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qu_e tienen de común es lo más esencial de ellas y que Io que las


cliferencia es accidental y debe considerarse sólo como pertene- XIII. EL SIGNIFICADO EMOTIVO DE LOS TERMINOS
ciente a la meto-dolo_gía práctica. \ub especie aeternitoris sólo hay E,TICOS *
para él urta realidad y une ciencia.
Por consiguiente, si establecemos que el problema fundamental wr C. L. SrevsnsoN
tle la ética! "¿Por qué obra el hornbre moialmente?" sólo puede
resolverlo la psicología, no vemos, en esta subordinación -de la I
ética a la psicología, degradación o daño alguno para la ciencia
sino una simplificación feliz de Ia concepción del mundo. La éti- LIS CuESTIoNES éticas aparecen por prirnera vez en las formas
ca no busca la independencia, sino únicamente la verclad. "¿Es bueno esto?" a "¿Es esto mejor que aquello?" Estas pr_e'
guntas son difíciles en parte porque no sabemos bien qué es lo
[ue buscamos. Preguntamos: "¿Hay una aguja en eseprimero pajar?"
firf saber siquiera lo que es exactamente una agUja. Lo
que hay que-hacer, pues, es examinar las propias_ P{eguntas. Te-
-que
nemos tratar dé aclararlas, ya sea definiendo los términos
en que eitán expresadas, o bien por cualquier otro rnétodo a nues-
tra disposición.
El presente trabajo está consagrado totalmente a este pas.o
preliminar de aclarar las cuestiones éticas. A fin de contribuir
á contestar la pregUnta "¿ES bueno X?", debemos sustituirla por
una pregunta que esté libre de ambigüeciad y confusión. -
Ei evidente que al sustituirla por una pregunta más clara, no
debemos formular una pregUnta de una clase totalmente distin-
ta. No quiero (para poner un ejemplo extremo de una falacia muy
común)-, sustitfur "¿Es bueno X?", por l-a pregunta: "¿Es X rosa
con adornos amarillos?", Y pretender, después, que la pregdlta
-Esto
es en realidad muy fácil. sería eliminar la pregUnta origi-
nal, no ayudar a resolverla. No debemos espe_rar, por otra-parte,
que la piegunta sustituta sea estrictamente "idéntica" a la ori-
ginal, yi qúe esta última puede estar afectada de- hipostización,
ánttópb-órfismo, vaguedád y todos los otros males a que está
e*p,reito nuestro lenguaje oidinario. Si nuest{a pfegunta susti-
tuia ha de ser clara, ténemos que evitar esos males. Las pryguntas
serán idénticas sólo en eI seniido en que un niño es idéntico al
hombre en que se convertirá r.ás tarde. Por lo tanto, nojntros'debe-
*ot pedir qire la sustitución no_s dé la -imp-resión, en una
f"""ibtt inmediata, de que no ha producido ningún cambio de
significado.
-¿Cómo, pues, ha de relacionarse la- pregunta sustituta con la
ori--ginal?-Supongalnos (inexactamente) que debe resultar de sus'
titüir "buen-o", Éot algún conjunto de términos_ gue 19 definan.
El probtema eqüivale, entonces, a esto: ¿Cómo debe relacionarse
rlgnificado definido de "bueno" co¡ su.signific3do-original?
"l Co"ntesto que debe ser relevante. Un-significado definido será
llamado "refevante" al significado original, en estas circunstan-
cias: Aquellos que han entendido la definición deben estar en
r Este artículo apareció por vez primera en Mind,l9{. Se- re¡-roduce aquí
p"tttiiio del profesoi Stevenson y del editor de Mind' "

"o" "t-"-áÚte 269

_l
Y

270 ETICA Y SOCIOLOGTA ELSIGNIF'TCADOEMOTIVODEI,oSTERMINOSE,TICOS2TI

X?", hayan atendido a este otro sentido de "bueno"


y no a nin-
posibilidad de expresar lo que quieran decir, empleando el tér- en términos de interés' Si
mino de la manera definida. No deben tener nunca ocasión de áátioiA" relevantemente
;io'r;;iid" en ¿ifinir "bgeno" en términos de interés, y. en res-
usar la palabra en el antiguo y nada claro sentido. ( En el grado insistimos
p";il;-;-fr pt"Ñia interpretándola de esta manera' quizá este'
en que una persona tuviera que seguir usando la palabra en el eI problema que nos plantea' Es
viu'jo sentido, el significado de la misma no estaría aclarado y mos evacuencr" F;;;pfito
posible, por supüesto, que no exis-ta este oft6 sentido de "buerlo"'
la tarea filosófica no habría terminado. ) Ocurre con frecuenciá -u"u
.ttu ^confusión completa, pero esto es lo que
que una palabra se usa tan confusa y ambiguamente, que tene- o que tal vez
mos que darle varios significados definidos, y no sólo uno. En tenémos que descubrir. r ^ ---J^ del r^r interés
han sostenido-que las teorías
:

esle caso se llamará "relevante" sólo a todo el conjunto de signi- Atrora bien, *rr"rt"t
-;; argüido que
ficados definidos, y cada uno de ellos será llamado "parcialmente .ria" l"¡"r-A; ¿o*pt"tumente reldva¡rtes. Han
tales teorías ot"i¿.tt-ei^sentiáá á¿t irqnortante de "bueno"' Y
relevante". De ningúh modo es éste un tratamiento riguroso de no d! s9r admisibles'
la relevancia, pero servirá para los presentes propósitos. ciertamenteo sus argumentos 9gj*
Volvamos ahora a nuestra tarea particular: la de dar una defi- "Sólo que... ¿cuál es ese_ sentidó "'oás importante]' {: "bue-
no,,? I-as resp";iá; han sido tan vagas,. y tan-
Ilenas de dificulta-
nición relevante de "bueno". Examinemos primero algunas de Ias determinarlo'
maneras en que otros han intentado hacerlo. áór, q"" ¿ir¡óilmente. puede uno
satisfaría
La palabra "bueno" ha sido definida con frecuencia en térmi- Hay ciertor *áoiiiñ;, iin embargo: que se esperaba vigorosa-
"más importante", requisilos. que ap.elan
nos dé aprobación, o actitudes psicológicas análogas. Como ejem- para que
plos típicos podemos señalar: "bueno" significa deseado por mi mente a nuest;; ientiáo común' Convendrá resumirlos'
"ri*-É."tiAo
(Hobbes); y "breno" significa aprobado por la mayor parte de *-rr"u córno excluyen las teorías del
--E; primer interés.
Ias gentes (Hume, en lo fundamental).* Convendrá referirse a las término, debemos ser inteligentemente capaces para
definiciones de este tipo como "teorías del ,interés" siguiendo disentir acerca de si'una cosa es "bueña"' Esta el
condición ex-
siguiente argu-
;d;'í" á"n"i"iO" dá Hobbes. Porque veamos
en esto a R. B. Perry, aunque ni "interés" ni "teoría" estén usa- ü.rárro." "ESo no lo eS; no es bueno"' Traducido
das del modo más habitual. mento: "Esto es
por HobU"r, i"-con"ierte en: "Yo deseo esto." "Eso no lo
¡'Son relevantes las definiciones de este tipo? "rto no se contradicen
Es ocioso negar su relevancia parcial. La investigación más es, porqu" yo-ito fl ¿Liáo." L-os interlocutores
entre sí, y creen que Se contradicen únicamente a causa de una
superficial revelará que "bueno" eS extraordinariamente ambi- los pronombres' La definición
guo. Sostener que "bueno" no se usa nunca en el sentido de confusión et"merrilt "tt el uso de
de ,,bueno" á-ientido aé- diseado.'por- mi comunidad q-tte{3
Hobbes, y nunca en el de Hume, es sólo manifestar insensibilidad "., porque ¿"é*o podrían disentir personas de di-
ante las complejidades del lenguaje. Debemos admitir, quizá, no también excluida,
sélo esos sentidos, sino una variedad de sentidos similares que ferentes comunidades?t ,.bondad"
'-E;-;¿glrrr¿" de-he ,
término, la *..'' Aad,, debe tener, pgl_ur]_. decirlo,
difieren tanto en la clase de interés en cuestión como en las per- que X es
sonas de quienes se dice que tienen ese interés. un espe"id á;ñ;-i*i", Ury persona que reconoce a
.,b";":"; "¿"U" Faq"i¡i ipso fac-to una tende¡rci1 TT^P"tt"
Pero éste es un asunto de poca importancia. El problema fun- -."'il i.rro, de la que irubiese tenido de ya que, segú'otro modo' Esto
damerrtal no es si las teorías del interés san parcialmenie rele- oüilr
vantes, sino si son totalmente relevantes. E,ste es el único punto excluye el tipJ J" a"li"ición propuesta pol Hume,
é1, reconocer que algo -es "bueno"
es simplemelle. Teconocer
para una discusión inteligente. En resumen: Concediendo que al- Evidenternente, un individuo puede
gunos sentidos de "bueno" pueden definirse relevantemente en que la muyorlJf" -1n*"ua
ver que lu r"u]*i. "pñi"U3. a X sin que por ello tenga, por sí,
términos de interés, ¿hay algún otro sentido que no sea definido ftierte a favorecerlo. Este requisito e-xcluye
así relevanternente? Debemos prestar atención rhuy detenida a ,riu i"n¿""cia"más ,,bueno" términos del interés de per-
esta pregunta, ya que es muy posible que cuando los filósofos (y todo intento ?"- a"n"ir en
sonas qrrc ¡lf,, secm la -qu9- habla'z
otrosmuchos) han encontrado tan difícil la pregurtta"¿Es bueno debe ser verificable
En tercer té;ñ;; ü "bondad" de 3lgo.no no debe ser,psico
sólo mr¿iantJ ;fáá"áo científico. "Lá ética
* El autor ha pedido que se añadiera aquí Ia siguiente nota: Para un todas las teorías tradicionales del
tratamiento más adecuado de las ,opiniones de Hume véase rni Ethics and logía.,, Esta rlrihó"ián excluye
es tan amplia' que
Language (Yale University Press, lg4,1), cap-.-Xrt, sec. 5. En e_l presente tra-. io?"i¿r, ri" .*óái¿ió; alguná. La es admisible. restricción
Ua¡o tai referencias a Hume deben considerarse como referencias a Ia debemos hasta qué punto ¿Cuáles son las
f aitílía gr:neral de definiciones de
que es típica la de_ Hume; pero la defini- "**itrir
1VéaseG.E.Moore,.PhíIosoolticalstudies,PP-.332.334.
ción de Hume propiamenie dicha es algo diferente de todas las aquí espe 2 Véase c. ó: iii;ld;h4"iat rhenrl' PP' s2' sG57'
cíficamente enunciddas. Quizá debiera decirse Io mismo de Hobbes.
272 E,TICA Y SOCIOLOGIA EL SIGNIFICADO'EMOTIVO DE LOS TÉRMINOS E,TICOS 273

merodorógicas de ras reorÍas del i'terés que tal como lo implican las teorías del interés y otras semejantes.
:??:Tff;:lrr aqui ',os
íÁ familíar objeción de G. E. Moore sobre Ia cuestión a debatir
según la definición de F{obbes, una persona puede probar I* oertinente, sobre todo, a este respecto. No importa qué con-
juicios éticos, de nanera concluyente] mostrairdo o,i" - sus
lometiendo un error inrrospectivá uóri-"á'á"^;;;#;;r."3.:ili iun?o de propiedades científicamente cognoscibles pucda tener
la definición de Hume, pu+gn probarse los ¡"i.i*-?ii.o, (h+ irlrá .mu (dice de hecho, Moore); tras una cuidadosa introspec-
blanado grossa mod.o) mecriant-e una .Iión, se encontrará que es una cuestión discutible el preguntar
forma, este empleo del método ernpírico'otaci"ón.
n*- clatquier ii uleo que tiene esas propiedades es bueno. Resulta difícil creer
parece
Tuy remoto de áur cuestión recurrente sea absolutamente confusa, o quc
lo que usualment-e aceptamos. como prueba v gr"cía-J^la rere-
"ttududosa sólo a causa de Ia ambigüedad de "bueno". Más
áur"r"u
vancia completa de las-definiciones qüe lo implican
Fe¡o, ¿acaso no hay_ teorías del inierés niái complicadas bien Io que sucede es que debemos estar usando un sentido de
,,bueno" que no es definible, relevantemeltte, en términos de. algo
resulten inmunes a tales implicaciones metodoiogi.ái i ñ; oue
que en ellas aparecen los mismos factores, los Juales ion pT; científicamente cognoscible. Es decir, el método científico no
sólo es suficiente Para la ética.e
p.ospuestgljor plg,ttr consideremos, por ejempto, ta áL- Éstos son, pues, los requisitos que se espera que satisfaga el
finición : "x es bueno".tiempg.
sigñific a la mayor pari" a" i" gíit€ eoro- sentido "más importante" de "bueno": .l ) la bondad debe ser
baría X si conociera su naturaleta y -coniecuencías. 3"ga;-5;; un tema para desacuerdo inteligente; 2) debe ser "magnética"; y
definición, ¿_cómo podrÍamos probaf que una x determiñaou *ra j) no debe ser posible descubrirla solamente mediante el método
buena? Tendríamo_i prim_ero que averi!,ra., empírica*;;1;, cómo científico.
era exactamente X y cg4les serían sus consecrñncias. Hasta este
punto el método empírico, tal como lo requiere Ia definiciári II
parece encontrarse más allá_de jqdu objeción inteligente. p".o, Volvamos ahora a mi propio análisis de los juicios éticos.. Ex-
¿g:ré nos queda por tracer? Tendríam-os que averiguár, después, pondré primero mi posición dogmáticamente, para mostrar en
sj la T3yor parte de__la gente aprueba la crrase de cósa q.t. h"*o,
descubierto que es x. Esto no puede determinarse poi votación - medida discrepo de la tradición.
qué
Creo que los tres requisitos arriba enunciados son perfecta-
popular, aunque no fuese más que por lo difícil qué serÍa expli- mente razonables; que hay cuando menos un sentido de "bueno"
car de antemano a los votanles, -cuáles serían realmente la que satisface los tres requisitos; y que ninguna teoría tradicional
naturale?a y consecuencias de X. De no ser por esto, la vota- del interés los satisface todos. Esto no implica, sin embargo, que
ción sería un método adecuado. una vez más, éstamos ieáucidos haya que explicar lo "bueno" en términos de la idea platónica, o
a contar personas, como instancia absolutamente última. del imperativo categórico, o por una propiedad única y no anali-
-
Aho¡a bien, .no tenemos por qué desdeñar totalmente Ia vota- zable. Por el contrario, los tres requisitos pueden ser satisfechos
ción. un individgo que-rechazará las teofas del interés por irre- por una especie de teoría del interés. Pero, para ello, debemos
levantes, podría hacer fácilmente la siguiente deciaraciori: ,,si yt abandanar un supuesto del que han partído todas las teorías tra-'
creyese- que _T sería aprobada por la-rnayoría, cuando supiesén dicionales del interés.
todo sobre ella, me sentiría mut inclinado a decir que x es br¡e- I-as teorías tradicionales del interés sostienen que los enun-
na." Pero conlinuaría: "¿Necesito decir qrre x es búeno, en tales ciados éticos son descriptittos del estado real de los intereses, que
circunstancias? Ei que aóepte la supuestá prueba final,'¿no será no hacen más que dar información sobre los intereses. (Más
simplementé una consecueñcia de qüe soy áemócratal ¿óué ocu- exactamente, se dice que los juicios éticos describen cuál es, fue
rrirí3 con personas más aristócratás? Simplemente diríán que la o será el estado de los intereses, o indican cómo sería ese estado
aprobación de la mayor parte de las gentes, aun cuando supiesen bajo determinadas circunstancias.) Es esta insistencia en la
todo lo necesario sobre el objeto de su aprobación, no tendría descripción, en la información, lo que hace incompleta su rele-
n3da que_ver con la bondaá d-e algo¡ y probablemente-á¡á¿irioo vancia. Siempre hay, indudablemente, algún elemento descriptivo
algunas observaciones sobre el baid niv^et de los int"reuei de la en los juicios éticos, pero eso no es todo, de ningún modo. Stt uso
gentg." _De estas consideraciones pfrece en verclad desprenclerse más importante no es indicar hechos, sino crear una h{luencia.
que la definición En vez de describir meramente los intereses de la gente, Ios
-que,hemos estado examinanclo, r,rpo^r", desde
un principio,_idealés democráticoqi y que, de heci,o, h" ócultado modifica o intensifica. Reconziendan el interés por un objeto,
propaganda democrática bajo el disfraz de una definición. más que enunciar que ese interés ya existe.
Siguiendo un camino un tanto diferente, puede demostrarse 3 Véase G. E. Moore, Principía Ethica, cap. r. Trato simplemente de con-
que es inaceptable la omnipotencia del método empírico, al ms servar el espíritu de la objeción de Moore y no su.fol'ma exacta.
'ry

274 E,TICA Y SOCIOLOGfA EL STGNTFTCADO EMOTM DE LOS TFRMTNOS ETTCOS 275

Por ejemplo: Cuando usted le dice a un individuo que no debe suasivo de la palabra, tanto como el hombre desinteresado gu€,
robar, su propósito no es simplemente hacerle saber que la gente ansiCIso de estimular en cada uno de nosotros el deseo de la
desaprueba el robo. Más bien está usted intentando conseguir felicidad de todos, sostiene que el supremo bien es la paz.
que él lo desapruebe. Su juicio ético tiene una fuerza cuasi- Así pues, los términos éticos son instrumentos usados en la com-
imperativa que, operando mediante la sugestión, e intensificada plicada interacción y reajuste de los intereses hu::anos. Puede
por el tono de su voz, le permite fácilmente empezaÍ a inftuir verse esto claramente por medio de observaciones más genera-
en los intereses del individuo, a modifícarlos. Si al fin no logra les. Las gentes de comunidades muy distanciadas tienen diferen-
usted hacerlo que desapruebe el robo, se dará usted cuenta de que tes actitudes morales. ¿For qué? En gran medida porque han
no logró convencerlo de que el robo es malo. Seguirá usted sin- estado sometidas a influencias sociales diferentes. Ahora bien, es
tiendo esto aun cuando él reconozca plenamente que usted lo claro que esa influencia no opera sólo mediante palos y piedras;
desapmeba, y que casi todo el mundo lo hace. Cuando usted le desempeñan un gran papel las palabras. Las personas se alaban
señale las consecuencias de suó acciones que entre sí para estimular ciertas inclinaciones, y se censuran para
upted sospecha que él ya desaprueba*, las-consecuencias
razones que aPoyan desalentar otras. Las que poseen personalidades poderosas dictan
su juicio ético son simplemente un medio para facilitar su influen- órdenes que las personas más débiles, por complicadas razones
cia. Si cree usted que puede hacer carnbiar sus intereses hacién- instintivas, encuentran diffcil desobedecer, independientemente
dole percibir vivamente cómo 1o desaprobarán los demás, lo hará del miedo que pudieran sentir a las consecuencias. Los escritores
usted; de otro modo, no. Así pues, la consideración sobre el int+ y los oradores ejercen también influencia. De esta suerte, la
rés de otras personas, es sólo un medio adicional que puede usted influencia social sé ejerce, en una enonne proporción, por medios
emplear a fin de persuadirlo, y no es una parte del juicio ético que no tienen nada que ver con la fuetza física ni con recompen-
mismo. Su juicio ético no meramente le describe intereses, sino üs rnateriales. Los té-rminos éticos facilitan esa influencia. Siendo
que orienta sus propios intereses. I-a diferencia entre las teorlas adecuados para sugerir, se convierten en medios por los cuales
tradicionales del interés y la mía es como la diferencia que hay las actitudes de los hombres pueden orientarse en este o aquel
entre describir un desierto e irrigarlo. sentido. La raz6n, pü€s, de que encontremos una analogía mayor
Otro ejemplo: Un fabricante de municiones declara que la gue- de actitudes morales en una comunidad que en comunidades dife
rra es una cosa buena. Si con ello quisiera decir simplemente que rentes es, en gran parte, ésta: los juicios éticos se propagan. Un
la aprueba, no insistiría con tanta fuerza ni se excitaría tanto individuo dice: "Eito es bueno"; esto puede influir en la aproba-
en su argumentación. La gente se convencería fácilmente de que él ción de otra persona, quien hace entonces el mismo juicio ético,
la aprueba. Si el fabricante quisiera decir, tan sólo, 9ü€ la mayor el cual a su vez influyé en otra persona, y así sucesivamente. AI
parte de las personas aprueban la guerra, o que la aprobarÍan si final, por un proceso de influencias mutuas, las gentes adoptan
-poco
conociesen sus consecuéncias, tendrla que darse por vencido si se sobre más o menos las mismas actitudes. Naturalmente,
demostrase que no es esto lo que sucede. Pero él no aceptaría entre personas de comunidades distantes la influencia es menos
esto ni tampoco sería necesario. el fabricante no está describiendo fuertel de ahí que diferentes comunidades tengan diferentes
el estado dé aprobación de la gente: está intentando modilicarla actitudes.
por.su influericia. Si descubriése que pocas personas aprueban Estas observaciones servirán para dar una idea general de mi
la guerra, insistiría más fuertemente en que es buena, ya que punto de vista. Debemos, ahoraf ofrecer más detalles. Hay varias
sería mayor el cambio que tendría que efectuar. preguntas que deben ser contestadas: ¿Cómo adquiere un enun-
Este ejemplo ilustra cómo "bueno" puede usarse para Io que Ia óia¿o ético-poderpara influir en las personas, Por qué -resulta
mayor parte'de nosotros llamaría malos propósitos. Tales casos apropiado pára sugerir? Además, ¿qué tiene_qYe-yer_esa influen-
son tan pertinentes como cualesquiera otros. No estoy indicando cia con el iigníficado de los términos éticos? Y, finalmeql-e, ¿no:
el modo bueno de usar "bueno". No estoy influyendo a nadie, sino llevan realménie estas consideraciones a un sentido de "bueno"
describiendo el modo como se ejerce a veces esa influencia. Si el que satisfaga los requisitos mencionados en la sección prece-
lector quiere decir que la influencia del fdbricante de municiones dente?
es mala es, si el }ector quiere que la gente repmebe a ese Ocupémonos, primero, del problema sobre el significado. Este
indivicluo,-esto
o incluso lograr que él mismo repruebe sus acciones-, problema está lejos de ser fácil y, por I,o _talto, debemos empren-
en otro momento me sumaría de buefra gana a la empresa. Pero no der prim.to ,tttu'investigación aceica del significado en general'
es eso lo que ahora nos interesa. No estoV empleando términos Aunque parezca una digresión, resultará indispensable.
éticos, sino indicando cóttto se usan. Con su uio de "bueno", el
fabricante de municiones nos ofrece un ejemplo del carácter per-
.-. €
i

276 E,TICA Y SOCIOLOGfA EL SIGNIFICADO EMOTIVC} DE LOS TE,RMINOS E,TICOS 277

III que obsen/ar su tono de voz, sus gestos, las circunstancias en que
Itabla y otros hechos similares.
En términos generalef, h3y dos propósitos diferentes que nos lls Debemos pasar ahora a considerar una cuestión importante:
van a usar el lenguaje. Por una párte, usamos paladrur ("omá dQué tiene que ver el uso dinámico de las palabras con su sigttl*
en la'ciencia) para registrar, aclaiar y comunicai creencias. pol Jicado? Una cosa es clara: no debemos definir "significado" de
otra parte, usamos palabras para dar salida a nuestros senti- irn modo tal que el significado cambie con el uso dinámico. Todo
n?ientos (interjecciones), creai estados de ánimo (poesía), o in- lo que podrÍamos decir de ese "significado", es que resulta muy
cit3-r a las. p,e_rsonas a acciones o actitudes (oratorii). complicado y se encuentra expuesto a cambios constantes. Así,
Llamaré "desc-riptiv-o'f .al primer uso de las palabras; y "din{- indudablemente tenernos que distinguir entre el uso dinámico
mico" al -segun¿o. aoviértale que la distinción dependé ,irri.+ de las palabras y su significado.
me_nte del propósito de quien habla. No se sigue de ahí, sin embargo, que debamos defini¡ "signi-
cuando una persona áice: "El hidrógeno es el gas rnás li- ficado" de una manera no psicológica sino, simplemente, que
gero que se conoce", su propósito puede ser simplemente hacer debemos restringir el campo psicológico. En vez de identificar
qtre el _qqg escucha Io ciea, o bieñ crea que es algo que cree el significado con todas las causas y efectos psicológicos, que
el que habla. En este caso las palabras estáh usadas-d.ui.iptiná- acompañan a la emisión de una palabra, debemos identificarlo
mente. cuando una persona se corta.y dice "¡Maldita sea|l po, con aquellas con las que tiende a conectarse (propiedad causal,
regla gene_ral su propósito no es regiitrar, aciarar ni co*.rnñai propiedad propensional ). Más aún, la tendencia o propensión
creencia-alguna. La palabra está usaáa ünámicamente. Estas dos debe ser de una clase particular. Debe existir para todos los
formas de usar las palabras de ninguna manera se excluyen entre que hablan el idioma; debe ser persistente, y comprensible más
sf. Esto es evidente, por el hecho dé que muy a menuddnuestros o menos independientemente de las circunstancias determinadas
propósitos son comple.jos. Así, cuandó alguién dice: "euiero que que acompañan a la pronunciación de las palabras. Otras restric-
cierre usted Ia puerta", parte de su propésito, por lo general,'és cicines nacerán al ocuparnos de las relaciones recÍprocas de las
-q3e el oyente cr_eá que él tiené ese deseó. rn eía meaiaa,
hacer palabras en diferentes contextos. Más aún, tenemos que incluir,
Ias palabras están usadas descriptivamente. Sin embargo, el pro- bajo las reacciones psicológicas que las palabras tienden a pro
pósito fundamental es hacer qüe el oyente satisfaga iai cteseo. ducir, no sólo aquellas experiencias que puedan sujetarse de
En este sentido, las palabras éstán uéadas dinámiéamente. inmediato a introspección, sino las predisposiciones a reaccionar
Con gran_ frecuenciá sucede qüe la misma oración puede tener de una manera dada ante estímulos apropiados. Espero poder
un uso dinámico en una ocasión, y no así en otra ; o lncluso que estudiar estas materias en un trabajo futuro. Baste decir, por
tenga diferentes usos dinámicos en diferentes ocasiones. Éor ahora, que creo que "significado" puede definirse de tal forma
ejemplo, un individuo dice al vecino visitante: "Estoy abrumado que comprenda el significado "proposicional" como una clase
de trabajo." su propósito puede ser que el vecino sepa cómo importante. Ahora bien, una palabra pue de tender a poseér re-
vive. Esto no sería un uso dinámico de-las palabras. peio.puede laciones causales que en realidad a veces no tiene; y a veces
da_rse el caso, sin embargo, cie que haga 1a observación para puede tener.relaciones causales que no tiende a poseer. Y como
soltar una indirecta. E,ste sería uñ uso áinámico (a la vez que la tendencia de las palabras que constituye su significádo debe
descriptivo,). Puede suceder, también, que haga la observación para ser de una clase particular, y puede incluir, como respuestas,
despertar la simpatía del vecino. E,ite seria un uso dinámico propensiones a determinadas reacciones, de las cuales puede ser
dilerente del de lá indirecta. signo cualquiera de las diferentes experiencias inmediatas, no
o también, cuando Ie decimos a un individuo: "Naturalmente, h"y, pues, nada sorprendente en el hecho de que Jas palabras
usted no volverá a incurrir en esos errores", podemos simple tengan un significado perrnanente, a pesar'de que sean tan extre-
mente estar haciendo una predicción; pero lo más probable es madamente variadas las experiencias que acompañan a su uso
que estemos usando Ia "sugestión" a fin de estimularlo y, en y- que, de inmediato, pueden sujetarse a introspección.
-sería
c_onsecuencia, inzpedirle que cometa errores. El primer uso Cuando se define "sigtificado" de esta inanera, el significado
descriptivo; el segundo, fundamentalmente dinámico. no incluye al uso dinámico. Porque aunque las palabras van acom-
se verá claro, por estos ejemplos, que no podemos determinar
-dinámicamente pañaclas a veces de propósitos dinámicos, no tíenden a ser
si las_ palabras están usadas o no, sólo con consul- ácompañadas por ellos del modo arriba mencion'ado. Por ejem-
tar el diccionario, aun suponiendo que todo el mundo Llse los tér- plo, no hay tendencia alguna que pueda verificarse independiente-
minos en el significado que da el diccionario. En realidad, para mente de las determinadas circunstancias en que las palabras
saber si una persona usa una palabra dinámicamente, tenemos se pronLrncian.
Y
!

278 ÉTICA Y SOCIOLOGÍA EL SIGNIFICADO EMOTIVO DE LOS TERMINOS E,TICOS 279

Hay una clase de significado, sin embargo, en el sentido arriba de- fusos. Induciremos a Ia gente a pensar que los términns d-ef inidos
finido, que tiene una relación íntirna con él uso dinámico. Me refie- ,t uton dindmicamenteZon mettos -t'recuencia de la que elx reali-
ro al significado "emotivo" (en un sentido aproximadamente aná- dad son empleados.
logo al empleado por ogden y Richards).+ El significado emotivo IV
_d9 to? palabra es una tendencia de la palabra, que surge de la
historia de su uso; tendencia que produce (da por reiultado) Apliquemos ahora estas obsen¡aciones a la definición de "bueno".
-Eltu^palabra
reacciones afectiva.s en las personas. Es el aura inmediata de sen- puede usarse moral o amoralmente. Trataré casi
timiento que se cierne en torno a las palabras. Esas tendencias .itri"u*"nte dá uso no moral, pero sólo porque es rnás sencillo.
a producir reacciones afectivas se adhieren a las palabras tenaz- Lot p.ttttos principales del estuáio se aplicarán por igual a ambos
mente. Sería difícil, por ejemplo, expresar alegría us¿indo la USOS.
interjección "¡ay!". A causa-de la persistencia de iales tendencias. Tomemos, como definición preliminar, una aploximacjón in-
afectivas (entre otras razones) es factible clasificarlas como "sig- exacta. Tal vez resulte más desbrientadora que útil, pero bastará
nificados". pui" iniciar la investigaciórr. Aproximadamentg, pues, la oraciórr
li bueno" significá nos gusta X. ( El "nos" comprende aquí
¿Cudl es exactamente Ia relación entre el significado emotivo "t
y el uso dinámico de las palabras? veamos un ejemplo. supon- al oyente u oyentes.)
gamos, que un individuo está hablando con un gmpo de personas -A;;*eia hsta eita d"finición parece absurda; al ser usada,
entre las que se cuenta la señorita Jones, de 59 años de edad. -U*no."esperar oír conversaciones
oodriamos como la siguien-te: A' "ESto
Se refiere a ella, sin pensarlo, como una "solterona". Ahora ér B^. "P.ro a mí no me gusta. ¿Qué le indElo a creer
de- la réplica q, juzgada
bien, aun cuando su intención haya sido perfectamente inocente á;ñé-gusiaua?" La antinaturaliáadde parecería arrojar dudas
cuando use las palabras de una manera puramente des- ilg* el"uso ordinario la- qa]1bra,
-aUn
criptiva-, la señorita Jones no Io creerá así. Pensará qtie está --tuturla relevancia dede
roÉr" mi definición.
induciendo a los demás a que la desprecien, y se retraerfponién- 1o antinatural la réplica de B consiste simplemente
dose en guardia, Quizás hubiera hecho rnejor el individub si en en esto: supone que "nos gusü" (tal como ocurriría impltita-
vez de decir "solterona", hubiera dicho "soltera madura". Estas áente
-,,g ef uso d" "buenoi) está usado descriptivamente' Pero
últimas palabras hubieran podido tener el mismo uso descrip- "n
;; asf. Cuando "nos gusta" ha de tomar el lu_gar de "esto es
tivo, y no hubieran causado tan fácilmente recelo acerca de su ñ"""1-ia primera oración debe usarsedebe no sólo descriptiva, sino
uso dinárnico. dinámicaménte. Más -sages específicamente, usarse para producir
"Solterona" y "soltera madura" sólo difieren, sin duda, en una clase muy sutil de
-cuestión, tün (su-g9¡!ió¡ 9ü€., Para el sentido
significado emotivo. Gracias al ejemplo, resulta claro que ciertas ,ró *o.ul en;"os" resulta muy fáci! de resistir). En la me-
palabras, a causa de su significado emotivo, son apropiadas para ;t.ú;; !"" se ráfiet" al oyente,. debe tener el uso dinámico,
cierto tipo de uso dinámico; tan apropiadas, en efecto, que el L
-rá to sugestión, de indúcir al oyente a hacer verdadero
oyente probablemente se desorienta cuando las usamos de cual- "i"""i"r
lÑ;" "di.", io¿t -pien qre a creerlo simplemente' .Y en Ia
quiera otra rnanera. Cuanto más pronunciado es el significado *.diaa "tt qté "nos" se réfiere- al- que habla, la oración debe
l;;;t no sóló el uso descriptivo de ináicar alguna creencia sobre
emotivo de una palabra, rnenos probable es que Ia gente la uqe
de un modo puramente descriptivo. Algunas palabras son aprG ái- i"t"r¿s de qoi"tr habla,^ sino la función dinámica cuasi-inter-
áur^e¡presión directa al interés. (Esta expresión in-
piadas pára alentar a Ia gente, otras para desalentarla, otras para ;;"L";-a"
'-áái"tu de sentimientos ayuda e1-el proceso de la sugestión' Es
tranquilizarla, y sí sucesivamente.
Naturalmente, ni aun en esos casos deben identificarse Ios =[6fudesaprobardeenuñpresencia
áiii.if del eñtusiasmo de otro')
propósitos dinárnicos con ninguna clase de significado; porque ejémplo caso en que "Nos gusta .9st9': se usa en
,."ii¿o'aitth*ico en que se usa "Esto es bueno", piénsese en el
el significado emotivo acompaña a una palabra de manera mucho hijos:- "Una cosa es
más persistente que los propósitos dinámicos. Hay, no obstante, "f
caso de una madre qué dice a sus varios
relación contingente importante entre el significado emotivo v ¿i;rt;-"- iodot not gustq estar limpios." Si realmente creyera
el propósito dinámico: el primero ayuda al segundo. Por lb ;;,-;; ,"-*ot"rtaría1n estímulando a los niños a las palabras
decirlo. Pero no está usando
tanto, si definimos términos emotivos cargados de un modo que áártriptivamente. Está _ _que- gusten
desconozca su significado emotivo, probablemente seremos con- ¿át-ü fi*pieza. Al decirles que les gusta p fiqnieza, .los inducirá
su enunciado,
;-h;";; ierdadero gusta- estar-limpios",.hubiera
Por-.a:í decirlo. Si, en vez de
a Véase The Meaníng of Meaníng,. por C. K. Ogden e I. A. Richards. dicho "Es bueno
En la p. 125 (segunda edición), hay un pasaje sobre ética que fue la fuente á""ñi,A todo. nos áproximadamente el mismo.
de las ideas expuestas en este trabajo. JJ.- lir"piá;', át."io habría siclo
"i
zEA ETICA Y SOCIOLOGfA EL SIGNIFICADO EMOTIVO DE LOS TERMINOS E,TICOS 281

Pero estas observaciones aún son engañosas. ,,Nos tión, y conduce a la situación de toma y daca que es tan caracte-
gusta" se emplea para sugerir, tto *, Z"i-to¿o Aun cuando iística de los argumentos sobre valores.
bueno". La ultimá oraciói es. más sutil.. con ig";i;l grt, .s Estrictamente hablando, pues, es imposible definir "bueno"
corrro "Éste es un buen libro", ñ;- üuoro, tar en términos de interés favorable, si no se distorsiona el s_ignificado
r.91 e¡ernplo, ,rr"liuri-a ].actica-
mente imposible susriruirta po.r-,,NoJ guitá'.it;-iiü;;,."cuando ámotivo. Sin embargo, es posible decir que "Esto es bueno" se
se usa esta úlfima, y desea évitarse qí" ," Ia reÍiere al interés favorable de quien trabla V _dql- oyente u oyen-
enunciado descriptivo, debe ir. acompll?du porconfundá .o, ,o tei, y que posee un significado emotivo agradable que conviene
tan exagerada, que la fuerza de. sugéstión ei más una entonación u tui pálabras para usarlas en sugestión. E,sta es una tosca des-
lo ta'fo, eI enunciado resurta más abierto a Ia burrafueii" que
y, po, áripcién del significado, no una definición. Pero sirve para la
sg usa "bueno". cuando miSma función aclaradora que ordinariamente desempeña una
La definición es inadecuada, aclem4r, ctefinición; y eso, después de todo, -es bastante.
sido linitado al uso dinámico. Tras do Éaber -pgrque- er d,efinietts ha Hay que añadir una palabra sobie el uso moral de "bueno".
-difiere
dicho que el uso
dinámico es diferepje dgl significaáo, *-l"ndrÍa-ya-qü*-*.ncio Este del anterior en que se refiere a una clase diferente
narlo al darle significado di,,bueno,i. de interés. En lugar de ocuparse de lo que gusta al oyente y a
En relación con este último pt .rio, tenemos que volver ouien habla, se refiere a una especie más vigorosa de aproba-
significado ery91ivo. La p-alabra^,,b,renol; ii."* ,i" -rigiificadoar .iOn. Cuando una persona gusta de algo, se alegra cuando ello
emotivo.ag.radable que ro-hace especialmenlg apropiado prospera, y Ss decepciona cuando no. Cuando una persona aprue'
uso dinámico de para el ba ,írorolmente algo, experimenta un vivo sentimiento de segUri-
.sugeril un inteiés fávoiabl":-T;;;-ü áracion
'.Ngr. gusta" no tiené dad cuando ello prospera, y se irldigna o molesta sobremanera
tal significa¿"-ridificado
.-átiuo. por io-ianto, rni
definición olvictó p"T cuando no. E,stos no son sino toscos e inexáctos ejemplos de los
"ottrp"l"toemotivé
bien, desconocer ei^ significádo emotivo. Ahora muchos factores que habría que mencionar al distinguir las dos
"i cándu"* l.áuubi"*"nt*
a un sinfín de. confusiones, como veremos en sefuicla. procuré clases de interés. En el uso moral, tanto como en el no moral,
compensar lo inadecuado de la definición clejanáo-q"e-ra "bueno" tie-ne un significado emotivo que lo hace propio para la
tricción sobre der uso dinámico tomase-.i r"go, á"r lig"ificado res- sugestión.
emotivo. cuando que lo i ahora, ¿tienen alguna importancia estas consideraciones?
.qu9_.debí iracer, desdJ luego áiu'*rr"on-
trar un definiens cuyo significa{g ¿Por qué insisto de esta manera en los significados emotivos?^¿Stt
emotí.ro, .o*o á de ,,bueno,,,
canduiesc simplemente aI uso dinámico. ómisién realmente induce a la gente a corneter errores? Creo,
¿Pol_gué no lo hice? La respuesta que ofrezco es que eso no ciertamente, que los errores resultantes de esas omisiones Son
es posible, si la definición nos^ha enonnes. Pero a fin de ver esto, tenemos que volver a las restric-
vez mal'or- En primer {e permitir una craiidad cada ciones, mencionadas en la sección I, que se esperaba satisfaría
.rrg.1l, 1o hay dos paláti", A;!*t"rrg"n el sentido "más importante" de "bueno".
exactamente er mismo significado embtivo. Todo ro qüpodemos
esperar es una aproximación más o menos tosca. péro
ii btrr"o_
relación a ,,bueno,', rto ,"ar"tr"remos
ryos tal aproximación con V
gT-o sinónirnos, como ,,deseable,'
; ..;;lioiot,; y-¿;ü;';"" in-
útiles _p.orqg-e no aclaran la conexión entré ,,bú*íoJl-ár La primera restricción, según se recordará, se refería al des-
favorable. si rechazamos tales- sinónimos,-en favor de términos lnterés acuérdo. Atrora bien, hay, evidentemente, un sentido en el que
no,éticos,. produciremos gfan desorientación. pó; áj"*prl ,,Esto las personas disienten sobre puntos _ éticos ; _pero no debemos
es bueno" tiene algo del éignificado de "Me gusta esto j i supóner impmdentemente gge todo desacuerdo sucede a la ma-
tanto como a ti". pero esto, desde rue-go, no es exacto, *. gusta neia del que tiene lugar en las ciencias naturales. Ténemos que
el imperativo hace un ilamamiento u i* esruerzos conscientes ya que distingUir entre "desacuerdos en creencias" (típico de las cien-
cias)
-y "desacuerdo en intereses". El desacuerdo en creencias
9.1 oyente. Naturarmente, no puede gurturl. areó-r¿l;; tiene iugar cuando A cree P y B no lo c-ree. El desacuerdo en
intenie qtre le guste. Debe ser iond,r"ido
gestión. Por lo tanto, una oración ética difieré " ;;Ji--";:i: #iX1:
á" H;ilpverativa
intereses tiene lugar cuando A tiene un interés favorable en X
y B lo tiene desfavqrable,- y ninguno_ de los dos se conforma
en que le permite a uno operar cambios de un modo
menos
mái sutil, con que no se moclifique -el interés del otro-
consciénte. obsérvese que Ia o.;;i¿; ética
centra -plenamente
la atención del oyente no en sus intereses, sino en ei objeto Penrnítaseme un eiemplo de desacuerdo en intereses. A. "Va'
de interés v, por Io tantb, facilita ta sugáitio". a¿"más, mos al cine esta noChe.'- B. "No quiero hacer eso. Vayamos al
a causa de
su sutileza, Lrna oración ética permitJfácilmente la ,ort."r,rg"r_ concierto." A sigue insistiendo en ir al cine y B en ir al con-

)
282 E,TICA Y SOCIOLOGfA EL SIGNIFICADO EMOTIVO DE LOS TERMINOS E,TICOS 283

cierto- Este es desacuerdo el. un sentido perfectarnente conven- en gue A y B no pueden polerse de acuerdo sobre si ir al cine
cional. No pueden po-nerse de acuerdo acérca de dónd" qri*i.n
ir, y cada uno tratá de rectificar er interés del otro. ca¿ri¿iüü lal^conciérto. El ejemplo difería de una discusión ética enenque
Ie-usaban
"Á"átau
imperativos Í tto juicios éticos; pero era análogo la
qry-en el ejemplo se usan imperativos.) qüe cada pérsona trataba de modificar el interés de
EI desacuerdo que tie'e lugar en ética es de intereses. cuan- "n bien, ¿óómo argumentarían esas personas el caso,
il-ot u. Ahoia
do C dice "Esto es bueno', y -n dice .,No, es malo,,, tenemos un 'sirponiendo que fuesén demasiado inteligentes para gritarse?
c3so- de suge-stión y "--b,'nia"trteménte,
.contrasúgestión. Cadá individuó .rtá tratan- darían "razones" para apoyar sus im-perativos.
i'P"ro,
do de rectificar el interés dél otro. No es necesario, eviaénG ¡ loária decin ¿sabes?, la Garbo _está en gl Bijou." Su
mente,
-que haya un dominador, y-a gu9 cada uno d.e ellos puede esperanza es que B, qué admira a la Garbo, adquigra el . deseo
estar dispues,to a prestar oídos a-la influencia del otro; pero, no áJit al cine cüando sépa el filme que-se-proyecta. B puede res-
obstante, cada uno está tratando cie inducir al otro. Ér'.r, *rt" fÁr.,der: ,'pero Toscani?ri es directór huésped esta noche, y el
sentido en el que están en desacuerdo. euienes sostienen que íro*u*u está formaclo sólo por obras de Beethoven." Y así
ciertas teorías del interés no tienen en cuenta el desacuerho, íucásiua*ente. Cada uno apoyá su imperativo ("Hag.amos esto
están_equivocados, creo yo, simplemente porque las teorías trad.i- I lo otro") con razones que pueden establecerse empíric-amente.
ciónales, al omitir el significado ,emotivó, dán la impresión de " é"rr.tuliiemos esto: el desacuerdo en intereses puede tener
que los juicios éticos se usan g*.'"-" modo purarnente dbscriptivoJ sus raíces en un desacuerdo en creencias. Es decir, las
personas
y, naturalmente, cuando los juicios se_ usan de un modo pura- .,ire disienten en intereses muchas veces dejarían de hacerlo si
mente descriptivo, el único desacuerdo que puede produtirse
es el desacuerdo
- -int"t¿t. la naturaleza y consecuencias
Jor*i*ren
el
,precisas del objeto de
en intereses puede
en creencia.s. Este desacirerdb puedL ser des- J,t De esta manera desacuerdo
,lll acuerdo en creencias acerca. de intereses; pero esto no es lo ierolu".te afianzando el acuerdo en creencias, el que, a Su vez,
mismo que desacuerdo en intereses. Mi definición no tiene en afianzarse emPíricamente.
úr
cuenta el desacuerdo en creencias acerca de intereses, como tam- 'ouede
Ertu generalización sirvg para la ética. Si A y B, en vez de
,ifi
poco Ia de Hobbes; pero eso_no importa, porque no hay r4zón hubieian dicho respectivamente: "Sería
Para creer, _por lo menos en base al sentido comrin, qué exista "*pl"ut"imperativos,
'aihan,ir al
me'ior óine" y "sería mejor ir al concierto", las razones que
esa clase de desacuerdo. Sólo hay desacuerdo en ^intereses. serían apioximadamente las mismas. Cada uno de ellos
(Veremos dentro de un mornento qu-e el desacuerdo en intereses ;;; ó"a explicáción más completa delde objeto de interés, con el
iilil
no aleja a la ética de la sana argumentación: que esta clase de de terminar la rectificación intereses que empezó
',i.,rrósito
desacuerdo puede resolverse coñ frecuencia pór medios empi-
ricos.)
;;"-ia fuerza sugestiva de Ia oración ética.-En
ético
conjunto, Por
sólo ejerce pre-
,"p""it", la fuerá sugestiva-del enunciado
ya que éstas
I.a segunda restricción, acerca del "magnetismo", o la conexión ;iá; sufitiente para iáiciar la cadena de razones-,
i1] entre bondad y acciones, sólo necesita una palabra. Esta res- ,á, *".ho mái esenciales para la solución de desacuerdos de
I' tricción sólo excluye aquellas teorías del inteiés que al definir intereses que el efecto persuasivo del j-uicio ético por sí mismo.
"bueno" ?w comprende+ el interés del que habla. Mi explica- --lri,-et rdétodo empírico e,s útit para la ética simplemente por-
ción incluye el interér qé qui_en habla y, pbr lo tanto, es inmupe. que nuestro conocimiento del rnundo es un factor determinante
La tercera restricción, relativa al - método empírico, puede de nuestros rntereses. Pero adviértase que.los hechos ernpíricos
satisfacerse de un modo que surge naturalmente áe la anierior uures inductivas de las cuales se siga, proble.máticamen-
iá ,o"j"icio
explicación sobre eI desacuerdo. Formulemos la cuestión de esta ñ ;i ético. (Que es. lo q-ue imp.lican las teorías tradicio-
manera: Cuando dos personas discrepan sobre una materia ética, ;á; áel interés.) Si alguien dije-ra: "Cierra l-q.Ryerta", Y a!?'
¿pueden resolver por completo el desacuerdo mediante conside, ái"i": "Nos resfriaremoé", esta última frase difícilmente podría
raciones suponiendo que cada una de ellas aplique consicrerarse como base inductiva de la primera. Ahora bien, los
el método ernpírico hasta lo último, consecuentemente -y iin
-empíricas,
imnerativos se relaciónan con las razones que los apoyan, del
error? ;iil; ;odo que los juicios éticos se relacionan con razones.
contesto que algunas veces podrán y otras no y gue, de cual- '-;"8;"f-*¿t"bo empírico sufic¡"fr:_!::.a conseguir .e.l acuerdo
quier modo, aun cuando les sea posible, las relaóiones entre el étñ? Evidentementd no. porqug_el conocimie_r¡lo empirico resuel-
en la meclida el-que e-se des-
conocimiento empírico y los juicios éticos son completamente ve el desacuerdo en intereses sólo
diferentes de las que parecen implicar las teorías trádicionales acuerdo nazca de un desacuerdo en creencias. No todos los
del interés. intereses son de esta clase. Por _ejemplo: A tiene
á.iá"""rdos en discutiendo si sería buena
Esto se verá mejor gracias a una analogía. Volvamos al ejemplo un carácter compasivo y B no. Están
284 E,TICA Y SOCIOT,OGÍA EL SIGNIFICADO EMOTIVO DE LOS TERMINOS ETICOS 285

una rilnosna púbrica. supóngase que co'OCf:'ll tocias ras ¡ífícamente cognoscibles que una cosa pueda tener, siernpre es
cuencias de ia limosna. ¿l.ro ás poiirrrc, a'n así, que,a,liigu conse-
q,," íná á debatir si una cosa que tenga tales cualidades
es buena, v B que es rnala? Ei cr.sacuc.cro.; #r;;.*, "r*rtión
lánu*rradas) es buena. Porque preguntar si es buena, es pregun-
nacer no de la limitación de los conc.¡cirnientos r¿.ii.ur,pr..t.
simplemente gg lo compasión cle A y cle lá r.iar¿o,t ,t.i sirio iui pot una ínftuenci.a.. Y cualesquiera que sean mis conocimien-
póngase tambiér, en cl cjcmplo anórior, que A .r, ñ. o ,u- iár ro¡te un objeto, aún puedo pedir, 4"- un modo por
totalmente
¡-,ob." ), ¡ro pertinente, ser influido con respecto a mi interés é1.
tiene trabajo, y que B c.s ricó. Aquí, una váz más el'clcsac*ercir¡
puede no deberse a diferencias eñ el conocirniento f¿,ictlccr,
a las diferentes posiciones sociales ce los indivicluoi,-'uiir¿o, sino VI
sus intereses personales predominantes. u
Y ahora, ¿he señalado realmente el sentido "más importante" de
Cuando el desacuerdo étlco no na.ce de un clesac-uerclc, en "bueno"?
creen-
:io:' ¿lrqy algtin.mérorlo por e] cual. p.erla arreglai-s.e?-si p; Supongo que muchos segUirán diciendo "no", -pretendiendo
"métocl<1" sc cntienrle ,.tn méto ck> rnciá,er,
no ha¡i' ent.nccs mé-
todo algr:no. Pelo en cuarquier caso hay un ,,nroáo,,. considt:re-
o*" ñ" fiacasacio al no establecer todos los requisitos que debe
lienar ese sentido, y que mi análisis, cÓmo todos los efectuados
rnos dc nuevo el ejemplo bnterior, en Ll cr-ral el d.:sircrrt:rdo en térrninos de interés, es un modo de evadir la cuestión. Dirán:
se
debía a ia compasión itc a y a la frialdac dc Il acabar "Cuando preguntamos: '¿Es bueno X?' no sólo deseamos su
dicienclo: "Bucno, esto se clébe a que tenemos clif ¿Dcbcii
.lrcntcs [É]inpe- influencial o consejo. Decididamente, no queremos ser influidos
ramentos?" No ne-cesar.iamente. A, por ejempl', pucrlc tr¿rtar mediante la persuasión, ni nos sentimos del todo contentos cuan-
de nx¡clí'f icar el_ temperamento cle su'contiincinte. Fuccle n.rani- áo la influencia es apoyada por un amplio conocimiento cientí-
festar su entusiasmó cle un mocro tan conmo\rccior cscntar fico de X. La respuesta a nuestra pregunta modificará, natural'
los sufrimientos de l9r pobres tan eficazmente- quc -1li incruzca rnente, nuestros iñtereses. Pero esto es así sólo porque nos será
a su opositor a vcr la vicla con puccle e.¡er-cer, al revelado un tipo especial de verdad, una verdad que debe ser
-otros ojc-rs.
contagiar sus s_entimientos, una influencia que rnoclifiqLie el tem- aprehendíd,a a-priofi. Queremos que nuestros intereses se gUíen
peramento de B y prodlrzca en él trna sim¡iatía haciu pbr esa verdad,-y por ninguna otra cosa. Sustituir esa verdad por
que antes no existía. Este es, a rrenucio, cl únicoi,r., pobres
moclo cle ur, *"r" signific-acló emotivo y una sugestión es ocultarnos el ver-
conseguir el acuerclo ético, si es que en realid¿icl har. n,oclo algu- dadero objeto de nuestra investigación."
no' . Es persuasi-to,- .,o_
razón para olvidarlo. No _empír'ico ni racional i pero' "riu'-"o es Lo únicó que puedo respondef es que no comprendo. e_SoQr9
hay razó_n, tampoco, pa¡ra clcscleñarlo, qué e1 tal verdaá? Porque yo no recuerdo nirtguna idea platóni-
porque es sólo gracias a tales rnedios qué n.restras persopalida- Cv, nr Se que debo inlentar recordar. No encuentro ningUna
des pueden ciesarrollarse, mecliante el contacto con los demás. prbpieda¿ in¿efinible, ni sé qué buscar. Y los dictámenes "evi-
.
El punto que deseo clestacar, si' enrbargo, es simplcmcnte que derrl.t por sí mismos" de la razón, que tantos filósofos preten'
e.l mótodo empírico es útil para el acuercl-o ético ,élo la rne_ den ha6er encontrado, parecen, al eiaminarlos, ser dictámenes
"r,
9]du en que el desacuerclo nuzca de un clesacuerdo en creencias. únicamente de sus .espectivas razones (si es que lo son de algu-
Hay poca razón para creer qtre torlo cle.sacuerd<> e.s de esta clase. na) y no de la mía.
Por lo tanto, el método empihco no es suficiente para la ética. En Én realidad, sospecho fuertemente que cualquier sentido de
todo caso, la ética no es psicorogía, va que la psicologia ,ro tr"tu "bueno" del cual sb etpere que se una-de una manera sintética
de orienl¿r nuestros intefeses ; dlscr-ibre hechos sobre" Ias io.-as a priori con otros conceptos, y que influya también en los inte-
en que lo.s intereses sol o pueden scr oricntaclos, pero ¿it" .rn ,.r"r, es realmente una gran ionfusión. De este significado
problema totalmente distinto. ". obtengo únicamente el podér de influir, _qu9 me parece la única
"inteligible.
Para resumir esta sección: mi anári.sis de los juicios éticos parte Pero si el resto es confusión, ento¡ces induda'
cumple los tres requisitos que debe cumnlir el ienticlo ,,más blemente merece más que un encogimiento de hombros. Lo que
importante" de "bueno" qr," ñ-rcsen mencionaclos cn la sección I. yo querría hacer es explicar la confusión, exarninar las necesi-
Las teorías tradicionales clel intcrés no cumplcn ,.qi,iritor, áadés psicológicas qua Io originaron y mostrar cómo pueden
sencillamente porque olvidan el significaclo emotivo. "ruiEstó ol'iclo satisfaclerse tiles neiesidades áe otra manera. E,ste es el pro-
Ias lleva a desconocer el uso clináñico 1' la clase clc clcsactrcrclo blema, si la confusión ha de atajarse en -su misma fuente' Pero
que clc él resulta, juntamcnte con cl métoclo para rr:solverlo. éste .t un problema enorrne, y- mis_ reflexiones Sobre é1, qye
Pueclo añadir quc mi análi.sis rcsuclve la objcción clc Mrioi-c' sobrc en este momento sólo están eláboradas rudimentariamente, de-
la cucstión a clcbatir. Ctralesqtriera qt-'" rc". Ias prolriccllclcis cien- ben quedar resen/adas para un momento futuro'

I
286 E,TICA Y SOCIOLOGÍA
Puedo añadir que si "x es bueno" es esencialmente un vehículo
para la sugestión, difícilmente es un enunciado que los filósofos. XIV. SOCIOLOGÍA E,N FISICALIS¡UO "
más que los demás hombres, estén llamados a hacer. En ü
medida en que la ética se ocupa de predicar los términos éticos por Arro NeuRnrH
de cualq*i.I cosa, más que de explicar su significado, deja de
ser un estudio reflexivo. Los enunciados éticos son instrumentos l. El fisicalismo, Iibre de tnetafísica
sociales. Se emplean en una empresa cooperativa en la que unos
a otros estamos adaptándonos a los intereses de los demás. Los CoNTTXUANDo la obra de Mach, Poincaré, Frege, Russell, Wittgen-
filósofos, como todos los hombres, tienen su parte en esta empre- ;üi" y otros, el así llamado "Círculo de Viena par? l^a Con.cepció-n
sa, pero no la mayor parte. óiL"tífi.u del Mundo" trata de crear una atmósfera ios libre de
,rr"t"fíri"a para promover estudios cientÍficos e¡r todos cam-
oor mé¿io áet análisis légico.l Sería menos desorientador
"ár
ñurá. de un "Círculo de Viená para el Fisicalismo", y-a que el
lJrmino "mundo" está ausente dél lenguaje de la ciencia, y qqe
cát."p.ión del mundo (Weltaufassung¡ se confuncle a menudo
con vísión del mundo (weltanschauung). Todos los _representa¡r-
t"i- ¿" este Círculo están de acuerdo en que la "filosofÍa" no
existe como disciplina, aI lado de las ciencias, con propostctones
lsjecíficas: el cuérpo de proposiciones científicas agota la suma
de todos los enunciados dotados de sentido-
Cuando se articulan en una cíencia unificada, las diversas
ciencias siguen siendo cultivadas exactamente de la misma ma-
nera como cuando estaban disociadas. Hasta ahora no se ha
áestacaao suficientemente su carácter lógico uniforme. La cien-
cia unificada es producto de un amplio trabaio colectivol,dgl
*it*o modo que lo ha sido la estmctura de la químic-a, y la
de la
lógica'
!"áf"gí", de la iriotogia o también de la matemática
=
L^ óiencia unificada será cultivada de la misma rnanera que han
sido cultivadas hasta ahora las ciencias particulares. Así, el "pensa-
áor sin escuela" no tendrá más importancia que la que tenía cuan-
áo las ciencias estaban desunidas-. Et indiviáuo puede conseguir
* Este artículo, titulado "soziologie im Physi-kalismtls", apa-reció por
primera v* er, II de Erkenntn¡s (1931-32). Se incluye-en el-presente
"l'vol. áutorización de la señora Marie Ner¡raü y del
íiUro con la amabie
profesor
---i ai: luRudolf CarnaP.
revista El'kenntnís, en la cual colaboran constantemente los
,"pr"ilttu.tt"i á"f Cit",tto de Viena. Aquélla es tambien un órgano de la
;;E..tit Uá"fl la cual áif,ro'd" los puntos de vista del Círculo
ñ-rirñió"
dé Viena entre un público más amplio.
Publicaciones de-la agnrpación "Ernst Mach". Cuaderno l: "l'a' cgnclP
ción-cieniífica dei-mundo;'el Círqulo de Viena". Introducción con biblio
É.áTl"-ááiáii"A",-té.tt" po¡ $gd-oli Carnap, Ha-ns Hahn y O^tto Neurath'
¿;l¿t-" 2: Hans Hahn. Entidades superfluas; la navaja de Ocam' Ambos
de la Editorial cle Artur Wolf, Viena.
-- Éo.u rrri orienlaciOn-mar precisa: "Escritos para una corrcepció¡r cientí-
nca a-J *""áJ;, éáitu¿or poi nnitipp Frank (Praca) y.l\'loritz SSftpt< (Vie-
ilii. Eáiióii^l lúti"i Sprin-eer,.Vi_eriá. I. Friedrich Waismann, L-ósiga;- len-
sráj;fi¡ñfiu-f "" prJpar"iioú). .II. Rudolf Ca.rnap, Logí1ti-c3.. .II!. Richard
ñ;'i,fG;, FróUáUiti¿aá, Estadística, Verdad. IV.. \{oritz Schlick, Problemas
á" fu étiá. V. Otto-Ñ'"".oitt, SociologÍa empírica. VI. Philipp Frank, La
l* A .á*li¿"d-y ius límites. Todos en la Eáitoriat Julius Springer,"Viena-
287

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