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La dimensión internacional de la reforma de

derechos humanos: antecedentes históricos


Antonio Quintero Zamora
13 de octubre de 2021
Reporte 8

La protección de los derechos humanos de forma efectiva se ha complicado con la


globalización. Cada día son más frecuentes las relaciones fuera de los antiguos límites
espaciales y temporales debido a la interacción económica, política, social, cultural, entre
Estados y regiones. Hay flujos de personas, mercancías, capitales, servicios, información y
símbolos con enraizamiento cultural. El derecho también está globalizado, incluidos los
poderes judiciales, legislativos y de gobierno nacionales. En la garantía de los derechos
humanos, por ejemplo, existen procedimientos nacionales, regionales e internacionales; en
esta sinergia, las decisiones de los juzgados y tribunales ya no se refieren exclusivamente al
ámbito nacional, hoy existe una dimensión compleja de relaciones donde se avanza desde
lo local a lo nacional, regional y global.

Esta mundialización no sólo requiere formación jurídica, también se necesitan


conocimientos sobre el funcionamiento de la economía, la situación de la lucha contra el
crimen organizado, la preservación del ambiente, las prácticas culturales obligadas,
permitidas o prohibidas en diversos grupos, la violencia, entre otros.

La sociedad actual es compleja y está entretejida por variados actores y factores; para la
procuración y respeto a los Derechos Humanos todas las instancias del Estado necesitan
ubicarse en el sistema de evolución-capacitación. En este sentido, Amartya Sen (2010)
expuso que el trabajo de las instancias de administración de justicia debe de inspirar
confianza destilada del buen trabajo de quienes son responsables de su ejecución, con
apego a la normativa –internacional, regional, nacional, estatal– aplicable.

Para acentuar la –tan discutida– legitimidad social de las instancias legislativas, de


administración de justicia, y de los gobiernos en general, y la respuesta al marco
internacional, se planteó un proceso de reformas constitucional en materia de derechos
humanos, “resultado de un largo proceso de transformación política y social mediante el
cual la preocupación por la protección de los derechos humanos se incorporó en la agenda
pública mexicana” (Saltalamacchia y Covarrubias, : 2).
A través de los años, se han reformulado nuevas medidas e iniciativas, y ha evolucionado la
política interna en pro del fortalecimiento del multilateralismo, la codificación y el
desarrollo del derecho internacional, asegurando la eficacia y pertinencia del marco jurídico
y la plena aplicación de los derechos humanos.

La importancia que se otorga a la incorporación del derecho internacional

Estas acciones reflejan la importancia de conducir acciones que ayuden a las personas a
potenciar sus capacidades y, al mismo tiempo, los derechos humanos y sociales.

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