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Práctico 6:

Flanery O Connor

Una expresión de la violencia en el estilo mismo. Problemática del grotesco y el


realismo. Cómo pensar esta tríada: realismo, grotesco y violencia.

¿Por qué el cuento “Un buen hombre es difícil de encontrar” le da el nombre al


compendio de diez historias que componen el libro homónimo?

Reúne varios ejes o temas que podemos pensar en relación con la autora. Esta
cuestión de los valores que va a ser central. Qué es lo que trata de mostrar O
Connor en su ficción. Tiene que ver con la voluntad que tiene ella de mostrar o
desnaturalizar prácticas habituales de la vida cotidiana: lo hace a través de la
violencia. En realidad, como una anticipación de muchas cuestiones que van a ser
centrales en este cuento. Es un eufemismo de toda su literatura. Todo lo violento
que va a aparecer a través del grotesco. Parte del gótico sureño. Se muestran actos
horrorosos que están ligados a un misterio divino. Una de las características del
gótico sureño es el tema del doble. Lo siniestro: este elemento horroroso no
irrumpe desde lo extraño. Emerge del ámbito familiar mismo. Hay algo en el
propio ámbito familiar, domestico, propio que va a tomar un cariz siniestro. Es uno
de los ejes del gótico sureño. El gótico sureño tiene que ver con estas
características de monstruos que aparecen. Algo que señala O Connor está en la
propia historia del Sur. Elementos traumáticos. Hay algo en la propia historia del
Sur […] el Sur como espacio y su historia. Figura de O Connor ligada al gótico
sureño. Aparecen estas expresiones de violencia como una forma de sacudir esa
violencia estanca o naturalizada de ciertas cuestiones de la sociedad.

¿A partir de qué procedimientos se construye lo grotesco en “Un buen hombre es


difícil de encontrar”?
¿Cómo se relaciona la violencia y lo religioso en la conversación entre la abuela y
el fugitivo?

- Frente a la violencia, tenés una claridad que no tenés durante tu vida.

Caracterizar a los personajes del cuento. ¿Qué relaciones establecen entre sí?
¿Cómo es el retrato de esta familia sureña?
¿Cómo podemos pensar la presencia del “misterio” en el cuento de O´Connor?
¿Cómo define O´Connor el realismo en sus ensayos? ¿Cómo relaciona el realismo
con el grotesco?

¿Cómo concibe O´Connor el rol del escritor? ¿Y cómo piensa al lector?

Literatura grotesca. Qué va a decir sobre estas obras grotescas. Si un novelista


piensa que nuestra vida es y será siendo misteriosa, qué pasa con el reflejo de la
realidad. ¿Cómo se muestra la realidad? Se muestra conservando ese misterio y no
resolverlo. ¿Qué es el misterio del que hay que dar cuenta? ¿Cuál es el aprendizaje
de la abuela? Hay algo de cierto reconocimiento de que no es tan fácil plantear
dicotomías entre bueno y malo. Esta idea de que en realidad son más complejas las
relaciones y las figuras de las que se pueden percibir a primera vista. El buen
religioso también tiene que mirar hacia su interior. Hay una introspección. Esta
complejidad de las figuras se da a través de la caricatura. Hay algo en el estilo que
en primera instancia nos hace pensar lo contrario. Los rasgos exagerados y los
estereotipos que contradice esto, y sin embargo, hay un juego de espejos entre los
personajes, sobre todo la abuela y el inadaptado. Figura entre el marginal y esta
familia, que en principio se plantea como típica familia sureña, y hay valores que
están trastocados.
El misterio: hay determinados elementos que no podemos resolver, podríamos
pensar. Y determinadas cuestiones que no son visibles a simple vista. Y
concretamente el misterio tiene que ver con la doctrina religiosa: cuestiones que la
razón no poder resolver y que hay que confiar en la fe. La resurrección de cristo es
un misterio. La santa trinidad. Tiene que ver con determinados elementos que se
plantean desde la religión y desde la razón no hay explicación posible. Para el
misterio está la fe. Esos elementos del misterio van a ser los que aparezcan en los
cuentos de O Connor y en general van a estar ligados a la violencia. El inadaptado
no puede creer en la resurrección de Cristo.

Hay una concepción de esta figura que nos deja preguntas sobre el sistema judicial.
Hay una problemática casi no trabajada, este inadaptado que no recuerda cuál fue
su crimen. Cómo salió de la propia prisión. Hay algo que tiene que ver con esta
imposibilidad para creer en la resurrección. Que lo lleva a una falta de sentido de la
vida. No puedo creer en eso, no sé lo que pasó. Hay un elemento que tiene que ver
con esta maldad ligada al placer. El personaje de él, ¿aprende algo? Es una
concepción de su propia literatura. ¿Cuál es la base de la utilización de la violencia
en la literatura? Tiene que ver con crear estos momentos de epifanía. La gracia
divina. De determinados preceptos y conceptos religiosos. Ella decía que para ella
el hombre y la mujer en el momento de máxima violencia es cuando muestra su
mejor ser, su mejor yo. En un punto estas situaciones, y ahí esta la justificación del
uso de la violencia en su literatura nos hace dar cuenta a personajes y lectores de
eso, de nuestro mejor ser. Preceptos religiosos que ella quiere mostrar. El grotesco
no es un fin en sí mismo -como se la leía, ella escribía textos grotescos – sino que
es un medio para vehiculizar creencias, principios, para generar determinadas
reacciones en el lector/a.
Pensar qué elementos del grotesco aparece en el cuento. Construcción de mundos
ridículos que producen horror y perplejidad: una distorsión encaminada a producir
un efecto cómico y misterio. Exageración y distorsión.

La construcción de la familia sureña que no encarna los valores. La cortesía, la


hospitalidad, la confianza. Esos valores están subvertidos en esta familia. Pero el
discurso de la abuela intenta destacar esto, habla de la falta de respeto de los nietos.
Se van contradiciendo. No hay empatía con la figura del niño.

Qué pasa con el señor de las sandías. El nieto dice: yo nunca me casaría con
alguien que me regalara sandías. Se filtran elementos que no tienen que ver con los
valores cristianos del Sur: el tipo hizo negocios, se hizo rico, debería haberme
casado con él. Caracterización de la familia que no encarna con estos valores. La
abuela no es malvada, por más que presente elementos grotescos, cierta hipocresía.
Aparecen complejidades en los personajes […] deconstruye dicotomías
esquematizadas. Oposición entre realismo y grotesco: la caricatura no da lugar a
una asociación con el realismo, porque es una distorsión. A partir de esta distorsión
muestro esta realidad.

Para el catolicismo los niños son la inocencia. Hay un juego con esto. En este
cuadro cómo podemos pensar al inadaptado. Es un personaje que viene a romper
completamente este orden familiar. Pero, en un primer lugar, ella dice hay algo
familiar en esta figura: lo podemos pensar con que vio la foto en el diario. Pero
también podemos pensarlo de otra manera: rostro familiar que se acerca y que
rompe con esta suerte de orden familiar, disfuncional. Entra en este universo
familiar y trae algo. De nuevo aparece la cuestión de lo siniestro y la idea de todo
lo que nos rodea, esta sociedad, las figuras más cercanas pueden tener estas
características. Cómo es la figura del inadaptado.
Hay un juego especular entre el sujeto y la abuela. Quién encarna esos valores,
quién no. Cómo se construye esta relación: de qué forma se construye en esa
relación y en ese diálogo esta paradoja del sur de combinar los valores del Sur con
el imaginario ligado a la violencia. Están los dos extremos combinados en esa
combinación de personajes. La abuela y el inadaptado. Cómo, al mismo tiempo, el
Sur combina en su imaginario, todo el respeto e integridad con la historia violenta.

Cómo piensa esta idea de lo sobrenatural, lo grotesco y el realismo. Violencia


grotesca podemos pensar. Cómo ella encuentra en esta violencia ese vínculo con el
misterio divino. Imagen que conecte dos puntos.

Realista de distancias. Concepción que ella misma señala.

No es función del escritor decidir qué alma se va a salvar y cómo salvarla. Y el


lector, lo mismo. Preparación de los lectores. Hay cierta ingenuidad en creer que el
escritor tiene que recrear imágenes compasivas. Ella reconoce ese peligro. Hay de
cierto riesgo en la escritura. Es una literatura que requiere un lector, lectores
católicos bien preparados.

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