Los derechos humanos tienen un surgimiento en los últimos cuatro

siglos, siguiendo el proceso filosófico de los diversos tipos de conceptos como

los derechos naturales e innatos que cada individuo, grupo de personas o de

cada pueblo, para el proceso de consolidación de las aspiraciones , los

derechos constitucionales , como lo es designado en las diferentes

constituciones.

En este sentido el autor Garin (2010), define los derechos humanos

como una conquista de la conciencia jurídica de la Humanidad; Pero no son

debido a una conciencia abstracta, sino gracias a las luchas populares que se

han desarrollado en distintas épocas y países. De hecho destaca que “Debajo

de cada derecho corrieron –y corren- ríos de sangre”. El mismo hace

referencia a la defensa de los derechos humanos de cada individuo a lo largo

del tiempo lo que ha conllevado a consecuencias y pérdidas de carácter

humanos, debido a las diferentes reacciones de la ciudadanía y del ente o

persona ante el cual el individuo o individuos se manifiestan.

Por lo tanto, el autor antes mencionado bubb la fragilidad de estos logros

hacen necesario el constante trabajo a favor de una verdadera “cultura de los

Derechos Humanos” para contrariar el autoritarismo y la opresión. Lo que este

quiere referirse que la lucha por los de derechos humanos debería ser algo

consecuente, que cada ciudadano tenga el conocimiento de que estos existen

y deben hacerse valer.

Por otra parte, Bazdresch (2008), alude que es difícil dar una definición

precisa de los derechos humanos, ya que, concentran facultades con distintas

características y efectos, así que este propone un concepto muy general y

completo de este;

“… los derechos humanos son facultades que los hombres

tienen por razón de su propia naturaleza, de la naturaleza de las
cosas y del ambiente en el que viven, para conservar, aprovechar y
utilizar libre pero lícitamente sus propias aptitudes, su actividad, y los
elementos de que honestamente pueden disponer a fin de lograr su
bienestar y su progreso personal, familiar y social”

Es decir que, los derechos humanos serian nada más la manera de

nombrar las conductas que ya el hombre tiene desde sus orígenes con el

propósito de defender y mantener la integridad de su entorno y de los

elementos que colaboran para su bienestar y avance en los diferentes ámbitos

en los cuales se desenvuelve.

Sin embargo, Muller (2000), Entiende estos, como principios internos a

la dignidad humana que necesita el hombre para alcanzar sus fines como

persona y para dar lo mejor de sí a la sociedad, son aquellos reconocimientos

mínimos sin los cuales la existencia del individuo o la colectividad carecerían

de significado y de fin en sí mismas. Consisten en la satisfacción de las

necesidades morales y materiales de la persona humana”.

En Venezuela, los derechos humanos están reflejados en la Constitución

Bolivariana de Venezuela, y estos tienen por finalidad analizar el tema de los

deberes, derechos humanos y garantías, de los ciudadanos, a la luz de la Carta

Magna vigente en la República Bolivariana de Venezuela, desde el mes de

diciembre de 1999.

La Constitución o, fue impulsada por el actual presidente del País, Hugo

Chávez, y contó con un gran respaldo de diversos sectores, incluyendo a los

promotores de la anterior Constitución de 1961, como Luis Miquilena, y se

denomina Constitución Bolivariana, pues se inspira en los ideales de Simón

Bolívar y su ideología el Bolivarianismo.

En la Carta Magna estos derechos se ubican en, el Título III del Texto

Fundamental desarrolla el articulado de derechos consagrados para la

construcción del nuevo modelo de nación, basado en el respeto de los

derechos humanos. El artículo 19, garantiza el respeto de los derechos

humanos conforme al principio de progresividad y sin discriminación, siendo

obligatoria para los órganos del Poder Público, de conformidad con la

Constitución, con los tratados sobre derechos humanos suscritos y ratificados

por la República.

De esta manera las políticas públicas que se desarrollan por el Estado

venezolano, desde 1999, se orientan a garantizar los derechos humanos y

lograr la inclusión plena de los venezolanos y las venezolanas, haciendo

posible su realización y disfrute de manera integral y, especialmente, los

derechos colectivos económicos, sociales y culturales.

Sin embargo el desarrollo de la problemática se da gracias a este deseo

de la ciudadanía venezolana a defender sus derechos humanos; esta defensa

se dio mediante las protestas estudiantiles en donde luego se le agrego gran

mayoría de la población opositora al gobierno del país.

El inicio de estas se dan a finales de enero en donde el escenario de

polarización que ha caracterizado al país en los últimos años dieron paso a

hechos inéditos: líderes de oposición y Gobierno toman la decisión de trabajar

coordinadamente en materia de seguridad ciudadana, a partir del llamado del

Ejecutivo al diálogo para la construcción de una agenda nacional.

Al mismo tiempo, el Gobierno decide tomar un conjunto de medidas

para disminuir la especulación y el desabastecimiento, de atención prioritaria y

urgente. Pero sin embargo en los primeros días de febrero, con el proceso de

diálogo en marcha, se producen los primeros hechos en el estado Táchira.

Hechos los cuales muchos consideran coinciden con el llamado a tomar las

calles para forzar la salida del gobierno constitucional realizado por la diputada

María Corina Machado y el líder del partido opositor Voluntad Popular,

Leopoldo López.

Estas manifestaciones dieron paso a diferentes expansiones de disgusto

y el 12 de febrero del presente año el llamado del movimiento estudiantil

opositor era a marchar por la libertad de los detenidos por los sucesos del

Táchira. Esta jornada, que comenzó pacíficamente, derivó en una espiral de

violencia que se replicó hasta los últimos días. Rápidamente, la consigna inicial

fue sustituida por el llamado a copar las calles para forzar la salida del actual

gobierno.

Sin duda, en manifestaciones como las aquí serán analizadas, hay

participantes con intenciones pacíficas, mientras otros revelan con sus

acciones el objetivo de agitar la violencia. Al igual que en coyunturas recientes,

estas jornadas acaban respondiendo a la agenda político-partidista que busca

forzar una salida anticipada del gobierno actual. Este carácter también

explicaría la concentración de manifestaciones en los estados y en las zonas

de la capital donde la oposición tiene mayor número de adeptos. Como era

predecible, estas jornadas interrumpieron el diálogo entre Gobierno y

oposición.

Estas manifestaciones se dieron en gran parte del territorio nacional, y

las denominadas “Guarimbas” se han hecho cada día más común y con más

repercusiones en el día a día. El estado Lara fue el epicentro de grandes cierre

de calles y diferente variedad de manifestaciones.

Las interrogantes de esta investigación nacen gracias a los variados

factores por los cuales los estudiantes deciden luchar, y deciden defender sus

derechos humanos con el propósito de un bien común.