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CRISIS UNIVERSITARIA: FUTURO INCIERTO

Msc. Lic. José Decker Márquez
Catedrático Titular UMSS
Enero del 2022

La crisis por la que estamos pasando a nivel nacional es

también una crisis que afecta a todas las instituciones
públicas y privadas del país. Sin embargo, en el caso
universitario, esta crisis se está profundizando con mayor
incidencia, por todos los manejos institucionales,
económicos, financieros y administrativos que se han
desarrollado a lo largo de nuestra historia, pero
profundizada desde las reformas que dieron lugar, a la
inclusión del Principio denominado de COGOBIERNO
DOCENTE ESTUDIANTIL incorporado en el Estatuto Orgánico
de la UMSS.

Para entender mejor esta afirmación, debemos retomar con

fuerza y convicción el concepto ideológico profundo que es
la base del funcionamiento de la Universidad Pública que
además está incluida como parte de la base sustancial del
funcionamiento del país, cual es la CONSTITUCION POLITICA
DEL ESTADO y esta se refiere fundamentalmente al
concepto que se aplicó después de todos los
acontecimientos universitarios de Córdoba y que se
reflejaron en casi toda Latinoamérica, y particularmente en
Bolivia. Este Principio es el de la AUTONOMIA
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UNIVERSITARIA que está claramente puntualizado en los

articulados de nuestra Constitución que a la letra manifiesta
en el Art. 92 numeral I: “Las Universidades Públicas son
AUTONOMAS e iguales en jerarquía. La AUTONOMIA
consiste en la libre administración de sus recursos, el
nombramiento de sus autoridades, su personal docente y
administrativo, elaboración y aprobación de sus estatutos,
planes de estudio y presupuestos anuales, y la aceptación
de legados y donaciones, así como la celebración de
contratos, para realizar sus fines y sostener y perfeccionar
sus institutos y facultades…….”

“Las Universidades públicas constituirán, en ejercicio de su

AUTONOMIA, la Universidad Boliviana, que coordinara y
programara sus fines y funciones mediante un organismo
central, de acuerdo con un plan de desarrollo
universitario……”

Artículo 93:” Las universidades públicas, en el marco de sus

estatutos, establecerán los mecanismos de participación
social de carácter consultivo, de coordinación y
asesoramiento.”

“Establecerán mecanismos de rendición de cuentas y

transparencia en el uso de sus recursos, a través de la
presentación de estados financieros a la Asamblea
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Plurinacional Legislativa, a la Contraloría y al órgano

ejecutivo”.

Por lo tanto, si existen intenciones de cambiar este Principio

será completamente conflictivo a nivel nacional y en cada
departamento, porque esto supone, en primer lugar,
organizar un plebiscito nacional donde se defina una
constituyente para analizar la reforma del Art. 92 y
siguientes. Solo un referendo puede modificar los artículos
sobre la autonomía universitaria; luego la Asamblea
aprueba la modificación en la Constitución.

Es necesario aclarar que este principio de AUTONOMIA no

quiere decir que podemos hacer “lo que nos dé la gana”
como así lo piensan algunos sectores del sistema
universitario. Por ejemplo, si ya existe un presupuesto
aprobado es difícil cambiar el mismo, salvo disposiciones
emanadas del Ministerio correspondiente que permita
ampliar o rectificar el Presupuesto Universitario que de
acuerdo lo dispuesto por el Art. 92.I las universidades
públicas tienen la potestad de aprobar su presupuesto. De
acuerdo al art,. 39 numeral 30 del Estatuto Orgánico de la
UMSS. El HCU aprueba el Presupuesto General de la
Universidad.
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Cualquier cambio al margen del Presupuesto aprobado por

el HCU, y sin la debida autorización, es considerado como
MALVERSACION DE FONDOS y este es un delito que puede
tener consecuencias administrativas, civiles y penales.

Autonomía no quiere decir hacer cualquier cosa dentro de

la Universidad, porque eso supondría ir al margen de otras
leyes que rigen el comportamiento de la sociedad. Esto
significa que no podemos destrozar los bienes
universitarios, no podemos hacer mal uso de los predios, de
los muebles, y de todo lo que implica el patrimonio de la
Universidad.

Autonomía no quiere decir que los docentes, estudiantes y

administrativos puedan desarrollar acciones contradictorias
a la seguridad nacional, departamental y universitaria. La
Universidad no es un centro para proteger delincuentes,
asesinos, violadores, acosadores, proteger a personas que
cometen delitos, la Universidad debe dotar todos los
mecanismos necesarios para que las fuerzas del orden
desarrollen sus actividades ligadas a delitos comunes contra
la sociedad. El atropello a la dignidad de las personas dentro
de los predios universitarios no puede ser encubierto por el
sistema universitario, por el contrario, hay que dar
facilidades para que los que comenten daños al erario
universitario, los que transgreden normas estatutarias, los
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que a través de la violencia provocan daños a las personas,

a los bienes, y a la misma sociedad, debieran ser procesadas
y condenadas de acuerdo a las normativas vigentes en
nuestro país.

Autonomía no quiere decir administrar la Universidad sin el

concurso o al margen de las leyes o normativas del manejo
fiscal de los recursos nacionales, departamentales o
municipales. Todas las instituciones que reciben recursos
fiscales tienen la obligación de manejar estos bajo los
principios de la contabilidad fiscal y de toda la normativa
que esto implica, no estamos al margen de la Contraloría,
ninguno de nosotros está al margen del régimen fiscal, por
lo tanto, estas entidades que controlan el manejo
económico y financiero tienen toda la facultad para
fiscalizar, controlar, sancionar, etc., cualquier acto contrario
a las normas.

AUTONOMIA es un concepto muy amplio y significativo en

el marco del cual podemos tener la libertad de
pensamiento, de cátedra, de practicar la docencia y la
enseñanza aprendizaje con criterios ideológicos y
epistemológicos que no impliquen condicionamientos
políticos, pero si libertad de expresión, libertad para
adquirir conciencia ideológica y política, pero bajo ningún
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punto de vista para imponer uno u otro criterio de tinte

partidario.

Por esta misma razón y en el marco de nuestro sistema

universitario, todos y cada uno de nosotros debemos
defender a ultranza este principio fundamental y desterrar
cualquier intento de cambiar la Constitución para eliminar
la autonomía universitaria que a todas luces es un concepto
DEMOCRATICO PROFUNDO.

Lo que no está permitido bajo el principio de la Autonomía

Universitaria es la intromisión de instituciones ajenas en la
definición académica y pedagógica, tampoco esta permitido
que por disposiciones políticas nacionales se desarrollen
acciones contra docentes universitarios y administrativos,
pero además, tampoco está permitido que determinados
grupos hegemónicos políticos al interior de la universidad
impongan normas, ejecuten acciones contra la normativa
nacional, departamental o municipal, ni a imponer
ideologías ni criterios político partidarios.

La Autonomía es el concepto más idóneo y sustancial de la

democracia, es decir, es el principio que exige el debate
político y democrático y la participación libre de cada uno
de los sujetos universitarios.
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Del análisis de la Constitución y de nuestro Estatuto y en el

marco de lo que acabamos de definir hemos cometido una
serie de errores, hemos desarrollado acciones dentro y
fuera de la Universidad, a nombre de la Universidad y bajo
el principio de la Autonomía y casi todas estas acciones han
provocado daños al erario nacional, universitario e inclusive
se han provocado daños a personas y a los bienes de
personas particulares.

Y creo que es necesario hacer un mea culpa de todo lo que

hemos hecho, porque los daños que hemos ocasionado no
los hemos pagado, tampoco los hemos recuperado.

Se han destrozado muebles, ventanas, puertas, equipo

computacional, hemos destrozado construcciones,
documentos, etc. Muchos se han tomado la libertad de
cerrar y abrir la Universidad cuando sus partidos políticos
así lo determinaban. ¿Y todo esto ha ocasionado daños
económicos y financieros para la Universidad y cuánto de
todo esto hemos cobrado o pagado? ¿Cómo se han
contabilizado estos daños? Se han cometido delitos al
interior y exterior de la universidad y la policía no puede
ingresar a estos predios bajo el concepto erróneo de
AUTONOMIA UNIVERSITARIA ejemplos hay muchos, y el
ultimo es lo que ha ocurrido en la UPEA dónde el manejo
político partidario es una norma utilizada por autoridades,
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por docentes y universitarios para provocar, para sustentar

acciones contra determinados grupos hegemónicos
políticos, para organizar actos de sublevación, de tomas de
predios, de solicitar a través de la presión las renuncias de
autoridades, de docentes, inclusive se desarrollan actos
vandálicos para exigir cambios en las normativas de
exámenes de ingreso, de normativas para cambiar las
formas de evaluación, etc. ESTO NO ES AUTONOMIA.

En el marco de este análisis es bueno también analizar

comportamientos particulares de docentes, universitarios y
administrativos. Lastimosamente no hay evidencias y
simplemente recurriendo al refrán “si el rio suena es porque
trae piedras” es el hecho de que es Vox Populi el trafico de
notas tanto en el sistema pre universitario, en el
universitario y en el posgrado. Es también parte de los
comentarios, de que hay acoso sexual, de docentes,
administrativos y estudiantes, etc.

Estamos viviendo momentos en los que se constata que,

autoridades universitarias y facultativas desarrollan
acciones contra sus colegas, contra los estudiantes,
generando presiones y buscando, a toda costa, eliminar a
determinados grupos focales o personas en particular
porque no condicen con su forma de manejar la “educación
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superior” ni con los principios políticos o politiqueros de sus

grupos.

Estamos viendo un total avasallamiento a nuestros

Estatutos y reglamentos y no hay forma de detener este tipo
de acciones y por todo ello estamos siendo vapuleados por
moros y cristianos y lastimosamente, en el caso de
Cochabamba o de San Simón, no hay autoridad de la
administración central, mucho menos universitaria o
facultativa, que digan algo al respecto. Peor todavía, los
docentes ni se pronuncian por miedo a represalias en la
distribución de materias, de horas y de horarios, acción que
es muy normal y elocuente en las Facultades. Hay un
manejo dispendioso de todas las autoridades. Se obstruyen
acciones, programas y proyectos con tal de perjudicar a tal
o cual autoridad y todo esto no es parte de la AUTONOMIA,
es decir, nosotros mismos nos estamos entrampando ante
la opinión nacional con este falso proceder de muchas
autoridades académicas y administrativas, de docentes, de
estudiantes, porque nos han acostumbrado a manejar todo
bajo el concepto de PREBENDA y no hay facultad que se
libre de este procedimiento.

Desgraciadamente, y hay que reiterarlo, que gran parte de

todos estos acontecimientos luctuosos dentro y fuera de la
Universidad se han precipitado por el mal uso de la
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aplicación del CO GOBIERNO y de la poca predisposición a

dialogar y participar en la definición de políticas
universitarias. La mayor parte de las autoridades
universitarias tratan de prebendar a grupos estudiantiles, a
docentes para mantenerse en el poder, para seguir usando
discrecionalmente los recursos universitarios, etc. A Todo
este contingente de corruptos se los hubiera procesado por
todos los delitos cometidos si es que no hubiésemos
anulado el Reglamento de Procesos y hubiéramos
mantenido los Tribunales de Justicia Universitaria instancias
que de hecho han sido eliminadas para evitar precisamente
los juicios a muchos corruptos que todavía se encuentran en
la Universidad.

Sin embargo, de todo esto no hay razón alguna para

rechazar y repudiar cualquier acción venga de donde venga
que implique cambiar el principio de la AUTONOMIA
UNIVERSITARIA. Debemos luchar denodadamente contra
este tipo de acciones que son estrictamente políticas que se
las esta esgrimiendo contra el Sistema de la Universidad
Boliviana porque saben muy bien que este sistema, pese a
los problemas y deficiencias que tenemos, sigue siendo el
bastión de la LIBERTAD, DE LA DEMOCRACIA, DEL DEBATE Y
DE LA CONFRONTACION POLITICA.
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Por todo esto que se esta viviendo en el sistema

universitario es necesario retomar con la debida
congruencia social, económica y política este concepto de
AUTONOMIA UNIVERSITARIA y bajo este principio
reorganizar nuestras propias normativas internas bajo los
conceptos mas puros de la FORMACION ACADEMICA
(DOCENCIA), LA INVESTIGACION Y LA INTERACCION SOCIAL
(en la que se incluye la Extensión Universitaria).

Todos estos aspectos enumerados muy genéricamente

sobre el principio de la autonomía universitaria, nos lleva
también a mostrar nuestras preocupaciones a la forma muy
irracional del manejo de los recursos económicos y
financieros de la UMSS, es decir, cuando no existe la debida
información sobre el manejo de los recursos, los
comentarios abundan sobre malos manejos, sobre
contrataciones ilegales, sobre gastos dispendiosos, sobre el
manejo administrativo y académico basado en prebendas
políticas, a la contratación irracional de personas ligadas por
parentesco con autoridades, tanto académicas como
administrativas, y muchos otros aspectos irracionales del
funcionamiento administrativo universitario.

Esto que se dice no significa que efectivamente es así, pero

lastimosamente, las mismas autoridades de los últimos 15
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años, no han tenido la voluntad de mostrar a la comunidad

universitaria, mucho menos a las autoridades nacionales
que manejan el control de los recursos fiscales de informar
detalladamente y de acuerdo al presupuesto universitario,
cuales han sido las correspondientes dinámicas del
movimiento económico y financiero en todas las partidas e
ítems del presupuesto universitario de estos años
mencionados.

Gran parte de nuestras puntualizaciones emergen de

informaciones extraoficiales de personal administrativo, de
personal académico y de los comentarios en los pasillos que
se van generalizando en todas las facultades y carreras de
nuestra Universidad.

Sin embargo, tampoco hay información oficial sobre cuales

han sido las tendencias de los ingresos universitarios en los
últimos 15 años, cuales han sido las tendencias de los gastos
partida por partida o ítem por ítem de nuestro presupuesto.
No hay un informe detallado sobre la contratación de
personal administrativo y académico y un análisis histórico
de estas contrataciones, que de acuerdo a los pocos datos
que tenemos son gran parte de ellos, contrataciones
prebendales, políticas e innecesarias, y ante todo una gama
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de ejemplos de nepotismo en docentes, y en trabajadores

administrativos que incluso se ven ejemplos de parientes
muy cercanos como padre e hijo trabajando en el mismo
departamento u oficina como si nada estuviera pasando con
una total falta de responsabilidad ni vergüenza de ninguna
clase. Todo esto sobre la base de comentarios que surgen
del personal administrativo, de colegas docentes, incluso de
estudiantes, pero las mismas autoridades sin darse cuenta
avalan estas acciones.

En otras palabras, la comunidad universitaria esta

totalmente al margen del manejo correcto y responsable de
los recursos universitarios y cada día que pasa se habla de
un déficit significativo que se va acumulando
peligrosamente en todo el sistema universitario nacional.

Y no hay movimiento contestatario y fiscalizador alguno de

parte de administrativos, docentes, mucho menos de
estudiantes que digan algo al respecto.

La costumbre es aprobar en grande y sin debate un

presupuesto anual sin ningún análisis histórico detallado de
las ejecuciones presupuestarias. Con el agravante de que,
según el art. 44 del Estatuto Orgánico, solo el Comité
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Administrativo y Financiero tiene la potestad de presentar

la Planificación Financiera de la UMSS y de elaborar y
presentar el presupuesto ante el HCU, lastimosamente este
Comité Administrativo que debe ser presidido por el Decano
de la Facultad de Ciencias Económicas no cumple para nada
con esa misión encargada por nuestro Estatuto, por el
contrario el proyecto de presupuesto es analizado
exclusivamente entre las autoridades del Rectorado y de la
Dirección Administrativa y Financiera y es en esa instancia
que se define absolutamente todo dejando al margen al
Comité Administrativo del Honorable Consejo Universitario
y quien dice algo al respecto, NADIE.

Nadie conoce en detalle como se gastan los recursos, cuales

son las partidas o los ítems que mas gastos generan al
sistema, nadie ha hecho análisis si se puede o no
racionalizar algunos gastos. Pero para colmo tampoco nadie
ha hecho un estudio sobre como generar ingresos propios
para la Universidad. Aunque al principio de esta última
gestión hice unas sugerencias muy genéricas por escrito al
Rector y al Vicerrector sobre como generar nuevos ingresos
para San Simón, lastimosamente no se han dignado a enviar
por lo menos una nota indicando que han recibido dicho
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mensaje. En otras palabras, han ignorado totalmente las

sugerencias que se hicieron.

Por todo esto, el sistema se esta agotando, estamos

presionados por el exagerado “populismo académico”
como lo denomino nuestro amigo y colega Rolando López,
al presente “marginado” del sistema por una serie de
patrañas inventadas por Asesoría Legal y otras instancias
universitarias y este profesional con la experiencia que tiene
público un libro “ANTIMEMORIAS DE CONFLICTOS SIN FIN”
donde nos da detalles de toda la porquería legal a la que se
tuvo que someter por profesionales corruptos y
prebendados y donde efectivamente se habla del
“populismo académico” porque definitivamente se ha
perdido el carácter académico, cientifico e investigativo de
la universidad y para colmo se ha tergiversado
sustancialmente el concepto del co-gobierno que se lo usa
única y exclusivamente para prebendar grupos
hegemónicos de poder y no hay forma de cambiar esta
situación porque nadie quiere entrometerse en temas que
posteriormente pueden implicar en retiros obligados,
jubilaciones precipitadas, presiones políticas de todo tipo y
al final una Universidad totalmente manoseada por la
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irresponsabilidad de los actores internos universitarios

indirectamente manejados por grupos políticos externos.

Para colmo, tenemos una Facultad de Ciencias Jurídicas

donde supuestamente se estudia la forma de administrar
los derechos y obligaciones de la sociedad en el marco de
las normativas legales e institucionales nacionales,
departamentales y locales, lastimosamente es donde más
se violenta el Estatuto y se incurren en delitos de toda clase
y donde más prebendas se otorgan. Esa Facultad que
debiera ser la vanguardia del respeto a la normativa
nacional y universitaria, la lucha contra la delincuencia,
contra los malos manejos, contra la corrupción, etc., no
cumple en absoluto esa función que en el pasado le dio
jerarquía a todo el movimiento universitario nacional.

¿Qué hacer frente a este panorama tan irracional atribuido

a la dejadez de docentes, de administrativos y de
autoridades irresponsables? Es un reto difícil de responder
en la práctica, pero que se lo puede mencionar a través de
estos documentos que serán leídos por un grupo muy
selecto de personas e ignorado por los demás.
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La opinión personal del que escribe estas líneas, es que

debe haber un informe detallado del manejo
presupuestario, tanto de ingresos como de gastos de los
últimos 15 años, para saber cual ha sido la dinámica positiva
o negativa del accionar en ese periodo y para identificar, de
alguna manera, a los responsables de las cosas buenas que
se puedan encontrar y además identificar los aspectos
negativos y a los responsables que a futuro deberán ser
encausados por los mecanismos legales pertinentes.
Debe haber un examen conciencial de las ex y actuales
autoridades sobre los aspectos desarrollados en sus
correspondientes gestiones, tanto para mejorar nuestros
manejos administrativos, académicos e investigativos como
para sancionar delitos, y malos manejos de los muchos que
han debido existir.
De dicho análisis surgirán las medidas correctivas para los
años venideros y se establecerán normas de conducta más
racionales, pero también deberán surgir sanciones
administrativas, civiles y penales para todos los que
violentaron la normativa universitaria.

Todo este trabajo de análisis económico y financiero se lo

debe hacer con profesionales economistas, contadores
públicos especializados en auditorias institucionales
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seleccionados por la Federación de Docentes los que deben

trabajar en estrecha coordinación con los profesionales
administrativos que manejan las arcas universitarias. Este
equipo debe empezar a trabajar casi inmediatamente con
toda la información administrativa y contable de la
Universidad.

Sin embargo, hay un análisis que nadie hace en razón a que

todo el mundo despotrica contra las autoridades,
despotrica por todos los manejos irracionales, por las
prebendas y el manejo dispendioso de nuestros recursos y
nadie dice nada contra una instancia denominada
AUDITORIA INTERNA que de acuerdo a mis conocimientos
sobre el manejo fiscal de los recursos, toda auditoria interna
es una instancia de apoyo a las autoridades que controla las
acciones de dichas autoridades para que se manejen en el
marco de las disposiciones legales pertinentes y que se
manejen en el marco de la teoría fiscal y de la política fiscal
nacional. Ningún profesional del sistema publico puede
hacer uso irracional de los recursos fiscales al margen de lo
presupuestado o al margen de la normativa institucional
vigente, sin que sea observada o auditada por Auditoria
Interna de la institución.
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De un tiempo a esta parte, no se ha oído nada en los últimos

15 años sobre informes de auditoría interna sobre la gestión
de las distintas autoridades en los últimos 15 años, salvo
algunos informes desarrollados como auditorias de planillas
de la gestión 2018 y 2019 si mal no recuerdo donde se
determinaron una serie de anormalidades en las
contrataciones de personal académico y administrativo, así
como de estudiantes que sin tener la experiencia suficiente
y simplemente por prebendas políticas han logrado incluirse
en las planillas correspondientes de la UMSS. Este informe
ha sido presentado por un grupo de profesionales de
auditoría interna, pero que lastimosamente ha sido
prohibida su publicación.

Por todo esto sugiero que los que fueron responsables

(Auditores Internos) de las distintas gestiones como la
gestión del Lic. Argandoña, de Lucio Gonzales; de Waldo
Jiménez; de Mercedes Albornoz, la gestión de Negro Ríos y
de la gestión actual, todos ellos debieran haber
desarrollado una acción de apoyo administrativo y
financiero a los Rectores y Directores Administrativos en
todo su accionar; y eso no se ha desarrollado en la magnitud
que implica el cargo de Auditor Interno, porque lo que
hemos visto a lo largo de estos 15 años han sido plagados
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de una serie de actos al margen de la ley fiscal, como

contrataciones administrativas de parientes muy cercanos,
como hijos, esposas, hermanos, etc. Que al presente se los
puede visualizar objetivamente en toda la Universidad y
todos y cada uno de nosotros tenemos ejemplos para
sustentar esta afirmación.

Se han producido gastos, al margen de lo presupuestado, se

han tergiversado las planillas de administrativos y docentes
a tal punto que se ha distorsionado totalmente la escala
salarial, dado que hay trabajadores administrativos y
docentes que ganan mas que el rector y el vicerrector y los
auditores internos no dicen nada al respecto y si lo saben,
están callados en todo sentido, por miedo o por ser parte
de las prebendas políticas, o simplemente, porque fueron y
son designados por el rector de turno.

El uso de los recursos administrativos y financieros es

totalmente dispendioso, se exigen normas para detalles
insignificantes y un total descuido con el gasto en acciones
significativas y todo esto es vox populi y los auditores
internos no dicen absolutamente nada y si esto es
efectivamente cierto, las acciones administrativas, civiles y
penales no son solamente para las autoridades como el
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Rector, Vicerrector, Director Administrativo, Decanos y

todos los que de alguna manera manejan recursos
financieros, sino ante todo para aquellos que fueron
nominados para controlar que el manejo financiero
universitario se lo realice en el marco de las normativas
vigentes, por lo que dichos auditores internos, son tan igual
o de mayor responsabilidad que las propias autoridades,
porque son estas las que debieran oportunamente llamar la
atención por cualquier acto irregular.

Cada uno de nosotros en distintas épocas hemos sido

autoridades, si bien no manejando recursos financieros,
pero bajo nuestra responsabilidad había equipos de todo
tipo y en el caso mío, me hicieron responsable de la perdida
de una silla que en términos de costo no alcazaba ni a 100
bolivianos y para colmo fue una silla ni siquiera comprada
con recursos universitarios, sino que fue una que la dejó por
error, por negligencia un profesional y que a la larga se la
incluyo en el inventario. ¿Si por un error de esta naturaleza
la auditoría interna te sigue los pasos hasta que repongas
este activo, porque no hacen lo mismo cuando los actos
implican gastos de miles y millones de bolivianos y de
perjuicios muy serios para el futuro universitario?
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Por lo anterior sugiero que cualquier proceso que se inicie

contra alguna autoridad como el Rector, por ejemplo, los
directos responsables también son el Director
Administrativo y el Auditor Interno sin dejar de mencionar
el accionar del equipo de Asesores Legales que han
cometido una serie de acciones al margen de todo principio
ético y moral.

Y esta forma de proceder irracional de todas las autoridades

en los últimos 15 años han generado gastos enormes en
nuestro presupuesto y nadie ha dicho nada al respecto y
creo además por este manejo dispendioso prebendal y
político partidario no se hará nada al respecto y es probable
que por este mi atrevimiento yo sea juzgado por delitos que
se inventaran los abogados de Asesoría Legal que fueron
adiestrados para perseguir judicialmente a miembros de la
comunidad universitaria. De hecho, se ha contratado y
designado en esta gestión a una nueva Asesora Legal de la
UMSS, sin ser docente, sin experiencia ni conocimiento de
la “cosa universitaria”, sin tomar en cuenta las disposiciones
legales en vigencia en la universidad, cometiendo un delito
de Nombramientos Ilegales (Art. 157 del Código Penal).
Pues, según el art. 77 del Estatuto, el Asesor Legal debe ser
designado por el HCU previo Concurso de Méritos.
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Todas estas preocupaciones que las hago objetivas a la

opinión universitaria y a la opinión nacional no se las hace
por el simple deseo de fastidiar a determinadas
agrupaciones políticas en vigencia, por el contrario, el único
objetivo es mostrar a la opinión que hay gente que busca el
bienestar institucional de una prestigiosa institución
académica ponderada nacional e internacionalmente, pero
también espera que en algún momento se retome la
academia y la ciencia como parte sustancial de lo que debe
ser una Universidad que ha ganado prestigio por su
constante colaboración en la formación profesional de
mucha gente y por el aporte significativo al quehacer
económico social y político del país.