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Fuente: a denominación genérica de pe- imitación, el seguimiento o la hiperespe-
Partida Doble, núm. 145, páginas 40 a 53, queñas y medianas empresas (py- cialización en un segmento de mercado.
junio 2003
Localización: PD 03.06.03 mes) se suele reservar para hacer La toma de conciencia de su propio po-
Resumen: referencia a aquellas empresas de tencial, con un análisis riguroso de sus
El objetivo de este trabajo es analizar la reducida dimensión (número de puntos fuertes (a destacar) y débiles (a
proyección del Cuadro de Mando Integral, como
instrumento de la contabilidad estratégica, en las empleados, nivel de ventas, importancia proteger), les va a permitir aprovechar
pymes. Para ello, se evalúan tanto los de los activos, etc.), que operan en un mejor las oportunidades de mercado que
parámetros específicos que determinan la sector de actividad dado. Bajo esta deno- se presentan y adoptar medidas preventi-
competitividad de estas empresas, como los
elementos básicos para configurar un desarrollo minación genérica, se aglutina una gran vas para reducir el impacto de los posi-
de carácter estratégico para los sistemas diversidad de empresas que constituyen la bles peligros a enfrentar. No es posible ol-
informativos contables. base del tejido industrial y de servicios de vidar que la creciente mundialización de
Descriptores ICALI:
Cuadro de Mando Integal. PYMES. Sistemas de una nación y que actúan de forma coordi- la economía ha incrementado el grado de
Información nada, a la vez que completan la actividad competencia empresarial, provocando
desarrollada por las grandes empresas. que ésta sea considerada como un ele-
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reflexión conceptual de hacia donde existe una mayor conciencia de la necesi-
se dirige el sector, en general, y la dad de otorgar más protagonismo a estas
omo empresa, en particular, y en segundo últimas y, concretamente, a los sistemas
lugar por la dificultad de lograr fuentes contables de gestión, dada su utilidad en
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dad de gestión que han sido utilizados asumir no sólo la formulación explícita y
tradicionalmente por las empresas (Che- estructurada de la estrategia, si no tam-
atham, 1990; Foster and Gupta, 1989; bién contemplar la formación de la misma a contabilidad
Hogarth, 1993; Hopwood, 1990). como respuesta a oportunidades del en-
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en la estratégica se profundiza en el aná- coordinación de tales procesos, eliminan-
lisis de los portadores de costes de cada do distorsiones, errores y posibles duplici-
l diseño de un actividad de valor, explorando y poten- dades. La utilización de registros comu-
ciando las relaciones con los proveedores nes para ambos ámbitos, explotados ade-
de decisiones
APLICADA A LAS PYMES
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exterior, esencial en las pymes para el laciones entre estos componentes. Sin
mantenimiento y desarrollo de ventajas esta orientación integradora, la contabili-
competitivas y, en definitiva, para garanti- dad estratégica difícilmente será efectiva. l cuadro de
zar su supervivencia.
El diseño propuesto en el CMI presen-
ta la información contable estratégica or-
mando integral
3. EL CUADRO DE MANDO ganizada y estructurada, de manera que
INTEGRAL se puedan desarrollar y poner en práctica (CMI) proporciona
estos planteamientos. Para ello define
3.1. Conceptos Básicos una serie de referencias o señales que un modelo de
alertan de la adecuación, o no, de sus va-
El cuadro de mando integral (CMI) pro-
porciona un modelo de medición basado
lores para la buena marcha de la gestión
empresarial en relación con unas varia-
medición basado
en una estructura informativa formada por bles estratégicas básicas y predetermina-
indicadores, financieros y no financieros, das de antemano. Cada Pyme deberá re- en una estructura
cuya finalidad es obtener datos coheren- alizar la selección de los valores apropia-
tes, coordinados y de carácter multidimen- dos en su caso, pero, independientemen- informativa
sional, sobre la evolución y proyección fu- te de cuales sean los elegidos, los gesto-
tura de los parámetros básicos para la pla-
nificación, gestión y control estratégico.
res estarán en condiciones de conocer y
detectar las anomalías con agilidad, valo-
formada por
rar su repercusión y estimar la corrección
La integración de las medidas de ca- a llevar a cabo. Habrá indicadores genéri- indicadores,
rácter no financiero en los sistemas de in- cos, útiles para todas las organizaciones,
formación a la dirección responde a la ne- e indicadores específicos, consecuencia financieros y
cesidad de satisfacer las nuevas deman- de la estrategia concreta que se pretenda
das de información para la toma de deci-
siones estratégicas (Norton, 1999). La su-
desarrollar. En cualquier caso, estarán li-
gados a los objetivos e interrelacionados
no financieros
pervivencia de las empresas, y las pymes entre sí, de tal manera que se establez-
no son una excepción, depende cada vez can unos vínculos causa-efecto, que sir-
más de variables tales como la satisfac- van para comunicar el significado de la
ción de los clientes, la singularización del estrategia a toda la organización.
producto o servicio ofrecido, la excelencia
de la producción, la calidad, el liderazgo El CMI es, pues, una herramienta útil
del mercado o el liderazgo tecnológico. El en la gestión estratégica, al permitir la in-
análisis conjunto de medidas financieras y terpretación de los objetivos estratégicos,
no financieras posibilita no sólo una mejor proporcionando un modelo de medición
identificación de los aspectos relevantes (financiera y no financiera) que persigue
en estas variables estratégicas funda- el equilibrio de cuatro perspectivas dife-
mentales, sino que incrementa las posibi- rentes: finanzas, clientes, procesos inter-
lidades de actuar sobre ellas con éxito. nos y formación y crecimiento, mediante
la definición de unos indicadores estraté-
La contabilidad estratégica suministra gicos. Así, traduce la estrategia de la or-
las herramientas necesarias para la deli- ganización en una representación integra-
mitación del modelo estratégico empresa- da de las cuatro perspectivas, de manera
rial, en el cual se hacen explícitas las va- que refleje adecuadamente la estrategia
riables relevantes sobre las que hay que previamente definida y contribuya a la in-
decidir. Pero obtener información sobre tegración de la misma en el sistema de
todos y cada uno de los componentes del gestión (Norton, 1999).
modelo estratégico no es suficiente, tam-
bién es importante la coordinación de es- En su proceso de implantación, una
ta información con una visión global, que vez definidos, objetivos e indicadores de-
determine y valore las interacciones y re- ben ser comunicados para que sean
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comprendidos y asumidos en los diferen- ridades de entorno competitivo, estrate-
tes niveles de gestión. Con estas bases, gia específica y fase de la vida de los
as propias se planifica el desarrollo de los objetivos productos o servicios ofertados por las
en las cuatro perspectivas mencionadas, pymes. Para esta perspectiva financiera,
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mático que agilice el acceso a la infor- 3.2.3. Perspectiva interna
mación a un coste reducido. Con estos
sistemas se ve facilitada la coordinación En la perspectiva interna, se identifi- l logro de un
de medidas financieras tradicionales, can los procesos internos críticos que
basadas en el análisis de la rentabilidad,
productividad y costes del negocio, con
añaden valor, definiendo la cadena de
valor completa: innovación y diseño, pro-
buen conocimiento
otras medidas no financieras, tales co- cesos operativos y servicio post-venta
mo oportunidad, flexibilidad en la res- (Figura 5). de los procesos
puesta, percepción por parte de los
clientes de la calidad o prestigio e ima- El proceso inicial, de innovación y di- internos parece,
gen corporativa. seño, es fundamental, puesto que es en
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En el proceso operativo, que com- para apoyar políticas estratégicas en este
prende la construcción y entrega de los ámbito no será excesivamente compleja,
a dimensión productos a los clientes, los indicadores dada la dimensión de estas empresas y el
críticos contables objeto de evaluación tipo de relaciones personalizadas que
de las pymes son los relativos a tiempo, calidad y coste: suelen establecer con los clientes.
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4 ILUSTRACIÓN DE LA La perspectiva futura de cómo y hacia
POTENCIALIDAD DEL donde caminan puede ser resumida en su
CUADRO DE MANDO filosofía de ser un grupo empresarial diná- l punto de
INTEGRAL EN LAS mico e innovador dentro del mercado es-
PEQUEÑAS Y MEDIANAS
EMPRESAS A TRAVÉS DEL
pañol, con colaboradores capacitados,
comprometidos y apasionados por el ser-
partida básico fue
ANÁLISIS DE UN CASO vicio, percibido por el consumidor como
una organización que superó sus expec- el desarrollo del
4.1. Introducción tativas, garantizando en todo momento la
máxima de calidad, servicio y capacidad mapa estratégico,
La empresa analizada en este caso fue para generar riqueza. Los valores preten-
fundada en 1934 como una empresa de dis-
tribución de alimentos y bebidas, abarcando
didos para impulsar este buen hacer son
los de respeto de la dignidad humana,
como ejercicio
tanto el comercio al por mayor como el de de- igualdad de oportunidades, honestidad en
talle. En 1954 se produce la separación de las acciones e intenciones, desarrollo del de reconocimiento
ambas actividades, propiciándose de esta bienestar de los empleados, superación
forma el nacimiento de lo que posteriormente de las expectativas del cliente, integración y propia
será la cadena de supermercados. Otro he- en la comunidad y salvaguarda de la ima-
cho relevante tiene lugar en 1970, con la ven-
ta y, por tanto, separación definitiva, del ne-
gen y el patrimonio de la empresa.
comprensión
gocio al por mayor, centrándose el objetivo 4.2. Implantación del CMI
empresarial en la venta al consumidor final. de la estrategia
La cadena de supermercados instau-
El desarrollo posterior de la entidad ra en la organización su primer CMI en
afianza esta estrategia de actuación, de for- 1999, después de un proceso de forma-
ma que en 1985 se adquieren dos cadenas ción de la dirección financiera, utilizando,
de supermercados. En esta misma línea, asimismo, como soporte para la implan-
en 1995, se negocia y acuerda una alianza tación las recomendaciones que daban
con una central de compras y comienza su una serie de autores para su diseño y
expansión geográfica, apoyando su creci- establecimiento.
miento en el objetivo de ofrecer la máxima
calidad y buen servicio, ofreciendo a su Los primeros pasos fueron, en cierta
clientela una gran atención y proximidad. medida, problemáticos, debido fundamen-
talmente a la escasa estructura de comu-
En la actualidad, la empresa asienta nicación existente. Reconociendo esta si-
su competitividad y justifica su razón de tuación de partida, se decidió abordar,
ser en la atención al público actual y a las con la participación de todo el cuadro di-
futuras generaciones, ofreciendo: rectivo, la definición de la misión pretendi-
da, la visión deseada y los valores a ob-
• Productos de la máxima calidad. servar, todo ello como marco o escenario
en el cual llevar a cabo la implantación.
• Soluciones y servicios eficaces,
que aporten valor a los clientes a
El punto de partida básico fue el desa-
través de:
rrollo del mapa estratégico, como ejercicio
– Trato personalizado.
de reconocimiento y propia comprensión
– Capacitación y compromiso con
de la estrategia, con una descripción deta-
los proveedores y colaboradores.
llada de las relaciones causa-efecto de to-
– Relación win–win con los clientes, dos los elementos tratados. Se plantearon
proveedores y colaboradores. interesantes intercambios de opinión por
– Asegurando un nivel óptimo y parte de los mandos acerca de cuales eran
sostenido de rentabilidad. los fundamentos esenciales de la estrate-
gia, dudas ante las cuales se optó por una
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actitud prudente, utilizando las cuatro pers- Estos últimos, es decir, los componen-
pectivas definidas por Kaplan y Norton tes que forman el beneficio aportado por
l grupo de (1997), como trayectoria sistemática para un producto o servicio, son aquellos atri-
la delimitación de los contenidos. butos que mejoran el rendimiento o la ex-
del cliente asumiendo como definición: colegió que la clave en el mercado es ha-
cer rentable el conocimiento que tenemos
Es la proposición de las cualidades del cliente.
que hacen apreciable a la empresa
con respecto a los competidores, que Como soporte teórico de su razona-
parte del valor ofrecido por la empre- miento, se incluyeron los elementos que
sa a sus clientes y que termina y se forman la propuesta de valor de una
concreta por la percepción de los be- compañía a sus cliente, que pueden ser
neficios en la mente del cliente. muy variadas, dependiendo siempre, ló-
gicamente, del sector de que se trate
(Figura 7).
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3. El cliente debe sentir una imagen objetivos estratégicos y los indicadores de
atractiva. desempeño, tarea para la cual se llegaron
a estimar cuales debían ser las metas de os objetivos
4. Se debe lograr que el cliente sea leal. cada uno de ellos.
FIGURA 7 FIGURA 8
LA PROPUESTA DE VALOR EL CLIENTE
Coste económico
el precio es uno de los
elementos más visibles Sentir satisfacción
en la proposición de valor con cada compra
a los clientes
Sentir imagen
Tiempo
atractiva
Servicio
Ser leal
Encontrar un surtido
Producto de calidad
con calidad e incluyendo
más y mejores estaciones
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consiguiendo las metas propuestas ini- A diferencia de otros instrumentos de
cialmente; sin embargo, el énfasis puesto gestión, el cuadro de mando permite
e implantó en los resultados financieros había provo- transformar las metas y estrategias en la
cado un efecto negativo en cuanto al cli- empresa en objetivos e indicadores con-
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pasado a formar parte de la empresa, pu- Cooper, R. and Kaplan, R. (1988,b): “Measure
diendo afectarle positiva o negativamente. cost right: make the right decisions”, Harvard Business
El cuadro de mando facilitará, entonces,
Review, September-October, pp. 96-103.
Foster, G. and Gupta M. (1989): l CMI, adaptado
no sólo la identificación de estos elemen- “Manufacturing Overhead Cost Driver Analysis”,
Journal of Accounting and Economics, January, pp.
tos no serenamente deseados, sino que
también suministrará las bases para ac-
309-337. a las características
Johnson, T. (1988): “Activity-based information:
tuar estratégicamente sobre los mismos. a blueprint for world-class management accounting”,
Management Accounting, June, pp. 23-30.
Johnson, T. and Kaplan, R. (1988): La contabili-
de las pymes,
El tamaño de estas empresas va a ser dad de costes. Auge y caida de la contabilidad de ges-
uno de los principales puntos que facilite tión., Plaza & Janés, Barcelona.
Headley, J. (1998): “Aspectos Prácticos de la
puede ser útil no
la implantación del cuadro de mando,
Implantación del Cuadro de Mando Integral”. Harvard
puesto que su comunicación debería ser
fluida y rápida. Su posterior evolución y la
Deusto Finanzas & Contabilidad, pp. 35-41.
Hogarth, R. (1993): “Accounting for Decisions
sólo como fuente
and Decisions for Accounting”, Accounting,
obtención del mejor rendimiento de la in-
formación obtenida en el mismo se verán,
Organizations and Society, vol. 18, n1. 5, pp.
407-424. de oportunidades
asimismo, favorecidas, a priori, por esa Hopwood, A. (1990): “Accounting and
misma característica, al existir una mayor
Organisation Change”, Accounting, Auditing and
Accountability Journal, pp. 7-17. de mejora
facilidad en la transmisión y comprensión, Kaplan, R.; Norton, D.(1992): “The Balanced
por toda la empresa, de los objetivos es- Scorecard Measures that Drive Performance”, Harvard
Business Review, January-February, pp.77-84.
tratégicos y de las relaciones entre éstos Kaplan, R.; Norton, D. (1993): “Putting the
y los indicadores de medición definidos Balanced Scorecard to Work”, Harvard Business
Review, September- October, pp.134-147.
en las cuatro perspectivas básicas. Por
Kaplan, R.; Norton, D. (1997): Cuadro de
estas razones las perspectivas de clientes Mando Integral. Ediciones Gestión 2000. S.A.
y de aprendizaje y crecimiento se benefi- Barcelona.
ciarán de la menor dimensión. En relación Lewy and Du Mee, L. (1998): “The ten com-
mandments of balanced scorecard implementation”,
con los procesos internos, se contrapone Management Control and Accounting, April, pp.20-
el escaso margen de maniobra de las es- 26.
Mallo, C.; Merlo, J. (1995): Control de Gestión y
tructuras de coste de estas organizacio- Control Presupuestario. McGraw Hill. Madrid.
nes y su capacidad limitada para abordar McCunn, P. (1998): “The Balanced Scorecard…
proyectos de I+D, entre otras considera- the Eleventh Commandment”, Management
Accounting, December, pp. 34-36.
ciones, con la menor complejidad de los
Ministerio de Economía y Hacienda (1999):
procesos y mayor proximidad al cliente. Informe de Coyuntura Económica, Mayo.
Una buena gestión de esta perspectiva Mintzberg, H. (1988): “Ideology and the
Missionary Organization”. Incluido en Mintzberg, H.
permitirá equilibrar el efecto final. En prin- and Quinn, J. (eds), The Strategy Process. Concepts,
cipio, la perspectiva financiera no se verá Context and Cases. Prentice Hall, New Jersey, U.S.A,
pp. 345-350.
afectada por el tamaño, si bien es cierto
Norton, D. (1999): “El Cuadro de Mando inte-
que su gestión puede resultar más flexible gral (Balanced Scorecard)”, Dirección y Progreso, pp.
en aquellas organizaciones de dimensión 45-48.
Shank, J. (1989): “Strategic Cost Management:
controlada. New Wine, or New Bottles?”, Journal of Management
Accounting Research, fall, pp. 47-63.
Shank, J.; Govindarajan, V. (1989): Strategic
BIBLIOGRAFÍA Cost Analysis. The Evolution from Managerial to
Bromwich, M. (1990): “The Case for Strategic Strategic Accounting, Richard D. Irwin, Homewood.
Management Accounting: The Role of Accounting Illinois.
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pp 27-46. Journal of Management Accounting Research, Fall, pp.
Cheatham, C. (1990): “Updating Standard Cost 179-197.
Systems”, Journal of Accountancy , December, pp. Shank, J.; Govindarajan, V. (1993): Strategic
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