Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Ciudadano
Juzgado de Primera Instancia en lo Civil,
Mercantil, de la Circunscripción Judicial del
Estado Nueva Esparta.
Su Despacho.-
Nosotros, Víctor Avila, Tiisay Romero, y Daniel Bruno, venezolanos, mayores de edad, de
gprofesión abogados, titulares de las cédulas de identidad N° __________, _________, y
________, e inscritos en el Instituto de Previsión Social del Abogado bajo los N° _______ ,
_______ , y _______ respectivamente y de este domicilio, procediendo con el carácter de
Defensor del Pueblo Delegado del Estado ________ el primero, según se evidencia de
________________, Defensora Adjunta la segunda, y Defensor Auxiliar, respectivamente,
actuando en este acto por delegación del ciudadano GERMÁN MUNDARAÍN HERNÁNDEZ,
venezolano, mayor de edad, de este domicilio, en su condición de Defensor del Pueblo de la
República Bolivariana de Venezuela, tal como se evidencia de la designación publicada en
Gaceta Oficial número 37.105, de fecha 22 de diciembre de 2000, respetuosamente y de
conformidad con las atribuciones conferidas en los artículos 280 y 281 numerales 2ro, 3ro de
la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, en concordancia con los artículos 2
y 5 de la Ley Orgánica de Amparo Sobre Derechos y Garantía Constitucionales, acudimos
ante su competente autoridad a los fines de interponer como en efecto interponemos en este
acto, ACCIÓN DE AMPARO CONSTITUCIONAL, contra medida de cierre del vertedero de
1
basura ubicado en el sector el Piache, Municipio Mariño , del estado Nueva Esparta, y el cual
constituye el único vertedero de basura legalmente establecido en el Estado. Medida
adoptada por la empresa Karcom, sucesión Fermín, y demás personas a solicitud de éstas.
Situación que constituye una amenaza inminente a los derechos constitucionales de los
habitantes del Estado. En este sentido seguidamente se expone:
CAPÍTULO I
DE LA LEGITIMACIÓN ACTIVA
2
derechos e intereses legítimos, colectivos y
difusos de las personas, contra las
arbitrariedades, desviaciones de poder y errores
cometidos en la prestación de los mismos ,
interponiendo cuando fuere procedente las
acciones necesarias para exigir al Estado el
resarcimiento a los administrados de los daños y
perjuicios que les sean ocasionados con motivo
del funcionamiento de los servicios públicos.
3
del conjunto de personas existe o puede existir
un vínculo jurídico que los une entre ellos.”
4
estas atribuciones la Constitución le faculta, para
ejercer todas las acciones que considere
pertinentes a los fines de garantizar estos
derechos. Es por ello que acudimos a este
honorable Juzgado Superior en lo Contencioso
Administrativo, a los fines de interponer la
presente acción de amparo constitucional.
CAPÍTULO II
DE LA COMPETENCIA
5
constitucionales, cuando no exista un medio
procesal breve, sumario y eficaz acorde con la
protección constitucional.
6
En estos casos la infracción constitucional se
reputa que ocurre en el lugar donde se
desmejora o lesiona la situación jurídica; es
decir, en el lugar donde se concreta el efecto del
acto, y conforme a lo explicado en este fallo, lo
natural será acudir en amparo ante los
Tribunales de Primera Instancia de dicho lugar, o
los excepcionales del artículo 9 de la Ley
Orgánica de Amparo sobre Derechos y
Garantías Constitucionales.
Sin embargo, mientras no se dicten las leyes que
regulen la jurisdicción constitucional o la
contencioso-administrativa, y a pesar de la letra
del artículo 7 de la Ley Orgánica de Amparo
sobre Derechos y Garantías Constitucionales, el
conocimiento de los amparos autónomos afines
con la materia administrativa, corresponderá en
primera instancia a los Tribunales Superiores con
competencia en lo Contencioso Administrativo,
que tengan competencia territorial en el lugar
donde ocurrieron las infracciones
constitucionales, a pesar de que no se trate de
jueces de primera instancia. Esta determinación
de competencia se hace en aras del acceso a la
justicia y a la celeridad de la misma, evitando así,
que las personas lesionadas deban trasladarse a
grandes distancias del sitio donde se concretó el
hecho lesivo, a fin de obtener la tutela
constitucional. En beneficio del justiciable, si en
7
la localidad en que ocurrieron estas
transgresiones, no existe Juez Superior en lo
Contencioso Administrativo, pero sí un Juez de
Primera Instancia en lo Civil, éste podrá conocer
del amparo de acuerdo al procedimiento del
artículo 9 de la Ley Orgánica de Amparo sobre
Derechos y Garantías Constitucionales.
8
CAPÍTULO III
DE LA PROCEDENCIA
9
derechos humanos fundamentales que
seguidamente se detallan.
CAPÍTULO IV
DE LOS HECHOS
10
Asimismo el artículo 19 dispone: El Estado
garantizará a toda persona, conforme al principio
de progresividad y sin discriminación alguna, el
goce y ejercicio irrenunciable, indivisible e
interdependiente de los derechos humanos. Su
respeto y garantía son obligatorios para los
órganos del Poder Público de conformidad con la
Constitución, los tratados sobre derechos
humanos suscritos y ratificados por la República
y las leyes que los desarrollen.
En este mismo sentido, el artículo 23 de la Carta
Magna establece “Los tratados, pactos y
convenciones relativos a derechos humanos,
suscritos y ratificados por Venezuela, tienen
jerarquía constitucional y prevalecen en el orden
interno, en la medida en que contengan normas
sobre su goce y ejercicio más favorables a las
establecidas por esta Constitución y la ley de la
República, y son de aplicación inmediata y
directa por los tribunales y demás órganos del
Poder Público”.
No es intención de esta Defensoría realizar una
enumeración de todo el articulado de la Carta
Magna que se relacione con la obligación de
garantía del Estado frente a los ciudadanos
respecto de la tutela de los derechos humanos
de estos. Pero ante esta situación de conflicto
que viene atravesando el país, debido al paro
indefinido que fuera declarado, nos lleva a
analizar desde el punto de vista de los derechos
humanos y a la luz de la Constitución, las
11
situaciones que se generan a consecuencia de
esta medida.
En el artículo 1, párrafo 2, del Protocolo II
adicional a los Convenios de Ginebra de 1949 se
considera que las "situaciones de tensiones
internas y disturbios interiores" no son conflictos
armados. Aunque no figura una definición como
tal, se deja claro, no obstante, que, como las
tensiones internas y los disturbios interiores no
son conflictos armados, el Comité Internacional
de la Cruz Roja ha tratado de definir a las
mismas (CICR, Ginebra, 1986; publicado,
asimismo, en la Revista Internacional de la Cruz
Roja, nº 85, 1988, pp. 11-37), realizando la
siguiente descripción de los disturbios interiores:
“Se trata de situaciones en las que, sin que haya,
propiamente hablando, conflicto armado sin
carácter internacional, existe sin embargo, a nivel
interior, un afrontamiento que presenta cierto
carácter de gravedad o de duración y que da
lugar a la realización de actos de violencia. Estos
últimos pueden revestir formas variables, que
van desde la generación espontánea de actos de
sublevamiento hasta la lucha entre grupos más o
menos organizados y las autoridades que
ejercen el poder. En estas situaciones, que no
degeneran forzosamente en lucha abierta, las
autoridades que ejercen el poder apelan a vastas
fuerzas de policía, o bien a las fuerzas armadas,
para restablecer el orden interno. El número
12
elevado de víctimas ha hecho necesaria la
aplicación de un mínimo de reglas humanitarias".
El mantenimiento del orden público genera en
estas situaciones conflictos entre los derechos
enunciados en la Constitución. Las personas
tienen derecho a tener una opinión y a
expresarla, a reunirse pacíficamente y a
asociarse con otras personas, siempre que
cumplan sus responsabilidades de conformidad
con la ley. Tanto el respeto de los derechos y las
libertades de otras personas o de su reputación
como el orden y la seguridad pública, la defensa
nacional, la salud y la moral pública son razones
posibles para restringir el ejercicio de los
derechos mencionados anteriormente. Los
funcionarios encargados de hacer cumplir la ley
se ocuparán de hacer efectivas tales
restricciones cuando las autoridades
competentes lo estimen necesario.
Los principios esenciales del derecho de los
derechos humanos, aplicables en situaciones de
disturbios y tensiones, y especialmente
importantes para la aplicación de la ley son el
derecho a la vida, la libertad, la salud y la
seguridad de las personas.
En este orden de ideas, entendemos que el goce
y ejercicio de un derecho no puede afectar otras
garantías previstas por la constitución de la
República, como son los derechos antes
enunciados, máxime cuando ello afecte a
13
personas inocentes o que no se encuentran
involucradas en la situación de conflicto.
Al mismo tiempo, que existen servicios públicos
básicos o mínimos que deben resguardarse en
toda situación de tensión interna, ya que la
suspensión de esta prestación puede acarrear
graves lesiones en el orden público.
§1
Las empresas contratadas por Petróleos de
Venezuela, S.A. (PDVSA)
14
Considerando esta realidad, la Constitución
prevé, en su artículo 303, que por «razones de
soberanía económica, política y de estrategia
nacional, el Estado conservará la totalidad de las
acciones de PDVSA».
15
regirá por la Ley que Reserva al Estado la
Industria del Gas Natural y la Ley que Reserva al
Estado la Explotación del Mercado Interno de los
Productos Derivados de Hidrocarburos,
respectivamente, en cuanto no colida con lo
dispuesto en la presente ley» (énfasis añadido).
§2
Antecedentes del conflicto
16
“Transportistas de hidrocarburos se paran por los
hechos de Altamira”, se observa que la Unión de
Transportistas y Distribuidores de Derivados de
Hidrocarburos decidió unirse al paro convocado
por FEDECAMARAS, la CTV y la Coordinadora
Democrática, como protesta por los hechos
sangrientos ocurridos en la Plaza Altamira el
pasado viernes 06/12/02. En tal sentido el
comunicado expresa:
§3
Del conocimiento de estos hechos por parte
de la Defensoría del Pueblo
17
Profesionales Bolivarianos, solicitó la
intervención de esta Institución en el conflicto
suscitado por un sector de la nómina mayor de la
empresa PDVSA, ya que considera que el mismo
es ilegal y está afectando la viabilidad económica
del país.
CAPÍTULO V
DEL DERECHO
18
para nombrar no sólo al Presidente de Petróleos
de Venezuela, así como a la Directiva que la
conforma; sino también, en conjunto, con el
Ministro de Energía y Minas tener las
competencias de formulación, regulación y
seguimiento de las políticas y la planificación,
realización y fiscalización de las actividades en
materia de hidrocarburos, lo cual comprende lo
relativo al desarrollo, conservación,
aprovechamiento y control de dichos recursos;
así como al estudio de mercados, al análisis y
fijación de precios de los hidrocarburos y de sus
productos.
19
trabajadores puedan tener de forma directa
sobre los servicios públicos que se prestan a la
población y que se encuentran vinculados
directamente al sector petrolero, tales como la
gasolina y el gas, así como también, otros
servicios públicos esenciales como el servicio de
agua, luz, salud, educación y alimentos, cuya
distribución y funcionamiento también dependen
de forma directa o indirecta del funcionamiento
de los servicios que presta la industria petrolera.
§1
Sobre el derecho a disponer de bienes y
servicios de calidad
20
El artículo 117 de la Constitución de la República
Bolivariana de Venezuela, consagra:
21
trabajadores de la mencionada empresa
petrolera y las empresas contratadas para la
prestación del transporte de sus productos, en
consecuencia, dichas acciones amenazan de
manera directa la prestación de los mismos y la
calidad de vida de la población venezolana.
22
La naturaleza propia de la actividad del servicio
público consiste en mantener y sostener la
calidad de vida de la sociedad, lo cual no es otra
cosa que –conforme lo ha señalado la Sala
Constitucional en sentencia de fecha 30 de junio
de 2000- «...el producto de la satisfacción
progresiva y concreta de los derechos y
garantías constitucionales que protegen a la
sociedad como ente colectivo, como cuerpo que
trata de convivir en paz y armonía, sin estar
sometida a manipulaciones o acciones que
generen violencia o malestar colectivo, por lo que
ella, en sentido estricto, no es el producto de
derechos individuales como los contenidos
puramente en el Capítulo de los Derechos
Humanos, sino del desenvolvimiento de
disposiciones constitucionales referidas a la
sociedad en general» (énfasis añadido).
23
leyes deben interpretarse en contra de todo lo
que perturbe esa meta, perturbaciones que
pueda provenir de cualquier área del
desenvolvimiento humano, sea económico,
cultural o político.” (énfasis añadido)
24
un efectivo control gubernamental y
jurisdiccional.
25
Todas esas características, así como la actividad
que realizan, equiparan a los comerciantes cuya
actividad implica un verdadero servicio público,
con la misma administración, por lo que estas
empresas se encuentran sujetas principio de
legalidad. En consecuencia, el presente conflicto
pone de manifiesto la amenaza inminente de
violación de este derecho constitucional, ya que
además de las consecuencias económicas que
sufriría el país por la continuidad de las acciones
ilegales de este grupo de trabajadores de
PDVSA y de las empresas contratadas para la
distribución mediante transporte terrestre de los
productos de PDVSA, se estaría afectando de
manera directa el derecho a tener servicios
públicos de calidad y en consecuencia se
violarían también derechos conexos a los
mismos, tales como, el derecho el derecho al
libre tránsito, el derecho al libre ejercicio de
ciertas y determinadas actividades económicas e
incluso hasta el principio de seguridad
alimentaria de la Nación, en virtud de la posible
escasez de combustible que se generaría por el
cierre o la deficiente operatividad de las centrales
petroleras del país.
26
las de escasos recursos- quienes utilizan el gas
para cocinar, el transporte público para
movilizarse, entre otros aspectos. Por su parte, la
ausencia de combustible, no sólo afectaría a los
pequeños y medianos empresarios entre los que
se encuentran dueños de bombas y gasolineras,
taxistas y transportistas que requieren del vital
líquido para ejercer su actividad económica, sino
que además traería como consecuencia directa
en corto plazo, graves deficiencias al servicio
público del transporte, lo cual no sólo afectaría a
los trabajadores sino a toda la actividad
productiva y en general al funcionamiento normal
de las actividades del país.
27
§2
Del derecho de Propiedad
28
el interés general y colectivo que se encuentra
políticamente institucionalizado le confiere las
características al derecho de propiedad, junto
con el derecho de disposición del titular, el cual
no desaparece.
29
expropiación de cualquier clase de bienes”.
(énfasis añadido)
30
forma u otra, beneficiada del ejercicio efectivo de
dicho derecho.
31
da un concepto abstracto de libre disposición o
señorío sobre el bien objeto del dominio
reservado a su titular, que se encuentra limitado
a través de las leyes para salvaguardar los
legítimos derechos o intereses de terceros, la
función social o el interés general. La
delimitación del contenido del derecho de
propiedad privada en virtud de su función social,
debe ciertamente regularse por la ley, pero
también por la Administración de acuerdo con las
leyes.
32
de la persona en sociedad a través del libre
desarrollo de su personalidad, que se encuentra
supeditada a órdenes o valores superiores o
supraindividuales como son los derechos
colectivos o de la sociedad dentro de un Estado
social de derecho. Por esto, la garantía
institucional de la propiedad privada consiste en
su correcta interpretación constitucional desde la
perspectiva de la nueva realidad y que es el
Estado democrático, social de derecho y de
justicia.
33
que ser regulado por el Ministerio de Energías y
Minas.
34
(derivado de hidrocarburos), es un servicio
público y en consecuencia deben operar
medidas mínimas, a los fines de producir el
menor daño posible a la población.
§3
De los intereses en conflicto
35
Este grupo de trabajadores y empresas
contratistas, han utilizado la figura del «paro»
interrumpiendo sus jornadas laborales y
prestación de servicios a PDVSA como
herramienta para la ruptura del hilo democrático
que alegan defender y que según sus dichos ha
regido siempre a esta empresa del Estado. Estas
figuras no se encuentran contempladas de
manera autónoma en nuestra normativa laboral,
la cual sólo prevé estos mecanismos como parte
de un sistema de reivindicaciones laborales en el
marco del ejercicio del derecho a huelga, y no
como lo es el presente caso que se trata de una
protesta en contra de un sistema de gobierno
instaurado democrática y constitucionalmente.
Sin embargo, en el caso de autos, no nos
encontramos en el ejercicio legítimo de este
derecho, pues el mismo, tal como lo establece la
Constitución, los tratados internacionales en
materia laboral y la ley, requieren el agotamiento
de unos requisitos previos sin los cuales su
ejercicio deviene en ilegítimo e ilegal, pero cómo
se mencionó el presente caso no se trata de una
huelga laboral, sino de acciones de otra índole,
llegando incluso a realizar protestas de tipo
políticas.
36
reivindicaciones laborales, muy por el contrario,
busca levantar una decisión tomada dentro de
las atribuciones legales y constitucionales del
Presidente de la República y la salida del mismo
del gobierno de una manera no establecida en la
Constitución.
37
no se corresponden con el ejercicio legítimo de
un derecho, sino muy por el contrario, que son
acciones ilegales que están afectando y
amenazan afectar en mayor medida los intereses
de la Nación y en consecuencia los derechos e
intereses regionales.
CAPÍTULO VI
MEDIDA CAUTELAR
38
alimentos, gas, agua, educación, entre otros. Por
ello, es evidente que se encuentra involucrado el
orden público de la nación, en el que las
tensiones internas y los disturbios interiores
pueden conducir a una situación que el
Gobierno, dadas las circunstancias, y recurriendo
a las medidas de que normalmente dispone, no
se considere capaz de controlar. La situación
puede llegar a ser tan grave que incluso peligra
la posición del Gobierno elegido
democráticamente. Al respecto, el artículo 4 del
Pacto Internacional de Derechos Civiles y
Políticos contiene importantes disposiciones.
39
dictada en tiempo oportuno para evitar la
producción del daño o hacerlo cesar.
En este orden de ideas, cabe recordar que
“proceso urgente” reconoce en la actualidad tres
tipos principales de mecanismos diferenciados
entre sí: a) Las medidas cautelares: que nunca
constituyen un fin por si mismas, sino que están
ineludiblemente preordenadas a la emanación de
una ulterior providencia definitiva y al resultado
práctico que aseguran preventivamente. Más que
a hacer justicia contribuyen a garantizar el eficaz
funcionamiento de la justicia (CALAMANDREI,
Piero, “Introducción al estudio sistemático de las
providencias cautelares”, Edit. “El Foro”, 1997,
p.44/45). b) La medida autosatisfactiva: es el
requerimiento urgente formulado al órgano
jurisdiccional por los justiciables que se agota –
de ahí lo autosatisfactiva- con su despacho
favorable, no siendo entonces necesaria la
iniciación de una ulterior acción principal para
evitar su caducidad o decaimiento (PEYRANO,
Jorge W., ”Régimen de las medidas
autosatisfactivas. Nuevas propuestas”, La Ley,
1998-A-968). c) La tutela anticipatoria: es aquella
que apunta a la satisfacción inmediata total o
parcial de la pretensión contenida en la
demanda, cuando de la insatisfacción pueda
derivar un perjuicio irreparable.
40
tutela efectiva en la oportunidad adecuada
aparecen tanto en el ámbito nacional como en el
Derecho comparado, las tutelas de urgencia o,
como se las denomina en nuestro medio, los
“procesos urgentes”. La nota característica de
tales procesos es la prevalencia que se asigna al
principio de celeridad, que conduce a reducir la
cognición y a postergar la bilateralidad a los fines
de asegurar una tutela eficaz (DE LOS
SANTOS, Mabel “Conveniencia y necesidad de
legislar sobre las tutelas de urgencia”, FUNDESI,
Escuela Judicial, “Procesos urgentes”, clase del
10-4-00).
41
aunque no sea el juez competente o no se lo
hayan solicitado, de conformidad con el artículo 9
de la Ley Orgánica de Amparo sobre Derechos y
Garantías Constitucionales, debiendo remitir
posteriormente a su pronunciamiento sus
actuaciones, lo cual ha sido reiterado por la
jurisprudencia patria en la Sala Constitucional y
en la Corte Primera de lo Contencioso
Administrativo.
42
proceso constituye un instrumento fundamental
para la realización de justicia".
2. Que no obstante lo anterior, en aquellos casos
en los que el tiempo constituye un factor
fundamental para la tutela judicial, se hace
necesario un análisis ajustado a la nueva
filosofía de la Constitución, pues si bien el
procedimiento de amparo debe garantizar la
defensa del agraviante, es lo cierto que en el
caso sometido a su consideración, el derecho
invocado por el accionante quedaría totalmente
inerme y, en caso de resultar victorioso en su
pretensión de amparo, su derecho no podría ser
concretado de todas formas.
3. Que a los fines de que el procedimiento no se
convierta en una herramienta en contra de
quienes tienen la razón o pueden tenerla, se ha
diseñado el mecanismo de las medidas
cautelares innominadas que fungen como un
verdadero amparo en el proceso mientras se
dilucida la pretensión de mérito.
4. Que si bien el accionante no solicitó tal
protección cautelar y esa falta de impulso no
puede ser suplida por el juez, se ha plasmado en
la doctrina la tesis de la "Tutela Cautelar
Constitucional Preventiva Anticipativa" que
permite un restablecimiento preventivo y
provisional de la situación mientras se resuelve
el fondo del asunto planteado. En este sentido la
Corte señalo:
43
Que la tutela preventiva configura un género que
comprende diversas posibilidades cautelares y
que dentro de ese género preventivo se
encuentra la "Tutela Cautelar Constitucional
Preventiva Anticipativa" representada por
medidas que previenen un peligro inminente
(periculum in damni) en perjuicio de unos
derechos legítimamente invocados (fumus boni
iuiris) y que pueden aplicarse en aquellas
situaciones en las cuales la cautela tradicional es
inoperante o las razones del proceso así lo
imponen.
Que en materia de amparo constitucional, este
tipo de tutela cautelar facultaría al juez para
acordar un restablecimiento provisional de una
situación que se presenta como inminente y en la
que, además, el procedimiento se convierte en el
peor obstáculo para la realización de justicia.
Que este era el espíritu que se desprendía del
derogado artículo 22 de la Ley Orgánica de
Amparo sobre Derechos y Garantías
Constitucionales y que el artículo 27 de la
Constitución recoge nuevamente al facultar al
juez para restablecer inmediatamente la
situación jurídica infringida.
5. Este restablecimiento será siempre y
necesariamente provisional mientras se
desarrolla el trámite procesal correspondiente
para debatir la veracidad de lo alegado por el
accionante y para garantizarle al presunto
44
agraviante el uso de sus derechos procesales a
la defensa.
Sin embargo, de la misma forma, el Tribunal
Supremo de Justicia, en sentencia de la Sala de
fecha 24 de Marzo de 2001, expediente Nº: 00-
0436, sobre este tema expresó:
Pero para la provisión de dichas medidas, y al
menos en los amparos contra sentencias, al
contrario de lo que exige el Código de
Procedimiento Civil, al peticionario de la medida
no se le pueden exigir los requisitos clásicos de
las medidas innominadas: fumus boni iuris, con
medios de prueba que lo verifiquen; ni la prueba
de un periculum in mora (peligro de que quede
ilusoria la ejecución del fallo), como sí se
necesita cuando se solicita una medida en base
al artículo 585 del Código de Procedimiento Civil,
donde también han de cumplirse los extremos
del artículo 588 eiusdem, si se pide una cautela
innominada.
...omissis...
Lo importante de la medida que se solicita con el
amparo, es la protección constitucional que se
pretenda y, al igual que en los artículos 3 y 5 de
la Ley Orgánica de Amparo sobre Derechos y
Garantías Constitucionales, la protección
constitucional se concreta suspendiendo efectos
lesivos o amenazantes, y es éste el tipo básico
de medidas que puede pedir el accionante, y
cuyo decreto queda a criterio del juez de amparo
si lo estima o considera procedente para la
45
protección constitucional sobre la cual gravita la
inmediatez del daño. Es más, no permitiendo la
estructura del proceso de amparo una específica
oposición a la medida que se pide con la solicitud
de amparo, el juez debe analizar muy bien los
efectos que puede causar la medida que decrete,
teniendo en cuenta la actuación de los afectados
y el carácter reversible de lo que decrete, en el
sentido de que si el accionante no tuviese razón,
la medida no perjudica al accionado. Esto sin
perjuicio de la responsabilidad proveniente del
error judicial.
Por la urgencia que esta causa amerita debido a
las informaciones aparecidas en todos los
medios de comunicación social, siendo un hecho
notorio comunicacional, según las cuales este
grupo de empresas transportistas, contratados
por PDVSA, han manifestado la radicalización
del conflicto y en consecuencia, la agudización
de las medidas que hemos señalado como
atentatorias de los derechos constitucionales, es
que la Defensoría del Pueblo solicita a este
honorable Juzgado actuando como órgano
constitucional, que ordene en protección de los
derechos e intereses difusos de la población
venezolana:
46
combustible requerido para el normal desarrollo
de los servicios públicos de transporte de la
gasolina y gas domiciliario, no sólo en para el
Estado _____ sino en los demás Estados y las
demás ciudades del país donde sea requerido el
suministro de dichos insumos.
CAPÍTULO VII
DEL PETITORIO
47
Por las razones de hecho y de derecho que se
han expuesto, es criterio de la Defensoría del
Pueblo solicitar a esta Honorable Juzgado, en
vista de la gravedad de los hechos señalados y
luego de haberse comprobado la amenaza de
violación de derechos fundamentales a la
prestación de bienes y servicios de calidad
(servicios domiciliarios), derecho a la salud,
derecho a la educación, derecho a la
alimentación, entre otors, que las acciones
emprendidas por este grupo de empresas y
trabajadores sean declaradas inconstitucionales
y en consecuencia se ordene la reanudación
normal de las actividades de las empresas y la
faena de los trabajadores de dichas empresas,
cumpliendo con ello lo establecido en cada uno
de los contratos, so pena de incurrir en desacato,
de no darse cumplimiento a este mandato.
48
QUE SE ENCUENTRAN RAYADOS. DE IGUAL
FORMA DEBERÁN COMPLEMENTAR EN EL
CAPÍTULO DEL DERECHO AQUELLOS
ASPECTOS QUE VINCULEN LA PRESTACIÓN
DE SERVICIOS PÚBLICOS MENCIONADOS
EN EL PRESENTE ESCRITO CON LA
SITUACIÓN QUE SE PRESENTARE EN SU
ESTADO
49