El hombre y su evolución del lenguaje

Mariana Llerena Brito

Derecho: Primer semestre

El hombre ha sido catalogado a lo largo de la historia como un animal racional gracias a sus capacidades de asombro, análisis,

interpretación, asociación y sobre todo por su capacidad de comunicarse y transmitir sus pensamientos y emociones a través del lenguaje, a

pesar de que no se tenga un registro exacto de cuándo ni cómo se desató este fenómeno se convierte en un suceso que marca la historia de

desarrollo del hombre de manera positiva y que impulsa la aparición de varias dinámicas individuales y colectivas. Desde un enfoque

biológico en el texto se aborda o más bien, se justifica la idea de que los procesos que se desatan por medio del raciocinio del hombre son

producto de la evolución, donde a partir de las capacidades de adaptación, ya no desde lo instintivo, sino desde lo racional se aseguraba su

supervivencia y un óptimo desarrollo.

A medida que se avanza en el texto el autor expone muy detalladamente cómo los procesos en el medio natural en el que se desarrolla y se

forma el hombre incide en la formación de su capacidad cerebral al igual que pasa por múltiples transformaciones físicas que hacen parte

de su proceso de adaptación, considerando esto desde mi punto de vista como un despertar, un renacer desde todo lo que se percibía y se

conocía desde el momento en que nacieron y fueron creciendo y obteniendo ciertas habilidades dependiendo del entorno donde se

encontraban.

Se resalta y comparto la idea de siendo la racionalidad una capacidad adaptativa que genera libertad e independencia también posee y crea

límites respecto a los estilos de vida en los que crecen sus antepasados, ya que, no se quedaban estancados ante las adversidades que les

lanzaba su entorno, sino que se creaban un sentido de preservación hacia la especie, se esforzaban por cambiar de territorio para buscar

uno en el cual pudieran tener condiciones óptimas de vida, con buen abastecimiento de comida y agua, lugares donde los depredadores no

pudieran alcanzarlos fácilmente y sobre todo un entorno para formarse socialmente por medio del lenguaje. Al estar el hombre mediado por

el lenguaje se empiezan a crear significados, diferentes representaciones de lo que acontece en nuestro entorno e incluso de la idea de

nosotros mismos y los que nos rodean, lo que da paso a una distinción de lo que es realidad y lo que puede llegar a tener percepciones

fantasiosas, se cambian los enfoques interpretativos y se aporta el hecho de que se considera la racionalidad como una facultad no orgánica

sino que se desarrolla con base en las experiencias y la capacidad de cuestionamiento del ser humano.

El autor resalta con mucho valor la relación existente entre el lenguaje y la razón que en resumidas cuentas es lo que nos vuelve humanos,

la interacción, los constructos sociales y la esencia de darle sentido y significado a los símbolos culturales, experiencias, y objetos que se

relacionan dentro de las comunidades o múltiples entornos sociales donde se forme el ser humano son lo que permiten que las dinámicas

sociales se lleven a cabo y fortalezcan los procesos evolutivos que nos permitan persistir como especie.

A modo de conclusión se puede decir que a través de los referentes históricos y evolutivos se crean manifiestos intelectuales que son los

que nos permiten a los seres humanos ser coherentes con nuestros procesos, formar sociedades progresistas, velar por el bienestar y el

aprendizaje sobre el proceder y el significado que le damos a las realidades individuales y colectivas para dar paso a la esencia real de los

seres humanos en sociedad y como objetos transmisores del lenguaje.