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Venadita, la llegada.

El 17 de Marzo del año 2020 falleció mi perrita Chihuahueña, era una perrita color café oscuro, con
café claro y tintes de color blanco en sus patitas y pecho, demasiado peculiar y muy distinta a otros
animales de compañía que he tenido, (Todos son muy auténticos y tienen su propia personalidad)
Nos la regalo una tía, la tuvimos cuando tenía pocas semanas de nacida, si no es que días,
inmediatamente me encariñe con ella como ningún otro animal de compañía que antes hubiera
tenido, ella creció y me acompaño durante una etapa muy importante en mi vida, fueron 10 años
aproximadamente, pues en ese entonces tenía cerca de 23 años, en ese tiempo y hasta la fecha creo
que he sido una persona más consciente en muchos aspectos de la vida, durante esa época cambie
varios sistemas de creencias que tenía, ya que si bien mi madre siempre nos inculco el catolicismo,
aprendí que la realidad es otra, discerní muchas dudas y puedo decir que llegue a conectar con mi
yo superior ó con entidades de otras realidades ya que, en cierta etapa de mi vida cuando estaba
en la universidad, tenía una profunda depresión por motivos personales, sentía que no me iba bien
en cuanto a mantener o crear amistades, me sentía solo, y por el otro lado tenía la pregunta que
muchos alguna vez nos hemos hecho, ¿a qué venimos?, ¿qué hago aquí?, ¿por qué me va así?, ella
me acompaño durante todo este proceso, me enseño lo que es el amor incondicional, la paciencia,
apreciar lo que tenemos, ser leal, disfrutar del momento del presente sin tantas complicaciones,
ella era muy cariñosa, super amorosa, querendona e inteligente. Lo reitero como ningún otro
animal de compañía que hubiese tenido, y vaya que toda mi vida ha estado llena de ellos,. Menciono
que con Venadita convivía mucho desde que me la regalaron, cuando me escuchaba llegar en el
carro del trabajo ya me estaba esperando por la ventana de la sala moviendo la cola violentamente
y con las orejas paradas, se veía chistosa por su tamaño, ya cuando me bajaba del auto
inmediatamente se iba a la puerta a recibirme, después de comer me iba un rato a la cama a reposar,
donde ella me acompañaba (la foto del final es un momento de esos), eran momentos muy
especiales que hoy extraño mucho, ya cuando me casé en el año 2017 con una persona super
especial para mi <3 y que me ha ayudado tanto, Venadita tuvo que quedarse afuera con las otras
perritas, de vez en cuando la metía. Menciono que actualmente tenemos 8 entre hembras y machos
de distintas razas, con ella eran 9, (el año pasado murió Mal-hecha tmb, la perrita más viejita, la
guardo con mucho cariño en mi corazón) lamentablemente se fue a la que más amaba, la que más
me correspondía, y no lo digo porque hubiera querido que se fuera otra mascota en su lugar, para
nada, todos guardan un lugar especial en mi corazón. Cuando solíamos ir a caminar los sacábamos
por grupos, ella solo me seguía a mí, la volteaba a ver y veía como me correspondía con su cabecita,
veía en su mirada lo feliz que era y la gratitud que ella tenía por ese paseo, cerca de sus últimos años
de vida me daba pendiente de que cuando se ponía muy contenta comenzaba a toser, como si algo
atorado tuviera, un día le paso que tocio y se agacho como si fuera a expulsar algo, me preocupe,
pero después ella volteo a verme moviendo la cola como diciéndome que eso no importaba, que
está bien y que es feliz, al menos eso fue lo que sentí que me trasmitió, irradiaba felicidad, amor y
sabiduría en cualquier acción. Ese problema que presentaba le pasaba de vez en cuando, cuando se
entusiasmaba más, pensé que no era de importancia.
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Hace un año había ido a cortarse las uñas y limpieza de dientes y el veterinario la vio bien, nos dijo
que estaba sana. Quizá ese problema lo pase desapercibido tiempo después que hasta la fecha no
se si fue la razón de su partida.

Hubo una ocasión en que intentamos cruzarla, buscamos algunos perritos similares a ella, y así fue,
la dejamos cerca de 4 días con su “amado”, un perrito Chihuahua más pequeño que ella, en las fotos
se veía similar a ella, físicamente no, días después en la casa andaba rara, medio chipil, pues el
Veterinario en otra consulta nos había dicho que posiblemente si estaba embarazada, que, si le
sentía algo, ese día durmió con nosotros, le teníamos preparado su cajita por si se aliviaba, y en caso
de ser necesario llamaríamos al veterinario, comenzó a escarbar en las cobijas, tenía calor, pero esa
noche, ni los siguientes días paso nada, fue un embarazo psicológico, solo fue una ilusión. Sentí que
debí de haberla cruzado cuando era más joven, deseaba una descendencia de ella.

Venadita a pocos días de haber llegado a mi vida.

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Un gran ser compasivo, que me acompaño por una etapa importante en vida, fue más que una
mascota de compañía, fue quizá, un alma vieja familiar.

Venadita con síntomas de embarazo, el cual resulto ser ficticio.

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Su Partida.

El día que murió yo estaba trabajando, cuando llegué del trabajo mi hermano no espero a que
entrara a la casa cuando me dio la noticia, ni siquiera le pregunte por que, solo le dije que donde
estaba, ya la tenían envuelta en papel y una bolsa para enterrarla, me la lleve a mi cuarto, la destape
y es aquí donde sentí que todo se venía abajo, no lo podía creer, me decía a mí mismo entre lágrimas,
- ayer estabas bien, contenta, con tu locura natural, que pasó - e inclusive sentí que tenía la
necesidad de intentar revivirla, pero ya tenía horas que se había ido, todo era en vano, desde hace
4 meses he estado viviendo un inmenso duelo, los 2 primeros han sido los más pesados, poco a poco
he sabido sobrellevar su partida.

Mi hermano la encontró tirada en el piso, en el patio, como si estuviese descansando, como si

estuviese dormida, pero al percatarse de que no se movía fue a levantarla y vio que ya no tenía
signos de vida. Fue una muerte inesperada y al parecer súbita.

Decidí llevarla al veterinario de la colonia para que nos diera su punto de vista, el Señor veterinario
muy apenas la agarraba, como si sus dedos fueras unas pinzas, ni siquiera le examino el hocico, ni
me entrego nada escrito, ni nota. (Antes de llevarla mi esposa le pregunto si se la podíamos llevar
para que la revisara, a lo que él dijo que sí, pero tenía un costo) nos dijo que posiblemente haya sido
una torsión gástrica, un paro, o una bacteria, en fin. Que si queríamos saber exactamente que fue
tenía que hacerle una autopsia y que me iba a salir muy cara.

Pensé en la incineración, mi padre desde antes de que yo llegará ya la tenía preparada envuelta para
enterrarla, desde que llegue se la quite y después de ir al veterinario donde me acompaño mi esposa
buscamos un lugar donde la podíamos incinerar, cuando mi Esposa me dijo que mi padre se fue
llorando a la otra casa, ya que él se suele quedar por la noches en otra casa que tenemos, y en donde
hay un patio atrás de aquella casa donde mi padre entierra a nuestras mascotas, me dijo que no
pudo hacer nada por la muerte de Venadita, pero que a él no le gustaría que lo cremaran cuando
muriera, decidimos mejor llevársela.

Efectivamente mi padre la enterró en la otra casa, ahí yace un cementerio de animales de compañía
que hemos tenido a lo largo de la vida, lugar que está enfrente de una casa donde me sobaron de
una muñeca y dónde Venadita nos acompañó hace 2 meses antes de su partida, era la primera vez
que Venadita iba por aquellos rumbos, sin pensar que dos meses después sus restos yacerían en esa
colonia, frente a ese lugar.
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El día antes de su Partida.

Un día antes de su partida mi esposa la metió sin razón alguna, aunque Venadita en un principio no
quería a mi esposa, ya que la gruñía cuando intentaba tomarla, ella rápido se ganó su confianza y
también la amaba. - menciono esto para dar más detalles a lo que paso - Mi abuelita, mis padres y
mi hermano vivimos en la misma casa, ellos en la planta baja, mi esposa y yo en la planta alta, en la
planta alta hay una terraza/patio con mucho espacio toda techada, ahí teníamos a las hembras;
Venadita junto con Malecha, Rubí y Yubarta, esta última tiene cerca de 3 años que se integró, es
una chichuahueña la más pequeña, color café oscuro con tintes en blanco y muy excéntrica, Malecha
es la más longeva, una cruza de chihuahua y dachshund, le encanta estar comiendo a todas horas,
y Rubí una perrita chihuahueña también y muy tímida de color cremita del forje similar a Venadita),
en la planta de abajo hay un patio a un más grande donde mis padres tienen a 5 perros cada uno
con su estilo único y propia personalidad. 2 de ellos son de nosotros (mi esposa y yo).

Nos fuimos a acostar para descansar un rato pues tenía poco que había llegado del trabajo, y
Venadita acompañándonos, llego un momento en que se puso en medio de los dos con las patas
hacía arriba de tal manera de que con la palma de mi mano izquierda le tocaba al mismo tiempo su
pecho y abdomen, paso por mi mente “que voy a hacer cuando ya no estés aquí, cuando este
corazoncito deje de latir”, llego la noche, fuimos a cenar, menciona mi padre que ese día Venadita
no quiso su comida, yo le di un poco de la mía, era chicharrón, lo cual se lo comió encantada, e
inclusive le quito un par de pedacitos de manera muy cómica y chusca que le había dado también a
Dorcy, un gato de mamá de color amarillo y juguetón pero a la vez tosco.

Mi padre les hace higaditos con tortillas, nosotros preferimos darles croquetas y de vez en cuando
les doy comida de la que yo como, pero solo en pequeñas porciones.

Al final del día hacía la hora de dormir la sacamos nuevamente al patio, esta vez fue raro, porque
casi siempre que la sacábamos por la noche ella lloraba en tono aullando porque quería seguir
adentro, esta vez no hizo ruidos, como extraño esos aullidos.
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El día después de su Partida.

Al día siguiente de su partida mi mamá y mi abuelita me dijeron que estuvieron llorando en la noche
por su partida, mi abuelita dice que la perrita se fue a despedir de ella, pues ese día cuando la
metimos efectivamente Venadita fue al cuarto de abuelita a verla un ratito.

Busque información y orientación después de su partida para tratar de calmar mi dolor, no tenía
ganas de comer, sentía que me faltaba la respiración, inclusive tenía sensaciones muy fuertes, de
momentos creía que estaba soñando, ó como si estuviera en este presente pero metido en un largo
sueño. Leí sobre la comunicación de Inter-especies, telepatía animal, que pasa con nuestras
mascotas cuando mueren, tanto científicamente como espiritualmente, leí varios casos, etc.

Bueno otra cosa somos los seres humanos, que estoy convencido de que vinimos a vivir esta
hermosa experiencia en este mundo en 3D, después transcendemos y la vida continua, eso lo se de
manera personal bajo mi experiencia de contacto. Me tocaba averiguar qué tan similar eran los
animales de nosotros en el sentido espiritual.
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Ayuda Espiritual.

Busque a una persona muy espiritual y que conecte con ella en mis momentos de despertar hace
mucho tiempo, recurrí a María, su nombre como mi madre, me ayudo a tranquilizarme, me pidió
fotos de Venadita y su edad, me dijo que Venadita se había sentido inmensamente amada por su
vida aquí en la Tierra y que no tenía ninguna queja, que ella estaba muy feliz y se encontraba con
mucha luz, que ella ahora me estaba enseñando lo que viene siendo el desapego, me aconsejo que
le hablara, que le comentara que si yo lloraba era por que iba a ser difícil para mí vivir el duelo, pero
que yo la dejaba ir en paz. Me comento que el año pasado ella sufrió la perdida de una gatita que
lamentablemente ella no estaba ahí cuando murió, pero que la propia felina le ayudo a dejarla ir e
inclusive que la vio después de su muerte y que le dio señales, lo que viene a continuación es gracias
a la ayuda de María.

Para aplicar su consejo y aparte porque sentía la necesidad de así querer hacerlo, cuando iba a la
terraza sufría demasiado al no verla, ya nada era igual, su chispa que desprendía al escuchar mi voz
o con olerme eran inigualables a ningún otro animal de compañía que hubiese tenido antes, sin
embargo trate de meditar por cortos periodos de tiempo, hacía tiempo que no lo hacía, pero esta
vez aparte le hablaría una vez meditando, agradecerle por estos años de compañía y todo lo que
aprendí de ella, por último, le dije que si quiera me diera una señal para saber que en realidad ella
me escuchaba.

-Esto de la señal lo he aplicado en otra ocasión muy distinta, también la pedí en mi mente, o
telepáticamente, una señal que recibí por otras entidades quizá extraterrestres para confirmar que
yo era una semilla estelar-

Fueron varios días los que salía a hacer lo mismo siempre llorando y pensando el por qué se tuvo
que ir, sobre todo en estos momentos cuando seremos papás, yo quería que ella conociera a mi
niño, Elian, en realidad Venadita era muy importante para mí.

*Elian ha sido ese rayito de luz que después de la partida de Venadita ha llegado a nuestras vidas y
nos ha dado tantas alegrías.
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Llegaron las Señales.

Cuando iba a recoger la ropa limpia del patio en la planta baja ya obscurecido, me quedaba un rato
contemplando el cielo y lamentando la perdida aun llorando, me sentaba en una pila la cual alberga
plantas a su alrededor, ahí estaba René (El más loco de todos juguetón y alegre, una cruza entre
Yorkie ó Schnauzer y tal vez con Chihuahua) y Marshall (Un chichuahua pequeño, de color blanco
con manchas en café que adoptamos junto con Yubarta, algo alegre, muy tierno, pero reservado)
animales de compañía de mi esposa y yo, en un instante teniendo a los dos junto a mi lado a la
altura de mis rodillas consolándome, note como de repente, cuando me vieron aún más decaído y
succionando lágrimas y escurrimiento nasal, (ese sonido que haces cuando lloras y te lamentas) al
momento de hacer ese sonido los dos al mismo tiempo se acercaron más a mí rápidamente, como
si estuviesen sincronizados moviendo sus rabos y tratando de lamerme la cara, sentí como si la vida
fuera un regalo. Ahí tuve una sensación una vez más lo tan fuerte que es el amor incondicional que
un perro te puede dar.

Después vinieron las señales, Soñé con Venadita alrededor de 4 veces, en el primer sueño recuerdo
que ella no movía la cola, estaba tranquila, yo la traía cargada en mi hombro izquierdo, en otro
sueño igual la recuerdo tranquila, yo le hacía cariños estirándole su rostro como se lo solía hacer,
ella estaba tranquila, ese mismo día mi esposa me dijo que no sabe si fue real o solo fue un sueño,
ella vio a Venadita que venía corriendo hacia nuestra habitación en la madrugada, y se subió en
nuestra cama, como lo solía hacer cuando entraba o se metía por sorpresa, y se puso en medio de
los dos, en la cama, mi esposa dentro de esa experiencia se preguntó “¿Quién dejo meter a los
perros?” ella tenía cerca de 2 años convivido con Venadita, mi esposa se puso más triste por mí por
cómo me veía que por Venadita, me sorprendió que haya vivido una experiencia así, aunque de
cierta manera sé que ella es muy sensible y tiene la intuición muy desarrollada, tuve sentimientos
encontrados, tiempo después los sueños que tuve con Venadita no los recuerdo muy bien lo que si
recuerdo es que ya no se veía tan serena, era más la Venadita que me gustaba, la querendona.

Las señales continuaron, y es que ahora con la cuarentena por el COVID-19 tuve 15 días de descanso
forzoso en casa, era un calvario sobrellevar mi duelo, trataba de distraerme haciendo cosas que me
entretuvieran y me alejaran de mi tristeza, un día Yubarta hizo algo que ella nunca hace;

A veces solía cargar a Venadita para darle muchos besos y abrazos, posteriormente cuando la bajaba
pareciera como si cuerda le hubiera dado, salía corriendo como cuete encendido se tratase, con las
orejas hacia atrás, corriendo por todas las partes de la casa, de aquí para allá, hasta que se le pasaba,
un día me asome a la terraza, ahí estaba Yubarta, me vio e hizo lo mismo, solo fue y vino de orilla a
orilla, solo una vez, pero me quede atónito porque jamás lo había hecho ni lo a vuelto a hacer.
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Menciono que a partir de la partida de Venadita hubo cambios permanentes en algunos de los
animales de compañía que tenemos hacía mí, Rubí ahora es un poco más desinhibida, ella tiene una
personalidad muy reservada, pareciera que no le gusta mucho convivir con los humanos para que
no la molesten, no le gusta dar besos, solo muestra su amor cuando no te ve por medio día o un día,
mueve la cola, se acerca y no dura más de dos minutos y se aparta de ti. He notado que ahora es un
poquito más sociable.

Marshall, como si Venadita le hubiera dicho que me amara como ella me amo, pues me sorprendió
que, si bien él está en el patio abajo, ahora cada vez que salgo es el que me muestra más afecto y
se pone super contento, antes no era así conmigo, quizá comprendió lo que paso cuando me vio
llorar, ellos cambiaron.
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Señales y más señales, quizá de otros seres.

Desconcertado y a la vez consciente de mi duelo seguido solía asomarme a la terraza donde ella
permanecía, en el patio de arriba, sintiendo una gran ausencia en mi corazón y una sensación en el
ambiente tétrico cada vez que lo hacía, pues bien estaba siendo consciente de que una parte de mi
se había ido para siempre, un día de esos asomándome al patio del segundo piso de mi casa se ve
el patio de otra casa de enfrente que está deshabitada, una casa de dos pisos también con un patio
considerable dando hacia mi casa, cuando me asomo por la puerta al patio para ver cómo están las
perritas, veo una luz titilante plateada en la esquina inferior derecha de la ventana izquierda del
piso debajo de esa casa, la luz yacía suspendida como si fuese uno de los llamados Orbe de luz, por
la malla de mi puerta no aprecie si esa luz estaba en el patio justo a la altura de la ventana o dentro
de la casa asomándose por la misma, era una luz pequeña, muy plateada, blanca, pura, se mantenía
estática, pero tenía variaciones en su intensidad. Al abrir la puerta para salir al patio y apreciar
mejor lo que veía, noté como al instante esta luz se fue apagando, ya para cuando yo estaba a fuera
no la volví a ver más, eso para mí fue una señal contundente, aunque me pregunto porque esta luz
no estuvo en mi patio. ¿?

El siguiente avistamiento no estoy seguro de que esté relacionado directamente a la partida de

Venadita, pero fue parte de mi Duelo; estaba en el patio de arriba una vez más, mire hacia al fondo
a la derecha, encima de un cerro vi una esfera plateada haciendo un patrón como la letra “C“, pero
mientras iba avanzando el objeto de arriba hacia abajo se movía como si zigzagueara, no era un
movimiento limpio, tenía movimientos bruscos hacia todos los lados mientras hacia su recorrido,
pero sin salirse tanto de su eje. Fui a dentro por mi celular para grabarlo, pero cuando salí ya no
estaba.

Ningún objeto que haya visto antes hace ese tipo de movimientos.

Todas estas señales que menciono pasaron dentro de los primeros 2 meses que Venadita partió,
señal que le pedí y creo haber sido correspondido.
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Paciencia para que termine el Duelo.

Venadita un ser de luz que llego a mi vida para demostrarme el afecto, el amor incondicional, la
lealtad, su sabiduría, el disfrutar la vida con los pequeños momentos de alegría, y aunque ya no esté
físicamente me sigue enseñando lo que es el desapego.

Tras ya casi 4 meses de su partida sigo viviendo mi duelo, algunos días vuelvo a caer en la depresión,
otros no tanto, siempre la tristeza va de la mano con la gratitud por haber llegado a mi vida y pasar
divertidos momentos perrunos.

Me considero una persona espiritual, pero también me gusta la ciencia y la astronomía, por ende,
me gusta saber el por qué suceden o cómo funcionan las cosas.

Un animal es un ser que te ha elegido a ti, que ha llegado a tu vida para que juntos puedan seguir
experimentado y aprendiendo uno del otro, ellos también sienten, aman, se asustan, tienen deseos,
pero no se complican la vida, tenemos mucho que aprender de ellos.

Tras casi 4 meses de la partida de mi Venadita he sentido la profunda necesidad de escribir en

resumidas cuentas un poco de lo mucho que compartió conmigo, cuan tan importante y especial
fue este ser de luz que llego a mi vida, y lo mucho que sigo aprendiendo de él. Donde la llevaré en
mi corazón por toda mi vida.

Actualización a 19/03/2022.

Ya dos años de su partida, corregí este documento y vaya que aún la extraño, pero puedo decir que
he superado el duelo por el 8vo mes, los meses posteriores tampoco fueron sencillos, pero fui más
consciente de su partida.
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En memoria de Venadita, 17 de marzo de 2020, gracias por tu chispa, por ser como fuiste, por vivir
la vida, por todo el amor y conocimiento que diste y sigues dando, tu amor durará para la
eternidad en mi corazón.