Tegucigalpa. Este 24 de octubre se conmemora el Día Mundial de
lucha contra Poliomielitis y la Organización Panamericana de la Salud/Organización Mundial de la Salud (OPS/OMS), en conjunto con la Secretaría de Salud llama a los padres de familia a no dejar de vacunar a los niños para seguir manteniendo las coberturas de vacunación.
La Región de las Américas fue declarada libre de Polio en el año
1994, gracias a las arduas labores emprendidas mediante la Iniciativa de Erradicación Mundial de la Poliomielitis.
La edad recomendada para la vacunación de niños contra la
polio es una dosis a los dos meses, cuatro meses, seis meses y un refuerzo a los 18 meses.
La Poliomielitis, es una enfermedad contagiosa causada por un
virus que invade el sistema nervioso y puede causar parálisis, afectando con énfasis a los niños menores de 5 años. Esta enfermedad no tiene cura, pero es prevenible por vacuna.
El virus de la Polio se transmite a través de la vía fecal oral el
cual es transportada en el agua o alimentos contaminados con materia fecal de una persona infectada. Los virus se multiplican el en intestino y se excretan con las heces.
Una de cada 200 infecciones produce una parálisis irreversible
(generalmente de las piernas) y un cinco a 10 por ciento de estos casos fallecen por parálisis de los músculos respiratorios.
Las manifestaciones clínicas son muy variables, desde
enfermedades inaparentes hasta cuadros de parálisis severa. Los síntomas relacionados con esta enfermedad son fiebre leve, dolores musculares intensos o debilidad, cefalea, náuseas, vómito, rigidez del cuello y de la espalda; con menor frecuencia signos de meningitis aséptica (no bacteriana). Cada 24 de octubre se celebra el Día Mundial contra la Polio, con el objetivo de concienciar a la ciudadanía sobre las implicaciones de esta enfermedad poco frecuente y en conmemoración al nacimiento de Jonas Salk, científico que desarrolló la primera vacuna contra esta terrible enfermedad.
La Poliomielitis continúa siendo una amenaza por la importación