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Tipos de organización
DIVISIÓN EUMICOTA
Clase Zigomicetes
Los zigomicetos son un grupo de unas 900 especies saprófitas, viven
sobre materia orgánica en descomposición y constituyen una parte de lo
que popularmente se conocen como mohos; existen también
representantes parásitos y simbióticos. Se caracterizan por presentar
paredes celulares de quitina y micelio sifonado, es decir, con hifas
plurinucleadas y carentes de septos. Las únicas células tabicadas son las
encargadas de la reproducción, que pueden convertirse directamente en
esporas o fusionarse entre sí para realizar un proceso reproductivo de
origen sexual mediante el que se funden dos células plurinucleadas
procedentes de dos micelios distintos. Este proceso, característico del
grupo se denomina gametangiogamia. Las estructuras somáticas
sifonadas se consideran un carácter primitivo frente a los micelios
tabicados.
Los mucorales son el grupo mas frecuente y una de cuyas especies más
comúnes es Rhizopus stolonifer, el moho negro del pan, se ha empleado
comercialmente para la fabricación de ácido fumárico y durante un
proceso intermedio, en la fabricación de la cortisona. R. oryzae, que vive
sobre los granos de arroz, es capaz de producir grandes cantidades de
alcohol. Otras especies de Rhizopus son capaces de formar ácido láctico
más fácil de purificar que el que se produce a partir de bacterias.
Clase Ascomicetes.
La clase de los Ascomicetes agrupa unas 30.000 especies conocidas
aunque se supone que quedan muchas más por describir. Viven en una
gran variedad de hábitats, que abarcan desde los suelos, excrementos,
jugos vegetales, hasta los ambientes húmedos en aguas marinas y
aguas dulces. Comportándose como saprófitos o como patógenos y
mutualistas con plantas y animales.
REPRODUCCIÓN ASEXUAL
REPRODUCCIÓN SEXUAL
ORDEN EUROTIALES
ORDEN LECANORALES
Clase Basidiomicetes.
Biología
La principal diferencia entre el ciclo biológico de los ascomicetos y
basidiomicetes estriba en la ausencia de estos últimos de todo tipo de
estructuras sexuales - gametangios -, de manera que a diferencia de los
ascomicetos que han de efectuar una fecundación -plasmogamia- por
cada uno de sus cuerpos fructíferos, en los basidiomicetos una sola
plasmogamia, producida entre dos células somáticas al principio de su
ciclo vital, asegura la producción de basidiocarpos y por tanto de esporas
de origen sexual durante toda la existencia del hongo.
DIRECCIONES DE INTERNET
MENÚ FILO ZYGOMYCOTA
Inicio
Introducción: ¿Qué ha sido de los extraños
Agradecimientos y
"tricomicetos"?.
colaboraciones
La IX edición del Dictionary (2001) distinguía dos clases dentro
Historia de la Micología de este filo. Por un lado estaba la cl. Trichomycetes, con hongos
asociados a la cutícula o al tubo digestivo de artrópodos, cuyo
Hongos beneficiosos y micelio no está inmerso en el hospedante. Por otro lado teníamos a
perjudiciales la más conocida y ubicua cl. Zygomycetes, que incluye a hongos
mayoritariamente saprofitos, aunque los hay simbiontes y parásitos,
Biología de los hongos pero en este caso el micelio siempre está inmerso en el hospedante.
Principales grupos
Volviendo a la cl. Trichomycetes, se la consideraba un grupo
fúngicos relacionado con los zigomicetos, pero ecológica y morfológicamente
bien diferenciado. No obstante, se intuía que sus distintos órdenes
Rincón del setero quizá no estuvieran estrechamente emparentados. Eso sí, todas las
especies viven obligatoriamente asociadas a artrópodos. Se discute
Enlaces interesantes el nivel de esta asociación, aunque no parece ser de tipo parasítico
dañino. Muchas viven en el tubo digestivo, aunque algunas lo hacen
en el exterior del cuerpo. Abundan en artrópodos acuáticos (o en sus
larvas). Se adhieren al intestino mediante una célula especial
(holdfast, en inglés), pero no penetran las paredes. Aparentemente
se alimentan del contenido intestinal y, de algún modo, favorecen la
supervivencia del animal (aunque algunos tricomicetos que se
desarrollan en el exterior pueden interferir con la muda).
Filo ZYGOMYCOTA.
Son hongos ubicuos, extremadamente frecuentes, que se pueden
aislar casi de cualquier sitio. Muchos provocan podredumbres
indeseables en los alimentos, sobre todo si éstos contienen agua,
pero también los hay parásitos (e incluso depredadores) de muy
diversos organismos, desde protozoos hasta mamíferos. Por otro
lado, algunos grupos son micorrizógenos. Como se ve, hay taxones
muy especializados.
Subfilo Mucoromycotina.
Subfilo Kickxellomycotina.
Subfilo Entomophthomycotina.
Subfilo Zoopagomycotina.
Simbiontes.
Son todos aquellos capaces de crear asociaciones simbiontes con las
plantas que comparten su hábitat creando lo que se conoce como
micorrizas (término empleado por primera vez por el botánico alemán
Frank en 1885), una asociación a nivel radicular beneficiosa para ambos
seres, ya que, mientras el hongo ayuda a la planta en la absorción de
agua y nutrientes tales como el fósforo y el nitrógeno, éste recibe a
cambio carbohidratos generados en la fotosíntesis. Se establece que
entre el 85% y el 95% de las plantas vasculares forman micorrizas, que
pueden ser de tipo ectomicorrícico (entre un 3% y un 5% del total) o
endomicorrícico (el resto). En el primer caso, las hifas de los hongos
recubren las paredes de las células de la raíz de los vegetales sin
penetrar en su interior, mientras que en las endomicorrizas, las hifas
invaden el interior de dichas células.
La importancia de las ectomicorrizas en ambientes forestales es enorme,
pues establecen asociaciones de este tipo árboles y arbustos de familias
tan importantes como Pinaceae, Fagaceae, Betulaceae y Salicaceae,
entre otras. Por otra parte, los hongos formadores de ectomicorrizas
forman parte de géneros tan comunes en nuestros montes como Amanita
sp., Boletus sp., Lactarius sp., Hebeloma sp., Tuber sp., Terfezia sp., etc.
Además, las fructificaciones de algunos de estos hongos tienen gran
interés económico por ser muy apreciados para el consumo humano
(como en el caso de los boletos, níscalos, trufas y patatas de tierra).
Saprófitos.
Estos hongos se nutren de sustancias producidas por la descomposición
de la materia orgánica muerta (tanto vegetal como animal), por lo que,
junto con las bacterias, están involucrados en el reciclaje de nuestros
montes. Para ello, utilizan enzimas capaces de degradar las fuentes de
carbono complejas como la celulosa, la lignina o el almidón y
transformarlas en moléculas sencillas y nutritivas como azúcares y
aminoácidos. Mientras algunos hongos aprovechan indistintamente
materia orgánica de origen diverso, otros prefieren sustratos más
específicos. Así encontramos, entre otros: