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¿Que debe saber el administrador sobre la tecnología?

Después de todo, ¿no es cierto que los temas de tecnología deben dejarse a los científicos y
a los ingenieros? ¿Cómo se puede esperar que un administrador domine las complejidades
de la tecnología cuando los tecnólogos han pasado su vida estudiando el tema? Estas son
preguntas importantes y reflejan los temores de algunos administradores sobre la tecnología.

El administrador debe preocuparse por las características de rendimiento de la tecnología y


no por sus detalles técnicos. Las decisiones de selección de tecnología son de extrema
importancia y requieren de atención especial.

Los administradores deben de estudiar el proceso de operaciones a profundidad antes de


hacer una selección de tecnología. El administrador debe de evaluar las características de
rendimiento de la tecnología junto con sus implicaciones económicas y administrativas.

Fuente: Apunte de Producción del Instituto tecnológico de la Paz

La fábrica del futuro

Según un reciente artículo, la fábrica del futuro es “el producto de rápido cambio, con
tecnologías disruptivas que golpean a la fabricación como un ciclón.” Dicho así, se le puede
perdonar por pensar que esta factoría del futuro, basada en el concepto de la Industria 4.0, es
algo que temer. Pero, en realidad, estas tecnologías disruptivas tienen el potencial de
transformar radicalmente la fabricación, incrementando eficiencias, productividad y la
rentabilidad global de las empresas en todo el mundo.

Guiada en parte por el Internet de las Cosas, la Industria 4.0 representa sin duda el cambio
más revolucionario para impactar en el sector de la producción durante algún tiempo, con
negocios impulsados a seguir los modelos digitales que abarcan la conectividad, el análisis
de datos y el enfoque en los clientes. El objetivo general de esta cuarta revolución industrial
es facilitar la ejecución de una "fábrica inteligente", donde las múltiples fuentes
de datos en juego darán lugar a una mayor automatización, mayor perspectiva y toma de
decisiones optimizadas.

UNA ABUNDANCIA DE DATOS

Los forofos de los grandes volúmenes de datos (Big Data), defienden que todos los datos son
valiosos y por tanto deben de ser útiles. La realidad en la mayoría de las empresas es que no
saben lo que hacer con sus datos o todavía está trabajando para saber qué preguntas deben
hacerse sobre los mismos. Los fabricantes podrían disponer de las soluciones de análisis de
datos exhaustivos más eficientes pero serían inútiles para tratar datos contextualizados en
procesos y operaciones obsoletas e ineficientes. Para esas empresas que no deseen quedarse
atrás cuando el “ciclón” golpee, ahora es el momento de empezar a dar sentido a sus
necesidades de datos, poniendo el marco sólido sobre el cual construir la fábrica del futuro.

Aquí es donde la simulación predictiva entra en juego. Para optimizar resultados, la


simulación debe ocupar el lugar que le corresponde como un proceso de negocio integral,
vital, no solo para definir el alcance y diseñar la fábrica del futuro sino también para facilitar
la comunicación de futuras operaciones antes de iniciar cualquier transformación. El uso
efectivo de la simulación plantea cuestiones clave de gestión de procesos para asegurar que
las partes interesadas comprendan la naturaleza dinámica e interconectada de su negocio,
proporcionando nuevos conocimientos sobre cómo se ejecutan los procesos y cómo se
aplican las políticas, destacando las áreas en las que aún faltan datos particularmente valiosos,
y garantizando que las empresas son tan eficientes y productivas como sea posible.

GESTIÓN DE LA COMPLEJIDAD

Entonces, ¿cuáles son las características específicas de las fábricas del mañana para las que
la simulación puede ayudar a prepararse? En primer lugar, se requiere una nueva fuerza de
trabajo inteligente para gestionar la empresa del futuro. Esta fuerza de trabajo necesitará tanto
comprender las operaciones en juego como actuar sobre los conocimientos encontrados en
los datos que las fabricas inteligentes serán capaces de producir. Procesos operacionales
interconectados, variabilidad (que nunca se puede eliminar del todo), retroalimentación o
pasos repetitivos de procesos, compartición de recursos y políticas de prioridades —todo
incrementa el nivel de gobernabilidad que este tipo de operaciones requiere.

La necesidad de una solución que sea capaz de manejar este nivel de complejidad es de suma
importancia para equipar con éxito a una nueva fuerza de trabajo inteligente con
conocimientos de su operación existente y la previsión para asegurar que se van a realizar
cambios de políticas, decisiones de inversión y asignación de recursos para lograr el resultado
deseado.

Mapeando y analizando un espectro de variables de producción en un modelo operacional


particular, la predicción facilita una comprensión de las complejas relaciones entre procesos
en múltiples y variadas etapas. Los modelos pueden probarse utilizando diferentes escenarios
para descubrir cambios estratégicos y tácticos para una producción optimizada. En particular,
los procesos que involucren alta conectividad, variabilidad, interrupciones y complejidad de
interacciones son ideales para la simulación. Otras técnicas para medir estos procesos, como
hojas de cálculo Excel y Mapeos de la Cadena de Valor, a menudo ignoran o tratan atributos
como medias estáticas, lo que puede tener implicaciones críticas en la toma de decisiones. Y,
a medida que las empresas se hacen digitalmente más complejas y conectadas con la Industria
4.0, estas implicaciones pueden llegar a cambiarlas radicalmente.

EXPANSIÓN DE LA CADENA DE SUMINISTROS

Este nuevo nivel de complejidad no acaba con los procesos. Una parte integral de la fábrica
del futuro es la extensión y expansión de las cadenas de suministro, que rompe las barreras
comerciales tradicionales y trasciende las cuatro paredes de una simple instalación para
trabajar incluso más cerca de los clientes, los proveedores, los organismos de la industria y
el mundo académico. Esta idea de la empresa extendida es fundamental para el concepto
global de Industria 4.0, donde esta manera colaborativa de trabajar se ve como la única
manera de optimizar la productividad.

La simulación tiene la capacidad de modelar un ecosistema completo de fabricación y


componentes de cadena de suministro, como plazos de ejecución, costes, distancias,
proveedores, etc. facilitando una comprensión incluso más profunda de las complejas
relaciones entre, no tan solo procesos internos del negocio, sino también entre socios del
negocio, o clientes y proveedores. Llevando claridad y control a los socios colaborativos, la
simulación puede maximizar un potencial de negocio, suavizando los enlaces y estableciendo
los canales de comunicación más eficientes para facilitar la transición a la forma de trabajar
de la fábrica inteligente.

LA VELOCIDAD ES LA ESENCIA

Las escalas de tiempo más cortas y crecientes eficiencias que son subproductos de procesos
optimizados se anticipan en términos de la necesidad de mejora de la agilidad global del
negocio. Para alcanzar la excelencia operacional real, alcanzando los niveles de agilidad
requeridos para responder rápidamente e incluso predecir, nuevas oportunidades de negocio
y cambios de mercado, los negocios necesitan tomar decisiones a alta velocidad, más
eficientemente. Incluso las operaciones más eficientes se ralentizarán debido a retrasos en la
toma de decisiones, particularmente si las decisiones no son las correctas cuando finalmente
se materialicen.

La única manera de asegurar toma de decisiones más rápidas y más eficientes es teniendo
acceso a la información correcta, en el momento correcto, en el contexto correcto. De nuevo,
la simulación es clave. La información producida llevando a cabo simulación predictiva a
través del negocio es robusta, en tiempo real y contextualizado. Los responsables de tomar
decisiones entonces pueden utilizar esta información y apoyar sus decisiones, con la
seguridad de que las decisiones están basadas en la mejor información disponible. La
adopción de una cultura de modelado para la toma de decisiones a nivel directivo asegura
que la simulación es el primer Puerto de llamada cuando se tienen que realizar decisiones
complejas, algo que mantendrá al negocio en una buena posición ya que la velocidad de toma
de decisiones crecerá en línea con el ritmo creciente del negocio de la fábrica del futuro.
FACILIDAD DE USO

Otra área donde la simulación guiará a la fábrica del futuro es en la usabilidad de la


tecnología. Con la única reserva de expertos en modelado y simulación, la simulación va
saliendo de las sombras y de los escritorios de los usuarios de negocios. La naturaleza
interdependiente de la fábrica del futuroe significará que más personal, no técnico, no
especializado, estará involucrado, haciendo que lo más importante sea que estas herramientas
proporcionen los mayores niveles de rendimiento necesario pero en un paquete útil, accesible
y visual.

La realidad virtual (VR) es un gran ejemplo de esto. Un modelo simulado de su negocio


proporciona potentes datos del estado futuro en un medio fácilmente consumible,
desmitificando mucho de los procesos analíticos al proporcionar una experiencia visual
interactiva, ayudando tanto a analistas como a los responsables de toma de decisiones a
comprender sus procesos, datos y cómo se afectan entre sí. Llevando los problemas del
mundo real en el mundo de realidad virtual, visualizando dinámicamente los diversos
resultados potenciales y seleccionando el mejor curso de acciones, la simulación permite a
los negocios el lujo de poder realizar test exhaustivos sin los riesgos y costes asociados de
los test en un entorno vivo, optimizando procesos en preparación para la industria del futuro.

RECETA DEL ÉXITO

Para muchos, los datos son la clave que permite la fábrica del futuro. Sin embargo, antes de
intentar responder a esos datos, es vital que los negocios conozcan qué datos recoger, cómo
contextualizarlos y cómo utilizarlos. Y mientras no existe una única solución para
transformar repentinamente un negocio en una empresa digital de alto rendimiento, los
negocios pueden hacer cosas mucho peores que adoptar las capacidades de la simulación
predictiva como medio para prepararse para la transición a la fábrica del futuro.
Ahora es el momento para reconsiderar procesos y procedimientos. Antes de pasar al ámbito
de las analíticas Big Data, los negocios deberían de trabajar estrechamente con su proveedor
de simulación para asegurarse de que están haciendo un uso completo del software.
Únicamente así estarán en primera posición para adoptar la fábrica del futuro en toda su
bondad.

© Addlink Software Científico. Creative Commons (CC), este contenido está disponible
bajo la licencia CC BY 4.0 (https://creativecommons.org/licenses/by/4.0/deed.es), salvo
que se indique lo contrario.

Fuente: https://www.addlink.es/noticias/witness/2642-un-paso-adelante-hacia-la-fabrica-
del-futuro

Las oficinas y los servicios del futuro

Las razones por las que vamos a la oficina están cambiando. El alto coste de la vivienda en
los centros de las ciudades y los desplazamientos cada vez más largos, obligan a las
compañías a diseñar espacios donde nos apasione ir a trabajar. ¿Quieres saber cómo serán las
oficinas del futuro?

En todo el mundo está aumentando el tiempo que las personas invierten en llegar al trabajo.
Los nuevos datos demuestran que la media en Estados Unidos es de más de 27 minutos por
desplazamiento. Las personas pierden una cantidad de tiempo equivalente a una semana de
trabajo completa al año. Pero este problema no está solo al otro lado del Atlántico. Si vives
en una gran ciudad, sabrás perfectamente de qué te estamos hablando.

El aumento del número de atascos de tráfico es un argumento más para replantear cómo
deben ser las oficinas del futuro y hacer que estos trayectos al trabajo merezcan la pena.

El rápido crecimiento económico tiende a alejar a las personas del centro de las ciudades
donde la vivienda se hace inasequible. Pero ¿qué hacemos si el trabajo se desarrolla allí?
Aunque existen empleos que se pueden realizar en remoto, no siempre es la solución. De
hecho, Harvard Business Review informó, recientemente, sobre un estudio de una importante
empresa de tecnología donde se reveló que «los trabajadores en remoto informaban un 80%
menos sobre sus tareas, que los trabajadores presentes en la oficina». La realidad es que no
todo el mundo está capacitado para trabajar bajo esta fórmula.

Es más, desde Steelcase, elaboramos un informe sobre el nivel de compromiso de las


personas con el espacio de trabajo y descubrimos que: el 55% de los trabajadores, a nivel
mundial, desean trabajar en las oficinas siempre y cuando los espacios les hagan sentir
cómodas y motivadas.
Las personas pasan cada vez más tiempo desplazándose al trabajo, por eso es importante que
cuando lleguen a la oficina, su experiencia sea fluida y agradable, ayudándoles a sentirse
cómodos y revitalizados.

Es más, las empresas deberían comenzar a interiorizar que el bienestar de sus empleados no
solo ayuda a las personas a estar más sanas, sino que también, a ser más eficaces y
productivas y por eso, se hace imprescindible que el espacio de trabajo potencie su bienestar

¿Cómo está cambiando la forma en la que colaboramos en el trabajo?

Cada vez son más las compañías que están adoptando prácticas como el design thinking (un
método creativo de resolución de problemas) y la metodología Agile (un proceso de
ejecución rápida) para estructurar la forma de trabajo en equipo. Ambos modelos son
dinámicos y de ritmo rápido. Al moverse los empleados de una tarea a otra de forma
colaborativa, se valora la presencia física para mantener el rendimiento del flujo de trabajo.

A la hora de colaborar, las reuniones formales, sesiones de lluvia de ideas, encuentros con
otros departamentos e interacciones improvisadas; ayudan a resolver los problemas de
manera más rápida y en tiempo real, a la vez que crea un sentido de comunidad y se desarrolla
la confianza entre los participantes.

Selección de Tecnología.

En el área empresarial, la tecnología incluye las habilidades, técnicas, procedimientos,


equipos y sistemas para llevar a cabo un trabajo. Cuando las empresas diseñan o rediseñan
sus subsistemas de Operaciones han de tomar decisiones relacionadas con los métodos y
equipos, esto es, con la tecnología a emplear en la producción de bienes y servicios. El acierto
o fracaso en la selección de la tecnología adecuada ejerce importantes repercusiones
estratégicas sobre la empresa.
Las distintas tecnologías empleadas por una empresa no generan necesariamente el mismo
impacto competitivo. El dominio de alguna de ellas es una condición para el éxito, dadas sus
repercusiones sobre costes y diferenciación, mientras que la contribución de otras puede ser
menos importantes, bien por tener poca influencia sobre los objetivos mencionados, bien
porque pueden acceder a ellas todos los componentes de una industria.
Podemos clasificar las tecnologías en tres grupos: básicas, claves y emergentes.
Las básicas son utilizadas intensamente por la empresa, pero que están al alcance de
cualquier competidor. En muchos casos, su dominio les permite conseguir una ventaja
competitiva temporal, pero no sostenida.
Las claves son las que, en un momento dado, ejercen el mayor impacto; constituyen la fuerza
conductora de la competencia y la fortaleza, que las distintas firmas tienen en relación con
ellas, se refleja en sus posiciones competitivas. Su dominio se convierte en una cualidad
distintiva e indispensable, necesaria para aquellas entidades que quieren alcanzar el éxito en
un determinado proyecto.
Las emergentes son las que se encuentran en la etapa de desarrollo. Su empleo en un proyecto
empresarial determinado es, por el momento, marginal; sin embargo, en un futuro, podrían
tener un impacto potencial importante y algunas podrían pasar a ser tecnologías clave.

La caracterización de cada tecnología dependerá, esencialmente, del papel que desempeñe


dentro de cada actividad emprendida por la empresa, pudiéndose dar la circunstancia de que
una tecnología dada pueda pertenecer indistintamente a las tres categorías señaladas en
función del proyecto en el que se aplique.

La elección de la tecnología parece un problema de oportunidad, imaginación y creatividad,


además de disponibilidad de recursos técnicos y financieros. Además del presupuesto de
capital, hay que tener en cuenta la compatibilidad con la estructura organizativa y métodos
de trabajo existentes; efectos sobre el personal. Medio ambiente, etc.
La elección no se puede considerar como una sola acción, sino un proceso que incluya la
investigación tecnológica continua, la elección de tecnologías adecuadas y la implantación
de la elegida (todo ello con el apoyo y asesoramiento especializado).

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