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El Problema de La Creacion Del Derecho
El Problema de La Creacion Del Derecho
CREACION ) DERECHO
o POR
Philipp HECK
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SÉ Luis MONEREO PÉREZ
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9 788481•518160
BIBLIOTECA COMARES DE CIENCIA JURÍDICA
Director de publicaciones:
MIGUEL ÁNGEL DEL ARCO TORRES
1
a) Importancia central del problema ................
b) Su forma actual (la ley) .........................
c) Las necesidades del presente ....................
d) Propuestas para la complementación de las lagunas
1. Libre estimulación ..........................
2. Limitación protectora
© Philipp Heck 3. Complementación dependiente de la ley .......
1
conceptual. § 3 .................................
1. Procedimiento ..............................
© de esta edición
2. La jurisprudencia superior de Ihering ..........
Editorial COMARES, S.L. 3. Crítica
Polígono Juncaril, parcela 208
4. Origen
TIf,: (958) 4653 82 • Fax: (958) 4653 83
5. Difusión y tendencias paralelas
18220 Albolote (Granada)
E-mail:comares@comares.Com b) Influencia científica. § 4,,,,,,,,,,.,.....,.,,,,,,
http://www.comares.com 1. Compulsión y rechazo de la conexión vital a segun-
do término al
ISBN: 84-8151-816-6 Depósito legal: Gr. 173/1999 2. Sobreestimulación de las construcciones conceptua-
Fo'roCosIPosIcIÓN, IMPRESIÓN Y ENCUADERNACIÓN: COMARES, S.L. les mi
VIII SUMARIO
1
Erwin SEIDI., War Begriffsjurisprudenz die Methode der Rómer?, en
Archivfür Rechts und Sozialphilosophie, XLIII/3, pág. 343 (1957).
PRÓLOGO EL PROBLEMA DE LA CREACIÓN DEL DERECHO
SEIDL, lugar citado, págs. 345 y 346: «Así, a base detener en cuenta para
la decisión los contenidos económicos y sociales, ha surgido una nueva juris-
prudencia que según el punto de vista que se adopte puede calificarse (con Heck)
de jurisprudencia de intereses, o (con Müller-Erzbach) de pensamiento jurídi-
co causal, o con W. G. Becker "jurisprudencia notativa", o con Betti "jurispru-
dencia integradora"». Recientemente ha llamado nuestra atención el profesor (Madrid, 1947); BADENES GASSET, Metodología del derecho, pág. 248 y sigs. (Bar-
Ralph A. Newman sobre un pasaje contenido en la última publicación de Roscoe celona, 1959); RECASENS SIcHES, Nueva filosofía de la interpretación del Dere-
Pound (Law Finding through Experience and Reason), en el que este autor se cho, pág. 64 y sigs. (Méjico, s.a.); del mismo HECK ha sido publicado en España
refiere a la diferencia entre razonamiento y razón. Señala que el razonamiento el ensayo Jurisprudencia de intereses, con prólogo del traductor, Manuel
no siempre conduce a un resultado razonable ni está siempre orientado por la GONZÁLEZ ENRÍQUEZ, en Anales de la Academia Matritense del Notariado, t. IV,
razón. Ello depende del punto de partida que adopte, de cómo se desarrolle y pág. 513 y sigs. (Madrid, 1948). Especial interés ofrece el libro publicado en
hacia qué fin. Muchas veces se funda en una conexión meramente superficial América por la Universidad de Harvard, con el título The Jurisprudence of
entre las ideas, sin discutir los puntos de enlace verdaderamente esenciales.— Interests (Cambridge, Masigs., 1948), con una selección de escritos de Max
Puede verse también de Ralph A. NEWMAN, Equity and Law—A Comparative Study, ROMELIN, Philipp HECK, Paul ORTMANN, H. STOLL, Julius BINDER y Hermann ISAY,
Nueva York, 1961. con una interesante, introducción de Lon L. FULLER. En Alemania, últimamente,
Sobre la jurisprudencia de intereses puede verse en España: Jerónimo puede verse la sencilla pero penetrante exposición de Karl ENGIScH, Einführung
GONZÁLEZ, Jurisprudencia de intereses, en Revista Crítica de Derecho Inmobi- indasjuristische Denken, pág. 180 y sigs. (Stuttgart, 1956),
liario, junio de 1935, pág.408; La Escuela de Tubinga, en la misma revista, agosto ' Después de nuestros escritos de 1950 y 1951 (puede verse especial-
de 1925, pág.561 (trabajos incluidos en el tercer volumen de los Estudios de mente el libro La jurisprudencia como fuente del derecho, Barcelona, 1951),
Derecho Hipotecario y de Derecho civil, del mismo autor, t. III, Madrid, 1948, era natural que dejáramos a los demás la tarea de contestar a alguna aislada,
pág. 148 y sigs. Y 160 y sigs.); del mismo autor, Una nueva manera de enfocar pero apasionada, opinión discrepante. El reconocimiento de lo que las cosas ver-
los problemas hipotecarios, en Revista Crítica (citada), febrero de 1940, pág. daderamente son se produce desde entonces sin cesar. En 1952 VASSALLI publica
39 y sigs. (también incluido en los citados Estudios, t. 1, pág. 262 y sigs.); su famoso estudio Estrastatualitá del diritto civile, en Doctor Communis, 1/II,
HERNÁNDEZ GIL, Metodología del derecho, esp. pág. 276 (Madrid, 1945); CASTÁN pág. 128 y sigs. (1952); Puede verse Guido TEDESCHI, Díritto Civile e Legislazione,
T0BEÑAs, Teoría de la aplicación e investigación del derecho, esp, pág. 118 y sigs. en AHí del primo consegno nazionale di studi giuridico comparativi, pág. 657
EL PROBLEMA DE LA CREACIÓN DEL DERECHO
4 PRÓLOGO
II
La palabra ley no posee un solo sentido y puede referirse
a fenómenos radicalmente diferentes. Vamos a señalar los que
nos parecen fundamentales'.
El derecho privado es un derecho jurisprudencial, en el
12
En nuestro citado trabajo (notas 5 y 11) hemos recordado un artículo
de PELLA y FORGAS, Codificación moderna y codificación catalana (Revista Jurídi-
ca de Cataluña, t. 18, 1912, pág. 129 y sigs.), en el que contrapone la codifica-
ción que llama de tipo catalán (en realidad las compilaciones de este derecho)
a la codificación de que es prototipo el Code Napoléon. La primera, respetuosa
con la tradición, mantiene el enlace con el pasado, mientras la segunda, de tipo
racionalista, tiene la pretensión de dejarlo completamente superado. Acerca de
10 Con referencia al derecho romano, dice ScHULZ, Princciples of Roman
este fenómeno, cfr. Rudolf B. SCHLESINGER, Comparative Law-Cases, Text and
Law, pág. 10 (Oxford, 1936): «En materia de derecho civil la ¡ex intervino cuan- Materials, pág. 174 (2.' cd., 1959).
do hubo necesidad de abolir inconvenientes sociales (como en el caso de la ¡ex 3
Quizá convendría subrayar el calificativo de sistemática persecución
Cincia, ¡ex Praetoria, ¡ex Voconia), o cuando se trataba de reglas de tal natura- del bien común. El intervencionismo y dirigismo estatal producen el fenómeno
leza... que sólo podía promulgarlas el Estado (como en la ¡ex Aquilia, ¡ex Falcidia, que exponemos en el texto a continuación. Pero no hay duda que la idea del
las dictadas en materia de fianza); o cuando se trataba de reglas de derecho ci- bien común, en contraposición al interés particular, es muy antigua. Véase el
vil que estaban enlazadas con disposiciones administrativas, como en la ¡ex Atilia importante estudio de la doctora Vera BOLGÁR, The Concept of Public Welfare,
o en la ¡ex Cornelia de iniuriis. Pero las principales y extensas materias del de- en The American Journal of Comparative Law, VIII/1 (1959), pág. 44 y sigs.;
recho civil, como los contratos, la propiedad, las servidumbres, el pignus, el de- también ofrecen interés, en relación con el mismo tema, los estudios de la mis-
recho relativo a marido y mujer, padres e hijos, el derecho de sucesiones, per- ma autora: The Magic of Property and Public Welfare-La magia de la propiedad
maneció prácticamente ajeno a la legislación, incluso en casos en que su nece- y el bien común, en la revista bilingüe Inter-Ameri can Law Review-Revista Jurí-
sidad se deja sentir con carácter apremiante...». dica Interamericana, 11/2 (1960), pág. 283 y sigs., y The Magic of Freedom, pu-
Remitimos a nuestro trabajo citado en la precedente nota 5. blicado en las págs. 453 y sigs. De la obra citada en nuestra anterior nota 5.
PRÓLOGO EL PROBLEMA DE LA CREACIÓN DEL DERECHO
14
Citado de René DAVID, Existe-t-il un droit occidental?, en las pág. 56 y
sigs. De la misma obra citada en nuestra precedente nota 5. Véase, en la contri- 16 Véase BONFANTE, Las relaciones de vecindad, traducción, prólogo, con-
bución de DAVID, página 62. cordancia y apéndice de Alfonso GARCÍA VALDECASAS, esp. pág. 29 y sigs. (Ma-
15
Great Citíes of the World - Their Government, Polítics and Planning, drid, 1932). Puede verse el tomo III de nuestros Fundamentos de derecho civil
Londres, 1954. (Barcelona, 1953), pág. 165 y sigs.
10 PRÓLOGO EL PROBLEMA DE LA CREACIÓN DEL DERECHO 11
20 Sin duda tiene plena razón H. R. HAHL0 cuando afirma: «Los verdade-
ros problemas, como correctamente lo subraya el profesor Pascal, son cuestio-
nes de política más que de interpretación. ¿Debiera un fideicomitente o fidu-
ciario estar en aptitud de vincular un patrimonio en perpetuidad, ya sea me-
diante un fideicomiso o a través de mayorazgos, como lo está actualmente en
Sudáfrica? ¿Debiera una persona estar en condiciones de segregar una porción
de su patrimonio durante su vida y destinarlo a ciertos fines? ¿Es una sana po-
lítica la de que sea imposible constituir por acto entre vivos un fideicomiso que
se convierta de inmediato en irrevocable?» En su estudio El fideicomiso 21 CARDOZO, Selected Writings (citado), pág. 358, se refiere al Informe
sudafricano, publicado en la citada (supra, nota 13) Revista Jurídica Haldane, de 1918, para Inglaterra, en el que se bacía constar lo difícil que re-
Interamericana, 11/2, pág. 258. sulta que el gobierno preste atención a problemas estrictamente jurídicos.
16 PRÓLOGO El, PROBLEMA DE LA CREACIÓN DEL DERECHO 17
24
Queremos insistir en que nos parece indudable la necesidad de la pre-
conizada reforma también en España. No es suficiente la dedicación de
competentísimas personas a la preparación de los proyectos de ley que
esporádicamente se dedican al derecho privado. Comisiones parlamentarias y
de codificación trabajan intensamente en ciertos momentos, pero al ritmo que
22 Puede verse lo que y en tal sentido hicimos notar en el prólogo a la
les impone el poder público, sin propia iniciativa y con la falta de constante
traducción española de un ensayo de LOEVINGER, Una Introducción a la lógica atención a todas las manifestaciones del derecho privado. También entre noso-
jurídica, pág. 27 (Barcelona, 1954). tros puede repetirse con pleno sentido una afirmación de EGGLESTON (1. Cit. pág.
23 F. W. EGGLESTON, Legal Development ín a Modern C'ommunity, ella obra
178): «Una institución puede ser austera y espléndida y, a pesar de ello, resul-
citada supra nota 18, pág. 167 y sigs., esp. 176. tar insuficiente para las exigencias de nuestro tiempo».
18 PRÓLOGO
WRSJLSIÍSJ
(IWJj
22 INTRODUCCIÓN EL PROBLEMA DE LA CREACIÓN DEI, DERECHO 23
18 Geist des rómischen Rechts, II, 1, pág. 357 y sigs. De la 3•C ed.—Rumpf
21 SAVINGNY, System, 1, 42, pág. 262 y sigs., 46, y págs. 214, 217, Carac-
terísticamente califica Savigny de «especialmente peligrosa» la considera-
ción del valor interno del resultado en la interpretación. Cfr. págs. 225,
238, 40. No puedo, naturalmente, compartir la valoración global de Savigny
por Kantorowicz (Recht und Wirtschaft, 1, H. 2 y 3).
22 Cfr. Kiss (1910). 23 Cfr. Bey»ffsbildung, núm. 4.
46 INTRODUCCIÓN EL PROBLEMA DE LA CREACIÓN DEL DERECHO 47
a) Las concepciones
(de la ley), en primer lugar, cuando la ley no parezca ofrecerle una decisión
inequívoca; en segundo lugar, cuando, según su convicción libre y concien-
zudamente elaborada, es improbable que el poder estatal existente en el mo-
mento de la decisión tomara ésta como exige la ley. En ambos casos debe el
juez tomar la decisión que, según su convicción, tomaría el poder estatal en También la segunda conferencia judicial alemana se ha pronun-
el caso de que se le presentara el problema. Si no consigue llegar a una tal ciado con absoluta decisión...-Cfr. supra, pág. 61, nota 30.
convicción, debe decidir según derecho libre. En tercer y último lugar, el juez Esa fórmula da, por una parte, demasiado, y, por otra, demasiado
debe prescindir de la ley en casos de confusión desesperada o de problema- poco. También en la complementación de la ley debe estar vinculado el
ticidad sólo cuantitativa, como la indemnización de daños materiales, y deci- juez por las valoraciones contenidas en la ley. Así lo imponen la autono-
dir según su arbitrio». La fórmula puede ser, pues, entendida diversamente mía de la comunidad de derecho, la seguridad jurídica y el postulado de
de como la ha pensado Kantorowicz. No sólo es probable, sino en mi opi- igualdad de tratamiento de casos iguales. Por otra parte, no es arbitrio, sino
nión, seguro, que «el poder imperial existente» habría resuelto el problema coherente ejecución de la norma, lo que permite la moderna doctrina al
de la reforma financiera del Reich de modo diverso a como lo está. Los órga- autorizar una separación estrictamente lingüística. Esto puede llegar a ser
nos de aplicación del derecho iban realmente a encontrarse ante una entera necesario mediante la aplicación de los medios comunes de la interpreta-
serie de «casos de confusión desesperada» si siguieran estas indicaciones. ción histórica (contexto, origen del texto) en los casos de deficiencias de
41 1905y1907.
la ley y en los de cambio de las circunstancias reales relevantes. Las fronte-
42 1911 y Deutsche Richterzeitung, III, pág. 258, Die ccontra legem 'fabula.
ras son sin duda difíciles de trazar, pero es imposible hacerlo con la fór-
Starnpe (1911). Stampe considera, por ejemplo, deseable la mula que discutimos.
reintroducción de la hipoteca mobiliaria por vía de jurisprudencia del Tri- 46
Esto vale de Kantorowicz, según sus nuevas manifestaciones (1911),
bunal del Reich.—Cfr. sobre Stampe mi Gesetzesauslegung, 18, número 1. yen parte también de Stampe (1911).
60 INTRODUCCIÓN EL PROBLEMA DE LA CREACIÓN DEL DERECHO 61
c) La jurisprudencía de íntereses. § 7.
62 El artículo 100 del Código Civil prescribe: «Utilidades son los fru-
tos de una cosa o de un derecho, así como las ventajas ofrecidas por el uso
de la cosa o del derecho». Mientras se considera aisladamente ese texto, es
literalmente imposible decir qué intereses se estimaron al redactarlo. Pero
es que el artículo no tendría ningún interés jurídico, ninguna significación
práctica, si la ley no hablara de utilidades en ningún otro precepto. Es na-
turalmente lo que hace. El art. 987, por ejemplo, obliga al poseedor de cosa
ajena a entregar al propietario las utilidades que obtiene luego de disuelta
la relación entre ambos. Al transponer el art. 987 el contenido del art. 100,
una forma de cesión y no trate la hipoteca misma como objeto del negocio éste cobra significación práctica. Y queda claro que el art. 100 interviene
correspondiente. Sería erróneo inferir de aquí que en una cesión de ese en la delimitación de intereses realizada por el art. 987.
tipo un error sobre la hipoteca no deba tratarse como error sobre el con- 63 La transformación no queda en mi opinión correctamente carac-
tenido de la declaración. La construcción legal de la cesión de hipoteca terizada por Wieland (1911) cuando coloca como modelo el método de la
no se propone una nueva estimación de los intereses afectados por la im- ciencia histórica según la concepción de éste por Rickert. La ciencia jurí-
pugnación del erroi—Sobre la importancia de la utilización legal del con- dica ha sido siempre una «ciencia de valores». Pero la nueva tendencia re-
cepto en general. Cfr. Rúmelin (1907), pág. 47, Begriffsbildung, 7. basa esa comprobación y coloca junto a la tarea de registrar valores y obe-
61
Para el complejo global del derecho hay que mantener la teoría decerlos la de una valoración autónoma. La concepción de Wieland está
de la norma.—Cfr. Gesetzesauslegung, 2, núm. 5, Grundiagen, pág. 140 y sigs., condicionada por la teoría objetiva de la interpretación de la ley.—Cfr., so-
y en este mismo lugar sobre la contraposición entre orden jurídico hipoté- bre la reasunción de este error por representantes del derecho público,
tico y ordenjurídico concreto, pág. 147 y sigs. Begrzjfsbildung, 3, núm. 4.
72 INTRODUCCIÓN EL PROBLEMA DE LA CREACIÓN DEL DERECHO 73
lo que es esencial para sus fines últimos. Kantorowicz defiende aquí el punto
de vista correcto (1911). Hay que suscribir sus palabras cuando exige una
«sociología del derecho» distinta de la sociología general. Esta sociología
del derecho corresponde a la investigación de la vida descrita en el texto
como segunda tarea cognitiva. Kornfeld (1911) desea despojar a la ciencia
jurídica de su carácter normativo y transformarla en una sociología del de-
recho. La solución de las tareas normativas es para él una técnica. No hay
nada que objetar a la elaboración de un sociología del derecho, pero debe
en cambio rechazarse esa propuesta terminológica. Las tareas normativas
son tan importantes y tan amplias que su teoría mantendrá siempre el ran-
go de una ciencia.
69 Cfr. Kantorowicz (1911), Stampe (1911), Wieland, Fuchs, etc. La
teoría objetiva de la interpretación de la ley ha conseguido mucha acepta-
ción en el terreno teórico, no en el práctico. Tanto más satisfactorio es el 71 La atención al punto de vista del lego (KRAUs, Grünhuts Zeitschrift,
hecho de que recientemente se yergan contra ella muchas voces de consi- 32, pág. 610) no ha sido nunca causal para la teoría y no hay por qué to-
deración. Cfr. M. Rümelin (1908), pág. 37, Bierling (1911), pág. 256 ysigs., marla en consideración. Un precepto aislado puede sin duda tener un ob-
Staffel (1911), p. 737. jetivo sentido para el lego; pero la ley en su totalidad conexa no puede
Más detalles en mi estudio sobre la interpretación de la ley, tenerlo.
Ges etzesauslegung. 72 Begrzffsbildung, 12,
76 INTRODUCCIÓN
PORILA V I) 0Ufl1 3d
tr() ordenamiento jurídico resultados indubitables de la samente las molestas cuestiones litigiosas debidas a una
investigación científica y de la experiencia práctica, así legislación desafortunada. Cuanto más precisamente se
como exigencias innegables de las nuevas circunstancias adapta la ordenación jurídica a las necesidades vitales, tan-
vitales. El Ministerio de justicia debería ser un colector de to más evidente y clara aparece aquélla. Una actividad re-
propuestas, así como su analizador y, llegado el caso, su formista que fuera demasiado celosa quedaría coartada ya
formulador, por el derecho de impugnación del parlamento,así como
La única objeción objetiva contra la propuesta podría por el hecho de que la tarea se confía al Ministerio deJus
ser la de que pone en peligro la estabilidad del derecho. ticia y no a un organismo administrativo particular. Un
La estabilidad del derecho es sin duda un bien importan- organismo administrativo particular sentiría en efecto muy
te. Un cambio en el derecho, prescindiendo de la valora fácilmente la necesidad dejustificar su existencia mediante
ción misma, es sin duda una situación negativa. Por otra una lluvia de proyectos de reforma. Esta desazón adminis-
parte, no basta con que exista un buen derecho sino que, trativa no puede, en cambio, temerse del Ministerio de
además, debe ser conocido. Hace falta elaboración litera- Justicia. El Ministerio de Justicia está perfectamente capa-
ria. La implantación del Código Civil permitió ver también citado para sopesar a la vez las excelencias de la estabili-
muy claramente los aspectos sombríos de todo período de dad y las de la modificación tomada en consideración. Por
transición. Y ahora propongo aparentemente eternizar un último, las pruebas hechas hasta ahora en el terreno de la
tal estadio transitorio, haciendo sistema de la alteración legislación simplificada suministran un contra-argumento
permanente del derecho. Pero si mi propuesta tuviera este de importancia frente a la idea de estabilidad. Las rules in-
efecto no la presentaría. Lo que ocurre es que no se trata glesas han dado óptimos resultados. Nadie piensa en sus-
de una codificación general, sino de una progresiva de- tituirlas por una ley parlamentaria. Y tampoco se percibe
puración del derecho; se trata de desarrollo, igual que el intranquilidad alguna en los ámbitos hoy día regulados por
realizado sin cesar por lajudicatura y por la ciencia —aun- vía administrativa, como el régimen de nuestros ferroca-
que menos perfectamente y menos regularmente—. Todo rriles, o por acuerdo entre interesados, como en el caso
jurista tiene que atenerse hoy a la jurisprudencia del Tri- de nuestro seguro marítimo,
bunal del Reich y elaborar las normas complementarias Los beneficios que espero de mi propuesta consisten
partiendo de las decisiones particulares del mismo. Las ante todo en la perspectiva de conseguir un derecho le-
disposiciones del Ministerio de Justicia se elaborarían del gal de la mayor perfección técnica posible. Una redacción
mismo modo. Por otra parte, la mejora de la ley, así posi- adecuada y perfectamente clara de los preceptos legales
hilitada, descargaría el trabajo mental y eliminaría preci- no puede conseguirse sino por paulatina lima y constante
86 INTRODUCCIÓN EL PROBLEMA DE LA CREACIÓN DEL DERECHO 87
Destacamos en orden cronológico de la literatura hasta
90 APÉNDICE El, PROBLEMA DE LA CREACIÓN DEL DERECHO 91
92 APÉNDICE El. PROBLEMA DE LA CREACIÓN DEL DERECHO 93
11 iDIwmr-J.1Fri.1!TrmU
Las concepciones metodoló gicas fundamentales ex- 84 Die grosse Haverei. Berlín, 1889.
94 APÉNDICE EL PROBLEMA DE I CREACIÓN DEL DERECHO 95