SEGREGACIÓN, DESIGUALDAD Y POSTCONFLICTO EN COLOMBIA
El conflicto armado ha sido uno de los principales problemas en el crecimiento
económico, social y político en Colombia, destacando que es considerado a nivel de Latinoamérica como una de las guerras que se presento por un largo tiempo, siendo un total de 50 años, esto tuvo como resultado un total de entre 1950-2013 un número de muertes de civiles de 79245 personas, siendo un total hasta del 2018 de 352.786 (Histórica, G. M, 2018). En consecuente, encontrándose situaciones complejas, tales como plantea Mosquera Lozano (2020) de “secuestros, persecuciones, desplazamientos, muertes selectivas, ataques y masacres, torturas, falsos positivos, parapolítica, farcpolítica, narcotráfico, ejecuciones extrajudiciales, sicariato, mutilados por minas antipersonas, entre otro/as.” (p. 269), esto demuestra un sin numero de hechos que evidencian la polarización social y política en la que se encuentra inmersa Colombia, dándose fenómenos de segregación y desigualdad en el estilo de vida en las poblaciones rurales que mas presentaron conflicto armado y las urbanas que en porcentajes menores no vivenciaron este tipo de hechos. Ahora bien, esto invita a cuestionar ¿Por qué se menciona el entorno rural y urbano?, se menciona por el simple hecho que la conformación geográfica juega un papel importante en la guerra en Colombia, las poblaciones rurales sufrieron el mayor porcentaje de los sucesos del conflicto armado, mostrando una estrecha desigualdad y segregación por parte del estado al abandonar de forma literal a esta población. Segregación y desigualdad Estos fenómenos son explicados desde una perspectiva psicosocial causada por la guerra en El Salvador, empleado teóricamente por Ignacio Martín-Baró (1988), afirmando que la segregación y desigualdad percibida desde las víctimas y el estado como entidad implicada directamente en la guerra presenta las siguientes características: La polarización social: Este fenómeno se da de manera intencional por los actores implicados en la guerra, donde se presentan posturas ideológicas y personales por la situación presentada en el país, utilizando la violencia estatal y militarizada por parte de los grupos armados para inducir en el pensamiento de la población, haciéndoles tomar partido por uno de los dos bandos de manera forzosa. La mentira institucionalizada: Es un mecanismo que con el tiempo va alcanzando nuevos niveles, esto conlleva a la desacreditación del estado y a la división espontanea de los bandos que se encuentran en disputa, evidenciando el fenómeno e segregación por parte de estos grupos, desde un contenido discriminatorio para la no aceptación de sus ideologías. La violencia: Es el principal método de separación social para someter a una población específica, que ha pasado de ser preponderantemente represiva a ser mayoritariamente bélica causando deshumanización y cristalización polarizado de parte de los bandos involucrados. Postconflicto y aportes desde la arquitectura Las políticas de estado desde la firma de acuerdos de paz el 4 de septiembre de 2012 buscan mejorar el cambio de imagen de Colombia, para ser un socio estratégico para futuras inversiones, se puede entender que el tratado de paz mas allá de buscar un fin a la guerra, tiene un tinte político y económico que busca que el país entre en el mercado global y sea tenida en cuenta para las inversiones extranjeras. Desde el Departamento Nacional de Planeación (DNP) para que contribuya a las estrategias del país a mediano y largo plazo, centro como punto esencial para que las actividades del Estado tengan un mayor nivel de efectividad estén enfocadas en el crecimiento económico y al mejoramiento de la infraestructura y la adquisición de nuevos bienes subsidiadas por parte del gobierno con la intención de cumplir con las exigencias de desigualdad de la ONU y la OCDE, superando las expectativas (Alegría & González, 2015). Como ejemplo y finalización del escrito, se puede colocar en contexto el programa de “Mi casa ya”, esto desde el crecimiento de la infraestructura permitió el diseño de nuevos barrios donde las personas victimas del conflicto armado puedan acceder a este tipo de viviendas, por esta razón, el diseño de este tipo de programas al no hacer un estudio del contexto de la guerra, conllevo a se presentará segregación y desigualdad en la población por parte de los grupos armados guerrilleras y paramilitares que se encuentra en el área humana, siendo estos barrios un ejemplo claro de la guerra y que su infraestructura no se presto para ofrecer un ambiente armonioso y de igualdad, siendo conjuntos residenciales aislados y divididos entre sí (Alegría & González, 2015). En esencia, esto quiere decir que la influencia en el diseño de nuevos barrios conlleva a que se generen otro tipo de problemas sociales, porque lo que es importante tener en cuenta este tipo de factores a la hora de ejecutar este tipo de proyectos, dándole viabilidad a formatos arquitectónicos que no van acorde a las necesidades de la población, en vez de generar igualdad, ofrece totalmente lo contrario, también se demuestra que la desigualdad en la que s encuentra la población desplazada frente a este tipo de hechos, ofreciendo algo contrario Referencias Alegría, R. C., & González, P (2015). Las organizaciones de la arquitectura global y el posconflicto colombiano: el caso de la cooperación de la ONU, el Banco Mundial y la OCDE. POLÍTICA EXTERIOR COLOMBIANA, 293. Histórica, G. M. (2018). ¡Basta ya! Colombia: Memorias de guerra y dignidad. Centro de Memoria Histórica. Bogotá (Colombia). Martín-Baró, I. (1988). La violencia política y la guerra como causas del trauma psicosocial en El Salvador. Revista de psicología de El Salvador, 7(28), 123-141. Mosquera, C. E. M., & Lozano, M. N. R. (2020). Políticas de memoria en la escuela en América Latina. El Caso de Colombia frente a su conflicto armado. Revista Colombiana de Ciencias Sociales, 11(1), 267-286.