INTRODUCCIÓN AL ARTE PALEOCRISTIANO

Y BIZANTINO.

Introducción

La crisis del imperio. El arco de Constantino

En el siglo III hubo una crisis en el Imperio romano, por una parte está la pérdida
de poder de los emperadores, inestabilidad política y guerras civiles, y el asedio por
parte de los bárbaros. Por otra una grave crisis socioeconómica, causada por las malas
cosechas. La falta de alimentos provocó la inmigración de la población de la ciudad,
empobrecida al campo, porque los impuestos eran más bajos y los alimentos más
abundantes. Hubo sublevaciones contra los propietarios de las tierras y disminución del
número de esclavos por la falta de nuevas conquistas. Las ciudades entraron en un
proceso de abandono y deterioro. A este proceso se le llama ruralización. Algunos
estudiosos apuntan a una pérdida de la moralidad y los valores que sostenían el Imperio
Romano. En esta época el Imperio Romano se descentraliza y en él reina la anarquía,
llegándose a escindir algunas provincias. El último emperador romano Romulo Augusto
fue depuesto en 476, por Odoagro, jefe de los Herulos. Aunque el cargo de emperador
hacía tiempo que era nominal y quien tenía el poder eran los bárbaros.
A la descomposición del Imperio Romano corresponde una nueva sensibilidad
artística, que se comienza a apartar de lo sensorial y de la observación de la naturaleza,
que ya comenzó en el siglo II. Es un arte muy intelectualizado que en lugar de prestar
atención a la diversidad de formas que ofrece la naturaleza prefiere la uniformidad de
las convenciones (personajes representados de frente, tamaños correspondientes a su
respectiva importancia jerárquica, un arte que prefiere las figuras planas a la expresión
volumétrica y que destruye las proporciones para expresar ideas que le parecen más
importantes.

EL ARTE PALEOCRISTIANO

Durante el Imperio Romano nace el cristianismo en Palestina. En un primer

momento sólo se extenderá entre los judíos, pero pronto se predicará a los gentiles, San
Pablo es el primero que lo hace. El cristianismo se expandió por el Imperio Romano
utilizando su red viaria. En un primer momento los cristianos fueron perseguidos por
negarse a rendir culto al emperador. El cristianismo era anicónico, pero por influencia
romana se empiezan a representar imágenes. Como diría Gregorio V en el siglo VI “La
pintura puede ser para los iletrados lo mismo que la escritura para los que saben leer”.
Su primer arte se desarrollará en la clandestinidad. El arte cristiano beberá directamente
del romano, del clásico, tomando tipos iconográficos, modos de representación que
obtendrán un nuevo significado, un nuevo contenido. Por ejemplo el buen pastor,
tomado del moscóforo o de la iconografía pastoril, símbolo de la filantropía en Roma, se
adopta para representar a Cristo. Para representar a Cristo se utiliza la imagen de Apolo,
la Virgen es una matrona romana con un niño. Los primeros lugares de culto eran casas
romanas adaptadas (domus ecclesiae o tituli).
 El edicto de Milán (313) convirtió al cristianismo en religión oficial. Auque no era
la única del Imperio fue favorecida por Constantino, convirtiéndose en la religión
dominante. Gran número de funcionarios y aristócratas se convirtieron inducidos por el
favor imperial hacia esta religión. La organización de la iglesia se consolidó,
equiparándose a la organización administrativa del Imperio. Constantino creía que era el
apóstol número 13, elegido por Dios para llevar a la Iglesia de Cristo a la victoria. Bajo
su reinado se concedió a los obispos el rango, los privilegios y las insignias de los más
altos cargos del gobierno.
La nueva posición de la iglesia afectó a la liturgia, se hizo prácticamente uniforme
en todo el Imperio, siguió las líneas fundamentales que ya existían en el siglo III. El
ritual se hizo más estricto y más solemne, Cristo ya no era el Dios de los pobres, al igual
que el emperador se consideraba su representante en la tierra, a Dios se lo consideraba
el emperador del cielo. La liturgia se convirtió en un ceremonial ejecutado ante el Señor
o su representante el obispo y respetado con tanta rigidez como el ceremonial que se
hacía ante el emperador. La liturgia adoptó rasgos del protocolo oficial romano y de la
corte imperial. El obispo, ataviado con las galas de un alto magistrado, entraba en la
iglesia en solemne procesión. Se hacían los mismos rituales pero con un ceremonial más
complejo. La iglesia necesitaba un tipo de arquitectura diferente, había pasado a un
ámbito público y no le servía la arquitectura de carácter doméstico, además eran
demasiado numerosos como para celebrar sus ceremonias en los tituli o las domus
ecclesiae, aunque se siguieron utilizando.
La iglesia necesitaba una nueva arquitectura a la altura de su nuevo estatus y de su
imperio protector, y dada su nueva posición bajo Constantino y su nuevo concepto de
Cristo rey la iglesia cristiana se volvió hacia en ámbito de la arquitectura pública y
oficial. Dentro de la arquitectura social eligió un edificio que tenía connotaciones
religiosas y oficiales. Los cristianos tomaron como modelos la basílica para hacer su
lugar de culto
También esto afectará a la iconografía, ya que se toma la iconografía imperial para
representar algunas escenas. Ya en el siglo IV el clero, quería reflejar los grandes
intereses espirituales de su élite después de la paz de la iglesia. Los artistas no tenían
ninguna base para construir imágenes que ilustraran esas ideas, nuevas y abstractas, y
las tomaron de la iconografía Imperial, que les permitía representar el poder de Dios.
Tenemos así el Cristo en majestad sentado en un trono y también la Virgen sentada en
un trono, ambos con ricos trajes. Viene de aquí también la representación de Cristo
sobre el globo terráqueo, o con él en la mano, como símbolo del poder universal. Así se
representaban también los emperadores. Los mártires son coronados por Jesús así como
eran coronados los vencedores por los emperadores, y se les atribuía las ropas de
dignatarios de la corte. Todas estas escenas estaban inspiradas en las ceremonias
cortesanas. Este modelo se utiliza también en escenas de la trasmisión de la ley a San
Pedro. Otra escena es Cristo presidiendo una asamblea de apóstoles.
Otros temas tratados a menudo por el arte paleocristiano reflejan modelos
imperiales: la Adoración de los Magos y la entrada de Cristo en Jerusalén, tema
iconográficamente próximo al de la huída a Egipto. Estos episodios son interpretados
dejándose influir por la iconografía oficial, en particular por la muy oficial y simbólica
escena de la ofrenda de coronas y presentes por parte de los orientales y los bárbaros
vencidos por un emperador y por la del ritual helenístico y romano del soberano
visitando una plaza de su Imperio o una ciudad conquistada. Antes de que los cristianos
se apoderaran de ella esto era un símbolo de la extensión del poder del emperador.
Hay otras escenas que dependen de la iconografía de los tribunales, juicios,
condenas y ejecuciones. Las escenas de juicio son frecuentes en los sarcófagos de
magistrados romanos, aplicándose el mismo esquema iconográfico al juicio de Salomón
que al de Daniel o a los de Jesús y los mártires. Mientras que el estado romano
propagaba esas imágenes para glorificar al magistrado y al militar que al cortar las
cabezas establecían el orden romano, los imagineros cristianos utilizaron los mismos
esquemas icnográficos para exaltar la memoria de los supliciados y proclamar la
iniquidad de los representantes de ese estado.
Estilísticamente el arte paleocristiano es parte del arte romano imperial. La
escultura y la pintura participan de esa pérdida de realismo, naturalismo y rigidez, pero
se da un paso más Las imágenes cristianas son esquemáticas, se reducen a la mínima
expresión, son imágenes-signo que permiten abreviaciones sorprendentes. Son imágenes
triviales y sólo su repetición en un determinado contexto, hace comprender el sentido
general que se les confiere y que les da valor de ilustración de ideas abstractas.

ARTE BIZANTINO

La caída del imperio de occidente y la llegada de los pueblos bárbaros

En el 395 Teodosio prohibió el paganismo, y a su muerte dividió su imperio entre sus

hijos, Arcadio y Honorio. Desde entonces existirán el Imperio Romano de Oriente y el
de Occidente. El Imperio Romano de Occidente desaparece tras la invasión de los
barbaros, esto ocurre en 476, pero ya desde principios de siglo gobernaban Roma en la
sombra.
El Imperio de Oriente resistió y en él pervivieron las tradiciones clásicas, pero su arte va
evolucionando hasta crear un estilo propio, el arte Bizantino. Hay que tener en cuenta
que tenían una cultura griega, por la importancia que la herencia helenística tenía en
esta región, de hecho la lengua oficial del Imperio fue el griego. El arte bizantino se da
desde la caída del Imperio de Occidente hasta 1453, cuando Constantinopla cae en
manos de los turcos. En este periodo tiene lugar un acontecimiento muy importante, el
gran cisma, en el que se separa la iglesia ortodoxa y la iglesia romana En 1054.
El Imperio de Oriente no rompe abruptamente con la tradición romana. En el Imperio de
Justiniano se conservan los esquemas del aparato imperial romano tradicional, las
estructuras del estado, se sigue usando el latín como lengua y se sigue la tradición
artística romana y paleocristiana. A partir del siglo VII hay una crisis, La crisis
iconoclasta de las que el Imperio sale profundamente transformado: Cambian los
esquemas del estado, se cambia la lengua oficial y el emperador se aleja de lo que era la
figura del emperador en Roma. El arte se adecua a esta nueva cultura y ya es
propiamente bizantino.

ARQUITECTURA

El arte Bizantino se va a desarrollar en un periodo muy amplio y va a cambiar, pero

tiene unas características generales que perduran en el tiempo. Es heredero directo del
arte romano y del arte paleocristiano.
Los materiales de construcción utilizados son la piedra y el ladrillo, que no suelen ser
ricos y van revestidos de mármol y mosaicos. Los exteriores son muy sobrios y los
interiores muy decorados.
Es una arquitectura abovedada, se usan la bóveda y cúpulas sobre pechinas. Las plantas
son de tipo basílical, derivadas de las basílicas paleocristianas y de planta centralizada.
Se intenta dar sensación de unidad de espacio al interior. Además la iglesia tiene un
simbolismo, se intenta que sea una imagen del cosmos, donde la parte cuadrada es la
tierra y la cúpula el cielo. A esto ayudo el modo en el que se distribuyeron las imágenes
dentro de la iglesia, pues estaban decoradas con mosaicos y frescos. En la cúpula
aparecía Cristo o Dios pantocrátor a veces con los evangelistas en las pechinas, el Dios
invisible, rodeado de ángeles. Los profetas apóstoles, mártires y obispos se
representaban en las demás cúpulas o en la parte alta de los muros y en el ábside la
figura de la Virgen. Por la nave central puede haber representaciones de las fiestas de la
iglesia o de la historia de la salvación. Los bizantinos comienzan a representar los
grandes ciclos de la vida de Cristo.
Como soporte se usan los pilares, pero son más frecuentes las columnas corintias o
compuestas, con capiteles más esquemáticos realizados con trépano y con cimacio. El
cimacio es un elemento de piedra, con forma de pirámide trucada invertida que se
coloca sobre el capitel para darle más altura.
LAS ARTES PLÁSTICAS

La imagen bizantina aboga por la claridad y la sencillez de las representaciones, rigidez,

sin expresión, el arte clásico no está del todo olvidado, puesto que el artista sabe como
colocar el manto alrededor del cuerpo. Se dejan de cotejar las formas artísticas con la
realidad, ya no se intenta descubrir como representar un cuerpo, o crear ilusión de
profundidad. En esta escena un artista helenístico habría representado una gran multitud
y una escena teatral, aquí se aboga por la sencillez, pero sin duda se sabe que está
ocurriendo algo sagrado, persiste la representación del entorno, pero el fondo ya es
dorado, los apóstoles le acercan a Cristo los panes y los peces con paños como se
hacían las ofrendas al emperador. No solo representa el milagro de los panes y los
peces, sino el símbolo y la señal del poder permanente de Cristo, Cristo mira
directamente al espectador a quien alimentará (ejemplo: El milagro de los panes y los
peces de San Apolinar el nuevo).

 La crisis iconoclasta y el triunfo de las imágenes: Virgen y Cristo niño en un

trono

Existía un partido contrario a las imágenes religiosas, denominado de los iconoclastas o

destructores de imágenes. En 754 consiguieron el dominio y comenzó lo que se llama la
Crisis Iconoclasta y se prohibieron las imágenes religiosas. El bando contrario
argumentaba que si Dios se había mostrado a los ojos de los hombres en forma humana,
por qué no se va a manifestar por medio de las imágenes visibles. Ellos no adoraban a
las imágenes por si mismas, sino a través de ellas adoraban a Dios y a los santos.
En el 843 vuelve al poder este partido y desde ese momento las pinturas que adornaban
las iglesias ya no podían ser miradas como simples ilustraciones al servicio de los que
no sabían leer. Eran reflejos misteriosos del mundo sobrenatural. Por ello la iglesia
oriental no pudo permitir que el artista siguiera su fantasía en esas obras. Sólo se
aceptaban modelos consagrados por una tradición antigua, así se volvió a insistir en la
observación de las tradiciones. Gracias a esto se conservó algo de la tradición griega, la
forma de modelar los rostros, de disponer los pliegues de la ropa, aunque esté alejado de
lo que consiguió el arte griego. Se estableces modos de representación que se repetirán.
Por ejemplo la virgen TEOTOKOS es la virgen con el niño representada como madre de
Dios, la ODITRIGIA es la virgen sola de pie, como conductora de almas, puede
aparecer con el niño KIRIOTISSA La virgen representada como un trono de sabiduría y
Jesús niño sentado en sus piernas y los dos rígidos hacia delante. Puede ser a la misma
vez Teotokos. La virgen lo señala como camino de salvación. GALACTOTROFUSA, es
la que amamanta al niño, Glycofilusa, Virgen que acaricia al niño.
También aparece el Cristo Pantocrátor o la Deesis (la Virgen y San Juan a los lados de
la cruz)
En cuanto a las técnicas utilizadas están la miniatura, para ilustrar libros y manuscritos,
existe la pintura al fresco, pero la más importante es el mosaico. Los romanos ya lo
utilizaban sobre todo para los suelos. La musivaria consiste en hacer dibujo con
pequeñas piezas (teselas). Los Bizantinos los van a emplear para decorar el muro y van
a mejorar la técnica, puesto que las teselas se cubren con pasta vítrea e incluso piedras
semipreciosas para darles brillo. Incorporan los fondos dorados. Los temas
representados son Vírgenes, Apóstoles, Cristo, Santos, Escenas de la Biblia, e incluso
algunos emperadores o patriarcas.
Mención aparte merecen los iconos. Pinturas sobre tablas que representaban a la Virgen
con el niño Jesús, Cristo o algún santo. A partir del siglo VI su culto se convirtió en
idolatría. Algunos de estos iconos tenían origen sobrenatural (imágenes aquerópitas),
que son imágenes no hechas por la mano del hombre, como el retrato de la Virgen
pintada por San Lucas o el paño de la Verónica. Los iconos tienen un gran desarrollo en
Rusia y aun son muy importantes para los ortodoxos.