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Alumno/a:
UNIVERSIDAD ISABEL I
1. Introducción………..………………………………………………….................1
2. Marco teórico………………………..……………………………………...........3
3. Objetivos……………………………………………………....……..…...…......9
4. Método………………………………………………………………..…............9
5. Resultados………………………………………………………………...........13
6. Discusión………………………………………..………………………….......22
7. Conclusiones………………………………………..…………………….........34
8. Referencias bibliográficas…………………………..……………….................35
9. Anexos................................................................................................................42
Resumen
El CrossFit es una práctica deportiva que nació en California en el año 2001. Su creador
fue Greg Glassman, quien ideó unos ejercicios destinados en un principio, a los policías
de Los Ángeles y posteriormente al ejército de los Estados Unidos, para mejorar su
forma física. El paso del tiempo ha situado al CrossFit como el entrenamiento por
excelencia de las fuerzas y miembros de seguridad de todo el mundo (Kte, 2019).
CrossFit es una marca registrada en la Unión Europea, propiedad de CrossFit Inc., que
consiste en una modalidad de fitness y deporte competitivo caracterizado por múltiples
capacidades físicas y movimientos multiarticulares (Gómez-Landero y Frías-Menacho,
2020). Es una forma de ejercicio intenso apoyado en gimnasia, ejercicios
cardiovasculares, pesas y elevación olímpica (Woolf y Lawrence, 2017). Los
movimientos son constantemente variados y realizados a intensidades submáximas. Su
objetivo está centrado en el desarrollo de la resistencia cardiovascular, fuerza,
flexibilidad, potencia, velocidad, coordinación, agilidad, equilibrio, precisión, todos
ellos considerados por Crossfit Inc, como los componentes de la aptitud física (Kte,
2019).
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últimos 10 años. La web oficial de CrossFit (mapa. www.CrossFit.com), señala la
existencia de cerca de 15.000 gimnasios a nivel mundial en el año 2021, y en los juegos
CrossFit Games Open 2021 tiene un total de 137.351 participantes pertenecientes a los
cinco continentes. Publicado en este sitio oficial, se encuentra el reglamento que recoge
la normativa vigente para la temporada competitiva de la compañía en el año 2021 y
que se denomina Rulebook 2021. En él destaca como novedad, la accesibilidad para los
participantes, ya que se han incluido más categorías de participación, la realización de
las primeras fases clasificatorias hasta las semifinales de forma en línea y la inclusión
de una categoría adaptativa, en la que tiene cabida atletas con alguna discapacidad. Para
ello, se incluyen 16 divisiones, en la que los atletas compiten en función de la división
que mejor se adapte a sus capacidades, lo que supone un gran paso adelante, para la
inclusión de un mayor número de deportistas.
Cuando se habla de CrossFit se debe tener presente una característica inherente a este
deporte, que es la escalabilidad (Montalvo et al., 2017). Con este término se alude a las
progresiones en la carga y modificaciones en los movimientos realizados de habilidad y
flexibilidad, en los programas de entrenamiento diario, más conocidos como Work of
the Day (WOD). Estos entrenamientos que oscilan entre los 10 - 20 minutos, incluyen
diversos ejercicios de resistencia, peso corporal, gimnasia, levantamiento de pesas
(Keogh y Winwood, 2017). Los WOD combinan ejercicios aeróbicos y anaeróbicos,
con movimientos de alta habilidad, realizándose en condiciones de fatiga cardiovascular
y muscular (Montalvo et al., 2017). Son realizados a una intensidad alta, en sucesión
rápida y con un tiempo de recuperación nulo o limitado (Keogh y Winwood, 2017).
Puede existir un tiempo limitado para su realización o bien se deben completar tantas
rondas como sea posible en el tiempo establecido. Esta posibilidad de compartir
experiencias y resultados del WOD entre los atletas es lo que da paso a otra
característica propia del CrossFit que es la de generar comunidad (Montalvo et al.,
2017).
En cuanto a los motivos atribuibles a su éxito, predomina el hecho de ser una práctica
de ejercicios siempre variados y con retos diarios novedosos, que evitan la pérdida de
motivación. La ausencia de rutina, el seguimiento del entrenador, la obtención
generalmente de unos resultados rápidos y el efecto de formar parte de la comunidad
CrossFit con un ambiente cultural físico y social, son razones que favorecen el éxito y la
retención de los miembros (Almonte Ocaña et al., 2020; Woolf y Lawrence, 2017). La
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rápida expansión también se debe a su modelo de negocio, los emprendedores que
quieren abrir su propio centro CrossFit deben afiliarse, pagar una cuota y completar un
programa de certificados de capacitación para instructores, que exige la propia marca.
De esta manera, se mantiene la calidad en el servicio, se continúa con la marca y se
externalizan los costes, favoreciendo un crecimiento mucho mayor, sin perder su
esencia (Woolf y Lawrence, 2017). La presencia del CrossFit en la industria del fitness
ha crecido exponencialmente, a la misma vez que el interés por su investigación (Hech
Dominski et al., 2018). La participación en los concursos creados para la competición
en este deporte, CrossFit Games en 2007, y CrossFit Open en 2011, reúne a miles de
deportistas de todo el mundo.
A pesar de la existencia de muchos estudios que analizan esta práctica deportiva, existe
poca evidencia científica, en cuanto al riesgo de lesiones en atletas de CrossFit, en
función de su nivel de experiencia (Szeles et al., 2020). Además, el crecimiento
constante en la participación de competiciones de este deporte, suscita un gran interés
científico que evalúe las posibles lesiones musculoesqueléticas en los atletas
competitivos (Feito et al., 2020).
2. Marco teórico
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Factores todo ellos, que generan una alta fidelidad de sus practicantes a los programas
CrossFit (Davies et al., 2016; Dominski et al., 2020; Gianzina y Kassotaki, 2019). En
esta misma línea de trabajo, Simpson et al. (2017) concluyen que los factores que llevan
a sus participantes a seguir y continuar con los programas de entrenamiento CrossFit
son cuatro: aceptación y superación del desafío, el compromiso existente, la conexión y
comunidad que genera y la transformación y empoderamiento que conlleva.
Por otro lado, diversos estudios han evaluado el consumo máximo de oxígeno
(VO 2 máx.) y la composición corporal de practicantes de CrossFit con distintos niveles
de condición física. Concretamente, esta práctica deportiva, mejora la capacidad
metabólica y el acondicionamiento físico (Camacho-Cardeñosa et al., 2020; Gianzina y
Kassotaki, 2019; Gómez-Landero y Frías-Menacho, 2020). En esta línea Barranco-Ruiz
et al. (2020) en su estudio, atribuyen al CrossFit la mejora del acondicionamiento físico
y de la fuerza, así como la de otros marcadores de salud en poblaciones muy
heterogéneas, como adultos y jóvenes.
Respecto a los efectos del CrossFit a corto plazo, Drake et al. (2017) indican que se
produjeron mejoras significativas en la mayoría de los parámetros de salud y el estado
físico de los deportistas. En contraposición, según estos autores, se detectó una
sobrecarga funcional, siendo fundamental el control de la intensidad en el
entrenamiento, para evitar un sobreentrenamiento y posibles lesiones.
Frente a las bondades manifiestas en multitud de estudios acerca del CrossFit, existen
alertas fijadas en esta modalidad deportiva, en cuanto a las lesiones durante su práctica.
En concreto, una de las características intrínsecas de este deporte, es la intensidad
(Kaczorowska et al., 2020), pudiendo aumentar el riesgo de lesión. Por lo que, se han
realizado estudios para analizar la prevalencia de lesiones en modalidades deportivas de
alta intensidad como el CrossFit (Elkin et al., 2019; Minghelli y Vicente, 2019). En este
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sentido, Sibley y Bergman (2018) alertan que el registro público de resultados, dado su
factor social y el espíritu competitivo, puede conducir al sobreentrenamiento.
Por otro lado, Montalvo et al. (2017) indican que los programas de entrenamiento diario
de CrossFit (WOD) suelen estar compuestos por una combinación de ejercicios
aeróbicos y anaeróbicos realizados con movimientos de alta complejidad técnica, en
situación de fatiga cardiovascular y muscular, en contraposición con los entrenamientos
tradicionales partidarios de la ejecución de movimientos de potencia multiarticular
maximizando la carga y preservando la técnica. También señalan, que las lesiones
pueden venir provocadas por la pérdida de concentración y técnica mal implementada,
durante la realización de ejercicios anaeróbicos de alta intensidad en condiciones de
fatiga. Barranco-Ruiz et al. (2020) destacan como denominador común que suele
predominar como causas fundamentales de lesiones en atletas, el efectuar un
sobreentrenamiento, la realización de una mala técnica o bien cargas de entrenamiento
muy superiores a las posibilidades de los atletas. Dominski et al. (2018) hacen alusión a
que la falta de instructor o de una supervisión inadecuada, en el que el instructor no
tenga conocimiento de la carga máxima de cada atleta, es otro factor que incrementa el
riesgo de lesión.
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Así, Barranco-Ruiz et al. (2020) determinan que actualmente, existen dudas sobre la
seguridad de llevar a cabo entrenamientos de alta intensidad, pues los estudios llevados
a cabo no obtienen conclusiones claras acerca de la tasa de lesiones. Encontrando
estudios cuya tasa de lesiones por 1000 horas de entrenamiento se asemeja a la de otros
deportes como el fútbol o el rugby, en comparación con otros estudios que reportan una
tasa de lesiones elevadas, de más del 40% de la población estudiada, siendo este
porcentaje superior que el informado por estudios anteriores.
No obstante, el CrossFit implica un riesgo similar de lesión a otros deportes (Feito et al.,
2018; Klimek et al., 2018). En este sentido, Kaczorowska et al. (2020) indican que el
CrossFit tiene una tasa de lesión en sus practicantes incluso inferior a la producida en
otras modalidades deportivas. El estudio de Keogh y Winwood (2017) atribuye una tasa
de lesión al culturismo de 0,24 - 1 lesiones por 1000 horas de entrenamiento, a
StrongMan 4,5 - 6,1 por 1000 horas, siendo la tasa más alta la asociada a Higland
Games de 7,5 por 1000 horas en comparación con la de CrossFit que se sitúa en 3,1
lesiones por 1000 horas de entrenamiento. Asimismo, Dominski et al. (2018) afirman
que la tasa de lesión de CrossFit no se considera alta en comparación con otros deportes
o ejercicios físicos. Así con una tasa de lesión obtenida en el estudio, para el CrossFit de
3,1 lesiones por 1000 horas de entrenamiento, es baja si se compara con las lesiones por
1000 horas de entrenamiento de otros deportes tales como la carrera (2,3 a 33), el
triatlón (5,4), la gimnasia (5,45), el fútbol (9,6), el rugby (26,7) y ligeramente superior a
la del balonmano (2,5). En esta línea, Gardiner et al. (2020), concluyen en su estudio
que el CrossFit tiene un riesgo de lesión bajo, y señalan como factores que influyen en
la incidencia de lesiones, la experiencia en la práctica de CrossFit, la asiduidad de su
práctica y la participación en competiciones de CrossFit. Aquellos atletas que compiten,
presentan un riesgo de lesión mayor, durante el entrenamiento que durante la
competición, puesto que entrenan muchas más horas a la semana y compiten en
determinados momentos del año, por lo que la exposición a la lesión en relación a la
competición es mayor (Keogh y Winwood, 2017).
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2.2.1. Principales lesiones en la práctica de CrossFit
En cuanto a las lesiones más comunes asociadas a su práctica destacan las lesiones de
hombro, espalda baja y rodilla (Dominski et al, 2018; Gianzina y Kassotaki, 2019). En
ambos estudios, se hace alusión también a un tipo de lesión más grave, como la
rabdomiólisis, si bien es menos común. Esta afección se produce debido a un daño
muscular, la muerte de fibras musculares y la liberación del contenido de fibra a la
sangre. Aunque puede deberse a causas diversas, infecciosas, metabólicas,
farmacológicas, tóxicas, isquémicas y traumáticas (Morales-Hernández, 2016), puede
desencadenarse fruto de ejercicios de alta intensidad y breve descanso, induciendo daño
muscular excesivo en los atletas, con complicaciones clínicas y bioquímicas secundarias
(Gomes et al., 2020); si bien, aunque suele ser benigna, en casos de entrenamiento muy
extremo puede provocar insuficiencia renal (Carbone et al., 2020), pudiendo llegar
incluso a provocar la muerte (Lima, 2019). Sin embargo, la rabdomiólisis no es una
afección exclusiva del CrossFit, sino de todos aquellos deportes que se realizan de
forma extenuante y es de esperar, en aquellos atletas que hacen ejercicio a niveles de
intensidad extremadamente altos sin una supervisión adecuada o con una mala
prescripción del ejercicio (Dominski et al., 2018). La incidencia de esa afección en
CrossFit, no es superior a la producida en otras modalidades deportivas con similares
características en volumen, intensidad o duración, tales como el entrenamiento de fuerza
o culturismo, no existiendo diferencias ni en la frecuencia de casos, ni en la gravedad
(Lima, 2019).
Otro estudio indica que los miembros superiores, en concreto, hombros, muñeca o codo,
son las zonas con mayor riesgo de lesión en un atleta de CrossFit, teniendo menor
prevalencia de lesión la espalda o la rodilla. No obstante, concluye que es necesario la
realización de más estudios, que aporten luz acerca de las principales lesiones asociadas
a la práctica de CrossFit, diferentes tipos de lesiones, gravedad y causas que las
provocan, puesto que resulta complicado comparar las lesiones entre diferentes estudios
a tenor de multitud de diferencias entre las causas que las provocan, la severidad de las
mismas, la sensación de malestar en los atletas y su posible consideración o no como
lesión. La necesidad de realizar estudios más rigurosos, tiene como finalidad el poder
extrapolar los resultados a la realización de la práctica de CrossFit, con el objetivo de
mejorar el control de las zonas más lesivas. (Barranco-Ruiz et al., 2020).
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Por su parte, Keogh y Winwood (2017) señalaron como los sitios con mayor
probabilidad de lesión en una atleta de CrossFit, al hombro, espalda baja y rodilla. Con
una gravedad de la lesión, en términos de dolor o de pérdida de tiempo de
entrenamiento baja, siendo las distenciones musculares, las tendinitis y esguinces, los
tipos de lesiones más comunes. Similares conclusiones, se encuentran en el estudio de
da Costa et al. (2019) indicando la existencia de más posibilidades de lesión al hombro
y espalda baja, siendo estas lesiones leves o moderadas en un 89,1% de los casos y en
tan solo un 2,6% de los casos, con necesidad de intervención quirúrgica.
En estudios llevados a cabo con atletas de competición de CrossFit, consideran que las
lesiones por uso excesivo, son las que más predominan en esta práctica deportiva, dado
los altos volúmenes de movimientos repetitivos y elevadas cargas de entrenamiento.
Además, señalan que las áreas que durante el estudio resultaron más lesionadas, por
problemas de uso excesivo, fueron rodilla, espalda baja y muñeca (Williams et al.,
2017). Dadas las características del CrossFit, esto es, un deporte con altas exigencias
físicas y complejos movimientos, existe el riesgo de desgarros agudos del tendón dorsal
ancho (LTD), pero es una lesión deportiva poco común, fruto de la realización de
ejercicios que impliquen tracción horizontal y vertical (Holschen et al., 2019).
Al igual que diversos son los factores de una lesión, la ocurrencia de lesiones en una
parte u otra, varía por la realización de diferentes ejercicios o movimientos, que
conducen a la aparición de lesiones en los atletas (Barranco-Ruiz et al., 2020; Cheng et
al., 2020; Dominski et al., 2018; Keogh y Winwood, 2017). No obstante, ejercicios tales
como los olympic lifting o aquellos que implican una mayor amplitud de movimiento,
suelen predisponer a mayores probabilidades de lesión en el atleta (Barranco-Ruiz et al.,
2020). En este sentido, explicaciones al respecto del área más lesiva como es el hombro,
viene dada por una colocación del mismo en posiciones extremas de abducción, flexión
y rotación interna, que aumentan la probabilidad de lesión de esta área en la ejecución
de movimientos tales como Over head Squat, push press, kettlebel swing y santch, todos
ellos movimientos considerados perjudiciales, por el movimiento complejo de hombro
que conlleva su práctica (Dominski et al., 2018). El estudio de Cheng et al. (2020)
indica que los movimientos de levantamiento de pesas y los de levantamiento olímpico,
traen como consecuencia un incremento de las lesiones en la espalda, seguidas del
hombro y la muñeca.
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Dada la alta incidencia de lesiones en el hombro, se aconseja una mayor cautela en los
atletas y vigilancia de los entrenadores, durante la ejecución de ejercicios de gimnasia y
levantamiento de pesas olímpico, evitando esfuerzos físicos excesivos e inadecuados.
Así, en el caso del hombro, atletas que se hubiesen lesionado previamente, tienen 8
veces más probabilidades de lesionarse (Dominski et al., 2018).
3. Objetivos
4. Método
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Los operadores booleanos lógicos utilizados con estas palabras clave fueron “AND”,
“OR” y “NOT”, siendo las búsquedas resultantes, CrossFit and (“lesión” or “lesiones”)
not (“embarazadas” or “niños”), CrossFit and (“injury” or “injuries”) not (“pregnant” or
“children”). La última búsqueda se realizó el 09 de abril de 2021.
• Se excluyeron los estudios que pretendían sacar conclusiones sobre los efectos
psicológicos o sociales del CrossFit en la población.
• Se incluyeron todos los estudios donde el objeto de investigación fueran las lesiones
durante la práctica deportiva del CrossFit.
• Se incluyeron todos los estudios sobre daño muscular generado por la práctica
deportiva del CrossFit.
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Meta-Analyses (PRISMA) (Moher et al., 2016). A través de un diagrama de flujo
representada por la Figura 1, se resume las diferentes fases de la revisión sistemática. El
09 de abril de 2021, se realizó una búsqueda en las bases de datos anteriormente
mencionados, obteniendo un total de 147 estudios relacionados con las palabras clave y
los operadores booleanos expuestos anteriormente. Se eliminaron los estudios que no
fuesen de acceso abierto, los que estuviesen duplicados en ambas bases de datos, las
revisiones bibliográficas y los que no estaban relacionados en base al título objeto de
estudio. En una primera revisión, se seleccionaron 15 estudios para la elaboración de la
revisión sistemática, después del análisis de las referencias de los estudios, se incluyó
uno más, obteniendo un total de 16 estudios.
11
Figura 1.
n=70
Artículos excluidos tras la primera
etapa (duplicados).
n=30
n=15 n=1
revisión bibliográfica.
n=16
12
5. Resultados.
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Tabla 1.
Resumen de los estudios seleccionados que han analizado las lesiones en CrossFit.
(Tawfik et 270 encuestados con una Estudio epidemiológico Sexo, edad, duración de La lesión de muñeca y de la mano suelen ser
al., 2021). edad media de 34 años y mediante cuestionario participación en CrossFit, habituales en los atletas de CrossFit. Es
98,8% de los encuestados durante 9 semanas. lesiones anteriores, regreso al frecuente que los deportistas de CrossFit
con una continuidad en la entrenamiento y número de regresen al entrenamiento antes de tiempo, por
práctica del CrossFit superior días de entrenamiento por lo que quizás sea recomendable establecer
a los 12 meses. semana. terapias y medidas preventivas para estas
lesiones.
(Gomes et 23 participantes con más de Análisis de sangre tras Número de glóbulos blancos, Una sola sesión de HIFT (entrenamiento de
al., 2020). 8 meses de experiencia. completar un actividad de la creatincinasa intervalos de alta intensidad) alteró de forma
entrenamiento de plasmática, nivel de cortisol significativa los recuentos de glóbulos blancos,
CrossFit (Cindy), en sangre y concentración de marcadores de estrés y tejido muscular similares
durante un día. lactato. a otros entrenamientos de alta intensidad. Los
atletas más experimentados, mostraron
respuestas mayores de linfocitos y cortisol que
los menos expertos.
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(Cheng et 244 atletas de CrossFit de 15 Cuestionario en línea, Edad, sexo, índice de masa Tanto en la población asiática como occidental,
al., 2020). centros diferentes en durante 26 semanas. corporal, aparición de el entrenamiento funcional con respecto al
Malasia, mayores de 18 años lesiones en los últimos seis CrossFit, tiene similares tasas de incidencia de
y más de 6 meses de meses, causas de las lesiones, lesiones. Ésta se incrementa en gimnasios no
experiencia. lesiones previas, presencia afiliados. Un calentamiento previo de espalda y
del entrenador, certificación hombros previene lesiones, así como aquellas
del entrenador, tipo de precauciones tomadas de forma adicional, en
gimnasio y nivel de atletas con lesiones previas.
condición física
autopercibido.
(Feito et 3049 atletas que participaron Análisis transversal, Sexo, edad, número de La competición en eventos de CrossFit no
al., 2020). en un evento deportivo de durante 208 semanas. lesiones reportadas, presenta un riesgo significativo de lesión. Si bien
CrossFit entre 2013 a 2017. participación en la falta de experiencia en su práctica, así como el
competiciones, frecuencia de no pertenecer a una filial oficial, sí va
entrenamiento, duración del acompañado de una mayor probabilidad de
entrenamiento, experiencia y lesión del atleta. Se aconseja cautela en los
atención médica. atletas con una experiencia inferior a doce
meses, para la participación de competiciones de
CrossFit.
15
(Carbone 22 atletas de CrossFit que Se les realiza un Sexo, horas de participación El retorno de atletas al CrossFit ante una
et al., habían sido sometidos a una seguimiento de 104 postoperatorio, tiempo de reparación artroscópica del manguito rotador es
2020). reparación artroscópica en el semanas, mediante suspensión de CrossFit antes del 100%, regresando el 91% de los atletas al
manguito de los rotadores, cuestionario y análisis de la cirugía (días), tiempo mismo nivel previo a la lesión o superior. El
que participasen en de sangre en laboratorio para reanudar CrossFit tras la CrossFit presenta una tasa de lesión baja, no
entrenamientos de CrossFit desde el preoperatorio cirugía (meses) y nivel de diferenciándose la tasa de lesiones de hombro,
durante más un año y al hasta el final. actitud física de retorno. respecto de la obtenida en otros deportes.
menos 4 veces por semana.
(Szeles et 515 atletas de 13 diferentes Cumplimentación de un Edad, sexo, peso, lesiones Uno de cada 3 atletas de CrossFit, en un periodo
al., 2020). cajas de CrossFit en una cuestionario, previas, experiencia en de entrenamiento de 12 semanas, ha padecido
ciudad Brasileña y con una observaciones de 12 CrossFit, cargas de trabajo lesiones musculoesqueléticas, a nivel general de
experiencia de un año en una semanas con 6 medidas durante el entrenamiento, gravedad baja o leve. Los atletas de CrossFit que
caja CrossFit. repetidas quincenales. estiramientos, ejercicios realicen entrenamientos a niveles de
preventivos, uso equipos de competición (Rx) alternos y cargas de
protección, variación de entrenamiento escaladas, presentan mayor
entrenador, demostraciones probabilidad de este tipo de lesiones, que
previas de ejercicios,práctica aquellos que entrenan de forma consistente con
de otros deportes, gravedad Rx o cargas escaladas. Mayor probabilidad de
de lesión, atención médica, lesión también presentan aquellos atletas con
competiciones, lesiones más lesiones previas o una experiencia en la práctica
frecuentes y ubicación. de CrossFit inferior a un año.
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(Alekseyev 885 atletas que practican Encuesta transversal Edad, sexo, nivel de El hombro y la zona lumbar son las áreas más
et al., CrossFit en EE.UU. e retrospectiva realizada, experiencia, horas de lesivas. 1 de cada 3 practicantes de CrossFit
2020). internacionales. Se dividió a durante 26 semanas. entrenamiento por semana, experimentan una lesión durante su
los encuestados en tres tipo de lesión, ejercicio entrenamiento. Los atletas experimentados, con
grupos de experiencia en cesante, lugar de más de 3 años de práctica o con un
CrossFit: principiante, entrenamiento, instrucción entrenamiento superior a las horas semanales,
intermedio y avanzado o con respecto a la forma y incrementan la probabilidad de lesión, al hacer
competitivo. técnica adecuadas, ejercicio con una mayor intensidad y menos
estiramiento antes y entre periodos de descanso. Es recomendable la
entrenamiento, tratamiento prevención con un mayor control de los
de la lesión, recurrencia de la entrenadores.
lesión e impacto de la lesión.
(Shaw et Un atleta de 40 años que Evaluación mediante Rango de movimiento, El uso de la herramienta de evaluación Selective
al., 2019). prepara una competición de inspecciones musculares, variaciones anatómicas, Functional Movement Assessment (SFMA),
CrossFit y que presentó rango de movimiento, ubicación del dolor, rango de sistema o herramienta de movimiento funcional
dolor bilateral en la rodilla y pruebas ortopédicas y movimiento, derivación de la selectivo, puede ser muy útil, para localizar
lumbalgia. pantalla de movimiento. articulación sacroilíaca, áreas aparentemente no relacionadas con el
ejercicios causantes de dolor, dolor, ayudando a disminuir el dolor, mejorar el
medición de la fuerza y rendimiento y tratar la causa de la lesión de los
reflejos. atletas. Con unos ejercicios básicos se mejoró la
función del deportista.
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(da Costa 414 atletas que practican Estudio observacional, Sexo, edad, peso, altura, Las áreas más lesivas en los atletas de CrossFit
et al., CrossFit en Brasil, con más descriptivo, de corte práctica de otros deportes, son el hombro, y la zona lumbar, si bien con un
2019). de 16 años de edad y más de transversal y presencia de lesiones previas, nivel de gravedad leve o moderado. La
6 meses de práctica en esta epidemiológico mediante periodo de práctica de probabilidad de lesión aumenta en el atleta,
modalidad deportiva. cuestionario de CrossFit, nivel de conforme aumenta el periodo de práctica y el
recolección de datos competencia del atleta, zonas nivel de competencia.
durante 52 semanas. corporales más afectadas,
gravedad de la lesión y
lesiones más frecuentes.
(Elkin et 411 participantes, Encuesta, durante 104 Edad, sexo, historial de Tanto los atletas de levantamiento de pesas y
al., 2019). distribuidos en 7 gimnasios semanas. lesiones, uso de suplementos, aquellos practicantes de CrossFit, deben
autorizados de Pensilvania, atención médica, zonas más aumentar la precaución y ser conscientes de sus
todos ellos practicantes de lesionada y ejercicios limitaciones, para prevenir el riesgo de
CrossFit y de levantamiento cesantes de lesión. potenciales lesiones.
de pesas tradicional, con una
media de entrenamiento de
4,5 días a la semana.
18
(Tibana et Un atleta de élite que Estudio en el que se Magnitud de la carga interna, Durante el 50% del tiempo que duró el estudio,
al., 2019). compite en CrossFit, de 24 analizaba su ritmo relación de carga de trabajo el atleta realizó entrenamientos fuera de la 'zona
años de edad. cardíaco, carga de aguda / crónica, percepción segura’. Se recomienda el uso de la escala de
entrenamiento, índice de de bienestar y variabilidad de bienestar, y un mayor control por parte de los
carga de trabajo la frecuencia cardiaca. entrenadores, para prevenir lesiones e incorporar
aguda/crónica y cambios en las cargas del entrenamiento en base
sensación de bienestar de a las respuestas del atleta.
38 semanas de duración.
(Holschen Un deportista Caso clínico, durante 52 Movilidad del hombro, El CrossFit, al igual que otros deportes con
et al., semiprofesional de CrossFit semanas. percepción de dolor en elevadas exigencias físicas, suelen incrementar
2019). que participa en reposo y con estrés, rango de el riesgo de desgarros agudos del tendón dorsal
competiciones nacionales e movimiento del hombro y ancho. Va acompañado de dolor agudo y una
internacionales, que regreso al entrenamiento alteración del contorno del hombro afectado. Su
experimentó una lesión en la CrossFit. tratamiento puede ser conservador o quirúrgico.
parte posterior del hombro
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(Arcanjo et 195 participantes en la Estudio mediante Edad, sexo, nivel de Tras la participación en una competición de
al., 2018). encuesta tras una encuesta descriptiva, competencia, ubicación de la CrossFit, las zonas señaladas por los atletas que
competición de CrossFit en exploratoria y lesión, síntomas referidos y presentan síntomas dolorosos son: cuádriceps,
Brasil y que presentaron cuantitativa, durante un gravedad, percepción de la espalda baja y hombro. Fueron síntomas agudos
síntomas. día. causa de dichos síntomas, y leves, ocasionados fundamentalmente por la
momento de la competición fatiga posterior a la prueba. La involucración de
que busca atención, técnica los fisioterapeutas en CrossFit es importante
de tratamiento de síntomas, para prevenir, tratar y disminuir los niveles de
tiempo de práctica, lesiones y lesiones.
tratamientos previos.
(Williams 6 atletas que participan en Estudio en el que se Variabilidad de la frecuencia Monitorear las respuestas de las frecuencias
et al., competiciones mundiales de analizaba la frecuencia cardíaca en reposo diario y cardíacas en atletas que participan en
2017). CrossFit. cardíaca, la carga de de las cagas de trabajo. competiciones, puede ayudar a los profesionales
entrenamiento y lesión a preparar a estos atletas, al equilibrar de forma
por uso excesivo de 16 óptima las cargas de trabajo y los valores de
semanas de duración. intervalos de trabajo semanales y por tanto el
“riesgo y la recompensa” durante su
capacitación.
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(Montalvo 191 atletas de CrossFit, Encuesta durante 26 Años de práctica, horas Las personas interesadas en realizar CrossFit
et al., clasificándolos en función de semanas. semanales de entrenamiento, para fitness, competición o ambos, deben
2017). su tiempo y frecuencia en exposiciones semanales, sopesar los riesgos y beneficios de la
este deporte, historial de altura, ubicación de las participación. Siendo su tasa de lesión muy
lesiones y antecedentes de lesiones, masa corporal, similar a la de otros deportes. En modelos
los atletas. número de lesiones, sexo, ajustados, factores que se asocian con mayor
práctica de otros deportes, probabilidad de lesión son la altura, la duración
calentamiento y estiramiento, de la participación en CrossFit, práctica de otros
gravedad de las lesiones, deportes y exposiciones semanales de los atletas
variación del entrenamiento, a CrossFit.
nivel de competición, y
atención médica.
(Aune y 247 atletas que participan en Encuesta retrospectiva Sexo, lesiones previas, Los atletas de CrossFit presentaron una tasa de
Powers, un programa de durante 13 semanas. problemas médicos lesiones similar a la de otras actividades
2017). entrenamiento extremo, con musculoesqueléticos recreativas. El hombro o la parte superior del
una media de más de 12 preexistentes, experiencia en brazo fueron las áreas más comúnmente
meses de experiencia. CrossFit, zonas lesionadas, lesionadas. Una lesión previa en el hombro,
ejercicios implicados en la predispone a una nueva lesión en el mismo
lesión, percepción de causa lugar. Los atletas nuevos presentan mayor índice
de la lesión y tratamiento de riesgo de lesión, que aquellos más
empleado en la lesión. experimentados.
21
6. Discusión
El objetivo de este trabajo fue realizar una revisión del riesgo de lesión y las principales
lesiones que tiene un atleta de Crossfit. En la literatura actual se encuentran diversas
opiniones al respecto sugiriendo tasas de lesiones que oscilan entre el 12,8% y el 73,5%
y una incidencia de lesiones entre 0,27 y 3,3 por 1000 horas de entrenamiento (Tawfik
et al., 2021). En cuanto a los motivos que justifique esta variabilidad de valores, puede
deberse a diversos periodos de estudio, una definición de lesión más inespecífica en la
que se considere como tal, cualquier dolor, sensación o malestar musculoesquelético,
que impidiera al atleta entrenar, trabajar o competir de cualquier manera y durante
cualquier periodo de tiempo (Aune y Powers, 2017; Montalvo et al., 2017; Szeles et al.,
2020). La selección de la muestra y el método de muestreo aplicado, tipo de estudio
realizado (prospectivo, retrospectivo) implicación y bondad de los resultados
suministrados por los participantes de cada estudio, son factores que pueden justificar
esta variabilidad. Por otra parte, como señalan Arcanjo et al. (2018) en ocasiones, el
aumento del dolor muscular es habitual en deportes de alta intensidad pudiendo
malinterpretarse como una lesión. Considerando la diferencia existente entre los
estudios analizados, cuya metodología se representa en el Anexo I, el objetivo es
realizar una síntesis general de los mismos y obtener conclusiones desde una
perspectiva cualitativa, que permita concluir con los riesgos inherentes a un grupo
concreto de CrossFit, los atletas experimentados en su práctica.
Según la filosofía del CrossFit, todo practicante de CrossFit suele ser considerado un
atleta (Szeles et al., 2020; Woolf y Lawrence 2017). Si bien, a efectos de esta revisión
sistemática, se ha tenido como criterio de inclusión, estudios que entre sus participantes
cuenten con un mínimo de 6 meses de experiencia o participen en competiciones de
CrossFit, asociando a éstos, el término de atleta de CrossFit, (deportistas
experimentados, competitivos o avanzados). Los resultados obtenidos del análisis de los
estudios seleccionados, revela un porcentaje de participantes lesionados que oscila entre
19% y 73,5% (Alekseyev et al., 2020; Aune y Powers, 2017; Arcanjo et al., 2018;
Cheng et al., 2020; da Costa et al., 2019; Elkin et al., 2019; Montalvo et al., 2017;
Szeles et al., 2020). En cuanto a la tasa de lesiones, entendiendo ésta como el número de
lesiones por 1000 horas de entrenamiento, los estudios se encuentran dentro del ratio
0,27 (Tawfik et al., 2021) y 5,3 lesiones por 1000 horas (Cheng et al., 2020), salvo el
estudio llevado a cabo por Szeles et al. (2020) que presenta un valor de 18,9 por 1000
22
horas. El elevado valor de este último estudio de carácter prospectivo, puede que sea
debido al método llevado a cabo, así como por su definición de daño, pues se consideró
como lesión musculoesquelética a toda aquella o a cualquier dolor (en articulaciones,
huesos, ligamentos, tendones o músculos) que impidiera la práctica de deporte al atleta
durante un día. Similar definición de lesión adoptan otros estudios al considerar como
tal, todo recuerdo de dolor y que sea asociado por el participante en el estudio, como
dolor (Elkin et al., 2019), cualquier síntoma musculoesquelético (Arcanjo et al., 2018),
cualquier síntoma asociado a lesión por uso excesivo (Williams et al., 2017) o cualquier
dolor que impidiera entrenar, modificar ejercicios o programa de entrenamiento o ir al
médico (Aune y Powers, 2017; Montalvo et al., 2017). Choca la anterior definición de
lesión más inclusiva, con la seguida por otros estudios, como la de Weisenthal et al.
(2014) y Mehrab et al. (2017) citados por Szeles et al. (2020, p. 12) que apuestan por un
término más restrictivo y por tanto definen lesión como cualquier dolor, sensación o
malestar musculoesquelético que tuviera como consecuencia la interrupción de la
práctica de CrossFit o cualquier otro deporte durante más de una semana, o bien que
supusiera la modificación de las actividades normales de entrenamiento en duración,
intensidad o modalidad durante más de 2 semanas, o bien cualquier queja física que
fuera lo suficientemente grave para acudir a un médico. Esta definición de dolor ha sido
la utilizada por algunos de los estudios objeto de análisis (Carbone et al., 2020; Cheng
et al., 2020; da Costa et al., 2019). La consideración de lesión y los principales valores
extraídos de los estudios analizados, han sido recopilados en el Anexo II.
Cabe señalar que una definición de dolor menos restrictiva, permite identificar un
mayor número de lesiones menores o por uso excesivo, factor que resulta interesante a
efectos de identificar de forma temprana pequeñas lesiones y reducir el riesgo de
progresión de las mismas, favoreciendo la prevención de lesiones futuras (Szeles et al.,
2020).
Estudios tales como Cheng et al. (2020); Dominski et al. (2018); Montalvo et al. (2017)
definen al CrossFit como un deporte inclusivo, al considerar al CrossFit como un
deporte adecuado para diferentes grupos de edad de 18 a 69 años, siempre y cuando se
realice en un entorno seguro y con profesionales bien formados y cualificados. Si bien
en los estudios analizados la edad media de los deportistas lesionados no difería de la
edad medida de los no lesionados, tras realizar en un estudio un análisis de regresión
logística multivariante, ajustado por rutina de entrenamiento y sexo, se obtuvo que el
23
riesgo de lesión se reducía un 13% por cada aumento de edad de 10 años (Elkin et al.,
2019). En cuanto al riesgo de lesión y el sexo del atleta, estudios tales como Alekseyev
et al. (2020), Aune y Powers, (2017), Carbone et al. (2020), da Costa et al. (2019),
Dominski et al. (2018), Feito et al. (2020), Keogh y Winwood, (2017), Montalvo et al.
(2017), Szeles et al. (2020) no encuentran diferencias significativas en el riesgo de
lesión a tenor del sexo del atleta. En contraposición estudios como Cheng et al. (2020);
Elkin et al. (2019); Tawfik et al. (2021) encuentran un mayor riesgo lesivo en los
hombres que en las mujeres. Estos hallazgos son consistentes con la explicación de
otros autores, quienes apuntan a que las mujeres son más propensas a la búsqueda de
entrenadores que les den las directrices y las orientaciones e instrucciones con respecto
al entrenamiento CrossFit con respecto a los hombres (Tawfik et al., 2021). En este
sentido, existe además una correlación significativa entre la supervisión del entrenador
y una menor tasa de lesiones (Barranco-Ruiz et al., 2020; Dominski et al., 2018; Tawfik
et al., 2021). Concretamente Cheng et al. (2020) indican que en mujeres la tasa de
lesiones fue de 5,1 por 1000 horas de entrenamiento, mientras que en hombres fue de
5,5 por 1000 horas de entrenamiento. En esta línea, Feito et al. (2020) encontraron
diferentes tasas de lesiones en atletas competidores hombres y mujeres, siendo para las
mujeres 0,31-1,13 lesiones por 1000 horas de entrenamiento, y la de los hombres 0,33-
1,14 lesiones por 1000 horas de entrenamiento. Sin embargo, estas diferencias no fueron
significativas. Quizás estos datos sean debidos a que los hombres tienen una mayor
predisposición a participar en competiciones y más exposición al entrenamiento de éstos
entre otros (Szeles et al., 2020).
Otro estudio Montalvo et al. (2017) aluden a la altura con un mayor riesgo de lesión de
CrossFit. Una mayor altura del atleta de CrossFit puede estar asociada con momentos
biomecánicos superiores. Atletas con mayor talla, suele asociarse con cargas mayores,
sometiendo a un riesgo superior a su sistema musculoesquelético. No obstante, se
deduce que el riesgo de lesión tiene mayor relación con la fuerza que con el factor de
altura.
Por otro lado, no existe evidencia de una mayor riesgo de lesiones en los atletas de
CrossFit y el consumo de suplementos (Elkin et al., 2019), estiramientos previos y con
posterioridad a la realización de la práctica (Alekseyev et al., 2020; Montalvo et al.,
2017; Szeles et al., 2020).
24
En cuanto a la relación entre el riesgo de lesión y experiencia en la práctica de CrossFit,
hay estudios que la avalan (Alekseyev et al., 2020; da Costa et al., 2019; Feito et al.,
2020; Gomes et al., 2020; Montalvo et al., 2017; Szeles et al., 2020; Tawfik et al.,
2021), mientras que otros niegan la existencia de relación (Cheng et al., 2020).
Pese a la creencia de que los atletas competitivos se lesionan más que los no
competitivos, y hay autores que le atribuyen un mayor riesgo de lesión, (Alekseyev et
al., 2020; da Costa et al., 2019; Keogh y Winwood, 2017; Montalvo et al., 2017),
existen evidencias de que no existen diferencias significativas en cuanto a las
probabilidades de lesionarse de los primeros respecto de los segundos, por lo que la
participación en competiciones de CrossFit, no conlleva un riesgo superior de lesión.
(Feito et al., 2020).
25
En cuanto a la intensidad y su relación con las lesiones, en un estudio elaborado sobre
los efectos en atletas ante una única sesión de alta intensidad, se observaron
perturbaciones agudas en parámetros inmunitarios, marcadores de estrés y daño
muscular. El estudio estaba compuesto por atletas experimentados, con más de 18
meses de práctica en CrossFit no competitivos, y por atletas novatos con una práctica
entre 3 y 8 meses, Las conclusiones obtenidas, mostraron que los atletas más
experimentados mostraron mayores respuestas de linfocitos y cortisol que deportistas
iniciados o más novatos, lo cual es indicativo una perturbación superior a nivel
inmunitario y marcadores de estrés superiores en los atletas con más antigüedad (Gomes
et al., 2020). Esto quizás sea debido a que los atletas más experimentados realizan los
ejercicios a una intensidad mayor, más cargas y repeticiones.
Contrapuesto a estos resultados, existen estudios como Cheng et al. (2020) en los que
no encuentran diferencias significativas entre atletas experimentados y principiantes. Su
asociación a una probabilidad más alta de lesión se debe a otros factores como la no
pertenencia del atleta a un gimnasio afiliado o una elevada percepción del atleta de su
26
condición física. En esta misma línea, los hallazgos del estudio de Carbone et al. (2020),
sugieren que la vinculación con un centro oficial de CrossFit, puede resultar menos
lesivo que uno que no esté afiliado, siendo un factor protector respecto de las lesiones.
Así, Cheng et al. (2020) sugieren que aquellos atletas que se percibían a sí mismos con
un nivel físico superior a la media, se lesionaban más, que aquellos otros que se
consideraban con un menor nivel de condición física. Concretamente, la probabilidad de
lesionarse de los primeros respecto de los segundos era 10 veces mayor. Esta
percepción del atleta, puede llevarle a subestimar el entrenamiento, a no realizar un
calentamiento adecuado o incluso ambas a la vez, aumentando las probabilidades de
lesionarse. La igualdad de riesgo de lesión en los atletas, se debe a que existe un
estrecho control de los entrenadores en los programas de entrenamiento, no siguiendo
estos estándares los gimnasios no afiliados. Si bien este estudio no concluye con la
asociación respecto de la experiencia, podemos deducir, que una atleta con mayor
experiencia en CrossFit, tiene una mayor predisposición a prescindir del control del
entrenador con el tiempo y dado el incremento progresivo de su nivel físico, percibirse a
sí mismo con unas capacidades físicas superiores a la media, aumentando así, la
probabilidad de lesionarse.
27
entre 0,27 - 3,3 por 1000 horas de entrenamiento y siendo incluso más bajo si lo
comparamos con el fútbol americano (Tawfik et al., 2021).
Así algunos estudios como da Costa et al. (2019) obtienen tasas similares de incidencia
de lesiones al comparar el CrossFit con otras modalidades deportivas, incluyendo
levantamiento de pesas olímpico, levantamiento de pesas básico y gimnasia olímpica, e
incluso reportando valores inferiores de media, a los obtenidos por los corredores
recreativos cuya tasa asciende a 7,7 por 1000 horas. En una línea parecida, Montalvo et
al. (2017) otorgan una tasa de lesión a los atletas de CrossFit de 2,3 por 1000 horas de
entrenamiento, a los levantadores de pesas entre 1,0 - 5,8 por 1000 horas de
entrenamiento y de 2,4 - 3,3 por 1000 horas de entrenamiento a los levantadores de
pesas olímpicos. A los gimnastas de élite una tasa de lesión de 2,63 por 1000 horas y a
los subélite de 4,63 por 1000 horas. Siendo los resultados de CrossFit similares a los
obtenidos en estos deportes y muy próximos a la tasa de incidencia de los gimnastas de
élite, obteniendo resultados inferiores que los obtenidos con respecto al deporte
Strongman que obtuvo unos resultados de lesión de 5,5 por 1000 horas de
entrenamiento, atribuyendo esta diferencia mayor, a la naturaleza de los movimientos
del Strongman. No obstante, se concluye en el estudio, que los resultados alcanzados
por regla general, son similares en deportes relacionados.
Por otro lado, estudios en los que la tasa de lesión en CrossFit obtenida se situaba en 5,3
por 1000 horas de entrenamiento, al compararlo con otros deportes, obtienen resultados
superiores a los obtenidos por deportistas de gimnasia (1,6) y badmintong (2,9), inferior
a la obtenida en fútbol (8,0), pero muy próxima a la obtenida en fútbol sobre césped
artificial (5,1). Concluyendo igualmente, que la tasa de lesiones son similares con otros
deportes (Cheng et al., 2020). Más allá va el estudio de Williams et al. (2017) en la que
asocian una tasa de lesiones en CrossFit de 2,1 - 3,1 por 1000 horas de entrenamiento,
considerándola baja y comparable a otras actividades de fitness recreativas.
28
factores de riesgo de lesión. Otros estudios apuntan además a la existencia de lesiones
previas, a otro factor como desencadenante de lesiones, esto es, el hecho de alternar
cargas de entrenamiento y Rx, circunstancia que otorga 3,5 más probabilidad de lesión a
los atletas que lo realizan. La explicación de un entrenamiento escalado, viene
justificado bien por la falta de habilidad por mantener el nivel de un Rx, o bien por la
falta de conciencia de los atletas en cuanto a sus limitaciones (Szeles et al., 2020). La
realización de determinados movimientos gimnásticos por encima de la cabeza que
requiere de una mayor amplitud de movimiento, así como las repeticiones continuas de
las series de cada WOD, suelen ser las causas de lesión más habituales en los atletas
(Barranco-Ruiz et al., 2020; Tawfik et al., 2021). Además, existe una correlación
postiva entre una supervisión adecuada y una menor tasa de lesiones, por lo que la
ausencia de un entrenador, una supervisión inadecuada o programas de entrenamiento
ineficente, son factores referenciados como causantes de lesiones (Feito et al., 2020;
Tawfik et al., 2021).
Las lesiones previas, es uno de los factores más recurrentes en cuanto a los motivos
causantes de lesiones en atletas. (Alekseyev et al., 2020; Arcanjo et al., 2018; Cheng et
al., 2020; da Costa et al., 2019; Dominski et al., 2018). Cuando nos referimos a lesiones
previas, es importante hacer referencia a la tasa de prevalencia de lesiones en los atletas.
Así en el estudio realizado por Alekseyev et al. (2020) existe una correlación positiva
entre el número de años de práctica en CrossFit y la prevalencia de lesiones. Así se
observa que atletas con 5 o más años de experiencia, tenían una prevalencia de lesiones
de un 68%, frente al 14,9% que presentaban los deportistas con menos de un año de
experiencia. Continúa el estudio, haciendo referencia a la aptitud del atleta ante una
lesión, indicando que los participantes que se lesionaron durante el estudio y dejaron de
entrenar una vez ocurrió la lesión, fue de un 55,9%, un 67,1% recibieron tratamiento
por lesión y un 32,2% fueron recurrentes en la misma lesión. En esta misma línea, otros
autores como Aune y Powers. (2017) sitúan la tasa de prevalencia de lesiones de por
vida en atletas de CrossFit en un 34%, si bien aluden a la posibilidad de tasas
superiores, de hasta un 74%, en el caso de atletas con un historial de entrenamiento
prolongado.
Tawfik et al. (2021) demostraron que ante una lesión anterior, el atleta tiene un riesgo
de lesiones futuras cuatro veces mayor, y que por regla general, los atletas lesionados
previamente, suelen regresar temprano al entrenamiento, sin haber tenido una
29
recuperación adecuada, estando los músculos y huesos involucrados en la lesión, aún
débiles y por tanto con mayor riesgo de volver a lesionarse.
La comparativa realizada entre atletas previamente lesionados frente a los que no,
asigna una probabilidad de lesión del 60% y por tanto de sufrir una nueva lesión, frente
al 42% de lesionarse a aquellos que carecían de lesión previa (Cheng et al., 2020). Las
lesiones previas constituyen un factor de riesgo importante de lesión, al atribuir algunos
estudios como Szeles et al. (2020) un riesgo de lesión 3,2 veces mayor, a aquellos
individuos de CrossFit que estén lesionados previamente.
Las lesiones predominantes sufridas por los atletas de CrossFit, suelen ser categorizadas
en estudios llevados a cabo, dentro de la escala de gravedad como leves o moderadas en
un 89,1% de los casos y tan solo un 2,6% de los lesiones, requirieron de intervención
quirúrgica (da Costa et al., 2019). Los resultados de la investigación realizada en otros
estudios, son consistentes con el hecho de indicar que la mayoría de las lesiones eran
leves (Montalvo et al., 2017; Szeles et al., 2020). En un estudio de caso Carbone et al.
(2020) en una de las áreas más lesionadas en CrossFit como es el hombro, en sujetos
sometidos a una reparación artroscópica del manguito rotador del hombro, se asoció con
un retorno del 100% de los atletas a su entrenamiento CrossFit, de los cuales un 91%
afirmaron regresar con el mismo nivel a la lesión o superior.
30
principales lesiones reportadas por estos fueron, lesiones musculares (45,3%), dolor
articular (24,7%) y tendinopatías (13%), con un promedio de gravedad entre bajo y
leve, ya sea en relación al dolor ocasionado, así como al tiempo de entrenamiento
perdido a consecuencia de la lesión. En cuanto a las lesiones predominantes en CrossFit,
se cree que las producidas por un uso excesivo, entendiendo como tal aquellas que se
han producido sin un evento específico o identificable y responsable de la misma, son
las más habituales. Esto se asocia por ser un deporte con grandes volúmenes de
movimientos que siguen un mismo patrón repetitivo y/o cargas de entrenamiento altas
(Clarsen et al., 2013; citado en Williams et al., 2017, p. 2).
La espalda, seguido de la rodilla son las siguientes zonas más lesionadas (Barranco-
Ruiz et al., 2020; Dominski et al., 2018; Montalvo et al., 2017; Szeles et al., 2020). Así
la tasa de lesión de la espalda en los estudios analizados oscila entre un 12,9 - 38,28% y
la rodilla 10 - 16,1%. En esta línea, los resultados del estudio de Tawfik et al. (2021),
coinciden con los existentes en la literatura actual que asocian una probabilidad de
lesión en CrossFit al hombro entre 22,6 y 39%, siendo la de mayor riesgo de lesión,
seguido de la espalda entre un 12,9 y un 36% y a las rodillas con un tasa de lesión que
oscila entre un 14,1 y 16,1%. Otros estudios, aunque en menor medida, incluyen entre
31
las zonas más lesionadas al cuádriceps (Arcanjo et al., 2018), cuello (Aune y Powers,
2017) y cadera (Elkin et al., 2019).
En lo referente a los ejercicios y su relación con las lesiones, los ejercicios que durante
su práctica generaban mayor índice de lesiones, son squat, ringdips, overhead squat,
bench press (Aune y Powers, 2017). Otros movimientos también aludidos como lesivos
son deadlight, clean and jeark (Alekseyev et al., 2020) y olimpics lifting (Barranco-Ruiz
et al., 2020; Elkin et al., 2019). Una recopilación de los ejercicios más lesivos, así como
las zonas con mayor índice de lesión, a los que se hace referencia en los diferentes
estudios objeto de análisis, puede verse en el Anexo III.
Monitorear las cargas de entrenamiento a las que está sometido el atleta mediante el
control de la carga de trabajo aguda (análogo al estado de fatiga del atleta) dividido
entre la carga de trabajo crónica (análogo a la aptitud del atleta), es utilizado como un
método (ACWR) que resulta seguro y sistemático para realizar el progreso en las cargas
de entrenamiento del atleta, reduciendo su riesgo de lesión. Existe una correlación
positiva entre las lesiones del atleta y un ACWR alto o lo que es lo mismo carga de
trabajo aguda mayor en comparación con la carga de trabajo crónica. Los competidores
de élite suelen presentar una carga mayor de entrenamiento. Para optimizar su
rendimiento y reducir el riesgo de lesión en este tipo de atletas, suele ser aconsejable
cargas de entrenamiento crónicas elevadas, sin picos rápidos en las cargas de trabajo (un
ACWR próximo a 1,3) (Tibana et al., 2019).
32
La variabilidad de la frecuencia cardíaca, medido a partir de la media semanal de la raíz
cuadrada transformada logarítmicamente de la suma media de las diferencias al
cuadrado entre dos picos R de una forma de onda de latido cardíaco tradicional de ECG,
los intervalos R-R (LnRMSSD), es otro método práctico y de bajo coste, muy útil para
monitorear la fatiga de un atleta de élite. La disminución del LnRMSSD, se asocia con
menor capacidad física, mayor fatiga percibida y una mayor carga de entrenamiento,
siendo un valor bajo asociado con un mayor índice de probabilidad de lesión (Tibana et
al., 2019).
Dado que el hombro es la zona más lesionada, los atletas de CrossFit para reducir este
tipo de lesión, deben mejorar la habilidad, fuerza y flexibilidad en los movimientos
realizados por encima de la cabeza y levantamiento olímpico (Montalvo et al., 2017).
Por otro lado, sería interesante que los fisioterapeutas trabajen en equipo con los
entrenadores, para ayudar a prevenir, tratar síntomas, mejorar la recuperación del atleta
y disminuir su fatiga posterior al entrenamiento, convirtiéndole en un elemento
fundamental en la prevención de lesiones. En ese sentido, la identificación de pequeñas
33
lesiones o por uso excesivo, reduce la progresión de las mismas, lo que es interesante en
la prevención de lesiones futuras en los atletas (Szeles et al., 2020).
Además, el entrenador debe controlar los niveles de ACWR y LnRMSSD para reducir
el riesgo de lesión en los atletas (Tibana et al., 2019). Del mismo modo, el análisis
conjunto de la respuesta inmunitaria en los deportistas tras una sesión de entrenamiento,
junto con el daño muscular y marcadores de estrés, es una vía interesante de estudio
para valorar aspectos de salud que pueden afectar a los atletas experimentados (Gomes
et al., 2020).
Este estudio tiene debilidades, puesto que está basado en el análisis de estudios de gran
heterogeneidad conceptual, motivados por diferencias sistemáticas en el diseño del
estudio, heterogeneidad clínica, muestreo, percepción del nivel de atleta (experiencia,
horas de entrenamiento...), definición del concepto de lesión, duración del estudio,
evaluación de resultados, prioridades objeto de análisis, falta de unificación de
resultados en tasa de lesiones informadas por 1000 horas de entrenamiento.
Adicionalmente estos estudios no están exentos de limitaciones inherentes a los
mismos, tales como pueden ser los sesgos de selección, de detección, de respuesta, de
muestreo (que sea representativa, no se tiene en cuenta a los lesionados previos al
estudio, ni a muchos de los que al lesionarse no lograron finalizarlo, gimnasios afiliados
versus gimnasios no afiliados…) por lo que es posible que el número de lesiones se
haya informado en exceso o en defecto debido a estas limitaciones.
7. Conclusiones
34
beneficios para la salud que reporta, además la comprensión y tomar conciencia de la
existencia de estos riesgos, ayuda a la realización de un programa de entrenamiento más
seguro.
Los datos aportados en este trabajo pueden ser de interés para atletas de CrossFit,
entrenadores o monitores, permitiéndoles tomar conciencia de la importancia de la
prevención en la planificación de los programas de entrenamiento, en la aplicación
práctica y adaptación a cada atleta, así como en el conocimiento de las propias
limitaciones.
8. Referencias bibliográficas
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41
9. ANEXOS
Anexo I
Tabla 2
42
8. (Shaw et al., 2019). Estudio de caso 1
Nota. Fuente: elaboración propia a partir de los estudios incluidos en la tabla de resultados.
43
Anexo II
Tabla 3
Estudio Tasa de lesiones Tasa de incidencia de lesiones % participantes lesionados Definición de lesión
44
9. (da Costa et al., 2019). 37,9 % 3,24 / 1000 h 37,9 % Restrictiva
Nota. Fuente: elaboración propia a partir de los estudios incluidos en la tabla de resultados.
45
Anexo III
Tabla 4
1. (Tawfik et al., 2021). Mano/muñeca (20,4%) Clean and Jerk, front squat y handstand push-up.
46
Hombro (19%), espalda lumbar (15%), rodillas (11,7%),
6. (Szeles et al., 2020).
pierna (7,7%), cadera (7,7%), mano/muñeca (7,7%),
codo (6,5%), brazo (6,1%), tobillo/pie (3,6%), espalda
torácica (3,6%), antebrazo (2,8%), espalda cervical
(2,8%) y otros (5,7%).
47
11. (Tibana et al., 2019).
16. (Aune y Powers, 2017). Squat, ring dips, overhead squat y bench press.
Hombro/brazo (15%), tronco/cabeza (12%),
pierna/rodilla (12%), mano/muñeca (5%), cadera/ingle
(4%), antebrazo/codo (3%) y pie/tobillo (2%).
Nota. Fuente: elaboración propia a partir de los estudios incluidos en la tabla de resultados.
48