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UNIVERSIDAD NACIONAL JORGE BASADRE GROHMANN- TACNA.

ESCUELA PROFESIONAL DE DERECHO Y CIENCIAS POLITICAS.


ASIGNATURA: Derecho Procesal Constitucional
ESTUDIANTE: DIEGO TORRES VILLANUEVA –CODIGO: 2019-127042
FECHA___26/07/2021
TEMA: ANALISIS CASO DIANE PRETTY

ANALISIS DEL CASO DIANE PRETTY

Aquí en el tribunal europeo se analiza los alcances y límites de una muerte digna
y el caso concreto es si la señora Diane Pretty tiene derecho a decidir sobre su
vida o dicho de otra manera sobre la manera en que se elija morir.

Acerca del caso del artículo 2 del Convenio Europeo “El derecho de toda
persona a la vida está protegido por la ley, la muerte no puede ser infligida
intencionalmente a nadie salvo en ejecución de una sentencia de pena capital
pronunciada por un tribunal en el caso en que el delito este castigado con pena
por ley”

Al respecto a ello la demandante plantea que no se violaría el convenio si el


DPP acepta su petición y a su interpretación el convenio reconoce un derecho a
la vida oponible a los demás, pero no cuando el individuo desea escoger seguir
o no viviendo.

Respecto a lo anterior el tribunal no comparte sus argumentos y no amparando


su punto de vista.

Al respecto de este primer artículo analizado es menester recalcar que el


derecho a la vida posee una radicalidad en el contexto jurídico universal de los
derechos humanos sin este derecho ninguno de los demás derechos
garantizados en la constitución o en un tratado internacional tendrían base
serian meras ilusiones.

Por lo que, si en una legislación se acepta el suicidio asistido y en otra no, no


corresponde analizar en este caso ya que el tribunal vela por la aplicación de sus
leyes y por ende esta proscrito en el Código Penal el delito del que ayuda a
suicidarle.
En conclusión, se entra en conflictos y analogías estableciendo al artículo 2 y en
otros artículos que tendrían como por ejemplo el derecho asociarse también
plantea su contrapartida con el derecho a no asociarse y por ende en analogía
no cabría analizar por igual aquí, porque no cabría avalar el derecho a morir.

No obstante que trata de la abolición de la pena de muerte en tiempo de paz en


este caso de la señora Diane Pretty no cabe ampararse el suicidio asistido no
cabría por ninguna norma o jurisprudencia que interpretara que un tercero podría
matar a otra con su consentimiento sin persecución penal entonces estando a
las jurisprudencia no apoyando a la demandante y estando a la opinión de la
doctrina y explicar el alcance de las normas del convenio no cabría
objetivamente amparar la demanda , ni el estado suscribir un acuerdo para no
iniciar investigación penal contra el que ayude a un suicidio ya que el estado vela
por la vida.

Respecto al artículo tercero ampara que nadie podrá ser sometido ni a penas o
tratos inhumanos o degradante, la demandante alega que ella está siendo
sometida a un trato degradante dado que viene padeciendo una enfermedad
atroz e incurable en fase final, su futuro será conocer una muerte penosa e
indigna con falla respiratoria y de neumonía.

No obstante, el estado no se encontraría facultado de proteger en su aspecto


positivo de impedir un trato degradante ya que aquí no se busca una supresión a
un trato degradante o sufrimiento si no de autorizar interrumpir la vida de alguien
con autorización del estado esto último no cabría amparar según el derecho
inglés.

El que la señora Pretty cite en su demanda el articulo ocho del Convenio


Europeo tiene como objetivo específico reivindicar el derecho de
autodeterminación, el cual, según señala, se encuentra en todo el Convenio,
adquiriendo una mayor fuerza en este particular artículo. El referido derecho de
autoderminacion conlleva, según la demandante, un derecho a escoger cuando
y como morir y nada hay de íntimamente relacionado con la manera en la que
una persona lleva su vida que decidir el modo y el tiempo de su propia muerte.
Tal acto seria entonces la expresión más clara del respecto a la vida privada a
las personas.
Al respecto se inclinó por la que los estados tienen derecho a regular
penalmente todas aquellas actividades perjudiciales para la vida y la seguridad
de los demás. Con esta respuesta el Tribunal reconoce que tiene mayor peso la
consideración general de la vida, la salud y la seguridad pública que el principio
de autonomía de la persona.

Como conclusión el Tribunal brindo bases para el derecho estableciendo que no


existe un derecho a morir fundamentado en la calidad de vida y mucho menos se
debe interpretar el derecho a la vida en su aspecto positivo, es decir como la
facultad de disponer de su propia vida. Del mismo modo para el Tribunal que los
bienes jurídicos como la vida, integridad física y los derechos de los demás está
por encima del derecho de la autonomía de la voluntad de cualquier sujeto en fin
lo que establece el tribunal es que el estado no puede ampara el derecho a
suicidarse

DIEGO TORRES VILLANUEVA

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