Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Estadística hospitalaria
tema
Indicadores y usos para la toma de decisiones
docente:
Yolima Judith Llorente Pérez
Integrantes:
Elizabeth mercado león
Luz Angélica Figueroa Díaz
Jairo Junior Puestas Pacheco
Lila Margarita Naar Ballesteros
Karina Marcela González Chávez
Según la OMS se definieron los indicadores de salud como “variables que sirven para medir los
cambios”.
Ellos son necesarios para poder objetivar una situación determinada y la vez poder evaluar su
comportamiento en el tiempo mediante su comparación con otras situaciones que utilizan la
misma forma de apreciar la realidad
Los indicadores de salud son instrumentos de evaluación ya que pueden determinar directa o
indirectamente modificaciones dando así una idea del estado de situación de una condición. El
análisis de estos indicadores es un componente necesario de todas las evaluaciones y un factor
fundamental para el ajuste de las acciones de salud y para la toma de decisiones dándose diversas
situaciones derivadas de la evaluación, cada una de las cuales conlleva distintas conductas según la
combinación de los resultados.
Los indicadores simples, están constituidos por una medida directa y única del aspecto a evaluar,
generalmente en un contexto de tiempo y lugar. Muchos de ellos corresponden a números
absolutos, tales como los siguientes:
Ejemplos: El índice de frecuencia de los accidentes con incapacidad: (Número de accidentes con
incapacidad en la empresa durante un período dado) *K/ (Número de horas hombre trabajadas en
dicho período). Porcentaje de trabajadores expuestos al riesgo A: (Número de trabajadores
expuestos al riesgo A) *100/ (Número total de trabajadores).
La tasa es una relación entre dos magnitudes. Se trata de un coeficiente que expresa la relación
existente entre una cantidad y la frecuencia de un fenómeno. De esta forma, la tasa permite
expresar la existencia de una situación que no puede ser medida o calculada de forma directa. La
tasa se obtiene dividiendo un número de acontecimientos sucedidos durante un periodo de
tiempo (un flujo) por la población media existente durante ese periodo
Las proporciones son medidas que expresan la frecuencia con la que ocurre un evento en relación
con la población total en la cual éste puede ocurrir. Esta medida se calcula dividiendo el número
de eventos ocurridos entre la población en la que ocurrieron. se obtienen que al ser el numerador
(el volumen de eventos) una parte del denominador (población en la que se presentaron los
eventos) aquel nunca pueda ser más grande que éste. Esta es la razón por la que el resultado
nunca pueda ser mayor que la unidad y oscile siempre entre cero y uno.
Ej: si en un año se presentan tres muertes en una población compuesta por 100 personas, la
proporción anual de muertes en esa población será:
Indican que se expresan en forma de porcentaje, y en tal caso los resultados oscilan entre cero y
100. En el ejemplo anterior, la proporción anual de muertes en la población sería de 3 por 100, o
de 3%. Nótese, asimismo, que el denominador no incluye el tiempo. Las proporciones expresan
únicamente la relación que existe entre el número de veces en las que se presenta un evento y el
número total de ocasiones en las que se pudo presentar.
Son aquellas características que cambian en un mismo individuo, grupo, comunidad o población
con el avance del tiempo o que varían entre los individuos, grupos, comunidades o poblaciones
comparadas en el mismo instante. Cada situación (por ejemplo, cada consulta que haga un
paciente o cada factura que se genere), individuo o grupo que se analice recibe el nombre de
unidad de observación. Y su función es:
es el patrón de referencia para el análisis. Se conoce también como norma. Deben elaborarse
teniendo en cuenta el contexto general en el cual operan los servicios de salud. Actualmente el
enfoque de la auditoría médica no está dirigido al alcance rígido de estándares, sino al
mejoramiento continuo de la calidad de la atención y de la operación general de los servicios
Nombre o denominación: La identificación clara y precisa del indicador es necesaria a los fines de
que se pueda descubrir la característica o hecho que se medirá. Ejemplo: porcentaje de camas
ocupadas
Vigencia. En entornos cambiantes los indicadores deben ser revisados periódicamente para que la
información suministrada por estos sea pertinente y oportuna. Lo cual quiere decir que se deben
actualizar tomando en consideración los cambios del entorno y las necesidades reales de
información de la institución a fin de no agotar esfuerzos y recursos en calcular indicadores que no
generan valor agregado a la institución.
Nivel de utilización. Se refiere al nivel organizacional donde se usa el indicador para la toma de
decisiones gerenciales. Se refiere a las personas para las cuales se genera el indicador e indica los
responsables de la toma de decisiones en función de la información transmitida por el indicador y
su posible desviación respecto a los niveles de referencia escogidos.
La fuente de información son todos aquellos medios de los cuales procede la información, que
satisfacen las necesidades de conocimiento de una situación o problema presentado y, que
posteriormente será utilizado para lograr los objetivos esperados. La validez en la toma de
decisiones, depende de la calidad de la información con la que se cuenta, en ese sentido es
necesario que la recolección de la información se realice a partir de fuentes de datos confiables.
Las fuentes de información son importantes en la definición de indicadores ya que estas son
herramientas e instrumentos para el conocimiento, búsqueda y acceso a la información, donde
encontramos datos útiles para estudiar y abarcar todos los datos del trabajo que estamos
realizando y porque además nos ayudan en la toma de daciones que son una parte primordial de
las estrategias que implementemos en la investigación.
12.- Mencione y describa las fuentes de datos para el cálculo de indicadores en Salud Pública?
Establecer las fuentes de datos ya existentes que, aunque no se hayan formulado con ese
propósito, faciliten la elaboración de un indicador confiable.
Estas dos opciones definen lo que se denominan datos secundarios (provenientes de fuentes
secundarias) y datos primarios (provenientes de fuentes primarias). La decisión de crear nuevas
fuentes de datos para un objetivo determinado que implique monitorear la salud de una población
o usar fuentes disponibles de datos debe basarse en las ventajas y limitaciones de estas opciones.
Por consiguiente, es importante ponderar la calidad de las fuentes de datos disponibles frente al
esfuerzo requerido para crear y mantener las nuevas fuentes de datos.
Fuentes de datos secundarios: Los datos de fuentes secundarias son aquellos que
originalmente se recopilaron con otros propósitos. Los datos obtenidos de fuentes ya
existentes se consideran datos secundarios. Aunque estas fuentes no se crearon para este
propósito, facilitan la elaboración de los indicadores necesarios. Son ejemplos de datos de
fuentes secundarias los datos obtenidos de censos, investigaciones y sistemas de
información, entre otros.
El procesamiento empieza con datos en su forma en bruto y los convierte a un formato más legible
(gráficos, documentos, etc.), dándoles la forma y el contexto necesarios para que los ordenadores
los interpreten y los empleados los utilicen en toda una organización.
1. Recogida de datos
La recogida de datos es el primer paso del procesamiento. Los datos se extraen de las fuentes
disponibles, entre las cuales se cuentan los data lakes y los almacenes de datos. Es importante que
las fuentes de datos disponibles sean fiables y estén bien creadas para que los datos recabados
(que posteriormente se emplearán como información) sean de la más alta calidad posible.
2. Preparación de datos
Una vez recabados los datos, se pasa a la fase de la preparación de datos. La preparación de datos,
a menudo llamada «preprocesamiento», es la etapa en la que los datos en bruto se limpian y
organizan para la siguiente fase del procesamiento. Durante la preparación, los datos en bruto se
verifican diligentemente para detectar errores. El objetivo de este paso es eliminar los datos
erróneos (datos redundantes, incompletos o incorrectos) y empezar a crear datos de gran calidad
para obtener la mejor business intelligence.
3. Introducción de datos
A continuación, los datos limpios se introducen en su destino (puede ser un CRM, como Salesforce,
o un almacén de datos, como Red shift y se traducen a un lenguaje comprensible. La introducción
de datos es el primer paso en el que los datos en bruto empiezan a cobrar forma como
información utilizable.
4. Procesamiento
Durante esta fase los datos ingresados en el ordenador en la fase anterior se procesan realmente
para su interpretación. El procesamiento se efectúa por medio de algoritmos de machine learning,
si bien el proceso en sí puede variar ligeramente según cuál sea la fuente de los datos que se esté
procesando (data lakes, redes sociales, dispositivos conectados, etc.) y su uso previsto (estudiar
patrones publicitarios, diagnósticos médicos a partir de dispositivos conectados, determinar
necesidades de clientes, etc.).
5. Salida/interpretación de datos
La etapa de salida/interpretación es la fase en la que los datos resultan finalmente utilizables para
los que no son científicos de datos. Están traducidos, son legibles y muchas veces se presentan en
forma de gráficos, vídeos, imágenes, texto simple, etc. A partir de ese momento los miembros de
una empresa o institución pueden empezar a autogestionarse los datos para sus propios proyectos
de analíticas de datos.
6. Almacenamiento de datos
La última fase del procesamiento de datos es el almacenamiento. Cuando todos los datos están
procesados, se almacenan para su futuro uso. Si bien hay alguna información que ya puede
emplearse de inmediato, gran parte tendrá utilidad a posteriori. Además, almacenar
correctamente nuestros datos es una necesidad para dar cumplimiento a la legislación de
protección de datos, como el RGPD. Cuando los datos están bien almacenados, a los miembros de
la organización les resulta fácil y rápido acceder a ellos siempre que lo necesiten.
Un indicador debe ser de fácil comprensión e interpretación y debe permitir establecer relaciones
con otros indicadores utilizados para medir la situación o fenómeno en estudio, es decir, debe ser
comparable en el tiempo y en el espacio.
El análisis de los indicadores es una herramienta fundamental que proporciona una idea clara de la
situación, ya que observamos y medimos los cambios y progresos que se están realizando en
busca de los objetivos y resultados definidos.
De todas las definiciones que tratan sobre los indicadores surge que éstos constituyen
informaciones cifradas que brindan una escala sobre la cual pueden medirse rendimientos y
resultados conforme a un criterio de apreciación.
Ya sea para describir el estado de un sistema o para compararlo con uno o varios estados
anteriores (indicadores de estado), poner de manifiesto las alteraciones de ese mismo sistema
(indicador de presión) o para ilustrar el estado de avance de las medidas tomadas (indicador de
respuesta), un indicador constituye una herramienta de evaluación gracias a la cual se podrá
evaluar o medir una tendencia, de manera relativamente objetiva, en un momento dado, en el
tiempo y/o en el espacio.
Al permitir la representación tangible y palpable de una realidad compleja, los indicadores brindan
un resumen de informaciones complejas que ofrece la posibilidad de dialogar a diferentes actores
(políticos, científicos, administradores o ciudadanos comunes).
Política: identificando las prioridades y evaluando los rendimientos de los actores de dicha
gobernanza.
Los indicadores deben responder a cierto número de criterios de calidad, entre ellos:
Pertinencia: debe existir una relación causal entre el hecho medido -indicado- y el
indicador.
Robustez, fiabilidad y precisión: la solidez del razonamiento que llevó a su elaboración, así
como los modelos matemáticos utilizados y la fiabilidad de los datos recolectados deben
permitir reflejar con la mayor precisión posible el estado o las variaciones que están
destinados a sintetizar.
Calidad y disponibilidad de los datos: éstos deben ser indiscutibles y de fácil y libre acceso.
En lo que se refiere al empleo de los indicadores, conviene considerar a los indicadores como
señales sobre un sistema, o sobre una parte de un sistema. Dichas señales son empleadas para
brindar cierto número de informaciones a propósito del sistema en cuestión: su estado o su
evolución.
De esta consideración cabe retener las tres nociones esenciales a propósito de los indicadores:
El sistema: estamos a la vez dentro del sistema y fuera de él. En ese sentido, los
indicadores pueden ser internos o externos. Se puede disponer de auto indicadores
generados por los mismos actores o de indicadores brindados por observadores externos.
Pero en todos los casos, siempre lo que se trata de abordar es el sistema.
Los indicadores o las baterías de indicadores tienen una triple función -informar, alertar y permitir
la conducción y la acción- que va a regir su empleo.
Los indicadores como informadores: Un procedimiento que se apoya sobre indicadores
permite informar tanto en interno como en externo del sistema, pues una buena política
de indicadores, y por lo tanto de evaluación, debe ser una política transparente. Todas las
informaciones brindadas por los indicadores, cualesquiera que sean (internos o externos)
deben regresar hacia los actores del sistema. Éstos están directamente involucrados en lo
que los indicadores revelan en cuanto al estado del sistema del que se ocupan.
Estos indicadores también deben utilizarse para informar a los ciudadanos y, más globalmente, a
la opinión pública. Por otra parte, una política de indicadores o de evaluación debe pensarse de
entrada como respuesta a una demanda social considerable. Esa fuerte demanda de evaluación es
acompañada, de un modo bastante paradójico, por una reserva o un eventual cuestionamiento y
un escepticismo que subrayan la imperiosa necesidad de un proceder riguroso, tanto a nivel de la
elaboración como del uso de los indicadores.
Los indicadores como sistema de alerta: Más allá de la información que brindan de
manera explícita, los indicadores también alertan. En este sentido, la información que
brindan debe inspirar, a posteriori, un doble proceder de profundización y de acción. Hay
que incitar a los actores a seguir siempre profundizando. Su autoevaluación debe ser
posterior y complementaria a un sistema de indicadores.
Los indicadores como herramientas de acción y de conducción: Los indicadores no son una
obra de ciencia exacta, aunque sean de muy buena calidad. Sin embargo, la exigencia de
calidad no debe hacer olvidar que los indicadores son prioritariamente concebidos para
ayudar a los organismos a profundizar y a actuar. Allí radica su dimensión política. Es en
ello que los indicadores son instrumentos, herramientas de conducción. Toda sociedad
democrática moderna exige dos grandes funciones: la evaluación, que una buena batería
de indicadores permite realizar, y el debate público sobre la calidad y el lado perfectible de
los actores del sistema estudiado.
El indicador debe reportarse en forma oportuna. Un indicador debe contar con datos actualizados
según la fecha y la hora, debe ser revisado y analizado. Con esto se establece que el indicador
permite tomar decisiones para anticiparse o reaccionar de forma rápida y efectiva según los
problemas y las oportunidades.
Contexto: el contexto es importante para saber por qué es necesario construir un indicador que, a
su vez, está relacionado con el objetivo. La motivación detrás de las acciones que se quieren
verificar y, en general, una buena descripción de todo el contexto que enmarque las acciones, los
productos y los resultados cuyos avances se quieran medir, permitirá evidenciar el verdadero
aporte de un indicador.
19.- Para usted como Administrador en Salud que le aporta la utilización de Indicadores?
Nos aportaría algo muy importante como es tomar decisiones. La observación y el análisis de los
datos permiten a los gestores mejorar: si algo va mal, para corregir; y si va bien, para ser mejores.
Los indicadores nos permiten avanzar hacia mejoras en términos de productividad, rentabilidad,
compromiso, posicionamiento y claridad. A su vez, permite medir, tanto los procesos
administrativos especializados.
En términos generales, los indicadores de salud representan medidas resumidas que capturan
información relevante sobre distintos atributos y dimensiones del estado de salud y del
desempeño del sistema de salud.
Específicamente, proporcionan señales para monitorear la gestión de un servicio, lo que permite
asegurar que las actividades vayan en el sentido correcto, evaluar los resultados de una gestión
frente a sus objetivos, metas y responsabilidades. Por lo tanto, es la expresión cuantitativa del
comportamiento y desempeño de un proceso, cuya magnitud, al ser comparada con algún nivel de
referencia, puede estar señalando una desviación sobre la cual se toman acciones correctivas o
preventivas.
Debido a su relevancia e impacto en la población, todo indicador de gestión en salud debiera ser
considerado por los directivos de las redes asistenciales para guiar las estrategias a implementar
en los establecimientos que conforman la Red Asistencial de Salud Pública.
Este índice expresa la productividad que presta cada una de las camas en la institución en un
periodo definido.
Indica el número de pacientes que pasaron por ca cama disponible en el periodo (se expresa con el
respecto a la unidad y valor entero.
Es la relación existente entre el número de días cama ocupada y los días cama disponible.
Expresa en términos porcentuales el número de días que en el periodo estuvo realmente ocupada
una cama.
Egresos
Paciente que después de haber permanecido hospitalizado, sale del hospital vivo, remitido o
muerto.
Por alta: incluye los pacientes a los que se les ordena salida con destino a su domicilio, igualmente
incluye a los pacientes que solicitan salida voluntaria o que se fugan.
Por muerte: incluye los pacientes que fallecieron durante la estancia hospitalaria, se clasifican en
muerte durante las primeras 48 horas después del ingreso y después de 48 horas poste ríos al
ingreso.
Por remisión: incluye los pacientes que son remitidos a otras instituciones hospitalaria
PARTE II
El giro cama es un indicador relacionado con la producción de servicios; es una medida del número
de egresos que en promedio comprometieron el uso de cada cama disponible. Dicho de otra
manera, es la rotación media de las camas y expresa cuántos pacientes pasan en un período dado,
en promedio, por cama disponible, En promedio por cama disponible.
Definir Egresos:
Es la salida del establecimiento de un paciente internado. El egreso puede darse por alta médica,
traslado a otro establecimiento, defunción, retiro voluntario del paciente u otro.