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Rehabilitación (Madr). 2015;49(2):61---62
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EDITORIAL
Tono muscular normal: consideraciones generales
e importancia en rehabilitación
Normal muscle tone: General considerations and importance
in rehabilitation
El término «tono muscular» es un concepto ampliamente
empleado en el entorno de la rehabilitación. Cualquier
clínico tiene la habilidad de distinguir en un paciente un
aumento o un descenso del tono, así como reconocer
un tono normal. Sin embargo, la cuestión se torna bastante
más compleja cuando lo que se pretende es explicar o
definir qué es el tono muscular. De esta forma, términos tan
ambiguos como «contracción basal», «tensión», «firmeza»
o «estado de rigidez»1---3 han servido, en la mayoría de los
casos, para conceptualizar vagamente el tono muscular.
La mayoría de los textos y estudios que abordan el con-
cepto del tono lo hacen desde el punto de vista de sus
alteraciones. La definición de la hipotonía o la hipertonía
sí que ha sido planteada en multitud de ocasiones como
la disminución o aumento del tono muscular, incluso esta-
bleciendo diversos sistemas de evaluación y cuantificación4 .
Sin embargo, resulta paradójica la posibilidad de contem-
plar un aumento o disminución anormal del tono sin haber
determinado previamente qué es, o qué se considera como
tono muscular normal. Muy pocos son los estudios que
abordan el concepto del tono muscular normal y sus fluc-
tuaciones fisiológicas5 , así como los que se alejan de la
perspectiva cualitativa y ofrecen un enfoque cuantitativo
y objetivable1,5---8 . Según esto, algo clínicamente senci-
llo como determinar una hipertonía o hipotonía muscular,
puede resultar difícil desde un punto de vista científico,
pudiendo llegar a plantearse cuánto tiene que aumentar o
disminuir el tono para considerarse anormal.
El concepto de tono muscular
Las primeras referencias al tono muscular se pueden encon-
trar ya desde la antigüedad, donde Galeno consideraba
al tono muscular como un tipo de movimiento en el que
se generaba resistencia estática, considerándose este
como una «acción» producida por la contracción muscular
http://dx.doi.org/10.1016/j.rh.2014.10.003
0048-7120/© 2014 Elsevier España, S.L.U. y SERMEF. Todos los derechos reservados.
y controlada por el sistema nervioso2 . Desde entonces,
el término tono muscular ha servido para referirse a un
concepto confuso, fácil de reconocer pero difícil de definir.
Desde un punto de vista clínico, el tono muscular ha sido
definido como la resistencia percibida ante una moviliza-
ción externa durante una relajación voluntaria9 , por lo que
comúnmente hace referencia a una sensación subjetiva. En
este sentido, y desde una perspectiva mecánica, hay autores
que han tenido en cuenta el tono como sinónimo de rigi-
dez, refiriéndose al ratio de la variación de fuerza entre la
variación de longitud sobre el eje longitudinal del músculo10 ,
o incluso negando el componente neural del tono muscu-
lar, como propusieron Simons y Mense, definiéndolo como la
rigidez elástica y/o viscoelástica en ausencia de actividad
contráctil (actividad de la unidad motora y/o contractura)3 .
Sin embargo, la interacción entre las propiedades viscoe-
lásticas y estructurales del músculo, considerada como el
componente pasivo o intrínseco, junto con la regulación neu-
ral, descrita como el componente neurogénico o reflejo, han
sido ampliamente evidenciados como los componentes fun-
damentales del tono muscular2,5,11 . Según esto, resulta clave
la necesidad de profundizar en el estudio de las propiedades
mecánicas del músculo tales como la rigidez, la viscoelasti-
cidad, la extensibilidad o la tixotropía, así como indagar en
el papel del reflejo fásico y tónico de estiramiento y otros
mecanismos medulares, cuantificados mediante la monito-
rización electromiográfica de los músculos cuando el sujeto
permanece totalmente relajado. El conocimiento y entendi-
miento de todos estos factores que regulan el tono muscular
fisiológico será fundamental para poder optimizar el diag-
nóstico y tratamiento de sus alteraciones.
La Biblioteca Nacional Médica (acrónimo en inglés, NLM)
de los Estados Unidos, que utiliza el término «tono muscular»
como encabezamiento de temas médicos (MeSH, del inglés
Medical Subject Headings), lo define como «el estado de
actividad o tensión de un músculo más allá de lo relacio-
nado con sus propiedades físicas, es decir, su resistencia
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activa al estiramiento». Además, esta definición concluye
con la siguiente afirmación: «en el músculo esquelético, el
tono depende de su inervación eferente»12 . Según esto, la
mayoría y las más citadas de las definiciones propuestas,
asumen el concepto de tono muscular como la resistencia
que ofrece un músculo en reposo cuando este es estirado
por una fuerza externa, independientemente de que la resis-
tencia sea generada por las propiedades biomecánicas del
músculo o por factores nerviosos o reflejos (pero sin activa-
ción voluntaria)5,7,13 .
Por otra parte, también se ha sugerido el paradigma de la
«compresibilidad» del músculo, que evalúa clínicamente la
calidad de la respuesta a la presión del músculo para deter-
minar cómo de «elástico» se encuentra2,3 . De esta forma,
algunos autores sostienen la idea de que el tono también
puede ser la resistencia que ofrece el músculo cuando se
le aplica una fuerza perpendicular a la dirección de sus
fibras1,10 , habiéndose incluso desarrollado instrumentos de
cuantificación basados en este paradigma1 . Sin embargo,
aún está cuestionado si esta medida corresponde realmente
al tono muscular o simplemente aborda algunas de las pro-
piedades mecánicas del músculo14 .
Según esto, podemos destacar que el entendimiento del
tono muscular normal resulta fundamental para poder abor-
dar de forma eficaz los diversos trastornos del tono que tanta
prevalencia tienen en las consultas de rehabilitación. Cual-
quier alteración en cada uno de estos factores, ya sea de
origen neurogénico o mecánico provocará una alteración del
tono. La alteración del tono de origen mecánico más común
son las contracturas3 , mientras que la alteración del tono
de origen neurogénico más descrita ha sido la espasticidad,
aunque también se destacan las distonías, el «síndrome del
hombre rígido» (Stiff-man syndrome) o el síndrome de las
piernas inquietas3 . De esta forma, el desarrollo de instru-
mentos y metodologías que permitan cuantificar de forma
analítica cada uno los componentes del tono muscular, resul-
tará de vital importancia tanto para entender y diagnosticar
sus alteraciones, como para definir su tratamiento.
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J. Gómez-Soriano a,b
a
Escuela Universitaria de Enfermería y Fisioterapia de
Toledo, Universidad de Castilla-La Mancha, Toledo, España
b
Grupo de Función Sensitivomotora, Hospital Nacional de
Parapléjicos, Toledo, España
Correo electrónico: julio.soriano@uclm.es