Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
14 Ejemplo de Asesoría 5 El Cuerpo
14 Ejemplo de Asesoría 5 El Cuerpo
REDACCIÓN EL CUERPO
Presentación
El primer punto por desarrollar en esta investigación busca conocer el discurso ilustrado
de la idea
religioso español, es decir qué ideas tenían los ilustrados españoles en torno a la Iglesia, y con ello
Las relaciones entre el Estado español y la Iglesia tuvieron un cambio vertiginoso, a raíz
Richard Herr, sostiene que los borbones orientaron sus objetivos eclesiásticos a lograr un acuerdo
con Roma. El ejemplo más claro lo constituye el Concordato de 1753, mediante el cual el rey se
reservaba el derecho de nombramiento de las autoridades eclesiásticas y las rentas que recibía
antes el Papa. Este último, además, renunciaba al privilegio que le eximia de contribución a las
A partir de cita podemos ver que el cambio que promovió la dinastía de los Borbones
consiste en establecer vínculos estables con la Iglesia de Roma. Entre las principales decisiones
que se tomó para estabilizar la situación Estado – Iglesia, está dejar en manos del rey la elección
Es con Carlos III, ya en la segunda mitad del siglo XVIII, que la política borbónica en
Antecedente + cita textual
corta + consecuente
materia eclesiástica experimentaría un nuevo ajuste al buscar subordinar la Iglesia al Estado. Las
diferentes medidas dictadas contra el clero secular y regular “tuvieron por finalidad otorgar al
estado un mayor campo de acción y poder de control sobre el cuerpo eclesiástico.” (Guibovich
1993, p. 2). Así, podemos resumir la política de Carlos III en cuatro objetivos principales: control
del Estado sobre la Iglesia, mejorar la disciplina de las órdenes, mejorar la calidad del Alto Clero
Junto a esta política real, un pequeño sector de la población empezó a reflexionar a la luz
institución, mas no al dogma católico. Como lo menciona Herr, ni la fe ni el dogma católico corrían
peligro; ya que los escritos irreligiosos de los filósofos franceses no llegaron a despertar interés
entre los españoles. Un ejemplo de esto lo constituye la obra de Voltaire, ya que, si bien en círculos
españoles se admiraba su poesía, no ocurría lo mismo con sus ataques a la religión y argumentos
respecto a las inconsistencias de los dogmas sagrados. Tales ideas ni gustaban ni interesaban a los
de los españoles, pero sí se aceptaba la crítica que desde los francos se hacía sobre la institución
eclesial. Se juzgaba la actitud que toman las autoridades y el clero, no se consideraba en esta crítica
la fe católica.
Este pequeño grupo de ilustrados españoles eran también hombres creyentes y, en algunos
Antecedente + cita textual corta +
casos, podían ser calificados de creyentes irreductibles. Ello lleva a autores como Sarrailh a
afirmar: "nosotros no creemos que en la España de la segunda mitad del siglo XVIII haya habido
consecuente
hombres que después de madura reflexión, negaran la existencia de Dios” (1957, p. 615).
Las críticas de este sector ilustrado iban dirigidas particularmente contra la riqueza de la
institución eclesiástica, en particular por la gran extensión de tierras baldías que poseían, la
opulenta decoración de las iglesias y la situación fiscal privilegiada que tenían, pues todo ello
Antecedente en
A la par, se criticaba que el número excesivo de religiosos alejaba del trabajo útil a los
jóvenes, constituyendo un peso para el Estado. Así Pedro de Campomanes 1 calificaba a los
al nivel cultural del clero y a las consecuencias que esto traía. Al respecto Herr señala que “[...] se
acusaba a muchos hijos de labradores y de artesanos de engrosar las filas de la Iglesia con el mero
propósito de alcanzar el prestigio social de ser clérigo [...].” (Herr, 1988, p. 26).
Así, se entiende la razón de la poca instrucción que recibían los religiosos, esta estaba
limitada a la filosofía escolástica. Unido a esto, se puede ver como los ilustrados criticaban la falta
de vocación de muchos de los curas y frailes. Para los ilustrados el bajo nivel de instrucción de los
curas traía como consecuencia que la religión se nutriera de supersticiones; por ello, se criticaban
las procesiones y el culto a los santos (imágenes) y reliquias por convertirse en una suerte de piedad
tonta y grosera.
de España (es importante recordar que se criticaba el número excesivo de religiosos que distraía
del trabajo a los jóvenes españoles) se cuestiona que muchos jóvenes dejasen de formar una familia
por abrazar el sacerdocio. Sarrailh afirma al respecto que “una manera de atacar el celibato
eclesiástico consistía en celebrar las alegrías y los encantos del matrimonio.” (1957, p. 647).
1
Pedro de Campomanes fue uno de los representantes del pensamiento ilustrado español. En 1760 fue nombrado
ministro de Hacienda de España. Respecto a la situación de la Iglesia, escribió Tratado de la regalía de la amortización
(1765), en donde señala lo perjuicios que causan a la economía española la propiedad inmobiliaria de la iglesia.
Como se ha podido observar las relaciones Estado – Iglesia fue muy complicada pues se
estado, a la moral de aquel y algunos puntos propios de las actitudes eclesiales, todo ello sin afectar
la fe católica. También, es importante señalar que, además de agudas críticas, los ilustrados
proponían una reforma que concordase con las ciencias modernas y la nueva filosofía. Se pedía un
retomo a la Iglesia Primitiva, teniendo como base una vuelta a la Biblia (Ley del Evangelio), donde