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UNIVERSIDAD CATÓLICA SANTA ROSA

FACULTAD DE DERECHO
DERECHO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO II
Prof. Luz Oriana Martínez C.

PROPIEDAD
INDUSTRIAL

Alumno: MARIA EUGENIA ROJAS


C.I. 11.924.476
SECCIÓN FS12”B”

OCTUBRE 2021
1. ¿Qué protege la propiedad industrial según la Ley de Propiedad
Industrial?
La Propiedad Industrial es un conjunto de derechos exclusivos que
protegen, tanto la actividad innovadora materializada en nuevos productos, nuevos
procedimientos o nuevos diseños, como la actividad mercantil, mediante la
identificación en exclusiva de productos y servicios ofrecidos en el mercado.

De la misma forma lo establece en el capítulo 1 y Articulo 1 de la Ley de


propiedad industrial.

La presente Ley regirá los derechos de los inventores, descubridores e


introductores sobre las creaciones, inventos o descubrimientos relacionados con la
industria; y los de los productores, fabricantes o comerciantes sobre las frases o
signos especiales que adopten para distinguir de los similares los resultados de su
trabajo o actividad.

2. ¿Cuáles derechos obtiene el titular de una Marca al registrarla según el


ordenamiento jurídico nacional?

La propiedad industrial protege marcas, patentes, diseños industriales y dibujos. ...


Otorga dos tipos de derechos: el primero es el derecho a utilizar la invención,
diseño o signo distintivo, y el segundo es el derecho a prohibir que un tercero lo
haga, permitiendo así que la persona inventora tiene la seguridad de que nadie
utilizará su creación ni obtendrá ganancias de esta salvo que el mismo creador así
lo autorice.

3. ¿Qué es la Decisión 486 (Régimen Común sobre Propiedad Industrial)


y cuáles fueron las implicaciones de su desaplicación en el territorio
nacional?
La Decisión 486 nace en el Acuerdo de Cartagena celebrado en fecha
22/4/2006, en el cual se decidió que: “Los Países Miembros otorgarán patentes
para las invenciones, sean de producto o de procedimiento, en todos los
campos de la tecnología, siempre que sean nuevas, tengan nivel inventivo y
sean susceptibles de aplicación industrial”.
La desaplicación de la Decisión 486 del Régimen Común de Propiedad
Industrial, por parte del servicio Autónomo de la Propiedad Intelectual (SAPI), a
través de un acto administrativo viciado de nulidad, bajo incompetencia manifiesta,
ha traído para la propiedad intelectual en Venezuela, varias consecuencias
jurídicas.
En principio trajo como consecuencia una evidente inseguridad jurídica,
generando así una total incertidumbre entre las personas naturales y jurídicas en
torno a aquellas solicitudes que gozaban de la aprobación respectiva o se
hallaban a la espera del examen de registrabilidad y aprobación por parte del
Servicio Autónomo de Propiedad Intelectual.
Igualmente en lo referente a las marcas colectivas, éstas no se encuentran
establecidas en la ley de propiedad industrial, al igual que las denominaciones de
origen y las marcas de certificación, lo que trae como consecuencia un retraso
significativo en el sistema marcario venezolano en comparación con el resto de los
países del mundo, así como la suspensión de los procedimientos de registros
existentes en esta materia, por cuanto ya las mencionadas figuras no están
contempladas como posibles dentro de nuestro ordenamiento jurídico.
Por su parte, la desaplicación de la normativa andina produce también una
serie de efectos jurídicos en lo que se refiere a la renovación de la marca, ya que
conforme a lo establecido en la ley de propiedad industrial se sanciona la
extemporaneidad, al momento de que el titular no renueve el signo, en los seis (6)
meses anteriores al vencimiento, extinguiéndose el derecho sobre el registro de
éste.
Por otro lado, con la desaplicación de la Decisión 486 se abandonó el
clasificador internacional de Niza, trayendo como resultado la aplicación
nuevamente del clasificador contenido en la ley de propiedad industrial. Todo esto
trae como consecuencia un retraso significativo a la hora de clasificar las marcas;
ya que deberá tomarse en cuenta una clasificación totalmente desactualizada con
relación a los diferentes productos y servicios presentados en el mercado.
Otra consecuencia derivada de la desaplicación de la Decisión 486 es la
obligatoriedad de realizar búsqueda de antecedentes marcarios; de ahí que el
Servicio Autónomo de Propiedad Intelectual tomó la decisión de exigir que toda
solicitud de registro de signos distintivos deberá estar acompañada del reporte
obtenido de la operación de búsqueda de antecedentes o referencias marcarias.

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