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AUTORES

ESTELA RIVAS VÁZQUEZ


BELÉN BUENO SIERRA
MARÍA JUSTINA SAN MIGUEL SILOT
CARLOS BARTOLOMÉ BÁRGUEZ
CARLOS DE CEPEDA Y GRILLO
BERTA LIDIA ALONSO VANDENEDES
ANIA AURORA ORTEGA BARRERO
DESIDERIA RAMOS PUERTO
REGINO SÁNCHEZ LANDRIAN

REDACTOR GENERAL
CARLOS BARTOLOMÉ BÁRGUEZ

COLABORADORES
LOURDES JIMÉNEZ GIL
LUIS RAÚL GARCÍA PÉREZ-ROLO
WILFREDO SÁNCHEZ NÚÑEZ
MERCEDES CÓRDOVA WILLIAMS

2004

2
AGRADECIMIENTOS

Al Hospital General Clínico-Quirúrgico “Hermanos Ameijeiras”, por contribuir en


el trabajo de fotografía.

Al Palacio Central de Computación y la Dirección de Inversiones y Desarrollo de


la Empresa de Telecomunicaciones de Cuba, S. A (ETECSA) por su
colaboración en la mecanografía.

A la Compañera María del Carmen Macías Pluma, del Archivo del Comité
Provincial del Partido Comunista de Cuba en Ciudad de La Habana, por su
valiosa ayuda.

A la Compañera Caridad Durán Parreño, Funcionaria Ideológica del Comité


Municipal del Partido en Centro Habana, por su constante preocupación y
ayuda.

A la Dirección Municipal de Cultura de Centro Habana y a su directora, Idalia


González Súarez por su apoyo en la mecanografía y edición.

Al Gobierno municipal de Centro Habana y sus dependencias, por el aporte


dado en datos de interés.

A la Oficina de Asuntos Históricos del Comité Provincial del Partido, por su


apoyo sin límites para lograr este Empeño.

3
A la memoria de Desi, que nos acompañó en los primeros
momentos de este trabajo.

Los autores

4
ÍNDICE
Introducción 7
I. Características generales de Centro Habana 9
Origen del nombre del municipio 9
Extensión territorial, situación geográfica y límites 10
Población 10
Consejos populares 12
Geografía física del municipio: relieve, hidrografía, clima, geología y suelos 13
Flora y fauna 14
Actividades económicas 14
Fuentes 16
II. Evolución histórica del territorio del actual municipio de Centro Habana
durante la colonia 17
Los antiguos parajes y estancias (XVI-XVII). El torreón de San Lázaro 17
El segundo asentamiento de la ciudad y Centro Habana 17
Los ataques de piratas y el torreón de San Lázaro 18
El terreno, estancias y producción agraria 19
Los viejos caminos 22
Urbanismo y población. Los barrios centrohabaneros (XVIII-XIX) 22
El Palacio de Aldama y calles célebres 40
Algunas calles del territorio (siglos XVIII - XIX) 43
La población humilde, sectores y organizaciones fraternales 45
La masonería 52
El llamado “Barrio Chino” y la comunidad Árabe 53
Industrias tabaqueras, imprentas y perfumerías 56
El comercio. Mercados, tiendas, servicios, el juego y la prostitución 58
Instituciones asistenciales y de salud pública 61
La cultura y la educación. Papel de la Sociedad Económica Amigos del País 64
Rebeldías, corrientes políticas y luchas por la independencia nacional 67
III. La república neocolonial 75
El centro comercial de La Habana 75
Capitales, empresas e industrias 98
Manifestaciones de la cultura. Instituciones y personalidades 107
Las comunidades chinas, árabes y los centros regionales españoles.
Sincretismo cultural 129
La salud, la educación y los deportes 132
El proceso de unidad nacional. Las luchas obreras, populares patrióticas y
antiimperialistas 141
Notas y citas 178
La lucha insurreccional de 1952-1959 183
Notas y citas 250
IV. Revolución en el poder 253
El 1er congreso de la CTC revolucionaria 262
5
Partido Comunista de Cuba 263
Defensa 270
Los Comités de Defensa de la Revolución 276
Organización de Pioneros José Martí 277
Manifestaciones religiosas 279
Cultura 280
Desarrollo general del territorio 282
Vivienda 282
Comunicaciones 283
Comercio y gastronomía 285
Intentos desestabilizadores del enemigo 287
Festival mundial de la juventud y los estudiantes 289
Batalla de ideas 292
El Barrio chino, su reanimación a partir de la década del 80 295
Bibliografía y fuentes 298
Anexos 299

6
INTRODUCCIÓN

El presente trabajo tiene como objetivo dar una visión sintetizada del devenir
histórico de los territorios que conformaron a posteriori el municipio de Centro
Habana, creado en 1976 de acuerdo a la Ley 1304, precedida esta estructura
por la Resolución sobre la división político- administrativa del país que adoptó el
Primer Congreso del Partido Comunista de Cuba celebrado del 17 al 22 de
diciembre de 1975. Como antecedente inmediato de este municipio se
encuentra la existencia de la región de Centro Habana entre 1963 y 1976 como
desprendimiento del antiguo municipio de La Habana.

Centro Habana surgía así como un nuevo municipio de los quince que
integraron la nueva provincia de Ciudad de La Habana. Este municipio
capitalino, hunde sus raíces en los primeros años de la colonización española,
en las vicisitudes de la villa de San Cristóbal de La Habana, fundada y
trasladada varias veces de sitio entre 1514 y 1519. No en vano es el Torreón de
San Lázaro, construcción antigua que data de 1664, el símbolo del municipio.

Ámbito extramural bañado por la Zanja Real, cuyas inmediaciones vieron nacer
su primer caserío: Guadalupe, en los albores del siglo XVIII, embrión del actual
barrio de Los sitios; su devenir expresa el proceso de sincretismo étnico
principalmente afrohispánico, que jalona la génesis de la nación Cubana y en su
territorio se reflejaron todas las modalidades sucesivas del desarrollo
económico- social Cubano y del movimiento político y cultural de la nación.

A lo largo del siglo XIX, al ser La Habana el centro de las fuerzas sociales y
ocurrir la crisis económica de 1856- 1866, se produce una emigración fuerte del
territorio hacia los Estados Unidos de América, fundamentalmente a Key West y
Tampa. Entre estos emigrados están Carlos Baliño y Gerardo Castellanos.

Fue el cementerio de Espada el vórtice de los sucesos de los estudiantes de


medicina mártires del colonialismo español en 1871.

En el actual Centro Habana vivieron, conspiraron, lucharon y murieron figuras


cimeras de los procesos político-sociales Cubanos de los siglos XIX y XX, entre
ellos: José Antonio Aponte, Ignacio Agramonte, José Martí, Juan Gualberto
Gómez, Antonio Maceo, Máximo Gómez, Enrique Loynaz del Castillo, Carlos
Baliño, Julio Antonio Mella y Fidel Castro. De igual manera, figuras destacadas
de la cultura desarrollaron actividades en ese territorio como Fernando Ortiz,
José Lezama Lima, Eduardo Abela, Fidelio Ponce, Alejandro García Caturla,
Gonzalo Roig y Alejo Carpentier.

7
Dentro de sus límites se asentaron las primeras organizaciones marxistas y
antimperialistas de Cuba y los centros rectores del movimiento obrero socialista
y nacional- liberador del siglo que recién terminó: la Universidad Popular José
Martí, la Liga Antimperialista, el Partido Socialista Popular, la Confederación
Nacional Obrera de Cuba y la Confederación (después “Central”) de
Trabajadores de Cuba; en esta parte de la ciudad se libraron y prepararon
acciones que confluyeron en la histórica victoria del primero de enero de 1959;
Fidel Castro salió delegado del Partido Ortodoxo por el Barrio de Cayo Hueso,
para los asaltos a los cuarteles Moncada y Carlos Manuel de Céspedes salieron
seis grupos de combatientes de esta localidad, la céntrica esquina de Infanta y
San Lázaro fue testigo de grandes choques entre el estudiantado revolucionario
y la policía del régimen de turno; Este territorio se convierte después en
escenario privilegiado del despliegue transformador de la Revolución Socialista
y de las luchas mantenidas en defensa de la patria y las conquistas de la
Revolución.

8
I
CARACTERÍSTICAS GENERALES DE
CENTRO HABANA

ORIGEN DEL NOMBRE DEL MUNICIPIO


Antes de 1962 ningún municipio, barrio, zona o localidad se conocía con el
nombre de Centro Habana. El territorio que hoy corresponde a este municipio
formaba parte del llamado municipio de La Habana que abarcaba además, el
área íntegra de lo que hoy son los municipios de La Habana Vieja, Cerro, Plaza
de la Revolución y 10 de Octubre, así como parte de Arroyo Naranjo, una parte
de Boyeros y otra de Regla.

En 1962 se presentó un proyecto de nueva división político-administrativa del


país en el cual se proponía la desintegración del municipio de La Habana, su
división en varias regiones o regionales y su integración a la llamada Habana
Metropolitana. Así apareció por vez primera la denominación “Centro Habana”
para designar a un espacio territorial.

Esa división se aplicó con carácter experimental en 1963 y se oficializó por


acuerdo del Consejo de Ministros al año siguiente.

La región o el regional de Centro Habana era mucho más grande que el actual
municipio y se componía de varios seccionales. En 1976, al adoptar la república
una nueva división político- administrativa, la región de Centro Habana se
propone dividir en dos municipios que se denominarían Centro Habana Norte y
Centro Habana Vieja, además de ceder el barrio de Atarés al nuevo municipio
del Cerro. Finalmente, la Ley 1304 que estableció los nombres definitivos de los
municipios los denominaría Centro Habana y La Habana Vieja,
respectivamente.

El nombre del regional creado en 1963 se debe a que ese territorio forma parte
del centro tradicional de la capital Cubana y a la vez es su principal centro
comercial y de servicios lo cual es válido para el nuevo municipio surgido en
1976.

9
EXTENSIÓN TERRITORIAL, SITUACIÓN GEOGRÁFICA Y
LÍMITES
Centro Habana tiene una extensión territorial de 3,42 kilómetros cuadrados lo
cual representa sólo el 0,47 % del territorio de toda la provincia de Ciudad de La
Habana, siendo el más pequeño de los quince municipios que integran la
provincia y a la vez el más densamente poblado. Es un territorio totalmente
urbanizado, contando con 514 manzanas y muy pocos espacios libres.

Se ubica en la parte norte y central de la provincia, al oeste de la Bahía de La


Habana. Tiene como límite norte, el litoral del Estrecho de La Florida; al sur, el
municipio del Cerro; al este, el municipio de La Habana Vieja y al oeste, el de
Plaza de la Revolución.

Los derroteros de sus límites son, de acuerdo al Artículo 2 de la Ley 18, “Ley de
los límites territoriales de las provincias y municipios”, de junio de 1978, los
siguientes:

“A partir de la intersección de la Avenida del Malecón, Castillo de La


Punta, (C-LHV – CH), toma por el borde oeste del Paseo José Martí, con
rumbo sur, hasta la calle San José (LHV – CH – 1), la que continúa, por
su borde norte y rumbo oeste, hasta la calle Industria (LHV- CH –2), la
que toma por su borde oeste y rumbo sur hasta la Calzada de Monte (LHV
- CH –3); continúa por esta, con rumbo suroeste y borde noroeste, hasta
la calle Manglar (LHV – CE – CH); continúa por esta, por su borde sur y
rumbo oeste, hasta la intersección con la Avenida Salvador Allende (CH –
CH – PZ); continúa por la calle Infanta, con rumbo noroeste hasta la
Avenida del Malecón (C- CH – PZ).”

POBLACIÓN

Según el cierre estadístico del 31 de diciembre del 2001(no se cuenta aún con
los datos del censo de septiembre del 2002), la población del municipio es de
150 877 habitantes, lo cual representa una población relativa o densidad
demográfica de 44 116 habitantes por kilómetro cuadrado que por sexos se
comporta de la siguiente forma:

• Población femenina: 23 604 hembras por Km2.


• Población masculina: 20 512 varones por Km2.

10
Como puede observarse este municipio es uno de los densamente poblados del
país. La población femenina predomina sobre la masculina en un 54 % y en
cuanto a los grupos etáreos, la población adulta resulta mayoritaria siendo
Centro Habana uno de los municipios más envejecidos del país, contando con
33 709 adultos mayores, lo que representa el 22 % de la población.
Al crearse el municipio en 1976 contaba con una población de 138 778
habitantes por lo que ha crecido en 12 099 personas en 25 años, en una
proporción de 483,96 personas anuales como promedio.

Centro Habana se caracteriza


por su diversidad étnica, su
elevada población flotante y por
la identidad de sus barrios
tradicionales.

11
A continuación, la siguiente tabla, ilustra el comportamiento demográfico por
consejos populares, teniendo en cuenta el sexo y los grupos etáreos.

EDAD CAYO HUESO COLÓN


Hembras Varones Total Hembras Varones Total
Menos de 2 422 367 789 325 282 607
De 2 a 6 970 843 1 814 774 672 1 446
7 a 13 1 476 1 283 2 759 1 182 1 028 2 210
14 a 64 12 514 10 875 23 389 9 474 8 233 17 706
65 y más 3 028 2 632 5 660 1 814 1 576 3 391
Total 18 411 15 999 34 410 13 568 11 791 25 359

EDAD DRAGONES LOS SITIOS


Hembras Varones Total Hembras Varones Total
Menos de 2 402 349 751 400 347 747
De 2 a 6 924 803 1 727 953 828 1 781
7 a 13 1 422 1 236 2 659 1 411 1 226 2 637
14 a 64 11 083 9 631 20 714 11 664 10 136 21 800
65 y más 2 387 2 074 4 461 2 294 1 994 4 288
Total 16 218 14 094 30 312 16 721 14 531 31 252

EDAD PUEBLO NUEVO TOTAL MUNICIPIO


Hembras Varones Total Hembras Varones Total
Menos de 2 390 339 728 1 938 1 684 3 622
De 2 a 6 855 743 1 597 4 476 3 889 8 365
7 a 13 1 317 1 144 2 461 6 808 5 917 12 725
14 a 64 10 629 9 237 19 865 55 363 48 111 103 474
65 y más 2 617 2 274 4 892 12 141 10 550 22 691
Total 15 807 13 737 29 544 80 726 70 151 150 877

Por ser el mayor centro comercial y de servicios de la capital, Centro Habana es


uno de los municipios más visitados diariamente por personas procedentes de
los restantes municipios capitalinos y de otras provincias así como por turistas
extranjeros. Su población flotante diaria se estima que oscila entre las 180 000 y
las 200 000 personas, es decir, superior a la población que habita
permanentemente en el municipio.

CONSEJOS POPULARES
El municipio cuenta con 5 consejos populares y 99 circunscripciones. Los
consejos no coinciden en su totalidad con los barrios tradicionales de la antigua
Habana pues cada uno agrupa a dos o varios de ellos.

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No. Consejos Barrios Extensión territorial Población Circunscrip-
Populares (kilómetro cuadrado) ciones
1 Cayo Hueso Cayo Hueso, San 0,81 34 410 22
Lázaro
2 Pueblo Nuevo Pueblo Nuevo, 0,90 29 544 20
Chávez, Parte de
Peñalver.
3 Los Sitios Los Sitios, San 0,68 31 252 19
Nicolás, Parte de
Peñalver.
4 Dragones Dragones, 0,52 30 312 22
San Leopoldo,
Monserrate.
5 Colón La Punta, Tacón 0,51 25 359 16
(compartidos con
La Habana Vieja),
Colón
Total 3,42 150 877 99
municipio

GEOGRAFÍA FÍSICA DEL MUNICIPIO: RELIEVE,


HIDROGRAFÍA, CLIMA, GEOLOGÍA Y SUELOS
Centro Habana presenta un relieve llano, con varios niveles de terrazas y diferentes
formaciones (Jaimanitas, Vía Blanca y Peñalver).

El paisaje de terrazas, se encuentra altamente urbanizado y pertenece a las


Alturas Habana- Matanzas, encontrándose también paisajes de llanura
sumergida de la plataforma insular, del tipo abrasivo acumulativo con cobertura
vegetal sobre depósitos de arena y fango, ocasionalmente desnuda y débil
cobertura vegetal sobre fango carbonatado; llanuras secas y medianamente
secas y llanuras abrasivo- acumulativas formadas por rocas sedimentarias
carbonatadas depositadas.

En cuanto a su hidrografía, actualmente carece de ríos y arroyos.

El clima es tropical con una estación de seca y otra de lluvia; sus temperaturas
son altas (de 24 a 27 grados centígrados), es determinante la gran radiación
solar que incide sobre la superficie produciendo cambios de temperatura en ella
(isla de calor). El comportamiento de las precipitaciones es de 1 200 a 1 400
milímetros.

Es afectado por el viento del nordeste y del norte (con la entrada de los frentes
fríos que producen las lluvias ácidas); mientras que en la costa afecta la brisa y
el terral. Durante el verano, es afectado por los ciclones tropicales y huracanes.

13
Las rocas son de tipo calizas- coralinas, arrecifes, margas, areniscas, calizas,
arcillas, conglomerados y carbonatadas.

El Carso es llano (litoral y con fenómenos cársicos superficiales menos


frecuentes).

Las costas son dentadas, abrasivas y abrasivas acumulativas.

Los suelos son de los tipos fersolíticos-pardos-rojizos, húmedos, carbonatados,


carbonatados-arcillosos y esqueléticos, ferrolíticos rojos sobre calizas y
cenagosos (transformados en su mayoría, por el hombre).

FLORA Y FAUNA

La vegetación es seminatural (secundaria), comunidades de herbazales con


aislados arbustos (Ceibas, Majaguas, entre otros), de origen antrópico 97 %.

La fauna es de insectos, reptiles, roedores, gorriones y otros no tan abundantes.

ACTIVIDADES ECONÓMICAS
Las actividades económico - sociales fundamentales que se desarrollan en el
municipio son:
• El sector comercial y de los servicios.
• La industria del Tabaco torcido.
El municipio cuenta con 1 063 objetivos económicos distribuidos en 66
empresas, 31 unidades presupuestadas y 966 establecimientos. Las principales
producciones y servicios son:
‰ Comercio.
‰ Tabaco torcido.
‰ Confecciones textiles.
‰ Reactivos químicos.
‰ Pan.
‰ Ampollitas.

Es un municipio eminentemente comercial con 133 entidades que comercializan


en divisas libremente convertibles, 92 unidades que ofertan servicios básicos
personales a la población y 496 unidades pertenecientes a la Empresa de
comercio y gastronomía.

14
La producción mercantil, al cierre del año 2002, fue de 1 786,5 MMP y la fuerza
de trabajo en las diferentes categorías ocupacionales se comporta de la
siguiente manera:

¾ Hombres: 26 478
¾ Mujeres: 25 490
¾ Total: 51 968.

El comercio y los
servicios es la
actividad económica
fundamental de Centro
Habana, característica
que le resulta histórica
pues desde el siglo
XIX constituye el
principal centro
comercial capitalino.

15
FUENTES
1. Alonso Hernández, Ricardo. “Datos socioeconómicos de Centro Habana”. (inédito).
Grupo de investigación social de la ORD.

2. Archivo de la Secretaría del Consejo de la Administración Municipal de Centro Habana.

3. Archivo de la Oficina Municipal de Estadísticas de Centro Habana.

4. Archivo de la Dirección Municipal de Planificación Física de Centro Habana.

5. Consejo de la Administración Municipal. “Centro Habana: Impacto de los programas


priorizados de la Revolución”. La Habana, 2003.

6. Ley 18. “Ley de los límites territoriales de las provincias y municipios”, de junio
de 1978. Gaceta Oficial de la República de Cuba.

7. Rensoli Medina, Rolando Julio. “Apuntes para la Historia de la Provincia de Ciudad


de La Habana" (inédito). En Fondos de la Oficina de Asuntos Históricos del Comité
Provincial del PCC de Ciudad de La Habana.

16
II

EVOLUCIÓN HISTÓRICA DEL


TERRITORIO DEL ACTUAL MUNICIPIO DE
CENTRO HABANA DURANTE LA
COLONIA

LOS ANTIGUOS PARAJES Y ESTANCIAS (XVI-XVII). EL


TORREÓN DE SAN LÁZARO
Los primeros siglos de la colonización estuvieron marcados por el asedio de los
corsarios y piratas, la visita de las flotas del reino y una producción microagraria
en función del autoabastecimiento y el comercio.

EL SEGUNDO ASENTAMIENTO DE LA CIUDAD Y


CENTRO HABANA
La fundación original de la ciudad ocurrió en la primera mitad del año 1514, al
sur de la actual provincia de La Habana, por la desembarcadora del río
Onicajinal. Fue la quinta villa creada. Aquel establecimiento estuvo a cargo de
Don Pánfilo de Narváez, por orden de Don Diego Velásquez.

El último y definitivo asentamiento debió consolidarse en 1519, en torno al


Puerto de Carenas (de La Habana). Según el mito coincidente con el día
santoral dedicado a San Cristóbal.

La investigadora norteamericana Irene Wright, especializada en estos siglos,


calculó que el asentamiento intermedio se ubicó junto a la caleta de Juan
Guillén, luego llamada de San Lázaro.

Si tenemos en cuenta en primer lugar la lejanía de La Caleta de las escasas


posibilidades de agua potable para sus pobladores y analizamos las
características del terreno en una faja de constantes penetraciones del mar,
llegamos a la conclusión de que es poco probable la afirmación de Irene Wright,
si a esto le añadimos los datos aportados por las actas capitulares del cabildo
17
en las cuales un 13 de septiembre de 1561 se mercedan en este lugar tierras al
alguacil menor de la villa, Juan Guillén para su sitio de cabras, podemos
aseverar que esta posibilidad es poco admisible. Además no existen huellas de
obras hidráulicas en esta faja, que sí se conserva con los muros de contención
en la Chorrera y en el Barrio de Puentes Grandes, donde sin lugar a dudas tuvo
lugar la traslación de la quinta villa: San Cristóbal de La Habana, para finalmente
establecerse junto al puerto de Carenas, lugar que definitivamente ocupó.

LOS ATAQUES DE PIRATAS Y EL TORREÓN DE SAN


LÁZARO
La faja costera del actual municipio de Centro Habana representaba la más
próxima zona de defensa de la ciudad contra cualquier ataque. La preocupación
por la seguridad y la necesidad de entrar el saqueo se expresó desde 1589 con
la construcción del sistema de fortificaciones con los castillos de la Real Fuerza,
los Tres Reyes Magos del Morro y San Salvador de La Punta. Hacia 1646 se
aceleraron y se completaron estas medidas con la conclusión de los Torreones
de la Chorrera y Cojímar, las últimas edificaciones del Morro y la fabricación del
cinturón de piedra que rodeó la ciudad, dividiéndola en dos zonas precisas: La
intra y la extramural.

Torreón de San Lázaro.

Había que hacer de La


Habana una ciudad
inexpugnable, de esta
época data el pequeño vigía
insomne de la Caleta de
Juan Guillen o de San
Lázaro: el Torreón de San
Lázaro. Como cada
construcción de los primeros
siglos coloniales, no escapa
esta edificación a la
polémica sobre la fecha de su fundación, de ahí los diferentes momentos en que
lo sitúan los historiadores. Ricardo Rousett y Manuel Pérez Beato lo ubican en
1546, Jacobo de la Pezuela lo señala como una edificación de mediados del
siglo XVII y John Wurdeman lo sitúa en el siglo XVIII.

Estas amplias concepciones plantean el análisis de una serie de factores para


dar mayor claridad a este debate: en primer lugar, la fecha de edificación de los
Torreones de Cojímar y la Chorrera (1646), la etapa de construcción de otro
vigía similar hacia el este (el de Bacuranao) de finales del siglo XVII, y el período
18
en que se asienta el Leprosorio en este lugar (1744) del cual toma
posteriormente el apellido.

Todos estos elementos llevan a definiciones mas precisas:

La existencia de este vigía no pudo ser atribuible a fechas tan tempranas, basta
el desembarco efectuado en la caleta por el pirata francés Jacques de Sores en
1555 y la posterior declaración de Zona Vedada el 10 de diciembre de 1565 lo
cual prueba la inexistencia de la fortaleza en aquellos años.

Por otra parte el desarrollo del sistema de fortificaciones iniciado en 1589 con
Juan de Texeda y Juan Bautista Antonelli, se extendió todavía a finales del siglo
XVII, para su completamiento.

En esta ampliación del sistema se incluyeron los Torreones y el amurallamiento


de la ciudad.

De esta forma consideramos que la fecha más exacta de la construcción del


pequeño vigía de San Lázaro es la de Jacobo de la Pezuela: 1665.

El Torreón era una de las edificaciones de 30 metros cuadrados de


circunferencia, con una sola planta compacta de mampuesto, una pequeña
puerta de acceso, aspilleras y almenas en la azotea, a la que se asciende por
una escalera interior de madera, Se atribuye la edificación a Marcos Lucio por un
Torreón similar construido en México. Con el decursar del tiempo, a quedado en
el Parque Maceo como símbolo del municipio de Centro Habana.

ELTERRENO, ESTANCIAS Y PRODUCCIÓN AGRARIA

La zona adyacente a la recién fundada villa, poseía un suelo muy desigual, hacia
arrecifes y salinas, uvas caletas, cuevas y canteras, con una pronunciada
lengüeta de mar o caleta al sur, una bolsa de la bahía hacia la entrada en la faja
cenagosa del manglar, donde abundaban los cangrejos. Florecía además cerca
de las actuales calles Ánimas y Soledad, un manantial conocido como el Ojo de
agua Minaya y próximo a él se encontraban derramaderos, manaderos internos
hacia el norte. Igualmente en lo que después sería la Casa de Beneficencia
(sitio del actual Hospital Hermanos Ameijeiras) coexistían tres lagunas que
dieron nombres posteriormente a la calle de ese nombre. A este panorama se
añadía el Hoyo del Inglés, en los alrededores de las actuales calles de
Consulado, Industria y Virtudes, elementos que van definiendo la tipografía del
terreno según consta en el plano anónimo de los primeros siglos.

19
Al centro mismo y por ser el lugar mas alto y medio, La Zanja Real,
abastecedora de agua en los primeros siglos, daba la posibilidad de concentrar a
su alrededor las tierras más fértiles.

La originaria villa, convertida en ciudad en la ciudad de San Cristóbal de La


Habana en 1592, se autoabastecía de los principales productos agrícolas y
derivados de la ganadería. Esta actividad de autoabastecimiento de la ciudad a
que se hace referencia, se realizaba en gran medida, desde el territorio del
actual Centro Habana, que era el espacio territorial aledaño, más inmediato, a la
ciudad, donde se encontraban sitios y estancias que se especializaban en
diversas producciones:

• Estancias de ganado mayor y lecherías: las de Doña Rosalía; huertas,


viandas y hortalizas: la de María.
• Conejeras y Cocales: los de Don Gervasio Gutiérrez.
• Porqueriza: la de Juan Guillén, del alguacil menor de la Villa.
• De árboles frutales (mangos): las tierras de Micaela Jústiz, a corta
distancia de la ermita de Salud (calle Real).
• Salinas de la costa.
• Canteras como La Criolla, cercana al mar.
• Árboles maderables en toda la zona.

Este panorama económico no cambiaría en los primeros siglos para los terrenos
aledaños a la ciudad. Se trataba de una estructura agraria minifundiaria, con no
solo estancias sino: huertas, corrales, conucos y otras formas menores de
producción agraria.

Las tierras iniciales del territorio se otorgan a los vecinos mas importantes de la
villa y a las iglesias para su asentamiento, pero poco después esta potestad del
cabildo extiende las innumerables estancias y huertas que debían abastecer a
San Cristóbal de La Habana a través de sus cultivos menores, porquerizas,
lecherías, tasajeras, conejeras, además de la madera fina, piedras de cantería
para la construcción de navíos y viviendas.

Dar con exactitud los propietarios de estancias en esta parte del territorio es
tarea harto difícil, no solo por el rastreo los protocolos originales, en no muy
buen estado de conservación, sino también debido a otros factores, por
ejemplo: los continuos actos de compraventa, las superposiciones de
propiedades en un mismo espacio, que llevan a un proceso penoso y largo de
litigio entre las familias con el cabildo o con la corona españoles en algunos
casos. No obstante estas dificultades, pueden llegar a conocerse algunos de los
más importantes.

20
Tomemos como punto de referencia la Zanja Real. Hacia el norte pertenece a
este lugar las estancias de Doña María Álvarez, la de Don Miguel Castro
Palomino, la de Jerónimo del Rosario y Sotomayor, la huerta de Blas Pedroso,
la de Doña Tomasa Carrillo, la estancia de Don Sebastián Calvo de la Puerta, la
de Don José de Santa Cruz, la de Don Martín de San Oquendo y la de Doña
Magdalena Corbera y Don Gaspar de Arteaga. Al sur de la Zanja, las estancias
de Don Antonio de la Luz, Don Marcelo Carmona, Don Tiburcio de la Barrera,
Don Gabriel José Calvo, Don Cristóbal Salas, Don Pedro de las Meras, Don
Antonio Zayas, Don Bernardo Urrutia, la huerta de Buenaventura Toledo, la de
Melchor de la Torre, la de María, la de Don Antonio Bruzón, Don Juan Díaz
Menocal y la estancia de Doña Rosalía.

Fueron varios los litigios provocados por la declaración de las tierras realengas
de la Huerta de Palomino, que se extendía incluso hasta bien entrado el siglo
XIX, como ocurrió con María Mercedes Noriega y Castro Palomino que pleitea
en 1854 su derecho a dichos terrenos, Don Luis Vignier llevado a juicio por D.
José de Palomino “...sobre reconocimiento de un censo y paso por los
créditos”, exigiéndole el pago de 870 pesos por los créditos de la casa de la
calle de San Miguel No 93 antes 83 que le había sido vendida a Vignier por
Suárez, quien en 1862 la había comprado antes el escribano D. Manuel
Pimentel.

Esto evidencia como alrededor de las mismas propiedades podían existir a


veces discordias o desavenencias por la venta convencional o legal de las
mismas. En ocasiones existiesen a la vez dos o más limites propios de una
misma estancia cuyo deslinde sufría alteraciones muchas veces sin que
mediaran procedimientos legales.

Paralelo a la producción con destino al abastecimiento alimentario de la ciudad,


se desarrollan diversas industrias en función del comercio. Durante los siglos
XVI y XVII fue relativamente significativa en el área la presencia de los ingenios
azucareros de agua, o prensas, movidos principalmente por la fuerza hidráulica
proporcionada por la Zanja Real y sus ramales. Se distinguen: el Tívoli (Zanja y
Belascoaín), propiedad de Alonso de Rojas, el de Peñalver (Sitios y Peñalver), y
el de Garcini (Reina y Belascoaín). Sucede al auge de la producción azucarera
el desarrollo de la producción de rapé, muy cotizada en aquellos tiempos, la que
se lograba moliendo el tabaco y sin una fuerza de trabajo muy numerosa.
Fueron representativos el molino de Bartolomé Jaime (Reina y Galiano) y el del
Marqués Jústiz de Santa Ana en la calle Real (Salud).

Los pobladores que más se distinguen durante estos primeros siglos van a estar
relaciones precisamente con la fuerza de trabajo. Fue notaria la presencia de
inmigrantes canarios, al punto que a una localidad centrohabanera se le
conocería como el “Rancho de los Isleños”. Igualmente coexistieron con
21
indígenas guachinangos, embarcados desde Yucatán. Los negros esclavos
africanos también se hallan representados en estos primeros tiempos, aunque
todavía sin la influencia que tendrían después. Se distinguen, en cambio los
negros horros o libertos, así como la entrada de los primeros negros curros, que
comenzarían a poblar el Manglar.

LOS VIEJOS CAMINOS


En esta zona se destacaban: el camino de San Antonio Chiquito (Reina), vía que
enlazaba la ciudad con el ingenio del mismo nombre situado en las laderas de la
loma de Aróstegui (hoy conocida como “del Prìncipe”). Este se cruzaba hacia el
este con otra senda no menos importante, el camino a la Iglesia de Jesús del
Monte, que conducía a las vegas de tabaco. Otros senderos valiosos fueron la
calle Real (actual Salud) y la Zanja Real, a pesar de las dificultades que
comportaba en esta ultima el cruce de sus puentes. El camino de la costa
(Ancha del norte, -San Lázaro- más cruce de sus puentes), estuvo vedado a
partir de 1565 por el edicto del cabildo, de ahí su utilización como vía a partir del
siglo XVII.

A partir del 3 de enero de 1671 comenzó a edificarse la muralla protectora de la


ciudad. Tendría muros, bastiones y garitas, con dos entradas y salidas: El
Camino del Norte y la llamada Puerta de Tierra, esta última de gran importancia
para la urbanización y surgimiento de los barrios centrohabaneros.

URBANISMO Y POBLACIÓN. LOS BARRIOS


CENTROHABANEROS (XVIII-XIX)
La ciudad extramuros crece significativamente a partir del siglo XVIII,
desbordándose sobre todo a través de sus arterias de comunicación, sus viejos
caminos. En el entorno de aquellas calzadas se va gestar una población humilde
que puja por hacer vida comunitaria cristiana y se le reconozcan sus derechos
ciudadanos.

FORMACIÓN DE LOS PRIMEROS BARRIOS

El inicio del desarrollo urbanístico en extramuros va a ser uno de los principios


hitos del siglo XVIII en la historia de la ciudad. Para el proceso ocurrido en
Centro Habana sería esencial el Camino de la Puerta de Tierra y sus
alrededores.

Antiguamente la adjudicación de propiedades por el cabildo se hacía muchas


veces sin límites exactos ni medidas. Debido a la poca población y la

22
abundancia de tierras, no se requería tampoco de muchas precisiones. Sin
embargo, en la medida que se incrementa la población, mucha gente humilde y
sin recursos, incluyendo a los negros horros, se van asentando ilegalmente, no
siempre en egidos, pero tampoco sin que se les pudiera echar oficialmente. Se
combinaban así en los arrabales de extramuros, una población heterogénea, de
múltiples procedencias y orígenes étnicos. Les unía en no pocos casos los
oficios religiosos de algún cura semanero que se desplazaba los domingos
hasta lejanas y rústicas ermitas para oficiar la misa en los nacientes caseríos.

Los planos de la ciudad en el siglo XVIII revelan que las antiguas estancias
comienzan a ser parceladas en manzanas y solares. En los expedientes
correspondientes a Don Miguel de Castro Palomino es posible apreciar cómo
desde los años 50 la estancia de sus familiares y herederos se divide en más de
15 manzanas.

La Habana extramuros, según un grabado de 1838.

GUADALUPE

Casitas pequeñas e irregulares de embarrado y guano debieron existir desde


bien temprano el siglo XVIII. En 1716 se registra que a instancia de Francisco
Carrete se exigió una ermita dedicada a la advocación de la Virgen de
Gualdalupe. Sin duda por ser la patrona de muchos de los vecinos de origen
yucateco. Se estableció originalmente a sólo 500 pasos de la muralla, por donde
ya existía una taberna y una pulpería.

La ermita de la Guadalupe daría lugar al partido o Capitanía Pedánea de


Guadalupe, pronto considerado como barrio de extramuros, el primero de Centro
Habana. Ya hacia 1739 la iglesia adquiere jerarquía de Parroquia Auxiliar, con
23
archivo propio. Auspiciada por el Obispo, Monseñor Juan Lazo de la Vega, se va
a comenzar a construir de mampostería y se concluye en 1742, por la calle
Águila y el llamado Callejón del Suspiro.

Hacia mediados del siglo XVIII la Parroquia de Guadalupe atiende las ermitas:
Nuestra Señora de la Salud (donde luego se estableció la Parroquia), la de
Jesús María, la de San Luis de Gonzaga (Reina) y la capilla de San Lázaro en el
hospital. Comprende casi medio centenar de cuadras, con nueve calles de norte
a sur y dieciocho de oriente a poniente. Según el padrón de la época el territorio
abarcaba un total de 669 casas, de las cuales 554 eran de pajas, 115 de piedra
y tejas, y 12 de ellas con altos. Se calculó ha existencia de 700 familias con un
total de 3,761 habitantes.

Las primeras casitas de tejas -a saber- fueron propiedad de Francisco Pico, y


debieron hallarse por San Rafael, muy cercanas a donde luego se edificó el
Paseo del Prado.

El proceso de urbanización de la ciudad se inició en el centro–sur de la villa,


extendiéndose mayormente hacia el sur bordeando el camino de Jesús del
Monte (actual calzada del 10 de octubre) y en dirección de la Zanja Real, por
Carraguao hasta el Cerro.

La parte oeste de extramuros, su cercanía al mar y la necesidad de mantenerla


despejada para garantizar la visibilidad y maniobra frente a cualquier ataque de
escuadras enemigas, limitaba las posibilidades constructivas en esta faja por
este período. Aquí el proceso de urbanización fue lento y atrasado para
extramuros en comparación con territorios mas alejados, siempre con las
dificultades propias que comportaba el uso militar de parte de esta zona.

Desde 1739 se hacía sentir en la ciudad la guerra declarada por Inglaterra a


España. Por este motivo, a partir de 1740, los terrenos extramurales se
cubrieron de fosos y estacadas, así como obras de carácter militar para la
defensa de la ciudad, convirtiéndose esta área en una zona polémica, donde
quedó terminantemente prohibido todo tipo de construcción sobre todo hacia el
norte.

Se desarrollaba un acontecimiento defensivo capitalino que comenzó con la


utilización del Campo de Marte (hoy Parque de la Fraternidad) como lugar de
entrenamiento militar. Más tarde se establecería allí, la Escuela española de
Artillería.

Poco tiempo después de iniciar Carlos III su reinado y ser firmado en 1762 el
conocido Pacto de Familias entre España y Francia, de nuevo se rompieron las
relaciones británico-españolas.

24
En 1762 los ingleses le declararon la guerra a España y las operaciones se
trasladaron a las colonias, especialmente a Cuba atacando y ocupando La
Habana por un periodo de once meses, de agosto de 1762 a julio de 1763. De
esta ocupación el saldo positivo fue la aplicación de una nueva política
económica, que estableció un intercambio comercial con sus colonias mucho
mas ventajoso que el español, bajo el monopolio de la Real Compañía de
Comercio. De hecho, el capital habanero obtenía mas beneficio.

No obstante este auge mercantil, el mismo no resultó positivo para toda la


población y en especial la de extramuros, solo incidió en particular, sobre el
grupo aristocrático habanero, mientras tanto en la zona aledaña crecía sus
primeros núcleos urbanos y continuaban la explotación de sus estancias,
huertas, canteras y árboles maderables, entre otros renglones.

Todavía en 1769-1771 en época de Bucarelli, cuando se establecían divisiones


territoriales mas precisas en Intramuros, mucho mas definido urbanísticamente,
Extramuros era considerado zona rural dividida en capitanías pedáneas. Así
se arriba en 1774, al gobierno del Marqués de la Torre, en el cual no solo hubo
preocupación por mejorar las capacidades defensivas de La Habana, sino que
se operaron cambios en el ornato publico, se crearon instituciones para elevar el
nivel cultural de la mas selecta aristocracia habanera y se construyeron lugares
de esparcimiento, mientras que en el orden económico se decretó la
introducción de una serie de productos a España, que aumentó el movimiento de
barcos y el incremento del comercio exterior.

En el área extramural en estos años se unían a los barrios existentes los


caseríos de San Antonio Chiquito (hoy dentro del actual municipio de Plaza de la
Revolución), Reina y San Lázaro, contribuyendo con esto al crecimiento
acelerado de la población que se reflejó en el primer censo (1774-1775) que
oficia:

Población total de 171 620 habitantes en la isla, de ellos:

- blancos 96 540
- Mestizos libres 19 207
- Negros esclavos 11 640
- Mestizos esclavos 5 724
- Negros libres 41 607

Como se desprende de este cuadro, la población mestiza y negra (esclava o


libre) era un total 78 128 frente a 96 540 blancos.

25
SAN LÁZARO Y LOS BARRACONES

En 1778, el Padrón general de la Isla de Cuba aportó datos de otro barrio


extramural, San Lázaro, entonces partido pedáneo del mismo nombre, cuyo
núcleo principal se localizaba aproximadamente a una legua de la ciudad, al
norte de la Zanja Real hasta la caleta del mismo nombre, en el cual estaba el
llamado “Barrio de los Barracones”.

El partido tenía un total de 333 habitantes: 192 blancos, 174 negros esclavos, 16
negros libres y 1 mestizo. Además de su iglesia, el barrio reflejaba poseer un
hospital –el leprosorio-, un cuartón, un eclesiástico secular y 74 casas.

Históricamente, los barracones se habían vinculado con el comercio negrero,


pues desde sus orígenes la razón fundamental de su fabricación fue la de estar
destinados al alojamiento temporal o definitivo de los negros africanos obtenidos
a través de la trata.

En Cuba el término barracón fue utilizado indistintamente tanto para las


instalaciones de este tipo existentes en las zonas rurales y urbanas, como para
otros establecimientos que no se vincularon exclusivamente con el comercio de
esclavos.

Juan Pérez de la Riva, en su obra El Barracón y otros ensayos, aclara además


que en Cuba existieron barracones de ingenios en las afueras de las ciudades
(Matanzas, Güines...) que, utilizados para albergar negros bozales y chinos
culíes, podían ser de dos tipos: barracones naves o barracones de patio. Pero
en dicha afirmación solo se refiere a los relacionados con la esclavitud. No
fueron tenidos en cuenta otros establecimientos que, denominados igualmente
barracones, existieron en la zona inmediata a las murallas próximas a los limites
urbanos, cuya construcción tuvo como objetivo inicial el alojamiento de tropas y
almacenes militares cuya funcionalidad estuvo dada por su utilización como
albergue provisional durante los conflictos bélicos de la época.

Estos se localizaron en extramuros hacia la zona este del partido de San


Lázaro; también un poco más al oeste en La Chorrera y en el pueblo ultramarino
de Regla, construidos todos con el mismo propósito.

Los barracones de la zona este del partido de San Lázaro, fueron construidos
allí “...para salvar la imposibilidad de alojamiento que ofrece esta ciudad y
barrios adyacentes, precaviendo las enfermedades epidérmicas que se debe
tener en estos climas de América para lograrse en el paraje que sé a
situado la mejor ventilación de las brisas que son los vientos sanos y
generales, al mismo tiempo que la ventaja de tener todo el ejercito
reunido”.- según se explica en le plano de Luis Huet de los barracones
26
militares. Razones similares motivaron igualmente la construcción de dichos
establecimientos en la Chorrera y Regla.

En lo que se refiere a los barracones aledaños a las murallas en el partido de


San Lázaro: “La Intendencia ordenó (....) la construcción de 40 barracones
muy capaces entre las calles del Consulado y la Alameda [ o sea, nuestro
Prado actual ] (....) a la altura de la calle Colón y se extendían de Norte a
Sur hasta la Zona Franca (....)” Eran de madera redonda, es decir, sin labrar,
y techo de guano en ellos cupieron perfectamente los 12 000 hombres
conducidos por la flota de Solano.

Sin embargo, hay autores que solo se refieren a la existencia de 18 entre la calle
del Consulado y la Alameda extramuros y de Oeste a Este como calle Santa
Bárbara. No se especifican a que período de la existencia de los mismos
corresponden. En estos casos, ante la contradicción, podemos inferir que dichos
autores se refieren a etapas de desarrollo diferente. De cualquier modo,
aceptamos la idea de que fueran cuarenta como los ordenó la Intendencia
General de Hacienda, y que la medida en que se fueron desocupando se
deterioraron por la endeble calidad de su construcción, reduciéndose su número.
En los legajos consultados no se hallaron referencias a ese numero total de
barracones, sino solo aquellos que al parecer resistieron los embates del tiempo.

Según se aprecia en las fuentes catastróficas y por la información de las fuentes


primarias en contraste con alguna bibliografía, los barracones ubicados al este
de la Capitanía de San Lázaro ocuparon el área que se extendía:

- Por el norte: hasta la calle Merced ( actual Refugio)


- Por el sur: hasta la calle San Miguel o Santa Bárbara, justamente en el
segmento entre Industria y Neptuno.
- Por el este: hasta la Alameda de extramuros (actual Paseo de Martí o Prado).
- Por el oeste: la calle Industria.

Toda la superficie inmediata hacia los extremos norte, sur y oeste fue conocida
como “cercana a los barracones” y en su conjunto como “Barrio de los
Barracones”, denominado así por los vecinos de la zona quienes tomaron la
existencia de los mismos como punto de referencia para nombrar estos terrenos,
transmitiéndolos por vía oral y escrita, incluso en documentos oficiales, desde
1779-1780 en que surgieron hasta 1836, manteniéndose la costumbre hasta
después de 1841 en que surge el Barrio de Nueva Cárcel, pues no hallaban otra
forma de referirse a esta área en particular que no tenía peculiaridad más
notable que la presencia de aquellas construcciones. Las particularidades físico-
geográficas de la zona, fueron otras de las razones por las que los terrenos
aledaños se declararon como realengos, por lo que sólo la Real Hacienda
nacional, representante de los intereses de la Corona, podían disponer de ellos,
27
destinando dichas construcciones a diferentes usos en el transcurso de su
existencia.

En las fuentes aparecen indistintamente 1779 y 1780 como fechas iniciales de


construcción de los barracones, pero los estudios realizados al respecto nos
permiten afirmar que los mismos se comenzaron en 1779 y se terminaron al año
siguiente. Estos formaban una planta regular y simétrico que contrastaba con el
resto del panorama urbanístico (según plano de Luis Huet).

Aunque la ubicación de las calles nos permite formarnos una idea de la


distribución de los barracones, estas no siempre se denominaron del mismo
modo, como sucedió por ejemplo con las calles Merced, de las Canteras,
Trasera de Barracones, Santa Bárbara y otras que dejaron de existir, como
ocurre con la llamada calle de las Cocinas.

En agosto de 1781, se acuarteló en ellos el mayor número de tropas del período.


Los conflictos bélicos habían propiciado que entre 1779 y 1783, se acumularan
en Cuba algunos capitales especulándose mucho con el comercio, la venta de
terrenos, el fomento de ingenios, la compra y venta de esclavos y diversos
negocios de otro tipo.

Al año siguiente, el 20 de enero de 1784, se dispuso por Real Orden que: “...los
barracones que se construyeron en extramuros de esta plaza para
acuartelar el ejercito de operaciones se hiciesen dividir en diversas
habitaciones para alquilarlas a beneficio de la Real hacienda...”, lo que no
tuvo efecto hasta 1792, prolongándose por un período de seis años la división
en varias posiciones numeradas mas fácilmente por parte de la Real Hacienda,
que los habilitó como viviendas, arrendándoles a la gente pobre más de 60
casas.

Otra parte de aquellos enormes caserones se utilizaron para depósitos


municipales y de guerra y como consecuencia de las necesidades de importar
negros, para ser utilizados como fuerza de trabajo, se pensó en un depósito
donde establecer a los que llegaron por conducto del consulado, por lo que
algunos se dedicaron a alojamiento de esclavos africanos.

“......Inmediatamente que arribaba el negro era llevado a las plataformas


para las cuales iban consignados, o lo que era mas común, conducido a
los barracones destinados al efecto (....) que eran además el mercado de los
esclavos nuevos, de los bozales, de donde pasaban a las faenas de las
plataformas o de las ocupaciones urbanas”
Se puede considerar, por tanto que el período entre 1781 y 1798, fue el de
28
mayor auge de los barracones, con un destino primario que se enmarca hasta
1783 en que se retiraron definitivamente las tropas acantonadas una vez
finalizadas las hostilidades, dedicándose a partir del siguiente año al alquiler de
habitaciones. En 1794 algunos son administrados por la Real Hacienda que los
utiliza para alquiler, destinando otros como depósitos municipales o de guerra.
En 1795 pasa una parte de forma oficial a poder del Real Consulado de
Agricultura y Comercio, dedicándolos al depósito de los esclavos africanos que
entraban por el puerto de La Habana con autorización legal, destino que, en
esencia, no varió mucho en los años siguientes.

Con el advenimiento del siglo XIX, comienza otro ciclo de vida en la isla,
destacándose particularmente el rápido crecimiento de los centros urbanos; todo
se mantuvo en orden dentro del recinto intramural, no se produjeron cambios
en su concepción urbanística original, mientras que hacia extramuros, a partir de
la segunda mitad del siglo XVIII, la expansión adquirió otros matices, siendo mas
dispersas o concentrada en dependencia de la zona hacia donde se desplazara.
Es justamente en el primer año del siglo XIX, bajo el gobierno del Capitán
General Don Salvador de Muro y Salazar (Marques de Someruelos), que lo
barracones, después del incendio arrasador ocurrido en 1800, comienzan a
atravesar por una etapa intermedia hasta 1824, caracterizada por el aumento en
la variedad de usos a que se destinaban declinando hacia finales de este
período como consecuencia de los incendios ocurridos, la solicitud de derribo de
algunos de ellos por parte de los vecinos del lugar, la desocupación de otros al
ponerse en práctica la prohibición de la trata en 1820, y toda la serie de
elementos que sustentan la inutilidad y ambigüedad de su existencia en esta
zona que clamaba por afiliarse al conjunto de modificaciones que en el orden
urbano se daban en otros territorios de extramuros.

Antes del primer cuarto de siglo XIX, es decir en 1824, ya se comenzaban a


hacer las primeras solicitudes de derribo de los barracones por parte de varios
vecinos del lugar, petición que se justificaba con múltiples razones, entre ellas,
por ejemplo:

- Que los barracones No. 5 y 6 tenían una pared que impedía la continuación
del trazado de una calle.
- Que los que continuaban en pie y sin uso constituían un peligro por su
tendencia a incendiarse arriesgando la vida de los vecinos de la zona.
- La inutilidad de su existencia y la necesidad de hacer nuevas
construcciones de mampostería y tejas eliminado los techos de embarrado
y guano de mala calidad y en general propicios al derrumbe en cualquier
momento.
- Una vez derrumbados podían ser utilizados los terrenos por S.M. en lo que
mejor conviniera en beneficio propio.

En 1832, tuvo lugar otro incendio en el partido de San Lázaro, en la zona Norte
29
de la Zanja Real, que afectó la manzana 17, cercana al barrio de los barracones,
lo cual coincidió con la solicitud de los vecinos del lugar de derrumbar el
barracón No.6 donde se alojaban las tropas de caballería ligera del Teniente
Don Domingo de Armona, pues se había vencido el plazo del alquiler y su
existencia interrumpía a los moradores de la zona en sus proyectos de
fabricación.

De manera particular durante el gobierno de Vives el progreso constructivo no


continuó el curso ascendente de años anteriores en la capital pues solo tuvieron
lugar reformas de tipo político y militar ante la difícil situación conspirativa y de
amenazas insurrectas por las que atravesaba la Isla.

En 1836 se destruye el último barracón situado en Animas esquina a Prado,


dando frente de ambos a la Alameda del Prado y su fondo a la calle del
Consulado, esquina en la que posteriormente (1857-1858) existió una fábrica de
carruseles y según refiere Fernando Ortíz se construyó más tarde el Casino
Español de La Habana (hoy Palacio de los matrimonios).

Todo lo expuesto hasta aquí puede resumirse en un cuadro representativo de


los periodos por los que atravesó el” barrio de los barracones” desde que fueron
construídos en 1779-1780 hasta que s e destruyó el ultimo en 1836.

30
Etapa de auge Etapa Intermedia Etapa Final
1780 - 1800 (comienzos de deterioro) (Decadencia)
(1800 - 1824) fines 1824 - 1836

1781 - 1783 Aumenta la variedad de usos a 1824 - Primeras solicitudes


Acantonamiento que se destinaron (depósitos de de derrumbes de los
Militar bozales, almacenes de víveres, barracones
tabernas). Inicios de deterioro
1800
1802 - Incendios
1822

1784 - 1792 La puesta en práctica de la 1832- Incendio que azota


Disposición y división prohibición de la trata provocó la gran parte de San Lázaro
de una parte de los deshabilitación de los barracones alcanzando la zona de los
barracones dedicados a este negocio barracones

1792 - 1800 1824 - Aumenta los pleitos por


Se mantienen solicitud de permisos para
oficialmente en alquiler fabricar en terrenos yermos de
algunos de ellos por la los barracones
Real Hacienda y otros
por el Real Consulado
de Agricultura y
Comercio (1795) que
los dedica al
alojamiento de negros
esclavos

DEL ÚLTIMO BARRACÓN AL BARRIO DE NUEVA CÁRCEL. (1836-1841)

En particular, la zona objeto de estudio que continuaba siendo para muchos “el
barrio de los barracones” mantenía el orden interno establecido desde las
construcciones de estos, estructurados por cuadras y manzanas con nombres
en sus calles. La desaparición del ultimo barracón en 1836 permitió que el
proceso constructivo de esta área se estimulara a partir de entonces, puesto que
no había tenido lugar a la par del resto de extramuros, donde se reconocían ya
otros barrios hacia el Sur y el Oeste.

En dicho “barrio de los barracones” varió la calidad de las fabricaciones en los


diferentes momentos, construyéndose inicialmente de embarrado y guano y más
adelante de mampostería y tejas, aunque sin rebuscamientos ni rigores en las
formas sobre todo en la década del 30, época en que no existían en el área de
los barracones construcciones destacables por su valor arquitectónico o utilitario,
pues solo se fabricaron algunas casas destinadas a viviendas y alquiler entre las
que a veces se podía encontrar algún que otro establecimiento de los servicios
públicos.
31
Los terrenos pertenecientes al área de los barracones comenzaron a partir de
este momento a ser objeto de conflictos. Muchas manzanas, cuadras y
esquinas que formaban parte de los mencionados terrenos, fueron a partir de la
década del 40 y hasta la década siguiente, motivo fundamental de pleitos entre
herederos y propietarios de aquellas parcelas de tierra, solares o casas que en
el siglo anterior habían pertenecido a aquellos dueños originales que por medio
del traspaso, la herencia, la compra-venta o el alquiler ocuparon los terrenos
donde a finales del siglo XVIII se habían construido dichos barracones.

El barrio Nueva Cárcel toma su nombre por la cárcel que en 1834 mandó a
construir Tacón, quedando terminada totalmente entre 1838 y 1839 a la cual se
le puso su mismo nombre, situada inmediatamente después de la Puerta de la
Punta, siendo visible desde la entrada del puerto.

El nombre que recibió dicho barrio en este periodo no respondió inicialmente a


reglamentaciones oficiales sino que, similar a lo ocurrido con la denominación
del “Barrio de los barracones”, Nueva Cárcel fue el nombre dado a dicho barrio
por sus pobladores a partir de la fabricación de la misma, que se tomaba con
frecuencia como punto de referencia para denominar dicha zona. Así, a partir de
1841 fue reconocido oficialmente el mencionado barrio de la Nueva Cárcel como
segregación del de San Lázaro.

Los límites de este nuevo barrio serían a partir de entonces:

• Al norte: la calle San Lázaro que daba al mar.


• Al oeste: la calle Galiano.
• Al sur: la calle San Rafael y,
• al este: el Paseo del Prado de extramuros.

En el barrio Nueva Cárcel en particular, se concentraba el mayor número de


habitantes si lo comparamos con la existente en los barrios Guadalupe, San
Lázaro, Jesús Maria, Chávez, y Peñalver. Su población representa el 24 % del
total de extramuros, de ella el 12% era población blanca y el 7% libre de color y
el 5% esclava, es decir que la presencia de población blanca es mayor en el
barrio de Nueva Cárcel no así en los barrios Chávez y Jesús María donde se
hacinaba la mayor cantidad de población libre de color (término de la época que
se refiere a la población negra y mestiza).

Este barrio (Nueva Cárcel) era uno de los mas extensos junto al de San Lázaro y
Peñalver y es significativo el hecho de que sea Nueva Cárcel el barrio que
presente el mayor número de habitantes ya que fue precisamente allí donde
existieron los barracones que dieron nombre a dichos terrenos.

32
Fuera de los límites de la muralla el barrio Nueva Cárcel se convirtió en el lugar
mas factible para la ubicación de la creciente población debido entre otras
razones a que el resto de los barrios que se encontraban en las cercanías ya no
ofrecían posibilidades de ubicación para las familias que pretendían residir en
extramuros, por lo que muchos aprovecharon la existencia de los barracones
para establecer allí su lugar de residencia, dando lugar al surgimiento paulatino
de ciudadelas y solares como consecuencia del hacinamiento cada vez mayor
de los pobladores de la zona donde “...la mas de las veces una sola
habitación es sala de recibo y dormitorio, cámara de enfermo, lavadero y
cocina, todo en una sola pieza”. Sin dejar de tener en cuenta la ubicación del
barrio, que al limitar por sus extremos con la población calle Galiano, el mar, y
los teatros Diadema y Tacón, constituía un punto de atracción para loa
habitantes del lugar.

Según el censo de 1841 estas eran las estadísticas de los barrios del territorio,
incluyendo a Jesús María. En el resumen de extramuros se incluían las cifras
correspondientes a los presidiarios en la Real Cárcel y las familias en el Real
Arsenal.

33
Nombres Blanca Libre de Color Esclava Total

De los
V H T V H T V H T
A E O A E O A E O
Barrios
R M T R M T R M T
O B A O B A O B A
N R L N R L N R L
E A E A E A
S S S S S S

Nueva Cárcel 5717 5125 10342 1781 2231 4012 3648 2954 6602 21456

Guadalupe 3461 2711 6172 2406 2295 4701 2424 1790 4211 51087

San Lázaro 3317 3038 6355 1528 1380 2908 2528 1616 4144 13407

Jesús María 3270 2649 5919 2002 2419 4421 1440 339 2779 13119

Chávez 2594 2088 4682 2828 2738 5561 1143 636 1779 12022

Peñalver 2195 2061 4256 2155 2226 4381 1672 1370 3012 11679

Total 20554 17672 38226 12700 13284 25984 12855 6505 22560 86770

Total extramuros 20942 17724 38666 12827 13298 26125 12996 9732 22728 87519

Fuente: Comité Estatal de Estadísticas. (En: Los Censos de Población y Vivienda en Cuba. Tomo 1 Vol. 2
Cuadro Pág. 98)

Al cuadro que aportan los datos referidos a la distribución de la población en


esta zona, se complementa con este otro sobre el estado de la población en
general de la ciudad, en 1841.

Blanca Libre de Color Esclava

V H T V H T V H T Total

Población 13693 6809 22502 3927 5207 9134 9502 7722 17224 48860
Intramural

Población 20942 17724 38666 12827 13298 26125 12996 9732 22728 87519
extramural

Total 35076 26538 61614 17208 18505 35713 32717 17454 40171 137498

• En este total general se incluye el dato referido a los presidiarios de esta zona.
• “Se presenta el resultado de la población fija de esta parte de la ciudad agregándole para
complementar el total la población eventual compuesta por la guarnición veterana, tripulación de la
34
marina nacional y extranjera pasajeros accidentales de ambas que alcanzaba aproximadamente
una cantidad de 22 000 habitantes, aunque es un dato poco exacto y muy variable por
circunstancias del país y por las actividades comerciales por lo que en este censo se asume un
total general de 159 498 habitantes, que incluye la población fija y la eventual”.

Fuente: Comité Estatal de estadísticas (En los censos de Población y Vivienda en Cuba, Tomo I. Vol. 2
Cuadro 23 pág. 98)

Este cuadro nos permite apreciar como extramuros iba ganando en importancia
con respecto a intramuros donde según los resultados que arroja el censo de
población de la isla de Cuba realizado a fines de 1841 por orden del Capitán
General Jerónimo Valdés, el número de habitantes residentes en intramuros
constituía aproximadamente la mitad de la población existente fuera del recinto
amurallado, lo cual nos da la medida de la rápida evolución demográfica que se
operaba en extramuros en este tiempo en el que tenían lugar numerosas
transformaciones en todos los órdenes.

El marco expansivo del área se completó con el plan de paseos y calzadas que
estaba casi concluido hacia 1850 de la pequeña y caduca ciudad, la importancia
de las plazas y los mercados, las calles principales y los establecimientos de
intramuros cedieron así el lugar a aquellos que en las afueras del recinto ya
habían formado parte del interés socio-cultural de sus pobladores.

Después del cambio estructural del 1841, hubo una nueva reorganización a
partir de 1851: los hasta entonces barrios extramurales fueron considerados
como parte integrante de la capital cuya nueva demarcación se extendió hasta
los poblados de Cerro, Jesús del Monte y el caserío de Arroyo Apolo. Para esta
fecha también se incorporaron como parte integrante de la ciudad las
poblaciones de Regla y Casablanca. También los barrios mayores se
subdividieron. Guadalupe generó a Peñalver y Jesús María aporta a Chávez.

Al modificarse nuevamente la estructura urbana, intramuros también sufrió


modificaciones no de manera esencial, quedando toda el área dividida en seis
distritos

1. Distrito de la Catedral.
2. Distrito del Espíritu Santo.
3. Distrito de la Salud.
4. Distrito de la Factoría.
5. Distrito del Horcón.
6. Distrito de Regla.

El tercer distrito estaba compuesto por los barrios de La Punta, Colón, Tacón,
Guadalupe, Monserrate, Dragones, San Leopoldo y San Lázaro resultando este
de interés particular para nuestro trabajo por formar parte de él los dos primeros
35
barrios que a su vez constituían la subdivisión interna del que anteriormente se
denominaba barrio de la Nueva Cárcel.

EL BARRIO DE COLÓN

El otro barrio de los barracones que aún continuaba siendo reconocido así entre
muchos de los habitantes del área se localizaba en la parte este del barrio de
Colón alcanzando una pequeña porción de La Punta.

De ahí que la parcelación de esta zona constituya la base de la formación del


barrio de Colón, desde 1851 donde abundan solares y ciudadelas algunas de las
cuales se dedicaron a la prostitución clandestina a partir de los años 50,
característica también de algunas de las calles comerciales y céntricas de la
ciudad intramural, como por ejemplo: Sol, Amargura, Lamparilla y Luz, o de los
barrios extramuros en los alrededores del Paseo del Prado, en los mercados, en
la calzada de San Lázaro y la calle Monserrate. Entre otras, cuya población
comenzó a extenderse de forma arbitraria construyendo casas que
paulatinamente iban conformando manzanas en los terrenos de aquellas
primitivas estancias y terrenos del glacis más cercano a las antiguas murallas.

En esta zona, particularmente en la calle San Miguel existió una cerca de tablas
que limitaba las canteras que allí hubo de donde se extrajeron cantos que se
utilizaron para la construcción de algunos de los edificios del área, dicha calle
se fue transformando de forma progresiva por las construcciones de casas que
tuvieron lugar de un lado y otro de la misma. Similar a como sucedía en la parte
Sur, en dirección al Norte llegando su población hasta la Calzada de San
Lázaro, se veían en este periodo sobre las rocas y la arena numerosas casas de
madera algunas muy débiles y otras muy bien construidas, así como edificios de
mampostería, baños, tiendas de diferentes tipos y talleres de artes y oficios, pero
en esta parte de la calle San Lázaro el trabajo constructivo no fue sólido y
numeroso como el de la acera del frente de dicha calzada donde la calidad de
sus edificaciones fue muy superior comenzando desde La Punta y llegando
hasta la Casa de la Beneficencia.

Otro ejemplo de cómo ocurría este proceso progresivo de urbanización lo


constituye lo sucedido con el antiguo Jardín de Gervasio, donde sobresalían los
árboles frutales y los cocoteros, la estancia de Morales y parte de la de
Betancourt que se convirtieron también en casas y establecimientos entre los
que se hallaba una gran máquina de vapor utilizada para aserrar maderas, una
tenería y una importante casa cuyo dueño era Don Lorenzo de Larrazábal. Todo
esto contribuía al fomento de la mencionada Calzada de San Lázaro

Hacia la parte Este de la misma también existía en esta época una barriada
numerosa donde se podía apreciar sólidas y elegantes casas, notándose mucho
mas lujo y ostentación en las cómodas viviendas construidas en el frente
36
opuesto a dicho paseo desde el glacis a la Alameda de Isabel II “... En el
mismo local que ocupaba los antiguos barracones....” en el lugar mismo
de aquellas mezquinas construcciones que afeaban tanto, pues algunas de
estas (...) barracas estaban cubiertas con techos de hojas de palmeros, se
ven (...) algunas casas de dos o tres pisos y otras comunes de muy bello
aspecto y acaso con mejores condiciones que las de intramuros”.

Mapa de La
Habana de 1853.
Obsérvese el
crecimiento de la
ciudad con
nuevos barrios
extramuros hacia
el oeste; es el
área que hoy
denominamos
Centro Habana.

La distribución de los terrenos primero y el trazado recto y amplio de las calles


extramurales después, se correspondía con las características de la expansión
urbana que tuvo lugar hacia las afueras de la ciudad amurallada en ese período.

De modo que hacia la década del 50 ya podían apreciarse grandes edificios


sostenidos por altas y gruesas columnas que formaban extensos portales de
puntal elevados con grandes ventanas y portones característicos de la mayoría
de las construcciones que se fueron desarrollando en extramuros
particularmente en los alrededores inmediatos al Paseo del Prado donde se
elevaron grandes edificaciones que muchas veces a pesar de tener algunos
elementos en común, sus estructuras dificultaban que se les agrupara dentro de
una línea estilística definida aunque los caracterizaba la sobriedad y
magnificencia de sus fachadas e interiores.

El crecimiento poblacional exige constantemente reajustes y creación de nuevos


barrios como: San Nicolás, San Leopoldo, Dragones y La Punta. Estos son los
37
barrios hasta la mitad de la década del cincuenta del siglo XIX:

La Punta: Era la mitad de la población dividida de oriente poniente por la calle


Amargura desde la Plaza San Francisco hasta la iglesia parroquial auxiliar de
Santo Cristo del Buen Viaje y de ella atravesando por la esquina de Bernaza a
la Real Murralla del Poniente.

Dragones: Formaba cuadrilátero limitado por las calles San Miguel, Lealtad,
Calzada de la Reina y Belascoain o de la beneficencia y la calle Zanja, donde
se hallaba el Tivoli trapiche) comprendía el cuartel de Dragones ocupado por el
Regimiento de Lanceros del rey creado en 1776 que constaba de dos
escuadrones.

San Lázaro: Limitado por la caleta de San Lázaro desde Calzada de


beneficencia o Belascoain hasta la batería de la Reina (parque Maceo) por la
vereda que desde allí se dirige al puente de Zanja en la Calzada de Infanta
hasta la línea del este del Ferrocarril. Se encontraban enclavados en la zona: el
Hospital de San Lázaro y la Casa de Beneficencia.

Guadalupe: Formaba cuadrilátero con Lealtad, San Miguel, Calzada de Galiano


y de la Reina. Enclavada en el territorio la Parroquia de la Guadalupe, toma su
nombre de esta parroquia fue antes (1742) el Santuario de la Salud. Aparecen
en sus registros parroquiales los bautizos de pardos y morenos desde 1736 y los
de blancos desde 1756. También se conservan en la actualidad los Registros
Parroquiales Iniciales de la Iglesia del Sagrado Corazón de Jesús (actual Reina).

San Nicolás: Se extendía a Manrique, cañada de los Sitios de los Ángeles,


comprendía parte de la Calzada del Monte, desde la calle figuras hasta la de Los
Ángeles, estaba en el mismo la Ermita de San Nicolás (que se destruyó por un
incendio en 1802) de ahí toma su nombre.

Chávez: Limitaba con el canal de Desagüe desde el puente de Chávez hasta la


ensenada de Tallapiedra, en medio de la calle de Las cañadas y el sendero que
prolonga hasta Belascoain y de esta al puente de Chávez, toma su nombre por
Don Miguel de Chávez, administrador de las rentas reales, se edificó en 1797
gobernando el Conde de Santa Clara, el puente de cantería (sustituyó al de
madera) volviendo a reedificarse en 1835.

Peñalver: Limitaba con el medio de Belascoain y con el medio de la Reina, la


calle Manrique y el sendero que parte de la cañada, en prolongación de esta
hasta Belascoain. Tomase ingenio de Peñalver. La casa de Peñalver se situaba
en Carmen y Figuras, tenia barracones de esclavos, posteriormente fue
arrendado por Don Dionisio Delgado el que fabricó después casas y varias
ciudadelas.

38
San Leopoldo: Formaba un cuadrilátero limitado por el promedio de las calles
de Lealtad, San Miguel, Calzada de Beneficencia o Belascoain y por la costa
San Lázaro.

En el plano topográfico de los barrios extramuros de la ciudad de La Habana,


confeccionado por Don Rafael Rodríguez que data de esa fecha, aparecen ya
delimitados el barrio de San Lázaro, que se extiende de norte a sur desde la
Calzada de la Beneficencia hasta el Paseo de Isabel II y de este a oeste, desde
la Zanja Real hasta la Batería de la Reina. El barrio de Guadalupe que se
extendía de norte a sur de Chávez y el Campo de Marte y de este a oeste por
la calzada del Monte y Línea del ferrocarril de Güines. Pueblo Nuevo limitado por
norte a sur con Chávez y Calle de la Soledad y por este a oeste por el ferrocarril
de Güines y el Paseo Militar del Príncipe.

Entrada del Paseo Militar o de


Tacón, después llamado de Carlos
III y en la actualidad Avenida
Salvador Allende. Comunica a la
antigua Calzada de San Luis
Gonzaga (Reina o Avenida Simón
Bolívar en la posteridad) con el
Castillo del Príncipe empleando el
trazado de lo que fue el Camino al
ingenio y poblado de San Antonio
Chiquito que continuaba después de
la ladera del castillo por lo que
después sería la Calzada de
Zapata.

Entre 1851 y 1857 continúa el crecimiento de estos barrios, aparecen


localizados en esta última fecha, la mayor parte del territorio que en la actualidad
forma este municipio. En el plano pintores de la Ciudad de La Habana nos
corresponde los siguientes territorios agrupados en el tercer y cuarto distritos:
Tacón, (compartido con Habana Intramuros), Colón, La Punta (compartido con
Habana Intramuros), Guadalupe, Monserrate, Dragones, San Leopoldo y San
Lázaro y en el Cuarto Distrito: San Nicolás, Chávez, Peñalver, Pueblo Nuevo.

Ya en 1874 los barrios se amplían apareciendo según consta en el plano de


Esteban Pichardo los siguientes: San Lázaro, de Aramburu (o Cayo Hueso), San
Leopoldo, Monserrate, Punta, Colón, Dragones, Guadalupe, Tacón, Marte,
Pueblo Nuevo, Peñalver, San Nicolás y Chávez.

En el caso de Aramburu o Cayo Hueso, hasta los primeros años del siglo XX va
a aparecer sin urbanizar, ya que allí se encontraban ubicados el Lazareto, el
Cementerio Espada y el Asilo de Dementes de San Dionisio.

39
EL PALACIO DE ALDAMA Y CALLES CÉLEBRES

Primera mitad del siglo XX.

El Palacio de Aldama fue


construido en 1840 por el
arquitecto e ingeniero
dominicano Manuel José
Carrera, por encargo del
acaudalado propietario
vasco Don Domingo de
Aldama y Arrechaga. La
mansión se diseño frente al
antiguo Campo de Marte
(hoy Parque de la
Fraternidad), sobre la calle
Amistad, en la que ocupa
toda la cuadra comprendida
entre las calles Estrella (Enrique Barnet) y la Calzada de la Reina (Avenida
Simón Bolívar).

Comprende dos casas contiguas, tratadas como una unidad arquitectónica, de


excepcional monumentalidad como dice Weis: “el dueño destinaba una de
ellas para su morada propia y otra para su hija Rosa Aldama y Alfonso su
yerno, Domingo del Monte, el eminente polígrafo”.

Portales del palacio en la actualidad.

Esta magnifica edificación constaba primitivamente sólo de dos plantas, con dos
portadas, la principal, por la calle Amistad y la otra también hermosa por la
avenida Simón Bolívar. Ya sabemos que su estilo es el Neoclásico pero se
40
distingue de muchas otras edificaciones de aquel periodo por mostrar una
mucho mas señalada influencia italianizante.

De la fachada principal puede decirse que es la más bella que en su estilo y


género existe en La Habana y especialmente el portal, de puntal altísimo, pues
abarca dos pisos. El bajo y el entresuelo con su gran columnada alquitrabada,
que sustituyó a la de arcadas, es de estilo dórico monumental, cuyos capiteles
sostiene un bellísimo entablamiento del mismo estilo, exponente de la severidad
clásica, propias de las grandes composiciones arquitectónicas realizada por
Palladio o por sus seguidores. Y también es muy bella, en su severa sencillez,
la portada que tenemos que considerar secundaria y que honrarían a cualquier
otro edificio, el segundo piso apilastrado, coronadas por bellas cornisas clásicas,
completaban un conjunto hermosísimo.

El muy notable arquitecto José M. que escribió la monografía titulada “El palacio
Aldama”, nos dice:

... “Con el mismo acierto de sus exteriores y empleando también la unidad


que le dio el proyectista al Palacio de Aldama, ejecutando toda su fachada
principal en un mismo plano, sin cuerpos salientes, dejando con la pureza
de los perfiles de sus elementos, que estos formasen un gran todo, para
que fuese su masa o conjunto el que predominase y no tal o cual cuerpo
más o menos avanzado, esta cualidad junto con las majestuosas
proporciones de cada uno de los motivos recogidos hacen de este Palacio
una composición de primer orden que ornamenta La Habana y crea un
acertado fondo en esa cuadra a la que hoy Plaza de la Fraternidad”.

Pero si los exteriores son de mano nuestra, la decoración interior fue hecha al
igual, por verdaderos artífices y se observa que las pinturas pompeyanas de los
artesonados son bien de su época pero no solo de la época en que se vivía en
Cuba, sino de lo que se hacía por entonces en Italia.

La fina belleza de sus artesonados y la delicadeza de los motivos escultóricos de


sus frisos, bastarían para catalogarlo como una obra de arte, pero hay mas, la
variedad de los pisos de mármol verdaderas joyas de composición por sus
dibujos y colores y las bellas rejas interiores de estilo imperio y las jambas de
madera que enmarcan los huecos todo esto reafirma nuestro criterio de que es
la mas valiosa obra que se levanto en La Habana durante el siglo XIX.

Bens elogia así mismo muy merecidamente las fachadas también de sillerias
que enmarcan sus dos grandes patios “que recuerdan los de los Palacios de
Roma” y en cada uno de los cuales se coloco una fuente de mármol blanco de
Carrara, la originalidad de su majestuosa escaleras, la exquisitez así de material
41
como de mano de obra que se observa hasta en los menores detalles de
carpintería y herrería.

Las líneas del palacio de Aldama tienen la sencillez y la pureza clásica de los
palacios de renacimiento de Roma. Y también como estos su belleza depende
de sus proposiciones admirablemente estudiadas. De su magnitud basta decir
que cien comensales podían asistir cómodamente a un banquete en su
comedor. Ninguna de estas condiciones reúne las magnificas residencias del
Vedado.

Y karl Vossler, el eminente humanista e hispanista alemán al visitar La Habana


corroboró estos conceptos diciendo que el Palacio de Aldama es de tal
majestuosidad y belleza que no desentonaría entre los palacios de las grandes
ciudades italianas.

Si desde el punto de vista arquitectónico el Palacio de Aldama merece ser


considerado como una soberbia obra de arte, como una verdadera joya de
nuestra ciudad, desde el punto de vista histórico es un monumento al altísimo
valor en cuanto a nuestra vida cultural y sobre todo a nuestro sentimiento
patriótico. Y aquí también se nos impone una comparación en tanto que el
Palacio de Gobierno representa el más alto valor histórico en lo que se refiere a
la vida oficial de Cuba, el Palacio de Aldama es un vivo recuerdo monumental de
la rebeldía Cubana y de nuestras heroicas luchas por la independencia.

El constructor del Palacio de Aldama, Manuel José Carrera, dominicano de


nacimiento emparentado con las familias de Angulo, Heredia y Del Monte, de la
misma procedencia y que figuran con brillantez en la historia de nuestro país.

Carrera trabajo como arquitecto en todas las empresas de Aldama y Alfonso con
quienes este se había unido por su matrimonio y fueron obras suyas las
numerosas líneas ferrocarrileras que estas familias construyeron en la provincia
de matanzas.

El influyente Domingo logró que para autorizarlo a levantar su casa derogase la


orden que prohibía construcciones de este tipo en zona militar adyacente al
campo de Marte como bien se observa Rens, es significativo del momento de
auge urbanístico que desde 1834 a 1840 vivió en La Habana, que al otorgarle el
permiso se le advirtiese que por presentar su frente al campo Militar, paraje de
gran perspectiva, sena del mayor merito los edificios que allí se establezcan.

Pero aun hay algo más interesante, si bien los planos del edificio fueron llevados
a realidad por un profesional tan distinguido como el arquitecto Carrera que dejó
en el su obra maestra y por ella ha merecido pasar a la posteridad, otra mano, la
de un afamado por su cultura y su gusto refinado intervino en el proyecto. Por el
epistolario de Domingo del Monte se ha comprobado que el mismo dio al
42
arquitecto las ideas generales y muchos detalles de la futura construcción si bien
los planes primitivos sufrieron algunas modificaciones ya que su realización
había resultado excesivamente costosa. Así y todo se calcula que el monto de la
obra ascendió a un millón de pesos, cantidad fabulosa para aquella época.

Domingo del Monte después de haber dado sus ideas para la construcción del
Palacio de Aldama residió en él durante algún tiempo y fue una de las
personalidades más importantes de su época. Aunque nacido en Venezuela de
familia Dominicana desde muy niño fue traído a Cuba incorporándose
definitivamente ya adulto a nuestra vida literaria y política, ejerciendo en Cuba
de 1830-1843. Profunda influencia en nuestras letras y nuestra vida social.
Además de realizar valiosa obra literaria contribuyó a la formación de
personalidades intelectuales tan prestigiosas como José Jacinto Milanés, Ramón
de Palma, José A. Echeverría y otras muchas que brillaron en esta época.
Patrocino la publicación de revistas y organizó famosas tertulias literarias en los
salones del Palacio en que habitaba. Ayudó y aconsejo, guió y defendió a sus
compañeros en las letras, combatió la infamia de la esclavitud.

No sólo el Cerro tuvo grandes mansiones y jardines arquitectónicos. Además del


Palacio de Aldama el territorio dispuso en la etapa colonial de bellas
construcciones, domésticas y públicas, muchas de las cuales sobrevivieron al
esplendor del turismo y quedaron registrada no solo en planos sino en antiguos
dibujos, para orgullo de la arquitectura Cubana.

ALGUNAS CALLES DEL TERRITORIO (SIGLOS XVIII -


XIX)
Aramburo: (1770). Tiene 61 casas con 7 cuadras comienza en la Calzada de
San Lázaro y termina en Zanja. Toma su nombre de San Martín de Aramburo,
que por instrumento público ante el escribano Ramírez el 7 y el 10 de agosto de
1770 legó la cantidad de $ 387 048 y 29 centavos representadas en fincas y
estancias de la capital APRA el sostenimiento de hospitales instituyendo una
obrapía que se conoce como la de Aramburo, estando en patronato a cargo del
Convento de Belén y en defecto de este, el ministerio de la venerable orden 3ra
de San Francisco, que la expresada cantidad se distribuyera a partes iguales
entre los hospitales de san Lázaro, San Juan de Dios y San Francisco de Paula.
Entre los bienes estaban las estancias que estaban en esa calle. Esta finca se
vendió en solares, para formar la barriada que hoy esta poblada con casas
modernas, el resto de sus bienes se los dejó a sus primos.

Belascoain: (1782). Llamada luego Padre Varela, se abrió como calle en esa
fecha y se llamó Cocal por que en el había una estancia de Don Gervasio
Gutiérrez y en el terreno de enfrente se conservaban muchas matas. Se le llamó
43
también la beneficencia por que allí radicaba esta institución y de Belascoain
(desde el paseo de Tacón hasta Calzada del Monte) nombre que le dio el
general O´Donell, en los planos de La Habana de mediados del siglo XVIII
aparece el Cocal que pertenecía al Gervasio con hileras de árboles.

Del Blanco: (1711). Existía a principios del siglo XVII según acta municipal de
16 de enero de ese mismo año. Formó parte de la estancia de Don José de
Santa Cruz. Tenía 55 casas y 4 cuadras, comenzaba en el malecón y acababa
en la calle virtudes. Tomaba su nombre de un paredón que servia de blanco
para servicios de artillerías que se efectuaban en la Escuela Práctica.

Dragones: Construidas a finales del siglo XVIII con 82 casas y 12 cuadras.


Comenzaba en Egido y terminaba en Escobar Tomaba su nombre del cuartel de
Dragones que existía en aquella época.

Gervasio: (hoy Rafael Martínez Alonso) comprende 185 casas y 13 cuadras,


comenzaba en el malecón y terminaba en Maloja. Toa su nombre por la estancia
y casa quinta de Don Gervasio Gutiérrez. Fue célebre en su época por los
cocales que existían en la misma. Comprendía además la esquina de la Calle
Lagunas donde el dueño tenía conejeras. También se le llamó de las Ánimas por
que en la esquina de la calle Salud tenía Cipriano Castro un retablo de Las
Ánimas.

De La Reina: (Hoy Avenida Simón Bolívar). Con 140 casas en 11 cuadras


comenzaba en Amistad y terminaba en Belascoain se le llamó Camino de San
Antonio Chiquito porque conducía al ingenio de ese nombre. Era el único
camino hacia La Chorrera y así se llamó hasta el siglo XVII. También se llamó
San Luis Gonzaga por la ermita de ese nombre que había en la calzada de
Belascoain y la esquina de Carlos III. La ermita se San Luis Gonzaga se erigió
en 1751 y se destruyó en 1835. En los planos del siglo XVIII, incluía la estancia
de Carmona que abarcaba gran extensión y que estaba situada en las alturas de
Gervasio y Estrella.

De Vento: Pequeño callejón entre la Calzada de San Lázaro y Marina, seguía a


la orilla del mar cerca de la caleta de San Lázaro.

Las Salinas: Eran parte del terreno y costa desde la Fortaleza de La Punta
hasta la Caleta de San Lázaro fue mercedado a diferentes vecinos para la
formación de salinas que se abandonaron varias veces. A mediados del siglo
XVIII se dieron algunos lugares inmediatos a la punta, Al ingenio Caballero Don
Francisco Teneza, al castellano de aquella fortaleza a Don Luis de Sañudo que
tenía una huerta en sus cercanías.

Consulado: (1794). Debe este nombre por que allí existía desde esa época el
Consulado de La Habana que produjo grandes beneficios comerciales. El
44
gobernante Don Luis de las Casas procuró que las pocas casas de este lugar se
alineasen en una calle con ese nombre. Hubo por allí barracones de negros
bozales.

LA POBLACIÓN HUMILDE, SECTORES Y


ORGANIZACIONES FRATERNALES
Referimos que buena parte de la fuerza de trabajo en las estancias originales y
luego en los primeros barrios centrohabaneros, fue de origen canario.
Igualmente, se insertaron en el territorio inmigrantes de otras regiones de
España, en especial: gallegos, vascos y catalanes. Mencionados también a los
indígenas guachinangos, procedentes de la península de Yucatán, en México;
posteriormente valoraremos la presencia de las comunidades chinas y árabes,
que tendieron a ser étnicamente más conservadoras. Por ahora nos
detendremos en el grupo poblacional más humilde, discriminado y explotado: la
población negra.

Las actas capitulares del cabildo de La Habana dan cuenta de la existencia y la


forma de vida que llevaron los negros en aquellos momentos. De esta manera
desde 1550 en lo adelante aparecieron las primeras actas que hacían referencia
a los mismos.

• 12 de Septiembre de 1550. Se les prohibía cortar cedro o caoba en dos


leguas de la villa.
• 29 de enero de 1552. Se les prohibía dedicarse a la venta de frutas y
cangrejos porque al ejercer este comercio holgazanean en el trabajo de sus
amos.
• 9 de enero de 1553. Se les prohibía tener casa de comer y de beber vino
por los escándalos que ocasionaban fuera de la villa.

Por otro lado la historiadora americana Irene Wright mostraba su preocupación


sobre otros fenómenos que se estaban dando según consta en el cabildo del 8
de febrero de 1556: la compra por los negros de su libertad (conque según ella
habían hurtado a sus amos) preocupación racial bien delimitada de la población
blanca, sobre todo si se tiene en cuenta que el cabildo le concedía merced para
fabricar o estancias para habitar fuera de la villa.

De esta forma se inició el asentamiento de una población negra esclava que


laboraba en las estancias, otra que trabajaba en las tabernas o con herramientas
o con malojeros, zapateros, o cualquier trabajo adicional, a tal punto que en un
acta del cabildo de 1853 los tenía en cuenta para hacer velas (guardias) en las
fortalezas al igual que los demás vecinos españoles.

45
Los negros esclavos y horros provenían de diferentes regiones africanas entre
las que pueden mencionarse a: Angola, Guinea, Cabo Verde, o Islas
Adyacentes, Nigeria, Benguela, (colonia portuguesa que hoy forma parte de
Angola), Gambia, Senegal, Cabinda, ( colonia portuguesa que actualmente
forma parte de Angola) Congo, Dahomey, Costa de Oro (Ghana), Liberia, entre
otras, todos ellos de diferentes etnias y hablantes de diferentes dialectos:
mandingas (originarios de la costa de Senegal a Liberia), existen además en
Dahomey y el Níger; gangás (originarios de langoba), mani y quissi (de Liberia),
y los lucumíes (puerto del nordeste de Benin), los carabalíes (de Nigeria) los
congos (del Congo).

Los lucumíes, los mandingas, los congos, los yolofes ( de Senegambia) y los
Minas (suroeste de Dahomey) fueron los que surtieron fundamentalmente a los
negreros (comerciantes de esclavos africanos) ya que debido a las constantes
guerras intertribales ya habían sido reducidos a la esclavitud en su propio país y
eran los más fáciles de vender.

Toda esta población africana y sus descendientes principalmente en los centros


urbanos, sufrió un fuerte proceso de transculturación. Los aportes africanos se
fueron reintegrando al país, tomando a su vez caracteres nuevos.

No podemos olvidar que los africanos llegaron con migraciones sucesivas, en


oleadas diferentes, con diferencias jerárquicas y sociales de cada uno de ellos y
procedían de diferentes lugares. No obstante estos factores, es innegable el
aporte dado por ellos mismos a la cultura Cubana y a la del territorio que
estudiamos.

De estos grupos de negros ninguno fue tan peculiar ni tuvo una influencia tan
decisiva en la sociedad como el famoso “negro curro”.

LOS NEGROS CURROS

Estos llegaron y se asentaron en esta zona a fines del siglo XVII pero en
realidad tuvieron su momento de esplendor a fines de XVIII y principios del XX.

Era el negro curro un africano trasplantado a la península Ibérica. Una vez allí,
se nos presentó como un producto de su transculturación con aquel medio de la
España de aquella época, mixtura de culturas diversas, la antigua romana y la
islámica. Posteriormente este negro ya español, fue traído a Cuba y aquí sufrió
su segundo proceso de transculturación, para ser un hombre que conservaba
características africanas, españolas y a las que añadió las de La Habana de
aquella época sin ser por ello idéntico a ninguno.

46
“El curro se nucleó en el Manglar, en casas sobre portones, en los
arrabales de la ciudad”... Este era un barrio lleno de marismos y encenegados,
con abundantes mangles y cangrejos del cual sólo queda como recuerdo la
calle Manglar.

José V. Betancourt, en “Los Curros del Manglar” describe el lugar como “(...)
asquerosas pocilgas, donde vivían en mezquinas casuchas una numerosa
población casi toda africana, antes del incendio que la convirtió en cenizas
en el año 1902”.

“Los curros -definió Fernando Ortíz- tenían una fisonomía peculiar y


bastaba verlos para clasificarlos como tales: sus largos mechones de pasas
trenzadas cayéndole sobre el rostro y cuello a manera de grandes
mancaperros (reptil que vive en nuestros campos) sus dientes coratos a la
usanza carabalí (en puntas), la camisa de estopillas bordadas con
cadeleros (especie de bordados), sus calzones blancos casi siempre de
listados de colores, angosto por las cintura y anchísimo de piernas, el
zapato de cañazo de corte bajo con hebilla de plata, la chupa de olancito
de cortos y puntiagudos faldones, el sombrero de paja afarolado con
lenguas colgantes y negras borlas de seda y las gruesas argollas de oro
que llevan en las orejas, de donde cuelgan corazones y candados del
mismo metal, forman el arreo que solo ellos usan, se les conoce además
por el modo de andar contoneándose como si fueran gonces y meneando
los brazos hacia delante y atrás por la inflexión que dan a su voz, por su
locución viciosa , y en fin por el idioma particular que hablan tan físico
(retórico) y disparatados que a veces no se les entiende”.
Este negro africano seguirá recordando sus raíces en el uso profuso del pañuelo
en remembranza a las costumbres del carabalí, Senegal, Senegambia y otros
pueblos africanos entremezcladas esta con las toledanas de las fiestas de
agosto (1561). Este adorno fue también característico de los valientes de las
cárceles de Sevilla, de Andalucía le llegara al curro y adoptara la chaqueta de
terciopelo negro y el sombrero felpudo.

El toque peculiar de su popular calzado no estaba exento de raíces españolas


en el chapín y al mismo tiempo rememora la usanza africana que imprime un
paso muy peculiar que se puede ver en regiones como Níger y Gabón, de ahí
que Fernando Ortíz explicó el chancleteo de los curros del manglar como
simbiosis de las costumbres africano-españolas.

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Otra de sus peculiaridades fue su lenguaje especial con una serie de
alteraciones fonéticas de ciertas voces castellanas. A todo se le unieron las
costumbres de La Habana de aquel entonces, la cual Ortíz describe de la
siguiente forma:

“...La dársena habanera fue por aquellos siglos XVI y XVII centro de
toda la actividad de la urbe (...) y en las riberas de la bahía hallaron
esparcimientos y sobrados de vicios no solos los esclavos del arsenal y la
soldadesca de la Fuerza y luego la de los tres castillos y de los demás que
se construyeron, sino también la chusma numerosísima de los galeotes de
la flota”.
De esta manera el curro se desarrolló como un producto suburbano de zonas
marginales, guapos de armas blancas, retadores y fáciles de arreglar sus
asuntos a cuchilladas. Ya que en el siglo XIX va convirtiéndose en una figura
picaresca disimuladora, diluyendo su matonismo, para convertirse en figura
popular de los carnavales de La Habana desde fines del siglo XIX.

Al crecer la presencia del africano y sus descendientes en Cuba, surgió la


necesidad de estos de agruparse en cofradías y cabildos, que preservaban su
identidad cultural y religiosa.

LOS CABILDOS AFROCUBANOS

Sus antecedentes hay que buscarlos en Sevilla y datan de 1642 cuando Enrique
IV en Toledo restringió la libre asociación en hermandades por considerarla
perjudiciales. La voz “cabildo” era por tanto harto conocida en España en la
época de la colonización, los negros y los gitanos de Sevilla tenían y aun tienen
estos últimos, sus cofradías organizadas.

Los cabildos de Indias no hicieron más que reproducir la organización


española, propia de los lugares donde hubo un gran grupo de africanos.

Estos agrupaban a los negros de una misma nación o procedencia territorial


africana, sobre la base del socorro y ayuda mutua, y servían a su vez para
mantener el rito y las prácticas ancestrales de cantos y danzas que implicaban
sus creencias religiosas.

Su vínculo sevillano lo pone de manifiesto la disposición del cabildo de la ciudad


del 10 de abril de 1573, que ordena la asistencia de los negros horros a la
procesión de Habeas Christi “lo mismo que asistieron a la famosa Sevilla”.

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Reunión de negros y negras bozales, se les conocía por sus días festivos que
era su carácter más ruidoso, de ahí que muchas veces se ignore su carácter
más primario de socorro. Contaba con una organización rigurosa encabezada
por Rey, Reina, mayordomos y capataz, generalmente el más anciano era el
Rey del cabildo y entre sus obligaciones estaba controlar los fondos de la
sociedad e imponer multas a sus súbditos. Cargo ceremonial importante y
ambicionado lo fue el abanderado, creado cuando fue admitida la bandera del
cabildo.

Los ingresos del cabildo consistían en cuotas mensuales que pagaban los
cofrades, súbditos o agremiados. Con estos fondos atendían sus fines
humanísticos y adquirían casas para sus domicilios.

En sus inicios situaban sus domicilios en la propia villa, pero el bando del
Gobierno de 1792 en su artículo 39 los echó fuera de esta y así vinieron a
situarse en este territorio. “... todos los citados cabildos se pasen a las orillas
de la ciudad, desde la puerta de la antigua Tenaza, hasta los de la Punta,
excepto el frente de la tierra.”

Sus llamadas horas de diversiones: domingos y días festivos (desde las diez del
día hasta las doce, para reanudar después de la siesta de las tres de la tarde a
las ocho de la noche), fueron sus actividades mas conocidas, en la cuales
ocupaba un lugar cimero, las fiestas del Día de Reyes el 6 de enero de cada
año, escenas que quedaron plantadas en las pinturas del andaluz Víctor Patricio
de Landaluce, en las descripciones del literato Ramón Meza, en la obra del
etnólogo Cubano Don Fernando Ortiz, las del escritor Aurelio Pérez Zamora, en
las litografías de Miahle y Gustavino, que tienen las figuras de los diablitos o
íremes de la Kulona, de la negra curra bailando, de los festejos del Día de Reyes
y de recorridos de grupos de comparsa de negros por las calles de la capital.

La decadencia de los cabildos se inició desde finales del siglo XVIII, ya que en el
bando de 1792 se les prohibió celebrar sus fiestas. La abolición de la esclavitud
marcó en el siglo XIX su final, los cabildos trasformados bajo la presión oficial en
legislación de asociados, mantuvieron encabezados el nombre de viejo cabildo
“La caridad” Sociedad de socorro mútuo de la nación arará sabalú africana, bajo
la adjudicación del Espíritu Santo.

Este fenómeno se extendió un siglo después, cuando aparecieron registrados


como sociedad de Socorro Mutuo, en las calles, el viejo cabildo aparecía de
forma encubierta.

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LAS COFRADÍAS

En las ciudades mayores se organizaron las cofradías que funcionaban en las


iglesias como agrupaciones seglares. Las agrupaciones negras estaban
separadas de las de los blancos y correspondían a los lugares de origen de los
africanos.

Las cofradías negras tenían horas y días específicos dentro de las Iglesias,
podían realizar también sus fiestas o procesiones con motivo de un santo patrón
y se les permitía cantar el rosario por las calles con acompañamiento de una
música, además de hacer recaudaciones para la iglesia.

Las presencia de las agrupaciones yorubas y lucumíes y sus descendientes


criollos y de muchos mestizos y blancos que se adscribieron a estas creencias,
marcaron las tradiciones y costumbres de este territorio, desde la casa del
cabildo que se convertiría en un altar o santuario decorado con búcaros, flores y
santuarios de santos católicos, que representaban las deidades africanas, lo que
devino en casa templo propia de la regla Ocha. Igualmente los bantús (cuenca
de los ríos Congo y Zaire) dejaron su impronta con la misma trasformación de
los cabildos en las salas de las casas particulares de los Tata-Nganga. Los
religiosos de origen bantú fueron conocidos como “paleros”. Ambas
manifestaciones se retiraron a los barrios extramuros de Guadalupe y San
Lázaro desde finales del siglo XVIII. Las “buenas familias” de la ciudad
protestaban por la música que producían con sus instrumentos y cantos durante
rituales y conmemoraciones.

LOS ABAKUÁ EN CENTRO HABANA

La hermandad secreta ABAKUÁ se organiza en Cuba a través de la fundación


en 1836 de la potencia Efik Butón, al amparo del cabildo oficialmente legalizado,
de origen carabalí: Appá Efor.

Ya a mediados de la década del 40 del siglo XIX existían en la ciudad decenas


de juegos abakuá, principalmente en Guanabacoa, Regla, Jesús María y
Carraguao. Los barrios centrohabaneros con población humilde también se van
a organizar en potencias. Pero sobre todo, hay un acontecimiento relacionado
con Centro Habana y los abakuá que aún no ha tenido su justo
dimensionamiento en nuestra historiografía. Y es que los abakuá residentes en
la localidad aportarían un elemento en favor de la unidad racial, de la ciudad
entre los Cubanos y, por tanto, contribuyente, a la gestación de la nacionalidad
Cubana.

Los Abakuá que habrían sido originalmente una sociedad exclusiva de negros, a
partir de una propuesta de la Bococó Efó, comienzan a valorar la posibilidad de

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dar ingreso a hombres blancos, iniciar a los hombres sin exclusión de razas en
el secreto abakuá.

La iniciativa la promueve el Isué de la Bococó, Andrés Facundo Dolores Petit, en


principio criticado por muchos. Los medios oficiales y la prensa lo tildaban de
brujo y hechicero. Hasta no pocos ekobios lo acusaron de querer vender el
secreto a “los blancos”. Pero finalmente sus ideas unitarias triunfan y el 24 de
diciembre de 1863, se consagra la potencia de blancos: Akanarán Efó Muñón
Ekobio Mukarará. Tendrían su sede en San Lázaro No.115 (antiguo).

Jóvenes de la Acera del Louvre, estudiantes universitarios, Cubanos, españoles


o de otras etnias pudieron desde entonces optar por ser abakuá, siempre que
fueran hombres íntegros y que abrazaran en rigor códigos éticos basados en los
principios de ser buen padre, buen hijo, y sentir como suyos las inquietudes,
dolores y alegrías de sus hermanos de fé.

Los barrios de San Lázaro y Colón darían abrigo a numerosos abakuá. El


primero en sitios como el solar El África (Zanja y Oquendo), los alrededores del
Parque Trillo, el solar Los Muñequitos (San Miguel y Aramburo) o el Callejón de
Hamell. De Colón, conocieron de juegos solares como La California y El Ataúl,
Crespo (Recreo) y Colón, y las cercanías del abrevadero de la Plazoleta de
Antón Recio, entre otros.

SOCIEDADES DE SOCORRO MUTUO

Fundamentalmente en el territorio de pardos y morenos sus antecedentes hay


que buscarlos desde 1860, cuando se llevaba en las iglesias absolutas
separación de bautismo, matrimonio y enterramientos de tal manera que uno se
asentaban los blancos y en el otro indios, pardos y morenos.

A partir de 1866, van surgiendo las Sociedades de Socorro Mutuo que se


agrupan o bien por filiación religiosa y de barrio. En sentido general se admiten
gente de la zona que pagan de 25 a 50 centavos por suscripción. A la gente
enferma se le da apoyo siempre que la enfermedad no sea por alcohol o vida
disoluta. Se le paga 25 a 30 pesos cuando la enfermedad es por tiempo.

Las sociedades que tenían escuelas gratuitas separaban hembras y varones,


algunas tenían un periódico “La Fraternidad” dirigidos por Juan Gualberto
Gómez. En la zona extramuros se organizaron varias instituciones culturales,
donde predominaron el nombre con el santoral católico donde el lugar o donde el
lugar se funda. Casi siempre predominan sociedades con dos objetivos
instrucción y recreo, para garantizar además la educación gratuita de los niños.
La existencia de los mismos es un fenómeno urbano y adquieren importancia en
la medida en que la estructura urbana se amplio por ser zonas de una mejor
concentración poblacional.
51
Estas sociedades fueron amparadas por la Ley de Reunión por la propia España
que trajo a la colonia después de 1868, persiguen objetivo de instrucción y
recreo y adopta la mismas características de sociedades blancas se hace con el
objetivo de desafriconizar a los negros sobre todo lo de cabildos cofradía (como
hermano entre hermana).

Tienen desde su primer momento desde su surgimiento hasta 1887 cuya


característica fundamental es la falta de unión y la actuación dependiente de
estas sociedades. Un segundo momento va de 1887-95. En este período bajo la
guía cartera de Juan Gualberto Gómez que es capaz de crear el directorio
central, Sociedad de Colón, para luchar por los derechos civiles políticos e
igualdad en 1892, se considera las primeras aspiraciones de los negros en
aquellos momentos, de ahí toman sus nombres: Fraternidad, Igualdad,
Concordia, Unión. A partir del 95 hasta finales del siglo tienden a desaparecer
por que sus principales jefes se incorporan a la lucha independentista. En 1899,
abrirán de nuevo sus puertas durante la intervención norteamericana ante el
incremento del racismo.

LA MASONERÍA
Se inicia en Cuba como una institución piramidal de carácter secreto y raíces
rurales en el siglo XIX, como reflejo de las ya existentes en España. En el siglo
XVIII es que se conoce por primera vez en Cuba, en Oriente, al traerla la
inmigración francesa en La Habana cuando su toma por los ingleses 1762-63,
los cuales trajeron este ritual, con una fuerte presencia del ceremonial escocés.

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En la capital las logias más antiguas en el siglo XIX fueron:

• Hijos de la Viuda 19 de agosto 1865


• Amor Fraternal 22 de agosto 1861
• San Andrés de La Habana 7 de enero 1864
• Hijos de América 11 de febrero de 1887
• América 1 de Julio de 1883

Las logias en nuestra zona se registraron más bien en el siglo XX sobre todo en
Cayo Hueso y Pueblo Nuevo, en otros barrios del área.

De vital importancia fue su difusión, la creación el 5 de diciembre de 1859 en


Santiago de Cuba del Gran Oriente español que contribuyó al desarrollo de esta
institución en el oriente del país.

No obstante el hecho de que estas hermandades jugaron un papel importante


para otras zonas en la colonia, no se puede excluir zonas en la colonia, no se
puede excluir el hecho de que tres de las principales figuras que tuvieron una
incidencia en el territorio fueron Masones: Narciso López, José Martí, e Ignacio
Agramonte, en el caso de López este vino de Venezuela siendo masón, Martí
integro las filas de la masonería en España en logia “Armonía” y Agramonte en
logia “Tínima” de Camagüey según registra el archivo de la gran logia de Cuba,
que existe en el museo de los atributos de masón en Martí, donados por Fermín
Valdés Domínguez.

La masonería jugó un papel importante en toda la crisis política del XIX hasta
1868 y después en la guerra estará siempre muy vinculada a las luchas
redentoras.

EL LLAMADO “BARRIO CHINO” Y LA COMUNIDAD


ÁRABE
El tráfico de culíes y la libre inmigración asiática a iberoamérica y en especial a
Cuba, se inicia en la década del 40 del siglo XIX. El arribo del primer contigente
de trabajadores en condición de semiesclavos se produce en junio de 1847 a
través de la firma Zulueta y Cia. Con la coordinación de la casa Matía
Menchacatorre, de Manila y la firma inglesa Tait and Company.

Este comercio se inició en Amoy con las fragatas Oquendo (española) y Duque
of Arq. Yle (inglesa). Ambas con destino a La Habana embarcaron más de
medio millar de culíes.

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Barrio Chino de La Habana.

Gran Bretaña, en pleno auge de su revolución industrial, se convierte en


abanderada de las ideas abolicionistas. En Cuba, por un lado, el miedo al negro
debido a los sucesos de Haití, las crecientes sublevaciones de esclavos y
conspiraciones como la de La Escalera (1844), bajo la necesidad de introducir
nuevas tecnologías hacen ver con buenos ojos esta inmigración. Ya para 1842
el Reino Unido propone la inmigración de trabajadores asiáticos hacia Jamaica,
Trinidad y en el caso de Cuba, especialmente chinos.

No se puede obviar en este recuento la situación de los campesinos en China


que venían a otras tierras lejanas con la esperanza de ayudar a sus familias en
el imperio Manchú y sus imperios vasallos.

El auge inicial de este movimiento migratorio asiático se produce entre 1848 y


1874, ante la prohibición de la trata negrera. El asiático será adjudicado a los
grandes hacendados en condiciones de semiesclavos, de ahí la inadaptación al
medio y al trabajo en la isla.

Los chinos provenían de una antiquísima civilización agraria, con una cultura y
habilidades ya desarrolladas como cultivadores, sobre todo de arroz, razón por
la cual se amotinan, se suicidan en masas o se convierten en cimarrones. Así
mostraron una gran apropiación de sus patrones culturales y una gran
resistencia al proceso de desculturación.

Aún así los chinos con problemas idiomáticos trataron de adaptarse al sistema
de la plantación. Juan Pérez de la Riva señala que las causas del alto índice de
mortalidad en los chinos está dada porque en su patria la esclavitud había
desaparecido casi 2000 años.

El proceso de liberación de los culíes se inició en 1853, pero fue lento y difícil
extendiéndose a 1855 -1872 y no fue hasta la década del 80 que se suprime el
régimen contractual.

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Ya en la década del 60 los chinos se incorporaron a la gesta independentista,
formando parte de la caballería de Ignacio Agramante, las tropas de Antonio
Maceo y Máximo Gómez.

En La Habana trabajaron en la agricultura, en la industria cigarrera, como


peones de la línea del ferrocarril, como estibadores y carretilleros en el comercio
y entre 1850 y el 60, en el despalillo y la producción de tabacos y cigarros;
también fueron albañiles trabajando en la construcción en Galiano y Belascoain
y Reina y Zanja.

Los chinos establecidos en California, EE.UU, y que habían sido atraídos por la
fiebre del oro, fueron expulsados de San Francisco y llegan a Cuba en la
segunda mitad del siglo XIX. Esta nueva oleada migratoria se diferencia de la
primera en que tenían capital y su influencia fue significativa en el ulterior
desarrollo del Barrio Chino, porque además del comercio trajeron juegos
prohibidos como la Charada (Chifa), el Siló, el Mahjong y el Kupar, unido a la
prostitución y la droga. Ejemplo de esto fue la inauguración en 1878 de la Casa
del Opio en Galiano # 116. Esta zona, desde el ensanche del ferrocarril La
Habana-Bejucal se convirtió en el inicio del barrio y sus establecimientos. En
1859 en Zanja y Rayo, surge el comercio de Luis Pérez (Cheng Leng), que
ofrece comida a los obreros del despalillo de la zona. Para 1870 ya se abre la
primera casa importadora de productos asiáticos con un capital de 50 mil pesos,
propiedad de los banqueros Weng Yong Sham y Lam Tong.

A todo ello se unirían las primeras asociaciones de carácter artístico – cultural,


de recreo, secretas, de parentescos regionales, gremiales, políticas y
nacionales, como la asociación Chung Wah, inauguraba el 19 de mayo de 1893
y que se convertiría en la institución rectora de todas los chinos residentes en
Cuba, con local social en el llamado “Barrio Chino” de La Habana.

La población asiática en Cuba tuvo una cresta de crecimiento en 1877, cuando


alcanzó la cifra de 40, 327 habitantes, disminuyendo luego, sin perder su
influencia en la vida económica, en especial comercial y cultural.

El llamado “Barrio Chino” se fortaleció principalmente en las calles Zanja, Rayo,


Cuchillo y San Nicolás, donde descolló el comercio y toda una serie de servicios
comunitarios, en especial: trenes de lavados, fondas, cafés y puestos de
viandas, verduras y hortalizas.

LA COMUNIDAD ÁRABE

Los inmigrantes de procedencia árabe llegan a Cuba desde la segunda mitad del
siglo XIX. Su ingreso se produce tanto por el puerto de La Habana, como por el
de Santiago de Cuba, y su procedencia es amplia. Se asentaron

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fundamentalmente en zonas urbanas, muy vinculados a los comercios e
industrias especializadas.

Los árabes se integran en parte desde el punto de vista religioso a las prácticas
católicas, sobre todo en la iglesia de San Nicolás de Bari. Allí en ocasiones
oficiaría un sacerdote de origen libanés.

La ciudad de La Habana les brindó abrigo en diversos repartos y poblados, pero


tuvieron especial preferencia por las calles: Monte, San Nicolás, Corrales,
Figuras y Antón Recio; formando el llamado “Barrio Árabe” de La Habana.

INDUSTRIAS TABAQUERAS, IMPRENTAS Y


PERFUMERÍAS
La industria tabacalera comienza a desarrollarse a ritmo galopante desde 1817
con el desestanco del tabaco. Según Memorias de la Real Sociedad
Económica Amigos del País, en 1836 ya había en La Habana 306 tabaquerías
con 2,152 tabaqueros, incluyendo a esclavos. Promediaban entonces 7
operarios por taller. Para 1861 las estadísticas reportan la existencia de 516
tabaquerías con una fuerza de trabajo superior a los 15 mil hombres y casi 30
trabajadores por taller. Muchas de aquellas fábricas se establecieron en arterias
y calles centrohabaneras. El cuadro que ofrecemos a continuación refleja
algunos de los talleres de la localidad hasta la década del 80.

AÑO MARCA DIRECCIÓN


1821 El Crédito Figuras No. 7
El Guardián Neptuno No. 172
1831 La Lealtad San Francisco y Salud
1834 Francisco Larrañaga Belascoain No. 213
1840 El Fígaro Sitios y Ángeles
1844 H Upmann Carlos III No.183
Industria No 160
Partagás Galiano No. 98
Ramón Allones
1845 La Corona Calzada Belascoain y Ánimas No. 129
1853 El Rey del mundo Marqués González No.10
1855 Flor de Loto Lealtad No. 110
1858 La Carolina Ánimas No. 100 y 102
1864 La flor de T. Gutiérrez Dragones No. 6 y 8
1870 El Ecuador Rayos No. 63
1872 Romeo y Julieta Belascoain 2ª
1874 Belinda Gervasio No. 96
Flor e A. Fdez García Neptuno No. 172
1879 La miel Maloja No. 31
Flor de Benito Súarez Reina No. 137

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1880 La huelvana Campanario No. 147
El águila de oro Lagunas No. 85
La sociedad Manrique No. 138
Flor de Coruje Gervasio No. 138
La flor de Cuba Virtudes No. 96
Larrañaga San Miguel No. 58
No me olvides Dragones No. 51
Partagás y CIA Industria No. 160

A partir de la década del 80 se incorporan al rosario tabacalero local, otras


muchas importantes marcas, como Romeo y Julieta (Ánima/ Belascoaín); de
Ignacio Álvarez; Hijas de Cabañas y Carvajal (Zanja No.2 y Carlos III No.181) de
Leopoldo Carvajal, el Rey del Mundo (Belascoaín) de Florencio Mantilla, y la
célebre marca La Corona que cae en manos de la empresa británica Henry Clay
and Bock Co. y se establece en el Palacio de Aldama (Reina No.1).

Como puede apreciarse hubo realmente un boom de la industria tabaquera que,


aunque a finales del siglo comenzó a caer en manos de monopolios de capital
extranjero fue un sector que dejó su impronta no solo en la localidad sino en
toda la cultura y la historia nacional del movimiento obrero.

TABAQUEROS Y GRÁFICOS

La industria tabaquera estuvo siempre muy vinculada a los gráficos, con una
fuerte representación de imprentas en las barrios centrohabaneros. El mismo
pionero de la organización de los tabaqueros y fundador del primer periódico
obrero en Cuba, estaría muy vinculado a la localidad: Saturnino Martínez.

Siendo un inmigrante asturiano, Saturnino Martínez se estableció en la barriada


y se formó como tabaquero. Por las noches, cumplió además labores como
bibliotecarios de la Sociedad Económica Amigos del País. Fue como referimos,
el fundador y director en octubre de 1865 del periódico La Aurora, el primero de
su tipo en el país. Desde sus páginas exhortadas a los obreros a ser cultos, a
que se crearan escuelas nocturnas y bibliotecas para la clase obrera. Saturnino
fue el promotor de la tradición de lecturas en las tabaquerías desde finales de
1865, y fue el organizador del primer gremio obrero Cubano: la asociación de
tabaqueros (Marqués González Nros. 216-218 y Lucena) de La Habana fundada
a mediados de 1866.

Un buen número de imprentas y talleres tipográficos se crearon en esta etapa en


barrios centrohabaneros, hermanándose en la luchas con los tabaqueros, y
generando una tradición combativa que, como veremos en la etapa neocolonial,
se extendió en creses durante el siglo XX.

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LA INDUSTRIA DE LA PERFUMERÍA

Hubo en el territorio varias fábricas de jabones y velas desde fechas tempranas,


pero quizás ninguna tan próspera como la empresa de Cabrisas, Gibert y
compañía, fundada desde 1859 en San Rafael No. 137 (antiguo). Aunque luego
sucumbió ante la competencia de las colosas Sabatés y Crusellas y durante no
pocos años dio batalla con su popular jabón ¨La Estrella¨.

Desde 1882 se registra la fundación de la Perfumería ¨La Constancia¨ de


Eduardo Planté, quien inició sus producciones con cascarillas de Mérida y de
arroz. Sus laboratorios y talleres estuvieron situados siempre en calles
centrohabaneras: Salud, Reina y Manrique.

EL COMERCIO. MERCADOS, TIENDAS, SERVICIOS, EL


JUEGO Y LA PROSTITUCIÓN
El desarrollo del comercio estaría muy en razón con el desplazamiento que
tendría el centro de la ciudad en su proceso de ampliación hacía el oeste y el
hito de la inauguración, el 21 de Julio de 1817, de La Plaza del Vapor, o
Mercado de Tacón.

LA PLAZA DEL VAPOR

Se construye en la manzana formada por las populosas arterias de Reina,


Galiano, Dragones y Águila. Popularmente fue conocido el mercado como Plaza
del Vapor debido a que él catalán Francisco Marty y Torrens (después dueño del
teatro Tacón) tuvo una fonda por el lado de Galiano, con un admirado cuadro
que representaba al buque Neptuno y el primer vapor que en 1819 realizó viaje
entre La Habana y Matanzas.

En 1835 el Capitán General Don Miguel Tacón dispuso reedificar de mampostería el


mercado a través de un contrato con el ingeniero Manuel Pastor y el ayuntamiento. Una
vez constituido y reinaugurado el nuevo mercado se denominó de Tacón, fue entregado
al ayuntamiento.

Por acuerdo del 3 de febrero de 1874 se dispuso que se construyera por el municipio
las casillas interiores del mercado para la venta de carne, así como mesillas viejas de
hierro cortada por el costado que da a la Calzada de Reina (Luis Gonzaga) y por
Dragones, además dos torres y un reloj publico. Acuerdo aprobado por el gobernador
general el 16 de julio de 1870. El Boletín Especial de la provincial el 22 de abril de 1879
se publicó que el ayuntamiento sacó a pública subasta, la construcción del mercado,
situado en el patio del edificio del mercado de Tacón, concediendo presupuesto del
mismo nombre por un número de años que no excediera del 20. El 24 de abril de 1882
quedó aclarado por solución del gobierno general de la Isla que los portales eran de
propiedad privada de los dueños de las casillas de interiores del mercado.

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Al mercado se le siguió llamando popularmente Plaza del Vapor y ya desde la
octava década del siglo XIX era el centro comercial más importante de la ciudad,
notable por su extensión y belleza. Se hallaba dentro de una doble arquería cuyo
centro ocupaban las habitaciones y tiendas de toda especie. El cuadro de la
plaza estaba dividido por un edificio destinado al expendio de carnes.

Su construcción consistía en un conjunto de propiedades que parecían una sola


estructura, especie de bazar inmenso que no tenía un solo dueño sino que
muchos tenían su control, ubicados cada uno con sus respectivas casillas, como
dueños de la misma.

Estos terrenos fueron comprados y utilizados por el gobierno obteniendo de ellos


notables resultados, en sus portales se colocaban vidrieras, quincallerías, con ventas de
objetos baratos. Estaba bellamente iluminado por faroles y quinqués colgantes de las
tiendas, siendo muy concurridas en las noches por las señoritas acompañadas de sus
madres o chaperonas, otros acudían a pasear y pasar el rato.

TIENDAS, CAFÉS Y OTROS SERVICIOS

Al influjo de la Plaza del Vapor y de la creciente población y turismo que le visita,


en muchas de las calles colindantes comienzan a florecer negocios, comercios,
tiendas. Surge en 1876 “J. Vallés” (San Rafael e Industria), en 1881 “La Casa
Grande” (Galiano y san Rafael) y en 1885 “La Época” (Neptuno), en 1888 “El
Encanto” (San Rafael y Galiano), en 1895 “El Bazar Inglés” (Galiano y San
Miguel), de López y Río, “La Filosofía” (Neptuno No.73) de los Santos y otras
más que tendrían su mayor esplendor ya en el siglo XX.

Junto a la Plaza del Vapor y los comercios, van erigirse numerosos servicios en
los que participan también muy activamente las comunicaciones china y árabe.
A principios de la década del 80 se ensancha la calle Galiano, mientras se
decora su entrada en 1886 con un Arco de Triunfo de mampostería entre la
Plaza del Vapor y la Peletería “La Reina”. Al final de Galiano, en San Lázaro se
levanta otro arco que igualmente engalana la calle y se le utiliza como punto de
partida en desfiles habaneros.

A partir del Café “El Louvre”, en los bajos del Hotel “Inglaterra” surgen otros en el
entorno como el Fornos (Neptuno y San Miguel), así como restaurantes y
cafeterías de diversas categorías. Poco a poco comienza la penetración de
capitales extranjeros que invierten en esta prometedora faja cercana al mar y a
la antigua villa. Aparecen empresas como la Remington (Galiano y Conde
Cañongo), prestigiosa firman comercializadora de máquinas de coser.

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Paradójicamente a la multicidad de servicios y ofertas que dan una imagen
urbana alegre y atrayente, se distinguen también numerosas funerarias, entre
ellas la de Guillot, establecida desde 1844, en San Lázaro No. 251, la Agencia
Funeraria Barbosa, en Zanja No.87. la funeraria de Urrutia (San Miguel No.65), y
las de Don Francisco Caballero, una en Concordia No.35 y otra en San Miguel y
Lucena.

EL JUEGO Y LA PROSTITUCIÓN

Siempre polémicos por sus secuelas sociales, muchos de los juegos de


azahares terminan por ser autorizados. Era preferible mantener entretenidos a
los Cubanos, en lugar de pensar en como liberarse del yugo metropolitano. Las
peleas de gallo restringidas por el gobernador Miguel de Tacón vuelven poco
después a contar con todo el apoyo oficial, facilitando el ingreso anual de miles
de pesos a la hacienda Española. Hubo en el territorio centrohabanero hasta
una plaza de toros -por supuesto de efímera trascendencia- pero sí se asimila y
desarrolla la lotería convirtiéndose en vicio popular que tanto escándalo y
corrupción originó desde su establecimiento en 1812.

Los billares, vicio objeto de crítica por José Antonio Saco en Memorias sobre la
vagancia en Isla de Cuba proliferan en los siguientes cafés centrohabaneros.
Juegos menores eran promovidos por propietarios de comercio y servicios
quienes estaban a los incautos que esperaban de los naipes, los dados o las
barajas, un golpe de suerte que cambiara sus vidas.

Las murallas se derrumbaban en 1865 y sin aquella barrera la prostitución


organizada en la calle Bomba y otras visitadas locaciones en la antigua villa,
pareció desbordarse hacía en centro comercial en gestación, con ofertas
especiales. Hermosas mujeres, no pocas de ellas isleñas y hasta francesas,
comenzaron a nutrir finos prostíbulos en las calles como: Virtudes, San Miguel,
Amistad, Zanja y San José.

EL TREN, EL FERROCARRIL URBANO Y OTROS MEDIOS DE


TRANSPORTE

La privilegiada situación geográfica de Centro Habana haría que su territorio


tuviera una incidencia protagónica en los principales acontecimientos de la
ciudad, como la inauguración del ferrocarril en Cuba, el día 19 de noviembre de
1837, día del cumpleaños de la Reina Isabel II de España. Ella había dado
autorización a las obras unos años antes, por gestión de Claudio Martínez de
Pinillo, Conde de Villanueva y Presidente de la Real Junta de Fomento. Cuba se
invertía en el séptimo país en el mundo en disponer de aquel moderno medio de
transporte. Se partía de la Quinta Garcini atravesando 29 kilómetros hasta
Bejucal y poco después hasta la Villa de San Julián de Güines en busca de la

60
producción azucarera. Años más tarde se creaba una línea de pasajeros de
unos 10 kilómetros hasta Marianao, que partía de Carlos III, Retino y Barnet.

La empresa Ferrocarril Urbano de La Habana a partir de 1862 desarrolla


también el transporte de pasajeros comunicando a la ciudad con diversos puntos
y cubriendo el recorrido de calles como: Belascoaín, Reina, Galiano, San Rafael,
Consulado, Neptuno, San Lázaro y San Nicolás.

Las empresas particulares de ómnibus, tirados por caballos, complementaban


todo el servicio de transporte que abarcaba prácticamente todo el territorio
centrohabanero, con paradas en todos los puntos de mayor concurrencia en la
localidad.

INSTITUCIONES ASISTENCIALES Y DE SALUD


PÚBLICA
Las atenciones de salud y asistencia social durante la etapa colonial, aunque
siempre contaron con la voluntad y atención consagrada de instituciones
católicas, en muchos casos fueron insuficientes. El territorio de Centro Habana
por su condición de cercanía a la villa, pero al propio tiempo ser un área
suburbanizada, facilitó que en el se crearan distintas obras de caridad y
beneficencia.

HOSPITAL DE SAN LÁZARO O LAZARETO

Las epidemias eran muy frecuentes, asolaban la población. La lepra provocada


por el vacilo de Hansen era una de aquellas terribles enfermedades infecto-
contagiosas importada de Europa y África. No se conocían soluciones médicas
para este mal, por lo que solo se proyectó aislarlos, evitar el contagio y que
tuvieran en su agonía “Un remanso de paz”.

El 30 de Julio de 1861 se estableció con aquellos fines un grupo de bohíos con


una ermita, en la estancia de los portones cerca del puente de Villarín. En la
segunda mitad del siglo XVIII, el médico tenaza, entidades filantrópicas y
religiosas intervienen para que se construya un hospital de mejores condiciones.
Se logra la posesión de una pequeña faja de terreno, próxima a la caleta 1005.
Aun sin concluir comienza a funcionar el hospital de San Lázaro en el año 1774.

El párroco norteamericano Abiel Abot, enfermo de tuberculosis, viajó a Cuba


para beneficiarse con el clima y aprovechó su estancia para visitar distintos
lugares en 1828, entre ellos el Hospital de San Lázaro. El Sacerdote era amigo
del presidente de los Estados Unidos John Quincy Adams. Le escribió
contándole que cuando llego al hospital se encontró “con la puerta abierta y
61
solo unos cuantos empleados `negros´ encargados de la alimentación. Los
enfermos dormían en miserables chozas, se hallaban desfigurados y con
aire de desesperada angustia” (…) Concluía sus comentarios aseverando “es
evidente que actualmente al institución está muy abandonada” (…) (Abbot,
Abiel. “Cartas”, Consejo Nacional de Cultura, La Habana, 1965, p. 187.)

CASA DE BENEFICENCIA

La casa de beneficencia o de misericordia fue una de las instituciones


asistenciales que hubo durante la etapa colonial. Tuvo por objetivo recibir y dar
atención a los niños que eran abandonados, o remitidos allí por muerte o
incapacidad de sus padres y familiares. En principio la casa cuna se estableció
por iniciativa de Fray Jerónimo Valdés en Muralla y Oficios, durante el año 1785.
El clérigo permitió además que los niños privados hasta de apellido, llevaran el
de Valdés.
Grabado de la segunda mitad del siglo XIX.
Es en tiempos de Don Luis de las
Casas, que la Condesa de Jaruco y
Don Luis de Peñalver, promueven
la construcción de un mejor edificio
en Jardines de la antigua estancia
Betancourt, en Belascoaín y San
Lázaro. Las obras se inician en
1792 a cargo de Francisco
Wanbitel, comandante de la Plaza.
Ya para fines de 1794 se inaugura la Casa de Beneficencia con 34 niños. El cura
Abbot, quien también visitó esta entidad en 1828, escribió que: “tenía
capacidad para 250 pequeños, que había tres veces mas hembras que
varones y que en este caso la atención era ´muy buena´”( )

Asilo de mendigos que existía junto a la


Casa de Beneficencia.

62
CEMENTARIO DE ESPADA

Desde finales del siglo XVIII se hace imprescindible la toma de medidas sanitaria
en la ciudad a fin de contener en parte las epidemias. El prestigioso médico
criollo Tomás Romay hace notar a la sociedad patriótica de La Habana a la que
nos referiremos en el siguiente epígrafe- a las autoridades y al Obispo Días de
Espada, sobre lo perjudicial que resultaba la práctica de los enterramientos en
iglesias y conventos y la necesidad de destinar un lugar alejado de las
comunidades con ese fin.

Restos del antiguo cementerio de


Espada. Obsérvese las marcas de
los nichos en la pared.

Desde 1804 el Obispo Espada logra la concesión de un terreno en el barrio de


San Lázaro para construir el cementerio. Antes de iniciar las obras debió
proponerle alguna expropiación, desvío de aguas, construcción de puentes y
salvar algunos otros obstáculos, pero lograba su inauguración el 2 de Febrero de
1806. Al camposanto se le conocía con el nombre de: Cementerio de Espada.

El aumento creciente de enterramientos determinó que en 1845 se construyeran


nichos a lo largo del paredón que lo cercaba, aun pueden observarse sus
huellas por las calles de San Francisco, Vapor y Hospital. Sin embargo, desde la
segunda mitad del siglo XIX se hizo imperiosa la necesidad de habilitar un
cementerio de mayor capacidad, clausurándose el cementerio de Espada el 3 de
Noviembre de 1878.

LA CASA DE DEMENTES DE SAN DIONISIO

La casa de Dementes de San Dionisio fue otra de las obras promovida por el
Obispo Espada. A su llegada a La Habana observó que las personas con

63
perturbaciones mentales deambulaban errantes por las calles y lugares públicos
sin ninguna atención.

Numerosos tropiezos tuvo también el Obispo para lograr la atención a los


enfermos. En tanto gestionaba la construcción de una casa para los dementes,
logró que la Casa de Beneficencia recibiera provisionalmente a las mujeres,
mientras para los hombres se habilitó un albergue en el Hospital de San Lázaro.
Los tenemos para la construcción de la nueva entidad asistencial los obtuvo,
justo entre el Cementerio de Espada y el Hospital de San Lázaro.

La Casa de Dementes de San Dionisio fue inaugurada en 1829. En el mismo


terreno de la barriada de San Lázaro fue objeto de sucesivas ampliaciones hasta
se determinó que era más aconsejable el traslado del centro a las afueras de la
ciudad. En 1861 quedó desactivada La Casa de San Dionisio, construyéndose el
Hospital de Enajenados de la Isla de Cuba en las cercanías del pueblo de
Mazorra.

LA CULTURA Y LA EDUCACIÓN. PAPEL DE LA


SOCIEDAD ECONÓMICA AMIGOS DEL PAÍS
Un grupo de prestigiosos intelectuales encabezados por Francisco de Arango y
Paneño, Luis de Peñalver, Tomas Romay, Francisco Joseph Basabe, Juan
Manuel O´Farrill, Diego de la Banera, José Agustín Caballero, Antonio Robledo,
el Conde de la Casa Montalvo, solicitan a la Corona la constitución de una
sociedad que promueva el fomento económico, la agricultura, el comercio, la
industria, la cultura, la técnica, y la ciencia en el país, en correspondencia con el
movimiento de la ilustración en la Metrópoli. Carlos IV de su aprobación desde
finales de 1792.

José Agustín Caballero.

64
La sociedad patriótica de La Habana -léase Sociedad Económica Amigos del
País- se constituyó el 9 de enero de 1793. Su presidente de Honor fue el
Capitán General de entonces, el ilustrado Don Luis de las Casas. Curiosamente
la entidad, que se estableció en el territorio, tendría una decena de nombres:

1. Sociedad patriótica de La Habana (1793-1795, mayo 1839, abril 1843,


enero 1846 junio 1849
2. Real Sociedad Económica de La Habana (1817,1823) enero 1846, junio
1849
3. Sociedad Económica de La Habana (1824-1825), mayo 1843 noviembre
1845)
4. Real Sociedad Patriótica de La Habana (noviembre de 1835-abril 1838)
5. Real Sociedad Económica de La Habana (enero 1846-junio 1849)
6. Real Junta de Fomento y Sociedad Económica de La Habana (julio 1849-
1850)
7. Real Junta de Fomento y Sociedad económica de La Habana (1851-53)
8. Real Junta de Fomento y Sociedad Económica de La Habana (1853-
1857)
9. Real Junta de Fomento y Real Sociedad Económica (1858-1863)
10. Real Sociedad Económica Amigos del País de La Habana (noviembre
1877-diciembre 1896)

Don Luis de las Casas y Arangorri, el gobernante


español que más hizo a favor de la cultura en Cuba.

Desde la fundación de la entidad fueron notables sus aportes al sistema de


enseñanza, al menos en La Habana. Ya hacia 1816 lograban el financiamiento
65
de cinco escuelas para varones y dos de hembras, mientras daban su apoyo a
los escolares de los conventos.

La sociedad fundó la primera Biblioteca Pública, Dragones No.62, luego 308), en


1796, por mucho tiempo la única del país. Gracias al ilustre habanero Antonio
Bachiller y Morales -quien vivió y murió en Reina No. 359, entre Lealtad y
Escobar- ya para 1856 la biblioteca disponía de 4 mil volúmenes. Igualmente, el
célebre escritor José Silvano Jarrín hizo aportes y donativos considerables,
incrementándose las colecciones a 32,458 libros.

Sede actual de la Sociedad


Económica de Amigos del País,
organización social, la más antigua de
las que hoy existen.

Puede verse el busto a su principal


propulsor: Francisco de Arango y
Parreño.

La academia de pintura de San Alejandro era también promovida por la


sociedad. Fue dirigida en principio por el célebre maestro francés Juan Bautista
Vermay. El plantel se ubicó en el edificio de Dragones No.62 (hoy 303) desde el
6 de julio de 1856.

Aunque la sociedad continuó promoviendo la instrucción y la cultura, las artes y


oficios, a partir de 1889 el gobierno dictó una ley donde establecía que la
enseñanza primaría pública debía estar bajo la administración y financiamiento
de los municipios.

Las escuelas privadas en aquellos tiempos no tenían una alta incidencia en la


localidad. El colegio la Inmaculada de la compañía Hijas de la Caridad, aunque
fundado desde 1878, no se estableció en San Lázaro hasta 1917. La Iglesia
Metodista Methodist Church -establece a finales del siglo XIX una escuela en
Virtudes esq. Crespo. Otra iglesia representante del protestantismo, los
presbiterianos, se instala originalmente en Manrique No.190, creando centros de
enseñanza vinculados a su prédica en Sitios No. 86 y en Lealtad No. 182.

La sociedad Económica Amigo del País desde sus inicios estuvo políticamente
vinculada a la corriente reformista. Luego, valiosos intelectuales como el
enciclopedista Bachiller y Morales, defendieron a capa y espada el
abolicionismo, como en otros momentos figuras no menos representativas de la
66
institución asumieron posiciones anexionistas o independentistas. De manera
que su acción, como todas las actividades sociales no escapan de la impronta o
la influencia política que -como sabemos- tiene en última instancia una base
económica y clasista.

REBELDÍAS, CORRIENTES POLÍTICAS Y LUCHAS POR


LA INDEPENDENCIA NACIONAL
La riqueza en acontecimientos políticos, obreros y patrióticos que suceden en el
territorio Centro Habanero desde la segunda mitad del siglo XVIII es realmente
admirable, incluyendo la presencia de José Martí y sus primeras actividades
conspirativas.

Los motivos de este privilegio histórico sin duda está relacionado con las
características del territorio en esta etapa. Poco urbanizado aún, pero muy cerca
de la antigua villa, el desplazamiento rítmico del eje de la ciudad hacia aquí, y
sobre todo la masa humilde que con un sentido de pertenencia comienza a
compartir el protagonismo de los acontecimientos, junto a las más lucidas y
representativas personalidades.

EL ENFRENTAMIENTO A LA INVASIÓN BRITÁNICA DE 1762

El primero de los combates y luchas políticas que se registra en la localidad, con


un sentido evidente de pertenencia, ocurrió durante la toma de La Habana por
Gran Bretaña en 1762. Por parte de las autoridades coloniales y jefes militares
de la plaza, no hubo la mejor dirección ni espíritu de lucha, salvo en caso de
contados oficiales como Marqués González y Luis de Velasco.

La resistencia y más decidido enfrentamiento al invasor lo brindaron las milicias


criollos y sus jefes. En el caso de Centro Habana se distinguió el regidor y
coronel de milicias Ruiz de Aguilar. Al frente del Batallón de Milicias de
Guadalupe, integrado por mil hombres, incluyendo compañías de pardos y
morenos, aniquiló una batería británica y, cuando ya era un hecho la
capitulación, se mantuvo en armas por la cercanías de la ciudad con el propósito
de reconquistarla y echar a los invasores.

Significativamente en las cargas durante el combate no se escucharían vítores a


España o al Rey, sino “¡Viva la Virgen!” ( ). Era una expresión de identidad
con el credo católico en contra del protestantismo de los anglosajones, pero tal
vez una forma también de eludir el yugo político de toda opresora corona
colonialista.

67
GUADALUPE Y LA CONSPIRACIÓN DE APONTE

A los efectos del estudio de las corrientes políticas en la etapa colonial, las
luchas de los esclavos por la liberación se han incluido en el esquema del
abolicionismo. Realmente habría que discernir entre lo que fue el pensamiento y
proyectos de la naciente burguesía en ella interesada en la situación de fuerza
de trabajo esclavo por el obrero salariado más capaz y con mayor estímulo
laboral y las conspiraciones y sublevaciones de esclavos y negros criollos,
quienes como nadie sentían el peso de la discriminación y la explotación más
despiadada.

La Conspiración que aspiraba, entre otras cosas, a la abolición de la esclavitud


en 1812, va a tener como líder a un centrohabanero: José Antonio Aponte, el
“Espartaco de Cuba”. Se trataba de un negro libre, carpintero imaginario, quien
precisamente durante los preparatorios revolucionarios tallaban una imagen en
madera: de la Virgen de Guadalupe, para la parroquia del barrio. Su casa, hecha
de madera y techo de yaguas, como su taller, se hallaban en San Luis Gonzaga
(Reina) y Belascoain.

Aponte era dirigente religioso del Cabildo, “Shangó Tedeum”, que en 1795,
cuando se anunció la visita del rebelde negro Yean Francois, general de la
Revolución de Haití, pretendió recibirlo y aclamarlo con vítores y festividades.

Logró Aponte organizar una gran red conspirativa, nutriéndose de esclavos,


hombres libres de sectores humildes, artesanos, herreros, empleados, y
labradores de todo el país. Era fundamental la participación de los miembros de
las milicias de pardos y morenos, como el caso de Salvador Ternero, en el
Cuartel de Dragones. Ellos debían ocupar las guarniciones militares mientras se
sublevarían las dotaciones de esclavos.

La rebelión estalla en el oriente a principios de 1812, sin que se logre echar a


andar la maquinaria de los complotados en la capital. Aponte y su estado mayor
eran detectados en el mes de abril. Su cabeza fue colocada a manera de
escarmiento en el entronque de Belascoaín y Reina. Otros de sus compañeros,
como Clemente Chacón – el organizador de la compañía de morenos en Atarés
– cuya cabeza fue exhibida en su casa, por el Puente Nuevo del Horcón (Cuatro
Caminos). Había sido sofocada la primera conspiración general de toda Cuba.

REFORMISMO - ANEXIONISMO

Cuando ocurría la Conspiración de Aponte prevalecía en el sector criollo puntero


la corriente política reformista. Esta toma nuevos formas en la década del treinta
y desde la mitad de la década del cincuenta hasta el estallido de la Guerra.
Luego adopta hasta el ropaje de autonomismo cuando ya ni aquellos cambios
podían neutralizar las ansias de total independencia de Cuba como nación.
68
El anexionismo tiene su mayor cresta entre la mitad de los años cuarenta y la
mitad de los cincuenta del siglo XIX. Igualmente existen conspiraciones
independentistas en la década del veinte, muy vinculadas al movimiento de
liberación anticolonialista en Latinoamérica; Todas estas expresiones tuvieron su
incidencia en acontecimientos concretos en la localidad y personalidades del
territorio. Entre los reformistas se distinguen Antonio Bachiller y Morales y
Domingo del Monte, y entre los anexionistas Miguel de Aldama y Narciso López,
este último, aunque venezolano, vivió en Industria y San Miguel. Su defunción
obra en los registros parroquiales de la iglesia de Monserrate (Galiano y Conde
Cañongo) asentada el 1º de septiembre de 1850.

LA GUERRA DEL 68

La Habana como ninguna otra ciudad se debate entre toda una serie de
posiciones políticas heterogéneas que dificultan la unión, como concentra la élite
de las fuerzas represivas, autoridades coloniales. Pero esta y otras barreras,
como los privilegios de los sectores acaudalados occidentales respecto a los
orientales, impiden que la capital vibre al grito de: “¡Viva Cuba Libre!” Un
militar español diría de La Habana: “Encuentro que aquí son insurrectos los
hombres, la mujeres, los viejos, los niños y los negros. Hasta el aire que
respiro y los adoquines de la calle son insurrectos” ( ) (Colección facticia. Archivo
del Museo Municipal de Centro Habana.)

La Lucha clandestina llamada laborantismo se conjugó con los que se


involucraba en expediciones para participar directamente en los combates,
prevalece una conciencia patriota en el pueblo, aunque no existan compromisos
formales en la insurrección. Así, cuando finalizaba el año 1868, el 30 de
diciembre, fallece en la cárcel el joven combatiente insurrecto Camilo Cepeda,
de 22 años. Se conoce que el Párroco de la Iglesia de Monserrate se ha negado
a recibir el cadáver y el pueblo lo toma en hombros, lo lleva a la Iglesia de la
Caridad (Salud y Manrique), y de allí hasta el cementerio en una imponente
manifestación de 8 mil capitalinos.

Combatientes en extramuros fabrican proyectiles y explosivos como los


tabaqueros Francisco León y Agustín Medina, quienes enmascaran su labor con
ingeniosos enmascaramientos. Son los tiempos en que el joven José Martí, de
sólo 16 años escribe su poema Abdala desde la publicación clandestina
PATRIA LIBRE, o junto a su amigo Fermín Valdés Domínguez, funda también
EL DIABLO COJUELO y la emprenden con la pluma contra el régimen colonial.

El enseñamiento contra el joven Martí es elocuente de la represión que se vivía.


Condenado por su honestidad a 6 años de presidio y trabajos forzados y sin

69
tener en cuenta que sus padres eran españoles y que Don Mariano había sido
aforado y celador de policía.

PRESENCIA DE MARTÍ EN LA LOCALIDAD

Martí nació el 28 de enero de 1853 en la casita de Paula no. 41 (hoy Leonor


Pérez No.314), pero residió y realizó estudios en el territorio del actual municipio
de Centro Habana más que en ninguna otra parte, incluyendo La Habana
Intramural. Veamos:

1852- 7 de febrero - Se registra en los registros parroquiales de


la Iglesia de Monserrate (Galiano y Conde Cañongo) el
matrimonio de los padres de José Martí
1859- Reside en Industria No. 32 entre Colón y Refugio
1866- Vive en Refugio No. 151 entre Morro y Cárcel
Vive en Peñalver No. 114 entre Lealtad y Campanario
1867- Estudia en San Alejandro en Dragones No. 308 (Actual
Escuela Sergio González)
1868- Estudia en el Colegio San Pablo, de Prado y Ánimas
1869- Reside en San Rafael 409 e/ Campanario y Manrique
1870-71- Condenado a prisión, realiza trabajos forzados en las
canteras de san Lázaro, y cumple estadíos en La Cabaña, La Cárcel y la
Isla de Pinos, hasta un primer destierro.
1879- 6 de abril, Bautizo del hijo de Martí José Francisco Martí y Zayas Bazán
en la Iglesia de Monserrate
1887- Se registra en la Parroquia de Monserrate la defunción de Marianao Martí
y Navarro
1907- Se registra en la Parroquia de Monserrate la defunción de Doña Leonor
Pérez

Museo de la Fragua Martiana,


construido en lo que fueron las
canteras del presidio, donde
José Martí realizara trabajo
forzado, siendo marcado como
el preso 113.

70
LOS VOLUNTARIOS Y EL CRIMEN DE LOS ESTUDIANTES DE MEDICINA

El Cuerpo de Voluntarios, en especial la Escuela de Gastadores del Primer


Batallón de Voluntarios de Ligeros, había estado involucrado en el proceso
contra el joven José Martí. El 22 de enero de 1869 los sucesos del Teatro de
Villanueva ponen al desnudo la violencia de estas hordas colonialistas.
Causaron 14 muertos y numerosos heridos. Hasta el fotógrafo Cohner, ajeno a
los hechos, quien salió al balcón en su casa de Neptuno, perdió la vida ante los
disparos indiscriminados de aquellos bárbaros.

¿Pero qué decir cuando la respuesta profanación del sepulcro del periodista
Gonzalo de Castañón hecha por estudiantes de medicina en el Cementerio de
Espada? Quien dude hasta qué punto llegó la represión, sólo tiene que recordar
la arbitraria sanción impuesta a 8 estudiantes de medicina escogidas al azahar:
PENA DE MUERTE POR FUSILAMIENTO. No valió en ninguno de estos casos
las altas influencias de sus padres en su mayoría de familias acaudaladas y de
probada fidelidad a la Corona.

Un mes antes del crimen de escarmiento contra los estudiantes de medicina, en


octubre de 1871, los voluntarios del Quinto Batallón, al mando del acaudalado
Ramón Herrera, se distinguían con las detenciones de la calle Neptuno, la
policía sorprendió el 20 de octubre a varios patriotas que, procedentes del
exterior, quienes comandados por Carlos García, cumplían misiones de enlace.
Uno caía en el encuentro, y otro luego de ser detenido era ejecutado al día
siguiente. Pero además, se desataba una ola de detenciones en La Habana
donde eran maltratados y deportados 67 ciudadanos.

Durante 1872 y 1876 se producían movimientos huelguísticos encabezado por


tabaqueros, cocheros y zapateros, que aunque tenían un carácter reivindicativo,
en el contexto de la guerra se convertían en una expresión política en contra del
régimen colonial. En 1876 era detenido un catalán muy combativo, Don Nicote
Sola Fleixas, director de El Gorro Frigio. Todas las expresiones obreras una
represión inmediata y contundente del aparato represivo.

A pesar del Pacto del zanjón el espíritu patriótico y de lucha no se desarraigó en


la localidad. En junio de 1878 la policía detectaba una imprenta clandestina en la
calle Esperanza, y otro núcleo insurgente en San Lázaro No. 318. Aquí las
fuerzas represivas fueron recibidas a tiro, aunque al final ocuparon un
cargamento de armas y otros pertrechos. Se cuenta que uno de los patriotas
logró escapar, lanzándose al mar.

71
EL MOVIMIENTO OBRERO Y EL “REPOSO TURBULENTO”

La primera de las huelgas de la que hemos tenido noticias en la localidad fue


reprimida violentamente. Ocurrió en el temprano año de 1841 cuando se
construía el Palacio de Aldama. Los albañiles y peones realizaron un paro ante
el injusto sistema de trabajo. Fue entonces fue guardias armados los
conminaron a continuar sus labores y sin atender sus solicitudes les dispararon
despiadadamente, causaron la muerte a cuatro trabajadores e hirieron a otros.

Durante la crisis económica de los años cincuenta, numerosas fábricas y


principalmente tabaquerías cierran o reducen su producción. Muchos obreros de
la localidad emigran hacia Cayo Hueso, Tampa, Jamaica, Brooklyn o Nueva
Orleáns.

En 1865 -como vimos en el epígrafe sobre la industria tabacalera- el asturiano


Saturnino Martínez funda la Asociación de tabaqueros de La Habana y el
periódico La Aurora. Cuatro años después, en plena guerra, los emigrados
constituyen la Asociación Patriotica de Cayo Hueso, prendida por el tabaquero
José Dolores Poyo, y como secretario a José maría Reyes, quien por su nivel
cultural había llegado a se codirector y administrador general de La Aurora.

Ya durante el “reposo turbulento” se crean en el exterior nuevas organizaciones


obreras y patriótico-revolucionarias que contribuyen activamente a los
preparativos redentores. Una de las primeras que se registra en Cayo Hueso
estuvo a cargo de mujeres: el Club Femenino “Hijas de la Liberta” (1878). Luego
surgían: el llamado Club Revolucionario No. 25 (1879), “La Estrella Solitaria”
(1879) y el Club “Ignacio Agramonte” (1879), entre otros.

Mientras tanto, el movimiento obrero en La Habana seguía desarrollándose. Uno


de los primeros países del mundo en conmemorar el Día Internacional de los
Trabajadores fue Cuba. Organizado por el Círculo de Trabajadores de La
Habana, el 1ro de Mayo de 1890 se efectuaba en desfile con la participación de
más de 3 mil obreros, que partió desde el Campo de Marte (Plaza de la
Fraternidad) hacia las calles: Reina, Galiano San Rafael y Consulado, hasta el
Staking Ring (Virtudes y Consulado), el emblemático centro deportivo de la
localidad. Allí hicieron uso de la tribuna más de una docena de oradores quienes
denuncian la explotación reinante, clamaron en favor a la jornada de 8 horas, en
contra de la discriminación racial y a favor de los derechos obreros, incluyendo
los de huelga. Con este acto se iniciaba la tradición de conmemorar los 1ro de
Mayo en el país.

Los preparatorios insurrecciónales, por su parte, continuaban, El general José


María Aguirre se reunía en la sastrería de los Hnos. Carrillo, Justo y Vicente, en
Neptuno entre Manrique y Campanario, en el Café “La Isla” y otros lugares

72
cercanos. Igualmente, otros jefes nucleaban combatientes en la barriada, en su
mayoría obreros y artesanos.

Ya para la década del 90 existían más de 70 clubs patrióticos en Cayo Hueso,


entre ellos el San Carlos, donde José Martí funda el 10 de abril el Partido
Revolucionario Cubano, instrumento decisivo para la organización definitiva de
la Guerra de Independencia.

Surge en La Habana la Sociedad General de Trabajadores, que sustituye a la


Junta de Artesanos y el Círculo de Trabajadores. Su fundación tuvo lugar el 23
de abril de 1893 en el local social de Manrique No. 154. El Día Internacional de
los Trabajadores siguió conmemorándose desde entonces promovido por esta
organización obrera, aun después de comenzada la Guerra de Independencia.

Los preparatorios para la insurrección crecen bajo la orientación de Martí y el


Partido Revolucionario Cubano. El Apóstol visita Cayo Hueso en numerosas
ocasiones: el 15 de noviembre de 1892, el 27 de febrero de 1893, el 8 de mayo,
el 13 de septiembre y el 19 de mayo del 1894. Los tabaqueros recaudaron fondo
hasta jugando béisbol pero sobre todo clamando un día de haber “el Día de la
Patria” y el 10% del salario en apoyo a la causa independentista.

LA GUERRA DEL 95

La última de nuestras guerras por la independencia en el siglo XIX estalla el 24


de febrero de 1895. Había sido determinante en su preparación la labor
realizada por José Martí y el Partido Revolucionario Cubano (PRC), con todos
los emigrados conspiradores, en especial los tabaqueros de Cayo Hueso y
Tampa.

La inteligencia militar española, conocedora de la inminencia del levantamiento


efectúa por días antes de la fecha señalada, la detención de reconocidos
patriotas, como los generales Julio Sanguily y José María Aguirre. No pueden
impedir que el día 24 Juan Gualberto Gómez, delegado del PRC, junto a otros
habaneros se trasladan a Ibarra, en Matanzas, para allí producir el alzamiento.

El 15 de junio de 1895 estalla un levantamiento organizado también por


combatientes habaneros, localizado entre Gabriel y Güira de Melena. Sin
embargo los rebeldes llegan a ser sorprendidos por fuerzas muy superiores y
capturados alrededores de 30 jóvenes insurrectos. Algunos de estos presos
logran escapar e incorporarse al Ejército Libertador. Otros son desterrados y hay
uno, en enero de 1896 que logra evadirse, cuando se le traslada: Máximo
Camero Díaz. Perseguido como prófugo, la policía gubernativa lo asesinaba por
la Calzada de Infanta.

73
La Lucha insurreccional en la capital sería no menos difícil y sangrienta que
durante la Guerra Grande, esta vez sobre todo por la crueldad de Valeriano
Weyler y determinados funcionarios a cargo de la represión citadina.

La Habana se desangra con la caída en combate del general Antonio Maceo.


Pero además, de Juan Bruno Zayas, José María Aguirre, Néstor Aranguren y
otros tantas valientes. La miseria y el dolor invaden la familia Cubana con la
reconcentración, a lo que contribuyen los Estados Unidos con su bloqueo naval
al puerto habanero.

El gobierno de los Estados Unidos se atribuye el derecho de discutir con España


el cese de la dominación europea peninsular, desconociendo a los libertadores
Cubanos. El 1ro de enero de 1899 las fuerzas norteamericanas de ocupación
inician un nuevo y efímero período colonial: el de la dominación y administración
política del poderoso vecino sobre Cuba. No obstante, en aquel momento los del
norte parecieron convencerse de que no podían anexarse la estrella de Cuba.
Instrumentaron en cambio, mercancías políticos para subordinarnos con nuevas
formas, neocolonialmente; y sobre todo, a través de ataduras económicas.

74
III
LA REPÚBLICA NEOCOLONIAL

EL CENTRO COMERCIAL DE LA HABANA

El Centro Comercial de La Habana, su surgimiento y desarrollo, estuvo muy en


sintonía con el centro funcional de la ciudad. Quizás su cara más visible, de
impacto social, lo han sido las tiendas, con sus lujosas aceras y vidrieras
comerciales. Las comunidades chinas y árabes se insertaron muy bien dándole
un toque pintoresco a todo el conjunto comercial y de servicios en función del
turismo, la demanda interna y de una población flotante que por diversas
razones acudía a la urbe capitalina.

Paralelo a las compras se hacían también negocios, se conocía de la última


moda, del último espectáculo en el Alhambra o en el Cabaret Nacional, o se
hacía una estancia en un viaje de esparcimiento. Por eso, se desarrolló toda una
red de servicios públicos y gastronómicos. Surgen numerosos hoteles, frontones
de jai lai, casinos, salones de billar, teatro, cines, cabarets, clubes nocturnos,
bares, prostíbulos.

Significativos edificios públicos aparecen en cierto período. El Ayuntamiento de


La Habana creaba por sus calles instituciones municipales como: el hospital de
Emergencias, el Conservatorio de Música, la biblioteca. La localidad dispuso de
las afamadas escuelas de San Alejandro, de Artes y Oficios. Surgen entidades
como el Museo, el Instituto Finlay, el de higiene. Establecen aquí sus redes
numerosas organizaciones comerciales, profesionales, fraternales, obreras. No
por casualidad monopolios americanos como la Woolworth o Sears escogen el
territorio centrohabanero para fundar sus primeras filiales en el país, o se
edifican las oficinas centrales de compañías tan importantes como las de
teléfono y electricidad.

Se parte de la tesis que existió un máximo esplendor en la localidad durante las


décadas de los años 20 y 30 del siglo XX, donde floreció todo un conjunto de
entidades marcadas por el Centro Comercial de La Habana, entonces en pleno
desarrollo. Futuras investigaciones deberán precisar más en detalle el período
en que se construyen los edificios más representativos de la trama urbana.
Igualmente sobre el uso original, características y readaptaciones del grueso de
las construcciones locales. Todo ello valorado en su armonía con la cultura y el
desarrollo de las comunidades centrohabaneras.
75
URBANISMO Y POBLACIÓN. BARRIOS, AVENIDAS, HOTELES Y EDIFICIOS

El siglo XX atrae consigo un reordenamiento urbanístico y arquitectónico de la


ciudad que se apoya en inversiones estatales. El centro funcional de La Habana
que había estado desde la antigüedad en las cercanías del puerto comienza a
ubicarse a las puertas de extramuros en torno a la Acera del Louvre, lejos del
montonero hacinamiento de comercios, residencias, prostíbulos baratos y
viviendas de pobres.

El estado Neocolonial aunque no dispone de recursos gestiona créditos. Era de


interés de los nuevos políticos mostrar obras constructivas públicas y
monumentos donde su legado fuera expreso, visible y perdurable. A la oligarquía
financiera norteamericana le interesaba mejorar las condiciones de
infraestructura de la ciudad, de manera de ir penetrando en la economía y vida
social habanera con las mejores ganancias.

Desde 1901 comienza a operar el North American Trust con la fachada nacional
de Banco Nacional de Cuba. Otras casas bancarias y nacientes monopolios
como el Trust Company of Cuba (Galiano y San José) se encargarían de facilitar
nuevos empréstitos o de financiar inversiones privadas. (1)

Se erigen obras monumentales como el Palacio Presidencial, el Capitolio, la


Colina Universitaria o edificios majestuosos como los centros gallegos y
asturianos. Es el especialista francés Forestier quien logra dar una cierta
armonía urbanística a todas aquellas construcciones aisladas, con el Paseo del
Prado, el Parque Central, los jardines del Capitolio y el Parque de la Fraternidad.
Toda esta faja flamante de esplendor arquitectónico y urbanístico se convertía
en eje para el desarrollo turístico y comercial, con una alta incidencia para los
barrios centrohabanero.

Como parte de aquel


espíritu monumentalista y
de impacto al visitante, se
proyecta el conjunto
escultórico al General
Antonio Maceo. A la figura
cuestre del Titán de
Bronce se insertaba en la
plataforma la imagen de
Mariana Grajales con sus
hijos jurando fidelidad a la
Patria, las batallas de
peralejo, Cacarajícara y la
protesta de Baraguá. Para
la ejecución de la obra se solicitó un crédito de un millón cien mil pesos. En
76
pública convocatoria a todos los escultores del mundo salía triunfador el
proyecto del italiano Doménico Doni. La obra se ubicó donde antes estuvo la
Batería de la Reina al final de la calzada de Belascoaín. Fue inaugurada el 20 de
mayo de 1916, con motivo del aniversario 14 de la Constitución de la República.

A partir del monumento a Maceo se promueve todo un proyecto de


embellecimiento del litoral habanero y de la avenida costera que lleva el nombre
precisamente de Antonio Maceo. La caleta de San Lázaro fue rellenada para dar
continuidad lineal al malecón.

Las obras del malecón habanero,


proyectados por el ingeniero José
Ramón Villalón involucraban la
zona de los arrecifes del litoral en
San Lázaro, donde estuvo la
Batería de Santa Clara. El muro de
cemento permitía conformar un
agradable paso peatonal donde los
habaneros y viajeros podían recibir
la refrescante brisa marina. La
moderna baranda daba a la vieja
calle de la Marina un nuevo porte,
y lugar ineludible para
enamorados. Capitales
inmobiliarios privados proyectan toda una serie de nuevos edificios de casas a
las aguas del Golfo. “La ciudad ha centuplicado sus bellezas-afirmaba a
propósito la revista Arquitectura-la calle Marina la cual era sucia, fea,
destartalada y pobrísimas sus casas, ha adquirido en poco tiempo un realce
extraordinario, propiedades valoradas hace 4 años en 6000 pesos, hoy valen 8
ó 10 mil pesos”.

El malecón habanero con su avenida


de Maceo se convertía en una de las
calles más hermosas del mundo,
según apreciación de los turistas y
viajeros de la época. Se generaba un
fuerte movimiento de visitantes de
muy heterogéneo carácter. Donde la
marinería en busca de efímera
diversión en bares y prostíbulos,
viajantes de otras provincias que
vienen a la capital con diversos
objetivos, excursionistas, turistas y
hombres de negocios.

77
Las inversiones hoteleras en el territorio resultan un buen termómetro de lo que
empezó a ocurrir. A principios del siglo XX, en 1901 había solo tres hoteles: el
Perla de Cuba, Amistad (130 ½), de Francisco López, El Louvre (San Rafael y
Consulado), de Manuel López y The International (Carlos III # 14), aun en la
zona comercial, cerca de las populosas arterias de Reina y Belascoaín. Se
destacaban unas pocas casas de huéspedes y posadas como la de Soledad
Mérida, en Consulado # 124. Sin embargo el movimiento constructivo aun no se
había hecho sentir.

Durante las “Vacas Gordas” resultado de la Primera Guerra Mundial, la


burguesía criolla logra introducirse en estas empresas junto a especialistas
norteamericanos y en 1919 constituyen la Comisión Naval de Fomento del
Turismo. Son ampliados algunos hoteles como La Reguladora (Amistad # 412),
mientras se construían: El Habana-Madrid (Peñalver # 212), El Roosevelt
(Amistad # 251), El Lincoln (Galiano # 164), El Regina (Industria # 420), El Ritz
(Neptuno # 514), El Bristol (Amistad # 305) y el Royal Palm (San Rafael e
Industria).

Paseo de Carlos III.

Los empresarios norteamericanos, muy astutos en el negocio inmobiliario no


pierden oportunidades en comprar terrenos y promueven la construcción de
nuevos hoteles. En este sentido desollaría John Mc E. Bowman, gerente de una
cadena hotelera en Nueva York, entre ellos el Vil Montt y Biltmore. Aquí va a
construir una especie de sucursales. El Vil Montt habanero es erigido en la calle
Industria, mientras amplía el Sevilla, agregándole el nombre de Biltmore, o sea:
Sevilla Miltmore. Mr. Bowman va a estar muy vinculado también a los negocios
de la casa Vanderbilt, y en “honor” a aquel influyente clan norteamericano, en la
calle neptuno construye el hotel Vanderbilt.

A los inversionistas inmobiliarios y casa tenientes criollos los encabezan en


Centro Habana el senador liberal Alfredo Hornedo Suárez, con su esposa
78
Blanquita Mauri y su socio copropietario de los periódicos El País y Excelsior
(Reina # 158), El ingeniero Cristóbal Díaz, y otras conocidas figuras de la
sociedad habanera de entonces como el Sr. Marcos González de Carvajal, II
Marqués de Pinar del Río, o el famoso químico y farmacéutico Don Ernesto
Sarrá Hernández. El fabricante Antonio Gelavert (Infanta # 65), aportaría
bloques y adornos arquitectónicos prefabricados, incluyendo: columnas,
mensuras, cornisas, frisos, capiteles, dinteles y balaustrados. (2)

Sería interesante que en próximas investigaciones se determinaran las fechas


de la inauguración de cada hotel y los factores involucrados en su promoción y
construcción. Obtendríamos directrices muy valiosas por etapas históricas,
relacionadas indirectamente con la aparición de teatros, cines, las instalaciones
de jaralai, casinos, billares y prostíbulos. De por sí la sola relación empírica -y
seguramente incompleta- de hoteles en el territorio, puede ofrecer luz sobre la
magnitud de este proceso:

Hoteles Dirección Año de Inauguración


Alamac Galiano # 308
Amistad Amistad # 373
Andino San Lázaro # 1218
Los Ángeles Aguila # 459
Ariete San Miguel # 56
Belinda Neptuno # 207
Belmont Industria # 403
La Belleza Belascoaín # 919
Bristol Amistad # 305 1924
Caribe Zanja # 511
Central Consulado # 410
Coal Manrique # 611
El Colonial San Miguel # 254
Deauville Malecón y Galiano
La Estrella Consulado # 311
Gran América Industria # 502
Habana Madrid Peñalver # 212 1921
Hanabana Neptuno # 105
The International Carlos III # 141 (antiguo) Siglo XIX
Konford Perseverancia # 1
Lido Consulado # 216
Lincoln (Richardsen) Galiano # 164 1926
El Louvre San Rafael y Consulado
Madrid Belascoaín # 202
Manhattan San Lázaro # 673
Martí Industria # 173
Moderno Dragones # 165
Merán Industria # 124
Nuevitas Dragones # 163
New Cork Dragones # 156
Origen Galiano # 201
Palacio de la Moneda Animas # 57
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Pan American Consulado # 216
Park View Colón # 101
Isla de Cuba Amistad 130 ½ (antiguo) Siglo XIX
Perla de Cuba Moderno Amistad # 458
Regina Industria # 410
La Reguladora Amistad # 412 (antiguo)
Rex San Miguel # 64
Ritz Neptuno # 514
Roosevelt Amistad # 251
Royal Palm San Rafael e Industria
San Luís Belascoaín # 73
Savey Estrella # 5
Senado Industria # 218
Surf Ave. Malecón # 31
Turis Manrique # 611
Vanderbilt Neptuno # 1223
Washington Virtudes # 6

Significativo resulta que de todos estos hoteles, el único que se distingue en la


trama urbana por su modernismo, propio de la década del 50, es el Deauville. El
estilo arquitectónico de muchos de los hoteles es el ecléctico, como la residencia
de Alfredo Hornedo (Carlos III y Castillejo), la Biblioteca Municipal de La Habana
o la Escuela de Artes y Oficios (Belascoaín y Maloja). Y también, en materia de
estilo, representativos del art decó serían: los Almacenes Ultra (Reina # 109), el
edificio América (Galiano y Concordia). Un caso típico del llamado estilo
plateresco lo fue el edificio de la Cuban Telephone Company (Aguila y
Dragones) en 1927. Del art nouveau, la residencia del dos plantas de líneas
sinuosas en Reina y Escobar. Y en este breve esbozo sobre los estilos
arquitectónicos, imposible dejar de mencionar del neogótico, a la majestuosa
Iglesia del Sagrado Corazón de Jesús (Reina e/ Gervasio y Belascoaín).

Retomando la temática de las inversiones inmobiliarias junto a los hoteles, casas


de huéspedes y posadas, se construyen infinidad de edificios de apartamentos,
muchos de ellos hasta en calles pequeñas con 3 ó 4 plantas. En la modesta
calle Vapor, por ejemplo, se construyó una tetralogía de edificios de 25
apartamentos cada uno. En la calle San Francisco se construyen 6 edificios de
este tipo, incluyendo El Álava. Edificios hasta de 8 plantas se erigieron en calles
como Soledad. Sin embargo del estilo Modernista, tan común en el Vedado, en
Centro Habana son pocos que se distinguen, como el llamado Blanco
(Belascoaín y Zanja).

Es raro caminar en Centro Habana y no ver, por lo menos, edificios biplantas.


Por eso, a pesar de ser el más pequeño de toda la ciudad por su extensión
territorial, con solo 3,47 Km2 , y tener infinidad de comercios y centros
gastronómicos, de servicios y locales sociales o estatales, desde la etapa
neocolonial, tuvo una alta densidad de población. A diferencia del Cerro,
Pogolotti y otros barrios humildes, aquí muchas de las cuarterías llegaron a
80
formarse en edificios altos con divisiones y subdivisiones en lujosas
construcciones.

Se calcula que por el centrohabanero transitaban no menos de 200 mil visitantes


anuales por aquellos tiempos. La población flotante fue siempre muy elevada, al
margen de que la ciudad creció a un ritmo galopante y especialmente los barrios
rodeados de importantes y populosas calles.

Paralela a la avenida Antonio Maceo (Malecón) hay calles que tributan al Paseo
del Prado, los palacios y los grandes parques, consolidándose o convirtiéndose
en arterias radiales de magna importancia en la trama urbana como sedes de
entidades sociales, fábricas o aceras comerciales. Son los casos de San Lázaro
(Calzada Andrés del Norte), Neptuno (Juan Clemente Cenea), San Rafael
(General Francisco Camillo), Zanja (Dr. Carlos J. Finlay), Salud, Reina (Simón
Bolívar) y Carlos III (Paseo de Tacón).

Vías perpendiculares a estas calzadas también van a ser muy importantes en el


movimiento demográfico, desarrollándose populosos y pintorescos barrios. De
Prado a Galiano crecen las comunidades de la Punta, Colón, Tacón y Marte. De
Galiano (Ave. De Italia) a Belascoaín (Félix Varela) se agolpan nada menos que
siete barrios: Monserrate, San Leopoldo, Dragones, Guadalupe, Peñalver (Los
Sitios), San Nicolás y Chávez. Realmente no hubo zonas de extramuros en la
ciudad que se agrupó tal cantidad de barrios en tan reducido territorio. Al
extremo Este, de Belascoaín a Infanta (Ave. Menocal) se mantiene al Norte San
Lázaro, y al Centro Pueblo Nuevo. Surgen Cayo Hueso, y el Reparto El Pontón.

La población que se desarrolla en los barrios va a ser principalmente de


trabajadores del comercio, la gastronomía y otros servicios, así como de
tabaqueros, gráficos y otros sectores de la clase obrera. Desprovista de áreas
verdes en sus aceras, apenas se dejó espacio comunal para 4 parques. Uno de
ellos sería el célebre Parque Trillo, donde se erigió el monumento al General
Quintín Banderas Betancourt, obra del escultor Florencio Gelabert. Se ubicaba
en el barrio nuevo de Cayo Hueso, oficializado como tal en 1912, en la
significativa fecha del 26 de julio. Antes este territorio formó parte del barrio de
San Lázaro, pero al liberarse el espacio que ocupaba el Cementerio de Espada
y el Leprosorio, la población obrera especialmente tabaquera, se incrementó,
llegando a tener en la misma primera década del siglo XX, casi 25 mil
habitantes, más del doble que cualquier otro barrio citadino, por lo que fue una
necesidad subdividirlo.

Otra de las nuevas comunidades fue el Pontón cuyos terrenos durante la etapa
colonial, eran bañados por los arroyos Villarín y Pontón. Al ser canalizados
soterradamente sus aguas hubo un ajuste urbanístico en esta zona de Pueblo
Nuevo. Durante la etapa colonial este barrio habría estado casi suburbanizado,

81
con muy escasa población. Pero ya a la altura de la segunda década del siglo
XX, se había convertido en uno de los más poblados con 12 mil habitantes.

La expansión de la alta burguesía tuvo lugar hacia el Vedado y el Carmelo, y


luego más al oeste, a lo largo de la faja costera hacia Miramar, el Country Club y
Biltmore. Mientras este movimiento urbano ocurrió hubo también un
desplazamiento hacia el oeste del más selecto turismo, síntoma inequívoco de
que el centro funcional capitalino, se movía…A partir de la construcción del Hotel
Nacional, la prolongación del Malecón y la creación de Radio Centro, se
fomentan otros modernos hoteles y edificios de apartamentos, cines, night club,
casinos y cabaret de lujo que compiten con el centrohabanero, que apuntaba
hacia un galopante deterioro, como antes ocurrió con La Habana intramuros.

ACERAS Y VIDRIERAS COMERCIALES. LAS TIENDAS


El comercio en el territorio de Centro Habana se desarrolla, como vimos, desde
la etapa colonial. El mercado de Tacón, o Plaza de Vapor, enmarcado en la
cuadrícula de Galiano, Reina Aguila y Dragones, forma el foco mercantil por
excelencia de la ciudad. Se convierte en una feria permanente donde acuden,
junto a las comunidades de su entorno, toda una población flotante que incluye a
excursionistas, transeúntes y turistas.

Perduran en la República toda una serie de tiendas antiguas como: J. Vallés


(San Rafael e Industria), especializada en venta de ropa masculina, la peletería
La Granada (San Rafael 14 ½ (antiguo)); la llamada Casa Grande (Galiano y
San Rafael); la tiendecita La Época (Neptuno # 359), que aun en 1927 contaba
con solo unos empleados; El Encanto (San Rafael y Galiano), fundada por los
hermanos Pepe y Bernardo Solís, junto a Aquilino Entrialgo. Todos estos hábiles
comerciantes fueron creciendo y comprando casas colindantes hasta hacer de
sus tiendas empresas con muy altas ganancias.

El Encanto adquiriría también locales en San Rafael # 62 y San Nicolás # 100,


así como un área para parqueo en la calle San José.

Las aceras comerciales que más prosperan son las de Galiano, Neptuno, San
Rafael, Monte, Reina y Belascoaín. En menos medida pero también de intenso
tráfico comercial serían las calles Industria San Martín (San José), Amistad,
Salud e Infanta. Con la expansión sustitutiva industrial que se produce durante la
Primera Guerra Mundial surgen y se desarrollan numerosas fábricas criollas sin
perjuicio de la penetración del capital extranjero que a ritmo de elefante va
controlando el mercado.

El trust norteamericano F.W. Woolworth Co. el 20 de diciembre de 1924,


inaugural su primer Ten Cent en San Rafael y Amistad. Introducían un principio
comercial muy a tono con la experiencia monopolista: eliminación del registro
82
con precios bajos y fijos. Las mercancías eran ofertadas a la vista del
consumidor con los precios marcados. Preferían ganar poco en cada mercancía,
pero vender mucho, que ganar mucho vendiendo poco y caro. Por eso, su
máxima fue: “Siempre la mejor calidad a los precios más bajos” (3). Los más
lúcidos propietarios hacían suyo el axioma, surgiendo tiendas como la popular
“Casa de los 3 Centavos” (Belascoaín y Reina).

El año 1936 marca un hito en el desarrollo del Centro Comercial de La Habana.


Para el mes de noviembre de aquel año, la organización denominada “Conjunto
de calles y asociaciones comerciales de Cuba” (Aguila # 507), promueve la Feria
de San Cristóbal de La Habana, semana cultural-comercial a celebrarse todos
los años en saludo al Santo Patrón de la ciudad. Para la revitalización de esta
tradición contaron con el apoyo del Dr. Emilio Roig de Leusheirng, historiador de
la ciudad, maestro Gonzalo Roig, el músico y compositor Obdulio morales y
otras destacadas personalidades de la cultura. Se proponían generar todo un
movimiento cultural y deportivo en torno a la feria para beneplácito de la
población y el turismo.

Participarían en las jornadas culturales, la Banda Municipal de Música de La


Habana dirigida por el maestro Gonzalo Roig varias bandas de cornetas y
tambores representando a las escuelas públicas, una revista coreográfica
preparada por Armando Borroto y Obdulio Morales titulada “El Milagro
AfroCubano”, diversos espectáculos deportivos y el desfile de las comparsas.

Exposiciones en las de las tiendas acompañaban el mejor lucimiento de la feria,


algunas de las cuales dejaron nuestras de copias de obras a manera de
promoción cultural. En especial la tienda “El Encanto”, construyó su moderno
edificio dedico el Saleri Verde de su tercer piso como galería de variadas
muestras de pinturas y esculturas. La cooperativa Fotográfica S.A (Industria No.
156) aportó las fotos necesarias para la divulgación de las ferias, la mueblería de
Urbay y Cerrato (Infanta y San Martín) las sillas para los ritos y espectáculos, y
así otros muchos propietarios y empresas del Centro Comercial.

Las oficinas de la Feria de San Cristóbal de La Habana radicarían en el lobby del


Hotel Royal Palm (San Rafael e Industria) por cortesía de su propietario Pascual
Morán.

A raíz de aquella primera feria, la Woolworth adquiere la tienda que perteneció a


la Casa Grande desde 1881 y locales adyacentes para establecer en gran parte
de la manzana, por las esquinas de San Rafael-Galiano-San Martín, el más
famoso de sus tencenes. El Ten Cents de Galiano se inaguraba oficialmente el
29 de enero de 1937.

83
La Woolworth Co. Sería la
primera empresa en adoptar
el sistema de “TIENDAS POR
DEPARTAMENTOS”. Es
decir que en ellas se podía
hallar todo lo que podía
aspirar a tener en compras
menores la familia Cubana.
Desde un merienda, ventas
de ropas, juguetes, ferretería,
peletería, etcétera. Le siguió
desde 1938 en la aplicación
de aquel novedoo sistema,
casi todo importado de los
Estados Unidos, los
“Almacenes Ultra” (Reina No.
109), luego “El Encanto” (San Rafael y Galiano), que se convertía en la más
afamada de las tiendas. Igualmente serían muy prestigiosas: “Fin de Siglo”
(Aguila y San Rafael), “La Epoca” (Neptuno No. 359), “La Filosofía” (Neptuno y
San Nicolás), “La Opera” (Galiano No.310), “Los Precios Fijos” (Reina y Aguila),
“Flogar” (Galiano y San José) y la Sears, Roebuck andf Co. S.A ( Reina y
Amistad).

No pocas tiendas especializadas se asientan en capitales monopolistas como “El


Bazar Inglés” (Galiano 352). En esta línea de ropa de mujer se destacan los
“Almacenes Inclán (Aguila No. 363), como en tiendas de hombres “J’Vallés”
(Belascoaín y San Rafael), “La Gran Vía” (Neptuno No. 257), “Paramount”
(Galiano No. 504) o “Roseland” (Neptuno y Aguila).

La alta productividad industrial determinó que muchas de las mercancías que


habían sido manufacturada casi artesanalmente, según los intereses del
consumidor, ahora concurrían al mercado a muy bajos precios, pero en
dimensiones y formas Standard. No obstante, hubo tiendas como sastrerías,
ópticas y joyerías que mantuvieron una labor muy profesional, al detalle, para
complacer a los clientes en los más exigentes gustos. Tan solo en San Rafael
existieron numerosas sasterías, entre ellas: J. Mieres y Cia. Quinta Avenida, y la
de Oscar, “el sastre anatómico”. Igualmente los arabes hicieron su aporte con
numerosas sederías y tiendas de tejidos.

Las joyerías centrohabaneras, gozaron siempre de mucho prestigio. Durante la


Segunda Guerra Mundial, con la inmigración de numerosos especialistas de
origen judío procedente de Europa, se enriqueció esta tradición, como también
arabes procedentes del medio Oriente, surge la Asociación de Mayoristas
Importadores de Joyería y Relojes de Cuba (Amistad 252). Entre las joyerías del
territorio estarían :”Le Trianon” (Galiano No. 405), “Casa quintana” (Galiano
84
358), “Mazzeo”(Aguila y san José), “El Gallo”(Galiano y Concordia), “La
Esmeralda”(San Rafel e Industria), “El Cairo” (Galiano y Barcelona),
“Riviera”(Galiano y Zanja), “Francesa”(San Rafael y Amistad”, “Cuervo y
Sobrinos”(San Rafael y Aguila”y la de Ignacio Herrera (San Rafael No.155). Al
finalizar la guerra, el Partido Socialista Popular (PSP) mandó a hacer una obra
para regalar a Stalin en la joyería de San Miguel 155. Consistió en una carreta
de caña con un guajiro, todo talado en plata por los grabadores Rolando Ozón y
Evelio Rodríguez. También en una joyería del territorio se harían los celebres
sortijones de amatista, que regalaban a sus allegados el dictador Batista, tenía
grabada la inscripción F.G (Fulgencio Batista) y al reverso las iniciales a quien
estaba dirigido.

La mayor cantidad de ópticas en todo el país se concentró también en el Centro


de LA Habana. El propio local social del Colegio Optometrista Nacional
(Belascoaín No. 103), radicó en el territorio. Entre las ópticas que se distinguían
pudieran mencionarse: “El Almendares” (San Miguel No. 258), “El Telescopio”
(San Rafael No. 24) y las que pertenecían al libanés Bared (San Rafael y
Consulado) y “El Cairo” (Galiano entre Barcelona y Zanja). En esta última, su
optometrista era quien hacía los espejuelos a Sergio González López “El Curita”,
y a través de Cila Segredo, del Movimiento de Resistncia Cívica (MRC)y Julio
Camacho Aguilera(s) “Jacobo Díaz” del MR 26-7, se le hacían llegar armaduras
graduadas a los combatientes de la Sierra Maestra , entre ellos a Fidel Castro
Ruz, quien solía romper con frecuencia los cristales.

La Asociación de Comerciantes y Propietarios de las Calles Galiano y San


Rafael (Rayo No. 2) había sido la piedra angular en la promoción de las ferias de
San Cristóbal de La Habana. Pero además, otras entidades semejantes del
sector contribuyen al desarrollo de otras aceras comerciales. Entre las más
representativas estarían: la Asociación de Propietarios, Profesionales,
Comerciantes, Industriales y vecinos de la calle Neptuno (Neptuno No. 264), la
Unión de Comerciantes de la Ave. Italia (Rayo No. 10), la Asociación de
Comerciantes de las Avenidas Simón Bolívar(Reina) y Carlos III, el Bloque de
comerciantes de la Zona de Salud, comerciantes de Infanta, la Unión de
comerciantes de Monte y sus calles adyacentes y la Unión de Comerciantes de
las calles Industria, San José y sus anexos.

Existió una importante organización que representó los intereses en particular de


los múltiples negocios que existieron en la Plaza de Vapor. Se le denominó:
Asociación de Comerciantes e Industriales del Mercado de Tacón. El modesto
mercado que había surgido a la sombra de la Estación de Ferrocarril de Pajarito
y Estrella que reconstruido y presentado como el flamante Mercado de Carlos III,
Mucho tuvo que ver en esta obra la familia Hornedo-Mauri, quienes vivían
prácticamente enfrente y entre sus interés estuvo mejorar la imagen visual de su
entorno. Aquí también se organizaron los comerciantes, a través de una
asociación propia del ramo.
85
Estas y otras muchas entidades que sólo se mencionan en el presente libro,
deberían ser objeto de análisis histórico para futuras investigaciones donde
cuántas conexiones sociales y políticas podrán hallarse de su estudio, todas de
incalculable valor para el enriquecimiento de nuestra historia. A priori podeos
comentar que muchos de los integrantes de estas “uniones” y “asociaciones”
eran rivales económicas entre sí, pero la integración a organizaciones o bloques
de calles o aceras, les permitían otras muchas ventajas comunes para marchar
en aparente armonía como las redes técnicas de servicios a sus tiendas,
aplicación de modernas técnicas a sus salones, o el apoyo estatal para la
reconstrucción de aceras y otros detalles de alta importancia comercial.

Durante la dictadura de Batista a los comercios ubicados desde la esquina de


San Rafael y Galiano hasta Prado se le llamó: “la mejor acera comercial de
Cuba”. Partiendo de la iniciativa de “El Encanto”, el “Ten Cens” y las principales
tiendas por departamentos habían ambientado sus salones con aire
acondicionado, e instalaban novedosas escalera mecánicas para el acceso a las
distintas áreas. Pero además, sus vidrieras fueron decoradas con elementos de
punta y sus aceras hechas de granito, con medios que facilitó el Ministerio de
Obras Péblicas. Precisamente los comerciantes, de acuerdo con el Ministro y
otros personeros del batistato, organizaron un pomposo acto de inauguración de
la “nueva” Acera de Galiano, con una tribuna instalada en San Rafaely Galiano.
Veremos lo que ocurrió, pero más adelante, como parte del boicot a los
comercios, servicios y centros de entretenimiento, cuando analicemos la lucha
revolucionaria, armada e insurreccional.

SERVICIOS PÚBLICOS: LAS ESTACIONES DE RADIO


El desarrollo del Centro
Comercial de La Habana entraña
no solamente el incremento en
número y significación de tiendas.
Se gesta toda una infraestructura
de servicios de todo tipo, donde
incluso las más grandes
empresas establecen sus plantas
y centrales. Surgen numerosas
emisoras de radio sustentadas
financieramente en anuncios de
comercios y servicios, las que a
su vez, como la prensa plana,
indican en la promoción de
mercado.

86
Uno de los servicios públicos de carácter privado heredado en la colonia, que se
desarrolló en los primeros años de la república, fueron curiosamente el negocio
de funerarias o”trenes funerarios”, como se les llamó entonces. En el año 1902,
de 16 funerarias que existían en la ciudad, 11 radicaban en el Centro comercial
tan solo en la calle San Miguel había tres y una en las calles: Concordia, zanja,
Maloja, Estrella, Aguila, San José, Industria y San Lázaro. Sus propietarios eran
principalmente Cubanos o españoles.

Otros de los singulares “trenes” del territorio lo aportaría la colonia china de La


Habana: las tintorerías o trenes de lavado. De un total de 153 existentes en la
ciudad, 129 eran empresas de esta comunidad, distinguiéndose los de las calles:
Maloja, San Lázaro, Dragones, Sitios, San Miguel, Lagunas, Espada, Salud,
Águila, Campanario, Barcelona, Concordia y Nueva del Pilar.

La comunidad china extendió también por toda la ciudad numerosos puestos de


verduras, viandas y frutas, así como heladerías, donde existieron puntos de
venta en: Belascoaín, Águila, Gervasio, Industria, Maloja, Oquendo, Salud, San
Miguel, San Nicolás y Sitios. De 33 heladerías registraban en el directorio
comercial habanero de 1955, 20 eran de propietarios chinos; e igualmente, se
refleja que aproximadamente el 30% de las tiendas y bodegas en la capital
estaban vinculadas al llamado “barrio chino” de La Habana.

La comunidad árabe, por su parte desarrolló no solo el comercio textil minorista,


las sastrerías, ópticas, joyerías, ventas ambulantes y quincallería, sino también
los restaurantes y fondas, entre ellos: “El Árabe” y “La Estrella del Oriente”. En
general el territorio se caracterizó por los múltiples y variado centros
gastronómicos, teniendo hasta en las tiendas por departamentos lujosas
cafeterías con una atención rápida y esmerada.

Propiamente trenes, o los ferrocarriles, tuvieron su principal emporio en el mismo


centro de la urbe capitalina en la estación de Villanueva, de la compañía de
capital británico Ferrocarriles Unidos de La Habana, se enmarcaban en las
calles: Prado, San José, Industria y Dragones. Desde allí salía una importante
línea que iba hacia el oeste partiendo de las calles de Zanja y luego Galiano.
Una ley autorizaba la permuta de los terrenos de Villanueva, por los estatales de
Arsenal, línea de Galiano pasaba a ser explotada por tracción eléctrica a través
de la empresa New Jersey: Habana Electric Raileway Company (Compañía de
Tranvías Eléctricos de La Habana). Aquella tradicional vía por ferrocarril hacia el
oeste se continuó desde la Estación de Estrella (Barreto) y Pajarito (Retiro).
Desde allí una línea urbana atravesó Infanta y todo el Cerro para continuar el
paseo por tren hacia Marianao y los pueblos del interior de La Habana.

La Habana Electric Railway se fusiona en 1912 con la compañía de Gas y


Electricidad de La Habana hasta 1931 en que aparece la llamada Compañía
Cubana de Electricidad Inc., subsidiaria indirecta de la Electric Bond and Share,
87
que tuvo su edificio central en Carlos III. El capital norteamericano fue más
conservador en medios de transporte como los ómnibus, donde por muchos
años los dueños fueron propietarios criollos, algunos hasta propietarios de una
sola “guagua”, hasta que se construyó la Cooperativa de Ómnibus Aliados
(COA). Eso sí tanto tranvías, luego Autobuses Modernos S.A, como “guaguas”,
hasta que se constituyó la Cooperativa de Ómnibus aliados (COA). Eso sí tanto
tranvías, luego Autobuses Modernos S.A, como “guaguas”, tendrían numerosas
líneas con sus diferentes medios prestando el servicio a pasajeros por las calles
centrohabaneras.

Durante los primeros años de la República la red de teléfonos, se había


extendido a casi todos los barrios de la capital. Sus oficinas y planta central
radicaban en la Plaza del Vapor. En 1909 la Cuban Telephone Company se
establece en Dragones en un edificio detrás plantas que hubo en Aguila No. 161
entre Dragones y Barcelona. Se proponían introducir el equipamiento para un
sistema automático y extender el servicio telefónico a todo el país.

La Cuban Telephone demostró ser una


empresa muy eficiente contribuyendo a la
gestación del poderoso trust: Internacional
Telephone and Telegrahp Corporation (ITTC).
Obtener dividendos que en breve les permite
hacer reinversiones. Una de ellas dio lugar a la
primera emisora de radio que oficialmente se
registro en el país. Se estableció en su edificio,
con un estudio de radio anexo enfrente, por la
calle Aguila. A la planta se le codificó con las
siglas PWX. Se trasmitía por la banda de 400
metros, con una potencia de 500 Watts. Fue
inagurada el 10 de octubre de 1922 con un
discurso del Dr. Alfredo Zayas Alfonso,
Presidnete de la República, dirigiéndose
especialmente a los Estados Unidos. El
programa artístico incluyó la interpretación de
música Cubana, con danzones ejecutados por
la orquesta dirigida por Luis Casa Romero y
números en las voces de las sopranos Rita Montaner y Lola de la Torre, el
violinista Joaquín de la Torre en la ejecución del Ave María de Schubert-
Wilhelny, acompañado al piano por su esposa Matilde González. Recitación de
Gustavo Robreño y otras destacadas actuaciones en vivo.

El Campoamor (Industria y San José), “EL PRIMER TEATRO DE CUBA CON


APARATO DE RADIO” reproducía en alta voces la histórica transmisión. Lo
mismo hacía el Hotel “La Reguladora” (Amistad No. 412), más cerca aún de la
planta de radio, quien además oferta a sus huéspedes y visitantes el nuevo
88
cóctel “RADIO”. Por otra parte, hace rápida competencia a empresa vendedora
de aparatos de radio, vinculada igualmente a la Cuba Telephone, Mr. Frederic
W. Borton, gerente de la empresa Electric Equipment co. Of Cuba, quien hace
las ventas desde su local en Galiano No. 29, por precios entre 300 y 75 pesos.

Exactamente 5 años después de aquella histórica transmisión radial, el 10 de


Octubre de 1927, la Cuban Telephone Company inagura el nuevo edificio de
seis plantas con terrenos adquiridos hasta la calle Dragones. Para el sexto piso
de la flamante edificación trasladan todo el sistema radial, con la acústica y
condiciones técnicas necesarias, incluyendo camerinos y otras facilidades para
los artistas e invitados.

El célebre músico y compositor de “Si llego a besarte”, Luis Casas Romero sería
el director artístico de la PWX, luego clasificada como CMC. El y su hijo Luis
Casas Rodríguez habían sido realmente los primeros en crear la radio en Cuba.
Desde 1920 habían creado una planta de radioaficionados y ya para el 22 de
agosto de 1922 inician las transmisiones, desde su domicilio en Animas No.
99(antiguo), luego 457, entre Manrique y San Nicolás. Salían al aire a partir de
las nueve de la noche, con el cañonazo. Transmitían música y ofrecían
información, incluyendo el boletín sobre el estado del tiempo. La emisora se
codificó como la 2 LC. Oficialmente fueron los segundos en crear una planta de
radio ya que su inauguración oficial fue en 1923. Estuvo en la banda de 360
metros con una potencia inicial de diez Watts, que fueron incrementando.

El senador Alfredo Hernández Suárez, figura constante en la historia neocolonial


centrohabanera, es de las primeras en crear una planta de radio, la 2 EP, en
1925. El dinámico Mr. Bordon, que vendió los primeros aparatos de radio de La
Habana llegó a constituir más de una planta de radio una de ellas con sede en
Galiano No. 29 esquina a Animas. La Westinghouse Electric Internacional Co.
(San Francisco y Salud) constituyó la 2EV. La Casa Salas (san Rafael No. 14),
de los hermanos Manuel y Guillermo Sals, crearían primero la 2 MG y luego la
CMB2 donde promovieron a la jazz band de los hermanos Castro. La Casa
Lavín (San Lázaro 99) creó la CMY, John L. Stower (San Rafael No.29), la 2 YR,
Oscar Collado (Neptuno 97), la 2OL; Fernando Mendoza (Aramburu 23, altos), la
CMBE; Ricardo Derkins (Crespo 9), la CMBP; Emilio Perera (Trocadero 111,
altos), la CMBT; Manuel Cruz (Industria 106), la CMCA; Angel Bertematy (Jesús
Peregrino 108), la CMCD; Julio E. Doler (Aguila 24); la CMCE; Rafael Fernández
Morejón (Estrella 121), la CMCH; Raoul Karman (Rayo 67), la CMCF, y la
institución Radio Club de Cuba en los 1219 kilocidos, en la banda de 246
metros, la CMCC, en planta en los altos del edificio en Genios No. 23.

Durante la década del 30 desaparecen muchos de las primeras emisoras, y no


son tantos las nuevas plantas de radio. Aunque sí algunas de mucha
significación como la que constituyen Miguel Gabriel y el comerciante de medias
de vestir Angel Cambó: La CMBY, en la bandas de 1440 kc. Se le conoció en
89
principio como “La Casa de las Medias” (Infanta 159) y luego con las siglas:
CMQ.

Surgen en territorio centrohabanero: Radio Alvárez (San Miguel 570) con la


CMBX. La jabonería Sabatés S.A constituye en San Miguel 314 la CMKC,
“Radio Jabón la Llave”. Otra industria del Cerro, la Ivonbeer establece la CMCQ,
en Galiano 464. La Casa Lavín deja sus estudios originales en San Lázaro para
crear la CMCX en reina No. 314. Surge la emisora que se hace llamar “La
Predilecta”, con las siglas CMCW, transmitiendo desde Malecón y Galiano. El
Nuevo Frontón (Belascoaín y Sitios) constituye la COCH, más otras de efímera
trayectoria es: San Rafael 108, Hospital 658 y Malecón 673.

La emisora de mayor trascendencia político cultural va a inaugurarse el 1ro de


abril de 1943. Sería conocida como la “MIL DIEZ”, con el lema “TODO LO
BUENO AL SERVICIO DE LO MEJOR: EL PUEBLO”. Se trataba de la
esplendida emisora CMCX que fundara Francisco Lavín y era adquirida por el
Partido Unión Revolucionaria Comunista (URC) a un costo de 75 mil pesos. Le
llamaron “Mil diez” porque realmente se ubicaba casi al centro del dial, en los
1010 kilociclos. Tenía la ventaja de que no solo transmitía por onda media, sino
también por onda corta, con el código COCX, banda de 31 metros. Era un canal
libre internacional que entraba con claridad en toda Latinoamérica y otras partes
del mundo. Su director general fue Ibrahin Urbino, el responsable técnico, el
ingeniero Raul Karmann, e integraron su cuadro de locutores, entre otros:
Manolo Ortega, Ramiro Obrador, Abilio Felipe, Enrique Marrero, Pepe Agüero,
Enrique Sardá y Juan Ramón González Ramos, “Tatita”.

La Mil Diez tendría 18 horas diarias de producción. Su misión fundamental fue


mantener un noticiero con 12 ediciones al día, sobresaliendo por su dinamismo y
objetividad. Fue además una radio de nuevo tipo porque dio un vuelco a la
concepción musical y dramática que se hacía hasta entonces. Los artistas que
trabajan en la Mil Diez debían ser talentosos, pero además, estudiar. Fue
promotora de numerosos valores artísticos, cultivando la música Cubana o los
mejores valores del teatro nacional e internacionales, sin concesiones
mercantilistas a la mediocridad. Fomentó además la investigación social y el
estudio de la cultura Cubana con una bien dotada biblioteca que atesoró hasta
obras originales de compositores Cubanos del siglo XIX.

Otra emisora destacada que tuvo sus orígenes en territorio centrohabanero fue
la COCO. Había sido creada por la familia Casas, a manera de continuidad con
su significativa “LC. Al complementar las emisiones en onda corta y larga a la
clave de la planta se le sumaron las siglas CMCK. En 1948 es el afamado
periodista Guido García Inclán, quien se convierte en el director del dueto radial
COCO-CMCK (Manrique No. 166), añadiéndole el slogan “EL PERIODICO DEL
AIRE”. En el suplemento humorístico se iniciaría como escritor Enrique Núñez
Rodríguez.
90
Durante la década del 50 son mucho menos la cantidad de emisoras radiales
que inciden en el territorio de Centro Habana, que continúa cediendo los lugares
de preferencia que gana el Vedado. No obstante el proceso continúa y aún
surgen nuevas plantas y estudios radiales, como la alabardera batistiana que se
instala en la cúpula del edificio de la CTC (San Carlos y Desagüe), codificado
como la CMCF (4) aparece en los altos del Mercado de Carlos III (Carlos III s/n,
entre Pajarito y Árbol Seco), la CMBG, “RADIO MUSICAL”. La Cadena Oriental
de Radio, desde Campanario 215 se distinguió como tribuna en no pocas
intervenciones contra el régimen durante los primeros años del batistato. Y por
Infanta surgen: el duelo se siglas CMCQ y COBA, de “LA ONDA MUSICAL DEL
OYENTE” (Infanta 801), y Radio Progreso, “LA ONDA DE LA ALEGRÍA” (Infanta
105-109).

El nuevo edificio de Radio Progreso era inaugurado el 28 de noviembre de 1953.


Se trataba de una emisora que había tenido sus orígenes en las primeras
estaciones de la calle Monte y luego fortalecida desde los bajos del Centro
Gallego (San José 104). Manuel Fernández Balmaceda, Vice-Presidente de la
Federación de Radioemisores de Cuba y su hermano Ovidio, habían formado la
empresa Estaciones Radiodifusoras Radio Progreso S.A. Con capitales
adquiridos a través de anuncios comerciales, construyeron el edificio de Infanta
105, diseñado por el ingeniero Carlos Estrada Castro, en el más moderno
sistema y con equipos de punta. La amistad entre el ingeniero Estrada y el
especialista de los Mestre Espinosa, permitió que los errores técnicos cometidos
en el ampuloso edificio de Radio Centro, no se repitieran. De manera que los
estudios de Infanta, aunque más modestos, fueron de superior nivel técnico y
acústico. Un golpe de suerte quizás, a favor de las emisoras radiales
centrohabaneras, ya casi en la despedida del máximo esplendor comercial en el
territorio.

LA PROSTITUCIÓN. EL JUEGO Y LAS DROGAS


La proliferación de la prostitución en determinadas zonas del territorio formó
parte del sistema de comercios y servicios de la ciudad, en gran medida en
función del turismo. Nació en la República y se desarrolló en la República junto
al juego y las drogas como oferta especial de la industria del entretenimiento.

La Habana fue “el Montecarlo Caribeño”, “el París de las Américas”, - al decir de
la época. Y realmente el lugar que ocupó esta plaza en la arena internacional
hizo tan famosa a la capital de la Isla como el azúcar, el tabaco y el ron. Las
condiciones que generaron y dieron tal magnitud a esta lacra social se asoció
no solo a la variedad y significación de los prostíbulos, sino a las posibilidades
ambientales y de comunicación, a todo el sistema de infraestructura con cabaret
como el Nacional (San Rafael entre Prado y Consulado), clubs nocturnos como
el Palermo (Amistad esquina a San Miguel), escuelitas de baile, hoteles, edificios
de apartamentos, y posadas.
91
Al descorrerse las cortinas del siglo XX ya aparecía invadido de prostíbulos el
noreste del actual municipio de Centro Habana. Comprendían no solo Colón,
sino también en cierta medida los barrios de Tacón, Marte, Dragones, San
Leopoldo y Monserrate. Las calles con mayor afluencia a este “comercio” eran:
Amistad, Virtudes, San Miguel, Rayo, Ánimas, Blanco, San José y Zanja. No se
trataba de balluses baratos, como los de la calle de la Bomba y San Isidro, sino
de elegantes casas donde las pupilas eran mujeres muy hermosas, de cierta
fama por sus artes y especialidades eróticas, algunas extranjeras,
principalmente francesas; otras, por su cultura y refinamiento, debieron
pertenecer a sectores de la burguesía y la aristocracia colonial cuyas familias
quedaron arruinadas durante la Guerra de Independencia. De semejante origen
eran igualmente muchos de sus promotores – protectores – explotadores, los
proxenetas, conocidos popularmente como “chulos”.

Una de las casas – burdeles fue la de “Marina” Cuenyas en Consulado No.14


(antiguo), y en el edificio de enfrente, en los altos de la farmacia del Dr. Miriarte.
“La Camagüeyana” no fue menos famosa, en la calle Blanco, hacia San Lázaro,
“cuyo chulo era de una gran familia y donde ejercía la prostitución Luz
Gil, luego vedette del Alhambra” (5). Igualmente la de “Raimunda”, en los altos
de Virtudes, Blanco, o la de “La Americana” (Ánimas 32, antiguo), la de “Marina
Goutier”, “Mercedes Chihuahua”, “Lina Frutos”, en edificios confortables como
Rayo No. 14, Malecón No. 69… Asegura Dulcila Cañizares en sus interesantes
investigaciones sobre el tema fue a este tipo de prostíbulo “no se iba solo a
tener contacto sexual sino que, antes, los políticos y ricachones mandaban
a preparar un buen almuerzo, bebían y conversaban, hacían negocios,
trazaban planes, y luego… buscaban a la preferida” (6)
La familia del famoso proxeneta Alberto Yarini y Ponce de León vivió en Galiano
No. 22 (antigua), actual No.116. Allí tuvo lugar su concurrido velorio el 22 de
noviembre de 1910. Como Yarini era dirigente del Partido Conservador,
correligionarios y amigos como el general Fernando Freyre de Andrade
tuvieron una participación muy activa en las honras fúnebres. El cortejo que le
acompañó hasta el cementerio agrupó a multitudes por las calzadas de Reina,
Carlos III y Zapata.

El escándalo por la muerte de Yarini y las investigaciones al respecto, pusieron


al desnudo hasta que punto se vinculaban la prostitución con la politiquería y el
hampa habanero organizado. Se suceden ofensivas moralizadoras contra la
prostitución, el juego y las drogas pero a iniciativa de una persona o funcionario,
quien a pena estuvo el respaldo formal de otros sectores en el poder, por demás
siempre vinculados a intereses turísticos y sus secuelas sociales, incluyendo la
“trata de blancas”. La muerte del Jefe de la Policía, general Armando de la Riva
Hernández, baleado por el Gobernador de La Habana, Ernesto Aubert Díaz,
92
además aspirante a la presidencia de la República por los liberales es una
muestra de la lucha quijotesca de la honestidad y el civismo contra la impunidad
de la corrupción administrativa y la mafia de entonces.

Poco después de estos sucesos, el Dr. Enrique Núñez derogó la orden No.
55/02, del Gobierno Interventor de los Estados Unidos, que reglamentaba la
prostitución, y suprimió la llamada zona de tolerancia de San Isidro. Su resultado
el adecentamiento esperado, sino que se esparció la prostitución, en sus más
vulgares formas hacia otros barrios de la ciudad, en especial hacia Colón. La
medida marcó el inicio de un serio proceso de deterioro social del
centrohabanero.

Cinco años después se proyectaba la expansión de la industria del


entretenimiento hacia el oeste, en función del turismo y más cerca del nuevo
habitad de la alta burguesía criolla. Se planeaba la construcción de balnearios
de clubs exclusivistas en las playas de Marianao, un hipódromo, grandes
parques, centros de diversiones, casinos y todo tipo de juegos de suerte. La
cámara aprobaba en 1918 un proyecto de ley autorizando y regulando las
apuestas en determinados espectáculos. En el verano de 1919 el presidente de
la República, general Mario García Menocal refrendaba la disposición como
parte de la ley de fomento al turismo.

La compañía de sport y fomento del turismo S.A., que patrocina el Frontón Jai
ALAI de La Habana (Concordia y Lucena), conocido como el “Palacio de los
Gritos”, que durante años tuvo el monopolio de este deporte de apuestas, vio
aparecer en 1921 el Nuevo Frontón (San Carlos y Peñalver), llamado también el
“Palacio de las Luces”, y en 1922 el Frontón Habana - Madrid (Belascoaín entre
Sitios y Peñalver), popularmente conocido como “La Casita Criolla”. Estos
centros fueron acusados de ser virtuales “garitos”, de una fuente de corrupción y
desórdenes. Y en verdad, hubo infinidad de casos de “togo”, pelotari que se
jugaban mal ex profeso para que sus parciales perdieran las apuestas en
coordinación con los recaudadores. En una ocasión, un fanático, sintiéndose
burlado, se lanzó a la cancha revolver en mano y apretó el gatillo frente a un
delantero. Por fortuna el arma se encasquilló, mientras que el juego quedaba
definitivamente interrumpido…

Cuando la campaña moralizadora del comandante Rogelio Zayas Bazán,


Secretario de Gobernación, en 1925, los frontones de Jai ALAI estuvieron a
punto de ser clausurados. Se les llegó a considerar parte del engranaje creado
en función del turismo, pero nocivo en el orden social para el país y las buenas
costumbres, fueron momentos en que cobró fuerza otra campaña contra la
prostitución y el juego. Hasta se valoró derogar la ley de fomento al turismo. Por
supuesto, las ganancias eran demasiado bondadosas y no hubo el consenso
necesario como para prescindir de ellas por preceptos moralistas.

93
El juego y la corrupción, en cambio se enseñoreaban refrendados por el Estado
o extraoficialmente amparados por los funcionarios y agentes del orden. Desde
el verano de 1923 el Dr. Alfredo Zayas Alfonso habría aprobado la ley de la
Lotería Nacional. Aprovechando la esperanza popular de que la suerte podía
solucionar los problemas y aspiraciones individuales y familiares, los
funcionarios recaudarían millones de pesos partiendo del mismo principio de lo
fortuito, proliferan otros muchos juegos, fundamentalmente prohibidos, como: la
bolita y otros de denominación asiática como: la charada (china), el kupar, el
mahjong y el siló. Según el testimonio de una mujer que conoció en su juventud
la vida nocturna, asegura que en los prostíbulos centroahabaneros se
practicaban también otros juegos de azahar de origen chino, como: el Paco Pío,
que era parecido a la lotería, pero los boletos tenían letras en lugar de números
y se tiraban exactamente a las doce meridiano. Otro era “El botón”, utilizado
mayormente por la calle Zanja, y el de arroz. “La casa siempre era la que
ganaba – asegura – pues el banquero era un hábil prestidigitador y hacía
aparecer o desaparecer un gramo hacia la parte que menos apuesta tenía”
(7)

Los salones de billares fueron otros de los centros de ocio y entretenimiento que
se fomentaron como vía rápida para obtener ganancias con poco esfuerzo.
Pronto se convertían en lugares preferidos de proxenetas, jugadores, traficantes,
lumpens y marginales de todo tipo. Centro Habana contó con salones muy
concurridos como los de Infanta No.206 y Concordia No. 954. Desde billares en
el territorio se organizaron entidades del ramo como la Asociación Nacional de
Salones de Billar y la Asociación de Billaristas de Cuba.

El tráfico y consumo de drogas fue otra de las lacras sociales que contribuyó al
deterioro acelerado de la localidad. Paralelo a los viciosos de la marihuana que
iban a fumar al Malecón, lo cierto es que hubo graves situaciones con la droga.
El “Barrio Chino” llegó a ser el mayor consumidor de opio del país, con todo un
régimen de depauperación social. Pero además, muy vinculado a la hampa
internacional y a la trata de blancas se desarrollarían los mecanismos de
promoción de drogas como la marihuana y la cocaína.

El crimen de Rachel Keigester, la atractiva vedette de La Alhambra, no debió


estar ajeno a los turbios negocios de oligarcas criollos con la mafia internacional.
La bella francesa alternaba sus actuaciones como corista en el cabaret “El
Infierno” (Blanco y San Lázaro), donde se mostraba semi desnuda, algo
escandalosos en la época. Era asesinada en 1931, en un apartamento de un
edificio de la calle San Miguel. Nunca se esclarecieron públicamente los hechos,
pese a la intervención de especialistas de renombre, síntoma de que el, o los
involucrados, se hallaban vinculados a las altas esferas del gobierno
machadista.

94
Desde finales de la década del treinta y especialmente durante la Segunda
Guerra Mundial, la prostitución se desborda sobre los límites hasta entonces
soportados por comerciantes, vecinos, e instituciones civiles y religiosas. Ante
las quejas de la Iglesia Metodista y su colegio, situados en la esquina de
Virtudes y Crespo, así como de algunos vecinos y propietarios de comercios de
la calle Zanja, fueron clausurados en 1945 varios prostíbulos. Las casas que se
ubicaban en el entorno de la iglesia y el situado en Zanja entre Galiano y Águila.
Esta acción represiva puntual, sin mayor tratamiento preventivo – que por demás
fue reversible al poco tiempo – era calificada en su momento por un informe
político, como “una recia cruzada que ha dirigido el coronel José R.
Carreño Fiallo contra la prostitución, el proxenetismo y la trata de
blancas […] que le ha valido al ilustre Jefe de este cuerpo [de la Policía
Nacional], los más cálidos elogios y las más sinceras felicitaciones…” (8)
Crímenes, e infinidad de hechos delictivos, borracheras y escándalos de todo
tipo se cometían en el barrio de Colón hasta que ocurre en 1950 la muerte del
proxeneta y líder del hampa Luis Fernández Ramos (a) “Potaje”, en la esquina
de Trocadero y Amistad. Era el resultado de pugnas internas por el control de
mujeres y negocios en la barriada. En las investigaciones del caso se ocupa la
documentación de un traficante donde se revelaban nombres de conocidos
comerciantes, industriales y personalidades de la política y el gobierno. Se
comprobó que si bien la venta de drogas se hacían en infinidad de puntos en la
ciudad, “el centro de las actividades estaba en la barriada de Colón y que
los expendedores estaban amparados por influyentes elementos políticos
que constantemente dificultaban la libre actuación de los agentes del
orden” (9)
Impuesto el secretario de gobernación, Lombato Díaz, de la gravedad del
problema, ordenó al general Quirino Uría la ejecución de un operativo gigante
que abarcó la ocupación de todos los prostíbulos, el registro de todos los
comercios, y la vigilancia permanente por las calles, en busca de proxenetas y
caciques de la droga.

El buró de investigaciones hizo un levantamiento de la situación de la barriada,


precisando que la zona de mayor afectación se encontraba en las calles: Bernal,
Crespo, Neptuno, Malecón, Galiano, Prado, Amistad (de Trocadero a Virtudes),
Animas (Galiano – Industria), Trocadero (Galiano – Industria) y Colón (Blanco –
Industria).

A muchos de los prostíbulos se les reconocía por tener en la entrada un farolito


rojo. Pero no todos eran de igual categoría. Hubo algunos que conservaron
cierta distinción. Como la propietaria “Marina”, la misma que comenzó con una
casita en Consulado y para aquel entonces ya poseía un lujoso edificio con las

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más caras “niñas” de la ciudad. Igualmente la casa administrada por el
afeminado conocido por “Tulipán” (Trocadero 207), se podía escoger a las
mujeres según los gustos y especialidades, mostraban educación formal, el trato
era afectivo, el lugar se hallaba limpio y no se permitían escándalos… otra forma
de ejercer la prostitución lo fue a través de las academias de baile, cabarets y
bares, donde las mujeres eran oficialmente empleadas del centro y luego de
consumir en el lugar salían con el “marchante”. Eran por lo general muchachas
que enmascaraban su condición en el juego a que el cliente las conquistaba.
Sus empleos eran conseguidos a través de anuncios como este: “Solicito
muchachas jóvenes y atractivas para trabajar como meseras en lugar de buena
moralidad. Buen sueldo y comisión. BAR LORENZO, - Zanja y Manrique” (10). Se
dirigían a los hombres con discreción. –“¿Me invita a un trago…?”. La policía
por lo general no las molestaba, no tenían que dar un por ciento de lo que
cobraban excepto si respondían a un proxeneta y no salían nunca por menos de
dos pesos.

Ya para 1950 desde la fachada de la mayoría de los prostíbulos del barrio de


Colón se advertía el estado de abandono sanitario y constructivo. A las mujeres
les estaba prohibido salir a buscar clientes, pero se paraban frente a unas
ventanitas a llamar a los hombres con frases como estas: “¡Psss… ven, vamos
a echar un palito!”, “¡Mira papi, esto es de primera…!”. A los extranjeros
les decían: “¡Eh mister, comán, comán… foky foky for tus pesos!” (11).
Aunque tiempo atrás debieron haberse diseñado para un uso de mayor confort,
en aquellos momentos sus salones y cuartos se hallaban subdivididos en
múltiples cuarterías, separados por rústicas mamparas, colchonetas
visiblemente sucias, paredes con fotos pornográficas e inscripciones obscenas,
espejos en distintos ángulos y el servicio de agua en muchos casos a través de
vasijas y palanganas. El informe del buró de investigaciones sobre la
generalidad de los prostíbulos en Colón, concluía afirmando que era
“indescriptiblemente pavoroso, ofreciendo huellas inequívocas de una
descomposición sanitaria de tal naturaleza, que se hace difícil creer que
hasta ahora no se hayan desatado epidemias que pongan en peligro la
salud de toda la población de La Habana” (12)
A Lomberto Díaz se le pretendió intimidar haciéndole un atentado dinamitero.
Pero mantuvo la orden de cerrar todos los prostíbulos de Colón, sin distinción de
categorías. Los propietarios que no fueron a recoger sus muebles, estos fueron
montados en camiones y depositados por la policía en los Fosos Municipales.
Lomberto declaraba en una entrevista para el periódico prensa libre que había
tenido conocimiento de que la mafia relacionada con el barrio de Colón estaba
haciendo un “pool” para comprar a la prensa y a las autoridades. “Pero
fracasarán – afirmaba – ese es un dinero que mancha y nadie se atreve a

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entrar en trato con ellos […]. Tengo los nombres de los magnates de la
prostitución y la cocaína. ¡Acabaremos con ellos!” (13)
La prostitución pareció efectivamente erradicarse en Colón por un tiempo, pero
inmediatamente se extendió a la zona de San José, mientras reaparecía como
ave fénix en San Isidro. La Victoria, reparto del barrio de Pueblo Nuevo, donde
habían comenzado a gestarse desde la década del 40 un grupo de prostíbulos
de superior categoría a la de Colón, pronto se saturó con múltiples casas,
caminando por calles como Pajarito, Árbol Seco, Estrella… Ambientaban la zona
bares y posadas. Entre estas últimas: La Cuevita (Peñalver 706), El Hotelito
(Estrella 652), Las Brisas (Estrella 465) y Pajarito 12. Hacia allá pretendieron
emigrar muchas prostitutas y chulos de Colón. Pero no había lugar para todos…

Muchas de las prostitutas de casas debieron parar a la categoría de “fleteras”.


Eran las que tenían que conquistar a los clientes en la vía pública. Se vestían
característicamente, con mucho maquillaje y se acercaban a los hombres
provocadamente, a veces incitándoles con la lengua, para que las invitaran a
una posada o a un hotelucho, por un peso o centavos. Eran además, las mas
expuestas a ser detenidas por la policía. “Si no pagábamos al policía de posta
medio peso, o una cajetilla de cigarros americanos - recuerda una ex-fletera
- nos llevaban presas. Los sábados, como eran los días de mayor
movimiento en el negocio, teníamos que pagar un peso.” (14)
Cuando el cierre de Colón la cantidad de fleteras creció tanto que llegaron a
obstruir el movimiento tradicional de mujeres en compras por la Zona Comercial
de La Habana. Contra las prostitutas se dirigió el conjunto de calles y
Asociaciones Comerciales de Cuba, y sus distintas uniones de propietarios. En
mas de una ocasión, el inspector del 2do. Distrito de la policía Nacional detalló
información a sus capitanes como esta:

…he recibido en esta inspección a una nutrida comisión de comerciantes


que se hallaban radicados en las calles de Reina y Galiano, aceras de esa
demarcación a su mando, para denunciar los escándalos que se vienen
suscitando en las puertas de sus comercios, al estacionarse y ejercer
libremente el ilícito negocio de la prostitución, las prostitutas conocidas
por “FLETERAS”, quienes son situadas en esos lugares por sus “chulos”
o proxenetas, los cuales a su vez hacen ostentación de sus influencias y
amistades con policías; llegándose al extremo de ver a las familia alejarse
de estos establecimientos al notar que dichas mujeres no tienen recato
alguno en seducir a los hombres que allí frecuentan y confundirse entre
las damas que pasan o se detienen. (15)

97
Ordenaba el Comandante de turno en aquella ocasión “dar una batida sin
tregua” contra las causantes de las afectaciones de los Almacenes Ultra, las
peleterías La Opera, El Mundo, La Reina y El Gallo; las casas de artículos para
hombres Waterloo y Águila Sport, el cine Reina, la papelería Nacional y todos
los portales comerciales de la calle Reina. La policía de la Cuarta y Quinta
estaciones, hacía frecuentes recogidas, no solo para cumplir las órdenes de la
superioridad, sino para explotar a estas muchachas con algo mas que lo
cotidiano.

“yo recuerdo una vez que me escapé - precisa una de aquellas mujeres -
porque subí por una escalera, y en la primera puerta que encontré toqué y
me dieron refugio. Pude ver por las persianas de una ventana que daba a
la calle, como la policía le entraba a golpes a Yolanda, quien al correr se
había caído. (…) De los balcones se oyeron voces y gritos de:
‘¡Abusadores, ensáñense con El Colorado o cojan a Policarpo,
sinvergüenzas…!’” (16) En realidad solo podían acusarlas de ofensa a la moral,
alteración del orden, o escándalo público, delitos menores cuyas fianzas eran
cubiertas por sus proxenetas para reiniciar una y otra vez parecidos ciclos.

La prostitución, que se había imbricado en el Centro Comercial de La Habana,


convirtiéndose en palanca para el fomento del turismo, junto al juego, desde la
Primera Guerra Mundial, ya al cerrarse la primera mitad del siglo XX, las
dedicadas a tan antiguo “oficio” en la localidad eran muchas, demasiadas,
molestaban…

CAPITALES, EMPRESAS E INDUSTRIAS


Centro Habana vio rivalizar empresas
industriales y comerciales durante la
República Neocolonial en la competencia, no
ya solo por motivos de producción y mercado,
sino por el lugar de emplazamiento de los
negocios. Hubo industriales que ambicionaron
colocar sus plantas fabriles en lugares
céntricos, de manera que los intereses de
ubicación de tiendas y fábricas no pocas
veces de interfirieron.

Numerosas unidades de la industria ligera y


transformadora, preferentemente en las
ramas químicas, papelera y alimenticia,
existen junto a grandes tiendas, empresas de
servicios, bares y cines. Tiende a prevalecer,
98
sobre el capital criollo, el monopolista norteamericano que invade todo lo que fue
reporta altas ganancias. Desde 1927 la FIRESTONE establece una sucursal en
Concordia No. 57 (antiguo), para la producción d artículos de gomas, incluyendo
la producción de cámaras de automóviles y otros medios de transporte.
Igualmente la firma de coser REMIMGTON RAND de Cuba S.A. (Galiano No.
208), con su casa matriz en Nueva York.

Surge la planta embotelladora Pepsi Cola (Carlos III No. 565, e/ Subirana y
Franco), aparece la ORANGE CRUSH. Pero indudablemente las industrias que
más germina en el territorio van a ser la tabacalera, la gráfica, la farmacéutica, y
la de jardinería, cosméticos y perfumería.

LA INDUSTRIA TABACALERA

Notables marcas de tabaco torcido habían ganado prestigio internacional en


tiempo coloniales, facturadas en talleres centrohabaneros. Se distinguían desde
entonces: “El Rey del Mundo” (Belascoaín 2A, antiguo), de Florentino Mantilla;
“POR LARRAÑAGA” (Belascoaín 2B, antiguo) de Alvarez (17) la PARTAGAS
(Industria 15B, antiguo) del acaudalado banquero José Antonio Bances; “Hijas
de Cabañas y Carbajal” (Zanja No. 2), de Leopoldo Carbajal; y “LA
CORONA”, marca producida en el palacio de Reina No. 1, que perteneciera al
hacendado reformista Miguel Aldama Alfonso. Otros fabricantes tabacaleros,
llamados “independientes” habían comenzado a poblar calles como: Estrella,
Gervasio, Maloja, Márquez González, San Rafael, Consulado, Dragones y
Carlos III.

El capital español, y en menor medida el criollo, habían sido los hegemónicos


hasta que en la novena década del siglo XIX comenzó a penetrar el capital
británico a través de la Henry Clay and Bock Company Limited. Esta a su
vez, desde 1898 tuvo su matriz en Londres, con la firma HAVANA CIGAR
AND TABACCO FACTORIES LIMITED. Ya para e 1901 los británicos habían
adquirido siete de las fábricas tabacaleras en la localidad, incluyendo la puntera
marca “LA CORONA” (Reina No. 1) así como: “EL AGUILA DE ORO”
(Manrique No. 226), “LA ESPAÑOLA” (Consulado No. 21), y otros, ubicadas en
Belascoaín, Reina y Márquez González.

El proceso de concentración monopolista norteamericano en la industria


tabacalera realmente despegó en 1899 con las facilidades brindadas por el
Gobierno interventor a la firma HAVANA COMMERCIAL COMPANY, que se
establece en Galiano No. 102. Por esa misma calle le enfrenta su coterránea, la
CUBAN AMERICAN MANUFACTURING CO. Pero ambas son absorbidas en
1902 por la CUBAN TABACCO COMPANY, con su matriz en la AMERICA
TABACCO COMPANY (ATC), de New York.

99
La HENRY CLAY AND BOCK CO. LTD, desde su planta principal en el Palacio
Aldama, generó nuevas marcas, como la “Shakespeare”, “La Legalidad”, “La
Estrella” y “La Aristocrática”. Aunque oficialmente siguió estando registrada
como de nacionalidad británica, el trust newyorkino llegó a someterla
financieramente. Según el profesor investigador Alejandro García Alvarez, la
AMERICAN TABACCO “llegó controlar en 1904 el 52% de la exportación
tabacalera y los llamados comerciantes independientes logran mantener el
control de la otra mitad del total exportado (18)

El Reino Unido en 1916, ante la Guerra Mundial, dispone que toda su flota esté
en función de la contienda bélica, afectándose la exportación hacia ese
importante mercado. La Henry Clay, es cerrada y se limite la producción de
otras muchas fábricas, con despido de tabacaleros. Sin embargo, en post guerra
el fenómeno se reinvierte y surgen nuevos fabricantes. En 1918 se funda la firma
Robert Tabacco Company (Neptuno No. 167) con la marca “ALMENDARES”.
Roberts alterna la importación de cigarros extranjeros, con la producción de
habanos de inferior calidad, pero a muy bajo precio.

La Compañía Tabacalera Cuba S.A., como sucursal de la ATC, es la encargada


de absorber definitivamente a la Henry Clay en 1932. Esta nueva firma
norteamericana es la continuadora del proceso de concentración industrial en la
rama. A expensas de productores independientes asume también estas
históricas marcas: “La Africana” (San Miguel No. 108), “La Comercial”
(Virtudes No. 124) y “Don Quijote de la Mancha” (Estrella No. 19).

Los cigarreros José María Villamil, Benito Santalla Fraguela y Enrique


Beremguer Gisper, éste último de los tabaqueros propietarios de “Por
Larrañaga”, se unen en 1925 para constituir la llamada Compañía Tabacalera
Nacional. Se propone introducir, en negocios con una sucursal de la ATC,
maquinarias para implantar el torcido mecanizado. Resaltaron ser los
promotores de esta primera experiencia en Cuba, pero fueron muchas las
dificultades con los sindicatos tabacaleros y ante la crisis del 29, decidieron
abandonar el proyecto. Villamil y Santalla, por su parte, continuaron
desarrollando la industria cigarrera con sus propias marcas “ROYAL” y
BILLIKAN”. . Primero, desde un modesto taller en Virtudes No. 129, y luego, en
una confortable fábrica en Campanario No. 1002.

La planta de mayor producción cigarrera del país estuvo en territorio


centrohabanero. Fue la firma Hijos de Domingo Méndez, Cigarros y Tabacos
S.A. (Clavel No.13), con su célebre marca "Regalías El Cuño" .También
hicieron notables aportes a la industria del cigarro otros pujantes tabacaleros
como: Ramón Rodríguez e Hijos. (Industria No. 520), de Partagás; el Trust
Tabacalera Cuba S.A. (Reina No. 1), con su histórica marca “La Corona” y “La
Competidora Gaditana”, de Martín Dosal e Hijos (Belascoaín No. 808). El

100
astuto Alfredo Hornedo estuvo también vinculado a estos negocios, en sociedad
con Alfonso Gómez Moa, para la comercialización de los cigarros “POLLACK”.

Curiosamente nombres muy castizos se mezclaron con otros en idioma inglés


para creer marcas y hasta para oficializar títulos a la propiedad industrial. En no
pocos casos se hizo para aparentar la pertenencia a monopolios extranjeros,
como supuesta garantía de poder. Este fue el caso de la firma The Fernández,
Havana, Cigar Co. (Márquez González No. 10), quien en 1936 creó los sellos
tabacaleros “La Democracia” y “Casco de Oro”. Terminó siendo absorbida por
otra empresa independiente criolla.

Hasta la década del 30 muchos propietarios tabacaleros eran todavía de origen


español, muy relacionados con la Península por vínculos filiales, culturales y
hasta políticos.

Unos apoyaron a la República Española, y junto a los obreros, colaboraron con


el envío de tabacos gratuitos al frente. Sin embargo, otros dueños demostraron
ser bien reaccionarios.
A la caída del Gobierno Revolucionario, el fabricante Rogelio Cuervo Aguirre,
propietario del taller de Estrella No. 102, saludó el ascenso del dictador Franco
con la creación de la marca “Falangista”.

Hay productores independientes criollos que no solo logran sobrevivir, sino


asociarse y crear, tanto para el mercado nacional, como para la exportación,
sobre todo a partir de la II Guerra Mundial. “Partagás” (Industria No. 520) llega
a tener mas de mil operarios y una producción pantera. La H Upmann, que en
principio se estableció en San Miguel No. 85 (antiguo) y luego en la calle
Amistad, ya en la segunda mitad de la década del 30, se reubicó en Carlos III
No. 159. Con una acumulación mayor de capital creó condiciones para construir
un nuevo edificio para su producción de cigarros en el Cerro. Para el torcido de
tabaco se ampliaba en la planta de Amistad No. 407. En la producción
tabacalera llegó a ser la mayor del país, por encima de la “Partagás”, y más del
doble que el trust norteamericano Tabacalera Cuba S.A.

Medio centenar de calles habaneras -¡sí, más de 50 vieron nacer y crecer


fábricas y talleres de tabaco y cigarro. De ellas, la calzada de Reina (Simón
Bolívar) fue realmente emperatriz tabacalera, partiendo del Palacio de Aldama,
con casi diez empresas en distintos momentos históricos. La calle Estrella
(Enrique Barnet) le siguió en magnitud, a continuación Zanja (Dr. Carlos J.
Finlay), luego Carlos III (Ave. de la Independencia), Rayo, Dragones, e
igualmente: Neptuno, Desagüe, Consulado, Virtudes, Lealtad, San Miguel; pero
sobre todo; la calzada de Belascoaín (Padre Varela)...

Por Belascoaín llegan casi a coexistir, entre la década del 40 y el 50, siete
grandes rivales criollas. Dos por la acera de los nones y cinco por la de los
101
pares. La “Sociedad Anónima Romeo y Julieta Fábrica de Tabacos S.A.”
(Belascoaín 152), que tuvo un confortable edificio de estilo ecléctico desde 1905.
Su último gerente fue Ramón Argüelles Busto, quien elevó la plantilla de la
fábrica a 800 obreros de ambos sexos, para exportar anualmente más de 20
millones de tabacos. Mas hacia abajo estaría “La Competidora Gaditana”
(Belascoaín 808), de Martín Dosal y Cía. Aunque fue creada desde tiempos
coloniales no la referimos en principio por cuanto su planta no se trasladó hacia
la localidad hasta adentrada la República. Su nómina la integraron 150 hombres
y 75 mujeres. Aunque luego se trasladó, por muchos años estuvo en Belascoaín
No. 713-715, “Flor Larrañaga”, con sus marcas “La Gloria” y “Flor de
Larrañaga”. “El Rey del Mundo” (Belascoaín 852) tuvo entre sus marcas:
“Casamontez”, “Flor de Abelardo”, “La Rumbera” y, por supuesto, “El Rey del
Mundo”. A esta tetralogía se sumaron al final de la calzada: “El Crédito”
(Belascoaín 856), De Rodríguez Mauri y Hermano, y ya en la década del 50: la
fábrica “Campoamor” (Belascoaín 1003) y la firma Constantino González y Cía,
S. en C. (Belascoaín 1052), almacenistas, escogedores y exportadores de
tabaco que vino a poner el sello definitivo de tabacalera por excelencia a toda la
calzada y al territorio centrohabanero.

LA INDUSTRIA GRÁFICA. IMPRENTAS, REVISTAS Y PERIÓDICOS

La industria gráfica criolla durante la intervención norteamericana recibió duros


golpes. Desde entonces se hicieron modificaciones arancelarias que
favorecieron deliberadamente las mercancías procedentes de los Estados
Unidos, limitándose el desarrollo de las industrias del país. Por quilos de papel
impreso debía pagarse un peso y veinticinco centavos, y por igual cantidad de
papel en blanco había que pagar por derecho de aduana, ocho pesos. Por
demás, el Gobierno encargaba los impresos oficiales a editores
norteamericanos, así como los libros de texto para las escuelas. Igualmente se
le concedieron derechos especiales a determinadas empresas, como The
Habana Post Company Incorporated (Industria No 165) para reproducir diversas
obras y materiales en ediciones bilingües inglés-español. Con el nombre The
Habana Post apareció un periódico que en principio tuvo sus talleres en San
Lázaro No 12 (antiguo) y luego en Lealtad No152.

De todas formas los gráficos Cubanos se abrían paso ante la necesidad de


romper la letra y el espíritu dependiente que había estado estrangulando a la
cultura nacional. En 1901 el territorio de Centro Habana aglutinaba más del 75%
de las empresa litográficas de la ciudad, incluyendo a la colosal sociedad en
comandita de P. Fernández y Compañía, la que en principio estuvo en San José
No. 21(antiguo), y luego en Hospital No. 619, esquina a Valle. Además de la
calle San José (José de San Martín), el territorio a comienzos del siglo XX tuvo
impresoras en: Reina, Amistad, San Nicolás, Dragones y San Rafael. El
periódico La Caricatura (Galiano 116, antiguo) aparecería en esa céntrica calle
y no por casualidad, muy cerca de él le antecedió un célebre cine homónimo.
102
También en Galiano No 72 (antiguo) se radicó el taller de la publicación La
Seguridad.

El mismo año 1901 sería prolijo en nuevas publicaciones periódicas. La Gran


Logia de la Isla de Cuba (Reina y Belascoaín) fundaba su órgano masónico de
prensa. Se creaba la revista Artes y Letras (Manrique No. 23), y surgía el
periódico El Mundo (Virtudes 252, entre Aguila y Galiano). Su primer número
vería la luz el 11 de Abril de aquel año. Posteriormente se creaba la Compañía
Editorial El Mundo S.A. (Aguila No. 60, esquina Virtudes) donde se comienzan a
publicar los anuarios y se hace más voluminoso el diario y suplemento
dominical.

La revista Bohemia (Trocadero entre Blanco y Galiano) fue otra de las


publicaciones insignes de la prensa Cubana que en sus comienzos se editó en
Centro Habana. Luego tuvo un edificio ad hoc en la Avenida de Rancho
Boyeros, cerca de la antigua Ermita de los Catalanes, lugar donde se debía
reordenarse el centro de la ciudad según consenso de muchos urbanistas.

El movimiento obrero, siempre muy combativo, contó con varias publicaciones


clasistas, muchas de ellas editadas en impresoras centrohabaneras. En el
verano de 1904 el Partido Obrero de Cuba constituía La Voz Obrera (Concordia
73, antiguo), que luego sería también el órgano de prensa del Partido Obrero
Socialista y del Partido Socialista de la Isla de Cuba.

La Primera Guerra Mundial contribuye al ascenso de la industria gráfica criolla.


Centro Habana se ratifica como enclave de imprentas y editoriales de la ciudad.
Surge, en el mismo año 1914 en que estalla el conflicto, la revista de
generalidades América (Malecón 311). En 1916, la publicación literaria
Adelante (San Rafael 88), Azul y Rosa (San Miguel 30), y poco después la
revista ilustrada Azul (Reina 77). Especializada en temas musicales aparece
Alba (Concordia 16, altos), mientras el Colegio de Arquitectura de La Habana
(Infanta y Humbolt) constituye, a mediados de 1917, la revista Arquitectura.

Los tabaqueros, sector de vanguardia en el movimiento obrero creaban tanto el


boletín de los torcedores como el de los cigarreros. Pero además, desde la
tabaquería La Ideal lograron adquirir una imprenta que sería de trascendental
importancia. En 1925 es ampliada y trasladada para la Sociedad de Torcedores
de La Habana (San Miguel 216, antiguo, luego 622). Se le conocería como “la
imprenta de los tabaqueros” pero en realidad se convertiría por muchos años en
la mejor y más completa imprenta del movimiento obrero y comunista en La
Habana. Aquí se editarían, entre otros muchos documentos de alto valor, los
órganos partidistas El Trabajador y Bandera Roja.

Todo el trabajo de propaganda clandestina se complementó en otras imprentas,


por lo general ubicadas en el territorio centrohabanero como la llamada “Los
103
Bobos de Moda” (Neptuno casi esquina Aramburu), de Santiago García
Martínez y la imprenta de José Prado Betancourt, en Marquéz González, entre
San Rafael y San Miguel.

Desde 1938 comienza a publicarse legalmente el periódico Noticias de Hoy, sin


que apareciera como el órgano comunista. Pero fue un esfuerzo gigantesco del
Partido por difundir la información cotidiana con veracidad y desde la óptica de la
clase obrera. No obstante, las tiradas no se hacían en local propio, con
innumerables inconvenientes. El Parido se propuso, para garantizar la calidad y
la sistematicidad del periódico, adquirir un buen taller de impresión. Se promovió
una gran campaña para recaudar los fondos necesarios. Algunos compañeros
donaron hasta sus anillos de compromiso, entre otros muchos sacrificios,
lográndose recaudar 10 mil pesos. El 26 de Marzo de 1942 se registra el
nacimiento, en Desagüe Nro. 108 y 110 de la empresa periodística Noticias de
Hoy a la que se autorizaba a efectuar todo tipo de impresiones, y en especial
NOTICIAS DE HOY “UN DIARIO AL SERVICIO DEL PUEBLO”.

El señor Alfredo Hornedo Suárez, junto al ingeniero Cristóbal Díaz creaban la


empresa editora El País S.A. (Galiano Nros 48-50) con los periódicos El País y
Excelsior. Hacia 1938 los diarios salieron como uno solo El País-Excelsior,
como en 1945 se editaron unidos El País-El Sol, ya en los talleres de Reina Nro.
158, entre San Nicolás y Rayo. A manera de suplemento dominical lanzaban el
megazine El País Gráfico. Un sobrino de Don Hornedo, Alfredo Izaguirre
Hornedo, sería el propietario de otros de los diarios capitalinos punteros: El
Crisol (Manrique Nro. 166, esquina a Virtudes).

El periódico Avance, de la Compañía Publicaciones S.A., se fundó en 1945,


originalmente con el nombre El Avance Criollo, siempre teniendo

Sus talleres en Consulado No.252. En esta imprenta se editó también el Diario


Nacional, antes de que se trasladara al reparto Ayestarán, en el Cerro. Otro de
los más leídos fue Información (San Rafael No. 467), con un voluminoso
caudal de páginas.

De los periódicos más reaccionarios estaría ante todo Alerta (Carlos III No.
615, entre Marqués González y Oquendo), que fuera punta de lanza del
anticomunismo desde tiempos de la Segunda Guerra Mundial. También en la
extrema derecha estaría el vendido Prensa Libre (Manrique No.563). Mañana
(Barcelona No.56) fue casi una tribuna del batistato, como Pueblo (Zanja
No.352) que luego de haber estado bajo la dirección progresista de Guido
García Inclán, deviene en libelo oficialista de la dictadura batistiana.

Las revistas Carteles y Vanidades se publicaron en el llamado Instituto de


Artes Gráficas de La Habana (Infanta y Peñalver). Su gerente fue el Sr. Alfredo
T. Quílez. Su gerente fue el Sr. Alfredo T. Quílez, quién administro tanto Artes
104
Gráficas S.A, como Editorial S.A, realmente dos empresas en una. La venta de
generalidades intentó hacer competencia a Bohemia y fue representativa de la
ultraderecha política. Vanidades por su parte, fue la revista femenina
especializada de mayor tirada. Dedicad igualmente a la mujer, pero más objetiva
fue Ellas (Concordia No. 55). Y ya, hasta con aspiraciones sectoriales, surgía en
Lealtad No.353, La Voz Femenina .

Muchos cines poblarían el centro de La Habana, y especializados en este medio


surgían en el Territorio: Cine Gráfico (Animas No.506), del Dr. Carlos Roche,
quién desde 1940, además de esta temática trata y aborda aspectos literarios.
Semanario Cinematográfico (Industria No. 52)
Se registró desde los años 40. La Revista Films (Desagüe No.565) ofrecía un
panorama de producciones nacionales e internacionales con el mundo de la
farándula artística. Y Cinema (Industria No. 57), revista que no sólo se
especializó en cine, sino en música con interesante información y comentarios.

Sobre temáticas de radio y electrónica aparecían en 1938 la revista Radio


(Galiano No.18), de Lloret y Cía.; Ondas y Canales (San Miguel No.368), surge
después mientras Radiomanía (Campanario No.607), luego Condesa No.66),
lo registramos ya en la década del 50, con un carácter muy técnico.

De ninguna manera se piense que hemos mencionado todas las publicaciones


talleres e imprentas que hubo en Centro Habana. Pudieran hacerse libros sobre
la Industria gráfica, con sus proyecciones políticas y culturales.

LA INDUSTRIA FARMACÉUTICA

La industria farmacéutica criolla en la localidad comienza a registrarse a saber,


desde el año 1901 con el Laboratorio de Emulsión Creosotada. (San Miguel
No.82, antiguo). Pero se desarrollo sobre todo durante la Segunda Guerra
Mundial como sustitutiva de medicamentos importados. Muchos de los
Laboratorios se crearon con capital mixto o extranjero. Con ello se poblaron las
calles de Infanta, Clavel, San Rafael, San Lázaro, Carlos III, Neptuno, Maloja,
San Miguel o Manglar.

Se constituyen organizaciones profesionales del Sector como el Colegio


Farmacéutico Nacional (Maceo 307) y el Instituto Nacional de Practicantes
de Farmacia (Maceo 661)

Pudiera adscribirse al epígrafe anterior que los Laboratorios Kuba S.A


(Concordia 64) publicaron la revista Kuba, la que junto a artículos propiamente
farmacéuticos se adentró en temáticas de medicina tropical y parasitología. Los
Laboratorios Nodarse (Consulado 206)

105
Comienza en 1944 a publicar la revista Galenos y paralelo a su farmacopea
crean también artículos de perfumería.

Otras empresas farmacéuticas en la localidad fueron: Clío, con laboratorios en


Manglar No.352, entre Franco y Oquendo, y en Carlos III No.1063. La Tropical
Trading S.A se establece en San Miguel No.1 El Instituto Biológico Cubano
en Infanta No.212; Bladiere y Cía. , en Clavel No.302 ; Brokhan en San
Lázaro No. 1219 , y la Sterling Products Internacional Inc. (Maloja 810)
importadora de medicamentos semi-elaborados, así como de pastas dentífricas.

La industria farmacéutica está muy ligada históricamente con la cosmetología y


la perfumería. Por eso no es de extrañar, que los Laboratorios Nodarse
(Consulado 206) creen la parte “Biodental”, o que la Farmacia Monserrate
S.A (Campanario 252). Comercialice “para enmascarar las canas” su agua de
violeta Amper. Igualmente se vincularía con la industria de la perfumería: la
Sociedad de Productos Farmacéuticos S,A (Neptuno 956) la Droguería
Nacional S.A (San Rafael 152) ,y la Cuba Industrial Farmacéutica (San
Lázaro No. 909).

LA INDUSTRIA DE LA PERFUMERÍA

La industria de la jabonería y perfumería en Centro Habana parte del Jabón “La


Estrella” (San Rafael 137, antiguo), de Cabrisas, Gilbert y Cía., y la fábrica “ La
Constancia” (Salud y Reina ) de Eduardo Planté, con su jabón “Habana”
perfumado. A principio de la República en “La Constancia” desde sus nuevas
fábricas en San José No.42 y Manrique No.46, la barriada de Pilar, Francisco
Sabio, sucesor de Planté abre otro taller en la calle Manrique, mientras en Rayo
No.17 (Antiguo) el fabricante Ricardo Lavielle enriquece el mercado de
perfumería capitalino.

Durante la segunda década del siglo XX comienza un proceso de concentración


de perfumerías rectoriado por las Crusellas, constituyéndose la Cía. Nacional
de Perfumería S.A, que radicó en la Calzada de Jesús del Monte. No obstante
en calles centrohabaneras permanecieron algunos talleres. A mediados de la
década del 20 se registra uno de origen chino en Neptuno No.7 (antiguo) a
nombre de Chang. Posteriormente aparece una sociedad en comandita a titulo
de Antonio Chong y Cía.

La comunidad árabe no podía sustraerse de promover esta fina industria de


ancestral tradición en su cultura. En ella se distinguió la familia Habif, con los
laboratorios de Josset en Marianao, pero también en San Rafael No.58, en
Animas No.55 Isacc Habif quién perteneció a la dirección de fabricantes del
ramo tuvo su perfumería en la calle San Rafael, mientras Mauricio y Alberto
Habif la crearon en la calle Animas. En esta última se produjo el perfume

106
llamado “Cachucha”, en correspondencia con el personaje de una popular
actriz del momento.

Enriquecen la industria de la perfumería en la localidad inmigrantes de diversos


origenes, distinguiéndose Jean Danhauser, en Neptuno 114 esquina a
Perseverancia. Aquí se hacían varios perfumes muy vendidos, entre ellos el
“Cleopatra”, Le haría competencia la firma MaxN. Liychi e Hijos (San Rafael
No.252) creadora de esencias y colonias de mucho éxito como el “ Agua de
Abedol”. Ya a partir de la Segunda Guerra Mundial quién más se distingue en
territorios centrohabaneros en la Perfumería Bourjois S.A (Benjumeda No.262
con una gran variedad y especial acierto en la preferencia del consumidor
Cubano.

Numerosos fabricantes domésticos pujan por ser competentes en el mercado,


como Miguel Ángel Noya, con su jabón “Tornillo” (Benjumeda No.266), y
propiamente en perfumería el monarca criollo centrohabanero sería; Agustín
Reyes ( Dragones N0. 456), creador de numerosas y populares farmacias.
Paralelos a ellos proliferan toda una serie de firmas, muchas de ellas solo
virtuales, importadoras y distribuidoras del ramo como: Cía. Ultramar S.A
(Industria 266), Dávila y González (Neptuno 627), Mabuma S.A (Gervasio 63),
Lloret y Cía. ( San Rafael 212), Productos Continental S.A (San Rafael 564),
Realt y Camy (Estrella 855), Perfumes Habana S.A (San Lázaro 316).

MANIFESTACIONES DE LA CULTURA. INSTITUCIONES


Y PERSONALIDADES
El auge de lo vernáculo, de la Cubanía, se desborda con la despedida del
régimen colonial español, con todas sus restricciones e inhibiciones culturales.
Aflora con mas fuerzas que nunca el ajiaco que durante siglos se estuvo
cocinando y que tiene en principio elocuentes expresiones en el teatro
Alhambra.

Durante las tres primeras décadas del siglo XX el Alhambra y toda la red de
teatro y espectáculos dan rienda suelta a la representación de hechos cotidianos
y tradiciones que son acogidas con mucho agrado por el público. El teatro
vernáculo se convierte en gran medida en el centro de la actividad cultural,
absorbiendo a virtuosos artistas e intelectuales procedentes de otras
manifestaciones. Literatos de talla de Robreño, o Sánchez Galarriaga se
involucran directamente en empresas de teatro, igualmente músicos como Jorge
Anckermann, Ernesto Lecuona o Gonzalo Roig. La ambientación de escenarios
y la plástica coreográfica también cuenta con el aporte de talentosos
especialistas, decoradores y pintores. La danza por su parte, haría las delicias,

107
sobre todo para los hombres con hermosas vedettes y coristas, tanto en los
grandes teatros como cines y cabarets.

La literatura siempre muy fuerte en el territorio centrohabanero deberá ser


motivo de investigaciones mas profundas, sobre todo en la vinculación de los
periodistas con las múltiples fuentes periodísticas de la localidad. Igualmente la
música que aquí se reseña en un epígrafe vinculada a la danza, como las
comparsas, aspecto muy notorio y que pudo ser tratado gracias al aporte de la
investigadora Jorgelina Guzmán Moré, así como Israel Díaz, en el caso de los
datos biográficos de José Lezama Lima.

Observaran que el análisis de la cultura en la localidad centrohabanera esta


marcado por el carácter comercial y cosmopolita del territorio. Muchos artistas
que llegan a la capital recurren a los múltiples edificios que se construyen aquí,
alquilan o se establecen definitivamente, mientras sus viviendas se convierten
en focos culturales o enriquecen el que hacer cultural del entorno con sus
espacio casi siempre en función del turismo y visitante de todo tipo.

EL TEATRO, LOS CINES Y LOS DRAMATIZADOS RADIALES

El “Alhambra” (Consulado y Virtudes) había surgido como teatro de zarzuelas,


alternando en la primera Intervención Militar de los Estados Unidos, con
variedades del music hall. Al margen de sus antecedentes como “Café
Americano” su despegue definitivo como centro cultural se define a finales del
año 1900. La obra “El velorio de Pachenco”, llamada originalmente ”Tin Tan
te comiste un pan”, de Gustavo Robreño y José Mauri, abría el camino al éxito
del teatro vernáculo Cubano.

Durante las tres primeras décadas de la centuria se estrenan, a teatro lleno,


además de zarzuelas; revistas, juguetes y comedias entre otros géneros. El
Alhambra se convertía en el cuartel general de los bufos y caricatos Cubanos,
lugar donde se expresó con fuerza el decir de la Cubanía en muchas de sus
expresiones. Fue laboratorio y factoría de cultura. En el campo propiamente
teatral marcó un momento cumbre, como en el campo de la música “el
Alhambra fue -sentenció Alejo Carpentier– un verdadero conservatorio de
ritmos Cubanos” (19)
Todo este movimiento cultural genuinamente Cubano y renovador contó con el
apoyo de hombres de negocio, financiamiento y publicidad, pero no solo por
amor al arte. Este florecer de la cultura Cubana se insertó en los códigos de la
industria del entrenamiento, parte del sistema orquestado en el Centro
Comercial de La Habana. Son los tiempos en que el estreno de cartel teatral,
sea drama o comedia es de un gran impacto publicitario.

108
El actor Regino López, en su popular personaje de “Cañita” mientras simula
estar borracho hace demoledoras críticas en forma de inocentes verdades.
Hacen época también otros actores como: Adolfo Colombo, Sergio Acebal,
Ramón Espigul y Arquímedes Pous. Y entre las actrices, movilizaban a todo un
pueblo masculino: Blanquita Becerra, Luz Gil, Hortensia López; Blanca Vázquez,
Consuelo Novoa, Hortensia Valedon y Amalia Sorg. A las vedettes las
acompañan rosario de no menos hermosas coristas quienes en sugestivos
montajes escénicos y coreografías, atuendos, poca ropas y muchas picardías
como mostraban sus atractivas y abundantes carnes.

El Teatro Principal de la Comedia (Ánimas No.2, antiguo) es el otro gran coloso


aparecido en la cresta del esplendor centrohabanero. El 20 de Octubre de 1921
abre sus puertas con el estreno de la comedia de Galdós “La de San Quintín”.
La institución desarrolla una intensa temporada teatral donde por varios años
desfiló lo mejor del género en la época. Tres de las primeras actrices alternaban
allí con frecuencia: Celia Adams, Enriqueta Sierra y la española Pilar
Bermúdez. Estas dos últimas mantienen una rivalidad artística con grupos de
fanáticos quienes a veces trocaron pasiones enfrentando cultura Cubana vs.
Peninsular.

Otro de los teatros punteros


que cultivó lo picaresco fue el
Verdum (Consulado Nro
214), donde se estrena en
1922 una popular comedia de
enredos; el Campoamor
(Industria y San José), el
Encanto (Neptuno No 19), el
Shangai (Zanja Nro 35),
considerado el primer teatro
con desnudos artísticos; el
Cuba (Galiano, entre Neptuno
y Concordia), llamado luego
Moulin Rouge (Molino Rojo),
donde se consagró
Arquímedes Pous. Muy cerca de allí, en 1926 estuvo el Teatro Cubano (Neptuno
103, antiguo), llamado luego Regina sala donde participa con mucho éxito la
compañía de Ernesto Lecuona.

Durante la crisis de 1929-1930 el teatro Cubano se ve duramente afectado


sufriendo además los años convulsos del primer lustrote la década del 30. Sin
embargo, en 1936 se inaugura el Teatro Radio – Cine (Galiano y Neptuno), con
la fabulosa capacidad de 2900 localidades distribuidas en platea y dos balcones.
Al comenzar la década del 40 se construye el teatro América (Concordia No. 61)

109
con 1,800 asientos. Pero seria el último de las edificaciones de su tipo en la
localidad.

Tanto América como el Radio-Cine, el Regina, el Verdum y hasta el Alhambra ya


con el nombre de Alcázar son convertidos en cines. Actores y publico debieron
atemperarse a la llamada “decadencia” del teatro de empresa. En realidad el
teatro Cubano fue comercialmente aplastado por la invasión de películas
extranjeras, fundamentalmente de los consorcios norteamericanos: Warner
Bros., Columbia Pictures, Paramaunt, Metro Goldwyn Mayer y 20th Century Fox.

Los cines habían comenzado como pequeños teatros, salón de multipropósitos


en que además de proyectar filmes desarrollaron toda una serie de
programaciones artísticas, incluyendo las escénicas que enriquecían la vida
espiritual y cultural en los barrios a precios módicos. El boom del séptimo arte
con su banda sonora desde 1929, hace que los inversionistas vuelvan sus ojos
más hacia esta institución cultural. La empresa con cine era mucho más fácil,
segura y económica. Más rentable era hacer rodar una cinta que organizar,
financiar y correr la suerte de una obra de teatro.

El cine no fue la causa de la decadencia del teatro. Pudieron ambos coexistir


como opciones alternativas, solo que los magnates “habaneros” dueños de la
industria del entretenimiento, lo apostaron todo a las películas. Por cierto el
decano de la cinematografía Cubana lo fue el actor José Esteban Casasús
Valdés (1871-1948), quien vivió en la calle Colón Nro 46 y participó muy
activamente a todos aquellos primeros pasos por crear una industria Cubana de
cine. Pero había interés porque La Habana tuviera ciudadanos cinéfilos y
peliculeros, que consumiera cinematografía, que tuviera mucho cine e importara
muchas películas, pero no que desarrollara su propia industria.

En poco más de 20 años de 1930-1953, las calles centrohabaneras vieron nacer


más de medio centenar de cines. Cifra que si no fueron record, no deben ser
muchas las capitales de países subdesarrollados que, en solo 3,47 Km2,
tuvieron por aquellos años tal cantidad de salas. Si la calzada de Belascoaín fue
“la emperatriz tabacalera”, tuvo además el cetro de los cines. A saber, en sus
aceras existieron: el Palace, Wilson, Edén, Oriente, Astor, Favorito, Miami,
Belascoain y Cuatro Caminos. Por consulado: Alcázar, Majestic, y Verdum; en
Reina: el Colonial, Cuba y Reina. Por San Rafael: Cinecito, Duplex y Rex-
Cinema. Igualmente son de referir otros cines de mucha recordación como: el
Manzanares (Carlos II No. 910), el Infanta (Infanta No. 357), el Pacifico (Zanja y
San Nicolás), el Águila de Oro (Rayo y Zanja), el Rialto (Neptuno No. 507) y el
Astral.

Entre las bondades de la modernidad que conspiraron contra el teatro tradicional


estuvo también el auge de la radio y sus dramatizados. Tan solo en la emisora
Mil Diez (Reina No. 314), de 1943-1948 se dispuso de un destacado elenco,
110
iniciado con el actor de zarzuela y tenor cómico español Antonio Palacios, con:
Paco Alfonso. Nenita Viera, Elvira Cervera, Bellita Borges, Santiago García, Paúl
Díaz, Oscar Luis López, Nicolás Rodríguez, Tomas Cuervo, Luis López y
Amador Cuervo. Este último, joven negro que actuaba sin maquillarse y sin
hablar como "bozal", haciendo incluso papeles protagónicos, algo insólito para
aquellos tiempos.

EI programa dominical "Ronda Infantil", con guión de Blas Roca y dirección


artística de la maestra y actriz Thelma Norton, tendría mucha audiencia. Aquí
cantaban niños hijos de trabajadores quienes declamaban, representaban y
cantaban. De esta cantera surgieron estrellas como Asseneh Rodríguez y
Leonel Valdés. Par su parte Violeta Casals era quien narraba cuentos y hacía
voces con la mejor literatura universal para niños.

Otros muchos actores y actrices se iniciaron o consagraron en las complejas


formas de la radio-teatro y en especial en la emisora centrohabanera de los
comunistas, entre ellos: Raquel Revuelta, Antonia Valdés, Marta Casañas,
Agustín Campos, Alfredo Perojo, Ernesto Fraga, Ricardo Dantés, Ángel Toraño,
Ignacio Valdés Sigler y Reinaldo Miravalles.

LA LITERATURA Y ESCRITORES

La literatura durante las primeras décadas del Siglo XX centrohabanera giró en


gran medida en torno a los libretos alhambrescos. Muchos jóvenes estuvieron en
función del teatro vernáculo Cubano. Entre ellos se distinguen: Gustavo y
Francisco Robreño, Mario Sorondo y Federico Villoch. Asumen elementos
populares a favor de una zarzuela superior y del teatro lírico Cubano, el poeta
Gustavo Sánchez Galarraga y otros libretistas como José Sánchez Arcilla y
Antonio Castells.

AI referir a escritores destacados vinculados al territorio es imprescindible


mencionar a quien naciera el 24 de noviembre de 1904 en Maloja entre Escobar
y Lealtad: ALEJO CARPENTIER. Gran parte de su obra lIeva la impronta de su
barrio natal y en general sobre La Habana, "Ia ciudad de las columnas". EI
escritor Miguel de Carrión, el creador de Las Honradas y Las Impuras
inmortalizó muchas de sus experiencias vividas en la Casa de Huéspedes de la
calle Virtudes, sumergiéndose en el micromundo de la vida habanera en los
primeros años del siglo XX.

Nicolás Guillen, nuestro poeta nacional, vivió en el barrio de Los Sitios, como el
insigne historiador José Luciano Franco, quien consagró su vida a la profesión.
Fernando Ortiz vivió en Neptuno y Oquendo, barrio de San Lázaro, desde allí
inició muchos de sus estudios etnográficos. Otros muchos escritores, aunque no
nacieron en el territorio, vivieron o desarrollaron gran parte de sus obras en
barrios centrohabaneros, es el caso del poeta y notable escritor José Zacarías
111
Tallet, o del locutor igualmente escritor y poeta Marcelino Arozamena, miembro
de la Sociedad de Estudios AfroCubanos. Pero, sin duda, la figura descollante
de la literatura Cubana, con mayor incidencia en Centro Habana, lo sería el
poeta José Lezama Lima, desde la barriada de Colón. (20)

José Lezama Lima comienza a vivir en Trocadero No. 162 junto a su madre
Rosa Lima Rosado y sus hermanas Eloisa y Rosita, a la edad de 18 años,
momento de su ingreso a la Universidad de La Habana y del inicio de su
creación literaria y artística.
EI edificio en que pasa a residir la familia Lezama Lima se había acabado de
inaugurar ese año, 1929. Su diseñador había sido el arquitecto Emilio Juncosa, y
su financista, Dona Blanquita Mauri de Hornedo. Los valores arquitectónicos del
inmueble se correspondían con los recursos expresivos del eclecticismo tardío.
Uno de sus elementos decorativos, las columnas salomónicas del portón
principal, serían tomadas como referencia por los amigos, visitantes y el propio
Lezama para identificar la casa. Con el tiempo - advierte el investigador Israel
Díaz - la propia fachada de Trocadero 162 lIega a ser como un icono con el que
asocia la vida y obra del poeta.

Aquella casa pronto se convirtió en foco cultural en el campo de la literatura,


pero además en las artes plásticas y en general de la intelectualidad más
creadora y auténtica. Lezama abrió sus puertas de Trocadero a sus amigos más
cercanos. Se iniciaban las famosas tertulias lezamianas, devenidas núcleo
destacado en la vida cultural de la época. La importancia de ese grupo de
intelectuales que visitaban con frecuencia a Lezama en su casa ha sido
destacada en múltiples ocasiones par críticos e historiadores de la cultura
Cubana. Más que una generación puede hablarse de un movimiento cultural que
centró algo de lo mejor de la creación artística en su momento.

La sala y el escritorio, que ya iban Ilenando sus paredes con las obras de
pintores vanguardistas, fueron escenario donde se gestó la edición de Orígenes,
revista de arte y literatura cuyos lazos con el mundo colocaron a la literatura
Cubana en un nivel de paridad respecto a las corrientes intelectuales que Ie
fueron contemporáneas. Ángel Gaztelu, José Rodríguez Feo, Cintio Vitier, Eliseo
Diego, Fina García Marruz, Gastón Baquero, Lorenzo García Vega, el músico
Julián Orbón, se incorporaron también al fomento de una amistad perdurable
que dio elevados frutos literarios.

Como ellos los artistas plásticos de diferentes generaciones se unieron al


proyecto editorial y su estela de exposiciones, conferencias, encuentros. René
Portocarrero, Mario Carreño, Roberto Diago, Alfredo Lozano, Víctor Manuel
García, Mariano Rodríguez, con el regalo de sus obras contribuyeron a formar
una de las colecciones privadas de arte de la vanguardia Cubana, más
completas del país en su momento.

112
Del periodo Origenista data la relación con dos de los intelectuales españoles de
mayor relevancia: el escritor Juan Ramón Jiménez y la filósofa María Zambrano.
Con el primero, Lezana sostuvo relaciones de respeto y agradecida cordialidad
intelectual, que quedaron expresados en el decisivo ensayo “Coloquio con Juan
Ramón Jiménez”. Con la Zambrano estrechó los lazos de una especial amistad
basada en la admiración mutua y un afecto sostenido aún en la distancia.

En el cuarto - estudio de la ya conocida casa de Trocadero el escritor dio forma


a ensayos, cuadernos de poesía, conferencias, donde la lucidez y la profundidad
iban unidas al refinamiento poético. De esos años bastaron: “EL Secreto de
Gracilazo” (Conferencia 1937, “Enemigo Rumor” (Poesía 1941), “Aventuras
Sigilosas” (Poesía 1945), “La Fijeza” (Poesía 1949), “Tratados de La Habana”
(Ensayo 1958), preparaba “La Expresión Americana” y la que sería su obra
cumbre resumen y complemento de todo lo que había escrito hasta entonces:
“Paradiso”.

La tradición de escritores centrohabaneros estaría también muy en


correspondencia con el desarrollo local de la industria gráfica. Sería muy valioso
que en posteriores interrogatorios, contando con la UPEC Municipal, se hiciera
un trabajo en el territorio. En principio son de mencionar a: Eduardo Robreño,
Juan Antonio Pola, Fernando Rodríguez Sosa, José Manuel Valdés Rodríguez,
Manuel de Jesús Zamora y Zamora, Fernando Carr Parúas, Carlos Lechuga y
Evelio Tellería Toca

Muy relacionado con la Literatura, los escritores y los periodistas, estarían dos
tipos de instituciones culturales vinculadas directamente a la promoción de
Libros, revistas y periódicos. No siempre y en todos los casos han tenido el
estudio y el reconocimiento que merece las bibliotecas y librerías.

El territorio dispuso desde tempranos tiempos de la Biblioteca Municipal de La


Habana (San Miguel No 216, Antiguo). Luego fue trasladada para un edificio
más confortable en Neptuno No 255 (Antiguo), luego 772. Era considerada la
biblioteca de la municipalidad. En ella laboró María Villar Buceta, poetisa y
bibliotecaria, promotora de vigoroso movimiento por el fomento de bibliotecas en
todo el país.

A finales de la década del 30 cobra fuerza el proyecto de construir otra biblioteca


en los barrios habaneros que fueran como sucursales de la municipal. Se crean
bibliotecas en parque del Cerro y Santo Suárez, pero con la que se planifico
para el parque Trillo, en Cayo Hueso, iba a ser objeto de uno de los casos de
corrupción más escandalosos e inauditos que se conociera durante la República.

El alcalde Antonio Beruff Mendieta logró que se aprobara 70 mil pesos para
construir la biblioteca en el Parque Trillo y abastecerla de libros, sin poner un

113
ladrillo en el lugar luego solicitó un crédito para demoler la inexistente biblioteca,
para luego seguramente pedir mas dinero para “reconstruirla”.(21)

La sociedad económica “Amigos del País”, que había fundado sus celebre
biblioteca en Dragones 62 (antiguo), luego 308, inaugura un nuevo edificio el 17
de enero de 1949 en Carlos III No 710. Sus arquitectos fueron Govantes y
Cobarrocas, quienes concibieron u edificio de dos plantas de un neoclásico
tardío que incluía el diseño de un hermoso jardín central. La institución atesoró
las mas completa colección de Hemerotecas del país, fundó la revista Bimestre
Cubana y aglutinando a laureados escritores, desplegó una labor literaria,
investigativa y bibliotecológica que la situaría entre las instituciones culturales
mas valiosas del país.

La Asociación Cubana de Bibliotecas, organización creada para canalizar la


lucha del sector, lidereados por la Dra. María Villa, tuvo su sede en la Biblioteca
de la Sociedad Económica Amigos del País. Allí se establecieron las oficinas de
su órgano de prensa, que vino a reforzar la labor divulgativa y de enseñanza
especializada sobre bibliotecas.

Otras instituciones del territorio crearon también sus bibliotecas, distinguiéndose


entre las organizaciones fraternales la denominada “José Martí” de la Gran Logia
Odd Fellow de Cuba (Manrique No 221), la creada por el colegio de Arquitectos
de La Habana (Infanta y Humbolt), la asociación de Prensa Obrera de Cuba
(San Miguel No 856), la asociación cultural de laboradores en Yeso de La
Habana (Xifré No 57) y la Asociación Nacional de Periodistas de Radio (Estrella
No 452).

En cuanto a Librerías, una de las mas famosas y surtidas del país, desde 1901
fue “La Principal”, propiedad de Macario Gutiérrez, establecida en la plaza del
Vapor No 36. Otras concurridas librerías fueron “Las Ideas” (Infanta No 306), y
América (San Lázaro No 1208), Fue en el centro de La Habana donde mayor
cantidad de librería se abrieron. En la década del 50 tan solo en la calle Neptuno
existieron cuatro librerías, en Reina tres y en Galiano dos, además de otras en
Manrique, San Nicolás y Belascoaín. De todas ellas cabe destacar un pequeño
local donde se vendían libros de uso, la Librería Canelo, donde acudían hasta
visitantes extranjeros en busca de libros raros y títulos de ediciones agotadas.
Aquí se hizo popular la frase de “…Si no lo tiene Canelo, no lo busques
más…”.
LAS ARTES PLÁSTICAS. LA ESCUELA DE SAN ALEJANDRO

La escuela de San Alejandro fue otra de las instituciones culturales insignias


auspiciadas por la sociedad económica “Amigos del País”. Luego de su

114
instalación original en el convento de San Agustín, permaneció por muchos años
en la antigua edificación de Dragones No 60.

El inicio de la República encuentra en la dirección del centro a Miguel Melero


(1836-1907) pintor Cubano quien introduce notables mejoras organizativas
incluyendo la posibilidad del empleo a la mujer. Dos días antes de su
fallecimiento, el 6 de junio de 1907 nombraba a la primera mujer profesora de
San Alejandro, Adriana Billini. Durante el Periodo que se encaminan en la
búsqueda creadora de la Cubana, incluyendo el recreo de bellos paisajes de la
campiña Cubana.

El Museo Nacional se constituyó en 1913, en el caserón que se había construido


para el frontón de Jai Alai de La Habana (Concordia y Lucena). Había expirado
la concesión hecha al espectáculo de pelota Vasca y ahora el “Palacio de los
Gritos”, en absoluto silencio y remodelado, abría sus puertas para exponer obras
de arte. Se trasladaban hacía allí, buena parte de las colecciones de la Escuela
de San Alejandro. Las exposiciones se mantienen por cinco años, no más, por
cuanto el Ayuntamiento de La Habana autorizó nuevamente que se jugará Jai
Alai en el edificio, a partir de la primavera de 1918.

El plantel adopta oficialmente el nombre de Escuela Profesional de Pinturas y


Escultura “San Alejandro” desde el 5 de octubre de 1925. A los pocos meses la
Secretaría de Instrucción Pública y Bellas Artes autorizan la creación la creación
de algunas becas de aspirantes de origen humilde que no tuvieran recursos para
costearse los estudios. Las plazas se obtuvieron por exámenes de oposición, en
las que resultan beneficiados estudiantes de mucho talento como el joven
Teodoro Ramos Blanco.

Otro Rotulo debe hacerse en 1934 para el centro, que pasa a denominarse
Escuela Nacional Superior de Artes Plásticas “San Alejandro”. Entre sus
novedades estuvo el comienzo de cursos preparatorios. Ya en 1936 se crea otro
plante que se denomina “Escuela Elemental de Artes Plásticas” (Reina No 362).
Hacia 1944 la dirección del claustro de profesores solicita al ministerio de
Educación un crédito para la construcción de un nuevo edificio donde se
unificarán las dos escuelas. Posteriormente piden a la Sociedad Económica
Amigos del País que le entreguen el local de la antigua biblioteca, al ser
construida la nueva en Carlos III. En 1951 logran la autorización para trasladarse
hacia el edificio de Dragones No 308, donde permanecería la escuela durante
casi diez años.

Existieron en el territorio, además de la Escuela de San Alejandro, prestigiosas


escuelas privadas como la José Baixauli (Reina No 462), vinculada al maestro
Alfredo Sosa Bravo. Igualmente, prestigiosas personalidades de las artes
plásticas han residido en el territorio, como: Ana Rosa Gutiérrez (Gervasio entre
Zanja y San José), quien se registra como la primera mujer galardonada de
115
Cuba; el pintor vanguardista Victor Manuel García, Raúl C. Santos Serpa
(Gervasio 577), Armando Posse Valhuerdis (San Nicolás 317), José González
Álvarez (Laguna 370), José Manuel Villa Castillo (San Nicolás 452) y Oscar José
Morena Rodríguez San Rafael No 617).

Sintomáticamente, en Centro Habana radican dos de las organizaciones


punteras del sector de las Artes Plásticas: La Asociación de Dibujantes de La
Habana (Concordia No 426) y el Círculo de Bellas Artes (Industria No 458).

Sintomáticamente, en Centro Habana radican dos de las organizaciones


punteras del sector de las Artes Plásticas: La Asociación de Dibujantes de La
Habana (Concordia No 426) y el Círculo de Bellas Artes (Industria No 458).

LA MÚSICA, LOS MÚSICOS Y EL BAILE

El teatro vernáculo Cubano, con los exitosos espectáculos en el Alhambra,


Principal de la Comedia, Molino Rojo, Campoamor y otros, fue el gran incentivo
para los más reconocidos músicos durante el primer tercio del Siglo XX. La
música escrita por compositores de prestigio académico, quienes manteniendo
los moldes estético occidentales, comenzaron a introducir creadoramente
elementos musicales de ascendencia africana.

A consagrados músicos como José Mauri, José María Varona, Raimundo


Valenzuela y otros, se suman una pléyade de jóvenes talentos que harían época
como: Jorge Ankermann, Gonzalo Roig, Ernesto Lecuona, Rodrigo Prats.
Gonzalo Roig había nacido el 20 de Julio de 1890en el primer piso del edificio de
Amistad No 404, entre Barcelona y Dragones, casi enfrente de donde en un
tiempo estuvo la fábrica de tabacos H.Upmann (22). Julio Roig, su padre,
mantuvo decorosamente la familia gracias a un modesto “chinchal de
tabaquería del que era propietario”(23); Don Julio en principio no quiso que él
fuera un “oscuro musiquillo” de bailecitos y antes de acceder a que estudiara
música, contaba Roig “tuve que aprender con él a fabricar tabacos...” (24).

A los 17 años de edad Roig estrena en el Alhambra la partitura musical d” El


baúl del diablo”, sobre libreto de los hermanos Federico y Manuel Audois.

Cuatro años después compone ya la música de la que sería su canción


estandarte: “Quiereme mucho”, la que –según se rumoró - estuvo dedicada a
Blanquita Becerra, una de sus intérpretes.

Por su parte, Ernesto Lecuona, también a la edad de 17 años muestra a su


maestro Hubert de Blanck la danza “La comparsa”. El insigne músico queda
admirado con la pieza, al punto que que le obligó a tocarla por varios días en el
Conservatorio Nacional de La Habana (Galiano No 67, antiguo, luego 209). Aquí
116
terminó Lecuona su octavo año de piano, obteniendo el Primer Premio y
Medalla de Oro. Sus estudios anteriores los había realizado hasta el tercer año,
en el Conservatorio Peyrella de (Reina no 3, antiguo);

Aquí también hizo sus estudios otra de las grandes figuras de la época: Rita
Montaner. Y en materia de pedagogía musical el territorio centrohabanero
dispuso también, a partir de 1903 de un importante escuela musical; cuyo primer
director fue el maestro Guillermo Tomás, quien desde hacía cuatro años había
sido el director –fundador de la Banda de Música Municipal de La Habana, con
sus salones en la calle Reina, frente a la Iglesia del Sagrado Corazón de Jesús.

El 1º de Abril de 1911 se inaugura la Escuela de Música Municipal de La Habana


de Rastro y Lealtad, la que años después tendría como director a Gonzalo Roig,
quien como Tomás asumió también la dirección de la Banda de Música
Municipal.

A través de la Sociedad de Conciertos, Roig, César Pérez Sentenat, Joaquín


Molina y otros destacados profesores fundan en 1922 la Orquesta Sinfónica de
La Habana; Gonzalo Roig sería su Director, también de la Orquesta Ignacio
Cervantes, fundada por él en 1929; En ambas el maestro centrohabanero
promovió la difusió de talentosos músicos Cubanos, como el propio Cervantes y
Rafael Díaz Albertni, de quienes no se había hecho nunca interpretaciones
sinfónicas de sus obra. Asimismo difundieron obras clásicas del patrimonio
universal, mintras hubo ocasiones para acompañar a cantantes solistas quienes
se vieron acompañados por primera vez vez con una excelente instrumentación.

Consecuentemente con la línea de promoción de la música Cubana y universal,


más la promoción de jóvenes talentos, incorpora a la orquesta a virtuosos
músicos como Enrique González Mantici, quien se convierte en el primer violín,
mientras en la viola sitúa a al joven Amadeo Roldán. El 31de Julio del 1937, en
la antigua casa natal del pianista, compositor y pedagogo Ignacio Cervantes
Kawanag, sita en Virtudes No 35, entre Amistad y Águila se efectuó un acto
solemne donde se develó un monumento conmemorativo en bronce. Al año
siguiente el maestro Roig fundó la Opera Nacional, de la que fué su director y
orquestador. Elíseo Grenet, el creador de “Ay Mamá Inés”, fue otro de los
virtuosos músicos quien desde muy joven tuvo una incidencia en la localidad
centrohabanera. Desde los 13 años tocaba el piano durante las películas
silentes en el cine “La Caricatura “(Galiano). Amadeo Roldán, también de joven
tuvo necesidad de laborar, amenizando musicalmente cines silentes,
restaurantes, y hasta centros nocturnos como el cabaret “El Infierno” (Blanco y
San Lázaro),donde actuaba “La Bella Raquel”. Allí además compuso, un libreto
de Alejo Carpentier, la suite sinfónica que lo consagró “La Rebambaramba”.
Roldán había roto progresivamente con los esquemas armónicos europeos,
siendo el primero en insertar la percusión Cubana en el pentagrama sinfónico.
Ya aquí en esta suite para ballet del año 1928, hacía alusión a la música y
117
rituales abakuá. Ese mismo año hacía “Danza Negra” y en 1929 culminaba “El
milagro de Anaquillé”; Eran evidentes las enseñanzas de humildes rumberos
que, de quienes tomó nota, logrando una música mestiza, cualitativamente
diferente, Cubana.

Ernesto Lecuona hacía lo mismo en “Danza Ñañiga” y si “Danza Negra”. En el


año 1928, con texto de Gustavo Sánchez Galarraga hace el sainete “La
despalilladora” donde canta las dificultades a que se obligada a enfrentar las
obreras tabacaleras. En 1929 estrena en el Regina (Neptuno 103, antiguo) “El
Cafetal”, sobre la explotación esclava como “El Batey”, con la romanza “Canto
Negro” y el tango congo “Allá en el Batey”. Igualmente en 1932 estrena en el
Principal de la Comedia, también con libreto de Sánchez Galarraga, “La
Guaracha Musulmana”. Otros temas harían alusión a la presencia asiática como:
“Rosa la China”.

Rita Montaner es muchas veces la intérprete de estas piezas. En 1927, se


presenta vestida de negrito calesero en el Regina, representando un sainete de
Lecuona y Eliseo Grenet. En 1929, estrena en el Campoamor (Industria y San
José) “Chivo que rompe tambó” de Moises Simons. Y así, lo mismo hace con un
pregón, que – al decir de Carpentier – “con canciones arrabaleras, nacidas
del Batey de un Ingenio, de un puesto de chinos, del patio de un solar, o de
una fiesta abakuá”. (25).

El maestro Gonzalo Roig recrearía igualmente estampas coloniales saboreando


Cubanía. Inspirado en la obra literaria de Cirilo Villaverde, crea la música de la
zarzuela más representada del teatro lírico Cubano “Cecilia Valdés”. Pero
además, no menos que los músicos Cubanos más visionarios de la época, es un
ferviente admirador y procesador de la herencia musical africana. Es creador de
más de un centenar de obras teatrales, muchas de ellas con esta influencia.
Además de su antológica “Quiéreme Mucho”, es autor de otras populares
melodías como: “Yo te amé”, “Mulata”, “Prisionero de amor” y “Ojos brujos”.
Logra una producción musical con una treintena de títulos que incluye: congas,
danzones, caprichos afroCubanos, claves, guarachas, guarachas rumbas y
rumbas. Entre estas últimas estaría la titulada: “El servicio militar obligatorio”,
popularísimo tema que en 1922 llevaría al éxito las voces de Blanquita Becerra y
Rafael Lloresns. Y dedicado a uno de los barrios más humildes del territorio
centrohabanero compone su llamado paso ñáñigo: “Pueblo nuevo”.

Paralelamente a este fructuoso proceso creativo protagonizado por los más


eminentes músicos Cubanos de academia, las fuentes humildes en las que
bebieron continuaron el desarrollo, aunque virtualmente en la clandestinidad sin
poder escribir y tener que tocar con cajones y cucharas. En el mejor de los
casos se le incluyó en la llamada “música popular”, aunque no pocos críticos de
salón le llamaron peyorativamente “música de negros” siempre en oposición a la
118
clasificada como “música culta”, como si ambas fueran antagónicas y no
pertenecieran al mismo tronco de la música Cubana.

Según la huella de aquel quehacer cultural ingráfico y discriminado es difícil,


máxime cuando el ayuntamiento de la habana desde 1901, inducido por el
gobierno interventor norteamericano, había prohibido las manifestaciones de
negros con tambores de ascendencia africana, tanto en la vía pública como en el
interior de edificaciones.

La rumba de cajón se fortalece en contraposición de esta medida surgen en los


barrios más humildes coros de clave y va a aparecer una nueva expresión
donde se conjuga muy vivamente el canto y el baile: “el Guaguancó”.

Los promotores del guaguancó en La Habana van a ser los hermanos Apolonio y
Carlos Victor Lamadrit obreros portuarios matanceros, quienes se establecen en
la calle Bernal No. 22, barrio de Colón. Ellos organizan el coro “ La Nueva Idea”
, que pronto se extiende a otros inquietos solares vecinos como: “El Trueno”, “El
Macao” y “La California”. (Crespo y Colón).

Hacia 1908 ya había varios coros de guaguancó en la ciudad, distinguiéndose


otra agrupación formada por los Lamadrid en Colón: “Los Capirotes”. Su director
seria Francisco Albo, “Ten-Ten”, prestigioso plaza abakuá de las presentaciones
el coro cantaba lo siguiente:

Capirote tiene mesura


Y una voz melodiosa
Para que puedan apreciar
Los cantares de mi guaguancó (26)
Los Capirotes aglutinan no solo a muchas buenas voces, masculinas y
femeninas, sino también a excelentes parejas de bailadores, clasificando
punteros a nivel de ciudad estaría también en barrio de Centro Habana: el coro
Los Roncos, de Pueblo Nuevo.

El coro de clave y guaguancó Los Roncos que organizado por Agustín Gutiérrez
(padre) e Ignacio Piñeiro, quien junto a Bienvenido Julián Gutiérrez, crearon gran
parte de su repertorio. Tendrían también muy buenos bailadores y bailadoras,
conectos armonías y brillantes textos. Su tema musical comenzaba diciendo:

Romperemos el silencio con un preludio


Para ver en que condiciones están las voces (27)
Los coros fueron agrupaciones eminentemente territoriales, con un alto sentido
de identidad por sus comunidades, Representaban con mucha pasión su barrio
119
en los encuentros entre dos o más coros que se organizaban los domingos y
días festivos. Tenían gallardetes, adornos con una moña de cintas que solían
intercambiar como muestra de respeto y reconocimiento. Pero de existir una
mala interpretación en los cantos todo podía acabar en riña tumultuaria.

La histórica confrontación de los Roncos con el mejor coro de la ciudad, el paso


Franco de Carraguao, ocurría en 1909. Aquí la cordura de la dirección del coro
de Pueblo Nuevo, junto a Ignacio Piñeiro, fue determinante para preservar la
armonia, la vida artisitica de estas dos instituciones y posiblemente la vida
personal de muchos de sus integrantes. Ante un agresivo desafío del coro Paso
Franco, Los Roncos respondieron:

No cantamos si no demuestran ser prudentes,


Porque no queremos llevar
2 nuestros hogares tristezas,
y que la prensa mencione
y escriba con rostro sostenido:
¡Que barbaridad!
¡En fiesta de color, muertos y heridos! (28)
En el año 1909 fue afortunado para la rumba, la conga y los carnavales en los
barrios, el General José Miguel Gómez “Tiburón”, aquel ultra populista y
campechano Presidente de la República, autorizó a salir a la calle, como en
tiempos coloniales, a los espectáculos ñañigos, y que se organizaran comparsas
para el disfrute y divertimento local. En Colón se crean “Los Hijos de Chavez”,
“Los Componedores de Batea” en Cayo Hueso, y “Las Lucumisas” en Los Sitios.
Los iremos o diablitos y la orquesta de un juego abalcuá en este ultimo barrio-
según conoció Fernando Ortiz- “llegaban hasta las casas asustando en
broma a mujeres y niños, sin violencia, ni malicia” (29)
Aquel año cobraron fuerza también determinadas protestas y exigencias de la
agrupación Independiente de color, partido político que había surgido meses
antes 2 tenor de la apertura democrática propiciada por “Tiburón” Gómez y al
amparo del articulo No. 17 de la Ley Electoral. Sin embargo, ante el carácter fue
tomado el movimiento, el senador liberal negro Martin Morua Delgado, estimó
que la segregación racial entre los Cubanos no era beneficiosa para conservar
la unidad del pueblo y la nación propuso modificar el citado articulo para
conservar la unidad del pueblo y la nación política con fines raciales o clasistas.
El proyecto fue presentado a los legisladores el 11 de febrero de 1910, aprobado
por el congreso y sancionado por el Presidente de La República.

La “Enmienda Morúa” permitió neutralizar las luchas legal a la agrupación


Independientes de color, que incluía no solo aspectos netamente racistas, sino
120
consideraron la propuesta de Morúa como una traición a la raza, y luego de
múltiples conflictos; a mediados de 1912, terminaron alzándose en armas contra
el Gobierno “Blanco”...El resultado fue la excavación del racismo y la masacre
de mas de 3 mil negros y mulatos. En el orden cultural eran suprimidas las
libertades concedidas, incluyendo la autorización a la organización y salidas de
agrupaciones de comparar en los barrios.

El gobierno de conservadores es elegido en noviembre de 1912. El nuevo


Presidente es el mayor general Mario Garaz Menocal y Deop, acaudalado
aristócrata amado del modo de vida norteamericano fue llamado “el Mayoral de
Chapana”. No solo por ser el dueño de aquel central tunero, sino por llegar
“Sonando el Cuero.” Reprenda la política de mano dura contra la clase obrera y
en especial contra los sectores humildes negros. La represión se argumenta con
criterios “artistas”, cenofobicos y neumalistas, operándose un cierto
reordenamiento en las expresiones populares de la música fue en principio
favorecer directamente a la trova.

El autor de “Perla Marina”, “La Tarde”, y “Retorna”, Sindo Garay, había llegado a
la Ciudad de La Habana desde 1906. Obtuvo mucho éxito en el Café “Vista
Alegre” (Belascoain y San Lázaro) donde recibe el apoyo de Alberto Yarini. No
hay trovador y bardo popular que no se vinculara de una u otra forma a los
espectáculos en los cafés, bares y cines. La guitarra como instrumento de
cuerdas importado de la cultura occidental, de fácil aprendizaje y una amplia
gama de sonoridad, parece ser un buen refugio para los sectores humildes.
Comienza la era romántica a la trova, con Sindo, Alberto Villalón, Rosendo Ruiz
Suarez y Manuel Corona.

Los que pensaron que habían dado muerte a los elementos de origen africano
en la música Cubana se equivocaban. Aunque sin tambores, a través de la
guitarra, o en los grandes teatros, como vimos, se promovió la rumba, congas y
cantos abakuá. En el mismo año 1913 Sindo Garay Populariza la rumba
“Ferrocarril Central”. Otros destacados trovadores incluyen en su repertorio
números de este corte, como José Castillo, Floro, Juan Cruz, incluso Alberto
Villalón. En 1916 Ignacio Piñeiro hace el tema ñañigo a dos guitarras:
“Sambumbia se fue de fuño”, que retoma María Teresa Vera. Es también esta
trovadora quien hace en 1918 muy popular en su estilo la Rumba de Manuel
Corona “Que bien, Rubén”. Manuel Corona Raimundo es uno de los trovadores
que mas promueve la rumba a través de la guitarra. Entre 1917 y 1918 el sello
discográfico Colombia le grava numerosas composiciones, entre ellas la
sugestiva rumba: “Arrollar en Carnaval”.

Corona tuvo por amigo a un tabaquero español que vivía con una negra en
concordia y escobar. Allí les nacieron siete hijos, seis niños y un niño. El varón
se nombraba Abelardo Barroso Dargeles. Observando la vocación del pequeño

121
un día aseguró el afamado trovador: “¡Oiga Barroso, este va a ser
cantante!”(30). El vaticinio se cumplió cuando llegó el son con los sextetos en la
decada del 20.

De los más productores sextetos en Cayo Hueso fundaba hacia el año 1924 el
músico y cantante Domingo Vargas la agrupación Jóvenes del Cayo. En el
verano de 1925 se incorporaba Abelardo Brroso al sexteto habanero, el y
Gerardo Martinez el otro cantante del grupo en breve clasifican como los
máximos soneros del momento. Poco después Banoso transita por el sexteto de
Alfredo Boloña hasta que se incorpora al grupo que organiza en 1927 Ignacio
Piñeiro, casi como en “todos estrellas”.

El sexteto nacional se convierte en la punta expresiva del son Cubano.Es la


primera agrupación que mantiene un repertorio con obras propias. Le siguen a la
experiencia del Habanero en convertirse en septeto, con lka incorporación del
trompetista Lázaro Herrera Barroso hace aquí un excelente de voces con
Bienvenido León, el destacado compositor Rafael Ortiz es uno de los
guitarristas, el otro no es nada menos que Alberto Villalón, quien por supuesto,
hace voces. Todos los demas sextetos partiendo de las innovaciones del
Habanero y Nacional se convierten en septetos, incluyendo a Jóvenes del Cayo.

Hacia finales de la decada del 20, Abelardo Barroso crea una nueva agrupación
sonera con otro buen trovador, Rafael “Nene” Enrizo. Surge el Septeto
Agabama. Pero lo mas importante de aquellos años es el surgimiento de un
nuevo genero bailable que desplaza al danzon: el danzonete......

La Emperatriz del danzonete es Paulina Álvarez quien, aumque natural de


Cienfuegos, por aquellos tiempos vivia en galiano y trocadero. Sus primeras
actuaciones con apenas 15 años de edad, habian tenido lugar en unas
plataformas que ponian en las ferias por la Plaza del Vapor y en sociedades
como el Centro Maceo, de Carlos III y la sociedad de torcedores (San Miguel No.
662). Próximamente, comienza a cantar en la emisora de radio 2PC de Angel
Bertematy, en la calle Hospital. Su debut fue con el pregon de Moisés Simons
“El Manisero” y su consagración ocurre en 1929, cuando el compositor Aniceto
Diaz le entrega “Rompiendo la rutina”. En la voz de Paulina estalla el danzonete
primigenio con aquel pegajoso estribillo: “Danzonete, prueba y vete / yo
quiero bailar contigo/ al compás del danzonete.”

Los exitos se suceden “Capullito de Alhelí”, “Lagrimas negras”, “Echale


Salsita”.....Paulina Alvarez canta en los centrohabaneros fue donde gozan de
prestigio como el Campo Amor le acompañan diversas orquestas, en su mayoria
de pequeño formato.

122
Mantienen plena vigencia las orquestas del tipo charanga francesa. En ese
formato Cheo Belén Puig funda en 1934 su agrupación con el popular cantante
Pablo Quevedo, quien llega a ser idolo de la radio Cubana, compartiendo con
Paulina el otro danzonete. Al género se suma tambien el estelar Abelardo
Barroso.

De una nueva hornada impacta el cantante de la orquesta de Alejandro Riveiro,


quien en 1935 da a conocer la guajira-son “Guajira Guantanamera” Es Joseito
Fernández, a quien se le conociera como “El rey de la melodía”. Habia nacido en
el solar de Tenerife No.90 antigua) aumque la mayor parte de su vida transcurre,
primero en Lealtad No. 559 y finalmente en Gervasio No. 658. Fue un cantante
encumbrado, representando el repentismo sonero, pero sin perder nunca su
trato amable, caballero, bondadoso y solidario. Del agradecido testimonio que
lego Miguel Ojeda, tomamos estas lineas: “Era muy querido. Al bajar por la
avenida de Carlos III, no habia guagua que no parara y el chofer le
dijera: Rey ¿como esta, para donde va ¿ y lo dejaba donde él quisiera”(31).
Por estos tiempos llega a territorio centrohabanero otros de los grandes de la
música Cubana, quien por aquel entonces se incorpora modestamente, como
clarinetista, a la Banda de música de La Habana, Aun eran celebres las retretas
en el malecón y en los parques, donde los músicos de academia tocan
orgullosos para el publico que acude masivamente a escucharlos.

La llamada “música culta” no cuenta con muchos mas espacios para imponerse
en los medios populares, pero no por ello los músicos Cubanos decaen.Amadeo
Roldán luego de crear sus “Rítmicas (V y VI) “Tres Toques” y “Motivos de un
Son”, dedica mayormente sus esfuerzos a la pedagogía musical. Promueve
diversos proyectos como el de creación del Conservatorio de la Filarmónica en
1932 y la fundación de la Escuela Normal de Musica, pero ambos fueron de
efímera duración. Su proyecto de crear un Conservatorio Nacional de Musica, ni
siquiera pudo concluirlo, por lo que en 1935 humildemente se incorpora como
profesos de armonia y composición de la Escuela Municipal. Ese mismo año el
centro pasa a denominarse Conservatorio Municipal de Musica de La Habana, y
en 1936 es elegido Director. Tres años después fallecía, legando una obra
admirable y siendo Presidente de la Seccion Antillana de la Asociación
Panamericana de Compositores.

Otros directores continuaron la obra ejemplar de Guillermo Tomas Roig Roldán


hasta el maestro Harold Gramatges, manteniendo el Conservatorio
centrohabanero como el mas importante plantel formador de músicos Cubanos.

El primer mulato aspirante a la Presidencia de la República va a ser el ex-


sargento Fulgencio Batista y Zaldívar. Luego de una represión brutal durante la
Huelga de marzo de 1935 y sientiendose seguro va a desarrollar como antes
“Tiburón” Gomez una política democratica (burguesa) que incluye la atracción de
123
la población negra y mestiza a favor de su campaña. Da el espaldarazo a los
investigadores folcloricos “afroCubanistas” y autoriza los proyectos para celebrar
los Carnavales de La Habana en frebrero de 1937. Al señor Antonio Beruff
Mendieta, alcalde municipal de quien nos regimos antes por el escandalo de la
biblioteca “Fantasma” del parque Trillo correspondió organizar el desfile por el
Paseo del Prado. Debía se un divertimento, que entretuviera y contentara al
pueblo, pero sobre todo, que se convirtiera en un gancho para el turismo, por su
colorido y espectacularidad.

La reorganización de las comparsas del barrio, su desfile por el prado, con


promoción y apoyo oficial arguraban un festejo popular fabuloso. El precio
cultural era hacer ciertas concepciones estéticas, como suprimir las
alucinaciones religiosas de origen africano, ser mas modelador en las
coreografías, vestuarios, en los textos de la musica, disimular el “primitinismo
negroide” y semejarse a los estereotipos de Cubana de salon. Si la rumba se
difundia con bailadoras refinadas y en short, con “vuelitos” en los brazos y
tapando las nalgas, los compaseros debian ser casi coristas de cabaret
arrollando en la pista del pavimento, alfombradas de serpentinas y confeti.

Se inscriben múltiples comparsas para anticipar en el paseo del carnaval de La


Habana. De ellas fueron seleccionadas diez. La mitad, organizadas en barrios
del territorio centrohabanero: Los componedores de Batea, Las bolleras, La
Sultana, Los Guajiros y la Danza del Dragón.

Las Lucumisas, de los Sitios, tienen que empezar por cambiarse el nombre.
Como las protagonistas de su argumento coreografico eran lucumíes
vendedoras de “bollitos” calientes y otros comestibles por las plazoletas de San
Nicolas, Antón Recio, y el litoral, les condicionaron llamarse Las Bolleras. Su
director fue Ricardo Campos Sánchez (Estrella No. 131) y el lugar de ensayo y
salida fue Maloja No.178. Explica la investigadora Jorgelina Guzmán Moré que
en general, los que percutían los tambores lo hacían de forma moderada, los
comparseros parecían inhibidos, bailando con cautela y fue los elementos
tradicionales preserados de ascendencia africana fueron permitidos en virtud de
lo pintoresco y llamativo (32) Jorgelina Guzmán, “Telly” detalla que la comparsa
se componía de 60 personas. “Los hombres escribe vestían de guayabera
escocesa de distintos colores, pantalones blancos, pañuelos al cuello, sombrero
de jipijapa y zapatillas de colores. Las mujeres lo hacían con blusa y saya
escocesa collares y pulsos de fantasias, grandes argollas en las orejas,
chancletas de colores y en la cabeza un pañuelo y un plato de lata pequeño,
ademas portabana maruga y tres rayas en la cara, como las antiguas bolleras
“[...] Llevaban 8 faroles grandes y 17 chiquitos representando el Capitolio,
una estrella con el diseño de la mbollera friendo, una niña, el barracón de
las bolleras [...] La comparsa también llevaban un carro de 4 ruedas sobre
el cual aparecían una bollera friendo en el cabildo” (33) El acompañamiento
124
musical en principio el tipico de la conga, aunque después fue enriquecido con
tambores bata, propios de los rituales de la regla de osha.

Los componedores de Batea, de Cayo Hueso, representaban otro aspecto de las


tradiciones populares en la localidad Las lavanderas de solares. En la
coreografía se presentaba entre dos mujeres dedicadas a lavar ropa en una
ciudadela. En la competencia por demostrar cual era más eficiente, rompen la
batea. Es en el momento que aparece el componedor, quien arregla la batea, las
lavanderas confraternizan y todos alegres cantan y bailan. Su director fue
Alfredo Mora (San Francisco No 28) y el local de la comparsa estuvo en Soledad
Esq.a San Rafael. La integraron un centenar de entusiastas pobladores del
barrio, 40 mujeres, 10 niñas, 40 hombres y 10 niños. Las mujeres y niñas
mostraban saya y corpiño azul, blusa y zapatos blancos, collares de fantasía y
pañuelos de cabeza de distintos colores. Los hombres y niños usaban ropas a
manera de estibadores, con pantalones y bolsa azul, zapatillas blancas y
sombrero. Llevaban- reseña igualmente Telly- 4 farolas de gran tamaño que
representaban un farol antiguo, otro una lampara 19 luces, un tercero una copa
con 12 luces y el cuarto una batea sobre un barril con 12 luces (....). Su baile fue
la rumba tipica y utilizaron un bombo, un redoblante, dos tumbadoras, una caja,
dos jimaguas y una clave (34).

La Sultana, del barrio de Colón fue unas de las comparsas de nueva creación. El
catalizador directo de inspiración fue una película donde se recreaban la vida en
un antiguo harén, con los antecedentes de la comparsa el Turco y la existencia
de una comunidad árabe de mucha influencia cultural en el territorio. Surge en
los solares el macaco y la California, siendo su fundador y director Oscar Rivero.
Representaba un harén con distintas figuras, como La Favorita, La Sultana y
Heliodo, el encantador de serpiente. El vestuario lo hacían de colores y buenos
tejidos, decorados con lentejuelas, turbantes, collares de fantasía, y demás
elementos plásticos remedando el arquetipo exótico árabe más difundido.
Originalmente aparecía casi el doble de hombres, 60, siempre muchos
aparecían jocosamente infiltrados con disfraces en el harén. No pocas de las
mujeres (de verdad) eran prostitutas de la barriada. Según testimonio de más de
aquellas comparsas fundadoras “danzan en la comparsa era algo que daban
cierto caché, sobre todo si salíamos de Favorita o Sultana. Cada conga
tenía una reina, con sus figuras y corte. Las Favoritas eran bailadoras
que, por su destreza y buena presencia, intervenían en la coreografía con
mayor libertad de movimientos que los integrantes del cuerpo de baile. Se
lucían más que la propia Sultana y no tenían que bailar de acuerdo a los
pasillos y cuadros ensayados”. (35)

Aunque el tema central era una melodía árabe adaptada por Juan Sotolongo,
prevalecían la música y los bailes Cubanos, en especial, la rumba.

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La otra de las comparsas fue Los Guajiros, que tuvo como director a Lázaro
Marrero (Peñalver # 69), la integraban unas 25 parejas bailando a ritmo de
zapateo. Utilizaron como tema, décimas musicalizadas por Ignacio Piñeiro. Su
módulo instrumental era un cornetín, clarinete y tres guitarras.

La comunidad china aportó otra comparsa de nueva creación: La Danza del


Dragón, que tuvo como antecedentes otras agrupaciones de carnaval como:
“Los Chinos Konfoya” y “Los Chinos Buenos”.

Todo este fenómeno cultural y recreativo relacionado con los festejos de


carnavales trasciende sobre todo en los órdenes musical, plástico y danzario,
continuando un desarrollo en la década del 40 y años sucesivos. Musicalmente
es el momento en que los septetos dan paso a los conjuntos.

Jóvenes del Cayo, aunque ve partir a Miguelito Valdés quien pasa a hacer
carrera como solista, se nutre de dos nuevos cantantes: Alfonsín Quintana Y
Celio González, manteniéndose su fundador Domingo Vargas. En esta etapa
clasifican como formato de conjunto, y tanto Miguelito como el conjunto Jóvenes
del Cayo, integran el popular elenco de la Mil Diez, “La Emisora del Pueblo”.

Antonio Arcaño funda en 1937 la orquesta que se conocería como Arcaño y sus
Maravillas. Va a promover un danzón de nuevo ritmo, con músicos estelares,
incluyendo al compositor Orestes López. Incorporan la tumbadora a la charanga,
mientras hacen notables improvisaciones de flauta. En 1944 se incorporan a la
Mil Diez, compartiendo lauros allí con Arsenio Rodriguez y su Conjunto, otro de
las agrupaciones vinculadas al territorio centrohabanero.

A diferencia de los primeros años del siglo


cuando los productores artísticos se
sirven de músicos de academia como
intermediarios en la obtención de música
genuinamente Cubana, esta vez van
directamente a los solares en busca de
talentos. Luciano “Chano” Pozo es uno de
ellos. Le confían el protagonismo del
espectáculo de Tropicana “Congo
Pantera”, Allí es ovacionado por su
inobjetable virtuosismo ante el tambor, el
baile y la creación musical.

“Chano” Pozo se identificó mucho


territorialmente en el barrio de Belén,
perteneció a la comparsa Los Dandys y

126
compuso para ella su tema estandarte: “Siento un bombo” sin embargo, tambien
participo en la comparsa de Cayo Hueso y en la Sultana de Colón.

Vivió en el solar “El África” (Zanja y Espada) de Cayo Hueso; en el solar “El
Ataúd” (Gervasio 207) y en “La California “(Crespo y Colón). Y se vinculo
estrechamente tambien a las comunidades de los Sitios y Pueblo Nuevo. Fue el
autor de numerosos hits musicales por aquellos tiempos como “Nague” y “Blem
blem blem”, ambos popularizados sobre todos en la voz de Miguelito Valdés.

Chano participo en jazz band como la Orquesta Azul, y el Cuarteto de Mario


Santana, con quien actuó en el teatro Alkazar (Consulado y Virtudes). Partió a
New York en 1947 donde su fama se acrecentó clasificándosele como el mejor
rumbero y percusionista nacional, “El Tambor de Cuba”.

El más grande entre los grandes BENNY MORÉ tambien fue de los que, sin
haber nacido en Centro Habana, se estableció en el territorio, desde su llegada
a la ciudad en 1940. Vivió en Santa Marta y Franco, en los altos de una imprenta
en Oquendo y Clavel, ambos apartamentos en el reparto La Victoria de Pueblo
Nuevo. En principio estuvo vagando por cafés, parques y actuaciones
eventuales hasta que en 1945 viaja a México con el conjunto Matamoros, allí
conoce a Dámaso Pérez Pardo e ingresa en la orquesta de Mariano Mercerón.

En la década del 50 triunfa como cantante de la orquesta de Bebo Valdés y


luego con su propia banda. Uno de sus grandes éxitos sería tomado de los
filineros Luis Yañez y Orlando Gómez: “¡Oh, vida!”.

El Feelling aparece como una modalidad del cancionero Cubano en la segunda


mitad de los años 40, surge a través de las tertulias musicales en casas de
familias de Centro Habana, en especial en el Callejón de Hamel, donde vivían
Angel y Tirso, hijos del trovador Tirso Díaz. Los tertuliantes eran todos jóvenes
entre 18 y 25 años, de condición humilde, en su mayoría eran mulatos o negros,
trovadores con inquietudes creativas. Eran amantes del jazz y de la música
norteamericana a la manera de Nat King Cole y Glen Miller, pero también fans a
la trova tradicional, al danzón de Arcaño y sus Maravillas; o el Son de estelares
conjuntos, como los de Matamoros y Arsenio Rodríguez.

Aquellos encuentros, lo mismo podían escucharse discos de sus intérpretes de


preferencia, como cantar ellos mismos sus propias canciones. Y es que las
tertulias donde se gestó el filin eran como un taller intimista donde todos
coincidían en la necesidad de renovar la canción Cubana con un lenguaje más
vital, coloquial y optimistas lo contraponían a los aspectos escépticos del bolero
y la cancionistica de moda, donde como en los tangos prevalecía un regodeo
casi morboso en el dolor, la tristeza, las despedidas, el abandono o la soledad,
Igualmente rechazaban los arreglos a piano y orquetaciones comerciales donde

127
se estaba sacrificando la autenticidad interpretista, en favor de un supuesto
perfeccionismo formal y el gran espectáculo.

Las tertulias se iniciaban todas las noches en casa de Pilo Rodriguez (Virtudes y
Soledad) “En ese lugar - explica Ángel Díaz - comenzaba la cosa, cantaban
a dúo, solos, a trío, las canciones que nosotros empezábamos a crear. Más
tarde, a media noche, nos íbamos a mi casa en el Callejón de Hamel, para
el feeling. Y ahí mismo empezaba ha llegar una enorme cantidad de
admiradores del feelling. Mucha gente: Cesar Portillo de la Luz, José
Antonio Méndez, Justo Fuentes, ya fallecido, gran pilar del feelling con
canciones muy bellas, Leonardo Morales “Timochenco”, Eligio Várela
Mora”.(36) Igualmente fueron fundadores del movimiento: Luis Yañez, Armando
Peñalver, Armando Guerrero, Rosendo Ruiz Quevedo, Ñico Rojas, el Niño
Rivera, Orlando Gómez, Zamorita, Franck Emilio y Jorge Mazón.

Cantaban de forma muy espontánea, a manera de “descarga”, le harían


serenata a una muchacha, visitaban a otros filineros como la casa de Aída
Diestro en la calle Soledad, quien a su vez involucra a quienes serían excelsos
interpretes: Elena Burke “ La Señora Sentimiento”, Moraima Secada, Las
Portuondo, en fin, el cuarteto Las D´Aída fundado en 1952.(37)

Otro de los lugares donde


se mudo se descargó
feeling que en Marqués
González # 506, la casa de
Jorge Mazón. Su padre era
comunista y tabaquero de la
Corona. Allí fundaron un
modesto sello discogrífico
para publicar sus
creaciones, pensaron en
principio llamarle
Producciones Feelling, pero
para no encasillarse en una
línea les propusieron inscribirla como Editorial MusiCuba. Mucho influyó en este
proyecto el líder de la CTC Lázaro Peña, asiduo a las tertulias junto a su
compañera, la compañera Tania Castellano “¡Ustedes son doblemente
explotados en esta sociedad capitalista- recuerda que le decía Tania -. Por
negros, por ser negros y por ser pobres, desempleados o trabajadores. A él
debemos el sentido de clase que teníamos. A él debemos habernos
agrupado en la Editora MusiCubana, para defendernos de la explotación
128
aquella” (38).Laempresa que radicó también en el saloncito de Zanja y
Belascoaín, donde vivía Luis Yánez, dio a conocer no solo la obra de los filineros
fundadores, sino de otros que se fueron incorporando como: Frank Domínguez,
Giraldo Piloto y Malta Valdés incluso; Adolfo Guzmán grabó por primera vez aquí
su: “No puedo ser feliz”

El maestro Guzmán llegó a ser el Director Municipal de la radio Mil Diez, y junto
a Enrique González Mántici, se lograron los arreglos orquestales que permitían
la promoción de muchos talentos. El feelling tuvo una plaza fuerte en la “Emisora
del Pueblo, catapultando a la fama a cesar Portillo de la Luz y difundiendo la
Obra de José Antonio Méndez, la voz de Elena Burke y de otras jóvenes figuras
como: Olga Rivero, Berta Velázquez, Reinaldo Enríquez, Pepe Reyes y Miguel
de Gonzalo

LAS COMUNIDADES CHINAS, ÁRABES Y LOS


CENTROS REGIONALES ESPAÑOLES. SINCRETISMO
CULTURAL
España como metrópoli colonial reflejó en la isla sus diferencias culturales
internas a traves de sus sociedades regionales donde se hacían patentes las
inquietudes, tradiciones y preferencias de los peninsulares, según el lugar de
origen. No obstante, en gran medida tuvieron un alto grado de integración a la
vida nacional, siendo una de las sustancias esenciales del ajiaco Cubano.
Igualmente el caso de los diversos grupos etnológicos africanos, que por
hallarse sometidos, esclavizados, no les quedó otra alternativa que sobrevivir,
adaptando sus códigos a los de la cultura europea imperante.

Las comunidades chinas y árabe, de muy elocuente presencia en el territorio,


comienzan a aparecer como grupos sociales influyentes - como vimos, desde el
siglo XIX-, Se organizan y tratan de conservar su unidad cultural, e incluso
mantenerse como población. Sin embargo, en todos los casos, aunque se
conservan costumbres y tradiciones, se producen ínter actuaciones
significativas, con su sincretismo cultural y religioso que hizo mucho más
pintoresco, el cosmopolita territorio.

Muchas de las sociedades regionales españolas tienen su sede en territorio


centrohabanero. La razón obedece al mismo principio por el que fue este se
desarrolla como zona comercial, correspondiéndose con la amplia red de
servicios y edificios por los que puede optar o solares donde construir desde las
primeras décadas del siglo XX. Se destacan entre ellas la Sociedad de
Beneficencia de Naturales de Cataluña, fue establecida en Consulado No 68,
igualmente en la barriada de Colón, el Centro Andaluz. La Sociedad Naturales
de Galicia (San Martín No 458),y el Comité Central Asturiano por un tiempo
129
radicó en la calle Suvirana, así como los Naturales de Ortigueiras (Gervacio No
615), en Los Sitios.

La iglesia católica fue el culto religioso que impuso la administración Española.


En el territorio centrohabanero se construyen durante la república bellos
Santuarios, como él de la Iglesia del Sagrado Corazón de Jesús, proyectado
desde 1913, e inaugurado oficialmente el 3 de mayo de 1923.su emplazamiento
fue en la calzada de Reina No 463, entre Belascoaín y Gervasio. De colosales
dimensiones al estilo gótico su torre se pierde lamentablemente en el obstáculo
visual de otras edificaciones altas de los alrededores. Su interior es también una
maravillosa obra arquitectónica de impresionante magnitud y de acuerdo a las
necesidades del culto religioso fue constituida por los Jesuitas, con diseño del
hermano Luis Gordoza Diendo, junto al sacerdote Granda de Madrid.

La iglesia nuestra señora del Carmen (Infanta y Neptuno), constituida por la


orden de los Carmelitas Descalzos; también en la década del 20,en otras de las
obras arquitectónicas de la época, como también el Convento La Inmaculada
(San Lázaro No 805 entre Marqués González y Oquendo) de la Compañía Hijas
de la Caridad. Otars de las Iglesias es la de Nuestra Señora de Monserrate
(Galiano y Concordia).La Iglesia de la Caridad (Salud entre Manrique y
Campanario) surge por la fusión de las antiguas ermitas de Guadalupe y el santo
Cristo del Buen Viaje, en los Sitios, tanto aquí como en la Iglesia de San Judas
Tadeo, en la Plazoleta de San Nicolás, en donde se ofrecieron misas en lengua
árabe a fin de que esta comunidad pudiera participar del culto cristiano.

La comunidad árabe se integró fundamentalmente con: libaneses, sirios,


palestinos y en menor medida yemenitas, libios, egipcios y argelinos poblaron
sobre todo las calles de San Nicolás, Antón Recios, Figuras, Águila ,Maloja y la
Calzada de Monte. Los judíos crearon organizaciones como en comité de
corporación económica con Israel (Rayo No. 12) y la Asociación Femenina
Hebrea de Cuba (Neptuno). Enriquecieron la zona comercial y de servicios en La
Habana, aportando su milenaria cultura, como el caso de los chinos.

El “Barrio Chino” se extendió


irregularmente por diversas
calles centrohabaneras,
principalmente por: Zanja,
Dragones, Cuchillo, Rayos,
San Nicolás, Industria,
Amistad y Manrique,
abarcando zonas de los
actuales consejos populares
de Los Sitios, Colón y
Dragones. Con no menos
intensidad que la comunidad
130
árabe, desarrollo el comercio y los servicios e hizo aportes a la formación de la
nacionalidad Cubana.

A principios del siglo XX los chinos tienen su Consulado en Amistad No 128


(antiguo).El Casino Cheng Weh, funge como orientador y rector de todos los
chinos residentes en Cuba. Organización constituida desde finales del siglo XIX,
en 1954 construye el “Edificio China” en Amistad No 420 entre Dragones y
Barcelona, en cuyos bajos se establece el banco chino. Crean decenas de
sociedades de diversa índole, secretas, regionales, gremiales como la
Asociación de Detallistas Chino (Salud No 165), políticas como la Alianza China.

De las instituciones artísticas y recreativas fue muy significativa la Sociedad


Cultural de Música “Chung Wah Yin Loch Kou Se”, la que promovió la
compañía de opera “Chung Wah “. La comunidad china siempre hizo aportes
con agrupaciones artísticas, con motivo de los festejos que desarrolló la ciudad.
En 1936 participó en las ferias desfilando con la Banda de Música del Kuo Ming
Tang, al año siguiente organizaron con vista a los carnavales de La Habana, la
comparsa “ La Danza del Dragón”

Entre sus expresiones culturales más notorias se distinguieron Los Teatros


Shangai y Chung Wang, así como el cine Águila de Oro (Rayo y Zanja).
Significativa fue igualmente la producción literaria, sobre todo a través de la
prensa plana. Contaron con una cantidad y variedad de periódicos, entre ellos:
el Kwong Wong Po (San Nicolás y Cuchillo), el Wan Man Sion Po (Manrique No
555), el Hoy Men Kong Po (Manrique No 513) y el Man sen Yan Po (zanja no
114).la cultura culinaria china se vio muy bien representada en Restaurantes
como : “ El Pacifico” (San Nicolás y Cuchillo ), “Nan King” (rayo y Cuchillo) y “La
Muralla” (Cuchillo entre San Nicolás y Rayo). Un buen ejemplo del aporte chino
a la medicina verde y tradicional se gestó en la farmacia “Cheng Wang” (Zanja
entre San Nicolás y Manrique), mientras que todo un mito Chang Bon Bian “El
Médico Chino”

Un estudio profundo sobre las potencias abakuá en los barrios centrohabaneros


, en especial de Colón, Los Sitios y Pueblo Nuevo, deberá ofrecer mucha luz
sobre la evolución de la música y la danza . Esta influyente organización
fraternal y religiosa de ascendencia africana determinó la gestión de infinidad de
aspectos que hoy forman parte de la cultura nacional y que comenzaron a
insertase, sobre todo a raís de la reforma o apertura racial propiciada por Alfredo
Petet, en la iniciación y creación de juegos ñañigos de blancos. Igualmente los
aspectos sincréticos de las reglas de osha y conga, con su aporte a la cultura y
tradición religiosa.

Muchas de las asociaciones fraternales masónicas que se registran en el siglo


XX republicano, tienen sus comienzos en la centuria anterior, aunque se
reubican en nuevos edificios. La Gran Logia Occidental “Orden Caballero de la
131
Luz” construye su templo en Infanta No 1203, entre Santa Marta y Clavel, la
Gran Logia Odd Fellowsde Cuba radicó en Manrique No 221 y fueron las más
llamativas por su arquitectura y símbolo en lo alto, la Gran Logia Masónica de
Cuba, en Carlos III y Belascoaín.

La influencia del protestantismo cristiano nos llegó a través de los Estados


Unidos desde el siglo XIX. Una de las iglesias primeras por su integridad lo fue
la Methodist Church o Iglesia Metodista (Virtudes y Amistad), que promovió
también un colegio. La primera Iglesia Presbiteriana Reformada (Manrique y
campanario) se establece ya en 1906, en los Sitios. La iglesia Bautista (Carlos III
entre Marqués Gonzáles y Oquendo), en Pueblo Nuevo, la Holy Trinity Cathedral
(Neptuno y Águila), y la Iglesia Evangélica Pentecostal (Santa Marta entre
Lindero y Mercado), en Pueblo Nuevo. Hubo asta una iglesia evangélica en la
calle Zanja, de un pastor chino, expresión de las alternativas y complejidades de
los cultos religiosos y experiencia culturales.

LA SALUD, LA EDUCACION Y LOS DEPORTES


Estos tres aspectos sociales, tan esenciales en la calidad de vida de cada
comunidad, por lo general no han recibido un buen tratamiento historiográfico.
De la salud en la República neocolonial, sólo se acostumbraba a hacer mención
al desamparo en que se hallaba la mayor parte del pueblo, sin valorar los
esfuerzos de profesionales, instituciones religiosas o benéficas, los centros de
salud qu4 existían, ni alcance, logros limitaciones, el desarrollo de la atención y
asistencia medica a través del tiempo. Algo semejante ocurría en el caso de la
educación, mientras el deporte era casi omitido en todo texto de historia.

Estas líneas pretenden tan sólo abrir el ángulo de estas esferas, para que
percibir algunas de las muchas cosas que desconocimos; y por tanto, de lo
mucho que nos falta por inverstigar e historiar.

SALUD Y ASISTENCIA MÉDICA

El territorio centrohabanero hereda de la colonia tres importantes instituciones: el


Hospital de San Lázaro (Marina y San Lázaro), la Casa de Maternidad y
Beneficencia (San Lázaro y Belascoaín), y el Laboratorio de Lectología y
Bacteriología, fundado por el Dr. June Santos Fernández, que se convierte en el
primer Centro de Vacunación Antirrábica y Antidiftérica en Cuba.

La docencia médica local comenzó en la temprana fecha del 19 de noviembre


de 1900 en que los profesores Cirilo Yarini, Pedro Calvo, y Marcelino Weiss,
fundan la Escuela de Cirugía Dental (Belascoaín y Zanja). Fue la primera de su
tipo en Latinoamérica y una de las diez primeras en todo el mundo. Estuvo en

132
principio adscripta a la Escuela de Medicina y Farmacia, pero al incrementar sus
cátedras adquirió rango propio como Facultad de Odontología de la Universidad
de La Habana.

El leproso río de San Lázaro fue trasladado en 1907 hacia otro edificio en el
Mariel, y luego definitivamente para El Rincón. Mientras, el antiguo Cementerio
de Espada era demolido al año siguiente. El espacio que se liberaba condicionó
que pudiera proyectarse el Monumento y el Parque de Maceo, así como la
ampliación del barrio de San Lázaro que -como vimos -da lugar al nuevo barrio
de Cayo Hueso en 1912.

El general Fernando Freyre de Andrade el 1ro de abril de aquel mismo año,


propuso la construcción del Hospital Municipal de La Habana. Se edificó en un
área de 4,5000 metros2 en la manzana comprendida entre las calles: Avenida de
Carlos III, Hospital, Jesús Peregrino y Espada. Se ejecutó a un costo de
736,781 pesos y aunque después se continúo su ampliación- fue inaugurado
oficialmente el 18 de octubre de 1916. Contaba con servicios de: Pediatría,
cirugía, laringología, Oftalmología. Estomatología. Hidroterapia. Laboratorio
Clínico, Radiografía y Sala de Autopsias. Se diseñó con ocho salas con
capacidad para 120 camas. El servicio de Emergencia, Obstétrico, Dental y de
funciones de Casa de Socorro en la demarcación, sería el más notorio del
centro, con un pintoresco servicio de ambulancias de tracción animal.

La jefatura de Sanidad Municipal se insertó en la planta baja del hospital, junto al


Servicio de Farmacia, biblioteca, salón de conferencia. Relativamente áreas de
allí, en Belascoaín entre Estrella y Maloja, se construyó el edificio donde
estarían las oficinas rectoras de la Salud Pública a nivel Nacional.

Junta Superior de Sanidad fue el nombre que tuvo en principio el Ministerio, que
estuvo prendido por el Dr. Carlos J Finlay Barrés. En honor a su memoria,
enfrente se construyó el parque que lleva su nombre. El Dr. Enrique Barnet sería
quien dictó el primer Código Sanitario de Cuba, por eso y por su fecunda labor
como Secretario de Sanidad y Beneficencia, a la calle Estrella colindante con el
edificio Central de Salud, se le denominaría: “Enrique Barnert”.

Caracterizada Centro Habana por su multiplicidad y variedad de publicaciones,


no podía quedan atrás en esta materia. Desde 1913 en la calle Salud No. 64, se
comenzó a editar el Boletín Médico Municipal de La Habana. Por aquellos
tiempos también la revista Archivo de Medicina Mental (San Miguel43-A). En las
décadas siguientes se incrementarían las publicaciones, incluyendo el
reconocido Avance Medical (San Lázaro No. 113)

Las lluvias de octubre de 1916 desatan fuertes brotes epidémicos de influencia,


paludismo y fiebre tifoidea en la ciudad. La Secretaría de Sanidad y Beneficencia

133
adopta un conjunto de medidas contra el mosquito transmisor, entre ella la
clausura del Mercado de Tacón o Plaza del Vapor, debido a su estado sanitario.

Otro de los problemas epidémicos críticos en la localidad lo fueron las


enfermedades venéreas, sobre todo debido a los prostíbulos del barrio de Colón.
En Campanario No. 1060 se construye el dispensario Municipal “Joaquín
Albarán” (39) Desde 1928 esta entidad comenzó a promover medidas
profilácticas, asumiendo también los servicios concretos que en este campo
cumplía la Casa de Socorros del Cerro. Igualmente el Dispensario asumió el
Servicio de Enfermedades en la Piel que desde 1921 atendía el Hospital
Municipal. Llamado ya por aquel entonces “de Emergencias”. En mayo de 1934
el centro de la calle Campanario fue mejor dotado, convirtiéndose en el Instituto
Municipal de Profilaxis Venérea de La Habana. Antes de la clausura coyuntural
de los prostíbulos de Colón tenían expedientados más de 200 mil hojas clínicas.

El Instituto Nacional de Higiene (Infanta y Crucero FFCC) se inaugura en 1944.


Bajo la dirección del Dr. Moisés Checliak se organizan nuevas batidas contra el
mosquito, incluyendo la petrolización, desinfección y zanjeo. Esta entidad asume
muchas de las funciones propias de Beneficencia Social, incluyendo la recogida
de animales en la vía pública y el Servicio de Limpieza de Calles.

Al Instituto “Carlos J Finlay” (Infanta y Santa Marta), constituido casi


contemporáneamente con el de Higiene y colindantes, retoma las importante
funciones investigativas, de profilaxis y de vacunación que desarrollo el
primigenio laboratorio del Dr. Santos Fernándes. Sus especialistas laboraron
arduamente en investigaciones en torno a diversas enfermedades, incluyendo la
difteria y la poliomielitis, que vieron su fruto con la Revolución. Por aquellos
tiempos lograron desarrollar campañas de vacunación de limitado alcance como
la vacunación antinómica. La entidad desarrollo además otras muchas tareas,
incluyendo la capacitación de personal de salud, a atención a sectores humildes
y la creación de un comité para la rehabilitación de marginales en los llamados
“Barrios de indigentes”.

Durante la década del cincuenta se registra la existencia de varias entidades


privadas de carácter benéfico relacionados con la salud, y la asistencia social,
como los casos del Instituto del Niño (Carlos III No. 559 y Marqués González), la
Institución Pro-Vida (Neptuno No. 303) de carácter naturalista, la sociedad de
Estudios Clínicos de La Habana (Manrique No 412), así como organizaciones
profesionales como el Colegio Nacional de Enfermeros de Cuba (Nueva del Pilar
No. 53) y el Colegio Optometrista Nacional (Belascoaín No. 103).

Surgen clínicas mutualistas como la Cooperativa Médica de Dependientes


(Reina No. 255) y curiosamente, otros centros de salud se incorporan a la
Avenida de Carlos III: La Policlínica Cruz Blanca (Carlos III No. 562), el Instituto
Clínico Santa Bárbara (Carlos III No. 609) y la Clínica “ Nuestra Señora del
134
Amparo” (Carlos III No. 1151). Pero para la atención gratuita y de urgencia a la
población en todo el territorio sólo se hallaban el Hospital Municipal de La
Habana (“Emergencias”) y la Casa de socorros de San Lázaro No. 611.

ESCUELAS CENTROHABANERAS

La Escuela de Artes y Oficios de La Habana (Belascoaín y Maloja), junto a la


Academia San Alejandro y el Conservatorio Municipal de Música de La Habana,
fue el más importante centro docente del territorio, en ella se formaron muchos
trabajadores técnicos y manuales, en las más diversas y útiles profesiones para
brindar su aporte económico y social al país.

Hubo programas universitarios que se desarrollan desde edificios


centrohabaneros, como el caso de la Academia Arenosa (Infanta # 363, entre
Neptuno y San Miguel) donde se impartían Ciencias Comerciales, en
coordinación con los planes docentes de esa facultad en el alto centro docente;
Otras entidades ubicadas en la localidad y vinculadas a la enseñanza superior
fueron: La Agrupación Católica Universitaria (San Miguel 1111) y la
Confederación Nacional de Profesores Universitarios (Maceo # 307).

Como en la universidad había la posibilidad de presentarse a exámenes de


ingreso sin ostentar él titulo de bachillerato, determinadas escuelas se dedicaron
a preparar a estudiantes aventajados a través de cursos introductorios. La
Academia Newton (San Lázaro casi esquina a Aguila) fue uno de aquellos
planteles. Su director fue el ingeniero español Tomás Segoviano de Ampudia.
Aunque el edificio era un viejo caserón, disponía de un buen colectivo de
profesores, incluyendo al poeta mexicano Salvador Díaz Mirón, a cargo de las
cátedras de Literatura e Historias. Había sido amigo de José Martí y contribuyo a
la formación política de los jóvenes, trasmitiéndoles su identidad con nuestro
Apóstol y sus experiencias sobre la Revolución Mexicana. Entre los alumnos de
aquella academia estaría Julio Antonio Mella.

La existencia de la zona comercial centro habanera debió condicionar la


aparición de infinidad de centros docentes de carácter privado, relacionado con
la contabilidad, los idiomas, mecanografía y taquigrafía y artes comerciales en
general. Desde 1907 se constituye la Academia Morales (San Rafael # 1055),
donde se impartían cursos de secretaría comercial. Entre los más importantes
escuelas del ramo en la localidad pudieran citarse: La Fremont College
(Manrique # 110), La Havana Business Academy, que tuvo numerosas filiales en
toda la ciudad, entre ellas en Infanta # 102, Amistad y Neptuno, y Amistad # 180,
La Academia Adams (Neptuno # 452), La Specialty Business College (San
Miguel # 260), La Pitman Academy (San Nicolás # 309) y La Academia Central
de Comercio (Aguila # 664 y Estrella).

135
El territorio agrupa también escuelas de las más diversas especialidades. En
Corte y Costura se generó una competencia entre los siguientes centros: La
Academia de Sastres Cortadores “Gentelman Milady” (San Rafael # 562); La
Celia Canto Rico (Valle # 15), La Academia Central de Corte y Costura (San
Lázaro # 1009), El Dorothy Robuthan (Amistad # 311), El Colegio Nacional de
Profesores de Corte y Costura (San Carlos # 915 entre Desagüe y Benjumeda).
En escuelas de automovilismo hubo una tetralogía local: la Academia Nacional
de Choferes (San Lázaro # 704), La Cuba (Nueva del Pilar # 55), La Moderna, y
La Cubana de Automovilismo (Consulado # 103). Hubo varias escuelas de
electrónica entre ellas: Radio Instituto Internacional (Aguila # 169) y la Escuela
Cubana de Radio (San Rafael #773). También pequeñas escuelitas de
peluquerías y otras, muchas veces con nombres rimbombantes, pero que en
realidad el espacio era solo un aula, ubicada en el cuarto ó la sala de una casa
particular.

El Sistema de Enseñanza Estatal aportó la Escuela Municipal de Kindergarterns


de La Habana (San Lázaro # 682), así como un total de treces planteles públicos
de primaria y secundaria. De las escuelas primarias superiores, las dos
estuvieron en la calle San Lázaro, números 201 y 667. De primarias dispuso las
siguientes: Belascoaín # 1102, Rayo # 414, Desagüe # 454, Zanja # 314,
Escobar # 572, Campanario # 960, Estrella # 908, Oquendo # 860 y en la calle
Salud hubo tres escuelas las correspondientes a los números: 257,310, y 623.

Entre las escuelas privadas de enseñanza básica se distinguieron, desde


comienzos de la República, los colegios. “El Angel de la Guarda” (Carlos III #
553), fundado por Mariana Lola Alvarez en 1902, el “San Meliton” (San Nicolás #
23, antiguo) y en 1912 surge el Amelia de Vera (Galiano # 20), que tuvo una
revista propia. En los años veinte sobresalen la Escuela Politécnica Nacional
(San Rafael # 101) y el Colegio Santo Tomás (Reina #78), Posteriormente se
registran centros como el Instituto Panamericano (Hospital #711), el Dalton
(Maloja #14), el “Corominas de Hernández” (Neptuno # 667) y la Academia
Rabiña (Neptuno y Manrique). De los colegios religiosos serían notorios: El
Convento “La Inmaculada” (San Lázaro # 805), la Escuela Pía de La Habana
(San Rafael # 360), el Colegio Asilo “Nuestra Señora de la Caridad, de las H.H
Oblatas de la Providencia (Lealtad # 609 esquina a Reina) y la Metodista Central
(Virtudes #152), en la barriada de Colón.

Los maestros y profesores organizan en territorio centrohabanero varias


organizaciones del sector, entre ellas: La Asociación Educacional de Cuba (San
Lázaro # 206), el Colegio de Maestros Normales y Equiparadores de La Habana
(Manrique # 65) y en las luchas profesionales crean la Federación Nacional de
Retiro Escolar (Gervasio # 311),

136
EL JAI- ALAI Y LOS CLUBES DEPORTIVOS EN CENTRO HABANA

El territorio centrohabanero es muy pequeño y se le explotó intensivamente en la


construcción de edificios de dos ó más plantas, sin que se reservaran muchos
espacios para terrenos deportivos. No obstante, el auge del JAI-ALAI, con sus
fontís y graderías, si llegó a tiempo al reparto de solares en el nuevo siglo,
siendo tal vez el más beneficiado de toda la ciudad.

“JAI-ALAI” fue la denominación con la que se popularizó en Cuba a especialidad


del deporte de canchas, que fue un híbrido entre la pelota vasca y el scoash
británico, dando lugar según el autorizado criterio del Dr. Antonio Méndez Muñiz-
al Frontón Cubano, Centro Habana Neocolonial sería el imperio del JAI-ALAI en
Cuba, constituyéndose entre 1901 y 1922, tres de los más importantes y
populares frontones del país.

La primera de las canchas se inauguró el 3 de Mayo de 1901 con el nombre de


Frontón JAI- ALAI de La Habana (Concordia y Lucena). Se construyó con un
diseño casi perfecto con piedras importadas de Italia, a pesar de que el contrato
firmado con el Ayuntamiento de La Habana, propietario del terreno, el mismo
con edificio nuevo incluido, debía devolverse al cabo de 10 años. A la instalación
se le conocería como “El Palacio de los Gritos”. Debido a la resonancia de las
voces de los árbitros, el murmullo del público y los golpes de pelota, pero sobre
todo, a la gran bulla que generaba los espectadores cuando el juego llegaba a
su clímax.

Paralelo al deporte rentado, surgía el Frontón Cubano de aficionados, y una de


las primeras canchas estuvo situada, desde 1905 al costado del gran Frontón.
Se denominó “Edgar- JAI (Concordia y Marqués González), Su promotor era el
veterano pelotari Hernani, quien desarrolla allí las modalidades de mano, pala,
guante y cesta El auge de estos deportes de canchas se expresa también en la
revista literaria y deportiva BETI-JAI, cuyas oficinas radican en los altos de
Galiano # 26 (antiguo).

El 28 de Enero de 1921 se inaugura el NUEVO FRONTÓN, en la manzana


comprendida entre las calles Marqués González, Desagüe, San Carlos y
Peñalver. Se le conocería popularmente como el “Palacio de las Luces”, debido
a su gran iluminación durante las funciones nocturnas; también se le denominó:
“La Catedral de la Pelota” y el “El Templo Máximo de la Pelota”. Ya por aquel
tiempo se había reabierto el primigenio FRONTON de Concordia y Lucena y
existía otra gran cancha en la ciudad de Cienfuegos. El Nuevo, apuntaba a ser
el puntero con ofertas hasta entonces desconocidas en este tipo de instalación,
como restaurante y espacio para actividades culturales, con salones de baile. No
obstante, en el transcurso de las competencias se comprobó que el frontón no
tenía la misma calidad que el Palacio de los Gritos.

137
Al año siguiente, 1922, se inaugura el FRONTÓN Habana-Madrid (Belascoaín
entre Sitios y Peñalver). Sería conocido también como “La Casita Criolla” o “El
Templo de la Raqueta”. Aquí desde el principio participan jugadoras
profesionales vascas, quienes introducen en Cuba la pelota de cuero con la
raqueta reforzada. También la instalación es de las primeras en brindar abrigo a
competencias de aficionados, incluyendo en 1924 la celebración de juegos entre
niños pelotaris. Ese mismo año se funda la Federación Nacional de JAI- ALAI
Amateurs, coincidiendo el esplendor de este deporte con el de los espectáculos
centrohabaneros en general.

Son los tiempos en que las funciones de JAI- ALAI se integran en las ofertas del
turismo habanero, y muchos de los hoteles y servicios son utilizados por las
pelotaris, muchos de ellos españoles. Además del Hotel Habana-Madrid, refiere
el Dr. Méndez Muñiz que el San Luis fue muy utilizado por los jugadores-
viajeros, como otros muchos hospedajes de la localidad, incluyendo

Al año siguiente, 1922, se inaugura el FRONTÓN Habana-Madrid (Belascoaín


entre Sitios y Peñalver). Sería conocido también como “La Casita Criolla” o “El
Templo de la Raqueta”. Aquí desde el principio participan jugadoras
profesionales vascas, quienes introducen en Cuba la pelota de cuero con la
raqueta reforzada. También la instalación es de las primeras en brindar abrigo a
competencias de aficionados, incluyendo en 1924 la celebración de juegos entre
niños pelotaris. Ese mismo año se funda la Federación Nacional de JAI- ALAI
Amateurs, coincidiendo el esplendor de este deporte con el de los espectáculos
centrohabaneros en general.

Son los tiempos en que las funciones de JAI- ALAI se integran en las ofertas del
turismo habanero, y muchos de los hoteles y servicios son utilizados por las
pelotaris, muchos de ellos españoles. Además del Hotel Habana-Madrid, refiere
el Dr. Méndez Muñiz que el San Luis fue muy utilizado por los jugadores-
viajeros, como otros muchos hospedajes de la localidad, incluyendo el Tekiona
(Marqués González N° 214), del que era copropietario el expelotaris Odriozola, y
donde las ofertas culinarias se especializaban en platos españoles, también los
jugadores solían alquilar dos pisos tercero y cuarto de Belascoaín y Salud, cuya
propietaria o administradora era una mujer vasca, quien en coordinación con el
bar – restaurante “Alfonso XII” ofrecía lo que desearan los deportistas,
incluyendo termos de jugo de naranja bien temprano en la mañana, que eran el
desayuno predilecto. Los que gustaban de comida china solían ir a restaurantes
como eran el bar-restaurante “Celada” (Belascoaín y Carlos III), “concurrido por
los puntistas quienes de noche, al salir del frontón, transitaban a pie por las
calles Belascoaín arriba y, si bien eran interceptados varias veces por
admiradores, siempre llegaban hasta el establecimiento a tomar café o coñac
antes de acostarse a dormir.

138
“El bar Madrid, en Concordia y Belascoaín – destaca Méndez Muñiz –
resultaba también un lugar muy concurrido por los artistas del mimbre,
sobre todo por los vascos, aunque igualmente acudían pelotaris Cubanos.
Ocurría otro tanto con los bar-restaurantes “Mar y Tierra”, cerca de
Belascoaín y Malecón, el “Vistaalegre”, el situado en Belascoaín y San
Rafael, así como el Centro Vasco (...). Los criollos del Frontón Jai-Alai
solían ir con gran asiduidad al bar “Neptuno”, en Neptuno y Marqués
González, cuando terminaba la función (...). Los atletas del Habana –
Madrid frecuentaban otros lugares (...). Muchas veces, al terminar la
función de la tarde, o de la noche, se acercaban a la zona de El Palacio de
los Gritos, visitando “El Sol de Cuba”, el bar “OK”, en Belascoaín y
Zanja, o el restaurante de Belascoaín y Neptuno, terminando en el Parque
Maceo, frente al malecón habanero, donde formaban la peña de jai-alai,
una de las diversas tertulias que allí se celebraban hasta bien entrada la
madrugada”. (41)

El territorio centrohabanero suplió la carencia de otras grandes instalaciones con


la práctica de deportes que no necesitaban de grandes áreas, como las
academias de cultura física, de las que hubo muchas en calles céntricas como
San Lázaro o San Nicolás; pero sobre todo, la juventud paliaba sus inquietudes
a través de clubs o sociedades de instrucción y recreo.

La Liga Juvenil Comunista, por ejemplo constituyó al mes siguiente del revés de
la Huelga de marzo de 1935, el club Juventud Cultural Deportivo, basado en las
experiencias de la Juventud Cultural Deportiva del Cerro, desde 1927, que fue la
primer organización juvenil del partido Comunista. Este club de 1935 se
constituyó en Campanario N° 13, luego se trasladó a los altos de Marqués
González esquina a San Rafael, que era donde vivía el Dr. Carlos Manuel
Betancourt, abogado de la organización Defensa Obrera Internacional. Más
tarde alquilaron en Malecón N° 73 y se establecieron definitivamente en San
Lázaro N° 83, entre Aguila y Crespo, donde se desarrollaron la mayor parte de
las actividades. “La casa de San Lázaro – explica la investigadora Matilde
Serra, joven comunista por aquel entonces y una de las organizadoras del club –
aunque no muy nueva, tenía buena presencia. Era amplia, alegre,
agradable. Dos grandes ventanas, cubiertas de rejas con bonitos
arabescos, le daban cierta personalidad. Esta se componía de una sala
grande, separada por dos columnas de la saleta, cuatro habitaciones y un
patio de cemento. Al fondo de la cocina y demás servicios, cómodos
sillones y gran cantidad de sillas ocupaban la sala. Algunos adornos y
reproducciones de cuadros famosos, donados por los asociados,
adornaban las paredes de altísimo puntal. Una larga mesa de pimpón y
139
otras más pequeñas destinadas a ajedrez, damas, parchís y otros juegos,
ocupaban la saleta. A continuación la oficina, convenientemente
amueblada, y la sala de lectura o biblioteca circulante. La familia que
representaba el Club ocupaba la parte restante de la vivienda”. (42)
Además de los juegos de mesa y entretenimiento, una comisión promovió la
práctica sistemática de deportes, individuales y en equipo, en terrenos
apropiados. El primer éxito de un equipo del club fue con el baloncesto. Su
entrenador fue Sergio Chan Capote, quien había sido el Secretario General del
Comité de Huelga en los Institutos de segunda Enseñanza. Obtuvieron la Copa
de Campeón que otorgaba el Club Deportivo Asturias (Estrella y Subirana),
venciendo a otras entidades locales, como la Asociación Deportiva Cubana
(ADC). En sus terrenos de Colón N° 35, esquina a Aguila, se efectuaron
muchos de los encuentros. “Extraordinario júbilo los invadía en cada
triunfo –recuerda con pasión Matilde Serra – en masa se lanzaban al terreno
para demostrarlo, pero éste no tuvo límites al conocer que el club había
sido declarado campeón, al vencer, en justa lid, a los “muchachos” del
ADC, el Deportivo Asturias y a los de Cuba Nueva, y obtener por ello el
preciado galardón. En esa ocasión se efectuó, en el propio terreno del
baloncesto del Deportivo Asturias, un emotivo acto en homenaje a los
valientes y esforzados atletas del Juventud Cultural Deportivo” (43). Y
efectivamente, en la noche del 29 de febrero de 1936, el presidente del Club
Deportivo Asturias entregaba la reluciente copa, al capitán Sergio Chan del JCD.
La actividad era amenizada con un bailable donde intervenía la Orquesta Típica
de las Hermanas González.

También organizaron un equipo femenino de baloncesto y obtendrían notorios


éxitos en deportes como el béisbol, donde tuvieron de capitán y entrenador a
Romero, que era un veterano jugador del Club Teléfonos (de la Cuban
Telephone Co.) otro de los prestigiosos equipos locales a quien también
vencieron. La Juventud Cultural Deportivo organizó igualmente disciplinas
atléticas y la natación en ambos sexos.

De forma semejante desarrollaron sus actividades otras sociedades de


instrucción y recreo, como: el Club Atlético de Cayo Hueso, el Peñalver Tennis
Club, el Club de Cuatro Caminos, o el Club Deportivo de Pueblo Nuevo. Hubo
clubes que agruparon a sus integrantes según las calles donde vivían, o
laboraban, como en los casos del: Galiano Sport Club, el Club Deportivo
Neptuno, el Dragones Sport Club, el Concordia Sport Club, y el Club Deportivo
Infanta.

El ajedrez fue otro de los deportes de mayor participación en la localidad. Surge


el Club Ajedrez “Capablanca” (Infanta No. 64) y desde 1963 surgió la revista
140
Ajedrez (Virtudes No. 20). Otras publicaciones deportivas en el territorio fueron:
América Deportiva, con el lema “un periódico al servicio de los deportes” en los
años cuarenta, y Deportes (San Lázaro No. 615), ya en la década del cincuenta.

EL PROCESO DE UNIDAD NACIONAL. LAS LUCHAS


OBRERAS, POPULARES PATRIÓTICAS Y
ANTIIMPERIALISTAS
Históricamente el tema de la nacionalidad se aborda casi exclusivamente en la
etapa colonial, durante su gestación original o nacimiento, como si todo el
proceso económico y superestructural sucesivo no incidiera, o incluso le pudiera
afectar, al punto de hacerla desaparecer. La trascendencia de una nación se
corresponde con la solidez, con su coherencia interna, con la armonía de su
“ajiaco”, con la unidad de todos sus factores integrantes. En el caso de la
sociedad Cubana, los procesos sociales como políticos, han apuntado al
desarrollo de la nacionalidad. Centro Habana fuer4zas, por ser el territorio
históricamente más cosmopolita del país y mantener insertadas dos
comunidades de ascendencia extranjera, pudiera haber reflejado resquicios en
las luchas patrióticas, obreras y político revolucionarias. ¡Todo lo contrario! Estos
factores, como vimos en el campo cultural, armonizaron creadoramente.
Políticamente, participaron en las contiendas patrióticas junto a la vanguardia,
siendo casos paradigmáticos el de José Wong, por la comunicada china, y
Alfredo Yabur Maluff o Félix Elmuza por la comunidad árabe.

Las epopeyas no sólo fueron el abono de la unidad. Veremos también en las


siguientes páginas, enrevesados giros y complejidades como las increíbles
luchas fratricidas, laboratorio en el que se laboró el camino de la unidad y el
fortalecimiento de la nacionalidad Cubana. Cada acción, desde las viriles y
dignas posiciones de Salvador Cisneros Betancourt y Juan Gualberto Gómez
contra el plattismo y la intrusión extranjera, hasta los reveses, fueron
experiencias a favor de la unidad, compactando el haz entre todos los Cubanos.
Cada pequeño hecho local fue una contribución al hermanamiento entre vecinos
y compañeros de trabajo, en el modesto aporte al sentido de pertenencia, a la
identidad patriótica, al amor por la nación y por Cuba.

EL MOVIMIENTO OBRERO, REVOLUCIONARIO Y COMUNISTA.


GRUPOS ARMADOS
La República de Cuba nació con un lastre: la Enmienda Platt. Contra ella se
pronunció el pueblo y los más lúcidos patriotas, distinguiéndose el marqués
Salvador Cisneros Betancourt y el multo Juan Gualberto Gómez, ambos

141
residentes en edificios centrohabaneros; el primero en Neptuno No. 860 y el
segundo en Lealtad No. 106 en un voto particular contra la Enmienda, el 15 de
marzo de 1901, Cisneros afirmó que “los americanos no vinieron a Cuba
puramente por humanidad como pregonaban sino con miras particulares
y muy interesadas.” (44). Juan Gualberto, por su parte a nombre de una
Comisión de la Convención Constituyente, el 26 de marzo de 1901 redacta una
brillante ponencia – respuesta al Gobierno Militar interventor donde hacía añicos,
punto por punto, todos los supuestos “nobles motivos” del senador Platt y del
Gobierno de los Estados Unidos, para tribuirse el “derecho” de intervenir cuando
lo deseara en Cuba.

La dependencia política y económica, al sometimiento a los Estados Unidos,


aunque era el problema esencial que las traba la República, no era el único que
limitaba la libertad de los Cubanos en su propia tierra. La clase obrera, por
ejemplo, era aún excluida, y discriminada como en los peores tiempos de la
dominación colonial española.

La Liga General de Trabajadores Cubanos (LGTC), reorganizadora del


movimiento obrero Cubano en esta etapa inicial de la República, propició la
repatriación de muchos de los obreros que se hallaban en Cayo Hueso, Tampa
y otros puntos fabriles en la Florida. El barrio de Cayo Hueso, que surge como
un desprecimiento de San Lázaro, toma este nombre precisamente debido a la
cantidad de tabaqueros y obreros en general que regresan y se establecen
definitivamente aquí, procedentes del cayo homónimo. Son trabajadores
fogueados en las luchas sindicales norteñas, con un concepto de clase en sí, y
que mucho contribuyen a la politización del proletariado Cubano.

La primera de las bases programáticas de la Liga General de Trabajadores


planteaba que los obreros Cubanos tuvieran las mismas oportunidades y
derechos que los extranjeros residentes en el país. Sí, porque aunque parezca
mentira, aquí los obreros Cubanos estaban relegados a los empleos más duros
y peor renumerados. En los tabaqueros las labores de secado, rezagado,
escogida y fileteado se reservaban por lo general a españoles y sus parientes,
mientras a los Cubanos sólo se les ocupaba en el despalillo y galera. En el caso
de los aprendices, prácticamente todos eran hijos o sobrinos de éste o aquel
español, sus sociedades regionales contribuían decisamente en este rejuego,
donde se excluía a los Cubanos. De manera que si bien los norteamericanos
comienzan a controlar la industria tabacalera, como vimos en el epígrafe
económico, a los efectos de las posibilidades de aprendizaje y las ofertas de
empleo, a fines del primer año republicano, todavía parecía que La Habana se
hallaba bajo la bota colonial de la corono española.

“Nosotros queremos unión, paz, concordia, pero con dignidad. No


pedimos, ni pediremos nunca exclusiones – había sentenciado el
142
Presidente de la Liga de Trabajadores – pero no estamos dispuesto a
tolerar por más tiempo que se nos excluya…” (45). Mantuvieron desde su
constitución una lucha sostenida, pero moderada, sin que prosperaran sus
demandas. Fue entonces que en la Asamblea de Amistad Nro. 114 los
dirigentes gremiales combativamente aprobaron un conjunto de exigencias
donde la primera era que los niños Cubanos, sin diferencia de raza, fueran
admitidos como aprendices en cualquier centro. La patronal tabacalera rechazó
rotundamente el pliego, por lo que estalla la que se dio en llamar “Huelga de los
Aprendices”.

Parque Trillo con el monumento


al General Quintín Bandera.

Los mítines en tabaquerías, calles y en el Parque


Trillo, estremecen el centro de la ciudad. El Teatro
“Cuba” (Galiano y Neptuno) es escenario de un
acto político celebrado por los tabaqueros. A la
salida la policía hace disparos contra los obreros
que ya abandonaban el lugar causando varios
heridos. Ante la gravedad de la situación, sin que
la patronal transigiera, la Liga General de
Trabajadores decide convocar a la huelga general,
recavando el apoyo de todos los gremios y
entidades obreras del país. Se solídanzan con los
tabaqueros no sólo los obreros de otros sectores,
sino también intelectuales, entre ellos Fermín
Valdés Domínguez, residente en Centro Habana.
Aseguró en una tribuna que de vivir su amigo José Martí hubiera apoyado con
sus fuerzas a los obreros tabaqueros, sus fieles hermanos en la emigración,
quienes tanto contribuyen a la causa independentista.

Comienzan a sucederse encuentros entre huelguistas y policías. El primero que


en la calle Lealtad, entre Maloja y Sitios, cuando los tabaqueros se dirigían en
manifestación a la Fábrica “Águila de Oro”, cuyos operarios españoles no se
habían sumado al paro. Otro disturbio violento fue en Galiano y San José.
Mientras, en Gervasio y Neptuno otra manifestación es interceptada, empujando
a los obreros por toda la calle Neptuno hasta Galiano. Era detenido y golpeado
el tabaquero Emilio Ramos por lo que la multitud de obreros se enardeció y se
presentó en el lugar el Jefe del Cuerpo de Policía, general Rafael de Cárdenas.
La actitud de este ex-oficial mambí fue tan abusiva y reprendible que el alcalde
O’Farrill se vio obligado a cesantearlo.

El lunes 26 de noviembre de 1902 iban a ocurrir encuentros aún más graves.


Todo Centro Habana era un hervidero de pueblo. Por Belascoaín, desde Reina
143
hasta la Casa de Maternidad y Beneficencia y por todos los alrededores del
Leprosorio de San Lázaro, se encontraban más de 4 mil obreros, los choques
con la policía habían comenzado en Neptuno, entre Lucena y Marqués
González, pero también por Carlos III, Tomás Estrada Palma daba el
espaldarazo a la represión y amenazaba con el derecho plantista de intervención
extranjera. La reacción de la fuerza pública esta vez fue la más bárbara y cruel
que hasta entonces se conociera, con un saldo de cinco obreros fallecidos y casi
un centenar y medio de heridos. La jornada sería recordada como el “Lunes
Sangriento”.

Aunque la Liga General de Trabajadores Cubanos tuvo que disolverse a raíz de


las investigaciones y represión contra los huelguistas, la clase obrera continuó
ganando en organización y politización. Si bien continuó prevaleciendo en el
movimiento obrero el marco – sindicalismo y el reformismo, el 18 de noviembre
de 1903 surge la primera organización marxista de Cuba; el Club de Propaganda
Socialista. Su fundador fue el tabacalero Carlos Benigno Baliño, en
Perseverancia No. 63, actual 217, sus integrantes eran 11 obreros, muchos de
ellos trabajadores tabacaleros, emigrantes que ya vivían en Cayo Hueso, habían
sido dirigentes de la Liga de Trabajadores.

Carlos Baliño.

Meses después se funda el Partido Obrero


en Concordia No. 73. Su órgano de prensa
fue La Voz Obrera, donde Carlos Baliño
comenzó a escribir. Hacía 1905 logró que
asumieran los postulados básicos de la
ideología científica de la clase obrera, por lo
que en 1906 se fusionan el Club de
Propaganda Socialista con el Partido Obrero,
surgiendo: el Partido Obrero Socialista
(POS). Poco después, se les suma la
Agrupación Socialista Internacional,
compuesta en su totalidad por exponentes
con un dominio de la teoría, pero
desconocedores de la idiosincrasia y los
problemas concretos del pueblo de Cuba.

El Partidos Socialista de la Isla de Cuba es como se denomina la nueva


organización, la que constituye distintas filiales, incluyendo la Agrupación
Socialista de La Habana (San Rafael No. 86). Sin embargo, aunque
conocedores de los principios básicos, no hicieron una interpretación correcta de
los problemas y necesidades de la clase obrera Cubana y del país,
manteniéndose al margen de asuntos vitales como el ingerencismo
144
norteamericano, las discriminación de todo tipo, y las reivindicaciones sociales y
económicas. Se limitaron prácticamente a pregonar la necesidad de la toma del
poder político, desvinculándose de las masas y sus inquietudes, por lo que no
pudieron jugar un papel de vanguardia.

Luego de el Gerente de Ajusto y en la segunda intervención norteamericana, el


20 de febrero de 1907 se inicia la llamada “Huelga de la Moneda”. De nuevo son
los combativos tabaqueros quienes promueven el paso. Se les estaba
entregando materia prima de muy baja calidad, por lo que sus rendimientos eran
muy bajos; unido a esto se les pagaba con moneda española, cada vez más
devaluada.

La huelga comenzó en la fábrica “Hija de Cabañas y Carvajal” (Zanja No. 2), la


que en aquellos momentos ya había sido absorbida por el monopolio
norteamericano Havana Comercial Company. Su líder fue Miguel Valdés, quien
luego sería uno de los fundadores del primer Partido Comunista de Cuba. Otros
dirigentes fueron: Manuel Cerdoya, Emilio Sánchez, Enrique Peña, Juan Ayala,
Domingo Aragón y Feliciano Prieto. Exigían el pago en moneda norteamericana.

El Partido Socialista de Cuba apoyó el movimiento huelguista, divulgando en la


Voz del Pueblo el curso de las acciones, con la edición diaria de un suplemento
noticioso. El Dr. Enrique Valencia, abogado que tenía su bufete en Campanario
No. 10, fue el abogado que defendió las demandas de los tabaqueros. Mientras
la huelga continuaba comités de ayuda como el de Cayo Hueso permitieron que
se continuaran firme en la lucha, no sólo por el aporte material, sino por la
solidaridad que les unía.

El 14 de julio de 1907, Rafael García Márquez, presidente de la Unión de


Fabricantes de Tabaco, a propuesta del gerente de la Henry Clay, plantea a la
dirección del Comité de Huelga que estaban dispuestos a conceder un aumento
del 5% en los jornales. Ese mismo día los tabaqueros se reunieron en asamblea
magna efectuada en el cine Gris (San Miguel No. 860), enfrente del Parque Trillo
y acordaron rechazar la limosna que les proponía la patronal y continuar el pago
hasta que el pago fuera en dólares. Samuel Compres, el Secretario de la
American Federation of Labor vino a La Habana, recorrió las fábricas en huelga
e hizo declaraciones a favor de los tabaqueros Cubanos, el miembro el
Gobernador Magoon no tomaba partidos en el conflicto. De manera que la
patronal tabacalera, luego de 145 días de huelga tuvo que acceder a la petición
obrera, sin descuento en los cambios.

El apoyo verbal del reformista Gompers y la interesada “neutralidad” de Magoon


hicieron reeditar en algunos la idea del supuesto “paternalismo” de los
norteamericanos. Frente a estas ilusiones y contra los plantistas y anexionistas
de siempre, de nuevo se erige el Marqués de Santa Lucía, Salvador Cisneros
Betancourt. Poco después del éxito del Huelga de la Moneda, el 2 de agosto de
145
1907, convoca a una reunión en los altos de Belascoaín No. 32 donde asisten
numerosos combatientes del 95, o viudas de aquellos. Con el propósito de
reafirmar los sentimientos patrióticos en el pueblo y luchar por la derogación de
la Enmienda Platt, se constituye el 10 de octubre de 1907 la Junta Patriótica de
La Habana, Participan en este proyecto junto a Cisneros Betancourt: Fermín
Valdés Domínguez, Enrique Collazo, Bernarda Toro, viuda de Gómez, Amalia
Simoni, viuda de Agramante, Adela Azcuy, Ana Quesada, viuda de Céspedes,
Carlos García Velez, Francisco Arredono Miranda, Bernabé Boza Sánchez,
Eusebio Hernández Pérez, y otras destacadas personalidades (46).

Mientras tanto, la patronal tabacalera, insatisfecha con los resultados de la


última huelga, ahora desde la Unión de Fabricantes de Tabacos y Cigarros de la
República de Cuba, da a conocer que por necesidades del capital, realizaría
despidos de los obreros en distintas fábricas el 7 de enero de 1908. El día 10 de
enero los operarios de la “Romeo y Julieta” y H. Upman paralizan sus centros y
se lanzan a las calles centrohabaneras en manifestación, convocando a todas
las fábricas a secundarles en el paro. La Federación de Torcedores, que se
hallaba en formación, encabezada por Emilio Sánchez, otros líderes de la huelga
anterior hacen gestiones ante las autoridades y piden ayuda a otros gremios y
entidades cívicas. Esta vez no vino Gompers y Mr Magoon, por su parte,
autorizó el encarcelamiento de los principales dirigentes. El sábado 11 de enero
comenzaron las rebajas de plantilla anunciadas, extendiéndose sin vacilación los
despidos hacía los huelguistas y dirigentes de la Federación de Torcedores, que
no hallaron trabajo en ninguna otra tabaquería de la ciudad. Este era el
verdadero “END” que añoraba, no sólo la patronal tabacalera, sino toda la clase
dominante y aliados norteamericanos. Muchos de los tabaqueros desempleados,
optan por volver a Cayo Hueso y Tampa, en espera de tiempos mejores.

No fue hasta los mejores años de la segunda década del Siglo XX en que se
crea el Centro Obrero de Dragones No. 409 entre San Nicolás y Manrique. En
1914 se constituyen la Sociedad de Torcedores de La Habana y el Comité
Central de Auxilio a Torcedores. Con la consigna “Pan y Techo” promueven en
el Parque Trillo un acto multitudinario y se efectúa numerosos mítines en la
localidad.

1914 es el año en que el Gobierno menocalista se plantea el control del


movimiento sindical. Promueven el llamado Congreso Obrero, en colaboración
con dirigentes reformistas y del Partidos Socialista de Cuba, como el tabacalero
Manuel Cendoya y otros que parecían renunciar a objetivos ideológicos
estratégico, en función de reivindicaciones concretas y del favor oficial. En el
Congreso intervenían con planteamientos acertados, la Sociedad de Resistencia
Torcedores de La Corona, la Asociación de Tipógrafos y otros gremios. Pedían
ayuda ante la carestía de la vida, protección a inquilinos urbanos contra los altos
alquileres impuestos por los casa tenientes, creación de escuelas nocturnas
para trabajadores y otras medidas de beneficio popular.
146
Durante la Primera Guerra Mundial (1914 – 1918) se expresa nuevamente con
fuerza el movimiento obrero. Reaparece en 1917 la Agrupación Socialista de La
Habana con Carlos Baliño como presidente, junto a otros dirigentes como el
cigarrero Alejandro Barreiro. Por su parte los líderes gráficos Alfredo López y
Antonio Penichet, aunque de orientación anarquista, conducen y organizan a los
obreros, levantando la combatividad y el espíritu de clase. Surge la Federación
de Torcedores de las provincias de La Habana y Pinar del Río, que cuentan con
el Boletín del Torcedor.

El movimiento feminista también se desarrolla durante los años bélicos, ya en


post- guerra, el 28 de diciembre de 1919 tiene lugar en el Parque Trillo, el primer
acto público organizado por el Club Femenino de Cuba. Una de sus
participantes la centrohabanera Rosario Guillavme Pérez “Charito”, quien luego
ingresaría en el Partido Comunista. Se proponían solicitar al Gobierno su
intervención en los problemas que gravitaban sobre los sectores más humildes,
pidiendo rebajas del 50% en los artículos de primera necesidad, así como de los
alquileres. La policía, alegando no estar debidamente autorizado el acto,
convocó a las mujeres a retirarse. Al negarse éstas, procedieron con violencia,
disolviéndola a tiros, cayendo mortalmente herido el carretonero Luis Díaz
Blanco.

En respuesta a este crimen, el Gremio de Carretoneros organizó el entierro


partiendo del Parque Trillo. La policía nuevamente hizo uso de sus armas de
reglamento, a fin de disolver la manifestación, organizando una mayor alteración
del orden y acusando varios heridos. Argumentaron la agresión afirmando que
los participantes en el sepelio daban “Vivas al Soviet”.

Convocado por la Federación de Torcedores de las provincias de La Habana y


Pinar del Río, se celebra del 14 al 20 de abril de 1920 el llamado Primer
Congreso Obrero. Participa un centenar de organizaciones de todas las
provincias. Se tratan aspectos candentes de la actualidad nacional e
internacional, incluyendo sugerencias concretas para paliar la problemática de la
carestía de la vida, y se proyecta dar los primeros pasos para constituir una
Confederación Nacional de Trabajadores.

La Federación Obrera de La Habana (FOH) queda constituida el 4 de octubre de


1921. Su Secretario General fue Alfredo López Arencibia. Fue consecuencia del
proyecto reorganizador del Congreso Obrero, agrupando a casi 20 gremios, con
lo que se daba un gigante avance en la estructuración unitaria.

Una de las acciones fue expresar el apoyo a los obreros Nicola Sacco y
Bartolomé Vanzetti, quienes estaban encarcelados injustamente y en peligro de
ser asesinados legalmente por el sistema judicial “democrático” de los Estados
Unidos. En el acto, ejecutado en el Parque Trillo, los obreros capitalinos, en

147
nombre de la clase obrera y el pueblo Cubano, ofrecieron su solidaridad con
aquellos hermanos, finalmente fueron ejecutados.

Dentro de los resultados directos de la FOH fue la constitución de una Escuela


Racionalista en el Centro Obrero de La Habana (47), en 1922.

La Federación Estudiantil Universitaria de La Habana también se funda en 1922,


el 20 de diciembre. Su directorio eligió a Felio Marinillo presidente, y como
secretario a Julio Antonio Mella (48). Desde entonces se inicia una fructuosa
alianza obrero – estudiantil. El Boletín No. 1 de la FEU se edita en la imprenta de
la Sociedad de Resistencia y Tabaquería “La Ideal” (Figuras Nros 35- 39). Aquí
se explicaba que la F.O.H. y los estudiantes habían coordinado que se dictaran
conferencias de superación cultural en locales obreros como parte de los
principios nacionalistas. La primera Conferencia la impartía Julio Antonio Mella
en la Fábrica de Tabacos “Por Larrañaga” (Belascoaín Nro. 225, antigua).

El ascenso del movimiento obrero, la radicalización del estudiantado y capas


progresistas de la intelectualidad desde los primeros años de la década del 20,
durante el zapateo, es un interesante fenómeno socio – político. Le animan
factores externos como el movimiento reformista democrático que se desarrolla
en Latinoamérica y la aparición de la Revolución de Octubre. Internamente se
conjugan las experiencias de las dos primeras décadas republicanas con todo el
oportunismo y la concepción de que hace ostentación la “sacrosanta” generación
de generales y doctores, modos de los cuales no sólo viven de las glorias
pasadas, sin que se animan a la sombra de la bota extranjera en busca de más
dinero y poder. La respuesta es el surgimiento de movimientos cívicos,
patrióticos, democráticos burgueses, de ascenso del pensamiento revolucionario
en general, el marxista – leninista, antiimperialista en particular.

El 18 de marzo de 1923 se constituye la Agrupación Comunista de La Habana


en el Centro Obrero de Zulueta No. 37 se trataba de una escisión de la
Agrupación Socialista de La Habana donde sus 15 integrantes se identificaban
con los principios del marxismo - leninismo y se orientaban de acuerdo ha los
dictados de la Tercera Internacional su artífice fue Carlos Baliño, junto a José
Miguel Pérez, José Peña Vilaboa, Alejandro Barreiro y otros fogueados líderes
obreros. Ya desde su fundación hubo estudiantes que se integraron.

Del 15 al 28 de octubre de 1923 se efectúa el Primer Congreso Nacional


Revolucionario de Estudiantes, donde se ahondan problemas del país, se define
una actitud muy firme ante el plattismo, llegándose al detalle de plantear la
supresión de letreros en lenguas extrañas en la vía pública. Respecto a la
relación con los obreros se plantean los deseos de “una perfecta unión”, para
“preparar la transformación del actual sistema económico, político y
social, sobre la base de la más absoluta justicia” (49). Uno de los acuerdos
148
concretos del congreso sería la apertura de aulas en la Universidad a los
obreros, como uno de sus deberes en función de la cultura del pueblo. El sábado
3 de noviembre de 1923 se habría el curso de la Universidad Popular “José
Martí” con 15 estudiantes como profesores en la Colina.

Durante esta etapa se gestan numerosas instituciones representativas del


ascenso ideológico. Una de ellas sería la Federación Anticlerical de Cuba
constituida en la primavera de 1924. Sus reglamentos se aprobaron en los altos
de Lealtad No. 120, en ellos se plantea “protestar contra todo intento de
lesionar la soberanía, así como contribuir a la difusión de la cultura
pública eminentemente laica, por medio de conferencias, publicaciones y
cursos libres, semejantes a los de las universidades populares” (50).

Rubén Martínez Villena.

Como parte de combativas jornadas que se


realizan por estos años, Julio Antonio Mella y otros
estudiantes fueron acusados por sus
pronunciamientos antiimperialistas ante el Juzgado
Correccional que se hallaba en Belascoaín No.
124, allí el fiscal pedía 180 días de cárcel; pero
tuvo como defensores a los abogados Rubén
Martínez Villena y Juan Marinillo. El juez
finalmente optó por imponerle una multa de 200
pesos. Pero Mella tampoco la aceptó. Desde los
portales de Belascoaín, sobre un sillón de
limpiabotas convertido en tribuna, se dirigió a la
multitud que lo aclamaba. De allí se improvisó una
manifestación que recorrió las calles de Reina,
Galiano y San Rafael, hasta el Parque Central, donde fueron heridos varios
estudiantes, entre ellos. Mella, Raúl Roa definía que aquella jornada había sido
el último acto de la llamada “revolución universitaria”. Se iniciaba un período
nuevo de ascenso en el proceso de concientización y unidad popular: la
Revolución del 33,

LA REVOLUCIÓN DEL 33
Llamamos “Revolución del 33” no solamente al momento de ascenso al poder
del primer Gobierno Revolucionario en Cuba, sino a todo el decenio
comprendido desde los inicios de la lucha insurreccional antimachadista, hasta
el asesinato del líder Antonio Guiteras Holmes. Algunos le llaman también
Revolución del 30, o “de los años 30”. No importa el detalle nominal numérico,
sino el concepto, que tuvo su clímax en los proyectos y medidas democráticas,
populares, agrarias y antiimperialistas que promovió Guiteras, quien más tarde
149
se levantó en armas para reconquistar lo alcanzado y continuar haciendo
avanzar el proceso. En algún momento de su discurso político Raúl Roa
comentó que aquella revolución “se fue a volina”. Pero para la HISTORIA, toda
gesta deja su impronta. ¡No Roa, no se perdió! Fue un jalón necesario en el
proceso de unidad nacional. Como veremos en este epígrafe, las causas
esenciales de este revés fueron, como antes en el 68 y el 95, dificultades
relacionadas con la falta de unidad. Y las experiencias de la Revolución del 33,
como de toda la historia de Cuba, acciones concretas, serían experiencias
decisivas para la historia final.

Antonio Guiteras Colmes.

La fundación de la Liga Antiimperialista de Cuba, la


CNOC y el Partido Comunista de Cuba, las tres
organizaciones en el verano de 1925, serían los
pilares de buena parte de todo el proceso
revolucionario en el período, resultado cualitativo de
todas las acciones antes realizadas. Hubo en todo
ello un edificio e imprenta centrohabaneros que jugó
un importante papel, les creaba el combativo sector
tabacalero: la Sociedad de Torcedores de La
Habana.

Julio Antonio Mella.

El primer acto que se celebra en la Sociedad de


Torcedores (San Miguel No. 210, antiguo, luego 662)
fue en la noche del 1º de Mayo de 1925 donde hizo
uso de la palabra Julio Antonio Mella. Se había
constituido un Comité Pro 1º de Mayo entre obreros y
estudiantes que convocó para aquel día una gran
concentración en el Campo de Marte – luego Plaza de
la Fraternidad. De aquí partieron para el Nuevo
Frontón (Peñalver y San Carlos) donde tomaron la
tribuna tanto obreros como dirigentes estudiantiles.
Poco después el 14 de julio, la Sociedad de Torcedores se convierte en el lugar
donde se constituye la Liga Antiimperialista de Cuba (LAI), como Sección
Cubana de la Liga Antiimperialista de las Américas. En asamblea es elegido
Presidente: Rubén Martínez Villena, y Secretario: Julio Antonio Mella. Poco
después promovían distintos actos, en el Sindicato de Motoristas y Conductores,
en el Campo de Marte y en la propia Sociedad de Torcedores de La Habana,
donde entre otras causas, se inició una campaña nacional por la devolución de
la Base Naval de Guantánamo.

150
Luego de las labores preparatorias hechas en el Segundo Congreso Nacional de
Cienfuegos, estaban las condiciones creadas para constatar del 2 al 7 de agosto
de 1925, la Confederación Nacional Obrera de Cuba (CNOC). Prevaleciendo los
principios unitarios, donde no se reconocían privilegios de ninguna clase entre
obreros, sin diferencias de razas, nacionalidad, o cualquier otro que divida a los
trabajadores. Igualmente se acogió y respetó las corrientes anarcosindicalistas y
reformistas y comunistas. No obstante, todos aclaman este grito: “¡Abajo la
explotación del hombre por el hombre!” (51).

DIEZ DÍAS DESPUÉS DEL CONGRESO CONSTITUYENTE DE LA CNOC

Diez días después, entre el 16 y 17 de agosto, se efectuó el congreso –


constituyente del Partido Comunista de Cuba (PCC), como Sección de la III
Internacional. Tuvo lugar en varias casas particulares ya que sesionó en la
clandestinidad. Sus delegados representaban a las distintas agrupaciones
comunistas locales y entre todos, incluyendo a los invitados, no llegaban a veinte
personas. Asumieron la plataforma de principios de la COMINTERN sin que
elaboraran en aquellos momentos un programa o proyección del Partido de
Cuba. Se limitan a formular un plan de acciones reivindicativas y aprobar
algunos aspectos orgánicos y tácticos. El semanario Justicia (figuras No. 35 y
37) es oficialmente el órgano del Partido, fue una publicación directamente
vinculada a los intereses partidistas, obreros y revolucionarios. Tuvo como
director a Celestino Rodríguez y como emblema una hoz y un martillo sobre una
pluma y un sol. Su lema: “SEMANARIO DEDICADO A LA DEFENSA DE LA
ORGANIZACIÓN OBRERA”.

La represión contra el movimiento obrero y comunista se evidenció desde los


comienzos mismos del Gobierno de Machado. A finales de 1925 ya la
Universidad Popular “José Martí” había sido clausurada y los cursos se ofrecían
en la Sociedad de Torcedores. En una ocasión ésta fue asaltada por la Policía
Nacional, aunque los obreros logran escapar subiendo al techo y escapando por
las azoteas colindantes, son detenidos: Rubén Martínez Villena y Gustavo
Aldereguía. Se les acusa de reunión “ilícita”.

Dos militantes comunistas que distribuían propaganda revolucionaria son


detenidos y torturados y asesinados. Los cuerpos arrojados a la había habanera,
aparecen casualmente luego del testimonio de otro compañero quien los vio
presos. El brazo de uno de ellos los encuentra un pescador, dentro del
estómago de un tiburón, la viuda lo identifica por la tela de la camisa.

Durante la Toma de Poderes, Machado adopta momentáneamente posturas


“democráticas”. Permite la legalización de la CNOC, la FOH y se abre el Centro
Obrero de Dragones No. 104. Pero pronto pone al desnudo nuevamente sus
garras, José Magriñat y otros dos matones a sueldo, viajan a México para
151
asesinar a Julio Antonio Mella el 10 de enero de 1929. Posteriormente, “Pepito”
Magriñat era ajusticiado por el combatiente revolucionario centrohabanero Pedro
Vizcaino. Su casa en San Rafael y San Nicolás se convirtió en centro operativo
del movimiento insurreccional. Allí funcionó una planta de radio rebelde.

El 1º de Mayo de 1929, en saludo al “Día de los Trabajadores”, aparece el


boletín “La Voz de Obreros y Campesinos”, cuyo jefe de redacción es el chino
José Wong, fundador unos meses antes de la Alianza Socialista China, que
enfrentaría a la dictadura desde posiciones muy verticales y antiimperialistas.

Rafael Trejo.

El ascenso del movimiento obre e insurreccional


se hace palpable a partir de la huelga de 1930.
Se suceden desde entonces también las
tínganas estudiantiles. El 1º de Mayo de 1930 se
reedita otra manifestación obrero estudiantil que
comienza en la Plaza de Marte y concluye en el
Nuevo Frontón. El 30 de septiembre de 1930
fallece el estudiante de Derecho Rafael Trejo,
por un disparo que le hiciera el policía
Francisco F. Díaz, luego de un forcejeo y
golpearle con el dub de reglamento, en una
manifestación estudiantil frente al Parque Alfaro
en Infanta y 27 de Noviembre.

Machado ante el auge revolucionario concibe la


creación de “La Porra”, que fueron destacamentos para militares de
enfrentamientos a determinadas personalidades de la opinión y contra el monto
revolucionario en general. Con un grupo presidiarios y prostitutas formó un grupo
que se dedicó a atacar las manifestaciones de mujeres revolucionarias. Las
porristas, dirigidas por una tal Josefa “La Camagüeyana”, con otras y apodadas
“La Leona”, “La Sargenta” y “Mango Macho”, golpeaban y rompían las ropas de
las manifestantes a fin de neutralizarlas e inhibirlas de que continuaran
participando en demostraciones públicas.

Los crímenes de la dictadura se intensifican. El líder obrero Alfredo López es


detenido a la salida del Centro Obrero y no se supo más de él, José Wong, que
residía en Clavel No. 61, fue detenido en Manrique esquina a Reina
condenándole a ser expulsado de Cuba. Sin embargo, antes de que se
cumpliera la sentencia y en acción urdida junto a agentes anticomunistas del
Kno Ming Tang, era estrangulado el 13 de agosto de 1932 en una celda en el
Castillo del Príncipe.

152
También personas ajenas a la lucha caían victimas de la agresividad y la
represión brutal del régimen. Por ejemplo, hallándose en el Café Moka (Virtudes
esquina a Prado) el ciudadano Arturo Tagle sintió vocerías y movimiento de
personas. La curiosidad le atrajo y salió a la acera, allí un soldado empezó a
pegarle con un machete, y cuando trataba de eludirlo, un policía que venía atrás
le disparó, dejándolo sin vida. Ya en los últimos meses del machadato, la
situación era en extremos convulsa, por doquier explotaban petardos y la
Sección de Expertos de la Policía Nacional salían automóviles tratando de
rastrear a los sospechosos.

En la noche del 14 de abril de 1933, en Valle esquina a Pasaje Upman, vieron


aun individuo que se movía con cierto temor, portando un paquete en la mano.
Los policías pensaron que llevaba una bomba por lo que se detuvieron frente a
él. Uno de ellos se bajó, y sin más averiguación le ametralló. Pero lo que había
en el cartucho no eran explosivos, sino sobras de comida. Se trataba del
mendigo nombrado Manuel García González…

A la caída de Machado la Embajada de los Estados Unidos y la oligarquía


interna tratan de frustrar la Revolución con un gobierno militarizado y utilizando
la figura de Carlos Miguel de Céspedes, hijo del “Padre de la Patria”. Pero éste
es igualmente derrocado el 4 de septiembre de 1933. Toma el poder un grupo
heterogéneo de revolucionarios universitarios e intelectuales que se habían
destacado en la opinión antimachadista, quienes utilizan un golpe castrense de
clases y soldados contra sus oficiales. El “Gobierno colectivo de los 5” pronto da
paso a la Presidencia de la República al Dr. Ramón Grau San Martín.

El Dr. Antonio Guiteras Holmes, quien en determinado momento vivió


humildemente en una casa de huéspedes en Maloja, entre Oquendo y Franco,
fue llamado a ocupar las importantes secretarías de Gobernación, Guerra y
Marina. A él le confían las tareas de dar solución a los conflictos con los
oficiales, depuración de la policía y otros candentes problemas, los que resuelve
con energía y prontitud. En la práctica comienza a asumir el papel de estadista
principal, controlando otros ministerios y dependencias a través de otros
revolucionarios, compañeros suyos en la lucha antimachadista. Sus medidas y
proyectos tienen un asombroso carácter democrático popular y antiimperialista,
lo que demuestra una visión muy objetiva y marxista de la problemática del país,
y del programa que debía asumir la Revolución en una primera etapa.

Antonio Guiteras fue un estadista de nuevo tipo. Además de vivir muy


modestamente, renunciaba a los protocolos y grandes cenas para compartir con
sus amigos y compañeros de lucha. Cuenta uno de los promotores del
movimiento del 4 de septiembre, Pablo Rodríguez que:

153
Guiteras, Santana, Fernández de Velasco, y yo íbamos a la calle
Concordia, pasando Belascoaín hacía Infanta a una casa humilde donde
servían comidas criollas – potaje, arroz, bistec – a los trabajadores por un
precio módico. Allí almorzábamos con frecuencia. Se llamaba “La Casa
de Doña Concha”. A Toni no le gustaban los restoranes de lujo… (52)

Refiere “Pepe Tabares en su documentada obra biográfica sobre Guiteras, que


el líder iba con frecuencia al edificio “López Serrano” donde vivía Fernández de
Velasco, a pie, solo, o con algún amigo, cuando se le escapaba a sus escoltas.
Allí recibía, como en su casa, a compañeros para asuntos de trabajo, o
simplemente para intercambiar criterios, escuchar música clásica hablar de arte
o literatura y jugar ajedrez.

Antonio Guiteras, líder indiscutible de la Revolución del 33, llama a la unidad de


todos los revolucionarios en contra de la reacción y el imperialismo. Trata de
explicar a la extrema izquierda que el momento no es el de establecer “soviets”,
sino el de laborar unidos en un parte amplio, patriótico y antiimperialista.
Legaliza el Partido Comunista, la CNOC y todas las organizaciones
filocomunistas. Interviene propiedades de malversadores machadistas y les
ofrece edificios como el de Reina No. 402, entre Escobar y Lealtad, donde se
reestablece la Liga Antiimperialista de Cuba (LAI), la Liga Juvenil Comunista
(LJC) y la Liga de Pioneros de Cuba (LPC).

La LAI y el Partido Comunista, proyectaron traer a La Habana las cenizas de


Julio Antonio Mella procedente de Ciudad México. Se le velarían el 29 de
septiembre de 1933, en el edificio de Reina 402, y de allí el sepelio partiría por
toda la calle Reina hasta el Parque de la Fraternidad donde se enterrarían las
cenizas. Miles de hombres de pueblo, movilizados desde todos los barrios de la
ciudad se concentraron aquel día en los alrededores del edificio y por las arterias
de Reina, Carlos III y Belascoaín, para rendir homenaje al desaparecido
dirigente estudiantil.

Las cenizas tuvieron guardias de honor hechas por pioneros y distintas


personalidades patrióticas y revolucionarias como el general Eusebio
Hernández, ayudante de Maceo y Máximo Gómez. No sin dificultades hizo uso
de la palabra por última vez en público, Rubén Martínez Villena, quien por
aquellos tiempos vivía en Árbol Seco No. 26 y se hallaba gravemente enfermo.
En su oratoria Villena tomó el brazo de un militar que poseía un fusil,
significando la unidad de los obreros y campesinos, soldados y marinos.

Ya a punto de comenzar la manifestación hacía el Parque de la Fraternidad, en


grupo de francotiradores apostados en las azoteas de los edificios cercanos
comenzó a disparar contra el público, provocando la confusión en los soldados y
la multitud. Otros grupos contrarrevolucionarios atacaban simultáneamente a los
154
obreros movilizados en San Miguel y Marqués González, frente a la Sociedad de
Torcedores y otros puntos. Resultaban muertos numerosos trabajadores, así
como el pionero Francisco González Cueto, de 13 años de edad. “Paquito”, cayó
junto al cartel que portaba “abajo el Imperialismo” (53)

A partir de esta masacre, la dirección del Partido Comunista – encabezado por


Jorge Vivó – y la CNOC – liderada por Cesar Vilar Aguilar interpretan que
Antonio Guiteras les ha traicionado que urdió el plan macabro de ametrallar a la
multitud. No fueron capaces de discernir cómo ocurrieron los hechos, ni de ver
que había un ala derecha en el Gobierno representada pro Batista que iba a
producir también allanamientos a locales, obreros y detenciones.

Guiteras, en cambio, continuó ayudando decididamente a obreros y comunistas.


Cuando la huelga de la Cuban Telephone Co., promovió una reunión con la
gerencia de la empresa, exigiendo que ésta cumpliera las demandas de los
trabajadores. Lo mismo haría con la huelga de los tabaqueros donde intervino
personalmente para evitar el embarque del tabaco “Partagás” y H. Upman. El
caso de la Cía. Cubana de Electricidad fue quizás el más elocuente. Fue
intervenida ante el asombro del gerente Mr. Thompson y el sirviente coronel
Batista.

La soberbia de la oligarquía y los monopolios yanquis no podían tolerar por más


tiempo la existencia del Gobierno revolucionario. Al día siguiente de la
intervención de la Compañía de Electricidad, Batista entregaba de nuevo el
poder a la sección, a través de un nuevo Golpe de Estado. La falta de unidad
entre las fuerzas revolucionarias queda demostrada ante la absoluta indiferencia
de la CNOC, que celebraba su IV Congreso de la llamada “Unidad Sindical” y no
fue capaz ni de hacer una condena verbal.

Antonio Guiteras, junto a combativos y visioneros dirigentes sindicales como


Antonio María Penichet, convocó a una huelga general en repudio al golpe. Pero
aislados, pronto las fuerzas represivas aplastan el movimiento. Al día siguiente
del golpe, el 16 de enero de 1934, fallecía Rubén Martínez Villena. Era tendido
en la Sociedad de Torcedores de San Miguel y Marqués González partía en
multitudinario sepelio hasta el Cementerio de Colón.

La primera organización insurreccional creada por Guiteras en esta etapa fue la


TNT y de carácter celular y secreto. Ellos apoyarían resueltamente las huelgas
obreras como las desarrolladas por los trabajadores de “El Encanto y “La Casa
Grande”. En una comunicación pública sobre el boicot, a estas empresas
vinculadas al gobierno y a monopolios norteamericanos, expresaban: “Nosotros
estamos al lado de los humildes y explotados trabajadores de Cuba,
ofreciéndoles nuestro mazo y valor” (54).

155
La fundación de Joven Cuba por Antonio Guiteras en mayo de 1934 fue un paso
superior en la organización del movimiento revolucionario. Su programa
planteaba la necesidad de la toma del poder político y ejerció la dictadura
revolucionaria, como única vía para enfrentar la intrusión del imperialismo
norteamericano y luchan por la satisfacción de las necesidades del pueblo.

La lucha armada era a su vez, el camino que tomaba Joven Cuba para la toma
del poder, descartando toda participación en concia bulos con la reacción tanto
para elecciones, como para cualquier alternativa que no fuera el enfrentamiento
resuelto al enemigo. Entre las formas de lucha se incluían los atentados a
elementos ultra reaccionarios. En la localidad, de ellos fue al ex – machadista
Ramón Vasconcelos. Este señor tenía residencia en Lagunas esquina a
Belascoaín. Al lado le quedaba el Hotel San Luis (Belascoaín No. 73), y desde
ciertas habitaciones en los altos del hotel, se podía observar a Vasconcelos
cuando se sentaba a leer en el patio de su casa, por lo que se planeó tirarle un
petardo. El encargado de la acción fue Pedro Vizcaino, quien le dio un buen
susto con la bomba, pero nada más, ya que ésta no explotó.

A Cosme de la Torriente, quien se había prestado a figurar en el gobierno, se le


tiroteó cuando pasaba en su automóvil por el Malecón, pero fue bien defendido
por su escolta. Lo mismo ocurrió en la primavera de 1934 cuando en Infanta y
Maloja un comando en el que participaba Ivo Fernández, ametrallaba a José
Ignacio Rivero, director del Diario de la Marina.

Los estudiantes Ivo Fernández Sánchez y Rodolfo Rodríguez Díaz,


protagonistas ambos de un valeroso rescate entre las garras represivas, habían
logrado refugio en una casa de la calle San Lázaro. Pero fueron ubicados por el
servicio de información y detenidos en la tarde del 31 de agosto de 1934. En
horas de la noche les asesinaban. Ante este crimen Antonio Guiteras, desde
Jovellar No. 38, la casa de sus familiares, escribe este mensaje al pueblo
publicado por el periódico Alerta:

Protestamos, pero no pedimos justicia, no pedimos que se castigue a los


culpables, es inútil solicitar tales cosas a desgobiernos como el nuestro, carente
de autoridad y fieles servidores de los intereses imperialistas extranjeros; sólo
indicamos al pueblo Cubano la necesidad imperiosa de recoger el reto
incalificable a la sociedad de Cuba, lanzado al rostro de los revolucionarios y de
todas las conciencias honradas en tan reprochable crimen.

Sobre la tumba de Ivo y Rodolfo hay que poner el siguiente epitafio:


“VALEROSOS MÁRTIRES DE LA LIBERTAD, ASESINADOS POR LOS
SOSTENEDORES DEL IMPERIALISMO YANQUi”. (55)

156
Varios paros obreros se realizan en esta etapa, entre ellos la huelga médica que
se programa a regulaciones equitativas en las quintas de salud de los centros
regionales españoles y otras reivindicaciones en el sector, que fueron apoyadas
por sus profesionales, enfermos, alumnos de medicina, comadronas,
laboratoristas, empleados de salud, prácticos de farmacia y hasta agencias
funerarias. Para atender como graves se mantuvieron equipos de emergencia.
En Campanario y Condesa había una farmacia que permanecía abierta. El
responsable del Comité de Acción en Defensa de la Huelga, Dr. Elías Borges,
militante comunista, fue hasta allí personalmente para persuadir de la
importancia de que el establecimiento se sumara al pago. Cuando creía haber
cumplido su misión y se retiraba, fue victima de 3 disparos por la espalda que le
ocasionaron la muerte. Este médico combatiente fue tendido en el local de la
Federación Médica de Cuba que en ese momento radicaba en la Ave. Maceo
(Malecón).

A principios de diciembre de 1934 es cesanteado en el Hospital Municipal


(Emergencias), el estudiante de medicina y dirigente del Ala Izquierda
Estudiantil, Carlos Font, quien encabezaba demandas a favor de mejores
condiciones de trabajo para los médicos, estudiantes y empleados en general,
así como la restitución de la boleta para pobres y otros servicios de interés
popular. Protestaron contra la represalia dirigentes de otras tendencias: el
católico Justo Varona, y el auténtico Eduardo Díaz; ambos eran también
cesanteados. Ello generó un impresionante movimiento huelguista unitario en
todos los servicios sanitarios municipales que obligaron al alcalde a acceder a
las solicitudes.

Pero la situación revolucionaria parecía ya incontenible. Explotaban petardos en


el Auto Club de Cuba (Zanja y Rayo), en Zanja No. 152 y en otros muchos
puntos de la ciudad. En las escuelas públicas los maestros dejaban de asistir
haciendo reclamos, les apoyó la Liga de Pioneros de Cuba. En la localidad se
preparaban los estudiantes de San Alejandro y de la Escuela de Artes Oficios.
Sin existir las condiciones necesarias para la huelga como había alertado
Guiteras – Cesar Vilar al frente de la CNOC, declaraba el 7 de marzo: “Vamos
a todos vapor hacía la huelga general” (56).
Ya efectivamente, el 8 de marzo de 1935 se precipitaba el paro general al
sumarse fábricas y varios servicios públicos a la huelga promovida por el Ala
Izquierda Estudiantil, y otros sectores profesionales. Las tres fuerzas
revolucionarias de aquel entonces: la Joven Cuba, el Partido Comunista y el
Partido Revolucionario Cubano (Auténtico). No habían hecho las coordinaciones
necesarias, ni disponían del material bélico para convertir la huelga general en
insurrección triunfante.

157
El teniente coronel José Eleuterio Pedraza fue nombrado Gobernador Militar de
La Habana. Se estableció la ley marcial. Suprimió todos los derechos civiles, los
ciudadanos podían ser apresados en la vía pública o en el interior de edificios,
obligados a ingerir palmacristi y otras torturas hasta la muerte en menos de 72
horas ya las fuerzas del orden eran dueños absolutos de la calle, e iniciaban las
investigaciones contra los dirigentes de la huelga. Quedaban ilegales todos los
gremios y sindicatos, suspendidos los contratos colectivos. Miles de obreros
quedaban cesanteados y cientos de ellos presos.

Se iniciaba una ola de terror donde la Sección de Investigaciones de la Policía


Nacional precisaba uno por uno la conducta de los sindicatos durante la huelga.
En los casos en que se comprobaba la participación en la huelga todos sus
dirigentes eran detenidos. Mientras, se promovían confidencias como ésta:

… entre los individuos que fueron detenidos en días pasados por


miembros de la Marina de Guerra Constitucional en el local social que
ocupaba la Unión Sindical de Artes Gráficas (USAG), San Lázaro No. 83,
y que fueron presentados ante el Tribunal de Urgencia No. 2, el viernes 15
del presente mes (de marzo …) se encuentran 3 peligrosos individuos
amigos del desorden y la perturbación, que aunque figuran con nombres
supuestos, no son otros que: Andrés Solís, Secretario General del Peno
Sindical, agitador sistemático y uno de los organizadores principales de la
fracasada huelga; Manuel Vila, Tesorero General; y un señor de apellidos
García Botana, experto ponedor de bombas desde tiempos del Dr. Grau
San Martín, todos miembros de la LIGA JUVENIL COMUNISTA DE CUBA (57)
Sobre el sector tabacalero las investigaciones policíacas consignaban que
durante la huelga la mayoría de las fábricas se habían sumado por estar al
frente de sus gremios elementos comunistas. Se afirmaba que muchos de los
que habían eludido a la policía habían regresado y se imponían de nuevo con la
anuencia de los dueños por temor a nuevos boicots.

La Revolución del 33 se mantuvo viva mientras vivió Antonio Guiteras y


laboraban en los planes de obtener recursos, reagrupar las fuerzas y desde
México regresar en una expedición armada y… bueno, hacer lo que hizo
después el nuevo líder de la Revolución triunfante de 1959.

IDEOLOGÍAS, TÁCTICAS POLÍTICAS Y GRUPOS ARMADOS

La lucha de clases entre 1935 y 1952 se presenta de muy complejas maneras.


Por lo general todos cuidan de ofrecer un verbo patriótico, en defensa de los
más legítimos derechos e intereses del pueblo y de los trabajadores, cumplir la
voluntad de los mártires y promover la justicia social y política. La confusión
158
ideológica es grande. “EL FIN JUSTIFICA LOS MEDIOS” – parecer ser el axioma de
moda. Los llamados “ajusticiamientos revolucionarios” se convierten para
algunos en la única vía de sentirse “revolucionarios”. La violencia y la muerte se
entronizan en no pocos jóvenes como remedio deformado de la leyenda épica
de la Revolución del 33. Mientras tanto, los dirigentes de la organización política
llamada desempeñar un papel de vanguardia prorrogan por tiempo indefinido la
lucha insurreccional, mientras aparecen sonrientes junto al estadista criminal,
para acompañarlo en su Gobierno Constitucional y obtener “reivindicaciones”.
Todo ello en medio de una corrupción y un banalismo galopantes. ¿Podían los
que eran jóvenes a la muerte de Guiteras entender todo lo que pasó hasta el
Golpe del 52? ¡Veamos!

La pérdida de Guiteras coincide con el avance de la ideología más reaccionaria


en la arena internacional. Se consolidaba el fascismo en Italia, el nazismo en
Alemania y asechaba el falangismo en España. El VI Pleno del Partido
Comunista de Cuba (PCC) en 1935 recibe las orientaciones del VII Congreso de
la Internacional Comunista celebrado en Moscú. Allí se plantea constituir un
frente único obrero y del frente popular antifascista. El Pleno del PCC enfatiza en
la reorganización del movimiento obrero con prioridad en determinados sectores
como la juventud.

Se comienzan a crear nuevamente las condiciones para combinar el trabajo


partidista clandestino con formas legales de lucha, para ello se crean
organizaciones que no tenían formalmente fachada de comunistas. Se funda el
Club Juventud Cultural Deportivo (1935 – 1938) en Campanario No. 13, y luego
estuvo como vimos al referir el deporte – en distintos edificios de Centro
Habana. En estos locales se reunían clandestinamente los dirigentes del Partido
(PCC), la Liga Juvenil (LJC), Defensa Obrera Internacional (DOI), la Liga
Antiimperialista (LAI) y diversos sindicatos. Allí se construyó una ingeniosa
imprenta doméstica para editar propaganda revolucionaria y “por la noche
salían del Club a pegarlas por las vidrieras de San Rafael, Neptuno
Galiano y otras calles céntricas” (58).
El Servicio de Investigaciones de la Policía Nacional siempre los tuvo vigilados,
partiendo de que les resultaba sospechoso que en el club compartieron blancos
y negros sin perjuicios raciales. En más de una ocasión llegaron con carros –
jaulas para llevarse presos a la masa de jóvenes. Pero siempre les tenían que
liberar al no poder comprobarles nada. El Servicio de Inteligencia Militar también
les visitaba. Cuenta Matilde Serra que: “raro era el día que no iban a la casa,
inclusive participaban en los bailes, en las conferencias en las charlas” (59).
El Club Juventud Cultural Deportivo no sólo iban jóvenes comunistas de la LJC,
o miembros de la LAI, de DOI, o del Ala Izquierda Estudiantil (AIE). También se
asociaron jóvenes masones (AJEF), miembros de la Organización Celular
159
Radical Revolucionaria (OCRR), de la Alianza Popular Revolucionaria
Americana (APRA) y auténticos (PRC-A).

Partiendo de las experiencias del Club, el 6 de octubre de 1936, el Partido


Comunista legalizaba otra organización: la Hermandad de Jóvenes Cubanos
(HJC) ellos, junto a las actividades culturales, deportivas, recreativas, ya van a
exponer un programa inspirado en el ideario martiano, con reivindicaciones
mínimas para la juventud trabajadora, campesina y los estudiantes.

El Partido Comunista legalizaba en marzo de 1937 el Partido Unión


Revolucionaria (PUR), que promovía como su principal figura al profesor
universitario Dr. Juan Marinello. 4 días después, el 1° de abril, se legalizaba otra
organización juvenil partidista, pero mucho más politizada: La Nueva Agrupación
Jóvenes del Pueblo. Se fundó en Neptuno y Manrique, fijando luego su local en
Carmen No.13.

Su misión básica fue garantizar la participación de los jóvenes en la lucha por la


Asamblea Constituyente.

El falangista Francisco Franco se levantaba en armas ante la República


española en el verano de 1936. Las organizaciones comunistas y filocomunistas
promueven la ayuda solidaria a los revolucionarios peninsulares. Se crea la
Asociación de Ayuda a la República Española y la Asociación de Auxilio al Niño
Español. Se les envía alimentos, avituallamientos en general, incluyendo
tabacos procedentes de las fábricas centrohabaneras. Significativo será el
aporte de las Brigadas Internacionales para el enfrentamiento militar, los
contrarrevolucionarios recibían el apoyo de los ejércitos reaccionarios de Italia
y Alemania, mientras el pueblo español acogía a los hermanos progresistas de
todo el mundo, incluyendo a Cubanos. El Partido Comunistas encargaba de
organizar aquí las brigadas, aportando combatientes como Pablo de la Torriente
Brau - quien vivió en San Lázaro y Manrique- y el matrimonio de Pedro Vizcaíno
y María Luisa Laffita en san Rafael y San Nicolás. Esta última integró el grupo de
enfermeras del Socorro Rojo Internacional. En el hotel Lincoln, Galiano y
Virtudes, se concentraron: Policarpo Candón Guillén, Manuel del Peso Ceballos,
Rolando Masferrer Rojas, Danilo Díaz Machado, Pedro Fajardo Buhera y otros
muchos internacionalistas, hasta un total de casi mil combatientes.

Fulgencio Batista aunque era formalmente sólo jefe del Ejército, era en la
práctica quien ostentaba el poder en Cuba. Aunque simpatizante de la ideología
reaccionaria que pujaba por dominar en Europa, ante sus aspiraciones
presidenciales y las orientaciones de la Embajada norteamericana, se ve
obligado a dar un giro democrático.

160
Desde finales de 1937 tolera la solidaridad con el pueblo español, se legaliza el
Partido Comunista y el periódico Hoy en 1938, también se aprueban las
inscripciones legales de los sindicatos en la Secretaría de Trabajo.

El líder obrero desde esta etapa será un centrohabanero: Lázaro Peña González
(60). Se había distinguido como dirigente sindical tabacalero desde las huelgas
antimachadistas y en 1934 integró el comité ejecutivo de la CNOC, cuando fue el
Secretario General de los Tabaqueros de La Habana. Durante el congreso
obrero celebrado del 23 al 28 de enero de 1939 se constituye la Confederación
de Trabajadores de Cuba (CTC) y es elegido secretario General.

Durante el año 1939 se fusionan el Partido Comunista (PCC) y el Partido Unión


Revolucionaria (PUR), formando el Partido Unión Revolucionaria Comunista
(PURC) con vistas a participar de las elecciones y en la Asamblea
Constituyente.

En principio habían acordado integrar el bloque que promovía al Dr. Ramón


Grau San Martín al frente del PRC (Auténtico) pero al ser rechazado por éste,
deciden dar un giro de 180 grados y apoyan la candidatura presidencial del
señor Rubén Fulgencio Batista y Zaldívar (1901-1973), por lo cual integran la
llamada Coalición Socialista Democrática. Este rejuego se correspondía con la
“política de alianzas” orientada por la Internacional Comunista desde el Kremlin y
tenía como fin aprovechar las oportunidades de la democracia burguesa y
compartir el poder a través de representantes a la Cámara, concejales y hasta
se elegía a un alcalde comunista en Manzanillo.

“ La victoria [sic] alcanzada por el PURC en las elecciones generales de


1940, así como anteriormente en la Asamblea Constituyente- se ha escrito-
daba a la clase obrera, a los campesinos y a la intelectualidad progresista,
una nueva e importante base en la lucha por el programa de democracia,
mejoramiento popular y defensa de la economía nacional, así como en el
combate, junto a los pueblos de todo el mundo, contra el fascismo y la
guerra imperialista, en defensa de la Unión Soviética y de la
independencia nacional de los países oprimidos” (61).
Sin embargo cuando se importó de Moscú la llamada “política de alianzas”, la
dirección de la Unión Revolucionaria Comunista olvidó que en el caso concreto
de Cuba, abandonar la línea insurreccional armada y asumir la electoralista, la
opción menos digna era pasarse a l bloque encabezado por el señor Batista.

No pocos hombres de pueblo, simpatizantes e inclusive militantes, interpretaron


que con esa política se hacían concesiones de principios y que era inadmisible
apoyar y alternar en el Gobierno con un traidor, con el asesino de Guiteras y
161
Aponte, con un probado servidor del imperialismo norteamericano, que ya había
torturado y cubierto de luto a familias humildes de Cuba.

Las secuelas de estos cambios de política tuvieron mucho impacto, sobretodo


en la juventud donde las decepciones y la confusión ideológica fue apabullante.
En la peregrinación estudiantil del 27de noviembre de 1939 por San Lázaro
hacia la Punta, se les incorporaba en Belascoaín el bloque de la Asociación de
Estudiantes de la escuela de Artes y Oficios, que encabezaba el comunista
Danilo Díaz machado. Cuando iban por san Lázaro y Oquendo el bloque de
Danilo fue agredido por bonchistas universitarios (62), en la riña que se generó,
hubo uso de armas de fuego, perdiendo la vida un obrero y resultando heridos
varios estudiantes, entre ellos el bonchista Carlos Ruiz. Aquel 27 de noviembre
se dio apertura al Congreso Nacional Estudiantil con vistas a la Asamblea
Constituyente, mientras sesionaba se conoció de la muerte de Carlos Ruiz.
Hubo fuertes pronunciamientos contra los comunistas y se pidió castigo para
Danilo Díaz Machado. Los delegados comunistas que participaban en el
cónclave tuvieron que ser protegidos por la Comisión Central de Orden del
Partido al frente de la cual estaba el imponente obrero metalúrgico: Manuel
Porto Pena, “ El Gallego”.

Los combatientes internacionalistas Cubanos que enfrentaron el fascismo en


España, cuando regresan se encuentran que el movimiento revolucionario
insurreccional se hallaba muy debilitado, muchos de los dirigentes oposicionistas
han abandonado la lucha armada y se preparan para las elecciones.

La Joven Cuba que había llegado a aglutinar casi 15 mil miembros,


desaparecido el líder se fragmenta. Diversos cabecillas comienzan a fundar
organizaciones que se atribuyen tener una línea verdaderamente revolucionaria,
continuar la lucha insurreccional y hacer justicia frente a los criminales que
alardean su impunidad en las calles de La Habana. Una de esas organizaciones
es Acción Revolucionaria Guiteras (ARG), creada en 1939 por Pedro Fajardo
Buhera “ Manzanillo”, junto a inquietos jóvenes como los estudiantes de Artes y
Oficios, Francisco Vilanueva “Paco”, Juan Valdés Morejón y Orlando León
Lemus “El Colorado.

Ante el X Aniversario de la caída de Rafael Trejo, la FEU constituye el Comité


“30 de septiembre”, muy influído por la nueva organización del valeroso
combatiente antifascista “Manzanillo”, proyectan efectuar toda una jornada
conmemorativa que incluye una velada en la noche del 30 en el Teatro Principal
de la Comedia (Ánimas No.2). Cientos de estudiantes participarían ansiosos por
interactuar en el proceso depurador antibonchista y por conocer la proyección
política de sus líderes. El problema era quienes harían uso de la
palabra....Cuando el estudiante Rolando Masferrer, que había sido Comisario
Político de Batallón en la Guerra Civil Española, se impone frente al podio, para
hacer uso de la palabra en nombre de los comunistas [sic], es agredido a tiros.
162
Interviene ”El Gallego” Porto junto a otros hombres del destacamento armado
del Partido como Manuel del Peso y José Sanjurjo. Se generaliza el tiroteo,
Orlando León Lemus, “El Colorado” recibe 4 impactos de bala; otros 7
estudiantes reciben igualmente heridas graves.

El balance de los sucesos del Teatro Principal de la comedia la noche del 30 de


septiembre de 1940 es trágico, además de los heridos, pierden la vida los
estudiantes Francisco Flores Iturralde, Pedro Vior Cisneros y el compañero
Manuel Porto pena. La sangre derramada aquí por militantes comunistas y
miembros de la ARG, va a convertirse en un abismo insalvable entre ambas
organizaciones, coincidiendo esencialmente en los mismos postulados
estratégicos (63). Sólo el caos ideológico que se vive, exacerbados por los
enemigos de clase, explica la falta de entendimiento y las posturas que asumen
muchos de los arreglistas, como veremos mas adelante.

Su fundador jefe Pedro Fajardo Buhera- asesinado el 31 de diciembre de 1941-


combatiente valeroso y a toda prueba, había sido forjado en el espíritu de
intransigencia revolucionaria que le inculcó su jefe y compañero de lucha
Antonio Guiteras. Pero no tenía la estatura política capaz de prescindir de las
deficiencias tácticas y promover la unidad de las fuerzas revolucionarias.

Los años de temor represivo batistiano entre 1934 y 1936, habían aportado
nuevos criminales políticos que llegaban a finales de la década pavoneando sus
grados y superiores cargos. A esta situación se añadió las amnistías concedidas
a todos los machadistas comprometidos con los crímenes del régimen. De
manera que muchos de los que habían huído al exterior regresan y se les
rehabilita en los cuerpos represivos y en el caso de los políticos algunos hasta
se abogan el derecho de aspirar a cargos públicos. Estas inmoralidades políticas
animan a las organizaciones revolucionarias insurreccionales a priorizar el
ajusticiamiento de politiqueros y esbirros.

Una de las organizaciones armadas muy activa por aquellos años, creada en el
verano de 1938 fue la Alianza Nacional Revolucionaria (ANR). Su lema era: “A
la toma del poder por la insurrección para la liberación nacional”. Entre
sus dirigentes se hallaban: Emilio Tro Rivero, Lázaro Cruz, Eduardo Taboada,
Gustavo Pino Guerra, Orlando Ortiz, Guillermo Ara y Mariano del Val. Los
aliancistas proyectarían el atentado al Dr. Orestes Ferrara Merino, el machadista
que logro atesorar una celebre colección de piezas museables pertenecientes a
Napoleón Bonaparte, con las que decoraba su residencia (64). En el Momento
en que se realizo el atentado, el 1ro de Marzo de 1940 era delegado a la
Asamblea Constituyente. La acción se realizo en Infanta y San José. El veterano
político salvaba la vida gracias a su chofer y escolta Rufino Alvarez, quien
falleció fulminado por los numerosos impactos de balas que recibió. La sexta

163
estación actuaba en las investigaciones acusando a Guillermo Ara y a
determinados estudiantes vinculados a la ANR.

El exoficial de la policía nacional Julio Fernández Trevejo y Tabernilla era


ajusticiado el día de Santa Barbara del año 1940. El atentado le fue preparado a
la salida de su domicilio, en Ánimas # 974. Actuaba también la sexta estación de
la policía Nacional y aunque no hubo detenidos, la prensa insinúo que la
ejecución había estado a cargo de la Acción Revolucionaria Guiteras (ARG).
Durante el mandato de Fulgencio Batista como Presidente Constitucional (1940-
1944), el PURC fue en enero de 1944 paso a denominarse Partido Socialista
Popular (PSP), va a continuar en el plano teórico adscripto a la línea
preconizada por la Internacional Comunista, con una política de frente único
antifascista. Se obtienen durante estos años numerosas reinvindicaciones
sociales y económicas. Se logra una Constitución de la República muy avanzada
y se aprovecha la apertura democrática burguesa para desarrollar una política
de masas, principalmente por métodos legales y pacíficos. Promueven además
la propaganda partidista a través del periódico HOY (Desagüe 108 y 110, la
revista Mella (Neptuno # 638), también Mediodía, Carta Semanal, Ultima Hora,
Vanguardia Cubano, Boletín de la Prensa Continental, Prensa Obrera y la
pujante Emisora Radial Mil Diez (Reina # 314).

La sede del Comité Nacional del Partido Socialista Popular (PSP), se estableció
en Carlos III # 609 esquina a Marqués González. Alternaron las secretarias
general y la presidencia, Blas Roca Calderío y Juan Marinello Vidaurreta. Aquí
radicaron también otras importantes comisiones como fue el Comité Nacional
contra la discriminación racial que presidiera Salvador García Agüero. Los
Comités Socialistas en los barrios de la localidad se establecieron en:

Barrio Dirección
San Lázaro Vapor # 120 e/ Espada y Hospital
Cayo Hueso San José # 975 e/ Espada y Hospital
Pueblo Nuevo Árbol Seco # 104 e/ Maloja y Sitios
Chávez Estrella # 223 e/ Manrique y San Nicolás
Peñalver Estrella # 223 e/ Manrique y San Nicolás
San Nicolás Revillagigedo # 70 Bajos
Marte Estrella # 223 e/ Manrique y San Nicolás
Guadalupe San José # 564 e/ Escobar y Lealtad
Tacón Barcelona # 64 e/ Aguila y Amistad
Dragones San José # 564 e/ Escobar y Lealtad
San Leopoldo Ánimas # 655 e/ Escobar y Lealtad
Monserrate Ánimas # 655 e/ Escobar y Lealtad
Colon Águila # 205 e/ Animas y Virtudes
La Punta Águila # 205 e/ Animas y Virtudes

164
El Ejecutivo Nacional de la Juventud Socialista (Neptuno # 638) también radicó
en la localidad centrohabanera. Fue presidido por Flavio Bravo quien promovió
otras entidades juveniles como el Parlamento de la Juventud (Malecón # 677
altos) a cargo de José Agustín Riera y que estuvo adscripto a la Federación
Mundial de Juventudes sede central en Budapest Hungría. Cesar Temes
desarrolló el frente Deportes Populares (Desagüe # 100) fomentando la
participación de atletas y formación de equipos en barrios y fábricas, creó la
publicación América Deportiva. Igualmente en este período la entusiasta joven
Matilde Serra preside el Comité de Defensa de la Infancia, constituyendo Clubs
Infantiles en Kindergartens (preescolares) y escuelas públicas para la
organización de fiestas, juegos y actividades patrióticas.

La Federación Democrática de Mujeres Cubanas (Industria Nº 452, altos)


estuvo presidida por Edith García Buchaga. Llegó a nuclear a decenas de miles
de obreras, campesinas, profesionales y amas de casa, participando muy
activamente en las luchas sociales y políticas que se requirieron en cada
momento. Igualmente a favor de la mujer y de su orientación revolucionaria se
ocupó la Organización Independiente de muchachas (Carlos III Nº 609) y el
Comité de Novias, madres y hermanas (Industria Nº 452, altos), el que laboró
en tareas concretas como es la campaña de no envío de Cubanos a Corea y
otras, ejecutando mítines, conferencias y actividades en general a favor de la
mujer.

El Frente Nacional de Defensa de la Economía Nacional (San Miguel Nº 1015,


altos), auspiciado por la Conferencia Económica Mundial, con sede en Moscú,
fue dirigido por Jacinto Torras, quien mucho ayudó a Jesús Menéndez y a la
CTC en la batalla por la obtención del “Diferencial azucarero”. Esta entidad
profundizó en estudios e investigaciones económicas, demostrándose el papel
explotador de los monopolios y empresas norteamericanas en la economía
Cubana, promoviendo la concientización popular en esta temática, a través de
conferencias y publicaciones. Otra de las variantes del frente económico, daría
lugar a la creación de una institución muy vinculada también a las luchas en el
sector femenino.

El Comité contra el alto costo de la vida (Industria Nº 452, altos), presidido por
Blanca Morales y con una alta incidencia en las amas de casa.

El Comité Pro-Paz (Malecón Nº 677, altos), se constituyó a partir de la “guerra


fría”, en contra de la carrera armamentista del imperialismo. Fue presidida por el
Dr. Elías Estralgo, quien promovió una campaña gigantesca donde se exigió,
entre otras consignas a favor de la paz, la prohibición de la bomba atómica. Las
movilizaciones logradas en todo el país permitieron la recogida de centenares de
miles de firmas clamando por la paz, entre ellas la del joven Fidel Castro Ruz.

165
El Partido Socialista Popular (PSP) organizó también la orientación y
participación revolucionaria de las comunidades de ascendencia extranjera
asentadas en nuestro país, como el caso de los chinos. Enrique León (Sitios Nº
36) encabezó la Alianza de Apoyo a la Democracia China, que radicó en los
altos de Zanja Nº 32. Funcionaron en estrecha coordinación con la Federación
de Apoyo a las repúblicas Democráticas de Asia, editándose los periódicos:
Kuong Wah Po y Hoi Men Kong Po.

De la comunidad árabe surgían varias instituciones, distinguiéndose por su labor


político revolucionaria el Centro Popular Hebreo, presidido por Salomón Meyer.
Dispusieron de la publicación La palabra Hebrea y los múltiples centros
regionales españoles, constituyeron una importante entidad de apoyo al pueblo
español.

La Casa de la Cultura. Numerosa ayuda de los obreros Cubanos e intercambios


culturales y sociales en general se desarrollaron a través de esta institución,
Unión de Mujeres Españolas, y otros organismos. Sus publicaciones fueron:
Nosotros y España Republicana.

Las organizaciones insurrecciónales, por su parte, prácticamente se limitan a


realizar atentados, donde se imponen determinados caudillos a fuerza de pistola
y violencia. El propio Orlando León Lemus “El Colorado”, cuando es expulsado
del ARG se mantiene como antibatistiano “independiente” con alguno de sus
amigos. El 26 de Agosto de 1944, cuando iba por Belascoain en un ómnibus,
junto a su compañero de lucha Rogelio Hernández Vega “Cucú”-Quien se había
iniciado desde los 15 años en la OCRR- Les identifica la pareja de policías,
Navarro y José A. Fernández, de la séptima estación, cuando intentaban apresar
a los insurgentes, fueron puestos fuera de combate espectacularmente en la
parada de Belascoain y Estrella, frente al Ministerio de Salubridad. Cinco días
después, otro vigilante de la séptima estación, Ramón Marrero y el policía de
salubridad Guillermo Barros, eran ultimados en Peñalver y Márquez González. Y
a poco menos de un mes, el 29 de Septiembre, el vigilante Antonio Ávila era
recogido cadáver en Árbol Seco y
Estrella. Son los tiempos en que se
colocan pasquines con la foto de
“El Colorado”, ofreciéndose 500
pesos por su captura,(una fortuna
en la época). Y se cuenta que él
personalmente, se dedicó a
arrancarlos y romperlos en plena
vía pública.

Propaganda electoral.

166
La “Jornada Gloriosa” del 1º de Junio de 1944, que dio el triunfo al Dr. Ramón
Grau San Martín, hizo pensar a muchos que había llegado la Revolución. Entre
otras muchas promesas se haría “justicia” .Pero la señora de los ojos vendados
no parecía estar en los planes reales de la Alianza Auténtico-Republicana y los
tribunales competentes para hacer justicia revolucionaria no se constituían. Eso
sí, el profesor Grau desalojó a todos los ex machadistas y batistianos de los
puestos que ocupaban, mientras insinuó a sus “muchachos” de acción que les
dejaría hacer justicia “por la izquierda”, o como se decía entonces “justicia por
la propia mano”…

La orgía de sangre que se desató, con vendetta y rivalidades dirimidas a tiros es


sencillamente inconmensurable. Las cronologías que se hicieron sobre
atentados y hechos de sangre son incompletas y no abarcan toda la dimensión
que tuvo el fenómeno. Todo comenzó por llamados “ajusticiamientos
revolucionarios”. Las grandes figuras y esbirros, como en la caída del
machadato escapaban. Así, ante la impotencia de condenar a Mariano FAMET,
sus culpas las pagaba el chofer, acribillado a balazos. Uno de los pocos jefes a
quien se pudo ubicar, fue al ex capitán negro Andrés Falcón Barreto. Le
internaban a las 11 de la noche en el Hospital de Emergencias con lesiones
graves producidas por armas de fuego. Hasta allí se constituían, el comandante
Antonio Borges Armenteros, Inspector General, el teniente coronel José M.
Corbo Lemus y otros altos jefes de la Policía Nacional, interesándose
formalmente por su salud y el curso de las investigaciones. Sin embargo, las
pesquisas sólo apuntaron hacia dos sospechosos que nunca fueron
identificados. Tampoco hubo detenciones, archivándose el caso.

El ex cabo Francisco Rey Merodio, fue uno de los esbirros sancionados, gracias
a las libertades a discreción que concedió el Dr. Grau a los grupos de acción.
Este sujeto había pertenecido a la policía judicial y fue el causante principal del
fracaso del levantamiento del General Peraza en el machadato. Durante la
represión batistiana, fue agente de la sección de Investigación, laborando
estrechamente junto al capitán Bernardo García y el coronel José Eleuterio
Pedraza, comprometiéndose también con los crímenes de éstos. Era ejecutado
en la noche del lunes 2 de Septiembre de 1946, mientras bebía en el café
“Celada” (Belascoain y Carlos III). Un fuego cruzado de la cabeza al vientre,
hecho por un comando de cuatro hombres, le fulminó al instante. El atestado de
rigor lo dio a conocer la sexta estación. No hubo detenidos, ni mayores
investigaciones….

El ex sargento y ex segundo jefe del Servicio secreto de Palacio de batista,


francisco Yagues y Pérez de Girón, se decía que estaba comprometido al menos
con dos crímenes políticos. En horas de la tarde del 14 de Mayo de 1947, al salir
de una barbería, le seguían dos hombres, y cuando llegaron a Consulado y
Ánimas, le dispararon con pistolas calibre 45 y 38. Le impactaron 7 veces,
167
suficiente para dejarlo sin vida al momento. En la céntrica esquina, los pistoleros
tiraban sobre el cuerpo ensangrentado un cartel que decía: “EN VENGANZA
POR EL ASESINATO DE EZEQUIEL PÉREZ PÉREZ” (65)

Otro agente del Servicio Secreto de palacio, Julio Rodríguez Rodríguez, caía el
13 de Agosto de aquel año en Carlos III e Infanta. Otro 13 de Agosto, explotaba
un petardo a las 11 y 20 p.m. en el domicilio de un primer teniente del ejército,
en Estrella Nº 64. Se suceden infinidad de hechos de sangre con el uso de
explosivos o armas de fuego. En territorio Centro Habanero se dan casos en :
Galiano y San José, en Reina y San Nicolás, en San José y Belascoain, en
Malecón y Crespo, en la Plaza del Vapor, en el portal del cine “Cuatro Caminos”
(Belascoain 1107), en el bar “Maniatan” (Desagüe y Amistad), en las oficinas del
Dr. Delio Núñez Mesa ( Malecón 107), en la Unión de Empresarios (Consulado y
Trocadero), en el consulado dominicano (Malecón 9), en el café “El Polo” (Reina
y Ángeles), en el bar “Nervion” (Blanco entre Animas y Virtudes), en el hotel
“Gran América” (Industria 502) y en la posada “Alfonso XII” (Belascoain 452)…

Toda esta violencia es observada con pasividad por las autoridades, incluso
hasta es alentada, al nombrarse policías y oficiales de policía, muchos hombres
de acción. De manera que quienes deben imponer el orden, son los primeros en
subvertirlo, legitimándose la impunidad de las pistolas.

Ante tal caos surge en 1946 una organización armada que se plantea crear un
tribunal ejecutor para el ajusticiamiento de esbirros: la UNION
INSURRECCIONAL REVOLUCIONARIA (UIR). Su lema es: “!LA JUSTICIA
TARDA; PERO LLEGA!”. Además se plantea un programa democrático popular,
que contempla varios aspectos de carácter social:

• Economía socializada
• Promover una cultura integral para el pueblo
• Justicia social
• Honestidad administrativa

El líder del UIR va a ser Emilio Tro Rivero, combatiente desde 1933, junto a los
trozquitas del Sindicato del Comercio “para combatir el régimen capitalista”
(66). El Secretario General fue Jesús Dieguez Lamazares, formado en los
tiempos del Ateneo Socialista y en la lucha antimachadista y antibastitiana,
había fundado antes “Acción Pino Guerra”. Otros miembros de la directiva
fueron: Guillermo García Riestra, Francisco Chao Hermida, Enrique Zayas-
Bazán, Gloria Ortiz, Armando Correa Morales y José de Jesús Jinjaume
Montaner.

La UIR se proponía unir a todos los combatientes en los medios insurreccionales


con trayectoria revolucionaria en las luchas contra las dictaduras de Machado y
168
Batista así como en defensa de la República española. A tales efectos
establecieron relaciones armónicas con: la Joven Cuba (JC), en aquellos
momentos controlada ya por Lauro Blanco, la Acción Revolucionaria Guiteras
(ARG), en manos de Jesús gonzález Cartas “El Extraño”, la Alianza Nacional
Revolucionaria (ANR) de Lázaro Cruz y Mariano Val, Acción Libertaria de Cuba
(ALC), dirigida por Elio Nardo y las asociaciones de combatientes de la Guerra
Civil Española y la Segunda Guerra Mundial.

Sin embargo, hubo un importante sector de hombres de acción e intelectuales,


procedentes del Ejército Caribe, Pro Ley y Justicia, Legión Revolucionaria de
Cuba, disidentes de las organizaciones comunistas y filocomunistas, y disidentes
de la ARG, que consideran a la dirección de la UIR sin la adecuada preparación
política e ideológica, ni tener las condiciones para encabezar la Revolución. Ya
a la altura de la primavera de 1947, transcurridos dos años y medio de la salida
de Batista, los sueños revolucionarios no estaban ni bien definidos en un
programa.

El Movimiento Socialista Revolucionaria (MSR) se constituye como la


vanguardia del proceso que debía impulsar la verdadera Revolución. Se dio a
conocer el domingo 6 de abril de 1947 en el “Cinecito” (San Rafael y
Consulado). Sus principales figuras eran: Manuel de Castro Tarragona,
presidente de la FEU; el periodista Rolando Masferrer Rojas, director de Tiempo
de Cuba y el comandante de policía Mario Salabarría Aguiar. Los tres habían
participado en la lucha contra el bonche universitario y tenían una meritoria
trayectoria revolucionaria. Se hallaban en el equipo de dirección: el exiliado
dominicano Juan Bosch, el abogado Eduardo Corona Zayas, Eufemio
Fernández Ortega, Feliciano Pérez, Antonio Acosta Borges, Roberto Pérez
Dulzaide, Roberto Meoqui Lezama, y Aida Pelayo y Pelayo.

La plataforma política del MSR estaba realmente mejor articulada que la


esbozada por la UIR. Había un análisis de las condiciones económicas y
sociales del país de las necesidades tecnológicas para el desarrollo, y de la
toma del poder político por las masas trabajadoras.Se traslucían las bases
socialistas del ideario guiterista que incluia hasta una proyección política
internacional antiimperialista (67). En cuanto a las fuerzas políticas internas,
señalaban la incapacidad de la dirección de los Pspeistas en asumir su roll al
frente de la clase obrera y la ausencia hasta de un programa minimo en
beneficio popular por parte de los autenticos.

Desconociendo los propósitos de la UIR, el MSR se erigia en la organización


idónea llamada a unificar a todas las fuerzas revolucionarias. “Por primera vez
en Cuba –expresaba Manolo Castro- se esta haciendo entre los
revolucionarios lo que desde hace tiempo debio hacerse: Unir a los

169
diferentes grupos de accion alrededor de un programa definido y concreto
de liberación nacional” (68).

El MSR lograba ciertamente unir a determinados hombres de accion que se


hallaban dispersos, como: José Fayat Agüeres “El Turquito”, José Ramon
Castañeda Rodriguez “Motorcito”, Osvaldo Sabatés Alburquerquez, Luis Matos
Gilbes, Eustaquio Soto Carmenate, Ivan Valdes Morejon, Rogelio Hernández
Vega “Cucu”, Alfredo Agerreberre Espinosa, Manuel Salgado Rebollo “El
Guajiro” y Orlando Leon Lemus “El Colorado”. Sin embargo a muchos de estos
hombres parecia moverles más que el programa revolucionario su amistad con
Masferer y Salabarria, o el resentimiento personal contra determinados
miembros de la UIR.

El 6 de septiembre de 1947, Emilio Tro y Manolito Villa Yedra eran objeto de un


atentado por individuos afines al MSR. En respuesta a la agresión, una semana
después Raúl Avila Avila, jefe de la policía del ministerio de salubridad,
participante en el hecho anterior era ejecutado por la UIR. Estos hechos ponían
al rojo vivo las diferencias entre el MCR y la UIR, y en especial se planteaban un
enfrentamiento directo Emilio Tro (UIR) y Mario Salabarria (MCR).

El comandante Mario Salabarria al frente del Servicio de Investigaciones


Especiales y Extraordinarios (SIEE), logra la autorización judicial para detener al
caudillo de la UIR quien aunque era empleado civil de Gobernación, tenía rango
de Comandante por ser el Director de la Academia de la Policía Nacional.

Salabarria, conocedor de que Tro no se dejaría de apresar vivo, espera el


momento adecuado donde estuviera solo o con pocos hombres y lo mas aislado
posible para poder cercarlo con hombres y medios, junto al apoyo de otros
oficiales de la Policía Nacional y la Secreta, a fin de ejecutarlo sin
contemplaciones.

El reparto Orfila en Marianao, domicilio del comándate Antonio Morín Dopico,


amigo de Tro, fue el lugar escogido para prepararle la celada, a pesar de que
alli se encontraban dos mujeres, una de ellas, la esposa de Morín Dopico, en
avanzado estado de gestación y una niña de brazos. Los hechos ocurridos el 15
de septiembre de 1947. Se desató una insólita aborrecible matanza que tuvo por
balance seis fallecidos, incluyendo a la señora Aurora Soler de Morín.

A partir de los sucesos de Orfila pocas son la gente de pueblo que va a


mantener la confianza en las organizaciones armadas, aun llamadas
“revolucionarias”. En tanto, entre los combatientes, se van a polarizar
definitivamente dos polos: los posibles miembros de la UIR y sus simpatizantes,
y los miembros del MSR y sus amigos. Había comenzado la “guerra de grupos”
(69)

170
Aquella misma noche del 15 de septiembre, Raúl Adam Daumy, agente del SIEE
a las ordenes de Mario Salabanía, era baleado al bajarse de un ómnibus en la
parada de San Lázaro y Marquez González y frente al parque maceo, muy cerca
de allí, su mama desesperada al enterarse de la muerte de su hijo, se lanzó
desde un balcón a la calle.

Mientras la violencia fratricida, la ejebocracia y el culto a las pistolas se imponian


en las calles de la ciudad, el Gobierno se hallaba inhibido en otro problema que
parecía preocuparles mucho mas. El “macartismo” había comenzado a recorrer
el mundo y en Cuba el movimiento obrero y comunista continuaba
desarrollándose. La embajada norteamericana alertaba a sus aliados, la
oligarquía comercial terrateniente plattista en el poder, que los comunistas y
organizaciones filocomunistas comenzaban a írseles peligrosamente de las
manos.

Blas Roca Calderío, Secretario General del Partido


Socialista Popular.

El anticomunismo resurgia en postguerra con


más histerismo que nunca. Sus voceros, Mr.
Truman y el senador Yoseph Mc Carthy.
Había que maniobrar con energía y sabiduría
para que el movimiento sindical pudiera ser
domesticado. La solución podia ser ayudar a
los candidatos tramitables como el catalán
Eusebio Mujal Barniol, quien se hallaba al
frente de la comisión Naunl Otnes (CON) del
Partido Revolucionario Cubano (Auténtico), o
al dirigente eléctrico Angel Cfiño, que se
proclamaba ser “independiente”.

Uno de los primeros síntomas de agresividad


macartista se presenta en la noche del 3 de
abril, a las puertas del condave obrero de
1947. Una máquina tirotea a los compañeros
que se hallaban en los portales de la sede del Comité Nacional del PSP (Carlos
III # 609), poco después, el 6 de abril, un comando armado encabezado por
Emilio Surí Castillo asalta el Centro Obrero de Industria y Dragones, donde
fundaba la Comisión de Credenciales preparatoria del ingreso, los obreros que
laboraban en la documentación les dan una respuesta armada contundente,
rechazando el ataque y causándoles una baja.

Las provocaciones de elementos arribistas, amarillos y pistoleros, se conjugan


con las maniobras de los medios oficiales. E 8 de abril era registrada la
Sociedad de Torcedores de La Habana (San Miguel # 622), donde se reunía el
171
Comité Ejecutivo de la CTC. En aquella ocasión era detenido arbitrariamente el
líder portuario Aracelio Iglesias.

El V Congreso Nacional Obrero de la CTC transune entre el 4 y el 11 de mayo


1947. Allí, Eusebio Mujal es derrotado aplastantemente, pese a los
apuntalamiento oficialistas, Tampoco su émulo, el dirigente eléctrico Angel
Cofiño García, corre mejor suerte. Es ratificado legítimamente Lázaro Peña
como Secretario General de la Confederación de Trabajadores de Cuba (CTC).
Al día siguiente, Lázaro Peña y el Comité Ejecutivo se trasladan para el Palacio
de los Trabajadores (Peñalver y San Carlos) que terminaba de construirse en los
terrenos del demolido Nuevo Frontón.

El Ministerio de Trabajo, advertido a que


Lázaro Peña era el líder obrero
indiscutible de Cuba, maniobra a capa y
espada par expulsar a los comunistas,
No reconoce el evento, ordenando a los
mujalistas y cofinistas a fomentar la
división y replicarles con otro V
Congreso apócrifo pero que el gobierno
refrendaría; Tuvo lugar el del 6 al 8 de
julio de 1947 en el Teatro Radio Cine
(Galiano y Neptuno).

Consumada la reunión fantoche, con la


exclusión de los dirigentes unitarios, el
29 de julio, el teniente coronel Fabio
Ruiz Rojas, el jefe de la División Central
de la Policía Nacional, se persona en
Peñalver y Desagüe, junto a una nutrida
jauría para conminar a Lázaro Peña,
por estar fuera de la ley, a que debían
Lázaro Peña, “Capitán de la clase obrera”,
desalojar el Palacio de los Trabajadores. Secretario General de la Confederación de
Trabajadores de Cuba.

Ante aquel río revuelto entronizado en el movimiento sindical, Jesús González


Cartas “El Extraño”, al frente de la ARG ve la oportunidad que esperaba para
insertar a sus hombres en las direcciones sindicales. Ya cuenta con un pequeño
líder, el tranviario marco Antonio Hirigoyen, quien aspira a tener el cetro de la
CTC.

El 27 de Octubre de 1947 es ametrallado el guaguero Rafael Antón Lezcano,


quien participaba en una manifestación ante el aumento del pasaje. A menos de
un mes, el 10 de noviembre, caía víctima de un atentado preparado por los
Aerregistas, el tranviario Manuel Montoro Castro, en Consulado y Genio,
172
también recibía heridas de balas profundas Rufino Perdomo daba cuenta a la
Tercera Estación, sin efectuar detenciones.

La llegada de 1948 no presagia nada nuevo bueno. Es el año en que se irá


Ramón Grau San Martín, ya los estudiantes le han gritado: “¡King Kong, que se
vaya Ramón!”. Pero, ¿quién vendrá?. Enero ha comenzado con una huelga de
los empleados de limpieza de calles. Ellos esparcen basura en la vía pública en
protesta por las cesantías en el Instituto Nacional de Higiene (Infanta y Crucero),
del Ministerio de Salubridad (Belascoaín y Estrella).

Los crímenes políticos de aquel año comienzan el 22 de enero con el asesinato


del querido dirigente comunista Jesús Menéndez Larrondo, líder del sindicato
azucarero, Exactamente un mes después, el 22 de febrero, caía una figura que
no ha sido justipreciada hasta hoy en nuestra historiografía; Manolo Castro.

La muerte de Manolo Castro se vinculó automáticamente con la “guerra de


guapos”, por ser dirigentes del MSR, pero a los conocedores del asunto
sorprendió por cuanto Manolo “Tenía fama de armonizador en las pugnas,
dándoles a muchos un ejemplo raro de serenidad” por otra parte, el dirigente
comunista universitario, Arquímedes Póveda, afirma categóricamente: “Mano
tenía una línea que concordaba mucho con la nuestra, con la de la CTC
(unitaria) de Lázaro Peña al frente”.

La masacre había tenido lugar en la acera de San Rafael, entre Prado y


Consulado, y concretamente entre el cine “Resumen” (Cinecito) y el Café “Uncle
Sam”. Ya se había terminado el Paseo del Carnaval Habanero y eran poco más
de las 11 de la noche, Manolo Castro era en aquel momento el Director General
de Deportes y conversaba con tres compañeros suyos en la expedición
internacionalista de Cayo Confites, y un estudiante universitario. Cuando
relampaguea la primera hornada de metralla, cayó fulminado Carlos Puchol
Samper y herido Ignacio Valdés Rodríguez, ambos veteranos de la Guerra Civil
Española. Pasan segundos y en la segunda ráfaga eran heridos el
expedicionario José Miró y Manolo herido mortalmente. Eran conducidos al
Hospital de Emergencia, pero Manolo Castro y Carlos Puchol llegaban sin vida.

Un policía había logrado detener al sospechoso Gustavo Ortiz Fáez, de 20 años,


estudiante de Agronomía, Había tirado al suelo su pistola 45 por habérsele
encasquillado, pero en sus bolsillos le aparecían tres cargadores de proyectiles.
Se dijo que había invocado su condición de ahijado del Dr. Ramón Grau San
Martín para ser liberado; de todas formas, no le valieron mucho sus influencias,
fue el único procesado en la instrucción de esta causa criminal, que se extendió
por dos años, sin que nunca se llegara a precisar los participantes en el
atentado, sus autores intelectuales y las verdaderas causas del atentado.

173
Aquel año de 1948 el suelo centrohabanero iba a enlutarse también con la
muerte, el 2 de abril, de Miguel Fernández Roig, dirigente comunista tabacalero
asesinado en la Fábrica “La Corona”. La patronal del ramo, aprovechando la
división del movimiento sindical y la entronización impostada de dirigentes
amarillos y cetekarios, pretendió generalizar la introducción de máquinas de
tabaco. Fernández Roig era de los que se oponía a la mecanización en la
factura de tabacos para el consumo nacional, ya que había significado el
desempleo para miles de obreros tabacaleros.

El Primero de Mayo de 1948 fue conmemorado por los obreros unitarios desde
sus locales sindicales, escuchando un programa especial en el Noticiero de la
Mil Diez (Reina # 312-314). Se edito un fragmento grabado del último discurso
ejecutado por Jesús Menéndez y comentarios políticos de actualidad. Todo esto
a la misma hora, a las 9:00 AM, en que estaba programado el desfile de la CTC
(Divisionista). La audiencia al programa de la Mil Diez fue tan grande, como el
descalabro del acto oficial de la CTC Mujalista. Este hecho concreto, y en razón
de la política gubernamental maccartista, el Ministerio de Comunicaciones
clausurada definitivamente la emisora Mil Diez el 6 de Mayo. Nadie mejor que
Sergio Nicols, uno de los trabajadores de la “Emisora del Pueblo”, para describir
lo que allí ocurrió al incluir la transmisión especial del Primero de Mayo:

.....Las ensordecedoras sirenas de las perseguidoras que venían a


parquear y cerrar totalmente la calle Reina 312, eran del carajo.
Estabamos en la emisora muy pocas personas no pasábamos de cinco. Yo
me asomé al balcón que daba a la calle Reina y aquello parecía que iban a
tomar la Bastilla. ¡Había “azules” por todos lados!

Previamente, yo había mandado a cerrar la cánula que estaba a medianía


de la escalera y el ruido era ensordecedor empujándola y golpeándola.
Regrese aprisa al borde de la escalera y la reja ya la habían forzado,
subiendo en compacto tropel por la estrecha escalera como treinta nízaros,
al mando del Comandante Antonio Borges, jefe del Primer Distrito, quien
entró en la cabina de control y se puso a arrancar los cables de los
paneles, dándole patadas a las cosas, mientras esgrimía la pistola en la
mano izquierda y los guardias tomaban la emisora y el noticiero que
estaba en la azotea. Yo le dije al Comandante que aquellos cables tenían
alto voltaje, con la idea de parar su ataque y el me gritó que “parara
aquello enseguida”, apuntándole al operador del Control. Hicieron un
registro destructor. [...] Vinieron enseguida dirigentes del P.S.P y la
discusión fue violenta, pero se nos sacó a todos de allí, tomándose la
emisora militarmente. (74).
174
Aracelio Iglesias era asesinado también aquel año y se temía que la vida de
Lázaro Peña, el último de los llamados “3 Zares Negros” del sindicalismo
unitario nacional que quedaba en pie de lucha.

Una de las primeras medidas del ex ministro de Trabajo, ahora Presidente de la


República Dr. Carlos Prío Socarrás, es aprobar el Decreto No. 5 llamado “Ley
contra el Gangsterismo”, puesta en vigor en diciembre de 1948, se declaraban
ilegales todas las organizaciones armadas y se regulaban sanciones severas
para los violadores del orden. Sin embargo a la cárcel apenas fueron enviados
individuos sin estatura ni compromiso en la guerra de grupos, y mucho menos
de pandillas que invadían los sindicatos unitarios.

El año 1949 no prometía tampoco ser mejor que el anterior. Dos hechos de
sangre predecían el atentado que se le hiciera a Justo Fuentes Clavel,
vicepresidente de la FEU, asesinado a la salida de la COCO, que entonces
radicaba en Manrique y Virtudes. Había liderado las luchas estudiantiles contra
el aumento del pasaje, haciendo comentarios sobre este tema en el Programa
de la COCO “LA FEU HABLA”. Pero en el espacio del 2 de abril de 1949 lo
empleó para señalar las violaciones de la Ley de gangsterismo y denunciar los
planes que se urdían para la fuga de Mario Salabarría, condenado por los
Sucesos de Orfila.

Cuando ametrallaban a Justo Fuentes, daban muerte accidental a un chofer de


taxi que se hallaba en el lugar. Justo logra sobrevivir en una agonía que duró 48
horas. Fallece el 4 de abril de 1949. Su compañero de luchas estudiantiles y
Presidente de la escuela de Derecho, Fidel Castro Ruz, fue uno de los oradores
en su sepelio. El compañero Flabio Bravo, en nombre de la Juventud Socialista,
expresaba:

En todos estos atentados y crímenes hay que ver la mano instigadora de los G-
Men, policías norteamericanos que desean sembrar el terror y crear un
ambiente propicio para la eliminación de todos los que de alguna forma luchen
por la liberación nacional, la paz y el bienestar del pueblo. El asesinato de Justo
Fuentes lo consideramos como un ataque al estudiantado, que tan
valientemente ha venido luchando contra la opresión yanqui, contra los
desmanes del priato, por los derechos democráticos y por las demandas
populares (75)

A raíz del atentado contra el combativo Vicepresidente de la FEU, se creaba el


grupo de Represión de Actividades Subversivas (GRAS), supuestamente para
cumplimentar con un órgano nuevo especializado, “La Ley contra el
Gangsterismo” y erradicar el pistolerismo. En realidad el aparto va a sumarse a
la política anticomunista y represiva del movimiento obrero unitario. El 24 de
enero de 1950 el dirigente de la Juventud Socialista Francisco Peñalver García,
175
era objeto de un atentado en la esquina de Malecón y San Nicolás. Aunque
lograba salvar la vida, recibía varios impactos de proyectiles. Daba cuenta la
Cuarta Estación, reportando la captura de un sospechoso, pero sin mayores
resultados.

El 8 de mayo de 1950 se celebra en la Sociedad de Torcedores de La Habana


(San Miguel 662), ya en poder de los aerregistas, el acto por el XV Aniversario
de la caída de Antonio Guiteras (76). Hacían uso de la palabra Jesús González
Caitar “El Extraño”, el tranviario Marco Antonio Irigoyen, Eufenio Fernández y la
compañera Aida Pelayo, los sindicatos unitarios tuvieron que desplazarse hacia
otros inmuebles. La CTC tuvo sus oficinas clandestinas en los altos del edificio
de Escobar No. 114, el Sindicato de la A... en Industria No. 452 y la Federación
Tabacalera en San Miguel No. 1015.

Cuando se aproxime el juicio a los procesados por el asesinato de justo Fuentes


Clavel y los grupos de Policayo Soler y “El Colorado” se propusieron eliminar a
los posibles testigos, en especial al ex teniente de la Radiomotorizada y
miembro de la VIR, Armando Correa. El 27 de julio de 1950 le siguieron hasta
el domicilio de pepe de Jesús Jinjaume en San Rafael No. 1021. Allí había un
núcleo de seis miembros de la VIR, pero el comando agresor no se detuvo.
Pasaron ametrallando en una primera ocasión, repitiendo con mayor éxito el
barrido de la segunda vez, donde quedaron sin vida; José Antonio Cremet
Juantorena y el chofer de Correa, José Carrere Arbelo. Heridos graves: Juan
Cancio de La Rosa y Marino Jiménez y heridos leves: Armando Correa y José A.
Zarranz. Ni a “El Colorado” ni a Pelicayo se les detiene ni procesa, en cambio
eran detenidos elementos de menor talla como Carlos Jiménez Alonso (alias)
“Tronco de Yuca”.

Los falsos “dirigentes” sindicales, una vez entronizados en el Palacio de los


Trabajadores y los centros obreros históricos, comienzan a pugnar
violentamente entre sí. De aquellas rivalidades el 14 de octubre es acribillado a
balazos en Consulado y Virtudes uno de los que había sido hombre de confianza
de Eusebio Mujal: Narciso Rodríguez Guerra (a) “Chicho”, quien a su vez había
agredido a Joaquín Barbosa, de la ARG. Se abrió una causa criminal y fueron
instruidos: Nivaldo Noriega Burges (a) “El Niño”, Juan Salas Cabrera, Hugo
Parra Velazco, y Emilio Grillo Ayala (a) “Pistolita”. Hasta el propio Marco Antonio
Irigoyen era detenido y obligado a esclarecer su situación. Respecto al
problema que motivo la disputa, tampoco quedo derimido y más tarde el chofer
de “Chicho” también era ejecutado.

A la altura de la primavera de 1951, todavía la “guerra de grupos” seguía


marcando una secuela de terror y sangre, otro chofer, Mario Carrillo Lima, este
de “Cucú” Hernández Vega (77), fallecía ametrallado dentro de un automóvil en la

176
esquina de Lagunas y Escobar. Sus atacantes le habían gritado antes de
dispararle esta frase: “¡Para que veas que la justicia tarda, pero llega!” (78)

El llamado “PACTO DE GRUPOS”, donde debió establecerse definitivamente la


paz entre todas las organizaciones armadas y sus tendencias, era propiciado por
el Dr. Prío Socarrás. Había comenzado ensayando el garrote para mantener el
orden, luego la persuación, y por último un método antiguo muy eficaz: el
soborno. Decidió reconocer los servicios “Revolucionarios”, ofreciéndoles
sueldos a través de puestos inexistentes, es decir “botellas”, a cambio de que
dieran vacaciones definitivas a us pistolas. Pretencdió así comprar la
tranquilidad avdidama.

Pero los señores del “gatillo alegre”, envisiados ya en el delirio patológico de oler
a pólvora y sangre, no podían estar conformes con la inactividad. Pronto
comenzaron las intrigas y disgustos por la desigual distribución, donde la UIR y
sus funciones creyeron ser los menos favorecidos. Por otra parte, faltaban
grandes culpables de Orfila, a quienes la justicia no había llegado…

Alejo Cossío del Pino, ministro de Gobernación durante los sucesos de orfila,
era acusado por la UIR de haberse parcializado a favor de los seguidores de
Salabarría contra Tro. El 24 de febrero de 1952 cuando se hallaba compartiendo
con unos amigos en el Bar “Strand” (San José y Belascoaín), de un automóvil
rojo se bajaron cuatro hombres. Con habilidad de expertos acumaron sus armas,
impactando 18 veces en su cuerpo, e hiriendo a varios de los que le rodeaban.
Por supuesto, el ex representante a la Cámara, llegó occiso al Hospital de
Emergencias.

El joven abogado Fidel Castro Ruz, dirigente de la Juventud Ortodoxa en el


barrio de Cayo Hueso, demostraba ante el Tribunal de Cuentas las
inmoralidades con las que se había pretendido comprar el silencio de las
pistolas. Con la decisión y el valor sólo concebible en un líder, acusa
directamente al Presidente de la República y señala, uno por uno, los distintos
grupos y facciones nominales, y a quienes se les entregaban los sobres con el
dinero. Afirmaba- según los datos en su poder – que había más de 2 mil puestos
(“botellas”) destinados por Prío para estos menesteres y comentaba:

“Aquello que el hecho más escandaloso que se haya visto en ningún


pueblo civilizado del mundo. Un presidente prostituyendo su alta
investidura se rendía incondicionalmente a los grupos fratricidas y
compraba la paz pública mediante las más o minorar concesiones” (79)
La incapacidad de los gobiernos auténticos para mantener el orden público y la
tranquilidad ciudadana, contener la criminalidad, el matonismo y erradicar el
culto a las pistolas, se había demostrado una vez más con el atentado a Lossio
177
del Pino, y poco después, con el tiroteo donde la policía dio muerte al aerregista
“Pistolita” y a una víctima inocente a quien una versión oficial definió
indebidamente como miembro de ARG.

La sospechosa conjugación del pistolerismo y la impotencia gubernamental para


erradicarlo, va a favorecer las aspiraciones presidenciales de alguien la misión
estadounidense consideraba como el hombre de mano dura, del brazo fuerte, el
único capaz de contener el terror armado en La Habana. De nuevo íbamos a
tener, en otro periodo a la historia colonial, a la figura de Fulgencio Batista y
Zaldivar.

NOTAS Y CITAS
1- Colección factoría del Archivo del Museo Municipal de Centro Habana
Arquitectura 1918 9.38.
2- La casa que construyera Alfredo Hornedo Suárez en Carlos III para su disfrute
familiar es actualmente la casa de la cultura del municipio de Centro Habana.
3- Véase el álbum de recuerdo del centenario de las calles de Galianos y San
Rafael 1839 – 1936 La Habana, SiL., (1936) p.20
4- Al triunfo de la Revolución la CMCF de la CTC, en San Carlos y Desague, se
convierte en “Unión Radio”.
5- Cañizares, Lucila, San Isidro, 1910. Alfredo Yarini y su época Ciudad de La
Habana, Letras Cubanas 2000 p.101
6- Idem
7- Fernández Robaina, Tomás Recuerdos secretos de dos mujeres públicas
Ciudad de La Habana, Letras Cubanas 1983 p.14
8- Memoria del Cuerpo de la Policía Nacional La Habana Imp. La Revoltosa de
Galiano No. 467, s.f.
9- Zamora y Zamora, Manuel de Jesús “Centro de Operaciones” Por la moral
pública La Habana, mat. Mimeografiado, 1951
10- Información La Habana, 4 diciembre 1958 p.9, c.2
11- Fernández Robainas ob.cit.p.24
12- Por la moral pública ob. cit. p3
13- Idem p.11
14- Fernández Robainas ob. cit. P.15
15- Reg No.12 “Confidencial” La Habana, 29 abril 1953, en Archivo personal de
Carlos Bartolomé
16- Fernández Robaina ob. cit. p.17. Orlando León Lenus “El Colorado” y Policarpo
Soler eran dos pistoleros temidos por la policía en esta época. Años atrás
Policarpo había sido oficial policiaco y tenía fama de ser franco tirador.
17- El propietario de “Romeo y Julieta”, Ignacio Alvárez, creó esa marca de tabaco
que sirvió para denominar la empresa. Según fuentes orales, Don Ignacio tuvo
especial preferencia por esa obra de la literatura universal. La empresa
británica The Havana Cigar an Tobacco Factories Ltd., motivado por la afición
y el éxito del fabricante criollo crearon la marca “Shakespeare”. Poesía un bello
diseño con las imágenes de Hamlet, Othello, Brutus, Puck y Falstaff.
Posteriormente, la empresa tabacalera de castañeda, Montero y Fonseca S.A,
178
en Galiano No. 466 crea la marca “Halmet” y atendiendo a la literatura
catellana, otra firma local la de Juan Cueto y Hno (Estrella No. 19), lanza al
mercado “Don Quijote de la Mancha”. Curiosos detalles de los que pocos
sabemos...
18- García Alvárez, Alejandro la gran burguesía comercial en Cuba 1899 – 1920
Ciudad de La Habana, Ciencias Sociales, 1920 p.111
19- Carpentier, Alejo La música en Cuba Ciudad de La Habana Pueblo y
Educación, 1989 p.163
20- Lo referido a José Lezama Lima (La Habana 19 diciembre 1910 – 9 de agosto
1976), ha sido éxito esencialmente por el investigador Israel Díaz. Como parte
de la Fundamentación de la declaratoria del Mpnumento de la casa museo
José Lezama Lima, añade que: “ La Casa de Trocadero 162 fue llevada al
reino de la poesía en la novela Paraíso, donde aparece como locación
evidente en alguno de sus capítulos, fue refugio de creación para Lezama. En
los últimos años de su vida constituyó su único ámbito vital, su único paisaje.
Allí tejió las cordenadas de su sistema poético, desde allé salío solo para morir
....
21- El fraude del alcalde Antonio Beruff Mendieta se descubrió y fue radicada la
Causa No. 606 / 10, por delito de malversación de caudales públicos. Fue
condenado e inmediatamente después indultado y para mayor escándalo fue
elegido Senador de la República, luego Presidente del Senado (¡¡!!)
22- Julio Gonzalo Roig Lobo (1890 – 1970). Nació en Centro Habana y es una de
las figuras más representativas del municipio. Al margen del alto valor afectivo
que el maestro confirió a su hogar en Amistad No. 404, las investigaciones
realizadas por Lucila Cañizares en su trabajo biográfico Gonzalo Roig, Ciudad
de La Habana, Letras Cubanas, 1978 hacen pensar que la csa natal de Roig
pudiera haber sido San Lázaro No. 203 A (antiguo), luego 567 o Amistad 114,
según certificado de nacimiento hechos en distintos momentos. Además
Gpnzólo Roig vivió por un tiempo en la calle Condesa, junto a su amante
Noemí. Luego en Aguila 559, en Malecón No. 403 y finalmente con su esposa
Libaneza Zoila en Amistad 404.
23- Testimonio tomado por Alberto Muguercia para su investigación geográfico
sobre Gonzalo Roig, en Colección Factoría del Departamento de Música de la
Biblioteca Nacional José Martí p.14
24- Idem
25- Carpentier ob. cit. p171
26- Blanco, Jesús “La fiesta Cubana rumba” Salsa Cubana a.4, n.11 (noviembre)
2000 p.16, c.1
27- Idem
28- Esquenazi Pérez, Marta Del areito y otros sones Ciudad de La Habana, Letras
Cubanas 2001 p.216
29- Ortiz Fernando Etnia y sociedad Ciudaa de La Habana, Ciencias Sociales,
1993 p.230
30- Depestre Catony, Leonardo Homenaje a la música popular Cubana Santiago
de Cuba Ed. Oriente, 1989 p.9
31- Idem p.9
32- Guzmán Moré, Jorgelina “Las Comparsas en Centro Habana” material inédito
p.2
33- Idem pp5-6
179
34- Idem p.4
35- Fernández Robaina ob cit p.
36- Justo Fuentes Clavel. Fue un destacado compositor, del grupo fundador del
filme. Sin embargo su obra no ha sido investigado, y no existe en la ACDAM
las inscripciones de sus piezas. Fue asesinado en 1949, sin que se moviera el
destino de sus canciones.
37- Díaz, Angeles Testimonio tomado por Felix Contreras para su libro Por qué
tiene Filin Santiago de Cuba, Ed Oriente, 1989 p.21
38- Castellano, Tania Testimonio tomado por Felix Contrera ob cit p.28
39- Juaquín Domíngue Albarrán (1800-1812). Insigne urólogo Cubano, dio su
nombre al Instituto Municipal de Profilaxis Venérea de La Habana en honor a
su memoria también se irguió un busto en Carlos III entre Espada y Hospital.
40- Demolido el Nuevo Frontón, se construyó en esta manzana el teatro de la
CTC.
41- Méndez Moñiz, Antonio Pelota vasca en Cuba 1930-1960 Bilbao, Ed.
Federación Internacional de Pelota Vasca 1995 pp 70-71
42- Serra Robledo, Matilde T. Club Juvenil Cultural Deportivo en los años 1935-
1938 Ciudad de La Habana, Ed abril 1989 pp.24-25
43- Idem p.51
44- Cisnero Betancourt, Salvador “ La voz de un revolucionario irreductible se alza
contra la Enmienda Platt”, en Documentos para la Historia de Cuba La
Habana, Ciencias Sociales, 1973 t.2 p123
45- Pimer Manifiesto de la Liga General de Trabajadores Cubanos, fechado el 14
septiembre 1899, en El Movimiento Cubano. Documento y artículos Ciudad de
La Habana, Ciencias Sociales, 19811 t.1 p.180
46- Edificio Centro habaneros habían dado ya abrigo a líderes de la guerra de
independencia como el generalísimo Máximo Gómez Baez, quien habrá vivido
en la residencia de Galiano Nos. 207-209 entre Virtudes y Conde Cañingo,
barrio de Colón. La ________ obtenido por cuestión popular.
47- El Centro Obrero de La Habana cuando la celebración del Primer Congreso de
Agrupación Comunista en agosto d 1925 radicaba en Silueta No. 46.
48- Julio Antonio Mella nació en la calle Obispo, de pequeño fue a vivir junto con
su padre a Manrique No.408 entre San Rafael y San José. Luego la familia se
mudó para Colón y Aguila, y ya en el año 1920 vivía, junto a otros estudiantes,
en una habitación alquilada de un edificio propiedad del Coronel Arsina, en
Aguila y San Miguel.
49- Alta de la sesión del Primer Congreso Nacional de Estudiantes celebrado el 23
de Octubre de 1923 en el Aula Magna dela Universidad de La Habana, en
Documentos para la Historia de Cuba ob.cit.t.3 p.191.
50- Vease : Alfredo Martin Fadragas, Mella, Nacimiento de un lider Ciudad de La
Habana, Ed. Extramuros, 2001 p.34
51- Menoria del Tercer Congreso Obrero Nacional celebrado del 2-7 de agosto de
1925 en Camaguey, Impreso en el taller tipografico de San Nicolas No. 302, en
Documentos para la Historia ... ob cit,t.3 p.287
52- Rodríguez Silveiro, Pablo Testimonio ofrecido a José A. Tabares del Real para
su obra Guiteras La Habana Ciencias Sociales 1973 pp.338-339
53- Francisco Gonzxález Cueto “Paquito”, primer pionero maestro de Cuba, nació
el 19 octubre 1919 en la calle San Carlos del barrio de Pueblo Nuevo. Era el
menor de seis hermanos. Su madre; Flora Cueto, era obrara cigarrera. La guía
180
de pionera era Rosario Guillaume Pérez “Charito”, nacida el 5 mayo 1889 en
San Rafael esquina a Gervacio. Fue militante comunista y luego dirigente de la
Federación Democrática de Mujeres Cubanas. Véase el libro de Carmen Ferrer
Cepero Antecedentes del movimiento pioneril Cubano Ciudad de La Habana,
Ed. Política 1987.
54- Cabrera Grcía Olga Guiteras, la época, el hombre La Habana, Ed. Arte y
Literatura, 1974 p. 516
55- Guiteras halmes, Antonio Declaración publicada el 1 septiembre 1934 en el
periódico Ahora, citado por Tabares en Guiteras ob.cit. p. 457
56- Gonzalo Calvajar Ladislao El Ala Izquierda Estudiantil, La Habana, Ciencias
Sociales, 197
57- Reg. No. 158. L.1 Jefatura de la Policía Nacional, Sección de Investigaciones.
La Habana, 16 marzo 1935, en Archivo Personal de Carlos Bartolomé.
58- Cerra Robledo, Matilde ob. cit p.59
59- Idem p.59
60- Lázaro Peña González nació el 29 de mayo 1911 en Carmen No. 38. Su
padre fue carpintero y su madre despalilladora de oficios. Estudió en la
Escuela Pública No. 67 (Sitios entre Campanario y Lealtad). De muy joven
ingresó en la fábrica de tabaco “El Crédito” y laboró también en “Por
Larrañaga” como torcedor. Destacado como líder obrero en el sector, llegó
hacer el secretario general del sindicato de tabaqueros de La Habana en 1934
61- Instituto de Historia del Movimiento Comunista y de la Revolución Socialista de
Cuba anexo al CC del PCC Historia del Movimiento Cubano Ciudad de La
Habana, Ed. Política 1985 t.2 p.79
62- Ciertos bandistas universitarios tuvieron un automóvil y un local en Infanta no.
204. Patrocinado por el Comandante jaime Mariné se suponía que el edificio se
utilizara en hospedar a estudiantes pobres de provincias que no tenían dinero
para alquilar una habitación. Le llamaron: Asociación Estudiantil Alma Máter. El
verdadero objetivo de Mariné era utilizar aquel grupúsculo de delincuentes
como punta de lanza anticomunista en la universidad.
63- Acción Revolucionaria Guieras tuvo en su fundación una plataforma ideológica
basada en los principios socialistas y antimperialistas, tomados del ideario de
Antonio Guiteras Halmes. Véase a Mario García Cueto “ Lo que dicen las
organizaciones revolucionarias, ARG” Bohemia, a.39, n.24, 15 junio 1947
pp58-58
64- La residencia del doctor Orestes Ferrara Merino y su colección ampliada,
constituye en la actualidad el Museo Napoleónico.
65- Ezequiel Pérez Pérez fue un joven combatiente que participó en las acciones
del cine Encanto en 1935. Fue ametrallado en los alrededores del Instituto de
La Habana por los agentes batistianos.
66- García del Cueto Mario “Lo que dicen de las organizaciones revolucionarias.
UIR” Bohemia ob. cit. p.56
67- Valoración hecha por Aida Pelallo, fundador del MSR, sobre la proyección
política de la organización. Entrevista realizada por Carlos Bartolomé y Julio
Lima el 7 agosto 1989 en el domicilio de la destacada luchadora, municipio de
Plaza de la Revolución, en: Archivo personal de Carlos Bartolomé.
68- Castro Tarragona, Manuel de Discurso pronunciado en el acto de presentación
del Movimiento Socialista Revolucionario (MSR), efectuado en la sala del
cinecito el 6 abril 1947. Tomado del admirable trabajo investigativo de Raúl
181
Aguiar Rodríguez en El bonchismo y el gangsterismo en Cuba Ciudad de La
Habana, Ciencias Sociales, 2000 p.6.
69- Con frecuencia se identifica a aquellas organizaciones armadas que surgen
entre 1934 y 1952, como “gangs”, y a sus miembros se les califica de
“gangsters”, identificándoseles con la mafia estadounidense. Aunque se dan
rasgos comunes: violencia armada, terrorismo y modus operandi, las
motivaciones y características esenciales no son las mismas. Los gangster son
delincuentes organizados que matan y extorsionan sin distinción ideológica. Se
deben a un padrino que dispone de él y su familia a su antojo. Los hombres de
acción Cubanos se afilian a determinadas organizaciones cuya plataforma
decía ser insurreccional revolucionaria sin objetivos patrióticos. Quienes
consideran que la lucha armada era la vía adecuada para hacer la Revolución,
aquellos fueron las organizaciones que encontraron en esa etapa. Se
perdieron en luchas fratricidas por la falta de preparación y orientación política
e ideológica. La reacción, sabiendo que en su mayoría eran jóvenes valiente,
con inquietudes patrióticas, antifascistas y antiimperialistas en muchos casos,
avivó la desunión entre ellos, propiciando que se exterminara entre si.
70- En el ataque a la comisión de Credenciales del V Congreso Nacional Obrero
de la CTC, en el local del Sindicato Textil y de la Aguja (Industria y Dragones),
perdía la vida el agresor Felix V. Palú. La prensa informaba que se trataba de
un “líder obrero” muerto a consecuencia de rivalidades sindicales.
71- La biografía de Manuel de Castro Tarragona esta por escribirse.
Probablemente permita incluir su foto en la galería de mantunes del Aula
Magna de la universidad de La Habana y enriquecer la historia del movimiento
estudiantil universitario. Sin embargo, no le faltaron detractores, quienes
comentaron que era casi un “estudiante profesional” para ostentar
indefinidamente la Presidencia de la FEU; que si tuvo por amigo a dos
matones; y sobre todo, que enlodó su trayectoria al aceptar el cargo de
Director General de deportes, a propuesta de José Manuel Alemán, Ministro de
Educación y antijice tristemente celebre Inciso K. Un ejemplo, relativamente
reciente sobre distorsión biográfica se ofreció en una de las escasas veces
que se le ha recordado en nuestra prensa, donde se afirmó: “Manolo Castro,
antiguo dirigente universitario de filiación izquierdista, devenido corrupto tras
asumir la Dirección de Deportes...”. esto lo escribieron, seguramente por
desconocimiento, las periodistas Magda Resik Aguirre y Alina Perera Robbio,
en “El muchacho que esperábamos”. Tres compañeros de Fidel en la
Universidad de La Habana recuerdan “Juventud Rebelde”, 11 Nov. 1996, p, 2.
72- Aguiar Rodríguez, Raul ab.at. p. 174.
73- Poveda, Arquímedes Testimonio tomado en mayo de 1976 por Carlos
Bartolomé, en Archivo personal de Carlos Bartolomé.
74- Nicols, Sergio testimonio tomado por Oscar Luis López para su libro La Radio
en Cuba. Ob. At. P. 329.
75- Bravo Pardo, Flavio comunicado del Comité Ejecutivo Nacional ante la muerte
de Justo Fuentes Clavel. Tomado del material inedito de Carlos Bartolomé El
bonchismo y el gangsterismo estudiantil. P. 53.
76- A los miembros de la ARG en su momento se les llamó “guiteristas ”. no todos
sus fundadores y mucho menos los que se sumaron después, cuando el asalto
a los sindicatos unitarios, siguieron el ideano guiterista. Por tanto, pensamos

182
que a los efectos de la historiografía es mas objetivo denominarlas:
aerregistas.
77- Rogelio Hernández Vega (a) “Cucú” había participado en la matanza de Orjila,
siendo entonces el segundo jefe de la Policia Secreta Nacional. Se hallaba en
la lista negra de la UIR y fue ejecutado en Julio de 1948, en el consulado
Cubano en México.
78- Aguiar, R. Ob.at. p. 208
79- Vignier, E. y G. Alonso La corrupción política y administrativa en Cuba La
Habana, Ciencias Sociales, 1973. P. 246.

LA LUCHA INSURRECCIONAL DE 1952-1959


La insurrección urbana junto a la guerra en los campos echaría a la dictadura
batistiana luego de siete años de encarnizado enfrentamiento. El centro de La
Habana, con sus hombres y entorno, serian protagonistas de hechos
verdaderamente epopéyicos. Toda su historia, aún por escribir, y a penas
esbozada en las siguientes paginas, emitirá la rica tradición combativa y político
revolucionaria de la Patria.

EL RECHAZO AL GOLPE DE ESTADO Y LAS PRIMERA ACCIONES


REVOLUCIONARIAS

El Golpe de Estado significaba para la oligarquía criolla y los monopolios


norteamericanos una garantía para desarrollar sus negocios, aspecto por
encima de toda ética y pudor legalista y democrático burgués. Por eso la
mayoría de los políticos tradicionales, la alta burguesía y la Embajada de los
Estados Unidos pronto demuestra total entendimiento con Fulgencio Batista
Zaldivar en su tercer y último cuartelazo.

El general, muy inteligentemente, había diseñado un atractivo menú a la


inversión extrajera mientras daba participación en el llamado Consejo Ejecutivo
a los comerciantes, grandes almacenistas criollos, banqueros y todo tipo de
oportunistas llamados a sostenerles. El control de Orden Público y el Movimiento
Revolucionario se suponía garantizado. Entre sus primeras medidas
significativamente estuvo la ocupación de las oficinas centrales del Partido
despueblo Cubano (Ortodoxo) y el Partido Socialista Popular (PSP), así como el
edificio de la confederación de trabajadores de Cuba (CTC), en Desagüe y San
Carlos. Eusebio Mujal Secretario de la CTC y sus representantes cetekarios no
tardaron en tramitarse quedando todos a la orden del asesino de Antonio
Guiteras.

El rechazo viril a la dictadura lo ofrecieron primeramente los estudiantes, obreros


unitarios, elementos burgueses de cívica posición política, insurreccionalistas

183
antibatistiano, la juventud ortodoxa y el Partido Socialista Popular. La Comisión
Ejecutiva Nacional del PSP publicaba el 11 de marzo, en el editorial de HOY, lo
siguiente:

Son los imperialistas yanquis los fomentadores de golpes de estado como


los de Venezuela, Perú, Bolivia, etc., que llevan al poder a gobiernos anti-
democráticos, que no dependen de elecciones, ni de opinión pública, que
se basan solo en el poder de las armas.

……
El Partido Socialista Popular reitera su consideración al golpe de Estado y
llama a las masas a… continuar e intensificar la lucha por la paz, contra
la utilización de Cubanos como carne de cañón por la democracia, por la
erradicación de gangsterismo y el porrismo, por la eliminación de la
discriminación racial, por el 30% de aumento de los salarios, sueldos y
pensiones por 80 pesos mensuales de subsidios para los desocupados, por
la unidad y la democracia sindical, por la honestidad administrativa. (1)
Paralelo a las demandas cívicas, reivindicaciones y la lucha pacifica, comenzó a
distinguirse una joven figura quien frente a la violencia militarista y la bravata
política, proponía acciones enérgicas y de consagración. Era un dirigente de la
Juventud Ortodoxa, delegado del Partido del pueblo Cubano (Ortodoxo) por
Cayo Hueso: el Doctor Fidel Castro Ruz. Mientras la cúpula de la Ortodoxia
medita qué hacer en la mayor legalidad y moderación, Fidel escribe la combativa
proclama, ¡REVOLUCION NO, ZARPAZO!, Aquí le decía a Batista.

Su asalto al poder carece de principios que lo legitimen, ríase si quiere,


pero los principios son a la larga más poderosos que los cañones. De
principio se forman y alimentan los pueblos, con principios se alimentan
las peleas, por los principios mueren.

No, llame revolución a ese ultraje, a ese golpe perturbador e inoportuno, a


esa puñalada trapera que acaba de clavar en la espalda de la república…

Cubanos: Hay tirano otra vez, pero habrá otra vez Mellas, Trejos, y
Guiteras (…); la hora es de sacrificios y de lucha, si se pierde a vida nada
se pierde, vivir en cadenas, es vivir, en afrenta y oprobio sumidos. Morir
por la patria es vivir. (2)

184
Pero una vez escrito el problema ahora era dónde se publicaba. Una linotipista
ortodoxo del periódico ALERTA, en Carlos III No, 615, logró montarlo en plomo,
pero el Director de ese periódico, aunque aún ortodoxo pronto se tramitaría con
Batista, por lo que eludió su publicación. Con la censura de prensa por aquellos
días era imposible que viera la luz de forma legal. Por eso fue Raúl Aguiar
Fernández, dirigente como Fidel del Partido Ortodoxo en Cayo Hueso, quien a
través de un amigo suyo en la barriada, que era publicitario, lo tiró en
mimeógrafo, desde su apartamento en el cuarto piso, de un edificio cercano a la
calle de San Lázaro.

Igualmente, a través de un mimeógrafo en Cayo Hueso, el “MOVIMIENTO”, que


comenzó a organizar Fidel, dispuso de una publicación periódica clandestina de
enfrentamiento al régimen. Se trataba de un pequeño tabloide que titularon:
“SON LOS MISMOS”, la imprenta se encendió en frecuencia en un automóvil de
alquiler que tenia su piquera frente al bar Detroit, en el Hospital no. 52, esquina a
25.

Muy cerca de allí, era el contador de la Agencia


de Automóviles Pontiac (Hospital no. 60) Abel
Santamaría Cuadrado muy cercano a Fidel en la
organización y dirección del movimiento, por lo
que tanto su departamento como su centro de
trabajo se convertían en un importante punto de
contacto y operaciones. A su vez, un amigo de
Abel era conocido de Fidel; Jesús Montané
Oropeza quien labora en la General Motors, en
Humbol, Hospital. El propio Montané presentaría
a otros futuros combatientes que laboraban con
él en la frigidaire: Reinaldo Boris Luis Santa
Coloma y Vicente Chávez Fernández.

Importante centro de conspiración del movimiento


de estos primeros tiempos en Centro Habana, lo
que También el apartamento de la Dra. Melba
Hernández Rodríguez del Rey y sus padres, en
Jovellar no, 107 entre Hospital y Espada.

Hubo otros hombres de pueblo quienes, aunque no conocían personalmente a


Fidel, sí compartían sus objetivos estratégicos. Uno de ellos sería Sergio
González López, el CURITA, había nacido en aguada de pasajeros y vino a la
capital para consagrarse como sacerdote. Desde los 14 años se inicio en el
Seminario de San Ambrosio y San Carlos. Pero cuando llevaba 9 años allí la
villareña Gladis Vergara cambió su vida. En 1949 se casan y tienen 4 hijos,
Sergio, Reinaldo, Ricardo e Isabelita. Sergio labora en la Empresa de Tranvías y
luego en los Autobuses Modernos S.A. Ya en los momentos que se produce el
185
golpe de estado se halla administrando la imprenta de su hermana Delia, en
Águila no. 618, en la Plaza de Vapor.

Antes del madugonazo, imprime miles de volantes de protestas, todos coinciden


que esta es una etapa de activa denuncia, agitación y propaganda
revolucionaria. El curita distribuye sus demás publicaciones clandestinas a
través de sus compañeros dirigentes sindicales y ortodoxos.

Por su parte, Fidel releva la publicación original del MOVIMIENTO. Coinciden un


título más impactante, un objetivo más concreto: EL ACUSADOR.

Era el momento en que Batista maniobraba para legalizarse en el poder. Fidel


quien había ejercido como abogado en el bufete del Consulado no. 7 y 9, le hizo
una contundente acusación. Radica causa contra el Sr. Presidente de la
República dejando ante el tribunal de Urgencia de La Habana. Se acusa entre
otros delitos de: Sedición, traición, rebelión, así como de violar seis artículos del
código de Defensa Social. De manera que según su informe, quien ocupaba
ilegalmente la primera magistratura era acreedor de más de cien años de cárcel.
Por supuesto, sabía Fidel que su denuncia sería estéril en el orden jurídico, pero
de mucho impacto en el orden político.

La Federación Estudiantil Universitaria (FEU) juega en todos los tiempos un


papel muy importante, compulsada por estudiantes muy combativos, entre los
que se distingue José Antonio Echeverría. La FEU organiza la JURA DE
FIDELIDAD A LA CONSTITUCION DE 1940. Su principio se representó como la
Constitución hubiera muerto, y
se efectuó un velorio simbólico
en la Universidad de La
Habana. Pero se proyectó que
había que renacer y fue
llevándose a la Fragua
Martiana, bajo el influjo del
Apóstol, la Carta Magna debía
volver a vivir.

Marcha de las antorchas.

La Fragua Martiana se había constituido como institución, unos meses antes, el


28 de enero de 1952, con la dirección del Dr. Gonzalo de Quesada Miranda.
Ante la cercanía del Centenario del Natalicio de José Martí 1953, se convertía en
una entidad política crucial ante el valor del legado ideológico martiano.

186
El domingo 4 de abril de 1952 se efectuó el desfile desde la Universidad,
llevándose la constitución en un sarcófago. El “Cortejo Fúnebre” logró avanzar
por San Lázaro hasta infanta; aquí tomó miembro a Humbolt por la calle 25. Al
llegar a la Fragua Martiana (Príncipe 108) se simbolizó la Resurrección de la
Constitución de la República, iniciándose un proceso de recogidas de firmas en
contra de los Estatutos prominales y a favor de la Constitución.

El acto de Jura a la
Constitución celebrado en la
escuela de Artes y oficio fue
de los más combativo y
masivos. A pesar de que
muchos de sus profesores no
participaron en el acto, sí casi
unánimemente todo el
estudiantado, y sobre todo,
obreros y población del
entorno al plantel. Aquí se
creó una organización
revolucionaria muy aguerrida
en el enfrentamiento al
régimen durante esta primera
etapa que se denominó: Movimiento Ortodoxo de Superación Estudiantil
(M.O.S.E).

El primero de Mayo de 1952, aunque sólo se autorizó el acto oficial por el día de
los Trabajadores en el Palacio de Desagüe y San Carlos, el Partido Socialista
Popular y los sindicatos Unitarios lograban movilizaciones locales en los barrios.
En Neptuno sorprendió una tela de gran tamaño contra la dictadura. Una de las
primeras manifestaciones en la ciudad partió desde Lagunas y Gervasio. Luego
se sumaría otro grupo sumado en perseverancia y Ánimas, coreaban las
consignas: ABAJO LOS ESTATUTOS! Y VIVA LA CONSTITUCION!

Un mes después, el 1ro de junio, día en que debieron celebrarse las elecciones
generales de 1952, la juventud Socialista convocó a una gran concentración de
protesta en el parque Trillo, ante la negativa del permiso para la segunda edición
del parlamento por los Derechos de la Juventud y la Paz. Los jóvenes partieron
por San Rafael hacia el Parque Central voceando consignas contra el batistiano
y a favor de elecciones libres, pero cuando iban llegando a la calle Galiano
fueron interceptados por fuerzas combinadas de la policía y el Ejército, quienes
lograron disolver la manifestación a costa de numerosos heridos.

Durante el verano, el régimen batistiano agudizó las represiones contra las


organizaciones comunistas y entidades obreras. El local del Partido Socialista
Popular (PSP) en San Leopoldo es asaltado por la policía, al igual que otras de
187
otros combativos barrios de la ciudad. Igualmente el club de Tabacaleros de San
Miguel 1015 es invadido. Los documentos y propiedades obreras son ocupados
y detenidos sus dirigentes.

En aquellos momentos difíciles, como en la revolución del 30, los obreros y


pueblo en general se unen en la lucha con lo mejor del estudiantado. El honrar a
los héroes y mártires de la patria se convierte en una acción solemne de
combate. Por eso en el aniversario XXII de la caída de Rafael Trejo, en el lugar
donde fue herido mortalmente por un policía, en Infanta y 27, se celebra un
patriótico acto donde es desvelada la tarja conmemorativa.

La dictadura batistiana, luego de intensa represión presionada por la opinión


pública internacional restaurar el 26 de octubre las llamadas garantías
constitucionales. Como parte de la política de aparente normalidad y en
diferencia con los sectores inversionistas a fines de 1952, el Ministro de obras
Públicas, ingeniero José Mendigutía, proyecta un pomposo acto para inaugurar
nuevas aceras del Centro Comercial de La Habana. Estaban de fiestas las
empresas y comerciantes de la calle San Rafael, en el tramo de Galiano a
Prado.

Cuando el Ministro daba comienzo al discurso su voz fue apagada por los gritos
de “ABAJO LA DICTADURA”. Al propio tiempo, cientos de volantes con lemas
revolucionarios y martianos se esparcieron al aire, inundando las aceras de las
flamantes vidrieras. Pese a la sorpresa de la policía, muchos vestidos de civil,
lograban capturar a algunos estudiante entre ellos a: Faure Chomón Mediavilla,
Antonio” Ñico”, Garra Lara, Carlos Vega Vega; y a los jóvenes: Conchita Portela
González y Mary Pumpido, ellas integrantes de una organización revolucionaria
femenina recién fundada y organizadora del boicot a estas ceremonia oficial.

Se trataba del Frente Cívico de Mujeres del Centenario Martiano (FCMCM),


grupo de agitación y colaboración en la lucha por el derrocamiento de la
dictadura y contribuir con nuestra ayuda y esfuerzos, a instalar en el poder al
pueblo… (3) lo encabezaba la estoica combatiente de mil compañas, Aida Pelayo
y Pelayo quien vivían en Industria 260. El nombre era un homenaje a José Martí,
en la próxima efeméride del Centenario de su natalicio. Con posterioridad a la
fecha se le llamaría Frente Cívico de Mujeres Martianas.

Los preparativos de celebración del centenario Martiano, al margen de las


entidades oficiales, eran un símbolo de rebeldía revolucionaria, al igual que otras
efemérides patrióticas. El 27 de noviembre la FEU conmemora el fusilamiento de
los estudiantes de medicina, no sin antes producir las primeras de la acciones de
alto impacto político en el Satadium del Cerro. El 10 de Enero del 1953, antes
del XXIV aniversario del asesinato de Julio Antonio Mella, es debelado un busto
suyo en el parquecito frente a la escalinata de la Universidad de la Haban. Pero
5 días después, en horas de la madrugada, una pandilla batistiana y
188
anticomunista embadurna el monumento con chapapote. Cuando el
estudiantado se percató del hecho, durante la misma mañana se estuvieron
produciendo acciones de protesta dentro y fuera de la Colina Universitaria.

Ya en horas de la tarde una masa enardecida de jóvenes clamaban por ganar la


calle de San Lázaro en marcha combatiente de desagravio. A pesar de que la
dirección de la FEU trató de calmar los ánimos, dirigentes revolucionarios más
radicales encabezados por José Antonio Echeverría lograron imponer que sobre
las 4 de la tarde se iniciara el desfile, San Lázaro Abajo, efectivamente sin estar
definido si el destino era el Memorial a los Estudiantes de Medicina, o el
mismísimo Palacio Presidencia, parte del Alma Mater una impresionante
columna de jóvenes, siguiendo a una vanguardia fue portada la enseña nacional.
Los policías que intentaron contener la manifestación en San Làzaro e Infanta,
finalmente se desplazaron hacia los lados ante el temor de ser arrollados…

Mientras cantaban el Himno nacional, cientos de hombres de pueblo se les


sumaban y juntos coreaban: “¡ABAJO BATISTA!, ¡¡ ABAJO!,¡ ABAJO LA
DICTADURA!, ¡
ABAJO!!!.

En San Lázaro y Belascoaín una barrera más nutrida de policías, con los clubes
(“Toletes”) de reglamento en las manos les esperaba desafiantes, pero la fuerza
de aquella muchedumbre era desconocida hasta entonces. A un ritmo muy veloz
rompió nuevamente la densa trocha de azules, fue entonces que se escucho con
intensidad las sirenas de numerosos carros de la radio motorizada, camiones de
bomberos y otros vehículos de las Fuerzas Armadas que se movían a toda
velocidad por Malecón para atrincarse al final de la calle San Lázaro y cerrar el
paso a los manifestantes antes de que llegaran a Prado.

La élite de la radio motorizada, la infantería casi completa de las estaciones del


Segundo distrito de la Policía Nacional, junto a los soldados, bomberos y
miembros de la Marina de Guerra con armas largas, todos dispuestos en
zafarrancho de combate para detener y disolver a los jóvenes. Lo primero que
sintieron sobre si aquellos aguerridos muchachos fueron los gruesos chorros de
agua. “Tenia una fuerza tremenda -recordaba Mary Pumpido- Tumbaban a
cualquiera. Para evitar que la bandera nacional que llevábamos, viniera
al suelo, varios compañeros sostenían el palo, la Bandera Cubana
ondeaba gallarda pero a veces se inclinaba, A pesar de los fuertes chorros
de agua, el grupo que la sostenía en lo alto impidió que tocara el suelo, la
escena era un dramatismo y emoción tremendos”(4).
En el afán d ganar el paseo del Prado se llego hasta la lucha cuerpo a cuerpo.
Cuenta Julio García olivera fue: “pronto se estableció un forcejeo por

189
arrancar de las manos de la policía las mangueras de los carros bombas
que proyectaban sus chorros de agua contra la manifestación. En algún
momento pasaron a manos de los estudiante, quienes repartieron
contundentes toletazos, con los largos pitones sobre los agentes
batistianos. Ante la ferocidad del encuentro, los esbirros no hallaron otro
recurso que comenzar a disparar sobre las cabezas de los estudiantes a fin
de detener su marcha” (5).

Precisa Alba Martínez Fernández, por su parte: “De pronto comenzaron a


sonar los tiros en todas las partes. Eran balas grandes y luminosas.
Salimos rápidamente del medio de la calle -Gaudelina García y yo- a
protegernos, pegándonos a las paredes. En ese instante, un pedazo de
papel calló sobre mí, los compañeros que se encontraban cerca, creyeron
que estaba herida. De un balazo me habían quemado el pelo ¡Si llego a
tener los zapatos puestos, me hubieran atravesado la cabeza!” (6).
Atardecía y se llega ciertamente a un momento de extremo peligro. Nunca se
pudo precisar si fue iniciativa de los esbirros o por decisión de sus jefes, pero lo
cierto es que comienza a caer los jóvenes por heridas de la bala. Iván Pardo
Caibo Serra, José Venegas y Alfredo Yaben se encarga de evacuar a los demás
heridos. Son atendidos en la clínica del estudiante del hospital “Calixto García”.
Allí se reportarían más de una docena de lesionados, en especial por armas de
fuego, mientras tanto José Antonio Echeverría, Faude Chomón y otros
compañeros se mantuvieron hasta última horas enfrentando a los agentes
batistianos con los puños.

La crónica del periodista de Bohemia, Fulvio fuentes ha sido utilizada por el


historiador Mario Mencía para significar el colofón de aquella gesta, que aquí
retomamos: “Al cabo cesó la refriega, los manifestantes se vieron
rechazados. Algunos quedan en las calles arrastrándose penosamente,
alcanzados por balas o derribados por los golpes. En pisicorre, tremolando
una Cruz Roja, los estudiantes improvisaban una ambulancia para
conducir a sus heridos que surgían de los portales, de los huecos de las
puertas, del refugio ocasional de los establecimientos. Era una
impresionante exhibición de cabezas rotas, camisas manchadas de sangre
y ropa empapada de agua, brazos fracturados, caras magulladas”(7)
De los heridos el más grave resultaría ser Rubén Batista Rubio, quien había
caído frente al edificio ocho, en San Lázaro entre Cárcel y Prado. Su nombre y
primer apellido coincidían con los de un hijo del dictador. Pero el revolucionario
tenia 21 años, estudiaba arquitectura y procedía de Cacocum, Holguín. El
190
proyectil le había perforado el hígado, los intestino y páncreas. Los médicos
desde el primer momento advirtieron que su situación era muy grave, con una
lesión muy parecida a la que había sufrido el líder de la ortodoxia, Eddy Chibás.
Luego de 29 días de agonía, fallecía Rubén Batista (8).

El “Año del centenario de José Martí” había comenzado demostrándole al


pueblo, y en especial su juventud, se resistía a que muriera el legado ideológico
del apóstol. Directamente relacionado con la importante efeméride, se
desarrollaría del 26 al 28 de Enero, EL CONGRESO MARTIANO EN DEFENSA
DE LOS DERECHOS DE LA JUVENTUD. Tendría lugar en el local de la
Asociación Cultural de los Elaboradores en Yeso de La Habana (Cifré No. 57, en
Estrella y Maloja) formaba parte de un movimiento internacional a favor de los
derechos de la Juventud, lo que al calor de la represión que se vivía, el evento
se convertía en una denuncia de alcance mundial.

Desde la Jura de la constitución se había iniciado un proceso de unidad entre


muchas organizaciones estudiantiles y juveniles en general. Ya en este cónclave
participan más de 300 representantes de las más diversas entidades juveniles
de todo el país, incluyendo por supuesto, la FEU y el frente Cívico de Mujeres
del Centenario Martiano (FCMCM). Pero además la Juventud Socialista
compartieron aspiraciones junto a católicos, masones, auténticos y ortodoxo. Se
vio a Lester Rodríguez y a otros combativos dirigentes de la Colina Universitaria,
compartir tribuna junto a Flavio Bravo, de la Juventud Socialista, al líder católico
santiaguero Luis Fuente, el secretario de la cámara Nacional Ajefista Armando
Hidalgo, o al secretario de la Juventud Ortodoxa Max Lesnick. También entre
otros dirigentes de la juventud en la localidad, jugó importante papel Ataúljo
Pichardo, presidente de la organización estudiantil de la Escuela de Arte y
Oficios. Todos en el objetivo común de honrar al Apóstol y luchar por una
República con mayor democracia, “Con todos y para el bien de todos”.

Diversas actividades adornarían las sesiones del Congreso. La primera de ellos


comenzaba el 18 de Enero, el maratón deportivo “TRAVESIA DE LA FLOR Y LA
BANDERA”.

Desde el cementerio de Santa Ifigenia marcharía un contingente de jóvenes


hasta La Habana, portando flores y la enseña nacional. El dirigente de la
Juventud Socialista, Francisco Peñalver García y las organizaciones provinciales
jugarían un papel importante en la incorporación de muchos jóvenes al paso de
lo maratón.

Asombra la profundidad y la osadía de lo ocurrido en el Palacio de los Yesistas


en la calle Xifre, durante los debates del congreso Martiano. Precisa el
investigador y profesor Alfredo Martín Fadragas en su libro Seguidores de mella.
Las luchas revolucionarias de la Juventud Socialista, “que el cónclave, a
191
demás de honrar dignamente a Martí, y potenciar la consigna “Por los
derechos de la Juventud”acusó al imperialismo yanqui como máximo
responsable de los males del país y denunció el peligro de la carrera
armamentista para la paz mundial. Estos asuntos forman parte de un
informe presentado ante la magna reunión por el compañero Lester
Rodríguez, y luego de un fructífero debate, fue aprobado por unanimidad”
(9).

El desfile de las antorchas proclamado para la noche del día 27, en espera del
Centenario del Natalicio Martiano, debía partir del Alma Mater para culminar en
la Fragua Martiana, de manera análoga a cuando se inicio la Jura de la
Constitución. Durante el día los estudiantes se enfrascaron en la preparación de
las rusticas antorchas, hechas de latas, palos y estopas. En precisión de otro
enfrentamiento cuerpo a cuerpo con la policía, a los palos se le añadían grandes
clavos. No obstante, esta vez las fuerzas represivas no interceptaron el desfile.
Sabían que la televisión, noticieros cinematográficos y hasta la prensa
internacional estaban cubriendo la conmemoración del Centenario Martiano. Por
lo tanto la dictadura por aquellos días hizo el esfuerzo de inhibirse de reprimir
pasando a la fase camaleónica de ofrecer una fachada democrática.

Así las cosas, faltando 30 minutos para la medianoche, miles de luces de fuego
empezaron a moverse desde la colina hasta San Lázaro e Infanta. Por una
parte se le incorpora el Contingente del Frente Cívico Martiano, y los Jóvenes
Congresistas de todo el país que marchaban a su encuentro por toda infanta,
atravesando Carlos III y luego Zanja. A pesar de la organización de estos
bloques, refiere la líder de los martianos, Aida Pelayo, “que la sensación de la
noche fue la columna de más de quinientos jóvenes perfectamente
formados que iban detrás de Fidel. Se veía que estaban bien entrenados
por la democratización de disciplina y cohesión que dieron (…) cuando
comenzamos a corear los gritos de “REVOLUCION”, “REVOLUCION”,
resaltaban las voces de estos jóvenes. Era como un tormento atronador…”
(10).

En horas de la tarde del 28 de Enero culminaba oficialmente el Congreso


Martiano y la Marcha de la Flor y La Bandera Nuevamente el pavimento de la
calle San Lázaro resistía el paso firme de aquella valiosa y combativa
vanguardia de la Generación del Centenario. Se adentrarían nuevamente hacia
el centro de la habana, esta vez en busca de la estatua del Héroe Nacional en el
parque Central.

192
ORGANIZACIÓN TERRITORIAL DEL MOVIMIENTO DEL
MONCADA EN CENTRO HABANA

Hemos visto el importante papel desempeñado por la vanguardia de la llamada


“GENERACIÓN DEL CENTENARIO MARTIANO” en el rechazo al golpe de
estado batistiano y en las primeras acciones revolucionarias. Sin embargo
fueron determinadas figuras de la generación de la Revolución del 30, quienes
constituyeron formalmente las primeras organizaciones armadas para enfrentar
a batista. Aureliano Sánchez Arango, creaba el primero de mayo de 1952, la
acción auténtica armada, conocida como la TRIPLE A, junto a Jorge Angostini,
Salvador Vilasea, Willi Barrientos y otros veteranos combatientes, el profesor
Rafael García Bárcenas constituía el 20 de Mayo el Movimiento Nacional
Revolucionario (MNR) con elementos que le respondían en las fuerzas Armada
y civiles que logró nuclear; en julio de 1952 Julio Carrillo Hernández daba forma
a su acción libertadora, de reducido alcance; mientras tanto, como otro
desprendimiento del PRC (A), el ex-presidente Carlos Prío Socarrás trataba de
hacer socorrer la organización auténtica (O.A).

En el apartamento de Jovellar
107 entre Hospital y Espada,
donde residía la Dra. Melba
Hernández Rodríguez, se
prepararon las acciones del 26
de Julio al igual que en la casa
de Abel Santamaría en el
Vedado y el Liceo Ortodoxo de
Prado 109.

Desde los primeros tiempos la Triple A


ubicó una planta de radio en la Casa
Huésped de San Miguel y Galiano a fin de
mantener las comunicaciones con
miembros en el exilio; el movimiento
nacional revolucionario (MNR) tuvo en
Centro Habana a los combatientes René
Oramas, los hermanos Ameijeiras y René
Lorenzo, entre otros, quienes se reunían
en la cercanía del liceo Ortodoxo y el
Parque de la Fraternidad.

Pero los objetivos de estas organizaciones


armadas eran ideológicamente muy
estrechos. Su programa aunque se decían “revolucionarios” en realidad no
deseaban una verdadera revolución, ni siquiera una insurrección popular, eran
más bien, como se les ha denominado: “insurreccionalita”. Se planteaban la
lucha armada pero simplemente para Tumbar a batista, manteniendo intacto el
193
status económico social. Por eso muchos de los jóvenes que en principio se
emulan en estas organizaciones por ser la primera vez, luego abandonan para
integrarse a otras fuerzas verdaderamente revolucionarias e insurrecciónales
como el MOVIMIENTO.

El prestigio de Fidel Castro Ruz, como dirigente de la FEU y luego como cuadro
de la Juventud Ortodoxa era crédito significativo en los medios insurrecciónales,
pero sobre todo, por sus acciones concretas luego del golpe de Estado a
diferencia de las organizaciones insurreccionalistas al MOVIMIENTO le inspira
el ideando martiano, la honradez chibacista y la combatividad de Antonio
Guiteras.

Casa de huéspedes de
Doña Filomena.

Fidel busca a los integrantes del MOVIMIENTO entrega incondicional y


absoluta a la causa. Se proyecta principalmente hacia la clase obrera y otros
sectores trabajadores en las cercanías del medio político en que se
desenvuelve, la ortodoxia, los barrios de la Ciudad de La Habana, aunque la
llamada también La Habana Campo, extendiéndose hasta Pinar del Río,
Matanza e incluso Palmas Sorianos y Santiago de Cuba.

Había sido Delegado del PPC(O) en las elecciones de noviembre de 1951, por
el Barrio de Cayo Hueso, Era señal de sus vínculos con la barriada, los que a
demás con motivo del éxito en aquellas elecciones se reafirman con fuerza y
proyectan hacia las comunidades colindantes. Es por eso que en la organización
territorial del MOVIMIENTO van a tener un peso importante el Grupo de Cayo
Hueso y otros del municipio actual Centro Habana, en total seis:

194
Mapa tomado de: “La capital en el Moncada”
de Haydée Labori Ripoll y otros.
1.- Cayo Hueso
2.- Lucena.
3.- San Lázaro
4.- San Leopoldo
5.- Parque de los Leones
6.- Plaza del Vapor.

GRUPO DE CAYO HUESO: Su jefe


fue el dirigente ortodoxo del banco
Raúl de Aguiar Fernández a quien
nos referimos al mencionar una
activa colaboración en la edición de
la proclama ¡REVOLUCION NO,
ZARPAZO ¡ Este grupo fue nutrido,
distinguiéndose José de Jesús
Madera Fernández, Armando del
Valle López y Andrés Valdez
Fuentes.

En Cayo Hueso estaba la casa de


Melva Hernández (Jovellar 107),
muy útil en toda esta etapa de
preparativos, el apartamento se convirtió en un taller de costura, confeccionado
los uniformes que llevaría los moncadistas. Apoyaron a Melba y a su mamá,
Elena, otras compañeras del movimiento: Delia Ferry, Elita Dubois y Naty
Revuelta. Significativa fue también la casa de Huésped de doña Filomena
(Espada no. 16) fue un importante lugar de citas por su alta confiabilidad, a
demás había teléfonos, con la posibilidad para dejar avisos. Visitaba con
frecuencia el lugar, entre otros: Raúl Castro, Pedro Miret, Abelardo Crespo,
Lester Rodríguez y Felipe Rodiles. En la casa de Neptuno no. 914, entre
Aramburu y Soledad, vivieron Raúl, Pedro Miret y Abelardo Crespo, además de
servir también de punto de contacto con otros integrantes del movimiento.

GRUPO DE LUCENAS: Fue dirigido por Ángel Plá Plicette. Entre sus
integrantes estarían: Humberto Valdés Casaña, Isidro Peñalver O´relly y los
hermanos Amelio, Alejandro y Antonio Ferrás Pellicer. Estos tres hermanos eran
los dueños de la imprenta que se hallaba en Lucenas nos. 304 y 306, entre San
Rafael y San Miguel. El local se convirtió en centros de reuniones del grupo, que
además era visitado con frecuencia por Abel Santamaría, Ernesto Trizol Aguilera
y el propio Fidel.

GRUPO DE SAN LAZARO: Tuvo como jefe a Vicente Chávez Fernández, quien
laboraba en la Frigidaire, junto a Jesús Montané Oropesa y Luis Santa Coloma,
195
su oficio era mecánico de refrigeración, fue delegado del PCC (Ortodoxo).
Reclutó a numerosos jóvenes entre ellos a: Gerardo Sosa Rodríguez y Ulises
Sarmiento Vargas, este último de solo 16 años, trabajador sin filiación política,
pero de madures ideológica y convicción política.

GRUPO SAN LEOPOLDO: El organizador fue Reinaldo Benítez Nápoles, quien


vivía en la casa de huésped de San Rafael no. 315 entre Rayo y San Nicolás,
se distinguió desde el golpe de estado por su combatividad. A través de Ñico
López, recibió la orden de constituir el grupo de su barriada, Llegó a reclutar a
15 miembros incluyendo a Carlos González Seijas e Israel Tápanes Vento.

GRUPO DEL PARQUE DE LOS LEONES: Su jefe fue Juan Manuel Almejeiras
Delgado “MEL” era el más pequeño d un humilde hogar de nueve hermanos.
Laboraba como taxista en un Chevrolet arrendado del año 1948. Junto a sus
hermanos trató de nuclear en grupo de combatientes luego del fracaso del
Movimiento Revolucionario. Integrantes de su equipa desarrollando la acciona
de quemar una bandera del 4 de septiembre en el cine Belascoain .Recluta para
el Grupo del Movimiento a: Pablo Cartas Rodríguez, Roberto Mederos
Rodríguez, Félix Rivero Vasallos, Gerardo Antonio Álvarez Álvarez y Osvaldo
Socarras Martínez entre otros. El lugar principal de reuniones del grupo fue el
parque de los Leones, aunque también contactaban con frecuencia en el Parque
de la Fraternidad.

GRUPO DE LA PLAZA DEL VAPOR: Su espigado jefe y miembro de la


Dirección del Movimiento, fue Antonio López Fernández, “Ñico”, quien laboraba
como dependiente en la Ten- Cents de Galiano. Aglutinó en este grupo, entre
otros a los hermanos Ibrahim y Elpidio Sosa González, Adalberto Ruanes
Álvarez, Armando Arencibia García y Antonio Darío López García.

LA HORA “0”, EL VIAJE A SANTIAGO

Los combatientes del Movimiento sabrían que se preparaban para una acción
armada para derrocar al régimen, pero no sabían el día, ni lugar. Llegaba la hora
“O” debían despedirse de su familia, bajo cualquier pretexto y, sin preguntar
incorporarse al transporte que se les ordenara.
Fidel desde el viernes 24 de Julio se mueve continuamente en dos direcciones,
los apartamentos de Abel Santamaría (“25 y O) y Melva Hernández (Jovellar
107) lo que demuestra la importancia histórica de estos dos edificios…

El grupo de San Lázaro, a través de su jefe Vicente Chávez recibe la orden de


movilizar a equipo para el día 24 de Julio. Por supuesto no podían ser todos los
compañeros. Los seleccionados fueron: Gerardo Sosa y Ulises Sarmiento. Se
les convoca para O y 25. Allí Vicente recibe la orden de que se incorporará con
el joven Ulises al carro donde se hallaba al frente Boris Luis Santa Coloma,
Gerardo Sosa iría en otro vehículo.
196
Boris recoge en la madrugada a Orbein Hernández y Manuel Suardíaz y sigue el
mismo trayecto; se hospedan en el Hotel Rex frente a la plaza de Marte en
Santiago de Cuba, el 25 por la tarde.

Del grupo de San Leopoldo, Reinaldo Benítez le da la orden a Tápanes y a


Carlos González que debían estar listos para salir a una práctica a las ocho de la
noche del día 24. A las ocho llega Benítez; la contraseña era “un pañuelo
blanco en una mano” Los recogió Gildo Fleitas, que venía manejando su auto.
Había recogido anteriormente a Gerardo Sosa y Amelio Ferrás.

De ahí se dirigieron a Consulado No, 109, unas oficinas donde trabajaba Gildo,
recogieron un Latas de aceite y unos discos con las grabaciones del Himno
Nacional e Invasor y el último discurso de Chibás conocido como “EL ULTIMO
ALDABONAZO”. El viaje trascurrió normalmente, al llegar a Matanzas penaron
que sería allí, pero continuaron viaje, almorzaron en Camagüey, en casa de la
hermana de Benítez. Todos los puentes estaban custodiados y chequeaban los
carros los soldados. Gildo se había conseguido una banderita del 4 de
septiembre y cuando lo paraban decía.- Somos de la Juventud del “P: A: U.” (11)
Y los dejaban seguir después de Guaímaro vieron el carro de Tizol parado, este
conversaba con Gildo y allí hacen un cambio de compañeros, sosa pasa al de
Tizol y Victor Escalona pasa al de al de Sosa recuerda que en el carro de Tizol
iba un joven recitando una poesía que titulaba “Ya estamos en Combate”, era
Raúl Gómez García, Gildo y sus compañeros de viaje llegaron a Santiago tarde
en la noche del día 25; se detuvieron en la Plaza de Marte para buscar el
contacto. Las congas en la calle, el ambiente era de fiesta. Se celebraban los
carnavales en Santiago. Fidel sorprende a Guido Fleitas arrullando en una
conga. Poco depuse el jefe saludaba allí también a Benítez, Tápanes, González
Seijas, Victor Escalona y Gerardo Sosa.

El grupo del “Parque de los Leones”, Salio de La Habana el día 24 en el carro


manejado por Juan M. Almejeiras. Este carro el lo tenía arrendado a un
particular y era el que usaba para el alquiler, en el traslado al grupo completo.
Juan Manuel recogió en su casa a Pablo Cartas, en el auto que venía Gerardo
Álvarez. Después recogió a Mederos también en su casa. No conocemos donde
montaron a Félix Rivero y Osvaldo Socarrás .Se desconoce las incidencias de
este grupo en el trayecto del viaje pues todos fueron asesinados después del
asalto. Se hospedaron en el Hotel Rex pues allí apareció la cámara fotográfica y
una gorra que llevaba Roberto Mederos.

El grupo de “La Plaza del Vapor” que dirigía Ñico López fue citado por este para
que se reunieran en el domicilio de Antonio Darío López en la Calle Dragones
no. 216 entre Galiano y Águila al mediodía del día 24. Desde temprano
esperaron allí, hasta que llegó Ñico con Ibrahim Sosa quien presentaba una
herida en una mano, la cual se había producido por un disparo que se le escapó.
197
Esto le impidió participar en el asalto. De ahí, Raúl Martínez Arará los llevó hasta
la casa de su hermano Mario en La Habana Vieja y después a su casa en la
calle Aguacate entre Teniente Rey y Muralla desde donde partieron entre las
seis y las nueve de la noche. Salieron en un carro que iba manejando Mario
Martínez Arará, que fue el que los llevó hasta Bayamo.

Durante el viaje Antonio Darío y Adalberto Ruanes amenizaron el viaje con


guitarras y filarmónicas. El día 25 almorzó en Cauto Cristo y coincidieron con el
grupo que llevaba Gildo Fleitas, ambos grupos siguieron sus respectivos
caminos. En Bayamo dieron un paseo a pie sin despertar sospechas. Allí se
encontraron frente a un garaje con Fidel y Tizol, pero por discreción no hablaron
con ellos. Después se dirigieron al albergue por la noche.

El grupo que dirigía Raúl de Aguiar de Cayo Hueso viajó a Santiago de Cuba en
el tren de la noche del 24 de Julio. En el mismo tren viajó Antonia Mondejar, una
amiga intima de la familia de Raúl de Aguiar quien afirma más tarde que se
encontró con Raúl y que por el boletín que llevaba supo que iba para Santiago
de Cuba, este le dijo que iba a pasear a los carnavales. Todos los que iban en el
tren se hospedaron en el hotel “Perla de Cuba”, un empleado de dicho hotel
reconoció una foto de Andrés Valdez que, después del asalto, le enseñó el
padre de este y manifestó que ese joven había estado hospedado allí.

Aunque no integrando grupos en este municipio hubo compañeros que salieron


de aquí. Raúl Castro, Pedro Miret y Abelardo Crespo eran estudiantes de la
Universidad y vivían en una casa de huésped de la calle Neptuno No. 914 esq.
Aramburu en el Barrio de Cayo Hueso. Estos jóvenes salieron de Centro Habana
para la cita en el Moncada. Raúl escribió un año más tarde en el presidio de
Islas de Pinos, precisamente el 24 de Julio lo siguiente.

“En compañía de Pedro Miret y Abelardo Crespo fui anoche a una fiesta
familiar y por motivos de unos jaiboles me dolía la cabeza…- era viernes.
Miret había salido muy temprano y cuando regresó al mediodía y
encontrarme con dolor de cabeza y aún en el cuarto, bajó a la calle y
regresó con un jugo de manzana insistiendo que me lo tomara pues tenía
que curarme enseguida… no obstante sus palabras, así como la seriedad
de su rostro me hicieron pensar en algo raro recibí una llamada telefónica
de José Luis Tasende, diciéndome que me mantuviera en la casa y
esperara otra llamada de él que tal vez pasaría a verme. Ya no quedaba
lugar a dudas, la “Hora 0” había llegado… (12).

198
ATAQUE Y DESTINO DE LOS COMBATIENTES

La llegada a la gran Granjita Siboney de los distintos grupos fue escalonada, ya


la entrada de la noche del día 25 de Julio, venían de distintos albergues que con
anterioridad Abel y Reanto habían preparado, otros no se alojarían en ningún
lugar, como los que viajaron en el carro en el carro de Gildo Fleitas, el del
Ernesto Tizol, el de Fidel y el de Mario Muñoz.

Abel Santamaría Cuadrado.

Las mujeres plancharon los uniformes y los


primeros que llegaban preparaban las armas.
Se habían traído colchonetas que se tiraron en
el suelo para que descansaran todos antes de
la acción… “Pero allí nadie podía dormir”.
Todos estábamos conscientes de que la hora
había llegado y cada cual pasaba revistas a
sus recuerdos y pensaba en sus familiares
queridos, que habían quedado en La Habana,
sin saber que se preparaba el ataque, mucho
menos, conocer los móviles que nos habían
llevado a Santiago.

Fidel había llegado como a la una de la


madrugada y después de cambiar impresiones
con algunos, volvió a salir pidiéndole a Pedro
Trigo que lo acompañara, posteriormente regreso con Abel, el doctor Mario
Muñoz y Gildo Fleitas con el grupo que llevaba.

Cerca de la hora programada para el asalto, 5:15 a.m… los reunió a todos y les
explicó el “plan a seguir”. “Podrán vencer dentro de unas horas, o ser
vencidos, pero de todas maneras, óiganlo bien compañeros, de todas
maneras este movimiento triunfará. Si vence mañana, se hará más pronto
lo que aspiró Martí. Si ocurriera lo contrario, el gesto servirá de ejemplo
al pueblo de Cuba, a tomar la bandera y seguir adelante. El pueblo nos
respaldará en oriente y en toda la Isla; jóvenes del centenario del Apóstol,
como en el 68 y en el 95, aquí en Oriente damos el primer grito de libertad
o muerte”.

“Ya conocen ustedes el objetivo del plan. Sin duda alguna, es peligroso y
todo el que salga conmigo de aquí esta noche debe hacerlo por su
absoluta voluntad. Aún están a tiempo para decidirse. De todos modos
199
algunos tendrán que quedarse por falta de armas. Los que están
determinados a ir den un paso al frente. La consigna de matar, sino por
última necesidad.”
Los que plantearon no ir al combate fueron separados del grupo y aislados en un
cuarto. Como Gerardo Sosa había llegado con parte de ese grupo en el auto de
Tizol, también fue aislado, pero al llegar Fidel a preguntar si insistía en su
determinación respondieron que sí, pero Sosa contestó: “Yo si voy”

Sitial Moncada.

Fidel distribuyó a los grupos que irían al


Hospital Civil y a la Audiencia y pidió
voluntarios para el carro de la vanguardia
que atacaría al campamento por la posta
tres. Todos dieron un paso al frente, pero
él seleccionó a los 8 que realizarían la
acción.

Designó a Abel para dirigir al grupo que


tomaría el Hospital Saturnino Lora, creyó
que ese lugar estaría más segura su vida,
para que si él caía se quedara de Jefe del
“Movimiento”, por las excepcionales
cualidades de Abel. Este protestó, pero al fin Fidel lo convenció.

Lester Rodríguez iría al frente del grupo que tomaría al Audiencia, del cual
formaba parte Raúl Castro.

En medio de los preparativos, todos poniéndose sus uniformes, tomando las


armas que le designaron, Alejandro Ferrás cogió una pistola de encime de una
mesa creyendo que estaba descargada y se le escapó un tiro que se incrustó en
el techo. Fidel lo recriminó por ello.

Fidel en el momento d la salida se dirigió a los tres compañeros del grupo de


San Leopoldo: Benítez, Tápanes y Carlos y les dijo:- Monten en ese carro, van
conmigo. El carro fue manejado por él y sería el segundo del grupo que
atacaría el campamento. El primero fue el que atacó la posta tres.

Los integrantes del grupo de San Lázaro fueron en la máquina manejada por
Boris Luis, Ulises, Chávez y Sosa y pudieron llegar al combate.

El grupo de Lucena fue completo en otro auto…, el grupo del Parque de los
Leones fue en el mismo auto que había salido de La Habana manejado por Juan
200
Manuel Ameijeiras. Los destinados para atacar desde el hospital Civil, fue el
segundo en salir de la Granjita, detrás del auto de Abel.

La perdida del factor sorpresa y otras adversidades determinaron el revés táctico


militar en el Asalto al Cuartel Moncada. Otro tanto ocurría en el ataque al Cuartel
Carlos Manuel de Céspedes de Bayamo...

Parque de los leones.

El grupo de la Plaza del Vapor fue dirigida por


Ñico López había llegado a Bayamo desde el día
25 por la tarde. Se hospedaron en el Hotel Gran
Casino, en gestión hecha previamente por Renato
Guitart.

El plan de Bayamo se basaba también en el factor


sorpresa. Un ciudadano de la localidad, conocido
de la guarnición debía llegar al posta principal
acompañado de Raúl Martínez, vestido de
sargento. Mientras conversaba un grupo
penetraría para conminar a la rendición al personal
de guardia. En tanto en el fondo por una puerta
que se suponía abierta, debía penetrar el resto de
los asaltantes. Sin embargo el individuo que debía
acompañar a Raúl, pidió autorización “un momentito” para ir a su casa y nunca
regresó.

Tarja que recuerda a los combatientes del Moncada del


barrio de Cayo Hueso, está situada en el parque Trillo.

Tuvieron que alterar el plan, determinando


atacar por la caballeriza. A las 5:15 am. salieron
al ataque, pero aquello no era como pensaban,
todo estaba rodeado con alambres de púas, y
cuando lograron penetrar un montón de latas
vacías los delató. La posta les dio el alto y
aunque todos le dispararon, eran humildes
escopetas calibre 22; que al parecer fueron
bondadosas con los soldados. Durante media
hora hubo un intercambio de proyectiles,
incluyendo una ametralladora de alto calibre que
los barría, hasta que los asaltantes decidieron
retirarse.

201
Si el plan fracasaba, Fidel había dado la orden de regresa a la Granjita Siboney
para de allí dirigirse a las montañas y proseguir a la lucha. Del grupo que
inicialmente reagrupó Fidel reiteró irse a las lomas. Voluntariamente le
acompañaron diecinueve combatientes, entre ellos Reinaldo Benítez, que se
encontraba herido, e Israel Tápanes.

Todos los integrantes del grupo del Parque de los Leones, dirigidos por Mel
Amejeiras, destinados al Hospital Civil, fueron apresados al concluir el combate
y asesinados. Del resto unos lograron evadir la fuga pública y otros fueron
ubicados, detenidos y asesinados, como caso del Elpidio Sosa.

En este lugar, donde hoy se


encuentra el Parque Sergio
González López, “El Curita”,
se encontraba el mercado
conocido como Plaza del
Vapor, punto de reunión de
un grupo de conspiradores de
la lucha revolucionaria contra
la dictadura batistiana.

Gerardo Sosa y Ulises Sarmientos se encontraron y buscaron la carretera


central, querían dirigirse hasta Palma Soriano ya que allí Sosa conocía a unos
conocidos del expreso Amaro, pensaron pedirles ayuda para que los trasladara
hacia La Habana. Por el camino se encontraron con Gabriel Gil, se pusieron de
acuerdo en decir que habían ido a los carnavales y que jugando lo habían
perdido todo. Al llegar al cuartel del Cobre estaban registrando, ya los iban a
dejar ir cuando l vieron una mancha de sangre en la camisa a Gil, los cogieron
presos y los llevaron al Cuartel Moncada, torturándolos salvajemente y
amenazándolos constantemente que los iban a matar. Al fin los presentaron al
Vivac y después los llevaron para la cárcel de Boniato.

Vicente Chávez logra escapar hacia La Habana, llegó al otro día a su trabajo y
por la tarde lo fueron a buscar por sospechoso, lo tuvieron preso un tiempo en
La Habana hasta que lo llevaron a Santiago para sentarlo al juicio.

Isidro Peñalver y Humberto Valdés Casañas también fueron apresados en


Santiago, negaron los cargos, pero los llevaron a juicio.
202
Armelio y Antonio Ferrás cuando se dio la orden de retirada se internaron en las
calles de Santiago buscando la casa de unos familiares, hasta allí llegaron a la
calle Corona entre Marina y Enramada, estaban preocupados por la suerte del
resto de sus compañeros y de su hermano Alejandro, al poco rato llegó este a la
casa y lograron que un familiar los llevara en máquina hasta Holguín, dijeron
cuando lo registraban que iban a Jíbara al día del Ibarreño ausente, allí tomaron
un ómnibus que venía de Banes y así llegaron hasta La Habana.

Tápanes y Benítez continúan con el grupo de Fidel, hasta que este viendo la
tropa extenuada decide dividirnos en pequeños grupos para poder burlar mejor
el cerco. Había dos heridos: Benítez herido en el asalto y Mario Lazo que se
hirió al escapársele un tiro. Se separaron seis compañeros: Tápanes al frente
del grupo, Montané que había perdido sus espejuelos y tenía dificultades para
caminar, Benítez Lazo, Severino Rosell y Rosendo Menéndez. Más adelante en
una lechería dejaron a Mario Lazo y Rosell, allí curaron a Lazo y después
lograron que fuera para Santiago y lo escondieron en distintas casas. Benítez y
Tápanes se separaron después también de Montané y Menéndez hasta que en
las orillas de un riachuelo, rodeados por el ejército fueron apresados y a las
pocas horas de estar en el Vivac sintieron una algarabía y era que habían traído
a Fidel. Fueron llevados después al cuartel Moncada y allí torturados.

La situación más difícil de analizar es la de los jóvenes del grupo de Cayo


Hueso. A los pocos días del ataque salió en los periódicos la noticia de la muerte
de José de J. Madera Fernández que había caído combatiendo en el Cuartel
Moncada.

De sus otros compañeros Raúl de Aguiar, Andrés Valdés y Armando Valle,


tenemos en testimonio cuando en el juicio Raúl Castro pidió permiso para hacer
una declaración:- “Tres miembros de este movimiento - dijo Raúl- Raúl de
Aguiar y otros dos cuyos nombres en este momento no recuerdo estuvieron
en casa de mi familia en Birán, buscando recursos para salir de la
provincia, ahora aparecen muertos en el Cuartel Moncada”.

Más tarde Fidel en su defensa en la sala del Hospital donde lo juzgaron


denunció: “Cerca del río Cauto, en un lugar conocido por Barracas yacen
en el fondo de un pozo ciego los cadáveres de Raúl Aguiar, Armando Valle
y Andrés Valdés asesinados a media noche en el camino de Alto Cedro a
Palma Soriano por el Sargento Montés de Oca, jefe del puesto de mando
del cuartel Miranda, el cabo Maceo y el teniente de Alto Cedro.

En varias ocasiones, ha aparecido en la prensa, que Raúl de Aguiar,


Andrés Valdés y Armando López fueron asaltantes en el cuartel de
203
Bayamo y posteriormente asesinados. Pero los testimonios de sus
familiares y lo investigados por José M Leiva, parece ser que no pelearon
en Bayamo sino en el Moncada. René de Aguiar había peleado e el
Moncada y que él cubrió la retirada.”
Ramón Castro Ruz le relató a Carmen, hermana de Andrés Valdés que estaba
junto a Raúl Aguiar y Armando Valle, después del asalto habían llegado a
Macané donde vivía y le manifestaron que habían peleado con Fidel en el
Moncada, que un compañero de ellos, José Madera Fernández había muerto en
el combate y ellos se habían equivocado y en vez de entrar en el cuartel, habían
entrado en el Hospital militar. De Mercané, Ramón Castro los llevó hasta Birán,
casa de sus padres adonde Raúl de Aguiar estaba acostumbrado a ir de visitas,
ante del asalto, por sus relaciones estrechas de amistad y compañerismos que
tenía con Fidel. Fueron ocultos en un lugar seguro pero insistieron en regresar a
La Habana y les facilitaron ropa y dinero. Luego aparecerían también como
muertos en el combate.

De los asaltantes de Bayamo, el grupo integrado por Ñico López, Calixto García,
Antonio Darío Lòpez, y Armando Arencibia en la retirada, cogieron una máquina
que intentó manejar Ñico López, cosa que no sabía, salieron dando saltos y
cerca cayó en un hoyo, tuvieron que abandonarla y salir a pie. Al llegar a un
parque se tropezaron con un yipi de la policía, Ñico le disparó y el oficial que
venía en él, Jerónimo Suárez Camejo, cayo muerto, esta es la única acción en
que se usaron las armas en la retirada.

Los cinco integrantes de la Plaza del Vapor lograron salir de Bayamo, ayudados
por vecinos del lugar y llegar a la habana, se mantuvieron ocultos hasta que se
exiliaron.

LA CAUSA NO. 37/1953 Y BALANCE DEL MONCADA

El juicio contra los asaltantes de los cuarteles Moncada en Santiago De Cuba y


Carlos Manuel de Céspedes en Bayamo fue radicado en la causa no. 37 y se
inició el 21 de Septiembre de 1953, y se terminó el 6 de octubre del mismo año.
En la primera sesión del juicio Fidel pidió asumir su propia defensa y ante las
interrogaciones del fiscal denunció los crímenes cometidos. A la tercera sesión
del juicio no lo trajeron más alegando que estaba enfermo. No les convenía a los
asesinos de tantos jóvenes valientes, decididos, patriotas, que habían sido
capaces de enfrentar a una fuerza superior en armas, con solo escopetas de
caza. Conocer de labios del propio Fidel, los crímenes cometidos y de probarles
en sus interrogatorios sus asesinatos de una forma pública.

204
Fue juzgado solo, junto con Abelardo Crespo, que por estar mal herido no pudo
estar junto a sus demás compañeros en la Audiencia con el resto de los
encartados, muchos de los cuales nada tuvieron que ver con el asalto.

A muchos de los moncadistas detenidos no se le podía probar realmente su


participación en los hechos, por eso, por orientación de Fidel, se decidió que los
menos comprometidos se declararan inocentes para que desde afuera pudieran
continuar ayudando clandestinamente a la naciente gesta, el resto debía
denunciar los crímenes, dejare expuesto bien claro el porque de la acción y
probar su no-vinculación con elementos politiqueros, corrompidos, deshonestos,
etc.

En los días siguientes fueron interrogados los inculpados; negaron su


participación en los hechos, procedentes del actual Centro Habana: Vicente
Chávez Fernández, Humberto Valdés Casañas, Isidro Peñalver O´Reilly,
Gerardo Sosa Rodríguez y Ulises Sarmiento Vargas, Reinaldo Benítez Nápoles
e Israel Tápanes Vento se declararon culpables.

A Israel Tápanes Vento lo llamaron:


-¿ “Lo embullaron a Usted, a venir a asaltar el cuartel?- le preguntó el
fiscal.
Vine espontáneamente – respondió - con la intención e sacrificar mi vida
por sacar del lodo en que las ambiciones han sumido a Cuba, eso es todo
en cuanto tengo que decir, porque era un simple soldado, pero quisiera
denunciar algo… dijeron que iban a matarme pero lo hacían para
sacarme de mis casillas... unos de los militares que me conducían preso
me despojó de mis pertenencias, en la primera sesión de este juicio vi a un
soldado con mi sortija que tiene la insignia de masón.
Benítez y Tápanes fueron condenados a 10 años de prisión. Fueron los únicos
combatientes de Centro Habana que estuvieron en el presidio de la Isla de
Pinos.

No fueron encartados en el juicio por no ser presentados los siguientes


compañeros: Alejandro, Antonio, Amelio Ferrás Pellicer, Armando Arencibia,
Antonio “Ñico López”, Calixto García, Adalberto Ruanes, Antonio Dario López y
Carlos González.

Al finalizar la participación de jóvenes de la “Generación del Centenario”, del


territorio de Centro Habana en asalto a los Cuarteles Moncada de Santiago de
Cuba y Carlos Manuel de Céspedes de Bayamo, nos encontramos, que de los
120 compañeros distribuidos en 15 automóviles que salieron de la Granjita
Siboney hacia el Moncada, más Julio Trigo que se había quedado en Santiago,
205
enfermo se le unió incidentalmente en el Hospital Civil para pelear con los que
allí se encontraban, participaron de este actual municipio, 22 asaltantes lo que
representó un 19%.

En Bayamo participaron en la acción 25 compañeros, dos se negaron a hacerlo.


De centro Habana fueron 5 combatientes, lo que representó el 20%.
La fuerza de Centro Habana que participó en los asaltos representó casi la
quinta parte de los asaltantes, de 146 asaltantes salieron de Centro Habana 27.
Todos participaron en las acciones.

Muere en el asalto al Cuartel Moncada: José de Jesús Madera Fernández.


Son asesinados posteriormente:
• Elpidio Sosa González.
• Gerardo Álvarez Álvarez
• Juan Manuel Ameijeiras Delgado
• Pablo Cartas Rodríguez
• Roberto Mederos Rodríguez
• Félix Rivero Vasallo
• Osvaldo Socarrás Martínez
• Raúl de Aguiar Fernández
• Andrés Valdés Fuentes
• Armando Valle López

Estos fueron al combate conscientemente de que se podía vencer o morir, pero


iban contentos, satisfechos de cumplir con un deber que la situación de la Patria
les imponía, fueron a la acción consciente de que “No era el asalto a una
fortaleza para alcanzar el poder con la acción de un centenar de hombres; era
el primer paso de un grupo decidido para amar al pueblo de Cuba e iniciar la
revolución. Era el inicio de una acción para transformar todo el régimen político y
económico-social de Cuba y acabar con la opresión extranjera, con la miseria,
con el desempleo, con la insalubridad y la incultura que pesaban sobre la patria
y el pueblo.

Por aquellos tiempos Fidel decía: “Hace falta echar andar un motor pequeño
que ayude a arrancar el motor grande.” Los Jóvenes de la Generación del
Centenario Martiano en Centro Habana materializaron ese axioma con su
incorporación a tan noble causa.

ACCIONES Y PUBLICACIONES CLANDESTINAS DE 1955. LA LUCHA PRO-


AMNISTÍA

La gesta del Moncada había revitalizado la esperanza de una patria mejor en


hombres como Sergio González López, El curita, quien ya había decidido luchar
contra la dictadura batistiana y consagrarse a la lucha por la liberación nacional.
206
Junto a otro destacado combatiente, Humberto Torres Fonseca “Fonseca” edita
en su imprenta de Águila no. 618, en la Plaza de Vapor, 40 mil volantes
clandestinos. Aquí denunciaba los crímenes de la soldadesca batistiana en
Oriente y llama al pueblo “luchar junto a los valientes que se inmolaron
frente a una fuerza superior y bien armada” (13).

El ataque que a los cuarteles de Santiago de Cuba y Bayamo había desbocado


las ansias represivas del dictador. Y sin sospechar que la dirección de los
Moncadistas había abrazado realmente los principios del Marxismo Leninismo,
los acusa de “Comunista”. Pero a demás utiliza esa misma categoría para
calificar a casi todos los políticos de la oposición, bien fuera moderados
ortodoxos o auténticos insurreccionalistas. Por supuesto, contra los dirigentes
del Partido Socialista Popular (PSP),- identificados en verdad como comunistas-
el tono se hace más agresivo. Llegan a implicar a Lázaro Peña y a Joaquín
Ordoqui en los hechos del Moncada y deben comparecer ante los tribunales. El
periódico Noticias de Hoy, con su establecimiento en Desagüe Nros.108 y 110,
sufre nuevamente una brutal ocupación y cierre, así como las oficinas del
Partido.

Carta Semanal: Aparece como después de ser clausurado Hoy, y uno de los
primeros lugares donde se edita clandestinamente fue en la imprenta de
Manrique entre Reina y Salud. Unos meses después, con la misma máquina de
linotipo, lograban la reaparición de la Revista Fundamentos, debido a la
dedicación y talento de Fausto Ortiz Sotolongo, apoyado por Amador Allende y
Jorge García Gravalosa. Por estos tiempos se refrenda oficialmente lo que la
policía ya había ejecutado groseramente. El Gobierno dicta el Decreto Ley
No.997/953, prohibiendo toda actividad comunista.

Suponiendo que todo nuevo ajetreo anticomunista podía estar relacionado en la


situación revolucionaria promovida por los moncadistas.
Carta Semanal se apresura en reiterar que la línea táctica del Partido no está
relacionada con la lucha armada, haciendo comentario:

El camino escogido por Fidel Castro y sus compañeros es falso. Nosotros,


que apreciamos su limpieza moral y que estamos convencidos de su
honradez, tenemos que decir que el putsh, que la acción armada desesperada
y con categoría de aventura, no conduce a otra cosa que al fracaso, al
desperdicio de fuerzas, a la muerte sin objetivo.

Tenemos que decir eso, y convencer los jóvenes que piensan como ellos,
que el camino es el de la lucha de masas y la acción de las masas (14)

207
Luego de reconstruir el alegato de Fidel en el juicio del Moncada , al que titularon
“La Historia me absolverá, Angelito Plá, los Hermanos Ameijeiras y otros
combatientes de Centro Habana, se convierten en los primeros artistas en imprimir
y dar a conocer el documento a fin de que el pueblo supiera los verdaderos objetivo
de los revolucionarios, que en nada tenía que ver con el “putsh”, “o el quítate tú
para ponerme yo”, y mucho menos con la “Aventura”, a costa de la sangre de
patriotas.

Hermanos Gustavo, Juan Manuel y Ángel “Machaco” Ameijeiras Delgado.

El folleto se edita hacia el mes de octubre de 1954, en una imprenta que había en
el último tramo de la calle desagüe, casi esquina Ayestarán. La tirada es ampliada
en el linotipo de los Hermanos Ferrás Pellicer, en Lucena Nros.304 y 306. Logran
publicarse 27 500 ejemplares. Posteriormente, otro de los lugares donde se editó el
programa del Moncada sería en el Laboratorio Weil S.A (San Nicolás 60, entre
Reina y Salud), propiedad del Doctor Alberto Curra, publicista de ascendencia
árabe.

Sergio González López, “El Curita”.

Los múltiples comercios, centros recreativos y de servicio


en el centro de la ciudad, con intensos tráfico de personas
y vehículos, facilitan la actividad revolucionaria clandestina
y la distribución de la propaganda. Los hermanos
Ameijeiras participan muy activamente en la entrega de “La
Historia me Absolverá” En este sentido utilizaron como
puntos importantes de distribución las cafeterías “Naranja
(Virtudes 507) y el Café el “El Cuzco” (Belascoain y
Virtudes).

Desde fines de año1953 la Policía Nacional recibió


confidencias en el sentido de que planeaba desde hoteles y otros edificios altos del
centro de la ciudad, arrojar propagandas subversivas. El Coronel Conrado
Carratalà Ugalde, Jefe del Departamento de Dirección Central, ordenó al Inspector
del Segundo Distrito procediera a practicar, registros en varios, hoteles de su
demarcación, entre ellos: Manhattan (San Lázaro y Belascoain) San Luis
208
(Belascoain y Lagunas) y el Lincoln (Galiano y Virtudes), Igualmente a mantener en
máxima alerta, en movimiento de azoteas al personal de SERVICIO ESPECIAL,
destinado a la vigilancia y represión política.

Saludando el I Aniversario del Asalto al Cuartel Moncada, el 26 de Julio de 1954


cayeron finalmente cientos de volante desde el último piso del Ten Cents de
Galiano. La policía lograba capturar al agitador subversivo, se trataba de Raúl
Suárez, quien laboraba de mochila en la fuente de soda. Del Ten Cents de Galiano.
Es conducido al Departamento de Investigaciones. Allí era interrogado y golpeado
sin que lograran obtener información, sobre sus compañeros de lucha. Por esta vez
quedaba en libertad, pero fichado y sometido a vigilancia especial.

“Proyectan alterar el orden en los Ten Cents de la ciudad -decía otro


confidencial-, especialmente en el de San Rafael y Galiano, y en todos aquellos
lugares de gran afluencia de público. En la próxima semana pretenden llevar
a cabo un plan terrorista, sin que hasta el momento, se haya podido
determinar en que consiste dicho plan, aunque es presumible se trate de la
colocación de aparatos infernales en sitios y lugares escogidos al efecto” (15).

No estaban lejos de la verdad los informes de la red de chivatos del Coronel


Carratalá. El 28 de Enero, las valerosas compañeras del Frente Cívico de Mujeres
Martianas se propusieron desagraviar al Apóstol colocando una bomba en el
Centro Comercial de La Habana. Nadie mejor que las protagonistas de lo hechos y
Dirigentes Marxistas de las Martianas, para explicar como ocurrieron los hechos:

Era las 8 y pico de la noche, poca gente en la calle, el policía de tráfico e’ase
de posta, N del A de Galiano y Neptuno estaba a media cuadra de nosotras.
Muy ajena a todo, en la acera de la tienda “La Filosofía” había una mujer
que se dedicaba a la venta de cucuruchos de maní. Atenta a su mercancía no
reparaba en nosotras. Decidimos poner la bomba en la peletería frente a la
“Época”. Enganchábamos el paquete al picaporte de la puerta, prendimos la
mecha y echamos a andar de nuevo desde San Nicolás hacia el mar.

Nos detuvimos en la esquina parapetadas en la puerta de una casa, contando


los minutos para oír la detonación o de lo contrario, pasado el tiempo de
duración de la mecha, regresar a revisarla.

¡Al fin sonó la explosión!

Algún que otro vecino, pensarían que esta vez sonaba más fuerte el cañonazo
de las nueve.
209
Sólo que, en ese momento, vinieron abajo ¡¡ catorce vidrieras!!! (16)

A penas dos meses antes de esta acción la policía informaba sobre la ocupación de
armas y explorarlos en la casa de la calle Salud marcada con número 222 y en
Malecón no. 411. Acusaban a los hermanos Armando y Enrique Hart, Rúben
Aldama. Rafael Dujarte, José Prieto, los Hermanos Mario y Alfonso Hidalgo,
Faustino Pérez, y hasta el combatiente Villarejo Ifraín Alfonso Liviano, “Cheché”. A
todos se les acusaba de pertenecer a Movimiento Nacional Revolucionario (MNR).
Siguiendo una política efectista, para que los combatientes, jóvenes y pueblo
desertaran de su lucha contra el régimen, la policía convocaba a la prensa para que
publicaran las fotos de los “Terrorista” junto a todo un arsenal de bombas y
granadas. En no pocos casos se trataba de elementos incriminatorios que se
añadían para causar un mayor impacto, tanto a los letrados como en la opinión
pública. El 20 de Abril de 1955, el Departamento de Investigaciones de la Policía
Nacional hacía publicar la actividad “Terrorista” de los jóvenes Efigenio Ameijeiras
Delgado, Fernándo Sánchez Camejo y Prisciliano Martín Vidal. Decían haber
detectado el Centro de Conspiración Clandestina, San Miguel no. 628, donde
hallaron 15 granadas.

La compañía Pro-Amnistía es una de las luchas fundamentales en esta etapa. Aquí


nuevamente se distingue Sergio González “El Curita” El dictador adoptaba poses
democráticas, a fin de legitimarse en el poder como Presidente constitucional de la
República, había venido concediendo indultos a distintos elementos de la
oposición, excluyendo deliberadamente a los moncadistas. Es entonar que “El
Cura” y otras fuerzas Revolucionarias, desarrollan una intensa campaña,
argumentando que era falso el lenguaje edulcorado que estaba usando Batista,
sino concedía la libertad a Fidel y a sus compañeros. La Juventud Socialista
expresaba:

“El gobierno ha excluido a Fidel Castro y demás jóvenes prisioneros por los
hechos del Moncada y los mantiene en las peores condiciones carcelarias en
la odiosa prisión de la Isla de Pinos, donde Fidel Castro permanece solo e
incomunicado (…) llamamos a los jóvenes y organizaciones juveniles de
todas las tendencias a coordinar acciones de protesta, mítines relámpagos,
lemas, demostraciones, etc., exigiendo la libertad de Fidel Castro y de sus
compañeros”.
El parque Trillo, el de los Leones y la Fraternidad se vistieron la “peñas” a favor de
los moncadistas Gustavo Ameijeiras llegó a crear varios comité pro-amnistía, con
un fuerte movimiento popular en los medios más humildes de la barriada.

210
Junto a la activa imprenta de El Curita en la Plaza del Vapor, iba a sumarse en la
calle Concordia un modesto tabloide llamado La opinión libre. Lo promovía el
padre del combatiente del Moncada, Juan Almeida y aunque el Departamento de
investigaciones no tardo en detectarlo y destruirlo, el objetivo se cumplía: Fidel
Castro y los Moncadistas eran liberados el 15 de Mayo de 1955. Una nueva etapa
en la historia de la lucha insurreccional se había abierto “EL MOVIMIENTO”,
fundado por Fidel Castro, a partir de ahora tendría nombre: “MOVIMIENTO 26 DE
JULIO”.

ORGANIZACIÓN DEL MR-26-7. EL CURITA Y LAS BRIGADAS DE FONTÁN

La reunión constitutiva del movimiento Revolucionaria 26 de Julio (MR-26-7), se


efectúa el 12 de junio de 1955. Acompañan a Fidel Castro en la Dirección Nacional,
varios compañeros que residían en Centro Habana a saber: Melva Hernández
(Jovellar 107) Pedro Aguilera González (Neptuno, entre Escobar y Lealtad) y Pedro
Miret Prieto (Neptuno 914).

Gerardo Abreu, “Fontán”.

El periódico LA CALLE, con sede en el viejo caserón


de San José no. 458, se había convertido en tribuna
para Fidel. Allí, el Director, Luis orlando Rodríguez, le
había asignado un buró de trabajo. Iba en horas de la
tarde y salía en la noche con los primeros ejemplares
del día. Esta vía legal de lucha fue posible hasta que
clausuraran el periódico el 16 de junio. En el último
artículo que pudo publicar en LA CALLE, escribió
“ESTAREMOS SIEMPRE JUNTO A TODA
CAUSA JUSTA, CON LOS POBRES DE ESTE
MUNDO” (17).
La primera imprenta que disparó el MR-26-7 fue la de Sergio González, “El Curita”,
en la Plaza del Vapor. Fidel se reunió en varias ocasiones con él en el local del
Partido Ortodoxo de la calle San Lázaro y en las oficinas d Consulado no. 24.
Sergio le manifestó que su imprenta estaba al servicio de la revolución. Cuando el
8 de agosto de 1955 se escribió el manifiesto no. 1 del 26 de Julio al pueblo de
Cuba, que impreso en la Plaza del Vapor, como el no. 2, traídos personalmente por
Jesús Montané desde México.

Posteriormente, es también en la imprenta de El Curita donde comienza a editarse


la primera publicación periódica del MR-26-7. Se llamó ALDABONAZO, en honor a
quien fuera el líder de la Ortodoxia, Eddy Chibás. La policía hizo allí un registro el
16 de agosto de 1956, en busca de pruebas sobre los cientos de volantes que se
difundieron al conmemorarse la muerte de Chibás. No hallaron los elementos que
211
buscaban, pero de todas formas el sitio dejó de tener seguridad necesaria para
reunirse y otras operaciones combativas que allí se realizaban.

Ñico López, fue el encargado de organizar el MR-26-7 a nivel nacional. Se haría en


principio sobre la misma estructura del PCC (Ortodoxo) en la base, para así
facilitar la captación de miembros, luchar directamente contra las componendas
electoralistas y desarrollar la insurrección armada aún a costa de la propia vida,
conciente se que se había agotado toda posibilidad legal.

Decisivo sería el Frente Obrero, sobre todo en Centro Habana por su gran cantidad
d tabaquerías, obreros gráficos, de servicios, y del transporte, Aquí jugaría un
importante papel también Sergio González El Curita, quien apostaría sus
experiencias y contactos, uno dirigente del transporte, y del Sindicato provincial.
Hasta en la Cuban Telephone Company (Águila y Dragones) se constituyó un
importante núcleo 26 de Julio, con una alta incidencia durante toda la lucha
insurrecional.
Antonio López Fernández, “Ñico”.

La brigadas Juveniles del MR-26-7 se organizaron,


sobre la misma estructura territorial de la Juventud
Ortodoxa, por distintos (barrios), pero con objetivos y
dirección propios. Aquí comenzaría a distinguirse otra
figura de leyenda en la Historia de la lucha
insurrecional Habanera: GERARDO ABREU,
“FONTAN”, “Fontán” fue un apodo de muchacho, que
identificara como seudónimo en la lucha. Su único
apellido fue Abreu. Aunque había nacido en Santa
Clara desde los 11 años se establece en Centro
Habana, de un hogar muy humilde, de tez negra, no
pudo alcanzar gran instrucción académica. Sin
embargo había adquirido cultura de forma autodidacta
en sus inquietudes artísticas, fue declamador de varios versos afroCubanos, actor,
cantante, bailarín; fue protagonista de aquellos que iban en un carro-autoparlante
por todo San Lázaro y hasta locutor de radio. Estuvo entre los jóvenes ortodoxo
que enfrentaron decididamente a la dictadura, pero además con virtudes
organizativas y un sorprendente nivel político.

La primera de las brigadas Juveniles que organizó el MR-26-7 fue la de La Punta,


su organizador y jefe fue Gerardo Abreu “Fontán”, un nutrido grupo de combativos
jóvenes le seguían: José Valladares Ortiz, Angel y Eusebio Noa, Aldo Rivero
Palenzuela “El Bromo”, Benito Peña “El Chino”, Raúl Cabrera, Rafael Peñalver “El
Rubio”; Norberto Hernández y otros.

212
Ñico López pronto confiaría en Fontán para dejarlo al frente de la organización de
las brigadas en la llamada “GRAN HABANA”.En el barrio de San Leopoldo se funda
un grupo Juvenil del 26 de Julio dirigidos por Julio Travieso Serrano; en la zona de
Manto-Arsenal es segundo Pérez Álvarez quien encabeza a los combatientes.
Humbertico Campos dirige a los jóvenes en La Victoria; Roberto Perdomo a los de
la zona de la calle Reina bajando hacia Neptuno…

Según testimonio del compañero René Rodríguez cuando Ñico quería


transmitirle una orientación a todos los barrios y concentrarlos en un punto,
Fontán citaba a los compañeros para el Malecón (…) los compañeros venían
acompañados por sus novias o esposas, como si estuvieran cogiendo fresco.
A veces desde el Prado hasta el Parque Maceo había pequeños grupos de
militantes del 26 de Julio. Entonces nosotros llegábamos, identificábamos a
los grupos, Ñico se sentaba, conversaba con ellos, les daba las orientaciones
y caminábamos; llegaba a otro grupo, y así transmitiríamos las
orientaciones. Todo esto era idea de Fontán...(18) .

Si bien que es cierto que Gerardo Abreu, Fontan por su condición de negro pobre
tuvo dificultades para moverse en los repartos de la Burguesía, todo lo contrario
ocurría en los barrios y medios más humildes, que fue donde se nutrieron
fundamentalmente las brigadas y sus cuadros. Fontán vivió en principio en el tercer
piso de un solar, en Galiano no. 63, entre Trocadero y San Lázaro. Aunque allí
vivían hasta dos soldados y un miembro de la Marina de Guerra, todos lo querían, y
aunque sabían en los pasos que andaban, le protegían solidariamente. Recordaba
el difunto Segundo Pérez que “cuando el ataque al cuartel Goicuría de
Matanzas – el 29 de abril de 1956- compañeros querían información y acudían
al solar para hablar con Fontán. Ese día él no se encontraba… El caso fue
que al solar llegó un compañero nuestro, muy simpático, que había ido dos o
tres veces ya a buscarlo. La viejita encargada le decía: ¿Quiere dejarle algún
recado?”, “No, no yo vuelvo luego”; pero al poco rato estaba allí otra vez, y
Fontán sin aparecer. En uno de esos viajes, el compañero sin poder
aguantarse, se paró en la escalera y le dijo a la anciana: “bueno mire…
¡Dígale a Fontán que en Matanzas se está combatiendo y que cuando
vamos a empezar nosotros!: Todo eso lo dijo en alta voz, y todo el mundo
tiene que haberlo oído. Después Fontán riéndose me lo contaba… (19)
A raíz de este singular incidente, y como medida de seguridad – allí vivía además
su hermana Magali Fontán y Segundo Pérez se dan a la tarea de alquilar otro
cuarto barato. No sin dificultades, regateándolo el precio a un español propietario,
Fontán logra mudarse. Se trataba de otro reducido y caluroso apartamento, a pesar
de ser el último en los altos del edificio de Genios, entre Consulado e Industria, “El
213
Palomar”, fue el nombre con que se conoció este apartamento en los medios
revolucionarios. Serían por más de 15 meses uno de los centros conspiratorios más
importantes de la Ciudad.

La organización de las Brigadas Estudiantiles del MR-26-7 fue otro de las tareas
que desarrollo Gerardo Abreu “Fontán”, en este caso teniendo como segundo jefe a
Ramón Vázquez Montenegro. Debían crearse en las escuelas superiores y
especializadas, labor que comenzó a materializarse a finales de 1955. La primera
Brigada Estudiantil en constituirse fue en la Escuela profesional del Comarco de La
Habana, organizada por Enio Leyva.

Muchas de sus demostraciones en desfiles por Ayesterán hacia el Parque Central


tendrían incidencias en Centro Habana, así como en acciones de agitación y
sabotajes, lo mismo ocurrió la Brigada del Instituto de La Habana, muy
estrechamente relacionada en su quehacer revolucionario con áreas que hoy
conforman el municipio Centro Habana.

Andrés Rodríguez, de seudónimo “Cañeco”, de la zona de Reina, quien estudiaba


Derecho en la Universidad Masónica, organizó allí un importante núcleo estudiantil.
Naturalmente la mayor incidencia en el territorio la va a tener la Escuela de Artes y
Oficios de Belascoain. El jefe de la Brigada Estudiantil del MR-26-7 allí lo fue
Juvenal García Moré.

Ya existía un fogueo combativo a través del Movimiento Ortodoxo de superación


estudiantil (MOSE), que de hecho se incorpora a la brigada, fortalecida además con
numerosos estudiantes de la barriada de Cayo Hueso.

La labor financiera era también de suma importancia por la contribución que ofrecía
los preparativos de la expedición desde México Sergio González “El Curita” era
depositario del dinero con que eran sacados los pasajes por barco de los
combatientes seleccionados para la expedición. Raúl Suárez otro de los
organizadores de las brigadas juveniles, tubo la responsabilidad de recoger el
dinero por las brigadas y convertirlo en dólares a fin de remitirlos a México.

En cuanto al Frente Obrero del MR-26-7, junto a Sergio González se distinguían el


joven dirigentes sindical Evelio Rodríguez Curbelo, desde su centro de trabajo, la
tienda “Fin de Siglo” (Águila y San Rafael). Allí formó un Comité Juvenil de
Superación Sindical que combatió a la camarilla mujalista. Llegaron a utilizar
medios de radiodifusión, como la “Onda Hispanoamericana” donde se denunció la
corrupción imperante en la CTC oficialista y los atropellos de la tiranía.

La Huelga de los Bancarios de La Habana en la segunda mitad de 1955 que


promovida mayormente por la sección obrera del MR-26-7, lográndose extender
hacia dos medios como la industria tabacalera y la fábrica Pepsi Cola. Los Comités
de defensa de las demanda obreras y por la democratización de la CTC,
214
impulsados por el PSP, y la FEU, también contribuyeron al desarrollo de la huelga,
así como en la lucha a favor del proceso de unidad. A partir de 1956 se hace
patente la unidad obrero-estudiantil. En estos esfuerzos nuevamente tuvo una
activa participación el Sindicato de la Tienda “Fin de Siglo” dirigido por Evelio
Rodríguez Curbelo, toda esta labor culminaría más adelante con la creación del
Frente Obrero Nacional (FON).

Numerosas acciones desplegarían el MR-26-7. Quizás la primera de ellas fue


convertir la Ciudad en un Mural. Creyones hechos de cera y tinta negra para
zapatos, poblaron las paredes de los más céntricos lugares. Junto al “ABAJO LA
DICTADURA” se daba a conocer la nueva organización revolucionaria. También
las mujeres con sus creyones labiales escribían consignas en los cristales y
espejos de las tiendas y cines.

La quema de las banderas del 4 de septiembre en el Cine Fausto ejecutado por


“Fontán” y otros combatientes en el cine Fausto sea de gran impacto político,
igualmente en el cine Alcázar (Consulado y Virtudes) donde se pusieron cohetes en
los baños, se dio gritos contra Batista y cuando prendieron la luz, desde las lunetas
de los altos se lanzaron cientos de proclamas. En esta acción la policía irrumpió de
forma violenta, y con sus disparos fue herido en menor de edad, las Brigadas
Juveniles del MR-26-7 enfrentaron los tiros electoralistas desde el ceno de la
Juventud Ortodoxa y en los comicios celebrados el 30 de Junio de 1956.

A puñetazo, cuando fue necesario, se libró esta batalla política con éxito para la
causa revolucionaria e insurreccional.

Cuando se acercaban los días del Desembarco del Granma las acciones y
sabotajes se hacen más intensas. Sergio Gonzáles López “El Curita” proyecta
tomar la emisora radial H.E.R. Company (Reina y Ángeles) y hacer un llamado a la
huelga y a la agitación revolucionaria. Junto a Gerardo Abreu “Montan” juntos
prepararan cócteles MOLOTOV y otros implementos bélicos caseros. De
madrugada son incendiados no pocos de los grandes almacenes de la calle
Galiano. Muchos de sus dueños no escondían su apoyo a Batista.

La propaganda revolucionaria tuvo momentos actorcitas. La ciudad, y en especial el


centro de La Habana, se llenó de proclamas editadas mayormente en la imprenta
de la Plaza del Vapor. De los lugares más altos en cualquier momento aparecía
una lluvia de volantes con este impreso: ¡SEREMOS LIBRES O MARTIRES!

ACCIONES DEL DIRECTORIO REVOLUCIONARIO Y LAS MUJERES


MARTIANAS

El directorio Revolucionario (DR) surge a iniciativa de José Antonio Echeverría con


una vanguardia en el sector estudiantil revolucionario. Se concibe en principio como

215
una agrupación secreta, en función de garantizar la verticalidad y combatividad de
la Federación Estudiantil Revolucionaria (FEU).

El plan original de atacar el Palacio Presidencial y ajusticiar al dictador Fulgencio


Batista Zaldívar, partió de las organizaciones insurrecionalistas auténticas, y en
particular de un grupo de veterano combatientes, encabezados por Menelao Moras
Morales (20). Tanto la Triple A, de Aurelio Sánchez Arango, como la Organización
Auténtica, que respondía al Dr. Carlos Prío Socarras, disponían de altos recursos
financieros. Esto les permite introducir en el país gran cantidad de armas y
explosivos. Logran además, importantes contactos en los cuerpos armados, que se
comprometen a participar, junto a comandos civiles, en acciones capaces de
propiciar el vuelco político en cualquier momento.

Dentro de la Policía Nacional comprometen a varios factores, entre ellos un


importante enlace en el Cuartel Maestre de la División Central, sita en Salud y
Castillejo. Allí se atesoraban cientos de pistolas y ametralladoras Thompson,
carabinas M-1; miles de proyectiles y granadas de fragmentación con espoletas.

La triple A y la OA realmente tuvieron excelentes condiciones para materializar sus


planes. Sólo que evidentemente les faltó el propósito real de llevarlos a cabo. La
cúpula de estas organizaciones hacía movimientos efectistas de hombres y armas
para presionar a Batista y lograr arreglos politíqueros, pero sin llegar a una
insurrección popular.

El Directorio Revolucionario inteligentemente penetra a las organizaciones


insurreccionistas a fin de obtener los arsenales y captar para sí los elementos más
revolucionarios, honestos y combativos, que realmente existían en las filas
auténticas. Son los casos del propio Menelao Mora, Daniel Martín Labrandero,
Carlos Gutiérrez Menoyo, o el expolicía Juan José Alfonso Zúñiga, entre otros.

El primer Plan de Ataque al Palacio Presidencial debió ejecutarse en agosto de


1955. Todos los hilos de la conspiración estaban en manos de Aureliano Sánchez
Arango pero cuando las fuerzas estaban movilizadas y todo parecía estar
impecable para la acción, la información se filtra a la policía; uno de los operativos
de Salas Cañizares aquel 4 de agosto de 1955 sería la toma del Centro de
Operaciones de Santa Marta No. 52, esquina a Lindero, allí fueron sorprendidos y
capturados: Fructuoso Rodríguez, Rolando Culselos, José Machado, Juan Pedro
Caibó Servia, Manuel López Sardiñas, Ramón Guín; y el hijo mayor de Menelao,
Alberto Mora Becerra, además del valioso arsenal que se ocupó aquí, en las
cercanías del Palacio Presidencial la policía descubría hasta un mortero, previsto
para que abriera fuego sobre el recinto de Batista.

La línea conspirativa en el plano militar es alterada por el Directorio Revolucionario


con la agitación política y el trabajo de las masas con la FEU. Pero ya para
diciembre de 1955 se prevé que las manifestaciones estudiantiles sean
216
acompañadas de hombres armados del Directorio. La primera acción de masas con
apoyo armado sería el 2 de diciembre. Se quería esclarecer que la posición
mediaccionista que asumía Don Cosme de la Torriente, Coronel de la Guerra de
Independencia, al frente de la llamada Sociedad Amigos de la República (SAR), no
favorecía al proceso revolucionario. La manifestación se proponía ir desde la
Universidad hasta la residencia de Don Cosme y hacerle comprender al viejo
mambí que aquellos eran nuevos tiempos de intransigencia y combate.

Cuando la policía fue a reprimir la manifestación estudiantil, que como de


costumbre bajaba bulliciosa por San Lázaro, se encontró que ante todo debía
parapetarse ante los disparos. En esta experiencia, por la movilización de masas
participaron, hasta militantes de la Juventud Socialista como Fulgencio Omez
Gómez, pero los disparos por parte de la manifestación atrajeron a otras unidades
armadas que vinieron a reforzar la trocha de la fuerza pública. Fue imposible que
los manifestantes pudieran avanzar más allá de Infanta, de aquella jornada son las
fotos donde aparecía Fulgencio Oroz auxiliando a Fructuoso Rodríguez, en el
suelo, mientras se acercaba la policía en la esquina de Infanta y San Lázaro.

La “Manifestación de Galiano”, organizada tres días después, el 5 de enero por el


Frente Cívico de Mujeres Martianas, complementaría esta acción iniciada por el
Directorio Revolucionario y la FEU. Las Mujeres Martianas partieron de la céntrica
esquina de Galiano y San Rafael con la Bandera Nacional y una tela sostenida por
Pastorita Núñez y Olga Román que decía: “QUEREMOS PAZ, NO SANGRE.
LA LIBERTAD ES LA ESENCIA DE LA VIDA” (21).
La policía intentó detenerla frente a las vidrieras de “Los Reyes Magos”, allí un
policía le fractura un dedo a Pastorita tratándole de quitar la tela; luego en Galiano
y Concordia, frente a la Iglesia de Monserrate, les esperaba personalmente el
Capitán José A. Hernández y Hernández “tatita”, pero su refuerzo tampoco impidió
que las Martianas se abrieran paso por Galiano hacía el Malecón, por allí un nutrido
grupo de agentes las enfrenta casi cuerpo a cuerpo y empiezan a conducirlas
detenidas y violentamente, los vecinos desde los balcones reclaman justicia y le
gritan a los esbirros ¡Abusadores!, ¡Abajo la tiranía! (22) no sin nuevas dificultades
llegan, al fin, un grupo de Mujeres martianas a la residencia de Don Cosme de la
Torriente, en nombre del pueblo de Cuba le hacen saber, con mucho respeto al
anciano, que no eran tiempos de entendimiento con dictadores, sino de Combate y
Revolución.

La vigencia del legado intransigente y combativo del General Antonio Maceo había
estado iluminando las fibras revolucionarias desde el Golpe de Estado, pero sobre
todo desde los tiempos en que la SAR con asombrosa ingenuidad política comenzó
a hacerle el juego a Batista, por eso la manifestación de la FEU aquel 7 de
diciembre de 1955 tenía un especial significado, a dos días de la Manifestación de
Galiano, el Directorio Revolucionario y la FEU bajan por San Lázaro hacía la
217
estatua del titán de Bronce en el Parque Maceo con un contingente reforzado con
hombres de pueblo, revolucionarios de diversas procedencias políticas o sin
partido, pero unidos en el mismo ideal patriótico, entre ellos estaría: Camilo
Cienfuegos Gorriarán. Los manifestante son interceptados por la policía,
produciéndose un intercambio armado con los escasos recursos del Directorio
Revolucionario, una veintena de compañeros son lesionados fuertemente, algunos
de ellos por armas de fuegos, entre ellos: Juan pedro Carbó Servia, del Directorio
Revolucionario; y el joven Camilo Cienfuegos.

Durante el año 1956 nuevas manifestaciones y acciones armadas adornan las


impetuosa trayectoria del Directorio Revolucionario y la FEU dirigida por José
Antonio Echeverría. A las dos tradicionales manifestaciones de enero, una para
honrar a Mella y otra a martí, se suma la dedicada al tercer aniversario de la caída
de Rubén Batista Rubio, pero es en las efemérides patrióticas del 24 de febrero
cuando José Antonio da a conocer en el Aula Magna de la Universidad de La
Habana, la existencia del Directorio Revolucionario.

José Antonio Echeverría visita en el verano dos Congresos Estudiantiles; de Chile


viaja a México a entrevistarse con Fidel Castro; en la ciudad azteca, el 30 de
agosto, se materializa el compromiso entre las dos organizaciones revolucionarias
insurrecciónales que coincidían en asumir la lucha armada como táctica esencial.
El documento que rubricaron trascendido con el nombre de “Carta de México”; ya
para el otoño, José Antonio regresa a la Ciudad de México junto con Fructuoso
Rodríguez y Joe Westbrook para un nuevo intercambio de ideas.

El Directorio Revolucionario y el M-26-7 debían potenciar y alternar las acciones


urbanas a fin de mantener en jacke al dictador y crear un ambiente propicio en
espera del desembarco del Granma; método de “golpear arriba” responder con el
“tenor revolucionario” al temor de la dictadura. Había sido un legado desde los
tiempos de los comandos armados de Pío Alvarez en la Revolución del 30; este
sería otra forma alternativa de lucha armada del Directorio frente a la tiranía
batistiana, así, comienza a hacerse chequeos a los casinos de lujosos hoteles y
salones de juegos en cabarets. Se determinaron horarios, guarda espaldas, el sitio
exacto donde habitualmente se entregaban a la bebida y al esparcimiento, surgen
los proyectos de ajusticiamiento contra Rolando Masferrer, Luis Manuel Martínez,
Orlando Piedra Nogueruela….

La medianoche del sábado 27 de octubre de 1956 un comando dirigido por Juan


pedro Carbó Servía ejecutó en el Cabarets MONTMARTRE, al Coronel Antonio
Blanco Rico, Jefe del Servicio de Inteligencia Militar (SIM), e hirió al hijo del Jefe de
Estado Mayor General, Calixto Tabernilla; los autores del atentado logran escapar.

El Brigadier Rafael Salas Cañizares, Jefe de la Policía Nacional, sale desbocado


buscando a los culpables. El 29 de octubre recibe de quienes buscaban, se habían
asilado en la Embajada de Haití, por lo que parte hacía allá con su grupo élite; viola
218
sin el menor escrúpulo la inmunidad diplomática y comienza a disparar a matar a
todos los jóvenes que allí se encontraban. Ni siquiera llegó a conocer que los
asilados no tenían ninguna relación con los sucesos del Cabarets MONTMARTRE,
muchos eran sobrevivientes del Ataque al Cuartel Goicuría, en Matanzas; uno de
ellos era: Orlando Fernández Farray (23).

Salas Cañizares portaba un chaleco protector anti-balas, pero unos de los


combatientes asilados, secundiro “El Guajiro” Martínez, herido y desde el suelo, le
disparó entrándole los proyectiles por la ingle, cuarenta y ocho horas después de la
masacre en la Embajada de Haití, fallecía el Jefe de la Policía nacional.

Numerosas acciones desarrolló el Directorio Revolucionario a finales de año, en


apoyo a los expedicionarios del Granma: quema de un nuevo parque de carros
patrulleros (perseguidoras) en la Ambar Motors Corporation, sabotajes y nuevos
atentados, mientras se continuó promoviendo combativas manifestaciones en
repudio a la dictadura batistiana; pero la acción más grande necesariamente debía
quedar pendiente para el año 1957.

EL AÑO 1957 Y LA LUCHA REVOLUCIONARIA CLANDESTINA

Ante el desembarco del Granma el régimen batistiano trata de ocultar que Fidel
Castro vive, que ha logrado sobrevivir y mantiene un foco guerrillero en la Sierra
Maestra. Después, al ser imposible ocultar esta verdad, minimizan las acciones
combativas que libra con éxito el Ejercito Rebelde, altera información, aunque se
prefiere el silencio sobre el tema para distraer la atención de la lucha política, de la
Guerra de Liberación, se hacen actos y eventos como el que organiza el cuñado de
Batista: la competencia de carreras de automóviles titulada “Primer Gran Premio de
Cuba”, desde el principio de 1957 acapara la atención de la prensa y la opinión
política internacional. El suceso llega a su climax cuando el popular corredor
argentino Juan Manuel Fangio gana espectacularmente la carrera, paralelo a estas
y otras noticias de impacto publicitario Batista fortalece el aparato represivo,
redobla los servicios especiales de vigilancia, y la labor revolucionaria clandestina
se hace más difícil.

Sergio González López “El Curita”, en compañía del combatiente “Pepe Díaz” es el
primero en romper la aparente tranquilidad de la urbe capitalina haciendo estallar
una potente bomba en la tienda puntera del centro comercial: “El Encanto”, en la
esquina de Galiano y San Rafael; tuvo la precaución y el valor de gritar a las
personas que se acercaban: “¡Una bomba, apártense que va a explotar!”.

Al Directorio Revolucionario correspondería a continuación conmocionar la ciudad,


y al país. Complejos fueron los preparativos en torno al plan insurreccional en el
compromiso con Fidel Castro en la “Carta de México”; numerosos fueron los
contactos y reuniones previos al Asalto al Palacio Presidencial, se efectuaron

219
principalmente en puntos de los actuales municipios de Plaza, Cerro y Centro
Habana, en este último hubo importantes acuerdos en edificios situados en las
calles: Valle, Hospital y Animas.

No se haría una movilización masiva de las fuerzas del Directorio, se acuartelaría a


los elementos seleccionados en formas de comandos, con misiones específicas
para sincronizadamente con el plan militar, convocar al pueblo a través de una
alocución que haría José Antonio Echeverría desde Radio Reloj.

Se decidió prescindir de los aforados complotados, incluyendo el enlace en el


Cuartel Maestre de la Policía nacional; a fin de evitar al máximo la posibilidad de
que el plan se filtrara a la inteligencia batistiana.

El 13 de marzo fue el día elegido para la acción. No hubo ninguna delación, pero sí
deserciones que fueron muy costosas, la casualidad también se interpuso, en
especial por el automóvil donde iba José Antonio hacía la Universidad de La
Habana; era el lugar donde organizarían el Estado Mayor y se le darían armas al
pueblo, éste nuevo revés militar tronchó la vida de José Antonio Echeverría ya
había escrito en su Testimonio Político:

Porque tenga o no nuestra acción el éxito que esperamos, la conmoción que


originará nos hará adelantar en la senda del triunfo. Pero es la acción del
pueblo la que será decisiva para alcanzarlo (24).

Aquel mismo día en las redadas que hizo la policía por toda la ciudad, caía una
valiosa imprenta del MR-26-7, la situada en la Concepción de la Valla No. 68 entre
Campanario y lealtad, allí se hacía impresos a través del linotipista Ricardo
Ragues, contando con la colaboración de Ibrahim y Violeta González. El local había
sido además centro operativo muy vinculado a la rama de propaganda del
Movimiento, a través de Humberto Torres Herrera, “Fonseca”.

Hubo un llamado segundo asalto al Palacio Presidencial; al día siguiente de la


acción del Directorio Revolucionario, acudió gran parte de la oligarquía criolla,
batistianos y oportunistas, a felicitar a Fulgencio Batista por haber salido ileso;
encabezaba a aquellas personalidades el Embajador de los estados Unidos, Mr.
Garden. Pronto en Washington, el Departamento de estado informaba que en la
Isla la situación era normal, incluso por aquellos días la Cuban Telephone
Company firmaba un nuevo convenio para fortalecer sus inversiones en el país.

Batista quedó tan gratamente impresionado por aquella muestra de apoyo que le
ofrecían que se animó para autoorganizarse otra velada semejante para el domingo
7 de abril; es entonces que Sergio González López “El Curita”, concibe la
operación: “7 Castros en 7 Hoteles”; se trataba de boicotear el acto batistiano
haciendo estallar distintos artefactos, que sonaran bastantes en hoteles de los
220
alrededores al Palacio Presidencial; se escogían: el Lincoln, Washington, San
Carlos, Packard, Nueva Isla, Central y Plaza. En cada uno de ellos jóvenes de
apellido Castro hacían estallar los explosivos al comenzar el acto.

Y efectivamente cuando Batista comenzó su discurso, simultáneamente


comenzaron a explotar proyectiles de alto calibre, cócteles MOLOTOV y otras
bombas caseras. Ninguno de los “Castros” fueron detenidos y no se supo más de
ellos. En el Hotel Lincoln, donde se había alojado el joven Juan Carlos Castro
Rodríguez, la policía hallaba medio centenar de casquillos cal. 50mm y latas donde
se utilizó fósforo vivo; en el hotel Washington un joven de apellidos Castro Grave
de Peralta había sido el autor de los hechos, los investigadores ocupaban tres
cócteles MOLOTOV sin estallar, otros muchos pedazos de botellas esparcidos por
la habitación, e igualmente indicios de haber utilizados fósforo vivo; lo mismo se
encontraban en el resto de los hoteles pero nada que los condujeran a los
revolucionarios. La operación había sido un éxito.

Otras muchas acciones se promovían en La Habana, como la que dañó las


propiedades de la Singer Sewing Machina Company, con sus máquinas de coser
en la calle Ángeles; o cuando estallaron las vidrieras de las tiendas de Neptuno y
San Nicolás. Mucha responsabilidad en estas acciones tendrían los estudiantes del
Instituto de La Habana, el Directorio Revolucionario, por su parte, sumido en la
mayor clandestinidad, promovía como su dirigente máximo a Fructuoso Rodríguez
y pasaba a denominarse: Directorio Revolucionario 13 de Marzo.

Era necesario hallar con urgencia nuevos puntos de enlaces, reunión y estadía. Es
Joe Westbrook, quien por intermedio de Gustavo Pérez Cowley consiguen el
Apartamento Nro. 201 de Humbolt 7. El 19 de abril, Julio García Olivera conduce
hasta el apartamento a: Fructuoso Rodríguez, José Machado Y a Juan Pedro
Carbó Serviá, al poco rato de estar los cuatros reunidos llegó el joven marcos
Rodríguez Alfonso, que a su vez mantenía amistad con Joe y Pérez Cowley. Joe
Westbrook les esperaba dentro. A continuación, los hechos suceden como siguen:

Al entrar fingió no conocer a los demás compañeros, lo cual motivó a que


Fructuoso y Juan Pedro le llamaron la atención por su forma de proceder,
hubo discusión y se cruzaron palabras, al parecer fuertes. Finalmente
Marcos se marchó del lugar y poco después lo harían Julio y Joe, Julio dejó
a Joe en casa de su novia, ahí surgieron discusiones entre la madre de Dysis
y Joe. Este debió reconsiderar su estancia en aquel lugar. Se conoce que
Marcos llamó por teléfono al asesino Esteban Ventura Novo y concertaron
una entrevista en la cual reveló el escondite de los buscados dirigentes del
Directorio. Entiéndase José Machado, Juan Pedro Carbó y Fructuoso
Rodríguez.

221
El día 20, Joe pidió a su novia que lo llevara a Humboldt 7, los acompañaba
una dirigente del Frente Cívico Martiano, Gudelia García, que atendía el
frente juvenil de las mujeres Martianas; “poco después de la 1 de la tarde,
precisa, en el auto de la novia de Joe, Dysis, llevamos a Joe hasta la misma
puerta del edificio de Humbolt 7, él se bajó, penetró en el lugar y nosotras
nos marchamos”.

Sobre las 3 de la tarde del 20 de abril, el traidor Marcos se entrevistaba con


Esteban Ventura en el apartamento 4 de la Calle de Carlos III No. 902, y se
materializaba su enferma venganza. Todo parece indicar que el esbirro tomó
precauciones y comprobó todo lo que le informó el Judas, porque necesito
casi 3 horas para asaltar el edificio de Humbolt.

Alrededor de las 5:50 PM, los asesinos comenzaron a romper las puertas del
apartamento de la planta baja, y le solicitó a la dueña que le permitiera
permanecer ahí. Ella estuvo de acuerdo y él se sentó en la sala aparentando
ser una visita. Sin embargo tocaron a la puerta, Joe tranquilizó a la señora y
abrió la puerta personalmente, estaba desarmado en esos momentos, los
esbirros lo sacaron al pasillo y segundos después una ráfaga de
ametralladora lo derribó dejándolo sin vida, igual suerte corrieron sus
camaradas. (25).

222
Para la opinión pública, la policía elaboró la versión de que los jóvenes habían
agredido a los agentes de la autoridad y que estos no habían tenido otra alternativa
que repeler el ataque, sin que pudieran evitar la muerte de los mismos. El Dr.
Francisco Calderín Toste, Juez de Instrucción de la Sección Cuarta, quien radicaba
en Carlos III No. 607 se personó en el lugar de los hechos y pudo comprobar que
las muertes de los jóvenes no podían haberse producidos como el cuento ofrecido
en el atestado oficial y a la prensa. Con mucha honestidad y valentía, abrió la
Causa No. 533/957 por delitos de “Atentado a Agente de la Autoridad” y
“Homicidio”, exigiéndole al Jefe de la Policía Nacional, Coronel Hernando
Hernández Hernández, un informe detallado sobre como habían ocurrido realmente
los hechos, el responsable máximo del operativo, los oficiales al mando de las
fuerzas que intervinieron, el objeto del aparatoso despliegue, si los occisos tenían
antecedentes delictivos; así como la relación, uno por uno, de todos los
participantes y los medios técnicos empleados.

Según rango y grados el mayor responsable debió ser el Teniente Coronel


Lutgardo Martín Pérez, Inspector General de la Policía nacional, no consignado
nunca en los informes, asi como, de igual grado, el oficial Dámaso Montesino
Alvarez, quien fungía en aquel momento como Inspector y Jefe del Segundo
Distrito, al cual se subordinaban directamente los otros dos oficiales participantes:
el Capitan Glery Hernández Hernández, Jefe de la Sexta Estación, cuya
demarcación abarcaba la calle Humbolt, y el Capitán Esteban Ventura Novo, Jefe
de la Quinta Estación, quien había actuado fuera de su jurisdicción, en prestación
de “servicios especiales”.

Esteban Ventura, quien gustaba de fotografiarse ante la prensa de civil de cuello y


corbata con traje blanco, desde el Golpe de Estado había venido destacándose en
la información, búsqueda y captura de combatientes revolucionarios, asegurándose
una vertiginosa carrera desde el Golpe de Estado en que era Segundo Teniente,
luego Teniente y en aquellos momentos Capitán. Convencido del valor, la firmeza y
el significado de los jóvenes que perseguía ordenó sorprenderlos y darles muerte al
momento. Fue por tanto, Ventura, el máximo responsable de la masacre y Jefe
Virtual de todo el operativo. Le acompañaron que reconocieron oficialmente: el
Cabo Orlando Carratalá Ugalde, hermano del Jefe de Departamento de Dirección, y
sus guardaespaldas: Francisco Mirabal Sánchez, y el chofer José Luis Alfaro Sierra
(a) “Rompe Huesos” dirigió el asalto que hicieron las fuerzas del Sevicios
Radiomotorizado integrado por las tripulaciones de los carros Nros: 111, 130 y 164.
El Capitán Glery Hernández, quien fuera de los últimos en llegar a Humbolt,
colaboró apartando solo un cabo y tres vigilantes del personal de servicio en su
declaración.

Ventura y el resto de los esbirros lograban eludir la justicia, luego de un dilatado


proceso que concluía cuando la Causa 533 era reclamada por la Jurisdicción
Militar. En cambio, el astuto criminal lograba un escaño más alto en su carrera, no

223
tardaba en ser ascendido a Comandante, con el rango de Inspector y Jefe de
Distrito.

El crimen de Humbolt 7 quedaba impune en aquel momento. La foto de un niño


observando la sangre que bajaba por las escaleras del edificio se convertían en la
denuncia que no necesitaba comentarios. Los cadáveres de los jóvenes eran
trasladados para la Casa de Socorro de San Lázaro No. 611, excepto el carro de
Joe Westbrook cuyo cuerpo no fue reconocido y fue llevado al necrocomio, a
Fructuoso, Juan Pedro y Machadito los identificaban sus familiares y eran
trasladados a funerarias.

A partir de Humbolt 7, el terrorismo policiaco alcanza niveles inauditos. Retomaron


de los tiempos del Machadato, el método de colgar los cadáveres luego de torturar
a sus victimas y asesinarlas; de madrugada dejaban entre las torres del tendido
eléctrico y árboles, a sus victimas para que todos los vieran al amanecer, haciendo
significar de alguna manera que eran revolucionarios. Esto no solo le ocurrió a
combatientes sino hasta periodistas que cumpliendo con su deber daban a conocer
los crímenes, así ocurrió el caso del periodista Juan B. Tey parra y el fotógrafo
Eduardo de Jesús Palmero Hernández de El País (Reina No. 158). Ambos en mayo
de 1957 parecían horcados, “la sangre manchó las áreas aledañas al sitio deonde
hicieron perder el madero con numerosos contusiones y señales de martirio en sus
carnes” (26) Luego de la autopsia, los cadáveres eran remitidos a la Funeraria Vega
Flores, de Reina entre Lealtad y Campanario.

Son los tiempos en que la Quinta Estación de la Policía desarrollaba sus


tenebrosas histerias de torturas y muertes. El Capitán Esteban Ventura Novo había
asumido el mando de la Unidad desde las 21:00 horas del 28 de enero de 1957. Ya
antes, siendo Teniente había estado destacado en otras estaciones que tuvieron en
su demarcación territorios del actual municipio Centro Habana, como la Tercera y la
Sexta. A partir de 1957 se suceden las causas que como la de Humbolt 7 quedan
en la mayor impunidad. Se archiva, entre otras por los delitos siguientes: detención
ilegal, privación de libertad, maltrato y violencia a detenidos, auxilio al suicidio,
homicidio y asesinato. Gustavo Ameijeiras cayó preso allí en 1957, y convencido de
las sesiones de tortura a que estaba siendo sometido en cualquier momento podían
acabar con su vida, decidió jugarse – recordaba su hermano Efigenio- “el todo por
el todo en una acción que no por audaz y temeraria era menos lógica.
Aprovechó la ocasión de un cambio de guardia con la unidad llena de policía
y algunos pejes gordos de visita; pidió que lo llevaran al baño; una vez allí,
arrancó la tapa del inodoro, empujó al escolta y agredió al Comandante
Castro Rey, éste sacó la pistola y le hizo un disparo que le atravesó el muslo
por la mitad, partiéndole el fémur. Había logrado lo que él quería, no se
atreverían a rematarlo allí, delante de tanta gente, y menos sin la presencia

224
del asesino Ventura. Lo llevaron para el Hospital de la Policía donde ( ) logró
salvar la vida” (27).

Sergio González “El Curita”, quien se hallaba ya muy vigilado, es detenido el 10 de


marzo de 1957 a raíz de la explosión de ocho bombas en el Centro Comercial de
La Habana, se le involucra con la fábrica de bombas caseras en Gloria No. 256; es
torturado, pero no logran nada de él, mientras la prensa le salva, dando a conocer
que se hallaba preso, por los que los tribunales lo remiten pero para el Castillo del
Príncipe. Poco después Ventura ubica otra fábrica de bomba, ésta en Galiano No.
15, apartamento 42; era detenido Francisco Pérez Rivas, “Paco”, vecino de
Escobar No. 664, se le presentaba ante la prensa como el autor de la explosión de
petardos, días antes, en los cines: Favoritos (Belascoaín No. 809) y Cuatro
Caminos (Belascoaín No. 1107).

Gerardo Abreu, “Fontan”, tenía muchas habilidades para evitar ser detenido, le
favorecían sus condiciones físicas, de estatura mediana, sin ningún rasgo especial
que sirviera de referencia. Pero además, por sus facultades histriónicas, donde
entre otras facetas podía desdoblarse con la voz y enmascaramientos
característicos de un homosexual. En una ocasión lo detuvieron en Consulado No.
64, entre Refugio y Genios, junto a otros combatientes, recordaba Benito Peña que
en cuanto el Comandante Mariano FAMET, el Jefe del Buró de Represión de
Actividades Comunistas (BRAC) lo vio, dijo: “Este no, el negro este con tipo de
… no puede ser revolucionario” (28). Y aunque lo ficharon, lo dejaron ir.
Ante el cerrado cerco y vigilancia de las fuerzas policíacas, que obstaculizaba
incluso que muchos combatientes clandestinos se incorporaban al Ejercito
Rebelde, la Dirección Nacional del MR-26-7 orienta en determinados casos asilarse
en embajadas. Muchos escapan por esta vía para luego incorporarse a la lucha en
mejores condiciones. Es el caso del dirigente sindical de la tienda Fin de Siglo,
Evelio Rodríguez Curbelo, a quienes sus compañeros brindan una emotiva
despedida. En una carta a ellos, fechada el 3 de julio de 1957, Curbelo les
comentaba que sintió regocijo al comprobar la lealtad, amistad y compañerismo en
ellos, “aún en medio del dolor que causaba abandonar la patria” (29).

A raíz de la caída del querido dirigente revolucionario Frank país García, el 30 de


julio de 1957, en la movilización popular durante su sepelio, surge la idea de
organizar una huelga masiva en repudio al régimen. El Cuartel General de la
Huelga en La Habana, encabezado por el MR-26-7, contó con el apoyo de
organizaciones como: el Directorio Revolucionario 13 de marzo (DR-13-3), el
Movimiento de Resistencia Cívica (MRC), la Organización auténtica (OA) y la
Juventud Obrera Católica (JOC). Se estableció en un edificio de la calle San
Francisco, donde se concentraron las armas y pertardos que se pudo aglutinar.

225
El 3 de agosto fue tomada la planta radial que transmitía la música indirecta a las
Tiendas del Centro Comercial de La Habana, haciéndose un llamado a la huelga. El
comunicado se escuchó, alto y claro, en todas las redes de tiendas, por
departamentos y otros concurridos negocios. También la imprenta de los Hermanos
Ferrás Pellicer (Lucenas No. 304 – 306) se editó un volante dirigido a los
comerciantes y dueños de tiendas, invitándolos a la huelga y conminando al cierre
de establecimientos. Como parte del plan de acciones de sabotaje de apoyo al
paro, fue seriamente dañada la rienda propiedad del General Francisco Tabernilla.

El Partido Socialista Popular, a pesar de que en principio consideró “que las


condiciones no eran favorables para el paro” (30), en cambio no escatimó
esfuerzos con sus activistas sindicales unitarios en apoyar la huelga, lográndose en
el territorio una incorporación significativa de los sectores como el tabacalero,
telefónico, eléctrico y del comercio. Aún después de extinguido el paro, ante la
ofensiva de al represión, la Juventud Socialista continuaba contribuyendo a
mantener la situación revolucionaria a través de las acciones de masas como el
mitin relámpago celebrado el 12 de agosto de 1957, en las esquina de Monte y
Águila, en ocasión del aniversario 24 de la caída de la dictadura machadista. Aquí
era detenido, y luego torturado, el joven Antonio Pérez Herrero.

Otras de las imprentas que en parte suple la pérdida de la que poseía “El Curita” en
la Plaza del Vapor, fue la que arrendó el MR-26-7 en Estrella No. 174 entre Rayos y
San Nicolás a Serrando Valdés. Se disponía de dos máquinas de pedal, una
llamada “pequeña gigante”, guillotina y se podían hacer varios ipos de letras.
Humberto Torres “Fonseca”, junto a Nestor Piñeira Soa “Titán”, Luis López, Rafael
Puig y el propio Servando, imprimieron gran cantidad de propagandas
revolucionarias, incluyendo bonos de uno, dos, tres y diez pesos.

Sin alcanzar la magnitud de meses atrás, Acción y Sabotaje del MR-26-7 en la


capital, mantuvo una sistematicidad en la explosión de petardos, causando daños
menores a propiedades, principalmente de reconocidos batistianos. Uno de los
objetivos en el territorio fue el Banco Pujol, en Infanta y Zanja, cuyas vidrieras
estallaron sin daños a personas.

Las mujeres combatientes de la clandestinidad jugaron un importante papel en las


delicadas misiones relacionadas con los explosivos, sobre todo porque
acompañaban a quienes colocarían petardo. De manera que si era sorprendido el
combatiente en una actitud sospechosa, se disimulara con una relación amorosa.

El gobierno trataba de aparentar una normalidad política, por lo que favoreció


diversas inversiones en centros de diversión y recreo, incluyendo la creación o
modernización de cines, por eso, en cierta medida estos fueron parte de los
objetivos, para saludar el de día de los batistianos, en especial de las Fuerzas
Armadas, que era el 4 de septiembre, se concibió poner varias bombas en los cines
226
de lujo de la capital, uno de ellos sería el América, lo asumiría aquí una pareja
integrada por el Jefe de la Brigada Estudiantil de Instituto de La Habana, Antonio
Sánchez “El Gallego”, y la hermosa combatiente Urseli Adíaz Baez; a pesar que
para la estudiante era la primera vez que usaba este tipo de explosivo, ante la
insistencia de Urseli, El Gallego la autorizó a que fuera quien estallar en el baño de
las mujeres, para entrar al cine había fijado la bomba – reloj al muslo, con un
esparadrapo, pero al instalarla cuando la manipulaba algo falló, explotándole.

La Dirección nacional del MR-26-7 proyecta dar un vuelco decisivo al curso de la


guerra, organizando un levantamiento general armado. Se concibió que el
momento fuera la madrugada del 5 de septiembre, en razón de que fue desde el
día anterior los batistianos y los esbirros iban a estar de fiesta por el “4 de
septiembre”; tanto los combatientes de Acción y Sabotaje, como los brigadistas del
26, se movilizaron en múltiples puntos en la ciudad para tomar las unidades
militares y los edificios públicos más estratégicos. En el caso del actual territorio de
municipio de Centro habana, se movilizaron fuerzas para ocupar el Cuartel maestre
de la Policía Nacional, las estaciones Cuarta (Dragones s/n entre Escobar y
Lealtad) y la Quinta (Belascoaín y Peñalver), Sexta (Salud y Aramburu) y el edificio
de la CTC.

El aguerrido grupo del MR-26-7 en Regla, esperaría la orden en el Bar Primavera y


en todos los portales de Carlos III desde Belascoaín hasta el Mercado; una de las
fuerzas se encargaría de tomar la más difícil de las unidades, la Quinta Estación,
otros compañeros, junto a la Comisión Obrera del MR-26-7, asumirían la dirección
de la Confederación de los Trabajadores de Cuba (CTC) desalojando del edificio de
San Carlos y Desagüe, a los usurpadores mujalistas y sindicaleros del Partido
Acción Unitaria (PAU).

Hubo a su vez, combatientes y grupos de Centro Habana, como el de Alejandro


Ferrás, que movilizaron en el entorno del Estadio del Cerro, con el propósito de
ocupar el Servicio Radiomotorizado de la Policía nacional, allí el personal de
guardia aquella madrugada estaba complotado en la acción y entregarían el
armamento y los carros perseguidoras que se hallaban en el parqueo a los
combatientes del MR-26-7.

Pero en Cienfuegos fue donde único se cumplieron fielmente los planes del
levantamiento armado, por eso fue posible que el MR-26-7 junto al pueblo, tomaran
la ciudad. Sin embargo, al no desarrollarse la acción simultánea en todas las
provincias, el Ejercito Batistiano concentró sus fuerzas para sofocar la audaz
insurrección. El plan de La Habana, que era esencial para el éxito nacional, no se
desarrolla por incumplimiento de los oficiales de la Marina de Guerra complotados,
a quienes se les había encomendado dar la señal de inicio de las acciones, con un
cañoneo al amanecer, sobre el palacio Presidencial y el estado Mayor de La Marina
que se hallaba en la Punta.

227
Las consecuencias inmediatas del revés del 5 de septiembre en la Capital fueron la
muerte de cuatro jóvenes del MR-26-7, y las múltiples detenciones efectuadas a
partir de entonces. El Capitán Esteban Ventura Novo, nuevamente se distinguía en
las investigaciones, arrestando revolucionarios. El 25 de septiembre ubicaba al
combatiente Celso Maragoto Lara, quien se hallaba oculto en la casa del
matrimonio médico de Gladys Colón y Agustín Clavijo, en Espada No. 406, entre
San Rafael y Neptuno, aunque en principio Celso lograba alcanzar la azotea, era
acorralado y ultimado a balazos.

Esteban Ventura participaba activamente también en las investigaciones sobre los


complotados en el seno de la policía, el 5 de septiembre descubre a la mayoría de
los implicados en la Radiomotorizada, los que son procesados y remitidos presos a
la Isla de Pino. Ventura era ascendido al grado de Comandante y promovido a
Inspector, Jefe del Tercer Distrito de la División Central, no obstante, lejos de
abandonar la Quinta Estación, más que nunca la utilizó, sobre todo su sótano,
como laboratorio de torturas y crímenes.

Sergio González López, “El Curita”, se reincorpora a la lucha en la calle a partir del
mismo 22 de octubre de 1957 en que escapa del Castillo del príncipe; junto a dos
compañeros; Fontán y él se consagran en la tarea de reagrupar a los combatientes
y volver a golpear en todas las formas posibles de lucha. Así, en medio de la
represión, mientras se producen bajas, algunas deserciones y hasta traiciones,
muchos otros hombres ocupan en creces las vacantes en el combate. En los sitios,
José Miguel Hernández organiza un grupo directamente bajo las órdenes de “El
Cura”. En la práctica, al fragor del quehacer revolucionario, se van incorporando
nuevos combatientes.

Cada acción requería de mayor audacia. Por fin era ejecutada, en San Rafael y
Consulado, Luis Manuel Martínez, un alabardero sumiso del régimen batistiano, a
quien el Directorio Revolucionario (DR) había intentado ajusticiar desde hacía
tiempo. Esta vez la acción se realiza de conjunto, entre el DR-13-3 y el MR-26-7,
pero la policía logra detener al brigadista del 26, Ramón Valdivia Rivero, quien es
conducido a la Tercera estación (Dragones y Zulueta), allí lo tortura el Capitán
Eusebio Zamora y el Teniente Francisco Calzadilla Estrada, del Departamento de
Investigaciones; finalmente lo asesinan y abandonan su cadáver.

El combatiente centrohabanero José Valladares Díaz, el 28 de octubre, realiza la


valiente acción de desarmar a un policía en plena calle, otros agentes acuden al
lugar, le disparan cayendo herido en San Lázaro entre Águila e Industria. Al tiroteo
se incorporó el combatiente de la Punta, Aldo Rivero, quien no pudo evitar que
remataran a Valladares, pero él ultimó a uno de los policías.

A finales del año 1957 la vida nocturna en La Habana se hace cada vez más
peligrosa, al ritmo de los “bum” “bum” de la insurrección, su máximo propulsor, el
Jefe de Acción y Sabotaje del MR-26-7: Sergio González López “El curita”;
228
solamente, el 8 de noviembre estallaba en la capital más de 70 bombas en menos
de 15 minutos, por si fuera pocas, “El Curita” y sus compañeros de acción se
proponen superar aquella cifra. En una de sus proclamas, editada en Estrella 174,
aparece este anuncio: ¡ESPERE LA NOCHE DE LAS 100 BOMBAS!. Y
efectivamente, el suceso ocurría la noche del 25 al 26 de noviembre, algunos
compañeros aseguran que estallaron 100 petardos, otros que fueron muchos más,
que la ciudad parecía estaba siendo bombardeada. Ismael Muñoz Figueroa,
“Mallet” otro de los organizadores de aquella operación junto a “El Curita” y Fontán,
llegó a precisar que: se repartieron 125 bombas y explotaron 26 (31); pero al margen
de las cifras lo valioso fue el alto espíritus de lucha y combatividad revolucionaria
con el que cerró 1957. Ante los magnos planes para el nuevo año, el MR-26-7
comienza a estrucurarse militarmente en milicias, una nueva fase de insurgencia
metropolitana comenzaba…..

LA DIFICIL HABANA DESDE LOS PREPARATIVOS DE ABRIL HASTA LA


VICTORIA

Los medios insurrecciónales acogieron 1958 con no poco optimismo, llamándole


prematuramente “Año de la Liberación”. Las palabras mágicas que allanarían el
camino eran: HUELGA GENERAL REVOLUCIONARIA. Era la experiencia de la
Revolución del 33, robustecida con el ensayo de agosto de 1957. Se sabía que no
todo podía dejarse a la espontaneidad y que se requería de una preparación. De
reveses en materia de huelgas ya se tenían no solo los precedentes del 55 y del
57, sino también, de la aplastante derrota de mayo de 1935, cuyo artífice había sido
precisamente Batista en sus extremos como criminales, al frente del Ejercito, se
valoró la importancia de que las milicias del MR-26-7 efectuaran los sabotajes y las
acciones armadas necesarias como factor decisivo, del triunfo, en tanto se
constituía el Frente Obrero Nacional (FON) y el Frente Estudiantil Nacional (FEN)
como pilares para garantizar el paro.

El Frente Obrero lo integraban valerosos cuadros del MR-26-7 en centro Habana.


Ante todo, Sergio González López “El Curita”, en representación de los autobuses,
por el Sector del Comercio, Vicente Chávez Fernández y Evelio Rodríguez Curbelo,
se proponían como laudos permanentes, planteamientos reivindicativos, así como
el cese de la persecución de los revolucionarios, las torturas y el temor
gubernamental, pero sobre todo, organizan el paro. El periódico clandestino
Vanguardia Obrera, editado en la imprenta de Estrella 174, difundía esta medular
consigna: “contra la sangrienta tiranía de Batista: HUELGA GENERAL
REVOLUCIONARIA” (32).
Tanto el FON como la FEN se proponían desarrollar la situación revolucionaria
hasta que llegara el momento de anunciar el paro; a través de la propaganda y
diversas movilizaciones, incluyendo la conmemoración de fechas patrióticas o de
significación política, debían crear un clima de agitación revolucionaria y de repudio
229
al régimen favorable a la huelga. En este sentido, el Frente Estudiantil en La
Habana organizó un acto con motivo del aniversario 105 del natalicio de José Martí
el 28 de enero de 1958, la masa estudiantil desfilaría por Galiano hasta rendir
tributo al Apóstol frente a la estatua en el parque Central, sin embargo, al llegar los
jóvenes a Galiano y San Rafael, la manifestación es disuelta a tiros y apresados
muchos de aquellos muchachos, entre ellos José Manuel Portela, militante de la
Juventud Socialista (33).

El Partido Socialista Popular (PSP) y la Juventud Socialista (JS) desde los primeros
meses de 1958, comienzan a tener una mejor comprensión del papel del Ejercito
Rebelde y la lucha insurreccional en el Llano, no obstante, persistían resquemores
tácticos y se mostraban conservadores en cuanto al apoyo decisivo al paro, servía
de argumento para su tesis además, en reciente acontecimiento internacional, la
caída de la dictadura de Pérez Jiménez en Venezuela, el éxito de las fuerzas
progresistas fundamentalmente a la lucha de masas, a esto hacía alusión
numerosas proclamas distribuidas por la Juventud Socialista en Centro Habana, de
manera que a menos de un mes del 9 de abril, y ante la inminencia de la huelga,
aun la organización no la incluiría entre sus consignas. El volante, un discreto
papelito de 10 x 7 cms, hecho en máquina de escribir, decía textualmente:

El Ejemplo de Venezuela nos Ilumina


La Hora de la Derrota de la Tiranía se Aproxima
El Camino: Unión y Lucha de Masas
Fuera la Farsa del 1 de Junio
Esas no son Elecciones Libres
Que Quiere el Pueblo
¡Abajo el Gobierno!
Juventud Socialista
Soplones y chivatos hacían llegar al Capitán Gleri Hernández, Jefe de la Sexta
Estación, varios ejemplares de esta proclama, el señor Capitán, aún convalicente
de las heridas sufridas en un atentado que se le preparó en San Lázaro No. 611;
remitía al Jefe del Buró de Represión de Actividades Comunistas (BRAC) un
original del volante con la única explicación de que fue hallado “regado” en su
demarcación.

El autor del atentado al Jefe de la Sexta Estación, participante en el crimen de


Humbolt 7, había sido uno de los grandes activistas de la “Noche de las 100
Bombas”, y quienes proyectara también los atentados al Cabo Cué y al
Comandante Esteban Ventura, el ex - policía y combatiente veintiseista de
formación autodidacta marxista, Arístides Viera González “Mingolo”, pese a los
frecuentes contactos que en la base tienen militantes comunistas y combatientes
revolucionarios en general, aún no se logra la necesaria unidad, pilar importante, la
230
tercera pata de la mesa en la preparación de la Huelga de Abril, junto al FON y la
FEN, sería el Movimiento de Resistencia Cívica (MRC). Se trataba de una
organización que agrupaba a profesionales, comerciantes, amas de casa y hasta
diversos sectores de la burguesía que se oponían a la dictadura.

Tuvo incidencia en no pocas entidades del territorio, muchas de ellas con su local
social en las Avenidas Maceo, frente al Malecón, como: La Asociación de Viajantes
del Comercio de la República de Cuba (Ave. Maceo no.217), el Colegio
Farmacéutico Nacional (Ave. Maceo no. 307), la Sociedad Nacional de Autores de
Cuba (Ave. Maceo no.107).

Igualmente: La Asociación de la Prensa de Cuba (Industria no.312), la Asociación


de Vendedores de Café Menudeo (San Lázaro y Campanario 252), la Asociación
de cafés y Cantinero de La Habana (Salud no. 305). En muchos de estos lugares
los combatientes revolucionarios hallaron refugios donde dormir, contactar, reunirse
y -¿por que no…?- paliar al hambre, como en el billar de los Sánchez Camejo
(Bernal y Águila) o la Potajera (Virtudes, entre Blanco y Águila).

El Movimiento de Resistencia Cívica (MRC), que había surgido en principio sólo


como aglutinador de intelectuales y profesionales independiente contra la dictadura,
desde finales de 1957 se extiende a nivel nacional como órgano alineado al MR-
26-7. Abarca precisamente a los sectores de la oposición no incluidos en los
frentes obreros y estudiantiles, por lo que se convertían en un excelente
complemento organizativo y en un paso importante, en el proceso de unidad
revolucionaria. Las consignas del MRC ilustran muy bien cuales fueron sus
funciones en esta etapa:

• Ayuda a los que luchan con las armas en la mano y a los que en la
clandestinidad mantienen viva la llama de la revolucion, con tu apoyo moral y
ofreciendoles alojamiento, comida y medicinas.
• No concurras a sitios de diversion, ni celebres fiestas. Cuba esta de luto.
• No juegues billetes de loteria, bolita, ni parlé. Los militarotes que jefean cada
zona se engordan cobrando por el vicio.
• No compres periodicos censurados, ni gubernamentales, compra y ayuda a
circular los periodicos revolucionarios.
• No salgas de tu casa por la noche, salvo algo urgente. Haz de tu pueblo una
ciudad muerta.
• Facilita la entrada de tu casa para albergar a una persona. Puedes salvar a un
revolucionario de las garras de los asesinos del dictador.
• Boicotea, los comercios e industrias d elementos adiptos a la dictadura, como
no piensa más que en sus estomagos, hazle pagar su mezquindad donde más
le duele.
• Haz el vaciio social a los beneficiados del régimen, ni asistas a los actos
oficiales. Que sientan el repudio de la ciudadania.
231
• No pagues impuestos, usa la huelga fiscal, resistiendote a pagar impuestos que
son usados indevidamente para pagar chivatos y matar pueblos.
• Ayuda a preparar el pago general revolucionario que dará al traste con la
dictadura. Coordina con el mr-26-7, el fon, el fen y la resistencia civica. Toma tu
trinchera y espera las instrucciones que han de llegarte. (34).

Naturalmente, la trinchera de los combatientes de Acción y Sabotaje, no era la de


sentarse a esperar, sino la de incrementar el enfrentamiento a fin de fortalecer las
condiciones subjetivas para la convocatoria a la huelga. Para el centro de la ciudad
diversas acciones se proyectan, como la quema de un ómnibus General Motors de
la ruta no. 2; aquí casualmente viajaba un policía a quien fue necesario ejecutar
para poder cumplir la misión. Era el 7 de febrero 1958. Sergio González “El Curita”
organiza ese mes cinco sabotajes dinamiteros en diferentes barrios de la ciudad,
hasta quemar casi cien millones de pesos en la caja de compensaciones del Banco
Nacional de Cuba. Fue una misión realmente espectacular, donde el comando que
participó dejó una bandera del 26 de Julio. Sin embargo, durante el segundo mes
del año la acción más relevante sería la operación “Fangio”.

El II Gran Premio de Cuba, llenaba gran parte de la información de los medios


masivos de radiodifusión nacional y extranjeros. Nuevamente la vía del Malecón
sería escenario de la carrera internacional de autos donde participarían el
campeón del mundo Juan Manuel Fangio. A través del cronista deportivo Elio
Constantín el MR-26-7 supo que el as del volante se hospedaría en el Hotel Lincoln
(Galiano no. 164, entre Ánimas y Virtudes). Y concretamente en la habitación No.
810, en las colindantes estarían: Marcelo Giambertone, su representante, y un
guardaespaldas que le situaba el Servicio de Inteligencia Militar (SIM),
supuestamente para protegerlo. El dictador nuevamente había levantado la
censura, dándose la ocasión de que a través de un secuestro la opinión pública
conociera la situación crítica que vivía el país.

La operación debía ser calculada con precisión matemática, de manera que Fangio
no supiera ni la más leve lesión, ni fuera a molestarse. De lo contrario podía
también herirse la sensibilidad de toda la masa de administradores del campeón
Argentino en Cuba y en el exterior. Por eso Faustino Pérez miembro de la Dirección
Nacional MR-26-7, y su máximo dirigente en La Habana, designó a todo un
caballero y audaz Capitán de Milicias: Oscar Lucero Moya.

Desde la llegada a Cuba del As del Volante, el viernes 21 de Febrero se puso en


tensión los hombres haciendo el chequeo de sus movimientos para hallar el mejor
momento de secuestrarlo. Se pensó que podía secuestrarse en las caminatas de
análisis que hacía por las pistas del Malecón casi al amanecer, pero siempre
acudía fuertemente escoltado. Así se descartaron distintos lugares y momentos
hasta que llegó. A vísperas de las causas y aún no se había precisado nada,
Faustino dio la orden de secuestrarlo la misma noche del día 23 en el Lincoln, el

232
comando propuesto por Oscar Lucero lo integraba él con siete hombres y su
esposa. Disponía de tres automóviles que estarían parqueados con sus chóferes.

Listos al costado del Hotel, por la Calle Virtudes. Llegaron desde temprano al lobby
del hotel, donde sabían que bajaría a cenar. Algunos esperaron tomando algo en
el bar de allí, llamado “Los Tres Monitos”. Pero pasaban las 9:00 pm y Fangio no
bajaba…Por fin lo reconocieron, estaba en un buen lugar, sólo que estaba muy
concurrido. Es entonces fue el combatiente Manuel Uziel Dueñas, saca delante de
todos su pistola y convida al campeón a que lo acompañe hasta la salida. El
recordista argentino y la gente que está alrededor piensan que es una broma y hay
risas. Pero las cosas cambian de tono cuando cachean a un sujeto de alta estatura
quien les pareció que era el guardaespaldas de la Inteligencia Militar. Uriel decidido
toma a Fangio por el brazo y lo conduce hasta la puerta, de aquí van caminando
por Virtudes hasta San Nicolás les esperaba, ya con el motor encendido un
Plymouth verde, estaba uno de los carros. Sale en punta al automóvil Monje Nuevo
de Oscar Lucero, al centro el de Uriel con Fangio, y en la retaguardia un Buick gris
que en la trayectoria tiene un accidente y no puede continuar, incluso interviene la
policía y su chofer es remitido a la estación más cercana.

Listos al costado del Hotel, por la Calle Virtudes. Llegaron desde temprano al lobby
del hotel, donde sabían que bajaría a cenar. Algunos esperaron tomando algo en
el bar de allí, llamado “Los Tres Monitos”. Pero pasaban las 9:00 pm y Fangio no
bajaba…Por fin lo reconocieron, estaba en un buen lugar, sólo que estaba muy
concurrido. Es entonces fue el combatiente Manuel Uziel Dueñas, saca delante de
todos su pistola y convida al campeón a que lo acompañe hasta la salida. El
recordista Argentino y la gente que está alrededor piensan que es una broma y hay
risas. Pero las cosas cambian de tono cuando cachean a un sujeto de alta estatura
quien les pareció que era el guardaespaldas de la Inteligencia Militar. Uriel decidido
toma a Fangio por el brazo y lo conduce hasta la puerta, de aquí van caminando
por Virtudes hasta San Nicolás les esperaba, ya con el motor encendido un
Plymouth verde, estaba uno de los carros. Sale en punta al automóvil Monje Nuevo
de Oscar Lucero, al centro el de Uriel con Fangio, y en la retaguardia un Buick gris
que en la trayectoria tiene un accidente y no puede continuar, incluso interviene la
policía y su chofer es remitido a la estación más cercana.

Los primeros autos, con Juan Manuel Fangio, llegan a su objetivo, un apartamento
en el Vedado. Oscar Lucero informó a Faustino Pérez. De inmediato se pasó a la
radio y a los periódicos Alerta (Carlos III No. 615) y El Crisol (Manrique No. 166),
esta escueta nota de prensa: “Habla el 26 de Julio. Fangio está en nuestro
poder, no competirá mañana”. (35)

Durante las horas que el popular Argentino estuvo secuestrado todos los medios
policíacos y de inteligencia contrainsurgente se mantuvieron en la calle. La flota
completa de los Servicios Radiomotorizados del Cerro (SR-1) y Marianao (SR-2),
233
los carros microonda del Departamento de Investigaciones y el SIM, más la
infantería y la red de chivatos de los distintos grupos represivos, se hallaban
dislocados por toda la ciudad en su búsqueda. Pero hasta los alabarderos del
régimen contribuyeron involuntariamente a promover la acción del MR-26-7, o a
confundirlos más en sus pesquizas. Otto Menudo en el comentario televisivo llegó a
asegurar que el autor principal del secuestro era el expreso político Efraín Alfonso
Liviano. Y en verdad “Cheche”, como le decían cariñosamente sus compañeros,
era uno de los capitanes del 26 de Julio en La Habana, utilizaba como centro
operativo su apartamento en calle Águila, entre Reina y Dragones, y agrupaba a
más de un centenar de milicianos. Pero ninguna relación había tenido con el
secuestro.

Nunca se había hecho tan notoria la desorientación de la policía, que conocía


aparatosamente de un lugar para otro tras cualquier supuesta pista. Por burla o por
equivocación, lo cierto es que esta vez todos los confidenciales que recibió la
institución eran falsos. Batista rabió de impaciencia e indignación ante el ridículo
espectáculo que ofrecieron sus esbirros. El coronel Fernando Hernández
Hernández, Jefe de la Policía Nacional, no tardaría en su relevado.

En tanto, la estancia de Fangio con sus secuestradores trascurrió en la mayor


armonía y cordialidad. El campeón conoció del por qué de la lucha revolucionaria,
se le habló de su compatriota, el médico Ernesto Guevara, a quien todos llamaban
“Ché”, convertido en leyenda desde entonces, como Comandante del Ejército
Rebelde en la Sierra Maestra. Sintió igualmente mucha simpatía por Fidel Castro y
prometió regresar algún día a Cuba para conocerlo personalmente cuando la
Revolución triunfara (36). Mientras tanto, Faustino Pérez daba a conocer este
comunicado:

Saludamos al pueblo Argentino a través de su Embajador en Cuba y le


pedimos excusas por el hecho de haber tenido con nosotros durante 24 horas
al popular Fangio. Hemos actuado así para impedir que la tiranía trate de
engañar al mundo, cuando nuestra Patria atraviesa por tan dramática
situación. Todos comprenderán que Cuba no está para fiestas. A Fangio, por
quien sentimos respeto y simpatía, a su familia y al pueblo Argentino, le
pedimos disculpas por estas horas de angustia Por el Movimiento 26 de Julio
Libertad o Muerte (37)
Sin ninguna dificultad se efectuaba también la devolución de Fangio,
completándose la operación en el mayor éxito. Nunca antes la prensa internacional
había reflejado con tanto sensacionalismo el nombre de Cuba vinculado a un hecho
patriótico. Por primera vez, miles de personas en el mundo conocían sobre Fidel
Castro y la Revolución Cubana.

234
Durante la primera semana de Marzo Sergio González López “El Curita”, se reúne
en San Lázaro No. 624, entre Gervasio y Escobar; en la fábrica de carteras de piel
de cocodrilos, con varios capitanes del MR-26-7.

Se encuentran presentes Machaco y Gustavo Ameijeiras, Rolando Navarro


Monteagudo “Nené”, Luis Pérez, Antonio Sánchez, José Ferrer y Alfonso Torice
“Morúa”, entre otros. Se planifica para el día 18 un gran levantamiento armado con
otras acciones y sabotajes escalonados como la voladura de un tanque en la
refinería de la ESSO Standar Oil, afectaciones en el Acueducto de Albear, y las
plantas eléctricas de Tallapiedra, Regla y Matanzas.

El valor, la pasión, la intransigencia revolucionaria, el dinamismo y el talento


multifacético eran rasgos de la personalidad de Sergio González. Gustaba vestir
de traje, como muchos jóvenes de entonces, pero siempre con mucha sencillez y
austeridad. Casi sus únicos medios para tantos proyectos eran: un automóvil con
su chofer y ayudante, el centrohabanero Manuel Blanco Fernández “Maño”,
propietario de la peletería de Neptuno y Manrique. Por aquellos días utiliza también
como centro operativo la bodega de San Miguel y Manrique, e incluso la Iglesia de
la Caridad (Salud y Manrique), donde oficiaba el Padre Diego Madrigal quien había
sido su condiscípulo en los estudios eclesiásticos.

Sergio González, no es de los jefes que sólo da órdenes. Personalmente afronta


las misiones más riesgosas, a pesar de que es padre de cuatro niños; Sergito,
Reinaldo, Ricardo e Isabelita. “El Curita” y “Maño” destruyen la impresora y miles
de pasquines electorales del politiquero batistiano Andrés Rivero Agüero.
Quemaron todo lo producido en Infanta 454, casi esquina San Rafael, así como las
existencias en los almacenes de aquella empresa, llamada Impresora Nacional S.A.

El fuego daba cuenta también de distintos objetivos económicos vinculados a


propietarios batistianos en Los Sitios. En conmemoración del primer aniversario del
Asalto al Palacio Presidencial, en coordinación con miembros del DR-13-3,
prácticamente convierten en cenizas, tanto la colchonería La Luisita como el
depósito de maderas.

A mediados de Marzo Faustino Pérez le explica a Sergio González que los


preparativos de la huelga en todo el país no han marchado al ritmo previsto, que
faltaban armas y explosivos que no llegaban del exterior, y que se determinó
aplazar el llamamiento hasta Abril. Por lo tanto, era necesario posponer también
los planes de mayor envergadura como los sabotajes que dejarían sin fluido
eléctrico a la capital, el ataque 2 varias unidades de policía, grandes incendios y el
toque de campanadas a rebato en las iglesias de la ciudad.

Todo aquel reajuste en horas, conllevaba a numerosos contratos de mucha


urgencia, violando 2 veces principios elementales del trabajo clandestino que
Sergio conocía muy bien. Prefería arriesgar una vez más su vida antes de que se
235
inmolara un grupo o se perdiera la iniciativa de una acción estratégica por
conocimiento del cambio de fecha. Aún el mismo 18 de Marzo, en que se había
planificado fue arrancaran las acciones y sabotajes armados en apoyo directo al
paro general, Sergio continuaba moviéndose constantemente dando órdenes, y
contraordenes en las capitanías y secciones del MR-26-7. le había dicho a “Maño”
que le recordara estar a la 1:30 pm en su barrio, para sostener un contacto en
Neptuno y Perseverancia pero no podría asistir, ya que a esa hora estaría preso en
el edificio del Departamento de Investigaciones y el BRAC.

Monseñor Raúl del Valle, amigo de Sergio desde los tiempos en que él fue
seminarista, le plantea al Cardenal Manuel Arteaga Betancourt, que interceda por la
vida de Sergio González López. Este luego dijo haber hablado personalmente con
el Presidente Fulgencio Batista, quien le prometió darle garantías. Sin embargo, ya
el 19 de Marzo, la crónica roja de los diarios daban la noticia de que habían
aparecido tres cadáveres sin identificar en un paraje solitario de Altahabana.

Se pudo comprobar en el necrocomio que uno de los cuerpos masacrados era el de


Sergio. Tenía múltiples orificios y quemaduras en sus carnes, los más profundos
causados por armas de fuego. Otros muchos, como una veintena, habían sido
producidos por punzonazos. Se esparcían por distintos lugares del cuerpo,
incluyendo el pecho, el estómago, las piernas y el miembro. No sin dificultades
pudo ser velado, pero casi exclusivamente por su familia, Mons. Del Valle y algunas
compañeras de la Funeraria Vega Flores (Reina y Campanario).

Los otros cadáveres a que se refería la prensa eran los de los jóvenes: Juan Borell
(S.O.A), de 21 años, capitán de milicias del MR-26-7, y su amigo y camarada de
luchas Bernardo García Santos “Motica”, de 24 años. Ambos se escondían en la
calle Benjumeda (38). Borell había sido detenido en el Vedado y “Motica” frente a
Dragones No. 305, entre Rayo y San Nicolás. Efraín Alfonso Liviano, “Cheché”,
participante también en el ajusticiamiento de Boris “El Polaco”, era capturado en el
Bar Primavera (Carlos III y Subirana). Pero en su caso, el cuerpo no apareció.
Según se supo después, el cadáver, junto al de su compañero de luchas Ramiro
Lavandero, fue lanzado al mar.

No eran casuales estos y otros crímenes seguidos. Era inminente la proximidad de


la Huelga General Revolucionaria y eso lo sabía la dictadura. Batista planteaba que
cada acción revolucionaria tenía que tener una reacción contundente, exigía
eliminar la “rabia” en la fórmula del consabido proverbio. Para sus fines
“pacificadores” promovía como Jefe de la Policía Nacional al asesino del Goicuría,
general Pilar García y García, hiena sin escrúpulos con fama de causar horros
hasta entre sus subordinados. Sólo en la capital, durante Marzo en que este señor
asumió el mando, eran asesinados dieciséis (16) combatientes revolucionarios.
Había precedido a estas irreparables pérdidas desde el mes anterior, un humilde y
valioso cuadro de la revolución: Gerardo Abreu, “Fontán”.

236
El día en que “Fontán” cumplió 26 años, el 24 de Septiembre de 1957, lo celebró
modestamente con los hermanos Iglesias Patiño, en un pequeño bar de San Rafael
y Oquendo. Allí a los combatientes del Cerro les dijo; un poco en broma, que: “por
lo difícil que se estaba poniendo la situación ese sería seguramente su último
cumpleaños” (39).
Caía la tarde del 6 de febrero de 1958. Se hallaban en la parada del ómnibus de
Infanta y Llinás, Gerardo Abreu, “Fontán” y Mario Gil González. Cuando subieron a
la guagua que esperaban el agente Pablo Núquez Fernández, del Departamento de
Investigaciones reconoce a “Fontán”. Le da el alto y trata de apresarlo dentro del
ómnibus pero los dos revolucionarios –que se hallaban desarmados- se bajan y
corren en distintas direcciones. Núquez a quien sigue es a Fontán. Dispara sin
efectividad, y cuando ya parecía que el negrito volvía a escaparse, le interceptó la
tripulación de una perseguidora.

La Dra. Celina Cardoso interpuso el recurso de hábeas Corpus, en aquel minuto


estaban vigentes las garantías constitucionales. Pero el coronel Orlando Piedra
terminaba pronto con quienes sabía que no hablarían y perdía el tiempo. Además
no tenían remedo, eran los irreductibles, los más peligrosos. Aquella misma noche
lo asesinaron. En horas de la madrugada abandonaron su cadáver en los terrenos
de la antigua Ermita de los Catalanes, en aquellos momentos el Palacio de Justicia
en construcción (40).

Según la autopsia, efectuada por los forenses, doctores Roca y Rodríguez, su


cuerpo de ciento setenta centímetros y cincuenta kilos y medios, presentaba quince
perforaciones causadas por armas de fuego; cincuenta y siete punzonazos, le
habían cortado la lengua y sus órganos genitales estaban destrozados….Le
velaron también en la Funerario Vega Flores de Reina, al menos, en horas de la
noche del día 7, porque ya por la mañana la policía impidió que el cadáver
regresara del necrocomio a la funeraria. Al parecer temían que el cortejo hacia el
cementerio se convirtiera en una manifestación popular en repudio a la dictadura.

El coronel Conrado Carratalá, Jefe del Departamento de dirección de la Policía


Nacional, no podía hacer menos que Ventura o Piedra ante el nuevo jefe. Entre
sus operativos a comienzos de aquella Semana Santa se distinguió el efectuado
en Cerrada del Paseo, entre Salud y Zanja. El despliegue se hizo para garantizar
la detención del “peligroso” estudiante del cuarto año de Medicina llamado Tirso
Urdanivia Pedrosa. Según informes el joven se había iniciado como terrorista en la
Organización Auténtica (OA) y en aquellos momentos era un dirigente imputante
del Movimiento 26 de Julio. En el registro le ocupó un mapa de la ciudad donde le
llamó la atención los puntos marcados. Carratalá pensó que podrían ser lugares
donde se escondieran armas u objetos de movilización y contactos para ataques.
Por todo lo cual, ordenaba a los Jefes de demarcaciones en Centro Habana,

237
practicar minuciosos registros, investigar y rendir cuenta urgentemente de la
situación de los siguientes puntos:

• Gervasio, entre San Rafael y San Miguel.


• San Miguel entre Espada y Hospital.
• Avenida Menocal (Infanta) y Neptuno.
• Neptuno esquina a Marquéz González
• Oquendo, casi esquina a San Rafael (41).

El día en que el G-5 Especial de Carratalá detuvo a Tirso Urdavinia, se hallaba en


la casa su padre que era invidente. El anciano quiso acompañar a su hijo y lo
complacieron. Jamás regresaron, ni sus restos serían encontrados….

La Habana ofrecía este panorama de desigual confrontación en las vísperas de la


Huelga General Revolucionaria, y aunque nuevos cuadros, de la talla de Marcelo
Salado Lastra y Oscar Lucero Moya ocupaban los puntos de avanzada en acción y
sabotaje, se hacía sentir las ausencias de El Curita y Fontán. Únase a esto que
con las redadas últimas las armas con las que se encontraban eran cada vez
menos, sin que acabaran de llegar los que conseguía el Movimiento en el exterior.
Mientras tanto, muchos aspectos organizativos estaban aún por resolver, sobre
todo en la sección obrera. No obstante, se sentía una necesidad impostergable de
romper el corojo. Aunque es fácil a posterior hacer disquisiciones de los errores y
de lo que faltaba, lo cierto es que en aquel momento se decidió no aplazar más la
fecha, so pena de defraudar a los combatientes y al pueblo, y hacer que la cresta
de agitación revolucionaria descendiera.

El llamado se produce el miércoles 9 de abril, a las 11 am., por Radio Progreso


(Infanta 2105) y otras populares emisoras de entonces. Le precedía primero la
canción de moda “Marcelino, Pan y Vino”, la que era interrumpida para en que en
su lugar se escuchara el “Himno Invasor”.

Luego un silencio y el locutor Wilfredo Rodríguez Cárdenas emocionado decía:

¡Atención Cubanos! ¡Atención!. Es el 26 de Julio llamando a la Huelga


General Revolucionaria.
Adelante Cubanos.
Desde este momento comienza en toda Cuba la lucha final que sólo
terminará con el derrocamiento de la dictadura.
¡Obreros, estudiantes, profesionales, patronos, a la Huelga General desde
este momento!.
¡Soldados, policías, marinos! ¡A luchar junto al pueblo a conquistar la
libertad!
¡Pueblo a la calle!. Lanza cócteles, obstruye el tránsito, celebra mítines
238
relámpagos.
¡A la Huelga General desde este momento!. Seis años de lucha culminan
yaen la victoria. ¡A la calle pueblo de Cuba!
¡A conquistar la libertad! (42).

La convocatoria de la huelga fue así, sorpresiva para facilitar las acciones y


sabotajes, que debían encender la llama de la insurrección popular, retirándose
todo el sistema previsto.

El Frente Estudiantil Nacional (FEN) cumplió su objetivo esencial, que las escuelas
paralizaran sus clases. Realmente desde Marzo los centros de enseñanza estaban
en huelga. Artes y Oficios había sido de las primeras en cerrar, y en escuelas
privadas como la Academia Prida, combatientes de San Leopoldo realizaron hasta
prácticas de tiro. No pocas escuelas primarias detuvieron también sus labores,
distinguiéndose especialmente la Escuela Pública No. 3 (Belascoain 1102), la que a
pesar de su cercanía con la quinta Estación, había iniciado un paso también desde
el mes de Marzo. Su directora, Nistina Rodríguez Retamar, fue conducida ante la
presencia del comandante Estevan Ventura, quien entre otras sugerencias la
amenazó con molestar a su hijo si no se iba inmediatamente del país.

El Movimiento de Resistencia Cívica (MRC), colaboró también en el trabajo con los


profesores y maestros para que no asistieran a las escuelas. Se orientó en igual
sentido a los intelectuales de las artes y a las asociaciones o colegios
profesionales. Instó a los propietarios de tiendas y empresas industriales a cerrar
sus establecimientos y a no delatar a sus trabajadores ausentes. No obstante, en
no pocos comercios la sección de milicias se vio obligada a cerrarlos a punta de
pistola, como en Los Sitios, donde el grupo de Juan Miguel Hernández fue
paralizando todo el movimiento comercial y de público.

Muy vinculado a la Resistencia Cívica (MRC) y a las Mujeres Martianas (FCMCM)


actuaría el Comando Femenino del 26 de Julio, organizado y dirigido por Pastorita
Nuñez. Una de sus más activas integrantes en Centro Habana lo fue la compañera
Desusa Baltar Hermida, española de 58 años, quien junto a su esposo, también
oriundo de “la madre patria”, Julio Echemendía, ofrecerían generosamente su casa,
en 25 No. 66, segundo piso, entre Espada y Hospital, donde además participaron
en la confección de cocteles Molotov y otros enseres bélicos caseros en apoyo a la
Sección de Milicias.

El Comando Femenino del MR-26-7 y el MRC retomaron los contactos de “El


Curita” en las iglesias católicas, en especial en la Iglesia de la Caridad (Salud y
Manrique) donde se crearon las condiciones para hacer allí una especie de
pequeño hospital en campaña con muchachas acuarteladas, las que se habían
preparado para efectuar los primeros auxilios a los heridos.
239
Las acciones y sabotajes armados estarían a cargo de la Sección de Milicias. La
Gran Habana se había dividido territorialmente en zonas que agrupaban a varios
barrios. El capitán Roberto Rodríguez Morales atendió gran parte del territorio del
actual municipio Centro Habana, abarcando desde Infanta hasta Galiano. Desde el
día 8 había acuartelado a sus tenientes. No todos los grupos dispusieron de
armas, pero el del teniente Mario Alvarelos García “Maximino” logró cierto arsenal,
el que fue ocultado en el apartamento No. 8 de Jovellar No. 165, entre Espada y
San Francisco.

Otro grupo que pudo contar con algunas armas fue el de Víctor Sorí Marín, quien
relevó a Cheché Alfonso cuando éste fue asesinado. Además de unas pocas
pistolas y revólveres, pudo distribuir un fusil y dos ametralladoras. Naturalmente
decenas de milicianos quedaron esperando armas.

El grupo de Humberto Campos en la Victoria dependía también de la llegada de


armamentos. Partiendo del acuartelamiento en Subirana No. 217 de todas formas
obligaron al cierre de los comercios que permanecían abiertos y con lo que
pudieron obstaculizaron el tránsito de Infanta hasta La Habana Vieja.

Antonio Jures, sin armas quedó movilizado con sus milicias en el Parque de La
Fraternidad. Contaban con la posibilidad de que el asalto a la Cía. Armera de Cuba
S.A, en Mercaderes y Lamparilla, fuera un éxito. Allí un comando dirigido por
Marcelo Plá cumple la primera fase del Plan, pero cuando ya se iban a llevar el
arsenal son descubiertos, iniciándose un tiroteo y fracasando la acción. Aquí
pierde la vida el estudiante de Artes y Oficios, Carlos R. Aztiazarain Turró.

Las acciones y sabotajes, al margen de los escasos recursos, no tuvieron la mejor


organización. Era fundamental causar afectaciones serias en los servicios
públicos, pero esencialmente en el fluido eléctrico. Para ello se contó con el
talentoso ingeniero Federico Bell-Lloch, quien retomando la exitosa experiencia de
Suárez 222, propuso sabotear las redes soterradas, volando determinados
registros eléctricos.

A tal objeto fue alquilado un local frente al registro de Estrella y Lealtad. Se cavó
un túnel hasta llegar a los cables. Participaron en las obras Orlando Pérez y “Tato”
Sabanilla, entre otros combatientes. Sin embargo, a la hora “O”, como recuerda
Bell-Lloch, “fue una odisea, porque lo que yo recibí fueron unos cuantos
cartuchos de dinamita y tuve que fabricar la bomba allí mismo, ante el
registro, para abrir el cual ni siquiera tenía herramientas adecuadas. Con la
acción logramos interrumpir dos días el fluido eléctrico en una zona grande
que abarca el Vedado y de Belascoain e Industria” (43).

240
Por su parte, Manuel Uriel y su grupo en medio de un fuerte tiroteo lograban
quemar el registro de Prado y Ánimas, afectando también el servicio de gas. Pero
el grupo de Rogelio Perea Suárez, “Rojito”, Carlos Acosta, Pedro Gutiérrez y
Carlos Figueredo, quienes debían inutilizar el registro de Reina y Escobar, por no
chequear y valorar previamente las características del objetivo, ni siquiera pudieron
subir la tapa, que estaba fuertemente sellada con plomo.

El Comité Nacional de Huelga y el Frente Obrero Nacional (FON) estuvieron


virtualmente atados, no sólo por la concesión sorpresiva del llamamiento, sino por
la hora escogida, las once de la mañana, cuando ya todos los obreros y empleados
se hallaban en sus centros de trabajo. De todas formas, apoyan el paro los
combatientes telefónicos, con el fuerte grupo de combatientes en la propia sede
central de Águila y Dragones; los eléctricos igualmente, con los compañeros de
Carlos III; los gastronómicos y empleados del comercio; los tabacaleros y
cigarreros; y los gráficos.

A iniciativa de muchas fábricas, a fin de paralizar la producción, en otros centros


como las emisoras de radio se ideó extraer una pieza clave en el sistema, o
destruirla. Entre los gráficos quien permitió generalizar la fórmula fue el mecánico
de linotipos Miguel Aparicio Lagunar, del periódico El Mundo (Virtudes No. 252),
este obre era miembro del Comité de Huelga en el sector gráfico, junto a sus
compañeros de El Mundo: los periodistas Carlos Lechuga y el comunista Manuel de
Jesús Zamora y Zamora “Zamorita”, y el linotipista Enrique Ross. Todos los demás
integrantes del Comité de Huelga radicarían en talleres ubicados en Centro
Habana. Y es que como vimos, la mayoría de la prensa periódica de la capital tuvo
sus imprentas aquí.

De El País (Reina No. 158), era el linotipista Octavio Fernández Boni; de


Excelsior, en el mismo taller, el linotipista Carlos Calvo Alonso; el obrero Andrés
Solís Mesa labraba en El Crisol (Manrique No. 166). Las revistas Carteles y
Variedades se editaban en el llamado Instituto Cubano de Artes Gráficas (Infanta y
Peñalver). Aquí había también un grupo de combativos obreros de la dirección del
FON en el sector, ellos eran: Jorge Lezcano Pérez, Pavel del Bosque, Orlando
Sánchez y José Iturriaga. Se destacarían también otros compañeros, como los de
Prensa Libre, mencionada, más en el periódico Alerta (Carlos III No. 615) se
interrumpió la salida normal de las publicaciones y hubo casos en que fueron
enviadas fuerzas militares, para suplir la ausencia de los obreros. El País y
Excelsior fueron tomados por Marina de Guerra, pero allí Carlos Calvo había
quitado la pieza clave a 17 de las 18 máquinas de linotipo que tenían los dos
periódicos. Cuando descubrieron por qué no funcionaban las máquinas tuvieron
que rastrearlas, no solo en el Cuartel de San Ambrosio, sino también en otras
dependencias y nunca la salida del periódico tuvo la misma calidad y con mucho
menos hojas.

241
Las piezas extraídas –recuerda Carlos Calvo- las llevó “a una casa situada en
la calle Escobar, entre Reina y Salud; por último al Café El Polo, en Reina y
Ángeles. Una vez finalizada la huelga, pero aún con la Marina de Guerra en
los talleres, dichas piezas se recogieron con discreción y se trasladaron, una
a una, a los talleres donde se le entregaban a los mecánicos. En la operación
cada compañero tomaba una pieza envuelta, y se la echaba en e bolsillo;
luego la llevaba enseguida para el taller”.(44)
Al margen de los éxitos en sectores, talleres o fábricas el trabajo de preparación de
los trabajadores, de la huelga en sí fue débil y careció de unidad. Aunque arriba el
FON, partiendo de la Sección Obrera del MR-26-7, tuvo contactos con el PSP y el
comité de Demandas Obreras por intermedio de Ursinio Rojas; con la Sección
Obrera del DR-3-3. a través de Pedro Martínez la Sección Funcional de los
Trabajadores de la Ortodoxia Histórica; e incluso con Orencio Batista, por los
auténticos, faltó la estrategia y la unión para la labor en la base con los obreros. En
reflexiones sobre el 9 de abril, el compañero Alfredo Rancaño Álvarez, del Comité
Municipal Habanero de huelga, reconocía que la gestión de huelga como tal “casi
no se sintió” (45).

Jesús Soto Díaz refería los errores tácticos, explicando que “algunos dirigentes
obreros no tenían experiencia, eran patriotas simplemente, y la huelga fue
una huelga en frío”…(46). Por su parte, Octavio Luit Venzant “Cabrera”,
coordinador de la Sección Obrera del MR-26-7 en La Habana, precisaba:
“Hicimos esfuerzos, pero en el seno del Frente Obrero Nacional, que debió
agrupar a todas las fuerzas antibatistianas y revolucionarias, la unidad no se
logró” (47).

Al caer la tarde del 9 de abril el reducido parque de las pocas armas se agotaba,
los cocteles molotov que no fueron ocupados ya se habían tirado. Las fuerzas
represivas tomaban la iniciativa en las calles. Fue entonces que, a través de la
planta de microonda de la Jefatura de la Policía Nacional, Pilar García dio esta
orden “¡No quiero heridos, ni prisioneros!” (48). Aún en horas de la noche se
sentían tiroteos y las sirenas de las perseguidoras. Sin embargo, como recuerda
el combatiente Bell-Lloch; “lo que hicimos es noche fue más por romanticismo
que otra cosa” (49).
Aproximadamente un centenar de hombres fueron asesinados en la ciudad aquel 9
de abril, podrá imaginarse cuánta angustia la de los revolucionarios. Cuando
pensaban que se acercaba el momento de echar al dictador, se cosechaba el
mayor martirologio de toda la historia de la insurrección de La Habana en menos de
24 horas. El descalabro fue aplastante. Pero ello no significó que los combatientes
cejaran en su decisión de continuar luchando y dar su vida por la patria. Un
242
vibrante ejemplo en el territorio lo dio el estudiante de bachillerato Mario Reguera
Gómez, miembro del DR-3-3, el 20 de abril de 1958.

Quiso ese día rendir tributo a sus compañeros asesinados en Humbolt 7, realizando
una acción. Le acompañaba Carlos Figueredo Rosales, pero cuando ya se
retiraban él es seriamente herido y cae en Infanta, casi esquina a Estrella. Hasta
allí llega atraído por el tiroteo un teniente de la Policía Nacional, y antes de brindar
auxilio a aquel joven de 22 años quien casi inerte se desangraba en la acera,
preguntó quién era. “Es un revolucionario” –le dijeron- sin el menor escrúpulo
descargó sobre él su pistola.

A partir del 3 de Mayo en la reunión de Altos de Mompié se analizan las causas del
revés del 9 de Abril. Se enfatiza en la necesidad de la unidad y se acuerda que el
Estado Mayor del Ejército revolucionario, incluyendo las fuerzas del llano y las
operaciones del Ejército Rebelde radicarían en la Sierra Maestra, teniendo en Fidel
Castro Ruz a su Comandante en Jefe.

El enviado del Jefe de la Revolución para reorganizar la insurrección en la capital


llega a ciudad el 15 de Mayo. Se trataba del comandante Delio Gómez Ochoa,
quien tenía además entre sus objetivos la promoción de frentes guerrilleros en todo
el occidente y centro del país, en coordinación estrecha con el llano. Se reúne con
Faustino Pérez, René Ramos Latour “Daniel”, David Salvador Manso, y Juan
Ramón García “Nicolás” y Marcelo Fernández Font “Zoilo”.

El comandante Gómez Ochoa, evidentemente no tuvo la mejor impresión en sus


primeros contactos. Al informar a Fidel le decía: “Me siento completamente
deprimido al ver el cuadro de pánico que me han ofrecido en La Habana”
(49).Por supuesto, el aún ni imaginaba en qué condiciones desarrollaban la lucha
los combatientes clandestinos en la ciudad. Se quejaba también de las dificultades
para disponer de un cuarto para dormir; que el MR-26-7 en La Habana no le había
ofrecido “ni un arma para la defensa personal” y que decían no tener “ni un
centavo” (50). También le hacía referencia a instrucciones generales y a algunos
planes de acción armada y sabotajes para revitalizar el movimiento.

Le contestaba el Jefe que no debía desesperarse. “Nosotros no los apuramos a


ustedes, al contrario –decía- nos preocupa que ustedes se vayan a apurar
demasiado. Sigue a pie de la letra nuestra instrucción de preparar todo
cuidadosamente, invertir el tiempo necesario en estudiar el ambiente, el
personal, el terreno, las circunstancias. A juzgar por tu comunicación veo
que no obstante los ingentes obstáculos has emprendido el camino con ánimo
resuelto y fe en el éxito…(51).

243
El MR-26-7 en la ciudad disponía realmente de algunas armas. En Centro Habana,
por ejemplo, se escondían en el edificio “Aro”, de la calle San Rafael, algunas de
las rescatadas en la jornada del 9 de Abril por Nimia Menocal de Armas y Mario
Alvarelos García “Maximino”. Pero además, en colaboración con el MRC se
gestionaba la importación de armamento, para las milicias urbanas, pero además
algunas de grueso calibre propias para los frentes guerrilleros. El trasiego se hacía
a través de la agencia “Autos Latour” (Lucena, ente Zanja y San José). Esta
empresa importaba autos de uso y piezas de repuesto. Mandaban el armamento y
otros pertrechos bélicos, insertados en los bastidores de los vehículos, entre los
forros de las puertas y hasta en los tanques de gasolina.

Se organizan planes de atentados a odiadas figuras, pilares de la represión y del


Gobierno batistiano, entre ellos; el comandante Esteban Ventura, al piloto Catasus,
quien dirigía los bombardeos aéreos a la Sierra Maestra; y al Presidente del
Tribunal de Urgencia, magistrado Bringuier, quien se había ganado las simpatías
del dictador por la crueldad de sus decisiones relacionadas con causas políticas.
Sin embargo el sistema de opresión parecía estar mejor lubricado que nunca…

Al poco tiempo de estar en La Habana el comandante Delio Gómez Ochoa y los


órganos represivos conocían de su misión, de su ficha personal, procedencia y
estuvieron a punto de capturarle. El servicio de Inteligencia militar (SIM) registraba
el edificio “Washington”.

Batista desde la creación del Estado Mayor Conjunto, donde confiaba el mando de
las distintas instituciones militares y la policía habla procurando la mejor
coordinación entre los órganos de inteligencia. La designación de Pilar García
como Jefe de la Policía Nacional no solo era para garantizar “mano dura”, sino
porque ese señor era Brigadier del Ejército y junto a su hijo, el oficial Irenaldo
García Báez podían hacer un buen dueto de contrainsurgencia que le garantizara la
seguridad y el orden público en la capital.

Pero el comandante Ventura y el coronel Carratalá no pierden ocasión para


sobresalir, incluso sobre el nuevo y flamante Jefe. Precisamente el 24 de mayo, en
saludo al inicio de una ofensiva militar de 14 batallones contra la Sierra Maestra, los
verdugos capitalinos presentaban ante la prensa el arsenal descubierto en la
“Agencia Latour”, junto a un nuevo grupo de “terroristas”.

Llegan a tener información de que estaban llegando a la ciudad, al igual que


Gómez Ochoa, combatientes revolucionarios procedentes de Oriente a fin de
reforzar la lucha clandestina en la capital con hombres y cuadros fogueados, pero
no conocidos aquí.

Entre investigaciones, registros y delaciones ubican y sorprenden a un oficial de


milicias santiaguero, quien es conducido a la Quinta Estación. Se trataba de un
participante de la Secta del 30 de noviembre de 1956: el capitán Emilio corrales.
244
Sobre las 5 de la madrugada, el detenido en un derroche de valor y audacia,
arranca a sus guardianes una ametralladora Thompson y a tiros de ráfagas logra
alcanzar una de las puertas laterales de la estación. Pero el fuego se concentra
sobre él y a penas puede cruzar Belascoain en busca de la calle Nueva del Pilar.

Las fuerzas represivas envalentonadas en la ofensiva de la tiranía sobre la sierra


Maestra golpean todo movimiento de la insurrección urbana. Cuando ya el nuevo
atentado a Esteban Ventura estaba casi listo, con todo el chequeo hecho, el
explosivo y las armas preparadas, ocurrieron sospechosos contratiempos, entre
ellos la detención del compañero Juan Ramón García (S) “Nicolás”, pero conocido
por todos como “Ramonín”, quien era en aquellos momentos el Jefe de Acción
habanero.

En reunión efectuada en la casa del matrimonio español de Jesús Baltar y Julio


Echemendía (25 No. 66, altos), se designó a Ángel Ameijeiras Delgado “Machaco”,
Jefe de Acción en La Habana. En aquel momento “Machaco” se encontraba
recuperándose de una herida en un pié, luego de haber cumplido la misión de
ejecutar a un esbirro.

A partir de ese momento, principios de Julio, “Machaco” comienza a recorrer la


ciudad para dominar integralmente la situación, mientras conocía y atendía a todos
los factores. Buscó y aglutinó a los distintos jefes y combatientes que se hallaban
dispersos; indagó sobre la cantidad de milicianos, zonas de influencia y armas con
las que se contaba. En el caso de las armas largas orientó recogerlas para
enviarlos a los focos guerrilleros.

Convocó a los principales jefes de las milicias al objeto de comenzar a aplicar una
nueva estructura por escuadrones y grupos, al tiempo de concretar los planes
insurreccionales. La reunión se efectuó en los altos de una tienda en Monte, entre
Ángeles e Indio. Allí participaron: Humberto Campos, Armando Menocal, Fidel
González, Ramón Perdomo, Héctor Zamorano, Nuñez Olano, Armando Rivas,
Hidelisa Esperón y José Antonio Fernández. Cada escuadrón llevó el nombre de
un mártir, y uno de ellos, el capitaneado por Humbertico Campos, una gran parte
del territorio de Centro Habana, se le denominó: “SERGIO GONZÁLEZ LÓPEZ, EL
CURITA”.

Aquella histórica reunión de “Machaco” Ameijeiras con sus capitanes no sólo ganó
en organización la insurrección Habanera y se discutieron planes concretos.
Además como asevera el combatiente e historiador Wilfredo Sánchez Nuñez, sin la
historia de la insurrección- fue “una clase maestra sobre el trato humano y el
respeto que se debía tener con el enemigo. Hay que recordar que quien decía esto
ya había perdido dos hermanos asesinados (Juan Manuel y Gustavo) y los tres
restantes, incluido él, habían sido golpeados y torturados por los cuerpos
represivos” (52).

245
Ya para el 26 de Julio, rompiendo el impasse de pequeñas acciones y al calor de la
vibrante victoria rebelde en El Jigüe, Machado y Gómez Ochoa proyectan
rememorar los tiempos de “La noche de las 100 bombas”. Habían conseguido
alguna dinamita en las Minas de Matahambre con la que planificaron conmemorar
el V aniversario del Asalto del Cuartel Moncada.

La noche del 25 al 26 de julio se pusieron más de 30 bombas en toda la ciudad. En


Centro Habana los lugares seleccionados estaban relacionados con la afectación a
algunos comerciantes batistianos, algunos incluso informantes de la policía y contra
la sede de la camarilla mujalista. Fueron los siguientes:

• Bar Marianela (San José, entre Belascoain y Lucena).


• Bar Fouché (San Miguel y Belascoain)
• Farmacia (Infanta 110)
• Almacenes Ultra (Reina No. 109)
• Palacio de la CTC (San Carlos y Márquez González)

Las explosiones demostraban, a contrapelo de los informes del Jefe de la Policía


Nacional, que la insurrección urbana capitalina, lejos de haber muerto, era capaz
de reeditar audaces explosivos como en tiempos de “El Curita”. Esto estremeció de
indignación a Pilar García quien se propuso vengarse de los revolucionarios
colocando un cadáver en cada lugar donde explotaron bombas.

Para el territorio de Centro Habana sólo reconoce la explosión en el Bar Marianela


donde colocaba el cadáver de un ciudadano blanco, de mediana estatura sin
identificar. La versión oficial que ofrecía la jefatura de la Policía Nacional fue que
cada uno de los fallecidos eran terroristas sorprendidos en su fechoría, quienes
habían hecho resistencia a las fuerzas del orden. En realidad muchas de las
víctimas no eran ni combatientes revolucionarios, sino simplemente víctimas,
sospechosos o detenidos por motivos no políticos a quienes se les asesinó. Con
esta maniobra Pilar García se proponía que el MR-26-7 se sintiera responsable
indirecto de estas muertes y que supiera lo que podía ocurrir si nuevamente en La
Habana sonaban petardos.

Al concluir el mes de Julio habían transcurrido 67 días de la ofensiva del Ejército


Batistiano contra la Sierra Maestra sin lograr debilitarla, al contrario. Cada combate
enriquecía de pertrechos a los rebeldes, aumentaba el prestigio de Fidel Castro y la
insurrección en operaciones militares en tanto que la moral de los “casquitos” y
oficiales del régimen era cada vez más baja. A principios de Agosto ya se invierte
definitivamente la cancelación de fuerzas a favor de los rebeldes, quienes
comienzan la organización de dos columnas invasoras, como lo hicieron en la
guerra del 95 Maceo y Máximo Gómez.

246
Los jefes de la represión política en la capital observan con alarma y preocupación
el curso de las operaciones militares y cómo no pocos oficiales del Ejército son
hechos prisioneros, otros desertan y hasta conocen del caso del comandante
Quevedo, quien pasa a las filas del Ejército Rebelde. Desde luego, los Ventura,
Carratalá, Piedra y el flamante general Jefe, estaban demasiado manchados en
sangre como para pensar en bajarse del burro. Su reacción fue recrudecer más aún
el terror policial, la impunidad y resanía criminal, en venganza por los éxitos de la
Sierra Maestra. Se proponían demostrarle a su padrino, El Dictador, que ellos si
sabían cumplir sus órdenes.

El comandante Esteban Ventura es, como casi siempre, quien sobresale entre el
resto de sus congéneres. Es él quien presenta desde principios del mes de Agosto
nuevos arsenales y la detención de numerosos combatientes. Fulgencio Batista
directamente le premia ascendiéndole al grado de teniente coronel. Es el momento
en que se “quema” el importante centro operativo del 25 No. 66, segundo piso,
entre Espada y Hospital, donde el matrimonio español de Jesusa Ballar y Julio
Echemendía ofrecían abrigo a los revolucionarios en peligro. Ambos son detenidos
y enviados a prisión por violar las leyes de extranjería y participar en actos
conspirativos contra los poderes del Estado.

También otros muchos compañeros, al ser retratados o sus nombres aparecer en la


prensa, son “juzgados” en el tribunal de urgencia y remitidos a prisión. Sin
embargo, no todos los combatientes detenidos tienen esa “suerte”.

El método de Pilar García era el crimen directo, a la vista de la población, a manera


de escarmiento. El 2 de Agosto amanecen, tirados en lugares céntricos, los
cuerpos de dos combatientes y otras víctimas nunca identificadas. En Infanta y
Príncipe aparece el cadáver de Pedrito P. Valdés Méndez, de 20 años, quien había
sido militante de la Juventud Socialista pero se había integrado a Acción y Sabotaje
del MR-26-7; en Infanta y Zanja son abandonados los restos de Conrado Duany
Pullido, de 18 años, estudiante de bachillerato y miembro del 26 de Julio. Los
cuerpos que no fueron reconocidos aparecieron en: San Lázaro y Trocadero; frente
a la casa de Virtudes No. 619; y en Oquendo y Desagüe. A todos, como era usual,
les colocaron petardos en las manos y hasta cajitas de fósforos para significar que
eran “terroristas”.

El 3 de Agosto era detenido el teniente de milicias José A. Tudela Muñoz “Pancho”


de 23 años de edad. Residía en Santa Marta No. 19 y Belascoain. Fue un
importante jefe de grupo en la zona del capitán Roberto Rodríguez Morales,
participando en infinidad de acciones, fuera del centro de la ciudad, e incluso de la
provincia, como cuando actuó en el sabotaje a la refinería de Cárdenas. Su salud
era muy delicada y según se conoció por los expedientes del hospital de la Policía,
estuvo en algún momento ingresado allí ante una aguda cirrosis hepática. De allí se
lo llevaron y no se supo más de él….

247
El Hospital de la Policía Nacional; (Oquendo y Estrella) no fue como otras
dependencias del cuerpo. A saber, no pocos revolucionarios fueron curados con
celo y profesionalidad. Es conocida la fotografía donde aparece José Antonio
Echeverría inconsciente, atendido por dos médicos de la policía. Ya a finales de
1958 hubo el caso del joven revolucionario José Carreño Loyola, de 23 años, a
quien entre las torturas le habían picado a navaja los brazos y las coyunturas,
mientras la espalda se la quemaban con soplete. Para reanimarlo le echaban sal y
vinagre en las heridas, pero hubo un momento en que perdió del conocimiento. No
sabe cómo llegó a los calabozos del Hospital Policiaco, que fue para él como un
oasis. Recuerda a un médico quien lo atendía, le había puesto un suero e impidió
que se lo volvieran a llevar….

A principios del mes de septiembre la Jefatura de la policía Nacional ordena estar


muy alertas. Según confidencias, era inminente la posibilidad de sabotajes y otros
“actos vandálicos” y en efecto, una potente bamba estalla en la conductora maestra
de Nueva del Pilar y Santa Marta, el 30 de Septiembre. Era una acción del
escuadrón de Cayo Hueso e Infanta, capitaneado por Armando Rivas Cabezas.
Causaba serias afectaciones al acueducto, reactivándose la ira de los criminales.

Al día siguiente, el 1ro de Octubre, en el lugar de la explosión aparecen los


cadáveres de cinco jóvenes negros, que no tenían ninguna relación con el sabotaje.
El día 2, con el mismo cinismo asesinan a otros tres muchachos a quienes tampoco
identifican: uno en Oquendo, entre Escobar y San Lázaro; otro en Vapor, entre
Infanta y San Francisco; y en Escobar entre San Lázaro y Lagunas. Tres días
después, escogen los portales del cine América (Concordia No. 61) para abandonar
allí a otra de sus víctimas.

Mientras cosas como estas siguen ocurriendo en el resto de la ciudad de La


habana, el comandante Camilo Cienfuegos, al frente de la Columna “Antonio
Maceo”, se acerca a Yagüajay, el comandante Ernesto “Ché” Guevara, en la
columna “Ciro Redondo”, atraviesa el Camaguey en dirección a Santa clara.

Los crímenes en la capital debieron estar impulsados por el temor vesánico a la


derrota. Infinidad de hoteles, casa de huéspedes y edificios y apartamentos en
Centro Habana eran registrados por la Policía Nacional y el Servicio de Inteligencia
Militar (SIM). Tan solo el 25 de octubre a la Sexta Estación, la jefatura le ordena
registrar 16 edificios. Y no era para menos, según informes, la inteligencia
aseguraba que:

Los hoteles, casa de huéspedes y otros edificios de la capital, se encuentran


repletos de elementos que están siendo enviados desde otros lugares de la
República por jefes de revolucionarios, con el fin de reunir a la mayor
cantidad posible de elementos para un movimiento de carácter insurreccional
que preparan… (53).
248
Batista, como antes Machado, trató de preservar el poder a toda costa a pesar de
que la Embajada de los Estados Unidos le indicaba la necesidad de alternativas
inmediatas sin su presencia. Pero ante las elecciones del 3 de noviembre
nuevamente organiza una burda farsa, quizás la más evidente de todas porque ya
no le apoyaban ni los elementos de la oligarquía que deseaban mano dura para
garantizar los negocios.

Consternación causaba en el pueblo el 8 de Noviembre, la masacre de Goicuría y


O’Farril donde caían combatiendo Ángel “Machaco” Ameijeiras Delgado, el jefe de
Acción de La Habana, Pedro Gutiérrez y Rogelio Perea “Rojito”, mientras en huída
y represada Norma Porras. Desde la Sierra Maestra, el Jefe de la Revolución
preparaba una alocución que era leída por Jorge Enríquez Mendoza por Radio
Rebelde. En ella, Fidel comparaba la estirpe de los Ameijeiras con los de los
Maceo. Mencionaba a los caídos: Juan Manuel, Gustavo y Ángel; que Salvador se
hallaba preso y que Eugenio era uno de los comandantes del Ejército Rebelde. Y
concluía el sentido homenaje con estas palabras:

Ángel Ameijeiras sigue siendo un combatiente de la Revolución. Los


valientes nunca mueren en el recuerdo del pueblo; los valientes que caen,
siguen peleando en todos los combates, porque los llevan en sus
pensamientos nuestros gloriosos soldados.
Cada héroe que cae, forma filas en primera línea y son los que mandan a
nuestros hombres, que no en balde, las columnas guerrilleras llevan los
nombres de los héroes que han caído.
Comandante Ángel Ameijeiras, ante ti se cuadran todos los combatientes del
Ejército Rebelde y esperan tus órdenes, cuando se acercan a las calles de La
Habana (54).
Otros combatientes relacionados con la insurrección en Centro Habana, fueron
privados también de conocer la victoria en el mes de noviembre de 1958, como el
que fuera asaltante del Moncada Humberto Valdés Casañas, quien vivió en San
Lázaro No. 353, entre San Nicolás y Manrique, y fue asesinado el día 17. Por
aquellos días Antonio J. Vilaboy Viñez era conducido a la Quinta Estación, sus
restos fueron hallados después del triunfo de la Revolución en el cementerio de
Gauanabacoa. Y el día 26, era detenido por el Parque Maceo el joven José Luis
Arruñada Martín, de sólo 19 años, y trabajador de la compañía de teléfonos (Águila
y Dragones). Debió soportar casi una veintena de días de tortura antes de que
fuera asesinado.

Aquel mar con sangre de patriotas no podía dar resquicios a la desunión. ¡Todos
contra aquel régimen bárbaro de opresión y muerte!. El 10 de noviembre de 1958
se creaba el Frente Obrero Nacional (FONU). Como paso previo unificador de
249
todas las fuerzas revolucionarias y antibatistianas en general, el FON había hecho
un llamado “a la UNIDAD DE TODOS, absolutamente todos los trabajadores y sus
dirigencias. Las agresiones, los atropellos y los crímenes que está sufriendo la
clase obrera y esta terrible agonía en que está sumida la Patria, debe tener; ¡y
tendrán! Un próximo fin, por la acción resuelta y unida de los trabajadores” (55).

NOTAS Y CITAS
(1) Hoy La Habana, 11 de marzo de 1952 p.l.
(2) Castro Ruz Fidel "¡Revolución no, zarpazo "¡La Habana 14 de marzo de 1952, en: El
Grito del Moncada, Ciudad de La Habana , Ed. Política, 1986 vol pp 131 - 132
(3) Pelayo Pelayo, Aida Discurso de fundación del Frente Cívico de Mujeres del Centenario
Martiano en el Salón de los Mártires de la Universidad de La Habana, en noviembre de
1952, En : Carmen Castro Porta "El Frente Cívico de Mujeres del Centenario Martiano",
La Lección del Maestro, Ciudad de La Habana, Ciencias Sociales, 1989 p. 29 .
(4) Pumpido de la Nuez, Mary " Ruben Batista, mártir ", en ob. Cita p. 64
(5) Gana2 Oliverus, Julio José Antonio Echeverría: La lucha estudiantil contra Batista,
Ciudad de La Habana, Ed. Política, 1979, p. 37.
(6) Martínez, Alba " Ruben Batista, mártir " ob. Ut. p 63 - 64 .
(7) Fuentes, Fulvio Artículo de Bohemia citado por Mario Mencía en El Grito del Moncada
ob cit. p. 301
(8) El 13 de febrero de 1953 falleció Ruben Batista Rubio. Una tarja conmemorativa le
recuerda en el lugar donde cayera mortalmente herido, San Lázaro s/n, entre Cárcel y
Prado, municipio Centro Habana. Fue el segundo estudiante mártir durante la tiranía
batistiana. Ya antes el 20 de mayo de 1952 había sido asesinado en Camagüey el
estudiante Sergio Reino Reyna, de solo 17 años de edad.
(9) Martín Fádragas, Alfredo Seguidores de Mella. Las luchas revolucionarias de la
Juventud Socialista, Ciudad de La Habana, Impresos Tips - Instituto de Historia de Cuba,
1998 p. 57
(10) Pelayo, A. " El Desfile de las Antorchas " en La Lección del Maestro, ob. Cit p.61
(11) Castro Ruz, Raúl. Apuntes hechos el sábado 24 de julio de 1954 en el Presidio de
Isla de Pinos, tomados de José M. Leyva Mestre, Haydée Laborí Ripoll y Teresa Andux
González La Capital en el Moncada, Ciudad de La Habana, Ciencias Sociales, 1990 p. 47
(12) Torres "Fonseca", Humberto " Mi amistad y lucha revolucionaria con Sergio
González López, " El Curita ", Revolución 19 mar 1963 p.3 c. 5
(13) Carta Semanal a.1, n.10 20 oct. 1953. Citado por el Instituto de Historia del
Movimiento Comunista y de la Revolución Socialista de Cuba , anexo al Comité Central
del Partido Comunista de Cuba Historia del Movimiento Obrero Cubano 1865 - 1958
Ciudad de La Habana, Ed. Política 1985 p. 274
(14) Juventud Socialista "¡Libertad para Fidel Castro y demás presos políticos ¡" La
Habana s. l , 16 de may 1954 .
(15) Arch. No. 317 - 953 " Confidencial " de la Jefatura de la Policía nacional, Dpto. de
Dirección al Inspector del 2do Distrito La Habana 27 de agosto de 1953. En: Archivo
Personal de Carlos Bartolomé".
(16) Pelayo y Pelayo, Aida " Desagravio al Apóstol ......una vez más " en La lección del
Maestro ob. Cit. P. 86

250
(17) Castro Ruz, Fidel " Lo que iba a decir y me prohibieron por segunda vez" La Calle 15
de jun. 1955, citado por Mario Mencía Tiempos precursores, Ciudad de La Habana,
Ciencias Sociales, 1986, p. 224
(18) Rodríguez Cruz, Rene " Gerardo Abreu (Fontan): un revolucionario íntegro "Granma
a.14, n. 32 7 jul. 1978 p.2 c. 3
(19) Pérez Alvarez, Segundo " Gerardo Abreu (Fontan) " idem p.2 c. 4
(20) Menelao Mora Morales (Pinar del Rio, 22 de julio de 1905 / La Habana 13 de marzo
de 1957). Fue combatiente revolucionario antimachadista desde las filas del ABC y
después integró la Legión Revolucionaria de Cuba, enfrentando a la primera dictadura
Batistiana en los años treinta cuando éste era coronel, Jefe del Ejército. Vivió en Neptuno
No.101, en Infanta No. 109 y en Concordia No. 655, altos, entre Soledad y Oquendo, entre
otros lugares. Al Golpe de Estado batistiano, su domicilio radicaba en Belascoain y S. José
(21) Castro Porta, Carmen " La Manifestación de Galiano " ob. Cit. P. 103
(22) Idem.
(23) Orlando Fernández Farray nació en Escobar No. 909, entre Concepción de la Valla y
Figues, actual Consejo Popular Los Sitios. De origen auténtico, es Mártir de la Revolución y
en particular del municipio de Centro Habana.
(24) Sánchez, Wilfredo y Florentino González " Sergio: huella indeleble " Así del valor
oculto, Ciudad de La Habana, Ed. Abril, 1990 p. 152.
(25) Echeverria Bianchi, José Antonio Testamento Político, en " Siempre con nosotros los
héroes del 13 de Marzo " Granma a 23, n 60 13 marzo 1987 p.1 c.4
(26) Sánchez Núñez, Wilfredo (Biografía de Joe Westbrook ) mat. Inédito.
(27) Rodríguez Calderón, Mirta " El hombre que salvó a los muertos " en Semillas de
fuego ob. Cil. v 2 p. 75
(28) Ameijeiras Delgado, Efigenio Más allá de nosotros, Santiago de Cuba, ed. Oriente,
1985 p. 12
(29) Rodríguez Curbelo, Evelio Canto a los trabajadores de la tienda Fin de Siglo .
(30) Historia del movimiento obrero..... ob. Cit. T.2 p. 334
(31) Muñoz Figueroa, Ismael testimonio ofrecido a Dolores Nieves para el artículo "
Fontán en el Recuerdo ", en Semillas de fuego ob. cit. t.1 p. 136
(32) Historia del ob. cit. t.2 p. 342
(33) Véase el testimonio de Amparo Chaple Trujillo referido por el profesor e historiador
Alfredo Martín Fadragas en su libro Seguidores de Mella ob. cit. p. 71
(34) Consignas del Movimiento de Resistencia Cívica, según un boletín provincial de ésta
organización fechado en noviembre de 1957. Citado por José María Cuesta Braniella en
los Apuntes históricos sobre el Movimiento de Resistencia Cívica sito mat. Mimeografiado,
1981 pp. 45 - 46
(35) Rodríguez, Arnold " ¿Como y por qué secuestramos a Fangio? ", en Semillas de
Fuego ob. cit. t. 1 p. 47
(36) El campeón argentino Juan Manuel Fangio cumplió su promesa de visitar a Cuba en
1981. En aquella ocasión volvió a referirse a los compañeros del comando del MR - 26 - 7
que actuó: " mis amigos secuestradores "
(37) Citado por Arnold Rodríguez Ob. cit. pp 51 - 52
(38) Desde allí, en Pueblo Nuevo, se había planificado el atentado al propietario
batistiano Boris Kalmanovich, " El Polaco " . Muy vinculado por razones fraternales y de
amistad con Orlando Piedra Nogueruela, jefe del Departamento de Investigaciones de la
Policía Nacional había promovido la iniciación de infidentes (Chivatos) en el trabajo de
inteligencia contrainsurgente. Se comentaba que había estado vinculado durante la II
Guerra Mundial al eje nazifacista, que se dedicaba al contrabando de joyas y que en virtud
251
de sus servicios a la policía tenía el grado de comandante honorario. Fue ejecutado el 3
de marzo de 1958 por un comando integrado por Juan Bonell, " Cheche " Alfonso,
Bernardo García Santos "Motica ", Delfín Rojas y Víctor Sorí Marín
(39) Lipiz, Niurka " Fontán: leyenda de un joven negro ", en Así del valor oculto, Ciudad
de La Habana, Ed. Abril, 1990 p 178
(40) Durante la Revolución se concluyeron esas obras y sus edificios se destinaron a las
sedes del Comité Central del Partido Comunista de Cuba y el Consejo de Estado en la
Plaza de la Revolución.
(41) Arch. No. 105 " Confidencial". Jefatura de la Policía Nacional, La Habana 2 de Abril
de 1958, en Archivo personal de Carlos Bartolomé
(42) Véase el artículo de Dolores Nieves Rivera " La Huelga del 9 de abril en el sector
radial ", en Semillas de Fuego, ob. cit. t.1 p. 81
(43) Bell Lloch, Federico testimonio tomado por Mirta Rodríguez Calderón para su
artículo " Anverso y reverso de una página de lucha " , en Semillas de Fuego ob. cit. t.1 p.
106
(44) Calvo Alonso, Carlos, Francisco López y Armando Fernández Los gráficos en el
movimiento obrero Cubano 1865 - 1961, Ciudad de La Habana, Ciencias Sociales 1991 p.
286
(45) Rancaño Alvarez, Alfredo testimonio tomado por Mirta Rodríguez para su artículo "
Anverso y ....... "ob. cit. p. 105
(46) Soto Díaz " Jaime ", Jesús idem.
(47) Lovit Venzant " Cabrera ", Octavio idem.
(48) Órdenes cursadas por la planta de radio de la Jefatura de la Policía Nacional el 9 de
Abril de 1958, en: Archivo Histórico de la PNR.
(49) Gómez Ochoa, Delio informe al Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz sobre la
situación en La Habana. En el trabajo investigativo de Mirta Rodríguez Calderón " Epílogo
de Abril". Semillas de Fuego ob. cit. t. 2 p. 11
(50) Idem p. 10
(51) Idem p. 12
(52) Sánchez Núñez, Wilfredo Historia del Movimiento 26 de Julio en Centro Habana, mat.
Inédito.
(53) Arch. No. 485 " Confidencial". Jefatura de la Policía Nacional. La Habana 7 de
octubre de 1958, en: Archivo personal de Carlos Bartolomé
(54) Castro Ruz, Fidel editorial de Radio Rebelde leído por Jorge Enrique Mendoza el 9
de noviembre de 1958, en Semillas de Fuego ob. cit. t. 2 p. 186
(55) Editorial. Vanguardia Obrera (nov) 1958 citado en: Historia del movimiento obrero
ob. cit. t. 2 p . 352

252
IV
REVOLUCIÓN EN EL PODER

El tirano Fulgencio Batista y sus principales verdugos huyen en la madrugada del


1ro de enero de 1959. El pueblo da la libertad a los presos políticos y se
reorganizan las fuerzas del MR-26-7 en la ciudad. Son tomadas las sedes de la
CTC, instituciones estatales, los medios masivos de comunicación y las estaciones
de policía. Para la Cuarta Estación se designa al capitán Alfredo Xiqués Alfonso, al
teniente Angelito Plá y otros combatientes centrohabaneros; asume el mando en la
Quinta Estación en principio Bernardo Corrales y luego el capitán Luis Pérez Jaén.
Para la Sexta Estación se pensó enviar a Salvador Ameijeiras, otro de los
combatientes que se hallaba preso, pero se optó en definitiva por José Antonio
Lamas de la Torre, ya que a Salvador se le reservó para la dirección de la
Radiomotorizada. Y para la Septima Estación es nombrado quien fuera
lugarteniente de “Fontán”, Ismael Muñoz Figueroa “Mallet”, quien como los demás
toma posesión del mando sin tirar un tiro. Los policías, que hasta minutos antes
habían respondido a la dictadura, ahora destruían los cuadros de Batista y de los
criminales que habían sido sus jefes, para dar formal recibimiento a los capitanes
nombrados por el 26 de julio.

Fuerzas combinadas de las milicias y rebeldes, del comandante Víctor Paneque


“Diego”, que son las primeras en entrar en la ciudad, acometen la misión de
capturar a los esbirros y chivatos de la dictadura abandonados a su suerte, para
luego juzgarlos en tribunales revolucionarios. Por orden expresa del Comandante
en Jefe se impidieron todo tipo de maltratos o venganzas contra el enemigo, ya
derrotado e inerte. Igualmente, se procuró evitar al máximo excesos contra
propiedades de batistianos, o saqueos como cuando la caida del Machadato,
aunque fue imposible impedir la quema de la sede de la revista Tiempo en Cuba
(San Martín No. 866), del sanguinario pandillero Rolando Masferrer Rojas, jefe de
la porra batistiana conocida como “Los Tigres de Masferrer”.

La Huelga General Revolucionaria, se abría paso como el colofón de unitarias que


darían la victoria a la Revolución. Era la orden sin alternativas que impartía el
Comandante en Jefe, desde Palma Soriano, fueran cuales fueran las noticias de La
Habana. Se hacían añicos las últimas maniobras de la reacción criolla y la
embajada norteamericana en el empeño de escamotear el triunfo de la insurrección
popular. El FONU y los combatientes revolucionarios de todas las procedencias,
junto al pueblo en general, todos unidos, garantizaban las órdenes de Fidel.

253
La desunión nos había privado de la victoria en el 68, el 95 y el 33. ahora, luego de
un largo camino plagado de reveses y dolorosas pérdidas, se lograba la unidad de
acción, la unidad de las organizaciones revolucionarias, la unidad popular. La
unión daría la victoria definitiva a la nación Cubana y a la Revolución, desde aquel
esperanzados amanecer de 1959.

Las calles habaneras se llenaron de alegría. La victoria fue saludada por un


desbordante entusiasmo popular, desde las primeras horas del 1ero de enero, la
noticia de la huída del tirano se recibió como algo añorado y no quedó otra
alternativa que inundar las calles para expresar la alegría.

Ante el avance incontenible de la caravana de la libertad que marchaba


consolidando el triunfo con el Comandante Fidel Castro al frente, los instantes de la
Oligarquía no se hicieron esperar. Desde la misma fuga del esbirro, un plan
emergente fraguado con anterioridad en la Embajada Norteamericana por su
embajador Carl T. Simth quiso escamotear el triunfo al pueblo.

El Departamento de Estado y la CIA propusieron una junta militar y se manejaron


nombres como los del Coronel Ramón Barguin, el General Martín Díaz Tamayo y el
Brigadier Alberto del Río Chaviano. Pero Batista no fue tan obediente esta vez a los
amos del norte, y en un instante desesperado entrega la presidencia y el mando del
ejército al General Eulogio Castillo, y este a su vez, entrega la presidencia al
magistrado más antiguo del Tribunal de Justicia Dr. Carlos M. Piedra. Aun así las
maniobras no terminarían. Barguin ofrece al Comandante en Jefe Fidel el primer
ministerio, más no el mando del ejército. Los Comandantes Ernesto Ché Guevara y
Camilo Cienfuegos tenían la orden de ocupar la fortalezas militares La Cabaña y
Colombia respectivamente, y una contundente huelga general convocada por Fidel
desde Santiago de Cuba impediría que lustrara la revolución como en 1895 y en
1933.

Los residentes en Centro Habana se sumaron de manera espontánea al acontecer


histórico de aquellos inolvidables días. Primero la alegría por la huída del tirano y el
triunfo y después en la Huelga General que quiso escamotear la victoria. Cuentan
algunos vecinos de esta área habanera que como el gran componente de la gran
mayoría de la población era proletario y popular, respondieron con energía a los
intentos burgueses de robarles el rol protagónico, y en muchas manifestaciones
entre los días 1ero, 2, 3 y 4 se arrancaron parquímetros en las calles de Monte,
San Lázaro e Infanta, como símbolo de que a la explotación le había llegado el fin.
Comenzaba así un período de consolidación de lo ganado y la reconstrucción de un
país que la codicia y las ambiciones internas habían llevado a puntos de desorden
y pobreza nunca pensados, donde la corrupción y demás males asociados llenaban
de indignación a todos los hogares honestos de Cuba.

El castigo ejemplar a los principales responsables de los crímenes cometidos por


la dictadura fue una de las primeras medidas revolucionarias que acometía la
254
triunfante revolución a su entrada el 1ero de enero de 1959 en La Habana. En el
territorio de Centro Habana se encontraban 3 estaciones de la odiosa policía al
servicio de Batista ellas eran: 4ta Estación en Zanja, 5ta Estación en Castillejo, 7ma
Estación en Infanta y Avenida Belascoain, Nueva del Pilar.

Otras medidas fueron la confiscación de los bienes mal habidos por funcionarios
del sangriento régimen batistiano, la disolución total del viejo ejercito al servicio de
la oligarquía y su sustitución por un pueblo uniformado, como diría el Comandante
Camilo Cienfuegos. La administración pública fue sacudida , los partidos políticos
que sirvieron a la opresión quedaron disueltos, así, como el congreso y extinguidos
los mandatos de gobernadores, alcaldes y concejales, se aprobó la Ley
Fundamental del Estado Cubano, basada sustancialmente en la constitución de
1940, con las modificaciones necesarias para aquellas circunstancias y exigencias
de la revolución y se nombró una comisión que se encargó del estudio de todas las
disposiciones legales dictadas por la tiranía para ser derogadas.

La dirección sindical Mujalista fue barrida, la sede de ella se encontraba en las


calles Peñalver y Oquendo, la misma acogería a los verdaderos líderes de la clase
obrera como Lázaro Peña, los obreros desplazados de sus puestos y centros de
trabajo bajo la tiranía, fueron reintegrados a sus cargos.

Todas estas medidas de un marcado carácter Democrático Popular, Agraria y


Antiimperialista causaría un imparto muy favorable en la numerosa población
centrohabanera que los esperaba. Los que temían que no fuese una verdadera
revolución comenzaron a confiar en su dirección, y su simpatía por el proceso se
hizo ilimitada, pues tantos gobiernos engañaron las esperanzas, algunos con
proyectos tentadores, que los Cubanos creían poco o nada en los políticos. Más
Fidel era diferente, su programa del Moncada paso a paso se hacía realidad, y a
pesar de las contradicciones internas del gobierno provisional revolucionario las
medidas revolucionarias se llevaban a efecto.

El área centrohabanera fue gestora y participó de cuanto en aquellos días hizo la


revolución por los desposeídos y las clases menos favorecidas, todos se sumaron y
llegó el momento en que fue toda la ciudad haciendo revolución.

El Gobierno Provisional Revolucionario, el primer Gabinete Profesional quedó


constituido en Santiago de Cuba, como Presidente el Dr. Manuel Urrutia llevo este
designó a el abogado José Miró Cardona como Primer Ministro, el Dr. Roberto
Agramonte, quien heredó la Dirección del PPC(O) tras la muerte de Eduardo
Chibás, como Ministro de Estado, el ingeniero Manuel Ray como Ministro de Obras
Públicas. Todos ellos se mostraron reacios a comprender las profundas
transformaciones que requería el país. Por otro lado hubo en este primer gabinete
personalidades que hicieron y dan lo mejor de cada uno por hacer realidad los
sueños de tantos que dieron la vida por un verdadero proceso revolucionario,
algunos con vida como el Dr. Armando Hart Dávalos en el Ministerio de Educación
255
y el finado Raúl Cepero Bonilla en el Ministerio de Comercio e interino de hacienda,
otros fueron: el Comandante Humberto Sorí Marin y el Comandante Luis Orlando
Rodríguez Rodríguez.

En estos momentos existen pugnas y conductas erráticas por parte del presidente
Urrutia y algunos miembros del gabinete, pues ofrecieron canteras ministeriales sin
colegiarlas con las fuerzas democráticas que habían ganado y desplazado del
poder a los efectivos batistianos. La población metropolitana observa con
detenimiento los rasgos y puntos anárquicos que producen tales conductas y
espera la llegada del máximo líder popular a la capital. El 1ero de enero llega el
Comandante Fidel Castro a La Habana, a partir de este hecho se comienza a ganar
en favor de la tranquilidad y de la constitucionalidad. Otros enfrentamientos se
darían en el seno de este primer gabinete, como los de Urrutia y Miró Cardona,
pues ambos no concientizaron la magnitud de los cambios revolucionarios y su
radicalidad. Todo esto deriva en la renuncia primero de Miró Cardona y su
sustitución por Fidel y con posterioridad Urrutia que lo sucede Osvaldo Dorticos,
tomado como Presidente Provisional de República de Cuba.

Las principales medidas revolucionarias que impactaron en la población Centro


Habanera, como ya señalamos, el carácter mayoritariamente popular y el
componente clasista proletario de esta población hizo que se vieran unas más unas
medidas que otras, aunque la alegría contagio a todos, no importaba el beneficio.
El 3 de marzo de 1959 se dispone la intervención de la campaña Cubana de
teléfonos, monopolio yanqui implicado en turbios negocios con la tiranía contra los
intereses del pueblo, dicha compañia enclavada en las calles Águila y Dragones de
Centro Habana.

El 6 de marzo se dictó una ley de rebaja de alquileres hasta el 50%, esta medida
favoreció a numerosos pobladores del municipio que vivían sojuzgados por
honososos alquileres que imponía la burguesía facista. El 21 de abril se declara el
uso público de todas las playas del país, suprimiendo el esclavismo y la odiosa
discriminación establecida en muchos de estos lugares y centros por la burguesía,
así muchos capitalinos pudieron disfrutar de playas y lugares hasta entonces
vedados por una minoría aristocrática.

La primera Ley de Reforma Agraria de mayo 17 fue aplaudida una vez más por la
población en general, pues muchos campesinos pudieron tener en propiedad la
tierra que trabajaban en sistemas de parceleria y arrendamiento despiadado y
humillantes y el Estado Revolucionario dio los pasos primeros para acabar con el
latifundismo.

Se crean los comités de apoyo a la Ley de Reforma Agraria. Otra medida de gran
importancia en Centro Habana en esta etapa inicial lo fueron las rebajas en tarifas
eléctricas del 20 de agosto de 1959 y con posterioridad su nacionalización por la
Ley 851 del 6 de julio de 1960. Dicha compañía se encontraba en el territorio en la
256
calle Carlos III, esto le puso límites al abuso de otros de los monopolios yanquis, la
lucha contra el desempleo, las mejoras en las condiciones de la educación y la
salud pública, sectores olvidados en toda la neocolonia y ministerios referenciales
en cuanto escándalo y malversación fueran improntas de estos momentos. El
juego, el tráfico de drogas y el contrabando fueron suprimidos radicalmente a lo que
más tarde seguirían pasos necesarios para la eliminación de la prostitución de
nuestros barrios.

Esto sucedió en las narices del imperio y este no estuvo indiferente ante lo que
pasaba: primero aceptó la huída a su territorio de los comprometidos con el injusto
régimen y posteriormente propició el éxodo de burgueses y capas medias
desorientadas para dejar a Cuba sin personal calificado y sin riquezas. La aptitud
del pueblo Centro Habanero fue crear refuerzos y apretar las filas alrededor de la
dirección de la revolución como lo atestigua la fuerte manifestación tras el
bombardeo de la capital el día 26 de enero.

En este justo equilibrio de consolidación y medidas revolucionarias a favor del


pueblo en general y en particular el citadino nos deja el año 1959 de la liberación
con un saldo positivo de prestigio para los líderes rebeldes y confianza en el pueblo
que se identifica con su revolución.

El imperio no se quedó impavido al ver agotados sus privilegios en Cuba, ya se


venían practicando todo tipo de maniobras para impedir el triunfo revolucionario y al
materializarse este no se quedó con las manos cruzadas. Se desata una ofensiva
contrarrevolucionaria incentivada y financiada desde el norte, que trajo dolor por las
pérdidas humanas y materiales. Se crean grupos como la Rosa Blanca entre otros
que cometieron asesinatos, sabotajes y todo tipo de actos terroristas.

En el territorio Centrohabanero ellos se materializaron en los primeros años del


triunfo de la siguiente manera:

• El 21 de octubre de 1959 un avión procedente de los Estados Unidos,


tripulado por el traidor Pedro Luis Díaz Lanz, bombardeó La Habana con
un saldo de 2 muertos y 42 heridos. Simultáneamente desde otra avioneta
se arroja propaganda enemiga.
• El 6 de mayo de 1960 un atentado dinamitero contra el Periódico
Vespertino “La Calle”, con cuantiosos daños materiales.
• El 14 de enero de 1961 material inflamable colocado en las fábricas de
tabaco que pertenecían a la firma Rothishild- Samvell Diuga, causa
cuantiosa pérdidas.
• El 13 de abril de 1961 de triste recuerdo un incendio provocado por
agentes de la CIA, destruye la tienda por departamentos nacionalizada “El
Encanto”, donde perece heroicamente la compañera Fe del Valle.

257
• El 11 de agosto de 1961 sabotaje a la Tienda ‘Fin de Siglo”, un transeúnte
resulta herido.
• El 29 de octubre 1961 sabotaje al teatro de la CTC, causa daños
considerables en las plantas donde se realizan trabajos de reparación.
• El 26 de abril de 1962 incendio provocado con dinamita gelatinosa en la
obra en construcción para el Banco Nacional en Belascoain y San Lázaro.

Esto es un muestrario de las actividades contrarrevolucionarias que se llevaron a


cabo por gente sin escrúpulos y dispuesta a los más viles cosas por dañar y
atemorizar al pueblo Centro Habanero y no olvidemos los sucesos del Hotel
Deuville cito en Galiano entre Infanta y Malecón en los primeros días de la
revolución en el poder, donde a pesar del llamado al orden hecho por los lideres
revolucionarios fueron allanados sus casinos de juego, tal vez porque representaba
un imperio de la mafia, donde hubo prostitución, droga y juegos.

El año 1960 sorprendió a la capital enfrascada en la laboriosa aptitud de


construcción de una sociedad más justa. Es este año el que recibe un segundo
momento o segunda fase en el carácter de las nacionalizaciones, pues abren el
paso a la etapa socialista de la revolución, porque abaten la propiedad privada
burguesa sobre los medios principales de producción: Centrales Azucareros,
Fábricas, Minas, Ferrocarriles, Bancos, etc. Sobre los Bancos y los grandes
establecimientos comerciales y establecen sobre ellos la propiedad social, la
propiedad de todo el pueblo, ofrecida a través del estado revolucionario, que
representa la voluntad de los obreros campesinos y todo el pueblo trabajador. La
soberanía nacional se extiende así al dominio de las riquezas nacionales, al
dominio incompartido de la economía nacional. Con estas medidas la revolución se
radicaliza más en el camino hacia el socialismo, demoliendo las estructuras
burguesas de explotación.

- 6 de agosto de 1960 se emite una Ley de nacionalización que afecta a 26


empresas norteamericanas, la Ley de nacionalizacion, anteriormente
mencionada, de 6 de julio de 1960, nacionaliza la compañía eléctrica y la
Cuban Telephone Company.
- La Ley 890 del 13 de octubre de 1960, donde por grupos de empresas y
compañías se fue expropiando a los burgueses que quedaron en el territorio
Centro Habanero, se nacionalizan un grupo de establecimientos comerciales,
entre ellos citamos:
ƒ Precios Fijos, S.A. (Reina y Águila).
ƒ Tienda Flogar, S.A. (San Rafael y Galiano).
ƒ López y Río, S en C. Bazar Inglés. (Galiano y San Miguel).
ƒ CIA. Distribución de Medios, S.A. Roseland. (Neptuno y Águila).
ƒ La Filosofía, S.A. (neptuno y Rayo).
ƒ Gabriel Sixto y CIA, S.A. Fin de Siglo. (Galiano entre San Rafael y
Águila).

258
ƒ Solis, Entrialgo y CIA, S.A. El Encanto. (San Rafael y Galiano).
ƒ Sánchez Mola y CIA, S.A. (San Rafael y Águila).
ƒ Almacenes Ultra, S.A. (Reina entre Rayo y Ángeles).
ƒ Tienda de Ropa y Cedería La Época, S.A. (Galiano).

El circuito Cinematográfico Astral también se afectó por esta ley en los grupos “W”.
También se nacionalizaron bancos que se encontraban en el territorio como el
Trust Company of Cuban y el Bank of Nova Escotia, Galiano y San José, Galiano
entre Neptuno y Concordia, respectivamente.

La ley de mayor impacto en el territorio Centro Habanero lo fuedin dudas , la del 14


de octubre de 1960, pues ella tocó un punto neuralgico que padecían los habitantes
en su mayoría de esta isla habanera, y esta estuvo relacionada con los alquileres,
que se vieron favorecidos desde el mismo 1959 y la necesidad de una Reforma
Urbana. Esta se concreta en la citada fecha. Ella prevé desde su capitulo I “El
derecho de toda familia a una vivienda decorosa”.

Muchas familias fueron beneficiadas en las tres etapas de la que constó dicha ley
Iera. El estado viabilizaba la amortización de las casas que habita cada familia en
lo que actualmente paga por renta en un período que no son menos de 5 años, ni
mayor de 20 años, de acuerdo con el año de construcción. El estado con los
recursos provenientes de esta ley y otros recursos, acomete la construcción de
nuevas viviendas que serán otorgadas en usufructo permanente mediante pago
mensual que no excederá del 10% del ingreso familiar. El estado con sus propios
recursos construirá viviendas.

Esta ley durante 4 años de vigencia concluyó la transferencia de la propiedad,


otorgó a los asignados por el estado y legalizó situaciones de hechos en
ocupaciones de la vivienda que hasta entonces no habían tenido solución jurídica.

En 1963 es que se puede hablar propiamente de Centro Habana con la concesión


de los regionales. Hasta ese año el territorio del actual Centro Habana perteneció al
municipio de La Habana, el cual desapareció al aprobarse ese año una nueva
división político-administrativa, surgiendo la región de Centro Habana, que
abarcaba los actuales municipios de La Habana Vieja y Centro Habana, así como
parte del Cerro. Los barrios que integraron la nueva región fueron: Cayo Hueso,
Los Sitios, Pueblo Nuevo, San Leopoldo, Marte, Arsenal, Colón, Dragones, San
Lázaro, La Guadalupe, San Nicolás, Chavez, Peñalver, así como los barrios de La
Habana intramuros, o sea, La Habana Vieja (Belén, San Isidro, Tacón, Santo Ángel
y otros).

La configuración del regional Centro Habana tuvo varios momentos a partir de


1963, año de la organización, la tuvo una extensión superficial de 6,61 km2 y su
población era constituida por 296 119 habitantes con 96 047 viviendas para un
promedio de 3.10 habitantes por viviendas. La densidad poblacional era de 34 624
259
habitantes por Km2 y estuvo compuesta por los seccionales: Cayo Hueso, Pueblo
Nuevo, Marte, Arsenal y Dragones.

Atendió:

- Núcleos de PCC 327


- Comités de Base UJC 128
- FMC 50 278
- Militantes 3 367
- Militantes 1 234
- CDR 166 344

Esta región se caracterizó por tener la mayor densidad poblacional de la provincia y


del país, con gran importancia en el Comercio, la Gastronomía, los Servicios, la
Producción Tabacalera y las Oficinas Administrativas, contó en su territorio con el
centro telefónico “13 de Marzo” (hoy ETECSA) (y la Termoeléctrica de Talla piedra).
En el momento de su constitución como regional contaba con 2 518 centros de
trabajo que agrupaban a 83 782 trabajadores, siendo los sectores fundamentales
los siguientes:

- Industrias 25 954
- Construcción 4 373
- Agropecuarios 3 163
- Servicios 37 602
- Transporte 4 356
- Educación 7 146
260
Por niveles de enseñanza los Centros educacionales fueron:

- Escuelas Primarias 102


- Escuelas Secundarias 9
- Pre- Universitarios 2
- Círculos Infantiles 16
- Jardines de la Infancia 17

Seccional Dragones.
Extensión superficial de 1,75 Km2 y la componía una población de 65 896
habitantes, Los derroteros fueron: De Belascoain y Malecón tomando por esta
hasta Monserrate la que sigue (ambas aceras) hasta Monte, siguiendo por Monte
hasta Reina (ambas aceras) por la que continúa hasta Belascoain (ambas aceras)
llegando a Malecón.
Seccional cayo Hueso.
Extensión superficial de 1,12 Km2 y la población de 45 966 habitantes. Se
encuentra partiendo de Infanta y Malecón siguiendo por esta hasta Belascoain por
lo que toma (como límite) hasta Carlos III, tomando por la misma hasta encontrar
Infanta, la que sigue (como límite) hasta llegar a Malecón.

Seccional Pueblo Nuevo.


Extensión superficial de 1,06 Km2 y una población de 47 658 habitantes. Los
derroteros partiendo por Infanta y Carlos III por esta en dirección este, donde se
convierte en Reina por lo que tiene (como límite) hasta Monte, teniendo por la
misma (como límite) en dirección suroeste hasta encontrarse con la Avenida
Manglar, por la que sigue hasta Infanta (como límite) la que continua hacia el norte
hasta el punto de partida.

Seccional Marte- Arsenal.


Este último seccional de la región Centro Habanera tuvo una extensión superficial
de 3 137 Km2 y una población de 57 152 habitantes. Su demarcación se situó
partiendo de Infanta y Avenida Manglar, siguiendo por Manglar hasta encontrar
Monte (ambas aceras) hasta la calle Factoría, continuando por esta hasta Ejido por
la toma (ambas aceras) hasta la calle Fundición que se encuentra con
Desamparados y se convierte en Avenida del Puerto siguiéndola y bordeando el
litoral de la bahía hasta el río Luyanó, encontrándose la línea del ferrocarril
occidental que sigue en dirección recta, hasta encontrar la prolongación de la
Avenida Gancedo , desviándose hacia el suroeste hasta la Vía Blanca por la que
toma hasta la Plazoleta de Agua Dulce y desde esta parte continua por la Calzada
de 10 de Octubre (como límite) hasta convertirse en Infanta, lo que sigue (como
limita) hasta la Avenida de Manglar.

En el proyecto de una nueva división político- administrativa da la provincia de La


habana, el Partido elaboró desde mediados de 1962 un plan para demoler
261
estructuras que eran inadecuadas y no respondían a las necesidades de
organización ni a las exigencias del desarrollo socioeconómico del país. Desde esa
fecha se preveia la en La Habana Metropolitana de una provincia directamente del
poder central.

En cuanto a la Dirección Regional, se ve en la región un eslabón fundamental para


el desarrollo de las funciones del Partido en la provincia y por ello es preciso que en
el regional se encontraran los mejores cuadros.

El municipio surge el 31 de octubre de 1976, cuando se efectúa el primer acto de la


Asamblea Popular Municipal, esto queda situado en la Provincia Ciudad de La
Habana, capital del Archipiélago Cubano. En esta última y definitiva división político
administrativa, los derroteros quedaron limitados de la siguiente manera: el territorio
está al oeste de la Bahía de La Habana, limita al norte con el Estrecho de La
Florida y el Malecón, esta rodeado por otros municipios hermanos, al este Habana
Vieja, al oeste Plaza de La Revolución, al sur el Cerro. La extensión territorial es de
3,42 Km2, la población de 160 392 habitantes y la densidad de 47 000 habitantes
por Km2. Esto la convierte en el municipio más pequeño y más densamente
poblado del estado Cubano. El paso más novedoso se da el 10 de octubre de 1990
con la creacion de los Consejos Populares: Cayo Hueso, Los Sitios, Dragones,
Pueblo Nuevo y Colón.

EL 1ER CONGRESO DE LA CTC REVOLUCIONARIA


Un hecho trascendental de estos días iniciales, lo fue, sin duda alguna la
depuracion que ocurrió en la CTC que como antes señalamos tenía una orientación
fraticida y de desunión pues se plegaron a las ordenes y deseos de los
gobernantes de turno y la tiranía Batistiana, tras esta acción, surge la idea y
necesidad de orientar por medio de un Congreso la política y la estrategia de esta
nueva CTC, que correspondieran a las expectativas del proceso recién iniciado y
liquidaran cualquier vestigio del mujalísmo precedente con una directiva nueva y de
arraigo proletario.

Del 18 al 23 de noviembre de 1959, se celebró el X Congreso Nacional Obrero.


Había triunfado tras más de dos años y medio la guerra en la Sierra y en el llano y
el Movimiento 26 de julio dirigido por Fidel derrumbaba estrepitosamente el aparato
divisionista. En las primeras horas del 1ero de enero el Palacio de lo trabajadores
fue tomado por un grupo compañeros Centro Habaneros y otros entre los que se
encontraban Luis M. Rubian Prendas, Octavio Fernández Roig, Vicente Valdez,
Benito Sánchez, Narciso Santier, quienes en nombre del Frente Obrero Nacional
Unido tomarían posesión del edificio.

Previo a la celebración del Congreso se creó un Comité de Dirección Provisional de


la Confederación de Trabajadores de Cuba, integrado por David Salvador, Octavio
262
Lonit Venzant, José Maria de la Agulera, José Peñón, Antonio Torres, Conrado
Becquer, Reinold González, Jesús Soto y José de J. Planas, quienes se
encargaron de la reestructuración del Movimiento Sindical, con vistas a la
celebración del X Congreso.

El proceso se inició con el Congreso da la Federación Nacional de Trabajadores


azucareros y continuó con los restantes de las demás Federaciones Nacionales
(había un total de 33).

Posteriormente, entre el 12 y el 13 de septiembre, se efectuó el primer Consejo


Nacional Extraordinario de la CTC, que resumió el Comandante en Jefe Fidel
Castro, en su condición de Primer Ministro del Gobierno Revolucionario.

En este primer Consejo se acordó convocar al X Congreso Nacional Obrero en la


fecha ya indicada (13 de noviembre), el cual se celebró con la participación de 3
000 delegados y de un numeroso grupo de invitados extranjeros, entre ellos
Vicente Lombardo Toledano, Juan Acuña, David Benedit de las CTAL y de la ORIT.

En el Congreso se rindió balance de las actividades desarrolladas por los


trabajadores en apoyo a su revolución en los meses siguientes al Primero de enero
y la Huelga General contra la intentona imperial.

Sin embargo, no todo marchó como se esperaba, al presentarse en el Congreso un


desagradable incidente y el consecuente condicionado del anticomunismo
sembrado en los últimos años, la falta de visión política de muchos delegados y el
sectorismo en otros. Todos ellos fueron finalmente derrotados por el enfoque
magistral de Fidel, en el curso de su intervención, quien llamó a erradicar como
acuerdo del Congreso, los últimos vestigios del mujalísmo y de la inmoralidad en el
seno de la clase obrera.

La significación de este Congreso primero tras el Triunfo Revolucionario en la


población Centro Habanera fue mayorista y dejó al frente del Movimiento Obrero
figuras de arraigo en las masas trabajadoras y todos comenzaron a trabajar por una
CTC revolucionaria y consecuente con el proceso que vivía y vive su país.

PARTIDO COMUNISTA DE CUBA


Al producirse el Triunfo Revolucionario en 1959, se mantiene la independencia de
las tres organizaciones que llevaban el paso principal en la lucha contra la tiranía
de Batista: M-26-7, el PSP y el DR 13 de marzo.

La única de ellas que estaba definida históricamente como Marxista Leninista era el
Partido Socialista Popular, pero las tres coincidían esencialmente en los objetivos
263
nacional- liberadores y socialistas del proceso que se iniciaba. Solo se exceptuaban
de esa coincidencia un ala derecha del movimiento antibatistiano, integrado por
elementos que en sentido general aspiraban a perpetuar el sistema capitalista y la
subordinación económica y política a Estados Unidos.

Estas posiciones conservadoras, sumadas a los prejuicios anticomunistas


existentes y el insuficiente desarrollo político ideológico de un sector de la
población, así como las dudas e incomprensiones que aún afectaban a muchos
revolucionarios hacían imposible la fusión orgánica de todas ellas en un solo
partido.

La dirección de la revolución se vio obligada a dar pasos progresivos en la


formación de un partido orgánico que confluyeran en su seno a todos los factores
que lideraban el proceso revolucionario, una importante contribución en el sentido
unificador y en particular a la explicación y divulgación de los fundamentos de la
ideología Marxista Leninista la ofreció el Sistema de Escuelas de Instrucción
Revolucionaria (EIR) craadas por Fidel Castro y Blas Roca.

En el territorio fueron numerosos los compañeros que participaron de esta


iniciativa, pues su confluencia con las ideas de transformaciones sociales,
económicas y políticas originadas tras el triunfo exigían una mayor entrega y
conocimiento para explicar y dirigir al pueblo en el empeño socialista.

Las EIR se ascribieron en un inicio al M- 26- 7 con posterioridad son asimiladas por
el Partido Unido de la Revolución Socialista de Cuba (PURSC) y finalmente por el
Partido Comunista.

Otro momento importante de este camino a la unidad de todas las fuerzas


democráticas y Populares lo constituye en junio de 1961 la creación de las
Organizaciones Revolucionarias Integrales (ORI) constituidas por los movimientos
protagonistas principales de las transformaciones y que arriba se han mencionado.
Esta organización duró poco tiempo y a pesar de errores cometidos con respecto al
papel en las masas y su sectarismo fueron valiosos sus aportes como cantera de
futuros cuadros del PCC.
Las ORI tubo un momento de vital importancia en los instantes de la declaración de
La Habana de 1961, fueron un eslabón pues de sus filas emrge el PURSC y de
esta el Partido Comunista.

En este proceso de unidad se vieron muchos compañeros de localidad que desde


las ORI y las EIR pasaron como cuadros al PURSC y luego al PCC, estos últimos
con un carácter más selectivo a recomendación del Comandante Fidel Castro tras
el análisis hecho el 28 de marzo de 1962.

El 1ero de octubre de 1962 se constituye el Comité Central del Partido, que adoptó
el nombre de Partido Comunista de Cuba, desde los primeros momentos de
264
formación, es depositario y heredero de los ideales patrióticos y revolucionarios que
durante más de un siglo han alentado las luchas de los Cubanos por una patria
independiente y soberana, aunados en torno a Fidel el pueblo marcha a la
vanguardia estrechando más los vínculos proletarios y campesinos, haciendo una
unión monolítica e indisoluble en la construcción de la sociedad comunista.

En los días 23 y 24 de diciembre de 1965 la Dirección Nacional del PURSC se


reúne para tratar sobre la estructura y funcionamiento de las organizaciones
provinciales, regionales, municipales y núcleos del PCC. La dirección del núcleo se
integraría por el secretario general, el secretario organizador y el secretario de
educación y orientación revolucionaria. En el territorio fueron muchos los cuadros
que emanaron de estructuras laborales, seccionales y de la región Centro
Habanera y que desde las ORI y las luchas clandestinas y armadas en la Sierra
Maestra adornan el colorario de dignidad de la localidad como: Aldo Peña, Santiago
Medina, Alberto Rodríguez, A. Trespalacios Delgado, Félix Gomez Algaazar,
Alberto Martínez, Ernesto Menéndez Corrilla, Bonifacio Gomez de la Vega,
Bernardo Hernández, Egipto Aguero, Evelio Granados, Guillermo García, Jesús
Méndez, Nelvis Núñez Diegues, Abel Mora Leiva, Néstor Lozano Ros, Emilio
Sergio García Valencia, Héctor Puentes, Rigoberto Pastida, Igdara Echevarria
González, Israel Nolusco López, Julio Riano, Espinosa Castro Borges, Margarita
Ulacia Urquiza, Julio Díaz Padrón. Por solo estar algunos de los que en los
seccionales Dragones, Cayo Hueso, Marte Arsenal y Pueblo Nuevo Dirigieron en
esta etapa de conformación y consagración. En 1976 con la DPA otra estructura se
aplica al territorio y comienza a funcionar el Comité Municipal.

El primer documento con que abre la Asociación de Jóvenes Rebeldes, tiene que
ver directamente con su constitución. En el aparecen las primeras ideas sobre la
nueva organización juvenil que se gestaba.

El documento fechado el 30 de agosto de 1959 fue elaborado en las oficinas del


Departamento de Instrucción del Comité Rebelde, que entonces dirigía el
Comandante Ernesto Ché Guevara y puesto en las manos del Comandante más
joven de la revolución Joel Iglesias Leiva, para su ejecución.

A partir de este documento se nuclearon gran cantidad de jóvenes del territorio


para formar parte de este proyecto. Con posterioridad se le crea un reglamento
provisional en el que aparecen los deberes del joven rebelde. De una manera u otra
todas las organizaciones juveniles que existían en el país estaban trabajando con la
revolución y para ella. Los jóvenes se unían en cada tarea planteada sin distinción
de sexo, credo, raza e ideología dispuestos a defenderla y hacerla avanzar.

Bajo este lema decidió la juventud socialista celebrar su IV Congreso el cual asistió
la AJR como organización fraternal, invitada a participar en todas las actividades.
La juventud socialista, organización juvenil de orientación Marxista Leninista se
había fundado en noviembre de 1944 y llegaba al triunfo revolucionario del 1ero de
265
enero de 1959 con un honroso aval de luchas a favor de las clases oprimidas,
contra la explotación capitalista, el imperialismo yanqui y los malos gobiernos que
caracterizaron todos los años de neocolonia.

En el cónclave de la juventud socialista se espaciaron las ideas sobre la unidad del


movimiento juvenil y la creación de una sola organización política para todos los
jóvenes Cubanos.

La juventud socialista pone a disposición del Movimiento Juvenil revolucionario


Cubano toda su apariencia de trabajo partidista y a un valioso grupo de cuadros
políticos, educados en sólidos principios de la ideología del proletariado, que fue la
base de labor posterior.

Esta génesis fue la cantera de donde evolucionan las distintas organizaciones


juveniles para fundirse con posterioridad en la Unión de Jóvenes Comunistas. En la
localidad llena de una masa juvenil ansiosa de hacer por la revolución fueron
muchos los compañeros y compañeras que desde estas organizaciones
emergieron como cuadros importantes de la UJC, el PCC y las demás
organizaciones de masas, por solo citar algunas que nos han legado ejemplos de
abnegación y entrega en las distintas estructuras del territorio, y hoy, aún persisten
con la patriótica idea de seguir haciendo revolución.

La UJC nace el 4 de abril de 1962, ella asume la formación de las nuevas


generaciones en el patriotismo y fidelidad al PCC, defiende los más altos valores
humanos y el espíritu antiimperialista e internacionalista que ha distinguido a la
revolución, propicia la participación consciente de todos los jóvenes en su obra,
expresada en el estudio, trabajo y defensa de la patria, simbolizando en su
emblema a tenor de los paradigmas: Mella, Camilo y el Ché.

La UJC realiza su trabajo con estudiantes a través de la Federación Estudiantil


Universitaria (FEU), Federación Estudiantil de Enseñanza Media (FEEM), dirige,
orienta y controla a la Organización de Pioneros “José Martí” (OPJM) , también
dirige a la Aso0ciación Hermanos Saiz y las Brigadas Técnicas Juveniles.
En los años 60 y 70 en el regional Centro Habana la UJC contó con más de 391
militantes e incrementándose su militancia hasta llegar a la actualidad con más de 2
852 militantes.

Su labor ha sido y es vital en todas las batallas que la revolución acomete, por eso
se puede afirmar que nuestra juventud es también inmortal.

Una de las medidas que imparto en la población Centro Habanera, por la


profundidad de su repercusion en la búsqueda de la igualdad, el desarrollo cultural,
lo fue sin lugar a dudas la Ley de Nacionalización de la Enseñanza del 6 de junio
de 1960, con ella se abrían a todos los niveles educacionales el @ de los Cubanos

266
y se ponía fin al exclusivismo de las clases dominantes y de planteles que se
vanagloriaban de ello.

En el territorio existían un número de escuelas y colegios privados como el de


“Marina Colomina” (hoy Raquel A. Carini), “Ángel de la Guarda” (hoy Mario Muñoz),
ambas instalaciones con la finalidad de educar niñas.

Por otra parte, las de varones como “El Colegio de Salle” (hoy Ministerio de la
Industria Básica), “Las escuelas Pías” (hoy Vitalio Acuña) esta y la Raquel A.
Carini situadas en Dragones y la Mario Muñoz en el Consejo de Pueblo Nuevo. En
la Localidad se nacionalizaron Escuelas de Contabilidad y Comercio como la
Sánchez Labrado (hoy Círculo Infantil “Los Proletaritos”) en Pueblo Nuevo,
Escuelas de Idiomas y Escuelas Públicas 16 y 43 (hoy José Joaquín Palma Lasso)
en Pueblo Nuevo.

Más la nacionalización llevaba dentro metas más ambiciosas, entre ellas el llevar la
educación a todos los rincones del país y acabar con el analfabetismo y convertir la
isla en un lugar de hombres cultos y libres. De enero a diciembre de 1961 se libró
esta histórica batalla contra la ignorancia, a pesar de la incredulidad de numerosas
personalidades y organismos exteriores.

Con mil jóvenes de todo el país y fundamentalmente de las ciudades dieron un sí a


esta hermosa tarea.

En esta labor participaron 303 Centro Habaneros, 135 varones y 168 hembras,
dando así la mujer Cubana su aporte decisivo por la revolución. Mas este logro no
se quedó estático y se plantearon metas y compromisos mayores, la batalla por
alcanzar el 6to grado primero y con posterioridad el 9no grado. Esto se lleva a cabo
con el esfuerzo de maestros voluntarios que el territorio donó en cifra 90 entre
ambos sexos.

Los que desplegaron su labor en lugares intrincados de la Sierra Maestra como “El
Roble”, La Magdalena, Central y Mariño.

La Dirección Municipal de Educación se crea en 1976 al realizarse la División


Política Administrativa en el país.

Esta ubicada en la Avenida Salvador Allende # 508 entre Padre Varela y Santiago,
en el 6to piso del Edificio Masónico, aquí funciona el Departamento Metodológico,
el Departamento Administrativo en Avenida Salvador Allende entre Santiago y
Marqués González y la Subdirección Económica en la calle Zanja.

267
Hasta la fecha se han sucedido 8 directores municipales y desde 1976 se atiende:
- La enseñanza Pre- escolar, Círculos Infantiles, Jardines y Vías no
Formales.
- Enseñanza Primaria.
- Enseñanza Secundaria Básica.
- Enseñanza Especial.
- Politécnicos.
- Pre- Universitario.

Se atendía metodológicamente al Politécnico de la salud “Carlos J. Finlay”, donde


se preparaban enfermeros, técnicos de radiología, laboratorio y otros, así como a la
Planta “Ismaelillo” de alimentación.

En la década del 60 y 70, con los regionales, existían en el regional Centro Habana
65 Escuelas Primarias: Dragones 22 con 7 989 alumnos, Pueblo Nuevo 11, Marte-
Arsenal 19 con 7 508 y 18 en Cayo Hueso. En la actualidad con la creación de los
Consejos Populares existen: 6 en Cayo Hueso, 6 en Dragones, 2 en Colón, 6 en
Los Sitios y 6 en Pueblo Nuevo.

Los Círculos Infantiles y los Jardines de la Infancia llevaron una evolución paralela
a las demás enseñanzas y de un comienzo de una cantidad de 15, en la división
regional, con una matrícula de 600 infantes aproximadamente, en Jardines de la
Infancia y 11 Círculos Infantiles, con matrícula 1800, aproximadamente, llegan a la
actualidad con 24 y una matrícula duplicada.

La mujer Cubana, a través de los siglos ha encarnado y simbolizado profundos


sentimientos de patriotismo, entrega abnegación y una profunda tradición de lucha
frente a todo intento de conquista y opresión. Se han escrito páginas
conmovedoras en las guerras del 66 y el 95, surgiendo de ellas figuras como: Ana
Betancourt y Mariana Grajales, por mencionar algunas.

En los años de revolución su participación ha sido y es decisiva en las tareas


encomendadas por la dirección del país y en otras de su inventiva.

En el municipio se han acometido muchas tareas donde la voluntad y la ternura de


la mujer Cubana están presente, estaremos en los primeros años, tras el triunfo
revolucionario, la rehabilitación de las mujeres, que ejercían la prostitución en el
barrio de Colón, antigua zona de tolerancia, donde el vicio y la degradación
campeaba por sus fueros. Según testimonios de Estela Rivas, en aquellos
momentos estudiante universitaria, el Plan de Rehabilitación de Prostitutas llevado
a cabo en Colón reinsertó a la sociedad a la mayoría de estas mujeres y
comenzaron las más jóvenes ha estudiar, otras a trabajar en bancos como
auxiliares y en los planes agrícolas como conductoras o operadoras de tractores y
las famosas y pintorescas violeteras como conductoras de autos.

268
La FMC se constituye el 23 de agosto de 1960 con la finalidad de unir a las mujeres
Cubanas en un solo frente donde centralizan y dirigen mejor el trabajo que se
desplegaba. Ellas se aglutinaron en centros de trabajos y en grupos que con
posterioridad serían las delegaciones de sus fundadoras, Yolanda Pulido. La
primera reunión en el territorio se llevó a efecto en el Edificio Masónico (Carlos III y
Belascoain) creándose una comisión que era el embrión de la organización.

Después avanzado el trabajo organizativo se pasa al seccional (1967) que


radicaban en Belascoain entre San Miguel y San Rafael, dirigido por las
Organizaciones Revolucionarias Integrales (ORI).

En la casa de la compañera Carmen Rodríguez, Lindero #10, se organizó una


delegación constituida por Secretaria General, Organizadora, Finanzas, Educación,
Orientación Revolucionaria y Trabajo Voluntario.

En el mismo año 1963, surgieron los regionales y seccionales y la mujer Centro


Habanera fue protagonista de estos cambios y las tareas que de ellas surgieron.

Desde la década del 60 la organización se le había asignado la tarea de publicar


una revista que sustituyera a variedades, fundada en el país desde 1938. Por la
editorial América S.A. Filiar de la corporación HEARST de Estados Unidos, que
para los imperialistas fue la primera prenetración ideológica en América Latina, ya
desde La Habana se distribuía al resto del continente.

La Revista Mujeres comienza a editarse en 1961 con una tirada de 275000


ejemplares, con la finalidad de que la mujer pudiera tener una publicación acorde a
la nueva sociedad. En esta publicación se reflejaron sus logros y aspiraciones, sin
distinciones de edades, razas y creencias religiosas, nivel profesional u ocupación.
La Revista orientaba a la familia y tenía secciones especiales para todo.

Esta publicación llegó a ser la segunda más importante del país. En la década del
60 y 70 la cantidad de federadas, delegaciones y bloques en los seccionales
Dragones y Marte- Arsenal por solo ilustrar cantidades. Se comportaba así:

Dragones 11040 federadas, 186 delegaciones y 15 bloques.


Marte-Arsenal 8125 federadas, 134 delegaciones y 8 bloques.

Todo esto sobre una población de 79 534 y 53144 respectivamente.

Las tareas dela mujer son múltiples entre ellas diremos algunas como la fundación
de círculos infantiles como movilizaciones, participación en defensa del país,
labores agrícolas, salud pública, alfabetización, estudios políticos y la batalla de
ideas en la FMC son vanguardia.

269
DEFENSA
La prepotencia de Estados Unidos y la Oligarquía desplazada del poder. Pensaron
que, con una serie de medidas económicas como la disminución,primero de la
cuota azucarera, después su eliminación ,y todo tipo, rendirán al pueblo .La
respuesta fue clara PATRIA O MUERTE.

Pero para lograr el mantenimiento de la independencia y la soberanía nacional se


imponía la preparación de todo el pueblo para la defensa.El 16 de Octubre de 1959
por la ley 600 del consejo de ministros se crea el ministerio de defensa y esta
apadrina el movimiento de las milicias nacionales revolucionarias que en el propio
mes de octubre de 1959 el día 26. Estas fueron anunciadas por comandante Fidel
Castro en un acto masivo frente al palacio presidencial,en el mismo el inolvidable y
querido comandante y querido Camilo Cienfuegos se dirigió al pueblo por ultima
vez.

Serian inerrables las paginas de heroísmo y entrega que las MNR han dado en
defensa de los ideales y sueños de un pueblo.En Centro Habana los milicianos se
concentraron en 8, y se tienen mártires del cumplimiento del deber como: Lázaro
garcía Granado quien cae cumpliendo su servicio de guardia en la fábrica de
cigarro Manuel Saavedra ante un sabotaje de la 8 contrarrevolución. Otras
epopeyas de las milicias lo fueron en playa Girón y la lucha contra Bandidos o la
digna actitud frente a al amenaza imperial en octubre de 1962.

Playa Girón el segundo semestre de 1960 y el primero de 1961 se incrementa la


hostilidad y las agresiones de grupos contrarrevolucionario, son los momentos de
terror e incertidumbre ante la ola de sabotaje y maniobra diversionista.esto hacia
pensar en que algo de mayor magnitud se preparaba contra la isla. Esta escalada
maniobra se lleva a cabo a partir del día 15 de abril de 1961, ya en el mes de Enero
los Estados Unidos rompe relaciones con Cuba para mantener las apariencias de
enajenación en lo que estaba preparando con la cúpula de Miami.

Tomando el curso de los acontecimientos el día 15 de abril 8 bombarderos norte


americano B26 proveniente de su base en puerto cabezas nicaragua realizaron un
ata1que sorpresivo en varios puntos del país, San Antonio de los Baños, Ciudad
Libertad y Santiago de Cuba.

El día 17 de abril esto se hizo realidad en la madrugada como (operación Pluto).


Desde la capital se movilizan varios pelotones y varios compañeros del territorio
participan en esta batalla, Enrique Galárraga, Alberto Rivero y Pablo Humberto
Veitía Alfonso, este último cae muerto victima de los bombarderos en Playa Girón
el 16 de abril de 1961. Otros mártires que ofrendaron sus vidas en estas
circunstancias de agresiones imperiales lo fue José Ramón López Tabares quien
muere al ser atacado por una lancha pirata, la embarcación SV26 del marina de
270
guerra revolucionaria el 12 de mayo de 1962, y Marino Gonzalo Otaño quien fue
degsinado al Escambray en el batallón 2602 de la Policía Nacional Revolucionaria
para la lucha contra Bandido y un día 23 de Mayo de 1963 muere en acción
combativa en las cercanía de Jagüey Grande.

De las MRN que derivaron las hoy Milicias de Tropas Territoriales (MTT) como una
concepción de la guerra de todo el pueblo, y en ellas se han organizado las
brigadas de Producción y Defensa (BPD) para que no pare la producción de
producto y materiales necesarios en tiempo de guerra la PNR continúan con su
valor vigilante y preventiva de delitos y orden ciudadano, mas en tiempo de guerra
se subordinan las fuerza Armadas Revolucionarias (FAR) quienes tienen los
mejores centros en especialidades especifica para afrontar cualquier intento
agresivo.

En el territorio esta el consejo de Defensa Municipal y los Consejo de Defensa de


Zonas. El 16 Abril de 1960 juraron 40 000 milicianos de ellos 263 centrohabaneros,
seguir defendiendo la patria hasta sus ultimas consecuencias.

En Centro Habana al igual que en el resto del país se crea el comité Militar, la
defensa civil, y las fuerzas Armadas revolucionarias y constituye el estado mayor
municipal, que dirige la lucha armada esta se encuentra ubicada en la calle
Oquendo y maloja.

Desde la década del 60 se crean en el territorio 3 regimientos, 119, 134 y 166 que
combatieron en Girón y tuenen continuidad histórica a partir que esto regimiento
surgieron otras estructuras en 1964 se realiza la maniobra Bastión que implico otro
cambio estructurar, se unieron los municipios Plaza de la Revolución, Habana
Vieja, Cerro Y Centro Habana .Fue ese año el que vio el movimiento de las MTT
como arma de las FAR

Las Fuerzas Armadas la constituye una serie de mandos subordinados a los 3


ejércitos: Occidental, Central Y Oriental, y a la dirección Central ubicada en el
MINFAR. Cada ejército cuenta con infantería, Aviación, Marina y artillería (aérea y
terrestre) y conformada además por las MTT. En 1984 otros cambios en aras de
perfeccionamiento defensivo, regula que los regimientos 119 defendieran los Sitios,
el 134 Cayo Hueso y Dragones, el 116 Colón. El resto de la década de continúan
los cambios estructurales pero en el 1990 con la caída del campo Socialista
(Modelo curro soviético) se produce otra amenaza real de guerra por el cambio
unipolar producido y se termina de diseñar una estructura más duradera. Las
Milicias se fortalecieron aún más y esto freno el ímpetu del imperio norteamericano.
En diciembre de 1990 se rinde homenaje en el salón de protocolos del MIMBAS,
cito en Carlos III a los restos traídos de los compañeros internacionalista de la
localidad.

271
En los años 1990’ hasta 1995 por los problemas asociados al Bloqueo, que arrecio,
y el periodo especial en tiempo de paz, que como medida sé tubo que adoptar por
la dirección del país dadas las consecuencias del dominio curro Soviético de
adoptaron otras estructuras creándose batallones y unidades independientes, como
está actualmente.

Esta década de los 90 a la luz de la tarea Alejandro la que adopta las Fuerzas
Armadas a las condiciones económicas reales del país pues estas estaban sobre
dimensionadas en gastos del presupuesto estatal desperdiciaban personal y
medios. El Ministro de las FAR General de Ejercito Raúl Castro. Adecuo la misma a
los nuevos tiempos y los puso en función de la producción, para ellas y el resto del
país y su economía, todo esto a posibilitado que se inserten las Fuerzas Armadas a
la vida económica de su país, como no lo hacen ningún otro ejército o institución
militar en el mundo.

Los destacamentos populares y/u obreros de respuesta rápida surgen en 1994 a


consecuencia de los sucesos del 5 de agosto y es una experiencia que se extendió,
desde el territorio centrohabanero al resto de la nación, en el afán de salvaguardar
los intereses del país ante la proliferación de grupúsculos estimulados y financiado
por el gobierno de los Estados Unidos y su sección de intereses en La Habana
quienes han tenido que extinguirse frente a la unidad monolítica y el profundo
carácter y convicción del pueblo Cubano.

También en la década del 60, surge en el seno de las Fuerzas Armadas un brazo
laborioso para acometer trabajos agrícolas en apoyo principalmente a la zafra
azucarera. Ellos en un inicio se llamaron columnistas, fue el nacimiento de lo que
mas tarde se llamaría Ejercito Juvenil del Trabajo. Este, como ante indicábamos
salen de la columna del 5to centenario de este bastión agrícola brotarían en la
localidad compañeros como Adrián Miranda Rodríguez que devendrían en cuadros
del mismo EJT, del MININT y Las FAR .en la actualidad el trabajo del EJT se ha
dimensionado además de las tradición a las tareas agrícolas para un mejor
mantenimiento del consumo de producto del campo para las FAR, lo hacen para
toda la población de los mercados agropecuario de la capital y se desempeñan
también en la campaña contra vectores libradas exitosamente en el país .Estas y
otras puertas de entrega en la cotidianidad nos presentan al EJT como ejercito
necesario.
Fruto de muchas hazañas libradas por el heroísmo del pueblo Cubano y como
consecuencias también de todo lo anterior expuesto el 5 de diciembre de 1993 se
crean la ACRC es una organización no gubernamental en la misma se realizan
actividades de trabajos patrióticos militar e internacionalista. Se conmemoran las
fechas históricas convicciones ideológicas patriótico militares que son sus valores
obtener mayores resultados en la preparación para la defensa y categorización de
los estudiantes en campeón (el máximo), experto y certero de mas porcentaje, las
competencias se realizan en el año 26 de Julio y el 2 de Diciembre en
conmemoración a los asalto a los Cuarteles Carlos Manuel de Céspedes en
272
Bayamo. Y Moncada en Santiago de Cuba por la generación del centenario (1953) ,
día de la Rebeldía Nacional y el desembarco del Yate Granma en 1956 y día de las
Fuerzas Armadas Revolucionarias.

Los compromisos emulativos son individuales por aulas y centro de enseñanza .Se
llevan ha practica de tiro recreativos popular, en una competencia deportiva masiva
que se realizan en las escuelas primarias y secundarias del territorio.

Se seleccionan en cada escuela los mejores y se llevan a nivel de consejo popular


municipio y después a provincia, se escogen dos por consejo popular.

La ACRC de l municipio se encuentra situada en San Nicolás entre San Rafael y


San Miguel, la Asociación patrocina las mencionadas actividades en el complejo
escultórico Parque Maceo, situado en la intersecciones de las calles Belascoain ,
San Lázaro y a lo largo de Malecón y Marina .Estos ejercicios se dan los días 14 de
cada mes.

En periodo preñado de peligros surge la Asociación. En primer lugar para defender


la Revolución incondicionalmente en todo los terrenos y lugares.
Los deberes y requerimientos de cada asociados los siguientes:

- Que cada combatiente de la Revolución Cubana sea un trabajador


destacado en su centro de trabajo, un activo miembro de su Comité de
Defensa de la Revolución, y su Destacamento de Respuesta Rápida un
entusiasta participante del trabajo voluntario.
- Un digno vecino de la comunidad donde vive
- Ser ejemplar en el seno de su familia y la educación de sus hijos
- Figurar entre los mas puntuales en la Defensa Armada de la Patria
Sistema único de vigilancia popular
- En los lugares donde vive y en que trabajan sea un enérgico defensor de
la Revolución, capaz de aclarar al confundido y también enfrentarse
resueltamente al destructor contra revolucionario.

En la actualidad en el territorio Centro Habanero estaba con la siguiente cantidad


de asociados por categorías.

- Combatientes 2645
- Mujeres 3146
- Ejercito Rebelde 264
- Lucha Clandestina 455
- Lucha Contra Bandidos 409
- Girón 263
- Internacionalistas 1177
- Medallas del Valor 7
- Fundadores del Bon Fronterizo 3
273
- FAR mas de 15 años 434
- Padres de comp. Caídos 9
- Médicos, maestros en misiones internacionalista 53
- Militante del PCC 1505
- Militante de la UJC 46

La Dirección de atención de los combatientes y familiares de mártires de la


Revolución, se encuentra en Manrique entre Concordia y Virtudes. Al triunfo de la
Revolución se crearon estas direcciones con el nombre de casas de combatientes.

Retomando los acontecimientos internacionales, los nacionales y su repercusión en


el territorio Centro Habanero pasamos por la década del 60, y nos detenemos en la
génesis de un acontecimiento que casi lleva a una tercera conflagración Mundial
esto no fue otro que la crisis de los mísiles o Crisis de octubre. La derrota de Playa
Girón no detuvo a la maquinaria contrarrevolucionaria del gobierno de los Estados
Unidos, y pensaron que la única vía para hacer desaparecer la Revolución, era
una intervención directa en el país. Esto no paso inadvertido por parte de la
dirección de la Revolución, y desde los días de Girón, el comandante en Jefe Fidel
Castro declaraba la posibilidad de esta agresión, directa. El Incremento de la
agresividad por parte del gobierno norteamericano quien declara el 25 de abril el
embargo a todo tipo de mercancías destinadas a Cuba, incluso las que ya estaban
compradas en puertos de los Estados Unidos. Aumentaron los grupos cuya
finalidad era el sabotaje y el diversionismo con sobredosis de espionaje, también al
apoyo a bandas armadas, Comienza o se retoma la estrategia de la eliminación
física de la dirección de la revolución se proyecta una auto agresión en la base
naval de Guantánamo, aumentan las violaciones del espacio aéreo y marítimo de
Cuba .Las presiones en la región a través de la alianza para el progreso, y entre los
finales de 1961 y principio de 1962 se elabora la llamada operación mangosta y
aprueban 33 operaciones a realizar escalonadamente contra Cuba. Este plan debía
culminar en octubre de 1962 con una rebelión interna en la isla, pretexto para la
intervención yanqui en la isla.
La Dirección de la Revolución planteó todas estas maniobras en todos los forum
internacionales como la organización de Estados Americanos y la organización de
naciones unidas, mas no se atendió debidamente las demandas Cubanas.

Desde 1961 las Fuerzas Armadas Revolucionarias con la ayuda de la Unión


Soviética venían trabajando para perfeccionar y mejorar sus estructuras y
composición.

El 29 de mayo de 1962 la URSS propone a Cuba emplear cohetes de alcance


medio o intermedio en la isla, esta medida es acogida con alegría pues mejoraba la
posición estratégica del país se decide la forma y publicación de este acuerdo
cuando el presidente de la Unión Soviética, Nikita S. Jruchov visitara en noviembre
de ese año la isla. A partir de Agosto comienza la instalación de 42 cohetes alcance

274
medio en la isla, así como el arribo de Bombarderos IL26 y un contingente militar
compuesto por 43000 soldados soviéticos, con la misión de apoyar a la FAR.

Cuando el presidente norteamericano J. F. Kennedy se disponía a dar el golpe


mortal contra Cuba recibe las prueba de la existencias de este armamento en Cuba
y moviliza todas sus fuerzas de aire, mar y tierra, no solo en el hemisferio sino en
Europa y el Lejano Oriente .El 22 de octubre se ordenan el bloqueo naval de Cuba
y aumenta la violencia del espacio Aéreo con vuelos espías, el 27 de octubre una
batería antiaérea derriba en Baire un avión V2 que realizaba una misión de
espionaje. Todo el pueblo cubano se movilizo ante la eminencia de la invasión. En
el territorio Centro Habanero se desplazaron las baterías antiaéreas llamada cuatro
bocas las cuales se situaron en Belascoain y Malecón, Parque Maceo y la otra en
la Fortaleza de la Punta, cuentan testigos que se vivieron días de total tensión pero
de mucho patriotismo.

Mas un arreglo llevado a cabo por los presidentes soviéticos y estadounidenses sin
el consentimiento de Cuba puso fin a la crisis con el compromiso de la retirada de
los cohetes y no la agresión a Cuba, ni por los norteamericanos y por sus aliados
eso fue el final.

El 28 de Octubre de 1962 el mismo día en que se conoció el acuerdo el


Comandante en Jefe Fidel Castro expresaba la posición del gobierno cubano:

- El cese del Bloqueo Económico y de todas loas medidas de posición


comercial que ejercen los Estados Unidos en todas las parte del mundo
contra Cuba.
- Cese de todas las actividades subversivas, lanzamiento y desembarcos
de armas y explosivos por aire y mar, organización de invasiones
mercenarias, infiltración de espías y saboteadores, acciones todas
llevadas a cabo desde el territorio de los Estados Unidos y algunos
países cómplices.
- Cese de los ataques piratas que se llevan a cabo desde bases
existentes en Estados Unidos Y Puerto Rico.
- Cese de todas las violaciones del espacio aéreo y naval por aviones y
naves de querrá Estadounidenses

Retirada de la base naval de Guantánamo y devolución del territorio ocupado por


los Estados Unidos.

Pero el compromiso de no intervención directa hecho por Kennedy no significo el fin


del hostigamiento ni el fin del bloqueo económico y los intentos de asfixiar a la isla
por cualquier medio. Le esperaría a la isla días de amargo dolor y muchas perdidas
materiales como en los días de Enero de 1965 en Santiago de las Vegas, cuando
un globo esparció sustancias toxicas sobre ese territorio, en 1968 las sustancias
diseminadas en cafetales, 1971 la fiebre porcina, en 1981 el dengue hemorrágico,
275
la conjuntivitis hemorrágicas, todo fruto de una guerra biológica inmisericorde
contra la isla de Cuba, que continua hasta los días del presente, adoptando nuevas
modalidades y métodos.

El gobierno de los Estados Unidos no ha parado de soñar con el fin de la victoriosa


Revolución que se erigen frente a sus narices y sirven de ejemplo a todos los
pueblos explotados del tercer mundo de que hay alternativas socioeconómicas y
políticas ante el capitalismo despiadado y explotador.

LOS COMITÉS DE DEFENSA DE LA REVOLUCION


Inevitable nos hace en cuanto a todas las manifestaciones de apoyo popular a todo
el proceso revolucionario en el hacer mención a la mejor organización de masas del
archipiélago Cubano. Esta no es otra que los comités de defensa de la revolución
nacidos del imperativo histórico de que cada verdadero revolucionario tomase un
papel vigilante y operativo frente a los actos de la delincuencia asociados a los
intereses desestabilizadores del imperio norteamericano.

Los CDR tienen una hermosa historia, nacen un 28 de septiembre de 1961. Fidel
desde el Palacio Presidencial le informa al pueblo sobre su viaje a la ONU, cuando
se escuchó un estampido como un cañonazo. El jefe de la revolución miró el reloj,
se sonrió al comprobar que no había sido el tradicional cañonazo d las 9 PM, dos
estruendos se repitieron y el pueblo congregado comenzó a cantar el himno
nacional.

Vamos a establecer un sistema de vigilancia colectivo, de vigilancia revolucionaria


colectiva y vamos a ver como se pueden mover aquí los lacayos del imperialismo
porque en definitiva nosotros vivimos en toda ciudad. No hay un edificio de
departamentos, en toda la ciudad ni hay cuadras, ni manzanas, ni hay barrios que
no estén ampliamente representados aquí.
Este fue el comienzo de las que llenarían de páginas con heroísmo y valentía en
todos los frentes.

En el territorio centrohabanero los primeros CDR. Junto a las FMC, se


establecieron en cada barrio. Centro de trabajo, etc. Cuando encontramos su rico
historial en la localidad como no podemos menos que mencionar algunos de esos
fundadores en los seccionales que componían la demarcación geográfica: Josefina
Castro Ruay, presidenta del CDR Josué País ubicado en San Francisco entre San
Rafael y San Miguel. Lázaro de la Fuente Romero del CDR Marcelo Salado en
Soledad 368.

El seccional se ubicó en Neptuno 908 y la zona 6 en San Miguel y Oquendo. No ha


existido tarea de la revolución con la que los comités no participaran: Campaña de

276
Alfabetización, la defensa, la Ley de Ofensiva revolucionaria, los censos de
población y vivienda y en la actual batalla de ideas.

Hoy en día la dirección municipal de los CDR esta situada en la calle Reina entre
Rayo y San Nicolás.

El territorio cuenta con 110 522 cederistas en 100 circunscripciones y tiene 889
CDR distribuidos por consejos populares:

- Cayo Hueso 212


- Dragones 155
- Pueblo Nuevo 223
- Colón 132
- Los Sitios 167

Los CDR fieles a os principios de la revolución y concientes de su origen y


finalidad, dan en la batalla de ideas actual lo mejor del pueblo en aras de una
cultura general e integral en apoyo a los ideales patrióticos de la génesis de la
nación.

ORGANIZACIÓN DE PIONEROS JOSÉ MARTÍ


Otros de los esfuerzos organizativos de los años iniciales de la revolución, estuvo
encaminado a recoger en una organización a los jóvenes estudiantes que por su
nivel primario o secundario no podían incorporarse a la federación de enseñanza
media, ni a la universitaria. Estos que a la vez tenían una histórica participación en
los movimientos revolucionarios que desde el machadato se habían dado, oradores
de esta tradición de genuina tradición patriótica, que dieron numerosas pruebas de
valor en la Liga de los Pioneros, y en 1961 cuando se crea con el nombre de Unión
de Pioneros Rebeldes UPR, con posterioridad y tras fundarse en 1962 la Unión de
Jóvenes Comunistas Fuerza que unió a la JUCI y a los Jóvenes Comunistas del
Partido Socialista, la UPC. Cambió su nombre por el Unión de Pioneros de Cuba en
aquella época solo eran pioneros aquellos niños que cumplieran una serie de
requisitos. En 1966 la UJC quien dirigía la UPC decide que la entrada a dicha
organización fuera masiva.

Las actividades que desarrollaban los pioneros eran muy diferente que la realizaba
la Liga, pues ya nadie los perseguía, ni los maltrataban, realizaban planes de la
calle, desfiles, excursiones, fogatas y trabajos sociales útiles, recogida de materia
prima y colaboraron en muchas tareas de la revolución.

En 1968 se cambió el lema de Pioneros Siempre Listos por el de Pioneros por el


Comunismo seremos como el Ché, atendiendo el deseo expresado por Fidel de
que las jóvenes generaciones seguirán el ejemplo del guerrillero heroico.
277
Durante todos estos años los pioneros continuaron desarrollando múltiples
actividades, en la que han demostrado que con ellos se puede contar. En 1969 se
efectúo el 1er encuentro nacional de jefes de destacamento, los cuales expresaron
sus opiniones acerca de su organización y aportaron ideas que se consolidaron.

En 1970 el Regional de Centro Habana, la situación político social en las escuelas


era buena, de 38759 alumnos (87 escuelas primarias) 30539 eran pioneros que4
representaban el 90% de integración revolucionaria, con un total de 1068
destacamentos de pioneros.

En las Secundarias existían 2825 miembros de la Brigada José Antonio Echeverría


de ellas 68 pertenecían a la UJC.

En 1971 se convierte en una organización autónoma en lo administrativo seguía


orientada por la UJC. En el 1973 se decide cambiar el nombre de la UPC por la
Organización de Pioneros José Martí y que extendiera hasta 9no grado.

Comenzaron a desarrollarse dentro de ella varios movimientos como el de los


pioneros exploradores que exhorta el amor a la naturaleza y a la defensa de la
patria.

En 1986 se efectúa la Asamblea Pioneril XXV Aniversario, en la misma los pioneros


plantearon las dificultades del proceso docente educativo y del trabajo de la
organización, lo cual fue valorado por el Comandante en Jefe como muestra de
madurez y espíritu critico y que merecían celebrar sus congresos. En 1991 se
celebró el primero.

Guante los días 21 y 22 de 1993 el presidente del Consejo Cayo Hueso Adalberto
Acuña tuvo la iniciativa de estimular a 21 pioneros que habían obtenido el Galardón
el Beso de la Patria, organizó recorridos por lugares históricos y diferentes
empresas del territorio. En esta actividad los niños entablaron animadas y
profundas conversaciones con directores de hospitales, MINBAS, Gas Licuado,
Ornitología, Radio Progreso, interesándose por la problemática actual.

1996 vio a la luz el 2do Congreso de la OPJM y se contribuyó con éxito a una mejor
estructuración de la organización. Dentro de ellas nace las Fuerzas de Acción
Pioneril (FAPI) y una serie de Festivales Culturales y deportivos que contribuyen a
dinamizar el imparto social de esta organización en medio frente. En la actualidad
el territorio cuenta con un total de 14028 pioneros en el municipio.

278
MANIFESTACIONES RELIGIOSAS
El territorio centrohabanero dado su componente social tendió siempre a
manifestaciones de tipo religioso, pues ellas sustentaban en tradiciones que
nacieron y vinieron con los primeros pobladores de los barrios nacidos de
extramuros coloniales. Entre las manifestaciones religiosas predomino siempre el
sincretismo religioso revestido de catolicismo.

En la localidad existen 14 templos católicos con una militancia inestable dado que
el sincretismo necesita del Bautismo católico para sus ritos iniciales, y muchas
veces se confunde los militantes con los ocasionales.

La Iglesia Católica y su religión están orientada a


dar un mensaje de salvación de los que quieren
creer una vida nueva después de la muerte por lo
tanto su doctrina fundamental es la de tipo
escatológico y aunque a partir del concilio
Vaticano (1968) se orienta a dar una actividad de
tipo social con la doctrina social de la iglesia sus
fines son los antes mencionados. Al triunfo de la
revolución la componían una jerarquía apátrida en
especial, reacuérdese el obispo auxiliar de La
Habana Monseñor Vidal, párroco de la iglesia
nuestra Señora de La Caridad situada en el
territorio, Salud y Manrique, quien tuvo actitud
poco loable. También existía en el municipio
Centrohabanero otras manifestaciones de tipo
protestante de tradición y arraigo como la iglesia
Prebisteriana Reformada, primera en Cuba de
este tipo, desprendimiento de la iglesia Anglicana
en los Estados Unidos, testigo de Jehová, Bando
de Gedeón, y otras. Quienes tienen una afinación un tanto atípica quienes no han
sido fáciles de integrar a la sociedad.

Ahora bien el sustrato religioso autóctono, como ante se menciona, está en los
barrios con su esencias populares y tradiciones de santería espiritismo etc. quienes
hacen del territorio algo muy colorido y dinámico.

También se observan en la región una tendencia a las fraternidades y


hermandades como los masones, caballeros de la luz, con una amplia membresía.

Existen otras religiones de corte protestante como Bautista, Pentecostales, etc.


Muchos de los miembros de estas religiones así como los sincréticos han dado
participación activa en movimiento y organizaciones políticas y de masas dando un
279
aporte positivo y consecuente con los principios de sus religiones y de los de la
revolución.

CULTURA
Lugar donde confluye lo más autóctono de la cubanidad, es sin dudas Centro
Habana. Calles multiformes, eclecticidad en la arquitectura y una mezcla vigorosa
de las genuinas raíces nacionales con lo pintoresco de la contemporaneidad hacen
del territorio quizás el sitio más representativo de la urbe capitalina. Nada de lo
verdaderamente Cubano escapa a sus pasajes y casas, a su gente, y todo lo bueno
tiene cabida en este municipio cargado de tradición y futuro.

Esto es Centro Habana: sincretismo


multirracial y soñador pueblo que
confía en el mañana que cada día
construye.

Cuando nos referimos a la cultura de


la localidad no se puede obviar la
riqueza que cimenta en sus 14
barrios, ni en la impronta renovadora
que la revolución triunfante a puesto
en el Empeño de hacer del lugar,
como de toda Cuba un pueblo de
hombre y mujeres cultos.

Los esfuerzos en este


sentido arrancan desde el
triunfo revolucionario con la
campana de alfabetización y
en la incorporación de sus
pobladores a las
organizaciones de masas y
cuanto proyecto constructivo
se haya llevado a cabo en
todos estos años.

Los instructores de arte se


crearon en 1964 por
iniciativa del comandante
Fidel, se formaron mucho pero con el tiempo fue decreciendo la presencia de los
mismos, cuando en los años 70 el arte era masivo con un naciente movimiento de
aficionado o instructores, no lo fue así en los finales de los 60 al comienzo del
periodo especial. En la década del 90 un grupo de compañero comenzaron a
280
realizar un trabajo comunitario en las ciudadelas del consejo popular de cayo hueso
como instructores de arte Margarita Sáenz, promotora cultural Rosa Sardinas los
escritores Adis Cupull y Froilán González y otras actividades que continúan bajo la
dirección del taller integral de cayo Hueso ,el cual dirige el arquitecto Joel Díaz,
este trabajo se extiende a todo el municipio y se fortalece a partir de 1994 con el
movimiento de cultivadores de la UNEAC.

En el momento mas critico de periodo especial el Comandante Fidel dijo: “Salvar la


Cultura es lo primero”, por lo que se impone defender nuestra raíces culturales. En
el año 2000 el Comandante retomo la idea y planteó crear un la escuela de arte por
provincia.

Los aspirantes tienen que tener aptitudes para las artes (Danza, Teatro, Música y
otros ) y realizar pruebas preeliminares para ser aceptados.

En el 2004 egresan 85 instructores:

- Artes Plásticas 21
- Danza 18
- Teatro 16
- Música 30

Con amplios horizontes de conocimientos para divulgar y consolidar nuestro raíces


culturales en las escuelas del territorio, que cuenta con otros miembros
profesionales experimentados.

Es oportuno mencionar algunos proyectos comunitarios como los del Callejón de


Hamel dirigido por Salvador González, Callejón del poeta de Rosa Sardiñas, Moros
y Cristiano de Deysi Ferry, Casa del Son de Eduardo Rosillo, Compañía de Narciso
Medina en el cine Favorito y la Compañía Tony Menéndez en el cine Reina. Así
como foco culturales como el Callejón Bernal, La Plazoleta de Antón Recio, Rocco
Jesús Pérez que dan un toque de armonía y autoctonía en el territorio. Existen
también proyectos institucionales en el museo municipal, en la Biblioteca Municipal
en la galería Galiano y en la casa de la trova. No se puede dejar de mencionar las
comparsas tradicionales de los distintos consejo populares: La Sultana- Colon ,La
Boyera- Los Sitios , Danza del León- Barrio Chino, Los Componedores de Batea –
Cayo Hueso Y finalmente decir que el símbolo del municipio Centro Habana es el
Torreón de San Lázaro, y la Distinción con que condecoran el territorio a las
personalidades es la medalla con el Torreón, Símbolo de la tradicional
intransigencia y valentía de los lugareños ante cualquier enemigo que intente
usurpar esta querida tierra.

281
DESARROLLO GENERAL DEL TERRITORIO
Como parte del proyecto social que se construye en el país, y los imperativos del
modelo socialista, nacen desde el mismo comienzo de la triunfante revolución una
serie de medidas e iniciativas que llevarán a dar cada día mayores y mejores
resultados en la calidad y el nivel de vida de la población nacional. Estos logros se
han organizado en a medida que se gana en experiencia y se amplían numerosas
ideas y proyectos.

En panorámica general, se
transita por los años 70 y 80
con una economía que
dinamiza y crece y el apoyo
de la comunidad socialista y
la Unión Soviética hacen
estables los resultados.

En el territorio se emprenden
una serie de planes,
vivienda, mejora en el
transporte, cultura, salud
pública, que como
señalamos anteriormente mejora la calidad de vida de los pobladores
centrohabaneros.

VIVIENDA
Con el desarrollo de una
infraestructura de
producción de materiales de
construcción y el avance de
las técnicas constructivas,
resultó recomendable y
posible simplificar los
tramites a seguir en casos
de reclamación y litigio en
torno a la vivienda,
surgiendo así la ley general
de la vivienda ley 48,
diciembre de 1984, creando
el INV como organismo
central del estado, encargado de dirigir, ejecutar y controlar la aplicación de la
política del estado y del gobierno en cuanto a vivienda.

282
En el territorio centrohabanero el DMV se encuentra en Figuras 209 entre Monte y
Tenerife y se ocupa de una extensión territorial de 3,42 KM cuadrados, con una
población residente de 159,156 habitantes, con una densidad poblacional de
44,490 habitaciones por KM cuadrados para un total de 49,736 viviendas según
censo del 2000.

La estrategia seguida por la dirección municipal ha dado numerosos resultados,


siendo beneficiado un sector mayoritario de la población de la localidad, esto ha
redundado en un sentir agradecido por parte de los lugareños y aunque no
acentúan de algunas imprecisiones, son loables. Centro Habana es un municipio
que tiene la mayoría de sus viviendas en un estado de envejecimiento y poco
mantenimiento, la primera razón se explica por la longevidad de las construcciones
y la segunda por las duras condiciones impuestas al país tras el derrumbe del
modelo soviético y el arreciamiento del bloqueo norteamericano, en las actuales
circunstancias de la unipolaridad ha sido un heroísmo todavía estar en pie. No
obstante se ven los resultados.

Como se ha hecho referencia las características de las construcciones en el


territorio, pequeño y de gran densidad poblacional son de fabricación antigua, de
madera y mampostería que son de la etapa colonial y se encuentran en malas
condiciones. Dentro del territorio están ubicados 73 edificios modernos entre 7 y 16
plantas y 4 hoteles.

Ha inicios del 1870 se organizó el sector de la construcción para acometer la tarea


de dirigir al grupo de desarrollo de comunidades, iniciativa del Comandante Fidel, el
plan consistió en remodelar La Habana. Se comenzó la remodelación por el Barrio
de Cayo Hueso que se comenzó con la edificación de dos edificios de 20 plantas,
así se iniciaba un indetenible movimiento constructivo que llenaría a los barrios del
territorio de reparaciones, remodelaciones y nuevas edificaciones.

COMUNICACIONES
CORRESPONSALIA DE PRENSA DE CENTRO HABANA
Es el órgano donde radican los compañeros que laboran en función de trasmitir a
la comunidad las noticias que se suceden a diario, acerca de acontecer social,
económico, histórico y científico.

Está representado por tres periodistas profesionales de las emisoras: Radio Ciudad
de La Habana, COCO, y Radio Metropolitana.

En el municipio existe desde 1988 una corresponsalía, cuyos periodistas son Alina
Peláez Roselló y Sonia Remigio. Se complementa este trabajo informativo con las
acciones que desarrolla el Buró De Prensa, mediante los corresponsales
283
voluntarios, hoy encabezados por Liván Reyes. La etapa más floreciente de esta
prensa comunitario fue en la década de los años ´90, momento en que se
desempañaba Víctor García Santos.

En le municipio se viene desarrollando en el orden profesional , una labor integral


de la información que tiene como protagonista en el acontecer noticioso a los
trabajadores del sector del comercio, gastron0omía, servicios de la producción y la
cotidianidad de los Consejos Populares, donde se resaltan las soluciones de los
problemas en la participación de las masas, y todo apoyado por la utilización de
géneros tales como: noticia integral, comentarios y los reportajes sobre hechos que
los han caracterizado.

En el 2003 se tuvo la iniciativa de crear una Sala de Prensa en saludo al 50


Aniversario del 26 de Julio, Día de la Rebeldía Nacional.

EMPRESA DE TELECOMUNICACIONES S.A. (ETECSA)


Antes del triunfo de la revolución los comunicadores de vanguardia se sumaron a la
lucha y evitaron con valiosas informaciones muchos asesinatos y propiciaron
victorias.

En el edificio de Águila y Dragones se ocultaron bonos, armas y uniformes en los


escaparates de los viejos equipamientos. El 6 de agosto de 1960 se nacionalizó y
funcionó hasta la década del ´90 que comenzó la modernización de ETECSA,
considerada una de las empresas más fuertes del mercado Cubano. Se funda
como empresa mixta en agosto de 1994 como parte del amplio proyecto de
reanimación económica en pleno período especial llevado a cabo por el Estado
Cubano, con el objetivo de detener el deterioro de la telefonía en Cuba y comienza
a ganar a partir de 1995.

Objetivo Social primordial: Prestar servicios públicos de telecomunicaciones


mediante la operación, instalación, explotación, comercialización y mantenimiento
de redes públicas de telecomunicaciones, tales como:

- Servicio telefónico básico


- Servicio de conducción de señales
- Servicio de transmisión de datos
- Servicio telex nacionales e internacionales
- Servicio de cabinas telefónicas públicas
- Servicio de telecomunicaciones de valor agregado
- Servicio de radiocomunicación móvil localizado
Misión: Proporcionar a los clientes un servicio de excelencia.

AGENCIA POSTAL HABANA 3


Ubicada en Ave. Salvador Allende Esq. Padre Varela (Belascoain), brinda un
Servicio Postal y Telegráfico a la población.
284
COMERCIO Y GASTRONOMIA
Es Centro Habana el centro
del comercio, la
gastronomía y los servicios
con una amplia red de
tiendas, cafeterías, bares,
etc. Atiende a la población
más numerosa de la Isla. Su
dirección está situada en la
Ave. De Italia (Galiano)
entre Conde Cañongo y
Virtudes, comprende la
comercialización de forma
minorista de los productos
alimenticios e industriales y
los gastronómicos.

Son muchos los sectores que dan al municipio un avance distintivo y no a todos se
les puede mencionar. Baste, entonces, un somero recorrido para iluminar el trabajo
y las principales direcciones por donde cursan los esfuerzos de un pueblo decidido
a continuar, con la dirección de la Revolución, los caminos del Socialismo.

Todo desarrollo, en lo material, tiene elementos cuantitativos y cualitativos, de un


desarrollo intelectual y espiritual, que sustenta el anterior dándole armonía y
consistencia. No se puede hablar de uno sin el otro, no se puede exaltar uno en
detrimento del otro. El desarrollo intelectual y espiritual dotan al territorio de la
savia necesaria para que todo lo demás tenga sentido de ser.

Son innumerables los logros y pasos dados en la localidad para la consecución de


dicho fin, y no se pueden dejar de mencionar algunos muy significativos. En lo
referente a la cultura arriba se mencionan una serie de proyectos que se ejecutan y
la creación de varios grupos que promueven, muchos giran alrededor de las
tradiciones en los barrios y en sectores muy sui géneris y particulares, otros de
alcance municipal con miras a reafirmar la identidad centrohabanera y, a su vez,
habanera.

En salud pública, el municipio tiene la dicha de ser uno de los privilegiados del país
al contar con muchas dependencias de ese sector en el territorio, además de contar
con uno de los más novedosos y competentes hospitales de la nación, el Hospital
Docente Hermanos Ameijeiras. En él se han llevado a cabo, exitosamente, los
primeros trasplantes de corazón, así como otras operaciones inéditas en el país, y
la aplicación de técnicas y terapias sin precedente.
285
El territorio tiene otros hospitales heredados por la Revolución, que gracias a ella
han sido renovados, como el Hospital Docente Freyre de Andrade que se inauguró
en la década del ´20, el cual se encuentra en la Ave. Salvador Allende (Carlos III)
entre Hospital y Espada. Cuenta, además, con una amplia red de policlínicos y
consultorios del médico de la familia que proporcionan a los pobladores de la
localidad un servicio de inmediatez y excelencia.

Es obligatoria la mención de otras instituciones que prestigian y distinguen al


municipio como la Empresa de laboratorios Carlos J. Finlay, con numerosos
reconocimientos de su labor, así como la Unidad de Higiene y Epidemiología,
situadas ambas en Infanta entre Santa Marta y Manglar.

La localidad cuenta con algunos Club de Computación y el Palacio de


Computación, pionero e insignia del país en cuanto a esta modalidad, y los
esfuerzos que lleva a cabo el país para dotar de saber a todos sus ciudadanos.

En el territorio se dan cita otras prestigiosas instituciones que con alcance nacional
orquestan en armonía la idea antes expuesta de un desarrollo intelectual y
espiritual promisorio y con resultados valiosos y concretos en la actualidad, entre
ellas, por sólo mencionar algunos, se encuentran el Instituto de Historia, creado el
26 de marzo de 1987, que no sólo conserva documentos y lleva a cabo
286
investigaciones científicas, sino que realiza cursos de adiestramiento en técnicas
de encuadernación y restauración de libros , su impacto cultural en el territorio es
loable; el Instituto de Literatura y Lingüística heredera del local que albergó a la
Sociedad económica Amigos del país; el Instituto Superior de Diseño Industrial que
comienza su labor el 3 de agosto de 1983 en el antigua Casa de los Viudos; la
Editora Política; Propaganda Nacional y varias imprentas. Como ya se mencionó
existen en el territorio bases de radio de alcance nacional e internacional, como
Radio Progreso y Radio Habana Cuba.

Esta somera mirada nos da elementos sobrados para decir que Centro Habana se
encuentra al centro y sobre abundantes componentes para ser la piedra angular del
desarrollo intelectual en la capital.

INTENTOS DESESTABILIZADORES DEL ENEMIGO


La etapa que historiografiamos es la que enmarca y comprende el período de
tránsito al socialismo. En esta etapa que llega a la actualidad, los enemigos
internos no han estado impávidos ante la pujanza del proceso revolucionario y han
tratado por todos los medios de derrocar a la revolución e instaurar el oprobioso
régimen lacayo que existía antes del 59. A cada uno de estos intentos, la dirección
de la Revolución y el pueblo en abrumadora mayoría ha dado respuestas
contundentes. Ante la guerra fría y el bloqueo el pueblo ha antepuesto una actitud
estoica y de unidad monolítica indestructible; ante la guerra bacteriológica y los
intentos de divisionismo y diversionismo ideológico, se ha antepuesto una labor de
higiene y prevención y una rectificación de cualquier error cometido. Ante atentados
y sabotajes, como el Barbados en 1976, o intentos desestabilizadores, como los de
la Embajada de Perú en abridle 1980, el pueblo ha apretado filas junto a Fidel y ha
respondido con elocuentes manifestaciones de apoyo a su revolución.

Los pobladores de Centro Habana han estado en las primeras trincheras de


combate, dando lo mejor de sus esfuerzos para que la Revolución no sea, ni
mínimamente, lesionada por estos intentos de involución. Los lugareños se han
incorporado masivamente a la estrategia de guerra de todo el pueblo y ha
soportado los rigores que por la caída del modelo euro soviético ha impuesto el
período especial en tiempo de paz.

5 DE AGOSTO, SU REPERCUSIÓN EN EL MUNICIPIO


En agosto de 1994 se produce lo que se conoce como la crisis de los balseros,
como consecuencia del rumor expandido a través de la emisora
contrarrevolucionaria de Miami “José Martí”, dando por hecho que a partir de ese
momento todo emigrante Cubano que arribara a las costas de la Florida recibiría un
tratamiento especial dentro de las leyes migratorias de Estados Unidos.

287
Días antes, entre el 1 al 5, el ambiente había comenzado ha tornarse tenso
alrededor del malecón y sobre todo en el muelle de salida de las lanchitas de Regla
y Casa Blanca, medio de transportación de los residentes de esos atípicos
poblados ultramarinos, los cuales por lo general trabajan en La Habana.

Periodistas extranjeros se veían en el entorno, cámara de video en mano, tratando


de buscar la primicia de alguna noticia en especial después del desvío de una de
dichas lanchas, la Baraguá.

Así las cosas, el día 5, entre las 3:00 y las 4:00 p.m. un grupo de jóvenes
confundidos por los cantos de sirena provenientes del norte, unidos a
contrarrevolucionarios pagados por Miami se lanzan a las calles del territorio
destruyendo, saqueando vidrieras de las tiendas en la calle Neptuno, una de las
zonas comerciales más importantes, bajando por Galiano hasta cruzar San Lázaro
para apedrear el frente del Hotel Deauville, cuyos cristales cedieron ante el embate.
En esos instantes, tal y como vio toda Cuba por la televisión, un miembro de la
P.N.R transitaba en bicicleta por malecón frente al hotel y fue agredido. Casi al
unísono y espontáneamente como contrapartida de estos hechos vandálicos , la
población residente sobre todo de Colón, Dragones y Cayo Hueso por ser los más
cercanos, así como los contingentes entre ellos los trabajadores del plan Malecón,
invadieron la calle dispuestos a detener estos disturbios en los momentos en que
llega un jeep del ejército apresuradamente se detiene frente al hotel y de su interior
desciende el Comandante en Jefe Fidel Castro, al momento la población allí
reunida comienza a dar vivas a la Revolución y a Fidel, frustrando así, reduciendo a
cero, este nuevo intento de desestabilizar la Revolución.

En horas posteriores se analizaría la situación por los distintos factores del


territorio, pues la población del mismo siempre ha mantenido una posición
combativa al lado de la Revolución y de Fidel, llegando a la conclusión de que
estos elementos provocadores de dichos incidentes provenían de otros lugares de
la ciudad y se habían trasladado al territorio con el objetivo marcado de producir los
mismos. Por otra parte, y demostrando su apoyo incondicional a la Revolución, se
organizaron en el malecón guardias masivas y puestos de mando en los Consejos
de Colón, en San Lázaro y Prado, donde radicó el Puesto Central de Mando, en
Dragones y Cayo Hueso, reactivando las medidas de vigilancia en el resto de los
Consejos. Pero lo que quedaría como experiencia práctica de estas acciones fue la
organización de un grupo especial a nivel de cuadra y centros de trabajo de la
circunscripción, llamado Grupo de Respuesta Rápida, para enfrentar cualquier tipo
de acción que perturbara la tranquilidad ciudadana, y la creación de un Sistema
Único de Vigilancia y Protección (SUVP),con el objetivo de tomar un conjunto de
medidas organizativas de aseguramiento y de dirección cuya misión es lograr la
unidad y cohesión de las instituciones que la integran, mediante la coordinación de
las acciones para prevenir y enfrentar con eficiencia el delito y demás conductas
antisociales y con ello hacen cumplir la política trazada por el Partido Comunista de

288
Cuba y el Gobierno para contribuir a garantizar el orden público, la tranquilidad
ciudadana y la protección de los bienes estatales y particulares.

Una particularidad de este sistema es su no existencia a nivel de Consejo Popular y


de circunscripción, aunque se analiza su funcionamiento en las reuniones de los
Consejos por la ley 91, actualmente su composición es como sigue:

- Presidente del Consejo Popular de la Administración Municipal (CAM):


Félix de Armas Machado
- Vicepresidente del CAM del SUVP: Armando González Acosta
- Fiscal Jefe Municipal: Margarita Hernández
- Jefe de la PNR Municipal: Inocente García
- Representante de los CDR: Mabel Arro
- Representante de la CTC: María Elena Pallá
- Representante de la FMC: María de los Angeles Dreke
- Representante de la ACRC (Asociación de Combatientes Revolucionaria
Cubana): Coronel Clemente Pérez Pérez

Está situado en el Poder Popular Municipal, sito en Simón Bolívar (Reina) Esq.
Ángeles.

FESTIVAL MUNDIAL DE LA JUVENTUD Y LOS


ESTUDIANTES
Antecedente la habana de celebraría por primera vez este festival en 1978, bajo la
consigna: Por la solidaridad antiimperialista, la paz y la amistad, sus preparativos
se iniciaran un año ante en estrecha colaboración con delegaciones de la FMC,
CDR, centro de trabajo que confeccionaron objetos, celebraron actividades
culturales y vendieron productos incluyendo picadura de las fábricas de tabaco
para ayudar a costear su celebración fue uno de los principales centros la
Universidad de La Habana y desde esa lejana fecha los delegados visitaban
lugares del territorio como la fragua Martiana y otros, transcurrirían 19 años en
1997, para que la isla de Cuba fuera seleccionada por segunda vez, para la
celebración de este festival, que coincidía con una fecha histórica los 50 años de
inauguración de dichos eventos. En estos años para Cuba significaba un gran reto,
en momento difíciles recrudecido por el bloqueo impuesto en la isla por el gobierno
de los Estados Unidos, las Leyes Helms-Burton y Torrecelly, Ley de Ajuste Cubano
a lo que se añadía el periodo especial tras la caída del campo socialistas del cual
tratamos de recuperarnos lentamente.

En el territorio fue seleccionado como sede principal el consejo popular de cayo


hueso en primer lugar por su cercanía a la bicentenaria Universidad de La Habana
y en segundo lugar porque había culminado el proceso de reanimación y
conservación ambas cosas permitieron a la dirección del consejo, su representante
289
poder seleccionar 129 casas cono viviendas junto a las familias Cubana de los
delegados asistente cuya estancia seria desde el 29 de julio al 5 de agosto a las
familias que tendrían a su cargo una atención se le entrego un modulo extra de
alimenticios.

Estos provenían de varios países entre ellos:


PAIS DELEGADOS
Grecia 89
Líbano 19
Malta 6
Yugoslavia 5
Kiriquizia 10
En total 12 335 delegados de 135 países.
El arribo al consejo así como la salida tuvo lugar en le Parque Quintín Bandera
(ante Trillo) y la atención de la salud en el Hospital Hermanos Aimeijiras. El Palacio
de los Torcedores situado en (San Miquel y Lucena) asumió la casa club con
actividades de referentes cada noche desde el 29 de julio, unido al cabaret Las
Vegas y El Colmado.

Entre ellas:
- Noche Folclórica
- Noche Juvenil (Rap)
- Noche Tropical(cabaret: Las Vegas y El Colmado)
- Noche de Boleros y Feeling
- Noche Joven y Vieja Trova.

El plegable del consejo y del municipio que se entrego a cada uno de los
visitantes, recogió datos históricos y de interés y estuvo confeccionado por el
equipo de historia municipal y su trabajo final estuvo a cargo de: la Dra. Belén
Bueno Sierra, Dra. en Ciencias Históricas Justina San Miquel Silot, licenciada
Estela Rivas, Licenciada Desideria Ramos, el logotipo estuvo diseñado por el
licenciado Rafael Yamido con una tirada de 2000 ejemplares en español y 200 en
ingles.

Durante la estancia visitaron diferentes lugares en el municipio entre ellos tenemos:

- Fábrica de Barquillos La Favorita


- José Antonio Echeverría (Contingente)
- Antonio Guiteras (Circulo Infantil)
- Carlos J Finlay (Laboratorio)
- Van Troi (Policlínico)
- Gómez Gendra (Hogar de Anciano)
- Amiguitos de Armenia (Circulo Infantil)
- Mathisa (Materiales higiénicos)
- Fragua Martiana (Museo)
290
- Barrio Chino
- Segurmática (centro de computación)
- Hotel Deauville
- Famrrit (Taller de tabaco )
- Hospital Hermanos Ameijeiras

Se realizaron múltiples actividades para los delegados en algunos focos culturales.


- Callejón del poeta
- Callejón de Hamell
- Peña Literaria galería del Che
- Sociedad de torcedores
- Palacio de los Pioneros Municipal
- Callejón animales Afectivos Callejón de la Paz
- Callejón de la Décima
- Sitial Moncada
- Guiñol la Titiritero
- Peña de la Rumba
- Peña Africana (Hola ola)

Visitaron, ExpoCuba, el parque Lenin, el Parque Zoológico y otros centros de


interés.

El día 5 de agosto la clausura en el estadio Panamericano después la fiesta de la


Sociedad en tres puntos del malecón, La Punta, La Piragua, malecón y G,
auspiciada por el grupo de recreación Nacional de la UJC, se ofrecieron bailables.
Para cerrar con un final por todo lo alto.

No podemos dejar de mencionar como el festival mundial del estudiante aporto una
cifra considerable a la economía del país, según las estadísticas ofrecidas por el
periódico tribuna de La Habana el 3-7-97 en su Pág. 6 el saldo fue:
Moneda Nacional 25 905 207.33
Moneda convertible 207 376.53

BIBLIOGRAFÍA

Periódico tribuna 3/7/97


Periódico Juventud Rebelde 6/7/97
Periódico Granma 6/8/97
Periódico UJC Suplemento
Calzadilla Irradia, Oramas Orlando. El hasta luego a sus familiares Cubanos
Granma ------------------------7/8/97.
En el decursar de 31 años (1997-1978) en el planeta se han celebrado 11 festivales
mundiales:

291
AÑO PAÍS
1947 Checoslovaquia
1949 Hungría
1951 RDA
1953 Rumania
1955 Polonia
1957 URSS
1959 Australia
1962 Finlandia
1968 Bulgaria
1973 RDA
1978 CUBA

BATALLA DE IDEAS
Desde los albores donde se gestaron los sentimientos de Cubanidad aparecen en
el florido verbo de los pobladores de la localidad, los términos que señalan una
clara distinción entre lo autóctono y lo franco. La primera vez que se utiliza la
palabra patria con un sentido de pertenencia a este lugar y sirvió para distinguir al
nacido en estas tierras del peninsular español. Fueron articuladas por pobladores
que vivieron en la región centrohabanera. Martín Félix de Arráte y el Obispo $ de
Santacruz, fueron descubridores e inspiradores de los componentes esenciales que
ya se daban en la isla y hacían pensar en el proceso que gestaba una nación.

En el siglo XVIII aparecen y se dan los pasos


intermedios en la identidad de esta Cubanidad.
Fueron los criollos adinerados que tienen acceso
a la cultura y la información quienes iniciaron
esta batalla ideológica: Francisco de Arango y
Parreño, Luis de Peñalver, José Agustín
Caballero, por solo citar algunos, son puntos
intermedios entre lo español y lo cubano.

Quizás y de hecho la creación de instituciones


docentes fue un acto de viraje que reseño más la
diferenciación. El Seminario de San Carlos, La
Universidad, la Sociedad Patriótica, el papel
periódico etc.

Todo este camino lleva a la especificación y el


deseo de los cubanos de ser independientes e
incorporarse al concierto de las naciones como
una más en igualdad.

292
Figuras de estos tiempos y con ideario más radical y revolucionario fueron: Félix
Varela, José de la Luz y caballero, José Antonio Saco, Heredia y con posterioridad
el pensamiento independentista amado que nos dejo la herencia batalladora de los
Céspedes, Agramonte, Maceos y esa figura cimera quien es guía de la nación José
Martí.

En el siglo XX otros próceres llenarían los espacios vacíos para lograr el sueño de
la soberanía y la independencia como: Villena, Mella, Guiteras y muchos otros que
harían imposible y tediosa la enumeración.

Tras el golpe de estado del 10 de marzo de 1952 hay una respuesta revolucionaria
y emerge la Generación del Centenario que daría fin a la tiranía y pondría en primer
plano y como meta los sueños martianos de una nación con todos y para el bien de
todos, donde la cultura es imperativo para la libertad y donde el hombre es lo más
importante y primero.

El Comandante Fidel Castro se encargaría de deponer en 1950 el régimen


oprobioso que enlutó a las familias Cubanas y no dejó que los EEUU se adueñaran
del país. Esta es la génesis de la actual batalla de ideas y las figuras antes
mencionadas vivieron en la localidad o pasaron algún tiempo en ella.

La Batalla de ideas actual tiene un punto de marcaje, esto no es otro que la batalla
librada por la recuperación del niño Elián González, secuestrado en Miami por la
mafia anticubana, con el consentimiento de las autoridades del los EEUU. A partir
de ese momento y gracias al éxito obtenido, se rediseña esta estrategia como
manera de dar a conocer al mundo la verdad de Cuba y sembrar en el continente
americano y el mundo las ideas de justicia, libertad e independencia ante la uní
polaridad estadounidense y su apetencia guerrerista de conquistar el universo.

Pensando siempre como Martí de que Trinchera de ideas eran más fuertes que
trincheras de piedras y bajo la sacia conducción de la dirección de la revolución, el
pueblo todo y en especial el pueblo centrohabanero han dado una respuesta
positiva a todos los planes y estrategias para impulsar una cultura general integral y
sembrar con ello las ideas que nos permitirán conservar lo ganado y luchar por un
futuro mejor.

Ante la hostilidad de las distintas administraciones norteamericanas y sus acólitos


miamenses, el pueblo Cubano ha tenido que enfrentar la embestida ideológica que
trata de desinformar y atemorizar al país desde la mal llamada Radio Martí y con
posterioridad Tele Martí. El pueblo ha tenido que incrementar sus esfuerzos en la
producción y diversificación de la economía tras el derrumbe del modelo Euro
Soviético, la uní polaridad y el arreciamiento del bloqueo, con leyes inhumanas
como la Torricelli, la Helms-Burton y las constantes acusaciones en forum
internacionales, para implicar a Cuba como violadora de los derechos humanos o la

293
fabricación de armas químicas, todo esto pretextando una invasión directa contra el
territorio nacional Cubano.

La batalla de Ideas actual está destinada a dar una respuesta de mayor cultura
política- ideológica y general en toda la población, de mayor y mejor atención en el
nivel y calidad de vida en el pueblo y de esta manera prolongar la conciencia
revolucionaria y patriótica en las nuevas y futuras generaciones de Cubanos.

Muchas son las tareas que conforman la Batalla de Ideas, estas van desde la
educación y la cultura hasta el internacionalismo, siempre presente en el quehacer
revolucionario, pues detrás de cada una hay resultados de mucho impacto en el
pueblo.

Centro Habana ha estado presente en muchos de estos planes y estrategias:


remodelación de escuelas primarias y construcción de una de e4llas en el Consejo
Popular de Cayo Hueso Raquel Pérez González, que inaugura el proyecto de aulas
con 20 alumnos por maestro, las secundarias del territorio han visto el desempeño
de los jóvenes maestros emergentes y del trabajo de los Trabajadores Sociales,
muchos de ellos son de la localidad, los programas televisivos de Universidad para
todos, así como las Mesas Redondas que son seguidas en los hogares
centrohabaneros por todos sus miembros, sin distinción de edades. Pero quizás la
más tangible para quienes no visitan con frecuencia el municipio lo fue La Tribuna
Abierta de la revolución, celebrado en el territorio el sábado 15 de febrero del 2003
en el parqueo del Hospital Docente Hermanos Ameijeiras. En ella es reseñaron los
logros del territorio y oradores de los distintos planes de la revolución pidieron ante
la multitud allí reunida la devolución de los cinco héroes prisioneros del imperio,
empeño actual de la Batalla de Ideas, para que regresen a la patria cinco jóvenes
injustamente encarcelados en Estados Unidos que defienden al mundo del
terrorismo.

Impactaron las palabras del joven Freddy Fernández, estudiante del Instituto
Politécnico Aguado y Rico de Centro Habana, de Marielis Luis García, pionera de
7mo grado de la Escuela Secundaria Básica José Martí y así también de los
restantes 6 oradores que impresionaron a la movilización de más de 5 000
compatriotas presentes en el lugar y a todo el pueblo Cubano que desde sus casas
o centros de trabajo dieron seguimiento a este acto.

La Batalla de Ideas continuará pues sus miras y metas van mas allá da la
derogación del injusto bloqueo o la devolución a la patria de los prisioneros en las
cárceles del imperio.

La Batalla de Ideas seguirá hasta sembrar en las conciencias del continente y el


mundo el desigual orden económico que sume en la miseria y el enajenamiento
cultural a todas las naciones del tercer mundo,habrá Batalla de Ideas mientras en el
mundo exista una causa justa para batallar.
294
EL BARRIO CHINO, SU REANIMACIÓN A PARTIR DE LA
DÉCADA DEL 80
Al iniciarse la década del 80, el Gobierno del territorio, unido al Gobierno Provincial
se trazaron la tarea de reiniciar la remodelación de una pequeña zona del barrio, su
corazón, cuchillo Rayo, San Nicolás, con el objetivo de animar esa área, en ella se
incluía el edificio del Club cultural de música china en el segundo piso del inmueble
donde radicaba el Restaurante El Pacífico, San Nicolás casi esquina a Zanja, frente
al callejón que formaba el cuchillo, y por supuesto el rescate de ese famoso
restaurante, fue que quedó después de la remodelación en la 5ta planta. Pero este
plan no bastó a pesar de las acciones constructivas para reanimar esta área, se
necesitaba de algo más abarcador que uniera dichas acciones a la reconstrucción
de su historia, su comercio y permitiera el rescate de sus tradiciones, por ello sus
descendientes se dieron a la tarea de crear un Grupo Promotor materializado con la
Resolución 106 del Ministerio de Economía y Planificación.

Este planteaba un autofinanciamiento del Barrio a través del pequeño comercio,


operando en moneda libremente convertible y moneda nacional, como un primer
paso.

Para lograrlo se apoyaron


en el Instituto Politécnico
José Antonio Echeverría
(ISPJAE) y la Dirección
Provincial de Planificación
Física y Arquitectura
(DPPFA) con el objetivo de
realizar acciones
constructivas, que en esta
fase inicial, según apunta en
la entrevista realizada el
arquitecto del grupo
Guillermo Chalita se centró
en la remodelación de la
Sociedad de Artes Marciales Say Jo Jon y la residencia del anciano chino, así
como la construcción en el placer de Zanja y Dragones de un área deportiva y en la
de Rayo y San Nicolás una Plaza China.

A partir de ese momento y desde el año 1996, hasta la fecha el Barrio Chino fue
ganando su espacio en el territorio, con la reanimación del recinto ferial de las
columnas en Galiano y Dragones, la Sede del Grupo Promotor en Manrique y la
Casa de Tradiciones en Salud y Cerrada del Paseo, pero sobre todo por el
intercambio cultural y comercial que ha representado durante estos años el Festival

295
de Chinos de Ultramar, iniciado en 1997, y un año después el Plan Rector para el
Desarrollo Integral del Barrio Chino.

En esta etapa con la reanimación del área comercial, la inauguración del Pórtico
Chino en Dragones y Amistad y la celebración anual del Festival de Chinos de
Ultramar que espera ya en el 2004 su V Festival de Ultramar , puede afirmarse que
en el Barrio Chino resurgen pero a su vez su reanimación se extiende a la
reconstrucción del entorno del Consejo Los Sitios, donde actualmente se encuentra
enclavado, por ello abarca escuelas del territorio, Consultorios médicos, un edificio
de apartamento en construcción, así como reparaciones particulares de vías
fundamentales: Zanja, Dragones, Manrique Campanario y de la Sociedades Chinas
allí situadas.

En la actualidad el Barrio Chino remodela algunos de sus principales restaurantes


el Cuchillo, reconstruye parte de Cementerio Chino y continúa colaborando con el
Gobierno Municipal para lograr el embellecimiento del entorno, con un plan
permanente de acción que sin lugar a dudas enriquece la historia, tradiciones,
costumbres y valores legados por la presencia china en el territorio.

PÓRTICO DE ENTRADA DEL BARRIO CHINO

Está rodeado de un entorno cultural e histórico, símbolo de nuestra identidad como


el Parque de La Fraternidad, con la Fuente de la India o de la Noble Haban, Palacio
Aldama, Paseo del Prado, Parque Central, El Capitolio Nacional y el Gran Teatro
de La Habana.

Esta obra diseñada de


acuerdo a las tradiciones de
la arquitectura china, es de
hormigón con un peso de 18
toneladas, con tres techos
de dos aguas, 18,8 metros
de ancho y dos columnas de
13 metros de altura, que son
la de mayor tamaño hasta el
momento en Latinoamérica.
Está ubicado en la calle
Dragones Esquina Amistad.

Los materiales utilizados fueron traídos de la República Popular China y la


estructura es antisísmica, antihuracán o sea contra cualquier fenómeno
atmosférico.

296
La Empresa constructora Shangai Building Decoration Corpation de Designe
Institute, el ingeniero de la obra fue Yuheyén, que junto a la brigada 8 del
Contingente Julio Antonio Mella de obras industriales, trabajaron en esta inversión.
Fue inaugurado el 28 de febrero de 1999 y es un monumento a la amistad cubano
chino.

Fuente: Ada Oramas (Entrevista sobre El Pórtico Chino)


Periódico Tribuna 28-2-99.

La ley significa un duro golpe para los chinos en su atípico Barrio que se iba
apoyando lentamente, pues de la treintava de sociedades de recreo que existían al
triunfo de la revolución solo subsistían una veintena a finales de la década del 60.
Esta También fue afectada por la ley sobre todo. La Wah Tin Yi Cuan Cun Huí
(asociación de lavanderos) que agrupa en 1956 más de 250 trenes de lavado,
según registro comercial de La Habana, editado por el municipio en esa fecha.

Así las cosas en el territorio y sobre todo, en esta última área que cubría el barrio
chino, el cierre del pequeño y mediano comercio significa el langecimiento su
actividad fundamental y aunque el estrado hizo esfuerzos considerables por tratar
de cumplir en parte este déficit, esto no fue posible hasta finales de los 70, que con
la construcción del Boulevard, se inicio la reanimación de San Rafael de Prado
hasta Galiano. Tiendas y servicios que se extenderían en los 80 al corazón del
Barrio Chino en las calles Zanja, Galiano y Neptuno a reanimar poco a poco, la
razón de ser del territorio: El Comercio y Los Servicios.

Al iniciarse la década del 80, el gobierno del territorio, unido al gobierno provincial
se trazarían la tarea de iniciar la remodelación de una pequeña zona del barrio
chino, su corazón, cuchillo, Rayo, San Nicolás, con el objetivo de animar esa área,
en ella se incluía el edificio del club cultural de música china en el segundo piso del,
inmueble donde radicaba el restaurante El Pacífico, en San Nicolás casi Esq.
Zanja, frente al callejón que formaba el cuchillo y por supuesto, el rescate de ese
famoso restauran. Pero este plan no basto, a pesar de las acciones constructivas
se necesitaba algo más abarcador que uniera dichas acciones a la reconstrucción
de su historia, su comercio y permitiera el rescate de sus tradiciones. Por ello sus
descendientes se dieron a la tarea de crear un grupo promotor materializando con
resolución No 106 del Ministerio de economía y planificación. Este planteaba un
autofinanciamiento del barrio a través del pequeño comercio, operando en moneda
libre convertible y moneda nacional, como primer paso se apoyó en el Instituto
Politécnico José Antonio Echeverría y la dirección Provincial de Planificación
Física y arquitectura con el objetivo de realiza5r acciones constructivas, que en
esta fase inicial según apunta en la entrevista realizada al arquitecto del grupo
Guillermo chalito Pérez, se centro en la remodelación de la Sociedad de Artes
Marciales Say Jo Jon y la residencia

297
BIBLIOGRAFÍA Y FUENTES
1. Amarante Rodríguez Sergio-Vice presidente de la UPEC Provincial. Entrevista.
2. Archivo del Partido Comunista de Archivo del Comité Provincial de Cuba. Ciudad
Habana exp. No 6 1965.
3. Archivo del Partido Comunista de Archivo del Comité Provincial de Cuba .Ciudad
Habana exp. No 7-1967-68.
4. Archivo del Partido Comunista de Archivo del Comité Provincial de Cuba. Ciudad
Habana .cajas No 1,3,4-1970.
5. Blanco Álvarez Rafael y Castillo Carbonell Mario, Historia del edificio de la CTC 1983.
6. Buch Rodríguez Luis M El Gobierno Revolucionario Cubano: Génesis y primeros
pasos, Editorial Ciencias Sociales, La Habana 1999.
7. Cantón Navarro José, Historia de Cuba: El Desafió del yugo y la estrella La Habana
2000
8. Cronología 1988-Instituto de Historia de Cuba
9. Cronología 25 años de Revolución Editora Política La Habana, 1987.
10. Congreso Cultural de La Habana, Ediciones cor, 1988
11. Constitución de la JUCED en La Habana, Imprenta Nacional de Cuba
12. Chacón Villena Alina departamento estadístico comercial MINCIN, entrevista
13. Chalita Pierre Quillermo. Arquitecto Entrevista
14. Orestes Sánchez Gualdo, Jefe de la unidad de análisis y tendencia de salud
,entrevista.
15. Durán Calcano Eleuterio .Instructor del PCC entrevista
16. García Norma ONAT. Entrevista.
17. García Himellis Milagros. ACRC. Entrevista
18. Izquierdo Irene. Periodista de Tribuna Pueblo Nuevo .Dos Partes un Barrio 19/6/96.
19. Mayoral Maria Julia. Periodista Granma Los 22 Dragones 11/6/2003
20. Menéndez Suárez Francisco Julio . Secretario organizador ACRC. Entrevista.
21. Mártires del MININT. Semblanza biográficas tomo 1 Editora Política La Habana 1990.
22. Pallá Marielena .Secretaria General de la CTC Entrevista
23. Peñalver Reina Licenciada en Educación Musical
24. Puerto Margarita Licenciada Entrevista
25. Pulido Yolanda. Licenciada de la FMC delegada municipal
26. Ruiz Hernández Concepción Directora de la escuela municipal del partido; Entrevista.
27. Seis Leyes de la Revolución Editorial Ciencias Sociales, La Habana 1973

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ANEXOS

PARQUE SERGIO GONZÁLEZ (EL CURITA), PATRIOTA


INSIGNE DEL MUNICIPIO
Situado entre las calles Simón Bolívar (Reina), Águila, Dragones y Avenida de Italia
(Galiano).

En el siglo XIX estuvo el mercado de Tacón que más tarde se denominó “Plaza del
Vapor”por existir en una de sus fondas, el cuadro que tenía la pintura del vapor
“Neptuno” (primer barco con máquina de vapor que llegó a Cuba en febrero de
1819). En el lugar Sergio González “El Curita”, administraba una imprenta familiar.

En 1852- 53, Fidel Castro lidereaba 6 grupos revolucionarios en Centro Habana, y


en la plaza se reunía el grupo “Plaza del Vapor”, que fue el asaltante del Cuartel
Carlos Manuel de Céspedes en Bayamo el 26 de julio de 1953. Posteriormente se
demolió y más tarde en este mismo lugar estuvieron los trabajadores por cuenta
propia, y hoy es el Parque Sergio González “El Curita”, mártir del municipio.

En 1544 después de 11 años de estudio para ordenarse como sacerdote, los


abandonó, contrajo matrimonio y comenzó a trabajar en 1945 como inspector en
Havana Railway Co, empresa de tranvías norteamericana y después prestó
servicios en los Autobuses Modernos, se enfrentaba a los patrones y esto hizo que
sus compañeros lo eligieran secretario general del sindicato en el mismo pero
elementos infiltrados no lo permitieron y lograron que lo despidieran.

299
En 1951 trabaja en la imprenta propiedad de una tía, que él administraba en la
Plaza del Vapor.

Por entonces el Curita militaba en la Juventud Ortodoxa y de cuya sección obrera


era organizador de los Autobuses Modernos y ocupaba un cargo en la Comisión
Obrera de ese partido en La Habana.

Cuando se produjo el golpe de estado del 10 de marzo, Sergio imprimió e hizo


circular volantes condenando el hecho y desde ese momento se imprimieron otras
propagandas opuestas a la tiranía, a favor de la liberación de los asaltantes a los
Cuarteles Moncada y Carlos Manuel de Céspedes, después que esto se logró, se
reunió con Fidel en Consulado # 24 en varias ocasiones y puso la imprenta a
disposición del Movimiento 26 de julio al cual se incorpora. Se imprimieron la 2da y
3ra edición de “La Historia me Absolverá”, que fueron sacadas de noche por
Fonseca, Machaco y Gustavo Ameijeiras para ser distribuidas en Pinar del Río, La
Habana y Matanzas, también imprimieron el manifiesto a los militantes del
Congreso Ortodoxo, los manifiestos 1 y 2 del M-26-7 al pueblo de Cuba, así como
el único ejemplar del “Aldabonazo”, periódico de esta organización, también se
imprimió la propaganda de la 03C (cero cabaret, cero cine y cero compras).

Era conocido como Tomás, Tomasito, el Curita como casi todos lo llamaban. Nació
el 29 de octubre de 1922 en Aguada de Pasajeros (hoy provincia de Cienfuegos),
era responsable, disciplinado y bondadoso, se preocupaba de sus compañeros
económicamente dentro de sus posibilidades, la imprenta fue lugar de refugio
donde muchos dormían y otros se ocultaban para salir exiliados a México u otros
países.

En 1956 fue detenido por primera vez en la imprenta, pero Fausto Salas Cañizares,
hermano del jefe de la policía lo conocía de los Autobuses Modernos e intercedió
por él.

Fue famoso por sus fugas espectaculares.

En una acción en que se rescataron las armas que habían quedado ocultas del
Asalto al Palacio Presidencial, la policía llegó al apartamento, y él con serena
sangre fría dijo que era sobrino del “Senador”, los convenció y se retiraron. En otro
apartamento en Santos Suárez, cuando llegaron los soldados, se tiró de un
segundo piso y con un pie fracturado logró escaparse una vez más.

La fuga del Castillo del Príncipe con 10 compañeros fue extraordinaria y a las
pocas horas ya estaba organizando el movimiento, bajo su mando se ejecutan: el
incendio a los tanques de la refinería, el asalto a la Cámara de Compensaciones, la
quema de los pasquines de Rivero Agüero (candidato a la presidencia del gobierno
de Batista), la noche de las cien bombas que explotaron al mismo tiempo con el
cañonazo de las 9 de la noche. Todos fueron duros golpes para la tiranía batistiana.
300
Así se convirtió en el hombre más buscado de la Ciudad de La Habana con
repercusiones en el extranjero.

Ñico López se había percatado de los dotes organizativos y el liderazgo del Curita
que junto a Fontán organizaron las Brigadas Juveniles del M-26-7.

Por el peligro que corrían sus vidas Fidel envió al actual General de Brigada Moisés
Sio Wong, para que los convenciera (Fontán y el Curita) para que fueran para la
Sierra, a Fontán lo asesinaron y la respuesta del Curita fue: Que Fidel lo disculpara,
pero no podía cumplir esa petición, porque en tal momento era imposible
abandonar su responsabilidad y a sus compañeros”.

Su captura en el apartamento de la calle K entre 23 y 21, no fue una delación y se


estaba preparando una acción para el día 18 de marzo, que se postergó y él fue a
avisarle a los compañeros del cambio. En el actual Coppelia había una exposición
de automóviles, el dueño de la misma era un oficial del Buró de Investigación, que
al notar un movimiento en la casa, pensó en un sabotaje y avisó a la policía.

En el registro del apartamento no se encontraron las armas, porque estaban


ocultas en una falsa pared del baño, pero hallaron un zapato que contenía rollos de
dinero y bonos revolucionarios, se llevaron a los compañeros presos y dejaron una
guardia, detuvieron a todos los que llegaban y así sorprendieron al Curita. Lo
torturaron salvajemente y sus últimas palabras fueron de desprecio a los
torturadores: “TIREN QUE AQUÍ HAY UN HOMBRE”.

A los 45 años de su desaparición física (19 de marzo de 1958-2003) fue develado


en el lugar donde estaba ubicada la imprenta un relieve en bronce del rostro y
cuello del mártir adosado a una pared de piedra.

En el parque que lleva su nombre Jesús Montané expresó: “Para recordar a Sergio
González, nuestro Curita, es necesario no solo hablar como él sino actual como él”.

BIBLIOGRAFÍA

Suárez Ramos, Felipe: El Curita, Verdad y Coraje, Trabajadores. 17-3-03. Pág. 14.
Pacheco, María Elena: Sergio. Tomás ó mejor El Curita. Tribuna. 15-3-98. Pág. 4.
Montenegro, Rogelio: “Tiren que aquí hay un hombre”. Granma.

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SÍMBOLO DEL MUNICIPIO
Es el Torreón de San Lázaro, por ser el
monumento más antiguo del territorio y
formar parte del sistema de fortificaciones
de la ciudad (16-10-1979).

Según las actas capitulares, el cabildo del


26 de septiembre de 1664 plantea que se
construyera un Torreón vigía al oeste de la
Coleta de Guillén (denominada después de
San Lázaro). El Torreón se comunicaba
con los pobladores de la Villa mediante
señales de fuego, se colocaba una
antorcha en la parte superior del
monumento y después salía un hombre con
un redoblante hacia la Villa tocando a
genérala para avisar de la presencia de
barcos enemigos.

El 10 de julio fue seleccionado “Día del


municipio”, debido a que en esta fecha
(1555) el corsario francés Jacques de
Sores, tomó, saqueó e incendió la Villa de San Cristóbal de La Habana, el alcalde
Juan de Loveda, sus hombres y la población la defendieron heroicamente.

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