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El primer documento describe un paseo en barco entre islotes estrechos donde se pasaban junto a otras embarcaciones más pequeñas llenas de niños. El segundo documento habla sobre como de niño el autor quería ser detective a pesar de las bromas de su padre, y como con el tiempo su padre se alarmó al ver que no era una broma infantil. El tercer documento trata sobre aprender a despedirse bien, mirando con serenidad y recordando los buenos momentos vividos.
El primer documento describe un paseo en barco entre islotes estrechos donde se pasaban junto a otras embarcaciones más pequeñas llenas de niños. El segundo documento habla sobre como de niño el autor quería ser detective a pesar de las bromas de su padre, y como con el tiempo su padre se alarmó al ver que no era una broma infantil. El tercer documento trata sobre aprender a despedirse bien, mirando con serenidad y recordando los buenos momentos vividos.
El primer documento describe un paseo en barco entre islotes estrechos donde se pasaban junto a otras embarcaciones más pequeñas llenas de niños. El segundo documento habla sobre como de niño el autor quería ser detective a pesar de las bromas de su padre, y como con el tiempo su padre se alarmó al ver que no era una broma infantil. El tercer documento trata sobre aprender a despedirse bien, mirando con serenidad y recordando los buenos momentos vividos.
A veces, cuando nuestro barquito pasaba entre dos islotes, el canal
era tan estrecho que casi podíamos tocar las rocas a un lado y a otro. Pasábamos junto a barcas y canoas de remo, llenas de niños rubios de tez tostada por el sol, y les decíamos adiós con la mano viendo mecerse violentamente sus pequeñas embarcaciones en la estela que dejaba nuestro barco, más grande.
DICTADO 4
De pequeño, yo decía que quería ser detective y mi padre se lo
tomaba a broma, como si hubiera dicho que quería ser domador de elefantes. A medida que me iba haciendo mayor y veía que no solo no me echaba atrás, sino que incluso ejercía de detective a pequeña escala, se había ido alarmando, en parte porque constataba que nos e trataba de una broma, en parte porque cuanto más crecía yo, menos podía imponerse él.
DICTADO 5
Ella me enseñó que la vida es una serie de interminable de
despedidas y que, por tanto, hay que aprender a despedirse bien. Y despedirse bien no es salir corriendo sin mirar atrás y echar una cortina sobre el pasado y hacer como si no hubiera existido. Muy al contrario, despedirse bien es saber estrecharse las manos, mirando con serenidad a los ojos. Y recordar en ese momento crucial todos los momentos hermosos que vivimos, y llevarlos con nosotros, porque eso es riqueza y enriquece.