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MONOGRAFÍA
DRA. MARÍA ALEJANDRA OVALLE SANTOS
CIRUGÍA PLÁSTICA
MEDICINA
FUNDACION UNIVERSITARIA DE CIENCIAS DE LA SALUD FUCS
20 DE MARZO DEL 2018
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CONTENIDO
1. DEFINICION: QUEMADURA
2. ETIOLOGÍA
3. FISIOPATOLOGÍA
4. CLASIFICACIÓN DE LAS QUEMADURAS
4.1. CLASIFICACION SEGÚN LA PROFUNDIDAD
4.2. CLASIFICACIÓN SEGÚN LA EXTENSIÓN
4.3. CLASIFICACIÓN SEGÚN LA SEVERIDAD
5. CRITERIOS DE HOSPITALIZACIÓN EN PACIENTES QUEMADOS
5.1. VALORACIÓN PRIMARIA
5.2. MANEJO INICIAL
5.2.1. QUEMADURAS MENORES
5.2.1.1. QUEMADURAS DE PRIMER GRADO EPIDÉRMICAS
5.2.1.2. QUEMADURAS DE SEGUNDO GRADO PROFUNDAS Y
SUPERFICIALES
5.2.2. QUEMADURAS MAYORES
6. QUEMADURAS ELÉCTRICAS
7. ORDENES MÉDICAS GENERALES
8. CONCLUSIONES
9. REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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1. DEFINICIÓN
Las quemaduras son lesiones tisulares a nivel local o sistémico causadas por la
exposición a agentes físicos, químicos o biológicos. Se tienen en cuenta dos
factores para establecer la gravedad de las quemaduras: La mortalidad (dada por
la profundidad y la extensión) y la presencia de secuelas permanentes (dada por la
localización y la profundidad de las quemaduras). (Ferro, 2012)
2. ETIOLOGÍA
Por su agente etiológico las quemaduras se clasifican en: Térmicas (producidas por
calor o frío), eléctricas, por radiación, por rozamiento y químicas. La principal causa
de quemaduras es el contacto con líquidos calientes, llamas o electricidad. (Tabla
1.)
Tabla 1. ETIOLOGÍA DE LAS QUEMADURAS
3. FISIOPATOLOGÍA
DERMIS
TEJIDO
EPIDERMIS Dermis Dermis SUBCUTÁNEO
Papilar Reticular
Ilustración 3. Quemadura solar ( primer grado) (María Teresa Pérez, Pedro Martínez, Lorenzo Pérez, Felipe Cañadas,
2011)
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Ilustración 4.Quemadura de segundo grado superficial con flictenas (María Teresa Pérez, Pedro Martínez, Lorenzo Pérez,
Felipe Cañadas, 2011)
Ilustración 5. Quemadura de segundo grado superficial con flictenas (María Teresa Pérez, Pedro Martínez, Lorenzo Pérez,
Felipe Cañadas, 2011)
Ilustración 6. Quemadura de segundo grado superficial tras retirar las flictenas (María Teresa Pérez, Pedro Martínez,
Lorenzo Pérez, Felipe Cañadas, 2011)
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Ilustración 7. Aspecto de la quemadura una vez retiradas las flictenas: área superficial de segundo grado (rojas) y
profunda de segundo grado (blancas) (UpToDate, 2018)
Ilustración 8. Quemadura de tercer grado con presencia de escara oscura anestésica (María Teresa Pérez, Pedro
Martínez, Lorenzo Pérez, Felipe Cañadas, 2011)
Ilustración 10.. Superficie corporal quemada en edad pediátrica. Para determinar la extensión de la cabeza y de
los miembros inferiores: Cabeza= 18-edad. Miembros inferiores= 27+edad.
• Severidad
o Quemaduras leves:
▪ Quemaduras en adultos de 2° <15% de superficie corporal
quemada
▪ Quemaduras en niños de 2° >10% de superficie corporal
quemada
▪ Quemaduras de 3° < 2% de superficie corporal quemada
o Quemaduras moderadas:
▪ Quemaduras en adultos de 2° de 15-25% de superficie corporal
quemada
▪ Quemaduras en niños de 2° de 10-20% de superficie corporal
quemada
▪ Quemaduras de 3° de 2-10% de superficie corporal quemada
o Quemaduras Graves:
▪ Quemaduras en adultos de 2° > 25% de superficie corporal
quemada
▪ Quemaduras en niños de 2° >20% de superficie corporal
quemada
▪ Quemaduras de 3° > 10% de superficie corporal quemada
▪ Lesión por inhalación
▪ Quemaduras con trauma adicional concomitante ( trauma
cráneo-facial, lesión intraabdominal, fracturas)
▪ Quemaduras durante el embarazo
▪ Comorbilidades que añaden un riesgo significante a las
quemaduras ( Diabetes Mellitus, uso de corticoesteroides,
inmunosupresión)
▪ Quemaduras en áreas especiales como ojos, orejas, cara,
cuello, manos, pies, pliegues flexo-extensores y genitales.
(Ahmet Çınar Yastı, Emrah Şenel, Mutlu Saydam, Geylani
Özok, Atilla Çoruh, Kaya Yorgancı, 2015)
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constantes vitales.
Hidrate la piel para restaurar la humedad. Al producirse la quemadura se inicia
un mecanismo fi siológico de deshidratación, es por ello por que debemos
hidratar de forma activa la piel, aportando sustancias coadyuvante para la
recuperación y el mantenimiento de la hidratación, evitando con esto la
sequedad de la piel que es la causante del prurito o picores tan característicos
en las personas que sufren quemaduras. Las sustancias empleadas podrán
aplicarse en forma de cremas, emulsiones o geles y deben contener glicerina,
propilenglicol, sorbitol, urea, ceras, vitaminas liposolubles (Vit A, y E) y colágeno.
Valore el uso de cremas con aporte de corticoides. Las cremas con corticoides
son uno de los escasos preparados tópicos no antisépticos de los que existen
estudios científi cos en pacientes con quemaduras de primer grado.
Están especialmente indicadas en quemaduras faciales superficiales, aunque
existen estudios con tamaños muestrales pequeños y limitaciones
metodológicas en las que se han utilizado en otras partes del cuerpo con
resultado satisfactorio. Su empleo no debe prolongarse más de 48 h
posquemadura.
Su uso no está exento de efectos secundarios, retraso en la epitelización,
disminución de defensas inmunitarias (micosis, herpes, infección bacteriana),
etc., por lo que debe valorarse y personalizar su uso en función del paciente.
Retire apósitos, gasas y vendajes por capas. Si se ha aplicado algún tipo de
apósito, la retirada debe hacerse de forma minuciosa y empleando la mínima
fuerza mecánica, para esto se humedecerán las gasas y así se evitará que se
adhieran y produzcan efectos no deseados como lesiones, desprendimientos de
islotes de piel, sangrados y dolor innecesario.
Estas quemaduras presentan muy poco riesgo de infección, normalmente
depende más de los factores concomitantes de la persona con quemaduras que
de la propia lesión, por tanto no es recomendable el uso de quimioterápicos
tópicos de forma preventiva en este tipo de lesiones, ya que la evidencia no
aporta prueba de que mejoren su pronóstico y además puede ser causa de
efectos secundarios importantes. (María Teresa Pérez, Pedro Martínez, Lorenzo
Pérez, Felipe Cañadas, 2011)
6.2.1.2. Quemaduras de segundo grado superficiales y profundas
• Limpieza y desbridamiento.
o Irrigue con agua a temperatura ambiente. Los cuidados iniciales del
paciente que ha sufrido quemaduras consisten en la irrigación con
abundante agua a temperatura ambiente. En el caso de quemaduras
extensas se aplicará mantas térmicas para evitar la hipotermia, una
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7. QUEMADURAS ELÉCTRICAS
Las quemaduras por electricidad son las más devastadoras de todas las lesiones
térmicas en relación a su tamaño, afectando normalmente a la piel y a tejidos más
profundos. Se producen principalmente en el ámbito doméstico (sobre todo niños)
y ámbito laboral, varones jóvenes en el trabajo (electricistas, trabajadores de la
construcción). Son además la causa más frecuente de amputaciones en unidades
de quemados.
Aproximadamente el 15% de las víctimas de quemaduras eléctricas sufren lesiones
traumáticas además de su quemadura, una tasa casi doble de la existente en otros
pacientes quemados.
El traumatismo eléctrico se produce por el paso de corriente a través del organismo,
la intensidad de la quemadura eléctrica está determinada por el voltaje, la corriente
(amperaje), tipo de corriente (alterna o continua), el recorrido del flujo de corriente,
la duración del contacto, la resistencia en el punto de contacto y la susceptibilidad
individual.
Traumatismo directo: hay paso de la corriente por el organismo.
• Bajo voltaje (<1000 V): Se trata del 80% de los traumatismos eléctricos siendo
especialmente frecuente en el ámbito doméstico y en los niños. Son pequeñas
y profundas, localizadas generalmente en manos y boca. Las quemaduras de
la cavidad oral son el tipo más frecuente de quemadura eléctrica grave en niños
pequeños. Pueden ocasionar arritmias graves.
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B. Paraclínicos:
• Corazón: Funciona a través de electricidad por medio de las fibras de
Purkinje. Por este motivo es raro encontrar necrosis secundaria a
quemadura eléctrica. Lo que generalmente se evidencian son
arritmias que pueden llegar a ser letales. SE PIDE UN EKG a la hora,
a las 2 horas y luego cada 6 horas (Hernández, 2018)
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por sodio, potasio, litio y ácido sulfídrico, en las cuales la aplicación de agua
tiene el riesgo de generar una quemadura adicional. El procedimiento inicial y
los posteriores se deben realizar preferiblemente en cirugía, a menos que se
trate de una quemadura muy superficial y que no exija hospitalización.
Técnica
• El cirujano debe usar vestido quirúrgico, mascarilla, gorro y guantes. Es
preferible trabajar con instrumentadora. En este caso la instrumentadora usa
bata quirúrgica y el cirujano sólo vestido, sin blusa.
Asegurar alguna forma de monitoría. Ideal: pulsoxímetro, dinamap, cardioscopio
y capnógrafo.
• Aplicar el analgésico, la sedación o la anestesia según el caso.
• No encender el aire acondicionado para prevenir la hipotermia.
• Retirar toda la ropa, anillos y brazaletes.
• Rasurar el cabello o vello alrededor de la lesión.
• Retirar la tierra o cuerpos extraños adheridos a la superficie quemada.
• No romper ampollas pequeñas. Si se rompen accidentalmente dejar la
epidermis como apósito biológico.
• Lavar con yodóforo diluido en solución salina estéril (Isodine o Clorexidina
jabón o espuma). Dejar en contacto durante un minuto, luego lavar el yodóforo
para evitar la acidosis metabólica y la citotoxicidad.
• Secar con compresas estériles.
• Aplicar sulfadiazina de plata con lidocaína 200 mg. La aplicación se realiza con
guantes estériles. Los guantes se deben cambiar las veces que sea necesario
durante el procedimiento.
• Cubrir con gasa vaselinada estéril.
• Cubrir todas las áreas con compresas de quemados, o rollos abdominales y
vendas elásticas
• En las extremidades envolver con plástico, preferible estéril, para ayudar a
macerar el tejido necrótico.
• Si existen quemaduras de tronco envolver con una sábana o campo estéril
desde las axilas hasta el pubis.
• Cubrir la cara con una máscara de compresas.
• Asegurar toda la cobertura con tela adhesiva. (Tróchez, 2008)
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CONCLUSIONES
1. La mayoría de las quemaduras son prevenibles.
2. La mayoría de quemaduras de 1° y 2° de extensión menor no requieren
hospitalización.
3. La extensión de la quemadura se calcula con la ley del 9% de Wallace y la
del 1% de la palma de la mano.
4. Extensión de quemadura < 10% puede no requerir reanimación hídrica.
5. El mayor efecto a nivel sistémico es la pérdida de la volemia por
extravasación llevando a insuficiencia renal, que es prevenible con la
administración de líquidos.
6. Se utiliza Lactato de Ringer para la reanimación hídrica garantizando una
diuresis de 1 cc/kg/hr
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BIBLIOGRAFÍA
1. Ahmet Çınar Yastı, Emrah Şenel, Mutlu Saydam, Geylani Özok, Atilla Çoruh, Kaya Yorgancı.
(2015). Guideline and treatment algorithm for burn injuries. Ulus Travma Acil Cerrahi Derg,
79-89.
2. Alzate, F. J. (2012). Cirugía Plástica para el médico general, estudiantes de la salud y otros
profesionales. Medellin: CIB.
3. Carlos E. Ramírez, C. E. (2010). FISIOPATOLOGIA DEL PACIENTE QUEMADO. Salud UIS, 55-
65.
4. Ferro, A. (2012). Manejo inicial del paciente quemado. Bogotá: Universidad Nacional de
Colombia.
6. Luisa Fernanda Durango, F. V. (2004). Manejo médico inicial del paciente quemado. IATREIA,
54-61.
7. María Teresa Pérez, Pedro Martínez, Lorenzo Pérez, Felipe Cañadas. (2011). Guía de práctica
clínica para el cuidado de personas que sufren quemaduras. Junta de Andalucia, 1-114.
8. Tróchez, J. P. (2008). Manejo del Paciente con quemaduras. En Trauma abordaje inicial en
los servicios de urgencias (págs. 289-311). Cali: Salamandra.