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ESCUELA DE POSGRADO
UNIDAD DE POSGRADO DE LA FACULTAD DE ENFERMERÍA
DOCTORADO EN CIENCIAS DE LA SALUD Y SALUD PUBLICA
PRESENTADO POR:
DE LA VEGA PORTUGAL, KAREN IVONNE
MENDEZ TORRES, ANACÉ
SOTOMAYOR BALBIN, ELCIRA
HUANCAYO – PERU
2021
INTRODUCCION
En el ciclo de vida de las NNA, se distinguen tres periodos: infancia (desde la concepción hasta
los 5 años de edad), niñez (desde los 6 hasta los 11 años de edad) y adolescencia (desde los 12
hasta los 17 años de edad). De acuerdo con la evidencia científica, la infancia es un periodo
fundamental para el crecimiento y desarrollo de la persona, en tanto el ser humano adquiere
sus habilidades físicas, motrices, cognitivas, sociales, emocionales y lingüísticas básicas. Ante
ello, la pobreza, la desnutrición, entre otros factores, se presentan como limitantes para el
correcto desarrollo de las NNA (Grantham McGregor et al., 2007; Cunha y Heckman, 2005). En
la niñez adquieren una mayor relevancia en su desarrollo las dimensiones de aprendizaje, de
entorno y protección, dado que se consolidan las capacidades físicas, sociales y emocionales
que se adquieren en la infancia, donde la carencia de salubridad, la migración, la falta de
estabilidad en la familia y la violencia afectan negativamente en su desarrollo (Thorne, 2005).
Asimismo, la adolescencia es un periodo clave en la consolidación de desarrollo del cerebro
(Dahl y Suleiman, 2017), que está relacionado también a la pobreza material (Noble, 2016) y al
desarrollo de habilidades socioemocionales (Cunha y Heckman, 2008). Existen pruebas sólidas
que sugieren que la adolescencia ofrece una segunda oportunidad para influir en las
trayectorias de desarrollo (incluidos el crecimiento y el desarrollo cognitivo) y compensar a
algunas pobres experiencias de la infancia (Dahl et al. 2018). Las pruebas de la neurociencia
indican que la segunda década de la vida es un período de desarrollo neurológico sustancial
(solo superado por la primera infancia, durante el cual se han producido importantes y rápidos
cambios neuronales y fisiológicos), cuando miles de millones de redes neuronales afectan a las
habilidades emocionales y las capacidades físicas y mentales son reorganizadas. La
adolescencia es también una etapa en la que los roles de género pueden consolidarse o
desafiarse y transformarse. Las normas sociales y de género durante la adolescencia
configuran las trayectorias de vida de las NNA y, las oportunidades y vulnerabilidades a las que
pueden enfrentarse. Por ejemplo, la vida de las adolescentes puede verse limitada por el
matrimonio precoz, la deserción escolar, las relaciones sexuales forzadas y sin protección, los
embarazos precoces y la violencia de género. Para los adolescentes, definiciones de
masculinidad que promueven la toma de comportamientos de riesgo como unirse a pandillas o
grupos armados, beber y el uso de drogas puede tener serias consecuencias sobre la vida y la
salud. En muchos países, los adolescentes varones son cada vez más propensos a abandonar la
escuela y se dedican al trabajo infantil o a trabajos peligrosos, y esto es a menudo exacerbada
en los entornos humanitarios (Unicef, 2019). En este marco, el limitado ejercicio de derechos
de las NNA se convierte en problema público en nuestro país a razón de indicadores que
reflejan la alta vulneración de sus derechos, representados en problemas específicos de la
sociedad que afectan en gran medida al grupo de las NNA: o El derecho a la supervivencia y a
una vida saludable se ve seriamente afectado por la anemia que, en niñas y niños menores de
36 meses de edad, se sitúa en un 40% de su población total. Este problema se hace aún más
crítico en departamentos con importantes índices de pobreza, ruralidad y componente étnico
como Puno, Ucayali o Madre de Dios, en el que la prevalencia llega hasta 69.4%, 57.2% y
54.8%, respectivamente (ENDES, 2020). El derecho al desarrollo pleno y autónomo se ve
limitado al no poder concluir satisfactoriamente los ciclos de educación básica que por
derecho les corresponden. Para el 2019, la tasa de conclusión de educación primaria en el
grupo de 12 a 13 años de edad fue 89.5% a nivel nacional, de 92.0% a nivel urbano y de 83.5%
a nivel rural. De igual manera, la tasa de conclusión de educación secundaria en el grupo de 17
a 18 años de edad fue 71.4% a nivel nacional, siendo 76.6% a nivel urbano, mientras tan solo
54.8% a nivel rural. Asimismo, en el caso de población de lengua materna distinta al castellano,
la tasa de conclusión es de 76.1% para el nivel primario y 57.9% para el secundario. Por otro
lado, Loreto es el departamento con menor porcentaje de conclusión tanto a nivel de
educación primaria como a nivel de educación secundaria (70.8% y 46.8%, respectivamente)
(ENAHO, 2019). Además, la desagregación indica que, en el caso de la conclusión en educación
primaria, la tasa es menor en varones que en mujeres (82.6% y 90.3% respectivamente), así
como en educación secundaria (75.1% y 78.6% respectivamente).
Por otro lado, los derechos de protección se ven claramente limitados en un contexto de
violencia familiar. Para el 2019, la violencia familiar (psicológica o física) en niñas y niños de 9 a
11 años de edad se presentó, alguna vez en su vida, en el 68.5% de esta población. Lo mismo
ocurrió para el 78% de adolescentes de 12 a 17 años de edad (ENARES, 2019). Situación similar
se destaca en referencia al 34.4% de madres que declararon que sus hijos entre 1 a 5 años de
edad estuvieron presentes cuando fueron violentadas física y/o sexualmente, siendo mayor la
incidencia en madres adolescentes entre 15 y 19 años de edad, donde el 46.1% declaró lo
mismo.
El trabajo infantil expone a NNA a situaciones de mayor vulnerabilidad. Así, para el año 2019,
ENAHO identifica que el 25.8% de NNA a nivel nacional se encontraba en situación de trabajo
infantil; siendo la zona rural el lugar donde existe la mayor incidencia de esta problemática
para las NNA (57.8%), a diferencia de la zona urbana (14%). Del mismo modo, la región sierra
se muestra preponderante al trabajo infantil (43.9%), respecto a la selva (31.8%) y, aún más,
respecto a la costa (11.6%). Finalmente, los derechos de participación aún se desarrollan de
manera muy limitada, pese a que el nivel de percepción en determinados segmentos
poblacionales se encuentra en un nivel alto . No obstante, este derecho no solo implica emitir
opinión, sino también participar en la toma de decisiones en las situaciones que involucran a
las NNA. En ese sentido, su nivel de organización y representación aún es muy baja. Muestra
de ello son los Consejos Consultivos de Niñas, Niños y Adolescentes (CCONNA), que como
espacios de participación en políticas públicas aún tienen insuficiente desarrollo a nivel
nacional. En ese sentido, su nivel de organización y representación aún es muy baja. Así, para
el año 2020, de los 1874 distritos existentes a nivel nacional, solo el 25% de distritos (471)
tienen en sus municipios un espacio formal para la participación de NNA en políticas públicas
que les competen.
Estimaciones realizadas por el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI), en el 2020
la población total a nivel nacional es de 32 millones 824 mil 358. De ellos, el 31% son NNA; de
los cuales, el 49% son mujeres (5, 031,892) y el 51% son varones (5, 233,242). Asimismo, la
distribución por grupo etario al interior de esta población también se muestra pareja: el 33%
son niñas y niños entre los 0 y 5 años de edad (3,351,449); el 33% tienen entre 6 y 11 años de
edad (3,430,046) y el 34% son adolescentes entre 12 y 17 años de edad (3,483,639).
Esta situación no ha variado mucho desde el último Censo Nacional 2017, donde las NNA (de 0
a 17 años de edad) representan el 31% (9,204,329) de toda la población. La mayor parte (79%
que hace un total de 7,254,604) reside en el área urbana y el 21% (1,949,725) restante, en el
área rural. La distribución de las NNA es casi homogénea según sexo y grupos de edad. Del
total, el 49% (4,533,726) son mujeres y el 51% (4,670,603) hombres. Según grupos de edad, el
33% (3,005,562) tiene entre 0 a 5 años; el 34% (3,179,931) son niñas y niños de 6 a 11 años, y
el 33% (3,018,836) son adolescentes de 12 a 17 años.
Gráfico 1. Población total y población de niñas, niños y adolescentes por grupo de edad, 2017
(Porcentaje)
Asimismo, según los resultados de los Censos Nacionales 2017, se estima que el 4.8%
(437,686) de NNA en el Perú tienen discapacidad. De ellos el 51% (221,781) son hombres y el
49% (215,905) son mujeres. La mayor población de NNA con discapacidad se encuentra en el
departamento de Lima (161,109), seguido del departamento de Piura (25,731) y del
departamento de Arequipa (22,121).
Es importante también destacar el perfil de la población objetivo por lengua materna. Así, en
el Perú se identifica que el 89.1% (6,920,484) de NNA tienen como lengua materna el
castellano, el 8.7% tiene como lengua materna alguna lengua indígena u originaria andina , el
1.4% alguna lengua indígena u originaria de la Amazonía y menos del 1% otra lengua
Niñas, niños y adolescentes por lengua materna y grupo de edad, 2017 (Número y
porcentaje)
De acuerdo con la tabla anterior, la población de NNA que tienen una lengua materna indígena
u originaria es en total 784,574. De ellos, el 86.4% (677,552) tienen lengua materna indígena
andina y el 13.6% (107,022) tienen lengua materna indígena amazónica.
Gráfico 2. Niñas, niños y adolescentes que tienen una lengua indígena u originaria, 2017
(Porcentaje)
Niñas, niños y adolescentes (de 0 a 17 años de edad) en situación de pobreza monetaria por
área de residencia, lengua materna y grupos de edad entre 2019 y 2020 (Porcentaje)
Precarias condiciones de habitabilidad
Una manera de aproximarse a la situación de las condiciones de habitabilidad es por medio del
Índice de Necesidades Básicas Insatisfechas - NBI (CEPAL, 2001). Este indicador permite
identificar a la población con al menos una de las cinco siguientes carencias: i) que residen en
viviendas con características físicas inadecuadas, es decir en viviendas con paredes exteriores
de estera, o de quincha, piedra con barro o madera y piso de tierra; ii) a la población que
pertenece a hogares en viviendas en hacinamiento (más de 3.4 personas por habitación, sin
contar con el baño, cocina, pasadizo y garaje); iii) que residen en viviendas sin ningún tipo de
servicio higiénico; iv) a la población en hogares con niños y niñas de 6 a 12 años de edad que
no asiste al colegio; y, v) a la población en hogares con alta dependencia económica, es decir a
aquella que residen en hogares cuyo jefe de hogar tiene primaria incompleta (hasta segundo
año) y con 4 o más personas por ocupado o sin ningún miembro ocupado.
Al respecto, los datos de la ENAHO 2019 revelan que la población con al menos una
necesidad básica insatisfecha disminuyó en 7.3 puntos porcentuales entre el año 2011 y el año
2019.
Población con alguna necesidad básica insatisfecha (NBI), 2011 y 2019 (Porcentaje)
No obstante, una revisión de los datos a nivel regional muestra un importante nivel de
desigualdad entre las regiones de la selva y las regiones de la costa. Así, se puede comprobar
que la diferencia entre las regiones con mayor y menor desempeño en el índice de NBI, es de
47.3 puntos porcentuales. En ese sentido, Loreto, Ucayali, Amazonas y San Martín, al tener
más del 29% de su población con al menos una NBI, son las regiones que menos condiciones
de habitabilidad pueden presentar para el desarrollo saludable de una NNA. Por el contrario,
Callao, Ica, Lima y Tacna, al tener menos del 10% de su población con al menos un NBI, son las
regiones que tendrían mejores condiciones de habitabilidad para el desarrollo saludable de las
NNA (ENAHO, 2019).
Población con al menos una necesidad básica insatisfecha (NBI) por ámbito regional, 2019
(Porcentaje)
Cabe destacar, además, que los resultados de las variables NBI señalan que la población que
carece de servicios higiénicos es la variable que más ha disminuido entre los años 2011 y 2019
(4.9 puntos porcentuales), ello implica un incremento sostenido de la cobertura en servicios
básicos de agua y desagüe a nivel nacional. De otro lado, la variable que menos se ha movido
en el periodo indicado es la referido a la población en hogares con alta dependencia
económica, es decir, aquellos hogares que cuentan con un jefe de hogar que solo haya cursado
hasta el segundo año de primaria, o con más de 4 personas desempleadas por persona
empleada.
Estos datos son extraídos del “Sistema de Información Regional para la Toma de Decisiones”
del INEI. En este sistema se puede observar que el porcentaje de viviendas urbanas que se
encuentran expuestas a deslizamiento de tierras, derrumbes o avalanchas aumentó 0.1 punto
porcentual (pp.) entre los años 2014 (4.1%) y el 2018 (4.2%). Asimismo, el porcentaje de
viviendas urbanas que se encuentran expuestas a inundaciones subió en 1.5 pp. entre el 2014
(14.1%) y el 2017 (15.6%). Por el contrario, el porcentaje de viviendas urbanas que se
encuentran expuestas a precipicios disminuyó en 0.2% entre los años 2014 (1.3%) y el 2018
(1.1%).
Fuente: Sistema de Información Regional para la Toma de Decisiones – INEI, 2014-2018 Elabo
Por otro lado, los derechos de protección se ven claramente limitados en un contexto de
violencia familiar. Para el 2019, la violencia familiar (psicológica o física) en niñas y niños de 9 a
11 años de edad se presentó, alguna vez en su vida, en el 68.5% de esta población. Lo mismo
ocurrió para el 78% de adolescentes de 12 a 17 años de edad (ENARES, 2019), donde el 50.1%
de adolescentes mujeres y el 49.9% de adolescentes varones sufrieron violencia familiar.
Situación similar se destaca en referencia al 34.1% de madres que declararon que sus hijos
entre 1 a 5 años de edad estuvieron presentes cuando fueron violentadas física y/o
sexualmente, siendo mayor la incidencia en madres adolescentes entre 15 y 19 años de edad,
donde el 59.8% declaró lo mismo (ENDES, 2019). La violencia familiar es transversal a cualquier
contexto de región y/o
Al respecto, a la fecha no existe un indicador que pueda dar cuenta de la conclusión de las
niñas y niños matriculados en el nivel inicial. No obstante, un indicador aproximado es la Tasa
de asistencia en educación inicial de niñas y niños de 3 a 5 años de edad. En ese sentido, según
ESCALE (2019) la tasa neta de asistencia en educación inicial en el grupo de 3 a 5 años de edad
se ha incrementado en 20.5 puntos porcentuales respecto a su línea base en el año 2011 (de
72.6% a 93.1%). En este marco, el 93.8% de las niñas asistió a educación inicial, mientras que el
92.3% de los niños hizo lo propio.
Cabe destacar, que la brecha entre la zona rural y urbana se ha reducido también de manera
importante llegando a mostrar para el 2019 solo 3 puntos porcentuales entre ambas zonas. No
obstante, el indicador no resulta muy homogéneo a nivel departamental. Es así que
departamentos como Tumbes (98.4%) y Huancavelica (98.3%) tuvieron, al 2019, el mejor
desempeño en la tasa de asistencia en educación inicial. Por el contrario, los departamentos
de Madre de Dios (85%) y Junín (85.8%) tuvieron el menor desempeño en el mencionado
indicador (ESCALE, 2019)
Por otro lado, la tasa de conclusión en educación primaria en el grupo de 12 a 13 años de edad
creció en 10.2 puntos porcentuales respecto a su línea base en el año 2011 (de 79.3% a
89.5%). Asimismo, en el área rural la tasa de conclusión ha aumentado en 18.9 puntos
porcentuales pasando de 64.6% en el 2011 a 83.5% en el 2019. Sin embargo, en el área urbana
la tasa de conclusión aumentó en 5.4 puntos porcentual, pasando de 86.6%, en el 2011, a
92.0%, en el 2019 (ESCALE, 2019). Por otro lado, la tasa se ha incrementado 10 puntos
porcentuales en mujeres (de 80.3% a 90.3%) y 10.4 puntos porcentuales en varones (de 78.3%
a 88.7%)
Cabe destacar que las condiciones de educación no se agotan solo con la educación básica. El
logro de una mayor autonomía requiere también sustentarse en una educación vinculada al
trabajo. En ese sentido, la educación técnico-productiva en las/los adolescentes resulta muy
importante. Al respecto, se debe indicar que, al 2019, el 23% del total de matriculados en
educación técnico-productiva pertenecían al rango etario de 12 a 18 años de edad.
No obstante, si bien la transición del estudio al trabajo constituye una necesidad fundamental,
se ha identificado en los Censos 2017, que el 15.1% de las y los adolescentes entre 14 y 19
años de edad ni estudiaban ni trabajaban (NINI). De este grupo, el 41.7% de las/los
adolescentes tenían primaria incompleta y el 38.7% tenían secundaria incompleta. A nivel
departamental, Lima registra el mayor número de población NINI de 14 a19 años de edad, lo
que significa casi la cuarta parte del total nacional (24.8%). Le sigue muy por debajo, los
departamentos de Piura (7.4%), La Libertad (6.7%) y Cajamarca (5.6%).
Asimismo, de acuerdo a los Censos 2017, existe una diferencia por sexo en la población NINI,
donde el 16.1% de adolescentes mujeres lo son, frente al 12.1 % de adolescentes varones. En
un estudio realizado por Málaga, Oré y Tavera (2016), se encontró que esto se explicaría por la
contribución de las mujeres a la economía familiar al realizar tareas del hogar y de cuidado de
integrantes dependientes en la familia (hijos, hijas, personas adultas mayores, etc.). Esta
investigación ayuda a complementar el análisis y refuerza la importancia de diferenciar, al
menos por sexo, entre adolescentes mujeres y adolescentes varones, ya que presentan
realidades distintas ante una misma problemática. En ese sentido, los resultados de la
Encuesta Nacional de Uso de Tiempo (2010) ofrecen información valiosa sobre cómo se
distribuye el tiempo que destinan adolescentes mujeres y varones al trabajo no remunerado.
La evidencia sugiere una brecha en el uso del tiempo entre mujeres y varones, donde las
mujeres dedican más horas a la semana al trabajo doméstico no remunerado, cuidado de la
familia, enfermos y personas mayores. Brecha que se replica para el caso de adolescentes
entre 12 y 17 años, donde el 21.55% de las adolescentes destinan su tiempo al trabajo no
remunerado, mientras que en el caso de los adolescentes varones solo el 13.46%.
Por ejemplo, una adolescente dedica 8 horas con 38 minutos a la semana para el cuidado de
NNA, lo cual es mayor a las 5 horas y 17 minutos que puede dedicar un adolescente varón. Lo
mismo sucede en el cuidado de miembros del hogar con dificultades físicas, mentales o de
edad avanzada, donde las adolescentes dedican 6 horas y 20 minutos semanales frente a 4
horas y 31 minutos que dedican los adolescentes varones.
Así, en el año 2020, el Programa Nacional Aurora, a través de los CEM, atendió 35,661 casos de
violencia contra NNA, de los cuales, el 66.7% (23,800) fueron mujeres y el 33.3% (11,861)
hombres. Mediante los equipos itinerantes de urgencia (EIU), entre el 17 de marzo y el 31 de
diciembre del año 2020, se registraron 6,066 casos de violencia contra NNA. Asimismo, se
atendieron 37,314 consultas sobre violencia familiar (física y psicológica) en víctimas de 0 a 17
años de edad a través de la Línea 100, quienes recibieron información, orientación, consejería
y soporte emocional. Un factor que influye en la práctica de violencia es la tolerancia social. En
el Perú, de acuerdo a la Encuesta Nacional de Relaciones Sociales (2019), el índice de
tolerancia social de las personas con relación a la violencia familiar hacia las NNA47 fue de
54.4%. En cuanto las estadísticas de violencia ejercida a las NNA por edad, se tuvo que desde el
año 2013 al 2019 hubo avances en la reducción; sin embargo, aún hay brechas por cerrar. Así,
la violencia familiar (psicológica o física) ejercida en las niñas y niños de 9 a 11 y en los
adolescentes de 12 y 17 años de edad, se redujo en 13.1 puntos porcentuales (de 81.6% el
2013 a 68.5% el 2019) y 9.1 puntos porcentuales (de 87.1% el 2013 a 78% el 2019)
respectivamente. Además, la desagregación indica diferencias entre varones y mujeres, donde
el 49.9% de varones niños y adolescentes sufrió violencia familiar frente al 50.1% de niñas y
mujeres adolescentes que también la sufrió.
Fuente: Encuesta Nacional sobre Relaciones Sociales, 2019 Elaborado por DPNNA-MIMP
Ciertamente, entre los años 2019 y 2020, la pobreza monetaria de NNA a nivel nacional,
aumentó en 11.9 puntos porcentuales a nivel nacional (de 27.9% a 39.8%). Si bien el año 2019
existía una brecha entre el área rural y urbana de 28.3 puntos porcentuales, para el año 2020
esta brecha se redujo a 20.6 puntos porcentuales. Asimismo, la situación de pobreza de NNA
que tienen el quechua como lengua materna aumentó en 6 puntos porcentuales (de 56.1% a
62.1%), asimismo, en aquellos que tienen el castellano como lengua materna, incrementó en
12.8 puntos porcentuales (de 25.4% a 38.2%). Entre grupos de edad la disminución osciló entre
12.4 puntos porcentuales (de 28.3% a 40.7%) en la niñez (de 6 a 11 años de edad), 11.9 puntos
porcentuales (de 30.2% a 42.1%) en la primera infancia (de 0 a 5 años de edad) y 11.7 puntos
porcentuales (de 25.7% a 37.4%) en la adolescencia (de 12 a 17 años de edad). Con relación a
la salud, se han desarrollado estrategias, sobre todo las referidas a garantizar un nacimiento
saludable, a disminuir la mortalidad neonatal, reducir la desnutrición crónica en niñas y niños
menores de 5 años de edad, y a reducir las enfermedades vinculadas con el sobrepeso y la
obesidad. Asimismo, se ha desarrollado un marco legal para garantizar el acceso a los servicios,
la promoción, prevención, tratamiento y rehabilitación en salud mental, como condiciones
para el pleno ejercicio del derecho a la salud y el bienestar de la persona, la familia y la
comunidad
Al respecto, las tasas de mortalidad neonatal, infantil y de niñez son indicadores útiles para
reflejar también la salud de toda la población y las condiciones socioeconómicas en las que
viven. En ese sentido, los resultados nacionales de los indicadores de mortalidad neonatal,
infantil y de niñez dan cuenta de una situación cercana a los estándares internacionales
planteados por los ODS al 2030, de la OMS30. No obstante, una revisión del indicador a nivel
de quintil de riqueza muestra que la mortalidad neonatal, infantil y de niñez aún tienen niveles
elevados (sobre la media internacional) en determinados segmentos poblacionales. El
desempeño desigual del indicador también se da a nivel geográfico.
Así, en el periodo comprendido entre 2011 y 2018, la tasa nacional de mortalidad neonatal
(niños y niñas menores de 28 días) se mantuvo en 10 por cada mil nacidos vivos. Sin embargo,
esta tasa asciende a 14 por cada mil nacidos vivos en el quintil inferior de riqueza (esta cifra
tampoco tuvo ninguna variación entre el 2011 y 2018). Asimismo, en el área rural se pasó de
13 a 14 por cada mil nacidos vivos y en el área urbana de 8 a 9 por cada mil nacidos vivos
(ENDES, 2011, 2018).
Fuente: Encuesta Demográfica y de Salud Familiar, 2011 y 2018 Elaborado por DPNNA-MIMP
Por otro lado, pese a que los nacimientos prematuros, es decir, aquellos que se dan en
periodos de gestación menores a las 37 semanas, solo constituyen el 10% de todos los
nacimientos, el 80% de las muertes neonatales ocurren entre los niños nacidos
prematuramente. Asimismo, existe evidencia que demuestra como las ratios de mortalidad
neonatal crecen de manera drástica con la Reducción de la edad gestacional. Así, comparado
con los bebés nacidos luego de 36 semanas de gestación, aquellos nacidos con 24, 28 y 32
semanas de edad gestacional tiene ratios de mortalidad neonatal que son alrededor de 180, 45
y 7 veces más altos respectivamente.
Para el mismo periodo la tasa nacional de mortalidad infantil (menores de un año), se redujo
de 16 a 15 casos por cada mil nacidos vivos. No obstante, si bien la reducción de casos de
mortalidad infantil es un poco mayor en el quintil inferior de riqueza, ésta aún se presenta en
niveles elevados para este grupo poblacional, situándose, al 2018, en 24 casos por cada mil
nacidos vivos (3 casos menos que en el año 2011). Es decir, aún se tienen 9 casos por cada mil
nacidos vivos, sobre la media nacional. De otro lado, para el mismo periodo de comparación,
en el área rural se pasó de 26 a 22 casos por cada mil nacidos vivos y en el área urbana se
ascendió de 11 a 13 casos por cada mil nacidos vivos.
Fuente: Encuesta Demográfica y de Salud Familiar, 2011 y 2018 Elaborado por DPNNA-MIMP
Finalmente, la tasa nacional de mortalidad en las niñas y niños menores de 5 años de edad,
para el periodo en mención, disminuyó de 21 a 19 por cada mil nacidos vivos. No obstante,
dicha media nacional se encuentra aún lejana para el quintil inferior de riqueza, que entre el
2011 y el 2018 solo disminuyó de 36 a 31 casos de mortalidad por cada mil nacidos vivos.
Asimismo, en el área rural el indicador solo se movió de 29 a 28 casos por cada mil nacidos
vivos, y en el área urbana el indicador se redujo de 17 a 15 casos por cada mil nacidos vivos.
Mortalidad en la niñez (niñas y niños menores de 5 años de edad), 2011 y 2018 (Tasa)
Fuente: Encuesta Demográfica y de Salud Familiar, 2011 y 2018 Elaborado por DPNNA-MIMP
Los indicadores en mención, además de mostrar una reducción heterogénea a nivel de quintil
y región, muestran que la reducción de la mortalidad neonatal, infantil y de niñez se ha
frenado en comparación a la década 2000 - 2010. En dicho periodo la reducción de la tasa de
mortalidad neonatal se dio de 23 a 11.1 casos por cada mil nacidos vivos; la tasa de mortalidad
infantil se redujo de 43 a 17 casos por cada mil nacidos vivos y la tasa de mortalidad en la niñez
disminuyó de 60 a 22.8 casos por cada mil nacidos vivos (INEI, 2021).
Dicha diferencia releva barreras de estructura socioeconómica y desigualdad social que obligan
a una mayor atención a: la biología humana, el medio ambiente, el estilo de vida y la
organización de la atención a la salud.
Proporción de nacidos vivos en los cinco años de edad anteriores a la encuesta con bajo peso
al nacer (menos de 2.5 kg), 2011 y 2020 (Porcentaje)
Fuente: Encuesta Demográfica y de Salud Familiar, 2011 y 2020 Elaborado por DPNNA-MIMP
Por otro lado, la desnutrición crónica infantil, el sobrepeso y la obesidad son problemas
directamente ligados a la malnutrición. Al respecto, según ENDES 2020 el porcentaje de
desnutrición crónica en niñas y niños menores de 5 años de edad (patrón OMS), se sitúa en
12.1%, valor que ha disminuyó en 7.4 puntos porcentuales con respecto al 2011 (19.5%). Por
otra parte, la prevalencia de sobrepeso en niñas y niños menores de 5 años de edad, al 2019,
fue de 6.4%, valor constante desde el año 2011 (6.4%); situación similar a la prevalencia de
obesidad en niñas y niños menores de 5 años de edad, la cual pasó de 1.7% a 1.6%, entre los
años 2011 y 2019 (CENAN, 2019).
• Porcentaje de muestras de sangre que llegan al INS antes de los 5 días: 82,0 %.
Respecto a la regulación de emociones, cabe indicar que el mencionado estudio revela que un
35.6% de estudiantes afirman que, en los últimos tres meses, al menos una vez las y los han
llamado por un apodo ofensivo o fueron blanco de burlas en la escuela
Estudiantes que afirman que durante los tres últimos meses las y los han llamado por un
apodo ofensivo, 2015 (Porcentaje)
Fuente: Estudio Internacional de Educación Cívica y Ciudadanía – ICCS, 2015 Elaborado por
DPNNA-MIMP
Por otro lado, un tercio de las docentes (32.3%) informaron que a un y una estudiante se le ha
hecho bullying por parte de otros y otras estudiantes.
Docentes que informaron que a un y una estudiante se le ha hecho bullying por parte de
otros y otras estudiantes, 2015 (Porcentaje)
Fuente: Estudio Internacional de Educación Cívica y Ciudadanía – ICCS, 2015 Elaborado por
DPNNA-MIMP
c.- Accesibilidad a los servicios de salud: personal de salud, servicios de salud existentes para
su protección
El indicador que representa la situación del acceso a la salud en las NNA es el “Porcentaje de
niñas, niños y adolescentes con seguro de salud” (ENAHO). Así, entre el año 2012 (68.9%) y el
año 2019 (85.8%) se observa un incremento de 16.9 puntos porcentuales, respecto a la
cobertura del seguro de salud a este grupo poblacional. Cabe destacar, además, que el
porcentaje de NNA con seguro de salud en el ámbito rural el porcentaje se ha incrementado en
13.2 puntos porcentuales, entre el año 2012 (79.7%) y el año 2019 (92.9%). En el ámbito
urbano se ha incrementado en 19.4 puntos porcentuales, desde el 2012 (64.1%) al 2019
(83.5%).
Los servicios de salud diferenciados para la atención integral a adolescentes la Defensoría del
Pueblo (DP) del año 2018 indica que, de los establecimientos de salud supervisados que
corresponden a las categorías I-1 y I-2 (9), un 66.6%, (6) no cumple con ofrecer servicios de
salud diferenciados para la atención a las/los adolescentes, de acuerdo a lo establecido en las
normas de categorización de los establecimientos de salud y a las normas de servicios
diferenciados para las/los adolescentes . Asimismo, a pesar de que los establecimientos de
salud de nivel I-3, I-4, II-1, II-2 y III-1 deben de contar con ambientes exclusivos para la atención
de la población adolescente, solo el 57.3% (47) de los 82 establecimientos supervisados,
cuenta con un ambiente exclusivo. De estos establecimientos, solo el 70.2% (33), ofrece todas
las prestaciones indicadas en el paquete de atención integral para las/los adolescentes (DP,
2018). En cuanto a la periodicidad de la capacitación, en los establecimientos de salud de las
categorías I-1 y I-2, se advierte que solo el 55.6% recibió capacitación hace más de 6 meses, el
22.2% dentro de los últimos 6 meses; y, un 22.2% no recibió ninguna capacitación. Es más,
sobre la capacitación del equipo humano en todos los servicios de salud diferenciados para la
atención integral a las/los adolescentes supervisados, solo el 63.7% (58) manifestó que
contaba con un plan de formación en salud sexual y salud reproductiva de las/los
adolescentes, mientras que el 36.3% (33) de servicios diferenciados aún no contaba con el
mismo (DP, 2018). Esto tiene un estrecho vínculo con el 25.3% (23) de establecimientos de
salud que no cumplen con la actual Norma Técnica de Salud de Planificación Familiar, la misma
que precisa que los anticonceptivos temporales que conforman actividades de planificación
familiar no constituyen tratamiento médico, por lo que estas deben estar disponibles en el
servicio de Planificación Familiar en favor de la salud sexual y salud reproductiva a las y los
adolescentes. Pese a ello, en estos servicios aún se exige la presencia de los progenitores,
medida que, según la DP, “deviene en una práctica discriminatoria” a esta población.
El porcentaje de niños y niñas menores de 36 meses con CRED completo para su edad, entre
los años 2011 y 2019, pasó de 47.3% a 62.1%, incrementándose en 14.8 puntos porcentuales.
No obstante, debido a la pandemia por la COVID 19, este indicador cayó a 38.9% para el año
2020. Sin embargo, debe destacarse que previo a la pandemia el principal avance de este
indicador se había dado a nivel rural, visto que este se incrementó de 55.2%, en el 2011, a
69.2%, en el 2019. Situación distinta al ámbito urbano, en el que el indicador solo llegó al 59%
en el 2019, tras haber mejorado 16.3 puntos porcentuales respecto al año 2011 (43.3%). Cabe
mencionar, que para el 2020, el indicador cayó 18.4 pp. en el área rural (50.8%) y 24.7 pp. en el
área urbana (34.9).
Cabe señalar, además, que, según la normativa del Ministerio de Salud aprobada en el año
2012, el indicador de salud de adolescente es la entrega del Paquete de Atención integral de
Salud que incorpora prestaciones para identificar factores de riesgo e intervenir
oportunamente, así como fortalecer los factores protectores en salud sexual y reproductiva,
salud mental y salud nutricional. En ese sentido, los resultados en estos últimos años muestran
una tendencia positiva de la atención de adolescentes en todos los establecimientos de salud,
el cual se incrementó de 17.9% en el año 2015 a 30% en el año 2019, cuando se aprueba la
nueva Norma Técnica de Salud. Debe destacarse que si bien el contexto de pandemia afectó el
acceso a los servicios (bajando la atención a adolescentes a 11% al año 2019), el MINSA
implementó diferentes estrategias establecidas en el marco de la Directiva Sanitaria 127-2020
MINSA, a fin de recuperar la tendencia positiva de este indicador
Resp
onsa
Código Objetivo Prioritario ble d Lineamiento
el O
P
OP 1 Mejorar las condicion MIN Lineamiento 1
es de vida saludables SA11 Garantizar la atención y tratamiento integral en salud, por
de las niñas, niños y a curso de vida, para las gestantes, niñas, niños y adolescent
dolescentes. es y sus familias, con énfasis en disminuir el embarazo en a
dolescentes.
Lineamiento 2
Resp
onsa
Código Objetivo Prioritario ble d Lineamiento
el O
P
Garantizar las condiciones de habitabilidad y adecuación d
el hogar y el acceso a agua y saneamiento de los hogares.
Lineamiento 3
Garantizar la atención y tratamiento de la salud mental de
las niñas, niños y adolescentes.
Lineamiento 4
Propiciar el desarrollo de saberes, conocimientos y práctic
as de autocuidado de la salud física, emocional y mental.
Lineamiento 1
Incentivar el aprendizaje de habilidades cognitivas y socioe
mocionales en la primera infancia (0-5 años).
Lineamiento 2
Incrementar el acceso y conclusión oportuna de las niñas,
niños y adolescentes en una educación básica de calidad c
on pertinencia cultural, que garanticen el nivel satisfactori
o en sus logros de aprendizaje.
Lineamiento 3
Implementar mecanismos para la reinserción de los estudi
antes, en el que se desarrolle sus competencias en la atenc
ión educativa de estudiantes con extra edad y atraso escol
ar.
Lineamiento 4
Fortalecer el desarroll Fortalecer las conductas y actitudes positivas para la valora
MIN
o de la autonomía de ción de su identidad y el establecimiento de relaciones sal
OP 2 EDU
las niñas, niños y adol udables hacia una reducción de las conductas de riesgo co
12
escentes. nducentes al consumo de drogas en las niñas, niños y adol
escentes.
Lineamiento 5
Incrementar la práctica regular de la actividad física, recrea
ción, deporte, juego y prácticas que promuevan la diversid
ad cultural, para una vida activa y saludable de las niñas, ni
ños y adolescentes.
Lineamiento 6
Desarrollar estrategias para asegurar el tránsito entre nivel
es, modalidades y formas de atención de la educación bási
ca, y de esta a la técnico-productiva o superior tecnológica
o artística o pedagógica o universitaria, que permitan el de
sarrollo de competencias teniendo como base la autonomí
a, el ejercicio ciudadano y la inserción laboral de las y de lo
s adolescentes.
OP3 Disminuir el riesgo de MIM Lineamiento 1
desprotección de las P13 Mejorar las competencias parentales, fortaleciendo pautas
niñas, niños y adolesc de crianza positiva con enfoques de ciclo de vida, género,
entes. perspectiva de discapacidad e interculturalidad en las mad
res, padres y cuidadores.
Resp
onsa
Código Objetivo Prioritario ble d Lineamiento
el O
P
Lineamiento 2
Mejorar la capacidad de identificación, prevención y denu
ncia de las diferentes formas de violencia, en las niñas, niñ
os y adolescentes.
Lineamiento 3
Incrementar el conocimiento de la sexualidad orientados a
prevenir la violencia sexual, en las niñas, niños y adolescen
tes.
Lineamiento 4
Incrementar el acceso oportuno a servicios orientados a la
atención, recuperación y reintegración de niñas, niños y ad
olescentes víctimas de violencia, trata y explotación sexual
.
Lineamiento 5
Incrementar el acceso a intervenciones orientadas a la erra
dicación del trabajo infantil y protección del adolescente q
ue trabaja.
Lineamiento 6
Incrementar la adopción de actitudes y prácticas de recon
ocimiento y valoración de la diversidad a fin de prevenir to
do tipo de discriminación14 hacia las niñas, niños y adolesc
entes, en la ciudadanía.
Lineamiento 7
Incrementar el acceso oportuno a servicios orientados a la
prevención y atención del riesgo y desprotección familiar d
e niñas, niños y adolescentes.
Lineamiento 1
Incrementar el acceso a espacios seguros y de socialización
que permitan la promoción de la diversidad cultural, políti
Fortalecer la participa ca y artística de las niñas, niños y adolescentes.
ción de las niñas, niño
Lineamiento 2
s y adolescentes en lo MIM
OP4 Mejorar el acceso y uso de tecnologías de información y co
s distintos espacios de P15
municación de las niñas, niños y adolescentes.
decisión de su vida di
aria. Lineamiento 3
Desarrollar capacidades que permitan la participación en l
a toma de decisiones en el entorno familiar y comunitario
de las niñas, niños y adolescentes.
OP5 Optimizar la goberna MIM Lineamiento 1
nza vinculado al ejerci P Fortalecer la articulación intergubernamental para garantiz
cio de derechos las ni ar el ejercicio de derechos de las niñas, niños y adolescent
ñas, niños y adolesce es, en los tres niveles de gobierno.
ntes. Lineamiento 2
Desarrollar las capacidades y competencias para fortalecer
el seguimiento, la evaluación y la mejora continua de las in
tervenciones dirigidas a las niñas, niños y adolescentes en l
Resp
onsa
Código Objetivo Prioritario ble d Lineamiento
el O
P
as entidades de los tres niveles de gobierno.
Matriz de servicios de la Política Nacional Multisectorial para las Niñas, Niños y Adolescentes
al 2030
Secto
Objetivo Prio Servicios identificadPersona que recibe el s r invo
Lineamientos
ritario os en los sectores ervicio lucra
do
OP. 01. 1.
MINS
Mejorar las c Servicio de atención Mujeres gestantes
A
ondiciones de prenatal.
vida saludabl 2.
es de las niña Servicio de control
s, niños y adol Lin. 01.01. de crecimiento y de Niñas y niños de 0 a 11 MINS
escentes Garantizar la atención y trata sarrollo a recién nac años de edad. A
miento integral en salud, por idos, niñas y niños -
curso de vida, para las gestan CRED.
tes, niñas, niños y adolescent
3.
es y sus familias, con énfasis Adolescentes de 12 a 17
Servicio de salud pa MINS
en disminuir el embarazo en años que asisten al esta
ra el cuidado integr A
adolescentes. blecimiento de salud.
al del adolescente.
4.
Servicio de atención Niñas, niños y adolesce MINS
en salud a través de ntes. A
telemedicina.
Lin. 01.02. Familias pobres y extre
Garantizar las condiciones de madamente pobres de l
5.
habitabilidad y adecuación de os centros poblados rur
Viviendas rurales m
l hogar y el acceso a agua y sa ales y/o asentada de ma
ejoradas para la pob
neamiento de los hogares. nera dispersa, cuyas vivi MVCS
lación en situación
endas presentan déficit
de pobreza del ámbi
cualitativo en las variabl
to rural.
es materialidad y hacina
miento.
6. Familias de ámbitos urb MVCS
Promoción del acce anos de estratos socioe
so a viviendas adec conómicos C, D y E.
uadas de la població
n en ámbitos urban
os de los estratos so
cioeconómicos C, D
y E.
Secto
Objetivo Prio Servicios identificadPersona que recibe el s r invo
Lineamientos
ritario os en los sectores ervicio lucra
do
7.
Servicio de saneami
ento ampliado, mej
Población del ámbito ur
orado y rehabilitado MVCS
bano y rural.
en beneficio de la p
oblación del ámbito
urbano y rural.
Lin. 01.03. 8.
Niñas, niños y adolesce
Garantizar la atención y trata Servicio de detecció
ntes atendidas/os en los MINS
miento de la salud mental de n temprana en prob
servicios de crecimiento A
las niñas, niños y adolescente lemas de salud men
y desarrollo.
s. tal.
9.
Servicio de tutoría p
ara promover el bie
Niñas, niños y adolesce
nestar y fortalecer l MINE
Lin. 01.04. ntes en educación básic
as competencias so DU
Propiciar el desarrollo de sab a regular y especial.
cioafectivas y cogni
eres, conocimientos y práctic
tivas de las y los est
as de autocuidado de la salud
udiantes.
física, emocional y mental de
Familias con niña/o de 6
niñas, niños y adolescentes. 10.
a 36 meses y mujeres ge
Servicio de acompa MIDI
stantes, de zonas en sit
ñamiento a familias S
uación de pobreza y po
– SAF.
breza extrema.
OP. 02. 11.
Fortalecer el Servicio educación i
desarrollo de nicial para el desarr Niñas y niños de 0 a 5 a MINE
Lin. 02.01.
la autonomía ollo cognitivo y soci ños. DU
Incentivar el aprendizaje de h
de las niñas, n oemocional (0 a 5 a
abilidades cognitivas y socioe
iños y adolesc ños).
mocionales en la primera infa
entes Niñas y niños de 6 a 36
ncia (0 – 5 años). 12.
meses de edad que vive MIDI
Servicio de cuidado
n en situación de pobre S
diurno -SCD.
za o pobreza extrema.
Lin. 02.02. 13. MINE
Incrementar el acceso y concl Servicios de educaci Estudiantes de los modeDU
usión oportuna de las niñas, ón básica regular dif los de servicios educativ
niños y adolescentes en una erenciados para incr os de secundaria en el á
educación básica de calidad c ementar el acceso y mbito rural y estudiante
on pertinencia cultural, que g la conclusión oportus del modelo de servicio
aranticen el nivel satisfactori na de acuerdo con e EIB (educación intercult
o en sus logros de aprendizaj l contexto de las niñ ural bilingüe) del nivel s
e. as, niños y adolesce ecundaria.
ntes.
14. Adolescentes en nivel s MINE
Secto
Objetivo Prio Servicios identificadPersona que recibe el s r invo
Lineamientos
ritario os en los sectores ervicio lucra
do
Servicio de educació
ecundario de educación
n secundaria con for DU
básica regular.
mación técnica.
Lin. 02.03. 15.
Implementar mecanismos pa Servicio educativo d
ra la reinserción de las/os est e la educación básic
udiantes, en el que se desarr a regular para la ate Niñas, niños y adolesce MINE
olle sus competencias en la atnción de niñas, niño ntes con atraso escolar. DU
ención educativa de estudian s y adolescentes co
tes con extra edad y atraso es n desfase en su tray
colar. ectoria educativa.
Estudiantes de educació Direc
n secundaria. cione
s/
16.
Gere
Servicio de prevenci
ncias
ón del consumo de
Lin. 02.04. Regio
drogas en el ámbito
Fortalecer las conductas y ac nales
educativo.
titudes positivas para la valor de Ed
ación de su identidad y el est ucaci
ablecimiento de relaciones sa ón
ludables hacia una reducción Direc
de las conductas de riesgo co 17. cione
nducentes al consumo de dro Servicio de orientaci s/
gas en las niñas, niños y adoleón, consejería e inte Gere
Niñas, niños y adolesce
scentes. rvención breve para ncias
ntes con consumo de dr
la atención de niñas Regio
ogas.
, niños y adolescent nales
es con consumo de de Ed
drogas. ucaci
ón
Lin. 02.05. 18.
Incrementar la práctica regul Servicio de educació
ar de la actividad física, recre n física para promov Niñas, niños y adolesce
MINE
ación, deporte, juego y prácti er una vida activa y ntes de educación básic
DU
cas que promuevan una vida saludable en las niñ a regular.
activa y saludable de las niñasas, niños y adolesce
, niños y adolescentes. ntes.
Lin. 02.06. 19. Adolescentes del nivel d MINE
Desarrollar estrategias para a Servicio de orientaci e educación secundaria DU
segurar el tránsito entre nivel ón vocacional estud de EBR y ciclo avanzado
es, modalidades y formas de iantil a adolescentes de EBA.
atención de la educación bási de nivel de educació
ca, y de esta a la técnico- n secundaria y ciclo
productiva o superior tecnoló avanzado de EBA.
gica o artística o pedagógica
Secto
Objetivo Prio Servicios identificadPersona que recibe el s r invo
Lineamientos
ritario os en los sectores ervicio lucra
do
o universitaria, que permitan
el desarrollo de competencia
s teniendo como base la auto
nomía, el ejercicio ciudadano
y la inserción laboral de las y
de los adolescentes.
20.
Servicio de fortaleci
miento de capacida
Madres, padres o cuida
des de las madres, p
dores de las niñas, niños MIM
adres, o tutores par
y adolescentes con disc P
a el cuidado de niña
apacidad.
s, niños y adolescen
Lin. 03.01. tes con discapacida
Mejorar las competencias par d (SAIPD).
entales, fortaleciendo pautas Familias con niñas, niño
21.
de crianza positiva con enfoq s y adolescentes menor
Servicio de fortaleci MIM
ues de ciclo de vida, género, es de 18 años, en situaci
miento familiar acer P
perspectiva de discapacidad e ón de riesgo de desprot
cándonos.
interculturalidad en las madr ección familiar.
es, padres y cuidadores. 22.
Servicio de fortaleci
miento de prácticas
Madres, padres o cuida
de crianza a madres MIM
dores de niñas, niños y
, padres y cuidadore P
adolescentes.
s para el funcionami
ento familiar saluda
ble.
23.
Servicio para el rep
Lin. 03.02.
orte y seguimiento
Mejorar la capacidad de iden
para la atención op
tificación, prevención y denu Estudiantes de educació MINE
ortuna de los casos
ncia de las diferentes formas n básica. DU
de violencia contra l
de violencia, en la niñez y ado
as niñas, niños y ad
lescencia.
olescentes a través
del portal SíseVe.
24.
Lin. 03.03.
Servicio de impleme
Incrementar el conocimiento
ntación de la educa Estudiantes de educació MINE
de la sexualidad orientados a
ción sexual integral n básica. DU
prevenir la violencia sexual, e
(ESI) a estudiantes d
n la niñez y adolescencia.
e educación básica.
Lin. 03.04. 25. Niñas, niños y adolesce MIM
Incrementar el acceso oportu Servicio de atención ntes afectadas/os por vi P
no a servicios orientados a la de la violencia familiolencia familiar y sexual
atención, recuperación y rein ar y sexual a niñas, .
Secto
Objetivo Prio Servicios identificadPersona que recibe el s r invo
Lineamientos
ritario os en los sectores ervicio lucra
do
niños y adolescente
s.
26.
Servicio de atención
Niñas, niños y adolesce MINS
en salud mental par
ntes víctimas violencia. A
a víctimas de violen
cia (SAISVI).
Niños, niñas y adolesce MINJ
27. ntes víctimas de violenci USDH
OP. 03.
Servicio de atención a.
Disminuir el ri
en patrocinio legal a Niños, niñas y adolesce
esgo de despr
favor de niñas, niño ntes víctimas de la trata
otección de la
s y adolescentes víc de personas.
s niñas, niños
timas de violencia, t Niños, niñas y adolesce
y adolescente tegración de niñas, niños y ad
rata de personas y e ntes del delito de víctim
s olescentes víctimas de violen
xplotación sexual. as de explotación sexual
cia, trata y explotación sexual
.
.
28.
Servicio de atención
Niñas, niños y adolesce
integral de niñas, ni
ntes afectadas por el de MIM
ños y adolescentes
lito de trata de persona P
vulnerables al delito
s.
de trata de persona
s.
29.
Servicio de atención
integral de niñas, ni Niñas, niños y adolesce
MIM
ños y adolescentes ntes vulnerables al delit
P
vulnerables al delito o de explotación sexual.
de explotación sexu
al.
30.
Servicio de autoriza Adolescentes entre 14 a
ción previa a las y lo 17 años que soliciten au
s adolescentes para torización para que reali
MTPE
que realicen trabajo cen trabajo por cuenta
Lin. 03.05. por cuenta ajena o ajena o en relación de d
Incrementar el acceso a inter en relación de depe ependencia.
venciones orientadas a la err ndencia.
adicación del trabajo infantil 31.
y protección del adolescente Servicio de restituci
Niñas, niños y adolesce
que trabaja. ón derechos de las
ntes que trabajan en las
niñas, niños y adole MIM
calles, se encuentran en
scentes en situación P
situación de mendicidad
de calle (servicio de
o hacen vida en calle.
educadores de calle
).
Secto
Objetivo Prio Servicios identificadPersona que recibe el s r invo
Lineamientos
ritario os en los sectores ervicio lucra
do
Lin. 03.06.
32. Niñas, niños y adolesce
Incrementar la adopción de a
Servicio de sensibilizntes, con prioridad en q
ctitudes y prácticas de recono
ación para el fortale uienes pertenezcan a p
cimiento y valoración de la di CULT
cimiento de la iden ueblos indígenas u origi
versidad a fin de prevenir tod URA
tidad étnico cultural narios, pueblo afroperu
o tipo de discriminación16 ha
de las niñas, niños y ano y otros colectivos c
cia las niñas, niños y adolesce
adolescentes. ulturales.
ntes, en la ciudadanía.
Lin. 03.07. 33.
Incrementar el acceso oportu Servicio de cuidado
Niñas, niños y adolesce
no a servicios orientados a la diurno de niñas, niñ
ntes en situación de ries MIM
prevención y atención del rie os y promoción del
go de desprotección fa P
sgo y desprotección familiar adolescente, en ries
miliar y vulnerabilidad.
de niñas, niños y adolescente go de desprotección
s. familiar (CEDIF).
34.
Servicio de acredita
Defensorías municipales
ción de las defensor MIM
de la niña, niño y adoles
ías municipal de la n P
cente - DEMUNA
iña, niño y adolesce
nte (DEMUNA)
35.
Servicio juguemos e
Niñas, niños y adolesce
n tu DEMUNA para
ntes entre 6 y 12 años,
el fortalecimiento d MIM
de la jurisdicción territo
e capacidades de au P
rial de municipalidades
toprotección de niñ
que ofrecen el servicio.
as, niños y adolesce
ntes
36.
Servicio juguemos e
Niñas, niños y adolesce
n las plataformas iti
ntes entre 3 y 14 años,
nerantes de acción
que viven en comunida
social – PIAS para el MIM
des de las riberas de los
fortalecimiento de c P
ríos Napo, Morona, Put
apacidades de auto
umayo y Yavarí en Loret
protección de niñas,
o y el Lago Titicaca.
niños y adolescente
s.
37. Centros de Acogida Resi MIM
Servicio de acredita dencial de tipo público, P
ción de los centros privado y mixto.
de acogida residenci
al para las niñas, niñ
os y adolescentes e
n situación de despr
otección familiar
Secto
Objetivo Prio Servicios identificadPersona que recibe el s r invo
Lineamientos
ritario os en los sectores ervicio lucra
do
38.
Servicio de acogimieNiñas, niños y adolesce
nto residencial para ntes, con o sin discapaci
niñas, niños y adole dad, con medida de pro MIM
scentes, con o sin di tección, en acogimiento P
scapacidad, en situa residencial desde 0 mes
ción de desprotecci es hasta 17 años.
ón familiar.
39.
Servicio de protecci Niñas, niños y adolesce
ón especial a niñas, ntes en situación de ries
MIM
niños y adolescente go de desprotección fa
P
s en situación de rie miliar o desprotección f
sgo o desprotección amiliar provisional.
familiar provisional.
40.
Servicio de familias
acogedoras para niñ Niñas, niños y adolesce
MIM
as, niños y adolesce ntes en situación despr
P
ntes en situación de otección familiar.
desprotección famili
ar provisional.
41.
Adopción de niñas,
Niñas, niños y adolesce
niños y adolescente
ntes declarados judicial MIM
s declarados en des
mente en desprotección P
protección familiar
familiar y adoptabilidad.
y adoptabilidad con
una familia idónea.
42.
Servicio de atención
en patrocinio legal a Niñas, niños y adolesce
favor de niñas, niño ntes en situación despr MINJ
s y adolescentes en otección familiar y adop USDH
situación de desprotción.
eccion familiar y ad
opción.
OP. 04. Lin. 04.01. 43.
Fortalecer la Incrementar el acceso a espa Servicio de fortaleci Estudiantes de educació
MINE
participación cios seguros y de socializació miento de los espac n básica regular y básica
DU
de las niñas, n n que permitan la promoción ios de participación especial.
iños y adolesc de la diversidad cultural, polí estudiantil.
entes en los d tica y artística de las niñas, ni 44. Especialistas a cargo de MIM
istintos espaci ños y adolescentes. Servicio de promoci los consejos consultivos P
os de decisión ón y fortalecimiento de niñas, niños y adoles
de su vida dia de los consejos cons centes en los gobiernos
ria. ultivos de niñas, niñ regionales.
Secto
Objetivo Prio Servicios identificadPersona que recibe el s r invo
Lineamientos
ritario os en los sectores ervicio lucra
do
os y adolescentes.
45.
Servicio de dotación
de infraestructura y Familias urbanas sin acc
equipamiento urba eso a servicios de equip
MVCS
no, sostenible y acc amiento e infraestructu
esible, para centros ra urbana.
poblados urbanos d
el país.
46.
Lin. 04.02. Servicio de cobertur Instituciones públicas (c
Mejorar el acceso y uso de te a a internet fijo que olegios, comisarías, cent
cnologías de información y co contribuye al fortaleros de salud) o localidad MTC
municación de las niñas, niño cimiento de capacid es con más de 100 habit
s y adolescentes. ades de las niñas, ni antes.
ños y adolescentes.
47.
Lin. 04.03. Servicio de fortaleci
Desarrollar capacidades que miento de capacida
Niñas, niños y adolesce
permitan la participación en l des de participación
ntes de consejos consul MIM
a toma de decisiones en el en de las niñas, niños y
tivos de niñas, niños y a P
torno familiar y comunitario adolescentes en los
dolescentes regionales.
de las niñas, niños y adolesce procedimientos que
ntes. les involucren o afe
cten.
Lin. 05.01.
Fortalecer la articulación inte
rgubernamental para garantizEste lineamiento no
ar el ejercicio de derechos de involucra servicios1 - -
OP. 05.
las niñas, niños y adolescente 7.
Optimizar la g
s, en los tres niveles de gobie
obernanza vin
rno.
culado al ejer
Lin. 05.02.
cicio de derec
Desarrollar las capacidades y
hos de las niñ
competencias para fortalecer
as, niños y ad Este lineamiento no
el seguimiento, la evaluación
olescentes. involucra servicios1 - -
y la mejora continua de las in
8.
tervenciones dirigidas a las n
na en las entidades de los tre
s niveles de gobierno.
4. EXPERIENCIAS EN OTROS PAISES
CHILE
Chile, muestra una situación inversa a la de Bolivia, ya que, empero el país no tiene Ley
especial sobre derechos de niñez, ha formulado una Política Nacional de Niñez y Adolescencia
(2015-2025), que posee enfoque de Derechos Humanos, y género. Además, favorece la
participación, incluyéndola no sólo como principio rector, sino como área estratégica. De esta
Política se derivó el Plan de Acción Nacional de Niñez y Adolescencia 2018-2025, que incluye
como uno de los compromisos Generar los mecanismos que aseguren la participación de los
NNA en los procesos de elaboración de proyectos de ley y en el diseño, implementación,
monitoreo y evaluación de políticas, planes y programas a nivel nacional, regional y local
La visión en esta Política está definida por un horizonte de sentido a un plazo de diez años y
con una orientación de las decisiones estratégicas que en ella se contempla. Su formulación
recoge y organiza de manera simple y sintética la identificación de diversas aspiraciones para la
niñez y adolescencia proyectadas para Chile al año 2025 y que son las aspiraciones recogidas
durante su proceso de construcción. En Chile al 2025, los niños, niñas y adolescentes cuentan
con las condiciones que garanticen el ejercicio de sus derechos de acuerdo a su curso de vida,
sin distinción de origen social, género, pertenencia a pueblos indígenas, diversos sexualmente,
en situación migratoria, en situación de discapacidad o cualquier otro factor de potenciales
inequidades La Política Nacional de Niñez y Adolescencia aspira a contar con:
• Un país fundado en los valores de la democracia donde niños, niñas y adolescentes sean
participantes activos e incidentes en las materias que les afectan, en consonancia a la
evolución de sus facultades, su edad y madurez, a través de relaciones construidas desde el
respeto y valoración de sus opiniones, deseos y formas de expresión y creación.
• Un país en que niños, niñas y adolescentes crezcan y se desarrollen con la seguridad de estar
protegidos, que puedan desplegar todo el potencial de capacidades, y que sus derechos sean
respetados por cada uno de los miembros de la sociedad en cada una de las acciones que
desarrollan.
• Un país que actúe de manera oportuna e integral frente a las situaciones y condiciones que
obstaculizan o atentan contra el pleno desarrollo de niños, niñas y adolescentes, a través de la
interrupción y restitución de los derechos vulnerados y la reparación psicosocial de los daños
asociados a dichas vulneraciones.
• Un país donde el Estado cuente con regulaciones y una institucionalidad que permita el
cumplimiento del mandato de la Convención por medio de una continua calidad y efectividad
de su accionar. Así, consolidar un nuevo trato político para la niñez y adolescencia en todo el
territorio.
En definitiva, un país que aspira a consolidar un nuevo trato para la niñez y adolescencia, que
encarne el respeto y promoción de sus derechos; reconozca, promueva y materialice el rol del
Estado y la ciudadanía como garantes para su ejercicio pleno, y sitúe el desarrollo, bienestar y
felicidad de los niños, niñas y adolescentes en el centro de su quehacer.
OBJETIVOS ESTRATÉGICOS
• Fortalecer y promover la gestión pública y la calidad de las políticas, así como la de los
programas y servicios considerando la perspectiva de derechos.
• Las orientaciones prioritarias para la próxima década agrupadas en cinco áreas estratégicas
en el marco de los derechos de la Niñez y Adolescencia, y a las cuales deberá abocarse la
gestión del Sistema.
• Las condiciones transversales que orientan las acciones o procesos de gestión del Estado.
Estas se vinculan como condiciones para el Sistema, así como para la implementación de las
orientaciones prioritarias.
Estos lineamientos se muestran en la siguiente infografía que refleja la relación entre ellos.
BOLIVIA
El Estado Plurinacional de Bolivia, cuenta con un Plan de Desarrollo Económico y Social (2016-
2020)31, que podría considerarse un ejemplo típico del divorcio entre legislación y políticas
públicas que suele ocurrir en nuestros países. Aunque Bolivia cuenta con un Código de Niñez y
Adolescentes bastante avanzado, el Plan de Desarrollo, carece de enfoque de derechos de
niñez. Las niñas y los niños, se mencionan a partir de una condición de vulnerabilidad. Las
únicas referencias están relacionadas a los que están “malnutridos” y a “niñas y niños en
situación de calle”. En abril de 2017 se conformó el Comité Plurinacional de Niñas, Niños y
Adolescentes. Una de sus atribuciones es apoyar el funcionamiento y fortalecimiento de los
Comités Departamentales y Municipales de la Niña, Niño y Adolescente. No se cuenta con
información sobre su funcionamiento en los 339 municipios.
COLOMBIA
La Política, como instrumento, espera aportarle al país y a las distintas entidades, instancias y
niveles de gobierno elementos sobre los cuales puedan forjar las bases sociales, económicas e
institucionales que se requieren para construir un país como lo merecen todos y cada una de
nuestras niñas, niños y adolescentes. Un país en paz, que reconoce sus derechos como
prevalentes y en consecuencia asume el interés superior como el elemento orientador de
todas las acciones, y desde la subsidiariedad, complementariedad y concurrencia responde al
goce efectivo de sus derechos como condiciones fundantes del Estado Social de Derecho.
PARAGUAY
VENEZUELA
COSTA RICA
Este país, cuenta además con una Política Nacional para la Niñez y la Adolescencia de
Costa Rica (2009 – 2021)22, que orienta la aplicación efectiva de los derechos de la niñez y la
adolescencia. Dicha política tiene como eje el derecho a expresarse, con la garantía de que las
opiniones de niñas, niños y adolescentes serán escuchadas, respondidas y tomadas en cuenta
en todos los asuntos que se relacionen con su vida.
PANAMA
CUBA
HONDURAS
En Honduras, en contexto del Pacto Municipal por la Infancia, compromisos por la niñez y
adolescencia, desde las Alcaldías, se está estimulando la generación de espacios para la
participación significativa de niñas, niños y adolescentes en el diseño e implementación de las
políticas públicas, y establecer mecanismos de rendición de cuenta e indicadores de monitoreo
de gestión municipal sobre los derechos de la niñez y adolescencia. En 2015, con participación
de niñas, niños y adolescentes la municipalidad de Masaguara promulgó su Política de Niñez y
Adolescencia, y en este 2018 el municipio de San Pedro Sula aprobó la suya (2018-2022). En la
misma se dice que su objetivo es: Promover la participación organizada de la Niñez y
adolescencia para garantizar que las instituciones de gobierno y la sociedad civil, implementan
la política escuchando y tomando en cuenta su opinión.
EL SALVADOR
MÉXICO
NICARAGUA
La política “Amor para los más Chiquitos y Chiquitas” fue creada en 2011 con el objetivo de
fortalecer las articulaciones interinstitucionales de las acciones realizadas en función de la
primera infancia, además de articular todos los programas dirigidos a este sector de la
población. En particular, busca: 1) Restituir los derechos humanos de los niños menores de 6
años y de las madres embarazadas y lactantes y propiciar su desarrollo humano integral; y 2)
articular todos los programas, centros y acciones estatales para que sean universales,
gratuitos, de calidad, equitativos, con calidez humana, pertinencia cultural y social.
2. Salud: garantía de salud integral al binomio madre-hijas e hijos (prenatal, parto y salud del
recién nacido) con servicios especializados y promoción de la salud preventiva.
7. Prevención de todas las formas de violencia contra la niñez, atención a las víctimas y sanción
a los agresores: programas socioeducativos y atención integral.
ECUADOR
La Estrategia Nacional Intersectorial para la Primera Infancia: Infancia Plena, liderada por el
Ministerio Coordinador de Desarrollo Social se ejecuta, desde 2012, a través de una visión
intersectorial e integral. Es una apuesta nacional para potenciar el desarrollo integral de las
niñas y los niños menores de 5 años, considerando que las condiciones de vida, la estimulación
temprana, la educación, la nutrición y el afecto durante la primera infancia, condicionan el
futuro de las personas.
La Estrategia Infancia Plena, alineada al Plan Nacional del Buen Vivir 2013-2017, está orientada
a reducir las inequidades, equiparando el punto de partida en el proceso de desarrollo
humano, desde el período de gestación. Es así, que una adecuada crianza por parte de las
madres, padres y cuidadores, además de una intervención de calidad y oportuna por parte del
Estado y el apoyo de la comunidad, permitirá la erradicación definitiva de la pobreza,
fortaleciendo capacidades y generando mayores oportunidades en la población.
El Plan Nacional para el Buen Vivir 2013-2017 es la hoja de ruta del Estado, en él se establecen
ejes que plantean rupturas o aportes programáticos, entre ellos se incluye a la equidad como
un imperativo moral para erradicar la pobreza, en este sentido se plantea el desarrollo integral
de la primera infancia, dado que “si no se generan capacidades desde que nacemos,
condenamos a la sociedad al fracaso” (PNBV 2013 – 2017). En este marco, la Estrategia
Infancia Plena establece políticas orientadas al desarrollo integral de la primera infancia como
una prioridad del Estado.
De los 12 objetivos del Plan, los siguientes son los que mayor vinculación tienen con la
Estrategia Infancia Plena:
En el Perú, existen dos planes o políticas de desarrollo integral de la primera infancia que son
explícitos y públicos: el Plan Nacional de Acción por la Infancia y la Adolescencia y los
Lineamientos para la Gestión Articulada Intersectorial e Intergubernamental Orientada a
Promover el Desarrollo Infantil Temprano “Primero la infancia”.
El PNAIA 2021 tiene cuatro objetivos estratégicos relacionados con las diversas etapas de vida
de los Niños y Adolescentes, de los cuales el primero y el cuarto se refieren directamente a la
primera infancia. El primer objetivo estratégico es garantizar el crecimiento y desarrollo
integral de niñas y niños de 0 a 5 años de edad; y para lograrlo se apunta a cuatro resultados: i)
embarazos y nacimientos saludables con atención prioritaria en zonas rurales y comunidades
nativas; ii) estado adecuado de nutrición y salud; iii) estimulación temprana para los más
pequeños; y iv) acceso a servicios de salud y educación inicial de calidad. El cuarto objetivo
estratégico es garantizar la protección de las niñas, niños y adolescentes de 0 a 17 años de
edad.
El Plan cuenta con un Sistema de Monitoreo y Evaluación llamado SIMONE, que brinda
información del progreso en el logro de los resultados esperados, y por ende, de los objetivos
estratégicos. Hay definidos indicadores para todos los resultados de interés; sin embargo, no
para todos los indicadores existen datos. La Comisión Multisectorial responsable de la
implementación del PNAIA, prepara anualmente informes de avance.
Los Lineamientos fueron elaborados bajo una lógica de gestión por resultados y basada en
evidencia científica; y en ellos se priorizan siete resultados, factores e intervenciones efectivas,
sobre los cuales se orientarán las políticas de Estado (MIDIS 2014). Los resultados priorizados
son: nacimiento saludable, apego seguro, adecuado estado nutricional, comunicación verbal
efectiva, camina solo, regulación de emociones y comportamiento, y función simbólica. Estos
resultados se encuentran estrechamente relacionados (cadenas causales) y se integran en
habilidades cada vez más complejas que sirven de base para nuevos aprendizajes (MIDIS
2014). Así mismo, los Lineamientos identifican un grupo de factores que deben ser abordados
por el estado y la sociedad para lograr el Desarrollo Infantil Temprano; así como
intervenciones, que son el conjunto de acciones, identificadas a partir de la evidencia científica
recopilada, cuya implementación genera cambios en los factores o resultados priorizados en el
marco del DIT (D.S. N° 010-2016-MIDIS). Los Lineamientos identifican más de 40
intervenciones, que en conjunto están orientadas a lograr: i) la atención oportuna en salud y
nutrición a la adolescente, gestante, niña y niño de 0 a 5 años; ii) las prácticas adecuadas de
crianza y cuidado para el desarrollo y aprendizaje infantil en la familia; iii) la atención educativa
de calidad para niñas y niños de 0 a 5 años; iv) la erradicación de todo tipo de violencia hacia la
niña, niño y la mujer; y v) el aseguramiento de un entorno adecuado en el hogar y la
comunidad (MIDIS 2014).
En general, las y los actores clave entrevistados para la elaboración de este informe de
progreso identificaron a ambos documentos -el PNAIA y los Lineamientos “Primero la
infancia”- como los referentes principales al hablar sobre una política nacional de primera
infancia. Sin embargo, cuando se les preguntaba acerca del documento de política que era el
referente para organizar las acciones de su organización o institución en temas de desarrollo
infantil temprano o primera infancia, la mayoría de entrevistados –tanto del sector público,
como de la academia, la cooperación internacional y organizaciones no gubernamentales- se
refirió a los Lineamientos. En general, si bien se refieren al PNAIA como instrumento marco de
política pública del estado peruano, entienden que los Lineamientos complementan lo
señalado en el PNAIA, aterrizando más las políticas para niñas y niños menores de 5 años.
Al ser consultados sobre las principales fortalezas de los Lineamientos, varios de los
entrevistados –incluyendorepresentantes de diferentes sectores del estado y de la sociedad
civil- destacaron el hecho de estar basados en evidencia científica rigurosa, lo que quedó
plasmado en los documentos técnicos producidos por los grupos de trabajo de la Comisión
Multisectorial3. En su opinión, el énfasis en el uso de evidencias permitió no solo darle solidez
al documento de política sino además resolver muchas discrepancias entre sectores, pues no
se trataba de lo que decía un sector u otro, sino de lo que la evidencia sugería. Igualmente, el
hecho de haber sido un proceso participativo, en el que hubo que trabajar intensamente, y con
el que todos los sectores se comprometieron, parece haber contribuido a generar un sentido
de propiedad (ownership) sobre estos Lineamientos. Aunque el proceso fue liderado por el
Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social (MIDIS), técnicos de otros sectores del estado como
el Ministerio de Educación (MINEDU) o el Ministerio de Salud (MINSA) también se sentían
representados por los Lineamientos.
Con relación a las debilidades o limitaciones de los Lineamientos “Primero la Infancia”, varios
actores entrevistados tanto del sector público como de organizaciones no gubernamentales,
coincidieron en señalar que una gran limitación era el hecho de que los Lineamientos no
especifican quién es responsable de qué y cómo, es decir, en el documento no se señalan
responsabilidades específicas para cada sector, ni se detallan reglas de asignación
presupuestal.
Muy ligado a lo anterior, se encuentra otra limitación identificada por algunos entrevistados
tanto del sector público como de la sociedad civil: los Lineamientos no tuvieron suficiente
capital político de respaldo. La Comisión Multisectorial encargada de su elaboración, fue
designada por resolución suprema a fines del año 2013, en un momento en que el gobierno de
turno, encabezado por el Presidente Humala, mostraba una clara intención de impulsar la
agenda para la primera infancia en el país. Sin embargo, para mediados del año 2014 cuando la
Comisión ya había terminado la elaboración de los Lineamientos y estos ya contaban con la
aprobación preliminar de todos los sectores involucrados, el apoyo político a la iniciativa al
más alto nivel parecía haberse perdido. De hecho, la resolución suprema aprobando los
Lineamientos recién se dio un día antes de que el Presidente Humala dejara el poder, el 27 de
julio de 2016. Una vez aprobados, los Lineamientos “Primero la Infancia” ya no tuvieron el
respaldo suficiente. Para algunos entrevistados, el que los lineamientos no tengan carácter de
Ley -como sí tiene el PNAIA- es otra muestra más de su debilidad política.
La implementación limitada que los lineamientos han tenido hasta la fecha, está
estrechamente relacionada con lo que varios de los entrevistados –tanto del sector público
como de la sociedad civil- han identificado como un gran desafío en el país: no existe un
liderazgo claro en la política nacional de primera infancia. Como consecuencia de esto, lo que
ocurre actualmente en materia de gobernanza sobre políticas de primera infancia es que
existen –en opinión de los entrevistados- disputas por la rectoría entre diferentes sectores. En
opinión de los actores de la sociedad civil –tanto de la cooperación internacional como de
organizaciones no gubernamentales- lo único que existe en el país son rectorías temáticas, es
decir, el MINEDU tiene la rectoría en materia de servicios educativos, el MINSA en salud y
nutrición, el MIMP en protección social, etc; más no observan una rectoría o liderazgo para el
desarrollo infantil en general. El problema con esto, señalan algunos entrevistados, es que “las
y los niños están descuartizados”, refiriéndose a que en la práctica no se tiene una mirada
integral de su desarrollo. Respecto a cómo superar la falta de un liderazgo claro en políticas
de primera infancia, la propuesta de algunos de los entrevistados es que la rectoría sea
asumida por el Presidente de la República o la Presidencia del Consejo de Ministros (PCM),
como único modo de superar los potenciales conflictos entre todos los sectores del estado
involucrados en la atención a la primera infancia, que son en principio pares y no está uno por
encima de los otros. Adicionalmente, se señaló en las entrevistas que para que la rectoría sea
tal, debe venir acompañada de la capacidad de asignar presupuesto para el cumplimiento de
los diferentes roles y responsabilidades de los sectores. Al respecto cabe señalar que esta es
una idea que está en el tintero hace varios años aunque no ha logrado concretarse. El Consejo
Nacional de Educación (CNE 2014) sugería en su balance del año 2013 la creación de una
Autoridad Nacional para la Infancia, de modo que se alinearan las políticas de todos los
sectores y se priorizará realmente a los niños menores de 6 años. Similar propuesta tiene el
Grupo Impulsor Inversión en la Infancia en su Pacto Social (ver acuerdo 4). Sin embargo, para
que una instancia como esa realmente funcione, es importante -como sostiene Cueto (2011)-
que esta autoridad no sea solo simbólica, sino que tenga “dientes”, refiriéndose a tener la
capacidad de aprobar planes coordinados y presupuestos, generando así sinergias entre los
diferentes sectores. Varios de los entrevistados tanto del sector público como de la sociedad
civil, coincidieron en señalar que la iniciativa actualmente en curso para la creación de un
Programa Presupuestal orientado a resultados de Desarrollo Infantil Temprano (PPoR DIT) es
una oportunidad inmejorable para favorecer la intersectorialidad y asignar responsabilidades
con relación a las políticas y programas de primera infancia. La Ley de Presupuesto del Sector
Público para el Año Fiscal 2019 (Ley N° 30879), señala en su artículo 22 que la mejora
significativa de los resultados específicos del Desarrollo Infantil Temprano constituye una
prioridad del Estado en materia de logro de resultados prioritarios del presupuesto. En ese
marco, la Ley aprobó la creación del PPoR DIT que debe establecer y priorizar las condiciones e
intervenciones efectivas basadas en evidencia, para la mejora de los resultados DIT. A
mediados de abril de 2019, se creó el Grupo de Trabajo Multisectorial encargado de
desarrollar los contenidos técnicos del PPoR DIT (R.M. Nº 161-2019-EF/10). De acuerdo a lo
señalado por el MEF, la expectativa de este grupo de trabajo es validar el modelo causal de los
Lineamientos “Primero la Infancia” y sobre esa base identificar qué intervenciones va a
financiar el estado peruano. Se trabaja con los Lineamientos porque su elaboración ha estado
basada en la revisión de evidencias y tienen la rigurosidad que solicita el MEF para armar la
metodología del programa presupuestal. Entre otras cosas, esta iniciativa apunta a resolver las
trabas que os presupuestos sectoriales ponían a un trabajo articulado entre sectores.
En el marco del PNAIA y de la Estrategia “Incluir para crecer”, se hace un seguimiento del
Gasto Público en Niños, Niñas y Adolescentes (GPNNA), es decir, se identifican los recursos que
el Estado Peruano destina para mejorar las condiciones de vida de la niñez y la adolescencia.
Para tal fin, desde el año 2013 se cuenta con una metodología que permite examinar de
manera continua la inversión que el Estado realiza en la niñez y la adolescencia. Dicha
metodología fue elaborada por el grupo de seguimiento al GPNNA conformado por
representantes del MEF, MINEDU, MINSA, MIMP, MIDIS, Mesa de Concentración para la Lucha
contra la Pobreza (MCLCP) y UNICEF (UNICEF 2016). La principal conclusión de los informes de
seguimiento, es que el GPNNA ha crecido de manera sostenida en los últimos años. Entre 2013
y 2016, este ha crecido, en promedio, en 7%; situándose para el año 2016 en S/ 28,724
millones de soles. Cuando se mira el GPNNA según ciclo de vida, se encuentra que para ese
mismo año, la distribución en las tres etapas de ciclo de vida fue similar: la primera infancia (0
a 5 años) representó 36%, la niñez (6 a 11 años) 33% y la adolescencia (12 a 17 años) 31%.
Cabe señalar sin embargo, que hasta 2016 el gasto en la adolescencia ha mostrado un
crecimiento mayor en comparación a los demás ciclos de vida a partir de 2014 (UNICEF 2016).
Con relación a las funciones en las que se ha priorizado el GPNNA en el año 2016, observa que
más de la mitad del GPNNA fue ejecutado en la función Educación (61%), especialmente en
mejorar los logros de aprendizaje en Matemática y Lectura de los estudiantes, así como en
aumentar el acceso a los servicios educativos en inicial, primaria y secundaria. En segundo
lugar, se ejecutó en la función Salud (16%) en la que se priorizó el gasto en vacunas, el Control
de Crecimiento y Desarrollo (CRED) y la atención prenatal. En tercer lugar, se ubicó la función
Protección Social (10%) en la que se priorizó el gasto en alimentación escolar y transferencias
condicionadas (UNICEF 2016). Los progresos con relación al GPNNA del Estado Peruano han
sido reconocidos por el Comité de los Derechos del Niño, que señala en su informe del año
2016 que celebra que el Estado haya aumentado sus recursos presupuestarios para hacer
efectivos los derechos del niño y que haya establecido un mecanismo para clasificar y
supervisar la inversión pública en favor de la infancia. Sin embargo, señala algunos aspectos a
considerar sobre la inversión pública en infancia: i) La desigual distribución de recursos entre
los diferentes sectores, como los de la protección y la participación de los niños; ii) La falta de
información sobre los recursos presupuestarios destinados a los niños en situaciones
vulnerables y marginales, incluidos los niños y niñas indígenas; y iii) El elevado índice de
corrupción en el Estado y sus repercusiones negativas en los recursos públicos, incluidos los
recursos destinados a la infancia (Comité de los Derechos del Niño 2016).
En salud
Difundir y promover las medidas preventivas ya conocidas como el lavado de manos, cubrirse
la boca al estornudar o toser, el distanciamiento físico entre Personas. Considerar las
necesidades específicas de cada población: indígenas, no indígenas, rurales, urbanos, personas
con discapacidad, en las acciones de información y prevención. Asegurar el acceso a vacunas y
prevención de enfermedades, inmunizaciones, influenza, a recién nacidos y nacidas. Y
estrategias para reducir el riesgo de enfermedades infecciosas como la polio, sarampión y
brotes de pertusis (tos convulsiva). Atención a niñas, niños y adolescentes con discapacidad, o
con otras enfermedades que necesiten continuar con la medicación y terapias. Y adolescentes
que padecen trastornos de la salud mental o tengan tratamientos por abuso de sustancias.
En educación
Asegurar que todas las niñas, niños y adolescentes tengan acceso a recursos educativos
ofrecidos por el MINEDU. Incluir en los contenidos pedagógicos recursos para la contención
emocional, autocuidado, prevención del COVID 19 y prevención de la violencia. Difundir los
teléfonos de emergencia para casos de violencia. Incorporar orientación sobre la protección de
la violencia cibernética y los peligros en internet. Fomentar el cuidado compartido del hogar,
con igualdad en la participación de hombres y mujeres. Atender las necesidades de juego y
recreación. Establecer protocolos para la prevención y monitoreo del contagio del COVID-19
en los centros educativos, de manera articulada con el MINSA. Garantizar las condiciones de
infraestructura y condiciones sanitarias de los locales escolares, con servicio de agua y
servicios higiénicos e insumos para el aseo (jabón y alcohol). Verificar las condiciones del inicio
del año escolar y funcionamiento del programa Qali Warma. Incorporar acciones de reflexión,
apoyo emocional y psicológico en las escuelas para que niños, niñas y adolescentes. Incluir
acciones dirigidas a docentes, padres y madres. Promover desde el currículo educativa, con
miras al 2021, el aprendizaje de la resiliencia para adaptarse a situaciones nuevas y de
emergencia, y cultivar la empatía y preocupación por el bien común. Planificar el cierre de la
brecha digital, el gradual acceso a internet y equipos de cómputo en todos los colegios
públicos y capacitar al profesorado en habilidades para el uso de tecnología.
Opinión y participación
Fomentar la división de las tareas en el hogar con igualdad entre varones y mujeres, para
evitar la sobrecarga de trabajo doméstico para las niñas y mujeres. Recoger las percepciones
de los niños, niñas y adolescentes sobre las repercusiones secundarias en sus vidas, en sus
familias, en la escuela y sus planes a futuro, y hacerla conocer a las autoridades regionales y
locales, de las escuelas y dirigentes de la comunidad para que tengan en cuenta sus
necesidades en las políticas de respuesta a la emergencia. Fortalecer el funcionamiento de los
Consejos Consultivos de Niñas, Niños y Adolescentes y de los Municipios Escolares como
espacios de propuestas en la gestión local y regional y de vigilancia que incluya el
cumplimiento de acciones de prevención de enfermedades y protección a la niñez y
adolescencia. Fortalecer la participación comunitaria para el control social y la identificación de
población que se encuentra en situación de vulnerabilidad y riesgo.
AL GOBIERNO NACIONAL
En el marco de la recomendación 12 del Comité de los Derechos del Niño al Estado peruano,
fortalecer la instancia rectora en materia de infancia, niñez y adolescencia dotándola del nivel
suficiente de autoridad, fortaleciendo sus conocimientos técnicos y capacidad para coordinar
eficazmente todas las actividades relacionadas con la aplicación de la Convención en los planos
intersectorial, nacional, regional y local y el funcionamiento del Sistema Nacional de Atención
integral de la infancia, niñez y adolescencia.
Diseñar e implementar una política pública que contribuya a compatibilizar la vida familiar con
la vida laboral, generando facilidades para que padres y madres participen en las actividades
formativas de sus hijos e hijas.
Desarrollar rutas, articular y ampliar la cobertura de los programas y acciones que los
diferentes sectores realizan para fortalecer competencias parentales, protocolos y sistemas de
referencia y contra referencia que articulen territorialmente a los diferentes actores y
establezcan responsabilidades y procedimientos para enfrentar las diversas formas de
violencia; considerando la gestión articulada de la intervención de los profesionales
(psicólogos, trabajadoras sociales, médicos) disponibles en las instituciones a fin de establecer
una atención eficiente y oportuna que maximice la calidad del servicio.
Articular y ampliar la cobertura de los programas y acciones que los diferentes sectores
realizan para fortalecer competencias parentales.
Mejorar la articulación entre el MIMP, el MINEDU, el MINSA, el MIDIS, los gobiernos regionales
y las municipalidades en cuanto a la creación y fortalecimiento de los Consejos Consultivos de
Niños, Niñas y Adolescentes, para favorecer y facilitar una presencia efectiva en esos espacios.
Diseño de mecanismos y/o procedimientos para la realización del seguimiento a las víctimas
que implique protocolo de recuperación, procesos, indicadores, control, monitoreo y
evaluación a cargo de los diferentes sectores. Lograr la alianza de instituciones privadas y
redes de apoyo comunitario.
A LA PCM - SERVIR
AL MEF Y EL MIMP
AL MINEDU
Garantizar la implementación efectiva en todos los niveles del sistema educativo de los
lineamientos para la gestión de la convivencia escolar, la prevención y la atención de la
violencia contra niñas, niños y adolescentes, aprobado por DS N° 004-2018-MINEDU: Plan,
estrategia de implementación y presupuesto.
CONCLUSIONES
1. El Plan Nacional de Acción por la Infancia y la Adolescencia 2012 – 2021 - PNAIA 2021,
es el instrumento marco de política pública del Estado Peruano, para articular y
vincular las políticas que se elaboren en materia de infancia y adolescencia en el país,
que orienta la acción del Estado y de la sociedad civil hacia el desarrollo integral de las
niñas, niños y adolescentes peruanos.
2. La COVID-19 no solo ha afectado la salud de las personas, sino que, además tiene un
impacto negativo en sus condiciones de vida, especialmente de las niñas, niños y
adolescentes.
BIBLIOGRAFÍA