Ser Mujer Desb - Unlocked

SER MUJER
Centro de Desarrollo Transpersonal Centro de Desarrollo Transpersonal

Marion Woodman, Robert A. Johnson,
Jean Shinoda Bolen, Riane Eisler,
June Singer, Deena Metzger,
i_’L
!. W.. Polly Young-Eisendrath,
Edward Whitmont y otros
SER MUJER
Edición a cargo de Connie Zweig
editoria1x5s
Numancia, 117-121
08029 Barcelona
• , ¿.
Ui:.
AGRADECIMIENTOS
;,•-• . Mi agradecimiento a:
Las que habéis contribuido a este libro: por vuestros azu
lejos llenos de color en este mosaico que refleja lo Femeni
no abandonado y el renacimiento de la Conciencia femenina
en nuestras vidas.
Las mujeres de mi línea materna: mi abuela materna, por
la herencia de heridas que conducen a la búsqueda de cura
Título original: TO BE A WOMAN ción; mi madre, por su firme compromiso respecto a mi pro
Traducción: Alfonso Colodrón pia búsqueda y a mí misma, en la que lee como un libro
Portada: Ana y Agustín Pániker abierto; ymi hermana, por representar el polo opuesto que me
refleja como en un espejo.
© 1990 by Connie Zweig
© de la versión castellana:
Mis amigas y sorors mysticas: Marilyn Ferguson, por el ex
1992 by Editorial Kairós, SA. quisito regalo de la palabra escrita y por su fiera lealtad hacia
la búsqueda; Manan Rose —cuyas ideas impregnan este libro
Primera edición: Marzo 1993 desde el principio hasta el fin— por la verdad y por nuestro
amor; y B. Berman-Real, por su hermandad de toda la vida.
ISBN: 84-7245-264-6
Dep. Legal: B-6.634-1993
Suzanne Wagner, por tenerme de la mano a lo largo de
todo el laberinto; Jeremiah Abrams, por su amistad bondadosa
Fotocomposición: Beluga & Mleka, Córcega, 267, 08008 Barcelona y paciente, sus solícitos comentarios y colaboración fructífera;
Impresión y encuadernación: Índice, Caspe, 118-120, 08013 Barcelona J. Tarcher que estableció las bases para permitirme recopilar
este libro y que siempre apoya mis esfuerzos creativos; Ste
ve Wolf, cuya amistad ha sido un pozo inagotable de amor.
Todos los derechos reservados. No está permitida la reproducción total ni parcial de este li Y finalmente a mi padre, cuya rara combinación de inte
bro, ni la recopilación en un sistema informático, ni la transmisión por medios electrónicos, ligencia y humor me cautivó. Con independencia de lo lejos
mecánicos, por fotocopias, por registro o por otros métodos, salvo de breves extractos a efec
tos de reseña, sin la autorización previa y por escrito del editor o el propietario del copyright. que llegue, siempre seré tu hija amorosa.
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INTRODUCCIÓN
Como muchos esfuerzos creativos, este libro fue inspira
do por un sueño:
Estoy en el vestuario de mi madre. El papel que tapiza la
pared, de un suave verde oliva, está cubierto con capullos de
fi ores rosas. Sobre el escritorio de mármol hay un joyero de
mármol decorado en rosa, un florero de rosas del mismo co
lor y una foto enmarcada: la mía cuando era bebé, con una
risueña sonrisa en los ojos muy abiertos.
Mi madre se aproxima vestida con una larga falda negra
de fiesta y unas botas negras de cuero. Camina hacia mí
con algún pensamiento en su cabeza. Me tiende una fuente
verde con albaricoques maduros para que me sirva. Al mas
ticar su dulzura, dando vueltas al hueso, fijo mi mirada a tra
vés de la ventana en las montañas azul oscuro en la lejanía.
Siento un anhelo por lugares lejos de la habitación de mi ma
dre, lugares exóticos repletos del olor de especias raras y del
encanto de hombres extraños.
La voz de mi madre me trae de nuevo a la pequeña habi
tación verde. “Voy a peinarte para esta noche. “Me siento en
una banqueta tapizada con bordados delante del espejo y
mi madre empieza a cardarme el pelo hasta que triplica su
volumen anterior. Ella lo contempla complacida consigo
misma, a medida que mi cabeza se hace más grande. Después
deja el peine y con sus dos manos empieza a alisar las pun
tas hasta que se forma una especie de bola. A continuación
-.
Introducción Introducción
toma la laca y llena el aire con una espesa nube. Cruza los únicamente como estereotipo social. Sus cualidades reales
brazos y mira satisfecha. -como artista de extraordinario talento y como estudiosa per
Me levanto y empiezo a caminar hacia mi habitación; me ceptiva de la naturaleza humana- no están todavía a mi alcance.
detengo delante del cuarto de baño. La cabeza ensangrenta&z Antes de empezar la investigación que desembocó en este
de mi padre está en el lavabo. libro, he sido instructora de meditación durante mucho tiem
A diferencia de muchos de mis otros sueños, éste no se po. Yo era una persona muy versada en las teorías budistas e
desvaneció pronto en el olvido. Permaneció claro y comple hinduistas sobre el desarrollo de la conciencia humana. Com
to en mi mente, como si insistiera en ser reconocido. Me ob prendí que, al igual que la evolución biológica, la evolución
sesionaba con preguntas: ¿Por qué había cortado yo la cabe de la conciencia avanza en fases que se desarrollan con ex
za de mi padre? ¿Por qué no sentía remordimientos ante este periencias específicas dentro de la psique. Sin embargo, a di
“acto horrible? ¿Por qué había dejado que mi madre me die ferencia de la evolución biológica, el crecimiento psicológi
Ira una nueva forma? ¿Por qué sus esfuerzos parecían tan ar cQçunprocesoautoconsc1eflte para avanzar ñesita
tificiales, tan incompletos? esfuerzo e intencionalid Puedeçelers este proceso de
En mi hambre por comprender estas cuestiones sobre mi crecimiento con ciertas prácticas que fortalecen nuestras ex
propio desarrollo, empecé el análisis junguiano. Ya había periencias internas, como la rneditaçión y el análisis o psi
experimentado otras formas de psicoterapia, pero no había coterapia, y también con el conocimiento práctico de cómo in
trabajado con el inconsientei tfves de mis sueños Cuan tegrar estas experiencias en la vida consciente.
do empecé a desvelar los mensajes codificados de éste y A medida que empecé a leer ampliamente sobre la psico
otros sueños, también empecé a descubrir algunos de los pa logía profunda junguiana y la spiritualidad. de la mujer, y a
sos claves en la danza del Principio Femenino que se desa hablar con otras mujeres acerca de su propio desarrollo es
rrolla dentro de todas las mujeres. piritual y psicológico, llegué a darme cuenta de que mis pa
A partir de este sueño, aprendí que tenía que sacrificar mi triarcasesiirjuajes me habían p pjçionada_muy pocas&
posición junto a mi padre, y a través de él, sacrificambién coipreissjjps como mujer. Las filosofías orienta
toda ld viacióiiela sociedad patriarcal dominada por les, ancladas en las tradiciones monásticas, tienden a ignorar
los hombres. Para ser u miijr, para poseer plena y cons las diferencias entre el género masculino y el femenino, o a
cientemente mi propia identidad femenina, necesitaba rom dar por sentado que el estatus espiritual de la mujeres infe
perla coniiR5ii cóiiWmñtémasculina logica que habia go rioJ1gunas de estas filo cT póstiilii que una per
berniZiacomo el capitán de un disciplinado barco. soha no puede alcanzar las fases superiores de evolución en
Mi padre, que era muy culto, generoso y comunicativo, y un espr volver a nácer como hom
que poseía una personalidad dominante, ab_ecjipsado a brLNinguna de ellas presta atención a las necesidades y cua
mi madre en nuestrpjigar. Muchas de las cualidades de esta lidades de las mujeres.o
me habían pasado desapercibidas. En el sueño, comienzo a Cuando empecé a apartarme de estos grupos jerárquicos
dejarle darme forma, a realinearme con su influencia feme y de sus “dioses celestiales”, yacspoja.rmedesu_bagaje-fi
nina. Sin embargo, sus esfuerzos en este punto son inade losófico centrado enjps valores masculinos, comencé a mi
cuados; me dejan afectada sólo superficialmente y atractiva rar hacia mi propia exp iencii1otras mujeres, a recrear
lo Centro de Desarrollo Transpersonal Centro de Desarrollo Transpersonal 11

mi comprensión sobre el desarrollo espiritual femenino. Em sendrath y Florence Wiedemann en su profundo libro, Female
pecé a plantearme cuestiones directas: Authority, una mujer no puede ser al mismo tiempo un adul
to sano y una mujer ideal. Si adopta una actitud expresiva y
de eficacia, es considerada demasiado “masculina” y en con
r — ¿Qué significa ser mujer en un mundo de hombres
Ç para las que no queremos quedamos en casa y “volvemos secuencia se vuelve poco atractiva pará los hombres. Por el
contrario, si escoge un estilo de feminidad definido por los
— \ como nuestras madres”, ni luchar agresivamente y “con-
hombres y por la cultura dominada por ellos, se vuelve-de=
1J vertimos n hombres”
pendiene_yse_quedaindefensa--sin-opciones. De cualquie
— ¿Por qué mujeres que forman parte de matrimonios
convencionales, atrapadas en formas restrictivas y obli ra de las dos maneras, muchas mujeres afirman hoy día que,
gadas a llevar el peso de los sentimientos de dos seres como mujeres, se sienten profundamente insatisfechas.
humanos, se sienten repentinamente tan enfadadas que Lentamente, pero con seguridad, a medida que me per
: están empezando a divorciarse por oleadas? mitía entrar en estas aguas turbulentas, emergía una pauta es
— ¿Por qué algunas mujeres expresan su profundo de pecífica del desarrollo de las mujeres; ésta se ajusta a un
sencanto con la realidad del éxito profesional y las pro cuadro más amplio de la evolución humana y aparece con una
mesas del feminismo, y afirman actualmente que de alguna dirección y un propósito que se desarrollan de una manera or
manera se han olvidado de cómo ser mujer? denada. Fue casi como si pudiera ver con los ojos de mi
— ¿Por qué tantas mujeres se apresuran a tener hijos a una mente una de esas películas de flores que se abren poco a
edad relativamente tardía, en un intento de asegurar no poco, mediante fotogramas tomados espaciadamente; la úni
perderse esta experiencia que constituye la quintaesencia ca diferencia era que se trataba de una imagen de Mujer.
de lo femenino? Por otra parte, yo observaba un desarrollo paralelo en mi
— ¿Por qué está tan extendido el interés por la espiritua propia vida y en la cultura en general. Esta Visión Evolutiva,
lidad femenina y por la Diosa? ¿Qué es lo que falta de ma descrita a continuación, es un vínculo crucial que muchas
nera tan dolorosa a nuestras religiones culturalmente es personas han visto antes que yo: la evolución avanza a través
tablecidas, y qué es lo que está presente en esta nueva del individuo y de la colectividad sobre vías paralelas. De he
que está emergiendo? cho, la evolución psiQológica individual contiene una reca
pitulaciónde toda la evolución de la especie. De esta mane
Las respuestas pueden encontrarse en el anhelo de la mu ra, estamos íntimamente conectados a todos los seres
jer de ser auténticamente “femenina”, de vivirse a sí misma humanos en cualquier fase de la evolución.
plenamente como mujer y, al mismo tiempo, de ser una per Por esta razón, los pocos individuos que alcanzan estados
sona fuerte e independiente, cuyo poder y autoridad estén avanzados de conciencia pueden servir como faros que seña
enraizados dentro de sí misma. Es la búsqueda para satisfa lan el camino para el resto. Este principio es aplicable no sólo
cer esta necesidad tan profundamente sentida la que ha ali a los santos y a los sabios que parecen estar a leguas por de
mentado estas tendencias culturales diversas. lante de nosotros; quizá signifique que las personas que están
Sin embargo, nuestra sociedad está tan estructurada que haciendo el trabajo dificil y enriquecedor de diferenciación psi
deja este anhelo insatisfecho. Como señalan Polly Young-Ei cológica, tengan también las claves de nuestro futuro.
12 Centro de Desarrollo Transpersonal Centro de Desarrollo Transpersonal

13
Introducción
La Visión Evolutiva
1 Introducción
en lajiferenciación entre,sf mismas y los demás, eisjetoclel

obiety la parte del todo. Se lleva a cabo entonces la transi
Primera etapa: La conciejzcií.iinatriazcal. Todo el mundo clon de la pan ystLque a la
ha nacido de la Mujer. Inicialmente nos desarrollamos en re No sabemos detalladamente cómo tiene lugar a gran escala
lación con una madre concreta, en un mundo definido e ins esta transición del matriarcado al patriarcado en las diferen
tintivo de sentimientos y sensaciones. En este universo ce tes sociedades; pero sí conocemos el resultado él patriarca-
rrado, que con frecuencia se llama participation mystique, do, una forma de orgamzacion social enla queelpadre o va
todavía no tenemos fronteras alrededor del yo: no existe nin rón más viejo es reconocido como abezade la.trjbuódela
guna división entre el “yo” y el “no-yo”, el “sí-mismo” y 4 y la descéñdiñcia ysel parentesco se establece a tra
farniliá
“lo otro”. vés de la línea masculina.
Lo mismo que los iniijyidiios, laS culturas se enraízan en Este md5tkú1ar de vida social y político, que ha al
lo que podemosiiamarl aqipo de la Gran Madre. En esta canzadp hoy día su[pumbre en Occident, está caracterizado
etapa, las personas viven en pequeñas tribus o clanes, cerca por un 1ndiv1dualismQJeroz” e(heoe que lucha por el do
nas a la tierra, y con sus identidades delimitadas dentro del minjoy el beneficio personal triunfa n detrimento incluso de
grupo. Algunos arqueólogos e historiadores creen que estos la comunidad; se generaliza la creencia de que los hombres
pjgijçç1 veneraban a una deidad femenina y que (y el Principio Masculino) sonle categoría superior y valen
tenían escasas inclinaci-enes-haei&-1a-g+tei’a- mas qe las mujeres(y el Pnncipio Femenino) -
Esta primera etapa indiferenciada del desarrollo individual Este desplazamiento cultural a la conciencia patriarcal se
y colectivo personifica el Principio Femenino instintivo e efleja en eLdesarrollo in4ividual; cuando una persona co
inconsciente. Podemos observarlo todavía en las culturas na nlienza a epararse del vmculo inconsciente con la madre
tivas contemporáneas en las que el grupo sigue ido.más para adqii?zun sentimiento de-autoaormay de delimitacion
importeeelindividuq,_yen las que la relación de la gen del ego) La psicoanalista junguiana Marion Woodman ex
, ) te coja naturaleza está, ligada a su relación con lo divino. La plica el patriarcado en términos psiçológicos, como el viaje
“ cualidad mítica de estas culturas reside en un sentido dewi del héroe por salir del inconsciente: pl quj gçn:
( ) dad con el mundo natural. ‘Algunos investigadores han su
geridóque nuestros mitos del Edén y de otros paraísos pue
su carnjpo de búsqueda del pperpersonal.
El padre rompe de manera típica esta unidad primaria y de
den proceder de esta era poco conocida de la prehistoria, de dependencia dela madre. El eminente psicólogo junguiano
este estado de la conciencia matriarcal. Erich lçiiinn escribió que la conciencia matriarcal está
Segunda etapa: laconcienciapatriarcal. Inevitablemente siptonizadacqn 4procesn ieii, mientra&quekçon
los individuos acaban separándose dél gÑpo omniabarcante y cienci&ptiarcale separa del inconsciente en un incipien
del arquetipo de la Madre inconsciente. Empiezan a desarro te “ego mentar. Neumanu sugirió que esta fase comienza al
llar un sentido Qmbrionario de identidad individual. Cuando fina e primer año d vid4.y que se asemeja a un “segundo —<J
esto sucede, surge una structura so ial totalmente nueva, con nacimientciI..—’
sus correspondientes creencias y costumbres. También surge liüiil que las culturas patriarcales, los individuos en la
una nueva forma de pensar, en el que las personas.se. focalizan fase patriarcal están gobernados por el rquetipo-del-Par.lre) y
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1
- se caracterizan por la acción, la voluntad, el análisis, la lucha, raizarse conscientemente en lo Masculino, y por lo tanto su
« y la competición. Esta fase se convierte en el proceso gene
proceso de desarrollo se desenvuelve de manera diferente.
ral de crecimiento, en el que dejamos atrás a nuestros padres Pero desgraciadamente, casi para todo el mundo, 1a,s he
y aprendemos a cuidar de nosotros mismos, obteniendo la ridas de la infancia no. cerrado; las ecesidades pro
apariencia de independencia en cada esfera de la vida. fundamente sentidas han quedado insatisfechas Mtarde, las
Pero psicológicamente, muy en lo profundo, muchas per aportamos en nuestras relaciones íntimas de adultos, espe
sonas no nos separamos totalmente de nuestro padre o de :1 rafldQ quelas personas a las que amamos completen estos
nuestra madre, o de ninguno de los dos, o de las expectativas asunoendientes.Yo creo que esto sucede, en parte, porque
estereotípicas de la sociedad. Hemos aprendido del psicoa nadie nos enseña que esta etapa patriarcal de la evolución -el
nálisis (como por ejemplo, de Freud y de Alice Miller), de los desarrollo psicológico de un ego separado y saludable- re
psicólogos del crecimiento personal (como Jean Piaget, Erik quiere un esfuerzo consciente por nuestra parte Sin un in
Erikson, y Laurence Kohlberg), y más recientemente del mo tenso trabajo personal con un psicoterapeuta, guía, o mentor,
delo de recuperación en doce etapas de los Alcohólicos Anó que nos ayude a curar nuestras heridas y que señale los es
nimos, que la mayoría de la gente no desarrolla un ego ple collos del camino, el ego no se desarrolla plenamente por sí
namente equikbrado o un estado realmelite individual dentro mismo; hasta cierto punto permanece en una fase infantil.
de nuestra sociedad; seguimos siendo “anormales” en algu .47 Tercera etapa: la çonciencia emergente. Durante mucho
nos aspectos esenciales. Seguimos acarreando en nuestro in >tiempo, los filósofos y psicólogos ocfdintales con una pers
terior a nuestro padre y a nuestra madre, no sólo siguiendo sus pectivaevolut4vli con que esta emergencia de un ego se
J huellas, sino coñ frecuencia, caminando dentro de sus zapa la cumbre de la evolución humana, lo mis
tps Volvemos a crear las pautas de nuestros padres, convir mo. que consideraron la sociedad patriarcal como la cumbre
tiéndonos en alcohólicos de segunda generación, madres y pa de 1aevolución cultural. Hoy día, sin embargo, muchas per
.dres autoritarios, o grandes triunfadores compulsivos. sonas señalan el ocaso del patriarcado y los inicios balbuce
- Entonces nos rebelamos contra ellos, creyéndonos haber roto antes de una nueva era, al tiempo que resaltan la creciente
los patrones, peró permaneciendo en realidad prisioneros de destructividad de los valores egocéntricos y el potencial im
• los misrnos. pulsor de la vida de los valoras más transpersonales.
Para las mujeres, para las que la fuente de identidad está En especial, dos fen?menos han ayudado a catalizar la
constituida por nuestras madres, este proceso de evolución se transición cultural para salir del patriarcado rígido: l feii
desarrolla en una dirección. Nos identificamos con nuestras nismo y el estudio de las primitivas culturas de la Dioa. Es-
madres como fuente de nuestra existencia, tanto en el plano tos dos prismas enfocados sobre nuestro entorno cultural son •
biológico como psicológico.Así pues, para ser mujeres, te fundamentales, ya que durante miles de años hemos vivido ‘
nemos que enfrentar la paradoja de romper la identificación como peces en las aguas del patriarcado, asumiendo ciega
personal, pero pennaneciendo ancladas en lo Femenino. mente que éste era la ley de la naturaleza.
Para los hombres, cuya fuente de identidad está constituida Las feministas han hecho un nuevo análisis riguroso de los
por sus padres, la clave es la necesidad de luchar para libe estereotipos de los géneros masculino y femenino. Su con
rarse de sus madres. La evolución de los hombres implica en- tribución ha sido una llamada para despertar de la opresión

generalizada de las mujeres en esta forma de sociedad. A Hemos descubierto que muchas de las cosas que hoy damos
pesar de sus fracasos políticos evidentes, nada ha quedado in por sentadas (como la familia nuclear con un hombre a la ca
cólume: la paridad en los puestos de trabajo, la igualdad en beza del hogar, o la religión monoteísta con un dios mascu’
las relaciones de pareja, y una educación basada en la no lino) no han sido siemprç la rglaçmpitica.Enconsecuencia,
discriminación sexual para nuestros hijos e hijas, se han con podemos empezar a imaginar una gran variedad de alterna
vertido en metas generalizadas. tivas a nuestros patrones patriarcales.
Además, el feminismo creó la hermandad entre mujeres, Muchos han sido los costes de una norma patriarcal uni
un nuevo posicionamiento de las mujeres con las mujeres. lateral Muchas personas a mculan con el desasieco1ogico
Esto nos ha permitido hacer que los hombres y el Principio global a que nos enfrentam actualmente, porque nos arre
Masculino dejen de ser una prioridad personal en nuestras vi bat&yiolentamente nuestra conexión directa con- la tierra. A
1 das, y que para algunas de nosotras desaparezcan como ob este corte primordial le siguieron otros: las mujeres, que
sesión. La hermandad entre mujeres nos ha enseñado la igual siempre habían estado vinculadas a la naturaleza, perdimos
dad de las relaciones de las mujeres entre sí: una auténtica nuestros poderes instintivos y nos hicimos subordinadas de
revelación para las que teníamos como meta principal en los ]iombres. Lodivin, asociado previamente con la natu
contrar y ganarnos a un hombre en competición con otras raleza ycon el ci rio humano, se desvaneció en los reinos
mujeres. -
celestiales, conirti oenpQfna gran parte de las cosas
El feminismo también ha aportado una conciencia cre que antes se vivían como sagradas.
ci]edad de que las mujeres tomemos nuestro Es corriente hoy día entre ciertos grupos lamentar esta
oder de definirnos, nuestro propio lenguaje, y los medios evolución social y política. Muchas personas están fascina
para afectar e cambio institucional. Esto ha tenido como re das por los pueblos nativo orlo quç pueden enseñarnos
sultado la aparición de una línea de mujeres académicas que parayivir coiienos dureza sobre la tierra respetando sus le-,
están reescribiendo amplias partes de la historia y revelando ysSin embargo, hmo leado demasiado 1jpara vol-’
que existe un prejuicio masculino en el lenguaje, la religión, ver a la tierra y adpmodos regresivos de vida, aunque’
y en otras muchas áreas. En la actualidad, el trabajo intelec sn más naturales, más matriarcales, o más espirituals. Es
tual y sociopolítico realizado por miles de mujeres ha hecho cierto qu erños trattáhdesa]Ores en todo esto;
cambiar el feminismo desde su fase inicial reactiva, caracte no obstante, necesitamosnovar nuestra relación con la tie
rizada por los esfuerzos para obtener la igualdad de dere rray con loçljyj_d. una mhera consciente, aportando con
chos dentro del patriarcado, a una visión más madura que nosotros los dones de un pleno desarrollo en una sociedad pa
conducirá, esperémoslo, a una individualidad más profunda. triarcal: nuestra individualidad bien definida y nuestras men
La segunda lente de aumento sobre el patriarcado ha sido tes curiosas, sobre las que está construido el mundo occi
el descubrimiento de las culturas prepatriarcales basadas en dental.
la nujf Los descubrimientos de investigadoras y teoriza Volviendo de nuevo al individuo, muchas personas he
doras como Marija Gimbutas, Merlin Stone, y Riane Eisler, mos llegado a aprender que el desarrollo del ego es una fase
han hechobscular nuestras presunciones acerca de los va de un proceso más amplio de maduración. Gracias al traba
loresyestilosdevidade las antiguas culturas “matriarcales”. jo innovador de personas como el psicólogo humanista Abra-

19
Introducción
Introducción
ham Maslow y del filósofo transpersonal Ken. Wilber,. se ele Muchas de las profesionales de la investigación psicológica
va la altura del techo del desarrollo humano Hemos sido y de la psicología clínica hemos sido testigos últimamente —en
inspiradas a practicar las disciplinas espirituales en un es nuestras investigaciones y en nuestras clientes— de una extra
fuerzo por abrirnos camino a través del dominio voluntario ordinaria reactivacion de las irnagenes de los prfncipios feme
so y enfocado en una sola dirección del ego patriarcal. Y, nnosde los arquetiposyde las diosas La reciente prohferacion
por primera vez en la historia, durante los últimos veinte de librcis, uftfdulos y conféfencias sobre “el ascenso de la Dio
sa” es un fenómeno que tiene grandes implicaciones para la
años, las experiencias trascendentes y extáticas se han de cuituray para 1aconcienci.
mocratizado y son posibles para miles de personas. Tal vez, el movimieñto de las mujeres sea la manifestación
Yo creo que esto es un signo de lo que Jung llama,aenañ externa de lo que está sucediendo en niveles profundos en el es
tiodromia’, que significa que, tarde o temprano, el péndulo os pacio-tiempo esencial, mítico y arquetípico. No podemos decir
ÓfT5TtQdo. camiahiçja.supuestq Jung identificaba este si el i viiiii&ntose há desarróllado porque la crisis del mundo
‘a
principio como aquel que rige los ciclos naturales de la vida. externo está llamando a un ascenso de la ,iosa para restablecer
En el terreno de la psique, si un extremo o tendenciáunila el equilibrio de Ja naturaleza -o porque la liberaFoTd&Tas ñTu
jereeiiEóna plena participación igualitaria está llamando a una
teral domina la vida consciente, a su debido tiempo, su opues liberación similar de su principio arquetípico, o incluso, porque
to creará la energía e intentará después abrirse paso a través ha llegado el tiempo de la Diosa en el ciclo cósmico de los
del patrón dominante. El conf.erenciante junguiano y recita acontecimientos. Pero todas las evidencias indican que está)
dor de relatos Robert A. Johnsón ex.plica la revolución con volviendo el Arquetipo Femenino.
tracultural de 1960 de la s’iguiente manera: el dominio rígi
do de la función pensante tuvo como consecuencia la Desde el punto de vista cultural, esto significa que nece
oscilaión-masivabacia la funcióii del sent imiento. sitamos dejar deldevahar.. 1 Fe ninoy permitirle tomar
Hoy día mueren las viejas formas de dominio de lo mas de nuevo su lugar adecuado en el mundo. Desde el punto de
culino, a medida que cada vez está más claro que nuestras ac vista psicológico, esto significa que para ser nujer tenemos
titudes!patriarcale y sus instituciones no pueden mantener la que rasentarnos en nuestra base femenina, y deshacernos
vida ei la tierra. Al mismo tiempo, crece la fuerza de los de nueiIntificación con elincipio Masculino y con la
valores femeninos, en un esfuerzo por aportar un equilibrio sociedad dominada por los hombres. Nuestro primer paso
al sistema genera: El salto adelante de lo Femenino exige el consiste en empezar a entender la naturaleza del Principio Fe
desplome de lo Masculino y, en consecuencia, un tiempo de menino y nuestra evolución hacia lo Femenino Consciente.
crisis en el qu b.uláel centro de poder. A nivel individual,
el Arquetipo Femenino, conocido también como la Diosa,
anuncia el hecho de que la conciencia de ego ya no es el ¿ Qué es 1 femenino?
único factor dominante.
Muchas terapeutas que trabajan con los sueños han ma “Femenino” es un adjetivo derivado de la palabra latinafe
nifestado esta transición y han intentado explicarla de muchas inina, que significa mujer. Describe algo “que pertenece a las
maneras. En su libro, The Searchfor the Beloved, Jean Hous mujeres o a las niñas; que tiene cualidades características o
ton dice: que se aplican a las mujeres, comamable, delicado, etc”. En

ocasiones, a lo largo de este libro, he utilizado “femenino” menino y lo Masculino, “este par primordial de opuestos sim
como adjetivo en su significado convencional; en este caso, boliza cualquier par concebible de opuestos que pueda darse:
lo he escrito con minúscula. caliente y frío, luz y oscuridad, norte y sur, seco y húmedo,
Sin embargo, cuando me refiero a ‘pFemenirio” como bueno y malo, consciente e inconsciente”.
sustantivo, me refierQa patrón universaTI l psique hu La psicoanalista junguiana Marion Woodman ha señalado
mana, que Jung llamaba arquetipo, y que no está restringi que estos rasgos opuestos funcionan como los polos de un
do a un género, sino que está presente tanto en mujeres imán. Lo o e ttae lo semejante sçrepele. Si una
como en hombres. En los hombres, este elemento Femenino persona permanece psicológicahñTéJnconscient de uno
de la psicología junguiana se llama ima En este contex de los dos polos, entonces renuncia ajLposesián de sus ca
to, “lo Masculino” tampoco está restrinido a los hombres, racterísticasy pierde sus cualidades proyectándolas afuera,
sino que constituye un atributo de todo ser humano. En las como por4empjp cuandouna mujer proy lo Masculino
mujeres, se conoce este elemento Masculino como el ánimüs. e el hombre. La rnjjçr se vuelve dependiente de que esa
Cuando me refiero al Principio Femenino, o al arquetipo, es personaexternaencarnffLprincipjo Masculino.
cribo el término con mayúscula. Del mismo modo, cuando uando esta proyección concreta sucede a un gran nú
hago referencia a lo Masculino, lo escribo también con ma mero de personas, como ocurre en nuestra sociedad, se car
yúscula. ga a los hombres la tarea de acarrear todas las cualidades de
Así pues, lo Femenino y lo Masculino no se refieren a los lo Masculino, como el pensamiento analítico, la indepen
órganos sexuales, sino a estructur de nuestra conciencia. Se les nie
Existen dos maneras de ver y de reaccionar iiUStra ex ga a las mujeres estas cualidades y se las carga con acarrear
periencia que son distintas entre sí, y que se expresan en los rasgos emeninos como el seutimiento, la interdepen
imágenes, comportamientos y respuestas emocionales di dencia y la aitIid orientada hacia el mismo proceso. A su
ferentes. vez, se niegalós hombres estas cualidades.
Por ejemp1o nuestro lado Femenino tal vez reaccione Por otra parte, si una persona es consciente de sus dos
ante una enfrmedadNcontemplando su significado simbólico polos Masculino y Femenino, existe dentro de su psique
y cuidándoló para festablecer la salud lentamente; el Mas una dinámica armoniosa. Como consecuencia se vuelve po
culino quizá responda actuando rápidamente con medios in sible un desarrollo más pleno de una amplia gama de posi
asivos para eliminar los síntomas. Ambos enfoques tienen bilidades.
su propio valor según las circunstancias. Además, la relación entre estos dos elementos es recí
En las tradiciones psicoespirituales de todo el mundo, lo proca: a medida que surge a la conciencia y se va clarifican- -
Femenino y lo Masculino son metáfora enraizadas para ex do lo Fmeninoen una mujer, es posible el crecimiento de un ..
presar la polaridad interna de los opuesto’que existe en los Principio Masculino más sólido que, a su vez, estimula un -
mundos naturales y simbólicos, exactamente lo mismo que las Principio Femenino definido con mayor claridad. Cada uno —-
bien conocidas cualidades chinas del yin y del yang, que se está finamente en sintonía con el otro, y la unidad de toda la
encuentran incrustadas una dentro de la otra en el interior de psique de una persona viene determinada por la soberanía de
un todo más amplio. Como expresa Jung a propósito de lo Fe- cada elemento.

Históricamente, las cualidades asociadas al Arquetipo Fe podemos entregarnos para recibir amor. Pero lo Femenino
menino han sido descritas mayoritariamente a partir de ob recibe: desde el llanto del planeta hasta el llanto del alma.
servaciones de los hombres sobre los cuerpos de las mujeres
(sus capacidades de recibir, contener y dar a luz). Hoy día, sin En la primitiva transición de la conciencia matriarcal a la
embargo, las mujeres se definen cada vez menos en términos conciencia patriarcal (que se encuentra recapitulada en la
biológicos, y están evolucionando con menos constriccio evolución de todas y cada una de las mujeres), se sacrifica y
nes impuestas por las proyecciones de los hombres. Ade abandona lo Femenino. Tanto en los hombres como en las
más, los resultados de las investigaciones de muchas perso mujeres, es expulsado de la conciencia y se sumerge para
nas en diferentes campos nos han ayudado a concebir nuestra pasar a ser parte del mundo de la sombra. Desde el punto de
definición de lo Femenino, liberándola de los significados observación del mundo a la luz del día, aparece como pobre
vinculados a la cultura y proporcionándole una gran riqueza y dependiente, mientras que en el cenit de esta misma luz, el
de valores diferentes. De esta manera, por primera vez, lo Fe reino unilateral de lo Masculino -concentra poder y tecnolo
menino puede hacerse consciente en las mujeres: sin identi gia y amenaza cón íiia destruccion colectiva —
ficarse con los hombres, sin actuar en reacción a otra cosa, sin Actualmente, con la llegada defpatriarcado, lo Femenino
tener que compensar por algo ausente. es como una raíz abriéndose camino entre la superficie de
Por esta razón, nos vemos obligadas a cuestionar las de hormigón resquebrajada de la cultura. La evidencia de su re
finiciones arquetípicas que han persistido durante tanto tiem aparición se manifiesta claramente en nuestro interés cre
po: estamos llamadas a reimaginar lo Femenino en su forma ciente por la ecología profunda, la Diosa, e incluso el movi
emergente. Marion Woodman comienza este proceso sugi miento de hombres que se está formando últimamente. Por lo
riendo algunas características de la energía femenina: tanto, lo Femenino consciente constituye la próxima imagen
que nos empuja hacia adelante en nuestro viaje humano.
— Lo Femenino prefiere el proceso al resultado, siguiendo Eijrinçipio Femenino se transforma a medida que evo
los meandros del camino y disfrutando del placer del via luciona nuestra naturaleza femenina dentro de la imaginación
je, por el contrario del estilo Masculino de fijar una meta cQlectiva y que se va manifestando dentro de nosotras y de
y de ir a por ella en línea recta. toda la sociedad en general. El arquetipo respira una nueva
— Esta orientación hacia el proceso implica presencia en vida, asume un nuevo semblante y nos proporciona nuevos
el cuerpo -en el instante-, una agudeza emoçjonal y sen significados.
sqrial, y una disponibllidad voluntaria..para seguir la pro Mientras que loemenino inconsciente emergía a través del
pia experiencia corporal, en lugar de escuchar únicamen instinto, lo Femenino consciente eyoluciona a través de la
-
- te al pensamiento. — imagación. Eo quier decirque esta fase en el desarrollo hu

— Lo Femenino implica también receptividad, mientras mano exige la voluntad. La evolución nos llama a centrarnos
que lo Masculino es rápido para •actuar.. Hoy en día, seña en el Principio Femenino, a empezar ahora, en este momento,
la Woodman, nuestros receptores psíquicos y sensoriales es a imaginarlo encarnado y realizado. Para hacerlo, infundiremos
tán cerrados para defendernos contra la brutalidad genera nuevo vigor a las fuerzas de la vida; seremos çomadro.iias de
í
lizada. Nos hemos vuelto temerosas y desconfiadas y no n.osotras mismas y unas para otrasç

Mi historia personal A lo largo de mi infancia, a través de discusiones fasci

nantes, apasionadas, que abarcaban toda clase de temas, y que
Me gustaría contar un poco de mi propia historia para manteníamos durante las comidas, mi padre preparó mi men
ilustrar el paralelismo con la historia colectiva ya que, como te para ser, como la suya, una espada irnpecaféra dis
cualquier historia de mujer, es de alguna manera la historia criminar los hechos de la ficción y los sentimientos de la
de todas las mujeres. Y a través de mi relato personal podré dura realidad. Y el mundo de sentimientos de mi madre se
introducirles en los temas principales de este libro. volvía cada vez más remoto y sin interés, y aparecía como ca
Siendo la mayor de dos hijas, muy pronto mantuve una re ótico y descontrolado. El deseo de otras chicas que yo conocía
lación de intimidad con mi madre, que escuchaba mucho y era de casarse y de tener niños me parecía lo más aburrido del
muy entregada. He encontrado muy pocas mujeres que hayan mundo; recuerdo que intuitivamente comprendí muy pronto
tenido con sus madres la clase de vínculo amoroso que no cómo se utilizaba la misma palabra “nuclear” para describir
sotras compartíamos. la familia y una guerra imposible de ganar.
Sin embargo, mi madre había sacrificado su vida de artista Cuando miraba a mis amigas maquillándose para ser atrac
para ser una esposa y madre a tiempo completo. (Sólo aho tivas para los chicos y hacer juegos cada vez más sofistica
ra, cuarenta años después, ha vuelto a su pasión por la pin dos de “flirteo”, yo me sentía perpleja. ¡Había tantas cosas
tura.) Además, mi madre había sido afectada y atemorizada más importantes que hacer! Me preguntaba por qué ocupaban
por acontecimientos que le sucedieron en su primera infan su tiempo en ello.
cia, y cuando yo era niña sufría depresiones frecuentes. Mi ,—
Hoy día, este patrón de comportamiento ha venido a ha
padre, que tenía una personalidad más extrovertida, compe
tía por mis atenciones. 4
/ marse “una hija del padre”, que hace referencia a la mujer
que, en alguna fase de su evolución, empieza a identificarse
En nuestro hogar, creamos el juego de dividir a la familia inconscientemente más con su padre y con el elemento Mas
en “equipos”, parejas de miembros de la familia que com culino interno (el ánimus) que con su madre y el Principio Fe
partían gustos similares y que se parecían más entre sí que a menino. Las “bijas dlp.adre” tienden a ser adeptas de la so
los demás. Yo hice equipo con mi madre, y mi hermana con ciedad del Mundo del Padre, competentes y llenas de
mi padre, porque nos parecíamos respectivamente más y pa fLanza,e,içeptcquizáen1o que se refiere a supropia fe
recía que teníamos más cosas en común. rnidad, que no se expresa por la vías estereotípicamente
No obstante, en alguna encrucijada desconocida, las im atractivas En esencia, ésta fue mi experiencia durante mis
presiones de mi padre en mi joven psiquismo parece que años de bachillerato y universidad.’ ¿3 ÇZ)
fueron más profundas. Puedo recordar haber sentido en los También porque nuestra cultura está estructurada alrede
primeros años de mi adolescencia que ser una niña parecía dor del Principio Masculino, muchas personas otorgan poco
irrelevante para mi identidad (una idea chocante cuando la valor a las cualidades femeninas. Para los hombres, esto sig
veo retrospectivamente). Mi padre me decía que con mis ca nifica un rechazo de aquellas partes de sí mismos que pueden
pacidades podía hacer cualquier cosa, con lo cual quería de ser nutrientes, receptivas y aptas para prestar cuidados y, al
cir, cualquier cosa que un hombre pudiera hacer. Y yo le mismo tiempo, un excesivo desarrollo de las partes corres
creí. pondientes que se consideran masculinas. Además, esto sig
26 Centro de Desarrollo Transpersonal 4 Centro de Desarrollo Transpersonal 27

nifica que la mayoría de los hombres buscan esas cualidades Cuando tuve la edad para iniciar estudios universitarios,
enterradas, fuera de sí mismos y en las mujeres, al tiempo que mi padre me sugirió que fuera a la Universidad de California
las desvalorizan. en Berkeley, y yo estuve de acuerdo. A pesar de su “actitud
Para las mujeres, este estatus de segunda clase del Prin sabelotodo”, no podía prever los efectos imprevisibles de
cipio Femenino hace que nos sea difícil identificamos con esta decisión aparentemente inocente, aunque años más tar
nuestras verdaderas naturalezas, con lo que Jane Wheelwright de deseaba muchas veces haberlo hecho. Entré en la univer
llama el ego biológico femenino. Como consecuencia, para sidad, virgen, partidaria de la guerra de Vietnam, y como es
sobrevivir “en un mundo de hombres”, adoptamos sin sa tudiante ansiosa por vivir la vida intelectual y seguir un tipo
berlo una determinada serie de características que, como un de estudios que me condujeran a una vida productiva.
rØáquillaje, recubre otra serie de cualidades o instintos que Pasado un año y largas series de iniciaciones, yo había
pueden ser menos adecuados para la supervivencia. Una ami abierto muchas puertas cerradas. Si mi sueño, ya descrito, pu
ga encantadora me dijo que para defenderse de los avances diera ser desmontado como un rompecabezas, supongo que
constantes de seducción de los hombres en su temprana ado incluso entonces podría haber soñado que decapitaba a mi pa
lescencia,”neutraIiz voluntariamente su apariencia y apren
”
3 dre. Pero tuvieron que pasar otros veinte años antes de que la
dió a compórtárse rudamente “como un chico más”. Su ex primera parte del sueño -alinearme de nuevo con mi madre-
periencia, que me reflejaba la mía, suele conducir a un pudiera emerger desde mi psique:
Çconflicto interno entre sentirse poderosa en el mundo y sen El contenido de la historia de mi vida durante las dos dé
tirse atractiva como mujer. cadas siguientes es menos importante para nuestros propósi
En los círculos junguianos, se dice que las mujeres como tos que el proceso general de emergencia de la conciencia.
mi amiga y yo tenemos un fuerte complejo-de-ánimu que Cuando estaba cerca de cumplir cuarenta años, sentí un ma
significa que somos gobernadas por nüestro énponente in remoto de cambios golpeando las costas; mi vida intelectual
terior masculino inconsciente n vez de por nuestro go que como lectora voraz, escritora científica, periodista y editora,
es femenino. Sin embargo, como algunas mujeres han apren era todírica, pero me dejaba de alguna manera vacía
dido las lecciones del feminismo, esta idea ha sido puesta en Como mujer.
cuestión, cuando hemos vuelto a considerar si cualidades ta Empecé a tener fantasías de abandonarlo todo y conver
les como utriente y reççptiva” o “porfiadoo agresivo” tirme en un ama de casa, de dedicarme por completo a la
puedenser.aignados cou propie.daiaunow otro género. vida del cuerpo femenino y sus maravillas. Por primera vez,
En cualquier caso, las mujeres con un ánjmus altamente empecé a sentir empatía por (e incluso envidia de!) las mu
desarrollado se contraponen a las mujeres-ánima, que, sa chas mujeres que dejan de lado su profesión para tener hijos,
biéndolo o sin saberlo, toman sobre síla imageiicultural es fenómeno que había sido hasta entonces un completo miste
teteotípica-cle -belleza y_de feminidad_para complacer a los rio para mí. Todavía soltera y habiendo disfrutado tan sólo po
hornesyrnantener las relaciones convencionales. En lugar cósáños antes esta vida, empecé a buscar seriamente hombres
-‘ de moldearse a sí mismas para volverse como los hombres, dispuestos a comprometerse. Y me hice mi propia casa, un
L ‘‘ las mujeres-ánima se moldean a sí mismas para estar conec precioso retiro en la montaña, a pesar de que algo seguía
tadas con los hombres. murmurando dentro de mí con el desdén de una previa orga

nizadora de inquilinos: “¡ Yo, convertida en una propietaria de este libro sobre sus respectivos temas. Pero a medida que
Los Ángeles!”. iban llegando sus capítulos, se fue haciendo cada vez más evi
Por supuesto, todos estos síntomas podían apuntarse a dente que cada autora estaba describiendo una manera de
cuenta de haber llegado a la mitad de la vida, ese periodo que curar una relación concreta importante o un determinado
como una bifurcación en la carretera está señalizado con un campo de la vida, y que esta curación abría una puerta o vía
signo de prohibición de dar la vuelta. Pero mi vida interior me de entrada a lo Femenino consciente.
estaba diciendo que algo estaba ocurriendo, algo más que Posteriormente, llegué a ver el nacimiento de lo Femeni
un simple paso del tiempo. A medida que algo moría, algo es no consciente como una especie de pgamehto, como un
taba naciendo: he llegado a llamarlo la Conciencia Femeni contexto que mantiene juntos muchos temas diversosjeco
na. Éste es el tema de este libro: la emergencia de un estilo
-,
gidos aquí, que han sido explorados diinte las últimas dé
7rj----de feminidad individualizada y realizada. cadas en la bibliografía femenina, pero que no habían sido en
Nuestra descripción colectiva de este proceso está muy le marcados hasta ahora en un cuadro evolutivo.
jos de ser completa. Podemos empezar a ver signos en el La Primera parte, “Tras las huellas de nuestra evolución
horizonte de la emergencia de lo Femenino consciente: el común: la búsqueda de lo Femenino abandonado”, empieza
naçimientode con un gran cuadro que proporciona una visión histórica ge
comunidad, ecología, consenso y çurción. A medida que neral de las tres Eras principales del desarrollo humano: ma
/ ‘
triarcal, patriarcal y emergente. Sus autoras y autor describen

estos lré sévíieWeñ contagiosos, aportan equilibrio
las instituciones patriarcales bajo las que hemos vivido du el predominio del Principio Femenino o Masculino de cada
rante tanto tiempo. Era, centrándose en cómo el corte entre los dos arquetipos
Como la evolución de la conciencia humana en su totali crean una grieta en la realidad colectiva. El abandono del ,,ctu 1
dad, nuestra evolución individual es una historia intermina Principio Femenino por la sociedad comporta crisis sociales,
ble llena de giros y dificultades interminables. No obstante, políticas y espirituales, así como problemas personales e in
he llegado a ver que existen para todas las mujeres que se ha terpersonales.
llan en el camino del despertar ciertas puertas que atravesa La Segunda parte, ‘Hacernos de madres de nosotras mis
mos, cada una con sus propias pruebas y recompensas. mas: la curació de nuestra rçacióçon la muers y lo Fe
memo”, explora las raíces de la herida madre-hija. Los sen
timieitos esenciales de cada niña sobre sí misma, sobre su
Puertas hacia lo Femenino consciente cuerpo y sobre sus relaciones con los demás, están enraiza
dos en su vínculo con su madre. Ella es nuestra fuente y
Este libro está estructurado alrededor de esas experiencias nuestro modelo de cómo ser una mujer.
claves que contienen la potencialidad para entrar en nue Como la mayoría de las relaciones madre-hija adolecen
vos niveles de conciencia -puertas hacia lo Femenino cons gravemente de intimidad y/o de independencia, nos encon
ciente. tramos suspirando por una madre que nunca existió, y que
Yo no me había dado cuenta de este hilo conductor cuan nunca pudo existir. Esta parte trata fundamentalmente de ha
do hablé por primera vez con las coautoras y los coautores de cernosde madres, encontrando a través de una serie de op

ciones un medio de despertar dentro de nosotras las cualida descubriendo que pueden imaginar e inventar nuevos ritua
des maternales que buscamos afuera. les que les fortalecen y satisfacen sus necesidades más pro
Estas opciones incluyen econectaT con lt “niña inte fundas.Estos tres capítulos sobre la menstruación, la sexua
rior”, dejarnos nutrir y aconsjr por una madre sustituta, lidad y la menopausia, señalan el camino.
como una terapeuta o una amiga, revitalizar la relación con La Quinta parte, “Despertando de nuevo la Divinidad de
nuestra propia madre, experimentar la maternidad cons lo Femenino: la curación de nuestra relación con los rque
,‘ ciente, ser testigos de partos, o recibir regalos de una abue tipos de la Diosa”, describe el destierro de lo Femenino del
çj \.. la o mujer anciana. territorio espiritual por un Dios masculino. Como niñas y
La Tercera parte, “Hacernos depadres de nosotras mismas: mujeres hemos sido desposeídas en una sociedad que no
la curación de nuestra relación con los hombres y con lo ofrece ningún rostro femenino de Dios. En consecuencia,
Masculino”, explora la relación herida entre cada mujer y nos hemos volcado en masa a buscar otros tiempos y lugares
su padr, la cultura patriarcal, los demás hombres significa para encontrar una alternativa vital a nuestro “viejo de bar
tivos en su vida, y lo Masculino interno (o ánimus). Todas es ba blanca allá en los cielos”.
tas influencias actúan juntas para conformar nuestras imá En nuestra búsqueda por curar nuestra relación con los ar
genes y expectativas de los hombres y del reino Masculino. quetipos de la Diosa, hemos descubierto un legado mucho
Al igual que nuestro vínculo con el Mundo de la Madre, más rico de lo que nunca hubiéramos podido soñar. Esta par
este lazo con el Mundo del Padre también es imperfecto. Se te explora la Divinidad de lo Femenino en el panteón griego
nos insta a curar nuestras relaciones y, en última instancia, a y en la diosa gnóstica de la sabiduría,Sophia. C
hacernos de padres de nosotras mismas volviéndonos cons La Sexta parte, “Lareñvación del mundo: lo Femenino y
cientes del padre interior, en sus aspectos luminosos y oscu el futuro”, examina el impacto del cambio de arquetipo de lo
ros, y del ánimus y de su influencia en nuestras identidades. Femenino a medida que nos adentramos en la Era que está
Esta sección explora también el feminismo y su papel en el emergiendo. Los dos autores de esta parte preven un despla
despertar de las mujeres a la naturaleza del Mundo del Padre. zamiento de nuestro sistema actual de valores —basado en la
La Cuarta parte, “Haciendo sagrado de nuevo el cuerj,o fe “masculinidad fálica”, la búsueda de la objetividad y la per
menino: la curación de nuestra rón con los iitrnos, los fección, y la necesidad de análisis y decontrol- hacia valores , -.
-instintosy1osdeseos”, la forman tres capítulos de imagina más femeninas como la conectividad, la actitud inclusiva, el
ción creativa que nos invitan a curar de manera ritual la re sentimiento, la fluidez, la ambigüedad y la introspección. Al
lación con nuestros ritmos, instintos y deseos. El interés re final, una leyenda de la corte del rey Arturo aporta claves
novado por toda clase de rituales significa la renovación de sobre cómo puede recuperarse lo Femenino perdido.
una conexión entre el mundo natural y el mundo simbólieo. Así pues, este libro invita a la imaginación colectiva a
En su libro An Irnage Darkly Forming, la psicoanalista interesarse por el tema del nacimiento de lo Femenino cons
junguiana Bani Shorter describe el uso de rituales por parte ciente. Espero que encuentren el diálogo inspirador y útil, y
de sus clientes en psicoterapia para despertar y encarnar una sea un recurso enriquecedor en su desarrollo para llegar a ser
feminidad consciente. Aunque hoy día pueden aprenderse y un ser humano más plenamente consciente.
adoptarse los rituales tradicionales, muchas mujeres están
Centro de Desarrollo Transpersonal

32 Centro de Desarrollo Transpersonal 33
PRIMERA PARTE:
TRAS LAS HUELLAS DE

NUESTRA EVOLUCIÓN
COMÚN: LA BÚSQUEDA
DE LO FEMENINO
ABANDONADO

Pero de hecho siempre fuimos así,
sin raíces, desmembradas: sabiendo
que ésta es la diferencia.
El nacimiento nos despojó de nuestro derecho natural,
nos arrancó de una mujer, de las mujeres,
de nosotras mismas, tan pronto y desde entonces,
y todo el coro zumbando en nuestros oídos
como mosquitos, no nos dijo nada,
nada sobre nuestros orígenes,
nada de lo que necesitábamos saber,
nada que pudiera hacemos recordar...
Con nostalgia de mí misma, de ella...
ADRIENE RIcH, “Transcendental Etude”
En la novela 1984, Georgerwel1 había previsto un futuro

en el que un “Ministerio de la Verdad” reescribiría los li
bros de la sociedad y remodelaría sus ideas para que pudie
ran ajustarse a las exigencias de los hombres que detentaban
el poder. Según Riane Eisler y otras/os autoras/es de este li
bro, este fenómeno horripilante ya ha ocurrido hace mucho
tiempo, cuando el dominio del Principio Masculino se im
plantó en la sociedad patriarca!, en la que se reescribieron las
leyes de la naturaleza humana desterrándose el Principio Fe
menino.
En esta parte que inicia el libro, las dos primeras autoras
trazan el gran cuadro de la evolución humana, desde la Era

Tras las huellas de nuestra evolución común Tras las huellas de nuestra evolución común
matriarcal hasta la Era que está emergiendo actualmente, pa el renacimiento que observa es un renacimiento espiritual, re
sando por la Era patriarcal. Sukie Colegrave y Riane Eisler sultado de la muerte simbólica del ego y de los valores tran
vuelven a trazar los vastos ciclos de nuestras transformacio sitorios, y la emergencia del Ser, cuyos valores son eternos.
nes personal y social, para ofrecer un marco dentro del que Riane Eisler exámia la história (y la prébitoria) a través del
poder considerar la transición que está ocurriendo hoy día: el prisma social y político. Investiga el significado de “femenino”
final del patriarcado y la vuelta de lo Femenino al escenario en las culturas primitivas que no lo habían desvalorizado, y
principal. encuentra claves en ellas para nuestras luchas actuales.
Colegrave y Eisler revisan los ciclos de la historia a tra Eisler aporta una valiosa contribución para volver a for
vés del prisma de la mitQlpgía, la antropología y el feminis mular nuestro lenguaje, revisando de esta manera nuestra vi
mo. Robert M. Stein sigue las huellas de la escisión entre los Sión de la historia. Afirma que el matriarcado no es lo opues
afciutipos Femenino y Masculino, pero lo enfoca en el te to al patriarcado; el matriarcado no está caracterizado por el
rreno psicológico y en el de sus efectos en nuestras relacio dominio de un grupo sobre otro. En su lugar, propone los
\ nes. Todos sacan la conclusión de que cuando el equilibrio de términos de sociedad de “dQrninación” versus sociedad de
poder se desplaza entre lo Masculino y lo Femenino, pueden “colaboración solidaria”; la primera, organizada alrededor
/ (
detectarse fases concretas en la evolución, que revelan saltos de la jerarquía deunaspersonas sobre otras, y la segunda, or
precisos de un nivel en la conciencia humana. gnizda alrededor de lo vínculos recíproco& Cuando exa
En el terreno colectivo, cadaEra ha tenido su propia mi mina la historia a partir de esta nueva clasificación, la histo
tología, su propia historia sobre 1areación de la vida humana ria cobra un significado diferente.
en este planeta, incluyendo la existencia de un paraíso y un Mientras que Eisler enfatiza la escisióii de lo’Femenino en
“ascenso” o una “expulsión” del mismo. Además, cada Era ha los terrenos social y político, Steinsecentra en su rütura en
) tenido su propio elenco de dioses y diosas, que revela rela el campo psicológico e interpersonal. Este último asocia las
s ciones características entre los dos arquetipos esenciales. limitaciones dolorosas de los roles estereotípicos con las li
Los tres ensayos examinan a gran escala la danza cam mitaciones que hemos atribuido al arquetipo Femenino, tan
biante de estos arquetipos: ¿Qué es la vida en los brazos de la to en el interior de las mujeres como de los hombres.
Gran Madre? ¿Cuáles son los costes y los beneficios de sacri El conocimiento de nuestra historia evolutiva y psicológica
ficar lo Femenino para obtener el desarrollo del ego en una so (en donde hemos estado) puede abrir la puerta del futuro
ciedad basada en la vía del poder? ¿Por qué no encuentran su (hacia donde nos encaminamos). Puede revelar capacidades,
sitio en el patriarcado los valores femeninos? ¿Por qué a lo lar valores y estilos de vida que previamente no se veían. Y és
go de la historia está ligada la desvalorización del Principio Fe tos pueden proporcionar motivo de inspiración a aquellas
menino a la desvalorización y opresión de las mujeres? personas que han perdido la visión de nuestro avance.
En su ensayo de apertura, Sukie Colegrave entreteje los No obstante, debemos tener cuidado en no predecir el fu
hilos de la evolución individual y colectiva. Describe la uni turo a partir del pasado. A fin de cuentas, la conciencia no
vrsalidad del movimiento desde el Principio.Femenino mdi evoluciona en línea recta. Y, aunque la dirección en la que va
fereñciado e inconsciente hasta la conciencia transpersonal mos sea cada vez más visible, el destino no está todavía de
Femenina, pasando por el Principio Masculino activo. Al final, terminado.

u
El desarrollo del Principio Femenino
El paso de una fase a otra siempre exige un sacrificio. Al

dar este paso, se pierde la unidad con la naturaleza y los de-
más seres vivos; lo Femenino es expulsado de los territo
rios social, psicológico y espiritual.t
Este desequilibrio reinañtEdel Pincipio Masculino con
duce inexorablemente a su opuesto: que alcance un respeto re
novado la nueva emergencia de lo Femenino, junto con sus va
lores de capacidad_dconexión, recpJJyJdad, amor y
1. EL DESARROLLO DEL reverencia. PJTTerreno de lo individual, un ego totalmente
desarrollado, que puede afrontar al Otro con su separatividad
PRINCIPIO FEMENINO EN y al mismo tiempo experimentar profundamente sugjiión
LA CONCIENCIA HUMANA ) con e?, constituye una nueva etapa en la evolución de la con
4cienhuiiiana que jeriite el crecimiento de los valores
transpersonales. En el terreno de lo colectivo, Gaia, la Gran
Madre Tierra, se está volviendo consciente de sí misma.
por Sukie Colegrave Sukie Colegrave estudió Psicología junguiana en Lon
dres y Boston, lengua e historia chinas en la Universidad de
Londres. Es autora de Uniting Heaven and Earth: A Jungian
A grandes trazos, la terapeuta y escritora de Nuevo Me’ and Taoist Exploration of the Masculine and Feminine in
xico Sukie Colegrave describe un cuadro de la evolución de Human Consciousness y de ByW of Pain: A Passage into
la conciencia humana en dos niveles simultáneos: el indivi Self. Actualmente trabaja como psicoterapeuta y escritora en
dual y el colectivo. 5qnç1 Nuevo Méxicol
Como personas y como especie, empezamos en un estado
de unidad preconsciente en el útero de la Gran Madre —un
útero seguro, no dual, y que lo contiene todo—. Cuando co
mienza a aparecer la diferenciación y a emerger los egos
individuales fuera ya de esta totalidad, la Madre Qmniabar Chuang Tzu escribió:
cnté se vuelve sofocante; surge entonces la necesidad ine
vitable de la separación a partir de nuestra necesidad natu En la Edad de Oro, los hombres virtuosos [y las mujeres] no
ral de independencia y autonomía. eran la excepción; las cualidades no llamaban la atención. Los
4
gobernantes eran simples faros indicadores, mientras que el
¡ El resultado de esta salida fuera de la totalidad es lafor pueblo era libre como los ciervos salvajes. La gente era honra
./ mación de un ego con capacidad para identificar y controlar
\ al Otro; en el plano social, la consecuencia es el patriarca
da sin tenerse que proponer cumplir sus obligaciones para con
losyecinos. Se querían unos a otros sin darse cuenta. Decían la
\do, la identificación colectiva con el Principio Masculino
—el orden de la objetividad, la dualidad y la dominación.
verdad sin proponerse tener buena fe. Hacían cada acción li
bremente sin reconocer tener obligaciones cqade. De esta

Tras las huellas de nuestra evolución común El desarrollo del Principio Femenino
manera, sus obras no dejaban huella y sus asuntos no eran trans consjentde ser lieno’fíe paz empieza a diferenciarse en un
mitidos a la posteridad.
Así pues, en aquellos días en que prkçíai los instintos
jJ mundo degpstos, iniciando así el proceso de la historia y
j el nacimiento de la conciencia humana,Jo mismo que cómo
/ naturales, los hombres [y las mujeres] actuaban con calimi
o por qué el infante sacrifica su estado de unidad embriáni- 6!
rEiZon firmeza. En aquel tiempo no había caminos en las
montañas, ni barcos o puentes sobre el agua. Cada cosa se ha ca conjg madre paa ‘
cía dentro de su propio ámbito. Se multiplicaban animales te do ocurre esta separación, tanto en el amanecer de la histo
rrestres y pájaros; crecían árboles y arbustos. Los animales po ria humana como en un momento específico de la vida de
dían ser conducidos con la mano y era posible trepar y cada individuo, la Edad de Oro preconsciente del alma em
escudriñar el nido del cuervo, porque entonces el hombre [y la pieza a disolv di renciarseenuna vivencia de lo
mujer] trataba con pájaros y animales terrestres, y toda la cre consciente y lo inconsciente. Y el estado de uiddéons
ación erau a No había distinciones entre [seres humanos] bue
ii,’ malos. Careciendo igualmente todos de conocimiento,
cieniTcosiiiíe transforma en un estado de ser que
su virtud no podía extraviarse. Careciendo todos por igual de de-j está contenido en el mundo, y es estrechado por los brazos de
seos malviidos, estaban todos en un estado de integridad natu4 la Gran Madre del cielo de la tierra.
ral, de perfección de la existencia humana. ) Mientras que la c nciencia colecti’ e individual se sien
te alimentada, contenida e insepara le del seno de la Gran
¿Fue disfrutada alguna vez por los seres humanos una Madre, la imagina como un ser esencialmente benévolo, om
Edad de Oro, un Jardín del Edén? La respuesta aguarda la nipotente y omniabarcante. Tanto si es venerada como la Se
aparición de métodos más refinados de investigación histó ñpradeciel.!err.J&Señora del principi y fiñd toda
rica.j Pero como imágenes del estado que precedea1 naci creación, o la Señora de las la tasyde los animales, se la
miento de la conciencia, estas palabras del sabio chino, al concibe como el espíritu de la tierray todas las formas del es
igual que laIscripciones bíblicas del Paraíso terrenal, tie píritu, virginal y bisexual. En Egipto se la llamó IsIs, “Madre
nen un aroma de una unidad tranquila y armoniosa que ca de todos, en posesión de ambturalezas, mculinay.fe
racteriza la matriz intemporal, indiferenciada y preconsciente laJ.ima, a la que
del alma humana en su estado anterior a la separación entre se invocaba como “mi Dios y mi Diosa”. En la China antigua,
consciente e inconsciente, yo y tú, nosotras/os y ellas/os. era el espritu d’que nunca muere, la mujer misterio
Las imágenes de Chuang Tzu nos recuerdan y abarcan la in sa llamada la Tcielo y la tierra.
tegridad orgánica y espontánea que subyace más allá de las Lacptcidad de la Gran Madre de dar ajer’ir
distinciones entre humano y animal, materia y espíritu, vida gnal se atr easutotai ,puesto que los arquetipos o
y muerte; la totalidad sin costuras que crea e informa las di todavía no separadas entre
ferentes partes y transiciones de la existencia. También nos sí,pennaneceen ii 1iconscien. Su bisexualidad
recuerdan nuestra ignorancia y desconocimiento que carac virginal manifiesta una tot sio1ñgiç. iç scinte,’
terizan este estado -la imposibilidad de elección y la ausen que puede coexistir —y cexiste de hecho- en ciertos peno-
cia de libertad individual y oportunidad para la creatividad y dos de la vida psicológica con la diferenciación física de
el amor conscientes. macho y hembra. Refleja un nivel de ser psicológico en el que
Sigue siendo un misterio cómo y por qué este estado pre el individuo o el grupo vive sin ninguna experiencia cons

ciente de las diferencias psicológicas entre los arquetipos de su abrazo inconsciente con la Gran Madre, para poder re
Masculino y Femenino, y sin ninguna individualidad cons clamar y afirmar su autoridad y poder independientes. Este
ciente. Por el contrario, existen como infantes psicológicos nacimiento a la conciencia del arquetipo Masculino y su pos-
tenor victoria sobre el arquetipo de la Gran Madre inauguran
J
protegidos por el abrazo de la Gran Madre, en mayor o me
nor grado según su identidad y bienestar psicológico, tanto si
se la vive como una Diosa cósmica como si se la proyecta so
la Era del patriarcado psicológico, en el terrno histórico y en
el plano individual.
/
bre la propia madre o esposa. Hoy día, cuando muere a su pesar y con resistencias el rei
La benevolencia del gobierno de la Gran Madre sobre la no ya caducado del Gran Padre en nuestra psicología y cul
conciencia humana continúa mientras que es útil para las ne tura colectivas, es fácil olvidar que, como la Era de la Gran
cesidades de desarrollo del individuo o del grupo. Pero cuan Madre, la época patriarcal ha cumplido un objetivo eeiiçial
do un alma está preparada para experimentar su libertad e in y creativó eríla çvQ1çift mnaSu orientación psicológica
dividualidad, su capacidad para darse cuenta y para fue una condición previa para el nacimiento de la feminidad
\, comprender, y su potencial de relación y de amor humano, el consciente y el desarrollo de la totalidad humana -y continúa
N siéndolo en ciertos momentos de la transición de la infancia
poderoso abrazo de la totalidad inconsciente de la Gran Ma
dre deja de sentirse como un útero cálido y seguro y empie al estado adulto, tanto en hombres como en mujeres-;. La
-_) •d’ za a ser sentido, desde la perspectiva de la naciente con energía heroica masculina, que logra diferenciarse del abra
ciencia del “yo”, como devorador, claustrofóbico y zo oscuro e inconsciente de la Gran Madre, rompe el mundo
amenazante En esos momentos; las imagenes d su geftero psíquico de una manetaquepermite distinguirentreel.o”
sidad on eclip4s en los osen a_mitologia -que son y el “tú”;iamatéria y el espíritu, macho y hembra. Con ello
los eos co1etivos e individuales del desarrollo psicoló inaugüi una revolución en la experiencia, la percepción y la
gico— por imágens e u naturaleza demoníaca. En la anti Mediante su energía y su poder,
comprensión del ser humano.
1
gua China-coiivirtió en la oran Madre de Occidente, una la conciencia individualy colectiva logra arrebatar del in
horrible criatura con cara humana, .dientes de tigre y rabo consciente la experiencia de la discriminacion, la individua
e1eopardo, que moraba en la cueva de una montaña y do lidad y la otredad. De iste ni&Io, desrróllan la capacidad de
minaba las plagas y la peste. En la mitología asirió-babiló ljbertad y de elección, así como, hasta cierto punto y en cier
nica, Tiamat, que dio a luz al mundo, también era una ima tos niveles,Pacapacidad de comprender, y con ella, de con
gen de caos primitivo y ciego “contra la que luchaban los trolar muchos de los acontecimientos hasta entonces impre
Dioses inteligentes y organizadores”. Y en la mitología hin decibles de la vida material y psicológica. Por otra parte, la
.dú,Kali la madre divina, tiene otra cara como la.Terrible Mu hegemonía del Gran Padre nos permite simplificar los me
jerA-rafia, las fauces del abismo que todo lo devoran. canismos de la superviyencia física y del bienestar de manera
Para diferencirse del gobierno de la Gran Madre y para suficiente como para proporcionarnos un espacio y un tiem
derrocarla, la lucha de la nueva conciencia emergente adop po para escuchar y para’.explorar otras dimensiones de no
ta formas muy diversas, pero todas comparten una caracte sotr-a/os.-mismas/os. -
rística esencial. Todas ellas reflejan la energía masculina, ya El abuso considerable y bien documentado de las mujeres
sea individual o colectivamente, esforzándose por separarse y de la tierra, la negación y desvalorización de lo Femenino,

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y la devastación de lo físico y de lo instintivo causada por las semillas que germinan de lo Femenino. Estas mujeres no
guerras políticas y económicas producidas por el poder egó imitan las pautas patriarcales, intentando poner lo Femenino
tico del Gran Padre, son más un reflejo del sometimiento in al servicio del ego personal o identificarlo con el cuerpo d
dividual y colectivo a su dominio competitivo, separativo y la mujer. Y esto porque, mientras que la naturaleza jerárqui
jerárquico, que una consecuencia inevitable de su presencia. ca y separativa del arquetipo Masculino es la de crear un ti
Sin la aparición y maduración de la energía masculina, tal vez mundo a su imagen y semejanza unilateral y ‘fragmentadora,,
no habríamos desarrollado hoy día un sentido suficiente de la naturaleza de lo Femeni esla de reconocer, experimen
\J ‘ nJiestra prop individualidad, para poder invitar y acoger lo r,.ie.ci6i ñJittitjwttalidad. Mientras que lo Maciilno di
Fmeninoen lonciencia -eiuestfo 1htériór y en las es ferejopestos, lo Femenino forneta larelacion entre
feras sociale jioíífícas y económicas-. Sin su energía ar e1is 4Lcop vy estan en cada nivel de exis
quetípica, quizá seríamos ipaces de escuchar y de seguir tencia, así como la comunicación seúal, las energías com
los hilos que dan vida a los mundos delos opuestos y los co plementarias dentro de cada alma humana, los dos modos
nctaneIe sí; mundoqii el poder discriminador masculino de pensar, el analítico y el analógico, y los dos polos del
ayudó a desvelar y, en parte, a crear. universo, la materia y el espitu.
Como intuyeron los antiguos sabios, el alma se desarrolla Mientras que loMasculino separa,çliscrimina,controla,
mediante la atracción de los opuestos y su relación con ellos, coiquista, aguanta, supra, lucha y crea, loemeninçi’ recibe,
-en especial de la materia y el espíritu, y de los dos brazos de pernute, tri.nsige, absorbe, disuelve, une, conecta y gesta
la Divinidad, lo Masculino y lo Femenino-. La revolución pa Así, mientras que lo Masculino y la revolución patriarcal
triarcal en la conciencia humana, junto con sus reflejos cul posibilitaron que emergiera a la conciencia el “yo” individual
turales, sociales y políticos, nos posibilita reconocernos y desde las profundidades subterráneas e inconscientes del úte
desarrollar uno de los brazos de este ser divino. E1 desequi ro de la Gran Madre, el despliegue de lo Femenino dentro del
librio psicológico creado por la hegemonía Masculina invi alma permite a este “yo” individual empezar a retomar y a co
ta apenetrar enla conciencia a “lo otro”, el complemento Fe nectar con su ser más vasto: su cuerpo, su alma y elespírilu
menino. -
unir-sal; le permite reconocer su ¡elación con la comunidad
Así como los hombres tendieron a ser los iniciadores de más amplia de la vida terrestre y cósmica, cQn_1jpiad di
la revolución patriarcal, las mujeres han tendido a concebir vina que da existencia alas partes separadas, a los pueblos,
y gestar el nacimiento de lo Femenino consciente a partir a las naciones, a los planetas y a las estréllas Lo Femenino
del abrazo de la Gran Madre. No las mujeres que, enfadadas permite que vivamos el mundo y nos vivamos a nosotras/os
por la opresión de su género bajo el patriarcado, han inten mismas/os en un cambio desde una perspectiva yo-ello, a -
tado convertirse en patriarcas dentro-de cuerpos femeninos, una visión yo-Tú, después, “yo soy” y “todo es noso
ni las que han intentado dar la espalda al camino psicológi tros/as”. - - - —
co por nostalgia del dominio sexualmente indiferenciado de Sin perder los poderes válidos y percepciones de la pers
la Gran Madre, sino aquellas que, codo con codo, y honran pectiva analítica y newtoniana masculina, que han revelado
do lo Masculino dentro de los hombres y de las mujeres, han muchas de las partes diferentes de nuestra naturaleza terres
empezado aescucharya dar la bienvenida a la conciencia a tre, psicológica y cósmica, lo Femenino nos permite disolver
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1
las divisiones conceptuales y perceptivas superfluas que se como tronco, raíces y ramas. Al ayudarnos a fundirnos con las
paran a cada parte entre sí y de la totalidad orgínica. Nos per diferentes cualidades y energías del alma y de la tierra, lo Fe
mite reconocer, por ejemplo, que el cuerpd; el alma y el es menino nos conduce a su toma de conciencia, como atribu
píritu no sólo no son niveles diferentes y separados de ser, tos inseparables y miembros de nuestro ser, del mismo Ser,
sinoqueestán íntima y simultáneamente conectados, impli sin que traicionemos nuestra alma, identificándonos única
cados en una danza continua conjunta, y que reflejan y co mente con una parte.
munican su bienestar respectivo y también su “mal-estar”. Lo Al invitarnos a vivir todas las cosas terrenales como as
Femenino nos permite darnos cuenta de que cualquier méto pectos integrales de nuestra totalidad, lo Femenino contribuye
do terapéutico, cualquier educaciói\ y organización sócial a despertar nuestro sentido de la responsabilidad hacia este
necesitn consecuencia téner- en cuenta y respetar todos planeta, a darnos cuenta de que no estáñios aqüí tiara abusar
los_niveJjçJxstencyus relaciones cambiantes y de él, sino para cuidarlo. Se nos capacita para entendernos y
sensibles. - vivirnos, no como los/as gobernaite.s de la tierra, sino como
T1eceptividad paciente y acrílica de lo Femenino posi s,gujiaíies/as, beneficiarios/as y, en última instancia
bilita que partes del alma reprimi como sus cocreadores/as.
das, neg isoi.dsejjxçopscientes. Nos invita a aban Desarrollahddentro de nosotros/as los hilos de la relación
donar la visión patriarcal del cuerpo y de la materia, como entre los opuestos espíritu y tierra, masculino y femenino,
instrumeñ de rnnipulación y explotación en aras del co vida y muerte, consciente e inconsciente, lo Femenino da a luz
n&irniento y de la autonom del ego; o como el cenagal a individuos y comunidades humanas capaces de reflejar y de
temido de la oscuridad, el misterio y el sufrimiento instinti encamar su fuente de ser yde.dynir: el Ser. Lo Femenino ex
vos e inconscientes. Por el contrario, lo Femenino nos faculta pande sñávmente nuestras almas disolviendo parámetros ilu- ,
a darles la bienvenida, a honrarles y a disfrutarlos, como re sorios y superfluos, aunque hayan sido útiles en otros mo
flejos instintivos y correspondencia entre el alma y el espíritu, mentos de nuestra evolución. Nos enseña a escuchar y a seguir
como los vestidos de nuestra divinidad. Nos sensibiliza a las recoocer y a
diferentes imágenes del alma, para que podamos percibir y re sentir la voluntad sagrada del cuerpo y del alma,l hágase Tid
cibir en la conciencia nuestra hambre y nuestras heridas emo Voluntd” que alguna vez hemos intentado domY y con
cionales; las que enterradas durante décadas, o incluso du trlar. Lo Femenino despliega un camino de devenir caracte
rante vidas enteras, han obstruido el flujo libre de la energía rizado por la actitud relajaih más que por elesfuerzo.
y han inhibido nuestra capacidad de entender, de relacionar Disolviendo las &ñiarcaciones rígidas y los comparti
Z. nos y de amar. mientos innecesarios que impiden nuestras relaciones y la
- La naturaleza tejedora de lo Femenino nos capacita para vivencia de la totalidad orgánica, del único Ser, que se halla
• apreciar y experimentar la naturaleza holística del mundo tras el ego y la individualidad, lo Femenino nos ayuda a sa
que complementa la perspectiva inconexa Masculina. Nos crificar la identidad menor por lamayor. Nos invita a aban
permite, por ejemplo, sentir la presencia del árbol de la vida donar el enfoque egoico y combativo en pos de nuestra con
y unirnos con su fuerza vital particular; también con el árbol vejiindivjduoiiuestro apego a la autononna del ego,
arquetípico, que vive en el alma como imagen, y en la tierra nuestro deseo de poseer y de controlar y, finalmente, nuestro
48Centro de Desarrollo Transpersonal Centro de Desarrollo Transpersonal 49

deço de identificamos con nuestro personalidad efímera. el amor, la reverencia y la serenidad. Al mismo tiempo, nues
Al TrffiUpierfa en nosotras/os la capaci tras emociones más burdas empiezan a marchitarse y a trans
dad de comprender a Chuang Tzu cuando dice que no esta formarse, a medida que disminuyen progresivamente los de
Ç ba seguro de si soñó que era una mariposa o era la mariposa seos, los miedos y las aversiones del ego que disturban la paz
\j ‘la que soñó que era Chuang Tzu. Y podemos entender la de nuestros corazones. Al ser capaces de reflejar, ya sea pá
pregunta que C.G. Jung se hacía en su infancia sobre si él era lida o intensamente, la sabiduría y el amor incondicional del
el niño que se sentaba en la piedra o la piedra sobre la que el Ser, nuestras almas están constantemente rebosantes y nues
niño se sentaba tros intereses se confunden con los intereses del Ser.
A medida que nos arriesgamos a penetrar en este territo Con este desplazamiento de identidad, desde el ego y la
rio en el que se desplazan y se disuelven las preguntas sobre personalidad efímera hasta elasuperior o universal, retor
nuestra propia identidad, lo Femenino impulsa aermitir en napien. Entramos en la totalidad psicológica y vir
;. lugar deapose, a vivir la vida como un proçso más que ginal de la Gran Madre y la conocemos por primera vez.
como piezas estaflcas, y puede lleyarnos a profundizar en el Pues como decía Philo de Alexander: “El congreso de los
morir que es la condición prçyj ckuuestro devenir. Puede hombres hace de las vírgenes mujeres para la procreación
aytrdárnos a que soltemos amarras, a sacrificar nuestro ape de los hijos. Pero cuando Dios empieza a asociarse con el
go personal a las reservas de sabiduría, poder y amor, a las alma, hace que la que era antes una mujer se convierta de nue
que nos ha dado acceso el nacimiento a la conciencia de vo en virgen”. En nuestra virginidad andrógina, capaz de re
nuestra naturaleza divina -el Ser-. Cuando lo hacemos, el lacionarse con las energías masculinas y femeninas en sus di
“yo” individual se despoja de su identidad y de su reflejo per ferentes manifestaciones y en sus diferentes niveles de ser,
sonal y efímero, que está delimitado por el tiempo y el es pero sin identificarse con ninguno, nos convertimos en ca
pacio. Vuelve a conectar entonces, o tal vez coiecta por pri nales libres para que fluya la energía espiritual a través del
mera vez conscientemente, con su”yo-idad”cósmica e cuerpo y de la tierra, y para el flujo y transformación co
inmortal el “yo que e’tu, ti ra_yyrso, el yo que rrespondiente de la energía terrestre hacia el espíritu.
ge expresar parte ds1LnauI:a1ez&gjIvés delaforma fí En los momentos en los que elegimos experimentar el
siçajndjjidüátEde la cosmos que es nuestro ser, dejamos detrás las energías ar
mento nos habíamos identificado. Con este sacrificio de las quetípicas de hombre y mujer y vivenciamos la única fuen
identidades, que se han quedado pequeñas, nos volvemos te que da nacimiento a su polaridad. Como dijo Jesús en el,
capaces de movernos libremente a través de todo el espectro Evangelio de Santo Toihá: “Cuando hacéis lo interno igual
de la conciencia, conectando nuestro ser temporal y nuestro a lo externo, lo itérno como lo interno, y lo de arriba como
ser universal. Podemos apreciar y disfrutar de nuestras na lo de abajo, y cuando unificáis varón y hembra, de manera
turalezas material y espiritual, así como de nuestra libertad que el varón no sea varón ni la hembra [sea] hembra, enton-’
creativa de elección, una vez que hemos experimentado nues ces entraréis [en el Reinol”.
tra unidad con la fuente de la creación. Este reino del alma está caracterizado, entre otras cosas,
__—‘ A través de esta muerte y renacimiento, se intensifican por el amor. No se trata simplemente del amor que sirve a los
.. nuestras capacidades de sentir emociones más elevadas, como demás como a uno mismo y cuida de la tierra como encar

Tras las huellas de nuestra evolución común
nación de nuestra divinidad; ni tampoco es sólo el amor de la

devoción física y psicológica, o el amor incondicional, que es
inconmovible sea cual sea la respuesta, actitud o acción de la
otra persona; ni meramente el amor trascendente y sin obje
to que constituye la fuerza de vida y la esencia del alma, y que
es accesible como fuente ilimitada cada vez que decidimos
volvernos hacia adentro y beber. Abarcándolos todos, este
amor es el amor de la bienaventuranza: el de la sabiduría y el
éxtasis. Tal vez sea comparable, aunque en pequeña medida, 2. LA TRANSFORMACION
al éxtasis efímero que nos ilumina cuando, antes de haber al
canzado las bodas internas de cuerpo, alma y espíritu, pro- SOCIAL Y LO FEIV[ENINO:
yectamos a otra persona nuestra pareja interior no realizada
y, al enamorarnos, vislumbramos el único Ser. DE LA DOIVIINACION A LA
COLABORACIÓN SOLIDARIA
por Riane Eisler
En su famoso libro El cáliz y la espada (1987), Riane Eis

ler traza las fuerzas subterráneas que dan forma a la cultu
ra humana, desde la prehistoria hasta el futuro, pasando
por la historia escrita. Reconstruye el mundo primitivo de co
laboración solidaria entre hombres y mujeres, que duró unos
veinte mil años, y que dio después “un giro sangriento de cin
co mil años” de dominación masculina. Eisler afirma que
posteriormente, en una determinada encrucijada histórica,
los hombres que estaban en el poder enterraron deliberada
mente la verdad sobre la naturaleza igualitaria de la socie
dad anterior, de manera que a todo el mundo le pareciera
(como sigue ocurriendo hoy día) que los hombres habían
mandado siempre, como padres, políticos, sacerdotes o Dios.
En su ensayo, escrito expresamente para este libro, Eis
ler emplea una rica mezcla de antropología, literatura, po
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J
Tras las huellas de nuestra evolución común La transformación social y lo Femenino
lítica y mitología, para explorar la relación entre la cultura

y lo Femenino. Utilizando un enfo que sistemático, la autora
percibe un patrón histórico de poder: el control del hombre Como muchas otras mujeres, durante los años sesenta ex-
está ligado a la dominación de los demás, a la escala jerár perimenté dentro de mí una fuerte conmoción, un despertar
quica, a la guerra y a un dios trascendente. Sin embargo, Eis para el que todavía no tengo nombre. A medida que pasó el
ler afirma que existieron periodos, perdidos para la historia tiempo, me di cuenta de que se trataba de un despertar de la
escrita, en los que los grupos humanos eran más igualitarios, conciencia de mi identidacLcomo mujer, un despertar de nue
• estaban conectados por vínculos y no eran guerreros. Tam vo a algo suprirnido hacía mucho tiempo, pero que era par-
bién veneraban a una deidad femenina inmanente. Su con te integrante de mi propio ser: unaemi ida onsciente. J
-\ Ç. clusión es que la opresión de las mujeres está ligada a la re A medida que pasaban los años, esta conciencia se fortalecía
Npresión de los valores femeninos. y se expandía. Comencé a entender hasta qué punto mi vida es
• \ Si es así, no tiene ningún fundamento el temor de los taba profundamente modelada, primero, por la supresión y la
hombres de que el fin de su dominación conduzca inevita distorsión y, después, por el poder in)plosivo y explosivo de mi
bleinente a la dominación por parte de las mujeres. Por el conciencia femenina en evolución. Lo que al principio no era
• contrario, Eisler prevé una sociedad solidaria en la que no sino un anhelo se convirtió en una intensa búsqueda, un viaje
se relacionará ningún género con la inferioridad o la supe interno que me ha conducido a territorios de pensamientos y de
rioridad, y en la que más valores de los denominados feme sentimientos que han aportado un nuevo contenido, propósito
ninos podrán ser compartidos por cualquier persona. y, sobre todo, integración a mi trabajo y a mi vida.
Eisler sostiene que hoy día estamos frente a una encru Durante las dos últimas décadas, mi investigación estuvo
cijada similar a la que nos enfrentamos en otro tiempo como inmersa en una revisión sistemática de nuestro pasado, pre
género humano, cuando se produjo el cambio de una socie senteyíuturocuhural. Mis descubrimientos, que están par
dad ginocéntrica a una sociedad .androcéntrica. Pueden ob cialmente detallados en mi libro El cáliz y la espada, indican
servarse signos de cambio hacia una Era solidaria que está que la nueva integración de las mujeres y la cuperación
emergiendo, en los grupos básicos que intentan crear rela de los llamados valores femeninos, como la compasión, la no
ciones de igualdad, armonía con el entorno y sociedades violencia y el cariño én todos los campos de la vida, es uno
pacificas. El trabajo psicológico que se requiere para inte de los progresos más importantes de nuestra época: un ele
grar conscientemente el Principio Femenino acelerará el mento esencial del cambio que necesitamos con urgencia,
nacimiento de una sociedad solidaria.. desde lo que he llamado sistema dominador de organización
Riane Eisler es la autora de El cáliz y la espada y co social hacia un sistema de colaboración solidaria.
fundadora del Centerfor Partnership Studies. Ha enseñado Mi trabajo también comprueba algo que una vez expresado
en la Universidad de California y en el Immaculate Heart parece obvio, pero que ha sido eficazmente oscurecido con la
College. supresión de la conciencia femenina: el modo en que afecta
a todo el s ina.spçial, a sus instituciones y a sus valores, la
estructura social más importante de todas las relaciones: las
relaciones entre las dos mitades femenina y masculina de la

humanidad y entre los valores estereotípicamente asociados tad de siglo, lo mismo que se dice que surgió Palas Atenea de
con la feminidad y la masculinidad. la cabeza de Zeus? ¿O tiene antecedentes, raíces espirituales
Concretamente, el que las mujeres y lo Femenino sean va y psíquicas, que sólo ahora estamos empezando a recuperar?
J
loradas e integradas en la gestión social, o desvalorizadas y su ¿Qué significa realmente “femenino”? ¿Cuál es su papel
primidas, afecta al hecho de que nuestras vidas como perso en la evolución de la cultura humana? ¿Cómo se relaciona con
nas sean armoniosas, en general, o que estén inmersas en lo la mitad femenina de la humanidad? Y sobre todo, ¿cuáles
que acertadamente se ha llamado la guerra entre los dos sexos; son sus implicaciones para el futuro de todas/os nosotras/os,
y esto tiene una importancia capital en nuestra época de bom tanto mujeres como hombres?
bas nucleares y de contaminación ambiental; también está Estas son algunas de las cuestiones a las que he intenta
‘relacionado directamente con el hecho de que una sociedad sea do encontrar respuestas mientras trabajaba -utilizando mu
pacífica o guerrera, democrática o autoritaria, ecológicamen chas 4jcip1ina-, para recQnstruir una imagen holística -en
te equilibrada o desequilibrada. En efecto, esta dinámica cla lo Que concierne alosgéner6s- de nuestro pasado y presen
ve puede determinar en gran medida nuestra calidad de vida. te, y crear una nueva liot6 plano principal de un futuro en
Según miro ahora hacia atrás, me maravillo de hasta qué el queJos valores llamdos fçmemnos hayan sido restaurados
punto he tenido que avanzar en mi evolución personal interna enla gestión social. El que estos valores fueran confinados en
y externa y de todo lo que tengo aún delante por caminar. A ve und de los dQs generos.h&sido pa.rtde la confusion Como
ces me pregunto cómo había podido vivir sin darme cuenta y consecuencia, la opresión de las mujeres y la opresión de lo
ser tan inconsciente, no sólo de la-importancia capital de lo Fe llamado “Femenino” han ido siempre a la par.
menino en cómo constru.im.oantie.stra sociedad y nuestro mun Hablo de “lo llamado Eemenino” porque es obvio que
do, sinodIq!L nstlu hír mi sentido más profundo los hombres son capaces de ser cariñosos, de no violencia y
e indispensable como mujerycomo persona. Pero la mayoría de compasión, y las mujerçs pueden estar tan identificadas
de las veces, estoy simplemente agradecida por haber nacido con, los llamados valores masculinos, como la conquista y la
en esta época fscinante de despertar de la conciencia, una dominación, coino se ha ensñaclo a los hombres a estarlo.
época que será recordada en los años venideros como una en Y hablo de “restaurar en la gestión social”, porque gracias en
crucijada decisiva en la evolución de nuestro planeta y de parte a lo que el arqueó’lógo británico James Mellaart llama
nuestra cultura: una época en la que lo Femenino consciente una “verdadera revolución en el campo de la arqueología”,
rompió las cadenas seculares, no sólo en las mentes y en los co estamos ahora aprendiendo que, durante miles de años de
razones de las mujeres, sino también en los de los hombres. nuestra prehistoria, la mujeres y los valores “femeninos” no
estaban subordinados a los hombres y a los valores “mas
culinos”.
La recuperación de nuestra herencia femenina: Esto no quiere decir que eran sociedades ideafe, pero
viejas claves y nuevos hallazgos parecen haber sido sociedades en las que la identidad mas
culina no se identificaba con la dominación y la conquista -de
¿Ha brotado de repente esta conciencia femenina emer mujres,..de otros hombres, otras naciones, o de la naturale
gente, de la que tanto se habla, estallando en esta segunda mi- za-, y en las que valores más femeninos y más suaves, como

Áa no violencia y la crianza, no eran considerados adecuados ras sociedades agrarias (lel Neolftico) que plantaron las pri
- sólo para las mujeres y los hombres “afeminados”. meras huertas. Igualmente, la leyenda de cómo la gloriosa ci
Un buen punto de entrada a esta imagen de nuestra evo vilización de Atlántida se hundió en el mar puede ser una
lución cultural es echar una mirada fresca a las numerosas le mezcla revuelta de recuerdos de la civilización ginocéntrica
\ yendas conocidas sobre la existencia de una Edad más ar minoica: una cultura única e increíblemente pacífica y crea-
\ moniosa y pacífica anterior. La Biblia judeocristiana habla de tiva en la que las mujeres y lo Femenino jugaban papeles
un jardín en el que hombre y mujer vivían en armonía entre preponderantes, y que se cree que desapareció cuando Creta
sí y con la naturaleza, antes de que un Dios masculino de y otras islas mediterráneas fueron terriblemente dañadas por
cretara que en adelante la mujer estaría subordinada al hom terremotos y enormes maremotos.
bre El Tao Te King chino describe una época en la que el yin, Estos nuevos descubrimientos arqueológicos (reforzados
o Principio Femenino, no estaba todavía gobernado por el por reinterpretaciones de antiguas excavaciones, mediante
yang, o Principio Masculino, una época más armoniosa en la la utilización de métodos más científicos, como la prueba
que todavía se honraba la sabiduría de la Madre y la huma del carbono para determinar la antigüeda, que ha hecho re
nidad vivía en paz. Los primeros escritos del poeta griego He montar a varios milenios la escala del tiempo prehistórico) re
síodo aluden a una “raza dorada” que cultivaba la tierra en velan que la civilización es mucho más antigua de lo que
“pacífica tranquilidad”, antes de que una “raza inferior” in creíamos. También revelan una fase anterior de nuestra evo
trodujera a Ares, su dios de la guerra. lución cultural, que hasta ahora había sido descuidada, pero
Aunque para muchas personas estas historias son simples que es de una importancia primordial: milenios de paz y
alegorías religiosas o poéticas, existe un consenso entre los prosperidad general, durante los que todas las tecnologías
eruditos sobre el hecho de que, en gran parte, éstas están ba básicas sobre la que está construida nuestra civilización se de
sadas en acontecimientos prehistóricos. Sin embargo, hasta sarrollaban en sociedades que no eran dominantemente mas
hoy día, ha sido considerado generalmente como una fanta cuJins violentas, .ni4&árquicas
sía un elemento clave: la alusión a una época en la que mu En otras palabras, estos descubrimientos nos proporcionan
jeres y hombres vivían en colaboración solidaria y éstos no una visión muy diferente de la visión de nuestros antecedentes
despreciaban los valores femeninos. históricos. Ya no es la noción de la prehistoria, aceptada desde
Cuando la arqueología estaba en pañales, las excavacio hace mucho tiempo, como una progresión lineal y siempre po
nes de Heinrich y Sophia Schliemann ayudaron a establecer sitiva de fases que irían desde el estado salvaje hasta la civili
que la legendaria Troya de Homero había existido. De la zación. Y también contradicen directamente la visión de que la
misma manera, las excavaciones arqueológicas actuales re guerra, el dominio masculino, y la conquista de la naturaleza,
velan que las historias sobre épocas en que las mujeres no son de derecho divino o genético, o de que son alternativa
eran dominadas por los hombres también están basadas en re mente requisitos previos de una “civilización superior”.
alidades más antiguas. Por ejemplo, los relatos mesopotá Mellaart informa, a partir de sus excavaciones en Çatal
mico y bíblico posterior acerca de un Jardín en el que hom Hüyük, cuna de una antigua civilización que se remonta a va
bre y mujer vivían en armonía entre sí y con la naturaleza rios miles de años antes de la civilización sumeria, que la es
proceden, en parte, de las memorias populares de las prime- tructura social característica de estas civilizaciónes primigenias

Í
parece haber sido generalmente igualitaria. Según él, el tama Al igual que en el Neolítico inferior, en esta civilización
ño comparativo de las casas, la naturaleza de sus contenidos, la subordinación de las mujeres no era la norma generaL El
y las ofrendas funerarias encontradas en las tumbas, muestran arte de Creta muestra a las mujeres en escenas en que reciben
que no existían grandes diferencias de estatus y posesiones. homenajes, cumplen funciones de sacerdotisas,.eiflClu5o
Los datos procedentes de Çatal Hüyük y de otros sitios ar como capitanas de barcos. Como escribe Nikolas Platon, en
queológicos neolíticos también revelan que en estas socie la Creta minoica, “puede verse el importante papel jugado por
dades, en las que las mujeres eran sacerdotisas y artesanas, la las mujeres en todas las esferas de la vida”.
hembra no estaba subordinada al varón. Es claro que, en También es importante, y es un fenómeno totalmente
agudo contraste con la mayoría de las religiones actuales, la relacionado, el hecho de que la influencia de la sensibili
deidad suprema era femenina y no masculina: era una diosa dad femenina sea omnipresente en el arte y en la vida mi
en lugar de un dios. noica (lo mismo que lo era en el Neolítico inferior, perio
Por otra parte, disipando la idea de que la guerra es el pre do en el que abundan las imágenes de deidades femeninas).
cio “natural” o inevitable que pagamos por la civilización, apa Ciertamente, la influencia de lo Femenin es tan poderosa
recen civilizaciones en las que la ‘guerra no era la norma. Se da en esta sociedad excepcionalmente pacífica y creativa, la
una ausencia general de fortificaciones. El variado arte consi última civilización ginocéntrica que se conoce, que Niko
derablemente avanzado carece de escenas, tan omnipresentes en las Platon afirma que “todos los aspectos de la vida estaban
el arte posterior, de “nobles guerreros” matándose entre sí en ba impregnados por una fe ardiente en la diosa Naturaleza, la
tallas, de dioses y hombres violando mujeres y de “conquista fuente de toda creación y armonía... [lo cuali desembocó en
dores gloriosos” arrastrando prisioneros encadenados. el amor por la paz, el horror por la tiranía y el respeto por
Todavía más fascinante —y también más relevante para la la ley”.
época en que vivimos- es el hecho de que este tipo de orga
nización social más pacífica y “femenina” parece haber con
tinuado hasta la Edad de Bronce, habiendo culminado en la Posibilidades humanas:
refinada civilización de la Creta minoica. una visión holística de los géneros
Nikolas Platon, el anterior director del Museo de la Acró
polis y director del Patrimonio Arqueológico de Creta (que Para algunas personas, la idea de una sociedad en la que
excavó la isla durante más de cincuenta años), ha afirmado las mujeres y los valores “femeninos” desempeñan papeles di
que esta civilización tecnológicamente desarrollada, que po rectivos, inmediatamente les lleva a imaginar un mundo en el
seía viaductos, calzadas pavimentadas (las primeras de Eu que los hombres estárrsubordinados en lugar de las mujeres.
ropa) y servicios cívicos sofisticados, tenía un alto nivel de Ciertamente, cuando se desenterraron en el siglo xix las pri
vida. Aunque existían diferencias de estatus y de riqueza, y meras evidencias de la existencia de sociedades prehistóricas
probablemente el gobierno era de tipo monárquico, hay evi no dominadas por hombres, la mayoría de los eruditos de
dencias del gran énfasis que se ponía en los bienes públicos, aquella época sacaron la conclusión de que, como no existí
lo que era muy extraordinario si lo comparamos con otras ci an los patriarcados, debía haber matriarcados. Pero el ma
vilizaciones avanzadas de la misma época. triarcado no es lo opuesto al patriarcado. Más bien es la otra
60Centro de Desarrollo Transpersonal Centro de Desarrollo Transpersonal

61
cara de un model on orde sociedad, en el que se es Tal vez, lo más importante sea que esta imagen holística
tructuran las relaciones humanas según el principio de je de los géneros en nuestra evolución cultural muestra que,
rarquía, empezando con la situación superior de una mitad de como especie, tenernos elección, y que una de las opciones es
la humanidad sobre la otra. una manera de vivir en la que los valores femeninos’ y las
La alternativa real a la sociedad patriarcal o dominante mujeres desempeñen un papel fuñdamental en nuestras es
masculina no es el matriarcado, sino un modelo copartici tructuras píquica y sociales. Y esto, porque si volvemos a
-pativo de organización social, cuyo principio primordial es la examinar nuestra historia cultural desde una perspectiva que
conexióñ én higar dIa jerarquía. En este modelo, la dive tenga en cuenta la totalidad de la humanidad (comprendien
sidad no se equpiraa la inferioridaI o la superioridad -em do a las mujeres y a los hombres) y toda la historia (inclu
pezando con la diferencia más fundamental de nuestra espe yendo la prehistoria), empezamos a comprobar que, bajo la
cie, la de varón y hembra-, y se da prioridad operativa a los gran diversidad que aparece en la superficie de organizacio
valores más “femeninos”, como el cariño, la no violencia y nes sociales humanas, se encuentran ciertos patrones que no
la compasión. son visibles de otra manera.
Este nuevo sistema de clasificación posibilita ver cómo y Por ejemplo, a primera vista, la Alemania de Hitler, el
por qué algunos de los periodos más creativos y progresivos Irán de Jomeini, el Japón de los samuráis y la Mesoamérica
de la historia sçrjta.han.sido épocas en las que las mujeres de los aztecas parecen representar culturas completamente di
y los y 1orsejieniaoshansic1qlominantes. Por ejemplo, ferentes.Pero cuando observamos con una visión global, in
en muchas de las comunidades çristjajasprimitiv, las mu cluyendo en ésta el estatus de las mujeres y los llamados va
jeres desempeñaron las mismas fuacionesdirigeñtes que los lores femeninos en esas sociedades, podemos identificar su
hombres, aunque este hecho haya sido rara vez señalado por configuración social dominadora. Vemos que dichas socie
los estudiosos de las religiones. Además, en muchas de estas dades que parecen diferentes tienen características asom
comunidades, que predicaban y practicaban la no violencia y brosamente comunes del modelo dominador. Tienen una es
la igualdad, la deidad era considerada como femenina y mas tructura rígida de dominio de los hombres y un desprecio
culina: la Madre y el Padre sagrados. valores “suaves” o. .iferneni
Igualmente, los trovadores y trovadoras que florecieron en nos”. Poseen una estructura socal generalmente jerárquica y
las cortes de Eleonor de Aquitania y en las de sus hijas Alix autoritaria, y se caracterizan por un alto grado de violencia,
y María, elevaron a la mujer y lo Femenino desde su condi queabarca desde el golpear a los niños y a las espóas den
ción subordinada y despreciada, afirmando que el Principio tro de la familia, hasta las guerras agresivas en un plano más
Femenino era parte integrante tanto de hombres como de amplio tribal o nacional.
mujeres y que la masculinidad era algo gentil, como en la pa A la inversa, también podemos ver asombrosas similitu
labra gentilhombre. No es una coincidencia el que fueran los des entre sociedades extremamente diferentes en otros as
trovadores quienes introdujeran lo que la Iglesia llamó des pectos y que son más igualitarias sexualmente, y en las que
pués la Mariología, el culto a María como Madre Divina, los “valores femeninos” se encuentran correspondientemen
que esencialmente es una reinstitucionalización del antiguo te más arriba en la escala de los valores sociales en vigor. Es
-culto a la diosa. tas sociedades tienden a ser no sólo más pacíficas, sino tam
62 Centro de Desarrollo Transpersonal Centro de Desarrollo Transpersonal63

bién menos jerárquicas y autoritarias. Este patrón se pone de

manifiesto en los datos antropológicos (por ejemplo, las so
1 La transformación social y lo Femenino
dominador presenta para nuestro planeta en esta época alta

mente tecnológica. Pero como ya hemos visto, la conciencia
femenina naciente tiene raíces muy antiguas.
ciedades de los BaMbuti y de los Kung), en los estudios de
las tendencias sexuales en las sociedades contemporáneas Ciertamente, las raíces del feminismo como movimiento
más igualitarias (por ejemplo, en los paísesescandinavos social de protesta se remonta probablemente hasta la época
como Suecia), y en los datos prehistóricos aludidos en el cataclísmiQa de nuestra prehistoria, en la que se impuso por
subcapítulo anterior. primera vez el sistema dominador: cuando fueron subordi
nadas las mujeres y el Cáliz (como símbolo de los valores “fe
meninos”). Como escribe la arqueóloga de a Universidad
Las mujeres, lo Femenino consciente y el futuro de California en Los Angeles, María Gimbutas, fue la época
en la que las sociedades que rendían culto a la Diosa, docu
¿Por qué estos patrones sólo se hacen visibles hoy día, al mentadas actualmente excavéiones arqueologicas,
mismo tiempo que estamos recuperando nuestra antigua he fuerondiñjoi invasores ré dhtSde
rencia femenina y viviendo la emergencia de un movimien confines 1 globo. Los invasores rendían literalmente culto
to feminista internacional y de una mayor toma de concien al poder mortal de la Espada, y aportaron consigo el despre
cia voluntaria de la feminidad? cio por las mujeres y todo lo asociado con los valores “sua
Yo creo que esta simultaneidad no es pura coincidencia. ves” o “femeninos”.
“Conciencia femenina” es una expresión que empezó a ex Incluso a través de los escritos muy posteriores de los
tenderse en los años sesenta. En un nivel personal, significa antiguos griegos, existen evidencias innegables de que, a pe
una nueva manera de mirarnos a nosotras mismas y al mun sar de la opresión, las mujeres de Atenas protestaron en con
do; ya no se aceptan los dogmas convencionales sobre la su tra del dominio masculino y de la guerra. Por ejemplo, en su
bordinación establecida por derecho natural o divino. En un famosa obra Lisístrata, Aristófanes cuenta cómo las mujeres
nivel social, simboliza el resultado de un proceso especial de de las ciudades-estado griegas en guerra se aliaron negándose
grupo: una convergencia de mujeres, no sólo para formular a tener relaciones sexuales con sus maridos hasta que deja
nuevas preguntas sobre la naturaleza de la realidad, sino tam ran de luchar, y lo lograron con este complot. Y en la brillante
bién para apoyarnos y nutrirnos unas a otras en una nueva obra de Eva Keul The Reing of the Phallus, se presenta un ve
hermandad social entre mujeres. En un nivel cultural, signi hemente argumento para explicar la ruptura de los penes en
fica un marco de reconocimiento de que la subordinación de cientos de estatuas del dios Hermes en Atenas, hacia el año
las mujeres y de los valores “femeninos”, como el cariño y la 415 a. de C., como un acto organizado de protesta femenina
compasión, se halla en las entrañas de un sistema social abe contra la Guerra del Peloponeso. (Era una época en la que,
rrante y cada vez más suicida. como escribe Keuls, el falo no era un símbolo sexual sino que
Los cambios masivos de conciencia reflejados en el mo se había convertido en un símbolo de dominación y con
vimiento contemporáneo de las mujeres son nuevos y radi quista masculinas).
cales, en el sentido de que constituyen respuestas contem Por otra parte, es claro que no es nuevo el reconocimien
poráneas al peligro potencialmente letal que el sistema to intuitivo de la importancia crucial de lo Femenino en los
64Centro de Desarrollo Transpersonal 65

asuntos humanos. Incluso durante la historia para la que exis lósofos de los “derechos del hombre” como Rousseau (que
ten fuentes (o historia del sistema dominador), se han escri ensalzaba lo Femenino pero al mismo tiempo relegaba es
to muchos volúmenes sobre lo Femenino -es una ironía que candalosamente a las mujeres al lugar subordinado “propio de
hayan sido escritos mayoritariamente por hombres, ya que du ellas”) es como un llanto surgido del corazón. Stanton, una de
rante mucho tiempo las mujeres estuvieron excluidas de es las grandes líderes del movimiento de mujeres americanas, se
cribir y de publicar. dirige a nuestra mente y a nuestro corazón. Y en la segunda
Sin embargo, es revelador el hecho de que en la mayoría fase del movimiento feminista moderno -caracterizado por un
de estos escritos, ejemplificados por las obras de clérigos gran resurgimiento de la acción política y social y de escri
como Heinrich Kramer y James Sprenger, poetas como Wi tos y transformaciones personales y sociales producidas por
lliam Blake, filósofos como Herbert Marcuse, y psicólogos el movimiento de liberación de la mujer- se puso de rele
como Carl Jung, lo Femenino ha sido alternativamente exal vancia un tercer tema fundamental: el tema del espíritu. Los
tado, romáticamente fantaseado o vilipendiado. Como Sophia escritos ecofeministas de mujeres como Susan Griffin, Mat
o Hokhmah, lo Femenino ha sido ensalzado como la con Keller, Gloria Orenstein y Charlene Spretnak, hacen hincapié
ciencia del hombre, como el símbolo de su sabiduría. La musa en que una espiritualidad que respete a las mujeres y a la
del hombre, lo Femenino, ha sido representada como su ms naturaleza es esencial para construir un futuro sostenible.
piración, la luz que le guía. Por otra parte, lo Femenino tam Sin embargo, aunque el movimiento de las mujeres del si
bién ha sido identificado con la oscuridad, la debilidad, la glo xx -y con él la expansión global de la conciencia femi
maldad y el engaño -como en los mitos arquetípicos de Eva nista- no tiene precedentes en cuanto a su profundidad y
y Pandora-; esto ha proporcionado razones de sobra al argu fuerza, ha sido en gran parte reactivo, adoptando la forma de
miito de que lo Femenino debe ser suprimido a toda costa. El reafirmación intelectual y protesta social. Un primer paso
argumento opuesto, el de que es esencial la restauración de lo esencial ha sido una revisión consciente de la estructura so
Femenino en la gestión social, especialmente en nuestra épo cial existente y la identificación de los elementos domina
ca de deshumanización tecnológica, también ha sido mante dores que tienen que ser cambiados. Pero el aspecto más
nido por un gran número de hombres, como los historiadores emocionante de este poderoso movimiento es un aspecto más
de la cultura Henry Adams y Lewis Mumford. Pero curiosa creativo: la creación consciente por parte de las mujeres, y
mente, se ha ignorado por completo la relación que parece tan cada vez por más hombres, de imágenes y realidades perso
obvia entre lo Femenino y las mujeres de carne y hueso. nales y sociales más “femeninas” de colaboración solidaria.
Sólo en raras ocasiones, como en la extraordinaria obra del La nuestra es una especie que vive literalmente de histo
siglo xii Cite de Daines, de Christine Pizan, han sido escu rias y de imágenes, de mitos —tanto religiosos como secula
chadas las voces de las mujeres mismas. res— que nos dicen lo que es “sagrado”, “natural” y “verda
Igualmente, en la obra revolucionaria del siglo XVIII de dero”. Y durante mucho tiempo, nuestras mentes conscientes
Mary Wollstonecraft, In l’ndication of the Rights of Women, han sido alimentadas por historias e imágenes que sirven
y en el llamamiento en Seneca Falis de Elizabeth Cady Stan para mantener un sistema dominador.
ton, en el siglo xix, podemos encontrar un enfoque más in Por ejemplo, el arquetipo demasiado familiar del héroe
tegrado. La respuesta apasionada de Wollstonecraft a los fi- como asesino (desde Ulises hasta Rambo) inculca las mentes

1
de hombres y mujeres (desde nuestra infancia) con la no

1 La transformación social y lo Femenino
ción de que la dominación y la conquista, ya sea de mujeres, rrestre”. Estas asociaciones son tan poderosas que a la ma
de otros hombres, otras naciones, o de la naturaleza, es lo que yoría nos cuesta imaginar cualquier otra cosa, a pesar de que
hace al hombre realmente masculino. El poderoso arquetipo muchas personas conocemos los pasajes bíblicos en los que
de la mujer como seductora diabólica (desde Circe, en La Jeremías se queja amargamente del pueblo de Israel por “ha
Odisea, hasta el papel de Glenn Close en la película Atrac ber caído” en el culto de la Reina de los Cielos, y el hecho de
ción fatal), sirve para justificar después la dominación de que el emperador japonés afirme su derecho a gobernar como
las mujeres y de lo Femenino por parte de los hombres. Y los descendiente de la Diosa del Sol.
cuentos de hadas en los que una Bella Durmiente espera pa Estas antiguas imágenes delo Femenino asociadas con los
sivamente al Príncipe Encantador para que la despierte, no cielos y el sol contradicen claramente la idea del varón como
sólo condiciona a niños y niñas a asociar la pasividad y la fal activo, luminoso y racional, frente a la hembra como oscura
ta de poder con las mujeres, sino que además su mensaje in e irracional. Pero con la misma claridad, la asociación de lo
trínseco es que no existe algo así como una “Conciencia fe Masculino con los primeros valores enunciados, y de lo Fe
menina”, que una mujer carece en absoluto de conciencia menino con estos últimos, sirve para mantener la mentalidad
sin un hombre que la despierte. de dominación, al reforzar inconscientemente la idea de que
Es difícil abandonar estas historias e imágenes consagra el gobierno de los hombres y de la masculinidad sobre las mu
das sobre las mujeres y los hombres “reales”, y de cómo de jeres y la feminidad es simplemente “la manera como son las
ben relacionarse entre sí de manera “natural”. Estos estereo cosas”.
tipos sexuales han sido nuestro sustento cultural, el material Existe una resistencia dominante al movimiento contem
a partir del cual hemos construido nuestra manera de pensar, poráneo de colaboración solidaria, en nuestro interior y en
de sentir, e incluso de soñar. Es por esta razón por la que es todo el sistema cultural. En el ámbito de la religión, obser
tan importante el cuestionamiento actual de lo que significa vamos hoy día el resurgir de los dogmas y de las prácticas mi
realmente ser un hombre o una mujer; y con él, lo que sig sóginas, tanto en el fundamentalismo islámico como en el
nifica “masculino” y “femenino” en una sociedad solidaria en fundamentalismo cristiano. En el terreno educativo, todavía
lugar de en una sociedad dominadora. encontramos la relegación de todo lo asociado con las mujeres
Pero en este proceso de desmadejar y volver a tejer de ma o lo Femenino al gueto de los estudios efectuados por muje
nera consciente los mitos convencionales de la masculini res. En la política, no sólo contemplamos la nueva idealización
dad y de la feminidad, tenemos que estar atentas/os al peli del gobierno de un “hombre fuerte”, sino que nos encontramos
gro de podernos encontrar inconscientemente atrapadas/os incluso con la colaboración de algunas mujeres en posiciones
en la red de los arquetipos sexuales de dominación, y tejien de liderazgo que adoptan posiciones duras o estereotípica
do de nuevo sin quererlo un tapiz de mitos y de realidades do mente “de hombre”, y que en definitiva sirven para mantener
minadores. Por ejemplo, en la mitología todavía predomi el sistema dominante masculino en el que se han elevado
nante yin/yang y ánima/ánimus, encontramos lo Masculino como “excepciones” a la regla.
asociado a los poderes “superiores”: el sol y el cielo. Por el Pero también existe un gran movimiento hacia adelante,
contrario, lo Femenino se describe como lo “oscuro” y “te- como el de la creciente toma de conciencia de que no pode
mos injertar un sistema global, pacífico y ecológicamente
68
j
equilibrado en estructuras sociales fundadas en el dominio, afirman mi Conciencia de Feminidad y refuerzan mi creen
respaldado por la fuerza, de media humanidad sobre la otra. cia en que, a pesar de los obstáculos, podemos crear un futuro
Lo más importante es que cada vez más gente se da cuenta de regido por el Cáliz, el antiguo símbolo del poder de dar e ilu
que no existe una posibilidad de construir un mundo guiado minar la vida.
por los valores “femeninos” y, al mismo tiempo, reservar las
instituciones y sistemas de creencia que mantienen a las mu
jeres subordinadas a los hombres.
Vivimos una época apasionante, una época de crisis y
oportunidad, una época que los teóricos llaman un periodo de
desequilibrio y, por ello, de transformación potencial de los
sistemas. Pero las posibilidades de un salto adelante funda
mental, en vez de un hundimiento de nuestra evolución cul
tural, no tiene solamente un interés teórico; tiene un profun
do interés personal y planetario, en un tiempo histórico en el
que la Espada -el antiguo símbolo de un sistema basado en
la fuerza o en la amenaza de la fuerza- es la bomba nuclear,
y en el que la “conquista de la naturaleza por parte del hom
bre” amenaza la ecología misma de la que depende toda la
vida de este planeta.
Cuando miro atrás y veo cómo ha cambiado radicalmen
te mi conciencia en sólo dos décadas -y con ella mi vida-, en
cuentro una prueba existencial de que el cambio esencial es
posible. Cuando miro a mi alrededor, veo las pruebas obje
tivas de que va por buen camino la transformación de una so
ciedad dominadora hacia una sociedad de colaboración soli
daria. Lo veo en todos los hombres que han vuelto a definir
la paternidad para incorporar comportamientos “femeninos”
que, tan sólo hace muy poco tiempo, estaban exclusivamen
te asociados con la maternidad; en todas la mujeres que es
tán introduciendo lo que la socióloga Jessie Bernard llama
“cualidades distintivas femeninas” en el “mundo masculi
no” de la política, la economía y la ciencia; en todas las fa
milias que están reconociendo como maltrato de niños dog
mas en otro tiempo incuestionables como “no se debe evitar
el castigo cuando se merece”. Observaciones de este tipo re-

De la liberación de las mujeres
maternidad o en la trampa de jugar el papel de objeto se

xual? ¿Qué es el Principio Masculino? ¿Cómo ha contri
buido a mantener limitadas a las mujeres? ¿ Cuál es la raíz
de la insatisfacción en las relaciones tradicionales entre
mujeres y hombres, que están hoy día deshaciéndose en can
tidades epidémicas?
Stein distingue entre lo que es instintivo o arquetípico en
nosotras/os como mujeres y hombres, y lo que hemos adqui
3. DE LA LIBERACIÓN rido, impuesto por una cultura que beneficia unos valores en
detrimento de otros. Explica que muchas cualidades que)
DE LAS MUJERES A LA consideramos como “femeninas como los sentimientos ma
“,
ternales, y otras que consideramos “masculinas como el

LIBERACIÓN DE
“,
poder fálico, no pueden aplicarse a los géneros (mujeres y

hombres), sino al arquetipo (Femenino y Masculino) que
LO FEMENINO existe en ambos sexos. Esta confusión tiene como conse
cuencia cortes psicológicos entre hombres y mujeres, que
son las que producen las enormes dificultades que sufrimos
por Robert M. Stein en nuestras relaciones recíprocas.
A partir de los dioses y diosas de la cultura griega, el au
tor trata de explicar en términos generales las característi
El Principio Femenino ha sido amputado no sólo en los te cas de lo Femenino y de mostrar cómo han sido desvalori
rrenos de la mitología, de lo social y de lo político, sino zadas en nuestra cultura, que está gobernada por el espíritu
también en la vida interior de los individuos, en donde podía del Principio Masculino. Alfinal, Stein afirma que para ser
tener el poder de generar el eros, la capacidad de conexión, una mujer, una debe hacerse consciente del papel que juega
el enriquecimiento interno y una especie de autoridad que lo Femenino interiormente, pero no ser atrapada por él en
procede del alma. Por esta razón, lo Femenino está tanzbién ninguna forma externa concreta.
ausente con frecuencia en nuestras vidas interpersonales, Robert M. Stein, doctor en Medicina, tiene una consulta
en el espacio sagrado que existe entre nosotros y las perso privada de psicoanálisis junguiano en Los Angeles. Es autor
nas que amamos. de numerosos artículos y es conocido sobre todo por su es
En esta fascinante investigación sobre las consecuen tudio pionero sobre el misterio del incesto, Incest and Human
cias de la escisión de los arquetipos, el psicoanalista jun Love (1984).
giano de los _ngeles Robert Stein plantea algunas cuestio
nes básicas: ¿ Qué es el Principio Femenino? ¿ Cómo está
vinculado a las mujeres y en qué es algo distinto de ellas?
¿ Cómo han sido éstas atrapadas en las obligaciones de la

Tras las huellas de nuestra evolución común De la liberación de las mujeres
mino más creativo de efectuar estos cambios necesarios, para

que no nos perjudiquen, como nos ha ocurrido con nuestros
El matrimonio se ha convertido para muchas mujeres en una avances tecnológicos.
prisión opresiva en lugar de ser un santuario. Y ya la educación C.G. Jung ha sido quien ha introducido el antiguo con
de las jóvenes no está encaminada exclusivamente a enseñar cepto de arquetipo en la psicología moderna. Yo utilizo el tér
les el arte de ciLqiijstar y agradar a los hombres, de construir mino arquetipo para expresar la presencia de una fuerza di
un hogar yde ser madres. Sin embargo, emparejarse, construir vina dentro del alma humana, que se manifiesta en todos los
un hogar y una familia, son todavía necesidades instintivas y patrones típicamente humanos del pensamiento, del senti
profundamente enraizadas que no se pueden dejar de lado sin miento, de las imágenes y del comportamiento. Esto implica
más. Los roles arquetípicos que mujeres y hombres han en que la energía e inteligencia que se hallan dentro del alma, y
carnado en nuestra cultura no se han debido sólo a la educación que la dirigen, proceden de una fuente divina, y que los ins
-; y al condicionamiento: son antiguos roles que tienen parale tintos humanos constituyen una de sus manifestaciones. Así,
lismos instintivos en muchas otras especies. cuando decimos que las mujeres están atrapadas en roles fe
El feminismo se ha interesado en primer lugar en liberar meninos arquetípicos, debemos reconocer que éstos no son
de estos papeles a las mujeres y en obtener un estatus y de simples creaciones humanas, sino que expresan también un
rechos iguales a los hombres. Se ha preguntado de qué ma aspecto de lo divino.
nera son opresivos estos roles y cómo se han desarrollado Todas las culturas y todas las religiones han intentado ex
¿Son solamente opresivos para las mujeres o también oprimen presar el arquetipo Masculino y el Femenino en sus dioses y hé
a los hombres? ¿Han necesitado tal vez las mujeres asumir roes. Los antiguos griegos estaban especialmente dotados para
esos roles y los hombres los suyos correspondientes? describir la actividad divina: cada estado y cada capacidad,
La psicología profunda nos ha enseñado que los patrones cada estado de humor, cada pensamiento y cada experiencia, es
culturales tienen sus orígenes en profundas raíces arquetípi taban reflejados por una deidad. En nuestro intento de explo
cas o instintivas, aunque puedan volverse opresivos para el es rar los roles arquetípicos en los que las mujeres están atrapadas,
píritu humano. Si estos roles arquetípicos Femenino y Mas debemos aprovechar la agudeza de percepción de los griegos.
culino han nacido para satisfacer ciertas necesidades básicas, El papel más obvio que las mujeres han tenido que acep
entonces haremos bien en explorar la naturaleza de estas ne tar es el de madre. Todas las religiones han tenido sus diosas-
cesidades y cómo pueden ser afectadas por el cambio. Siem madres. ¿Cuáles son las cualidades divinas que contiene la
pre que los cambios amenacen las necesidades básicas, la imagen de la madre? La madre es jve, cájjda, amorosa,
naturaleza humana se resistirá a los mismos. Por lo tanto, amable, sensible, receptiva, nutridora y sustentadora. Lo
efectuaremos mejor los cambios si conocemos más acerca de acepta todo y siempre está presente para responder a las ne
las resistencias. Además, lo mismo que nuestro progreso cesidades de los hijos/as. No tiene vida propia independien
científico y cultural ha tenido efectos dañinos en el equilibrio te de la de sus hijos/as. Sólo vive para darles a luz, alimen
de la naturaleza, tenemos que prestar atención a las conse tarles hasta que pueden hacerlo por sí mismos/as. Ciertamente
cuencias que tiene el cambiar estos modelos arquetípicos en las mujeres son el vehículo natural de esta función maternal,
la relación hombre-mujer. Debemos intentar encontrar el ca- sobre todo porque los hombres no pueden dar a luz.
‘y
[
Tras las huellas de nuestra evolución co,nún De la liberación de las mujeres
ción viable mientras que estuvo englobado en una comunidad

Pero las cualidades maternales implican muchas más co
más amplia y la pareja encontraba su sentido en criar hijos y
sas que dar literalmente a luz. Dar a luz es tanto un fenóme
perpetuar la vida de la comunidad. Pero desde el desmoro
no material como uno psíquico o espiritual, lo mismo que, por
namiento de la comunidad, y desde que los matrimonios se
ejemplo, dar nacimiento a una idea, a una visión o a un tra
han convertido en ciudadelas aisladas y separadas de la vida
bajo creativo. Lo maternal es una fuerza poderosa que se ex
comunal -que era significativa y renovadora-, la pareja de
presa a través de una amplia gama de actitudes, emociones y
pende cada vez más de sí misma para la intimidad, la com-
comportamientos humanos. Es obvio que dichas cualidades ..
pañía y la renovación espiritual. Además, cuando los hijos

no pertenecen exclusivamente a las mujeres. Un hombre tie
han crecido y dejan el hogar para crear su propia unidad, el
ne que desarrollar también estas actitudes o no es humano.
matrimonio ya no tiene para la vieja pareja ninguna función
Desafortunadamente, las mujeres han sido cargadas en nues
significativa como núcleo esencial de la vida familiar.
tra cultura con la responsabilidad de ser los únicos vehículos Ji
Este hecho puede ser catastrófico para la mujer identifi
de las cualidades maternales esenciales.
cada con los papeles de madre y de diosa del amor. Su fun
La mujer también ha tenido que sobrellevar el peso, casi
ción como madre empieza a perder su importancia esencial,
tan oneroso, de la diosa del amor. En consecuencia, ha teni
y su cuerpo envejecido le hace difícil seguir manteniendo
do que hacer enormes esfuerzos para cuidar su apariencia
su confianza en los poderes de su encanto erótico. ¿Para qué
física y desarrollar su capacidad para estimular los deseos eró
entonces mantener el matrimonio unido cuando la maternidad
ticos en los hombres. Este hecho tiene igualmente paralelis
ya no es tan importante y su cuerpo anteriormente joven ha
mos instintivos en muchas especies de animales. ¿No es aca
envejecido? Una vez que la mujer ha sido despojada del po
so el olor de la hembra en celo lo que despierta el deseo
der de estos roles arquetípicos, sólo se tiene a sí misma para
sexual en el macho?
ofrecerse en una relación, y si no se ha desarrollado a sí mis
Aunque la capacidad maternal y la necesidad de evocar de
ma a lo largo de los años a medida que desempeñaba sus pa
seos eróticos en el macho mediante su encanto y belleza son
peles, se sentirá vacía e inútil. Es por esta razón por la que el
ciertamente características instintivas predominantes en las ç feminismo se convirtió en una fuerza tan vital.
mujeres, verse obligada a identificarse con estos roles impi
Yo creo que es un gran error la tendencia del movimien
,< de a la mujer desarrollar su individualidad. Es más, una re
to de las mujeres a colocar la culpa de su opresión en los
lación creativa y evolutiva hombre-mujer es imposible mien
hombres. Es obvio que hombres y mujeres han satisfecho
tras que las mujeres sigan manteniéndose en esos papeles
sus necesidades instintivas básicas mientras han desempeñado
arquetípicos y los hombres en los opuestos de “macho” (ya
sus roles respectivos. Y en el pasado, estos papeles no han
sea física o intelectualmente).
sido necesariamente más opresivos que las pautas instintivas
Esta realidad, que las mujeres han identificado en gran me
que rigen las relaciones animales. Históricamente, los hom
dida con estos roles, y en la que los hombres se han mante
bres y las mujeres no sólo han dependido biológicamente
nido en general a un nivel igualmente primitivo, relacionán
entre sí, sino que también han sido interdependientes para
dose con ellas sólo como arquetipos maternos o eróticos, ha
completarse en el aspecto psicológico: los hombres han aco
contribuido mucho a la esterilidad de los matrimonios mo
piado las cualidades llamadas masculinas, y las mujeres las
dernos. El matrimonio patriarca! tradicional fue una institu

femeninas. Creo que el desplome del matrimonio tradicional, Femenino y la esencia del hombre con el Principio Masculi
de la familia y de las relaciones comunitarias, forma parte de no. Para la mujer moderna es esencial luchar por conseguir
un proceso evolutivo que conduce a niveles superiores de autonomía e independencia, que están conectadas con los
integración y de plenitud psicológicas. aspectos fálicos de su naturaleza. Desafortunadamente, mu
Las diferencias intrínsecas entre varón y hembra tienden chas mujeres, por miedo a volverse demasiado masculinas,
a obviarse cuando las mujeres consideran que su opresión se continúan manteniendo antiguas pautas de relación con los
debe fundamentalmente a la necesidad que tiene el hombre de hombres, a pesar de haber aprendido a emplear muchas de las
dominar, de mantener a la mujer en una posición inferior y mismas tácticas de fuerza que utilizan los hombres para con
servil. ¡Qué sinsentido despreciar la atracción instintiva que seguir sus metas profesionales. En consecuencia, después de
toda mujer siente por un varón fuerte en el plano físico o una dura jornada de trabajo, muchas mujeres profesionales se
intelectual! ¿Y cómo podemos simplemente eliminar la atrac sienten poseídas por este espíritu masculino ajeno y cortadas
ción del hombre por una mujer cálida, receptiva, cariñosa totalmente de su feminidad. Esto les sucede sobre todo a las
y/o sexualmente atractiva, como si fuera un mero producto de mujeres que se identifican principalmente con su naturaleza
un condicionamiento cultural? femenina.
Aunque la mayoría de las mujeres aprecian la receptividad Identificarse con un aspecto particular de nuestra natura
y la capacidad de cariño de los hombres sensibles, muchas se leza es reducir y limitar nuestra personalidad. Tal como lo he
quejan de que echan en falta la sensación de su propia femi mos expuesto, estas identificacioñes conducen también a una
nidad evocada por un varón más puramente masculino. Los polarización y a un corte entre lo Masculino y lo Femenino.
hombres también se quejan de que las mujeres de hoy día son Así, la mujer que tiene que ser muy enérgica en su trabajo se
demasiado agresivas y castrantes. — siente muy poco femenina cuando tiene que mostrar su fuer
Paradójicamente, cuanto más se identifica una mujer con las za “como un hombre”.Pero la mujer que se da cuenta de
cualidades arquetípicas femeninas de su naturaleza, más de que no tiene que comportarse como un hombre para asumir
3 pendiente se vuelve de un hombre que la haga sentirse completa las responsabilidades que eran en otro tiempo coto privado de
y femenin Esta misma afirmación vale para el varón “macho” éste, se abre una puerta para llamar a las raíces de su propio
que, como todos sabemos, necesita rescatar a la indefensa don poder fálico o yang, que es tan básico para ella como las
cella inocente, pura y frágil, para completar y confirmar su cualidades más “utéricas” o yin de su naturaleza.
imagen. Tanto para los hombres como para las mujeres, la sa La principal razón por la que las mujeres se sienten tan
lida de este tipo de dependencia es que el ego no se identifique poco mujeres en sus recién ganadas posiciones profesionales
con lo Masculino ni con lo Femenino. Lo que quiero decir con es porque han tenido miedo de confiar en sus propias capa
esto es que tanto lo Femenino como lo Masculino, lo mismo que cidades fálicas de penetrar y generar. Cuanto más “femenina”
el yin y el yang, son cualidades del alma a las que podemos ac es un mujer, más inconsciente será de su propias cualidades
ceder para sentir y expresar nuestra totalidad’El ego que se masculinas y más las vivirá como ajenas a su naturaleza. En
identifica sólo con una de las dos pierde esta capacidad; lugar de sentirse alimentada por las expresiones espontáne
Todos estamos todavía luchando contra las imágenes cul as de su propia energía yang, se sentirá amenazada y sobre
turales que identifican la esencia de la mujer con el Principio pasada. Le parece mucho más seguro aprender a actuar según
78
Centro de Desarrollo Transpersonal Centro de Desarrollo Transpersonal79
las reglas desarrolladas por los hombres, que tienden a excluir el antiguo dios griego Apolo, que todavía sigue vivo y cole
sus grandes poderes propios yang que surgen de las profun ando —al menos para los médicos, que aún tienen que recitar
didades de su ser, como por ejemplo, el enorme poder que el juramento de Hipócrates que empieza así: “Juro por Apo
hace posible que el útero expulse al recién nacido a través del lo...”-. Apolo es un dios que mira el universo desde muy le
canal uterino.
1 jos, desde un estado absoluto de distancia e impersonalidad.
Exploremos ahora la naturaleza de la fuerza opresora que Su principal interés es la cla’idad, el orden y la moderación.
ha impedido a las mujeres tener la libertad para realizar todo Desde las remotas alturas de su Olimpo, es un obsiador de
su potencial y de desarrollarse psicológicamente. Si no son los sapasionado de nuestras pobres luchas mortales y de nuestros
hombres, ¿quién o qué es responsable del estatus inferior destinos individuales. La elevación espiritual es una clave de
—económico y social— de las mujeres? ¿Y quién es respon su esencia, olvidándose del valor eterno de la individualidad
sable de las actitudes predominantes de que las mujeres son humana y del alma aislada.’Se ocupa más de lo que tras
intelectualmente inferiores a los hombres, de que son irra ciende lo personal, de lo inmutable, de las formas eternas. A
cionales, de que están guiadas por las emociones más que por esta deidad apolínea, que yo creo que domina nuestra con
la razón y que, por ello, son inestables, débiles, infantiles y ciencia occidental, no le interesan las necesidades del alma
moralmente inferiores a los hombres? hiiinana individual. Las necesidades del alma de implica
La psicología profunda ha probado que tanto las cualida ción, intriga, proximidad, desaparición, fusión, exuberancia,
de masculinas como las femeninas se encuentran en el alma exceso y de éxtasis, son eliminadas por el rayo brillante de
de cada persona En nuestra cultura occidental ha sido un esta perspectiva apolínea hipertrofiada.
desarrollo excesivo de la perspectiva masculina lo que ha Apolo personifica en el espíritu masculino una tendencia
) desembocado en una glorificación de la razón, de la objeti especial hacia ladistancia y la impersonalidad. En su mun
vidad, la separatividad, la ausea de. compromiso y el des do domina la claridad y la amplitud de mente.
y) precio por todos los sentimientosubjetivos y las emociones
vitales. Esta poderosa fuerza —o espíritu- masculina es la
principal responsable de la opresión de las mujeres. Pero
El espíritu femenino, por otra parte, tiende a moverse
con el impulso dionisíaco de la vida tal como nos implica y
nos enlaza con todslas cosas vivas. Dionisos, dicho sea de
esta perspectiva masculina distorsionada está infiltrada pro paso, era un dios bisexual, venerado en la antigua Grecia
fundamente tanto en las psiques de hombres como de muje principalmente por mujeres. Su mundo es la vida y el misterio
res: Todos los cambios sociales, económicos y políticos ca de la savia y los poderes de la tierra. Personifica la proxi
recerán de valor si continúa el dominio de este espíritu que midad y la unión, en contraste con la distancia y el desape
ha sido tan opresivo hacia lo Femenino. Una vez que hemos go de Apolo. Mientras que la distancia y la claridad de Apo
efectuado este desplazamiento necesario al terreno psicoló lo enfatiza la capacidad de coif6c Dionisos nos sumerge en
giconu.estro principal interés se centra en la opresión de lo el contacto inmediato con los demás y con la inmediatez de
&menijo, y no en la opresión de las mujeres. la vida.
oremos brevemente la naturaleza de este espíritu, de Apolo y Dionisos se necesitan el uno al otro. Sin Dioni
esta deidad masculina que ha provocado al final la cólera de sos, Apolo nos lleva a descuidar las nçcesidades humanasbá
tantas mujeres. Nos viene especialmente a la mente un dios: sicas y a abusar de ellas, a la manipulación destructiva de la

81
1
naturaleza, y a una li aciónd lemen y te

rrestre de nuestras propias naturalzas. ionisos sin Apolo
1 De la liberación de las mujeres
quier mujer que adopte esta distorsión apolínea automática

mente desvaloriza sus denominados sentimientos .ein.t.uicio
conduce en última instancia a la eliminación de la razón y de nes irracionales desconfiando de ellas, y lo mismo hace con
la cultura. Los griegos sabían que estos dos dioses iban jun la misteriosa inteligencia de las raíces emocionales-corpora
tos, y ambos eran venerados en Delfos. Las discusiones teo les de su naturaleza. Por supuesto que el corte de la mente y
lógicas siempre identificaban al uno con el otro.
2 del alma con el cuerpo también perjudica a los,hombres que,
Una de las consecuencias más importantes de la distorsión al proyectar el aspecto irracional y vulnerable de su propia na
apolínea de nuestra vida es que nuestro mundo se ha con turaleza en las mujeres, haijrido una pérdida todavía ma
vertido en un mundo sin alma. Sólo la mente racional ha yor del alma.
sido dejada con un poco de alma.\l cuerpo, las emociones, Apenas es posible hablar de la opresión apolínea de las
los instintos, la tierra, la naturaleza, la materia, las criaturas mujeres sin reconocer que los hombres han sido oprimidos, al
vivas, se han convertido en simples mecanismos totalmente menos en la misma medida, por este espíritu dominante de
dedicados a una inteligencia directiva.
3 Esteencumbramiento nuestros días. Lo Femenino está sufriendo tanto en los hombres
olímpico final de la mente es el producto de la ilustración y como en las mujeres. Lo que necesitamos es la liberación de
de la filosofía cartesiana:. “Cogito, ergo sum” (“Pienso, lue lo Femenino más que la liberación de las mujeres. Aunque
go existo”). Descartes veía el cuerpo, en su naturaleza animal- son obvias las ventajas económicas, educativas y sociales que
sensual, como una sustancia diferente de la mente y sujeto los hombres han tenido sobre las mujeres, y también es obvio
sólo a leyes mecánicas; el cuerpo es pasivo, mientras que la que éstas han de ser corregidas, yo no creo que sea ésta la
mente es activa y capaz de libre albedrío. La mente racional cuestión principal. Mientras que nuestra cultura y sus institu
es superior a las raíces emocionales-corpQrales de la natura ciones continuen siendo gobernadas por un espiritu desper
leza humana, porque puede controlar y superar las pasiones sonalizador y deshumanizador, lo Femenino continuáfásien
animales. La mente, afirmaba Descartes, es impulsada por el do maltratado y desvalorizado, con indpendencia de los logros
alma, mientras que el cuerpo sólo es movido por espíritus ani que las mujeres consigan en el campo de la igualdad.
males. Sólo la mente iiene alma. Y el primer motor es Dios, Una de las principales tareas de mi profesión, la psicote
cuya inteligencia directiva está continuamente manifestándose rapia, es ayudar a liberar, redimir y curar lo Femenino opri
en la mente racional. Dios ha implantado el movimiento en mido y rechazado dentro delly individual Nós por azar
el cuerpo humano y en toda la demás materia, pero después que la psicoterapia moderna tuviera su offgñen el intento de
ha abandonado toda la materia. “Las leyes mecánicas go Sigmund Freud de curar a las mujeres histéricas. Claro que
biernan el mundo material: el hombre obedece a fñTsmas en aquella época, las mujeres todavía se esforzaban por aco
leyes, puesto que no es más que una forma más compleja de modarse a la imagen de la puritana dama victoriana, que
organización del mismo proceso que domina todos los as constituía una auténtica violación del alma femenina. No
pectos de la naturaleza”.
4 puede confinarse lo Femenino en imágenes unidimensiona
Estos presupuestos metafísicos han tenido una enorme les. Exploremos algunos de los a(ributos de lo Femenino,
influencia en el desarrollo de la ciencia occidental y todavía para que podamos entender mejor la naturaleza de la tarea psi
subyacen en la mayor parte del pensamiento modrno. Cual- cológica.

De la liberación de las mujeres
Ya hemos expuesto algunas de las cualidades del arquetipo tador, abrasivo y fálico. Más bien agua; tierra receptiva y
de la Madre, pero sólo nos hemos referido a la naturaleza de ‘fértil; el útero. Estas no agotan ciertamente mis imágenes
la diosa del amor. Tras la idea generalizada de la “mujer de4o Femenino, pero estos aspectos de aceptación de todo,
objeto” ideal, que es claramente una distorsión masculina omniabarcantes, nutrientes, maternales y uterinos son fun
perversa de lo Femenino, debe existir una esencia funda damentales. Sin embargo, no me es desconocido el encanto
mental de la diosa. Por supuesto, estos modelos plásticos, ase erótico, embrujador y apasionante de Afrodita.
xuados, de la diosa “dorada” están bien lejos de la belleza se También he experimentado un tipo de lógica, muy direc
ductora, del encantamiento sonriente que irradia Afrodita y rápida,
ta, clara y pragmática, que se centra con precisión en
que arroba los sentidos. La fría separación, la distancia ina atender a una situación inmediata que implica el bienestar de
movible e intocable que mantiene la mujer-objeto, no tiene una persona. Creo que el uso del intelecto es femenino, en
ninguna conexión con la diosa griega. Más bien al contrario. contraste con la impersonalidad y falta de atención hacia el
La gran atracción que ejerce Afrodita es su disponibilidad a
individuo del intelecto apolíneo. Volvamos de nuevo a los
la entrega, a rendirse voluntariamente a la herida del amor con griegos para apoyar y elaborar este punto de vista.
un anhelo sin disfraz, que en sí mismo es irresistible. Palas Atenea, la diosa que nunca tuvo madre al haber na
Afrodita simboliza un don divino que no pertenece sólo a cido de la cabeza de Zeus, es una diosa del tipo de visión cla
las mujeres, sino que pertenece a la vida entera. Walter Otto ra que he descrito. Aunque es igual que Apolo en lo que 7
nos ofrece una imagen más amplia y más rica del mundo concierne a su claridad y capacidad de razonar, a diferencia
que inspira Afrodita con su espíritu: de él esuna diosa de la cercanía. “Ella infunde audacia al
De ella proviene, no tanto el éxtasis del deseo, como el en hombre, voluntad de victoria y valor, pero siempre con una
canto que lo enciende y lo impulsa. Ella es el encantamiento que causa franca y una claridad iluminadora.”
6 Siempre está cer
irradia de las cosas y de los seres y que embelesa los sentidos ca e implicada con las personas: compartiendo, aconsejando,
•con su sonrisa. No sólo hombres y animales, sino también plan ayudando, animando y regocijándose con el éxito. Otto nos
tas, imágenes y apariencias inanimadas, incluso pensamientos proporciona una visión penetrante de su mundo, al compararla
y palabras, extraen de ella su dulzura atractiva, conmovedora y con Apolo.
abrumadora
/
Así pues, el mundo pierde su belleza annoniosa, anhelante En Aj,olo reconocemos el hombre completamente masculi
no. La frialdad aristocrática, la superioridad de cognición, el sen
y cautivadora, cuando esta Cualidad Divina Femenina, que los tido de la proporción, éstos y otros rasgos relacionados con el
griegos llamaron Afrodita, es tan denigrada que se convier hombre, incluida la música en el sentido más amplio del tér
te en esa cáscara amarga, estéril y de plástico falso de la mu mino, son en última instancia ajenos a una mujer. Apolo es to
jer-objeto. das estas cosas. Pero la perfección en el presente vivo, la acción
Cuando pienso en lo Femenino, mis primeras imágenes victoriosa y sin trabas, no al servicio de alguna idea remota e in
son de suavidad, amabilidad, sensibilidad, receptividad, ca finita, sino de la maestría del instante, éste es el triunfo que
lidez, humedad, intuición, solidez y cácidad de nutrir. En siempre ha cautivado a una mujer de un hombre; es la victoria
a la que ella le inspira y cuya más alta satisfacción él puede
estas imágenes no hay nada cortante, indagatorio, conquis aprender de ella. La precisión divina de la obra bien planifica

da, la disponibilidad a ser poderosa y despiadada, la inagotable nuda y pragmática, y el espíritu esquivo del bosque-, lo que
voluntad de victoria, éstos son, por paradójico que pueda pare todas ellas tienen en común es la cercanía a la tierra y su im
cer, los dones de la mujer para el hombre, que, por naturaleza, plicación con las cosas vivas; la necesidad de nutrir, de pro-
es indferente a los afanes y cuitas por el infinito.
7 mover el crecimiento; la necesidad de proximidad, de unión
con otro o con la naturaleza. En general, lo Femenino pare
Atenea descuida lo que llamamos ternura del corazón. ce moverse con más libertad y comodidad cuando está cerca
“Su voluntad no consiste en la sabiduría ni en la visión, en la de la tierra y de la natTiraleza. Por el contrario, lo Masculino
devoción ni en el placer. Consumación, el presente inmedia tiende a buscar la distia de la tierra, a encontrar la liber
to, la acción aquí y ahora, ésa es Atenea”.
8 tad en el espíritu puro, en el reino de las ideas abstractas y de
Otro aspecto importante de lo Femenino se relaciona con los principios universales. Una vez más, permítaseme insis
un espíritu de la naturaleza intacta, libre, salvaje, indepen tir en que Lo Masculino y lo Femenino son cualidades que
diente y lleno de juventud, que no tiene ningún interés en fu pertenecen tanto a hombres como a mujeres: Cualquiera que.’
sionarse con un hombre. Para los griegos, este aspecto se se identifica con uno solo de estos opuestos no puede desa
reflejó en la diosa virgen Artemisa. Muchas jóvenes tienden rrollarse realmente en el plano psicológico
hoy día a identificarse con ella. También le pertenece la ne Como símbolos, lo Masculino y lo Femenino son las me
cesidad de volver a la belleza y maravilla prístinas de la na táforas raíces por excelencia, en cuanto que representan la afi
turaleza. nidad y la polaridad fundamentales de todos los opuestos.
Aquí todo es móvil, replegado en sí mismo y puro. La luci Como he escrito repetidamente, la función más importante del
dez de la diosa permanece suspendida sobre prados y lagos; su tabú del incesto es la de promover la formación y la interio
espíritu brillante se mece en la soledad del bosque y entre las so rización en la psique humana de imágenes de la unión sagrada
litarias luces de las montañas; ella produce la magia misterio de la pareja divina.’
0 Esta interiorización de la imagenar
sa de la soledad en la naturaleza y su temblor jadeante, su ter quetípica de la unión armoniosa entre los opuestos Masculi
nura juguetona y la severidad en la que puede transformarse de no/Femenino es esencial para el equilibrio interno de la rea
repente. A ella pertenecen las criaturas del campo y del bosque, lización total, y para experimentar la intimidad con los demás.
a las que protege maternalmente en sus necesidades y les hos
La herida del incesto describe el proceso doloroso de se
tiga hasta la muerte, como en un juego, con un placer incons
ciente. Pero el ser humano también pertenece a su reino. Su paración entre los opuestos Masculino/Femenino, amor/sexo,
manifestación es la ácida dulzura del cuerpo y del alma jóvenes, mente/cuerpo, espíritu/materia, interior/exterior. Una de las
el encanto que se encoge ante el fervor del amante y se vuelve consecuencias de la herida del incesto es la escisión interna,
cruel si éste se aproxima demasiado. La ligereza de los pies que predomina en nuestra cultura occidental, entre los as
que sólo pueden correr o danzar está imbuida de su espíritu: suya pectos maternal-espiritual y erótico-sensual de lo Femenino
es la frescura de la mañana con su claridad y trémulo reflejo, en -entre la Virgen María y Afrodita-. Como consecuencia de
los que, como en una gota de rocío, brilla y centellea el fuego
estas heridas, un hombre tiende a asociar la pureza, la sua
colorido de los rayos celestiales.
9
vidad, el bienestar, y los sentimientos tiernos y amorosos, con
Aunque sólo hemos aludido a unas pocas cualidades bá la madre-esposa; y la agresión erótica, el abandono sensual,
sicas de lo Femenino —la maternal, la erótica, la razón des- la excitación y la pasión con la lagarta promiscua o “la otra

mujer”. Este mismo corte ocurre en las mujeres como con mejores planes y esfuerzos creativos se verán continuamen
secuencia de la herida del incesto, de manera que ellas tam te abortados. Sin un respeto femenino por la manera de pro
bién sufren por esta perspectiva fragmentada. ceder de la naturaleza, la ingenuidad del espíritu masculino
Codo a codo con la fractura femenina se presenta una es se vuelve muy pronto destructiva de la vida.
cisión similar dentro de lo Masculino; esto es, entre los as Apertura, receptividad y sensibilidad hacia las fuerzas de
pectos comprensivos, protectores y maternales, y los aspec la vida son características de todos los aspectos de lo Feme
tos agresivos, fálicos, sensuales y dinámicos. La curación nino. Aunque en lo Femenino está contenida la capacidad
de esta fisura tiene mucho que ver con la redención de lo Fe de iniciar la acción, la fuerza de vida que engendra es esen
menino. En contraste con lo Masculino, lo Femenino no pue cialmente fálica. Comprendr la relación recíproca entre los
de tolerar quedarse estancado en un estado fragmentado y di aspectos masculino y femenino del alma es importante para
vidido en compartimientos. el proceso psicológico de liberación de lo femenino. Si ol
Volvamos a la tarea psicológica de redención de lo Fe vidamos y despreciamos los aspectos femeninos suaves,
menino. Es esencial una apreciación de la actitud femenina abiertos y receptivos de nosotros mismos, nuestras vidas se
básica de aceptación y armonía con la naturaleza. Lo Feme vuelven cada vez más rígidas, vacías, estériles, inertes y se
nino siempre respeta y venera los misterios de la naturaleza.( ,‘ llenan de acción sin sentido. (
Por el contrario de lo Masculino, lo Femenino muy rara vez Del mismo modo, si tememos abrirnos al influjo súbito,
atenta contra ella o penetra y disecciona sus misterios para to espontáneo e irracional de nuestras energías fálicas, nada se
mar el control de la naturaleza y poderla así manipular en su mueve, nada cambia, y nuestras vidas se estancan. Es abso
propio provecho: En este sentido, lo Femenino está someti lutamente esencial una relación positiva con la raíz fálica
do a la naturaleza y es incapaz de alterar o cambiar el curso del espíritu masculino para la existencia de un desarrollo
de los acontecimientos naturales’ Pero es justamente esta creativo, para la liberación de lo Femenino, y para la libera
aparente sumisión e indefensión, esta completa aceptación de ción de las mujeres.’ Mientras que una mujer permanezca te
lo que es, lo que no ha sido respetado en nuestra cultura por merosa e irritada, y siga rechazando lo Masculino dentro de
el espíritu masculino. Ante todo, debemos enfrentarnos a ella, mientras continúe poniendo la batalla “fuera”, en lugar
esta voz masculina interna que continuamente nos hace sen de librarla en el interior de su alma, nunca se liberará real-
timos avergonzados e inadecuados por los aspectos de no mente de su dependencia respecto a los hombres, porque se
sotros mismos que parecen débiles, indefensos, dependientes ha separado esencialmente de su fuente fálica de su propio po
e impotentes, cuando se ven desde una perspectiva masculi der y fuerza. Es más, continuamente provocará a los hombres
na de fuerza, inteligencia y potencia. Mientras que lo Feme a encarnar y a poner en acción las mismas cosas que teme, lo
nino quizá no tenga el poder o la inclinación de alterar el cur que, por supuesto, sólo sirve para acentuar su convicción de
so de la naturaleza, su relación con ella le da la fuerza que lo que los hombres sólo giran alrededor de sí mismos, son do
Masculino no tiene. El espíritu que permite a la mujer fluir minantes y personas en las que no se puede confiar.
con el ritmo de sus ciclos lunares, resistir paciente y alegre Por encima de todo, lo Femenino considera la relación
mente los nueve meses requeridos para dar a luz a un hijo, es como el valor más elevado. Consecuente con la fascinación
algo que un hombre debe desarrollar, pues de otra manera, sus masculina por el infinito, existe una tendencia a ver la rela

ción en términos de finalidad y realización. En contraste,

para el espíritu femenino la relación es un fin en sí mismo, y
se siente violado cuando una relación es utilizada en primer
lugar para cualquier otro propósito, aunque sea uno que val
ga la pena.
Hemos aludido a algunos de los factores psicológicos im
plicados en el feminismo, en la naturaleza de lo Femenino, y
en la necesidad de distinguir más claramente entre lo Feme- SEGUNDA PARTE
nino y la mujer. Mientras que una mujer no se distinga y se
diferencie de lo Femenino, continuará relacionándose con
los hombres como salvadores o como opresors. En cual
quier caso, seguirá siendo dependiente de un hombre para co-
nectar con su propia naturaleza fálica y con el inconsciente
VOLVERNOS A HACER DE
de las dimensiones psíquicas de su opresión, que son mucho
más importantes y requieren una atención más urgente.
rvIADRES DE NOSOTRAS
MISMAS: LA CURACION DE
NUESTRA RELACIÓN CON
LAS MUJERES
Y LO FEMENINO

Toda madre contieriça su hija en sí misma
y cada hija a su madre.
C.G. JUNG
Debemos estar dispuestas a sufrir a nuestras madres dentro

\ de nosotras, a ver las raíces de su comportamiento en nuestro in
\ tenor, y a transformarlas y perdonanlas en nosotras mismas
J J También tenemos que ser capaces de ver a través de nuestra he
rencia común de mujeres, encontrando dentro de nuestra madre
interior las respuestas a la falta de poder, las perversiones del es
píritu, y los potenciales desviados. No basta con volvernos
conscientes de los efectos negativos de nuestras madres en
nuestras vidas; es como si tuviéramos que llevar psicológica
mente a nuestras madres dentro de nosotras, al igual que ellas
nos llevaron un día físicamente.
KATHIE CARLSON
In Her Image
El Mundo-Madre es el reino de la vida que contiene a las

mujeres y a lo Femenino. Para las mujeres, éste incluye nues
tras madres, hijas y hermanas respectivas, y tal vez hoy día
podamos añadir nuestro sentido de hermandad con todas las
mujeres. En otro nivel, este reino contiene el arquetipo de la
tait en suappositivo (nutriçtQr, prQtectQr y gmorn
so), y en su aspecto negativo (seductor,jiçvQra&1 y des

Volvernos a hacer de madres de nosotras mismas Volvenos a hacer de madres de nosotras mismas
El arquetipo de la Gran Madre también aparece Sólo entonces podemos proporcionarnos, como adultas, las
como nuestro origen corporal, la tierra, y como nuestro ori cualidades esenciales que nos han podido faltar cuando éra
gen espiritual, la Diosa Divina. (Para los hombres, el Mun mos niñas, y que nutrirán y sostendrán nuestra evolución.
J do-Madre también incluye esposas y el ánima, o elemento in De esta manera, podemos aprender a honrar los legados del
consciente femenino en la psique del varón, a veces llamada Mundo-Madre, escogiendo los que queremos heredar. Kathie
alma.) Carison lo escribe en su libro In Her Image, de la siguiente
Para las mujeres, el Mundo-Madre es el mundo del origen, manera:
la fuente del conocimiento de nuestras identidades, nuestros
cuerpos y nuestros futuros. En una temprana época de la psi Al volvemos hacia nuestra madre interior, en lugar de in
tentar liberamos de su posesión indeseada en nosotras, ponemos
EIia profunda, Erich Neumann escribió que todos los egos a nuestras madres en un contexto diferente, en nuestra propia to
eran masculinos por naturaleza, mientras que el inconscien talidad. Nos convertimos así en sus matrices; de alguna mane
te se consideraba femenino. Hoy día es ampliamente aceptado ra, nos embarazamos de nuestras madres y portamos dentro de •
son femeninos, que son un lega /

do de nuestras madres.
Por esta razón, solucionar nuestras relaciones con nuestras Hay tantas maneras de volvernos a hacernos de madres
madres (tanto con la persona real como con las imágenes como mujeres individuales existen. Ninguna fórmula con
que hemos ido recolectando durante años) es un primer paso viene a todas. Podemos intentar encontrar una relación enri
hacia la creaciójid nuestras identidades distintas e inde quecedora y creativa con una madre suplente, cQmjimi
pendientes como mujeres. Podemos empezar intentando ha .&a,una consejera, una abuela o una psicoterapeuta; podemos
cer conscientes esos aspectos de nosotras mismas que he unirnos a grupos de mujeres que están iniciando y guiando a
mos absorbido de nuestras madres sin saberlo..-2sueden otras mujeres para despertar laCQn çj_ienina; y po-
como el sentido artístico, o demos utilizar la escritura, laj rayJjmagjción crea
el amor por los hijos, los negocios o la naturaleza. También tiva para expresajJaspa tesJ.atent dj jsmas, para
v,ueden abarcar los “aspectos-sombra”, que constituyen un ex hablar con las voces que normalmente son silenciadas.
peso de equipaje del que es mejor deshacerse, como la de Algunas de nosotras podemos desarrollar una relaciçSn 4
jendencia de los hombres, la adicción a ciertas cosas, o un más consciente y revitalizada con nuestras madres reales. Es J
7
kntimiento de inseguridad. muy posible que esto suceda después de haber realizado un
cientes de estos aspectos que hemos rechazado de ellasge cierto trabajo interno y de haber liberado intensos senti
o nos jus n5con]s que hemos 1uchiT mientos de rabia y vergüenza.
ue ha ntrar inconscientemente en nosotras jiq También creo que nuestra actual fascinación generalizada
probablemente continúan por la ecología profunda, y nuestros esfuerzos para reconec
jrcnteras-de nuestra conciencia. tar con la tierra y nuestras raíces en el mundo natural, son un
Estos son los primeros pasos para hacernos de madres reflejo de la necesidad de volvernos a alinear con el arqueti
de nosotras mismas, separando nuestras propias identidades po de la Madre. Para algunas mujeres, trabajar con los ar
como distintas de las de nuestras madres y del arquetipo. quetipos de la Diosa cumplen también este objetivo, al pro-

Volvernos a hacer de madres de nosotras mismas
porcionarnos una fuente femenina que es mucho más vasta

que nuestras madres individuales.
En los ensayos de esta Segunda parte se pueden encontrar
una magnífica recopilación de ideas inspiradoras y orienta
ciones prácticas. Lo mismo que Riane Eisler planteaba cuán
do la cultura del mundo fue desviada de estar centrada alre
dedor de las mujeres para centrarse en los hombres, Emily
Hancock se pregunta cuándo ocurre este desvío en la identi
dad de cada niña. Propone que, para completar nuestra inte 4. LA NIÑA INTERIOR:
gración del pasado, podemos recuperar la pequeña niña que
estaba en nosotras, antes de que se alienase con las expecta PIEDRA DE TOQUE DE
tivas y proyecciones de los demás. Alimentando y fortale
ciendo esta parte del ser femenino, podemos hacerle de ma LA IDENTIDAD FEMENINA
dre y conducirla hacia la totalidad.
La vasta descripción de Marion Woodman de los arqueti
pos de la madre, la virgen yla anciana resume nuestra visión por Emily Hancock
del Mundo-Madre interiot.J3n opinión de la autora, hacerse
de madre es una consecuencia -que aporta sabiduría al alma-
del difícil trabajo de diferenciación psicológica y despertar es Emily Hancock plantea una cuestión clave: ¿ Cuándo em
piritual.’Explica cómo la función de madre inconsciente pue pieza la influencia invisible de la cultura centrada en lo
de da aso, hacerse de madre conscientemente, que des masculino a imprimirse en una niña, frenando su evolución
pierta la vlzgen, el símbolo de ltotajjdespalque naturaifemenina? Hancock, psicoterapeuta de Berkeley, ha
Woodman percibe actualmente en los sueños de la gente. Si descubierto que las niñas entre ocho y diez años son, todavía)
gue después el nacimiento de la anciana consciente, la sabia inocentes y alegres, pero que a partir de esta edad se vuel-L
que surge como resultado de una vida plenamente vivida y ven autocontroladas y responsables. Y aunque puedan com-(
que ofrece amor sin ataduras. portarse como chicos, a esta edad no actúan todavía en re
Kathleen Riordan Speeth describe con palabras muy plás acción a ellos o a los hombres.
ticas la Madona con niño, la madre y la virgen en unión física En su libro The Girl Within, Hancock describe detalla
y espiritual. Ella cierra esta parte con una imagen que es al damente el proceso mediante el que se desvía el sentido fe
mismo tiempo intimidante e inspiradora. menino de la niña. Hacia la pubertad, es típico que su madre
se alíe con la cultura oficial para enseñarle como convertirse
en una “dama Si esto ocurre al mismo tiempo que el padre
“.
desaparece de la escena, sus vías naturales quedan cortadas
1 y se ve obligada a entrar en el molde cultural.

Hancock afirma que, mediante la recapitulación de los re
96 Centro de Desarrollo Transpersonal

Volvernos a hacer de madres de nosotras mismas La niña interior
fuerdos tempranos de la niña interior, podemoscujrLrL mente inútil, para atravesar un territorio desconocido, sin.
se contar con mapas de sus antecesoras ni el consejo de sus
nosotras as prOyeCciQw’S y. Las_expeci ivasde los demás. mayores que la guíe.
E.Fser más natural o esencial existe dentro detlñn Ante estos hechos, la cultura contemporánea se presenta
do con independencia de la relación con los demás; posee su aparentemente para apoyar sus metas, abriendo el mundo dç
propio estilo, sensibilidad, alegrías y miedos. Como el niño los logros al nuevo desafío de la mujer. Pero por debajo d
interior, ampliamente tratado en los círculos psicológicos esta aparente liberación, existe una gran variedad de fuerza
actuales, la niña interior nos proporciona a las mujeres una que amenazan cercenar su feminidad e impedir la verdadera
fi4 ente de renovación, un medio de brindar una nueva madre autorrealización que ella está buscando. La libertad respec-.
a la pequeña niña que todavía vive en todas nosotras. to a los roles restrictivos del pasado -y de los límites psico
Emily Hancock, autora de The Giri Within, inició sus in lógicos que esos roles imponían- ha abierto la puerta a la con
vestigaciones sobre la evolución de las mujeres en la Uni ciencia de las mujeres. Pero las leyes del patriarcado,
versidad de Harvard, en donde se doctoró en desarrollo hu insidiosas porque están disfrazadas de libertad equivalente, si
mano, en 1981. Enseña actualmente desarrollo de adultos en guen funcionando para moldear el desarrollo de una mujer.
el Centro de Estudios Psicológicos de Albany, California, y Muchas mujeres que intentan por ejemplo romper los límites
tiene consulta privada en Berkeley. de los roles domésticos, al verse forzadas a adaptarse al mo
delo masculino, pierden su búsqueda de una existencia natural
y femenina, que abarque tanto el propósito de su vida como
su capacidad de cuidar. Este modelo exige que deje de lado
sus preocupaciones de mujer, se despoje de sus aptitudes na
Ahora que los roles de las mujeres se multiplican, empe turales, y se encaje en la red empresarial. Demasiado cambio
zamos finalmente a preguntarnos como quién y como qué cultural producido en nombre del feminismo nos ha llevado
puede ser definida una mujer conforme a su sentido interno a aplaudir las cualidades “masculinas” que exhibe la mujer
de ser, en lugar de serlo conforme a las leyes del patriarcado. moderna, animándola a que se comporte como un hombre.
Con el aumento de la toma de conciencia de que la fuerza de Virtualmente obligada a establecerse en el “mundo real”, la
la mujer ha sido sometida a las necesidades y objetivos de los nueva mujer compromete —sin saberlo- su destino con el pa
demás, por fin nos hemos dedicado a esbozar, afirmar y ex triarcado, bajo la bandera de querer escapar del mismo.
presar el ser. Pero la cultura ha sido muy presionada para La nueva mujer vive así en un mundo de hombres, en el
proclamar que estas metas, completamente nuevas para las que se rebela contra las propias fuerzas femeninas que se
mujeres, pueden conseguirse en términos propios a las mu hallan en el corazón de su identidad. Poco sospecha que la in
jeres. Actualmente, un hombre puede seguir las huellas de su mensidad de posibilidades ofrecidas hoy día a la mujer cons
padre para ejercer las antiguas prerrogativas “masculinas”, tituye una ilusión. Engañada por la promesa de que lo puede
pero la “mujer nueva” puede contar difícilmente con la ex tener todo, en lugar de ello es obligada a hacer todo por una
periencia de su madre para orientarla. Atrapada en un mo cultura que ofrece a sus miembros una única vía de ser al
mento histórico peculiar, se aparta de un pasado aparente- guien. Cautivada por la mascarada del patriarcado, pierde

conciencia del corte existente entre lo que ella es “realmen ginación con ciertas capacidades y un anhelo aventurero que
te” y lo que parece que es. Esta desconexión de su identidad le lleva muy lejos del hogar, tanto en su fantasía como en la
primordial la hace tomar una curva peligrosa cuando llega al realidad. Todas las culturas del mundo reconocen el rápido
desarrollo de su auténtico ser femenino. desarrollo de la mente de las niñas, la aceleración de sus ca
¿Cómo puede una hija inconsciente del patriarcado con pacidades prácticas y el cambio de su manera de pensar .
3
tinuar su búsqueda hacia la individuación? Careciendo de La naturaleza y la sociedad conspiran para permitir que las ni
un modelo de identidad, ¿cómo puede una mujer llegar a re ñas florezcan a esta edad; abundan la armonía y la integridad
alizar su verdadero ser? al disfrutar de la totalidad del ser, la unidad con el cosmos y
Según un estudio que hice sobre el desarrollo del ego de una irradiación natural.
las mujeres,’ las respuestas a estas preguntas se hallan en En medio de una crisis matrimonial, Mega, una mujer de
“la niña interior”, la niña animosa, juguetona y satisfecha, de treinta y un años (que está incluida en mi estudio), recuperó
ocho, nueve, o diez años, que toda mujer lleva en la memo a esta niña. Conmocionada por una aventura de su marido, in
ria como piedra de toque de la mujer que puede llegar a ser. mediatamente después del nacimiento de su primer bebé, de
En las generaciones anteriores, las experiencias restrictivas repente se dio cuenta de que no tenía identidad propia. Había
que nos vinculaban al ideal femenino nos hicieron perder contado con el matrimonio en sí mismo para que le propor
nuestra conexión con esta niña. Hoy día, el comportamiento cionase un sentido de ser. Aterrorizada al comprobar que
_.,opuesto -la mujer actuando como un hombre- amenaza des esta presunción le había conducido a abandonar su propia
,/ viarla. Sin embargo, a pesar de estos factores negativos, al búsqueda, enfrentó la difícil tarea de construir una identi
mujeres están redescubriendo esta primera identidad de dad. Lo hizo tomando opciones y decisiones que surgían del
la infancia. Las que llegan a hacer el círculo completo hacia sentido recién encontrado de quién o qué era ella. Durante el
ésta encuentran en la niña olvidada una llave para desbloquear proceso de autodefinición, recordó una experiencia crucial
el ser esencial de mujer.
Çgunas que le había sucedido a los nueve años, cuando su familia se
¿Quién es esta “niña interior”? ¿De qué profunda verdad trasladó del centro de Nueva York a los alrededores, inte
está en posesión?” Sqp dida entre el ensueño de la edal rrumpiendo sus estudios. Sin la ayuda de sus padres, se las
reescolar y la esclavituddla adolescencia, una niña e arregló con los profesores para poderles enviar por correo los
esta e a ocup z1ajTftérniediá de la infancia, un es deberes, de manera que pudo finalizar sus estudios por sí
pacio interino entre jifantasia y la• realidad que alimentaa misma.
. Juguetona, aunque ya con
pertenencia creativa así misma
2 Este acto de independencia se instaló en la imagen que
i5]etivos, ha abierto la puerta de la edad de la razón. Con un Megan tenía de sí misma. Se acordaba de “haber caminado a
pie todavía en la escuela, lee y calcula, participa en juegos de los nueve años sobre un muro hasta dar la vuelta completa a
grupo, desarrolla sus facultades atléticas, y absorbe las reglas un parque, pensando que realmente me gustaba tener nueve
de su joven sociedad. Cuando tiene la buena suerte de crecer años y que no me hubiera importado tenerlos para siempre;
dentro de una familia que fomenta la independencia y cele estaba averiguando todo sobre el mundo, sin hacer nada tras
bra los logros, una niña de esta edad se enfrenta al mundo con cendental, simplemente pensando para mí misma de ese modo
su propia perspectiva. Combina entonces una inmensa ima mientras caminaba sobre el muro. Recuerdo haber tenido un
loo Centro de Desarrollo Transpersonal Centro de Desarrollo Transpersonal 101

auténtico sentimiento de alegría y de confianza por el he Ahí, como en ninguna otra parte, el cielo es su único límite,
cho de poder enfrentarme al mundo por mí misma. La ima sus anhelos y objetivos son infinitos; absolutamente todo es
gen que tenía era la de una niña con una cuerda muy larga a posible. La contradicciones no la frenan: futura arqueóloga y
la que podía agarrarme, una cuerda de largo alcance para abogada, practicará durante el invierno la abogacía e irá a ha
poder moverme libremente. Me sentía segura y completa en cer excavaciones arqueológicas al llegar el verano. Tanto si
mí misma. Tenía la sensación de poderme defender en el sueña ser oceanógrafa como astronauta, gobernadora, neu
mundo, aunque esto significase estar sola. Sabía que tenía mi rocirujana, directora de orquesta, presidenta de Banco, o
manera de arreglármelas en él, que podía hacerlo”. juez, es apoyada idealmente por los demás en la visión que
Vulnerable en su nueva maternidad, y afligida por su cri tiene de sí misma en el futuro. Rara vez sus metas son so
sis matrimonial, Megan volvió a escuchar a esa niña que te metidas a críticas; sus decisiones no comportan todavía pér
nía dentro y a recuperar el sentido de la vida que había en didas; sólo más adelante una elección supondrá dejar otra
carnado en su infancia. Volvió a descubrir la autonomía e de lado. Suexperiencjjje niña abarca hombre y mujer.i
iniciativa olvidadas que necesitaba para su independencia bajo y juego, independencia y dependencia, sin que fin Úfl
como adulta. La niña de nueve años conservaba esas cuali ermino su or ma o a otro. i re de las convenciones
dades en su memoria, aunque Megan las había olvidado a me y hacer!
dida que había ido creciendo. Ahora, esa niña le servía de pie Siendo una niña masculina en su corazón es la época en
dra de toque a la mujer en que se había convertido. El seguir la vida de una mujer en la que con más frecuencia está alia
sus huellas y el haber encontrado dentro de sí una niña en la da con su padre y, paradójicamente sin embargo, es el periodo
que podía confiar habían conducido a Megan a las raíces fe en que está menos definida por el patriarcad9. La cultura le
meninas de su fuerza como mujer. las bragas de encaje y la
¿Qué es lo que obstaculiza a la niña interior? ¿Cómo se lle Mary Janes de sus primeros años, por un lado, y el gentil de
ga a negar el tenerla dentro? ¿Qué se hace de su impulso vital? coro que ella exige a medida que crece, por otro, permitién
A pesar de que no exista un experiencia única de infancia dole un breve respiro en la construcción de su mujer adulta.
femenina, las respuestas de las mujeres con las que he habla En el centro de un universo perfectamente armonioso, es la
do proporcionan una visión sorprendentemente uniforme de lo dueña de su destino, la capitana de su alma. Es la protagonista
que significa crecer y perder la niña interior. Recuerdan esta de su propia experiencia.
niña como aquella que hace el mundo suyo. Liberada de los Pero de repente, bastante antes de la pubertad, llega la
límites impuestos por la familia, está orgullosa de su capaci cultura con sus recortes, cercenando despiadadamente su es
dad recién encontrada de ordenar y dirigir su vida. De repen píritu. Los adultos que la habían dejado hasta entonces hacer
te, “ocupada en sus propios asuntos”
, aumenta su capacidad
4 lo que quería, se anticipan ahora a su floreciente feminidad
en casa y en la escuela como una ola imparable. Admirada por y podan su expansión en el mismo brote. A medida que la cul-)
ser inteligente y fuerte, llega a ser la mejor en todo. tura traza la línea divisoria entre pequeño y grande, juego y(
Aunque sus circunstancias sean limitadas, una niña a esta trabajo, hembra y varón, sus agentes se ven obligados a in
edad puede aspirar a alcanzar altas metas en su imaginación tervenir. Persisten los patrones tradicionales de la mujer
-nuevo reino privado e interno al que nadie tiene acceso—. como nutridora, haciendo que las iniciativas de la joven re-

sulten amenazantes. Con demasiada frecuencia, el maestro alasestereop femeninos, enseñándole los mismos
que la había animado a hacerse arqueóloga, le advierte aho que la çomn e osa ma re: La cultura
ra que para ello necesita saber cinco lenguas. A la pequeña oficial —una cultura patriarcal que coloca su propia cerradu
ranchera a la que se le había regalado un lazo por su cum ra en su madre, tías, primas, profesores, y en su padre- la de
pleaños, se le informa, tal vez con palabras amables, que fine como una “hembra” cuando es devuelta al mundo de
sólo los hombres pueden ser cowboys. Los libros de anatomía las mujeres, en lugar de definirla como una “persona”. Se
que despertaban su interés por la medicina son sutilmente re rompe el vínculo, que ya no es directo, entre lo que ella hace
emplazados por el reloj de una enfermera para tomar el pul y lo que es. Abandona el ‘hcer’ en aras de “sr” bue..
so. Se someten a valoraciones y juicios las visiones de la ji_achici. n zdeentrar.se n. sí misma 1 intenta gradar. a
adolescente, que hasta entonces se toleraban como algo sin pdosJos que la rodean. Impresionada por la imortrncipe
importancia. Sus mayores desinflan sus ideas “grandiosas”, lapons.ajenas, se moldea así misma confqç a lo que
considerándolas irrealistas. Se encuentran mil maneras de los demás qiiiein gue.aea.
“hacerla aterrizar” y de moldearla. Muchas niñas que son ágiles atletas a los nueve años, a los
El once se convierten en “jóvenes señoritas”, cuando los dis
cambiando. Si antes se le permitía tintivos femeninos empiezan a estorbar sus proezas físicas:
en raras ocasiones comportarse como un chico, ahora sus pechos abultados, caderas que se ensanchan, suaves contor
acciones comienzan a madurar, ya que se espera de ella que nos empiezan a poblar de manera desordenada el cuerpo ter
se “comporte como una señorita”. Arrancada de su casa-ár so y esbelto de su juventud andrógina. La pubertad de las chi
bol de sus primeros años, se introduce a la niña en el entor cas conlleva un retraso en el crecimiento; la de los chicos, un
no humano y se espera de ella que cultive sus dones sociales. aumento de masa física. Cuando éstos las alcanzan y las so
Tras este barniz moderno, persiste el mandato femenino de brepasan en altura, peso y fuerza física, por primera vez son
cuidar a los demás, sofocando su impulso de saltar, correr, es más grandes y más fuertes que ellas. Mientras que ellos se
calar el pico de una montaña y, en general, de seguir activa vuelven más fuertes, listos y empiezan a hablar más alto,
J
mente sus metas. Mientras que sus capacidades infantiles no
tenían límites, cuando se acerca a la pubertad, se canaliza su
ellas se sienten más débiles e inseguras. Sus cuerpos se ablan
dan al tiempo que el de ellos se endurece. Las dicotomías se
[leficacia en las relaciones sociales. Mientras que se anima a xuales escinden a una joven, poniéndola en contra de sí mis
( su hermano para que desarrolle su iniciativa y ejerza su in
‘Iependencia, a ella se le encamina hacia la sumisión. Mien
ma, al etiquetar sus fuerzas y sus intereses como “no
femeninos”. Las capacidades que le aseguraban un lugar en
Jtras que antes estaba afuera en el mundo de la naturaleza, aho tre sus iguales ahora boicotean su popularidad. Un cuerpo vi
Jra la antigua niña debe entrar. goroso, un peso impresionante y la fuerza física pertenecen
Cuando cambia sus pantalones vaqueros por una falda, su a los chicos. Mientras que los cambios de la adolescencia en
padre, que hasta el día anterior mismo había sido su partida
rio más firme, la echa de sus brazos y la empuja de nuevo al 1 éstos anuncian un dominio creciente, los de ellas implican, de
manera recurrente, el mandato de nutrir y la exigencia de
dominio de su madre. D_utn1 sos días, tal vez también la ¡ retraerse. La ex eriencia de la adolescencia en ellos es la de
un aumento de poder; en e as, ampliación de riei

La niña interior
gLas libertades de ellos son espectacularmente incremen En la estructura general del mundo, incluso todavía hoy
tadas; las de ellas son coartadas. A ellos se les anima a ex- día, una niña tiene muy pocas posibilidades, salvo tomar su
A plorar; de ellas, advertidas de su vulnerabilidad femenina, se lugar como miembro del Segundo Sexo, como Simone de
espera que estén siempre cerca. A ellos se les empuja en don Beauvoir lo llamó hace casi cuarenta años. Es una ironía que
de a ellas se les limita. Diminutas en comparación con los va lo que ella escribió siga siendo todavía igual: a pesar de la úl
rones de su edad, ya no pueden repeler un ataque. Para ellos, tima ola del movimiento feminista, las mujeres de todas las
los nuevos territorios se llenan de conquistas; para ellas, la se- edades son consideradas como objetos y están desvalorizadas.
,4 guridad reside en el hogar. El mundo es una ostra con una per La publicidad ha multiplicado una infinidad de invitaciones
la eventual para ellos; para ellas contiene peligros. El mundo para explotar la sensualidad de la mujer, ya sea comiendo yo
de la niña de ocho o nueve años se convierte así, bien antes de gur, bebiendo un licor de lujo, o volando de vacaciones a la
tEa adolescencia, en un mundo dividido por el sexo. playa de cualquier isla. Constituyen abrevaderos yuppies a los
a niña mayor sucumbe a h’imgen cultura,1 deja íémi que la mujer puede dirigirse tras una jornada de trabajo, y que
na, objeto para el vafónque e l sujeto. Su manifestación in brindan deslumbrantes brebajes con nombres como “las bra
- fantil le permite esconder sus capacidades, méritos,
aspira gas de seda”. De hecho, las mujeres se están sexualizando
ciones y partes de sí misma, en primer lugar, de lo demás para cada vez más, a una edad asombrosamente joven. Junto con
complacerles y, después, también de sí misma. No siendo ya vampiresas que llevan sostenes negros de encaje y monobi
libre para proyectarse en el futuro con el egocentrismo pro quinis, los catálogos publicitarios de los grandes almacenes
pio de su edad, actúa para reprimir sus capacidades. El afán despliegan imágenes de niñas de siete años anunciando bra
de competición intensifica las conquistas de su hermano; en guitas de satén y camisones de noche, con sus caritas cho
ella se convierte en una actitud de 5 compromiso. La compe cantemente provocativas cuando están maquilladas y tienen
tencia fortalece al varón, pero todavía “asexualiza” a la mu los labios pintados de rojo chillón. Estas niñas-sirenas están
jer
j
6 jniidad . de sus actjy sse deshace ciiandoias me abocadas a convertirse en femmes fatales. Controladas, adap
as ro ias de la niña son lanzadas enjnedjo de lavida “dr tadas y sexualizadas mucho antes de la adolescencia, son
Los ro es çrpeninos le afectan y lus este+4pe-to- atemorizadas y domesticadas cuando su espontaneidad natural
man el control. No puede menos que sentirse atrapada en cede el paso a las construcciones patriarcales de la mujer. Al
iETiei’ativos contradictorios: aunque todavía se esté ponerse las máscaras proporcionadas por la cultura, una niña
poniendo el uniforme de colegiala, la publicidad de desodo pierde fácilmente de vista quién y qué es, más allá de la fa
rantes le incitan: “Nunca les dejes ver que sudas”. Cuand chada femenina que adopta en su juventud.
una niña se juzga conforme a cómo la ven los demás, s ¿Cómo pueden las mujeres volver a implantar la femini
confianza en sí misma queda subvertida por la imagen que tie dad esencial que la niña de ocho o nueve años encarna, da
ne de su propia persona, que se compara con un ideal feme das las fuerzas sociales que la desconectan de su poder na
nino imposible. Para alcanzar este ideal, debe separarse de tural? Las mujeres que aparecen en mi ensayo que
muchas partes de sí misma. Deja de ser como una niña, para recuperaron un auténtico sentido femenino de ser, lo hicieron
ser como una dama. Pierde su propia posición de ser, y sien ahondando en el territorio interno de la memoria y de la ima
te que ahora es “otra”. ginación en donde se esconde la niña interior. Ellas han de-

tallado las experiencias que les dividieron en contra de ellas; años sesenta proporcionó el hábitat adecuado para su germi
que les hicieron conducir a la niña esencial al reino en el nación: “Y entonces leí The Feminine Mystique y fui arras
que permanece escondida, incluso de sí misma. Han descri trada por el movimiento general. Cuando el clima se hizo su
to las presiones culturales que negaban su identidad femeni ficientemente cálido, empecé a crecer como una semilla que
na durante la juventud; han expresado el impacto que esto ha ha estado encapsulada en hielo”. Encadenada por un matri
bía ejercido en ellas, cuando descubrieron -mucho después de monio largo e infeliz, fue ayudada a “sacudir una maraña de
haber hecho compromisos adultos que las vinculaban a los cadenas” por el renacimiento que suscitó el movimiento.
destinos de los demás-, que las identidades que habían asu Katherine, una pediatra de unos treinta y cinco años, cap
mido desde su infancia estaban unidas a cimientos construi tó la esencia generadora femenina al comparar a sus hijos con
dos por el hombre y no por ellas mismas. Y lo más importante un jardín que tenía que atender para cultivar su potencial: “Es
es que habían sacado la niña de debajo de los escombros en como un jardín. Tienes flores y semillas”, decía; “veo que mi
los que la había enterrado el patriarcado, y habían recons trabajo como madre es el de intentar obtener que las flores
truido una identidad de mujer a partir de los materiales na crezcan en la personalidad de los niños; y lo que se quiere es
turales preservados a lo largo del tiempo. Cuando las muje alimentar y embellecer el potencial que se encuentra en ellos.”
res ponían a prueba su experiencia interna, cuando recorrían Miriam, una consultora de unos cincuenta y cinco años,
el camino de vuelta de su identidad naciente -la que tenían comparaba su evolución con “un brote a punto de abrirse y
antes de haber sido desviadas de ella por la exaltación cultural • desarrollarse”. Destacaba un rasgo importante de la flor:
de lo Masculino y la denigración de lo Femenino-, cuando “Existen algunas flores, como las begonias y las camelias, cu
volvían a habitar el territorio interno que albergaba a la niña yas capas de pétalos se abren lentamente. Lo más importan-
interior, recuperaban la auténtica niña y recobraban sus fuer • te son los pétalos, su apertura y su crecimiento; capas ente
zas femeninas. ras de pétalos desplegándose en espiral”. Este despliegue
Estas mujeres que han llamado a la puerta de su territorio sincronizado fue estimulado en la vida de Miriam por el mo
interno, han anclado las imágenes de su ser en un paisaje fér vimiento del potencial humano y el replanteamiento de la
!til. En el terreno de las imágenes y de la imaginación en el que relación con su hija.
estaban libres de las construcciones patriarcales de la hembra, Liz proporcionó otra imagen vívida, una imagen que re
han encontrado metáforas para expresar su evolución, que flejaba su triunfo femenino sobre fuerzas que casi llegaron a
surgió espontáneamente de una fuente orgánica y natural. dominarla. Había crecido con una madre abrumada por el
Anita, por ejemplo, que lleva a cabo terapias a través de la sufrimiento en el hogar. Liz tuvo un hijo antes de casarse y
danza, dice: “Mi evolución me recuerda a una hoja flotando continuó viviendo en casa. Convencida de que su fracaso
en un estanque. Su superficie está en calma: no hay ondas, no como hija era la causa de la desesperación de su madre, em
sucede nada, sólo agua gris. Y después brota un géiser. Sur pezó a sufrir depresiones. Al final, salió de la “jaula de los
ge un gran géiser de una fuente y la pequeña hoja de la su quehaceres domésticos” que habían podido con su madre,
perficie ¡sale disparada muy arriba!”. Para Anita, las largas dé entablando una amistad con una mujer que era completa
cadas que separaron su niñez de los cuarenta años fueron mente diferente de su madre, una mujer bondadosa y opti
estáticos, “años latentes y durmientes”. La ola feminista de los mista que adoraba la maternidad y el hogar. Esta relación
1
fundamental de mujer a mujer ayudó a Liz a rechazar la vi Su metáfora de la línea costera ilustra muy bien la auto
sión triste y rígida de su madre y la condujo a “despertar y nomía llena de sentido de la niña interior. En la capacidad de
florecer”. Después de haberse situado a una distancia segu esta niña de equilibrar lo conocido y lo desconocido, el océ
ra de la influencia depresiva que arrastraba a su madre, me ano y la roca, la competencia y el cuidado, el consciente y el
diante la identificación con su amiga, Liz se casó y tuvo tres inconsciente, lo masculino y lo femenino, en su compromiso
hijos. Tras haber derrotado el pesimismo negativo, sentía voluntario de tensión dinámica entre vínculo y autonomía,
que su ser “había hecho eclosión”. Y añadía a su autodes hombre y mujer, trabajo y amor, reside la reconciliación de las
cripción metafórica: “Está haciéndose un jardín!”. dicotomías que nos dividen en contra de nosotras mismas.
Entre las imágenes de estas mujeres, tal vez la más sor Desenterrada de su reino interior, la niña tiene mucho que
prendente fuese la metáfora de Rosabeth, una mujer de trein enseñar a la mujer sobre cómo ocupar el espacio subjetivo que
ta años; sorprendente por su profunda afirmación de cómo se halla en el corazón del poder generador. Ella sintetiza de
una mujer debe reconciliar y forjar, momento a momento, el manera natural la dualidad hombre-mujer en su androginia,
tejido orgánico de su vida mediante la confianza en su pro funde trabajo y juego en su actividad llena de sentido, re
pia iniciativa, capacidad de respuesta y autodeterminación: concilia amor y odio en su ausencia de contradicción. Utili
“Una línea costera implica un equilibrio, un trazar formas que za la dependencia y la independencia en la persecución tenaz
yo he logrado”, decía Rosabeth mientras tomaba un folio en de sus propios intereses. Encarna ambos lados de la aptitud,
blanco y trazaba con tinta una línea con su pluma de oro. La abarcando el dominio social y de las relaciones junto con
forma de la tierra constantemente cambiante, creada por el capacidades concretas. Separada y, sin embargo, conectada,
movimiento incesante del mar contra “las duras orillas” de su es autónoma, pero mantiene vínculos. Competitiva con el
naturaleza, empezaba a parecerse a la costa del estado de espíritu adecuado, es conducida por la maestría, no para do
Maine a medida que la dibujaba acercándose a la parte infe minar y conseguir el poder sobre los demás, sino para captar
rior del folio. “Es rocosa. La veo con el agua azul y la tierra los misterios y desafíos del mundo mismo. Desbordando ini
verde cuando se encuentran entre si. El océano es de un ma ciativa, la niña unifica los valores básicos de cooperación, ca
ravilloso azul y la tierra está hecha de montañas verde-ama riño y capacidad sin distorsionarlos. Como la línea costera de
rronadas y de rocas que suben y bajan. La línea es desigual. Rosabeth, reconcilia elementos de la naturaleza humana en lu
Esto representa toda clase de experiencias que han sido de gar de separarlos.
sagradables, apasionantes, desilusionantes y que, a veces, Las imágenes orgánicas de las mujeres hablan al cambio
me han enorgullecido”. crítico que necesitamos para restaurar el equilibrio de esos va
La línea describía una unión de ser y de experiencia vital lores: el cambio del objeto al sujeto. Al recuperar el sentido
más que una división entre ellas. Representaba el ser en evo
lución permanente de Rosabeth, una abstracción que conte
de la niña de sí misma como sujeto, al contrarrestar la posi-
ción de la mujer como objeto, al lograr recuperar la niña que /
)
nía un encuentro de elementos, casi como la grieta a lo lar encarna una identidad femenina primordial, las mujeres pue
go de la que había caminado Megan. “Lo que tienes delante den seguir siendo auténticas respecto al potencial del fértil
es un encuentro de fuerzas, y mi vida ha sido el sendero en mundo femenino que sobrevive separado de la esterilidad
tre ellas”, me dijo Rosabeth. de los valores patriarcales.
1
Las mujeres han atendido durante mucho tiempo los jar

dines de los demás. Mientras que ofrecían el contexto para el
desarrollo de los demás, históricamente han descuidado el
suyo. Cuando una mujer lleva consigo la niña virginal a tra
1
vés del umbral de la mujer adulta, cuando habla su propio
idioma con la misma naturalidad con que mimetiza el len
guaje del patriarcado, cuando penetra en la verdad más pro
funda acerca de quién es y cuenta su historia de haber llega
do a ser completa, gana el acceso a un mundo que es tan 5. LA FEMINIDAD
fértil y abundante como los más verdes jardines. Sólo cuan
do casamos la autonomía de la niña con la fecundidad de la CONSCIENTE: MADRE,
mujer y reconocemos la conexión entre la semilla y el suelo,
restauramos nuestra creatividad como cultura, prosperamos VIRGEN, ANCIANA.
y florecemos.
En la alianza entre la niña que posee la iniciativa y la
mujer que conoce su potencialidad de generar, reside la fuer- por Marion Woodman
¡ za creativa que necesitamos para llegar a ser plenamente no
j sotras mismas, y para hacer de esta cultura lo que tan deses
peradamente se necesita. La realización de la evolución En este ensayo elocuente y multidimensional, la analista
\ humana depende de que seamos capaces de recorrer el cir junguiana Marion Woodman describe la triple forma de lo
cuito hacia la niña interior y de conducirla hasta la mujer Femenino consciente o “maduro Madre, Virgen, Anciana.
“:
adulta. ¡Esta trinidad existe simultánea y continuamente en todas las

“)mujeres conscientes, aunque cada aspecto toma un lugar
predominante en la conciencia en momentos diferentes.
Woodman explica que el papel de madre coizsciente sólo
puede llegar cuando rompemos los vínculos inconscientes
que todas nosotras tenemos con nuestra madre personal y ar
quetípica. ÇJLUPdQ diferenciamos nuçstra propia naturaleza
jiiijgde los aspectos heredados de nuestra madre, 4n-
rwJospo.Ñivos como los ne vos pdemos empezar a za- /
cernos çje madre a nosotras mismas de manera mludq
ble, y también ser la madre de nuestros hijos de un modo más
consciente.
Esto puede lograrse con la ayuda de una analista que
haga de madre putativa, mediante la construcción de un
112 113
Volvernos a hacer de madres de nosotras mismas La feminidad consciente
ego femenino suficientemente fuerte para portar la energía

arquetípica sin ser poseída por ella. La identificación in
consciente con un arquetipo es una trampa perniciosa, aun En el mundo arquetípico, lo Femenino aparece frecuen
que se trate del arquetipo de “la buena madre porque,
“,
temente en grupos de tres: e_ornas, las tres Gracias
como señala Woodman, en este estado se pierde la indivi ieafar.as...En los hombres y mujeres actuales que están
dualidad. trabajando sobre sus sueños, lo Femenino Conscienk
Además, cuando despierta en nosotras la madre cons aparecer en tres aspectos diferentes: rnadre virgen y çj
ciente, nuestros cuerpos se revitalizan. Una relación reno consciente interior de
vada con la materia, el cuerpo y la tierra, significa un re su sombra inconsciente, encontramos con frecuencia una
lación renovada con lo Femenino, con una espiritualidad magnífica figura femenina que se convierte en nuestra madre
encarnada. Esta se convierte entonces en el hogar de la y guía internas. Nos ayuda a reconocer quiénes somos en
virgen consciente, en la esencia de la totalidad femenina, todo nuestro Ser.
que porta dentro de sí el matrimonio de la materia y del es Gracias a este reconocimiento, asimilamos poco a poco las
píritu. (En el siguiente capítulo, este arquetipo es descrito partes de nosotras mismas que en otro tiempo hemos recha
con gran belleza como la Madona, por Kathleen Riordan zado, consciente o inconscientemente. Tal vez no eran acep
Speeth.) tables para nuestros padres, maestros y amigos. Quizá, en
La anciana consciente es el producto de una feminidad nuestro anhelo por ser queridas, rechazamos las mismas ener
madurada, la vieja mujer sabia (u hombre) que ha viajado gías que nos son ahora indispensables para nuestra vida cre
muy lejos y ha obtenido una amplia perspectiva de la vida. ativa. Al encontrar aquellas partes perdidas, alertas a su pro
Woodman la llama “liberada Ya no está implicada en los
“.
pia verdad, y al vivirlas en nuestra vida cotidiana, damos a luz
juegos de poder de la sociedad y se puede, por lo tanto, con a la virgen dentro de nosotras mismas. J i.tgi, tal como yo
fiar en que diga lo que ve y en que ame plenamente. la entiendo, es lo menino a4oque.she.&ino vivirji
Marion Woodman es analista junguiana y tiene su con piaJuz ‘r’ ii prnnimateria sagrada
sulta en Toronto. Licenciada por el Instituto C. G. Jung de Zu es el término latino de A lo largo del pro
rich, es miembro de la Asociación Internacional de Psicolo ceso de hacer surgir nuestra propia materia a la conciencia,
gía Analítica y de la Sociedad Interregional de Analistas nuestro cuerpo se convierte en el equivalente físico de nues
Junguianos. Ha escrito ampliamente sobre lo Femenino en tra madre y guía internas. En nuestro amor por ella, respeta
sus populares libros The Owl Was a Baker’s Daughter: Obe mos y honramos la materia de los demás, y la materia que es
sity, Anorexia Nervosa and the Repressed Feminine; Adiction la madre de todas/os nosotras/os: la Madre Tierra. La cone
to Perfection: The Still Unravished Bride; Los frutos de la vir xión diaria e íntima con nuestra virgen interna nos lleva a to
ginidad: dinámica de la autenticidad; y The Ravaged Bride mar opciones conscientes y a hacer sacrificios dolorosos.
groom: Masculinity in Women. Poco a poco, intuimos cómo evolucionan las pautas de
nuestro destino personal y nos sentimos paradójicamente de
sapegadas y totalmente presentes. En este estado de espíritu
quizá podamos un día mirar al espejo y ver nuestra anciana

Volvernos a hacer de nadres de nosotras mismas La feminidad consciente
¡ interior. Su sabiduría nace del sufrimiento consciente. La El lazo inconsciente entre la madre y la hija puede ser
¡ madre, la virgen y la anciana están conectadas íntimamente
con cada encrucijada de nuestras vidas. Hacerlas surgir a la
misteriosamente fuerte. Por ejemplo, una madre en América
puede saber cuándo su hija que está en Europa va a conseguir
conciencia es esencial para llegar a una feminidad madura.
) un trabajo y cuándo ha tenido un niño. De la misma manera,
una hija puede sufrir una conmoción cuando su madre, ha
llándose en otro continente, tiene un ataque de corazón. Re
La madre inconsciente visando los puntos cruciales de su vida, una mujer puede
quedar sorprendida al descubrir que sigue los mismos pa
En el mito griego de Deméter y Perséfone, mientras la ma trones de la existencia de su madre, incluida la irrupción de
dre y la hija siguen conectadas de manera inconsciente, uni una enfermedad grave. Este lazo inconsciente puede crear
das enparticipation mystique, la hija es una simple Kore, el un bloqueo insuperable si la hija se siente culpable cuando le
término griego que designa a la joven doncella. Ésta no po llega el momento de despojarse de su madre, de superar el ni
see nombre ni identidad por sí misma. Permanece en la órbita vel de conciencia al que ésta había llegado. Una madre pue
de su madre, sintiendo los sentimientos de su madre, soñan de sentirse igualmente culpable cuando su destino le lleva a
do los sueños de su madre. Deméter como madre, y Kore una situación inaceptable para su hija. Por inestimable que sea
como hija, forman un tándem inconsciente, una vida sim su vínculo, necesita hacerse consciente si una de ellas quie
biótica. re descubrir cuál es su propia vida. Sólo es posible una rela
Puede que una mujer adulta nunca abandone este tándem. ción femenina madura cuando se permite que una nueva luz
Por mucho que odie el modo en el que la trataba su madre ilumine el espacio entre las dos.
cuando era una niña, se ve repitiendo lo que ella hacía y de Una hija que aborrece a su madre tal vez decida ser de
cía. En su matrimonio perpetúa la relación que su madre te cualquier manera excepto como su madre. Sin embargo, a me
nía con su marido, oscilando entre la madre que espera re dida que se hace adulta, al menos que se haga consciente de
sentida o contenta al “hombre de la casa” y la pequeña niña las cadenas que la atan a ella, puede parecer ser todo lo con
Kore, que es dependiente o actúa bajo la dependencia de su trario de su madre, pero en realidad sigue siendo una rebel
maravilloso marido, que sabe cómo hacerlo todo. de adolescente, una niña estrafalaria cuya madre es el centro
En un nivel más profundo, que tal vez no pueda recono de su existencia. Más tarde o más temprano, la sombra de su
cer, espera de su hombre que le proporcione brío. Al no te
ner una vida propia llena de sentido, una mujer proyecta su frentar en sí mismaala madre que 24j.jls una ironía que
propio espíritu en su hombre; la vida está llena y vale la quizá la madre real se convierta entonces en una pequeña
pena ser vivida cuando él está cerca. A los hombres que se ca niña asustada que tiene miedo de su hija.
san con mujeres que están todavía atrapadas en el tándem ma Con frecuencia, tanto en los sueños como en la vida, la
dre-hija, les encanta ser los príncipes que tienen una madre madre, especialmente si es viuda, se convierte en la hija de
para servirles; también disfrutan haciendo de papás de su su propia hija. Incapaz de cuidar de sí misma adecuadamen
pequeña niña. La feminidad de estos hombres está igual te, busca a la hija que le haga de madre. Incapaz ya de ver o
mente dividida y es igualmente inconsciente. de oír como antes, y de arreglárselas en un mundo que ya no
JÍ
respeta sus valores, se queda desorientada. Mira a su hija mos cuenta de que hay algo a temer y respetar en el corazón
con los ojos temblorosos y perplejos. La hija, por su parte, de la cebolla, algo que no controlamos. Y cuando lo hemos
sintiéndose culpable por estar hostil con su madre anciana, tal explorado a fondo, todavía quedan todas las demás cebollas
vez necesite examinar su propio cpiçjo de víctima-tirana. para hacer lo mismo.
Esta mujer anciana que antes parecía omnipotente está per La ener ía ue s el centro de esta cebolla
diendo control. Se ve forzada a rendirse al destino. Cuando simbólica s, l que Lun-gllama un rqr!e.tipq. o podñí6
la hija se enfrenta al de su madre, se ve forzada a afrontar k; sólo podemos ver imágenes del mismo. Es como un
también el suyo propio. Puede enfadarse y actuar como una imán que se encuentra bajo una hoja de papel, y que no po
tirana, o puede volverse consciente y romper el círculo. Una demos ver, pero del que podemos comprobar su poder si
tregua incómoda puede oscilar entre las dos. Ambas pueden echamos unas limaduras de hierro sobre dicho papel y ob
ablandarse si se rinden a lo que es. servamos cómo forman una configuración causada por el
A medida que ahondamos con más profundidad en la ma imán que está debajo. Las imágenes que están en la superfi
ternidad inconsciente, nos acercamos a la fuente de la ener cie pueden cambiar, pero el arquetipo en sí mismo es eterno.
gía arquetípica. Puesto que estamos intentando entender la di Es también como la carg de JanQ, con un opositivo
námica inconsciente que socava nuestro intento consciente, otro ne ativo. El ego está indefenso si no tiene suficiente
necesitamos comprender qué son los arquetipos. He aquí la uerza para aguantar las tensiones generadas por los opues
descripción de Jung: tos que se hallan dentro del arquetipo.
Cuando trabajamos sobre los sueños acerca de nuestra
Su origen sólo puede explicarse asumiéndolos como depó madre, estamos pelando una cebolla cuyo corazón es la
sitos de las experiencias constantemente repetidas de la huma Gran Madre, nutridora e incluyente, pero también devora
nidad... Las imágenes [arquetípicas] contienen no solamente dora y limitadora. Es por esto por lo que Jung decía que no
las cosas bellas y buenas que la humanidad ha pensado y sen existe ningún sueño sin importancia. Todo sueño, si se me
tido siempre, sino también las peores infamias y maldades de las
dita sobre él, resuena en última instanenenuceoíar
(ç que han sido capaces los seres humanos. Como poseen su pro
pia energía específica -ya que se comportan como centros de po En otras palabras, cuando consideramos la rela
der autónomos intensamente cargados—, ejercen una fascina ción con nuestra madre, estamos considerando al mismo
ción y una influencia posesiva sobre la mente consciente, y tiempo nuestra relación con la Gran Madre. En el núcleo
pueden producir por esto amplias alteraciones en el sujeto.
1 está el arquetipo, el imán que puede, si llega a formar una
constelación, sobrepasar inmediatamente al ego.Çi.
Según el modelo psíquico de Jung, los complejos (de ma el eo eil está encerrado todavía en una relación in
dre, de padre, de salvador, etc.) viven en el inconsciente Tifil con la figura delgs padres y,por 1 tauto, es incapaz
como grandes cebollas. Al intentar hacerlos conscientes es mantenerse en un punto sólido, llega a identitjcarsecj
tamos pelando capas de estas cebollas. Estas capas tienen ac-tú inconscientemeilte lo, gu leeta—l-
que ver con nuestra historia personal, nuestros padres con energía arquetípja.
cretos y con nuestras asociaciones personales. Cuando pela En el tándem madre-hija por eimpJpJgs perspnasiden-/
mos una capa, todas las demás resuenan. Poco a poco nos da- tificadas con el arquetipo cambian smplernente de la madre

jhJsineis-propin1imn1ypensa- no puede dejar de comer va a dormirse arropada en sus pro

mien. Para una persona adicta a la comida, la energía ar pios y enormes senos.
iípica puede desencadenarse al olor de unos panecillos A una madre inconsciente se la identifica con un arquetipo.
tiernos. Arrastrado por una fuerza que no puede controlar, la Su impulso más básico intenta atraer al macho para procrear la
niña engulle ávidamente la comida que le gusta. Pero “Mamá raza humana. Los pechos de la “Madre-Comunicación-De-
Panecillo” es materia, no amor. Saciada físicamente por su in Masas” rebosan imágenes de este estilo. ¡ Y qué diluvio de le
digestión de panecillos, pero aúrñ alime tada realmente, la che envenenada se derrama cuando llega para alimentar a los
persona adicta se convierte en una madre voraz. Puede que niños! La televisión en el peor de los casos hace de madre al
sienta rabia contra sí misma y contra el destino. Tal vez cai revés. Hay muy poco en ella que sea personal, muy poco que
ga en la depresión causada por la futilidad de sus acciones. se preocupe del individuo. La mayor parte está por una causa
A medida que se sumerge cada vez más en la oscuridad, la -dinero, materia, materialismo-, es una Madre concretizada,
madre negativa le chupa su energía vital, dejándola parali entronizada en nuestros cuartos de estar patriarcales.
zada.jjuadmsomlara, l ja—4iablo, está presente en su Si “el amor maternal” (tanto de la madre como del padre)
¡estupor. Hasta que un individuo construye un contenedor su- está motivado por una causa, ya está corrompido. Si la cau
/ ficientemente grande para relacionarse con el arquetipo sin sa de una mujer son sus hjjps, cuyas vidas están pilurar
denti icarse con , su ego es víctima del poder arquetípico. lo buena madre que ella es, éstos vivirán actuando como en
o tiene la fuerza de decir no. •
Nuestra ener ía ar uetí ica es nuestra-mayor bendición’ que son y, en su desesperación, hacen todo lo que pueden para
nuestra mayor_maldición, según sea 1 uerza emjo. gustar. Mutilados por el poder, no conocen otra realidad.
StJLiaizLQconel a opositiv e1aGranMadre, Educarán a los demás igual que ellos han sido educados. El
pensam&s1e nosotras mismas ue somos como la Gran /‘ sadismo y el masoquismo son las dos caras de esta moneda.
Mamá, capaz de satisfacer todas las necesidades de todo el Se va construyendo la pirámide del poder -personal, nacio
de Nos in nal, internacional y del medio ambiente.
flamos. “Mi pecho está henchi o pensamSrho os nu
,
/
trís, que Dios os ayude”; a esto una persona consciente res
pondería: “Y silo hago, que Dios me ayude”. Hacer de madre de manera consciente
Nadie es la Gran Madre, y si actuamos como si lo fuéra
somos inconscientes y estamos poseídas por el arque Hacer de madre de manera inconsciente puede transfor
)tipo. En este caso, nos identificamos erróneamente con su po marse en hacerlo d manera conscieii ; cuando el recipien
der, y en 1ugar te femenino es suficien eme erte para abrirse a la ener
llamamos amor. Sí, tenemos leche, pero en lugar de nutrir gía arquetípica y permitir que el amor fluya a través de él,
nuestra prj3ia creatividad, anegamos a los demás. A menos reconociendo al mismo tiempo las limitaciones humanas.
que este poder surja a la conciencia y sea visto como des Una madre que quiere auténticamente a su bebé, que respe
¿_tructivo, la madre y los hijos llegan a “los pechos de una ta su propio cuerpo mediante el que se le ha otorgado el don,
¿mujer y cambian su leche por hiel”.
2 La adicta habitual que que celebra su sexualidad, crea un recipiente para su hija/o.

(Ésta/e aprende que su pequeño cuerpo es su hogar en esta tie toma decisiones por ella. Antes bien, anima a las psicoana
rra, que tiene fronteras respetadas, que sus necesidades y sus lizadas a encontrar un apoyo para el ego en los sentimientos
sentimientos son respetados. En lugar de utilizarla/o como es reales que se manifiestan en sus propios cuerpos. Este proceso
pejo para mirarse, la madre consciente refleja la esencia de la es la base de la encarnación y de unfrtaieiento-gra4ual.
niña/o -su gozo, su enfado, su imaginación, su crecimiento-. A medida que transcurre el tiempo, otra pequeña niñ’
enel producto que está crean aparece en los sueños. Con frecuencia sale del agujero má
¡ complace en suproceso. sucio y abandonado de la casa, pero sus ojos brillantes y su
En la mayoría de los procesos psicoanalíticos, el o la ana espíritu inçIsjjble irradian luz en la oscuridad. Ella es úni-1
lista empieza considerando la proyección sobre la madre, y ca.Ese lmd
normalmente se profundiza la necesidad de dicha proyec E ego e un estruct a psicológica que construimos para
ción hasta que afloran los sentimientos más dolorosos de hacer e pe en e a rejLdad_jçrna y la externa. Sin un
abandono. Las personas acuden al psicoanálisis porque la ego fuer é, el mundo exterior puede converti?rrirn entor
vida tal como es les parece que no vale la pena ser vivida. Van no mente amenazante. Por otra parte, aunque el alma
por ahí con sus caros vestidos de diseño o con vaqueros y pla puede ser prisionera e entorno amenazante, tiene una vida
yeras, pero su manera de vestir y su maquillaje no ocultan su propia que lo trasciende, cuando nos hacemos más cons
profundo sentido de rechazo. Nunca se les reflejó su niña/o cientes de ella, para habitar un mundo que identificamos con
interna/o. El analista tiene entonces que observar constante esos valores permanentes que caracterizan el
mente los destellos del alma que puedan romper la fachada cultura. El ego, en su forma plenamente madura, es
-pequeñas frases dentro del discurso principal, murmullos a t ctoi, del alma, y la sostiene en la satisfacción de sus nece
medias, movimientos corporales que traicionan la voz bien si es más importantes.
modulada-. Cuando el o la analista-madre devuelve todo Aunque tanto el ego como el alma necesitan un cuidado
esto como reflejo a la persona psicoanalizada, ésta puede sensible, las ecesiiad.ç del alma son muy ifeentes de las
sentirse incómoda, culpable o aliviada. Han sido bien entre necesidades y la sesneracieraci’ dea abandona
nadas a mantenerse sobre sus raíles de hierro y a esconder sus da es muy diferente de la esesperaci’ del ego abandonado.
almas, como evidencian sus sueños de trenes, autopistas y pa Es más, las repercusiones resu tantes en la vida son de un gra
sillos de acero. do totalmente diferente. Para distinguir la diferencia, los in
Cuando se desploma la superestructura que controlaba dividuos necesitan comprobar la profundidad de sus senti
/ sus logros, las psicoanalizadas empiezan a darse cuenta de lo mientos de respuesta. “j,Qué estuvo pasando durante las
débiles que son las estructuras de sus egos. Sin la voz críti últimas horas? ¿Pertenece al reino de la esencia o al del ac
ca que dice “deberías”, carecen de una identidad propia para cidente? ¿Está hiriendo mi ego o es una traición a mi alma?
tomar decisiones y_acfliaL.cop orme a ellas. Aparecen en sus ¿Es esto sólo una perturbación pasajera o está implicada el
sueños pequeñas as perdi con todas las dificultades alma?” Existe una profunda conexión entre estas dos niñas
de personalidad de una nina e tres o de doce años que intenta pequeñas, pero al principio tienen que ser diferenciadas.
crecer. La analista-madre refleja el proceso como un espejo; El alma-niña no suele darse a conocer en sueños hast
consolida la confianza, recibe a la pequeña niña, pero nunca que está segur de que ser eyja. Con frecuencia, apa J
pero como un pequeño animal o un pájaro aveces A través de la disciplina amorosa que surge de los sueños,
como animal de com añía En algu- de una amiga o de una terapeuta, podemos aprenderrecu
nas ocasiones se transforma en una iña escondi en el áti- perar nitro propio cuerpo como una verdadera madre amo
co o perdida entre las chimeneas del horno o a abitación del\
(J rosa. Es nuestra materia cuya sabiduría nos enraíza y nos
Pero no mantiene en contacto con los ritmos de la naturaleza. Amán
morirá por muy cruelmente que haya sido apaleada. Con fre dola podemos abandonar la voluntad conductora que nos man
cuencia reaparece en el resplandor de una niña recién naci tiene andando sobre la cuerda floja por encima del abismo. Po
da. Por horrendas que hayan sido las historias existenciales demos entregarnos a la fuerza de vida que nos hace estar
que hemos oído, la pequeña alma sale brillante de detrás de contentas de estar vivas, contentas de ser parte del alma que. .
la basura, se si en la silla y dice: fEstoy todavía viva; habita en todas las cosas vivas. De ella ha nacido l‘iigerge c .
quiero vivir;
Éste es el punto en el que se encuentran la virgen y el ha
cer de madre consciente. Los hombres y mujeres que estu La virgen consciente
vieron carentes de cariño o que fueron ma dos cuando
eran niños tienen que aprender a hacerse d madr de sí mis L.yitginidaLl, tal como yo entiendo el término, tiene que
esto es, tienen que aceptar el hecho de que sus propias ver con la feminidad madura no contminadapo.-1.as_pr-
madres hicieron lo mejor que supieron, o lo peor, pero que yeccionesde los demás. Lyjis1Lpmpia_esenc1a.
también ellas fueron víctimas del poder patriarcaLEijjjigar de Como la selva virgen, contiene las semillas de innumerables
rla por no dajiç$ lo que4_ mao...nía -un mode-/ posibilidades. EJla.rjieia lo Femenino Divino auQresidy.rç
de feminidad-, y de esquivarusppnsabi1idad( - suena a través de todos sentidos de nustto Qrpmiep
r(nfiint-UJr en su rara estamos.yiya. Es el alma-niña madura y en proceso de
perdonar y tomar de madres maduración, el recipiente femenino, suficientemente fuerte y
sí mismas. Es un pero si ellas están en
.,
suficientemente flexible para recibir el espíritu masculino. Es
contacto con sus sueños, contactarán más adelante con la la conciencia que irradia a través de la materia que sigue vi
Gran Madre. Ella les enseñará cómo disciplinar sus vidas. viendo cuando ésta vuelve al polvo.
“Disciplina” es una palabra negativa para muchas perso La virgen en los hombres y en las mujeres de nuestra cul
nas porque la asocian con poder. Sin embargo, la madre po tura está muriendo. Aunque a ella le gusta el pan casero ela
sitiva, como las madres de todos los animales, piden disci borado con manos amorosas, su esencia divina necesita otra
lina. Hay que romper los hábitos destructivos. La palabra clase de alimento. Como madres conscientes, es responsabi
)disciplina procede de la misma raíz que la palabra discípulo, nuestra darle el mejor alimento posible.
lidad
Sin embargo, estamos imposibilitadas para alimentarla
que significa. utl Lo mismo que nos vemos en las pupi
.
las de otros ojo iendo receptivos a la disciplina, nos vemos

,
mientras que nos permitamos ser prisioneros de una actividad
a través de los ojos de otra persona. Cuando somos reflejados maníaca. Guiada por la ambición, la competitividad, los ide
en el espejo de los ojos de alguiei que nos ama y,cep ales perfeccionistas, o la cruda necesidad de conservar un
.ii.nusra esencia, nuestr(liiseli. puesto de trabajo, que exige un ritmo frenético, la gente se

1r
arroja violentamente al espacio. En sus sueños, abandonan sus una florida barba blanca. Dios ha muerto. Para algunas per
almas confiscadas por torturadores nazis y sus cuerpos se sonas hablar de Dios no sólo no tiene sentido sino que es
llenan de habitaciones vacías. Por estar separados de su ori ofensivo. Lo que ha muerto es la proyección. Hablar de la Dio
gen, quieren “colocarse”. Lo quieren rápido y lo quieren de sa puede volverse igualmente en algo sin sentido y senti
manera concreta: drogas, apostar, comprar, beber, comer, mental, si no existe una esencia interior que sabe que existe
sexo, y todas estas cosas pueden ser esfuerzos destructivos in una presencia amorosa que vive en toda la creación.
conscientes para satisfacer necesidades del alma. Los adictos Dios y Diosa ya no pueden proyectarse. Son experien /
7
quieren trascender, como lo quiere el alma misma, una exis cias internas a través de las cuales nos descubrimos a nos%
tencia aburrida y rutinaria. Confunden esa existencia con “la tras/os mismas/os, la naturaleza, las relaciones y los mo
condición humana”. mentos gloriosos que son dones que no podemos entender. La
Pero somos seres humanos, y trascender nuestra humani creación del alma continúa en el cuerpo.
dad no puede llegar a través de una huida rápida a estados al Citando a William Blake, puesto que el cuerpo es “una
terados de conciencia que no pueden ser integrados en la porción del Alma acotada por los cinco sentidos, [que son] sus
vida cotidiana. La huida construye la división entre el espí , nosotras/os hijas/os del
principales entradas en esta época”
3
ritu y el cuerpo. Podemos caer en un estado de bienaventu patriarcado tenemos que aprender a amar la materia, la diosa
ranza en un mundo sin espacio ni tiempo -el útero de la Gran en su aspecto de madre. Naturalmente, no nos entregamos al
Madre-, o podemos volar en un estado de posesión. Pero la bienestar de su útero. No oímos el lento latir de su corazón.
posesión por el estupor, el éxtasis, o la energía frenética es in Sólo echamos una fugaz mirada a los dedos moribundos del
consciencia. El ego deja de funcionar y, en consecuencia, invierno agarrándose a los brotes triunfantes. Rara vez nos de
no se aportan a la conciencia para nutrir el alma los tesoros tenemos para tomar una bocanada plena de la primavera, o
del estado alterado. En otras palabras, permanecen inaltera para dar las gracias por el sol en la piel o el sabor de la lluvia.
dos los puntos de vista y las actitudes ante la vida; atrapa Nuestra sensibilidad está tan envuelta que tenemos que apren
das/os en los viejos complejos, somos atravesadas/os por der a honrar la naturaleza, a honrar nuestros propios cuerpos.
nuestra propia espada fascista. La auténtica trascendencia Tenemos que volver a conectar con la sabiduría primordial que
implica un recipiente suficientemente fuerte y suficiente nos da la seguridad de que somos queridas/os, de que la vida
mente flexible para rendirse a otra realidad y para traer de es nuestro derecho natural, de que no tenemos que probarnos
vuelta a la vida los tesoros que ha experimentado; entonces, o justificar nuestra existencia. Con este conocimiento en nues
“la condición humana” cobra un significado rico y pleno de tros huesos, podemos aceptar la paradoja. La vida ya no está
texturas. dividida en verdadero y falso, luz y oscuridad, nacimiento y
La riqueza de los sacramentos que en otro tiempo incor muerte. Cada cosa forma parte de un misterio tremendo cuan
poró la vida diaria a un plan divino aportó la gracia a millo do somos suficientemente conscientes para recibir los men
nes de creyentes. Hoy día, mucha gente, abandonada a sus sajes de su alma virginal.
propios recursos para hacerla volver, no tiene recipiente para Relacionarse conscientemente con la Gran Madre es vol
experimentar esa riqueza. Se ha desterrado la proyección ver al jardín y reconocer el lugar por primera vez, reconoce
que alguna vez se puso en un gran Dios-padre amoroso con que es un jardín y que lo hemos deshonrado. La conciencia

127
requiere una posición del ego y se niega a caer en la conducta significado simbólico en el mundo del alma. Ambos están
compulsiva. Manteniendo una posición de firmeza contra el presentes de manera simultánea. Esta presencia simultánea de
principio de poder que se da entre la madre y sus hijos, la con lo literal y de lo simbólico es metafórica y apunta a ambas di
ciencia abre el camino del amor. recciones.
Y ahora, ¿quién es la virgen nacida de un útero cons Por definición, la metáfora es un elemento transforma:
ciente? La virgen comparte con su Madre arquetípica la fe dorEn griego significa u lad.de un sitio a otro, una
minidad original; no obstante, su identidad es propia. Esa jn nel a otro de energía. De hecho, todo
identidad es el alma. La virgen que ha roto su identificación lenguaje es metáfora, palabras que representan algo. Gran
con la madre, aunque permanece anclada en ella, es ya un as parte de nuestro lenguaje diario es metafórico: “Ella me echó
pecto transformador de lo Femenino. En ella, la materia está un rapapolvo. Mi estómago no puede soportarle. Se le soltó
atravesada por la luz. Vive en el límite en el que materia y es la lengua. Ella es un melocotón en almíbar, una princesa. Él
píritu se tocan y no se tocan al mismo tiempo. Ella es el es una cumbrera, un príncipe, un dechado de virtudes”J.,
puente entre el corazón y la cabeza. El encuentro que se re metáfora constituye un lenguaje colorido or ue com orta
aliza en un sueño es una imagen que no está completamente una carga emociona e imaginativa, al mismo tiem o ue
fuera del mundo de los sentidos ni totalmente dentro de la psi tiene u ca o.
que. La psique y el soma se encuentran metafóricamente. las conocidas líneas de Macbeth
Como el alma es la esencia eterna que habita la materia, las cuando se entera de que su esposa, que fuera su “más queri
imágenes de la materia ofrecidas por los cinco sentidos lle
do amor”, ha muerto:
van dentro de sí el alimento del alma.
Todo lo que existe en el mundo de los sentidos tiene una Mañana, y mañana, y mañana,
dimensión simbólica que existe en el momento en el que el avanza a ese corto paso de día a día,
alma está conscientemente en el cuerpo. Así, los alimentos hasta la última sílaba del tiempo prescrito,
son tanto físicos como simbólicos. Sin esa dimensión, el y todos nuestros ayeres han ido iluminando los sueños,
alma no está presente ni es alimentada. Ljts metáforas curan el camino hacia el polvo de la muerte.
porque hablan a la persona total ¡Apágate! ¡Apágate, breve candela!
és de la ima in
La vida es sólo una sombra, un mal actor
os sentimientos yJa Esta es la razón por la que Jung que durante su tiempo se agita y pavonea en la escena
‘
creía que la contemplación de las imágenes de los sueños y luego no se le oye más.
4
era el camino hacia la totalidad.
Sin el alimento proporcionado por las imágenes, el alma Como muchos estudiantes, tal vez se haya preguntado el
permanece acurrucada en la grieta que existe entre la mate lector por qué Shakespeare no fue suficientemente listo como
/ ria oscura y opaca y el espíritu desencarnado. Si logramos en
f\tender cómo funciona la metáfora, podremos comprender
para decir lo que quería decir, lo mismo que puede pregun
tarse por qué sus sueños no dicen lo que significan. Supon
/‘ or qué es tan válida la visualización para curar el cuerpo en ga que Macbeth hubiera dicho lo que quería decir: “Acaba
j fermo y tan fundamental para alimentar el alma creativa. Las ré con mi corta y vacía vida”. ¿Habrían captado estas palabras
imágenes tienen un significado literal en el mundo real y un el desmoronamiento total de todo lo que un hombre era y es-
128
1
peraba en la vida? ¿Se habría provisto a la imaginación con mismo sufriendo y al mismo tiempo experimentar ese sufri
la imagen de la chispa extinguiéndose de repente en la nada? miento como las punzadas del nacimiento.
¿Vibraría el corazón con la intensidad del andar sonámbulo El ego que está relacionado con el alma virgen está mo
de Lady Macbeth con una vela, avanzando a tientas en un tivado para reflejar las imágenes del sueño a través de la
5 ¿Veríamos la
mundo en el que “era un faro para los ciegos?” pintura, la danza, el canto, la escultura, o la escritura, per
vela de su vida, lo mismo que la vela de nuestras vidas, va mitiendo así que el proceso de curación transforme lo que de
1
cilar en la oscuridad? otra manera serían imágenes muertas a la energía de la vida.
J Sin la metáfora puede alimentarse la mente, pero la ima
ginación y el corazón quedan hambrientos. Sin la reflexión en táfora, la energía se queda bloqueada en patrones repetitivos:
) el corazón de la virgen, la mesa del banquete puede quedar JdiáTnéiIente que atrapa la energía de la piedra. En ¡
¿ servida en los sueños, pero los alimentos no son asimilados
y el alma agoniza. No hay nada más triste en un análisis que
la matriz creativa, fluye el símbolo entre la mente y la ma’
tena, curando la grieta.
ver sueños ricos en imágenes de curación, ya que la persona En los niños, la grieta todavía no se ha producido; así
que sueña es incapaz de digerirlos; es decir, que la concien ¡ pues, para ellos el mundo es todavía un lugar mágico -un lu
cia es incapaz de hacerlo y se niega a tomar el tiempo de hin ‘\gar en el que el alma todavía se infiltra en la materia—. La sa
car el diente, masticar, tragar, digerir e integrar lo que está re / Abiduría mágica sale de sus labios, pero no es consciente. En
presentado por las imágenes curativas. nuestra cultura, a lo largo del proceso de crecimiento, el pen
Mientras que el sueño no es llevado a la conciencia del re amiento racional se impone a la percepción del alma hasta
cipiente, las metáforas que soñamos forman parte de nuestros tal punto que la imaginación queda entumecida; sin ella, la es
cuerpos y de nuestras relaciones. Por otra parte, si trabajamos Ipontaneidad y la creatividad se petrifican. Ya no es percibi
¡ suficientemente con las asociaciones de las imágenes del Ida en la vida diaria la esencia eterna, y la vida se convierte
sueño y permitimos que los sentimientos, la imaginación y la en una rutina repetitiva. El recipiente femenino está tan ce
mente se muevan a través y alrededor del símbolo, somos si
1
rrado que no puede registrar nada genuinamente transfor
¡ lenciados de manera inevitable por la justeza de la metáfora. mador. Los contrarios (espíritu/materia, masculino/feme
¿
Existe un momento de ¡síl o de ¡oh, no!, cuando la verdad re nino, etc) dejan de percibirse como paradojas vivas; sin su
suena a través de todo el ser -a veces, una verdad dolorosa, tensión, humor, inteligencia y alegría, desaparece la sal que
y sin embargo, una verdad que conduce hacia la libertad-. La da a la vida su sabor. La risa estalla cuando chocan dos re
virgen ha sido alimentada. alidades diferentes, y si hemos de vivir la divina comedia,
La cruda honestidad de las imágenes que surgen del in tenemos que sostener la tensión de la paradoja entre dos
¡ consciente pueden aturdirnos con lágrimas o risas, o fre mundos.
cuentemente con ambas, porque la imagen hace desplazar Si nuestra virgen consciente es suficientemente fuerte
ese fino límite del absurdo que existe entre la tragedia y la co para recibir, sobreviene entonces el momento que contiene lo
Á.
media. Si el ego puede asimilar el punto de vista presentado finito y lo infinito. La luz de la materia abre la luz del espí
por el inconsciente y verlo de manera objetiva, puede en ritu. Sin un recipiente para Mozart, su música es sólo ruido.
contrar en ese momento otra posición. Se puede observar a sí Sin un recipiente para los sueños, éstos carecen de sentido.

‘1 La feminidad consciente
Layjsj’iieseiha.proilucilo entre el cuerpo/ilma y 1a

/
4
La luz en la materia es la luz que procede del alma por me de las imgene, pero pocus
dio de los sentidos. Esa luz es diferente de la luz espiritual onas han experimentad o esta clase de curación. La sabi
que se anuncia de repente a sí misma y cambia la vibración la con
de cada célula en su entorno. Un o una pianista, por ejemplo, ciencia. Esta es en parte la razón por la que aparece como la
puede haber creado un recipiente maravillosamente sensible Madona Negra. Esta figura también es negra, en parte, por
a través de la técnica, pero si está receptivo/a al espíritu, que sabemos tan poco acerca del misterio del cuerpo sutil, que
puede suceder algo trascendente: de repente, músico y au es el que señala todavía el lugar donde se encuentran la ma
diencia se hacen música, el infinito penetra lo finito. teria y la psique. Además, la redención de la materia, lo sa
La virgen consciente sentada en el regazo de la madre grado de nuestros propios cuerpos y del planeta, se halla to
consciente es una imagen del alma viva a todos sus valores, davía muy lejos de nuestra conciencia.
necesidades y posibilidades; está anclada en un cuerpo cuyas En este punto sólo podemos adivinar vagamente qué sig
células están sintonizadas con cada variación en la armonía nifica el aspecto sagrado de la materia, pero las imágenes que
del alma, y que son capaces de abrirse a variaciones más su aparecen en sueños —como las llamadas telefónicas de larga
tiles todavía. distancia de “Madre”- sugieren posibilidades que están más
La virgen es luz (conciencia) en la materia. Está en el pro- allá de nuestra comprensión. Imaginar un mundo en que la
/ ceso permanente de volverse más luz a través de la sabiduría
que se le va revelando para siempre a través de la materia y del
comunicación es posible sin recurrir a cables y teléfonos.
Imaginar un mundo en el que los seres humanos escucharí
espíritu. Es la personificación de la redención de la materia. Se an la sabiduría de lo profundo a través de los delfines, que co
convierte en la novia embelesada del verdadero novio. nocen los secretos de la Algo vasto y des
La Madona Negra es otro aspecto de lo Femenino trans conocido queda por delante.
1
formador, ese territorio desconocido -en parte espíritu y en
parte materia- en el que nace la metáfora. En el espacio os
curo del cuerpo sutil, al igual que los negativos de unas fo La anciana consciente
tos en la cámara de revelado, nuestra condición espiritual se
transforma poco a poco en imágenes, que podemos ver como La evolución femenina es crónica, no lineal. Mientras
sueños o como síntomas físicos. Este proceso tiene lugar que madre y virgen crecen juntas, la anciana está implícita en
en el útero de la Madona Negra. Está relacionada con Sop su maduración. Mientras que la virgen se entrega a su desti
jjla palabra gr iieeina la sabiduría. CuandT
no, la anciana atraviesa encrucijada tras encrucijada. Hç
Padres de la Iglesia estaban traduciendo e lejo Testamen te
to, decidieron utilizar la palabra abstracta sabiduría en lugar Todavía existen en Europa mojones en las encrucijadas, en
de la imagen personificada de Sophia, el aspecto femeninoi los lugares en los que la gente se enfrentaba a un camino
6 El Viejo Testamento tiene una resonancia dife
de Dios. desconocido; en medio de su miedo, ofrecían una piedra a Hé
rente cuando Sophia, en lugar de Sabiduría, actúa alrededor cate para que les diera valor. Simbólicamente, las encrucija
de Su trono. El cuerpo/alma responde a Sophia; la mente res das representan momentos en nuestras vidas en los que el in
ponde a Sabiduría.
133
1
c onsciente atraviesa la conciencia, en los que lo eterno atra do le conocí. Estuve en análisis con él unos seis meses y yo
1 viesa lo transitorio; en otras palabras, momentos y lugares en intentaba todavía ser una buena chica. La noche de Navidad
1 los que una Voluntad superior exige la rendición del ego. La recibí noticias de Canadá de que habían matado a mi perrito,
anciana ha atravesado en sí misma muchas encrucijadas; ha Duff. Me quedé aturdida, pero mi sesión empezaba a las seis
alcanzado un lugar de entrega consciente en el que las de en punto y tomé la decisión de no malgastar el tiempo ha
mandas del ego ya no son relevantes. Ella se ha convertido en blando de mi perro. Fui a su despacho y empecé a hablar de
un instrumento y por lo tanto está desapegada. mis sueños. Al cabo de una hora, el doctor Bennet estaba
Desapego no significa indiferencia. Significa que ha pa muy pensativo. “,Qué es lo que va mal?”, me preguntó.
sado por ahí. Ha sufrido, pero puede reponerse del sufri “Nada”, dije poniéndome el abrigo lo más deprisa posible.
miento. Sufre más dolor en presencia de una persona in “Bueno, en realidad usted no ha estado aquí”, añadió.
consciente de lo que esta persona puede ser capaz de percibir, “Han matado a mi perro”, dije entonces. Para asombro
pero puede sufrir el dolor y al mismo tiempo mirarlo de fren mío, el doctor Bennet empezó a sollozar. Yo pensé asom
te. No es indiferente ni está ausente. Está ahí, totalmente brada: ¡el doctor Bennet llorando por mi perro!
presente. Puede ser lo que es y vivir su verdad desnuda. Por “,Cómo puede desperdiciar la tarde de Navidad charlan
eso, es como un diapasón para los que le rodean; siendo ella do, cuando se ha muerto el perro de su vida?”. Sus lágrimas
misma tan real, da el tono justo. Los demás entran en armo rompieron el muro de mi corazón y empecé a llorar. Su sen
nía con ese tono y responden con la verdad de su propio in timiento me hizo ver lo que yo estaba haciendo a mi alma fe
terior. O si no, desaparecen. menina. Entonces empezó mi verdadero análisis. Dejó de ser
La anciana puede permitirse ser honesta. No está intere un estudio fascinantemente intelectual para convertirse en
sada en jugar juegos desgastados. Cerca de ella, los demás un viaje del alma.
pueden experimentar su propia esencia. Su verdad llana hace Otra anciana a la que yo quería era Barbara Hannah, una
que a veces sea difícil de aguantar. Pero su verdad es la me de mis analistas de Zurich. También tenía más de ochenta
dida de su amor. No tiene nada que perder, porque lo que ella años cuando la conocí. Decía la verdad y la decía de mane
es nadie se lo puede quitar. No tiene nada puesto en su ego y ra directa. Durante mi análisis, llegué a una de esas encruci
puede amar sin deseos de controlar. No tiene ninguna razón jadas en las que los deseos de mi ego eran totalmente echa
de persuadir. En sus ojos puedes ver tu verdadero ser. Es el dos a pique por lo que yo llamo Dios. Llegaba a su presencia
espejo perfecto. Puedes confiar en su disciplina. sin ninguna coraza. Ella me miraba, sin decir nada, pero su
En la Edad Media, tanto los hombres como las mujeres, amor era palpable.
eran tomados erróneamente por brujos o brujas. Vivían fue Me sentaba al lado de ella en silencio. Yo estaba como
ra de la colectividad -como lo hace mucha gente hoy- y te en un útero envuelta en el amor que latía tranquilamente en
nían suerte si podían escapar de la hoguera. su corazón. No me decía lo que tenía que hacer. Ninguna de
Las ancianas conscientes son criaturas magníficas. He las dos tenía idea de qué hacer. Me mantuvo en su amor
sido suficientemente afortunada como para conocer a unas hasta que mi alma estuvo de nuevo encarnada y estuve su
cuantas. Una de ellas era un hombre, el doctor E.A. Bennet, ficientemente fuerte y presente para caminar en lo desco
mi analista en Londres, que tenía más de ochenta años cuan- nocido.
134 135
Madre, virgen, anciana, las tres maduran juntas dentro de

la feminidad consciente. Durante siglos, la redención de la
materia ha sido discutida como un concepto teológico. Aho
ra nuestros cuerpos y nuestro planeta nos están poniendo
frente a decisiones que hacen imperativa la Feminidad cons
ciente y crucial para nuestra supervivencia la redención de la
materia. Todos/as necesitamos mirar en nuestro corazón para
preguntamos: “i,Quiero suficientemente a mi feminidad para
honrarla con tiempo y energía? ¿Creo que puede ser libera- 6. LA IVIADONA
da de la prisión del poder y dejada a su energía radiante?”
por Kathleen Riordan Speeth
En este bello trabajo de imaginación activa, la autora

Kathleen Riordan Speeth traza un retrato intemporal de la
‘ Madona, la mujer en la que la madre personal se une a la

madre divina, en la que el individuo se une al arquetipo.
Evoca el misterio y la magia del parto de una virgen en el que
una mujer que está completa en sí misma lleva dentro y da a
luz un niño que está entero, que está en ella pero no le per
tenece, que tiene su propio destino. La virgen/diosa da a luz
a un hijo/dios; el espíritu da a luz a la materia, que a su vez
da a luz al espíritu.
Al mismo tiempo, Speeth describe los elementos de todo
nacimiento: lplenitud de
lqdolorosje,jçk,zçtde la tarea, el
.uto,qçriñcjp deftnjji’’oF. Cada madre, como fuente de vida,
se convierte también en fuente de muerte. En cada naci
miento (y en cada muerte), la Vida aparece y desaparece en
un solo momento numinoso, mientras la vida continúa de
manera rutinaria.
La imagen descrita en palabras de Speeth aporta un en
cuentro con el Rostro que se halla tras el rostro de toda mujer:
la madre como creador, la mujer como fuente divina de vida.
136 137
Volvernos a hacer de madres de nosotras mismas La Madona
Kathleen Riordan Speeth es psicóloga y tiene su consul terrumpió su lectura. Sí, que así sea. No hay reservas: su co
ta privada en Nueva York y en California. Sus temas de in razón sencillo entona una sola nota. Ella ha dado su acuerdo.
terés incluyen la psicodinámica de la creatividad y de la Al florecer el sí, ella está fragante de gracia. Acepto. Que se
trascendencia, y la manera de vivir la vida como una obra de haga Tu voluntad.
arte. Es autora de The Gurdjieff Work y Generativity (de Nada detendrá ahora a María ni la desviará de su propó
próxima aparición). sito. Ella nunca lo cambiará. El huevo cósmico sólo es pe
netrado una vez. Nunca más recibirá al visitante. Ahora el ci
goto sagrado hace milagros secretos de panes y peces dentro
de ella. Lo uno se hace dos, se convierte en cuatro, siempre
esculpiendo, sin descansar nunca. Velado por la carne, es
Esta descripción surge de mi experiencia como madre, condido en cascadas de túnicas azules, la pauta se forma a sí
mis estudios de la maternidad en el arte, la literatura y la misma dentro de la esfera activa, acunado por sus huesos
psicología del ego, así como de la influencia de David Ro humanos blanqueados.
senmann-Taub, al que me gustaría expresar mi gratitud, par María es una doncella, cálida y pura, de amables maneras.
ticularmente por sus reflexiones inéditas en “Maternidad”, y Amistosa y dulce, respetuosa de su familia y del mundo,
en general por su profunda comprensión de la naturaleza y ahora debe elevarse por encima de las convenciones. El par
evolución humanas, de la que deriva mi propia perspectiva. to le hará perder la honra social. ¿Quién es el padre? Se al
En medio de las rosas mecidas al viento se sienta una es zan las cejas. La gente esboza sonrisas ante la respuesta, ha
belta niña con el libro de Isaías en sus rodillas. Bajo sus cen comentarios despectivos sobre la madre y la rechazan.
pies, se halla aplastada la cabeza de la serpiente. La luna que ¿Dónde están los amigos? Una parienta permanece a su lado,
se encuentra bajo ella refleja la luz hacia arriba. El alba aunque sus vecinos están divididos. Muchos la evitan. Otros
entrelaza sus cabellos. En la calma con aroma de cedro la ayudan, pero en secreto. Sabiendo que la luz tiene que
arrulla una paloma. Después, en medio de la brisa de la desvanecer las sombras, tiene la fuerza de soportar las sor
mañana, se produce un revoloteo, María no está sola. Mira presas, los insultos y las humillaciones a causa de su hijo.
hacia arriba asombrada. La señal se cae del libro. Ha com Náuseas. El fruto de esta tierra es salpicado de corrupción,
prendido. la carne de los animales es pútrida. Su boca se llena de mal
María es la elegida. Ha sabido la buena nueva. En un mo sabor. No soportando la suciedad, no puede aceptar la im
mento de duda, aparece una línea en su ceño, ya que el prin pureza, pero felizmente la segunda manzana está sin tacha; es
cipio está clavado al final. Debe elegir. Lo ve sencillo. ¿Debe enormemente dulce. Ella la añade a su pan y vino, formando
ser así? El tiempo queda suspendido. La paloma está silen el cuerpo y la sangre de su hijo que se va desarrollando.
ciosa. Cielos y Tierra están esperándola... Habiendo renunciado a la esbeltez, asume una forma glo
¡ Sí! bal, contenta de cómo la redondez la va moldeando. Lleva su
Al aceptar su destino se transfigura. Con alegría será ma delantal con dignidad; sobre él los pechos tiemblan colmán
dre de un niño. Su corazón está henchido de gozo. Dice sí lle dose de manera anticipada; bajo el mismo se está formando
na de felicidad al mensajero alado que con un lirio blanco in una nueva vida. María contiene su alegría sentada en el ban

r
La Madona
co bajo los cedros en el jardín de rosas, haciendo pequeñas hombre se arrodilla cerca. Estruendosas convulsiones sacu
piezas de punto o leyendo. den su cuerpo como una tormenta. Fuerzas colosales pue
Paseando entre las flores, sus pasos se agrandan volunta den destrozarla o dejarla sin vida. María olvida su nombre. Es
riamente. ¿Qué es esto? Está tranquila. Lleva su atención a las agarrada y liberada, aliviada y destrozada. ¿Qué puede hacer
espinas que están bajo los pétalos. ¿Por qué este murmullo? el hombre ante la naturaleza que se abre paso? Es sólo un es
Es una advertencia; alguien ha hablado. Se ha esparcido un pectador; sus ojos están tensos. Ella se aferra a su mano. El
rumor sobre los detentadores del poder. La vida que está le seca la frente. Los mansos bueyes continúan rumiando ni
dentro de ella se halla amenazada. La calumnia y la murmu tinariamente en el establo.
ración infestan este lugar. Ella siente la amenaza, escucha y María se está acercando a la maternidad. Se esfuerza aho
escapa, acompañada en su huida nocturna por un hombre ra y para siempre abriendo la puerta. Su vientre se eleva como
que confía en ella pero que no es el padre del niño. El pro una montaña: hay que quitar de en medio una roca para entrar
tegerá la semilla que no es suya. En su devoción por la ma a la cueva. La roca se mueve y duda, rueda y se detiene. Em
dre soltera, la toma consigo y bajo su protección. pujar y descansar, una y otra vez. ¡Qué esfuerzo! ¡Qué peso!
La calma de María es inalterable. Nuevamente a salvo, es Su abdomen se cierra como un puño furioso levantado
pera. El sí la envuelve. En el embarazo se reconoce a sí mis ante la tiranía de este mundo impermanente. El puño gesticula
ma como el entorno divino, la matriz del mundo. Bajo su y se agita, mostrando rebelión, proclamando la creación.
corazón hierve la esperanza de generaciones. Ella es real Después, poco a poco, la pequeña palma se despliega y se
mente lo que María es; se conoce a sí misma y está sin pe abre. En un momento todo está en calma.
cado, sin creencias, con certidumbres. ¡Ahora!
El sol va y viene, viene y va. Ella actúa y descansa con el Sus ojos se ensanchan llenos de asombro. Deja que salga
ritmo de los días y de las noches, gestando, con la esperan el niño maduro como un fruto. Ella se convierte en el pasillo
za en su interior. Es el envoltorio sagrado en el que toda la de la vida, en el puente hacia la diez mil cosas. Rinde cuen
evolución vuelve a contar su historia. La larga marcha des tas de su tesoro, dando luz a su pequeño, a ese que debe mo
de las branquias a los pulmones vuelve a repetirse en su océ rir. En adelante ya no le podrá proteger. Aparece la anciana
ano interior, alimentada por el maná del pulso de su médula y el pequeño rey se desliza al mundo de las formas. Su voz
espinal. Ella es la estasis eterna en la que el tiempo nada a es el llanto de un bebé en la oscuridad.
contracorriente. Alegría. Ya sin trabas él es él mismo ahora. Ahora hay dos.
Hacia la décima lunación, la luna redondea su cuerpo. En Ella le mantiene cerca, le da calor y le limpia, mientras que
algún momento, ella adentra su mirada en el futuro o en su el hombre que la quiere les cuida. El reconoce al hijo. La sa
propio interior. Se apoya con fuerza en el brazo ofrecido. grada familia.
Ha llegado su hora. El hombre encuentra su refugio; al acos La Madona ha dado por fin a luz. Algo que estaba dentro
tarse dentro de él, necesita un puerto de llegada -cualquier lu está ya afuera: una parte de sí misma, un ser humano; su
gar servirá-. Recostada sobre una fragancia de heno, rodea propio hijo -aunque en absoluto hijo suyo-. Este no es nin
da por ojos mansos de bueyes, toda su atención es entregada guna otra persona en la tierra, y es todo el mundo. El recién
al parto. Actuando sin aliento, debe cuidar de sí misma. El nacido es el centro de ella.

La inocencia que ella ha albergado en su propia sangre El niño que va floreciendo se siente uno con todo. No
roja humana ha empujado hacia adelante, y ahora debe ofre conoce limitaciones; lo es todo, dueño de todo. Su madre, que
cer la sangre blanca y pálida de sus pechos como conclu no piensa en sí misma, es la fuente de su bienestar. Para ella
sión, y lo hace de manera espontánea y alegre. Es un placer el hijo es el centro y ella es la periferia. Para el hijo ocurre
para ella. Este primer amamantamiento es un momento de éx igual: él es el eje y ella el marco. Ella se olvida de sí misma;
tasis para la mujer, que dilatada y sangrante será llamada en amar es estudiar al otro y su hijo es su tema natural de com
adelante, no con el nombre que se le ha puesto, sino con el prensión. Encuentra justo los medios adecuados de tenerle en
nombre mántrico y universal de Mamá. Ella es María, mére, brazos, de acomodarle, de moverle de un sitio a otro, y apren
mer, mare: el mara, la madreperla, que se realiza siendo los de canciones de cuna para ayudarle a salir de su agitación. En
cimientos de otro ser. su autosacrificio femenino es sin duda una diosa, la encar
Ella recibe las ofrendas de los que le esperan a él. La nación de la ofrenda sin límites.
criatura es bienvenida. Ella lo muestra a los animales, a los A medida que el niño empieza a emerger de esta unión be
hombres y a las mujeres, manteniéndole en sus brazos, arro atífica, se empieza a dar cuenta de que su madre aparece y de
pado de blanco. Todos ellos, pocos en número, le adoran. saparece. Mientras que está fuera de su vista él forma su
La tierra y el cielo se estremecen con el cambio. Una única imagen; cuando ella vuelve, él corrige, hace más vívida y per
luz deslumbra el cielo nocturno, puntuando la noche con una fecciona el icono interno de su madre sagrada.
exclamación: ¡bienvenido! El niño se aleja a gatas, mirando siempre atrás en busca de
Madre y niño prestan atención llenos de gracia, y con su madre para refugiarse. La Madre era su pecho. Ahora es un
gratitud la reciben, como si tuvieran una sola mente. Al prin pecho y un regazo. Es el cálido nido al que siempre puede vol
cipio el bebé y la madre son uno, y ese uno es el bebé. Así, ver. Un buen día se aleja de su vista, absorbido por las cosas
la divinidad que la madre ve en el recién nacido también es del mundo. Después vuelve corriendo a sacarse a sí mismo de
suya, y lo prueba con lo imposible, con la maniobra de los entre sus faldas, para encontrar sus brazos. Ella le da la bien
santos: ella sitúa al otro antes que a ella misma. venida, le abraza, deshace sus temores y le consuela. Sabien
Proporciona a su bebé todos los cuidados, y su leche do que ella está ahí, puede salir al exterior con valentía. Ella
azul-blanca es dulce como la miel. Sonriendo le mantiene es su hogar, su dama de la suerte, el templo de la diosa.
cerca. El bebé descansa seguro en un cielo hecho por ella. Maria le deja ir. Ella no es un mar que ahoga o sofoca, sino
Los latidos familiares de su propio corazón -pom--pom, pom un mar que sostiene. Implicado en sus propios amores con el
pom— son tan calmantes como las mareas de su respiración. mundo, lleva a cabo su propia vida. Cuando sus aventuras le
La melodía de su voz, que le es familiar al bebé desde el úte llevan a casa lleno de lágrimas, la encuentra ahí, lista para
ro, le arrulla, y estando éste bien sostenido, queda tranqui consolarle. Tanto si está herida como si está alegre, muestra
lo. Transportado con cariño, disfruta de la seguridad de los ternura. En la amplitud de su interés, intercede por él.
movimientos. Bien alimentado, florece y ríe satisfecho. Ali Madona. Nuestra Señora. Es una mujer amable, capaz de
mentado constantemente, va tomando seguridad en este mun moderarse. La mujer que dijo sí puede también prohibir. Ella
do, a medida que la madre se adapta y se adapta a sus ne educa. Cuando dice no es por el bien del hijo, no por su pro
cesidades. pia conveniencia. Alguna vez se niega a abrir la puerta a ex-

traños, y su orden silenciosa es poderosa. El pequeño es Sostiene a su hijo muerto en sus brazos. Como siempre,
condido bajo su manto azul contiene la respiración. Los sol ella lleva su peso. Todavía es el regazo, el marco. Acepta a
dados pasan de largo. Muy cerca, y después cada vez más le su hijo, lava su cadáver como a un niño, y las ropas de su
jos, se oyen los lamentos y las súplicas de mujeres a medida tumba son las vendas del sudario. La roca es retirada de la
que son degollados sus vástagos. El niño obedeció a su ma cueva, ahora y siempre.
dre y por eso está vivo. Ella es venerada como la protectora María está sola ante su insondable destino.
divina. María está sentada en el jardín de rosas, envuelta en una
El niño tiene fe en ella y en sí mismo. Juega con granadas túnica azul. Bajo sus pies, la serpiente lame su propia cola.
en su regazo. Examina el globo refulgente en sus manos. Ju La luna debajo de María refleja la luz arriba. La noche en
guetea bajo las palmeras, cerca del pozo, en el jardín vallado, trelaza sus cabellos. En la brisa, cargada de aroma de cedro,
o corre hacia los lirios y las rosas. Su madre vigila, para asis arrulla una paloma. Aunque los lirios se balancean, ella per
tirle ahora, ya que no puede desviar su inexorable destino. Vi manece inalterable. Estrella embarazada en medio de la eter
tal y encantadoramente inteligente, él sigue floreciendo. na oscuridad, abraza al Hombre interior en su vasto útero
A medida que crece va adquiriendo capacidades y cono virginal. Él estará para siempre seguro bajo su corazón que
cimientos. Aprende las escrituras. Los rabinos están asom le acuna. La hora de ella nunca llegará; su esperanza nunca
brados, la madre, orgullosa. Pero ella nunca cambia. Lo que cesará. Aunque el libro en sus rodillas permanece abierto, ella
él tenga que ser, lo será. Es un joven, un soñador, un traba no puede entender. Es la elegida: María, madona embaraza
jador. Un día se va y ella no sabe adónde, pero permanece se da, la Madona.
rena y llena de paz en su jardín, confiando en que volverá des
pués. Está feliz con sus salidas y con sus retornos.
Los días y las noches del hijo son asunto suyo y no de ella.
Vive en libertad como tiene que ser. Hace su propio camino.
Más alto que su madre, él la venera, y lo poco que ella pide
él se lo da. De pie en la montaña, expresa lo que piensa. La
gente se congrega. Unos pocos están convencidos, otros no
están de acuerdo. Algunos son aliviados, inspirados o cura
dos. Otros se despiertan del sueño de la tumba. La madre, que
se mantiene aparte, le conoce: suave con los humildes, deci
dido contra el poder del mundo; toma riesgos. Ella permanece
detrás de él.
Ha llegado su hora. Tiene que ser así. Ella no puede hacer
nada por impedir lo que va a suceder. A su vista se desgarran
cielos y tierra, pero ella permanece inalterable en su dolor. Él
ha dejado de respirar. Lo que le ha sido ofrecido al mundo a
través de ella le ha sido quitado con el mismo misterio.

TERCERA PARTE:
VOLVERNOS A HACER DE
PADRES DE NOSOTRAS
MISMAS:
LA CURACIÓN DE NUESTRA
RELACIÓN CON
LOS HOMBRES Y
CON LO MASCULINO

La niña y la mujer, en su nuevo y propio desarrollo, sólo de
paso serán imitadoras de los modos masculinos, los positivos y
los negativos, y repetirán las profesiones masculinas. Tras las
incertidumbres de dichas transiciones, será obvio que las mu
jeres únicamente habrán atravesado la profusión y vicisitudes de
esos disfraces (con frecuencia ridículos), para limpiar su natu
raleza más característica de las influencias distorsionadoras del
otro sexo.
RAINER MARIA RILKE
Abrirse a lo Femenino Consciente exige también una nue

va relación con el Mundo-Padre, el reino de la vida que con
tiene a los hombres y lo Masculino. Para las mujeres, éste
abarca a nuestros padres, maridos, amantes, hijos y hermanos.
También incluye nuestro ánimus, el elemento inconsciente de
nuestra psique, que puede volverse una clave. del creciinien
to espiritual cuando ocupa suropio sitio en relación con
-
nuestros egos femeninos.

En otro nivel, este territorio contiene el arquetipo del Pa
dre, la imagen trascendente que existe dentro y más allá del
mundo personal de los hombres. Este comprende tanto las ins
tituciones patriarcales (dominadas por los hombres) como
sus leyes patriarcales, la imagen Masculina Divina que se
nos ha enseñado a tomar por Dios.
(A diferencia de las mujeres, el Mundo-Padre es para los
hombres el lugar del nacimiento de la identidad del ego. Para
ellos, éste también incluye la esfera del movimiento de los

149
Volvernos a hacer de padres de nosotras mismas Volvernos a hacer de padres de nosotras mismas
hombres que ha emergido recientemente, y que está hacien él no ha vivido; en el segundo, intenta escapar a su influen
do nacer un sentido de hermandad y de comunidad entreellos.) cia. En ambos casos, está atrapada en la dinámica determi
Para las mujeres el Mundo-Padre (conocido normalmen nada por sus intensos sentimientos -probablemente incons
3
te como “el mundo real”) es el mundo del Otro. Desde el prin cientes- en relación con él, y no actúa conforme a una
cipio, nuestras relaciones de amor con nuestros padres son tí dinámica dirigida por sus propias opciones adultas.
picamente complejas e intrincadas sea cual sea la forma que Nuestros padres también dieron gran importancia a la ma
tomen. nera en la que vivíamos nuestros sentimientos de poder y de
Cuando empezamos a clarificar y a hacer consciente su di capacidad de atracción como mujeres. El ánima (imagen fe
námica oculta, damos un paso importante en la clarificación menina interna er iiiorizaapoFn
de nuestras relaciones con todos los hombres, y también con ija sin arse cuenta, lo cual le proporciona una sensación de
:N “) el principio Masculino.Éste es el comienzo de volvernos a ascen lente sobre él, pero la atrapa en las imágenes que él tie
\I..hacer de padres de nostras mismask ne de la feminidad y de la belleza. Otra posibilidad es que el
Al igual que nuestras madres, nuestros padres no podían
satisfacer las necesidades más que humanas que nosotros les
/ padre desvalorice el tipo de feminidad de su hija, criticando
el aumento de sus curvas o sus maneras hombrunas, y des
proyectábamos cuando éramos niñas. A veces, desafortuna truyendo de este modo los sentimientos incipientes de con
damente, ni siquiera podían tampoco satisfacer las necesi fianza en sí misma a una temprana edad. Empieza así a desear
dades simplemente humanas, tal vez a causa de sus propias ser ya una mujer en lugar de aceptar lo que ella es en ese mo
1 carencias como padres. Así pues, la mayoría de nosotras te mento.
nemos sentimientos muy heridos en relación con nuestros Más adelante, a lo largo de la vida, a medida que somos
padres, que abarcan desde el odio intenso hasta la adoración atraídas por amantes y compañeros, nuestros padres (ya com
idealizada y toda la ga a-que.hay entre estos dos extremos. pletamenteinteriorizdb dentro de nosotras) continúan afec
Para evolucionar psilicameié, tenemos que exami tançlo uu rasçj&jDnes y comporiientos. Algunas mu
nar con atención estos sentimientos y los efectos secundarios
“\ jeres, eternamente en pos de “aquel que partió”, buscan a
que tienen en nuestras vidas. Tenemos que mirar de cerca sus padres en otros hombres. Otras buscan a los opuestos de
‘- cómo poseernos o hemos rechazado las cualidades de nues sus padres, a los que tienen sus cualidades no manifestadas,
tros padres, cómo nos hemos identificado con ellos y hemos i ya que estas mujeres están decididas —incluso sin ser cons
llegado a ser como ellos, cómo los hemos temido, y cómo nos cientes de ello— a no recrear la relación padre-hija.
hemos rebelado. Conozco, por ejemplo, a una mujer cuyo padre sigue sien
Por ejemplo, en un tipo de relación con un padre, una do una presencia muy querida e influyente en su vida. Es un
hija que le quiere puede que haya adoptado voluntariamen gran conversador que dedicó su vida a tener éxito en los ne
te alguno de sus rasgos de carácter o incluso que haya in gocios y que valora mucho el conocimiento de la historia y
tentado satisfacer un deseo profesional que le correspondía a de la política. Durante muchos años, esta mujer se ha rela
él. Con una dinámica diferente, otra hija puede haber toma cionado con hombres que, a diferencia de su padre, eran si
do la dirección opuesta simplemente para contrariar la vo eros desde el punto de vista &óffómico
2
lenciososynadp
luntad paterna. En el primer caso, ella intenta vivir la vida que y cuyo interés prioritaria áISi ¿fd rpópio desa

Volvernos a hacer de padres de nosotras mismas Volvernos a hacer de padres de nosotras mismas
rrollo emocional y psíquico. Evidentemente, ella ha buscado Sanford añade que si una mujer proyecta en un hombre su
lo opuesto de su padre, casi como si le hubiera bastado con imagen positiva del ánimus -salvador, héroe y guía espiri
haber tenido en su vida uno como él. Ltual-, le está supervalorando. Si el hombre hace lo mismoL
a la mujer como a su mujer ideal, las proyecciones se em
1 Por todas estas razones y algunas otras, es esencial em jparejan y declararán “estar enamorados”. En medio de su
pezar a investigar las complejidades de esta relación prima-
estamos demasiado identificadas con nuestros pa fascinación y atracción recíproca, puede que lleguen a sentirse
4 ña. Tanto si silos exageradamente, no somos completados sólo uno por medio del otro, y que permanezcan
) dres comocrear unarechazamos propia hasta que detectemos ciegos al mecanismo de proyección que crea su realidad. Por
..tJ ‘libres de feminidad
esta mano invisible que influencia nuestro destino. otra parte, si ella-pya su imagen nega del animus, el
b)
U su
En la vida de una mujer, padre y las
de otros padres son el origen de°su ánimil
representacio
Tiiient
nes
o
se convierte en una causa de de
si él óYú
neinc!uso de traicion;
fftce lo mismo, ella se convierte en una
a hacFde padres im “bruja”. Este cambio sobreviene frecuentemente a la fase
plica despertar y aislar este elemento en el inconsciente. inicial de una relación amorosa, cuando empiezan a activar-
El analista junguiano Andrew Samuels llama al ánimus la se las proyecciones.
.
acción en la psique de una Empezar a comprender el papel de la proyección del áni
içiz:. mus en nuestras relaciones con los hombres es empezar a
(f Estos dos arquetipos, o patrones psicológicos universales
subyacentes, fueron descubiertos por Carl Jung en los sueños
distinguir entre lo que esta _qyi
fuera”Çtuand o aprendemos a poseer el
jQgue esta ahi
lado masculino de
9
no
y comportamientos de sus clientes, y corroborados en los tts mismas, a desarrollar nuestra propia fuente dauto
cuentos de hadas y en los mitos. Jung llegó a considerarlos nbrnía y espiritualidad, podrnos empezar a liberarnos de
como dos pilares básicos de la psique humana. El utilizó los) emocional de losa.
términos animus y az.ma.,,ponforme a su origen latino ani-Ç de lo Masculino en
mare, que significafiar, porque creía que ellos actúa los hombres: biperidentificación de una mujer con el áni
dando vida a las almas o espíritus de hombres y mujeres. Jn.trno. Esta fase psicológica necesaria está muy ex
tendida hoy día entre las mujeres. En nuestro esfuerzo por li
¡
El analista junguiano John Sanford explica en su libro The
invisible Partners que nuestro ánimus es normalmente difícil
, de detectar. Lo mismo
ante todo con lo
que los hombres que, identificados
Masculino, proyectan su feminidad en las mu
berarnos de los patrones estereotípicos de la feminidad, que
procede de proyectar toda la masculinidad en los hombres y
de recibir las proyecciones femeninas, hemos adoptado en lu
gar de esos patrones una manera “masculini da” de actuar,
/
/ jeres, las rnujres, identificadas conscientemente con lo Fe
,,_ menino$orecfl su aspecto masçuji içonsçiteei los convirtiéndonos en “hijas del patriarcado” )
‘— hombres. Por esta razón, nuestro ánimus aparece como si per Creo que el lenguaje que 1iibe este fenómeno es des
teneciera a otra persona, como por ejemplo a un amante que graciadamente simplista y que adolece de la profundidad que
parece ser la imagen viva del “compañero perfecto”. Sanford necesitamos para reflejar con precisión la complejidad de lo
llama a estos elementos inconscientes proyectados “los pa que está sucediendo. Se dice que una mujer con un ánimus al
trones invisibjes” de nuestras relaciones hombre-mujer. — tamente desarrollado se vuelve ecesivamente agresiva, in

153
152
Volvernos a hacer de padres de nosotras mismas Voit’ernos a hacer de padres de nosotras mismas
telectual y ansiosa de poçn un esfuerzo por acabar con los ánimus. Igualmente, cuando los hombres no colocan ya lo Fe
fpatrones de pasividad, dependencia y vulnerabilidad emo menino fuera de ellos en las mujeres, dejan deçst&jzeLnido
Ç cional. En los años sesenta, por ejemplo, muchas feministas de.unima_inconsciente. Esto conlieva después un profun
deseaban eliminar el mito de la biología como destino y de do cambio en nueii relaciones íntimas, así como en nues
mostrar las capacidades de las mujeres para pensar clara tras vidas creativas. Y nos empuja a desarrollar un nuevo
mente, manejar la autoridad y realizar todo lo que los hom lenguaje que trasciende las clasificaciones de Jung, que eran
bres llevan a cabo. más apropiadas para su tiempo.
Como consecuencia, algunas mujeres se volvieron adictas Nos hallamos hoy día en medio de estas transiciones psi
de la embriagadora carrera de lp!tiyidad, convirtiendo cológicas. Muchas mujeres han salido de lo Femenino in
eLtjpdidónvj’ndnseser”supermujç consciente hacia un estilo más activo y centrado en lo mas
( res”. Durante esta época podían sacrificar relaciones amoro culino. Sin embargo, también ha empezado la próxima etapa:
sas para desarrollar su poder personal. Otras piensan que sus muchas mujeres hemos comenzado a expresar sentirnos in
relaciones con los hombres sufrieron una pérdida clara de satisfechas con los lírnjje&.&tas vías recién encontradas,
fronteras entre los dos sexos. Algunas observadoras han se
ñalado que durante el apogeo del feminismo, muchos hom
f) lamentando nuestra
La analista junguiana June Singer llama a este síndrome
bres se más “receptivos”, “nutridores”y sensi _“la tristeza de la mujer de ito”.tice que procede de haber
) bles”, en respuesta aVdsarrollo por parte de las mujeres de por haber dado prio
lo que los hombres consideraban como rasgos “masculinos”. Jr ridad al desarrollo de la identidad individual a costa de los va
Por supuesto que el lado luminoso de este hecho es que,
por primera vez en la historia, muchas mujeres tienen y se
) loteljela. Singer no propone que las mujeres empren
dan una vuelta regresiva a ser cuidadoras a tiempo completo;
guirán teniendo un tremendo impacto en la cultura patriarcal. más bien, sugiere que los sentimientos profundos de conflicto
Mediante una mayor utilización del amplio abanico de nues irrumpen cuando la vida esu1jbteLtal,como cuando, por ejem
tras capacidades, hemos empezado a dejar nuestra huella en plo,jaaik laprofsión no validnçjer fejeniiq...
todos los campos de nuestros esfuerzos. Esta tendencia significa una nueva fase en el desarrollo de
Además, por primera vez, las relaciones hombre-mujer pue las mujeres. Podemos predecir el inicio del desmoronamiento
den convertirse en un vehículo de crecimiento de la conciencia, de la identificación con el ánimus, y junto a él, el çomienzo
a través de una comprensión acrecentada de las proyecciones• de la salida d1-Mundo-Padre y el nacimiento a la Feminidat’
4— y de su retirada de las personas que amamos. El sufrimiento que
ac,laindefinición de fronteras entre 1çssexos lleva consigo Yo no creo que este paso evolutivo de las personas esté re
la poración de formas más profundas deamor yçone lacionado con la edad, como la llegada a la pubertad; sin
xiones más significativas que sólo puee merger cuau.d han embargo, pienso que éste coincide frecuentemente con el pe
4... murto las proyecciones deimusyánijnp. riodo medio de la vida o os años posteriores a éste, porque
Cuando las mujeres no colocamos lo Masculino fuera de exige una cierta clase de madurez sicoló ica un cierto
nosotras (en un hombre o en la sociedad), el ánimus ya no es grado de éxito en el rnundq. que requieren un tiempo para ser
inconsciente y ya no se nos puede llamar poseídas por el logrados.

Volvernos a hacer de padres de nosotras mismas
En esta parte, se encontrarán ensayos perspicaces sobre las

mujeres en el Mundo-Padre.
- Manisha Roy describe lo necesario que es para las muje
-ç’res salir de la fase del ánimus, así como los peligros de que
‘ darse atrapadas en ella: Señala que esto explica la dinámica
J interna de ciertas teTncias sociales, como la confusión de
roles en las relaciones,
mismo y a o a eebjs entre muchas mujeres entusias
m ‘r ser madres.Roy sugiere que la función espiritual
del ánimus para guiar el ego a conectar de nuevo con el Ser,
7. EL DESARROLLO DEL
puede ser realizada hoy día por las mujeres.
Jane Wheelright considera el desmoronamiento de la iden
ÁNIMUS COMO PASO HACIA
tificación con el ánimus como una puerta clave para desa
rrollar la feminidad consciente. Señala que con frecuencia es
LA NUEVA CONCIENCIA
una especie de traum
una crisisorporJ, como una enfermedad o una depresión
FEMENINA
pospto,_otrna1risis en las relaciones. Al igual que Manis
ha Roy,inséj intrabajo psicológico para que pueda for
mar y evocar vos atrones femeninos)
1
por Man isha Roy
Polly Young-Eisendrath escri e como el feminismo le
despertó a la naturaleza de creadora de realidad en una cul
La analista junguiana de Boston Manisha Roy abre to
tura patriarcal. Como nuestras instituciones y lenguaje do
davía otra puerta hacia lo Femenino Consciente. Su tesis
minadas por los hombres consideran a las mujeres carentes en
consiste en que el ánimus de la muer el lado
relación a los hombres, hemos heredado una crisis colectiva
consciente de su ersona i ad, necesita mantener una rela
deidentií1ad. Young-Eisendrath cree que esto no pueEiF cu
ción sana eg fenino pqa poder rJQtJ
rado por un psicólogo que mantenga un prejuicio en rela
mente como mujer.
ción a los géneros. En consecuencia, la autora rechaza las in
terpretaciones clásicas de Femenino y Masculino e intenta Parq ujç el orig dJ dsQrr4eZimJÁs_e&
padre y las figuras . ntras ue el ori en de su
redefinir el ánimus y su evolución en las mujeres desde una
ego es su ma re. El ánimus pone dos trampas que pueden de-
visión que comprende las percepciones internas femeninas.
tener nuestra evolución: puede permanecer inconsciente,
/ y’ Así pues, entrar en el Mundo-Padre es un paso inevitable siendo proyectado en los hombres (esto puede verse en los
f necesario en el desarrollo de las mujeres.
5
E igualmente lo matrimonios convencionales que tienen roles sexuales este
V ea.lide él/Significará una nueva manera de vivir en todos reotípicos) o en la sociedad (esto puede verse en las femi
los nivel, personal, interpersonal y cultural.
nistas radicales que “se enfrentan a los hombres con sus

o mismas armas “). O puede que una mujer llegue a identifi
Centro de Desarrollo Transpersonal 157

Volvernos a hacer de padres de nosotras mismas El desarrollo del ánimus
carse internamente con su ánimus, haciendo que se vuelva rí

j gida y excesivamente intelectual y que, en última instancia,
J pierda el contacto con sus propios instintos femeninos.
Roy cree que hemos caído en estas trampas en
Martha, de sesenta y ocho años de edad, pidió divorciar-
se de su esposo después de cuarenta años de matrimonio.
propor
ciones epidémicas, y que esto puede explicar algunas ten Madre de hijos que habían dejado el hogar hacía muchos
dencias sociales apremiantes: mujeres que rechazan los es años, había pasado por lo que se llama el síndrome del “nido
tilos de vida sumisos de sus madres y buscan satisfacción vacío”, retomando la pintura, que había estudiado cuando
fundamentalmente en su profesión para vivenciar el propio era joven. No tenía otra formación, pero la idea de dejar la se
desarrollo de su ánimus; gran número de mujeres ya madu guridad económica del matrimonio no parecía importarle.
ras o en la última etapa de sus vidas, que inician el divorcio “Debo hacerlo”, decía. “No sé exactamente por qué. Algo en
para volver a integrar el arquetipo que proyectaron en sus mi interior sigue empujándome a salir de este sitio seguro y
maridos; y hombres que se sienten inadecuados y confusos confortable. Es una locura. Pero parece que no tengo otra
frente al aumento de poder de las mujeres y la disminución elección.
de su interés en criar. En algunos casos, los hombres han res “Hubo otras ocasiones a lo largo de mi matrimonio en
pondido desarrollando sus propias cualidades femeninas (el las que debería haberlo dejado. Me enfadé cuando mi mari
ánima), lo que ha conducido al desmoronamiento generali do tuvo su primera aventura extramatrimonial, pero no podía
zado de los estereotipos sexuales. dejarle. Le amaba y los niños eran todavía pequeños. El tiem
Roy no lamenta estos acontecimientos psicológicos y so po curó esta y otras muchas heridas. Supongo que es lo nor
ciales, porque los considera como parte del cuadro de de mal en un matrimonio de muchos años.” Se calló unos mo
sarrollo de la conciencia. La autora sugiere que el ánimus mentos antes de añadir: “Es extraño que ahora, después de
puede convertirse para una mujer en el guía interno que une todos estos años, tenga la necesidad urgente de salir, de ha
su ego a fuentes más profundas de creatividad. Si el ánimus cer algo por mí misma, para mí sola”. Aunque lloraba mien
cumple su objetivo espiritual, la guía hasta volver a conec tras me hablaba, parecía decidida.
tar con el Ser femenino perdido. Martha abandonó la seguridad económica del matrimonio
Manisha Roy, doctora en Filosofla, es una analista jun y el confortable hogar que había creado y amado durante tan
guiana que tiene su consulta privada en Nueva Inglaterra. tos años. Tras el divorcio, volvió a la escuela y trabajó por las
Nacida en la India, ha vivido y trabajado durante muchos tardes en la biblioteca para mantenerse. Necesitaba estar fue
años en América y en Europa, y ha enseñado antropología en ra, en el mundo de las ideas, del dinero y de la productividad.
varias universidades. Se ha formado como antropóloga cul Empezó a parecer más viva y a sentirse diez años más joven.
tural y psicológica y como analista junguiana en el Institu Mary, de cincuenta y cinco años, enfermera de forma
to C. G. Jung de Zurich. 7Jene en su haber un gran número de ción, había enviudado diez años antes de nuestro primer en
publicaciones, entre las que se encuentra el libro Bengali cuentro. Trabajó como voluntaria en el mismo hospital en la
Women. Jeremy P. Tarcher, Inc. publicará en un futuro pró que había estado empleada durante algún tiempo. Su marido
ximo su libro sobre el tema que trata este capítulo. le había dejado suficiente dinero para llevar una vida cómo
da. Aunque era muy querida entre sus amigas y compañeras

de trabajo, había empezado a aburrirse. Vino a la terapia en través de los símbolos culturales. Y puede actuar como guía
esta situación. Sus primeras palabras fueron: “He llegado a un espiritual para una mujer, especialmente en sus últimos años
callejón sin salida. Me aburro de todo. Me siento inquieta, de vida.
como si necesitase hacer alguna otra cosa, algo diferente”. La personalidad de cada mujer debe desarrollarse gra
También empezaron a manifestarse en Mary síntomas de dualmente para llegar a integrar sus elementos inconscientes
insomnio por primera vez en su vida. Meses después me in a lo largo de su vida. Su identidad femenina necesita estar an
formaba de que atravesaba una crisis. Con gran vergüenza y clada en el género, la cultura y los arquetipos, todos ellos de
sorpresa, me confesó que se había enamorado del joven sa manera proporcionada y combinada para funcionar como un
cerdote de su parroquia. Reconocía tener intensas fantasías se ser humano equilibrado en el aspecto biológico, social y es
xuales que estaban volviéndola casi loca. Estaba completa piritual. Idealmente, la personalidad consciente de una mu
mente perdida y en una situación difícil. “Estoy tan jer está enraizada en su cuerpo y en el arquetipo de lo Fe
avergonzada”, decía entre sollozos. menino dentro del contexto de la historia cultural. También
Mujeres como Martha y María, que son alcanzadas por lo aprende a ser mujer por la definición concreta de los roles se
que podríamos llamar la crisis de la mitad de la vida, pueden xuales femeninos prescritos por su sociedad y por sus pautas
llegar a actuar de maneras que ellas mismas no pueden ex culturales.
plicar. Otra paciente de cincuenta y un años intentaba im Sin embargo, internamente, la madurez psicológica de
placablemente organizar un equipo de baloncesto con sus una mujer depende de hasta qué punto su ego es consciente
vecinas y llegó a obsesionarse con este juego. Intrigado al tanto de lo Femenino como de los arquetipos contrasexuales,
principio, su marido llegó a quedarse completamente des y de cómo incorpora estas partes no vividas en el Yo cons
concertado y acabó por prescindir de ella. ciente. ja hacerlo,. debe sab cómo semaniesta eLni!s
en su vida, de manera ue sea ca az d ferenciar entr los
colecfiyQ y transpersonales del áni
Vivenciar el ánimus mus. Esto es necesario antes de que pueda integrar sus par
i’o vividas, su potencial inconsciente. Este proceso cons
Yo creo que estas mujeres necesitaban vivir lo que puede ciente de integración es vital para mantener una psicología
llamarse la experiencia del ánimus en sus varios aspectos. El saludable. De otro modo, el ánimus, que es potencialmente
ánimus, o el arquetipo contrasexual -concepto introducido por una parte sana y creativa de su vida interna, se convierte en
primera vez por el psicólogo suizo C.G. Jung hace treinta un complejo expresado a través de vías negativas y destruc
años— hace referencia a los aspectos masculinos inconscien tivas. Un ánimus no vivenciado puede llevar a la neurosis y
tes que han sido excluidos y reprimidos en la vida conscien comportar graves síntomas psicosomáticos.
te de una mujer. Estos aspectos masculinos están definidos El desarrollo del aspec prona1 del 4jmji&deina..m-
¡ por la cultura y la sociedad de un tiempo concreto. El ánimus
es un arquetipo enraizado en el inconsciente colectivo y que
j4ependedemuchosfacqs: sire y lajgap
ternas, sus imágenes culturales de la macu1inidad (ue pue
actúa como vínculo entre los territorios personal y transper den cambiar con el tiempo), yconstipiçiónpsicojógic. Su
jsonal. Como arquetipo, sus dimensiones se manifiestan a ego tiene que relacionarse con el ánimus de manera cons

Volvernos a hacer de padres de nosotras mismas 1 El desarrollo del ánimus
1 ciente para que tenga algún valor para ella. Por otra parte, el
gç de la mujer depende desu relación temprana con su ma
drey de su conexión con el arquetipo de la Madre, jin
otros factores.
Una joven normalmente vivencia diferentes aspectos del
compulsiva o en una adicción a la comida, al alcohol, las
drogas, al dinero o al amor. Se quejan de perder el control de
sus vidas. Se esfuerzan en crear relaciones y tienen grandes
dificultades en expresar sus emociones, en especial las ne
gativas, con excepción, tal vez, de estallidos circunstanciales
ánimus a través de las proyecciones en los hombres, objetos de impulsos histéricos.
e ideas que representan la masculinidad en su cultura. Figu ipesjir del éxito externo, estaspjjeres sufren dejipa
ras desconocidas de hombres en los sueños suelen represen autoestima muyjjçausa de la pén1id&4çsu yo femepi
tar personificaciones del ánimus en los niveles personal y no en algunapaftedç su yjd. Han vendido su alma al ánimus, /
transpersonal. Estas figuras pueden presentarse como jueces les ayuda a ser “hombres” de éxito. perjo a ser muje«’
negativos y críticos que desvalorizan a la soñadora, ya que, Son inteligentes en la conversación y ló
cuando es inconsciente, el ánimus puede volverse negativo e gicas, incluso cuando hablan de amor y de relaciones, y rara
incluso diabólico. vez traicionan sus sentimientos como mujeres que necesitan
Así pues, o bien ella proyecta la masculinidad primitiva en o aprecian tales experiencias. Una recibe la impresión de
los hombres y símbolos masculinos externos, desposeyéndose una existencia superficial sin profundidad, camuflada por
de esta parte de sí misma, o se identifica internamente con el una persona muy cultivada.
complejo de una manera que hiperpotencie su identidad fe ¿Por qué es tan duro para una mujer actual ser ella misma,
menina. Entonces se convierte en una Amazona, o mujer con ser totalmente femenina y totalmente productiva? Creo que
armadura, competente y con habilidades masculinas, pero la respuesta a esta pregunta reside p. la ausencia ççj1a.
que ha perdido su alma femenina. En un grado menos grave, çión entre su e o s s ar ueti os tanW FmQflioscom
puede que copie una masculinidad subdesarrollada en sus por ejemplo, la ausencia de relación con
opiniones e ideas obstinadas. el ánimus. Una ojeada a la historia cultural reciente puede
Puede que una mujer sea capaz en su vida diaria de detectar ilustrarnos sobre esta evolución psicológica.
su ánimus inconsciente por la interferencia que éste produce
y que perturba su vida consciente de mil maneras. Quizás
haga un comentario amargo o lleve a cabo una acción agresiva Tecnología frente a valores femeninos
a su pesar. Esta conducta puede tener costes emocionales para
ella. Poco después tal vez se diga a sí misma: “No debo hacer El descubrimiento de las píldoras anticonceptivas y el rá
esto”. Es típico de la conducta del ánimus en su aspecto ne pido progreso de la tecnología doméstica desde la Segunda
gativo hacer un movimiento hacia la perfección a costa del ins Guerra Mundial tuvieron un impacto trascendental en las
tinto y sentimientos personales de la mujer. mujeres norteamericanas. Durante las dos décadas siguien
Tanto en la vida diaria como en psicoterapia, una se en tes, la libertad de poder elegir el embarazo y de reducir el
cuentra con mujeres que son altamente inteligentes y profe tiempo y la energía dedicadas a las tareas domésticas con
sionales de éxito, pero que están deprimidas y que son infe dujo a las mujeres al mundo de los hombres por muchas
lices. Con mucha frecuencia se encierran en una actividad vías. Algunas emplearon su tiempo en adquirir capacidades
ji
profesionales valoradas en el mercado de trabajo, mientras Separarse de la madre

que otras, atraídas por una publicidad seductora, se con
virtieron en grandes consumidoras. Esta libertad recién en A finales de los años cincuenta, el papel modelo de la es
contrada respecto a la maternidad predestinada y a las ex posa/madre amable, acomodaticia y sumisa, ya se había que
tenuantes labores domésticas, no obstante, cobraron su dado obsoleto. Las mujeres que llegaron a adultas a finales de
precio. los sesenta y principios de los setenta esperaban alcanzar su
Entre 1950 y 1970, el desafío de construir un hogar y propio valor e independencia de que habían sido privadas
una familia ya no reposaban sobre la capacidad de la mujer sus madres y abuelas. El best seller de Nancy Friday, My
de crear y de organizar. Mantener una casa exigía una habi Mother Myself (1977), difundió claramente la necesidad de
lidad mecánica y una organización eficaz del tiempo más que las mujeres americanas de separarse de sus madres y de los
una imaginación creativa. Las mujeres empezaron poco a mitos de éstas, si querían llegar a ser personas individuales
poco a desdeñar la maternidad y el quedarse en casa, en autorrealizadas.
contra de sus necesidades instintivas y de las advertencias de Esta separación de la madre también significaba un re
la generación anterior, que todavía ponían el énfasis en el chazo del matrimonio tradicional y de la dependencia de los
matrimonio y la maternidad como las metas ideales de la hombres en el terreno de la seguridad social y económica. Las
vida de una mujer. mujeres comenzaron a formarse en todas las profesiones, y
Mientras tanto, la cultura avanzaba desarrollando y uti hacia 1980 constituían más de la mitad de la fuerza de trabajo
lizando su tecnología para conseguir un mayor nivel de de todo el país, incluyendo muchos altos puestos. Durante las
vida en el mundo. La educación para ambos sexos se con dos últimas décadas, las mujeres comprendidas entre las eda
virtió en la formación para adquirir capacidades basadas des de treinta y cincuenta años esperaban obtener la autoes
en aptitudes racionales y científicas con el objetivo de al tima a partir del éxito profesional, tal como lo hacen los
canzar esa meta. Se dejaba poco espacio para las cualidades hombres.
femeninas. Se reprimieron y desvalorizaron por parte de Esta separación consciente del modelo materno de matri
ambos sexos la intuición, el sentimiento, la subjetividad, la Amonio y de vida también las separó del arquetipo Femenino,
capacidad de relación, las reacciones emocionales, la re )de las partes emocionales e instintivas de ellas mismas. La
sistencia, y otros muchos rasgos asociados con la manera fe maternidad, la más instintiva de todas las necesidades feme
menina. ninas, y también otras necesidades emocionales como la de
Las mujeres crecieron deseosas de comer el fruto de la pendencia y la vulnerabilidad, fueron controladas por la ra
conciencia masculina basada en el racionalismo materialista. zón y el escepticismo. Parece probable que las adicciones y
Una actitud escéptica comenzó a impregnar la experiencia hu las compulsiones destructivas que emergieron entre muchas
mana, afectando los territorios más misterios: el amor y la re mujeres en la década siguiente fueron una reacción y una
ligión. Las mujeres empezaron a estar orgullosas de su ob compensación psicológica.
jetividad y de su capacidad para cuestionar y analizar de Estas mujeres se habían identificado totalmente con el)
manera lógica. ánimus en sus aspectos racionales y profesionales. No com
prendían que estaban limitando el ánimus en tanto qper:

sona or conse uir la aprobación social. Se convencieron a cesaria contra la imagen femenina herida y avergonzada que
sí mismas de que eran an capaces y validas como los hom heredaron de sus madres y de sus abuelas. No querían repe
bres a los ojos de la sociedad y, por lo tanto, a sus propios tir y perpetuar la autoimagen pretenciosa y desvalorizada de
ojos. Sin embargo, pronto comenzaron a darse cuenta de que la generación precedente. En esta escisión consciente, las
las capacidades que necesitaban para triunfar en su trabajo no mujeres de la generación de Elisabeth tomaron una posición
les ayudaban en sus relaciones íntimas. Algunas intentaron heroica. Lo mismo que en otros campos, siguieron a los hom
una “comunicación genuina” o un “matrimonio abierto”, bres en la batalla abierta contra sus madres, de las que nece
pero se sorprendieron de que estas buenas intenciones eran sitaban separarse para llegar a ser ellas mismas. Pero cayeron
frecuentemente trastornadas por emociones primitivas in en otra clase de falsa identidad, que sólo se hizo evidente en
controlables como los celos, la desconfianza, la cólera y la la década siguiente.
venganza. Hagamos un alto para examinar con mayor profundidad la
Elisabeth, una atractiva mujer de treinta y dos años con un imagen femenina herida y avergonzada. Es importante com
doctorado en Filosofía, tenía una elevada posición en un la prender psicológicamente esta situación histórica, antes de
boratorio universitario de investigación. Su padre era un res que podamos analizar el problema actual del ánimus.
/
petado profesor en la misma disciplina. Se casó con uno de
los alumnos de su padre, que era igualmente un científico bri
llante y prometedor. Antes de que hubieran pasado cinco El matrimonio como solución
años, su marido empezó un aventura con una mujer menos
atractiva y mucho menos cultivada. Elisabeth estaba más Para las mujeres de los años cuarenta y cincuenta, el ma
sorprendida de sus propios estallidos emocionales y de celos trimonio y la maternidad fueron las opciones de estilo de
que de la traición sexual de su marido. vida más comunes. En un matrimonio tradicional, la inter
Le costó varios años de psicoanálisis doloroso el darse dependencia simbiótica entre los miembros de la pareja era
cuenta de que no era su marido sino ella misma quien había posible por basarse en una división del trabajo según los ro
estado traicionando su yo emocional. La relación con su ma les sexuales. Era necesaria bastante o una total inconsciencia
rido era civilizada y decente, pero no estaba enraizada emo psicológica para que los miembros de la pareja se proyecta
cionalmente ni tampoco era satisfactoria. Ella no era capaz de ran recíprocamente sus arquetipos contrasexuales. La mujer
dar a su marido lo que una mujer corriente podía darle. Su edu proyectaba casi todos los aspectos de su ánimus en su mari
cación le había proporcionado preparación intelectual, pero no do y en sus hijos. A cambio, ella se hacía cargo de la pro
sabiduría y percepción interna de ella misma o de su hombre. yección del ánima de su marido (y la de sus hijos) en sus as
Su ego no podía beneficiarse del bien educado ánimus, por pectos positivos, y a veces también en los negativos.
que éste no estaba conectado con su naturaleza emocional, que Este tipo de matrimonio podía crear fácilmente un terrel
había irrumpido a través de su crisis matrimonial. no de base para que una mujer sacrificase gradualmente su fe
¿Por qué las mujeres como Elisabeth necesitan identifi minidad natural en el sentido arquetípico. Su total incons
carse con el ánimus racional y profesional, incluso a costa de ciencia sobre su propio ser interno exigía proyectar el ánimus
perder sus raíces femeninas? Yo creo que fue una defensa ne afuera. En comparación con las mujeres de las generaciones

167
¡ de sus hijas y de sus nietas, estaba más enraizada en su ser fe.. de sus obligaciones maternas, tiene la oportunidad de volverse
J menino, pero era menos consciente de su lado masculino in consciente de sí misma en un sentido espiritual más profun
¡ terno; y carecía de la ayuda necesaria de su ánimus para de 1 Sin embargo, muchas mujeres en el pasado no aceptaron
do
sarrollar su potencial humano total en todos los aspectos, ete desafio e hicieron todo lo que estaba en sus manos para
incluido el espiritual. permanecer inconscientes.
Muchas mujeres de esa generación se quedaron ancladas Helen, una mujer de cuarenta y seis años, estaba casada
en una vida material en la que las cuentas bancarias conjun con un prestigioso abogado y pasó más de veinte años edu
tas, las casas, los automóviles -incluso la familia misma- cando a tres hijos y siendo una esposa colaboradora y eficaz.
se convirtieron en posesiones que eran sinónimos de sus Tenía todo lo que una mujer puede desear: un marido con éxi
identidades. Su seguridad económica y los logros des mari to, hijos sanos y completos, una bonita casa, y la satisfacción
do e hijos llegaron a ser esenciales para su supervivencia de “poseer” todo esto. Pensaba que era una mujer afortuna
psicológica. da, hasta que hace cinco años descubrió que su marido tenía
La implicación de dicha dependencia respecto al mundo una aventura amorosa. Decidió no hundir el barco, sino que
de los hombres es verdaderamente muy grave. A causa de si se limitó a castigarle cambiándose de dormitorio. Meses des
glos y siglos de represión, el aspecto negativo del ánimus se pués, su marido pidió una separación legal. Ella se quedó
hizo casi tiránico. El poder del patriarcado contra el que las sorprendida de que él no estuviera agradecido por la tole
mujeres luchan hoy día, en parte podía mantenerse única rancia que ¡ella había tenido con su traición! Como vengan
mente gracias a dichas proyecciones negativas. Es más, el tipo za, se negó por las buenas a su demanda. Su marido siguió
de feminidad que estas mujeres representaban era muy pri adelante, iniciando un procedimiento de divorcio. Helen no
mitivo y conservador. Este es el arquetipo Femenino en su tenía más alternativa que oponerse. Contrató al mejor abo
forma más arcaica, en la que el instinto se resiste a cual gado especialista en divorcios del estado y luchó ferozmen
quier precio a su transformación espiritual. te; consiguió ganar la mayor parte de las propiedades comu
Una mujer necesita la colaboración de su ánimus en sus di nes y una pensión considerable, que sacrificó un año después
versos aspectos para que le ayude a transformar su feminidad al casarse con su abogado, cuyos ingresos eran bastante más
instintiva en metas más creativas y espirituales. En este pro elevados que los de su primer marido.
ceso, el ánimus se desarrolla y sirve al ego en lugar de con Al año de su segundo matrimonio, su nuevo marido bus
trolarlo. caba un terapeuta. El la animaba a “salir fuera y conseguir un
Desde el punto de vista psicológico, un matrimonio sim empleo o cualquier cosa”, pero Helen no se sentía estimula
biótico puede durar sólo hasta un punto. Cuando los hijos cre da a hacerlo. Estaba contenta con su vida y no podía ver por
cen y dejan el hogar, y cuando marido y mujer llegan a la mi qué él era tan infeliz. A los pocos meses, su segundo marido
tad de su vida, ya no puede funcionar la estructura simple de se marchó. Pocos años después a Helen se le produjo un en
las proyecciones ánima-ánimus. En esta etapa de la vida, la fisema crónico, a pesar de que nunca había fumado.
función del arquetipo contrasexual es guiar al ego a reco El ánimus de Helen no estaba disponible para aportarle
nectar con el Ser. El ánimus quiere ser interiorizado en lugar ninguna toma de conciencia, a causa de la negativa total de
de ser proyectado afuera. Así, cuando una mujer es liberada su ego. El ánimus se convirtió en un complejo negativo gra

ve, que encontró su expresión en una enfermedad respirato Humphrey Bogart y Gary Cooper eran hombres agresivos
ria crónica. Es bastante probable que este complejo incons que hacían la corte a mujeres sedientas de amor y depen
ciente de ánimus colaboró con su feminidad igualmente ne dientes (aunque inteligentes). Este ideal masculino —agresi
gativa, para crear esa destructividad en sus relaciones y en su vo, aventurero y físicamente fuerte, aunque al mismo tiem
salud física y mental. po amante romántico y padre-marido proveedor- ha sido
El caso de Helen es un ejemplo extremo de falsa identidad muy extendido hasta que llegó la generación actual.
creada por la inconsciencia total del ego. También muestra lo A finales de los años sesenta, los hombres educados con
fundamental que es el papel del ego en desarrollar el poten forme a este modelo empezaron a encontrarse en matrimonios
cial del propio ánimus. Si una mujer se niega a reaccionar a y relaciones de pareja con mujeres que ya no parecían nece
los desafíos de la vida, pierde su oportunidad de hacerse sitar este tipo de machismo en sus hombres. La toma de con
consciente. Se puede así comprender más fácilmente por qué ciencia de las mujeres de su propia masculinidad empezó a
las hijas y nietas de mujeres como Helen rechazaron sus mo hacer disminuir el poder de los hombres. A los ojos de éstos,
delos de roles. El acto de rechazo demuestra en sí mismo las mujeres modernas no sólo se habían vuelto menos feme
una conciencia elevada. ninas, sino que también se habían hecho más competitivas en
Aunque los dos maridos de Helen mostraron algo de con el terreno laboral y de los negocios. En otras palabras, los7
ciencia, en general, durante los últimos cincuenta años, la hombres continuaban proyectando en sus mujeres el ánima in
toma de conciencia de las mujeres superó con mucho a la de consciente y dependiente. Así, el ánima sexual e intelec
los hombres, simplemente porque éstos disfrutaban de una po tualmente apasionante sólo podía ser portada por una dama
sición social más privilegiada y por lo tanto tendían a estar sa o una mujer inasequible.
tisfechos de sí mismos. La vida ha sido menos problemática Este problema del paso de una fase a otra en el desarrollo
para los hombres hasta hace una o dos décadas, en que em psicológico es una de las principales razones del aumento del
pezaron a venirse abajo los estereotipos masculinos. índice de divorcios en este país. En las décadas de los años
setenta y ochenta, las mujeres empezaron ya a retirar de sus
maridos la proyección del ánimus profesional-proveedor, de
El efecto sobre los hombres jando confusos a los maridos tradicionales. Un reducido nú
mero de ellos han podido incluso buscar alianzas homose
Los hombres norteamericanos han sido educados tradi xuales en las que todavía pueden seguir asumiendo las
cionalmente según el modelo del “tipo duro y agresivo” que proyecciones de macho poderoso por parte de sus compañe
lleva a casa el pan y proporciona seguridad social y econó ros, que a su vez necesitan vivenciar el ánima, como una
mica a su familia. Este ideal masculino refleja la imagen de identificación que hunde sus raíces en la psicología personal
un caballero moderno o de un cowboy aventurero dispuesto y familiar.
a atacar al enemigo para salvar a la doncella en apuros. La mujeres que retiraron de sus maridos y amantes la pro
Otro de los ideales del hombre norteamericano es ser un yección de su ánimus empezaron a identificarse con el ánimus
amante romántico, otro rasgo heredado de los caballeros me activo e independiente. Esta identificación hace casi innece
dievales. Los ídolos de Hollywood como Clark Gable, sana la relación con los hombres, a menos que éstos estén dis

puestos a hacer los papeles de “esposa” en su sentido tradi cuando están al final de sus cuarenta, o en sus cincuenta, se)
cional. En esta estructura, algunas mujeres profesionales es enfrentan a un desafío más serio que el simple síndrome de1,,
tán confortablemente casadas hoy día con maridos “amas-de dyío”. En este sentido, sus crisis de haber llegado a la
casa” que, a su vez, parecen necesitar vivenciar una parte mitad de la vida no son diferentes de las de los hombres: el
de su ánima. desafío consiste para ambos en encontrar el verdadero Yo.
Nancy, una mujer casada de cincuenta y seis anos, vino a
la terapia a causa de sus continuos dolores de cabeza, que nin
La epidemia del divorcio guna cantidad de medicamentos parecía eliminar. Sus médi
cos, después de hacerla pasar una concienzuda serie de prue
¡ El divorcio parece inevitable si no se produce el cambio bas, no encontraron ninguna causa orgánica para su síntoma
L de papeles que acabamos de mencionar. El divorcio iniciado
1 por las mujeres de la última generación indican la retirada de
y le sugirieron una psicoterapia.
Aunque era un ama de casa, Nancy hacía cada cosa en su
la proyección del ánimus sobre sus maridos. En consecuen vida como un lógico hombre de negocios, con lo que ella
cia, estas mujeres se beneficiaron considerablemente al des llamaba “una comprensión estructural” del problema. Cada si
cubrir su propio ánimus, e integraron con ilusión algunos tuación en su vida era un problema a resolver. Estaba perdi
\ aspectos del mismo. Mi cliente Martha, descrita al principio da porque no sabía cómo resolver ese “molesto e inoportuno
de este capítulo, era una de ellas. A pesar de su avanzada dolor de cabeza”, ni tampoco lo sabían los mejores médicos
edad, se le hizo imperativo separarse de su marido para re especialistas.
cuperar las proyecciones de su ánimus. Escuchó a sus ins A Nancy le costó más de tres años admitir que, a pesar de
tintos y tomó la decisión consciente de sacrificar su seguri • su bien preservada personalidad de madre-esposa feliz, no es
dad económica y social. Sentía una fuerte necesidad de taba nada feliz consigo misma. Pero no podía averiguar por
desarrollar su ánimus hacia su propia meta espiritual defini qué, y esto le hacía todavía más infeliz. Sorprendentemente,
tiva: guiar su ego hasta el Yo, el arquetipo Femenino en su ni la aceptación de este hecho fue seguida por una gradual de
vel transpersonal. saparición de sus dolores de cabeza. Fue necesario que pasara
Sin embargo, a menos que una mujer sea consciente de su un año más antes de poder admitir la conexión simbólica en
situación psicológica, por muchas actividades independien tre sus dolores de cabeza y su control racional de cada uno de
tes que lleve a cabo, no puede resolver el problema de la in los problemas de la vida.
tegración de las cualidades proyectadas de su ánimus. Tiene En los sueños de Nancy aparecían frecuentemente hom
que tomar conciencia de por qué necesitaba abandonar la se bres con heridas en la cabeza. En uno de los sueños, un joven
guridad de su vida personal, para entrar en el vasto mundo de era decapitado en una escena ritual. En otro, cabezas corta
la aventura y del peligro. Para una mujer como Martha, este das de mujeres rodaban por el suelo de la cocina. A partir de
primer paso implica que muy en lo profundo estaba conectada estos sueños, empezó a comprender que tenía que darse una
1 con el Yo, que le guió a tomar el riesgo externo en aras de su
i\ propia individuación. Por esta razón, las mujeres que han
especie de sacrificio de su manera habitual de pensar. Más tar
de empezaron a aparecer figuras femeninas. Algunas eran
sido esposas y madres sumisas, y que quieren divorciarse muy primitivas y “sexy”, la clase de mujeres que ella mira-

ba por encima del hombro. Nancy tenía muchas resistencias El papel del feminismo
a reconocer estas figuras como partes de sí misma. Su com
prensión racional no la podía ayudar en absoluto. Este periodo Mientras que el matrimonio convencional es una antigua
de análisis fue una fase dolorosa. Muchas horas de lágrimas institución que sirve a una fase de evolución del ánimus/áni
de vergüenza y de humildad la hicieron aceptar finalmente su ma, los movimientos de las mujeres constituyen innovacio
lado sexual y más reprimido, su potencial no vivido. Su úl nes bastante recientes. El feminismo de hoy día tuvo sus pri
timo sueño antes de que dejara el análisis, después de cinco meras versiones en las sufragistas y en las organizaciones
años, fue muy iluminador. políticas que intentaban obtener derechos jurídicos y econó
micos para las mujeres.
Estoy paseando por un camino estrecho en los límites de Durante los años sesenta, el movimiento feminista pro
una ciudad desconocida. Parece que estoy siguiendo a una mu porcionó un sistema de apoyo a las mujeres que vivían a la
jer que camina varios metros delante de mí. Ella me conduce a sombra de los hombres. Por primera vez en muchos años, las
una casa oscura en la que entro. Allí, se pone frente a mí, y que mujeres norteamericanas pertenecían a una hermandad ba
do sorprendida de ver una antigua compañera de mis años de co
legio que era famosa por sus escapadas sexuales y a la que ex sada en la cooperación en lugar de la competitividad. Las
pulsaron por algún escándalo. En el sueño se me acerca a la cara amas de casa y las mujeres sin profesión podían expresarse
y toca mis sienes con cariño. Sus dedos parecen fríos y curati con más libertad y empezaban a tener confianza en sí mis
vos. Me despierto con una sensación de paz. mas. Estaban aprendiendo a existir sin tanta aprobación mas
culina.
Conectó esta figura en forma de alumna expulsada del cole Sin embargo, su confianza degeneró muy pronto en una
gio con la parte curativa de sí misma. Para Nancy, la identi actitud de ánimus, al menos en algunas mujeres, y algunas fe
ficación con el ánimus tenía que disolverse antes de que pu ministas empezaron a emplear su energía en luchar contra el
diera conectar con su lado curativo femenino. patriarcado. 2re.fodn la ramp ipdiqaL4el movimiento adop
Las emociones dolorosas y de vergüenza que Nancy tuvo actitud de las amazonas, combatiendo a los hombres
que vivir antes de poder volver a conectar con su sexualidad con armas de hombres. Desde el punto de vista psico1ó’
/
son esenciales en cualquier transformación psicológica. Las iiien haber esP’do epwbptiendpl ápjmijs tiránjco dentro
mujeres actuales que emulan el viaje heroico de separación de llas. Más adelante, algunas de las líderes sensibles se
la madre tienen muchas dificultades en entrar en sus emocio dieron cuenta que conseguir que el gobierno aprobara algu
nes, especialmente en las emociones dolorosas. ¿Cómo pueden nas leyes de derechos a su favor no parecía satisfacer sus
estas mujeres volver a una feminidad más consciente? necesidades más profundas.
La respuesta es compleja, porque mujeres diferentes pueden necesádad djgs mi.ieres de los años ochen
tomar caminos diferentes, según su personalidad y psicología. ta y noventa es liberarse de la identificación del ánimus y vol
Algunas, como Nancy, deben hacerlo de manera individual d re rimida heiiA1io
con la ayuda de alguien que les guíe. Las mujeres más extro
vertidas pueden unirse a grupos de apoyo o al movimiento de
( Vfáciect
que an logrado
terno, necesitan
competir
volver a
con
casa
los
-a
hombres en el mundo ex
su casa interna- para ali
las mujeres para beneficiarse de las experiencias de las demás. mentar a la mujer interior. Lo que Nancy tenía que hacer a mi-

tad de su vida, cada vez más mujeres están empezando a Restablecer el equilibrio
sentirlo ya después de cumplir los treinta años.
Janice acudió a la terapia porque su compañera lesbiana He intentado sentar las bases de las condiciones sociales,
la dejó de repente por un hombre. Esto destrozó a Janice; se culturales y psicológicas que llevan a las mujeres hacia una
gún lo explicaba ella, su compañera no sólo había traiciona nueva conciencia. Dados los potentes valores atribuidos al es
do la relación que mantenían, sino que también había trai tilo masculino en esta cultura, las mujeres que encuentran de
cionado el ideal que compartían. Ellas habían abrazado la nigrantes los modelos de feminidad de sus madres no tienen
causa del feminismo de desarrollar la intimidad con otras casi otra opción que la de seguir el estilo masculino de ra
mujeres. Le costó más de dos años darse cuenta de que esta cionalidad. Para contrarrestar la existencia muy personal,
ba herida por haber perdido a la hennana que le sustentaba -a subjetiva, y casi totalmente dependiente de sus madres, abra
la madre que nunca había tenido-. Mediante el análisis de in zan el modelo colectivo de independencia económica, me
finidad de sueños y la admisión gradual de sus necesidades diante una identificación inconsciente con el ánimus profe-,
internas, Janice vio hasta qué punto su ser femenino interno sional. Mientras se vivía el ánimus racional y activo, el)
estaba pidiendo desesperadamente atención. Hasta entonces, ánimus negativo y su aspecto tiránico y controlador perma-
ella se lo había proporcionado a través de la relación con su necían inconscientes y, por lo tanto, eran proyectados al mun-/
amante. Por eso, la pérdida de su compañera le ofrecía una do externo. Al mismo tiempo, estas mujeres carecían de insf
oportunidad de volver a ella misma. tinto femenino que las guiase de vuelta hacia sí mismas.
La feminista autoconvencida corre el peligro, más que No obstante, a causa de los límites de la conciencia mas
las demás mujeres, de no ver su imagen interna, porque pue culina, las mujeres han empezado recientemente a cuestionar
J de justificar la extroversión de sus actividades con el com sus vidas y a tomar nota de sus insatisfacciones de una ma
“\ promiso respecto a valiosas causas políticas. La rama menos nera más auténtica que la generación que las precedió. Ini
radical del movimiento feminista sabe de manera intuitiva que ciadas ya en la acción, también están más preparadas para ha
¡ el problema no es un problema externo. Las mujeres que la cer algo respecto a sus necesidades más profundas. Las
forman están más interesadas en la conciencia femenina que mujeres de esta generación saben que el itinerario de una
en usurpar el dominio masculino. Algunas son académicas y mujer hacia la conciencia debe ser diferente al del hombre,
escritoras; otras son activistas que participan en marchas si cuyo mito de matar el dragón (por ejemplo, separarse de la
lenciosas para protestar contra las bombas nucleares y la madre) se ha quedado ya obsoleto. El peligroso dragón, o el
contaminación de la tierra. Estos medios de protesta, simbó aspecto negativo del arquetipo Femenino, no puede ser ani
licos y pacíficos, contra las decisiones políticas que pueden quilado; está escondido en el interior de toda mujer y de
destruir la ecología y la psicología de la humanidad, pueden todo hombre, aunque de maneras diferentes.
ser emocionalmente eficaces. Tocan una cuerda profunda de Cuando no se acepta conscientemente esta destrucción
sentimientos, que se manifiestan en el arquetipo Femenino, reprimida en el interior de la psique en mujeres y hombres,
en el que los procesos internos vienen definidos por el equi corre el peligro de acabar con nuestra civilización, con tal sed
librio natural y el movimiento cíclico. • de venganza, que ningún héroe sería capaz de detenerlo. El
único modo de calmar al dragón es reconocer que formamos

puiir1eza.
te en lugar4jflte riuchar CQntrae1lay c.ontrDlarla..
EFaso de algunas mujeres (como en los casos de
Nancy y Janice descritos previamente), este reconocimiento
es doloroso, porque se inicia con la vergüenza de admitir
que el oscuro arquetipo encolerizado interno ha sido descui
dado durante mucho tiempo. Y sin embargo, debe ser reco
nocido, porque sin la ayuda de la naturaleza femenina, el
ánimus bien desarrollado de una mujer no puede funcionar 8. LA RUPTURA DE LA
como guía hacia su realización sexual, creativa y espiritual.
la vida real, una mujerpuede disceijl enfpq IDENTIFICACIÓN CON
equilibrado entre esQa.dDs arquet jpQs,dentLQ 1aç
a iio es impulsada’ a la accion, a la palabra,Q al manten EL ÁNIMUS PARA
miento de un ideal colectiyo, nte&de.darsecueni&de, çups,
iWque realmente valora para sí misma. Cuando su naturale ENCONTRAR LO FEMENINO
za femenina no es anulada por su ánimus, experimentará un
sentimiento de paz y de intimidad consigo misma. En este
punto, incluso las relaciones externas pueden no ser esen por Jane Wheelwright
ciales, porque tal vez ya no necesita proyectar su ánimus o su
feminidad fuera de sí.
Si es claro que lo Femenino violado y reprimido es lo La eminente analista junguiana Jane Wheelwright se hace
que está alzándose contra nuestra civilización unilateral- eco de las tesis de Manisha Roy, cuando señala que sólo la
mente limitada, a las mujeres les corresponde una gran res mujer que no está dominada por su ánimus puede tener un
ponsabilidad para establecer el equilibrio. Yo creo que una efecto curativo en la sociedad. Para llevar a çpboestaevo
mujer sabe más que un hombre acerca de lo que es un ver çj’lóica,las mujeres neçsitan recuperar el “ego
dadero equilibrio. Sin embargo, antes tiene que ser una mu biologjço femenino “
jer en su cuerpo y en su alma, así como en sus roles sociales Sin embargo, existen pocos modelos de esta Feminidad
y culturales. Además, necesita reconocer que su poder pue Consciente para inspirarnos hoy día. Muchas mujeres que
de tanto crear como destruir. Sólo entonces puede tener una dan atrapadas en su papel de “niujer-ánirnus’ con lo Mas
relación significativa con su ánimus, con los hombres y con culino inconsciente reinando como un tirano interior y re
la sociedad. Entonces, a su vez el ánimus será liberado de su creando el drama de la sociedad patriarcal. Wheelwright
posición controladora para servir a su ego femenino, de ma llama a esto ‘yjyjrjuiajij.e.4ra Así, vivimos el rol de la
“.
nera que la mujer pueda realizar su individualidad y su des /çüa ÇQZLJQ FçmennQ inçpnsçente que carca
“,
tino, creando la emergencia de una nueva conciencia. con las rQyccionesde los hornbrç. —Madona o ramera—.
Dados estos extremos, existe muy poco sitio para un estilo de

feminidad consciente y escogido que incluya lo Masculino in

terno en su lugar apropiado.
Por esta razón, Wheelwright dice ue con frecuencia es
necesario que suceda algún tipo d ruptuy para que una mu
jer cambie su realidad. Puede que sucnefpo reaccione con sín
tomas psicosomáticos, o tal vez sufra una Tbis posparto
1 La ruptura de la identificación con el ánimus
Una niña nacida dentro de una sociedad que cree en este

ideal, incluso aunque sea sólo implícitamente, se verá inevi
tablemente afectada por ello. Si las personas están marcadas
desde su nacimiento, lo mismo que lo están los animales, la
niña tendrá poco que decir acerca de su evolución. Su futu
ro depender de la influencia masculina.
Según la anaf ühgUiana Florence Wiedemann, muchas
después de dar a lllEQuizá tenga dificultades a largo plazo 2
para tener re ¿ciones íntimas con los hombres. Cualquiera jóvenes de menos de treinta y cinco años que acuden a la te
de estos problemas personaTes puede traerla a la terapia, que rapia son víctimas en sus sueños de personajes masculinos. Si
posteriormente le ayudará a dar su próximo paso evolutivo. esto es así en general, y yo
Wheelwright expone las ventajas de trabaJair tamos por qué el ideal positivo de la influencia patriarcal, el
cunstancias con una mujer analista o unpicoterapeuta. venerable anciano, es negativo hasta este extremo y qué po
Afirma que la mayoría de los hombres rfozzqríÓn los pa demos hacer sobre ello, si es que podemos hacer algo.
trones que su cliente está intentan Quperar y serían inca Las mujeres que están dañadas internamente y se sienten
paces de ayudarla a descubrir su. ego femenino enterrado. pueden no obstante ser las afortunadas, porque
Durante este periodo de tiempo, una mujer terapeuta o tutora erátL obligadas a desvelar supotencia1 femenino heredado,
que sea consciente de sus propios aspectos Masculino yj’e como el que ue con la ayuda del aifl La única/
menino internos puede ser un regalo para cualquier mujer esperanza para las mueres que se encuentran en esta situa-f
que esté buscando un equilibrio.intejior más armónico. ción es la de fende e con fuerzas femeninas, si es que ha
Jane Wheelwright practica el análisis que aprendió con Es el único modo en
Carl Jung en los años treinta. Es miembro fundador del Ins que pueden poner en su sitio a los personajes masculinos de
tituto G. C. Jung de San Francisco y autora de Death of a Wo sus sueños o imaginados, es decir, al icioeego bioló-j
man y Ranch Papers. gico femenino.
Por çgo biologco femenino me refiero al centro de con
oposiciónTilias
veces se toma por centro, pero que en realidad es el ideal so
)cial de lo que una mujer debe ser. También difiere del ego fe
Creo que sólo lo Femenino no contaminado -una mujer no menino que está contaminado por un componente masculino
• dpminada po1Jili— puede equilibrar el ecesivo ele interno que está fuera de lugar. En resumen, el ego emni
mento masculino de nuestra sociedad actual. uo. hiológico_normaLtiene suaíces en el ser de la mjjr. La
La palabra pg jarcado proviene de la palabraptrz:ça, mujer que habla o actúa conforme a sus propias convicciones
que a su vez, según el Diccionario de Oxford, está asociada y no duda en contradecir, como mujer, lo que le parece equi
en sus orígenes a grupos religiosos. Se refiere al ideal del ve ¡ vocado o incompleto de la sociedad dominada por los hom
bres (o de la psicología, la religión, o cualquier otro campo
nerable y ancia.i Ésta es la
nuecidEL Para la mayoría de los occidentales es Dios.

1 de interés) está funcionando conforme a su auténtico centro

Volvernos a hacer de padres de nosotras mismas La ruptura de la identificación con el ánimus
femenino de conciencia. Mi definición del ego de la mujer treinta y cinco años aproximadamente. Después de esta edad,
biológica incluye también, y trasciende, su potencial repro puede que piensen que son demasiado viejas para jugar el pa
ductivo físico. Puede estar implicado en la creatividad inte pel de hijas y que, por primera vez, empiecen a estar perple
lectual, espiritual o artística que, con frecuencia o quizá jas sobre sí mismas.
siempre, se manifiesta en las pautas del campo físico. Por Antes o después, puede que también vean que su trabajo
ello, para encontrarse a sí misma, la mujer madura de hoy día en la vida, diseñado para ajustarse al estándar masculino,
tiene que actuar sobre la base de que es diferente a los hom sólo ha empleado la it1 o menos de su potencial psíquico,
bres de manera innata, pero de que es capaz, porque está es decir, de su componente arquetípico masculino. La otra
sostenida por su componente masculino interno, de llevar a parte psíquica, que es más importante, su ego biológico fe
cabo acciones tan bien como sus socios masculinos y, en al menino, normalmente enraizado en el aspecto femenino del
gunos casos, mejor que ellos. Sus realizaciones, sin embar Yo, y alimentado idealmente por una experiencia positiva
go, tendrán una cualidad más humana. de la madre o de la persona que le sirvió de madre, ha teni
, Estas realizaciones serán inhumanas, si han sido hechas do muy poco que decir acerca de cómo tenía que vivir y tra
bajo la dirección del atributo interno masc o de la mujer, bajar. Estas mujeres tienen casi que descubrir que han esta
es decir, de su ánimus. Si el ego femenin no din de do viviendo una mentira y que, por primera vez, tienen una
Psu psique a la figura-m€eniina, la mujer sera aparada por
el componente masculino interno y perderá su orientación
oportunidad de experimentar suntica identidad básic.
Sin embargo, más importante todavía es que habrán adquiri
PQ!• do capacidades invalorables imitando a los hombres que han
Son cuestionables nuestros esfuerzos para borrar las di admirado.
ferencias entre mujeres y hombres mediante el concepto de La “hf a de la madre”, por otro lado, tal vez no tenga pri
la androginia. Si tenemos alguna vez que dar respuesta al sén casars Puede que se sienta desfasada porque la ma
dilema del mundo, nosos las mujeres tenemos que ser di- yoría dT mujeres, siguiendo las líneas maestras patriar-
ferentes a los hombres.\Si los hombres no pueden detener cales, se concentran muy pronto en las relaciones con los.
hombres. Las “hijas de la madre” pueden permanecer solas,)
4)1 nuestra precipitada carrera hacia la destrucción, ¿cómo po
demos las mujeres hacer lo diferente su con si deciden hacerlo. Es más, habiendo recibTÍiaklod
“
ducta y manera de pensar sus madres, pueden, si creen en sí mismas, ser las puntas d
J Hemos de sospechar que los problemas derivados de la lanza del esfuerzo de la mujer.mQ4rn para conocerse a s
manera de pensar patriarcal están muy extendidos a causa del misma. Pero, a menos que, antes o después, vivan la expe
fenómeno de las improntas. Las mujeres que parecen ir bas rieiPícia del padre o del padre suplente, puede encontrarse en
tante bien son tan normales como la sociedad espera de ellas desventaja respecto a los hombres.
que lo sean; pero no estando lo bastante mutiladas como para Las fases de la niña en las que se comporta como un chi
pedir ayuda, pasan inadvertidas durante la primera mitad de si no son muy interferidas, pueden ayudar a las mujeres
( co,reunir
sus vidas. Son las mujeres jóvenes que, habiéndoseles per a la energía necesaria para responder instintivamente
mitido vivir el papel de’jja el are”, parecen como si [a las demandas masculinas. Como chicas en competencia y
funcionaran adecuadamente hasta que alcanzan la edad de camaradería con muchachos de su misma edad, tienen más

Volvernos a hacer de padres de nosotras mismas La ruptura de ki identificación con el ánimus
oportunidades de reconocer sus talentos básicos. Puede in Estas mujeres no se dan suficientemente_çjnta de que se
cluso que adquieran el gusto de la independencia. Cualesquie han dedicado ante todo a desarrollar sus cjios, algunas de
ra que sean sus experiencias tardías de lo Masculino, al arries ellas lo han hecho hasta tal punto que se han identificado
garse en el mundo patriarcal de los hombres (o en lo que queda con los mismos. No son conscientes de que el fueroque
de él), son a veces las que se hallan en la peor situación. han puesto en éstos es equivalente al de un hombr que pasa
Si estas mujeres recurren a la ayuda de un terapeuta, tien la mayor parte de su tiempo relacionándose socialmente. El
den a escoger a un hombre. La comprensión que éste tiene de prejuicio social colectivo, sin embargo, evita en general que
las mujeres, con la ayuda de su ánima, no hace sino pospo los hombres caigan en esta gran trampa. Para las mujeres no
ner la confrontación de la paciente con una nujer qu.pieda existe una orientación básica equivalente.
llenar la. experiencia que le falta dela,id Un respetado Este tipo de mujer tal vez desarrolle síntomafísicos ame
colega afirmaba que los hombres analistas podían “hacer de nazantes sea enviada por su médico a un analista. O quizá
‘
madre” a clientes femeninas. Pero añadía que un hombre no encueitre una amiga mayor que, a partir de su propia expe
puede comportarse como una mujer. Para mí, esto significa riencia, vea lo que le está ocurriendo. El cuerpo de la mujer,)
,que un hombre no puede servir de ayuda para revelar el ego hogar del_pncial femenino, sEV&j si ella es mental
instintivo de la mujer. ELdesirrollo del e.g-*ige,..aLmenos mente peracft 7Su yo masculiiii Irabajador, concentrado’
/ temporalme.te upjçntifiçacióii. Un hombre no pertenece en su cabezi y en su voluntad, debe ser tomado por lo que es
) 1
‘._J al género adecuado para ello. y puesto en su lugar.-.
Si este tipo de mujer se casa, a pesar de su orientación’
7. Estas mujeres que han estado atrincheradas en actividades
masculina, y tiene un bebé antes de adquirir una sabiduría /
masculinas, tal vez dos tercios de su vida o más, se han o!
J vidado del error básico de sus actitudesflçhan encontrado respecto a sí misma, puede correr el riesgo de ser contami-(
las fuerzas deu egnin7El componente masculino in nada por el arquetipo instintivo y todavía inconsciente del’’
-. terno, apoyado por el prejuicio social, ya no es el realizador parto cuando llega el tiempo de dar a luz. Si se ha concen
trado principalmente en tenei(éxiøs en el mundo de loj’
(y-y que era en su origen y, sin la fuerza del ego femenino para de- hombres y en competir con ellos, no habrá respetado sufi-’
/ safiarlo, se convierte por el contrario en el tirano.
Las mujeres, al ser brillantes y capaces a veces tiéticas y cientemente sus instintos femeninos, que saben todo acerca
con más frecuencia, dotadas mentalmente para competir con U decómodaraluz.
los hombres en nuestras instituciones, han actuado bajojalsas .
i ¡ilbi instinto y el arquetipo son dos aspectos
percepciones de sí mismas. Puede que se encuentren atrapa del mismo fenómeno. La satisfacción del arquetipo del parto,
das para toda la vidaiiiin sistema cuando no ha sido expresada poco a poco a lo largo de la
Por primera vez, a pesar de tener éxito conforme a las pautas vida de una mujer y con la ayuda de una relación de confian
masculinas de la sociedad, y de encontrarse incluso en el tra za con la madre, le dominará en el momento de dar a luz. 5
bajo que le va bien, puede que una mujer haga un alto a mi ha esperado lo bastante a lo largo de su juventud para expre
A\
& tad de su vida (o quizá aiflçs), para preguntarse a sí misma por sar algún día su potencial reproductor, habrá drenado sufi
ciente satisfacción para quitar fuerza al arquetipo en tanto
O qué no es feliz con suCt. Mi respuesta sería
4
sona triunfó por ella, a siber, su componente asculino.
otra per
que amenaza.

Por otra parte, si sus ener ías están demasiado enfocadas Este tipo de mujeres que admiran a loØnbrpodero
sobre las jcines rofesional , la e arquei.p1 a sos y que no tienen a ninguna mujer cercá jiára impresio
r oidescuidada sfcumu1aá como una uerza abru narlas, sienten que el mundo del hombre la iiaih3riTifiu-
ma ora el inconieiite y bloqueara su ego15itico,ue la hacia la. naturajeza .av.entureracoida.queeU.a1a&naçido.
ha estado subdesarrollado a causa de la ausencia deErotec Los hombres con influencia han captado siempre su atenJ
cion y cariño materno&durarn su proa T áñiUna vez ción, a causa de su potencial extraordinario para triunfar
que el ego ha sido eliminado por el impacto arquetípico del -hasta tal punto que sus ideales se hicieron cada vez mas
parto, todo lo que no ha sido vivido y otros substratos in masculinos-. Al final, a medida que sus contactos externos
conscientes brotan como una corrien desordenada. En otras iban perdiendo misterio, estos ideales activaron y desarro
palabras, la mujer sucumbe a la bsicosi deipçspaxto. Las llaron sus cualidades potenciales internas masculinas, como
fuerzas que irrumpen han sido disidas por una situación si éstos hubieran sido incorporados desde fuera. En su psique,
externa que corresponde a una presión interna. evolucionaba una fuerza masculina más poderosa, a la que un
Conozco a una mujer que constituye un buen ejemplo del hombre no podía aproximarse. El cambio sucedió tan gra
problema que acabamos de plantear. Cuando nació su bebé dualmente que ella no era consciente de lo que estaba suce
tuvo un cambio fundamental de actitud interna que debió diendo. Su principal síntoma, que ella no podía entender, era
haçrse.prQducido mucho ant s.La doble presióninia y que tenía dificultades en cijççtar con los hombres de su
extern, se le hizo abrunadQLa. se sumergió en un estado in edad. Se había vuelto demasiadcti a, sabía dema
cbn’iente durante un corto periodo de tiempo. El sueño de siado, generalizaba hasta tal punto que los hombres maduros
advertencia de esta mujer, la primera indicación que tuvo de que la rodeaban la evitaban. Al final se casó con un hombre
que estaba viviendo una vida errónea, fue sobre un hombre in que más tarde la ayudaría, pero que al principio le parecía
visible que sólo dejaba tras él sus huellas. Ella se despertó lle sólo una elección sin entusiasmo. Los niños vinieron a con
na de terror. Pero no tenía a ninguna persona cercana que le tinuación, y el episodio devastador ya mencionado la sobre-
explicase que su ánimus, su figura interna masculina;efa in pasó. Sufrió una psicosis posparto.
visible, totalmente u n4íeiEite de ella y que, como un la Durante el episodio psicótico el ánimus volvió a ser otra
drón, podía despojarla había convertido en un parte di vez la figura central. Cuando ella empezó a recuperarse de
vidida de su psique. Tenía que empezar a reconocerla para manera espontánea, contó a su analista un sueño: Ella esta
evitar el desastre. baformando parte de una fila de chicas que todavía no ha
Pero incluso aunque hubiera habido alguien para decirle bían cumplido los veinte años. Pero en realidad ella tenía
algo acerca del ánimus, no hubiera probablemente escuchado. cerca de treinta. Un hombre, que también tenía alrededor de
Cuando el ánimus es el que tiene eiQ) el ego de la mu treinta años y que llevaba un rWe, recorrió la fila de estu
jer está probablemente demasiado suprimido como para hacer diantes apuntándolas con su rifle hasta que llegó a la soña
caso de consejos ajenos. Además, el ánimus evita ser detec-) dora y disparó. La bala le entró por la frente y ella se con
tado cuando está en libertad. Sólo viendo al ánimus como lo ‘ virtió en un fantasma.
que realmente es, en su lado positivo y negativo, puede una/ Recordaba hasta qué punto estaba extrañada de lo mu
mujer atraerlo a su lado para ayudarla y no para dañarla. J cho que quedaba de ella a pesar de estar muerta. Era la pri

mera vez que se daba,çuenide que después de que su cabeza, ayuda de su analista masculino, de que sus expectativas no
simbolo de la del anirn, habia sido inutilizada, toda son humanas, sino que están contaminadas por un poder pro
vía quedaba un seT1liiiíiáho entero. En este sueño el ánimus pio que reside en su psiqueJjççpnocer como suyo el p
era a la vez destructivo y constructivo. Según el sueño, el áni der que atribuye al analista, odría más adelante realizar sus
mus, aunque le había forzado a sumergirse en el subcons ropi s as iraciones endencia. Podría)
ciente disparándole en la frente y matándola, también se ha
bía eliminado a sí mismo de su posición dominante. La
ruptura parecía el camino natural para producir un equili
brio en la psique de la mujer. 3.
llegar a ser
dependiente
ces, tal vez
capaz
ni una
de hacer
pobre
pueda tener su
su camino
imitación
primera
sola
de un
sin
oportunidad
ser una mujer7
hombre.
de
laciones satisfactorias con hombres de carne y hueso.
Enton
entablar
En el caso concreto de la mujer que sufrió una psicosis

re-(
}
/
En resumen, el ánimus en una sociedad dominada poiQ.’
Ç hombres, cuando no está unido en la psique de la mujer d’e posparto, su analista masculino ayudó a llenar el agujero he
)una manera colaboradora, ex.agera sijçlpiiiiiespótico has- cho en su subconsciente para que ya no fuese vulnerable a
Ita que, dejado en total libertad, di smo. más erupciones. Ella estableció una enorme transferencia
Un enfoque tan drástico puede haber sido mitigado ide hacia él, a causa de la fase de desarrollo en la que se encon
almente por una analista o una amiga con las que esta mu traba y del desequilibrio de la sociedad. Era la primera vez
jer podía identificarse, y que comprendían el problema del que tenía un contacto cercano con un hombre mayor que ella
componente masculino. Si la paciente tenía prejuicios con y que había ido más allá del potencial que ella tenía. Ella pen
tra las mujeres, podía también haber sido ayudada por un só que este hombre podía llenar y representar de sobra sus
hombre que entendiera que el inconsciente de ella esperaba más elevadas aspiraciones masculinas. Su transferencia se
que él no dominase su ego femenino. Pero el analista mas hizo inevitablemente tremenda. De alguna manera, el analista
culino tiene que saber que la mujer debe percibir interna era Dios para ella.
mente el ánimus que inconscientemente ve en él. En aras de Mucho más adelante tuvo una aventura con un hombre que
preservar el ego de la mujer, tendrá que ser suficientemen rara vez escribía cartas durante sus largas separaciones. De
te humilde para no prevalerse de la proyección masculina que sesperada por saber de él, empezó a preguntarse por qué se
ella hace sobre él. preocupaba tanto. De repente cayó en la cuenta de que su ten
El analista tendrá que hacerle tomar conciencia de las sión era similar a la de las personas que rezan a Dios. A un
propias limitaciones que él tiene, para mantener una conexión Dios que nunca responde. En un vislumbre comprendió que
adecuada con ella. Tendrá que ayudarla a hacer emerger las había proyectado el Dios masculino en un hombre ordinario.
discrepancias que pueda haber dentro de la visión demasia Así se reveló la potencia del ánimus. De hecho, era una ma
do heroica que tiene de él. En otras palabras tendrá que con nifestación del aspecto masculino del ser.
trarrestar las influencias atriarcales bao las]Tfe1Z. Cuando progresó el análisis, soñó que estaba siendo lle
Antes o espues, quizá llegue a ponerse en contacto con una vada a través de un pasadizo en espiral que se adentraba muy
analista o amiga con la que pueda identificarse de manera se hondo en la tierra. Ella iba colgada de los hombros de un vie
gura. De cualquier modo, a largo plazo y si tiene suficiente jo y eminente educador religioso, el director de una escuela
perseverancia, la cliente podría llegar a darse cuenta, con la de chicos que había conocido hacía unos años. La educa

ción religiosa parecía ser el objetivo de su descenso al in muerto varios años antes. Sin embargo, la yuxtaposición de
consciente. Una vez más, según el sueño, su ánimus era más estas dos figuras se ajustaba a la primera percepción que la
viejo, más amplio, y más realizado que ella. Era él el que es mujer tenía de la relación de sus padres: la madre vengativa
taba a cargo de todo. y desilusionada frente a un padre complaciente. En el sueño,
Después, apareció otro sueño. Se trataba de un enorme gi la hija insultaba a la madre y la apartaba de su camino y del
gante de barba negra hundido en la tierra de cintura para camino del grupo. Al hacerlo, fue capaz de terminar un artí
abajo. El analista, que parecía muy pequeño, estaba empe culo que quería escribir sobre las mujeres.
queñecido delante del gigante -y de hecho, muy dominado Esta mujer joven nunca se había confrontado a las figuras
por él-. Señalando al gigante, el analista dijo: “Él es su ge arquetípicas negativas escondidas tras sus padres, porque se
nio y no yo”. El inconsciente de ella, que sabía más, estaba había limitado a hacer una transferencia a su analista y se ha
intentando decirle a ella y a su analista que éste tenía que de bía conformado con la sensación de vivir la imagen ideal de
volver su autonomía a esta mujer. Pero la profesionalidad su ánima. El problema de su madre había sido resuelto me
reconocida del analista, junto con su edad y alta cualidad, re diante la psicosis, pero de algún modo y en un sentido pro
forzado todo ello por los prejuicios de la sociedad, habían to fundo, no podía continuar haciendo su vida.
mado el puesto. Entonces decidió hacerse analista y prepa Antes de que se produjera este sueño, que desbloqueó
rarse para desempeñar este papel. Tuvo que trabajar muy por fin su creatividad, había tenido una experiencia que le ha
duro, porque tenía pocos estudios. De nuevo persiguió una bía dado un vislumbre de su situación. Mucho después de que
vida de logros en detrimento de su verdadera naturaleza fe hubiera acabado el análisis, había soñado que su analista le
menina. aclaraba que las mujeres que le seguían no eran importantes
Al final, esta joven mujer encontró su “feminidad” en re para él. Fue sólo entonces cuando ella empezó a cuestionar
lación con el analista. Sin embargo, no había encontrado su au su propio análisis. Mucho antes de este sueño, él le había con
téntico ser, que era distinto de la idea que el analista tenía de fesado personalmente que no sabía nada sobre las mujeres,
lo que debía ser una mujer. Aunque se adaptaba mejor que an pero ella no podía escucharle. La transferencia le había vuel
tes a la sociedad, todavía no era capaz de existir realmente por to sorda. El hombre había sido su ideal y, de alguna manera,
sí misma. Esta mujer se adentró en la práctica psicoanalítica también su salvación. El rechazarlo, aunque sólo fuera en
y lo hizo tan bien como otras muchas mujeres en esta profe sueños, le había forzado casi sin darse cuenta a deshacer el
sión. Pero no podía ofrecer a los demás sus experiencias para vínculo que le ataba a él. Podría decirse que él abdicaba de
que se beneficiasen de ellas. Estaba bloqueada. manera voluntaria, como el pistolero del sueño que se había
Años después, soñó que sus padres le bloqueaban el ca eliminado a sí mismo en su sueño psicótico. Desde entonces
mino a ella y a un grupo de analistas junguianas. En su sue empezaron a tomar forma sus propios puntos de vista origi
ño, su madre aparecía como una mujer de más de cincuenta nales de cómo funcionan realmente las mujeres.
años, negativa, dominante, de mano dura e inteligente, y su Ninguna de estas experiencias de toda una vida de ser es
padre como un hombre, también de cincuenta años, de meji clava del mundo de los hombres hubiera sucedido, si nuestra
llas sonrosadas, sensible pero ineficaz. La madre intelectual joven mujer hubiera tenido la suerte de tener una hermana o
de su sueño podía asociarse con su madre real, que había una madre iluminada. En este caso, habría sido animada a uti

191
lizar su iniciativa para intentar abrirse cualquier camino en su

entorno que se ajustase a ella, hasta que encontrara su ver
dadero sitio. Si hubiera existido por sí misma, su madre ha
bría contrarrestado los prejuicios sociales masculinos que, de
otro modo, le han podido conducir por caminos de actividad
que no tienen nada que ver con su ser real.
Por otra parte, habiendo tenido una madre menos ideal, tal
vez se la hayan presentado dificultades con un ánimus fasti
dioso e interventor, y se haya visto obligada a recurrir a una 9. LA REFORMULACIÓN DEL
mujer de más edad, que al menos comprendiese el complejo
masculino de la mujer. Esta joven mujer podría haber en FEMINISMO, DEL ÁNIMUS
contrado su verdadero ser en un plazo razonable de tiempo,
con ayuda de la comprensión y el respeto de una mujer cons Y DE LO FEMENINO
ciente de su propia masculinidad.
Si los hombres quieren ayudar, tienen que saber que el pa
triarcado está litera1menteacabado, y cuanto antes entiendan por Polly Young-Eisendrath
su miedo y
ciente, insatisfecha y marcadora, tanto mejor. Tal vez se be
neficien también de saber que las madres que tienen oportu Ahora que hemos arrojado alguna luz sobre el tema del
nidades de desarrollarse y de desafiar al mundo se revelarán elemento Masculino en las mujeres, recurramos a la analis
dentro de poco como seres humanos ordinarios. ta y feminista Polly Young-Eisendrath para meter una llave
Las mujeres deben darse cuenta -y explicar a los hom inglesa en el motor del sistema. Young-Eisendrath hace una
bres- de que por mucho de que se promueva el ideal de la an crítica provocadora, en su valiente intento de fundir el mun
droginia, la manera de funcionar, pensar y crear de los hom do simbólico interno de la psicología junguiana con las re
bres no es su manera. Necesitan creer que cuando las mujeres alidades sociopolíticas del feminismo.
estén convencidas de su propia singularidad, tanto los hom Pretende redefinir los arquetipos de lo Femenino y del
bres como las mujeres saldrán ganando. ánimus, yendo a sus orígenes en un sistema de creencias pa
triarcal que tiene fechas concretas. Más que considerarlos
como estructuras arquetípicas o universales de la psique hu
mana, propone desde la óptica del feminismo que son es
tructuras adquiridas por los individuos a través de las ex
periencias subjetivas en una cultura determinada. En su
libro en colaboración con Florence Wiedeman, Female Aut
hority: Empowering Women Through Psychotherapy, Young
Eisendrath ya no se refiere al ánimus como un arquetipo; lo

Volvernos a hacer de padres de nosotras mismas La reformulación del feminismo
llama más bien un “complejo una serie de ideas y de imá

“,
nación. Muchos de mis colegas junguianos son reacios a
genes que son absorbidas a partir de la experiencia personal. aceptar el feminismo como teoría psicológica, e incluso qui
También describe en términos generales las fases del desa zá también a aceptar cualquier implicación del significado so
rrollo de la conciencia del ánimus en las mujeres. cial y cultural de ser mujer. A su vez, muchas de mis colegas
Además, con la ayuda de la conceptualización feminista feministas son severamente críticas de la misoginia que su
sobre las diferencias entre los géneros, Young-Eisendrath pone apoyar las desviaciones de la psicología junguiana.
explica cómo lo Femenino y el ánimus fueron definidos (fun Mi identidad como feminista junguiana me ha parecido
damentalmente por hombres) en relación con los hombres y muchas veces un reflejo vergonzoso de mi propia división.
lo Masculino. Por esta razón, parece que lo Femenino care Durante algunos años oculté mi situación fragmentada; yo era
cería para siempre de todo lo que simboliza lo Masculino (in una “feminista vergonzante” entre los junguianos, y una “jun
teligencia, objetividad, o logos) y sobrellevaría sus opuestos guiana vergonzante” entre las feministas. Sin embargo, hace
(sentimientos y capacidad de conexión, o eros). Al mismo algún tiempo me prometí a mí misma que ya no silenciaría
tiempo, el ánimus ha obtenido una mala reputación al pro mis creencias políticas y sociales cuando escribiese o habla
porcionar a las mujeres las cualidades que las modelan a se sobre psicología junguiana, ni escondería mis ideas psi
imagen y semejanza de los hombres. cológicas junguianas cuando hablase con colegas y amigas fe
Para las mujeres el dilema se convierte en cómo imaginar ministas.
y vivir la feminidad auténtica y, al mismo tiempo, desarro
llarse como individuos independientes y fuertes. Young-Ei
sendrath llamaría a esto una “feminidad feminista “. Feminismo y discurso femenino
Polly Young-Eisendrath, doctora en Filosofla, es analista
junguiana, psicóloga-jefa de Clinical Associates West de Fi El feminismo, como movimiento cultural y como sistema
ladelfia, y psicóloga investigadora titular en el Institute of que da un sentido personal, ha sido fundamental y básico en
Pennsylvania Hospital. Es autora de Hags and Heroes: A Fe mi descubrimiento de mí misma como persona-mujer. Antes
minist Approach to Jungian Psychotherapy with Couples de mi primer contacto con el feminismo -más o menos en
(1984), Female Authorithy, Empowering Women Through 1976-, yo no era en absoluto una persona feliz, entusiasta y
Psychotherapy (1987), y Jung’s Self Psychology (con James comprometida totalmente con la vida. Carecía de un dis
Hall, 1990), y es también conferenciante nacional sobre temas curso que incluyera con precisión mis experiencias como
de psicología junguiana, psicología evolutiva yfeminismo. hija, estudiante, esposa, madre, autora, profesional y perso
na (aunque sólo “sabía” que me faltaba por la incomodidad
no expresada que producía su ausencia). La única forma de
discurso específicamente femenino que tenía era el chisme,
al que me entregaba de todo corazón. Aunque los chismes
Ser analista junguiana y feminista declarada puede pare eran denigrados por otras personas, e incluso, ¡ay de mí!, por
cer constituir un camino para una sana toma de conciencia, mí misma en algunas ocasiones. Al final los consideré tri
pero con más frecuencia constituye una lucha contra la alie viales.

De hecho, muchas de mis preocupaciones me parecían tri bieran sido descritas y de que cayeran fuera de las verdades
viales, incluidos temas como mi vida amorosa, mi sistema de institucionalizadas.
reproducción y sus irregularidades, mi particular punto de Ése fue el principio de mi búsqueda dentro del feminismo.
vista sobre la filosofía occidental, mis relaciones con mi Mi propia definición del feminismo comparte sus principales
madre y otras mujeres, mi deseo de describir los detalles temas con otras muchas personas. El feminismo es una dis
de mi manera de cocinar o de mis tareas domésticas, y otros ciplina de pensamiento y de acción que pretende potenciar la
muchos. Cuando recuerdo mis horas pre-feministas más os reciprocidad y la confianza entre la gente; revelar el signifi
curas, tal vez las más dolorosas eran las horas temibles que cado de las diferencias entre los sexos, especialmente si és
pasaba con remordimiento y vergüenza, asustada de mis tas pueden interferir con lo que se pretende potenciar; y opo
sentimientos de cólera, y a veces asesinos, hacia mis dos nerse a los modelos y métodos de dominación-sumisión de las
deliciosos y preciosos bebés. Estos sentimientos me abru relaciones entre las personas. Lo que el feminismo ha reve
maban en algunos momentos, especialmente por la noche, lado en sus muchas formas, desde la teología hasta la crítica
cuando me arrastraba de habitación en habitación, intentan literaria, pasando por la psicología y la filosofía, es que el si
do tranquilizar a mis hijos, atenderles y alimentarles. En al lenciamiento y la trivialización de las mujeres y de sus ide
gún momento, cuando llevaba tres años de madre, pensé as afectan continuamente a todo el mundo y la manera en que
que iba a perder los estribos. Sabía que había tenido senti deseamos ser nosotras/os mismas/os y en que queremos que
mientos muy conflictivos sobre la existencia de mis hijos, el mundo sea.
pero no podía encontrar ninguna referencia a estos senti El feminismo ha despertado un reconocimiento del he
mientos en ningún texto o manual de cuidado de bebés (y eso cho de que nuestras creencias influencian nuestras percep
que tenía un montón de ellos). Estando al borde de una de ciones, y que lo que creemos que es real -lo que asumimos
sesperación absoluta, di con un ejemplar del libro de Adrien que es “auténticamente verdad” para nosotras/os y para los/as
ne Rich Of Woman Born (1976) y tuve mi primera expe demás- es nuestra manera dominante de observar en ese mo
riencia feminista. mento. No descubrimos alguna realidad que está “ahí afuera”,
Aunque había estado políticamente activa en el movi sino que más bien inventamos nuestra realidad a partir de
miento de las mujeres antes de 1976, e incluso había dado una nuestras creencias. Nuestro conocimiento es sobre todo un pa
conferencia en 1974 sobre “La Psicología junguiana y las trón coloreado uniformemente, y todo el mundo busca el
mujeres hoy día”, no había tenido antes la experiencia de mejor ajuste con los patrones y expectativas que tiene. Estas
descubrir un nuevo discurso, una forma de discurso en el expectativas funcionan como desviaciones, como maneras
que fueran validadas mis propias experiencias. La lectura de en que esperamos que sean las cosas.
Of Woman Born fue liberadora en una manera que no había En gran medida, llegamos a estas desviaciones a través de
conocido nunca antes. Lo que descubrí fue un discurso de su las influencias de la familia y de la sociedad, especialmente
experiencia de ser madre en contraste con la institución de la a través la lengua que se nos enseña. Las psicólogas femi
maternidad. Mis ojos se abrieron por primera vez a la posi
jt nistas Rachel Hare-Mustin y Jeanne Marececk han escrito que
bilidad de que mis propias experiencias no fueran extrañas, “la lengua pone de relieve ciertos rasgos de los objetos que
aisladas, o ni siquiera únicas, sino más bien de que no hu representa, ciertos significados de las situaciones que des

Volvernos a hacer de padres de nosotras mismas La reformulación delfeminismo
cribe. Una vez que se ha aceptado lo que la lengua designa, la visión establecida del mundo incluye las presunciones de
todo el mundo está limitado por ello... A lo largo de la his la inferioridad, la inadecuación y la debilidad de las mujeres.
toria, los hombres han tenido una mayor influencia sobre el Toda la población femenina llega al estado adulto con senti
lenguaje que las mujeres”.’ Esto no quiere decir que las mu mientos inevitables y creencias significativas sobre su propia
jeres no hayan hecho su contribución a la cultura y lenguaje inferioridad. He escrito muchas veces
2 que las personas-mu
patriarcales, sino más bien que los hombres -principalmen jeres tienen que identificarse de alguna manera con la teoría
te los hombres caucásicos— han tenido un estatus privilegia de la inferioridad femenina para sobrevivir. Las atribuciones
do en todos los niveles de la participación cultural, desde la de inadecuación y debilidad femenina, y de su falta de com
educación (y la posibilidad de poder leer) hasta el liderazgo, petencia y de objetividad, se sostienen en conversaciones
el poder de decisión, la escritura y las publicaciones. corrientes en las que las comunicaciones verbales y no ver
Creo que estamos entrando ahora en un periodo en el que bales están estructuradas por la creencia básica de que a las
las mujeres están empezando a tomar el control sobre sus mujeres les falta algo. Inevitablemente, todas las mujeres
propios sistemas de creencias. Tal vez por primera vez en la desarrollan teorías individuales sobre sí mismas, sus familias,
historia escrita, “suficiente” número de mujeres han entrado sus cuerpos, inteligencia, competencia, capacidad de nutrir o,
en la cultura escrita, para abrir un camino al discurso feme como dicen a los demás y a sí mismas, “hay algo que no
nino, que apenas está abierto y que necesita protección. En funciona en mí”.
Estados Unidos, los años setenta y ochenta produjeron una ex Hasta que una mujer recibe una explicación feminista de
plosión de voces femeninas en todos los niveles del discur la situación que siente de inadecuación personal, a partir de
so, desde los informes de abusos sexuales y palizas, hasta en una teoría que tiene en cuenta la función de los estereotipos
sayos de teoría filosófica y de teología. Parece que nos sexuales y la realidad de las experiencias femeninas, perma
encontramos en medio de la creación de una epistemología nece por fuerza en una condición paradójica acerca de su
femenina, de una teoría feminista de la naturaleza y de los propia fuerza y autoridad. Si se comporta “como una mujer”,
fundamentos del conocimiento (cómo la población femenina será tomada por infantil, incompleta o, lo que es peor, men
puede llegar a conocer el mundo y reconocerse a sí misma). talmente enferma. Si se comporta como “una persona adul
Creo firmemente que este proyecto epistemológico es el as ta madura”, será considerada como poco femenina y se le re
pecto esencial, o el más fundamental, del feminismo con prochará estar compensando alguna carencia inherente -de
temporáneo, dadas las actuales limitaciones del patriarcado. inteligencia, de objetividad, de valor, de un pene, de un hom
Un estudio de la naturaleza y fundamentos de nuestro cono bre, de dinero, o de hijos-. Si insiste con fuerza en que ella
cimiento permitirá a las mujeres desarrollar un discurso de tiene autoridad propia, inevitablemente se encontrará con
mujeres fuertes y completas. muchas situaciones en las que se cuestionará su derecho a te
En este momento, todavía nos encontramos en la posi ner tiempo y espacio y a intervenir en conversaciones ya co
ción de ser dominadas por estereotipos de género que tienen menzadas. Con toda seguridad será amenazada y entonces
como función limitar nuestras experiencias, expresiones y tenderá a aceptar una explicación de que ha estado haciendo
expectativas sobre la vida que vivimos. Todas nosotras par algo equivocado -que es demasiado controladora, excesiva
ticipamos por fuerza en conversaciones cotidianas en las que mente masculina, muy dominante, demasiado intelectual o

ti
demasiado emocional, demasiado abstracta o demasiado con- za el argumento que vive la mayoría de las mujeres -tanto si
creta.
De lo que carecemos dolorosamente como cultura pa
triarcal es de relatos de mujeres fuertes y completas. Estos re
latos son por fuerza diferentes de las versiones heredadas de
1.. lo hace explícitamente dentro de su familia o claramente fue
ra de ella (como soltera, por ejemplo)—, se le forzará a res
ponder la cuestión de adónde se dirige o qué es lo que pre
tende.
heroínas, diosas, o figuras femeninas idealizadas que han El feminismo me ha enseñado a examinar las implicacio
sido principalmente creadas por las imaginaciones de hom nes que tiene pertenecer a un género o a otro, y de las dife
bres. La escritora feminista Carolyn Heilbrun escribió: rencias en general que ello supone, y me ha ayudado a mí y
a otras mujeres a ver las expectativas que se tienen sobre
¿Cómo podemos encontrar narrativas de complots femeni cómo han de ser las personas, y a establecer la diferencia
nos, historias que influyan en otras historias y que se hagan vi
vas más adelante, que no nos hagan enterrar a la hermana de entre cómo son en realidad y cómo les gustaría ser. Es éste un
Shakespeare, ni renunciar a describir a George Sand, porque no ejercicio de conciencia: el de hacer conscientes las estructu
queremos llamarla una mujer (bajo el antiguo complot) ni un ras subyacentes que utilizo para “crear” a una mujer o a un
hombre, cuando realmente no lo es?3 hombre a partir de mis creencias y de mi imaginación. He lle
gado a estar muy alerta de cómo mis prejuicios pueden si
La escritora francesa George Sand (1804-1876) constitu lenciar, eliminar o destruir la subjetividad de otra persona o
ye una perfecta ilustración del problema que intento plante la mía propia, la capacidad de seguir siendo una unidad au
ar. Como dice Heilbrun, Sand fue un enigma para sus bió torreconocida de intenciones, de deseos y de identidad.
grafos y para sus amigos, porque vivía a fondo de una manera
que no les estaba permitido a las mujeres. Aunque Sand es
taba totalmente a gusto con las actividades femeninas de lle Las mujeres, lo femenino y el ánimus
var un hogar acogedor, disfrutando con sus nietos y su jardín,
también saboreaba la posibilidad de una revolución social. En un artículo que publiqué en 1987, dije de mí misma y
Tuvo muchos amantes, normalmente más jóvenes que ella a de otras/os analistas junguianas/os: “Creo que algunas de
los que trató bien. Se negó a vivir de acuerdo con los este nuestras formas de crear arquetipos de estilos y modelos de
reotipos sexuales de su época, utilizó nombre y ropa de hom vida, de crear tipologías raciales y diferencias basadas en el
bre para moverse con más libertad por las ciudades durante género según nuestros modelos ideales, y algunas de nuestras
su juventud. Una de sus biógrafas, Ellen Moers, expresa el di teorizaciones sobre tipos psicológicos, han llegado a con
lema sobre Sand, cuando afirma: “Era una mujer que era un vertirse en estereotipos basados en presunciones que no han
gran hombre”.
4 La respuesta es planteada explícitamente por sido sometidas a un examen riguroso”.
5 Me gustaría traer
Heilbrun a lo largo de Writing a Woman ‘s Lije: simplemente ahora a la conciencia las funciones de los estereotipos basa
no tenemos narrativa, ni argumento, ni paradigma para la dos en el género, tal como aparecen en su efecto de impedir
vida de una mujer fuerte y arriesgada. Siempre hablamos de nuestra capacidad para entender a las mujeres, tanto a noso
estas mujeres como masculinas o identificadas con los hom tras mismas como a las demás, al aplicar la psicología jun
bres, en lugar de como mujeres totales. Si una mujer recha guiana.
1
En muchas ocasiones he escrito y hablado sobre el flaco

¡ La reformulación del feminismo
sar y razonar, y en aceptar hechos evidentes; si lo rechaza con

servicio hecho a las feministas, y a las mujeres en general, a
través del estereotipo junguiano de la mujer “poseída-por-el
ánimus”. Fundamentalmente, la teoría junguiana del ánimus
es la de que las mujeres van formando poco a poco una es
pecie de subpersonalidad de hombre o masculina. Esta per
sonalidad reprimida, el ánimus, vive una vida por sí misma,
0 vehemencia, será considerada como inconsciente y víctima de
la posesión del ánimus. Esto es exactamente un anna de dos
filos.
Cuando tomé contacto por primera vez con la psicología
junguiana y leí ensayos sobre el ánimus, quedé decepciona
da porque no encontraba mis propias experiencias en estas ex
como si la mujer se identificase con ser mujer y viera en plicaciones. La idea de que el ánimus era racional y mascu
tonces a las personas masculinas como un “no-yo”. (La sub lina, y de que era el guía o “motor psíquico” del inconsciente
personalidad femenina del hombre es el ánima.) Jung y al femenino, me era totalmente ajena. Mis experiencias de in
gunos junguianos han utilizado el concepto del ánimus de una fancia estaban llenas de mujeres que eran astutas y organi
manera psicológicamente desviada y dañina, cuando lo apli zadoras competentes del hogar y de las clases. Por otra par
can para indicar una falta de objetividad en las mujeres y en te, mi conocimiento de los chicos y de los hombres me llevó
las niñas. a concluir que ellos eran emocionalmente dependientes, da
La presunción subyacente es la de que existe un principio dos a peleas y a cóleras periódicas e inexplicables, e inca
de Masculinidad, del que tanto el ánimus de los hombres paces de ser objetivos. Mi complejo prototípico masculino era
como el de las mujeres no son sino un aspecto. Se describe extraño, irracional, amenazador e inestable. (Ésa era una
como logos este arquetipo Masculino: su contenido es ra descripción de mi ánimus.)
cional, lógico, intencional y objetivo. Como las mujeres no Cuando Florence Wiedeman y yo empezamos a construir
estarían estructuradas conforme a este arquetipo Masculino, nuestro modelo de desarrollo del ánimus, publicado en Fe
serían por naturaleza menos racionales que los hombres. male Authoriíy: Empowering Women through Psychotherapy
Como la personalidad inconsciente de la mujer está organi en 1987, creíamos que la teoría del ánimus era potencial
zada por el principio Masculino, una mujer tiene la posibili mente útil, pero demasiado estrecha y repleta de estereotipos
dad de desarrollar estas cualidades, pero sólo luchando con dañinos sobre las mujeres. El problema parecía residir en la
sus tendencias menos objetivas por naturaleza. Por lo tanto, conexión del ánimus con un principio Masculino universal,
en la práctica, cualquier mujer insistente sería “estridente” y más que en las experiencias de las mujeres y de las niñas res
atacaría simplemente sin razón, porque estaría basada en su pecto a sus propias creencias y construcciones sobre los hom
ánimus (su objetividad inferior). bres y la masculinidad.
La idea de que el ánimus es un arquetipo que tiene un Si asumíamos, como lo hacía en general la teoría jun
significado universal de objetividad inferior (hasta que se guiana, que el funcionamiento del ánimus era arquetípico
integra con la naturaleza Femenina), es un estereotipo basa -un aspecto de un principio Masculino universal-, entonces
do en una noción culturalmente relativa de la masculinidad, teníamos que afirmar el modelo en base a un significado
que los junguianos han llamado universal. Si una mujer acep dado de masculinidad. Si, por el contrario, asumíamos que la
ta este estereotipo, tiene que asumir, por supuesto, que ella es masculinidad femenina estaba construida a partir de las ex
inferior por naturaleza en inteligencia, en capacidad de pen periencias de hombres e instituciones masculinas, podíamos

entonces conectar el ánimus con los temas masculinos que minos junguianos-, como si fueran imágenes de mujeres. Las
descubríamos en los sueños, relaciones, fantasías e ideales de revistas, el cine, la televisión las novelas y la poesía están lle
las mujeres. nas de imágenes del ánima disfrazadas de relatos de vidas
Decidimos definir el ánimus como un complejo psicológi femeninas. Para diferenciar a la persona-mujer, en su propia
co (más que como un arquetipo) de ideas, imágenes, afectos y subjetividad, a partir del objeto de deseo y miedo de la per
hábitos que va creciendo alrededor del núcleo arquetípico del sona-hombre, debemos empezar por las mujeres mismas. Los
“No-Yo” —o “el Otro”—, el arquetipo de las emociones auto- ideales, informes, sueños, miedos, deseos y el discurso de las
conscientes. En vez de asumir por adelantado que el ánimus es mujeres constituyen las bases de clasificación de la psicolo
un guía o un crítico positivo o negativo (lo han hecho gene gía femenina que pueden ser contrastadas y comparadas con
ralmente los primeros junguianos), reunimos cientos de sueños las imágenes del ánima generadas por los hombres.
de nuestras clientes mujeres y los examinamos por temas que Demaris Wehr y Andrew Samuels son dos teóricos jun
parecían caracterizar diferentes imágenes de hombres, de jó guianos que comparten conmigo una visión crítica de los
venes y de la masculinidad. Descubrimos cinco series de mo principios universales Masculino y Femenino.
6 El problema
tivos que hemos llamado fases del desarrollo del ánimus. Es fundamental en esta cuestión consiste en dos presunciones:
tos motivos parecían describir una secuencia evolutiva de la una de ellas es que es justo y natural, tanto para las mujeres
población femenina en nuestra sociedad: desde una primera como para los hombres, adecuarse a roles y categorías pre
fase del Extraño Ajeno hasta una final de Androginia (o inte establecidas; la otra es que el arquetipo de lo Femenino abar
gración de todos las capacidades potenciales humanas). Es ca tanto la psicología femenina como el ánima masculina, y
probable que estas imágenes sean diferentes para mujeres que que lo Masculino incluye igualmente la psicología masculi
se han madurado en culturas diferentes a la nuestra. na y el ánimus femenino.
Desde hace ya algún tiempo he dejado de hablar en tér En primer lugar, me resulta ofensiva la noción de un prin
minos de lo Femenino arquetípico o del principio Femenino cipio universal de géneros. Durante mucho tiempo he sido
confonne a la línea que he teorizado en Hags and Heroes: A contraria a cualquier forma de reduccionismo y de determi
Feminist Approach to Jungian Psychotherapy with Couples nismo. El reduccionismo y el determinismo son métodos que
(1984). Cuando escribí este libro, estaba tan agradecida de ser nos llevan a creer en “verdades simples” al servicio de algún
capaz de captar y de articular un nuevo discurso (un discur grupo dominante, ya sea de científicos, de psicólogos o de po
so que implicaba cariño, empatía y confianza) que lo vi como líticos. Desconfío cuando alguien promueve una idea parti
un principio intrínsecamente Femenino o ético. Al reunir los cular sobre la “naturaleza real” de las diferencias humanas
datos para Female Authority, comencé poco a poco a reco (por ejemplo, que los afroamericanos son menos inteligentes
nocer la enorme dificultad de permitir a las mujeres que ha que los caucásico-americanos). ¿Cuáles son las motivaciones
blasen a partir de sus propias experiencias sobre lo que sig del promotor? En lo que concierne a las diferencias de género
nifica femenino o masculino. masculino o femenino, creo que ciertamente existen dife
Empecé a reconocer el peso de vivir en una cultura que rencias significativas entre las vidas de las mujeres y de los
promociona las imágenes que los hombres crean a partir de hombres en todas las culturas conocidas, pero ignoramos to
sus propias experiencias con lo femenino -del ánima en tér davía en gran medida cuáles son y qué significan. No sabe-

mos qué es lo masculino o lo femenino, sino en relación a un Como analista junguiana, me gusta ser clara sobre lo que
contexto; y no podemos saberlo hasta que las experiencias de entiendo en cada caso por arquetipo. Es una tendencia, fun
las mujeres sean claramente registradas e integradas en nues damentalmente organizadora, a formar imágenes unificadas,
tras estructuras mentales. mantenidas y coherentes, alrededor de un núcleo de expresión
A pesar de que el legado de lo Femenino en la psicología emocional. Dos ejemplos lo constituyen los arquetipos de la
junguiana es androcéntrico, su concepto ha ido siendo in Gran Madre y de la Madre Terrible; éstos son tendencias a
corporado parcialmente por las mujeres. En la psicología formar imágenes mantenidas de estados de apego y miedo du
junguiana, lo Femenino centraliza las experiencias que los rante la infancia, y no son simplemente experiencias de mu
hombres tienen de las mujeres y de sus relaciones con ellas. jeres reales. Los arquetipos son universales porque ciertas
Como señala Wehr, todas las características de los cuatro ti emociones humanas son omnipresentes y actúan para orga
pos de personalidad de lo Femenino (a partir de los modelos nizar las relaciones humanas que nos sostienen a lo largo de
de Aun Ulanov y Toni Wolf, teorizadora y teorizador jun la vida.
guianos) incluyen una manera de relacionarse con los hom La tendencia a formar una imagen de un yo es universal y
7 Parece que existe una clara evidencia de esa tipología
bres. ocurre después de que se han desarrollado las emociones au
que deriva en parte de la psicología masculina. Importar sig toconscientes, como el orgullo, la vergüenza, la culpabilidad
nificados e imaginaciones masculinas -como, por ejemplo, y la envidia. Estas emociones organizan el arquetipo del yo en
miedos y fantasías respecto a las mujeres y a las madres- al imágenes de yo-y-los-demás. El yo que tiene un género es una
núcleo de la psicología femenina puede provocar gran tristeza de las posibilidades para este tipo de organización. Las dife
y graves problemas en las mujeres. La consecuencia es lo que rencias biológicas de estructuras sexuales determinan la ubi
yo he llamado la psicología de Pandora, o la construcción de cación del bebé en un grupo determinado por el género; cuan
una “mujer”, a partir de las experiencias del hombre (como do estas estructuras son ambiguas, se resuelve la ambigüedad
Eva, que fue creada a partir de una costilla de Adán; y Pan (mediante una decisión o mediante la cirugía) y el bebé es si
dora que fue ideada por Hefestos por órdenes de Zeus). Un ser tuado en uno de los dos grupos determinados por el género.
femenino así es fundamentalmente inadecuado por no ser un Estos son recíprocamente excluyentes en la mayoría de las cul
hombre. turas. El pertenecer a uno de ellos garantiza que la persona or
Creo que las diferencias de género son etiquetas cultura ganice su imagen del otro como un extraño. Los significados
les puestas a una condición universal de diferenciación se concretos asociados a cada género son flexibles y relativos se
xual. Si hablamos del género como un arquetipo, entonces gún los contextos culturales y familiares en que se encua
sostenemos que su contenido siempre es el mismo (por ejem dren; la asignación a uno de los grupos y la estructura bioló
plo, el logos como masculino, y el eros como femenino), y gica del cuerpo no son flexibles. La pertenencia a un género
asumimos que ya conocemos cuáles deberían ser los patrones dura desde el nacimiento hasta la muerte; se trata quizá de la
de un comportamiento saludable. Si por el contrario hablamos diferencia más diferente [sic] de la vida humana, pero su sig
del género en términos de complejo psicológico, podemos in nificado es relativo según el contexto y la cultura.
corporar las imágenes y significados particulares que pro Para expresar todo esto en un contexto práctico, recurro a
vienen del contexto cultural y familiar. algo sobre lo que he escrito extensamente: las relaciones

cruzadas entre los géneros. La psicología junguiana me ayu Para volver al dilema de las mujeres, si queremos dife
da a comprender la envidia fundamental que existe entre los renciarnos, tenemos que reclamar la legitimidad de nuestra
géneros: la creencia de que el Otro posee riquezas y poder que propia experiencia. Tenemos que reconocer cómo y por qué
uno mismo no puede tener. La organización inicial del ánimus construimos nuestras experiencias como mujeres. Es aquí
(en la mujer) o del ánima (en el hombre) tiene lugar durante donde el feminismo nos ayuda psicológicamente: en descu
la infancia, frecuentemente alrededor de la envidia, y empieza brir nuestro propio discurso y diferenciar nuestras experien
entre los dos y los tres años. Llegamos al estado adulto con cias de las instituciones patriarcales, como el matrimonio y
un complejo contrasexual bastante bien organizado y defen la maternidad.
dido. Este complejo tiende a proyectarse en el Otro del sexo El feminismo nos ayuda a deconstruir y reconstruir nues
opuesto, con el que se tiene una relación íntima (o poten tros significados existenciales. La “deconstrucción” femi
cialmente íntima). Si el Otro se identifica con el complejo nista proporciona una crítica de las presunciones —heredadas
proyectado, ambas personas sufren enormemente a causa de cultural y psicológicamente- sobre la inadecuación del ser fe
la falta de diferenciación. Quedan atrapados en una telaraña menino y de la trivialidad de las ideas y del trabajo de la
de “no me entiendes”, “no me escuchas”, “no me ves”, “no mujer. Las feministas francesas nos han ayudado especial
me conoces”. Sólo el desarrollo de una empatía madura pue mente en este campo. Muchas de ellas asumen que cuando las
de ayudar a desenmarañar la mezcla de fantasía y realidad. La mujeres hablan y escriben no pueden probablemente repre
empatía madura es la capacidad de reconocer y mantener el sentarse a ellas mismas, porque tienen que entrar en el do
propio punto de vista, al tiempo que se es capaz de aceptar el minio del lenguaje creado por el hombre. Ellas nos animan a
de la otra persona. Es la capacidad que depende de la dife investigar sobre nosotras mismas, a través de los puntos fla
renciación y de la confianza, que amalgama la objetividad y cos, las lagunas y las deficiencias que esconden nuestro ser
la subjetividad. en los textos que hemos heredado. Para hacerlo tenemos que
Creo que una psicología de la diferencia de géneros es bá volvernos lectoras subversivas de los textos patriarcales. La
sicamente útil, y que el concepto junguiano de un complejo filósofa Luce Irigaray recomienda la metáfora del espéculo
reprimido de género añade un nuevo sentido con un nivel para volver el espejo examinador sobre los creadores de
necesario para la comprensión de las experiencias de los nuestras teorías, para plantear cuestiones acerca de dónde y
hombres y de las mujeres. Este concepto nos permite espe por qué la subjetividad femenina se ha disfrazado.
8
cialmente trazar un camino de diferenciación sexual entre Las feministas americanas nos invitar a creer en la re
personas-mujeres y personas-hombres que se relacionan en construcción, en nuestra capacidad de liberar nuestras propias
tre sí. Eso significa que cada persona se vuelve consciente del experiencias de las formas que poseemos. Se nos invita, por
significado de sus creencias y expectativas respecto al áni ejemplo, a creer en las antiguas culturas matrifocales y ba
mus/ánima. Así, por ejemplo, para prestarme atención, tienen sadas en la diosa. Por ejemplo, la pensadora en el campo de
ustedes que diferenciarse de mí. En caso contrario, simple las relaciones Riane Eisler construye una visión del pasado
mente me silenciarán, me imaginarán, o me refutarán, se que “lee” la historia de una manera diferente, de una mane
gún sus creencias y expectativas, sin ser influenciadas/os ra subversiva. Ella nos invita a recuperar un pasado en el
por mí. que las mujeres y los hombres vivían ya como iguales. En esa

1
sociedad, la gente veneraba el principio regenerador de la contemplado la formulación del “constructivismo” feminis
vida, que está muy cerca del ciclo reproductivo del cuerpo de ta (y de la “deconstrucción”), es decir, la influencia del con
la mujer. Eisler nos está diciendo que no necesitamos inven texto y el desafío a los patrones creadores de la realidad.
tar o descubrir formas ideales para el discurso femenino; Creo que el feminismo ha influenciado ampliamente la for
sólo necesitamos recordarlo.
9 mación de la cultura, apartándonos de los argumentos re
El aspecto reconstructor de la epistemología feminista duccionistas acerca de la naturaleza universal de la diferen
consiste en una búsqueda visionaria de inspiraciones y ma cia humana, y conduciéndonos hacia un rconocimiento
neras de articular las experiencias de la mujer. Como ha mos recíproco y del valor de la diferencia.
trado la socióloga Jean Lipman-Blumen en su análisis sobre La valoración recíproca de la diferencia conduce a la po
géneros y poder, en el camino de las mujeres que reclaman di sibilidad de una mutua autorrevelación, a la unión del cono
rectamente la validez y la sabiduría de su propio género fe cimiento y del deseo, en la continuidad de los intercambios
menino se encuentran dos creencias de base: 1) La creencia a partir de diferentes puntos de vista y de diferentes personas.
de que los hombres controlan el conocimiento necesario para Para que tenga lugar esta clase de diálogo entre hombres y
dirigir nuestras vidas diarias; 2) la creencia de que los hom mujeres, debemos aprender los significados de nuestros gé
bres controlan los principales recursos de los que todas no neros reprimidos. La psicología junguiana puede ayudarnos,
sotras dependemos.’° Los análisis feministas sobre los re con tal de que la revisemos, poniéndola al día con el relati
cursos, la vitalidad, las maneras de actuar y los ideales de las vismo y el constructivismo.
personas-mujeres proporcionan un contrapunto persuasivo a También debemos aprender a superar el silencio y el si
estas creencias. Las teólogas feministas nos ayudan a educar lenciamiento de las personas-mujeres. Tener registrados ide
nuestras mentes para descubrir nuevos ideales y nuevas imá ales, imágenes, visiones, narrativas e historias de vida es un
genes ideales sobre la autoridad de la mujer.” Las psicólogas paso fundamental de la voz de la mujer hacia el “auténticó ha
feministas nos invitan a pensar de manera diferente sobre blar”. Cuando el feminismo impregna la psicología, revela las
nuestros recursos y nuestro sistema de conocimiento: a in lagunas, los puntos flacos y las deficiencias que colorean la
vestigar nuestras voces, nuestras mentes y nuestra auténtica subjetividad femenina dentro de la historia del patriarcado.
identidad. 12 Cuando el feminismo es incorporado a la psicología, sirve
Cuando contemplo el ingente trabajo del feminismo con para liberar descripciones, narrativas, informes e ideales de
temporáneo, me gusta pensar que las mujeres están traba las personas-mujeres.
jando en un “cambio de paradigma” a gran escala, en el sen Aunque el feminismo no es una práctica espiritual, o una
3 El feminismo de los años setenta
tido expresado por Kuhn.’ promesa de alivio de los sufrimientos humanos, sirve como
introdujo y defendió el subjetivismo (“buenas vibraciones”) meta espiritual. El feminismo es una búsqueda en las fronteras
en oposición al objetivismo científico. A principio de los de los mundos patriarcales, que libera a las mujeres y a las jó
ochenta, fuimos testigos del desarrollo del relativismo ex venes para que se expresen, revitalizando sus prácticas ar
presado como una toma de conciencia feminista sobre las tísticas y creativas (desde las tareas ordinarias del hogar y del
diferencias de género, consideradas como las diferencias cuidado personal, hasta las contribuciones extraordinarias a
esenciales del ser humano. A finales de los ochenta, hemos la literatura, el arte, la filosofía y la religión). También per

1
mite la posibilidad de diálogo entre los géneros masculino y
femenino, revelando nuevos paradigmas de pensamiento, al
tiempo que reconoce la compasión como el impulso humano
primordial.
CUARTA PARTE:
HACIENDO SAGRADO
DE NUEVO EL CUERPO
FEMENINO: LA CURACIÓN
DE NUESTRA RELACIÓN
CON LOS RITMOS,
LOS INSTINTOS Y
LOS DESEOS
212Centro de Desarrollo Transpersonal Centro de Desarrollo Transpersonal
1.
1
Las raíces de la palabra “conocer”, kennen y kormen en ale-

man ken en gaelico gnosis ( conocimiento sabiduria ) en
griego, y gnosco en latín son las mimas que encontramos en pa
labras como genus, genital yhgeii&ir.
El conocimiento y la creatividad son taiih5exuales como es
pirituales. Cuando la Biblia nos dice que Adán “conoció” a su
esposa, expresa igualmente este significado existencial y crea
tivo del conocimiento que incluye el cuerpo.
La desvalorización -y también el reclao- del cuerpo y de
la experieii.cncia corporal que se inició durante el reinado del pa
triarcado fue» iiñarte del rechazo de las dimensiones mágicas
• y femeninas por parte de éste. Culminó en la dicotomía carte
siana mente-cuerpo..., constituyó el punto de partida para la
psicología y el psicoanálisis, y separó de hecho nuestra mente
consciente de la conciencia de la dimensión transformadora y
mágica... El ritual se hizo gradualmente ineficaz y dejó de tener
sentido.
EDWARD C. WHITMONT
Return of the Goddess
En la antigüedad, antes de que lo Femenino fuera deste

rrado y de que las mujeres fueran despojadas de todos sus po
los misterios de nuestros cuerpos eran celebrados con
rituales. menstruación, la sexualidad, el parto, la meno
pausia y la muerte se veían como pasos de gran importancia,
como transiciones entre dos mundos, que debían ser honra
das en los territorios internos y externos. Y el cuerpo feme
nino
deres,era el vehículo de estas transiciones.

Haciendo sagrado de nuevo el cuerpo femenino
En la actualidad, se han perdido los ritos de paso, así

como nuestra reverencia por el misterio. Estamos cortadas/os
de nuestrQs. cuerpos, huérfanas/os dentro de nuestros “egos
encerrados en una piel”. Por ello, esos periodos especiales de
y
ceremonia pueden convertirse por el contrario en graves di
ficultades personales, y la oportunidad para un salto adelan
te espiritual puede convertirse en un desmoronamiento espi
ritual.
Recientemente, ha aparecido un tenacirnienLQ4çl’
Pequeños grupos de mujeres interesadas en diversas formas
10. LAS TESMOFORIAS:
de la espixiLualidaifernenina se reúnen para celebrar los
acontecimieosde transición del mundo de la naturaleza,
RITUAL DE FERTILIDAD
como los pJlujos, los s.olstiçios y los equinocios. Otras
mujeres que estúdiu eLchamanismo y las culturas nativas
DE LAS MUJERES
() ‘creanl yce1eIeffia-musicales o de curación para las
ocasiones de transició.personal, como los partos, cumplea por Betty De Shong Meador
ños, bodas, enfermedades y muertes.
Los siguientes artículos sirven para volvernos a conectar
en la imaginación ceremonial con una era antes de que el
11 El primero de los misterios femeninos con que las muje
pajriarcado robara1a belleza inspiradora jpto ala Dio res nos enfrentamos en nuestros propios cuerpos es la mens
sa y la hiciera estérÍI;apuntan hacia el pasado para indicar el truación. La mayoría de las mujeres que he conocido no han
camino hacia el futuro. experimentado sus primeros periodos, ni ninguno de los si
Betty De Shong Meador describe con detalle una cere guientes, como acontecimientos mágicos; más bien se nos ha
monia de menstruación en el que los ciclos del cuerpo de la enseñado a considerarlos como acontecimientos fisiológi
mujer están ligados a los ciclos de la naturaleza. Deena Metz cos, e incluso mecánicos, en los que el cuerpo se desprende
ger describe la iniciación sexual como un instrumento de re- de nuestra sustancia como alternativa a la fertilización.
novación, en la que el cuerpo de la mujer es una puerta ha Mientras que nuestras madres generalmente no sabían
cia lo Divino. Y Elisabeth S. Trahan vuelve a crear el rito de nada sobre la llegada de la menstruación (y a veces pensaban,
la rnenopaiij como un camino para que las mujeres recu a la vista de la primera sangre, que estaban en peligro de per
peren onscientemente su poder tras los años de maternidad. der sus vidas), a nosotras se nos preparaba con explicaciones
cientificas puestas al día y con medios y medicamentos que
nos permitieran actuar como si no pasara nada. Lo ideal,
pues, era olvidarse de la pérdida de sangre.
La analista junguiana de Berkeley, California, Betty De
Shong Meador, se remonta a las tesmoforias, una ceremonia
216 217
Haciendo sagrado de nuevo el cuerpo femenino Las Tesmoforias
prepatriarcal de fertilidad que vinculaba las semillas de la truación!”. Hablan de algo sobre lo que nunca has oído hablar,
cosecha con las semillas del cuerpo de la mujer. El ritual im algo tan sucio como joder.
plicaba purificación, descenso, sacrficio y encuentro con Eres la última en haber empezado a tener la regla. Has
la Serpiente, la deidad subterránea de la fertilidad. Tal vez puesto un parche de papel de retrete a tu muñeca vestida de
observen que muchos de los elementos de este descenso se pa novia. Sientes el rubor en la cara y el calor en la ingle cuan
recen a los descritos por Elisabeth 5. Strahan. Son los ele do juegas a esto con ella.
mentos universales de la iniciación femenina. Empieza tu periodo. Estás en el cuarto de baño rosa. Tu
Este artículo ha sido reproducido con la autorización de madre está afuera tendiendo ropa en el tendedero. Le dices
la revista junguiana de Los Angeles Psychological Perspec que crees que has empezado a tener la regla. Ninguna de las
tives, volumen 17, número 1, 1986. dos ha pronunciado antes delante de la otra esta palabra.
Betty De Shong Meador es analista junguiana en Ber Entra a la casa contigo. No dice gran cosa. Sólo dice: “A
keley, California. Es profesora de la Academia C. G. Jung de veces es un alivio cuando empieza”. Te preguntas qué querrá
San Francisco y cofundadora de la Lavender Rose Women ‘s decir con esto.
Mystery School. Ha escrito numerosos artículos sobre la Después te ves volviendo de la escuela a tu casa con Jean
Diosa negra y divulgado y traducido el mito de la diosa Ann. Lleva puesto su abrigo rojo de osito de felpa. Algo se
Inanna. cae. “Mira hacia allá”, te dice. Ella recoge algo; no lo has vis
to porque estabas mirando hacia donde ella te señaló. Después
te dice que se le había caído el támpax.
Has tenido la menstruación durante treinta y cuatro años.
Después de haber cesado tus periodos, oyes a otras amigas
Sueñas con la menstruación. Sueñas con una hemorragia, que hablan de que todavía los tienen. Te das cuenta de que
con una inundación, con que tus vestidos se tiñen, se man ahora estás separada de ellas. Sueñas que tienes que hacer un
chan. Sueñas que tienes el periodo con tus amigas, con tu ma ritual que marque la transición entre tener el periodo y dejarlo
dre, con tus hermanas. Sueñas con otras mujeres que tienen de tener. No se te ocurre qué es lo que puedes hacer.
el flujo, que se tiñen, que tienen hemorragias. Sueñas que das Comienzas por verte a ti misma como una mujer que ya no
la bienvenida al flujo, que lo odias, que estás avergonzada, tiene la menstruación. Paseando por la calle, te das cuenta de
que lo ocultas. las mujeres que todavía menstrúan; las observas en los cafés.
Reúnes recuerdos de la menstruación. Te acuerdas de ha Sientes el ciclo activo en sus cuerpos; sientes la frontera
ber visto la sangre en el cuarto de baño, pero no recuerdas lo temblorosa de su fertilidad. Tu cuerpo empieza a hormigue
que tu madre dijo al respecto. Recuerdas que dijo que el rojo ar. Sientes las lágrimas que quieren estallar detrás de tus
de la sábana teñida era pintura de uñas. ojos; te surge una oleada de compasión por ellos; sientes la
Te acuerdas de Jaena Ann, de Grady, de Nancy y de Ion urgencia de protegerlos en su vulnerabilidad.
Ellen inclinadas sobre el diccionario en la buhardilla de la Oyes que las mujeres del noroeste de la India menstrúan
casa de Charlotte. Están buscando la palabra. Crees que em sentadas en el suelo sobre musgo blando. Carol dice que una
pieza por “a”, “administración”. Todas se ríen. “No, ¡mens vez estaba sola en una cabina y que quería menstruar en la tie
218
rra. No pudo resolverse a hacerlo. Oyes de una mujer que tie

ne una calabaza adornada con abalorios que utiliza para re
coger la sangre de la menstruación. Judy dice que le gustaría
recoger su sangre menstrual, pero que no sabe que haría con
ella. Nyla afirma que la sangre es buena para las plantas;
conoce a una mujer que pone la sangre menstrual en sus
1 El ritual es de una antigüedad inmemorial. Desde los tiem
pos en que las mujeres descubrieron que las semillas silves
tres podían conservarse, ser enterradas en la tierra y crecer,
empezaron a bendecir las semillas con sangre y carne. Des
de entonces celebran el ritual que en Grecia se convirtió en
plantas y que éstas florecen. Las mujeres que participan en las Tesmoforias han al
Oyes que en el pasado había rituales de mujeres centrados canzado la edad del principio de su ciclo menstrual. Han flo
en el misterio de la sangre. Te enteras de que las mujeres recido, han estado embarazadas o pueden estarlo. Comparten
celebraban su conexión entre el ciclo de fertilidad de sus
en sus cuerpos el vínculo común del fruto maduro de un úte
cuerpos y el ciclo de fertilidad de la tierra. Te enteras de que
ro que se llena y se desprende de sangre al ritmo de la luna.
las mujeres honraban sus ciclos menstruales con un regalo de
O están ya más allá de los ciclos menstruales. Han sobrevi
la diosa. Te enteras de que las mujeres protegían con orgullo vido al parto, a la enfermedad, a los partos malogrados, a los
lo sagrado de su fertilidad. Sientes el poder de un ritual que tiempos de infortunio y de hambre, a las penas y al desorden.
reúne a las mujeres, para articular y celebrar el misterio que Han pasado la menopausia, y el recuerdo del sangrar, el re
portamos en nuestros cuerpos. Quieres saber más acerca del cuerdo de la sangre se mezcla con el tiempo de crear sabi
ritual sagrado que hemos perdido. duría.
Los campos pertenecen a la mujer. La mujer lleva en su Los antiguos griegos celebraban un ritual aparte llamado
cuerpo el conocimiento secreto de la fertilidad y del creci Atforias parp las jíXa ue t avüi ng rnenstruab,n. Par
miento. La mujer es como un campo. Tanto el campo como la ticipaban en él las niñas entre siete y once años. En la Arre
mujer acarician la semilla. La semilla está “en casa” en su toforias las niñas actúan como parte del drama ritual de las
cuerpo y en el cuerpo de la tierra. La semilla se nutre del ali Tesmoforias, pero se les oculta cuidadosamente el misterio.
mento húmedo y fértil de que es portador su sangre y la tierra. Cuatro niñas de ascendencia noble se alojan durante el fes
Su cuerpo abriga de manera natural la semilla en el útero. La tival en el templo de la diosa. Una de las noches portan ob
semilla crece. El misterio la deja asombrada. Y ella es el mis jetos sagrados que no pueden ser vistos ni nombrados. Las
terio. De una manera sabia, los campos pertenecen a la mujer. mujeres colocan objetos en canastas que las niñas llevan so
Mucho antes de que los dioses olímpicos llegaran al po bre la cabeza. Caminan por un pasadizo subterráneo natural.
der conducidos por el gran patriarca Zeus, las mujeres en Al final del descenso cambian los objetos sagrados por algo
Grecia celebraban las Tesmoforias. Cada año, en la época que está envuelto y oculto y lo llevan de vuelta al templo. De
de siembra, las mujeres se reunían para rememorar el miste esta manera, las niñas se preparan para el misterio central de
rio sagrado de la semilla en la tierra y de la semilla en sus sus vidas que más adelante celebrarán en las fiestas de las
cuerpos. Nadie conoce el comienzo del ritual. Han sido en Tesmoforias.
contrados en muchos sitios de la vieja Europa restos arque El ritual de las Tesmoforias empieza con nueve días de
ológicos votivos similares a los utilizados en las Tesmoforias, preparación, durante los cuales las mujeres observan ritos
que datan de 6.000 años a. de C. de purificación. Durante los nueve días y noches de prepa

ración, las mujeres se abstienen de toda relación sexual. Así Para prepararse para las Tesmoforias, las mujeres beben la
empieza su apartamiento de los hombres. Las mujeres duer bebida hecha de ligustro para ayudar las menstruaciones.
men solas en sus casas. Preparan pequeñas camas indivi Las hojas del ligustro tiemblan en las ramas colocadas a la
duales para dormir fuera de la cama matrimonial. Las muje puerta de la cabaña, como signo del flujo inminente. Las go-
res empiezan a trabajar y a pasear solas. Empiezan a penetrar titas de sangre empiezan a desprenderse de las paredes de los
totalmente en su propia feminidad. Comen ajo para repeler a úteros, empiezan a reunirse en corrientes silenciosas. A la pri
los hombres mediante el olor desagradable de sus alientos. mera muestra de sangre, las mujeres están santificadas para
Colocan cuidadosamente una sopa de ajo para Hécate en las el gran ritual de las Tesmoforias. Se atan alrededor del bra
piedras apiladas en las encrucijadas de los caminos. zo una cinta roja que comunican a las demás que están listas,
Al atardecer de cada uno de los nueve días preparatorios, con flujo, apartadas, intocables por ser sagradas. El flujo de
las mujeres se reúnen en los campos escogidos. Allí, cons ese mes de siembra, Pianepsion, es sagrado y pertenece a
truyen cabañas para dormir durante los días del ritual y pre las deidades que rigen las Tesmoforias.
paran el gran altar. Llega el día del festival. Las mujeres se reúnen en el cam
Cada mujer construye la cabaña en la que dormirá. Trae del po sagrado. Sólo se reúnen las mujeres; ni siquiera se permite
campo grandes ramas de higuera silvestre, árbol que en la la presencia de un perro macho. Ellas guardan el área con cu
Grecia clásica señalaba la entrada al mundo subterráneo. Cu chillos rituales de sacrificio, fuegos y antorchas. En cierta
bre su refugio con esas ramas de higuera. Dentro de la caba ocasión, mujeres con las caras pintadas de sangre castraron
ña se prepara un lecho de hierba y montones de hojas blandas. a un hombre al que atraparon espiando.
Sobre el techo de la cabaña y sobre el lecho esparce ho Al primer día de los tres del festival se le llama Catodos
jas de ligustro. Entreteje sus ramitas alrededor de la puerta de y también Anodos, descenso Las mujeres,
la cabaña. Asegura sus hojas y flores dentro de sus paredes rificadas tras los nueve días de preparación, bajan lechones
por encima del lecho. Cada tarde cuando se acaba el trabajo, a una sima. Agitándose y con agudos chillidos, éstos se de
las mujeres se reúnen y beben a sorbos una bebida refrescante baten en los brazos fuertes de las mujeres. Juntos descienden
hecha de hojas machacadas de ligustro. a la sima.
Las mujeres cuentan numerosas historias sobre la planta El mismo día, las mujeres salen de la sima llevando gran
de ligustro. Dicen que florece con tres colores en el río Im des trozos de carne asada de cerdo. La naturaleza sagrada de
braso o Partenio. Dicen que el ligustro crece en la isla de Sa este ritual silenciaba cualquier información de lo que real
mos, o Partenia, la Isla de la Virgen. Cuentan que el ligustro mente ocurría allí abajo. Que las mujeres mataban los cerdos
crece con profusión en las orillas arenosas del río, y que sus es seguro. Pero se ignora la procedencia de la carne asada
flores azules, blancas y rojo pálido se dan en cantidades in con la que salían de la sima. Algunos afirman que la carne
numerables; que entre ellas Hera viene a pasar su katamenia, era la que quedaba del cerdo sacrificado el día anterior.
su periodo menstrual, que las mujeres de Samos llevan cada Otros aseguran que la carne asada pertenecía a cerdos sa
mes la estatua de Hera allí desde su templo, para pasar con crificados durante el ritual de la trilla de primavera. Otros di
ella la katamenia; que después, la bañan y vuelven virgina cen que la transformación de la carne fresca en carne asada
les al templo con ella. es un misterio.
222Centro de Desarrollo Transpersonal Centro de Desarrollo Transpersonal223
A
1
Se dice que los lechones eran el alimento para las deida mento conozco la vida que sustentas en mi cuerpo. ¡Gran
des primigenias del mundo subterráneo: las serpientes. La dei Serpiente! ¡Misterio! ¡Come!”
dad Serpiente aporta la vida bajo la tierra, rige el misterio de Dicen que las serpientes comían casi toda la carne de los
la tierra profunda. Las mujeres llevan alimentos a la deidad cerdos.
de la Gran Serpiente, pequeños lechones con su grasa y su Las mujeres salen de la sima portando cestas con carne
propensión a la fertilidad. asada de cerdo. Los silbidos y golpeteos que hace la Ser
Las mujeres se inclinan ante la Gran Serpiente con acti piente acompañan la escalada de las mujeres. Llevan en las
tud reverente. Están inexorablemente unidas a ella, aunque cestas el alimento transformado de la Serpiente. Imitan sus so
no lo sepan o no lo reconozcan, ya que la Serpiente es el po nidos. Se han convertido en la Serpiente. Ésta da vida a las
der en la tierra, en el campo, y el poder en el cuerpo de la mujeres, se encarna en ellas. La Serpiente está viva y emer
mujer. ge al mundo de arriba dentro del cuerpo de las mujeres.
Las mujeres veneran a la Serpiente con sacrificios. Cada El segundo día de las Tesmoforias se llama ateia, ejJ21&
mujer desciende a la sima con un cerdo para ella. El cerdo de en Medio, el día del solemne ayuno. La única sustancia
significa una promesa a la serpiente, una promesa que cada que se come es la semilla carnosa y roja de la granada. Si una
año sella el vínculo entre la Serpiente y la mujer. La Serpiente semilla cae al suelo, se queda allí para los muertos. El silen
no necesita que se le recuerde su poder, ¡pero sí lo necesitan cio y la tristeza impregnan la atmósfera.
las mujeres! ¡Ah! Ellas tienden a olvidar. Cuando la vida En este día de en medio las mujeres mezclan la carne asa
discurre perfectamente en el pueblo y el almacén está lleno, da de cerdo con semillas de maíz. Colocan la mezcla en el gran
puede que las mujeres digan: “Qué listas somos! ¡Qué bien altar y allí permanece en el sitio sagrado a lo largo del día.
sabemos proveer a nuestro pueblo!” Tal vez olviden que el Al subir de la sima una porción de la carne asada, las
poder de la vida pertenece a la Serpiente. Para recordarlo, ce mujeres han tomado carne de la Serpiente. Como compen
lebran las Tesmoforias. sación, bajan un sustituto. Elaboran imágenes sagradas cuyos
Las mujeres tienen cariño a los lechones, que tienen una nombres no pueden pronunciarse. Las hacen de pasta de ce
piel sonrosada y suave tan delicada como la de un bebé. Para real y las bajan a la sima en cestas. Los objetos sagrados cu
las Tesmoforias, cada mujer lleva a la Serpiente lo mejor de yos nombres no pueden pronunciarse tienen forma de penes
la carnada, el lechón más sano, robusto y redondo. En lo más y escrotos o anillos de serpientes.
profundo de la sima, cerca de la morada de la Serpiente, las Durante el resto del día, las mujeres ayunan sentadas en
mujeres sacrifican a los lechones, abriéndolos por el vientre. el suelo. Dicen que las mujeres imitan el modo antiguo de vi
Para ellas es duro y doloroso hacerlo, ya que los lechones for vir. Actúan de la manera primitiva que sus abuelas conocían.
man parte de sí mismas. Las mujeres dicen a la Serpiente: Se sientan en el suelo. Se sientan en silencio ritual en los cam
“Aquí! ¡Aquí hay una lechoncilla! ¡Es una parte de mí! pos sagrados.
¡Con su pequeño sexo en formación, con su estro, con su Silenciosamente su propia sangre fluye dentro de los cam
gran vientre esperando las semillas! ¡Aquí está! ¡En este mo pos. Se sientan con el sexo pegado a la tierra besando el sue
mento, Serpiente, te la doy! De todas maneras te pertenece. lo sagrado de los campos. La sangre de las mujeres fluye
Tú eres quien atizas la vida en nuestros úteros. En este mo- dentro del campo. El suelo del campo bebe la rica sangre de

las mujeres. En solemne silencio éstas dan a la tierra su sus

tancia. La Serpiente se mueve en las mujeres a través del
1 Las Tesmoforias
oscuras y escondidas son lanzadas al aire por las voces de las

demás. El griterío expone los secretos, hace añicos el orgu
flujo de sangre. Aporta la riqueza fertilizadora de ésta al llo, iguala a las mujeres en un terreno común.
cuerpo de la tierra. Las mujeres son una con la tierra. La Son mortificadas, despojadas de su orgullo, sacudidas y
vida de la tierra y la vida de las mujeres al mezclarse reali puestas al mismo nivel. La lengua de la Serpiente corta el fal
zan un abierto intercambio, un vínculo de parentesco, revi so orgullo y el deseo caprichoso. Ellas reconocen que todo
talizado por el poder misterioso de la Serpiente. pertenece a la Serpiente, y ninguna de ellas crea, ama, trabaja,
El ayuno se rompe a la puesta de sol. En una asamblea ri construye o juega fuera del abrazo de la Serpiente, del abra
tual, las mujeres comen pasteles, que tienen la forma de las zo que sostiene la vida.
partes pudendas que están sobre el altar. Se rompe el silen Una por una empiezan a caminar hacia sus cabañas. Cada
cio. Las mujeres empiezan a bromear y a reír mientras se una entra en su cabaña para dormir y esparce cuidadosamen
pasan los pastelitos con forma de sexo de mujer, de pequeña te ligustro sobre su lecho. Se dice que el ligustro, que facili
media luna creciente. ta el flujo de sangre, ahuyenta a los reptiles. Cada mujer sabe
Al atardecer, las mujeres se reúnen alrededor del fuego. El que el contacto íntimo con la Serpiente tiene un doble filo. Los
humor jovial que comenzó al acabar el ayuno se transforma dones de visión y fecundidad de la Serpiente son sólo una
ahora en jolgorio. La presencia de la Serpiente en las muje parte que sale de sus poderes de locura y posesión salvajes.
res hace desaparecer las fronteras de la vida ordinaria. Ya se Las mujeres se protegen a sí mismas con el ligustro por la no
han ido las preocupaciones que atan a las mujeres a la vida che, cuando su intensa alerta diurna se desvanece en el sueño.
del pueblo: el cuidado de los niños, los amantes, los maridos, Piden a la gran Serpiente que les libre de la locura y de la po
el chismorreo, la lucha. Las mujeres han cortado sus atadu sesión, aun reconociendo también que la locura entra dentro
ras con la vida cotidiana y empiezan a ver con los ojos des de su poder.
piadados de la Serpiente. El tercer día del festival se llama Kalligenia, o Nacimiento
La visión desata sus lenguas. Dicen lo que ven. Se agi Hermoso. Las mujeres se levantan cantando; han sobrevivi
ta y aumenta la pasión. Comienzan a gritarse unas a otras. do a las grandes pruebas de las Tesmoforias.
Sale a la luz lo que hasta ahora se había tolerado, ignora Se han atrevido a penetrar en la morada de la Serpiente.
do, escondido. Lanzan observaciones procaces, descrip Ante ella han hecho sacrificios. Han participado en un ri
ciones mordaces y ardientes de actos imaginados en la más tual de muerte en su presencia. La Serpiente las ha llenado.
absoluta privacidad. Nadie se libra, ni las mujeres, ni sus La misma deidad ha surgido desde las profundidades de los
padres, familiares, maridos, amantes o amigos. Se ríen, se cuerpos femeninos y su temible poder las ha poseído. Ella ha
insultan. La que está gritando compite por decir la última ampliado las fronteras de la vida ordinaria y ha hecho estre
palabra. Se encolerizan. Lloran. Se pelean, se tiran terrones mecer a las mujeres.
o piedras. Ahora ha llegado el día del Nacimiento Hermoso y la
Nada se libra. Los secretos, las rencillas, los odios, las en Serpiente regresa a su abismo. Ahora las mujeres van de un
vidias, los celos, todo sale a la luz. Una mujer no puede evi sitio a otro sintiendo su retirada. El aire está limpio. Ya no es
tar ver cómo su secreto se hace público, cómo sus pasiones
226Centro de Desarrollo Transpersonal

1 tremece. La Serpiente se ha ido.
1
Las Tesmoforias
Se implanta de nuevo la antigua jerarquía. Las mujeres cjófl de la familia, los hijos, el pueblo. Exterioriza una visión
más ancianas se acercan al altar; son las más respetadas por más allá de los hábitos de criar y de las estructuras seguras
haber dormido muchos años sobre el ligustro. Las demás de la sociedad. Se sitúa a sí misma fuera de las exigencias de
mujeres se reúnen alrededor de ellas. Las ancianas hablan de la civilización y desciende a la deidad que existe con ante
la retirada de la Serpiente. Dicen que nos ha dejado su me rioridad a los logros de la civilización. Reconoce que sus ra
moria. Levantan del altar las cestas con carne y semilla y íces como mujer se extienden hacia la inmensidad de abajo,
las pasan entre las mujeres. Cada una de ellas toma un pedazo y que su vida y su cuerpo con su ciclo natural están soste
de la mezcla y siguen a las portadoras de las cestas hasta el nidos por un misterio anclado en la profundidad del mundo
campo. Allí entierran carne y semillas en el suelo santifica subterráneo. Reconoce la llamada de la deidad del mundo
do. Cuando todas las semillas han sido plantadas, las muje subterráneo. Oye su llamada cuando en medio de la vida
res permanecen sobre los surcos arados y empiezan a cantar ordinaria...
suavemente. Cualquiera sea el nombre que den a la gran dei Antes de que una mujer actual pueda aportar la fertilidad
dad Serpiente, le cantan alabanzas. Desde tiempos inmemo al campo y a sí misma, antes de que pueda darse cuenta de sus
riales le cantan a ella, que tiene muchos nombres. Muy pocos poderes creativos, tiene que participar en el Descenso. Debe
de éstos nos han llegado. En la antigua Sumeria se llamaba poner juntas todas las piezas de su ser. Tiene que liberarse de
Ereshkigal. la rutina de su vida diaria. Ha de descender al abismo, in
¿Dónde pueden las mujeres en la vida actual encontrar un troducirse profundamente en la tierra, bajo el suelo. Y para
sitio para alabar a la gran deidad Serpiente? Aquí, la hemos esto, tiene que tomar con ella una ofrenda que sustente la
perdido; no hay lugar para ella; no hemos recibido recuerdos vida, la Serpiente. Debe recordarse a sí misma su vínculo
de ella por parte de nuestras madres. Hemos olvidado cómo inexorable con la Serpiente a través de su cuerpo, y renovar
transmitir su existencia a nuestras hijas. Ninguna fiesta sa dicho vínculo con una promesa; ha de dar a la Serpiente un
grada honra el misterio central de nuestras vidas. Nuestras lechón, o sus valiosas posesiones, o incluso su propia vida;
madres se avergüenzan de hablar de él. tiene que hacer su sacrificio al misterio subyacente y que lo
Se ha perdido nuestra tradición. La memoria ha quedado sostiene todo, y después esperar a que su don se descom
hecha pedazos; sólo recogemos pedazos rotos y hemos olvi ponga. Ahora, ella está desnuda y se inclina humildemente.
dado qué piezas van juntas. Hemos olvidado que la misma Las serpientes danzan a su alrededor y alrededor de su ofren
deidad regula el descenso al mundo subterráneo y el ciclo da, y están satisfechas. Comen la carne asada. Aceptan la
misterioso dentro de nuestros cuerpos. Hemos olvidado que ofrenda de la mujer. Cuando llega el tiempo, bendicen su
el descenso ha de tener su sacrificio; hemos olvidado que la vínculo con ella, llenan sus cestas con la carne transformada
sustancia quemada del sacrificio es el don de la fecundidad. y maloliente, y la despiden. La mujer vuelve al mundo de arri
En el festival de las Tesmoforias, las mujeres que tienen ba con la sustancia de su propia creatividad.
la menstruación se abren a la deidad Serpiente a través del sa El misterio de las Tesmoforias no dice que la creatividad
crificio. Cada una despedaza un lechón y lo mata ante la de la mujer viene de abajo. Para recibir el don, tiene que
Serpiente. Para llevar a cabo esta acción, la mujer sacrifica descender. Allá en la morada oscura de la vida primal, en
sus maneras naturales maternales. Sacrifica la reivindica cuentra a una vieja hermana, a la que vive antes que ella, La

228
que mantiene la frágil estructura de la civilización. El en

cuentro sacude sus estrechas creencias. Todas sus creencias
se hunden ante la exigencia de la primacía de la vida misma.
La mujer regresa ampliada, expandida. Vuelve con alabanzas
y regalos de comprensión.
11. SEDUCIENDO AL MUNDO

DE NUEVO: EL RETORNO DE
LA PROSTITUTA SAGRADA
por Deena Metzger
¡ En algunas tribus nativas americanas, existe una mujer a

la que se forma en el arte de la sexualidad para iniciar a los
muchachos durante su pubertad en los secretos del cuerpo fe
menino. Esta “Mujer de Fuego” y su contrapartida, el “Hom
bre de Fuego que inicia a las muchachas, son venerados
“,
como maestros de lo sagrado. Ambos reciben una amplia

formación, y a sus iniciados e iniciadas se les permite hacer
el amor con ellos todo el tiempo que deseen. En el contexto
de la Quodoushka, como se llama a esta sexualidad nativa sa
grada, hacer el amor constituye una práctica y una
espirüua.L que, de manera ideal, tendría que estar disponibleS.;
para todo el mundo.
Deena Metzger, psicoterapeuta de Los Angeles, poetisa y
escritora, nos dice que la Mujer de Fuego tenía una precur
sora en los tiempos antiguos, lQuedishtu, o Prostituta Sa
grada. Esta facilitaba el acceso a lósagrado, antes due se
produjera la falsa división entre pecaminoso y sagrado, sa
230 231
Haciendo sagrado de nuevo el cuerpo femenino Seduciendo al mundo de nuevo
cerdotisa y sacerdote, cuerpo y mente, y antes de que lo Fe Thought. Actualmente está trabajando en Writing for Your
menino cayera en desgracia y fuera abandonado y lo Mas Life: Creativity, Imagination and Healing. Está casada con
culino se convirtiera en la única esfera de poder. Como en Michael Ortiz Hill, tiene dos hijos mayores, y vive alfinal de
carnación de la Diosa, conducía a los hombres a reconectar ¡ un camino de tierra con su lobo Timber.
con lo sagrado en ellos y con lo sagrado en ella. Histórica
mente, todas las mujeres cumplían esta función en el templo,
en ocasiones por un periodo tan largo como un año.
Hoy día, por supuesto, esta idea no sólo es chocante, sino
qüe también constituye tal herejía que es difícil que sea com Hace mucho tiempo, en Sumerias, en Mesopotamia, en
prendida: Se ha reforzado la escisión entre sexualidad y es Egipto y en Grecia, no existían burdeles ni prostíbulos. En
piritualidad. Hemos sido desposeídos de nuestra sexualidad aquellos tiempos, en esos países existían en su lugar los Tem
natural, nuestros instintos han sido reprimidos y nuestro plos de las jutas.Sagra4as. En dichos templos, los hom
sentido de los sagrado ha sido desterrado a la otra vida. bres eran purificados y no mancillados, se restauraba la mo
Como señala Metzger, en un universo sagrado, aquélla es Sa ralidad en lugar de profanarla, y la sexualidad no estaba
grada; en un universo profano, es una fulana. pervertida, sino que era sagrada.
Las consecuencias han sido devastadoras: los hombres se La prostituta original era una sacerdotisaÁ el conducto a lo
J’ enfrentan a una proyección escindida del arquetipo Feme divino, aquella a través de cuyo cuerpo uno entraba en la
nino y buscan..,Jjlrmentoy el cariño en una fuente (la figura plaza sagrada y era restaurado. Los guerreros y los soldados,
ie q_rn iadona), yja excitación y el erotismo en mancilladosor los combates del mundo de los hombres,
otra (una querida, una amante, o una ramera). Como muje acudían a la Prostituta Sagrada, la Quedishtu, que significa li
res que vivimos bajo el fardo de estas proyecciones, hemos teralmente la no contaminada”, para ser purificados y uni
perdido la conexión con nuestra sexualidad, que fuera una dos de nuevo a los dioses. La Quedishtu o Quadesh se aso-
vez, hace mucho tiempo, una vía de alegría y autoexpresión, cia con varias diosas, entre las que se incluyen Hathor, Ishtar,
y un vínculo con el aspecto sagrado de nuestros cuerpos. Anath, Astarté y Asherah. Es interesante señalar que, según
El ensayo provocativo y original de Metzger es, como de Patricia Monaghan en The Book of Goddesses and Heroi
cíamos en los años sesenta, una llamada a las armas amo nes, Astar significaba originalmente “çj, Utero”, pero
rosas: la autora pide que hagamos el amor como acto polí aparece en el Antiguo Testamento como Astoreth que sig
tico... y que hagamos el amor como un acto espiritual; hace
un llamamiento a la resacralización de nuestros cuerpos y de A pesar de las Escrituras y del pensamiento ortodoxo, la gue
nuestras entrañas. rra se veía como algo que separaba a los hombres de los dioses,
Deena Metzger es poetisa, novelista, dramaturga, y psi y uno tenía que volverse a conectar para ser capaz de entrar de
coterapeuta de Los Angeles. Entre sus obras se encuentran nuevo en la sociedad. El cuerpo y el acto sexual eran los me
Dark Milk; The Axis Mundi Poems; Skin: Shadows/Silence; dios de volver a entrar. Siendo el cuerpo el instrumento, inevi
The Woman who slept with Men to Take the War Out of tablemente el placer era algo que lo acompañaba, pero el atri-_
Them; Tree; Looking for the Faces of God; y What Dina buto esencial de la sexualidad en este contexto era la oración.

En Pergamon, Turquía, vilas ruinas del Templo de las largo como un año. Esto contradecía la hegemonía que el
Prostitutas en el Camino Sagrado, entre otros templos, pa sacerdocio requería.
lacios y edificios públicos. Cualesquiera que hayan sido los Para conseguir el poder, con frecuencia es necesario po
ritos que imaginamos que tuvieron lugar en esos otros edi ner el mundo bocabajo. Por esto, los sacerdotes afirmaron que
ficios, es corriente asociar a las Prostitutas Sagradas con lo sagrado estaba pervertido, que el camino de lo divino era
orgías y libertinaje —tanto si las ensalzamos, como hacemos el camino de la perdición. No son infrecuentes inversiones de
los neo-paganos, como si las condenan, como hacen los ju este tipo. Las nuevas religiones suelen apropiarse de las cre
deocristianos-. Pero es posible que ninguna de las dos vi encias y prácticas existentes, y después invertirlas. Así, Ha
siones sean correctas, ya que tienden a exagerar la actividad des, centro espiritual del paganismo griego, se convirtió en el
física e ignorar o impugnar el componente espiritual. Nues Infierno. El descenso al Hades, núcleo de los misterios e4u-
tra preocupación materialista por la forma nos quita la visión sicos y de la iniciación exigida a cualquier persona gueçjn
del contenido. tesase por el alma f..iiipara&oiiel sufrimiento ja
Pero no es de extrañar que, desde el principio, los prime — erdición. En onde Píndaro había escrito: “Tres veces ben- 1’
ros patriarcas, los sacerdotes de Judea e Israel, los profetas de itos son aquellos que han visto estos Misterios, porque co-!
Jehová, todos ellos condenasen a las Prostitutas Sagradas y nocen el fin de la vida y su principio”, más tarde Dante dejóI.,
el culto a Asherah, Astarté, Anath y a las lemás diosas. las-. escrito: “Tú que entras aquí, abandona toda esperanza”. Igual
de los sacerdotes. las mujeres eran una prtaa1o mente, Dionisos, el dios de la vida, se convirtió en Satán;
divino. Si los sacerdotes deseaban interponerseentre el pue Adonis, el esposo de Afrodita, se convirtió en Cristo. María
Tio divino, tenían que apartar a las mujeres de aquella Magdalena, la Prostituta Sagrada, fue convertida y transfor
función. Así pues, no se trataba de que la sexualidad fuera mada; Afrodita se convirtió en Eva y en la Virgen María.
considerada originalmente pecaminosa por sí misma, o de Las inversiones eran completas. El viaje de Psique (del alma)
que la sexualidad de las mujeres amenazase la propiedad y la hacia la individuación se volvió casi imposible, al no existir
descendencia; se trataba de que para obtener el poder, los ya Afrodita, la madre de Eros, para atraer al Ser.
sacerdotes tenían que reemplazar a las mujeres como cami Tres de los caminos esenciales hacia los tres mundos es
no hacia lo divino -esa puerta tenía que ser cerrada-. Pode taban bloqueados o habían sido desviados. Los dioses no
mos elaborar la hipótesis de que la terrible misoginia que murieron en tiempos de Nietzsche, sino muchos siglos antes
sufrimos todas las mujeres fue instituida con este objetivo. con la subversión del sacerdocio femenino, y la secularización
Las mujeres han sido el vínculo esencial de los tres mun y degradación del cuerpo sagrado.
dos. Vinimos al mundo a través de la madre; a través de los Este artículo trata de la seducción, del coqueteo, del eros;
ritos de Deméter e Isis entrábamos en el mundo subterrá es un intento de restaurar la tradición, de instituir de nuevo
neo; y a través de la Prostituta Sagrada llegábamos a lo di una manera de ver el mundo. No se trata solamente de res
vino. El acceso era personal e incondicional. No bastaba con taurar las prácticas, sino sobre todo de restaurar la concien
que un nuevo sacerdocio suplantase a las mujeres. En la épo cia de la que pueden provenir estas prácticas.
ca de la Quedishtu, todas las mujeres servían a los dioses ¿Cuál fue el impacto en el mundo de la supresión de la
como Prostituta Sagrada, frecuentemente por un periodo tan Prostituta Sagrada? No nos preocupa aquí la supresión de

r
Seduciendo al mundo de nuevo
ciertos ritos, sino más bien la privación de la conciencia im gradas. En la novela, una mujer llamada Ada anda por la ca
plícita en esta supresión. Çesaron todas las prácticas ue ve lle de una ciudad ocupada, de vuelta del cementerio, y pasa
neraban la vía femenina. Fueron suprimidos los Misterios de largo por delante de su casa hacia la casa del general; en
leusicos,Tie habían proporcionado la imnortalidad; fueron tra en ella sin decir palabra y se introduce en su cama sin ver
suprimidos los misterios de Cabeiri, creados concretamente güenza. Lo hace en pleno conocimiento de que está llevando
para redimir a las personas que tenían sangre en sus manos; a cabo un acto político. Más adelante, Grace, una vieja pros
se infundió un sentido de culpabilidad a la procreación; fue tituta, rememora
ron condenados los festivales de fertilidad, que habían pro
porcionado el vínculo entre la tierra y el espíritu. Cuando Eran dulces los hombres que venían. No permitíamos látigos
los sacerdotes separaron el cuerpo de los dioses, separaroJ ni material duro. Y cuando se iban... ¡pobres corderillos! ¿Cre
mismo tiempo lo divino de la naturaleza, creando así la es es que las viudas nos enviaban una cesta en Navidad con un pe
queño jamón casero para darnos las gracias?
especular sobre sus consecuencias, aunque debemos admitir Siempre solían decir que esos hombres hubieran destrozado
que se produjeron consecuencias cuando los hombres volví la ciudad entera el sábado por la noche, si no hubiera sido por
an de la guerra sin la posibilidad de limpiar la sangre de sus nosotras. Pensé que debíamos haber recibido una condecoración
del Ayuntamiento. Tal como lo pensaba se lo dije al jefe de po
manos, cuando no se reconstituía la comunidad física y co licía. Eramos la mejor inversión en la ley y en el orden que ja
tidiana entre los dioses y la gente. No era la mujer en sí mis más se hubiera hecho.
ma la que era atacada, sino que eran los dioses mismos a los
que se exiliaba. Tal vez el mundo tal como hemos llegado a ¿Qué significa volver a coquetear con una sociedad? Sig
conocerlo -impersonal, abstracto, frío y embrutecido- fue nifica que debemos volvernos vampiresas de nuevo, seres
engendrado en esta división. sexuales/espirituales, que debemos manifestar el eros. Esto
En un universo sagrado, la prostituta es una mujer santa, una significa que debemos cambiarnos a nosotras mismas desde
sacerdotisa. En un universo secular, la prostituta es una rame nuestros propios cimientos. No podemos convertirnos en los
ra. En esta distinción se encuentra la agonía de nuestras vidas. instrumentos capaces de volver a santificar la sociedad, a
La cuestión es: ¿cómo nos relacionamos hoy día con este menos que estemos dispuestas a convertirnos una vez más en
hecho, como mujeres, como feministas? ¿Existe una vía para sacerdotisas que sirven a los dioses, no en teoría o con prác
volver a santificar la sociedad, para volver a ser de nuevo sa ticas vacías, sino a partir de nuestra misma naturaleza. Sig
cerdotisas, para ponernos al servicio de los dioses y de eros? nifica que debemos identificamos con eros, sin importarnos
¿Podemos mientras “re-visionamos” volver a coquetear?” las consecuencias aparentes para nosotras mismas. Incluso si
Vampiresa: Una mujer que hace lo que puede para en parece extravagante e inoportuno, incluso si nos hace vul
cantar o cautivar utilizando sus atractivos sexuales. nerables. Significa que no podemos ser distraídas de esta ta
Neo-vampiresa: remediar, reparar, renovar, restaurar, o rea, por el placer, el poder, la lujuria o la cólera. Exige una
restablecer. sincera dedicación otra vez.
En 1978, escribí una novela, The Woman who Slept with Sin embargo, es exactamente esta dedicación de nuevo a
Men to Take the War Out of Them, sobre las Prostitutas Sa- los principios de lo Femenino la que es tan problemática.

Lo Femenino ha sido tan desvalorizado y degradado que tiene persona, en la oscuridad, si dejo hablar a las partes oscuras de
muy poco poder en el mundo; hemos sufrido tantas pérdidas de mi cuerpo, con la lengua callada, con el lenguaje del cuerpo,
oportunidades, hemos sido tan oprimidas, que es difícil, cuan cuando entro en una parte de mí que creía que estaba realmente
do no aparentemente imposible, continuar representando lo empezando a morir, y desciendo al interior de la materia, sé que
estoy en el corazón de mí misma, y lloro de éxtasis. Porque en
Femenino en el mundo sin sentirnos como si nos estuviéra.. el amor nos rendimos a nuestra singularidad única y nos con
mos abriendo nosotras mismas a una violación ulterior. Así vertimos en mundo.
pues, estamos atrapadas en una terrible paradoja. Para sentirnos
poderosas, para adquirir alguna ventaja, debemos aprender las Si nos volvemos mundo a través del amor, entonces el
mismas maneras masculinas que nos oprimen y que están a amor es esencialmente un acto político. Si nos volvemos
punto de destruir el mundo. En cualquier caso, parece que par mundo alcanzando los dioses, entonces el amor es en esencia
ticipamos en nuestra propia destrucción. Pero si utilizamos lo un acto espiritual que redime al mundo.
Femenino, es posible que el planeta sobreviva, y también la es ¿Cómo podemos volvernos Prostitutas Sagradas? ¿Cómo
pecie, y que más adelante prosperemos. Sin lo Femenino y las materializamos sin hacerlo literalmente? ¿Cómo hace
eros todo está irremediablemente perdido. mos nacer su esencia? ¿Cómo restauramos el templo? ¿Cómo
Así pues, pennitámosnos considerar el volvernos Prosti cambiamos no sólo el comportamiento sino también nuestra
tutas Sagradas de nuevo. conciencia?
Cuando se estableció el feminismo contemporáneo sufi Llegar a ser la Prostituta Sagrada es estar dispuesta a sufrir
cientemente como para ofrecer esperanzas y posibilidades re la agonía de la conciencia que exige lo herético. Significa la vo
ales, mujeres que se consideraban a si mismas ateas volvieron luntad y la capacidad de mantener una visión del mundo cuan
a la espiritualidad. La Diosa y las diosas fueron invocadas de do la mayoría sostiene otra. Es comprometerse con eros, el vín
nuevo. Surgió un interés extraordinario en la espiritualidad, el culo, la conexión, cuando el mundo valora thanatos, la
mito, el rito, la ceremonia. De repente irrumpió el instinto separación y la indiferencia. La Prostituta Sagrada fue Cada
espiritual enterrado en un universo secular. Mujer, y se puso disponible al servicio de los dioses, espe
Como parte de este nuevo orden espiritual, tenemos que cialmente de aquellos que moraban fuera de su territorio. La,
abordar dos herejías. La segunda es volver a santificar el Prostituta Sagrada contemporánea tiene que estar dispuesta
J cuerpo; la primera -una tarea aún más difícil— es volver a la aportar lo sagrado a quien se ha hecho profano; debe ser la quq
\ percepción neolítica, pagana y matriarcal del universo Sa acoge “al otro”, la que hace el amor con “el otro” para volverl
\ grado en sí mismo. Pero echar por la borda el pensamiento se a conectar con la comunidad. Es portadora de la creencia d
cular puede ser el acto herético del siglo. Es por esto por lo que “el otro” no quiere seguir siendo un marginal.
J que nos encontramos en medio de tanto dolor psíquico.
Susan Griffin escribe lo que sigue en el último capítulo,
Estas ideas son viejas y conocidas, fáciles de decir, pero
muy difíciles de poner en práctica. Aunque es cierto que
titulado “Eros”, de Pornography and Silence: cuando las ideas se convierten en creencia dentro de nosotras
mismas, sucede la transformación fuera de nosotras.
Lo psíquico es simplemente mundo. Y si me dejo amar, en Yo he hecho un trabajo llamado desarme personal. Pido a
trar en mi propio placer y añoranza, entrar en el cuerpo de otra cada persona que se considere a sí misma como una nación-

239
estado y que se imponga a sí misma las condiciones que le ¿Cuándo respondo a la idea de pecado, la acepto o la pro
gustaría imponer al país. En este ejercicio debe identificar a voco?
sus enemigos, sus ejércitos, los sistemas defensivo y ofensi ¿Cuándo utilizo la sexualidad para distraer más que para
vo, las armas secretas, etcétera. Después de este autoexa comunicar?
men, le pido comprometerse públicamente al menos a un ¿Cuándo rechazo a eros porque soy rechazada?
solo acto de desarme personal para iniciar el cambio a un ¿Cuándo engaño a mi cuerpo?
mundo pacífico. Creo que nuestro militarismo y nuestra ac ¿Cuándo refuerzo la división mente/cuerpo?
titud defensiva son signos de nuestra agresividad y de nues ¿Cuándo y cómo denigro lo Femenino?
tros miedos internos. Creo en última instancia que sería más ¿Cuándo rechazo a los dioses? ¿Cuándo finjo creer en
fácil desarmarnos como nación, si nos desarmamos previa ellos?
mente como individuos. ¿Con qué frecuencia estoy de acuerdo con el “mundo
Hay que hacer el mismo examen con el problema que te real”?
nemos entre manos. Sería absurdo construir burdeles adjun
tos a nuestros templos y enviar a ellos a nuestras jóvenes a los Durante una meditación guiada, fui puesta a prueba por
dieciocho años, y además no cambiaría nada; nada puede una gran mujer luminosa, de aproximadamente dos metros de
cambiar mientras continuemos desvalorizando lo Femenino, alta, que era claramente la imagen de una diosa, aunque nun
denigrando el cuerpo y sin creer en el universo como algo sa ca se me habían aparecido imágenes de diosas en ninguna de
grado. Es claro que la revolución sexual lo ha demostrado, ya mis propias meditaciones. Sus cabellos estaban hechos de
que no ha cambiado nada. Así pues no es el sexo, a fin y al luz. Cuando se me acercó, quedé invadida al mismo tiempo
cabo, lo que andamos buscando, sino algo mucho más pro por el sobrecogimiento, a causa de su belleza, y por una es
fundo. pecie de terror ante su presencia. Si la integraba dentro de mí,
La tarea consiste en aceptar el cuerpo como espiritual, y sabía que mi vida cambiaría, que tendría que abandonar mu
la sexualidad y el amor erótico como disciplinas espirituales; chas de las formas masculinas que había adoptado para ma
creer que eros es pragmático; honrar lo Femenino incluso nejarme con éxito en el mundo. La mujer era poderosa, pero
cuando es deshonrado o desfavorecido. He aquí algunas de las su poder era un poder de receptividad, resonancia, magne
cuestiones que creo que es adecuado preguntarnos a nosotras tismo e irradiación. Tenía el poder de eros; ella me atrajo
mismas: hacia sí.
Cuando apareció, me acordé de la afirmación de una ami
¿Contra quién me cierro? ga: “Cuando llega al vientre”, me había dicho Diana Lin
¿Cuándo dejo de tener tiempo para el amor o para eros? den, “todas queremos ser el badajo; no queremos ser el cuer
¿Cuándo considero que eros es inconveniente, una carga, po [de la campana], pero es el cuerpo el que toca”. A pesar
o inoportuno? de la advertencia, cuando ella apareció, viví conscientemen
¿Cuándo considero que eros es peligroso para mí? te el terror de lo Femenino sobre el que había oído hablar y
¿Cuándo me complazco en la carga erótica de la culpabi había leído con tanta frecuencia. Estaba asustada de mi pro
lidad? pia naturaleza. En aquel momento, me prometí a mí misma

j
arriesgarme a la herejía, convertirme a cualquier coste a lo Fe

menino.
Así pues, aunque he escrito y pensado sobre ello, aunque
he intentado actuar en consecuencia, debo admitir que no he
sido capaz de encamar totalmente la función de la Prostitu
ta Sagrada. Esto me llena de tristeza, y también de respeto
ante la dificultad de la tarea. Pero me comprometo conmigo
misma: es ella la mujer que aspiro a ser.
12. MÁS ALLÁ DE LA
SANGRE: LAS MUJERES
DE ESA EDAD
por Elisabeth S. Strahan
En un elegante ritual de imaginación, la analista jun

guiana del sur de California, Elisabeth S. Strahan desvela un
poco del misterio esotérico de la menopausia: el ciclo final
de la vida de una mujer en el que su cuerpo cesa su ritmo
mensual, y ya no puede tener hijos. Pero Strahan nos dice que
la pausa de la menstruación significa algo más que un sim
ple cambio corporal, y que nos invita a%d pjeijnqs_de vie
jos hábitos y a abrirnos a una nueva vida otra vez
Aándose en lfaiT& y en1a7toria, Strahan ima
gina que en la antigüedad, al llegar la menopausia, la mujer
se retiraba sola para
lPof ‘Wi-8flC4s€fl3TO con
el falo, lafuentJjjçrsonal del poder sexual generador. Lo
mismo que la erpient el falo contiene los jugos fértiles y
creativos de la na uraleza. Lo encarnaba el dios Dionisos,
salvaje, caótico y embargado por la locura divina, que era al
mismo tiempo fascinante y terror(fico.

La participante en el culto, en un estado de trance, no po

día asegurar si ciertos acontecimientos realmente tenían lu
gar, si ella, como los hombres que eran renovados por la
prostituta sagrada, también recibía una curación sexual por
parte del dios, o si esas imágenes sólo se vivían en su fan
tasía. Pero no importa, ya que descubría el poder de su fe
minidad independiente de su relación con el marido, la fa
V Más allá de la sangre
sica, presente en los cambios de mi cuerpo: aumento de

sin comer más, arrugas en la piel, calenturas, cansancio, paiL
pitaciones, etcétera, etcétera. También me descubría con fre
cuencia llorando amargamente por pequeñas cosas. Pensé
que debía tratarse de la menopausia.
¿Cuál es el significado de todo este cambio? ¿Qué están
sugiriendo los dolores de cabeza, las depresiones, los miedos,:
t
milia, o los hijos, e independiente de su belleza juvenil. y el vacío de las mujeres a esta edad? ¿Qué nos está pidien- 4/1
Había entrado conscientemente en esta etapa de la vida, do la vida?
dispuesta a ser portadora del misterio del momento. Se escribe poco realmente sobre las mujeres y la meno
Elisabeth 5. Strahan es analista junguiana con práctica pausia. Sólo recientemente las mujeres han vivido lo sufi
privada en Fullerton, California. Se formó en el Instituto ciente como para hablar de ello. A finales del siglo pasado,
C. G. Jung de Los Angeles y ha ocupado el puesto de presi la expectativa de vida de las mujeres era de cincuenta años,
denta de su Comité de titulación. Ha estado casada durante y la menopausia ocurría en medio de la segunda mitad de los
veintiocho años y tiene dos hijos mayores. Da conferencias cuarenta. Actualmente, el veinte por ciento de la población fe
y seminarios sobre temas de la mujer y también Mora bailar, menina de los Estados Unidos tiene más de cincuenta y cin
çocinaryçi:ear. heios..espa.çjos en su casa y en su jardín. co años, y la expectativa de vida es de setenta y seis.
1 La ma
yoría de nosotras viviremos veinticinco años o más desde
que se produce la menopausia.
La vida de una mujer puede dividirse muy bien en tres
etapas: desde el nacimiento hasta la primera menstruación,
Este año cumplí los cincuenta. Este pensamiento se apo desde ésta hasta la menopausia, y desde la menopausia has
deró de mí al menos seis meses antes del acontecimiento. ta la muerte. En el lugar y en la época en que yo crecí se for
El número parecía en sí mismo tan inmenso, tan arquetípi maba tanto secreto y había tanto miedo alrededor de la me
camente significativo... Estaba llevando mi vida, ocupándo nopausia como del comienzo de la menstruación. Una mujer
me de ella de una manera tan ordinaria, que rompí en carca es el receptor pasivo de estos ritos corporales de inicia
jadas ante el ridículo pensamiento de que yo, que iba a ser una ción. No los elige, ni tampoco elige cuándo se producen; los
veinteañera crecida para siempre..., de repente iba a tener acontecimientos le eligen a ella a su debido tiempo. Las
cincuenta años. actitudes hacia la menstruación abarcan desde, “no es nada,
La edad nunca me había importado, con excepción del no eres diferente, sigue como si nada hubiera cambiado
dulce llanto que brotó en la comida de mi trigésimo cum en tu vida”, hasta “todo se acabó, la maldición te ha al
pleaños. Nunca pensé en mí misma como una mujer “de me canzado”. Estas actitudes hacia el periodo de poder de la
diana edad”, pero la cifra cincuenta está asociada a ser algo menstruación reflejan actitudes básicas hacia ser mujer y
que se encuentra en el medio. Junto con la conciencia con hacia lo Femenino mismo, junto con su realidad siempre
ceptual de cumplir años se encontraba la misma realidad fi- cambiante.

Haciendo sagrado de nuevo el cuerpo femenino Más allá de la sangre
La menstruación fue un secreto compartido por la mujer unos setenta y cinco años y se encuentra aproximadamente a
primordial y la serpiente. Los sistemas antiguos de creencias un kilómetro y medio de la ciudad de Pompeya, nada más pa
afirmaban que la venida de la regla se producía a través de la sar el cementerio. Extraordinariamente intacta, alberga des
cópula con la serpiente sobrenatural. La sagrada “sangre de concertantes frescos artísticamente bellos. Obviamente no
la vida” era femenina y real en las culturas matriarcales. La es una casa familiar sino una residencia grupal. No se sabe
sangre, en especial la sangre menstrual, ha tenido siempre un mucho acerca de lo que sucedía realmente allí. Imagino que
gran poder.fla sidQ considerada con miedo reverencial y esas pinturas representan un ritual para mujeres típicamente
‘)con actitud numinosa; se pensaba que contenía el poder de romanas que buscaban renovarse e iniciarse en el último ter
matar y el poder de crear nueva vida. Hasta tal punto que los cio de sus vidas. Me permitiré una licencia mitológico-poé
hombres que miraban a una mujer que tenía el periodo podían tica... un entramado de historia y de mi propia imaginación...
morir. En algunas culturas, se pensaba que la vida humana ha para describir lo que imagino que ocurría allí.
bía sido creada a partir de una mezcla de suciedad y de san La quinta era mantenida por un grupo de mujeres que
gre menstrual. Los ritos religiosos solían ser presididos por pertenecían a un cujto órfico en honor ai2ionisos. Es el dios
mujeres ancianas, debido a la antigua creencia de que las griego del éxtasis, de lrendi ónal espíritu de la-Nattirale
za con vingycanciones. También es el dios de la muerte y del
4
mujeres que habían pasado la menopausia eran los seres mor
tales más sabios, porque retenían permanentemente su “san mundo subterráneo. Según la tradición órfica, cuando era
.gre de sabiduría”.
2 perseguido, era capaz de adoptar la forma de varios anima
Recientemente, las mujeres han empezado a contarse unas les (larpje,ighjyçLyeJtoro). Pero a pesar de
a otras sus experiencias personales y a buscar imágenes-guí ello, fue despedazado y comido por los Titanes, que fueron
as en la antigüedad, cuando las mujeres celebraban rituales entonces reducidos a cenizas por el gran Zeus. A partir de es
comunitarios para ayudarse en los cambios de la vida. Los ri tas cenizas fueron creados los humanos, imbuidos de la cul
tos de paso son necesarios para integrar lo personal y lo pabilidad de los Titanes y de la plenitud de la vida y muerte
transpersonal, para hacer que nuestras crisis individuales de Dionisos.
sean sociales, y pata .encontrar una validación a nuestra ex Ese grupo de mujeres constituía una sociedad secreta, y la
periencia. Mircealiade.,expresa la necesidad de rituales de quinta era lo más autosuficiente posible, con sus propios po
la siguiente manera”La vida de todo ser humano está hecha zos y huertas, pastos para las cabras y las vacas, viñas, bo
de una serie. d pfl rirosas, de muertes y resurreccio degas para guardar el vino, hornos para cocer el pan, y mu
nes. LaniciaciØii se e,ncuentra en el núcleo de cualquier chas habitaciones individuales. Los detallados frisos y dibujos
vTda humi raiiténtica’J Jung decía: “La segunda mitad de por toda la casa sugieren el cuidado y la conciencia artística
la vida debe tener un significado por sí misma y no puede ser de sus habitantes. Hay un amplio patio con un baño de bellas
un triste apéndice”.
4 Consideraba que la edad madura cons proporciones en el centro, rodeado de pórticos interiores y ex
tituía una fase para trabajar interna y simbólicamente. teriores de colunmas finamente estriadas. Existen muchas
En los frescos de la Villa Dei Misterii, cerca de Pompeya, pequeñas habitaciones con diversos dibujos mitológicos en las
está sugerido un antiguo ritual para las mujeres que han al paredes: grifos, alados dragones coronados, ibis, codorni
canzado la mitad de la vida. La quinta fue excavada hace ces, palomas, todos ellos en parejas, intercaladas con deli

cadas reproducciones de la reina Nefertiti y de su amante que no ha llegado todavía a la adolescencia, desnudo salvo
Horus. Un motivo que se repite es un friso proporcionado y sus sandalias, lee con voz solemne las instrucciones de es-
estilizado griego en lo alto de las habitaciones, coronado por tancia en la quinta, mientras la mujer que la guía tiene en sus
un dibujo colorido acuoso, que quizá sugiera el movimiento manos un pergamino similar. A continuación, una mujer que
del orden geométrico al orden orgánico inherente a los ritos finge estar embarazada conduce a la iniciada a un asiento
que allí se hacían. La cámara principal mide aproximada- en forma de trono, en donde es invitada a desnudarse. Se le
mente ocho metros de largo por cinco de ancho, y sus cuatro ofrecen algunos pasteles para que coma con el vino y una ra
paredes ricamente decoradas con frescos que cuentan la his- mita de hojas de laurel para que masque, acentuando la in
toria de lo que sucedía en la quinta. El fondo de los dibujos toxicación empezada por el vino y toda la cuidadosa puesta
es de un bello rojo intenso; existen diez escenas. Las pintu- en escena. Otra sacerdotisa la conduce a un baño caliente al
ras excitan la imaginación y agradan la vista, centro de la casa, en donde masajea cariñosamente sus manos
Una mujer romana sabía que cuando su vida en la comu- y pies con aceite.
nidad se había agotado, cuando ya no fluía su sangre, cuando Cuando la iniciada ha caído bajo los efectos de la ramita
su espíritu la había abandonado, había llegado la hora de re- de laurel, es conducida a su habitación, cuyas paredes em
tirarse a la quinta. El conocimiento de ésta y de sus misterios bellecen figuras de sátiros y doncellas, grifos y serpientes ala-
se transmitía con sumo secreto de mujer a mujer. La partici- das. Empieza a oír una música y ya no sabe si está despier
pación en los ritos de este retiro ofrecía la promesa de espe- ta o dormida. Ve al viejo Sileno, el maestro borracho de
ranza y renovación. Pero también existía el miedo de lo que - Dionisos, que la llama con la música de su lira. Está acom
podía encontrarse allí. Existía la amenaza de que una podía pañado por faunos de orejas de cabra que bailan a su alrede
perderlo todo... todos los logros, la seguridad económica, el dor, uno de los cuales está tocando una flauta de madera. Ve
mundo ordenado de lo conocido e, incluso, la propia mente. a una fauna dando de mamar a un cabritillo, mientras que una
El día indicado, a la mujer se le daría la bienvenida por cabra negra mira fijamente a la iniciada que está a punto de
parte de las que ya vivían allí. Llegaría con sus vestidos más confrontarse con la naturaleza. Se despierta horrorizada con
finos -una capa sobre otra de ricas telas cubrían su cuerpo y el deseo de volver a la seguridad, pero con la tentación de
su cabeza-, llevando sus mejores zapatos, bien peinada y profundizar en lo desconocido. ¿Qué es lo que ha hecho?
con la cinta de novia intacta, una vez que ya había aprendi- ¿Qué significa ser iniciada en el culto de Dionisos?
do y realizado perfectamente su camino de esposa consuma- Empieza a recordar: Ponisos es ej dios de los-límite.. de
da, ama de casa, matrona social y madre. Estaría perfecta- atravesar los límites... esrgran Vesanudadoi... Dionisos
mente vestida y compuesta pero sin maquillaje en los ojos..., fue criado por las ninfas de la isla deNaxos, disfrazado de
cansada, agotada, llevando la muerte en sus pasos. Al entrar niña por mo, y Sileno le enseñó los secretos de la naturale
en la cámara principal, encuentra a su izquierda la imagen de za. Había sido iniciado en los misterios de la diosa Rea. Fue
una matrona como ella, que le recuerda que no está sola, que ella la que le vistió con una piel de cervatillo, le puso una
ésta es la vía de la mujer. guirnalda hecha de hojas de parra en su cabeza, y le envió al
Las sacerdotisas de la quinta le dan la bienvenida ofre- mundo a enseñar su intoxicación. Es el dios del vino que
ciéndole vino y una delicada comida. Después, un muchacho, arrastra su éxtasis entre las viñas. Es conocido por su locu

ra divina míi por lanaturajeza, su acción de disolver los allí para rescatarla; le dio una corona de oro, como símbolo
£1 1ímites. Lleva un báculo de doble hiedra coronado por un
cono de pino. Está acompañado por las ménades (mujeres en
delirio) y los sátiros (mitad humanos y mitad cabras).
5 Tal
de totalidad, y se unieron en unas bodas místicas.
¿Han abandonado a la mujer romana, como a Ariadna, to
dos sus esfuerzos heroicos y civilizados y se la ha dejado al
vez, reflexiona la iniciada, estas criaturas medio humanas borde de la muerte? ¿Se ha desposado con el salvaje dios
se han quedado ligadas a Dionisos por no haber sido capaces Dionisos, el Toro-que-brama? Llena de miedo reverencial y re
de pasar totalmente la iniciación. Están atadas a estas formas animada, medio consciente y medio dormida, se imagina en
perversas... iloqueadas en laregión fronteriza.., mujeres que esos momentos a sí misma muy fortalecida. Sueña que es co
no pueden iniegrar su locura y hombres que no pueden inte ronada con una fina capa de azafrán amarillo y que es velada
grar su naturaleza de cabra. con ese mismo amarillo. Cae de rodillas frente a una gran
Dionisos suele llevar una piel de pantera y siempre está ro cesta de aventar. Como por arte de magia, levanta en alto con
deado por una danza salvaje y una música jubilosa. ¿Dónde su mano izquierda el velo púrpura que cubre la cesta, mien
está Dionisos? tras que con la derecha saca de ella un gran pene erecto. Cau
La mujer romana ha vislumbrado las profundidades y el tivada con su poder recién encontrado, queda aturdida por la
mundo desconocido del inconsciente en el que gobierna Dio visión de un gran ángel-mujer de alas oscuras que se dirige a
nisos. ¿Se da la vuelta y vuelve al mundo de la luz y el orden, ella desde el cielo con una feroz amenaza. “A1to!”, ordena el
o continúa su descenso? Sus pesados párpados drogados y su ángel. Se despierta de su estado de sueño con los golpes de un
deseo de conocer más le arrastran más hacia abajo. Ve a Si látigo que cuero sobre sus hombros.
leno riendo cruelmente mientras alza un cuenco de plata so Una mujer la sostiene cariñosamente, húmeda de lágri
bre el que un fauno sostiene una máscara de Dionisos para mas y sudor, mientras que el ángel, aún con más cariño, la saca
que se refleje en ella. ¿Puede ella ver su cara en el rostro del a latigazos de su trance para traerla de nuevo a la realidad. Re
dios?, se pregunta. ¿Apareció realmente el dios? ¿Estuvo confortada y bañada, se cepilla el cabello resplandeciente y se
ella a punto de morir? sonríe a sí misma, mientras se pone sus nuevos pendientes y
Habiendo caído en un sueño profundo, ella es -o sueña brazaletes. Coronada con una guirnalda de mirto, recibe un
que e s-Ariadna la prometida de Dionisos, sentada en el nuevo lienzo de gasa y címbalos, y se le invita a danzar con
trono con el-dios enamorado a sus pies, cansado de hacer el las demás iniciadas. Recibe también un espejo en el que pue
amor. ¿Le había hecho el amor Dionisos a ella o lo había de ver su ser fluido y brillante. Se prepara para volver a su
soñado? Ariadna era medio humana y medio divina; sus pa casa, feliz e interrogándose sobre su misteriosa experiencia,
dres habían nacido de la unión de dioses con humanos. Poseía sin poder olvidar que sobre su hombro izquierdo pudo vis
el carácter oscuro y subterráneo de Perséfone y la capacidad lumbrar por un momento al travieso cupido sonriéndole con
apasionada de Afrodita, la diosa del amor. Se enamoró del hé su arco en reposo.
roe Teseo en la isla de Creta y le ayudó a matar al Minotau ¿Hacían realmente el amor en la quinta las mujeres ro
ro en el laberinto, de donde le sacó con un ovillo de hilo. Pero manas con los jóvenes disfrazados de Dionisos? ¿Era un lu
la abandonó en Naxos, en donde Ariadna se suicidó o la gar para facilitar la relación sexual con el dios mismo? Per
mató la diosa Artemisa en un ataque de celos. Dionisos fue siste el misterio de que cada mujer encontraba su propia

experiencia. El misterio mantiene vivo el drama y obliga a
que la experiencia vuelva a recaer sobre el iniciado. tras, que fue heredado de nuestras madres y experimentado de
En este ritual existen tres hilos principales de particular nuevo en nuestra falta de conexión con esos valores. Mu
importancia para las mujeres menopáusicas: salir solas, so chas de nosotras hemos sentido una reserva natural respecto
meterse a ser iniciadas por otras mujeres, y encontrarse con a otras mujeres, una autoprotección del aspecto devorador o
el poder fálico impersonal, Dionisos y el mismo falo. del frío rechazo que imaginábamos que se escondían en sus
Salir solas. Las mujeres tienden instintiva y cultural- ofrecimientos. Sin embargo, en los últimos diez o quince
mente a ser llevadas hacia la relación. Con frecuencia, esa años, las mujeres hemos empezado a confiar unas en otras.
fuerza de eros instintiva se convierte en un embrollo in Mujeres terapeutas, mujeres amigas y grupos de mujeres se
consciente, y la mujer se funde tanto con las personas que le han convertido en fuente de curación para individuos en
rodean en su vida que se olvida de sí misma y depende de los tiempos de crisis y/o de cambio.
Existe un riesgo y una recompensa en someterse al cui
demás para conservar el sentido de ser. Muchas mujeres ob
tienen su sentido de identidad de sus maridos e hijos. Su dado de otras mujeres. La energía es tan poderosa que suele
propio hogar y el entorno familiar estimulan demasiado su estar teñida de entusiasmo erótico y, a veces, de fantasías y
naturaleza de conexión. “Salir afuera” libera a la mujer, para sueños homoeróticos. Estar en compañía de otras mujeres
que se viva a sí misma como un individuo. La experiencia de estimula la conciencia de la mujer de su propio cuerpo. La re
lo desconocido que encuentra al viajar destruye el sólido compensa es que puede experimentar la relajación y la afir
mación de ser reflejada, de ser verdaderamente vista (y sitie
sentimiento de lo conocido y de propiedad. Se somete a la
ansiedad y al entusiasmo que produce un lugar nuevo, y las ne suerte), de una manera que no hizo su madre. También
exigencias del mismo despiertan en ella un sentimiento de existe la libertad de explorar y de ampliar las fronteras de las
respuesta a lo que es, en vez de la preocupación cotidiana por ideas y de las maneras de comportarse con las personas de su
cómo debieran ser las cosas. Esta entrega a lo que es, es la mismo género. Las mujeres pueden trabajar juntas de una
entrega a Dionisos. manera eficaz, en una especie de cooperación inconsciente en
Muchas mujeres creen que no pueden crear algo más pro la que se realizan las tareas sin ninguna necesidad de definir
fundo que una buena comida en su casa junto con la enorme previamente las responsabilidades. Las mujeres podemos ju
cantidad de tareas que hay que hacer. Estar fuera estimula el gar juntas alegremente. Por primera vez, podemos recuperar
o descubrir la danza, el canto, y el deleite de los cuerpos
pensamiento creativo de la mujer y una nueva manera de ver
las cosas, un sentimiento de que ella es alguien por derecho que nos pertenecían cuando éramos niñas.
El contacto con el poder fálico. Después de un rato esti
propio. Desvinculada de todas las fusiones de su vida, pue
de encontrar ciertamente quién es realmente. Puede oírse a sí mulante de escribir describiendo imágenes, una mujer soñó
misma. Simplemente, hasta entonces no había podido oír su lo siguiente: “Me despierto en una cama extraña con un gran
propia voz en medio del estruendo de toda esa Otredad. pene en erección en la mano derecha. Es terroríficamente
La sumisión al cuidado e iniciación de otras mujeres. Ha grande, caliente y lleno de vida. Me doy la vuelta e intento
existido un profundo sentimiento de desconfianza y desva ponérselo a mi marido. Es ridículo. No puedo de ninguna
lorización de las mujeres y de lo Femenino dentro de noso manera ajustárselo. Es demasiado grande”. Con frecuencia
tratamos de “ponérselo a nuestros maridos” con gran decep
252 253
ción y frustración. Los maridos se desgastan bajo el peso de entre dos periodos definidos. En él coexisten la muerte de lo
tan gravosa proyección. que ha sido y la preparación de lo que será. Existe una sen
¿Qué hacer con esta serpiente, con este poder creativo sación de flotar, de no estar ni aquí ni allí. Aparece una sen
que late? El falo desencarnado es una forma de Dionisos. sación interna de pérdida. Los sueños y la vida despierta,
En los frescos de la Villa Dei Misterii, Dionisos aparece con frecuencia, no se hallan muy diferenciados. Se produce
como un falo en erección sobre una cesta de aventar. (Y fren una alteración de la sensación de tiempo. “A mitad de la
te a la quinta, en la tienda de “souvenirs”, se vendían penes vida, mediante la experiencia de la «liminalidad», el alma se
con alas sin cuerpo... por miedo a que una se volviera de libera del autoengaño y despierta a un nivel que permanece
masiado esotérica). Esa mujer fue visitada por un dios... el más allá de la derrota y de la muerte del ego”.
6
dios del espíritu de la naturaleza, del abandono salvaje, de la Stein señala que se trata de un tiempo para volver a lo re
imaginación, de los borrachos, de lo incognoscible, de lo in primido. La sombra reprimida se desliza por las esquinas de
controlable, de lo impredecible, del desmembramiento y de nuestra existencia: chicas “complacientes” en delirio sexual,
la celebración. ¿Cómo puede integrar una mujer todas estas irritación con nuestras parejas con las que nos hemos identi
energías cuando aparecen en su mano? ficado demasiado, pautas de gastos extravagantes en perso
No existen respuestas; cada mujer tiene que encontrar su nas frugales, cleptomanía de mujeres de mediana edad bien
propio camino. Pero la aparición del poder fálico, que no educadas que han dado demasiado. Los dioses que hemos
puede proyectarse en los hombres de su vida, la vivifica y exi descuidado exigen nuestra atención.
ge su atención. Tener el falo en su mano derecha significa La menopausia invita a que aparezcan nuestros fantas
que, tal vez, la misma mano con la que estaba escribiendo mas inoportunos; exige una confrontación más esencial con
atrae esa energía en esta mujer. Es libre para ser completa nuestra sombra. Es un periodo para reconciliarse con ella. Es
mente una mujer y tiene en su mano el don de la energía pe una zona neutral en la que una mujer puede reconocer la dis
netrante y creativa. tancia entre sus ideales y la realidad. Puede reconocer lo que
Los antiguos rituales y nuestros sueños personales nos dan es incompleto en ella, lo que le da miedo y lo que está heri
instrucciones de cómo integrar las imágenes espontáneas para do. Es un periodo para enjugar las lágrimas todavía no ver
que nuestras vidas se enriquezcan y vivifiquen. El comienzo de tidas: las lágrimas por lo que fue, por lo que podía haber
la menopausia es uno de esos poderosos espacios de transición sido, y por lo que ya nunca será.
de la vida: cuando una mujer ya no es joven, pero todavía no Un encuentro con Dionisos puede hacernos salir de las vie
pertenece al grupo de las sabias. Está realmente a la mitad de jas estructuras de lo adecuado y de lo esperado. Una mujer
su vida. Estos periodos de transición tienen un gran poder; soñó que estaba en un bonito enorme edificio viejo, que las
los sentidos se agudizan, se intensifican las emociones y las ex paredes empezaron a temblar, derrumbándose todo a su al
periencias alcanzan su cumbre, tanto en sentido positivo como rededor, y que casi queda atrapada por las vigas gigantes de
negativo. Todas las cosas parecen cobrar relieve. madera caídas. Vio una pequeña apertura entre los escombros
En su libro sobre este periodo de mitad de la vida, Murray y se arrastró a través de ella hasta la luz que llegaba del otro
Stein habla deja cualidad de este espacio como “liminalidad”. lado. Se sentía misteriosamente “salvada” y agradecida de po
(fç) Un der empezar de nuevo en un sitio nuevo.
espacio’liminal es un espacio de transición que se halla
254
255
Sueños de este tipo apuntan hacia la renovación que es po

sible a través del sacrificio, incluso cuando es forzada. La pér
dida que conlieva el sacrificio priva a la mujer de las es
tructuras inservibles de su vida: las reglas, los “hay que”,
las necesidades, el orden establecido. A través de Dionisos,
aprendemos a confiar en la Naturaleza. Dionisos aporta un
nuevo género de orden: el orden de la naturaleza reemplaza
al viejo orden de los principios. Somos capaces de afrontar QUINTA PARTE
cada situación con maravillamiento, como si fuera por pri
mera vez. Podemos encontrar a los demás con curiosidad,
dándonos cuenta de su aportación en el drama de la realidad,
sin nociones preconcebidas de lo que deberían hacer o no ha-
cer. En esas ocasiones podemos descansar en una especie de
DESPERTANDO DE NUEVO
aceptación tranquila de lo que es, de lo real, sin concentrar-
nos ya en el potencial. Esta manera de vivir es más bien anó
LA DIVINIDAD DE
nima, no escrita, tal vez sin argumento. No está dirigida a los
logros ni a los éxitos visibles; está enfocada a lo sagrado de
LO FEI\4ENINO
lo mundano y de lo familiar. El significado y lo mágico se en-
cuentran en los pequeños acontecimientos del día. Nos pue
LA CURACION DE NUESTRA
de enseñar a ver lo numinoso en lo cotidiano y en lo trivial.
Y entonces aparece la paradoja: al mismo tiempo que
RELACION CON
mantenemos sueños y fantasías cuyo autor es Dionisos, El-
que-ata-y-desata, y que puede llevarnos al frenesí extásico,
LOS ARQUETIPOS
encontramos satisfacçión y estado de bienestar en nuestras
propias vidas.
DE LA DIOSA
256 de Desarrollo Transpersonal

Centro Centro de Desarrollo Transpersonal
No me ignores,
porque soy la primera y la última.
Yo soy la respetada y la desdeñada.
Soy la prostituta y la mujer sagrada.
Yo soy la esposa y la virgen.
Yo soy la madre y la hija.
Soy los miembros de mi madre.
Soy la estéril, pero muchos son mis hijos.
Yo soy la de la gran boda,
pero no he tomado marido.
Soy el silencio incomprensible
y la idea que se recuerda con frecuencia.
Soy la voz de múltiples heridas
y la palabra con muchas apariencias.
Soy el murmullo de mi nombre.
Yo soy vergüenza y osadía.
No tengo vergüenza y estoy avergonzada.
Soy fuerza y soy miedo.
Yo soy la guerra y soy la paz.
Préstame atención.
Yo soy la infortunada y la mujer magna.
AN0NIM0
Cuando éramos niñas, los adultos nos decían que estába

mos hechas a la imagen de Dios. Pero en nuestra imaginación
recién creada, la cara de Dios se parecía más a la de un abue
lo sonriente, amable y de pelo blanco o a la de un viejo pa
triarca severo tamborileando sus dedos sobe una mesa, que a
la cara que veíamos en el espejo. Como consecuencia, Dios
259
Despertando de nuevo la divinidad de lo femenino Desprtando de nuevo la divinidad de lo femenino
es un Otro, algo fuera de nosotras, mientras que los niños y tiempo, legitiman la autoridad política y social de padres e hi
los hombres pueden tener un vínculo más cercano con Él jos en las instituciones de la sociedad”.
que nosotras. En última instancia, “el poder femenino” se convierte en
Sin embargo, en un plano mitológico, estamos verdade una paradoja simplista; una mujer sólo puede identificarse con
ramente hechos/as a imagen y semejanza de nuestros dio Dios negando su propia identidad. Esto significa que ser una
ses. Lo que quiere decir que somos lo que imaginamos. La mujer es no participar en lo Divino.
forma que damos a nuestros ancestros divinos en nuestra Lo mismo que la jerarquía espiritual o religiosa masculi
imaginación personal y colectiva es la forma que aspiramos na apoya los intereses de los hombres en una sociedad pa
llegar a ser. Si lo imaginamos perfecto y todopoderoso, quie triarcal, el simbolismo de la Diosa apoya los intereses y la
re decir que tenemos estas cualidades como ideal. Si la ima imaginación de las mujeres. Tanto si concebimos a la Diosa
ginamos llena de munificencia y generosa, son estas cuali como una única figura trascendente, como si imaginamos
dades a las que damos relieve. muchas Diosas dentro de nosotras como metáforas de ener
Durante milenios, los múltiples rostros de lo divino co gías de la vida, Ella nos aporta una visión de la Mujer que se
nocidos previamente por las culturas de todo el mundo han halla fuera de los muros del patriarcado. Y Ella afirma el
sido reducidos a una foto instantánea unidimensional. Este cuerpo, la mente, el corazón, el poder y hermandad de todas
Dios peculiar de género masculino ha supuesto una grave las mujeres.
pérdida para las mujeres; nuestra imaginación se ha empo Imaginar lo Femenino Divino es satisfacer una necesi
brecido y ha disminuido nuestra capacidad para identificar- dad sentida en lo más profundo. También significa poner pa
nos con lo divino. Al final, la vida bajo la ley de “Dios Pa tas arriba nuestras prioridades. Christine Downing lo expli
dre” llegó a significar que gran parte de lo que había sido ca de la siguiente manera en su libro, The Goddess:
valorado por la experiencia de la mujer en las épocas ante
Ser alimentadas sólo por imágenes masculinas de lo divino
riores —como la sexualidad, la menstruación, el parto, la es estar mal nutridas. Padecemos hambre de imágenes que re
crianza, la menopausia, llegar a la ancianidad, el ritual y el conozcan la esencia sagrada de lo Femenino y la complejidad,
poder de la hembra- perdió su significado y su sentido sa riqueza y poder nutridor de la energía femenina... Buscamos
grado de autoridad. imágenes que afirmen que el amor que las mujeres reciben de
Carol P. Christ señala en su ensayo “Por qué necesitaban las mujeres, de la madre, de la hermana, de la hija, de la aman
las mujeres a la Diosa”, publicado en el libro Womanship te, de la amiga, es tan profundo y merecedor de confianza, tan
Rising, que los símbolos, incluidos los símbolos de lo divi necesario y sustentador como el amor simbolizado por el padre,
el hermano, el hijo o el marido. Anhelamos imágenes que re
no, tienen efectos psicológicos y políticos, porque crean los
presenten como auténticamente femeninas la creatividad, la le
sentimientos y actitudes que llevan a las personas a aceptar altad, el valor, la autoconfianza, la capacidad de adaptación, la
las reglas políticas que corresponden al sistema de símbolos. tenacidad, la capacidad de tener una clara percepción, la incli
Christ dice: “Las religiones centradas en el culto a un Dios nación a la soledad y la intensidad de la pasión.
masculino crean estados de ánimo y motivaciones que man
tienen a las mujeres en un estado de dependencia psicológi Como hija del padre y tipo de mujer Atenea, para mí ha
ca de los hombres y de la autoridad masculina y, al mismo sido dolorosamente difícil abrir esta puerta a lo Femenino
260 de Desarrollo Transpersonal 261

Centro Centro de Desarrollo Transpersonal
1
Despertando de nuevo la divinidad de lo femenino Despertando de nuevo la divinidad de lo femenino
Consciente. Durante mucho tiempo, no sentí la necesidad de Con esta sección sobre la Divinidad de lo Femenino, com
la Diosa en mi vida; me parecía regresivo recurrir a imáge j pletamos el círculo iniciado en la primera parte sobre la pér
nes tan antiguas de una época en la que las mujeres todavía dida y el abandono de lo Femenino en la historia humana. Lo
no habían tenido muchas oportunidades para el desarrollo que se perdió, ya se ha encontrado, y su poder de curación ha
personal. Más tarde, cuando entendí su valor arquetípico, no resultado ser enorme. La Diosa puede aportar sustento al
sabía cómo dejarlas sin sentir que me faltaba el suelo bajo los campo transpersonal y a una vida espiritual dedicada a los
pies. modelos femeninos. Y puede ayudamos para que volvamos
Más adelante empecé a percibir a la Diosa como patrones a hacer de madres de nosotras mismas, curándonos de las
impersonales de sentimientos y de comportamiento que pue heridas y de las limitaciones de nuestras madres.
den revelar dinámicas escondidas dentro de cada persona y en Finalmente, nuestra recuperación del arquetipo Femenino
las relaciones. Por ejemplo, yo podía ver a la Diosa en acción supone un gran beneficio para Ella. Sin nosotras, Ella esta
si me sentía engañada, como víctima en relación a un hom ría perdida en los pasillos del tiempo. Cuando está viva en
bre. Me sacaba de mi turbulencia emocional, del enfado y de nuestra imaginación, regresa a casa.
la culpa, al mostrarme una pauta más amplia de comporta El famoso novelista griego Nikos Kazantzakis escribió
miento, y me liberaba de este modo de un perspectiva de un pequeño y elegante libro llamado The Saviors of God,
masiado personal. del cual he tomado los siguientes párrafos:
Este es uno de los dones de conciencia de la Diosa. Estos
no representan una fórmula secreta mediante la cual podamos No es Dios quien nos salvará; somos nosotros los que sal
convertimos en la esposa/Hera, amante/Afrodita, o mujer in varemos a Dios, luchando, creando y transmutando la materia
dependiente/Atenea ideales. Estos dones no permanecen fi en espíritu.
4
Pero toda nuestra lucha puede perderse. Si nos cansamos, si
jados, como imágenes arcaicas que deben ser representadas nuestro espíritu desfallece, si caemos en el pánico, entonces el
como papeles teatrales. Más bien representan potenciales di Universo entero estará en peligro.
námicos capaces de encender nuestra imaginación y liberar La vida es una cruzada al servicio de Dios. Lo queramos o
nos de la prisión de los géneros. no, nos disponemos como cruzados a liberar a ese Dios ente
Las Diosas de hoy día, en cuanto espejos de lo Femenino rrado en la materia y en nuestras almas.
Consciente, proceden fundamentalmente de dos fuentes: las
culturas prepatriarcales, como las descritas previamente por
Riane Eisler, y la cultura griega que, en tanto que patriarca-
do, ha diferenciado más claramente los arquetipos de la Dio
sa, como los descritos por Robert Stein y por Jean Shinoda
Bolen (en la primera y quinta parte, respectivamente, de este
libro). La tradición de las religiones occidentales, en especial
en su forma esotérica, siempre tenían caras femeninas de
Dios que se nos han perdido. Sofía, recuperada aquí por June
Singer, es la diosa de la sabiduría de la tradición gnóstica.
262 263
Atenea, Artemisa, Afrodita
junguianos se refieren a este hecho como la posesión por

un arquetipo.
Sin embargo, Bolen propone que podemos tomar con
ciencia poniendo nombre a estos arquetipos y detectándolos
en nosotras y, más adelante, aprendiendo a elegir con cuá
les de ellos amistamos y cuáles rechazar. La tarea de danzar
de esta manera con los arquetipos no es fácil; requiere una
atención vigilante para ser capaces de percibir la corriente
13. ATENEA, ARTEMISA, universal que corre a través de nosotras y de contenerla y de
jarla ir de tal manera que adopte una sola forma. Pero se tra
AFRODITA, Y LA INICIACIÓN ta de una práctica con mucha fuerza que puede conducirnos
a la emergencia de lo Femenino Consciente.
A LO FEMENINO Bolen elabora esta idea, señalando que un arquetipo do
mninante de Diosa puede ayudar a determinar qué camino
CONSCIENTE se abre a lo Femenino Consciente. La mujerArtemisa, por
ejemplo, es atraída hacia el feminismo, mientras que el tipo
de mujer-Atenea, que triunfa fácilmente como “hija del pa
por Jean Shinoda Bolen dre es típico que no sienta la necesidad de identificarse
“,
como feminista y puede que precise una iniciación espiritual

más profunda.
En su libro más vendido, Goddesses in Everywoman, la En este ensayo, escrito para este libro, la reflexión per
analista junguiana de San Francisco Jean Shinoda Bolen, sonal de Bolen sobre la experiencia del parto como un pe
doctora en Medicina, introdujo a un vasto público a siete pa riodo entre dos territorios, que refleja nuestro paso colecti
trones mitológicos de lo Femenino procedentes de las Diosas vo de uno a otro, habla a esa parte de nosotras que siempre
griegas. Lo mismo que el feminismo había revelado estereo estódando a luz.
tipos opresivos en roles femeninos, Bolen y otros autores re Jean Shinoda Bolen, doctora en Medicina, es psiquiatra,
velaron arquetipos potencialmente opresivos que subyacen analista junguiana y profesora de psiquiatría en el Centro
ocultos en las psiques de las mujeres y que gobiernan se Médico de la Universidad de California, en San Francisco.
cretamente nuestros comportamientos. Es miembro del Instituto C.G. Jung de San Francisco y au
Si estos patrones permanecen inconscientes y cumnplimnos tora de Tao of Psychology; Goddess in Everywoman; y Gods
sus destinos (como el de Hera, que sitúa su principal valor in Everyman. Se o’cupa de explorar y de relacionar las di
en encontrar un ¡narido y casarse, o el de Atenea, que valo mensiones arquetípicas y espirituales del movimiento de las
rafundamentalmente la vidálógica de la mente), nuestras vi mujeres, el desarme nuclear y la preocupación por la flerra.
das se vuelven unidimensionales y perdemos la enorme ri
queza de posibilidades psicológicas. Los psicólogos
264 265
Despertando de nuevo la divinidad de lo femenino Atenea, Artemisa, Afrodita
primitivos surgió con el descubrimiento y traducción de los

manuscritos de Nag Hammadi, que se encontraron en jarras
Como analista junguiana que considera los mitos como selladas en el desierto del Sinaí.
fragmentos de épocas históricas, encuentro que un mito sin El significado del modo de percepción femenino y la pre
gular me habla de lo que le ocurría a la conciencia femenina sencia de la divinidad femenina no se habrían considerado
en el pasado y ofrece una metáfora para lo que está ocurrien significativos, si se hubieran encontrado los pergaminos en
do actualmente. Es la historia de Metis, diosa preolímpica de una época anterior a la aparición del feminismo. Parece un he
la sabiduría. Fue la primera esposa- del dios del cielo, Zeus. cho sincrónico el que éstos surgieran a la luz cuando ya exis
Este la engañó haciéndola muy pequeña y tragándosela cuan tían mujeres teólogas eruditas, como Elaine Pagels, autora de
do ella estaba embarazada de Atenea. Sólo después de ha los Evangelios gnósticos, para que pudiéramos entenderlos,
berse hecho adulta, Ateriea surgió de la cabeza de su padre ig así como instrumentos científicos para conservarlos y tra
norando totalmente qüe tenía una madre. ducirlos.
Al igual que Metis, el matriarcado y sus valores fueron El movimiento de las mujeres nos permitió volvernos
históricamente tragados por el patriarcado. Tenemos vestigios conscientes de lo que antes había estado invisible: tomamos
evidentes de que Europa estuvo habitada durante 25.000 años conciencia de que vivíamos en una cultura patriarcal y em
por pueblos pacíficos, matrilineales, que rendían culto a las pezamos a entender qué podía significar esto para nosotras
diosas, y que se dedicaban a la agricultura y a la artesanía, y desde el punto de vista personal y colectivo. Pudimos com
también de que fueron absorbidos por tribus guerreras que prender que los atributos femeninos eran.ininimizados: al
rendían culto a los dioses del cielo. Este descubrimiento ha igual que Metis, las mujeres y la sabiduría femenina había
surgido sólo recientemente, tal como ha documentado la ar mos sido engañadas para hacernos pequeñas y habíamos de
queóloga Marija Gimbutas en The Goddesses and Gods of saparecido de la vista, tragadas por el discurso del patriar
Oid Europe, obra publicada por primera vez en 1972. Cuan cado. Al proceso mediante el que empezamos a liberarnos de
do escuché hablar a Gimbutas, parecía evidente que había las limitaciones psicológicas y de la opresión institucional de
sido necesario que fuese una mujer determinada y con un los presupuestos patriarcales se le llamó con toda propiedad
interés concreto, que podría calificarse de feminista, la que in “toma de conciencia”. Prendieron las ideas que se habían
vestigase y probase la existencia de una cultura centrada en expresado a principios de siglo sobre la igualdad y los dere
las mujeres, hecho que había sido desechado previamente chos de las mujeres, y el cambio en el estatus de la mujer se
por los investigadores masculinos como una fantasía. convirtió en una idea cuyo momento había llegado.
También se había perdido para la historia la perspectiva de Como consecuencia, los años setenta fueron considerados
los cristianos gnósticos primitivos, que confiaban en la gno en Estados Unidos como la década del movimiento de las mu
sis individual; ónciencia experimentada intuitivamente de jeres. Se nos abrieron las puertas para entrar en los campos
lddivino sin la intermediación de un sacerdote. El gnosti académico, profesional y de los negocios, en donde podíamos (A
cismo era un cristianismóque incluía una divinidad femeni utilizar nuestros intelectos, ejercer el poder y competir con
na, Sofía o la Sabiduría Femenina. Nuestra toma de con éxito con los hombres. Fue una liberación del arquetipo de
ciencia sobre las crncias de los cristianos gnósticos Atenea en las mujeres: una mente competente e impersonal
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que era capaz de trazar estrategias y de utilizar el poder. Del menino, que está ausente, y quur la división entre el es
mismo modo que Atenea había surgido de la cabeza de Zeus, píritu y la materiaS (palabra procedente del término madre),
las mujeres con capacidades de Atenea se hicieron visibles y cuando se vive la divinidad como un aspecto de nuestra hu
fueron reconocidas y validadas por la cultura del Padre. Sin manidad y del universo físico. La capacidad para articular esta
embargo, al igual que la misma Atenea, las mujeres-Atenea clase de experiencia iniciática, de ser testigos de lo que ocu
eran hijas del padre que no se consideraban a sí mismas rre y de reflejarlo posteriormente, proviene del reino-matriz
como feministas. Con mentores masculinos y llenas de opor (madre) inconsciente y desemboca en una atención cons
tunidades, no solían sentirse oprimidas; mantenían su fideli ?iente que es femenina.
dad a los principios de Zeus y no tenían conexión con Metis, Reflexionar sobre el nacimiento de lo Femenino Cons
como sabiduría femenina. ciente estimuló mi pensamiento sobre la diferencia que exis
Aunque las beneficiarias iniciales del movimiento de las te entre la idea abstracta de la experiencia del parto, de la que
mujeres se parecían a Atenea, el movimiento mismo fue di tuve una idea anticipada durante las clases de obstetricia en
rigido por mujeres que eran arquetípicamente como Artemi la Facultad de Medicina, y la experiencia directa de dar a luz.
sa, la diosa griega de la caza y de la luna, la única diosa que Yo estaba mejor preparada para la realidad por haber sido ins
acudió en ayuda de su madre, que vivía en compañía de mu truida sobre lo que tenía que esperar, pero había un abismo de
jeres y que prefería estar en plena naturaleza salvaje. Cuan diferencia entre la descripción y la cosa real.
do daban a luz, las mujeres la invocaban para que las ayudase. Recordé también que la experiencia física del parto evo
Artemisa personificaba el arquetipo de la hermana, vincula caba y estimulaba en mí un cambio de conciencia: como
do profundamente, lo mismo que la diosa, a la, hermandad con consecuencia, me sentía profundamente vinculada a todas
las demás mujeres y con la Madre Naturaleza. El movimiento las mujeres que habían dado a luz. El parto fue para mí una
de las mujeres era pues una expresión del arquetipo de Ar iniciación a una hermandad entre mujeres que me hizo fe
,.. temisa, en cuanto que se interesaba por la ecología, la natu minista, y supuso el comienzo de la toma de conciencia emer
7
raleza salvaje y la Madre Tierra. gente de las exigencias y dones físicos, psicológicos y espi
Para las mujeres que desarrollan las cualidades de Atenea, rituales que llegan con la maternidad.
lo mismo que para los hombres que confían sólo en los datos No aprecié hasta más adelante el hecho de que el parto
probados cientificamente, el conocimiento de uni sabiduria también es una experiencia semejante a la de vivir un mito (lo
inarticulada, intuitiva o físicamente sentida coiuo. femenina, que sucede siempre que tenemos una experiencia arquetípi
vendria despues a traves de una expenencia iniciatica, como ca). Y sólo ahora, veo también que la experiencia del parto
participar en un parto, tener una experiencia-cercana a la muer puede servir como metáfora para describir eLnacini4ento de
te, o una epifanía extática transformadora de la conciencia. lo Femenino Consciente en los individuos y en la cultura;
Cuando somos conmovidas por el intenso sentimiento de aquí, como en la sala donde se da a luz, el cómo se aprende
amor y belleza que con frecuencia acompaña a este tipo de sobre un tema y lo que se aprende están íntimamente conec
experiencias, es como si Afrodita hubiera emergido del in tados. Cuando esto sucede de esta manera, el conocimiento
consciente como una presencia inspiradora de respeto y ve llega a través de una experiencia iniciática que nos transfor
neración. Tomamos conciencia del asPectofo de lo fe- ma profundamente.
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La transición hacia un parto ocurre todo el tiempo, pero es pueda y quiera proveemos para siempre, a ser adultos agra
más intensa justo antes del alumbramiento. Los dolores del decidos 4tie sabmos que puede ser destruida por un holo
parto son más largos y más fuertes cuando el bebé llega a tra causto nuclear o por simple descuido humano.
vés del cuello del útero al canal uterino y pasa bajo el hueso El saber que estamos viviendo en una época de cambios
púbico para salir al mundo. Igualmente, los periodos de tran fundamentales nos proporciona un sentimiento de estructu
sición son épocas en las que nos encontramos entre la vida ración, e incluso un sentido de propósito. Mi postulado, com
que hacíamos y el próximo periodo de crecimiento. Ese tiem partido por muchas otras personas, es que lo que está to
po que se halla entre un territorio y el siguiente, un estado de mando forma y marcando el comienzo de una nueva era es
conciencia y otro, se experimenta como “liminal’, termino femenino, personal, de alcance planetario y, al mismo tiem
que prpcede.de la palabra latina-limen, que designaba la viga po, esprofundamente sagrado y se halla simultáneamente
de madera del marco de una pürta; bajo la que hay que pa en el corazón de la vida ordinaria.
sar para atravesarla. Entiempos “liminales”, nos encontramos Se pueden conocer estos márgenes crecientes de con
en proceso de cambio y somos extremadamente vulnerables. ciencia femenina a través de la intuición, la conciencia ar
En esos momentos suele ser tan probable la transformacióQ quetípica o mítica, las percepciones corporales, las imágenes
y el crecimiento, como la destrucción y la regresión. y la imaginación, o la expresión ritual. Estos márgenes hacen
Creo que nos encontramos colectivamente en una época u- un llamamiento al alma/psique a participar y a verse afecta
minal de un cambio esencial, en la que lo Femenino Cons da emocional y espiritualmente por la experiencia a través de
ciente está emergiendo al mundo como un paso evolutivó de la que conoce más; ésta difiere del desapego impersonal en
la conciencia. Este deslizamiento se produce en la misma el que la mente funciona mejor -lo mismo que las funciones
matriz qie el movimiento de las mujeres. El anhelo por en adscritas al cerebro derecho son diferentes de las adscritas al
contrar una nueva identidad llega de muchas maneras: la es cerebro izquierdo—. Existe la misma diferencia que entre leer
piritualidad de las mujeres, la espiritualidad centrada en la acerca de un bebé dar a luz a uno.
creación, el retorno a la Diosa, la conciencia global, la pre
,,- ocupación ecológica, un nuvo reconocimiento y recupera
ción del cristianismo céltico gnóstico, por citar sólo algu
nas de estas expresiones.
Esta evolución también llega a nuestra conciencia a través
del desarrollo superior de la mente cognitiva, por medio de
los logros de la tecnología de la era espacial, que aportó a la
humanidad la experiencia de poder ver la tierra desde el es
pacio exterior. Muchas personas han llegado a una nueva
conciencia a causa de la terrible belleza de la tierra: estamos
tomando conciencia de nuestra dependencia del planeta, de su
fragilidad, y del milagro que hace la vida posible. Estamos
pasando de ser como niños que esperan que la Madre Tierra
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El encuentro de lo femenino
de nuestros días, que todavía afirma que las mujeres no pue )

den tener una relación directa con lo divino, que está suje
1
ta a la mediación de un sacerdote o de un marido.
Singer también relaciona otros resultados a largo plazo de
esta escisión con ciertos problemas actuales: confusión en los
roles interpersonales de hombres y mujeres, yfalta de respeto
por la frágil ecología de la tierra, la Gran Madre, que hace
un llamamiento a las cualidades femeninas nutridoras de
14. EL ENCUENTRO DE LO todas/os nosotras/os.
Al igual que las otras autoras de esta parte, Singer nos
FEMENINO EN ofrece unajorma de lo Femenino Divino desde otro tiempo
y lugar:Sofía, la Diosa gnóstica de la sabiduría que nos re
LA TRADICIÓN cuerda que puede ser vista como nuestro o rigen, nuestro re
corrido y nuestra meta.
JUDEOCRISTIANA June Singer, doctora en Filosofl’a, es analista junguiana
y practica en Palo Alto, California. Es autora de Energías del
Amor; The Unholy Bible; Androginy: The Opposites Whit
por June Singer hin; y coautora del Singer-Loomis Inventtory of Persona
lity. En su último libro, Seeing Through the Visible World,
explora las raíces gnósticas de la psicología de Jung. Cuan
June Singer, analista junguiana y autora, que vive en do no está reflexionando sobre asuntos serios, disfruta tra
PdloJ4itó, California, traza los amplios efectos de la escisión bajando en su jardín o volando a lugares lejanos.
ajiocalíptica entre lo Femenino y lo Masculino en la cultura
judeocristiana. Mientras que Riane Eisler examina los efec
tos de esta escisión en el mundo antiguo, en el campo social
(capítulo 2), Singer se centra en el terreno espiritual.
Singer intenta descubrir los momentos de la tradiciónbí Una conciencia femenina emergente nos está haciendo
blica en que lo Femenino o la Diosa fue rechazada, aban çaer enla cuenta-de queciertos problemas básicos a los que
donada y, al final, desterrada a los mundos inferiores. Ella nos enfrentamos actualmente no sonproblemas sólo de hoy
considera que lo divino se ha divorciado de la naturaleza y día. Constituyen nuestra herencia de las épocas del pasado,
del cuerpo humano, y que ha sido situado en un pedestal en la consecuencia pospuesta durante mucho tiempo de la alie
forma de un viejo hombre sabio. Por esta razón, apunta a la nación de la cultura patriarcal del principio Femenino.
religión como fuente de opresión, más que a la socieda1pa- Estos problemas existen en cinco niveles diferentes:
triárcal en su conjunto. Los resultados a largo plazo de este 1. En un nivel arquetípico, las distinciones entre sexos,
deslizamiento pueden verse en la religión institucionalizada aunque basadas en la biología, han conducido a la división de
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Despertando de nuevo la divinidad de lo femenino El encuentro de lofeinenino
• los roles basados ene! género. Lo que se considera masculi mos de una manera incompatible con nuestro sistema perso
no o femenino puede diferir de una cultura a otra, pero el pun nal de valores? ¿Consideramos que la sociedad favorece
to esencial es que siempre existe una diferencia. nuestras metas y valores o que se opone a ellos? En algunas
Es difícil determinar si lo que percibimos como masculi situaciones consideradas como no amenazantes, las mujeres
no o femenino es una consecuencia directa de nuestra expe y los hombres tienden a cooperar y a apoyarse entre sí. En una
riencia en el mundo, o si estas imágenes las llevamos pues situación opuesta, cada persona actúa para sí. La mayoría
tas en el mundo como lentes arcaicos a través de los que de nosotras/os nos encontramos a lo largo de la vida en una
contemplamos el presente. La psicología contemporánea pro gran variedad de circunstancias, a veces favorables y a veces
funda, en especial la influenciada por C.G. Jung, nos ha vuel dolorosas. Estas circunstancias, junto con nuestros propios va
to a las fuerzasarquetípicas existentes en la psique humana, lores y expectativas juegan inevitablemente un papel muy
que generan imágenes, actitudes y, posteriormente, compor influyente a la hora de determinar la naturaleza de nuestras
tanlientos. Las imágenes de la divinidad de los antiguos tiem relaciones interpersonales.
pos, incluidas las imágenes de diósas, han servido como 3. En el nivel social, la escisión entre los roles masculino
plantillas psicológicas internas que han generado estereotipos y femenino es un próblema que incluye las diferencias de po
sexuales que, a su vez, se nos presentan como si fueran ob der y de autoridad. ¿En qué instituciones prevalecen los hom
jetivos, es decir, como si procedieran del mundo fenomeno bres y en cuáles son las mujeres las que toman la mayoría de
lógico. las decisiones? Tengamos en cuenta que algunas de las cues
Seguramente no se trata de un caso de “esto o lo otro”, ya tiones sobre las que las mujeres suelen expresarse más no son
que no somos activados y propulsados a través de la vida cuestiones que conciernen sólo a las mujeres, como por ejem
sólo por las circunstancias de nuestro entorno, ni tampoco so plo, el aborto. Lo que está en cuestión en este caso es el bie
mos totalmente capaces de trascender nuestra herencia indi nestar del feto, y no necesariamente el de la mujer cuyo cuer
vidual, cultural y filogenética. Reconociendo la importancia po lo contieneHasta qué punto podemos lograr que los
tanto de la naturaleza como de la educación, adoptaré la pos dos sexos se interesen en asumir el proceso de tomar una
tura, frecuentemente pasada por alto, de que debemos con decisión en nuestra sociedad’?
siderar algunos de los principales problemas actuales a la 4. En el nivel del medio ambiente, la violación de la tie
luz de sus cimientos arquetípicos. rra es un resultado de los elementos de nuestra sociedad que
2. En el nivel interpersonal, los hombres ylas mujeres re persiguen el dominio y el control sobre la naturaleza: el lla
accionan entre sí en base a sus propios sistemas jternós de mado principio Masculino en hombres y en mujeres. Tam
valores, que pueden estar determinados en parte por factores poco se escapan los habitantes de nuestras ciudades -que
arquetípicos. ¿Cómo nos vemos a nosotras/os mismas/os? llamamos nuestro hogar- a la aglomeración, a la contamina
¿Tenemos poder, control, autoridad, autoestima? ¿Como con ción del aire y del agua, y a la falta de una buena educación
sideramos el sexo opuesto? ¿Podemos confiar en él para que para aquellos de nuestros hijos que más la necesitan.
nos ayude, nos sostenga y nos anime? ¿O lo vemos como el 5. En el nivel espiritual, existe igualmente una división en
,enemigo que compite por el reconocimiento, amenaza o mina tre el reino de lo temppral y el reino de lo infinito. Llevado
‘ nuestra autonomía, o a la expectativa de que nos comporte- esto al terreno de cada día, el problema consiste en que de-
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Despertando de nuevo la divinidad de lofeinenino El encuentro de lo femenino
masiadas personas con poder e influencia están más intere Creo que no es una simple generalización decir que el
sadas en los beneficios inmediatos que en la visión evoluti arquetipo del héroe es uno de los arquetipos con el que los
va global de la humanidad y desu bienestar. Coñio Solía de hombres han tendido históricamente a identificarse, bien
cir Jung no somos capaces de vivir nuestras vidas “bajo el como un ideal o como un modelo de conducta respecto al cual
aspecto de la eternidad”. Demasiadas personas permanecemos juzgarse, mientras que la Diosa representa más un aspecto de
inconscientes de las posibilidades de uiia renovación espiri lo Femenino, vital y dador de vida, con el que las mujeres se
tual del aquí y ahora. Apostamos por una gratificación in pueden identificar más fácilmente. Esta imagen ha sido des
mediata como si ño hubiera mañana. valorizada, rechazada y negada por la cultura judeocristiana.
‘
Espero mostrar, a través de una parte del cuerpo mitoló Sólo hoy día, cuando tanto hombres como mujeres han em
gico perteneciente a la cultura judeocristiana, pero que fue ex pezado a darse cuenta de que la mitología del pasado antiguo
cluido de la Biblia, cómo la alienación histórica de lo Fe habla la lengua del alma en términos simbólicos, hemos em
menino a partir de lo Masculino ha contribuido a algunos pezado a preguntarnos por qué la Diosa desapareció mientras
de estos problemas contemporáneos. rendíamos homenaje al héroe.
El mito del héroe en la cultura moderna se manifiesta en el
crecimiento de las grandes empresas, concebidas y desarro
El mito de la Diosa y el mito del héroe lladas por aplicados individuos que no se dejan nada en el ca
mino de sus logros. Los hombres corrientes sirven a sus hé
Actualmente se ha producido un interesante fenómeno, roes y se calientan en el reflejo de su gloria; pero el deseo
al haber sido capaces las mujeres de adaptarse cada vez con secreto implantado en los niños pequeños por sus madres, de
más eficacia a las exigencias del mundo moderno y de asu que cualquier hombre puede llegar a ser presidente de los Es
mir crecientemente posiciones de respeto y de importancia. tados Unidos, nunca ha sido olvidado por completo. Este mito
Se ha vuelto a despertar un nuevo viejo mito: el mito de la se vive por sustitución cuando los hombres vitorean a sus hé
Diosa; hasta tal punto se ha despertado, que casi ha reem roes deportivos, insisten en el derecho a portar armas morta
plazado el mito del héroe que tanto caracterizó los ideales de les, o proclaman: “Mi país ante todo y sin discusión”.
la primera mitad del siglo xx. Por otra parte, el mito de la Diosa reprimida nos habla del
Tal vez esto ha sucedido porque el mito del héroe, con to poder singular de lo Femenino. No es el poder de la fuerza fí
dos los dioses que le acompañan y apoyan, no tuvo éxito en sica el que caracteriza a la Diosa, sino el poder de la creativi
crear el mundo pacífico y armonioso que la mayoría busca dad. El útero es sólo una parte de este hecho. Pero es a través
mos. El héroe representa al individuo que ha prosperado por del útero como los hombres se han perpetuado a través de su
su fuerza o astucia, frecuentemente a expensas de individuos semilla, lo mismo que la han plantado en la tierra fértil y, con
menos ambiciosos, más débiles o más conscientes desde el la ayuda de la lluvia del cielo, han sido capaces de proveer a
punto de vista social. Sólo una ínfima parte de la población su familia del alimento que necesitaba para el sustento.
se parece al héroe, mientras que la vasta mayoría debe luchar Sin embargo, el hambre que el hombre siente, y que sólo
individual o colectivamente para sobrevivir económica, so puede ser saciada por la mujer, va más allá de la necesidad fí
cial y espiritualmente. sica o sexual. Es la conexión con el espíritu, con la Otredad
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Despertando de nuevo la divinidad de lo femenino El encuentro de lo femenino
total, lo que los hombres buscan en lo Femenino, porque la eternamente recurrentes de pensamiento y de conducta que
mujer es todo lo que no es el hombre. Porque ella es amoro han llegado a dominar nuestra cultura occidental judeocris
sa y compasiva, pero también ha de ser respetada y temida. tiana, y a detectar dónde fue rechazado lo Femenino y dón
Ella es esa enorme Madre que sobresale por encima del hom de se perdió posteriormente.
bre, como sobresalía cuando era un niño, la que puede otor Por ejemplo, consideremos la fiesta de Pascua del calen
garle sus deseos o negárselos, mantenerle en su regazo o dario cristiano. Esta fiesta se asocia, por supuesto, a la resu
abandonarle. Para convertirse en un hombre, el niño debe rrección de Jesucristo. ¿Pero en cuantas iglesias se mencio
arrebatar su libertad a su madre. na durante el domingo de Pascua el hecho de que el nombre
Estas huellas enterradas del pasado se transforman como de esta festividad proviene de Astarté, la diosa sumeria de la
por arte de ensalmo en el poder secreto de la Diosa. No es de fertilidad, que era venerada en Oriente Medio, dos mil años
extrañar, pues, que la cultura judeocristiana del patriarcado la antes de Cristo, como la encarnación de la Tierra Femenina?
haya rechazado. Como consecuencia, lo Masculino se ha se Astarté era sólo una de las diosas; también existían la diosa
parado de lo Femenino desde hace mucho tiempo. La alie Ishtar de Babilonia, Anahita en Persia, las diosas egipcias Isis
nación entre ambos ha conducido a una conciencia unilateral y Hatthor, Cibeles de Lidia, la diosa griega Afrodita, y la
y a una inconsciencia oscura y sombría. romana Venus, cada una de ellas temida y respetada como la
Rechazada o no, la Diosa no ha desaparecido por com Gran Diosa, la Santa Madre, la Prostituta Sagrada, y la Fuen
pleto. Se ha estado escondiendo, esperando los tiempos pro te de la Sabiduría.
picios para emerger de nuevo, los tiempos en los que el mun En contra de la opinión popular generalizada, la Diosa
do tenga necesidad de ella y esté dispuesto a prestarle no era venerada en lugar del Dios. Más bien lo Femenino se
atención. Parece que ha llegado la hora de su segunda venida. veía siempre en relación a lo Masculino, con el reconoci
miento pleno que requiere una relación para asegurar la fer
tilidad de la tierra y de la humanidad. Es muy interesante el
La reconsideración de los viejos mitos que permanezcan vestigios de la Diosa en la Biblia hebrea,
como en la historia de Ester (nombre derivado de Ishtar?),
Hoy día estamos asistiendo al renacimiento de los viejos que se convirtió en la esposa del rey-dios persa Asuero y lo
mitos, pero no nos conformamos simplemente con volverlos gró salvar a su pueblo, Israel, interviniendo en su favor ante
a contar. Estamos volviendo a reconsiderarlos desde el pun su marido, quien tenía intención de destruirlo.
to de vista de su significado arquetípico. Buscamos en los re Descubrimientos como éste han llevado a muchos estu
latos misteriosos de otro tiempo temas comunes que descri diosos a preguntarse por qué la Diosa fue derrocada de su tro
ban y caractericen el desarrollo de la conciencia del ego no al mando del Dios hebreo, cuya presencia patriarcal do
fuera de su matriz, cuando en los primeros tiempos empeza minaba la religión hebrea y, posteriormente, sus religiones
ba a interactuar en grupo. Buscamos en estos mitos indicios hermanas, el Cristianismo y el Islam. La historia bíblica nos
de los obstáculos que han interferido con este desarrollo y que cuenta que cuando los nómadas hebreos llegaron a Egipto
nos han hecho retroceder a estados arcaicos de conciencia. Es causaron problemas por su negativa a venerar a los dioses y
tamos aprendiendo a reconocer en los mitos los patrones diosas de aquel país basado en la agricultura. Cuando se Ii-
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beraron del yugo de la esclavitud y volvieron a sus costum encontrar. Un ejemplo podría ser el de Raquel que, cuando es
bres nómadas, siguieron a su propio Dios tribal y patriarcal tuvo preparada para dejar su hogar paterno para vivir con su
para adentrarse en tierras desconocidas y, posteriormente, esposo Jacob, tomó consigo sus terafim (ídolos de los que
en la Tierra prometida. En el camino recibieron la ley mo condenaba el segundo mandamiento) y los escondió bajo la
saica, que incluía la historia de su propio pueblo desde el falda. Cuando su padre descubrió que le faltaban los ídolos,
tiempo de la creación, así como instrucciones específicas y ella se negó a levantarse de donde estaba sentada, fingiendo
mandamientos sobre cómo conducirse respecto a su Dios, que tenía la regla, de manera que ningún hombre pudiera to
entre sí y con el resto de la humanidad. Esta historia y estas carla (según la ley hebraica). Este relato sugiere que los ído
leyes, junto con otros documentos posteriores, se convirtie los (diosas) estaban presentes entre los hebreos, pero de ma
ron en las Sagradas Escrituras mediante las que el pueblo nera oculta. Aunque se supone que este hecho sucedió antes
hebreo iba a ser gobernado y en las pautas a través de las cua de la recepción de la ley, la decisión de incluirlo en la Biblia
les se mediría su fe y su conducta. fue bastante posterior. En un periodo todavía ulterior, se
Tras su regreso a la tierra de sus antepasados, los hebre compiló el Nuevo Testamento como un testimonio de la vida
os encontraron a los habitantes locales atrincherados y rin y tiempos de Jesús; esta escritura sagrada, también se cerró
diendo culto a las diosas de la fertilidad, a las diosas del en determinada época de manera que no pudiera añadirse
amor y, a veces, a las de la sabiduría. Estas madres-de-la-tie nada más.
a encarnaban en sus expresiones más amables la compasión Mientras se escribían estos documentos “oficiales” se es
y el alimento, pero en sus personificaciones más feroces exi taba produciendo también un vasto cuerpo de literatura sa
gían sacrificios humanos y toda clase de rituales, que parecían grada tanto por judíos como por cristianos de muy diferentes
impúdicos y lascivos a los ojos de los puritanos hebreos. Sin escuelas de pensamiento, desde el valle del Tigris hasta las
embargo, estos ritos debieron tentar a algunos, ya que la ley orillas del Nilo. Se ha aventurado la hipótesis de que cerrar
hebrea tuvo que ser reforzada una y otra vez en lo concer el Viejo y el Nuevo Testamento era en parte el resultado de
niente a la prohibición de cualquier contacto con los adora los esfuerzos por cristalizar la intención de dichas obras sa
dores de la Diosa, bajo amenaza de los castigos más severos gradas en una determinada fase.
para cualquier hebreo que osara aproximarse a los lugares en Podemos preguntarnos por qué era necesario limitar la
los que se le rendía culto. Los hebreos necesitaban para so amplitud de los textos autorizados de la literatura religiosa,
brevivir como pueblo pennanecer como una comunidad fuer en vez de permitir que se expandieran e incorporaran puntos
temente unida de creyentes y seguidores de un dios-padre diferentes de vista. Los eruditos han sugerido que algunos tex
que debía protegerles de la contaminación o de la conquista tos extracanónicos contenían tendencias reformistas que ame
de sus vecinos. nazaban la autoridad de las facciones ortodoxas, y que por
Hacia el año 300 a. de C., cuando la versión oficial de la ello tenían que ser excluidas de lo que se consideraba el
Biblia hebrea se consideró oficialmente cerrada, habían sido cuerpo esencial de la doctrina. Otros avanzan la hipótesis
expurgadas casi todas las referencias al culto de la diosa. de que no podía permitirse que las ideas politeístas y las
Las que permanecieron fueron sutilmente veladas, de mane prácticas helénicas de diversas regiones del Próximo Orien
ra que era necesario buscarlas expresamente si se querían te, incluyendo el culto a la Diosa, contaminasen las mentes
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estrictamente monoteístas de los judíos y los cristianos. Pero do el Dios de la historia de la creación bíblica dice “Hagamos
algunas de aquéllas sobrevivieron en formas diversas, prin al hombre a nuestra imagen y semejanza”, existe una con
cipalmente a través de la leyenda y del mito. Se han encon notación de que está hablando al aspecto femenino de sí mis
trado muchas versiones diferentes, frecuentemente en frag mo o a la cocreadora femenina, ya que el texto bíblico con
mentos que son difíciles de reunir, traducir y entender. Estos tinúa: “varón y hembra los creó”. Lo Femenino, ya se trate de
textos extracanónicos contienen, entre otras cosas, “histo una diosa o de una parte de Dios se describe en las obras
rias” simbólicas del origen de lo Femenino en la tradición ju gnósticas como “luz celestial” o “luz de la sabiduría”. Des
deocristiana. de el principio se trata de una figura de sabiduría. En la Bi
blia se encuentran todavía vestigios de este aspecto de lo
Femenino, como por ejemplo, en los Proverbios, 8:1: “,No
Lo Femenino excluido llama acaso la sabiduría? ¿No eleva la inteligencia su voz?”,
y en el Cantar de los Cantares: “i,Quién es la que surge como
Necesariamente tengo que seleccionar inicamente algunos la aurora, bella como la luna, resplandeciente como el sol, y
ejemplos en esta ocasión, ya que su alcance es demasiado vas terrible como un ejército con estandartes?”.
to como para intentar hacer aquí un análisis general. Los sa En otro mito gnóstico, se ve lo Femenino como un refle
caré de textos recientemente descubiertos de los dos prime jo de un Dios trascendente completamente extraño. Este Dios
ros siglos de la era cristiana, concretamente de los es estático y coexiste junto con la totalidad que no está li
Manuscritos judíos del Mar Muerto, encontrados en Qumram, mitada al mundo visible, sino que más bien existe en el cie
en las colinas de Judea, entre 1945 y 1947, y de la Bibliote lo, lo que quiere decir en el mundo sin forma de lo infinito.
ca Nag Hammadi, una colección de textos cristianos gnósti Él es omnisciente, así que contiene el atributo del logos que
cos encontrados en 1945 en el Alto Egipto. da nacimiento a la mente, al intelecto y a la palabra. Lo Fe
Los esenios huían de lo que consideraban prácticas profa menino complementario es activo; posee la capacidad de
nas en Jerusalén, que estaban reñidas con sus propias ideas de moverse entre los cielos y las regiones inferiores. Esto pue
piedad y adhesión a la ley mosaica. Ellos representaron al de interpretarse como que representa la capacidad de relación,
máximo la separación por parte de lo Masculino de lo Feme un atributo de eros, el gran anudador y desanudador. En tér
nino, al formar en el desierto de Judea (hoy día la orilla oc minos psicológicos, esta imagen dualística de Dios puede
cidental del Jordán) una comunidad ascética de hombres que ser un resultado de la represión de la afinidad Masculina con
renunciaban a la sexualidad, por considerarla como una in la tierra (los mundos inferiores) y de la proyección de esta sa
terferencia en la vida espiritual. La relación sexual sólo esta biduría terrestre sobre lo Femenino. Como consecuencia, lo
ba permitida a un pequeño número de sacerdotes con la fina Femenino ha tendido a asociarse con la tierra, con lo que es
lidad de posibilitar la continuación del linaje sacerdotal. básico y humilde.
Por otra parte, los gnósticos del Alto Egipto otorgaban un Un mito adscrito a la escuela gnóstica de Valentín cuen
papel importante a lo Femenino; con toda certeza, en algunos ta que, en la época intemporal antes de la creación, lo Fe
textos aparece como la compañera de Dios, emanación de la menino aparece como el “pensamiento” de Dios; de aquí
misma sustancia del Altísimo y, por lo tanto, igual a él. Cuan- proviene el que se le dé el título de Sofía, procedente de la pa-

labra griega que designa la sabiduría. Siendo pensada, tiene do. Actúa y desciende, por propia voluntad o movida por la
cierta autonomía; es libre de mirar hacia abajo y de contem compasión, y los arjones al verla tienen deseo de ella. Caen
plar lo que ve. Su mirada alcanza todos los aspectos negati sobre ella y la vuelven ciega. Empieza entonces a sufrir enor
vos de los lugares inferiores, y está llena de compasión. Su memente con dolores y en la oscuridad. Extraviada de su
pensamiento no es puro intelecto, sino otra cosa: un anhelo hogar celestial, se encuentra turbada e indefensa. Se arre
de relación y un anhelo de algo con lo que se pueda relacio piente de su error, el de actuar sin el acuerdo de su consorte
nar, concretamente, la creación. Siendo de la misma esencia y, por lo tanto, de haber cometido un pecado en contra de la
de eros, está apasionada con su propio deseo y así, sin la Totalidad. Llora hacia el cielo en busca de ayuda.
participación del principio Masculino Divino, llamado tam Su plegaria es escuchada y el logos envía una emanación,
bién logos, la sombra de sus pensamientos asumen una exis que también es logos de la misma sustancia. El logos (en al
tencia independiente. La consecuencia de esta ruptura de la gunas versiones del mito es Jesús, llamado también Anthro
unidad primordial es la concepción de un dios-creador, que pos, o el Primer Adán, por haber sido el modelo primigenio
entonces es responsable de crear el mundo visible. Este dios- según el cual se habría modelado el Adán bíblico) desciende
creador, llamado Yaldabaoth y con otros muchos nombres a las regiones inferiores y, con un toque, restablece la vi
en la mitología gnóstica, tiene un fuerte parecido con el dios- sión de Sofía. De esta manera, el logos vuelve a conectar
creador del Génesis, o seguramente con su lado oscuro o con con eros, y Sofía, iluminada, puede una vez más encarnar la
su aspecto sombrío. figura femenina o de la sabiduría.
Yaldabaoth está muy lejos de ser un dios ideal, ya que fue En esta narrativa de la creación, los arjones arrojan su
concebido por un error de Sofía, al atreverse a formar un pen semilla a la tierra y hacen nacer a una criatura en forma de
samiento en el que su divino consorte no había participado y hombre. En otras versiones, Yaldabaoth moldea el primer
al que no había dado su acuerdo. Como resultado de la alie hombre a partir del polvo de la tierra. Este “segundo” Adán
nación por parte de lo Femenino de lo Masculino, Yaldabaoth (que proviene de Adamah, la palabra hebrea que designa la
es imperfecto: sufre de celos. Anuncia que es un dios celoso tierra) es débil e impotente y no puede levantarse del suelo,
y que no habrá otros dioses antes que él. Con esta declaración porque fue creado como consecuencia de un error. Viendo
reconoce que existen otros dioses (y diosas) y exige tener do esto, Sofía envía una segunda emanación en forma de la Pri
minio sobre ellos. Crea toda una caterva de espíritus malé mera Eva, una Eva celestial que es el prototipo de la Eva
volos, diablos y demonios para servirle, y otorga un lugar bíblica. Con ella tiene un doble físico, que, al encontrar a este
importante al diablo en los mundos inferiores en los que rei débil Adán, le insufla (espíritu) dotándole así con el don de
na. Los diablos son entronizados como “arjones”, o poderes la vida.
de los mundos inferiores. Gobiernan el mundo de la forma. Adán vive, cuando Sofía/Eva celestial le levanta y le in
Psicológicamente, experimentaríamos a los arjones como po sufla la esencia del verdadero Dios -del que ella forma par
deres; por ejemplo, los celos, la envidia, la codicia, la lujuria, te-. Es la potencia femenina la que es agente creador en este
la ambición, el autoenaltecimiento, la crueldad y el engaño. mito, que ha sido excluido de la literatura canónica de la tra
El mito continúa. Sofía, mirando hacia abajo desde arri dición judeocristiana. Pero esta misma potencia levanta una
ba, ve al diablo en todas partes y multiplicándose en el mun vez más los celos de los arjones. Estos se disponen a im

plantar su semilla en Eva, para ser ellos en vez de Adán los poder de generación y de la muerte. En lugar de permanecer
que puedan reclamar sus derechos sobre la descendencia. inconscientes, podían crecer en sabiduría, experimentando
Pero el espíritu femenino sale del cuerpo de Eva y huye al el dolor y la pasión de la mortalidad, y transmitir su sabidu
Árbol del Conocimiento, es decir, el Arbol de la Gnosis, y ría a su descendencia. El don de la vida significaba que una
desde allí observa, mientras que los anones, engañados, des generación podía aprender de sus predecesores y que, de esta
honran su doble. manera, la sabiduría podía aumentar. El don de la muerte
Habiendo fracasado en conseguir sus metas y temerosos significaba que cada generación podía reemplazar a la gene
del poder de la pareja terrenal, los arjones intentan otra es ración menos consciente que la había precedido.
trategia. Consiguen convencer a Adán de que Eva salió de su El principio Femenino abarca en este caso la conjunción
costilla mientras él estaba durmiendo, y de que por ello es in de los dos aspectos de eros: capacidad de generar y sabidu
ferior a él, quien ha de ser su señor y a quien Eva debe pres ría. La capacidad de generar está asociada a la pasión, la re
tar obediencia. lación y la vida. La sabiduría se asocia con la muerte física,
La pareja vive en el Jardín del Edén, metáfora que indica porque sólo cuando se deja el cuerpo físico, el vehículo que
un estado de inconsciencia cercano a la naturaleza. En él mo contiene la conciencia del ego, puede la sabiduría ser liberada
ran todos los animales, incluida la serpiente, a la que los de las cadenas de la carne. Se puede entonces tomar con
gnósticos llaman “el Sabio Instructor”. También es conocido ciencia de la totalidad en la que participamos, de la Plenitud,
como el Adversario, porque sólo él es suficientemente osado del matrimonio sagrado entre el cielo y la tierra.
como para oponerse al dios-creador, que intenta mantener el Podemos ver en estos mitos un elemento interesante del
conocimiento apartado de Adán y Eva. ¿Qué clase de cono Gnosticismo, que es la presencia del arquetipo de existencias
cimiento retiene este Dios? No es el intelecto, puesto que gemelas, de la idea de que existen mundos gemelos: el mun
Adán ya lo posee, por ser capaz de identificar y de nombrar do invisible, eterno y sin formas, por un lado, y el mundo vi
correctamente a todos los animales del Edén. El fruto de este sible del tiempo, el espacio y la forma, por otro. De la mis
árbol es el conocimiento del corazón. Cuando la serpiente ma manera, existen muchos dioses de los pueblos del mundo
dice a Eva “come y no morirás”, le está instruyendo en la sa visible, y cada uno de ellos pertenece a una raza, tribu o re
biduría de la relación, porque después de haber comido y de ligión particular. Y existe el Altísimo, cuyo reino contiene
haberle dado el fruto a su esposo, se conocerán de otra manera todo lo que es visible, pero que no está limitado al mundo vi
a como se conocían antes, y serán capaces de procrear. sible. Los seres humanos, que estamos creados a la imagen de
En consecuencia puede decirse que, en un sentido, Adán este Dios, participamos también de este arquetipo de exis
y Eva pertenecían a un orden superior al de los ángeles, ya tencia gemelas. Tenemos el cuerpo físico que nace y muere
que éstos, al ser inmortales, no podían procrear; en caso con en el mundo físico, pero también tenemos nuestra esencia es
trario habrían llenado la tierra hasta hacerla rebosar. El pre piritual, que es anterior a nuestra aparición en él y que retorna
cio de la inmortalidad era que los ángeles tenían que perma a la Totalidad cuando hemos completado nuestro ciclo en la
necer como eran, pasivos y no creativos, en una forma tierra.
inmutable de conciencia en suspenso. Pero a Eva, y a través ¿Qué podemos pues deducir de la mitología gnóstica en lo
de ella a Adán, les fueron concedidos los dones gemelos del que se refiere al significado de la verdadera sabiduría? ¿ms-

286 287
pira la sabiduría o la gnosis ese nivel de conciencia que va de época a época. Por lo tanto, necesitamos no encerramos en
más allá de los confines del ego personal y de todos los dio las diferencias llamadas arquetípicas entre varones y hembras.
ses y diosas tribales, y que permite al individuo conocer al Por fin podemos arrojar nuestros lentes arcaicos y ver nues
Dios verdadero y eterno? Se puede tomar esta proposición tro propio sexo y el sexo opuesto como partes de una espe
como metáfora de una perspectiva de vida que afirma que más cie de individuos, cada uno de los cuales posee sus caracte
allá de todo lo personal se encuentran valores relacionados rísticas y capacidades específicas. Todos los patrones de
con el dios ordinario, el esfuerzo habitual y los fines normales pensamiento y de comportamiento son sin duda flexibles y
de la humanidad. ¿Cuáles son algunos de estos valores? cambiantes, como demuestra claramente el estudio de la his
¿Cómo se relaciona con el problema al que nos enfrentamos toria de las relaciones entre los géneros. Cuando tomamos la
hoy día el resultado, tanto tiempo dejado de lado, de la alie responsabilidad personal de cambiarnos a nosotros mismos y
nación por parte de una cultura patriarcal del principio Fe de cambiar nuestras instituciones, nuevas imágenes arquetí
menino? Consideremos las cinco niveles de problemas que, picas empiezan a expresar el principio subyacente arquetípico
como sugerí anteriormente, han contribuido a la formación de P de diferenciación de los géneros.
esos valores contemporáneos que han conducido al desequi En segundo lugar, en el nivel interpersonal, necesitamos
librio en algunas actitudes generales de nuestro tiempo. curar la brecha entre hombres y mujeres. En este punto cobra
En primer lugar, en el nivel arquetípico, podemos obser relevancia para nosotras el mito de Sofía: el principio Fe
var patrones fundamentales que tienen como consecuencia ac menino representado por las experiencias de Sofía misma, que
titudes, imágenes y comportamientos, que son juzgados en ha sido descartado por el principio Masculino -que no está in
cada sociedad como adecuados en relación al género mas teresado especialmente en nada salvo en habitar en la Tota-
culino o femenino. En el pasado considerábamos que estos lidad—. Sofía es curiosa, meditativa y tal vez se halla abati
patrones arquetípicos era fijos e inmutables. Pero con el paso da por haber sido desatendida por su esposo durante eras
de los años, hemos conocido la existencia de una enorme inmemoriales. Tiene poca experiencia en pensar, y mucho
variedad de normas culturales, que abarcan, desde el culto a menos todavía en ejercer sus poderes creativos, pero, no obs
la Diosa en un pasado remoto, hasta vislumbres de todo tipo tante, está determinada a ampliar sus esfuerzos en estas dos
de idealización del androginado en los últimos tiempos, pa direcciones. Vaga pesadamente de acá para allá y tiene que vi
sando por toda clase de sociedades patriarcales. En todo el vir con la consiguiente frustración.
mundo, diferentes grupos establecieron sus propias normas, Las mujeres que han vivido los comienzos del movimiento
asumidas como correctas, adoctrinando en ellas a sus vásta de la mujer encontrarán aquí alguna resonancia. Lo Femeni
gos. Sólo cuando han sido investigadas las culturas ajenas, he no sólo puede pedir y recibir ayuda cuando reconoce que se
mos empezado a apreciar variantes en las actitudes respecto ha dejado alienar de lo Masculino. Quizá este mito sirva para
al género. recordamos que hombres y mujeres necesitamos considerar
Hoy día reconocemos que mucho de lo que habíamos las necesidades y cualidades especiales del otro género, para
aceptado en el pasado como arquetípico es mucho más flui que pueda darse una relación creativa entre ambos. Pero an
do de lo que habíamos pensado. Lo que se considera como tes, cada género tiene que dejar conocer al otro sus necesi
conducta natural varía, no sólo de lugar a lugar, sino también dades. Mientras que uno u otro, el masculino o el femenino,

insista en la autonomía o el dominio, las relaciones inter distribución equitativa. Cuando predomina el eros aislado, las
personales serán destructivas desde su raíz. Cada persona consideraciones sentimentales pueden sustituir a una buena
tiene que estar dispuesta a dar algo a la otra, para poder re y ardua planificación para el bienestar general.
cibir así algo de valor de ella. Por ejemplo, se pueden gastarse millones de dólares en
En tercer lugar, los problemas sociales reflejan imágenes proporcionar alimentos y cobijo a los vagabundos, mientras
cambiantes de lo Masculino y de lo Femenino. Empezamos que recibe una atención menos prioritaria la tarea más pesa
a contemplar alteraciones radicales en nuestras instituciones da de proporcionarles formación y oportunidades laborales,
sociales como resultado de la entrada masiva de mujeres en para permitirles volverse económicamente autosuficientes y
la fuerza laboral en todos los niveles. Las diferencias de gé enriquecer el entorno. Cuando eros y logos juntos dirigen
nero empiezan a ser reconocidas y se hacen concesiones sen su atención al mundo en que vivimos, puede darse una sen
satas a las mismas, a medida que cada vez más mujeres van sibilidad respecto a las necesidades y valores de los indivi
ocupando posiciones importantes influyentes en campos duos, así como una planificación para conformar la realidad
como la medicina, las leyes, la educación y la empresa. Ho según el ideal. Cuando hombres y mujeres, con sus intereses
rarios laborales flexibles, permisos de maternidad y paterni peculiares y sus preocupaciones compartidas, trabajan juntos
dad, seguros médicos, “canguros” diurnos para niños, y vi para mejorar el entorno, surge la esperanza para el futuro de
viendas baratas, constituyen unos pocos ejemplos en los que nuestro planeta.
ya se han dado algunos pasos. Finalmente, el terreno espiritual merece nuestra primera
Aunque lo que necesita hacerse sorprende a la imagina y última atención. Mientras salvamos nuestras vidas y la
ción, las actitudes cambiantes son ya evidentes. Hombres y vida del planeta, tenemos también que curar “la grieta en el
mujeres están descubriendo que necesitan cooperar entre sí en cielo”. Durante mucho tiempo, los hombres y las mujeres de
el lugar de trabajo y en el hogar si quieren preservar los va hoy día se han desviado de la búsqueda del alma, del aspecto
lores. Sofía, la personificación de la sabiduría, nos enseña que imperecedero de nosotras/os mismas/os que da sentido al
ni el principio Masculino ni el principio Femenino pueden aspecto temporal. Lo Femenino perdido en la tradición ju
crear un orden armonioso por sí solos. Son más eficientes deocristiana mira de nuevo con pena hacia el mundo de aba
cuando actúan juntos. jo. No es fortuito el hecho de que los libros de los mitos
En cuarto lugar, nada de esto será de utilidad, a menos que gnósticos, incluido el de Sofía, la encarnación del principio
dirijamos nuestra atención al estado del mundo visible en Femenino, hayan sido descubiertos de nuevo en un tiempo
que vivimos. El logos, que ha sido asociado tradicionalmen en el que su mensaje se necesita desesperadamente. Ella
te con el principio Masculino, tiene que ver con la planifi nos recuerda la importancia de entender que cada cosa que
cación, la organización y la prontitud. Eros, asociado tradi pensamos o hacemos tiene una resonancia en un contexto
cionalmente con el principio Femenino, tiene que ver con la mucho más amplio.
crianza, la conservación y el proporcionar compasión. Cuan Traducido en términos contemporáneos, el mensaje pue
do predomina el logos aislado, la gente planea cómo extraer de ser claramente el de que encerrarnos en las preocupacio
mejor todas las riquezas de la tierra y utilizarlas, sin preo nes de los asuntos cotidianos significa aislarnos de la energía
cuparse suficientemente de la conservación, preservación y profunda del universo que nos transporta cuando fallan nues

1
Despertando de nuevo la divinidad de lo femenino
tros frágiles egos. La sabiduría transmitida por lo Femenino

nos recuerda que el dios-padre no es el único dios. El Altí
simo simboliza la cooperación de lo Femenino y de lo Mas
culino. Esta conjunción de opuestos es un ideal por el que me
rece la pena esforzarse.
SEXTA PARTE:
LA RENOVACIÓN DEL
MUNDO: LO FEMENINO Y
EL FUTURO
II

Cuando emerge lo Femenino, la vida es venerada.
JEANNE ACHTERBERG
La conciencia está intentando desplazarse

del poder al amor.
MARION WOODMAN
En esta última parte, nuestros autores presentan la visión

de la manifestación de lo Femenino Consciente como una
fuente de renovación para los individuos y para la sociedad.
Como dice Edward C. Whitmont, las cualidades de lo Fe
menino se alzan en contraste con las cualidades de la tradi
ción patriarca! que es extrovertida, materialista y altamente
estructurada. Lo Femenino es “la sacerdotisa de la plenitud
de la vida”.
Mientras que lo Masculino es excluyente, lo Femenino es
inclusivo; mientras que aquél es objetivo, éste es subjetivo;
mientras el primero está dominado por el pensamiento, el
segundo está dominado por el sentimiento. Mientras que lo
Masculino busca la perfección, lo Femenino busca la consu
mación.
Cuando estos nuevos viejos-valores son integrados dentro
de, y entre nosotras/os, la vida cambia de sentido y de di

La renovación del mundo La renovación del inundo
rección. La lucha externa del itinerario del héroe hacia las al Masculino y no lo conoceremos hasta que lo veamos en su ple
turas toma un giro interno hacia las profundidades. Esto ini na complementariedad con lo Femenino. Lo Femenino es el
cia una nueva relación con el Yo, lo Otro, y lo Divino. eslabón perdido de nuestra cadena de conexiones con el cono
cimiento y con la experiencia profunda de [nuestra] vida psí
Con este desplazamiento en las prioridades se produce quica.
un cambio en nuestra relación con la materia, nuestros cuer No existe un pleno acceso a la vida consciente e incons
pos y la tierra. Algunas coautoras de esta obra han expresa ciente sin la modalidad femenina. Lo Femenino debe ser tra
do el vínculo etimológico que existe entre “madre” y “ma bajado, probado, examinado, meditado, conjeturado y contem
teria”, que ha conducido a la maternidad inconsciente y a la plado, porque lo Femenino es el elemento que completa cada
inconsciencia de la materia. Marion Woodman ha señalado esfuerzo que podamos hacer para convertimos en una persona
que el mundo nunca ha conocido a la Madre Consciente, por humana.
no hablar de la Mujer Madura Consciente. Pero el principio
Femenino puede actuar como contrapartida al ansia de poder Con un equilibrio creciente entre estas dos fuerzas, se re
subyacente en el patriarcado. forzará la capacidad de una mujer para responder con todo su
Woodman dice: “Tenemos que conectarnos con el princi ser. Mientras que el descuido de lo Femenino ha atrofiado
pio Femenino, porque el poder que dirige el patriarcado, el nuestra capacidad para la experiencia espiritual, su desarro
poder que está violando la tierra, el poder que se halla detrás llo aumentará nuestra capacidad de evolución. La meta de la
de las adicciones, tiene que ser transformado. Tiene que exis búsqueda espiritual se convierte para las mujeres en obtener
tir un contrapeso a todo este frenesí, aniquilación, ambición, la totalidad de ser en tanto que mujer, en relación con los
competición y materialismo”. hombres y con lo Masculino, pero no definida por ellos.
A medida que lo Femenino se vuelve más consciente, su En su libro Return to the Goddess, Edward C. Whitmont
arquetipo aliado también cambia. Nunca hemos conocido se explaya sobre el cambio de significado del ánimus y del
tampoco lo Masculino Consciente. Woodman señala que he ánima desde los tiempos de Jung. Señala que reservar el áni
mos confundido el principio de poder del patriarcado, que mus para las mujeres y el ánima para los hombres tiene gra
controla y modela la naturaleza a cualquier costo, con lo ves limitaciones: “Los hombres pueden ser conducidos por el
Masculino. Este también sufre un desequilibrio debido a la ánimus, preocupados por el cuerpo y ansiosos de poder, tan
pérdida de lo Femenino, y también se renovará, clarificará y to como las mujeres; las mujeres pueden ser poseídas por el
más adelante se volverá más consciente. ánima, cambiantes de humor, seductoras, solitarias y depri
Ann Belford Ulanov coincide con esta idea en su libro The midas tanto como los hombres”.
Fenzinine in Jungian Psychology and in Christian Theology: Especialmente hoy día, ciertas mujeres pueden estar go
bernadas en su apariencia consciente por el logos y no tener
ningún contacto con sus sentimientos, mientras que ciertos
Estamos tan familiarizados con lo Masculino como podemos
hombres pueden ser sensibles al instinto y a los sentimientos,
estarlo con algo que está truncado, como lo está lo Masculino
sin lo Femenino. Durante mucho tiempo hemos debatido a fon o a eros, ysin ningún contacto con el logos. Por eso, Whitmont,
do sobre la retórica, las imágenes y el vocabulario especial de hace un llamamiento para liberar a los términos ánimus y áni
lo Masculino... Pero todavía no conocemos realmente qué es lo ma (o yang y yin) de sus significados vinculados al género.

[ La renovación del mundo
De la misma manera, lo Femenino Consciente está vivo en

cada una/o de nosotras/os. No está reservado a las mujeres.
Pero es extremamente difícil escribir sobre lo Femenino sin
pagar tributo de vez en cuando a la conexión arquetípica con
las mujeres. Parece que la mente siempre vuelve atrás, por al
guna extraña atracción, para establecer este vínculo una y
otra vez.
Cuando se concibió originalmente este libro no iba a tra
tar solamente de mujeres, sino sobre lo Femenino, tanto en 15. EL FUTURO DE
hombres como en mujeres. Desgraciadamente, los hombres
que fueron invitados a participar para escribir sobre el ánima LO FEMENINO
declinaron la oferta. Así pues la descripción psicológica ha
quedado incompleta.
Pero lo mismo que los hombres jugaron un papel especial por Edward C. Whitmont
y principal en marcar el comienzo del reino masculino del pa
triarcado, las mujeres tienen un rol especial hoy día. En su ar
tículo, Whitmont empieza a clarificar esta tarea para que las En su obra seminal, Return to the Goddess, el analista
mujeres lleven lo Femenino a la vanguardia. junguiano neoyorquino Edward C. Whitmont, doctor en Me
Para concluir, Robert A. Johnson, autor de los libros enor dicina, expone con elegancia pruebas del resurgimiento de
memente populares, Extasis: la psicología del gozo, He, She los “valores-de-ego femeninos, tanto en los individuos,
“
y We, cuenta la historia de la reintegración y renovación de como en la sociedad en general. El autor piensa que esos va
lo Femenino perdido. lores, negados y suprimidos durante miles de años de dom i
nación masculina, llegan en un tiempo de urgente necesi
dad: el fin del patriarcado y el principio de un túnel crítico
hacia una nueva era.
Whitmont propone que la tradición heroica —que se basa
en el esfuerzo, la fuerza, la voluntad, la razón, el honor, la
responsabilidad y el mito de la objetividad— está siendo re
emplazado hoy día por la tradición de la Diosa, que valora
la interiorización, el sentimiento, la aceptación, la parado
ja, la incertidumbre, y vivir el momento. En este contexto, la
realidad de nuestra subjetividad, denominada por Whitmont
“el viejo enemigo se convierte en fuente respetada de sa
“,
biduría. Y las mujeres, que frecuentemente tienen un acceso

más fácil al reino del sentimiento subjetivo, se convierten

La renovación del mundo El futuro de lo Femenino
en guías para los hombres y para la cultura, y en las “guar
dianas de los reinos internos “.
A media que salimos progresivamente de una dirección

La feminidad ya no se puede limitar a la sensibilidad, la
materialista y extrovertida y nos adentramos en el incons
pasividad y la maternidad. Va a descubrir y a expresar su
ciente profundo, mayor número de personas nos enfrenta
capacidad activa, de iniciativa, creadora y de transforma
mos a lo Femenino oscuro enterrado durante tanto tiempo.
ción. Esto se expresa en la prontitud para pedir y desafiar: por
Whitmont señala que las mujeres hemos sido tan culpables
ejemplo, para exigir afirmación subjetiva y aceptación del
como los hombres en renegar de cualidades “impropias de “,
propio ser, tal como es, para afirmar la buena disposición a
abandono, de cólera o de depresión; todas hemos sido cóm
actuar y ser actuado/a. Acepta cualquier cosa que sea ofre
plices en desvalorizar lo Femenino prohibido. Y como las mu
cida, aunque se juzgue como pobre o negativa, y conduce a
jeres somos con mucho más femeninas que los hombres, dice
él, hemos sido declaradas social y políticamente inferiores la aceptación de la empatía, de “sufrir junto con”. Esta nue
por mutuo consentimiento. Al igual que Robert M. Stein, va conmoción también está llamada a afectar a los hombres
en forma de nuevas demandas por parte de las mujeres, así
que hace un llamamiento a la liberación de lo Femenino, y
no a la liberación de las mujeres, Whitmont apoya las metas como por parte del ánima, del aspecto femenino de sus pro
del feminismo, al tiempo que insiste en respetar las diferen pias psiques.
Para las mujeres y para el ánima [lo Femenino en los
cias arquetípicas entre lo Masculino y lo Femenino.
hombresj, la nueva feminidad exige autoafirmación para ser
Whitmont utiliza la palabra retorno para referirse a la lle
capaces de afirmar de manera adecuada la singularidad úni
gada entre nosotras/os de lo Femenino o de la Diosa; sin em
bargo, es consciente de que se necesitaba el sacrificio his ca de los demás. No podemos realmente dar lo que no pose
tórico de este principio para el desarrollo evolutivo del emos. Tratamos a los demás como nos tratamos a nosotros
mismos, con independencia de los intentos conscientes de
patriarcado y para el desarrollo psicológico de egos sepa
hacer lo contrario.
rados e individualizados. Así pues, este fenómeno no es un re
La autoafirmación significa para las mujeres, ante todo y
torno a la vieja forma de la Diosa; ella ha evolucionado
junto con la humanidad y emerge ahora más plenamente sobre todo, aceptación de su diferencia respecto a los hom
bres, en lugar de identificarse con ellos, imitarles o compe
Consciente que nunca.
tir. Sólo encontrando primero su posición básica femenina,
Este capítulo ha sido tomado de Return to the Goddess
pueden también recuperar su elemento yang y expresar, como
(1982), con la autorización de Crossroad.
mujeres, su fuerza y sus capacidades a su manera. Es enton
Edward C. Whitmont, doctor en Medicina, es director ho
ces cuando pueden recurrir a sus impulsos entusiastas, crea
norario del Instituto C.G. Jung de Nueva York. Entre sus
obras destacan The Symbolic Quest; Psyche and Substan dores y de orden, para tomar posesión de ellos, llenarlos e im
ce; y con Sylvia Brinton Perera, Dreams: A Portal to the pregnarlos. Pueden permitirse contener y sufrir estos instintos
en su naturaleza conflictiva, nutridora y también destructiva,
Source.
hasta que sean asimilables en las relaciones humanas.
Los impulsos primitivos —de herir, poseer, y hacer que
algo o alguien responda a nuestras expectativas- pueden ser
301
La renovación del inundo
destructivos cuando se les deja escapar, como suele ocurrir.

Y esto es así tanto para los hombres como para las mujeres.
1 El futuro de lo Femenino
esencial si tienen que volverse capaces de afirmar de mane

ra auténtica lo que realmente son, en vez de lo que desean ser.
Por eso, hemos sido educados en nuestra cultura a tratar es Lo cual requiere un nuevo tipo de valor: concretamente, el de
tos impulsos controlándolos o disfrazándolos, mediante la vivir no sólo con fuerza, sino también con vulnerabilidad.
voluntad y la disciplina únicamente, o desechándolos me Sufriremos el conflicto entre llamadas e impulsos opues
diante la razón. La psique masculina, moldeada como está por tos, viviendo entre el “deber” y el “querer”, sin intentar to
la disciplina represiva, tal vez se aparte parcialmente de esta mar decisiones prematuras. Ya no vale un combate de vo
manera de actuar respecto a los impulsos. La psique femenina luntad a favor de una actitud o de otra. Tendremos que vivir
siente que esta evasión es dolorosa. Equivale a una represión en la incertidumbre mientras nos abstenemos de decisiones
del yin transformador, el aspecto Medusa que necesita crear aparentemente racionales, hasta que puedan estar de acuerdo
nuevas formas y hacerlas surgir de las profundidades a su de la razón, el deseo y las “buenas sensaciones”.
bido tiempo y a su manera. Igualmente frustra a las que ma Esto significa reunir el valor de penetrar en el abismo,
nifiestan este proceso generador: Lila, la jugadora, y Palas permitiéndonos ser envueltos temporalmente por el caos de la
Atenea, la civilizadora. subjetividad, el viejo enemigo. Significa perdernos para en
Mientras que los hombres esperan el momento estratégi contrarnos más adelante. Al hacerlo, las mujeres y los hom
camente factible, el tiempo de las mujeres viene determina bres seremos invitados a intentar expresar los instintos “locos”
do por la experiencia interior de los ciclos y acontecimientos o “absurdos” que sintamos y las reacciones personalmente
que se “ensamblan juntos” porque son sentidos como una suavizadas, sin perder la integridad o la responsabilidad éti
unidad. Los impulsos instintivos han de ser afirmados, has ca. Tendremos que practicar el “fluir” sin traicionar ni arrojar
ta que podemos aceptarlos y hacerlos llevaderos para noso por la borda el honor, la autoestima y el respeto por los dere
tros mismos y mutuamente unos de otros. Entonces tienen que chos de los demás. El precepto ético “no dañarás” seguirá
ser expresados como el reto de un hecho interno, y no como siendo fundamental.
una manipulación dirigida por la culpabilidad o la amenaza. El cambio del que hablamos es el cambio de los medios de
Por ello, la mujer toma el rol de iniciadora y líder de una nue aprender a afirmar nuestro propio embarazo y sensibilidad
va experiencia de la subjetividad. Ella inicia, mediante su psicológicas y, en consecuencia, a recuperar nuestra propia fe
anhelo y su acción de suscitar, al exponer sus necesidades y minidad, la fuerza personalizadora y civilizadora que surge
afirmar su punto de vista ante sí misma y ante su pareja. del caos subjetivo. De esta manera, también los hombres po
Para los hombres y para el ánimus [lo Masculino en las demos descubrir nuestra pasividad relativa, o más bien, nues
mujeres], las nuevas demandas del yin exigen el valor de tra sensibilidad, respecto al reto iniciático que supone lo Fe
abandonar su firme posición egóica de control sobre sí mis menino fuera y dentro de nosotros.
mos y sobre los demás. Deben aprender a afirmar lo que no Estos nuevos valores del ego necesitan un cambio radical
es el yo —la realidad del otro-, y a respetar el poder y las ne del sistema de valores masculinos en ambos sexos. Median
cesidades que están más allá de su control o competencia. En te la capacidad de integrar simultáneamente los opuestos,
vez de poner todos sus esfuerzos en el intento de realizar su aparentemente excluyentes entre sí, habrá que modificar la lu
superego ideal, tienen que aprender un poco a “fluir”. Esto es cha heroica por el dominio, la conquista y el poder, el siste

302 303
1: La renovación del mundo
ma de posiciones superiores e inferiores, las reglas de auto

ridad y rango, de verdad y mentira, y de “mi manera y tu ma
nera de hacer las cosas”. Tenemos que aprender a apreciar los
matices y todo el espectro de colores, en lugar de los siste
El futuro de lo Femenino
El patriarcado reprimía el estrato mágico, el mundo feéri

co. En esta conciencia global, la vida y la muerte eran la par
te alta y baja de la ola. La unidad emocional se experimenta
ba con el grupo, el clan, la naturaleza y la sangre. Se conocía
mas negro o blanco, y a disfrutar de la polifonía entretejida, la vida a través de los ritmos y mareas de los instintos, de la
en lugar de una sola melodía dominante a la que el resto comunicación extrasensorial y de la apertura amorosa a cual
del conjunto sólo añaden voces armonizadoras. Los nuevos quier cosa que sucediera.
valores masculinos deben respetar una diversidad de dioses En su forma arcaica, estas tendencias eran excesivamen
y de ideas, en vez de un único Dios dominante, que es señor te pasivas, fatalistas y, por ello, regresivas respecto a nuestro
y rey. Se recurre a la cooperación parlamentaria en lugar de nivel actual de conciencia. Sin embargo, integradas con los
recurrir al gobierno monárquico o incluso al gobierno de la mejores logros de la fase mental y de la ética del patriarca-
mayoría. Un sistema de valores como éste, lejos de ser ca do, y verificadas en el aquí y ahora de la experiencia interna
ótico, iniciaría un nuevo orden integrador, cambiante y equi y de las relaciones interpersonales, constituyen una contri
librado en sustitución del orden estático al que estamos acos bución a una nueva fase de la evolución de la conciencia.
tumbrados. La nueva feminidad viene a establecer el valor de lo in
El ideal masculino previo del rey o del héroe conquista terno y de la afirmación de todo lo que es (aunque también
dor es ahora modificado por el rol del buscador o descubri una clarificación y diferenciación conscientes). Está abierta
dor. El nuevo aspecto de lo Femenino aparece como revela a las heridas, al dolor y a la fealdad, tanto como a la alegría
dor, guardián y retador; como mediador entre sí mismo y la y a la belleza -y es capaz de integrarlas-. Lo sensual ha de
manera masculina de ser -tal como es lo Masculino hasta ser valorado tanto como lo espiritual; lo intangible tanto
ahora-, como la sacerdotisa de los valores y misterios de la como lo concreto. Por último, los logros patriarcales del pa
vida. También las mujeres necesitan encontrar a la buscado sado no deben ser descartados, sino integrados en esta nue
ra dentro de sí. Los hombres necesitan responder a la guar va perspectiva.
diana, reveladora y retadora de los valores personales, tanto El rol arquetípico de la nueva feminidad es el de perma
dentro como fuera de sí mismos. necer como sacerdotisa de la plenitud de la vida tal como es,
¿Cuál es el valor que lo Femenino nuevo viene a reafirmar con sus peligros impredecibles, sus profundidades insonda
frente a las tendencias internas y externas del patriarcado? Es bles, su riqueza y privaciones, riesgos y errores, alegrías y pe
el auténtico valor implícito en la búsqueda masculina del nas. Este rol insiste en experimentar personalmente y en res
Grial, el vehículo o redoma mágica del juego y renovación de ponder a las necesidades de la condición humana.
la vida. Es la experiencia propia del alma a través del senti Esta nueva feminidad puede jugar y danzar como Arte
miento y de la intuición subjetiva y personal en relación al misa, atraer como Afrodita, cuidar del hogar como Vesta, o
aquí y ahora concretos. Lo que se valora es el sentimiento del ser maternal como Deméter. Puede actuar como Atenea, pro
momento con alegría y dolor, no las ideas abstractas o los cie moviendo la civilización, las artes y los oficios, o preocuparse
los remotos de perfección eterna y pacífica a los que el pa como María por el bienestar y el alivio de la miseria. Éstas
triarcado solía aspirar. no son más que algunas de las caras de la Diosa. Todas ellas

La renovación del mundo
1 ¡
El futuro de lo Femenino
se proponen transformar el poder caótico del yin abismal, la éste es demasiado horrible para ser expresado en palabras, o
Medusa, en el juego de la vida. Ellos median entre las caras incluso para pensarlo.
terroríficas de las Gorgonas y el rostro solícito de Atenea. La Y sin embargo, dicho impulso es una expresión de la fuer
vida está para ser vivida y saboreada por sí misma, en inte za de vida. Nos muestra cómo es realmente el sentimiento en
racción sensible con la tierra y el cosmos como organismos ese momento, con independencia de lo que nos gustaría de
vivos, y no como objetos muertos de explotación en aras del sear. Más tarde podemos sentirnos de manera diferente otra
“progreso” económico o tecnológico. vez. La fantasía, si podemos darle cabida, esperar junto a
Si la mujer del mañana tiene que afrontar y resolver este ella, alimentarla, meditar sobre ella y escucharla como una
desafío, necesitará abrirse y armonizarse con sus propias ten afirmación simbólica -por muy horrible o repelente que sea-,
dencias y directivas instintivas. La conciencia que hiere pue puede más adelante revelar una sabiduría escondida y abrir
de curamos. La herida es inevitable. La toma de conciencia nuevos canales de energía. El impulso de retorcer el cuello del
de este hecho le permite arriesgarse a implicarse, en vez de hijo puede suponer un aviso para una madre demasiado em
optar por la evasiva. Especialmente en los encuentros per palagosa y consentidora para que tome una nueva perspecti
sonales y subjetivos, ella estará abierta y aceptará los he va. De manera simbólica, puede que necesite volver o girar
chos, impulsos y sentimientos, incluidos aquellos que pueden el cuello en una dirección diferente, o romper un estereotipo
parecer negativos, destructivos y prohibidos según las pautas de cuello rígido y duro en su actitud indulgente hacia sí mis
estéticas y morales tradicionales (y también según sus propias ma o hacia su hijo. Es un desafío pensar y sentir a través de
pautas). Esto significa nada menos que la conciencia está cualquier cosa que se presente, y esperar a que se revele su
abierta a recibir y a clarificar los sentimientos, las fantasías mensaje simbólico oculto, en lugar de desecharla y esconderla
y los deseos, con independencia de sus implicaciones mora bajo la alfombra.
les o estéticas. La nueva mujer (y el ánima en el hombre) tendrá que pre
Significa también separar la emoción y la motivación de conizar y defender la necesidad de vivir a través de la expe
la acción. Tradicionalmente hemos mantenido que la culpa riencia de cualquier cosa que ha sido reprimida por el pa
bilidad reside tanto en la acción como en los pensamientos y triarcado (por miedo a que amenazase el orden establecido
en los sentimientos. Nos hemos considerado responsables sumiéndolo en el caos). Ella no defiende “deberes” abstrac
de los deseos, impulsos y fantasías asociales o no conven tos, sino hechos emocionales, sea cual sea el grado en que és
cionales, porque tenemos la sensación de que el sentimiento tos afecten a determinadas personas en un momento o situa
equivale a la acción. En el buen mundo creado y regulado por ción determinadas.
el buen Dios-Rey, cualquier impulso o sentimiento contrario Es importante darse cuenta de que cuando una mujer (o el
a su ley se considera una expresión de Satán, o de nuestro ánima) permite esta “fase nocturna” de impulsos prohibidos
propio demonio interno. De aquí que hayamos aprendido a re y se deja afectar por ellos, entra en el reino de Medusa, el
primir nuestros deseos y fantasías “inapropiados”. No nos mundo subterráneo del yin oscuro. Es como el descenso de la
permitimos a nosotros mismos reconocer, por ejemplo, que en Inanna sumeria al inframundo de la muerte y del terror para
un momento de cólera sintamos algo así como quererle rom encontrar a su hermana Ereshkigal. Durante esta fase, la mu
per el cuello a nuestro propio hijo. Un sentimiento como jer está como perdida para el mundo cotidiano de la vida. Por

La renovación del inundo El futuro de lo Femenino
ello, tiene que refrenar sus impulsos. Lo que contempla no De aquí que la afirmación de lo nuevo se haga en primer lu
puede integrarlo todavía en su vida, ya que mientras perma gar en aras de la confrontación y de la gestación interna.
nece en esta fase, sólo se relaciona con su propia profundidad Ello requiere, temporalmente al menos, una renuncia del “yo
todavía desconocida, desconcertante, e incluso amenazante, quiero”, tanto como del “yo debo”.
pero no tiene relación con ninguna persona por muy querida Por el momento, se descarta la cuestión de realizar las
o cercana que haya sido para ella. Puede sentirse completa fantasías o los impulsos. Primero viene su aceptación psico
mente desapegada, indiferente y desprovista de afecto —o in lógica, contemplarlos y meditar sobre ellos. Así, suelo sugerir
cluso llena de odio- hacia cualquiera que le pida algo. Como que las imágenes se entretejan en una especie de representa
Inanna, según la leyenda, está desnuda, empalada, y muerta en ción o ritual de carácter mitológico llevada a cabo por mutuo
presencia de Ereshkigal; desprovista de toda conexión. consentimiento, con el objetivo de vivir la carga psicológica
Casi es superfluo decir que este estado puede ser extrema y el significado simbólico que tienen. En este caso, el retor
damente aterrorizador para ella y para los que la rodean. Por cer el cuello -en la fantasía anteriormente mencionada- pue
eso, es grande la tentación de rechazar y reprimir la experien de transformarse en una pantomima de desgarramiento o des
cia y de hacer algo para sustituirla. Pero cualquier cosa que se pedazamiento, o llevarla voluntariamente en otra nueva
haga en este estado es errónea, cuando no abiertamente des dirección: convertirla, por ejemplo, en una danza extática o
tructiva. Por otra parte, el descenso al mundo subterráneo, si en un juego dionisiaco. De esta manera, se puede encontrar
se sufre y atraviesa de una manera consciente, presagia una reun nuevo mito vital, que puede experimentarse total o par
novación de la vida. Mediante la espera y la escucha de las cialmente, como actuación ritual o psicodramática, y que
imágenes que surgen de lo profundo, como si fueran un hijo puede comprobarse después en la realidad para ver lo que es
que hay que cuidar y criar, puede pasarse a una nueva fase de recíprocamente posible o aceptable en la relación. Unica
la vida personal. Arriesgarse al descenso de la “incubación” yin mente a través de este periodo de gestación nacerán nuevas
oscura en aras de dicha transformación y renovación, requie visiones internas y una nueva conciencia que, con pleno con
re dejar de lado, al menos momentáneamente, todos los debe sentimiento de lo “profundo”, podrá arriesgarse a desafiar las
res y obligaciones y todas las nociones abstractas. Sólo a la luz reglas convencionales de la moralidad si es necesario. Antes
de las escuetas experiencias personales pueden encontrarse de que se dé este proceso, toda acción comporta el riesgo de
nuevos valores y una realidad verificada. fracasar.
Si la mujer puede aguantar la tensión de esta fase, funciona Esta aceptación y protección de los impulsos de una nue
entonces como una desafiadora al servicio de la vida en evo va vida emergente requieren una actitud comparable a la que
lución. Aporta nuevas pautas desde las profundidades del se tiene cuando se trata con un niño. Implica una disposición
caos, y pide que sean aceptadas y, de algún modo, valoradas a jugar y a experimentar, prestando siempre atención a una re
e integradas, no sólo en lo que tienen de enriquecedoras, lativa seguridad respecto a todo lo que pueda suceder, para
sino también en sus implicaciones potencialmente destructi ejercer una disciplina amable y no una represión. Esta acti
vas. Ya que una necesidad del mantenimiento de la vida pue tud es como bailar con atención y sensibilidad con las subi
de ser la de desmenuzar una situación preexistente. El cam das y bajadas del ser y del suceder, concuerden o no con lo
bio y la transformación deben eliminar lo viejo establecido. que “debería ser”.
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La renovación del mundo El futuro de lo femenino
Al gestar así sus sentimientos, impulsos y fantasías, la mayor dificultad que el hombre en sentir su yo separado. El
mujer se convierte en reveladora, de sí misma para sí misma suyo es más bien una sensación con el sentido del yo.
y para los demás de ellos mismos. Y esto, porque nuestras El ego femenino es más como un canal abierto, un flujo
motivaciones para actuar fluyen a partir de nuestras emo dentro de sí de emociones, sentimientos y percepciones. No
ciones y sentimientos, y no sólo de nuestros pensamientos. está tan rígidamente orientado por la voluntad y la convicción
Solamente movilizando los sentimientos, se motivan los pen como el hombre, sino que está más abierto a encontrar el
samientos para actuar. Con demasiada frecuencia, éstos se li orden natural en lo que al principio parece caos; concreta
mitan a racionalizar sentimientos y predisposiciones emo mente, en el flujo no estructurado ni ordenado, en la dinámica
cionales. No nos podemos entender a nosotros mismos irracional de los acontecimientos. Al empatizar con ella y nu
totalmente, sin entender nuestros sentimientos y los impulsos trirla, el ego femenino revela y afirma la experiencia subje
conectados con ellos. tiva del momento como una nueva dimensión de la realidad
Al igual que la luna, esta afirmación de reflexión tiene un que se extiende no sólo por el espacio, sino también por la di
suave efecto de espejo. No sólo refleja nuestro propio ser, mensión cambiante del tiempo. Pero mientras se abre una
sino que puede ayudar a que otras personas experimenten nueva capacidad para la sensibilidad psicológica a través de
su realidad subjetiva tal como surja en un encuentro concre la empatía, esta nueva plasticidad relativa del ego puede tam
to. Esta especie de aprendizaje -bien lejos de constituir ex bién plantear dificultades. Este flujo indiferenciado —no apo
plicaciones abstractas o preceptos de lo que “tendría que yado suficientemente por su propia claridad yang, y por su ca
ser”— sucede mediante una revelación y experimentación pacidad de diferenciación y de seguridad- puede atravesar un
graduales. periodo de confusión, inseguridad y dependencia. El resultado
Constituye un paralelismo significativo el que, hoy día, la es una necesidad de afirmación, de que otros -particular
nueva física haya descubierto que toda realidad es subjetiva, mente hombres- le digan que existe y que sus revelaciones y
en la medida en que se desarrolla a través del encuentro experiencias subjetivas tienen valor para los demás y no sólo
-orientado hacia un fin- del observador con un “otro”, que es para ella misma. Este sentido de conexión sensual y sensorio
un objeto de observación que reacciona, y de su interacción con todo lo que es, el sentimiento de belleza, de placer, de dis
con él. Descubrimos ahora que lo que hemos considerado frutar y jugar, ha tendido también a atraer hacia las mujeres
previamente como realidad objetiva es experiencia subjetiva el reproche de frivolidad (cuando no de ser el instrumento de
de encuentro y relación. Satán) por parte del patriarcado.
Esta revelación contrasta con el cuestionamiento, duda y Esto que acaba de ser expresado no invalida, sino que
crítica masculinas, que caracterizan la tradición intelectual; amplía, el papel maternal y nutridor, que es una parte fun
pero también las complementa. La meta de la búsqueda es el damental y profundamente inseparable del carácter femeni
descubrimiento de la “fe”. Esto significa creer en el “río”, en no. De una u otra forma, se hace inevitable en cada relación
la corriente de la vida. Esto no puede verse y tocarse en el es o encuentro una tendencia a hacer de madre o de hija. El
pacio, sino que puede descubrirse únicamente con el tiempo sentimiento para el otro de ser un niño y una unión con él es
y mediante la experimentación de su significado y valor en parte intrínseca de la manera no separativa de vivir la exis
nuestro propio ser. Por esta razón, el ser femenino tiene una tencia. Lo Femenino, en consecuencia, implica también un
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La renovación del mundo El futuro de lo Femenino
4
sentimiento de concebir y criar, de cuidar la vida, y de estar vino -y de experimentarlo- y una nueva forma de nuestra
en conexión con nuestras raíces en la naturaleza. Es impor vida como un patrón individual de destino que se presenta
tante para una mujer ser capaz de relacionarse consciente transpersonalmente. Con excepción de sus corrientes subte
mente con esta dimensión, por miedo de que se le vaya de las rráneas místicas, se ha extrovertido el curso de la religiosidad
manos en forma de maternidad sofocante o abrumadora, y patriarcal occidental. A pesar de todas las afirmaciones de que
también de que se cierren aparentemente sus canales con “Dios es amor”, se le presenta como a un patriarca varón, ce
vencionales de comunicación. ñudo, severo y sin sentido del humor. Tiene su morada en al
La necesidad de hacerse de madre a sí mismos surge tan gún lugar “por ahí arriba”. Cielo e infierno han sido repre
to en hombres como en mujeres, cuando se extraen del inte sentados como lugares concretos en el espacio. La vida
rior los propios proyectos infantiles, o cuando la posición religiosa se enseña en términos de omisión y comisión de
del ego se encuentra amenazada por la presión de deberes y ciertos actos, con independencia de las necesidades y dife
tareas abstractas. La propia debilidad y estado de necesidad rencias individuales que existen en lo referente a la obe
recurre a la ayuda de uno mismo, cuidarse y protegerse con diencia a la ley de Dios, tal como la certifican la iglesia y el
ternura hasta que uno puede unificarse consigo mismo. Cuan Estado.
do no se satisface esta necesidad de nutrirse, existe la pro Esta religiosidad extrovertida era la que nos enseñaba la
babilidad de que se instale el vacío y la depresión. Esto se conciencia social. Pero en nuestros días ha alcanzado su pun
aplica tanto o más cuando uno se hace de madre a sí mismo to de saturación. Ha degenerado en una prédica moralista y
que cuando se cuida de los demás. La aceptación de esta ne en una visión del mundo que puede ver sólo la dinámica ma
cesidad contrasta de nuevo con la tradición predominante- terial y económica, desprovista de toda referencia al misterio
mente extrovertida de Occidente -aunque también es com de la existencia. Sin embargo, el resurgimiento de lo Feme
plementaria con ella-, que pone el acento unilateralmente nino vuelve a abrir la posibilidad de acceso a este misterio,
en la actividad externa y en el “hacer por los demás”, en de validando de nuevo la dimensión subjetiva interna.
trimento de las propias necesidades y deseos. En el mundo de la Diosa, se ve lo material como una ma
El cuidado y el respeto por los demás en su verdadera otre nifestación del espíritu, más que como algo separado de él.
dad es un primer paso indispensable de la individuación. El si La materia no es sino la forma en la que se percibe el impulso
guiente paso completa y profundiza el anterior con la emer permanentemente creador de vida, la conciencia significati
gencia de lo Femenino nuevo como encarnación de los espacios va y en evolución. De aquí que la experiencia del misterio de
interiores, que se mantiene maternalmente en defensa de los va lo “definitivo” tiene que buscarse en lo subjetivo, en la vi
lores internos y de las incertidumbres propias resultantes de la vencia aquí y ahora de nuestros problemas, sufrimientos y ale
dudosa autoridad de las reglas y leyes externas. Expresa la grías, incluidas las del cuerpo. El desarrollo en la vida diaria
necesidad de gestar, de escuchar pacientemente dentro de la di —de sus conflictos personales y de relación, de sus dificulta
mensión del tiempo, de dejar que las mareas suban y bajen has des y descubrimientos- puede hacerse transparente con un
ta que sea el momento del nacimiento. sentido que tiene por objeto encarnarse en la dimensión tem
Por último, la actitud directa interna intrínseca de lo Fe poral. La experiencia personal toma primacía sobre el razo
menino anuncia una nueva forma de relacionarse con lo di- namiento abstracto y sobre el dogma. La alegría y el dolor, la

La renovación del inundo El futuro de lofeinenino
belleza y la fealdad, la espiritualidad y la sensualidad tienen que observaba y jugaba con las conflagraciones, las guerras,
que reconocerse como manifestaciones del poder trascen las catástrofes y la destrucción de la tierra. Cuando la soña
dente y, por lo tanto, como sagradas y sacramentales. Son los dora el preguntó horrorizada por qué dejaba que ocurrieran to
medios a través de los cuales experimentamos la urdimbre de das esas cosas, le respondió: “Porque me gusta”.
nuestro destino en la vida, tanto interna como externa. Al La soñadora conmocionada se enfrentaba con ese aspec
aceptarlas y abrazarlas, nos sometemos a las pruebas del cre to de la fuerza creadora que hemos descrito previamente
cimiento y de la transformación. Preguntando “i,para qué como la fuerza transformadora. En Occidente, este aspecto ha
sirven?” [la cuestión planteada por el Grial], podemos des sido desgajado de la imagen del Dios patriarcal infinitamen
cubrir una dimensión del sentido de nuestras vidas que va más te bueno y justo. En las antiguas representaciones de la Dio
allá de las limitaciones del ego. Preguntarse “qué es lo que sa, como la diosa egipcia Sekhmet, o la diosa india Kali, to
nos cura?” y “j,qué es lo que nos agrada?” nos ayuda a tomar davía encontramos los aspectos creadores de vida, de amor y
conciencia del sentimiento, a hacernos conscientes de la pro alegría, así como los que revelan sufrimiento, destrucción y
fundidad y de la riqueza de nuestro ser emocional subjetivo. muerte. Esta dualidad funcional abarca emocionalmente la
Ahora sentir toma una nueva función orientadora y de plenitud actual de la existencia, la fase “del no” que hemos
validación. A su manera subjetiva circular (a diferencia del reprimido.
camino lineal “objetivo” de la razón), contiene sin embargo Es esta misma fase “del no” la que tiene que ser revalidada
su propia objetividad, en el sentido de proporcionar inteli en la nueva experiencia de lo Femenino. La función del sen
gencia merecedora de confianza. Es una nueva guía de in timiento como guía incluye esta fase “del no” en forma de no-
formación, ampliamente indiferenciada y difícil, que debe cariño, desapego, e incluso afirmación de la destrucción
ser refinada y desarrollada hasta convertirse en una habilidad, como necesidad, cuando la fase nutritiva y sustentadora se ha
de una manera que no es muy diferente a la manera de pen agotado y ya no es relevante para una situación determinada.
sar de la época del patriarcado. Porque, para ser capaces de afirmar, tenemos que ser capaces
Una nueva psicología profunda orientada hacia el interior de rechazar; para poder apoyar, tenemos que ser capaces de
está descubriendo en el sentimiento nuevos caminos para las permitir el desfallecimiento. El instinto femenino se niega a
decisiones vitales y las orientaciones existenciales. Sentir tener que dar, a que se le diga cómo tiene que sentir, amar y
cualidades o actitudes se considera inherente al tejido de la apoyar, cuando el sentimiento real dice no, e incita al desa
vida y del cosmos, y con necesidad de relacionarse en tér pego e incluso al rechazo. Ésta es una nueva lección que hay
minos de hechos dados y multifacéticos, más que en términos que aprender en las relaciones interpersonales y en la mane
simples de bueno y malo. ra de actuar en el mundo.
Un ejemplo ilustra esa nueva actitud vivencial. Una mu La relaciones contienen por fuerza diversos grados y ci
jer de mediana edad que se estaba analizando luchaba con los clos de distancia, no-comunicación, e incluso rechazo y dis
problemas que le planteaba su moral tradicional de “negro o gusto. Todo esto debe ser reconocido, tolerado y trabajado, si
blanco”. Tuvo un sueño hipnótico o visión. En el sueño con se quiere mantener viva la conexión entre los implicados en
templaba a un ser divino, una especie de creador que tenía en una relación. Lo negativo puede proporcionar un soporte a
las manos un globo terráqueo con un desapego divertido, y todo lo que atraiga y mantenga unidos a éstos. Es lo mismo

1
que se evita en una pintura la monotonía en dos dimensiones,

cuando se permiten los contrastes de luz y de sombras. Igual
mente, los contrastes de graves y agudos en música intensi—
fican el impacto emocional de su resolución armónica; sin
ellos, el resultado sería aburrido. En ocasiones, la renovación
de la vida que ya ha cumplido su ciclo sólo puede suceder a
través de la muerte y de la destrucción. Este hecho también
incita a la afirmación emocional.
Las fases “del no” aparentemente difíciles y dolorosas, en
las que todo parece estar en contra de nosotros, no son sim
16. LA FEMINIDAD
ples periodos de tiempo frustrantes y desperdiciados. Ex
presan una fase interna de cambio, que aunque sea negativa,
RECOBRADA
tiene su propia finalidad. Manifiestan un aspecto especial
del sentimiento que se desarrolla en la dimensión temporal. por Robert A. Johnson
Son tan vitales en su mensajes y percepciones como las fases
afirmativas.
La psique busca una y otra vez cambios internos, que re El eminente contador de historias junguiano Robert A.
quieren la mediación de la comprensión psicológica, si se Johnson recoge la leyenda de la búsqueda del rey Arturo de
quiere evitar que sean malinterpretados. La destrucción es Qué desean realmen
la respuesta a la perenne cuestión: “
siempre el final de un ciclo y el indicador de un nuevo co

te las mujeres? Esta leyenda nos ofrece claves sobre cómo
“.
mienzo. Invita a la creación más que a la mera represión o a despertar y redimir el aspecto Femenino interno.
la parálisis desesperada. Como recuerda siempre Johnson a sus oyentes, tenemos
Lo Femenino está armonizado con un movimiento más na que interpretar la historia en el mundo interno, en el reino de
tural que los altibajos masculinos de esta dimensión, al no es
la psique. La anciana sabia, en su disfraz de bruja fea, re-
perar la perfección y la apariencia de la estabilidad perma presenta el aspecto rechazado y desde fiado de lo Femenino.
nente (y desconfiar de ellas). Por ello, se mantiene en contacto Afirma que sólo quiere una cosa. Y cuando Gawain se casa
con el misterio de devenir, del nacimiento que iguala a la
con ella y la trata de manera especial, acepta este trato y se
muerte, del atractivo y de la amenaza del teatro del mundo transforma alquímicamente en una bella y joven doncella.
como un proceso sin fin. Lo Femenino está en contacto con
La historia nos impulsa a invitar y a honrar a lo Femenino
el aspecto de destino de la Diosa. abandonado en nuestro interior y en la sociedad, para que
pueda ocupar su sitio en la trama de la vida.
Este capítulo ha sido tomado de Feminity Lost and Regai
ned, de Robert Johnson, con la autorización de Harper & Row
Robert A. Johnson es un notable conferenciante y escri
torjunguiano de San Diego, California. Es autor de He: Un-

317
1
La renovación del mundo La feminidad recobrada
derstanding Masculine Psychology; She: Understanding Fe lo cual nos haría regresar a una era oscura. En una de las his
minine Psychology; We: Understanding the Psychology of torias del rey Arturo queda ilustrada una gran lección sobre
Romantic Love; Éxtasis: la psicología del gozo; Inner Work: cómo se puede hacer volver a la vida actual la energía fe
1 Using Dreams; Active Imagination for Personal Growth, y Fe

minity Lost and Regained. Estudió con C.F Jung en Suiza y
en el Ashrarn de Sri Aurobindo en la India.
menina. En general, las historias sobre el rey Arturo signifi
can la aparición de una nueva idea de los caballeros y de la
nobleza, pero sólo se refiere a una liberación parcial de sus
ataduras por parte de lo femenino. Pero una de las historias
es muy avanzada para su tiempo (o tal vez nos encontramos
nosotros muy lejos en nuestra comprensión?), y cuenta la
noble historia de una transformación de la oscuridad en luz.
La feminidad es una parte tan básica y fundamental de la Es la historia de Arturo y de la enigmática pregunta “,Qué de
personalidad humana que no puede ser obviada por mucho sean realmente las mujeres?”.
tiempo. Se la ha podido dejar de lado por un periodo, de Siendo aún un muchacho, el rey Arturo fue sorprendido
manera que la masculinidad ha tomado el papel central para cazando en los bosques del reino vecino y fue hecho prisio
solidificar los valores patriarcales de la ley, el orden, la for nero por su rey. Hubiera podido ser ejecutado inmediata
ma y la ciencia. Es improbable que estos valores hubieran mente, ya que la muerte era el castigo que se aplicaba por
podido ser establecidos y enraizados, si no se les hubiera transgredir las leyes de propiedad. Pero el rey vecino se con
dado derechos exclusivos para ocupar el escenario central de movió por la juventud y carácter encantador del joven Artu
la evolución, como se ha hecho durante los últimos tres mil ro, y le ofreció dejarle libre, si podía encontrar la respuesta
años. a una pregunta muy difícil en el plazo de un año. La cuestión
Pero lo Femenino volverá y tomará su justo sitio en cuan era: “i,Qué es lo que desea realmente una mujer?”. Esta pre
to esté afianzada la evolución masculina. Veremos en nues gunta hubiera dejado perplejo al más sabio de los hombres y
tra época algunos ejemplos maravillosamente brillantes y parecía imposible de superar por el joven. Pero era mejor
cálidos de este retorno. Probablemente, la humanidad nunca que ser ahorcado, así que Arturo volvió a su hogar y empe
ha estado en una posición de tanta prosperidad como lo está zó a preguntar a todas las personas con las que se encontra
hoy día; ya ha sido alcanzada la edad de oro del poder me ba. Rameras y monjas, princesas y reinas, sabios y bufones,
cánico, y es posible una nueva era de valores femeninos. Es todos fueron preguntados, pero nadie pudo dar una respues
tablecer las bases del ocio que el mundo moderno ofrece a ta convincente. Todos estaban de acuerdo, sin embargo, en
gran número de personas ha sido un noble logro. Nuestro que existía una persona que podría saber la respuesta: la vie
próximo paso es añadir las percepciones de una mentalidad ja bruja. El coste sería alto, ya que era un hecho conocido en
consciente. Como personas realmente de hoy día, nos en todo el reino el que la vieja bruja pedía precios ruinosos por
contramos en la cresta de una ola en la que podemos tener lo sus servicios.
mejor de los dos mundos, si somos lo suficientemente sabios Se acercaba el último día del año y, Arturo fue llevado fi
como para escapar al prejuicio moderno de la visión limita nalmente a consultar a la vieja bruja. Esta estuvo de acuerdo
da. Fracasar en esto supone invitar lo peor de los dos mundos, en darle una respuesta que satisfac jera al rey acusador, pero
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La renovación del mundo La feminidad recobrada
tenía que acordarse antes el precio. ¿Cuál era el precio? El tiempo y su parte afable y bella la otra mitad. ¿Cuál de las
matrimonio de la vieja bruja con Gawain, el más noble ca dos escogería para el día, cuál para la noche? Es éste un
ballero de la Mesa Redonda, que era también el más antiguo cruel dilema para un hombre, y Gawain hizo un cálculo rá
y mejor amigo de Arturo. Este miró horrorizado a la vieja bru pido. ¿Quería una doncella encantadora para mostrarla y
ja, que era fea, tenía un solo diente, exhalaba una aliento que sus amigos pudieran verla durante el día, y tener a una
que hubiera enfermado a una cabra, hacía ruidos groseros y repugnante bruja en la privacidad de su habitación durante
era jorobada. ¡Nunca se había visto algo más repugnante! la noche? ¿O quería una bruja repugnante durante el día y
Arturo se amedrentó ante la perspectiva de tenerle que pedir una adorable doncella en los momentos íntimos de su vida?
al amigo de toda su vida que asumiera esta carga por él. Pero Como Gawain era un hombre noble, le respondió que deja
cuando Gawain se enteró del trato, estuvo de acuerdo en que ría a la doncella escoger por sí misma. Al oír esto, la doncella
no era algo excesivo hacerlo por su compañero y para pre le anunció que sería una fina damisela para él día y noche,
servar la Tabla Redonda. puesto que le había respetado y otorgado el dominio sobre
Se anunció la boda y la vieja bruja compartió su sabidu su propia vida.
ría infernal: ¿Qué desea realmente la mujer? Quiere el do Si la feminidad tiene que mostrar su lado horrible, lo me
minio de su propia vida. Todo el mundo supo al oír esto que jor que puede hacer un hombre es mantener el respeto y la
era la gran sabiduría femenina la que había hablado y que Ar cortesía. Esta es la magia de la transformación que restaura
turo se salvaría. Por supuesto, el rey acusador concedió a rá el lado oscuro de la feminidad a su verdadera belleza con
Arturo su libertad cuando oyó la respuesta. más rapidez que cualquier otra cosa. Esta historia sobre la di
námica de la energía femenina interior es tan importante para
¡ Pero quedaba la boda! Toda la corte estaba presente y tan
dividida como el mismo Arturo entre el alivio y la pena. Ga los hombres que intentan relacionarse con su lado femenino,
wain estaba cortés, amable y respetuoso; la vieja bruja mos como para las mujeres que intentan vivir el núcleo de su
traba sus peores maneras: tragaba la comida sin hacer uso de identidad. Y es un principio que no debería perderse en las re
los cubiertos y producía horribles ruidos y olores. En ningu laciones externas entre hombres y mujeres.
na otra ocasión se había encontrado la corte de Arturo so Estamos sólo empezando la tarea de restaurar la cualidad
metida a una tensión similar. Pero prevaleció la cortesía y se femenina de la humanidad que nos es tan valiosa. Nuestro
celebró la boda. descontento y sufrimientos sutiles nacen de la pérdida del va
Según la leyenda, la noche de bodas fue todavía peor y lor de lo femenino, y nos enfrentamos a obstáculos enormes
debemos correr un tupido velo de circunspección sobre los para restaurarlo. Por el momento, hacemos débiles intentos
detalles, exceptuado un momento maravilloso. Cuando Ga para establecer la igualdad de los géneros —obteniendo igual
wain estaba preparado para el lecho matrimonial esperando remuneración a igual trabajo, y estableciendo igual digni
a que la novia se uniese a él, ésta apareció como la donce dad y respeto para cosas tan específicamente femeninas como
lla más encantadora que jamás hubiera podido desear un el nombre, el título, y la propiedad—. Pero queda una tarea
hombre. Lleno de asombro, Gawain le preguntó qué había mucha más sutil: conseguir igual tiempo y dignidad para los
sucedido. La doncella le contestó que como él había sido valores del sentimiento que pertenecen a la dimensión sutil
cortés con ella, le mostraría su parte repugnante la mitad del de la feminidad. El ocio, la espontaneidad y las cualidades ar
320 321
tísticas exigen la misma dignidad y respeto que los que se

otorgan, hoy por hoy, a la consecución del dinero y de la se
guridad. Estas tareas están todavía por hacer y exigen nues
tra atención. (
EPILOGO
Dos violentos vientos contrarios,
uno masculino y otro femenino,
se encontraron y chocaron en una encrucijada.
Por un momento, se equilibraron entre sí,
arreciaron, y se hicieron visibles.
Esta encrucijada es el Universo.

Esta encrucijada es mi corazón.
Esta danza de gigantesca y erótica colisión

se transmite desde la más oscura partícula
de la materia hasta el más vasto pensamiento.
•
NIKos KAZANTZAKIS
Después de una intensa conversación, en la que las ideas

de este libro se volvieron vivas para nosotras, mi querida
amiga Manan Rose, que se dedica en San Francisco a las
danzas ceremoniales, escribió esta Oda a lo Femenino:
Esto es lo que sé: lo Femenino ha sido herido y desvalori

zado. Lo Femenino no trata sobre las mujeres, aunque hayan
sido tradicionalmente las mujeres sus guardianas. Pero hemos
abdicado de ese poder; no hay que culparse; abdicar ha sido una
manera de sobrevivir.

322 323
Epílogo
Epílogo
Pero lo Femenino es la función de sentir, la función de la re
lación, del eros y la sexualidad, de la nutrición, y del apoyo y Hoy día, es la voz del renacimiento la que está haciéndo
el respeto a la tierra en todas sus formas de vida. ¡Lo Femeni se oír en medio del clamor: el renacimiento de la materia y del
no no trata de mujeres! No trata de hombres; no tiene nada que espíritu, el renacimiento del poder y del amor, el renaci
ver con la batalla de los sexos o la batalla de poder entre el ma miento de lo Masculino y de lo Femenino, cada uno de ellos
triarcado y el patriarcado. soberano en su propio terreno, cada uno en plena relación con
Lo Femenino no trata de cómo manipular a un hombre para el otro.
que se comprometa, para obtener seguridad y poder; no trata so Si naturaleza de este mundo es la dualidad, entonces la
bre cómo combatir contra el sistema para conseguir la igualdad;
unidad puede surgir únicamente de una dualidad consciente.
su tema no es el arte de las mujeres y nuestras voces silencia
das; no es tampoco la biología como destino cuando nos defi Una trascendencia prematura, una alianza de opuestos que to
nimos a nosotras mismas como nuestros cuerpos, como las da davía no se han convertido en sí mismos, no puede sino de
doras de vida, como los vehículos. rrumbarse como una silla de tres patas.
Lo Femenino es transcultural y va más allá del sexo. Lo Así pues, nuestra tarea consiste en clarificar y diferenciar
Femenino es la voz del renacimiento. los arquetipos. Aunque esto suene como un mandato directo,
Lo Femenino es la voz de la bruj a, la voz de la víctima, la no lo es, ya que lo Femenino sólo puede ser conocido smi
voz de la adulta, la voz de los veteranos del Vietnam, las voces bólicamente. Esta es la razón de nuestra lucha e, inevitable
de los devas y de los espíritus. Lo Femenino no tiene que ser de
finido y limitado en aras de este libro, porque definir es limitar mente, de nuestro fracaso en poder atribuir a lo Femenino una
y encuadrar en categorías, y lo Femenino no está listo para que serie específica de rasgos. Por esta razón, todas/os debemos
ese ánimus funcione ahora. buscar y encontrar nuestro propio camino hacia las imágenes,
Lo Femenino no ha sido realmente silenciado; simplemen sentimientos y acciones que surgen de dentro y que expresan
te está hablando otro lenguaje. No se le invita en ciertos luga lo Femenino para nosotros.
res. Ha sido desvalorizado de manera colectiva, pero no es Para mí, la concepción, elaboración y nacimiento de este
una víctima, no está herido; es fuerte, está presente. Es oscu libro ha sido paralelo al nacimiento de lo Femenino Cons
ro y luminoso. Es uno con el patriarcado. Es la alienación y el
movimiento de las mujeres, y la carrera de armamentos, y el ciente dentro de mí, todavía en proceso. Cuando estaba ter
que golpea a la esposa. No es ni la gran víctima ni el gran sal minándolo, tuve el siguiente sueño: Estoy nadando en un
vador. gran pozo natural y llego ante una cuerda, ante la que hay
La tarea que se nos pide es que demos un salto cuántico so paradas personas de origen hispánico. Paso a través de
bre la dualidad matriarcado/patriarcado. Cuando las mujeres ellas, explicándoles que ahora están en Estados Unidos,
seamos liberadas de la función de relación, tendremos más “Los Estados Unidos” [sic. En español en el original]. La
energía creativa para seguir adelante. gente llora y se abrazan. Nado de vuelta hacia una mujer
Por tanto, no hay que cargar la tarea de la transformación so
bre los hombros de las mujeres por el simple hecho de que es grande, una colorida Diosa contemporánea y le doy un beso.
nuestra voz la que ha sido aparentemente reprimida. La voz de Dice que cree que será destruida. Pero yo respondo: “No, yo
lo Masculino también ha sido reprimida, y también hay que te cruzaré”.
hacer que renazca.
Este sueño está lleno de esperanza para mí: estoy nadan
do en aguas profundas, haciendo frente a una frontera, he
324
Epílogo Epílogo
vando conmigo mis instintos y mi feminidad. La Diosa ex La ola cultural está bajo nosotros, apoyando nuestros es
presa su miedo a la destrucción así como su toma de con fuerzos y haciéndonos flotar hacia la orilla. La paradoja del
ciencia de su vulnerabilidad, a medida que nos aproxima patriarcado ha alcanzado su cima: una sensación de subde
mos al nuevo mundo, tal vez, la sociedad tecnológica sarrollo del ser, emparejado con una tecnología superdesa
patriarcal. Prometo protegerla, llevar la conciencia de la Dio rrollada, han creado la crisis a la que nos enfrentamos. Como
sa y su condición dentro de este nuevo entorno. respuesta, ha aparecido lo Femenino en muchas formas: un
Yo veo en todas partes esta integración de las mujeres. respeto renovado por la tierra, por la relación, y por los niños;
Una profunda curación está teniendo lugar en todos los te un florecimiento del interés por la curación, la compasión y
rrenos descritos en este libro: el Mundo Madre, el Mundo Pa el altruismo. La ecología misma desarrolla su acción en el
dre, el cuerpo, lo divino y lo colectivo. Nuestra relación ín contexto de la relación, una especie de quintaesencia feme
tima con los hombres, en especial, necesitan nuestra más nina de la acción.
cuidadosa atención mientras navegamos las aguas del cambio, Cuando se reafirma la voz femenina, empieza a aparecer
abandonando nuestro estatus de víctimas, nuestra codepen otra clase de masculinidad. El poeta Robert Bly lo llama “lo
dencia, nuestra cólera y nuestra culpabilidad, nuestros mitos masculino profundo”. Marion Woodman lo llama la Mascu
de perfección romántica. linidad Consciente. Con su emergencia, tenemos realmente la
En los años sesenta, solíamos decir: “Lo personal es po oportunidad de elaborar la alquimia espiritual, de encontrar
lítico”. Hoy día, después de haber alcanzado una nueva com el misterio del Otro en el matrimonio sagrado.
prensión de la psicología arquetípica, yo diría: “Lo personal
es colectivo”. Es decir, en nuestras psiques individuales par
ticipamos de algo más amplio. No podemos hacer el trabajo
personal de hacer consciente lo inconsciente sin afectar el in
consciente colectivo. Por esta razón, el trabajo interior no es
egoísta.
No es siempre simple o fácil. La búsqueda del autocono
cimiento es una búsqueda que dura toda la vida y existen
muchos escollos en el camino. En nuestro caso, elegir lo Fe Sueña el mito hacia adelante...
menino en una cultura que lo desvaloriza es una tarea difícil
y valiente. C. G. JUNG
Pero por primera vez en la historia de la humanidad, en
nuestra era, algunas personas tenemos la oportunidad de ha
cer el trabajo psicológico y espiritual del Ser, que Jung lla
maba individuación y los maestros de Oriente llaman auto
rrealización. Esta oportunidad evolutiva surge porque nuestras
necesidades básicas de supervivencia están cubiertas, así
como algunas de las necesidades elementales del ego.
326 de Desarrollo Transpersonal

Centro Centro de Desarrollo Transpersonal 327
.4 ”
Notos
4. HANCOCK: LA NIÑA INTERIOR
1. Emily Hancock, “Women’s Development in Adult Life” (te-

sis de doctorado en Filosofía, Universidad de Harvard, 1981).
2. D.W. Winnicott lo identificaba como una zona de la psique.
3. Este fenómeno, señalado por Piaget, Sheldon White, del De
partamento de Psicología y Relaciones Sociales de la Universidad
de Harvard, le llama cambio cognitivo. Véase, “Sorne General Ou
tlines of the Matrix of Developmental Changes Between Five and
NOTAS Seven Years”, Bulletin of the Orton Society, 20, pp. 41-57.
4. Robert Kegan utiliza este término en una bella descripción de
las características de esta etapa en The Evolving Self (Cambridge:
Harvard University Press, 1982).
3. STEIN: DE LA LIBERACIÓN DE LAS MUJERES 5. H. S. Sullivan llamó competición y compromiso a los dos ras
A LA LIBERACIÓN DE LO FEMENINO gos característicos de la época juvenil.
6. El efecto de la competencia, señalado por Margaret Mead
1. Genia Pauli Haddon, “On Delivering Yang-Feminity”, Spring hace unas décadas, sigue actuando todavía como lo hacía entonces.
1987, p. 133. Una portada de 1987 de la revista Savy proclamaba que el éxito
2. Walter F. Otto, The Homeric Gods: The Spiritual Signifi hace “sexy” a una mujer, pero el reportaje concluía que la com
cance of Greek Religion (Londres: Thames & Hudson, 1954), p. petitividad y el poder en las mujeres desinflaban al hombre. El au
203. tor, un psicólogo especializado en la sexualidad humana, aconse
3. Esta noción de que “la conducta del hombre depende de la ra jaba a las mujeres hacer todo lo posible por ocultar sus capacidades
zón, mientras que todos los animales están gobernados por el ins y fingir “sumisión” si querían tener una relación sexual satisfac
tinto” (Santo Tomás de Aquino), que está enraizada profunda toria.
mente en la tradición occidental, es absolutamente ajena a la
mentalidad y a las religiones orientales.
4. Frank Thilly, A History of Philosophy (Nueva York: Henry
Holt, 1927), p. 272. 5. WOODMAN: LA FEMINIDAD CONSCIENTE
5. Otto, The Homeric Gods, 161.
6. Ibid. 1. C.G. Jung, “The Personal and the Collective Unconscious”,
7. Ibid., p. 55. En ésta y otras citas de Otto, permítaseme suge en Two Essays Qn Analytical Psychology, traducción de R.F.C.
rir sustituir las palabras “hombre” y “mujer”, que él utiliza, por Hull (Nueva York: Meridian Books, 1956), pp. 79-80.
“Masculino” y “Femenino”. 2. Shakespeare, Macbeth, acto 1, escena 5, líneas 44-45.
8. Ibid., p. 56. 3. William Blake, The Marriage of Heaven and Heli, en Selec
9. Ibid., p. 161. ted Poetry and Prose of William Blake (Nueva York: The Modern
10. Robert Stein, Incest and Human Love: The Betrayal of the Library, Random House, 1953), p. 123.
Soul in Psychotherapy (Baltimore: Penguin Books, 1974). 4. Shakespeare, Macbeth, acto 5, escena 5, líneas 19-26.
11. Ibid. Para una exposición más detallada sobre este tema, vé 5. Emily Dickinson, The Complete Poems of Emily Dickinson,
ase el capítulo en el que se habla del Falo. compilado por Thomas H. Johnson (Boston: Litle Brown and Co.,
1960), poema 761.
328
L
Notas Notas
6. Véase Susan Cady, Manan Ronan y Hal Taussig, Sophia: The (Boston: Beacon Press, 1978), R. Reuther, Sexism and God-Talk
Future of Feminist Spirituality (Nueva York: Harper & Row, 1986). (Boston: Beacon Press, 1983), and N. Goldenberg, Changing the
Gods: Feminism and the End of Traditional Religions (Boston:
Beacon Press, 1979).
12. M.F. Belenky, B.M. Clinchy, N.R. Goldberger, y J.M. Ta
9. YOUNG-EISENDRATH: LA REFORMULACIÓN
DEL FEMINISMO, DEL ÁNIMUS Y DE LO FEMENINO rule, Women ‘s Ways of Knowing: The Development of Self Voice
and Mmd (Nueva York: Basic Books, 1986); Carol Gilligan, In a
Dfferent Voice: Psychological Theory and Women ‘s Devolopment
1. R.T. Hare-Mustin y J. Marecek, “The Meaning of Differen
(Cambridge: Harvard University Press, 1982); y R.T. Hare-Mustin,
ce: Gender Theory, Postmodernism, and Psychology”, American
Psychologist, 43 (1988) 6: p. 455. “An Appraisal of the Relationship Between Women and Psychot
2. Polly Young-Eisendrath, “The Female Person and How We herapy: 80 Years After the Case of Dora”, American Psycholo
Talk About Her”, en Feminist Thought and the Structure of Know gist, 38 (1983), pp. 593-601.
ledge, recopilado por Mary Gergen (Nueva York: New York Uni 13. T.S. Kuhn, The Structure of Scientific Revolutions (Chica
versity Press, 1987); Polly Young Eisendrath y Demaris Wehr, go: University of Chicago Press, 1962).
“The Fallacy of Individualism and Reasonable Violence Against
Women”, en Christianity, Patriarchy and Abuse: A Feminist Cri
12. STRAHAN: MÁS ALLÁ DE LA SANGRE
tique, recopilado por Joanne Carlson Brown y Carole R. Bohn
(Nueva York: Pilgrim Press, 1989); Polly Young Eisendrath y Flo
rence Wiedemann, Female Authority: Empowering Women Th 1. Lillian Rubin, Women of a Certain Age: The Midlife Search
rough Psychotherapy (Nueva York, Guilford, 1987). for Self (Nueva York: Harper & Row, 1981).
3. C.G. Heilbrun, Writing a Woman ‘s Life (NuevaYork: Norton, 2. Barbara Walker, bajo la dirección de, The Women’s Ency
1988), p. 42. clopedia of Myths and Secrets (San Francisco: Harper & Row,
4. Ellen Moers, citado por Heilbrun, p. 35. 1983), pp. 633-648.
5. Polly Young Eisendrath, “The Absence of Black Americans 3. Mircea Eliade, Rites and Symbois of Initiation (Nueva York:
Harper and Row, 1965 p.l28.
as Jungian Analysts”, Quadrant, otoño de 1987, p. 47.
4. C.G. Jung, “The Structure of Dynamics of the Psyche”. vol.
6. Demaris Wehr, Jung and Feminism: Liberating Archetypes
(Boston: Beacon Press, 1987) y Andrew Samuels, The Plural Psy 8, Collected Works (Princeton, Nueva Jersey: Princeton University
che: Personality, Morality, and the Father (Londres: Routledge, Press, 1969), 387-403.
1989). 5. Walter F. Otto, Dionysus: Myth and Cult (Boomington, In
diana y Londres: Indiana University Press, 1965).
7. Wehr, Jung and Feminism.
8. Luce Irigaray, Speculum of the Other Woman, traducido por 6. Murray Stein, In Midlife (Dallas: Spring Publications, 1983),
Gillian Gill (Ithaca, N.Y.: Cornell University Press, 1985). 46-6 1.
9. Riane Eisler, The Chalice and the Blade: Our History, Our
Future (San Francisco: Harper & Row, 1987). Versión en caste
llano: El cáliz y la espada. Nuestra historia, nuestro futuro, San
tiago de Chile: Ed. Cuatro Vientos, 1990, 2 ed.
10. Jean Lipman-Blumen, Gender Roles and Power (Englewo
od Cliffs, Nueva Jersey: Prentice-Hall, 1984).
11. M. Daly, Ginecology: The Metaethics of Radical Feminism
330
INDICE
AGRADECIMIENTOS 7
INTRODUCCIÓN 9
PRIMERA PARTE:
TRAS LAS HUELLAS DE NUESTRA EVOLUCIÓN
COMÚN: LA BÚSQUEDA DE LO FEMENINO ABANDONADO 35
1. El desarrollo del Principio Femenino en la conciencia humana,
por Sukie Colegrave 40
2. La transformación social y lo Femenino: de la dominación a
la colaboración solidaria, por Riane Eisler 53
(3De la liberación de las mujeres a la liberación de lo Femenino,
por Robert M. Stein 72
SEGUNDA PARTE:
VOLVERNOS A HACER DE MADRES DE NOSOTRAS
MISMAS: LA CURACIÓN DE NUESTRA RELACIÓN
CON LAS MUJERES Y LO FEMENINO 91
4. La niña interior: piedra de toque de la identidad femenina,
or Emily Hancock 97
5 La feminidad consciente: Madre, Virgen, Anciana,
por Marion Woodman 113
6. La Madona, por Kathleen Riordan Speeth 137
TERCERA PARTE:
VOLVERNOS A HACER DE PADRES DE NOSOTRAS
MISMAS: LA CURACIÓN DE NUESTRAS RELACIONES
ON LOS HOMBRES Y CON LO MASCULINO 147
L7)El desarrollo del ánimus como paso hacia la nueva
donciencia femenina, por Manisha Roy 157
333
Índice
/
La ruptura de la identificación con el ánimus para encontrar Otros títulos de la
1 femenino, por Jane Wheelwright 179 Biblioteca de la Nueva Conciencia:
La reformulación del feminismo, del ánimus y de
lo femenino, por Polly Young-Eisendrath 193
L. Dossey, R. Dass, M. Harner, L. Hay, N. Cousins,
CUARTA PARTE: E. Kübler-Ross, J. Halifax y otros
HACIENDO SAGRADO DE NUEVO EL CUERPO FEMENINO: LA NUEVA SALUD
LA CURACIÓN DE NUESTRA RELACIÓN CON LOS Edición a cargo de R. Carison y B. Shield
JMOS, LOS INSTINTOS Y LOS DESEOS 213
CiØ Tesmoforias: ritual de fertilidad de las mujeres, C. G. Jung, R. Bly, H. Miller, F. Kafka, G. 1. Gurdjieff,
por Betty De Shong Meador 217 S. Keen, 5. Dalí, E. Hemingway, N. Mailer, J. Hillman y otros
11. Seduciendo al mundo de nuevo: el retorno de la stituta SER HOMBRE
agraEbeena Metzger 231 Edición a cargo de K. Thompson
12. Más allá de la sangre: las mujeres de esa edad,
por Elisa beth S. Strahan 243 R. D. Laing, R. Assagioli, K. Thompson
5. Grof, R. Dass, 3. Kornfield y otros
QUINTA PARTE: EL PODER CURATIVO DE LAS CRISIS
DESPERTANDO DE NUEVO LA DIVINIDAD DE LO Edición a cargo de S. Grof y C. Grof
FEMENINO: LA CURACIÓN DE NUESTRA RELACIÓN
CON LOS ARQUETIPOS DE LA DIOSA 257 K. Wilber, C. Tart, 5. Levine, R. Dass, C. Wilson,
5. Grof, S Krippner y otros
(3 Atenea, Artemisa, Afrodita y la iniciación a lo Femenino .
¿VIDA DESPUES DE LA MUERTE?

consciente, por Jean Shinoda Boten 264
Edición a cargo de G. Doore
14. El encuentro de lo Femenino en la tradición judeocristiana,
por June Singer 272 K. Wilber, J. Campbell, M. 5. Peck, R. May, L. Dossey,
C. G. Jung, R. Bly, M-L. Von Franz, 3. Bradshaw y otros
SEXTA PARTE: ENCUENTRO CON LA SOMBRA
LA RENOVACIÓN DEL MUNDO: LO FEMENINO Edición a cargo de C. Zweig y J. Abrams
Y EL FUTURO 293
t1. El futuro de 1 Femenino, por Edward C. Whitmont 299 J. Campbell, R. Bly, C. G. Jung, R. Stein,
45. La feminidad recobrada, por Robert A. Johnson 317 A. Rich, E. Harding, C. Kerenyi, J. Hillman y otros
ESPEJOS DEL YO
EPÍLOGO 323 Edición a cargo de C. Downing
NOTAS 328
C. G. Jung, M. S. Peck, M. Woodman, J. Campbell,
M-L. Von Franz, R. Metzner, J. Bradshaw, E. Erikson,
G. Bachelard, B. Bettelheim, U. Le Guin, J. Singer y otros
RECUPERAR EL NINO INTERIOR
Edición a cargo de J. Abrams
M. Harner, J. Halifax, L. Dossey, 5. Grof,

J. Achterberg, 5. Krippner y otros
EL VIAJE DEL CHAMAN
Edición a cargo de G. Doore
334

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en lajiferenciación entre,sf mismas y los demás, eisjetoclel

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16 Centro de Desarrollo Transpersonal Centro de Desarrollo Transpersonal 17

18 Centro de Desarrollo Transpersonal Centro de Desarrollo Transpersonal

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22 Centro de Desarrollo Transpersonal Centro de Desarrollo Transpersonal 23

- te al pensamiento. — imagación. Eo quier decirque esta fase en el desarrollo hu

24 Centro de Desarrollo Transpersonal Centro de Desarrollo Transpersonal 25

Mi historia personal A lo largo de mi infancia, a través de discusiones fasci

26 Centro de Desarrollo Transpersonal 4 Centro de Desarrollo Transpersonal 27

28 Centro de Desarrollo Transpersonal Centro de Desarrollo Transpersonal 29

triarcal, patriarcal y emergente. Sus autoras y autor describen

30 Centro de Desarrollo Transpersonal Centro de Desarrollo Transpersonal 31

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TRAS LAS HUELLAS DE

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Con nostalgia de mí misma, de ella...

ADRIENE RIcH, “Transcendental Etude”

En la novela 1984, Georgerwel1 había previsto un futuro

Centro de Desarrollo Transpersonal Centro de Desarrollo Transpersonal 37

38 Centro de Desarrollo Transpersonal Centro de Desarrollo Transpersonal 39

El desarrollo del Principio Femenino

El paso de una fase a otra siempre exige un sacrificio. Al

40 Centro de Desarrollo Transpersonal Centro de Desarrollo Transpersonal 41

42 Centro de Desarrollo Transpersonal Centro de Desarrollo Transpersonal 43

44 Centro de Desarrollo Transpersonal Centro de Desarrollo Transpersonal

48Centro de Desarrollo Transpersonal Centro de Desarrollo Transpersonal 49

50Centro de Desarrollo Transpersonal Centro de Desarrollo Transpersonal 51

nación de nuestra divinidad; ni tampoco es sólo el amor de la

En su famoso libro El cáliz y la espada (1987), Riane Eis

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lítica y mitología, para explorar la relación entre la cultura

54 Centro de Desarrollo Transpersonal Centro de Desarrollo Transpersonal 55

56 Centro de Desarrollo Transpersonal Centro de Desarrollo Transpersonal 57

58 Centro de Desarrollo Transpersonal Centro de Desarrollo Transpersonal 59

Tras las huellas de nuestra evolución común La transformación social y lo Femenino

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bién menos jerárquicas y autoritarias. Este patrón se pone de

dominador presenta para nuestro planeta en esta época alta

64Centro de Desarrollo Transpersonal 65

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de hombres y mujeres (desde nuestra infancia) con la no

70 Centro de Desarrollo Transpersonal Centro de Desarrollo Transpersonal 71

maternidad o en la trampa de jugar el papel de objeto se

ternales, y otras que consideramos “masculinas como el

poder fálico, no pueden aplicarse a los géneros (mujeres y

72 Centro de Desarrollo Transpersonal Centro de Desarrollo Transpersonal 73

mino más creativo de efectuar estos cambios necesarios, para

ción viable mientras que estuvo englobado en una comunidad

pañía y la renovación espiritual. Además, cuando los hijos

76 Centro de Desarrollo Transpersonal Centro de Desarrollo Transpersonal 77

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naturaleza, y a una li aciónd lemen y te

quier mujer que adopte esta distorsión apolínea automática

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84 Centro de Desarrollo Transpersonal Centro de Desarrollo Transpersonal 85