifique, art. 472, en las 48 horas siguientes a la entrega, el presidente del tribunal
designará la sala a conocer la demanda y a las 48 horas subsiguientes dictarse autorización
para la notificación, art. 473 de la misma. El plazo para comparecer en materia ordinaria es
de tres (3) días francos y el tribunal debe dictar la sentencia en un plazo no mayor de 15
días luego del vencimiento de los plazos de los escritos ampliatorios de observaciones y
argumentaciones. Las sentencias de la Corte de Trabajo deben pronunciarse en el término
de un mes.

Conocimiento de la audiencia de conciliación previo al juicio de fondo. La conciliación


es una etapa previa a la discusión del caso en que el tribunal va a tratar de que las partes se
concilien. Eso es previo al conocimiento del fondo del asunto y además es obligatorio. Las
partes no se pueden poner de acuerdo para obviar esta parte del proceso.

El art. 487 del Código Laboral dispone, ninguna demanda relativa a conflictos de trabajo
puede ser objeto de discusión y juicio sin previo intento de conciliación, salvo en materia
de calificación de huelgas o paros y de ejecución de sentencias.
En las materias sumarias el intento de conciliación y la discusión se realizan en la primera
audiencia.
Se reputan sumarias las materias relativas a la ejecución de convenios colectivos y de
laudos sobre conflictos económicos, a los ofrecimientos reales y la consignación y al
desalojo de viviendas.

Práctica consistente en utilizar los servicios de una tercera persona neutral para que ayude a
las partes en un conflicto a allanar sus diferencias y llegar a una transacción amistosa o a
una solución adoptada de común acuerdo.

Constitución del tribunal. Los tribunales de trabajo son entidades jurídicas donde se
discuten y solucionan los conflictos laborales que no pudieron ser resueltos mediante
conciliación. Las jurisdicciones están constituidas por el Juzgado de Trabajo, que es el
tribunal de primera instancia.

A la vez está integrado por un juez que es designado por la Suprema Corte de Justicia y dos
vocales que fungen como delegados sectoriales, uno representa al sector de los trabajadores
y el otro al de los empleadores. Su papel es de conciliador, no participan en la elaboración
de las sentencias, pero sin su presencia no se constituye el tribunal.

Las decisiones que adopta el Juzgado de Trabajo son recurridas en apelación ante la Corte
de Trabajo, entidad superior. Esto significa que las resoluciones que tome el tribunal
inferior deben ser corregidas por el superior, conforme a los principios del derecho. El
recurso de apelación se solicita cuando la demanda del trabajador excede de un monto de
10 salarios mínimos.

 Art. 508.- En toda materia ordinaria relativa a conflictos jurídicos, la acción se


inicia mediante demanda escrita de la parte que reclama dirigida al juez del tribunal
competente y entregada al secretario de dicho tribunal, con los documentos que la
justifique, si los hay, de todo lo cual se expedirá recibo.
En las materias, sumarias de introducción, sustanciación y juicio las demandas están
sometidas a lo prescrito en el Título VII de este Libro

 Art. 509.- El escrito de demanda debe expresar: 1. La designación del tribunal ante
el cual se acude y el lugar donde funcione; 2. Los nombres, profesión, domicilio
real y menciones relativas a la cédula del demandante, así como la indicación
precisa de un domicilio de elección en el lugar en que tenga su asiento el tribunal
amparado; 3. Los nombres y residencias de los empleadores, o los domicilios de
elección de éstos, si existe contrato de trabajo escrito en el cual conste dicha
elección; 4. La enunciación sucinta, pero ordenada y precisa, de los hechos, la del
lugar donde han ocurrido y su fecha exacta o aproximada; 5. El objeto de la
demanda y una breve exposición de las razones que le sirven de fundamento; 6) La
fecha de la redacción del escrito y la firma del demandante, o la de su mandatario, si
lo tiene; y si no tiene ninguno ni sabe firmar, la de una persona que no desempeñe
cargo en el tribunal y que, a ruego suyo, lo haga en presencia del secretario, lo cual
éste certificará.

Aportación de pruebas mixtas


La prueba constituye un medio eficaz en la vida jurídica, puesto que se puede afirmar que sin su
existencia el orden jurídico sucumbiría a la ley del más fuerte, dado que no sería posible la solución
de ningún caso. Esta es un deber jurídico para obtener el máximo convencimiento de la verdad y la
legitimidad en la administración de la justicia.

No jerarquía de los medios de pruebas.

Estos son los procedimientos admitidos por la ley, para la presentación de la prueba y mediante los
cuales se trata de establecer la existencia de derecho.

En la misma audiencia de la producción de pruebas, o en la siguiente, si lo avanzado de la hora no


permite hacerlo en ella, se procederá a la discución de las que se hayan presentado así como a las
del objeto de la demanda. Cuando no sea suficiente una audiencia para la producción de las
pruebas, el juez puede ordenar su continuación en una nueva audiencia, en la cual las partes
presentaran sus medios de prueba, concluirán al fondo y el asunto quedará en estado de fallo.

Cada una de las partes, en primer término la demandante, tiene la facultad para hacer sus
observaciones en cuanto a las pruebas producidas, y exponer sus argumentos respecto al objeto
de la demanda.

Las Pruebas no son procesales, pues son, los residuos de los hechos y acontecimiento que se
establecen en justicia, es la fuente, es el hecho anterior al proceso; sin embargo, la articulación al
proceso de estos mediante procedimientos son los medios de pruebas, que si son procesales.

La falta de comparecencia de una de las dos partes a la audiencia de producción y discución de las
pruebas no suspende el procedimiento.

La apreciación de las pruebas, la decisión del caso y la redacción de la sentencia corresponden al


juez quien puede hacer consultas a los vocales acerca de hechos o materias de carácter técnico
que sean del conocimientos de éstos.
El artículo 541 del código de trabajo establece, que la existencia de un hecho o un derecho
contestado en todas las materias relativas a los conflictos jurídico, pueden establecerse por los
siguientes modos de pruebas:

1- las actas autenticas o las privadas,

2- las actas y registro de las autoridades administrativas de trabajo,

3- los libros libretas, registros y otros papeles que las leyes o los reglamentos de trabajo exijan a


empleadores o trabajadores

4- el testimonio,

5- las presunciones del hombre,

6- la inspecciones directa a lugares y cosas,

7- de los informes periciales,

8- la confección, y

9- el juramento.[5]

Estos medios de prueba no son limitativos, sino enunciativos, ya que existen otras disposiciones
que permite comprobar que las partes pueden probar en el proceso laboral, por cualquier medio,
los hechos que justifiquen sus pretensiones.

Por disposición expresa de la ley, en materia de derecho laboral, los jueces gozan de un poder
soberano de apreciación en el conocimiento de estos modos de pruebas. [6]

La admisibilidad de cualquiera de los medios de pruebas señalados en el artículo que antecede,


queda subordinado a que su producción se realice en el tiempo y en la forma determinado por este
código. Los jueces gozan de un poder soberano de apreciación en el conocimiento de estos modos
de prueba.

El principio IX del código de trabajo establece que el contrato de trabajo no es el que consta en un
escrito, sino el que se ejecuta en hechos. Es nulo todo contrato por el cual las partes hayan
procedido en simulación o fraude a la ley laboral. Es decir los hechos sirven de medios de pruebas
para determinar la realidad del contrato.

La parte que se desee hacer valer como de prueba un acta auténtica o privada actas o registros de
las autoridades administrativas de trabajo o libros, libretas, registros o papeles de los señalados en
el ordinal 3o. del artículo 541 está obligada a depositarlos en la secretaría del tribunal de trabajo
correspondiente, con un escrito inicial, según lo prescrito en los artículos 508 y 513.

Brevedad de los plazos procesales,


Principio de la íntima convicción).

Apoderamiento del Tribunal, Procedimiento hasta la audiencia de Conciliación.


Fases del Proceso:

La audiencia de Conciliación.

Ninguna demanda en materia de trabajo, con las excepciones que la


ley prevé, puede ser objeto de discusión y juicio sin previo intento de
conciliación.

La conciliación está a cargo de los vocales del tribunal, y se conoce en


una audiencia previa al conocimiento y discusión de la pruebas,
aunque se reitera en el inicio del procedimiento del juicio.

Luego de leídos los escritos de las partes, el juez precisa los puntos
de controversia y da la palabra a los vocales para que inicien la
conciliación siempre que lo hagan dentro de la prudencia, el buen
juicio y la equidad.

Mientras los vocales están en su actuación de conciliación el juez solo


puede intervenir para mantener el orden de la audiencia

Audiencia de conciliación
En derecho laboral, ninguna demanda relativa a conflictos de trabajo puede ser objeto de discusión
y juicio sin previo intento de conciliación, salvo en materia de calificación de huelgas o paros y de
ejecución de sentencias.
El procedimiento de conciliación está a cargo de los vocales del tribunal, y donde el rol del juez
“está limitado a ordenar la lectura de los escritos de las partes, a mantener la policía de la audiencia
y para advertir a las partes o a los vocales sobre alguna proposición o sugerencia que contravenga
o entre en contradicción con disposiciones legales de orden público e intimándolas a buscar otras
soluciones…34”
Cabe señalar que el empleador está obligado a comparecer a la audiencia o hacerse representar por
otra persona con el debido mandato para ello. La incomparecencia de ambas partes, salvo prueba
en contrario, hace presumir su conciliación y autoriza al juez a ordenar el archivo del expediente

La discusión de las pruebas.

Los medios de prueba en el proceso laboral, son los modos de la


prueba del derecho común: la prueba escrita, la testimonial, las
presunciones del hombre, la prueba directa o comprobación material
de hechos, de lugares o cosas, los informes periciales, la confesión y
el juramento.
Se caracteriza por poseer:
        Libertad de Medios
        Ausencia de jerarquía
        Apreciación soberana de la prueba en el procedimiento de trabajo

Prórrogas y Medidas de Instrucción.

La Sentencia.

El Procedimiento Sumario.

Es el procedimiento que se caracteriza por la brevedad y el conocimiento y fallo de los conflictos


relativos a la ejecución de los convenios colectivos y de laudos económicos, de los ofrecimientos
reales y consignación, el desalojo de viviendas, así como de los conflictos surgidos con las
ejecuciones de las sentencias de los tribunales de trabajo. Los plazos son breves tanto en su
apoderamiento, conocimiento como el fallo de la sentencia, art. 488.

El Procedimiento Especial (Sumarísimo).

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